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EL_CU STIONARIO DESIDERATIVO a por GRACIELA CELENER de NIJAMKIN 7 MONICA GUINZBOURG de BRAUDE 7 snap CCelener de Nijarikin. Graciela; Gurizbourg d El cuestionari desiderativo ‘LUGAR EDITORIAL CONTENIDO PRESENTACION A LA QUINTA EDICION, PROLOGO PREFACIO..., INTRODUCCION CAPITULO T SUSTENTACION TRORICA Y PROBLEMAS TECNICOS. caPiTULo IL CRITERIOS DE INTERPRETACION CAPITULO HI EL CUESTIONARIO DESIDERATIVO EN LA CL{NICA PALABRAS FINALES. QUINTA EDICION ACTUALIZADA, © 2002 Logar Eatrial S.A, CCostro Barros 1754 « (1257) Busnes Airs ‘Tifxe 4921-5174 y 4928-2006 ‘mall Ingared@eitione! ISBN: $50.9320.98.9 Queda hoche st dopéito ue maven la fey 22.728 Inpteso en Argentina — Printed in Argentina u 29 93 ‘Tape: Pablo Barragén PRESENTACION A LA QUINTA EDICION ‘Tengo mucha satisfacciin en presentar esta quinta edi- eién del Cuestionario Desiderativo de Graciela Celener de Nijamkin y Monica Guinzbourg de Braude cuyo texto he traducido al portugués con motivo de su reciente publicacién en Brasil Esta nueva edicién ha sido revisada por las autoras ¥ constituye una contribucién importante para los profesionales, psieélogos clinicos, investigadores y estudiantes, No tenfamos, hasta la publicacién de este manual, un libre que presentara pautas tan bien elaboradas que pudieran orien- tar la utilizacién de la ténica. En apariencia sencillo, el Cuestionario Desiderativo necesita de cuidados especiales en la toma y de una adecuada sustentacién en la interpretacién, Las autoras ofracen, en un lenguaje claro y de manera concisa, las informaciones més relevantes que son necesarias para el adecuado empleo del Cuestionario Desiderativo. Pre- sentan en el primer capitulo la fundamentacién teérica de la técniea y se dedican a la discusién de las condiciones de apli- cacsén. En las producciones de las que tenfamos conocimiento hasta la publicacion de este manual, no encontramos referen- cias tan claras con respecto a edmo conducir la toma del test. Las autoras muestran en forma clara las mas frecuentes difi- cultades que pueden ocurrir durante la administracién del test, dandonos orientaciones precisas acerca de como lidiar con di- ches situaciones. En el segundo capitulo exponen los eriterios de interpre- tacién, en formu umplia y profunda, Ofvecen al lector una brillante revisién de los mecanismos de defensa, de cémo éstos on empleados para que se logre responder al test, Desarro- an los indicadores que dan cuenta de las instancias psiquicas, Ia libido objetal, ofrecen material muy rico sobre las funciones. del yo y eémo todo esto puede ser evaluado por medio de este instrumento proyectivo, ademas de enfocar aspectos de las relaciones interpersonales, dol esquema corporal y de la iden- tidad de Ia persona a la cual se le toma el test. Vemos, de esta forma, eusnto material se puede obtener a partir de esta técnica cuando es aplicada e interpretada adecuadamente. Las autoras presentan ejemplos clinicos en el tercer capitulo, El material de una nena, evaluado antes y después ol tratamiento, os extremadamente ilustrativo de tas posibiii- dades de empleo del Cuestionario Desiderativo, en el psico- diagndstico y como follow-up. Incluyen también el estudio de ‘un adulto, completando y demostrando cémo elles proponen ol trabajo con ese test. Bn fin, creemos que los estudiantes, profesores ¢ investi- gadores dei area de la Psicologia, en toda Latinoamérica, dis- ponen ahora de un material muy til para que se pueda em- Blea el Cucstionario Desiderativo con més precision y segy- El Cuestionario Desiderativo ha demostrado, en nuestra experiencia, ser una técnica muy rica, Por sus caracteristicas puede ser tomada a todos, adultos y nifios, a personas con deficit sensoriales y fisicos, independientemente de la situacién cultural del sujeto, por la economia de tiempo y materiel. Creemos que es un instrumento extremadamente valioso, im- portante y necesario para el trabajo del psicélogo en la evalua- cidn de la personalidad en los mas variados eontextos, Prof. Dra. Leila Selomio de La Plata Cury Tardive Profesora Doctore del Departamento de Peiclogia Ciniea Insite de Prcclagin de le Universidad de S80 Paulo PROLQOGO La edicién de este libro es una respuesta a Jas inquietudes yy nocesidades de alumnos y profesionales que deseen intro- ducirse en el aprendizaje v/o busquen enriquecer la aplieacién y el andlisis del Cuestionario Desiderativo. ‘Tal como Io sefialan las autoras, esta téeniea de gran utilidad clinica tanto en nifios como en adolescentes y adultos, ha promovido desde eu creacién por J. Bernstein una serie de articulos espectficos de autores con enfoques tedricos a vecos parciaimente disimites, pero carecfa hasta ahora de un texto sistemético ¢ integrado. En un momento en que la evaluacién psicolégica, en tanto tarea especifica del psicélogo en las diferentes areas de su qushacer, requiere ser repensada creativamente frente @ las cniticas que se le realizan desde diferentes sectores, este texto intenta brindar una mayor fundamentacién teérica y un més preciso cuadro de eriterios de interpretacion. ‘Dado que un correcto anélisis de una técnica se asienta en primera instancia en una adecuada administracin del material, resulta especialmente valioso el tratamiento meticu- oso pleno de ejemplos que las autoras le dan a la especifica- cidn de los diferentes pasos de Ia consigna y las dificultades que puede encontrar quien la aplique. La inclusién del andlisis de dos protocolos de wna nia (est-revest pre y post tratamiento) permiten verificar la riqueza del material obtenido y su sensibilidad en la deteccién de posibies cambios. La interpretacién detallada del caso de un ‘adulto joven también le brinda al lector una excelente ejem- plificacién de Ia modalidad de andlisis cltnieo que permite ol test, que sin embargo siempre debers ser visto en el contexto ms amplio de una evaluacién. EI libro trasunta en su forma y contenido la prolongada y muy fecunda tarea profesional de ambas autoras en la actividad decente y asistencia, y ofrece de tal modo al lector una obra que, si bien se centra especificamente en el Cuestioario Desiderativo, transmite a su vez una modalidad de trabajo , clinico mas abareative del proceso diagnéstic. Lic, Renata Frank de Verthelyi Frofsere tar do "Tessas Froyeiivar Poo de Pata ofa Universidad de Basson Aree PREFACIO Queremos comenzar este libro recordando a nuestro maestro Jaime Bernstein, primer profesor titular de la catedra de Técnicas Proyectivas del Departamento de Psicologia de la Facultad de Filosofia y Letras de la Universidad de Buenos ‘Aires, y docente de la materia en las univesidades del Litoral y La Plata, Bernstein se ocupé no sélo de transmitir en el nivel pedagégico su interés por Ias Técnicas Proyectivas, sino tam- bién de modificar las técnicas existentes y de crear nuevos instrumentos. Introdujo en la Argentina tests mundialmente conocidos, como por ejemplo el TAT, pero su més valioso aporte Jo constituys el despertar interés por téenicas menos divulgedas internacionalmente, tales. como algunos de los tests graficos (Pareja) y otros como el Phillipson o el Cuestionario Deside- rativo, En algunos casos la seleecién pudo tener que ver con a fundamentacién tedrica de los tests, que coincidia con su orientacién psicolégica de aquel momento (Escuela inglesa) y cen otros casos, como por ejemplo el del Cuestionario Desiders- tivo, cuya sustentacién era la teoria de los valores de Spranger, el querer otorgarles un cuadro teérico referencial psicoanalitien, que abarcara posibilidades mucho mds amplias de aplicacién y enriquecimiento, tanto de la téenica en si como de los datos {que por medio de ella podian obtenerse. Generé en sus colegas y alumnos interés por el uso de las, ‘téenicas psicodiagnésticas y la inquietud por profindizar en su conocimients, buscando enriquecerio a través de la investiga- cién clinica. Todos sus aportes fueron muy valiosos y Ia semilla que él sembré ha perdurado a lo largo de varias generaciones de profesionales argentinos que se han ido acercando a las, ‘Técnicas Proyectivas, En un principio, dada la escasa bibliografia sobre el Cuestionario Desiderativo, se privilegié la transmision oral asada en algunos de los articulos de Bernstein publicados en la cétedra,!? En 1974 aparecen nuevos articulos compendiados sobre el tema en el libro Las iéenicas provectivas, de Maria Siquier de Ocampo, Maria Esther Garcia Arzeno ¥ colabora: dores.' En general, la literatura sobre el Cuestionario Desi- derativo ha sido esporddica y aislada, producida por colegas de Bernstein, sus aluranos ~-como en nuestro caso— y alumnos de sus alamnos A peser de né haber adquirido aplicacién masiva, ha perdurado la tradicién del conocimiento y el uso del Cues- tionario en nuestro pais, Cuando esta téeniea eruzé las fron: teras, lo hizo a través de la transmisién de discipulos de on. divulgarla en otros pafses, como Bomstein, que se dedi las autoras. Como receptoras y transmiseras de la técnica, desde nuestra actividad clinica y doconte, nos sentimos formando parte de esta historia, que tal vez estas neas ayuden a res- catar. Las autoras a A diez aiios de la primera edicién del Cuestionario Desiderativo queremos destacar que nuestro libro aporté algunos aspectos inéditos sobre el Cuestionario, con respecta a Ja bibliografia existente en la época. E] primer aporte significativo lo constituy6 el efectuar un primer registro escrito de 1a formulacién de la consigna y los procedimientos de administracién que, hasta ese momento, eran producto de la transmisiOn oral y por lo tanto no estaban sistematizados, Sabemos de le importancia que le consigna adquiere en toda técnica de evaluacién, pero en particular el mayor énfasis con que afecta a las técnicas proyectivas, ya que es un factor que influencia en forma directa la produecién de la respuesta. En el Cuestionario Desiderativo la consigna intenta pro- mover respuestas tanto positivas como negativas de elecciones simbélicas representativas de los reinos animal, vegetal e inani- mado, No siempre las respuestas del entrovistado pertenecen 4 estos reinos ni aparecen en esta secuencia. Por ello hemos tipificade aquellos fallos que consideramos mds frecuentes, efectuando las propuestas de resolucién y manejo técnica de Jos mismos. Por primera vez en nuestro texto se conceptualizan los “mecanismos instrumentales” imprescindibles que debe poder utilizar el entrevistado para resolver la tarea propuesta y que constituyen desde entonces, entre otros, algunos de los observa- bles para el andlisis de as respuestas. Hemos ampliado al, desarrollo de la sustentacién teérica psicoanalitica en la que se apoya la téenica, con especial énfasis en conceptos freudianos, pero incluyendo aportes de otros auto- res como Klein, Sogal, Jones y Rodrigué. Hl hecho de funda- ‘mentar los criterios de interpretacién tomando como referen- cia el Cuadto del Perfil del Desarrollo Metapsicolégico que Anna Freud desarrollé en el libro Normatidad y patologia de la niftez y adolescencia (Edit. Paidds, 1973) nos permitié ampliar la lectura de la técnica y posibilits una comprensién dindmica y estructural del funcionamionto global de la personalidad En el transcurso de estos diez afios le téenica se ha difun- dido a otros pafses y en el aio 2000 el texto ha sido traducido al portugués y publicado en Brasil. Ello se debe al recono- citiiento de la importancia de esta técnica en la evaluacién de la personalidad y al hecho de que su uso es cada vez més frecuonte, Las autoros INTRODUCCION Cuando comenzamos nuestra actividad profesional, el Cuestionario Desiderativo formaba parte de la bateria psico- diagnéstica que aplicébamos y siempre notamos la gran riqueza de informacién que nos brindaba acerea del paciente, incluso fon algunos casos como expresisn sintetizadora. En efecto, esta técnica no sdlo nos posibilita inferir la for- taleza 0 debilidad det Yo, el bagaje defensive y el tipo de rela- ciones objetales del entrevistado, sino que, a partir del andli- fis de 1a misma fundamenténdolo en et Cuadro Metapsicolégico de Anna Freud, se hace posible inferir los conflictos basicos del sujeto, las fuerzas pulsionales que estan on juego en dicho conflieto, jas defensas con las que el Yo lucha contra aquéllas, el grado de organizacién del Supor Yo, la autoimagen, la au- toestima, la imagen corporal e identidad sexual y el grado de éxito del desempefio de las funciones del Yo.t ‘Simultdneamente presenta otras importantes ventajas: + Economia de tiempo, ya que ia informacién acerea de todos los aspectos de personalidad que hemos men- cionado se obtiene en alrededor de diez 0 quince mi- niutos, que es el lapso que requiere la aplicacién del Cuestionario Desiderativo. + El amplio espectro de poblacién a la que se lo puede aplicar, Observamos que desde nifios pequeiios, preesco- lares, hasta personas de Ia tercora edad pueden res- ponder al Cuestionario sin dificultad. + Las caracteristicas de la consigna hacen posible su apli- cacién a personas perteneciontes a diferentes culturas ‘9 grupos sociales, deda la simplicidad de las preguntas y la no ineidencia de la cultura o el conocimiento. + Por ser tn test de estimulo y produccién verbal, puede incluso ser respondido por personas con discapacidades fisieas tales como la ceguera o problemas motores, ya. que las mismas no interfieren on la comprensién de la, consigna y la formulacién de la respuesta. * No requiere el desarrollo de destrezas espestficas (mo- trices, sensoriales) para poder responder a él. En el caso de personas afectadas en su capacidad auditiva también es factible administrarlo, por escrito, ‘Todas estas ventajas lo convierten en una téenica valiosa ¥ Gtil para el diagnéstico, Sin embargo, en contraposicién a la simplicidad de sw aplicacién, el proveso de interprétacién re- ‘wuiere un gran bagaje tedrice y préetico que hace al juicio clinico de quien Jo interpreta Caviruie 1 SUSTENTACION TEORICA Y PROBLEMAS TECNICOS OBJETIVO En toda técnica proyectiva, el juicio clinico debe basarse entre otras cosas en los criterios de interpretacién que el test Propone. Si bien en el caso del Cuestionario Desiderativo exis- ‘en trabajos en los cuales se postulan parémetros de interpre. tacién,® * nos parecié importante complementarlos con la biisqueda y formulacién de indieadores especificos a partir de los cuales (pudieran generarse criterios de interpretacién mas sistematicos. Uno de los principales objetivos de este libro es efectaar una contribucién en este sentido. La, Qbjeto de estudio. “Las fantasias de deseos constituyen una muestra muy expresiva de 1a personalidad.” Adler fue uno de los primoros que dieron al andlisis de log easuefios un papel significative en el conocimiento del individuo. 8 desiderativas se pueden obtener: “L) por via directa; 2) por via indirecta, En Ia forma 1) se opera més en el nivel de la realidad, sometiondo al examinado a un interrogatorio franco y perso, nalizado acerea de “cvales tou wus deseos acerca de.” Cuando se busca conocer las fantasfas de deseos, que de aqui en més denominaremos los aspectos desideratives de la forma 2), “indirecta, tal como sucede en el caso de las Téeni- cas Proyectivas, se recurre a Ja ereacién de un marco ficticlo, @ monudo bajo la forma de un cuento, para inducir le proyeccién de los deseos sobre otros; 0 a movilizar la proyeccién masiva de fantasias sobre personajes. EI interrogatorio no previene al examinado sobre los ob- Jetivos de la investigacién y permite, de manera distrazade, aeceder a las fantasias desiderativas mds expresivas de los stratus profundos de Ia personalidad”! Lb. Antecedentes A la modalidad instrumental mencionada pertenecen los tests para nitios “Los tres deseos” y “Las tres bolsas de oro”! coy Ave at wes $ Coss POR! = \ (L. Kanner, 1937), el “Test del Bestiario” de Zazzo (1950) y ios tests para adultos y nifios denominados “East Desiderativo” de Pigem y Cérdaba (1946) y el “Cuostionario Desiderativo” de Bernstein (1956), que es la versi6n que vamos a desarrollar en ‘este trabajo. El Test Desiderativo de Pigem y Cérdoba (1946) consiste, en cuanto a la técniea, en preguntar al sujeto: “ZQué desearia ser si tuviera’que volver este mundo no pudiendo ser per- sona?” Y para el andlisis de las respuestas se utilizé como mareo te6rico los sistemas de valores de Spranger. E1 simbolo legido se Hama “simbolo desiderativo". La consigna plantea al sujeto la situacién de transfigurarse imaginativa y electiva- mente, en cualguier otra cosa diferente de su oondicién de persona, El simbolo elegido es representative de los deseos del sujeto. El test promueve la movilizacién de las fantastas desi- derativas y su comunicacién, simbolizada ¢ intelectualizada, El andlisis e interpretacién reconocerfa como camino para la comprensién, el partir de los simbolos y su racionalizacién, para profundizar en el conocimiento de aquéllas y de la dindtnica subyagente.de Ia personalidad. XO Le, Bi Chgstidnario Desiderative de Bernstein Se_modifican_tanto_los_fundamentos_tebricos como la nica de_administraciin e interpretacién con relacién a su iv ‘Cérdoba.** Faime NeSag S2\Bornstein fundamenta el test desde el marco te6rico_psico- aS asses? 12 ~~analitica, entendiendo cada eleccidn 0 rechazo del sujeto como ‘un simbolo que debe ser interpretado desde los puntos de vista universal, cultural y personal. 7 Las modificaciones téenicas incluyen Ia ampliacién de las preguntas a seis: tres elecciones y tres rechazos, ¥ cada una de ellas investiga por la pusitiva y por la negativa los reinos animal, vegetal e inaniriado. (Esto debido a que el psicoansli- sis encuentra que las figuras animales sirven al inconsciente para expresarse figuradamente y que, aunque en un grado menor, también las figures de los vegetales y de las cosas pueden servir para simbolizar.} Por otro lado, en cada eleccién 0 rechazo, se pregunta el porqué. La racionalizacién, 0 sea la explicacién con que el sujeto fimdamenta su respuesta, nos parece esencial porque da cuents del significado personal que el simbolo elegido adquiere para él. Tanto por medio del sfmboto como de la racionalizacién ol sujoto nos transmite cémo sim- boliza y significa Ia realidad. Id. Fundementacién tesrica Desde el punto de vista tedrico, segtin Bernstein,’ la producéién del examinedo puede ser analizada desde los si- fuientes enfoques: adleriano (situaciones placenteras y temi- Gas), freudiano (la simbolizacién permite la emergencia de aspectos reprimidos de la personalidad, puntos de fijacién li- bidinal, identificaciones superyoicas, ansiedades frente a im- pulsos y exigencias del Bllo), Kleiniano (objetos protectores y frostradores), teorfa del campo (valencias positivas y negati- vas del campo psicolégico del examinado, barreras y conflic- tos). Como el Cuestionario basa su interpretacién en el signi- ficado de los simbolos, desarrollaremos este concopto dasde at enfique freudiano hasta los aportes que efectéa Rodrigué, basados en la toorfa Kleiniana, En sentido extenso, el simbolismo es un modo de repre- senfacién indirecta y figurada de una idea, un conflicto, un deseo inconsciente; on este sentido, en psicoandlisis podemos considerar simbélica cualquier manifiestacién sustitativa, como por ejemplo una palabra.” Encontramos a la palabra “simbélica” en su forma sus- tantiva en Freud, en La interpretacién de los suefos.* Habla alli de “la simbélica’, entendiendo por ella el conjunto de simbolos de significacién constante que pueden descubrirse en variadas producciones del inconsciente. De un modo mas general, empleamos el término “simbéliea” para designar In relacién que une el contenido manifesto de un comportamiento, de un pensamiento, de una \palcbra, a su sentido latente; lo empleamos a posteriori, cuando el sentido manifiesto esté més ausente (por ejemplo, en el caso de am acto sintomético francamente irreductible a todas las motivaciones conscientes que el individuo le puede conferir). En esta perspectiva, el simbolismo envuelve todas les formas de representacién indirecta, sin diseriminacién mas definida entre éste o aguel mecanisma: desplazamiento, con- dengacién, sobredeterminacién, etc. Efectivamente, desde el momento en que se reconocen en un comporiamiento, por ejem- plo, al menos dos significaciones, una de las cuales sustituye a [a otra, enmascardndola y expresindola al mismo tiempo, puede calificarse de simbéliea su retacién, Por otro lado, existe en Freud, més que en los analistas contemporéneos, un sentido més restringido de la nocién de simbolismo, Desde la primera edicién de La interpretacién.de los suefios se puede notar: 1) que Freud atribuye un lugar importante a las repre- sentaciones figuradas que son comprensibles sin que el sofiante {dé asociaciones; ef pape} mediador desemperado en este éaso por expresiones lingiifsticas sexuales; 2) la existencia de “suetios tipicos", en que determinado deseo 0 determinado conflicto son figurados en forma somo- Jante, sea quien sea el que suefie, lo que muestra que son ele- 13 14 mentos del lenguaje de los suefios independientes del discurso personal del individuo, Saar Esqueméticamente, agrupando los puntos indieados por Froud, podrfamos dofinir los simbolos en el sontido restringido ‘que coracteriza a aquello que Freud llama la simbélica, por las siguientes caracteristicas: 1) La esencia del simbolismo consiste en una “relacién constante” entre un elemento manifiesto y sus traducciones, Esta constancia so vuelve a encontrar no sélo en los suefos, sino también en dominios de expresidn muy diversos (sintomas y otras produeciones del inconsciente) y en dreas culturaies istintas entre si (mitos, folklore, religidn, ete.). Bsta relacién constante escapa relativamente, tal como un vocabulario fijado, a las influencias de la iniciativa individual, la que puede ele- sir entre los sentidos de un simbolo, pero no crearle nuevos sentidos. 2) Rota relacidn constante se basa en la analogia (de forma, de tamatio, de funcién, de ritmo, etc.), Freud sefiala aun que ciertos simbolos se pueden aproximar a la alusién. Por ejemplo, la desnudez puede ser simbolizada por vestuario, por una relacicn que asf es de contigiidad y de contraste; por otro lado, en numerasos simbolos se vienen a condensar relaciones muitiples entre lo simbolizado y el simbolo 3) A pesar de que los simbolos descubiertos por el-psico- andlisis son muy numerosos, el campo de lo simbotizado es muy limitado: cuerpo, padres y consanguineos, nacimiento, muerte, desnudez y sobre todo drganos sexuales, acto sexual. 4) Los individuos, més alld de la diversidad de culturas y Ienguajes, disponen de un “lenguaje fundamental”, De aqui ‘que existirian dos tipos de interpretacién de los suefios: una que se apova en las asociaciones de aquel que suena v otra que es independiente de ellas: la interpretacién de los simbolos. 5) _La existencia de un modo de expresién simbélico, asi caracterizado, trae problemas genéticos: ¢Cimo fueron los simbolos formados por la humanidad? Cémo se apropié de ellos el individuo? Estos problemas son los que Hlevaron a Jung 2 su teorfa del “inconsciente colectivo”. Freud emitié la hipstesis de una herencia filogenstica. En El proceso simbélico en el contexto det proceso psicoanalitico dicen B, Rodrigué y G. T. de Rodrigué:* “Por significado constante se entiende que Jos finbolos poseen une consitacion fja @ inconselentemente predeterminada. Un stmbolo puede connotar nop quizas mas objetos; pero sélo comnota a esos ohjetos” “Finalmente, le eonnotacién de un sfmbelo no sélo ¢9 eonstante prs cade individao sino que también lo es para la mayoria de la humanidad, teniendo la misma significacin en las culturas més dispares y en Jos Tenguajes mnés inconexos.” i ; | ; Sin embargo, sefialan que desde esta teorfa de la cons- tandia diferentes autores han sugerido gran ntimero-de signi- ficados para el mismo simbolo. Este hecho si bien no refuta la teoria del significado fijo, debilita su plausibilidad, En wn trabajo en que Sander Lorand y S. Feldman resejian ios distin- tos significados que se ha dado al sfmbolo “diente”, encontraron ‘que veinte significados, propuestos por ms de una docena de auteres, habfan sido adscriptos a esta unidad odontolégica Interesa consignar edmo en dicha resefia los sucesivos signifi- ‘cades que se le han asignado a “diente” coinciden con las tendencias y puntos de énfasis que se sucedieron en la teoria psicoanalitica. ‘La eritica de Rodrigué @ Ja “constancia” y su aporte en este aspocto —al cual adherimos— rosultan de sofialar: °Si se considera esta génesia, el simbola ha sido conecbido fuera de Ia experiencia del individas hstarico; ne existe un evento Iistérieo que haya requeride come medida adaptative que doe ‘objetos ee junten para que uno ea aimbolo del otro. El simbalo ro fue creado por el hombro tal come lo conoeemos; su significado fue foreado sobre 6” "Creo que s© puede conduir que esda mievo deseubrimiento analitico trae st gama de nuevos significades para vigjos simbe- Jos y nuevos objetos que merecen ser ‘significadas’ simbslion- Jones consideraba que la irreversibilidad del significado era una caracterfstica especifica del “verdadero simbolismo", sin embargo contintia Rodrigue: “Lajos de sor viejes religaian, los simbolos serfan stem plastioos fen sumo grade, copaces de. trangportar significados mtiplex (Cy Bntonees, generalizando: Ie interpretacién que les dames" alos simbolos refleja el grado de nuestro conecimients actual sobre la fantasfa inconsclente” Gierto es que también Freud en “Introduccién al psico- andlisis™ advirtié sobre “al posible rieego de wn empleo exagerado de los interpretaciones fins de los sfmabolos, Advertimos entre los diferentes autores una controversia acerca de si ol simbolo tiene un significado constante, fijo, universal “fuera de la experiencia del individuo histérico” 0 si este significado es influido por la pertenencia cultural, y la historia personal. Apoyando esta postura, Melanie Klein plantea: “no sélo el simbolisme debe ser considerado como Ta base de la fantesia ineonseiente y de toda sublimecién sino que, aun més, 15 16 sobre él se construye Ia relacién eon el mundo exterior 9 con a realidad”, Segiin Jones (citado en’): "Un simbslo es todo objeto, representacién plistica, abstracta 9 verbal, que adquiere cepacidad reprosentetiva de atros obietos, epresentaciones y experieneias emocionales (simbolizade), sin confundirse eon éstos, en base a una ligazin constante de signi ‘ieado ‘relacion simbolizante) (J BI objeto que adquiere la cuslidad de represontar a atro puede ser tanto una represen- taciin pléatica como tina idea, un sonsepta abstracto 0 une palabra. Podemos abstraer dos posibilidades por las euales un fbjsto puede sor selsecionado para representar significativamen. te a otro: 1) Un objeto puede ver simbalo porque es capac de representar pldsticamente (por su forma, movimiento, funcionamient, s0- hi) las caracteristicas del objeto 0 situatién emocional simbo- eada ‘las simbolos oniticos son un ejemplo de estas represen: taciones simbdliens 2) Un objeto puede ser simbolo porque se ha establecide uns I zanin de significado par reiteracion de experieneias emocionales, [En este ease Ia slecsién dal simbolo es an parte producto de la evolucign cultural y personal en tanto no reproduce en su ostruc ture eualidades o caractaraticas de lo simbolizado (dato es el ens de In palabra. ‘A su ver la concepcidn dela pelabra como simbolo sients las bases indispensables (es origen) del pensamionto verkel como instru mento eficaz de vineulacion y modifcacisn de la realidad interna y externa, 'BI simbolo logra sintetizar en si mismo, por sus eualidades plésticas, verbales 0 abstractas, un contexto de significado y fadquiere en funcién de esto, la cepacidad de representar 0 re La produccién de respuestas en el Cuestionario Desidera- tivo se da a través de Ia formulaciin de simbolos verbales. Retomando el tema de las controversias sobre el significa- do de los simbolos, adherimos para la interpretacién de los mis- mos en el Cuestionario Desiderativo @ la postura de que los simbolos tienen un significado histérico, cultural, personal. Por ello, pensamos que un mismo simbolo puede tener significados diversos. EI psicélogo, en el proceso de interpretacién, decodi- ficard el significado personal que el simbolo elegido tiene para el sujeto, guidndose no sélo por el s{mbolo sino por el contenido de la racionalizacién, que da cuenta de dichos significados. ‘Nuestra expectativa es que el sujeto formule una res: puesta “simbolo”, es importante aclarar que a veces lo que aparentemente es un simbolo, intrinsecamente no lo es. “Un simbolo, en un sentido amplio’, es un modo de representacién, indirecta y figurada de una ides, de un conflicto, de un deseo inconstiente. En este sentido, puede considerarse, en psicoandli- sis, como simboliea toda formacion sustitativa”. En al caso del oo GD se trata de te representacién verbal, tanto en las catexies positivas como negativas. "Advertimos, habitualmente a través de la racionalizacién con que justifiea su respuesta, que! el entrevistade no siempre ee Siente representado por el simbélo escogido sino que el simbolo y 4 oonstituyen una misma cosa, Bjemplificando: un sujeto rechaza en Jas catexias negativas ser “arafia” y justifica su rechavo de a siguiente manera: ‘No me gustaria ser arafa porque si estoy dentro de ella, la arana sno es araiia”. Bn este caso el ontrevistado ha perdido la capacidad sirbéliea de representar algo ausente con un simbolo y este- bleze una relacién “eoncreta” entre la arafa y é mismo, La araia no lo representa sino que es él. Jones denominé este fenémeno como de “generalizacién primaria” y Hanna Segal se refirié a él como “ecuacién sim- bdlica”. La ecuacién simbélica corresponde a los primeros in- tentos evolutives de sublimacién. I1.2, Condiciones de aplicacién del Cuestionario Esta técnica proyectiva, por sus caracteristicas, no debe ser administrada fuera de contexto. Esto supone haber esta- bblesido previamente un buen rapport on las entrevistas y ubicar wadministraci wuacién de Jas téenicas gréficas 0, en su defecto, cuando el tiempo ocupado por aquéllas torna de- masiado prolongada la toma, antes de algin test de léminas (CAT, Phillipson, TAT, Rorschach), Una vex concluida la administracién, se le puede pedir al sujato que amplie las respuestas interesantes 0 significativas 0 las relacione a través de asociaciones con aspectos de su historia, ‘Ya mencionamos en la Introduccién a quiénes se les puede administrar el Cnestionario Desiderativo, Al respecto queremos aclarar algunas cuestiones: ‘+ qDesde qué edad podemos aplicarlo? BI Cuestionario Desiderative se puede aplicar desde el momento en que elnino usa la palabra como simbolo, 6 sea coma rapra- sentante de otra cosa. Tedricamente este momento se corresponderia, desde €} nivel dinzmico psicoanalitico, con la constitucién del preconsciente alrededor de los 4 65 afos, y desde la teorfa genética con el momento de la iniciacién del pensamicnto simbdlico. Bn esta etapa el nifio logra captar el contenido de la consigna y responder con adecuacién a ella a través de a formulacién de respuestas simbolo, uy 18 Bn la evaluacién de las respuestas de nifios deben s considerados los aspectos evolutives cognitives y Jos dinsimicos afectives. + (Hasta qué edad lo podemos aplicar? Creemos, por nuestra experiencia, que hasta muy avanzada edad, va que nunca se ha manifestado como una téenica pertur- badora de la homeostasis psicol6gica del paciente en el momento de su aplicacisn, + Con respecto a factores sociales y cultursles, ya hemos mencionado que no inciden en a aplicacién del CD, pero estos factores deben ser tenidos en cuenta para la interpretacién. Para ello disponemos del andlisis que se hhace del simbolo, en el cual siempre tenemos presente la simbologia universal, el particular significado que adquieren los simbolos en determinadas culturas y en el nivel individual, en relacién con la historia personal, * No creemos conveniente aplicar el CD a suistos 5 za real v conereta de su in ence ILb. Implicaciones tedricas de la consigna 1) La consigna y la resignificacién que el sujeto hace de cella con respecto al tema de la muerte Bernstein sustituys la consigna original “;Qué desearia ser usted si tuviera que volver a este mundo no pudiendo ser persona?” por la pregunta: “Si no pudiera ser persona, jqué es Jo que més le gustarfa sor?” Seguin Marfa Luisa Siquier de Ocampo’ esta sustitucion s0 ofectia como una manera de atenuar el impacto de la expresin “si tuviera que volver a este mundo", que alude explicitamente a la muerte. Sin embargo, siempre segén Ocampo, la pregunta co- rregida sugiere igualmente al sujeto que se aniquile imagina- tivamente como persona para pensarse como otro ser no humano. Implicitamente, para realizar el test el sujeto tiene que imaginarse muerta. En cambio, Elsa Grassano’ enfoca de otra manera esia cuestién. Dice “Para que la consigna desencadene el juego de identificaciones proyectivas es necesarie una pre-condivisn: que el entrevistado este psleclégicamente capacitedo para interpretar el contenido metaférica 0 simbslice de Ia eonsigna, “Si lo he logrado en suficiente grado de integracién que lo capa ite, para diferencisy fantasia y)realided y para vlilizarel len- gusie y et pensamiento verbal de wn modo simbélico, podré tomar Ta eoasigoa como un ‘eomo sf (algo que sucade en el terreno de Ia fantesia) y fantaceard laz sucesivas personificaciones sin sentith como an Hedge para su identided.” Nosotros eoincidimos eon la propuesta de Gri sentido de que para poder responder a Ja consigna, ésta debe ser reconoeida por el_suie in “comp si”. Cousideramos mente” muerto_en forma rdiendo 1s capacidad del “como si”, esta toro del juicio lidad vy de Ia fundén_de discriminacién, lo que denotaria gna grave altera: ‘eidn de Ja personalidad, Esta forma de reaccionar apareceria, por ejemplo, si el sujeto contestara: “Nada, si no coy persona, no quiero ser nada"; y no quisiera continuar el test Sigue diciendo Grassano: ano, en el [jteral v_coners “A través de las respuestas, vorbales y comporslas, que nos ofrece } examinads, podemos obeervar el esfuer20- defensivo del Yo ara reeuperarse y absorber el impacto suffido y su modalidad aefensiva prevalente. "ELYo v sus objets estén amenazedos de muerte en la situ sidnae teats por lo tanto se movilzan recursos defensivosr el sujto, ‘Atiavds de lus catexias posiivas, explicta las fanaslas in- SSsglanwarde TEE TTETES, describe simbslicaments su mods ds tuitar los peligros inborentes a Ta amenazs fantaceads » in de las catexias yositivas sostione In fantasia sient song sil examinade respondiere ‘Cuando tenga misdo (v shore lo tensoi, hago tal cosa “frente al miede (par 31 mismo y por sus cbjetos, el Yo intenta reforzar daterminadot aspectes y evacuar otras, e profundizar 0 bvitar el vineulo eon detarminades objetos” "La verbslizacion de las estevias negetivas exprese: ‘ay Tape a Tantasin de Wo one S10 tee ane Te-sucederts oi Tos recursos defensivos que muestra en Tas positives, .B) come las comseouencias negativas que tiene sabre su Yo al uso especice de esas defancas, Bs decir. Jo percepei6n interna deal aspectos instrumentelee del Yo son cercenados por 1a defense. 2, Ho cts de aus las esos aan entanytnia an ositives come en las negatives, a] suede sabe Befenderee y de qu. 2) Enel enzo de que sus respuentas positivas seen adecuadas ofasals a ls names infarremn aue sabe dlenderss pers node qué “Encl ess0 de que responds a las catoxias nogativas pore no log posivay. eusstane ue no ibe cine Wena se ot sonnce os pelos oue tome funcionar én forma adaptative tanio en el nivel de las defen s como en él del autoconocimiento de sus conflictos, Indicarfa una personalidad “normal” 0 con trastornos leves (neursticos) Jos puntos 2) v 3), Ocampo y Garcia Arzono® sefislan que resulta de peor prondstion el fracaso o la confus 19 22 aleceiones al responder en cada caso al “jPor_qué?", nos da Ja informacién acerca de los atributos de los simbolos elegidos v v ‘en forma personal individual ‘Ahora vamos a desarrollar la consigna tal como creemos que debe ser aplicada. Se le dice al sujeio: “Ahora le voy a hacer una pregunta: si usted no pudiera ser persona, jqué es lo que mds le gus- taria ser?” (Por supuesto, utilizamos el tratamiento de “vos” 0 de “usted” seqrin el caso.) El sujeto da una respuesta, a la que denominaremos 1+, que puede ser un representante de cualquiera de los tres reinos antes mencionados. ‘Una vez registrada la respuesta, se procede a proguntar: “Por qué le gustaria ser (lo respondide en 1+)?” El sujeto contesta y registramos toda su explicacién. A continuacién se procede a reformular la primera con- signa, agregandole la eliminacién del reino o clase a Ie cual pertenece la respuesta I+. Ejemplificands: “Si usted no pudie- a ser persona ni (reino elegido en 14), zqué es lo que mas le gustaria ser?", El sujeto responde realizando la segunda elecci6n: 2+, Se registra su respuesta y nuevamente se procede 8 interrogar: "Por qué le gustaria ser (eleccién 2+)?". Para obtener la eleccién 34, se procede a formular la primera consigna, olimindndose los reinos o clases elogidos en 1+ y 2+, Bjemplo: “Si usted no pudiera ser ni persona, ni (reino elegido en la respuesta 1+), ni (reino elegido en la respuesta 2+), iqué es lo que mas le gustarfa ser”, El sujeto responde realizando la tercera eleccién: 3+. Se registra su respuesta y nuevamente interrogamos: “;Por qué le gustaria ser (elecciin 3+)". Llegado este punto y habiendo obtenido por lo menos una respuesta correspondiente a cada uno de los tres reinos 6 clases, damos por finslizado el interrogatorio en el que ave- riguamos aquello que al sujeto le gustaria ser y pasamos a investigar aquello que no le gustaria ser, para lo cual intro- ducimos la primera consigna de las elecciones negativas de este modo: “Ahora le voy a hacer otra pregunta: Si usted no pudiera ser persona, zqué es lo que menos le gustaria ser?” El sujeto da una respuesta a la que denominaremos 1., que puede ser un representante de cualquiera de los tres reinos (animal, vegetal, objeto). ‘Una vez registrada la respuesta, se procede a preguntar: “{Por qué no le gustaria ser (reino elegido en 1.)?". El sujeto responde y registramos su explicacién, Imego se procede a formular la primera consigna, agre- gandole la eliminacién dol reino o clase a Ia eual portenece la respuesta 1-: “Si no pudiera ser persona ni (reino rechazado f en 1+), squé es lo que menos le gustaria ser”, El eujeto rresponde procediendo al segundo rechazo, que registramos como respuesta 2-. Le preguntamos “ ‘Por qué no le gusterfa ser (eleecidn 2-)?, Se rogistra su respuesta, Para proceder a la tercere catexia, se formula la primera corsigna eliminandose les reinos o clases rechazados on 1- y 2-. Ejemplo: “Si usted no pudiera ser ni persona ni (reino rechazado en 1-} ni (reino rechazado en 2-), {qué es lo que menos le gustaria ser?". El sujeto responde procediendo al tercer rechazo: 3-. Se registra su respuesta y otra vez inte- rrogamos: “jPor qué no le gustaria ser (rechazo 3). Liegado este punts y habiends otenide nor lo menos una 1a corres reinos o clases, or terminado e] test. ‘Para mayor claridad, a continuacién transeribimos un ejemplo de administracién del Cuestionario Desiderativo: Suieto masculino; edad: 20 aitos. ~-Si no pudiera ser persona, jqué es lo que més le gus- ‘aria ser? TDR. 5° Le —Liebre Por qué le gustaria ser liebre? —Porque es répida y liviana, ;_Sine pudirn ser persona ni animal, zqué es lo que ms le gustaria ser? ‘TR. 10" 24: —Fratilla, —yPor qué le gustaria ser frutilla? Porque es una planta agradable, porque me gusta el color rojo fuerte, —-Si no pudiera ser.persona, ni animal, ni vegetal, save es lo que més Ie gustaria ser? ; TR, 3" 34: Piano, —~Por qué le gustaria ser piano? Porque es el sonido del instramento musical que més me gusta. —Abora le voy @ hacer otra pregunta: Si no pudiera ser persona, {qué es fo que menos le gustaria ser? 7 TR. 3" 1: —Cactus. “Por qué no le gustaria ser cactus? —Porque pincha y esté aislado, —Si no pudiera ser persona, ni vegetal, gqué es lo que menos le gustaria set? ‘TDR, 5" 25 “Pantera. —iPor qué no le gustarfa ser pantera? —Porque hace mucho dato —Si no pudiera ser persona, ni vegetal, ni animal, caué es lo que menos le gustaria ser? 23 20 sign on les catexias positivas que en Jas negativas. En caso de {allar-en Jas primeras, el Yo no sabe @ qué recursos apelar para dofenderse a pesar de saber de qué defenderse, En el sezundo caso sabe oimo haverlo, aungue no tiene claro qué es lo aue teme Sobre este tema coincidimos con Ocampo on el primer punto, pero encontramos que el segundo podria, tener una explicacién mds abarcativa, en el sentido de qué’ cuando el sujeto falla en las positivas y responde bien en las negativas, esto quizas pueda atribuirse @ que inicie la tarea con un monto importante de ensiedad que le impide organizarse para der las respuestas. Si luego mejora en las respuestas negativas, esto puede tener que ver can el buen rapport y con que la serio positiva le ha permitida efectuar un aprendizaje y recuperar la instrumentalizacién de las defeneas perdidas on un primer momento, y se puede reestructurar y responder. En este caso, al fallo de las catexias positives podria interpretarse, mas que como un fallo de las defensas en si, ‘como tna necesidad de més apoyo y contacto con el estimulo como para familiarizarse con éste y responder a él. En el caso contrario, en cambio, parece poder mantener los defensaz de mancra sobreadaptada on base a una impor- ‘ante digociavidn_que le impide ponerse en contacto Gon sus aspectos conflietivos, Esto parece velacionarse on poca_ca- pacidad de insight, escasa reflexion y al no haber egodistonta, ya que no hay nada que no le gustaria ser, nos inclinariamos fa pensar en caracteropatias, en las cuales los impulsos y sus defensas han sido asimilados como rasgos de carécter. Caracteristicas de esta téenica y su relacién con la simbolizacion Es una técnica de“estimulaci6n v produccién ver! En los tests graficgs, ol estimulo es verbal (por ejemplo: “dibuje una familia”) y la produecién es gréfica. Fn. Tos tests verbales de estimulacién visual (PAT, TRO), la estimulacién es doble: consigna verbal (‘nvente una historia") y estimulo visual (ldmina oon escena). La produccién del sujet es verbal (relate de la historia). Hn todos el sujeto debe simbolizar. En unos (TAT, TRO) la simbolizacion so apoya sobre una imagen que se le presenta al sujeto. En cambio, en los tests de produccién gréfica y los de produccién verbal, es el sujeto auien, sin apoyatura alguna, tiene que actualizar en un caso imagenes visuales (graficos) y en el otro caso conceptos ver- ales (CD) sin ningtin apoyo oxterno, En ambos casos esto implica un pedido que significa un mayor esfuerzo para la simbolizacién, en tanto rocreacién de engramas adquiridos. En el Desiderativo no se le proporciona al sujeto ningdin eoncepto palabra soporte. El esfuerzo al que es sometido el t i ‘Yo 28 mayor que en Jae otras técnicas, Por lo tanto, la posi- il suisto de organizar una respuesta nos brinda mayor {nfumaciGn-aue las restantes téenicas aoorea do la integriéad Es importante en oste test evaluar detenidamente la adesuacién & la consigna, porque ésta es el tinico estimulo que se Ie presenta al sujeto. Desde el punto de vista del entrevis- tador, la dificultad hasta el momento consiste en no contar con indieadores aspectficos que permitan llegar a los criterios de interpretacién postulados por algunos autores, y no disponer de respuestas clisés 0 estandarizadas a partir de muestras cggrativas ‘Birabejos de vatidacion ayadarian a orientar la incerpre tacion dol Cuestionario Desiderative The Consiga del Cuestionario Desiderativo de Bernstein En la bibliogratia existente sobre el tema, la consigna ha sido transmitida en forma sucinta, sin poner de manifiesto las imi tiples vicisitudes quo sufre en su splicacién. ‘Se ha consignado hasta ahora que se espera que se ex- preson tanto en catexias positivas como negativas una res- puesta perteneciente a cada uno de los tres reinos: animal, Vogetal e inanimado. Sin embargo, una caracteristica esencial do esta técnica es que al sujeta después de la primera con- Signa, que es comin a todos, s¢ le da Ja absoluta libertad de slecciin de reing, sin mencionar qué debe elegir, A partir de ese momento el orden de la produceién sigue un trayecto de- feeminado por al propic sujeto y no por el entrevistador, quien, por el contrario, debe asumir una participacion activa elimi- harido sucesivamente los reinos que el exeminado ya eligié Estg implica reacomodaciones constantes por parte del entre- vistador en la aplicacion de la consigna. Por ello, y dada Ia importancia que le asignamos a Ia consigna en este Last, queremos aportar pautas elaras para que se sje un eviterio unificado en ia aplicecion de la misma. Mencionasnos ya stipre cules fueron las aportes de Berns tein, La consigna plantea al sujeto “Sino pudiera ser persona, iqué_es lo que mas Je gustaria ser?” Una ver producids Ta respuesta, Ia segunda parte de le consigna es: %Por_qué?™ Como vemos, Ia eonsigna ests plan- feada de_tal forma que en la primera parte (Si no_padiera Ser persone’) sole pide al sujet que ee desidentingue-en tanto Ser humano, mientras que. on Ie segunda parte jQué es lo us mas le Gustaria ser?) se le ofece 1a posbilidad de r2i- ge jetos), Ef ‘ELpedido de que el suioto aclare jos fundamentos de sus 21 24 TR. 5° 3+ —Piedra. — 2) ‘Cuando Ios TR aumentan o disminuyen abruptamente en undo varias catexias, constituiifan indicadores de una situacién de conflicto para el sujeto. Dicho conflieto se inferira a través del gontenido del simbolo’y de la racionalizacién. 3) Cuando los TR aumenten o disminuyen a lo largo de 39 Ia secuencia ent la técnica, constituyen indicadares de las viei- situdes de la ansiedad, a) \"Disminucién progresiva del TR. El sujeto presenta un TR mds prolongado en las primeras catexias (14; 1-) disminuyendo en las siguien- tes. Esto implica que’ el sujcto ha podido efectuar una experiencia de eprendizae positive que contribuye a dist b) . Aumento progrésivo del TR. El sujeto presenta on TR esperable en las primeras eatexias, aumentando éste progresivamente en las siguien- tes, Esto implica que en el sujeto la experiencia no lo ayuda @ disminuir la ansiedad. 4, Secuencia de la eleccién de los reinos La secuencia esperable guarda relacién con la hipétesis, teérica de que ‘una personalidad saludable tendré una estruc- tura psiquica en la gue predomine el instinto de conservacién sobre los impulsos de muerte y que, por lo tanto, frente a un ataque o contrariedad, el Yo det sujeto rescatard sus aspectos ms vitales para preservar su integridad. De ahi que, como difimos, la secuencis esperable para las positivas sea: 1+) animal; 2+) vegetal; 3+) objeto. @Por qué consideramos esta secuencia como un indicador de mayor salud? Porque, exctuyendo al ser humano, los animales son los gue, con relacion 2 los restantes reinos, eonservan mas los impulsos vitales ligados a la autoconservecién, al instinto sregario y a los vineulos, tanto amorosos como agresivos, etc. Los vogetales les siguen en el ordon al cumplir un ciclo vital ~ (Ge procrean, erecen, etc.), pero, por lo que se sabe hasta ahora, carecen de vida instintiva, Por ultimo, los objetos inanimados carecen de vida. En funcién de lo expresado anteriormente, sera esperable que la secuencia en las catexias negativas fuese exactamente la inversaj tal como postula Bernstein: 1-) objeto; 2-) vege- tal; 3.) animal. Esto no es tan claro como en las positivas, desde la experiencia, Aqu{ fa eleceién de aquello de lo que cl sujeto ee desembaraza primero depende de lo que resulte més conflictivo para él: sus propios impulsos rechazados 0 ‘sus aspectos sentidos como mas muertos. Los desvios de la secuencia esperuble en las respuestas positivas (empe7ae. por Jo inanimado 0 por lo vegetal).‘mostraria una estructura me- nos saludable, que para enfrentar los peligros (consigna) nece- sita desvitalizarse, epelando como defensa a una actitud de mayor pasividad ¥ desafectivizacién, Siendo con esto que ¢l cd i sujeto paga un alto costo (émpobrecimiento) para poder adapiarse. IL. PASOS DE APROXIMACION PARA LA INFERPRETACION DEL MATERIAL Para efectuar una Bvaluacién Dindmica y Estructural del aparato psiquico a partir de los indicadores propuestes para la interpretacién de la téenica, efectuamos en pasos sucesivos diferentes lecturas del material, “a primera lectura de un CD nos brinda una apreciacién global acerca de la adecuacién o inadecuacién, riqueza o pobre- za, eve, del material. Es importante observar el lengua utili- Zado por el sujeto y sa adecuacién a la edad, nivel cultural, tte, Prostar atencién a los TR, si estan dentro de los espere~ dos y, en caso de que se desvien de ellos, inferir a qué situa- cin puede deberse. Bs conveniente ir anotando todos Ios fallos que encon- ‘tromos en los mecanismos instrumentales, asi como el tipo de falios. Primero prestaremos atencién @ Ta resolucién que ol su: jjoto hace de la consigna: aqui estaremos evahuando Ia primera disodacién instrumental Ba ana segunda mirada focalizamos si el sujeto dio tres respuestas positivas y tres nogativas aludiendo en cada serie 2 los tres reinos, ‘Aquf estamos evaluando en primer término la segunda disociacién instrumental (ver si pudo separar los aspectos de sf que quicre resguardar y los aspectos de los que quiere deshacorse 0 rechazar). En segundo lugar, también estamos evaluando la identificacién proyectiva, al tomar en cuenta la produccién de simbolos y la secuencia y presencia o susencie de reinos. ‘Luego observamos los fracasos. Si los hay en qué catexia se dan, en qué reinos y con qué pueden estar relacionados. ‘A continuacién prestamos atencién @ las racionalizaciones, explicitando cémo son desde el aspecto formal (l6gica, ete) Dado que, como desarrollaremos més adelante, los mecanismos jnstrumentales se relacionan con funeiones del Yo, se podré inferir el éxito o fracaso de los mismos, cudles se preservan, cuales no y en qué grado. Para evaluar el punto 2, vieisitudes de la ansiedad en cuanto al monto de ansiedad, afiotar si en el protocolo los fatlos fen los mecanismos instrumentales van disminuyendo, 0 si por fl contrario van aumentando a medida que el test avanza. El monio de ansiedad seré considerado alto. si los fallos que se producon son los considérados de los mas severos, El monto 41 42 de ansiedad seré considerado como adecuado si no se producen fallos, 0 los fallos son de los considerados parciales, Para evalvar el punto 3, tiempos de reaccién, habria que tener en cuenta si los tiempos son parejos, lo que evidenciaria tuna manera idiosinerasiea de reaccionar, 0 si presentan alti- hajos 0 diferencias importantes, en cuyo ¢aso tendrfamos que prestar atencién al contenido de los simbolos y las racionali- zaciones en que éstos se producen, lo que revelarfa posibles eonflictos expresados en dichas catexias, En estos casos el tiempo puede alargarse demasiado 0 por el contratio, acortarse bbruscamente. Otro punto a tener en cuenta es la disminucion progre- siva o el aumento progresivo de los TR. E] primer caso indica que hay un buen manejo o dominio de la ansiedad por parte del Yo; y el segundo caso evidencia que el Yo es superado por ia ansiedad y queda sin eapacidad de dominio frente a ella. Para evaluar el punto 4. Secuencia de la eleecién de rei- nos, observaremos la secuencia de catexias positivas y negati- vas con relacién a los reinos. Los desvios son significativos y nos llevan a tratar de detectar a qué problematica responde el fracaso, Para efectuar la evaluacién Dindmica y Estructural del Aparato Psiquien integramos los indicadores antes desarrolla- dos con Ja interpretacién que surge del andlisis de los aimbolos y sus significades, que constituyen otros de los indicadores propuestos para la interpretacién de la técnica, evaluéndolos desde los puntos de vista universal, cultural y personal. ‘A medida que vamos haciendo al andlisis sucesivo dé las catexias, los contenides se van relacionando entre sf, enri- queciendo y complejizando la interpretacion del material. Esto surge del cotejo, muchas veces no sistematico, entre Jas catexias positivas y negativas, a veces entre las respuestas 14 y 1, 24+ y 2%, 3+ y 3, ete, Otras, entre las respuestas positivas y negativas del mismo reino, Griterigs de evaluacién dindmico y estructural del funcionamiento global de la personalidad A partir de los indicadores propuestos para la interpre- tacién de la técnica podremos llegar a las inferencias que nos permitan formular hipétesis sobre la estructura y dindmica del aparato psfquieo, Si bien la técnica no ha sido formulada para arribar 2 un diagnéstico clinico estructural, de todes modes, a través de Ia intogracién de las inferencias realizadas a partir de la totalidad de los indicadores, podemos llegar a formular hipétesis acerea de su modatidad de funcionamiento (neurosis, psicosis, perversién). Para ello nos hemos basado en el cuadro ine EN | 1 ii neseae ei de Anna Freud sobre el Perfil'del Desarrollo Metapsicolégico", en dl que introdujimos algunas modificaciones, Aspectos a evaluar del Aparato Psfquico Punto de vista estructural A) ELLO: ‘ + Pulsién de vida o muerte. Integracién y desinte- gracién de las mismas, * Distribucién de la libido: nareisista-objetal + Puntos de fijacién: oral-anal-uretral-falico. B) YO: + Funeiones: 1) relaci6n con la realidad (adaptacion a la misma, interpretacién, procesos de pensamiento, cri- terio de realidad), 2) regulacién y control de los impulsos, 3) fancién sintetizadora. + Mecanismos de defensa: a) primitivas; b) pre-edipi- eas 0 evolucionadas (edfpicas); c} predominantes on cl sujeto (isociacién, aislamiento, desplazamiento, represién, te; d) eficacia ¢ ineficacia de las mismas en el control de la angustia; e} interferencias de las defensas en los logros del Yo; f) energia destinada por el Yo para man- tener la organizacién defensiva ‘+ Esquema corporal: vivencia de la integracién del propio cuerpo + Identidad sexual: rol sexual, identificaciones. + Retaciones interpersanales: tipo de vinculo fan- tavcade que ol eujeto tiende a cetablecer (simbistico, dependiente, discriminado, ete.) ©) SUPERYO: + Ideal del Yo: metas que el sujeto se propone al- canzar. Bvaluar si es primitivo o maduro, con adecuacién a la realidad 0 excesivamente exigente. + Concieneia moral: grado de internalizacién de las normas, Evaluar madurez o inmadurez Punto de vista estructural y dinémico CONFLICTOS L) Evolutivos (ligados # crisis vitales: nacimiento, adoles- cencia, matrimonio, menopausia, muerte). 43 2) Aocidentaies (enfermedades, mudanzas, separaciones, etc.). Para Anna Freud, los llamados en niios “conflictos externas’. 8) Intrapstquicos: son los internslizados y los internos, propios de las neurosis. Son conflictos entre las instan- cas psfquicas, + Libido narcisista y libido objetal ‘Tomartios los criterios diagnésticos de Anna Freud:"” vande obealy oi east sfente naressme (primero y stn “iavistido on el cuerpo, al Yoo al Superyé) pare asemurar eu Tespolade-s-suauinestimn. an snide do binestar tin hegar a ie _silsestimacin de sf mismo, indsbida independoncio oketa,.m.e una SI's mismo (..) Descabnir el grade de dlependencia de la propia estimacién de las relaciones objetales. “En relaciin la Ubido de los ebjetos, exarinar y descubrir si en el nivel y calidad dle las relaciones objetales (narcsista, anaclitica, Observables ¢ indicadores desde Ia técnica Punto de vista estructural A) ELLO: ¢ + Pulsién de vida y de muerte, integracién y desintegra- ;-cién de pulsiones libidinales. (Para su andlisis tomamos en cuenta tanto el contenido simbdlico del simbolo asi como de la.racionalizacién y Je segunda disociacién instrumental, Creemos que, cuando en las catexias positivas los simbolos y_las racionalizaciones destacan_aspectos c08, de cuidads, ateaccion, ull env Ta catexiay negativas se rechazan aspectos dafinoa, iniles,. jue haya’ una polarizacién-entre los misinos (éxito de la segunda disociacién instrumen- ial), el protocolo pone de manifesto la integracién de Jas pulsiones. ‘Ejemplificaremos con un caso completo: 14) Me gustania ser esr, porgie No me gusarfa ser rat aide may bien de so ety porque In gente Ia rece Gfonscancla objetal, oeespien, eps, posvedipea, adolescents, ee) el sujeto ha progresado de acuerdo a’su edad. Si en el momenta de Ja evalugeiOn el nivel mas alto sleanzado se mantione o ha sia aban- donado regrosivamente, si las yelaciones ohjetales existentes corres- ponden con el nivel mantonido 0 on regresion de la face de dess~ riolloe Pasaremos a continuacién a detallar los Indicadores desde la téznica. Para ello haremos un cuadro donde se desarrollaran correspondientes a la libido narcisista y a la libido objetal, Ineadores de ia naresi desde Ia tentea Descie el simbolo: Bet adecnedo Sino de lor t198 re Br exouo efecto (Odjotor sndestructibs. CObjetes amnipetentes, Pereeverscon etal Teh no (per wer la eons Objetos disgregsdine. Oe Jets de frag eonsston- Gin, Beteevracin en el reine por vivenda. de toned conse doa mena toner gooerel Yenenone fe como tn aaque nate pobresny va, 24) Me: gustaria sor arquides, 2) No me. gusterta ser ence Sati = ferguson Unaae 3embe: dat pufgue edb al Sono = Jaco ona can ‘stray prendindeme Desde la racionalizacién: $0) Mo gustaria sef Banco de 3) No me gustaria er Santa : eect ae a bina, porque etl reduno do ‘Rit porgue tens pines 7 i on = fa Yorde ya gone pode seme pain gincar eI gee gue i _— Aleeuedos rational — Sobredimensions. — Scbredimensions- Uae canedament, pase a ln, ‘ Facies con fondamen- ats en gstiven dela wiento del jstieacin tastn ed In logics fre jacacin —Aentua- en negtivas con sens Bs casetiga ets ab ecspot ant taat enact mel ‘in de cnlddee recep Son de stahides recap Pe cag eae a areata ei reels jane Tha postvas, capac pata del edad ot. vogasvan de mala fimbolos activos-pasivos, bondadosos-agresivos, constructivos- fad de inclu, ‘aspectos tivods otro, Acentua- del tro, — Acentaacin féestructivos, 0 cuando los afectos expresados en las catexias Yallios Go" amon, conde euelidades de de anpectn negaives det positivas y negativas son polarizados, esto daria cuenta de la Sen coded ie aid aida, lt ar ma Sr ea intogracidn de las pulsicines. Hida adad, lad, azn ley ein" ftw Bjemple: f5), se nvelueranoe i 1) “Me gustaria sor un coat, porque es suave : sen ae ee i shies eee peligro teen Crs a nl : jerno. cde por venta. de (ie 2) ‘No me gustaria ser bomba atémica, porque es ae 0 brea ere aa tr desea 7 va trvencia Ge in ‘nespeeléa 46 Indicadores de libido objetal desde la tenica Como dice Anna Freud, la libido objetal se desarrolta en nivel y calidad de acuerdo con el desarrollo evolutivo del sujeto. Tomaremos en su sentido més amplio el concepto de libido dbjetal: lo haremos a partir de la etapa postedipica, en Ja que también sufre vicisitudes relacionadas con el pasaje del sujeto por las sueesivas etapas vitsles y por eventuales crisis accidentales, Desarrollaremos los indicadores de libido objetal desde la técnica ateniéndonos especificamente al monto o quantum, En este sentido, diferenciaremos entre una equilibrada dis: tribucién de la libido entre el propio sujeto y ol objeto, un exacerbado reforzamiento de la libido narcisista y una exa- gerade catectizacién de los objetos. En el CD esos aspectos se yerian a través, principalmente, de la racionalizacién, En los casos en que hay una equilibrada distribucién, es Jesperable que en algunas de las catexias del protocolo se pri legie a través de la racionalizacién la relacién eon el objeta y \en otras, predomine la referencia a si mismo. 7 Cuando en las racionalizaciones predomina una exagerada referencia al si mismo (en todo el protocolo) en detrimento de Ja relacién con los objetos, estariamos frente al caso de un exaverbado reforzamiento de la libido narcisista. ‘Cuando por el contrario, las racionalizaciones a lo largo de la producci6n siempre inclayen al otro estamos ante una exagerada catectizacién de los objetos. El cuadro que sigue se refiere al quantum de libido objetal. Equttibredo Lievcerbode Defcto tela Sparecan relteradas fefereneae al tr, sea Seeds une rama ada aa Vinelar 0 desce te fereater modalidades ‘empl: Ty Me gustaria sor bres porque es algo gt para Ja ents, dan efor Sin y le poate te para le cuperasisn dest mismo, 58) Me gustaria ser fel, porgue dav a, tiene y mde feel aspesto Sols sente, we fuente de Iesiad'y ds ener para Ins planter Een, Coa respecto a a calidad de la libido objetal y su rela- cin cor. ta eualidad del vinculo, ésta se delatard a través de Jos contenidos de las racionalizaciones, que darn cuenta del tipo de vineulo que establece el sujeto con el otro y que se co- rresponileréin con las etapas del desarrollo evolutivo de la li bbido objetal, Asi por ejemplo un sujeto que ha legado a un alto nivel de desarrollo evolutivo de la libido escogeria por ejemplo en las caterias positivas ser un drbol frutal: “para dar alegria y alimentn a la persona”. En este caso en a racionalizacién el otro esta explicitamente presente como receptor de cuidado. Un sujeto cuya evolucién de la libido haya aleanzado un nivel filico podré elegir ser un ramo de rosas rojas “porque tiene lindo color y perfume, a la genie le gusta’. En este caso en Ia racionalizacién hay una referencia explicita a la cuali- dad de seduccién. gulibrad Bevwerbode Detecto = Raciorsisaconss que —-Racionaliasciones que — Raclenalizacionce on Duden expitamente ala en tedaa’o algunas de lee qQe al olve aris ce Dresencia del otro en las cateriee aluden a a glisiamests susonte flguras cxextas del proto» presincia.explicta el todas ela mayorte de Tae fala y 2 otras ro otro (objeto: hiperpres catexias, serie, Elempto on un proto. Ejomslo en un proto’ Bjemplo en un proto sale calor, ete canaris, porque son fens, porgue ia | | pergue ss vals urcanto alegre la tente se'complace: | 24) Me. gustanie ser 14) Me gueterfa cer li Me gustarta ser [11) Me gustaria ser oro, fom Semana” |" pus ewe ae 29 Hee srs |24) Me"rourie to | nal Sige bee nehigeodens error ae | es Shep redhe o)| anand |" a pau fundies.” |s0) Mo ewseris eer | Srl ne ple te Me pestarte cor” on Coreen poe | gain ‘dns, porgue as | ie iat tenes tanspareata farsn comin 9 50 1) No wie guttaris ser ‘verte revdhers porque ee | 1) Nome gustaria ser bn rma de feg0 7 tiene, porque pe puede bes. den cortar a la 2 gente aoe dave. der 2) None gustaria 8) Nome gustaria ser fier, porque s fo cr, porque todo el provacen mers upto lo eodicia. | 3) No me gustaria ser picle, porque a at unas personas no lee gusta ol ssbor ta fare "Dende a cnetes ton doe reapueeas dl miame suet AT F 48 + Puntos de fijacion: Bstos se infieren desde la técnica & partir de los simbolos y de las racionalizaciones. Dice Anna Freud:'* ‘Desde que presumimes que las neurosis (y otras patalogtns) se Jnician en las regresiones de 1x Wide hacia los punta de Sjacson Ae los niveles anteriores, la Toealizacion de estos puntos problema cos en la historia del sujeto es uno de los intertses vitales. del examinador. Durante et diagnéstieo inieil se delatan a por ciertas formas de conducta manifiesta: gue son carac. terfstiens de determinades sujetos y que permiten azribar a siertas conclusiones con respecto a les procesos slyacentes all Elio que han sufride represiones y modifesciones pero que han dejade una hella incenfundible. El mejor ejemplo. to. consti- tye el carictor absesive manifesto, en donde Ia limpieza, el ‘arden, lo puntualidad, la acumblasion de objetas, las dudas, las indecisiones, ete, traieonan a las dificaltades especiales experi- mentadas par et sujeto evande luchaba con les impueos de Ta fase sidico-anal, es decir na fijacién a esa fase, De manera similar, otree rasgoe del cardetar © aetitudee, treisionan @ los puntos” do fjzeiin on otros niveles a en otros campos, (La Dreoeupaciin por la salud o por la seguridad de los padres ¢ hhermanes, demuestra dificutades especiales para enfrentar de- seos de touerte de Ta infancia; el temor a Tas medicinas, los Caprichos alimentarios, etc, sefalan la defensa contra fantassas rales; la timider, contra al exhibieionismo; la anoranes por el hogar, a la ambivalencia no resuelta, ete 6) por aquellos item en la Sintomatotogia: las relacones antre Ja superficie y 1 profundo estan firmemente establecidas, sin posibilidad de variacién, y familiares al entrevistador, como los Sintomas de las neurosis cbsesivas con sus puntos de fjscién eenoeides. En contvaste, sintomas tales como la tentira, horio, Je enuresis nectuma, ete, con su etivlogia miltiple no suministran informacién genética durante la etapa diagndstica ©) por Ia actividad de ta fentosta del sujeto: slgunas veces tralelonadae aecdentelmente durante 1 prosedimiento. diagnos tico, por Jo comin aecesibles Ole por medio de los tests de personalidad {como en este caso a través de las respuestas do} sujote at Cusstionario Desiderstivo} En la téeniea cada simbolo tiene un significado, En algunos casos la cualidad del mismo esid expresada por el significado cultural que socialmente se atribuye al simbolo en sf mismo (gallina, burro), En otros casos, la racionalizacién es Ja que aclara el significado por el cual e simbolo fue elegido (por ejemplo: no me gustaria ser érbol, porque lo cortan). Los contenidos de los simbolos y las racionalizaciones jerarquizan, fen la aceptacin o en el rechazo, determinados aspeetos de los mismos, que nos dan cuenta de los puntos de fijacién a: —una fase de la evolucién psicosexual de Ia libido; —determinadas representaciones psiquicas a las cuales la pulsién se mantiene jada.” Ejemplos*; Punto_de fiiacion oral 14) ferro, porque lo cuidan, lo alimentan, le dan galletitas. 2) Repollo, porque se lo comen. Punto de fijacién anal: 1+) Perro, porque siompre es bueno, es fiel al amo, cuida la casa y es limpio. ) Una bomba atémica, porque destruye todo y mata, Purto de fijacién filico: [3+) Jazmin, porque tiene un perfume panetrante, 2+) Rosal, porque me podan. B) YO: Con relacisn a este tema, desarrollaremos los conceptos de las Funciones del Yo siguiendo ef esquema esbozado por Be- llak, L., en el libro Esquizofrenia, Bl autor efectiia desarrotlos teéricos a partir de los conceptos freudianos sobre el tema. Relacién con la Reatidad: Debemos tener en cuenta, al referimas a esta funcién, dos do sus componentes: ellos son la Adaptacién la Realidad y la Interpretacién de ia Realidad. ‘Adaptacién a la Reslidad: Para Bellak, el concepto de ‘Adeptacién a la Realidad y la funcién Sintetizadora del Yo se superponen. La Adaptacién a la Realidad so refiere a las fun- ciones auténomas de percepcién, pensamiento y ejecucién mo- tora. Incluye ademas, un satisfactorio dominio de las pulsiones y el empleo de defensas adecuadas. En cierto sentido, est relecionada con el ajuste 0 acomodacién al medio. Interpretacién de la Realidad: implica Exaetitud on la Per- cepsién y Solidez de Juicio, Una interpretacién acertada indica tung buena diferenciacién de los datos exteriores con respecto a les sensaciones anteriores. La Solidez del Juicio se relaciona con los Procesos del Pensamiento. Nos referimos aqui a los pro- cesos primario y secundario del mismo, El proceso secundario se desarrolla a partir del primario, pero sin excluirio. Esen- cialmente el proceso secundario puede reconocerse por el us0 de !a logica formal, mientras que el proceso primario se rige por ciertas caracteristicas formales tales como la condensacién, desplazamiento, cambio por lo opuesto, identidad de opuestos, simbolismo, aseciaciones laxas y absurdas y la deformaciin de Ja realidad. Criterio de Realided 0 examen de realidad, También se releciona, al igual que ta Interpretacién de la Realidad, con tun reconocimienta que diferencia adecuadamente entre los estimulos que provienen del medio externo y las sensationes que provienen del mundo interno. Esta funcidn esta relacionada a la percepcién més que al pensameinto. Regulacién y Control de los Impulsos: éste depende de que el Yo sea capaz de seguir ol camino de la conducta sustitutiva 49 a 50 consistente en posponer una satisfaccién inmediate por otra mas lejana, pero mayor. ‘También esta implicada en esta funcién la tolerancia a la frustracién y el control de la ansiedad, asi como ta tolerancia a la incertidumbre y la capacidad de sublimacién, que implica la transfarmacion de la energia impulsiva, convirtiéndala en fuerzas al servicio de las funciones adaptativas del Yo. Es factible, a través del analisis de los mecanismos ins- trumentales, formular inferencias acetea de estas fuciones, FUNCIONES DEL YO 1. RELACION CON INDICADORES DESDE LA TECNICA. TA REALIDAD A ADAPTACION ADECUACION INADBCUACION 3A REALIDAD 1 Diferenclacién entre Comprensiin do In con. Respuestas come “no en figura y fondo. signa y subeonsignas co- tiene, no ne". Conf roo esti. son entre pastivas y regia, by Conducta pristica, Resolver sin generar Pallas parcislos de Ia problemas dl pedide dela disecadisn. Acombre, consign Comentarios, —caeston rintee ©) Bepontansided y crew: ‘TR gormales. Capudidad TR muy brovee 0 prolon- thin, Regrecon el ser’ Ge dar’ espusetas cou gods pate acomoderse. Mao del Ye Simboles pertinentes Respoestas anttopoménf= ods una fe lar sabeon~ eon olelon, Fabae a Ta signas imboksasién (eouaciones Smbilees, Reierecn do eines A. INTERPRETACION DE LA REALIDAD Bactivud en la per- Adecatda _comprension Respuesta de _blogues. cpt. Ge In. sonsigne. Hecone Sentir la consign como Gwionte def "como a, un staque Blvccionoe simbslieas Palo de In segunds die pertnentes a law cong: cia, fs yroeensenas. Repu aniepemér 1) Solider det jc, Capacidad do formulae Raclozallzaclones can f raclonalizaciones ade- as en la Ijin. Rado. fanlas «Ios clei. aalizaconas donde "ee Te eivecira-comervade, hace tefurensia abibu- tes gue cl ambole eo peese (Gnzamiento ds} Smile). Bjeroplos (gomanin rer mentaas, porque puedo mirar Tas ‘ures? © Pmessos del pense: 4 Capacidad para oviter Ja contaminadion een aspectos o-mnpulsee ° Inopropiadas. Abstracin, cnrrento DB TA REALIDAD Buena delimitasion de la Sontarse del Ya 12, REGULACION Y¥ CONTROL Ds Los MPUuLsos Copacided do adem tar conductae bese @ demas, ADECUACION, Predominie del proceso seeandat (aiblon, Men divest consevada (raconelizasién Represdn oparativa ‘Sinbolos ¥racionalseién Ge) je ADECUACION Simbolos do estructure 1 Miniter precios, com Gietencia. 7 entructare Dbasna delistectin om tre al saato y el biota, Sovaraaizcis en Ine a lonaliseenes ‘ese Ades inherenies al ob. sete Capacided de compoes der al vee a de le cong, Capacided de responder cava stale, INABECUACION Boueciones simbaiea. Respocriae quo dsberion sporecer como. positives ch lee negations vow Racionahiesiones. desis: das por sustantacén en Tosice tis, Deformaciones e 1a res: ed. Relacones asics: Svar Taxa Porzaniete ae Tes eoalidades el oh Sincretieme. Condense- én, dorarguizeian or ae slecdiones de. eualldades seoundariee y ho pty ides ded abet, CConeretisnctones INADECUACION Sinbolos de Litas m= precnne, Simbolos de Enjegredo de estate Cogeran genérican Bespuestae sbtrocta, Recionalizaiones ate: ‘referencia, Confuse de ernst a8 propia dal cela © fon foreariento por parte et sujte. Subordinasioa de le ma sionalizadén a pen Irhentaegosbntica Hee Ducstasantrepomirfces Etcntsicadionee a vee, [etifieniones_prepec vas masivas. Coseretns Respuestes filens de re. hazo (gestes).Verbal= facin de dewealifcacén hacia al entrevista a teres 51 52, by Tolerancia a Le feae sracién ©) Tolersacla ela ae siednd a) Nosed itegrads 19) Tolsrancla a te ince dune 1 Sublimacin [FR denon de oe timies owas, Blecsin de simbolos prrtaneciantas ¢ los 228 Racinabcaconss en las ‘qve no etn Sneluides ontenidos hares cos vstided Secatncia progresva ee ered. TTR con scartamiento eo casndal Sorendizajes come ele: ments Ge carvesion Cintenciin dele sas ADBCUACION ‘Silos detadee de vitae haa ‘sssensin ce poaridadee Geotimieas del mov iiente entre postvas y egateae oder esperar ls scesi> van preguntes oder responder alos tres recs Cepacidad de remuesta nb Eewuencia progresiva que denota eprenaiaj. Ravionalisasiones aye Aneta deaviee de Ta aiecion orginal del “impuizal gbe hace refe- Actitudes de. sorpress confusiéa, que indiquen aque Ie consigns hs sido Ssnside come un atague Bloquea 1TR axcasivamente breves » prlongedos. Bistciones extropemst= fens Racionaligationes con foreamiesta. ol seribsile fie elecién tala human. Blogieo. Perseverasion. de. celnas Alargamiento ce los Th. Motfienisa de Ta se ‘eertamiento exoesivo Palatina de Tos TR oe mo expresion de reo puesta de earacteristicas Perearbscien dal proceso ae sprendieae INADECUACION Simbolos sin eannstadcn devia, Simbolos con moviided srscerbads, Racdonalizasién gue omic fe sobraye iden de ovimiente cen forza: Bolaridades dieotsmicas fotre positives 3 oegat Ss con respecte al me: Aeartamiento de los FR Perseverecin de tino, Secuencia que empeoce, Beaacisn sls, Blaques ‘Autorreferelas Recionsizscones redan- antes en eonteniée forzadas en su cual.” HE FUNCION ‘SINTETIZADORA a) Unie, organiee, Nigar, Repuestas simbsiees bion Concetizacones crest; eapecidad del Sntegradas -lecsanse canfose, fig para former Ges: Reepoestas con dfrercia- mlsisles tien clin de To primordial To + DEFENSAS Regresivas, precoces, adaptativas bas defensas tienen que ser evaluadas en cuanto a su adecuacién, de acuerdo con el momento evolutivo del sujeto, Diferentes autores ubican e] surgimiento de los mecanis- mos defensivos en disimiles momentos del desarrollo psiquico. Sin embargo, todos concuerdan en la mayor adecuacién 0 inadecuacién de los mismos, en ciertas etapas evolutivas. Estas etapas del desarrollo se caracterizan por vicisitudes especificas de la pulsién, por desarrollos psiquicos de la es- tructara del Yo y por modos especificos de mecanismos de defensa."' Seguiremos a Glover en su andlisis evolutive de los mecanismos de defensa: “Ante la necesidad de controlar la tensién establecida en la primera infancia por las experiencias orales, se ponen en marcha los siguientes mecanismos: la transformacién en lo contrario (0 sea, las tendencias de la pulsidn a volver de la actividad a Ja pasivided), la proyeccién, la introyeccién. Al finalizar Ia fase oral (alrededor del afto y medio 0 dos fos) la primacta de los impuleos ex asumida por ol grupo uretral y anal (primacia que se prolonga hasta alrededor de los tres anos); el conflicto con el sadismo oral es reemplazado por el conflieto con el sadismo excretor. La expansion del sis- tema preconsciente, eonsocuente del ejercicio del habla permite gradualmente la accién de la represin. En la primera parte Ge este periods, comienzan a perfilarse las operaciones defen- sivas que se consolidardn hacia el final del mismo: desplaze- Iientos, formaciones reactivas y formaciones sustitutivas (ten- dencia a la sublimacisn). ‘Altededor de los tres y hasta los cinco ais, el aumento de les intereses genitales sefiala el comienzo de a situacién edipica, Siempre, segiin Glover, los mecanismos caracteristicos del periodo con la represién, ol desplazamiento y la subli- macisn. "Aproximadamente entre los seis y los once atios (perfodo de latencia) es esperable una reduccién cuantitativa de la 54 estimulacion psicosexusl, una tregua en las urgencias infan- tiles. Las defensas infantiles se coordinan_y se extienden, y se’multiplican las energias sublimadas. Se establecen ast nuevas relaciones objetales del tipo de sublimacién o inhibi- cién de fines. En Ia adolescenefa, bajo el impacto de lac nuevas y podero- sas excitaciones sexuales, el psiguisma puede mostrar signos de regresion. Sin embargo, las rolaciones sublimadas contintan extendiéndose y comienza la btisqueda de los objetos sexuales adultos. Los vineulos pueden estar caracterizados por un alto monto de idealizacién o de desvalorizacién. En la adolescen- cia, todas las defensas primitivas parecen reaparecer por un tietpo.” En el caso del adulto se espera que aparezca una conste- Jacién de defensas mas o menos estables, que seria lo que Hamamos el “reperiorio” de defensas propias de eada sujeto. Este “repertorio” puede ser progresivo o regresivo, de acuerdo con que las defensas 2 las que apela habitualmente el sujeto correspondan a la etapa edipica o postedipica o, par el contrario, a la etapa preedipica. Dobe prestarse, entonces, especial atencién sl uso fuera de tiempo de determinadas defensas. Puede darse que una defensa que en un adulto resulta adsptativa en un nitio pequefio represente una modalidad precoz ya que cuando una defensa es utilizada antes de lo provisto implica para el Yo un nivel de exigencia que supera sus posibilidades en relacién al proceso de evolucién psico- sexual normal de la libido y tiene posibles consecuencias en su evolucién. Ea cambio, ante crisis vitales o accidentales, un adulto puede apelar a mecanismos defensivos de etapas pre- vias del desarrollo, consideradas como regresivas, pero que para esa sitiiacién cumplen una funcién adaptativa, Desde la téeniea tendremos indicadores de si las defen- sas son regresivas, precoces o adaptativas, una vez que evar Iuemos las defensas predominantes en el sujeto y las compare- mas con las que teéricamente serian esperables para el periado vital que éste atraviesa. Defensas predominantes en el sujeto Este tema Jo desarrollaremos conjuntamente con el punto B) del cuadro YO: “Relaciones interpersonales”, Preferiremos la denominacién “relaciones interpersona- les” on lugar de “relaciones objetales”, ya que creemos que aquél es un coneepto mas aborcativo. Ai hacerlo no dejamos de lado los aportes de las teorias que refieren a la génesis de Ja construceién de joa vineulos, sino que creemos que con esta denominacién pueden ser reconocidos desde diferentes postu- ras tesricas, Bl desarrollo psicosexuel de Ia libide puede suftir diver- sas vitisitudes: tal vez la libido siga una tinea progresiva, tal vex quede mayormente fijada en un punto en funcién de con- fictos (llamados “puntos de fijacién”) 0 evelucione y vuelva por determinadas circunstancias regresivamente a esos puntos de fijacion, Sogiin sea el punto de fijaciin predominante del sujeto, éste privilegiard determinados mecanismos de defensa con los que se manejara habitualmente y determinadas modalidades de relacién interpersonal, que corresponderén al grado de evo- Jucién aleanzado por ia libido objetal. ‘Vamos a tratar ambos temas en coniunto porque desde la técnica los indicadores son comunes a ambos. Dichos indi- cadores son predominantemente los simbolos y las racionali- zaciones. En algunos casos los s{mbolos por si mismos tienen im- plicito un significado —atribuido universal o culturalmente— que da cuenta de un determinado mecanismo de defensa y de determinada modelidad de relacién interpersonal. Ast, por ejemplo, la eleccion de un satélite 0 un asteroide, En si mismo, al satélite 0 el asteroide alude a algo lejano, distante, soli- tario, La jerarquizacién de la lejanta, en las catexias positi- vas, sila conceptualizamos desde el mecanismo de defensa nos levaria. a pensar en el “aislamiento”. Si lo pensamos desde el punto de vista de la relacién interpersonal, nos plantea una ‘modal'dad que privilegia el no contacto y excluye bésicamente los sentimientos. En otro caso, por ejemplo, la oleccién posi- tiva de un vestido de lentejuelas alude a algo que recubre con brillo. Desde el punto de vista del mecanismo de defensa parece aludir a “seduccidn” y desde la modalidad de interaccién que privilegia nos leva a pensar en la bisqueda de atraccién del otro a través de aspectos estéticns. En otros casos es Ia racionalizacién, junta con el simbolo, lo que da la pauta tanto del mecanisino de defensa como de la modalidad de interaccién, ‘Asi, por ejemplo, le respuesta “perro” es una eleccién que no tiene un simbolismo implicito, y es Ix racionalizacién del sujeto lo que nos guiars al contenido simbélico que Je adju- dica. Si Ia eleceion fose “perro, porque To euidan, lo miman, le dan de comer, lo abrigen’, conceptualizariamos que como mecanismo de defensa se advierte la introyeccién y como mo- dalidad de interaccién predomina la necesidad de recibir afecto y aprobacién, subrayando la dependencia, Si la respuesta fuera “perro, porque es limpio, bueno, 56 cuida la ensa, es util porque es guardian”, desde el punto de vista del mecanismo de defense podriamos pensar en el pre- dominio de la formacién reaetiva, en tanto que desde la mo- dalidad de relacién interpersonal dirfamos que predomina la necesidad de aprobacién del otro, a través del ser util y buono, Queremos alertar al lector que estos ejemplos estan plan- teados desde una perspectiva didéctica. Para la interprets. cién en Ia téenica es necesario tomar en cuenta la totalidad respuestas, tanto de las eatexias positivas como de las Variedad de recursos defensivos o pocas defensas utilizadas de manera exelusiva 0 excesiva En este punto nos referimos a Ia disponibilidad de una variedad de defensas versus el uso excesivo y rfgido de una sola o pocas defensas, Bl sujeto que frente a toda situacién tiende a aislar los aspectos emocionailes de los intelectuales, pierde la posibilidad de vivir experiencias emocionales intimas y agradables. Un indicador de la primera situacién podria ejemplificarse ‘con un protocolo en el cual sélo se reseatan aspectos intelec- ‘nals en las tres catexias positivas, sin ninguna alusién a otras cualidades o atributos, 0 sea: de manera excluyente. La posi- bilidad de ir incluyendo secuencialmente diferentes aspectos vvaliosos del si mismo seria un indieador desde la técnica de la variedad de mecanismos, en tanto que la perseveracién consti- tuiria un indicador de Io contrario Efectividad de ins defensas La efectividad de Ja defensa tiene que ver con el factor econémico, si por ejemplo, el tipo de defensa utilizado requiere tun gasto grande y permenente de energia en forma de contra. catexia. Asi por ejemplo un sujeto puede no poder memorizar, como una expresién de un uso excesivo del mecanisino de represién. O un nifio puede no aprender por estar voleado a un mundo de ensuefos diurnos o fantasfas en las que se esté poniendo de manifiesto ol uso excosivo de la negacién compen- satoria de una realidad displacentera. La utilizacién de un cuantum exagerado y permanente de energfa psiquica puesta al servicio de la defensa se verfa en la técnica representada por la exacerbacién de mecanismos de de- fensa tales como la formacién reactiva, la represién o la nega- in. En el primer caso, el indicador desde ia técnica seria la reiterecién en dos o tres catexiee positivas de racionalizaciones gue nes seialan que el sujeto apela rigidamente al mismo me- eanismo de formacién reactiva para enfrentar sus conflictos y resolver la ansiedad, En el caso de la represién secundaria, los indicadores desde la técnica serfan: 1) la incapacidad de dar sfmbolos en varias catexias 0 2) la pobreza de los contenidos de la racio- nalizacion para justificar la eleccién: serian los casos de “no 86", “porque me gusta’, ete. Interferencio de las defensas en ios lagros del Yo Nos referimos aguf a Ios aspectos de los cuales el Yo prescinde para mantener la organizacién defensiva y que pro- duce un empobrecimiento en él: ya sea de aspectos intelec- tuales, afectivos, ete Estos aspectos se visualizan en las elecciones positivas, por las cualidades que quedan excluidas a pesar de que el sujeto dispone de tres posibilidades (tres catexias) donde repre- sentarlos y darles eabida. Como, por ejemplo, rescatar s6lo los aspectos intelectuales en las tres catexias positivas o sélo aspectos estéticos, sin ninguna otra alusién a cualidades o atributos de otras caracteristicas. La perseveracién en el uso de una determinada defensa darfa cuenta de la restriccién det ‘Yo, Las catexias negativas parecen hacer alusién al precio pagado por et Yo, al indicarnos de qué aspectos prescindira el sujeto para mantener su adaptacién., Por ejemplo: excluir la agresién, perder la autonomia, quedar aislado, ete, # Bsquema corporal Siguiendo a Schilder,.* llamamos *esquema corporal” a la representacién que nos formamos mentalmente de nuestro propic cuerpo. ‘Suponemos que la imagen corporal se va construyendo de acuerdo con las etapas dol desarrollo psicosexual, desde lo emocional y cognitive, en cada sujeto. Por eso, en el CD, parece importante reconocer si las eleceiones son compatibles con la etapa evolutiva. ‘Tanto en el simbolo, en algunos casos, como en el sfmbolo yen su racionalizaci6n, en otros, encontramos aspectos expre- Bivos de la integridad, completud y adecuacién cronoligiea del ‘esquema eorporal del sujeto. Las distintas cualidades dei sfmbolo y sus racionali- zaciones nos orientardn acerca de los aspectos del esquema cor poral que el sujeto més valora o rechava: el intelectual, el fisico, aspectos integrados. 57 58 ‘Cuando en las positivas-los sfmbolos son diserepantes con ‘el aspecto fisico real del sujeto, parecen responder a una imagen de ideal corporal que se quisiera ser y que no se es. Cuando en las negativas los simbolos rechazados en tamatio integridad concuerdan con el aspecto fisico del sujeto, esto indica reprcbacién y conflicto eon algun aspecto o la totalidad de Ia imagen corporal. Por ejemplo: un obeso en 1- rechaza ser elefante, porque ocupa mucho espacio, Hay casos de anorexia, en que el sujeto es delzado pero iguelmente rechaza animales 1 objetos voluminosas, respondienda asi no a aspectos objeti- vables de su imagen corporal, sino a la imagen corporal dis- torsionada que tiene de sf mismo, Bjemplo de la conflictiva relacionada con el esquema corporal en un sujeto masculino de baja estatura: 14) Me gustaria ser elefante, porque es un animal im- portante. 24) Me gustaria ser un rable, porque es compacto y fuerte. 3+) Me gustarfa ser un piano de cola, porque ocupa mucho espacio. 1.) No me gustaria ser una hormiga, porque es peque- fia, no la ven y la pisan. 2.) No me gustaria ser una planta de begonia, porque sélo sirve para hacer canteros, 3-) No me gustaria ser una moneda, porque se mezcla enire las otras y se pierde, porque es pequefia En las catexias positivas el sujeto elige sfmbolos u ohjetos e gran tamano, que ocupan mucho espacio y son faeries cxmo sobrecompensando su sensacién de pequeliez que se ve refle- jada en los simbolos y racionalizaciones de las catexias nega tivas. * Identidad sexual La identidad sexual (como parte del esquema corporal) también se expresa en los simbolos y las racionalizaciones"® El tema de la identidad sexusl, aunque tenga que ver con, el esquema, implica, ademas, un aspecto central de la identidad, ‘Los simbolos y las racionalizaciones son depositarios de las cualidades femeninas 0 masculinas, tanto a partir de la simbologia universal y de lus eohnotaciones histéricas perso- nales, como @ partir de las convenciones sociales. Serfan to- das estas significaciones las que a través del andllsis nos He- Donde ven crete on sespnelae de on oo ue van al recanocimiento de las cualidades masculinas o femeninas implicitas en las elecciones, Machas veces las elecciones son predeminantomente de género masculino 0 de género femenino, lo que también es un -ndicador de identidad sexual. En muchas ocasiones es el articulo que acomparia al mismo simbolo el que deno- ta la czalidad femenina o masculina del mismo. Por ejem- plo; 1+) Me gustaria ser televisor porque muchas personas lo Er el andlisis de este item es necesario incluir, ademés, los siguientes aspectos: 1) Concordancia entre el sexo real y el género y/o las cualidades de las elecciones positivas del entrevistado, Para analizar la identidad sexual del sujeto seria necesario detectar el género tanto de los simbolos ele- gidos como de los rechazados. por el mismo. Si, en general, el género vio las eualidades de los stmbolos elegidos corresponden o coinciden con ef sexo real del entrevistado, y prevalecen entre los rechazados los del sexo opueato, es posible pensar que el papel sexual asumido y su funcién estan de acuerdo con el sexo real del sujeto, 2) Cuando en las catexias positivas son elegidos al mis- mo tiempo simbolos de género yio cualidades femeni- nas y masculinas y lo mismo ocurre en las negativas, esto indiea un conflieto de ambivalencia con el propio sex0. 3) Si, en general, el género y/o las cualidades de los simbolos elegidos en las positivas no coineide con el sexo real del entrevistado ¥, al mismo tiempo, ¢l géncro ylo las cualidades de ios s{mbolos rechazados coincide con el sexo real, se evidencia un trastorno mayor que en el caso 2), que podria referirse a Ja no aceptacién del propio rol sexual, con presencia de elementos la- temtas y/o manifistos de perturbecidn sexual de dife rentes intensidades. En el primer caso parece haber coincidencia entre el Ideal del Yo y el Yo real. En el segundo caso parece haber discre- pancias entre uno y otro, pudiendo on algunos casos, implicar elementos de confuisidn a nivel de identidad. En el tereer caso se advistte una nitida distancia entre el Ideal del Yo y el Yo real, expresivos de un trastorno severa de identidad. A continuacién, daremos algunos ejemplos de los concep- tos desarrollados: 59 60 Ideal sexual normal o adaptative (sexo masculine): [ 1+) Me gustaria ser leén, porque es hermoso y fuerte, 2+) Me gustaria ser un érbol fuerte como el cedro, porque tiene buena madera. | 8+) Me gustaria ser un rifle, porque dispara bien. 1) No me gustarfa ser una hormiga, porque vive tra- bajando, 2) No me gustaria ser una planta de rosal, porque la podan 3+) Nome gustaria ser un florero, porque le ponen cosas dentro, Vemos que el sujeto de género masculine en este caso elige catexias simbolos generalmente aceptados como representati vos de cualidades masculinas y rechaza s{mbolos habitualmente asociados a cualidades femeninas (el rosal, la silla). Ambivalencia sexual (sexo femenino} 14) Me gustaria ser un elefante, porque tienen trompa larga pero son pesados y poco elegantes. 24) Me gustarfa ser una yuca, porque se expande libre- mente, abre sus hojes, pinchudes, oeupando cada vex mas espacio. | 8) Me gustaria ser un auto Porsche, porque tione po- tencia y va a mucha velocidad, 1.) No me gustarfa ser una arafa, porque vive atrapando insectos indefensos. No me gustaria sor un ligustro, porque es una planta que no ene gracia. 3.) No me gustaria ser una sille, porque se sientan en ella. En este caso Ja oujeto fomenina elige aspectos en que expresa su_ambivalencia tanto por Tos simbolos elegidos, mas- culinos y femeninos en positivas y lo mismo realiza en las catexias negatives Tdentidad sexual patolégica (sexo masculins [ 14) Me gustaria ser una garza, porque tiene lindos co- lores. 7 2+) Me gustaria ser una planta frutal, porque tiene | rates. $4) Me gustaria ser una guitarra, para que la toquen. | 19 Nee gustaria ser un jaguar, poraue ox may agro sivo, | 2) No me gustarfe ser un eucaliptus; porque lo usan para hacer madera 3.) No me gustaria ser revélver, porque dispara, En este caso ol individuo de sexo masculino elige como aspectos valorados objetos de cualidades femeninas y rechaza simbolos euya cualidad coineide con su propio sexo masculino, «Relaciones interpersonales El desarrollo de este tema ya ha sido ofoctuado, en conjunto con el punto Defensas predominantes en el sujet ©) SUPERYO: Dado que este cvestionario es aplicable tanto a niios como 1 adultos, es importante tener en cuenta criterias evalutivos para la evaluacién de aspectos del Ideal del Yo y la conciencia moral. Es esperable que en un nifio pequefi, el Ideal del Yo y el Supery6 se expresen con fuerte raigambre preedipica y tengan caracteristicas polares, primitivas: fantasfas séidicas, exigendias abrumadoras, identificaciones con alto monte de idealizecién u objetos muy peyorizados. En cambio, a partir de Ja latencia y progresivamente en el camino a la adultez, con las regresiones nermales en la adolescencia, debido al desa- rrollo emocional y cognitive del sujeto, es esperable que en su conjunto el Superyé-ldeal del Yo se vuelvan més realistas y por lo canto se reduzean las dicotomfas, se incremente la to- Jerancia a los fracasos, las puniciones esperadas sean mas amortiguadas y la exigencia del [deal del Yo x del Superyé mas acordes a las posibilidades del sujeto y a aquellas que la reali dad le ofrece. En el adulto tanto el Ideal del Yo como la conciencia moral so pueden expresar a lo largo de un continuum que va desde Io que lamamos “primitivo” hasta lo més evolucionado 0 madure. Esto tiene que ver con el desarrollo psicosexual de la libido y los puntos de fjacién predominantes, que condicionan la organizacisn de la estructura de personalidad y por ende a las caracteristicas de su instaneia reguladora, Incluimos a contimuacién un cuadro que intenta formular indicadores para su reconocimiento en esta técnica, 61 62 Super! medare Distancia reslsta entre Jas metas, las poubiidadse y la evaluacion de las Rabiidadee y do la vedidad Distancis vealstaentve polidades de fencrecica y evaluaeén de las pes Slades on fide de le realidad 9 en oaeisn eon habilideder grins Eadgenclan acerdes a Ine posibiidades el abjote (antoonotimient) Sanciones acendes Ia faite oometice Intemalizan de Ins pvtes Indivodres ot thio Simbolos dtado de intgracin 7 ct Sistone, in sebredimersionamianto de Tae coal. Distancia aceptable enrre: objetos valorades.y-rechezodas gue no plican la’ polaridad iceslisacién: pesoriencin, Racionalizaclores viens acordes 2) smi seg, Correspendenei entre Ia taconsizecée yn edad condligice que te implica nbreenigenos Boomplas 1) Uns vaca, porque o8 uh snimal ‘muy at) para «) hombre ya que lesa alimentos y mateies pie poss vestimet, 2) Un manacng, argue de fotos y fore. 8) ED hierro, porque puede ml dvarse y tiene dsranier som by Name gusterie ee ale, porque ze spoyan on ella 2) Radicheta, porque es amar. 81 La tartuga, porque es lent Bp este primer eemplo ls mates ast ecisd In Productvided 3 la emp ‘dad de edaptacin. Las sanconee qos Snfrentats ef auto al frases tones que ver con ol Tompoamienta desis Tveasioner para alansar ©) ahstivo Supe rio Distencia exacerbada entre metas prepoecias J posilidades de eonere Distancia exacerbada ontre lax habii- ade ya evelaseiin datorionadn de Jas mismas (sutaimager Bugencae invediaabes Sanciones excarivamente severas con relnein a Is falta emetic, No internasionslizasin de las norms fan depositacign en Grae externas, Sopery lax. Indiondares el smi Objeton sinboloe ted de cualidades ‘ommipotentes fon paitivas) denigraccs fn negativas, Marcada distancia dsociativa entre res Duestas poshivas ) negatives Distancia entre Ia siquesa del aim: belay In pobresa de Je vacionali Distancia antre Ins siambolow y Ia raclonalizaciéay In edad cronalé: Hemp | 14) Una vaca, pargue ee et anime) sagrado de Tor hinddes ¥ alios ‘ven aderénda Pe) La sequoia, porque e# perenne, vive sempre Se) Acer, porque os indestoexe Una vaca, porque ee cetipida 1a 2) Castle de erana, porque se fa Neve ol agua 83 Lamalecr: pogue dostraye a los sembradiea, ya que erece de una Lmaners indontelabe. En eate caso i exgencia de covertirse 19 ope eld, deed rma Tlndestractbe conative un Heal (nignte a lechear Sa faceao io Ga Stent her dete, denaparecer 9 fonvertirs por teacsién agen que erga tebe” sf manna un mote my prior ds hestidad Punto de vista estructural » dindmica CONFL:CTOS: LD) Conflictos evolutivos fa) Estén ligados a determinadas etapas (fases del desa- rrolio e1 Ia infancia, pubertad, adolescencia, adulto joven, adulto medio, vejez) que implican cada una de ellas tarcas vi- tales a resolver. b) Son comunes a todos os sujetos. ©) Hay que diferenciarlos de los conflictos espectficos ¢ individuales. d) Si son resueltos satisfactoriamente tienen una exis- tencia transitoria, Se le suseitan al sujet cuando, 1) El ambiente le plantea exigencias especificas y en Ja fase evolutiva apropiads (por ejemplo, el control de esfinteres en el momento adecuade y de manera razonable), 2) Aleanza niveles de maduracién que entrafian conflic- tos especificos (por ejemplo, Ios acontecimientos de la etapa falico-edipica), Lo mas frecuente es que ambos factores actten com: binados [Las indicadores que desde la téenica nos hablan de la in- uencia de los conflictos evolutivos son primordialmente ot contenido de los simbolos y sus racionalizaciones. Cuando tales fnnflietes estan actuando, tanto en los simbolos como en las racionalizaciones aparecen simbélicamente referencias muy cla ras a los mismos or ejemplo, en el easo de un coniicto evolutivo promovido por el embarazo, en algunas de las catexias, junto a la jerar- ‘quizacién de aspectos estéticos y de seduccion propios de una personalidad histériea, se hacen alusiones a fantastas de flore- timients y completud: [i+i Me gustarfa ser un duraznero, porque florece en primavera y da muchos frutos. 2+| Me gustarfa ser un flarero, porque puede contenor Lo flores atractivas Bil este cago el confieto evolutivo promovido por el em. barazo, en algunas de las catexias, junto a la jerarquizacién de aspeetos estéticos y de seduecién propios de una personali- dad histérica, se haean alusiones a fantasias de florecimiento y completud. 63 64 I) Conflictos accidentaies El grado en que influyen en el desarrollo psicosexual de la nifiez cierto tipo de interferencias (tales como muertes, separa- cidn, hospitalizacién, etc.) depende de la fase del desarrollo en que se producen, La mayoria de estos conflicts entre los impulsos y el ambiente son lo que A. Freud llama “Confflictos externos”. También e] adulto puede verse sometide a una interfe- rencia importante a raiz de tensiones o situaciones vitales que superan las distintas maneras de que dispone para afrontar las tensiones, tolerar y resolver este tipo de interferencias y que pueden legar a alterar el equilibrio interno, La pérdida del estado de equilibrio puede llegar a gene- rar la aparicién de sintomas nivel orgénico y/o psicolégico que denuncian una reaccién de caracteristicas transitorias y que desaparecerén tan pronto como la interferencia grave se vaya distanciando en sus efectos en el tiempo. Algunas personas, en las que habitualmente el equilibrio interno de fuerzas es mds inestable, o tienen un precario equilibrio, son mas propensas a presentar el estado de dese- guilibrio ante estimulos de baja intensidad. Otras personas que euentan con mejores recursos psicoldgicos, en cambio, podran recuperarse o resolver Ta crisis que les genera la aparicién de estos desencadenantes accidentales en menor tiempo, con mejor recuperacién del funcionamiento psfquico previo e incluso con el enriquecimiento de} mismo. Teniendo en cuenta que cada aduito tiene su propia his- toria individual y se ha visto sometido a interferencias especifi- cas durante la infancia, que moldearon su cardeter, sus pre- disposiciones y sus debilidades, hay que sefialar que el efecto de las interforencias en la vida adulta dependerd no sélo de su intensidad sino también de su carécer especifico. De la misma manera, conflictos accidentales, tales como por ejemplo haber sido objeto de infidelidad, aparecen simbo- Jigados muy claramente en alguna o varias catexias, En el ejemplo del hombre de 37 aftos que ineluimos en este Ubro la catexia 14) “Arbol, porque es muy drbol” y raquella en la que elige 3+) “perro, porque es fiel”, aluden a su conflicto accidental actual prodacido por la infidelidad de su mujer, que lo hace sentir poco hombre, por lo cual precisa reforzar este aspecto en la racionalizacion de la pri- mera respuesta, y valorizar explicitamente la fidelidad en la tereera, 11D) Conflictos intrapstquicos Son los que aparecen entre el Billo, el Yo y el Supery5 0 entre impuleos insuficientemente fusionados 0 sus represen- taciones incompatibles, ‘Arna Freud” se refiere a los primeros como “eonffictos internalizados", ya que son aquellos que siendo originariamente cexternos, han pasado a formar parte de la estructura psiquica, donde actéan como los representantes internos del mundo exterior. Con frecuencia son secuclas de conflietos de desarrollo anteriores. Lo tipioo es que estos altimos correspondan espe- cfficamente a determinadas fases 0 etapas del desarrollo. Ep condiciones ideales desapareverdn tan pronto come se Ilegue a Ja etapa siguiente, lo que se debe en parte a que cada nueva fase en el desarrollo implica una redistribucién de la energia. Los conflictos intrapsfquicos, que pueden aparecer en cualquier momento del desarrollo infantil, pueden correr muy divorsa cverte, Algunos permanecen activos y se integran en Jas neurosis infantiles (a las que han contribuido a dar forma) y posteriormente en la neurosis adolescente'o adulta. Otros se prolongan cierto tiempo para después sueumbir ante Ia ac- tividad defensive, cuya eficiencia ha aumentado, debido a la crecien:e fuerza del Yo, y a las nuevas aptitudes aportadas por Ja maduracién, ‘Les “conflictos intemos” tienen que ver con impulsos insuficientemente fasionados 0 sus representantes incompa- tibles (ambivalencia, bisexualidad, ete.) Hemos definido a los conflictos neuréticos como conflic- tos internalizados, que suponen la estructura definitiva del Su- peryé como cansecuencia de la resolucién del conflicta edfpico, Con frecuencia son la continuacién de un conflicto de desa~ rrollo que no ha sido adecuadamente resuelto en el momento oportuno. ‘Alo largo de la secuencia, las temticas concordantes 0 discordantes entre catexias positivas y negativas, las defensas idiosincrésicas predominantes en el sujeto, el contenido de las elecciones positivas y negativas que dan cuenta de los puntos de fijacién, van perfilando Gestalten expresivas de aquellos ‘conflictos intrapsiquices del sujeto ‘Eo resumen: tomando en cuenta Jos aspectos menciona- dos, encontraremios configuraciones que corresponden a distin- tos tipos de conflictos que dependen de los distintos puntos de fjacién y las defensas utilizadas por el Yo frente a las distin- tas meciones pulsionales. ‘Asi, por ejemplo, si en un protocolo vemos que en las catexies positivas se jerarquizan la bondad, la utilidad, la efi- ciencia, y on las negativas se rechaza la improductividad, la 65 promiscuidad, la maldad explosiva, ae pone on ovidencia un conflieto intrapsiquico entre instancias psiquicas, en este caso entre el Ello con sus pulsiones anal agresivas y por ol otro lado fal Yo con Ja defensa de formacién reactiva al servicia de la censura de] Superyé, En otros cuadros nourdticos a través de los mismos indieadores se configuran Gestalten expresivas de neurosis histéricas, neurosis fobicas. En los casos en que, debido a las variaciones individua- les, la fuerza de los componentes pulsionales envuelios en el conflicto es mayor, el conflicta de desarrollo puede resolverse de un modo tal que algunos aspectos de los componentes pul- sionales que suscitarcn oposicién son integrados en la persona- lidad en forma de rasgos de cardcter. Se los puede integrar directamente (con algin desplazamiento o inhibicion de fines), 2 la manera de formaciones reactivas contra los mismos. En estos casos, el conflicto no aparece claramente expresado en la técnica debido a que Ia defensa, como dijimos, ha pasado fa ser un rasgo de cardcter, Es posible detectarlo a través de Id intensa rigides de la defensa y la perseveracion tematica. En situaciones mas graves (psicéticos) el conflicto invade al sujeto manifestndose a través de una desorganizacién mas abarcativa del aparato psiquico y se ve afectado por la severa perturbacién del funcionamiento yoico. Aparecen entonces en la técnica los indicadores que hacen referencia a las fallas mas severas de dicho funcionamiento y al conflicto eon la realidad, Captrua TI EL CUESTIONARIO DESIDERATIVO, EN LA CLINICA EJEMPLIFICACION Ejemplifearemos la interpretacidn a través de la presentacién de tres protocolos. Los dos primeres eorresponden al test y retest de una misma paciente, en este caso a los seis meses de tratamiento Este aporte contribuird a resaltar la sensibili- dad de lz técnica para detectar las modificaciones intrapsiquicas gue se pueden producir en el sujeto luego de seis moses de haber realizado una psicoterapia. Este maverial en particular nos resulté atractive porque en el primer protocolo se observaban indicadores de fracaso yoico Siguiendb Ios criterios de interpretacién que proponemos para Ja evaluacién del CD. Otro aspecto importante del.material es que permite ver la ineidencia que tiene un conflicto vital, ejem- plificadora en este caso de una etapa del desarrollo psico- sexual y por ende emo afecta a la paciente movilizando el con- flicto intrapsiquico al que reactualiza y que se expresa en la técnica ¢ través de las elecciones y sus racionalizaciones. Tal yer una de las utilidades maximas que aportan las técnicas proyectivas en general, més alld de los datos que se extraen de la clinica, es ta posibilidad de efectuar un prondstico y una evaluaciin de} paciente, asf como precisar con fineza los al- cances y profundidad de las conductas psivalégicas. El tercer protocolo fue elegido por pertenecor a un sujeto adul- to que también ests atravesando una crisis vital asf como una crisis accidental, situaciones que se ven reflejadas en la técnica. PRIMER PROTOCOLO. L. Bdad: 8 afos, Motivo de consulta: Consulta derivada por el pediatra s raiz de “dolores de cabeza” que padece desde hace scis meses. Electuado un EEG surgen indicadores de inmadurez neu- rologica en el area occipital. Al no responder al tratamiento medicamentoso, después de haber transcurrido un tiempo, el pediatra sngiore realizar un estudio psicodiagméstico por con- siderer que la sintomatologia persistente podsfa tener un origen emocional, Grupo femiliar: L. es la segunda hija de una familia de tres hijos. La hermana mayor tiene 10 aiios y la hermana menor, 67 68 2 afios, A través de los datos obtenidos a partir de la entre- vista con los padres no se registran antecedentes de trastor- nos emecionales, evolutivas ¢ de aprendizaje previos, Los padres no reficren situaciones desencadenantes cereanas; sin embargo, a través de los datos obtenidos vemos que en ese poriodo de la aparicién de los sintomas, su hermana mayor fue designada como integrante de la Seleccién de natacién de la escuela y que una prima cercana padecié un cuadro de neu- monia que requirié internacién y cuya posterior evolucién fue favorable, Podriamos hipotetizar que ambas circunstancias podrian actuar como desencadenantes, ya que son coinciden- tes con él comienzo de la sintomatologia, Lego de la entrevista con los padres, se decidié efectuar un psicodiagndstico que incluyé las siguientes técnicas: Hora de Juego con la nifia, Dibujo Libre, Dos Personas, HTP, Famili kkinética actual y prospectiva, Desiderativo, CAT, Hora de Juego Familiar. Transerihiremos ahora el protocol del Cues tionario, Desiderativo, 1652" Un per pone ads, e Hino 3 también porgue so me Inmagine ue hay peeesfsfrescente, bay peces higu to) ne sé un commalf, la meric: porgue es chic spite 22) 2 Una or, pn es tinda y porave da. lege al campo, fine planta y tambien a le gente ©) sna_margarite, {Tambien una rosa yon cls I res margarita peraue te may linda, la ows pergue tiene for res yeh evel feraue er lindo también a0) 1° Gna mabe, porgue ee blanc, pore os hinds, na mabe blanca, norm, porgae no hnes lever 3 eh cambio una ube Bann ne une mabe negra hace Hever, Porque sn mabe blanea’no hace over 1) Humo, eos, teletsign, mh antena Mame! porque es nego y fens porgue el negro me da mnain suere () sabiedola, En fos divsitos aninados {ee gue el rages trae mala seer y también no query Sr Gatapantasy nh mareador,earioes na cm a Pi Baca: porque a In essa ne Ye dan aga, no come y tam- Sen pone fe enti may sla, 20 tones comaaiaa, en tattle Sendo wou pant tents compat uy rooa on heesho ‘eleisén: poraue te veo todos y porque no podés ver fos ni tenor eara i hablar Savona: porque da letricdad, porgue ml, fea, que 46 siete Gamnns tose se sovostan on ts, me detarman, me aT tran to nacvey fambien no saean el elehen Pio: porque tedoe ma Fan, tian mon, cata da sto, ace de pajarit 2) 2" Gn sncapunta, una cass, una antana, nube Sck porave #8 lindo ie confinde o S11" Nada (21 y porque si no, no puedo encontrar una cos. Yuyo: porgue es muy fap y tambien pincha a Jos nenes. oo porque pineha a la genie y erece y tapa a todes las plantas. 4) 1" Ninguna cosa ni una planta ni nada, {Se indase) Lobo: porgue ee muy feo y tambign mata @ los animales y e'loe came y también mata a la gente [zpor qué mata Sse in cnt oreo tine Ge comer y mata or Andlisis e interpretacién LL, responde a las consignas de manera adecuada, dando la idea ‘de que comprendié el contenido de las mismas. Acepta el pedido de desidentificarse de su condicién humana y reidentificarse con representantes de los tres reinos. Esto confirma que con relacién a la consigna, en principio, ha podido instrumentar fedaptativameate la disaciacién entre realided y fantasta, f- Vamos cbservando a Io largo del protocolo en distintas catexias, diversos fallos de los mecanisinos instrumentales, que hicieron necessrio, especialmente en las \iltimas ca- texias, proceder a la induccién. ‘Los falles observados son los siguientes: a) Fracasos parciales de la primera disociacién instru mental entre realidad y fantasia. 'b) Fracaso o fallo de Jos mecanismos de la segunda diso ciaeién entre los aspectos positives y negativos en 2 ©) Fallo en la identificacién proyectiva: dificultad para Ia elecciin de un simbolo unico (1+, 2+, 1-, 2). 4) Falio en la identificacién proyectiva por aparicién de simbdlos disgregados (3+, 1-). @) Fallo en la racionalizacién por fracaso de la suatentacién égico formal (catexia 1). ‘Los falles de los mecanismos instrumentales van delatan- do algunos fracasos de las funciones del Yo: el a) ye) Gando lagar a la presencia de alin trastorno entre los limites del Yo y ls realidad externa. sto se advierte también on el uso de “me” y “te”, con que L. #2 refiere los simbolos, como si fuesen aspectos Ge ella misma, con pérdide de distancia entre el objeto ssimbolo elegido y el sf mismo. {I fallo b) mostraria la debilidad existente en el control de los impulsos, lo que genera fuerte angustia que el Yo no 03 demasiado eficaz para controlar. qos fallos c) y d) muestran sobre todo los fracasos del Yo {en la funcidn sintetizadora y del criterio de realidad, En- focando el protocolo desde este punto de vista, vemos que ro se trata de un Yo desorganizado (ya que en muchos 69 70 aspectos se hallan preservades los mecanismes instrumen- tales), pero si con indicadores de cierta debilidad en la organizacion y por ende, posible preocupacién por el ronéstico. Secuencia de las vicisitudes de la ansiedad, El monte parece comenzar en un nivel adecuado, y se incrementa @ medida que transcurre ol tost hasta transformarse en intenso. Esto se advierte por ol aumento ée fallos en los, mecanismos instrumentales y constituye un éndice de que la paciente va perdiendo la capacidad yoica de mantener 2 niveles manejables le ansiedad, la que aumenta, in- vadiendola Tiempo de reaccién. Las respuestas casi inmedistas a cada consigna indican una tendencia a reaccionar do manera instanténea, Jo que mostraria que la tolerancia a la frustracién es baja y que L. apela a una modalidad de- fensiva que le evita ponerse en contacto con la angustia que le genera la consigna. La modalided persistento de estos TR, breves a lo largo de todo el protocolo, pareciera tener que ver con el monto de ansiedad. Respecto de la secuencia de los reinos: En forma es- ponténea aparecen en la secuencia positiva osperable (animal, vegetal, objeto), lo que evidencia preservacién de Ja vitalidad y con indicadores de mayor salud, mientras que en la secuencia negativa se interrumpe y se retoma por induecién, Andlisis catexia por catexia En general la produccién impresiona como riea, con variedad de elementos, con elevado contenido simbélico y expresado con Auidez en un lenguaje adecuado para la edad. Andlisis de cada catexia Ww Pez: sfmbolo de buena consistencia, donde los elementos Jerarquizados son la movilidad, lo atractivo, lo estétieo, que irradia mucha vida, mucha luz y la pequetez. Los sim- bolos especificas elegidos, cornalitos, merluza, ademas de indicar su dificultad para elegir, hacen alusién a especies en las cuales hece referencia ‘a tamafos y finalmente escage ol “més pequefia”, ol “més chiquitite’. Bsto parece simbélicamente relacionarse con e] desea de ser menor en edad cronolégica. Si comparamos la riqueza de lo sugerido por Ia racionalizacién con la eleccién final de cornalito porque no tiene ninguna de aguellas cualidades, salvo su extremada pequettez, podemos pensar que prefiere perder todos Jos atributes, incluso los inherentes a su edad en pre de ser alguien pequefito. La condicién comestible del comalito y de la merluza, generan la hipétesis de que la nifa utiliza como defenss la regresisn y efectia una vuelta sobre los puntos de fijacién orales, con pérdida y aban- dono de las cualidades progresivas del Yo, 2s) Flor. Responde con una eleccidn genérica, resaltando los elementos estéticos y de slegrie, que podriamos com- pararla con la cualidad fosforescente de los peces. Bl hecho de rescatar aspects estéticos en los simbolos daria cuenta de que en estas catexias privilegia la seduccién como me- canismo de defensa para conseguir el amor y la aceptacién de los otros, Al mismo tiempo pone de manifiesto el punto de fijacién al cual ha Hegado en el proceso de evolucién psicosexual.{ La eleccién quiere brindar este atributo a todos, lo cual hablaria de cierta omnipotencia en sus _deseos de agradar y Hamar la atencién. ‘Cuando elige tres cosas, pone en evidencia su dificultad para saber quién es o cual es y a la vez su deseo de ser todos, Io cual se puede relacionar con su eleceién genérica “ser todas las flores” ‘Las racionalizaciones son redundantes ya que todas jerar- quizan la misma cualidad, lo cual refuerza la idea de que, con tal de agradar, ella podria ser cualquier cosa. Pareciora organizarse internamente en funcién de lo que ella piensa que el otro quiere de ella, 34) En esta catexia el simbolo elegido es un ejemplo de fra- caso parcial de la identificacion proyectiva, por identifica cién con un simbolo disgregado: nube. Observando la se- cusucia veinos que a nivel del simbole Ia paciente se va angustiando cada vez més, porque primero eligié un ge- nérico con dos opeiones, después un genérico para elegir ‘uno y finalmente en esta eleccién, un simbolo de escasa consistencia y diferenciacién, Creemos que esto se produce en Ja medida en que se le va limitando la posibilidad de cleccién, y aumenta la angustia que sigue estando disimulada en la apariencia, por los breves tiempos de reaccién. * En el nivel de Ia racionalizacién advertimos que hay una fala de la segunda disociacién instrumental en la tercera catexia positiva, “Blanco” habitualmente es un concepto asociade a la pureza, limpiezs, paz, y “negro” a algo malo, sucio, triste Esta wiltima idea es reforzada al agregarle el “no hacer ever”, ser causa de tristeza, conflictos, dolor, Si espe- ramos que las eatexias positivas sean un exponente de ‘cdmo un sujet se defiende de peligro fantaseado, ello nos 1 2 so) esté diciendo. que trata do defenderse tratando de ser buena y linda, o sea a través de le formacién reactiva y la seduccién. Al agregar en la racionalizacién “no negra, porque hace Hover’, vemos que la defensa no logré man- tener a raya los aspectos conflictivos, que emergen a pe- sar del esfuerzo defensivo. Este es otro de los elementos que nos estén dando una idea de Ia fragilidad en que en este momento esti su Yo, Si bien responde a lo esperable, hace una eleccién mil- tiple, en este caso de cuatre objetos (casa, TV, antena, humo), incluyendo la eleccién disgregada. A pesar de parecer diferentes, los cuatro objatos tienen como caracteristica comtin pertenecer a la casa Humo: reapareee Jo que se habis insinuado en 3+ como tuna irrupcién de los elementos rechazados entre los acep- tados. Vuelve a aparecer un elemento simbilico disgre- gado, en parte similar y en parte diferente de la nube. Similar en cuanto a su consistencia y diferente en cuanta ‘8 su origen: el bumo proviene del fuoge. Esta es ana referencia derivada y atenuada de la impulsividad, De lo primero que intenta desembarazarse es de su propia impulsividad, que da como resultado la eleccién de un “objeto disgregado, expresivo del estado de desorganizacién ‘2 aue lleva el contacto con sus impulsos. EE conectarse ‘con ellos, de acuerdo con su racionalizacién, la hace sen- firse fea, y teme que esto traiga malas consceuencias para clia y pare los demés. Las consecuencias temidas serian sentirse mala y ser ovitade por los demds, situacién en Ja que la dejaria el fracaso de la formacién reactiva. E] nivel de angustia, inerementado por esta vivencia de sentirse rechazable, influye en la interrupeién de su ra- cionalizacién y la fleva a buscar nuevas identificaciones (piso, sacapuntas, marcador, cama). Casa: llamativamente Ia racionalizacién de esta eleceisn omite una cualidad de este objeto, como es la contencién, y el sentirse basicamente protegida, Pierde distancia con relacién al entrevistador, al que involuera en la sensacién Ge soledad, desamparo y ausencia de suministros bésicos Por ello, a posteriori de ponerse en contacto con sus impulsos sentidos como males, L. en esta racionalizacion refiere cuéles serian los resultados de quedar excluida, evitada en el vinculo, Quedarfa sin suministros bésicos y sola, La cualidad de ambas pérdidas nos permite pensar que estos temores estén claramente asociades a las figu- ras parentales, ‘TV: En esta racionalizacién se refuerzan los atributos humanos adjadicados a los objetos, como ya comienza 2) a 2 vislumbrarse en ‘casa’, al adiudicarie ia cualidad humana de alimentacion (forzamiento del objeto). Igual- mente el uso de “te” intentaria acortar distancia ¢ invo- jucrar al entrevistador para que éste pase a recibir el im~ pacto de la angustia que ella padece. Lo cual lleva al ent-evistador a cierta confusién por la que omite conti- nuer interrogando le recionalizaciin de las restantes res- puesta, La eleccién de “TV", en su racionalizacién, confirma Ja hipitesis formulada con respecto al conflicto de identidad, Siendo lo que supone que los demas quieren que sea, L. ‘se queda ‘sin cara”, sin poder verse ni reconacerse, lo que constituye un elevado nivel de privacién, la privacién de ser, Esponténeamente la paciente agrega que no quiere ser cama, “porque todos se acuestan en mi (...)”. Esta respuesta muestra cimo no sélo no se siente contenida sing que ella tiene que soportar el peso de los demas (la indiseriminacién de identidades dentro del grupo fami- Jinr?). Por otra parte, a eso contribuye una identidad sometida a la mirada de los otros, que la arman 0 desar- mon y que atenta contra la estabilidad yoica. Esta falta de contencién refuerza la sensacién de no tener recursos: propios. Pico: el estado de empobrecimiento y desvalorizacién en que queda el Yo, depositario de contenidos desechables. Parece sentir que no recibe nada bueno, pero que es la dezositaria de todo lo desvalorizado, Esto parece mostrar tun autoconcepto con escasa valorizacién de sf misma. Por feso en la 3+ “nube negea” se relaciona con ta Thuvia (llanto) ¥y podemos penser que al ponerse en contacto con estos aspectos de su propia imagen, como contrapartida del in tento compensatario en las positivas, entra’en situaciones: de tristeza 0 pena. Le respuesta “sol”, que en realidad es un fracaso del mecanismo de disociacidn entre aspectos valoradas y re chazados, muestra su confusién y ademds constituye un intento sobrecompensatorio para desconectarse de una, parte nogativa de si misma transforméndose reactiva- mante en lo contrario, la energia, la vida, lo lindo. Nada, Fracasa totalmente su posibilidad de respuesta simbilica. Frente a la presién de la consigna, sélo a través de la inducei6n logra dar las respuestas faltantes que son. las que denotan cudl es ol,contenido de los aspectos pul- sionales, tan temidos por ella. Yayo: eleccién simbélica de escasa consistencia y dis- criminacién, elemento desvalorizado dentro del reino vegetal, La idea de yuyo esta asociada a planta pooo dis- 7B 74 riminada, no deseada, no euidada, que on. general es. rechazada, extixpada por sus efectos nocives sobre las otras plantas, La paciente asume en esta cleccién la cualided negativa de sus pulsiones agresivas expecialmente divigidas hacia Jos minios pequerios Relacionando los contenidas de la racionalizacién eon datos de su historia, especialmente ol nacimiento de su: hermana menor, que constituye uno de los factores desencedenan. tes de sus sintomas actuales, pensamos que dichos con tenidos aludirian a los sentimientos despertados por este nacimiento tanto en relacién a su enojo por este hecho como simuliéneamente al desco omnipotente de invadir cl espacio y ocupar el centro, en desmedro de sus her. manos Estos sentimientos que aparecen expresados claramente en la técnica, fueron sustituidos en la realidad por una expresién somética: el dolor de cabeza, Abordando el material desde la perspectiva Estructaral y Dindmica, podriamos resumir de la siguiente manera las inferencias e hipétesis interpretativas efectuadas a partir de este protocolo: Deste el punto de vista del Ello, las pulsiones de vida y de muerte se encuentran defusionadas, con exacerba, cién compensatoria de las puleiones de vida frente a in. tensos sentimientos agresivos, con fantasias pertenecion. tes predominantemente al nivel oral como panto de fijacin, ‘La libido es predominantemente objetal, con desmedro de Ja libido narcisista que se manifiesta en una disminacion muy intensa de la autoestima, : Desde el punto de vista del Yo, el pensamiento, lenguaje, ‘memoria, control de motricidad se encuentran preserva, dos. En cambio, existen indicadores de fallas en las fun, siones del juicio eriticn, famcién de eintesis y eriterio de realidad, cuando ésta cntra en contacto con temas con, flictives ‘para la paciente, tales como la agresiOn, el crecimiento, y el establecimiento de la identidad, inde- pendientemente de ia mirada de los otros. En euanto Jas defensas, algunas son regresivas (por ejemplo, la in. ‘troyeccién), con poea variedad de recursos. Las defencas resultan en algunos momentos ineficaces para el contral de la angustia, asf como para el contro} de los contenidos pulsionales que pueden ser actnados a En cuanto al esquema corporal, hay incongruencia entre ls edad cronolégica y los atributos de los simbolos elegi- dos, desde un punto de vista cronolégico. La identifica, én sexual no esté claramente diferenciads, lo cual no atravesando. es Hamativo por la etapa vital que ests ats Ba cuanto a las relaciones interpersonales, el tipo de vineulo fantaseado que tiende a establecer es el de abte~ ner el amor de los otras a través de, fundamentalmente, ser buena y mostrarse alegre para aplacarlos, escon- ciendo de ellos au agresividad, estableciendo una relacion Cependiente de los demas para obtener identidad y au- OT ideal decuacién a la BI Ideal del Yo es primitive, con poca adecuat wealidad, ya que para ser valiosa necesita permanecer quefia y renunciar al crecimiento. ie Ei Superge es inmaduro, y existe bastante distancia ent Ib idealizado y lo peyorizado, siendo que embas instan- dias estin exacerbades, El punto de fijucién predominanto es ol oral primaro, Parsoo haber un conic que primero fue evolutiva (ri: sis vital, nacimiento del hermane), pero que al perdurar en el tiempo y no ser elaborado, ha ido generando y/o gerecentando un conflicto intrapsiquien, en este caso entre Yo-Superyé versus Bllo que se expresa como igualdad versus bondad El ands seouencial « individual de estas respuestas parece ponernos en eontacto con el conflieto central de la paciente. Si ella no as lo que quiere el otro, 0 sea: si no és buena y linda, queda expuesta ser una persona evitada, desprotegida, dosvalorizada y autndegradads, Sa propia dificultad perece residir en no poder unir lngenes disociadas de sf misma Hee Pensamos que a partir de estas respuestas podemos re flexionar acerea de Jos contenides de otras respuestas va dadas. El querer ser chiguila wos permite formular hipdtesis: 1). Siondo chiqulta, ella podria evitar este confito que significa tener que renuncar a wa parte de su self dos aspects impulsive), porque siendo ehiquta puede ser como es, sin ser punida, ni autopunirse, Esta regresién estarie al servicio del Ello y representaria una Yentaja mayor que erecer: poder descargar las pulsiones dal Ello y poder acoptarls, El sresimiento, por of con: trevio, Ia amenaza eon la pérdida de suministros exter nos de amor. 2) EI confit que se express en as ca: sias indueidas tiene que ver con su deseo de preservar ciada # sentimientos intensamente agresivos hacia los demas, A partir del psicodiagnéstico efectuado, se recomend6 psico- ca de dos sesioes cemtales terapia pata Econ una feeue cal Y entrovstas Gon 10s padres para efecuat una orientacén © a 2 3 trada en su relacién con Ja nifia de una frecuencia quincenal, con la misma terapeuta. ° A los seis meses dol tratamiento, y con Is finalidad de evaluar si as modificaciones de sintomatologia y conducta que pre sentaba la nia se correlacionaban con modificaciones in- trapsiquicas, ee efectud 1a administracién de algunas téenicas proyeetivas, entre otras, el Cuestionarie Desiderative que trans cribimos a continuaci6n: SEGUNDO PROTOCOLO (Administrado 6 meses después que al primera.) 14) 10" Una tortuga, porque vive mas ates. no wh cenit, porque son peludites y lindos. iH 26) 1 Cra rae Td, ora are ac are ¥ también ana for consito, porque ves In apretés hace... (gesto de abrir y cerrari. 4 341 20° Una frtila: porqie mminh, a ver, poraue es ia linda, ae 1) 5" Una vaca, porque con fe, cuahde las ordes te queda Ja mano toda asquerosa. wee 24.10" Un del, porque erst ato y despite le sea as ores in eine porn nan st nos fe gue tenon ovet Todos na toe gustan porque ‘trepan, eraneiet 3) 28° Una Jechuga: porque no me gusta porque sn verdes (Induceidn de reino inanimado.) fe Sie, porque fe eed, Andlisis ¢ interpretacion 1. responde a la consigna de manera adecuada, denotando una ‘comprensin pertinente de la misma. Esto indica: 1- Una adeptativa instrumentacién de la primera disociacién, Sin embargo, presenta algunos fallos de los mecanismos instrumentales a lo largo de la técnico: a) Fracaso parcial de la primera disociacién instrumental y Ge a identieasion pregetiva por perseveraci6a-en vi reino (2- y 3), Ante dicha perseveracién se procede a la induecin (4). f rosie a b) Fracaso parcial de Ia identificacién proyectiva en un simbolo unico en 1+ y 2+ (clecciones multiples). ©) Fracaso parcial de la identifieacién proyectiva en 2, por respuesta gonérica, Desde isn abordaje interpretativo de la preservacion 0 no de las funciones del Yo, ditiamos que el fallo parcial en la primera disociacién instrumental parece aludir a wn fracaso en sl control de las pulsiones y a un incremento de la ansiadad, cuando L, se pone en. contacto con con- {enidos temidos del Ello, le agresividad filo de la tijera en 3) El fracaco de la identifieacién proyectiva en la catexia 2, por perseveracion en el reind, aludiria a la debilidad Gel control de las pulsiones, a la inéolerancia a la incerti- Gumbre y ansiedad. Ello también es confirmado por coin- Gdir en esta catexia la aleccién de un simbolo con ca- racteristicas genéricas (érbol), Io cual implica algunas di- ficultades en la identificacién. Las identiicaciones multiples en 1+ y 2+, como expresi- Yas de un fracaso de la identificacion proyectiva, en este Caso, hacen referencia a une diffcultad para identificarse en un simgolo tinieo. 2. Em cuanto a la secuencia de las vicisitudes de 1a anstedad el monto se va intensificando a medida que avanza la téoniea, afecldndola especialmente en las catexias negati- Yas, Sin embargo, se mantienen los niveles de discri- Tninacién eperativos que le permiten responder adecuads- mente a la induccién en 2 3- Los TR dentro de mites normates, son expresivos de una modalidad defensive operativa, B) ineremento en 3- jnostrarfa nuevamente la disminucién de Ja tolerancia a Ta feustracion cuando se conecta con la situacién con- fictiva 4~ Respecto de la secuencis, en forma espontanea aparecen cen las caiexias positives en el orden esperable (animel, Segetal, objeto) con adecuada preservacion de ta vitalidad, tn tanto que en las negetivas vuelve a tener dificultades, como en la evaluacién anterior, y surge la necesidad de Ja induecién Andlisis catexia por catexia 1s) ‘Tortuga: efige un animal lento, que se oncierra en su propio caparazén y es longevo. En la racionalizacién Jerarquiza este ltimo rasgo. Si bien comprendi la con- ‘signa, surge el impacto de la misma: parecerfa que quiere rescatar el tiempo como situacién de crecimiento lento que Ye asegure muchos afios de subsistencia. La longevidad parece estar al servicio del instinto de supervivencia y de actitudes de cuidado y proteccién. 24) 34) La segunda opeién, “conejito”, parece referir 2 no perder cualidades afectivas cdlidas y rogresivas (sensacién tctil de peludito). Su deseo de conservar los dos aspectos, creemos que estaria al servicio de una integracién progre- siva del Yo. Vuelve @ realizar una eleccién doble (“rosa” y “flor conejito”). Se rescatan aspectos valiosos del objeto, inhe- rentes al mismo, jerarquizando cualidades estéticas v agradables al contacto en un caso, y la posibilidad de movimiento, de abrirse y cerrarse, en el otro caso, como expresién de un contacto més flexible con el exterior y simulténeamente un buon reconocimiento del limite yoico. La posibilidad de preservar posibilidades de contacto afec- tivo sin que implique sometimiento 0 sélo ser alguien en funcién de las expectativas de los demés, parece tener que ver con estos rasgos elegidos, expresién de un buen grado de consistencia del Yo y simulténeamente una participa- cién activa, discriminada y afirmada de-su personalidad. Dentro de Ia secuencia es la primera respuesta tinica “fratilla”), No necesita dar opciones, se'siente capaz de que un objeto la contenga y la exprese. Aparece como un fruto agradable, apetecible, atractivo, valorizado. Quizés dentro de la racionalizacién a palaba “rica”, haga alusién tanto a los aspectos agradables como a los aspectos de valorizacién, Esta valorizacién le devuelve la imagen de un self valorizado, Eleccién circunseripta a un objeto vinico, animal (*vaca’ La racionalizacién parece aludir a aspectos asociados a la nutricién (ordenar), que son rechazados por su cusli- dad adhesiva y simbiotizante. Parece ser que lo recha- zado es el vinculo de dependencia regresiva, pasivo y nutricio, por parecer implicar una dificultad’para el despegue. “Arbol.” Nuevamente las caracteristicas del sfmbolo tic- nen una adecuada consistencia a pesar de su cualidad genérica. Los peligros que el crecimiento le acarrearia, producto de la angustia de castracién, estarfa asociada al ser lastimada y quedar daiiada como mujer (le sacarian las flores). Otro aspecto rechazado por ella en el “que se trepan” pare- ciera aludir a las fantasfas asociadas al acto sexual. Lechuga.” Resulta llamativa la eleccién por la reiteracion del reino vegetal, por la menor consistencia del simbolo y Ja precaria racionalizacion (porque son verdes"), Pare- ciera que‘ los fallos de los mevanismos instrumentales de esta eleceién son consecuencia del impacto sufrido en la catexia anterior al ponerse en contacto con claridad y diseriminacién con los aspectos que le generan mas temor a nivel oral: le simbiosis y la pasividad, asi como a nivel filico la rivalidad edipica, 4.) "Una tijera” (indueido). Se produce un fallo expresivo de que el monto de la angustia generada por la catexia 2 mantiene la perturbacién de funcionamiento de los mecanismos instramentales, con pérdida de reconoci- miento de la experiencia de aprendizaje ya que os un ob- jeto que carta y que ella categoriza como feo. La conno- tacién de feo es airibuida a lo que es filoso y corta. Parece tener que ver 2on la actitud un tanto agresiva que asocia a situaciones de separacién (corte). Lo temido os una rabia que aungue discriminada involucra una connotacién que hiere o lastima}Relacionando los aspectos de suavidad que surgen de la catexia 1+ con la agresin de 4-, es factible inferir que L. esta utilizando el mecanismo de formacién reactiva frente a 1a agresién,!Si bien la simbiosis la deja expuesta a no crecer, el crecimiento, a separacién, la diferenciacién, es algo que 1a pone en contacto con sus sentimientos agresivos (relacién ambivalente con el objeto) ¥ que le genera temor. Por ello ol crecimiento, la separa~ Gidn es algo que es vivido por la paciente como lo que puede dafarla, Efectwando un resumen de las hipétesis ¢ inferencias efec- twadas podriamos decir que: Desde el punto de vista de la preservacién o no del funciona- tiento del Yo, es de hacer notar que los fallos observados no se dan en todas las catexias y constituyen fracasos parciales. Cuando los fallos son de esis uaturaleza, se entiende que el conflicto permanece dentro de un nivel neurético en el que no esta mayormente afectado el funcionamiento del Yo, espe- cialmente en sus aspectos més significativos del contacto con la realidad. Desde el punto de vista de los aspectos estructurales y dinémi- cos de la personalidad, vemos que desde el punto de vista del Blo, las pulsiones de vida y de muerte tienden a estar mas integradas, lo cual se expresa en que en la eleccion de los simbolos la distansia entre los aspectos valorados y los re- chazados no es polarizada, Los afectos son mds pertinentes en cuanto a la intensidad y al objeto al cual van dirigidos, sin tanta polarizacién, y denotan preocupacién de L. por los ob jetos y por eila misma, La libidg objetal —en tanto su preceupacién por los objetos— y la narcisista —m cuanto al cuidado de sf misma (la tor- tuga}— guardan buen equilibrio, 19 80 La consistencia de Jos simbolos es adecuada, las caracteristi- eas de las racjonalizaciones son pertinentes, y en ambos se ve la posibilidad de incluir aspectos valiosos del s{ mismo (cuali- dades de cuidado, proteccién, afectivas, atractivas), lo que deno- ta una libido narcisista adecuada. La modalidad de libido objetal que privilegia distintos reeur- sos para establecer el vinculo (eualidades afectivas, seductoras, ete.) parece ser equilibrada, salvo cuando su conflicto la hace sentirse indefensa frente a la agresidn, entonces se incrementa, su dependencia y al mismo tiempo teme la venganza. Las funciones del Yo en general se encuentran preservadas, Las defensas son variades (represién, formacién reactiva) aun- que se mantienen también algunas regresivas, Jo cual indica flexibilidad acorde a la etapa vital de la paciente. La eficien- cia de las defensas parece fallar en lo relacionado estrictamente con el conflicto de agresién, hecho que inforimos a partir de la necesidad de induccién. Bn cuanto a la imagon corporal, tanto desde el punto de vista de las tamafios como desde las cualidades acordes al sexo y edad cronolégica, las elecciones son adecuadas. Lo que se registra es cierta ambivalencia frente a la cualidad femenina de lo nutricio (por su cualidad simulténeamente simbiotizante, que retiene en ef vinculo) y de Ja agresién como un aspecto dificil de integrar y acoptar de lo femenino. [Las relaciones interpersonales se caracterizan por un tipo de vineulo donde se establecen intercambios afectivos: L. desea sentirse querida, valorizada. Teme que la emergencia de los aspectos agresivas que intenta reprimir, no siempre con éxito, si se ponen en evidencia, la pongan en peligro de ser atacada por el otro (castracién) En cuanto al Superyé, el Ideal del Yo parece adecuado a la etapa vital, centrandose en una conilictiva de rivalidad edipiea, evolutivamente esperable para su edad. El punto de fijacién predominante parece aludir a la rivalidad edipica (punto de fijacién Félico) aunque se observan algunos elementos regre- ssivos que aluden a fantasias orales, La conflictiva de la actual crisis vital reactualiza un conflieto intrapsiquice entre el Yo Sdper Yo versus el Ello, Comparacién dal primer y del segundo protocota La situacién vital de la paciente, que sélo presentaba como sintoma un trastorno funcional (dolor de cabeza), con preser vacién en el resto de las areas del funcionamiento yoico, asi como Ja evolucidn que sufrié en seis meses de tratamiento —que se ven reflejadas en sus respuestas al segundo proto- colo, acompafiada de la desapariciin del sintoma, son aspec- tos que nos hacen pensar que tenemos que resaltar los indica Gores de funcionamiento yoieo preservados en los protocalos, Sorque on indices de pronéstion positivo, No podemos separar srmnalisis del material de Ja historia vital de la sujeto. Bn Gste caso la presencia de un desencadenonte eonereto (naci- Sento del hermano, enfermedad de la prima) que alude a wna wiaie coreana, habla de la ineidencia de un agente estresante, Gute ha becho dosbalancesr el equilibrio interno. La presencia Get desencadenante cercano a la crisis y al momento de la con- Salta, son indicadores fevorables en este caso para el prondésticn de la paciente, porque su conflicto no se ha instaurado de Seances permanente ni ha implicado una severa restriccién oie, $e snunciom compararemos Tos indiendors del primer y del segundo protacolos: 1 Byaluaciéa del funcionamiento yoies en funcién de la instramentacidn de las mecanismos instrumentales. Hn el primer protocolo las fallas afectan @ la primera Gisociacién, a la segunda disociacidn, a la identificacion proyectiva y a la racionalizacién, Es decir, se ven afec- fados todos los mecanismos instrumentals. Los fallos son Sbundantes, y alteran la produccién general. Surgen procosmente, desde el comienzo de la toma e influyen 0 Sificultan el rendimiento de la paciente, eel segundo protocolo se detectan sélo fellos_parcia- les en la primera disociacién y éstos apareeen al finalizar fl test (30), Se mantiene preservado el funcionemiento fa las restantes catexias. Desaparece el fracaso de. la Sogunda disociacién y los fracasos de la identificacion proyeetiva son aisladoe (en lugar de elecciones miiltiples Fe 5 6-4 objetos se reducen, en dos catexias, 1 y 2 8 dos opciones). Comparando la estructura de los objetos Semos que en el segundo protocolo mantienen su consis- Tanela ¥ que, @ diferenda del primer protocolo, no hay dlecciones disgregadas. fas sacionalizaciones son. pertinentes, y ha deseparecide dl forzamiento de las cualidades del objeto fe decir que en el segundo protocolo encontramos Lx apacidad de mantener un contacto adecuado con la red fided, producto de una mayor diferenciacién entre el svjeta a realidad (criterio de Ia realidad mas pertinente) y wn pensamiento en el que predomina el proceso secundario ton capacidad reflexiva y posibilidad sintetizadora. 2. Vieisitudes de la onsiedad: En el primer protocola Ia Gnsiedad dificulta la tarea, emergiendo precozmente partir de la segunda catexia positiva ¢ incide en le se- 81

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