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E) saber y la educacién en las sociedades de control Camilo Diagama Profesor Escuela de Filosofia y Humanidades UPTC Resumen: El uso masivo de las miquinas dele vercera generacibn ha abierto, desde mediados del siglo XX, la posibilidad de establecerrelaciones sociales adistancia que aceleran los procesos productivoseinchiso , pronunciado por el rector de la misma). Y Lyotard menciona un tercer caso, el del ‘enunciado performative, cuya forma presenta elacto por el cual el emisor modifica el estado actual del referente sitwindose en una poss de propadad con respecto a éste, Ia serie de caracteres 0 palabras expresa la modificacién de ese estado enveiplanoticnicoodeoperacions y al receptor debe aceptar inmediatamente el nuevo estado del referente, por cuanto el enunciado fija zeucmdicién de wo del mismo. (Elenunciado del roctor: la universidad queda abierta). En sintess, el enunciado denorativo expresalaexigenciasegin lacualelemisor y el receptor deben estar de acuerdo respecto del estado actual del referente, siempre que se encuentren en las mismas condiciones de observacién; el enunciado prescriptivo hace cexplicta una orden dirigida al receptor por el emisor, y exige una accién (u omisién) del primero en relacidn con el referente; y finalmente, el enunciado performativo snforma» una transformacién del referente por el acto de palabra del emisor, y modifica inmediatamente la relacion del receptor con ese referente. Puede observarse entonces que el criterio de validez © de legitimidad de los enunciados denotativos es la verdad, el delos prescriptivos la justicia, y el de los performativos la eficiencia o la eficacia. ‘También puede observarse que todo enunciado, cualquiera que sea, remite a una relacién social. A partir de este anilisis, Lyotard afirma que en lassociedades postindustrales la legitimidad del saber, la condicin de su ejercicio parece fundada, generalmente,en dcriteriode elicacia © de performatividad. Alli donde el régimen capitalista presenta un desarrollo téenico y teenologico mis elevado nos dice-, el lazo social formado por ellengusje no est’ fundado tanto en la descripcién de los referents, nien la prescripcién de las acciones que los receptores han de realizar, sino en los modos de operacién por los cuales los emisores modifican directamente cl estado de los referentes, y prescriben indirectamente las percepciones de los receptores. Se valora el saber segiin un criterio de eficiencia caro al capitalismo actual: obtener el miximo de informacién y de modificacién con un canfnimo de energfa empleaday’, un minimo relativo, desde luego, puesto que se trata de la inversién requerida para obtener el miximo beneficio © la mayor utilidad (de hecho, la inversién es enorme; sélo es minima en relacién con este miximo). En consecuencia, elsaberes objeto deun interés comin atodos Jos hombres tinicamente en la medida en que permite acondicionar sus distintas actividades al régimen comercial y financiero de la produccién capitalist, a fin de aumentar el beneficio que estas instancias proporcionan; fuera de este régimen, como lo hemos dicho, 7 Astcaracteriza Lyotard el Ambito de lo perfomativo, Gi op-cit, p. 83: {Las téenias remiten a juegos de lenguaje que dan predominio a los enunciados performativos}. Obedecea a un principio, el de la ‘optimizaciéa de las actuaciones: aumento del at (informaciones 0 modificaciones obtenidas), disminucién det input (energia gastada) para ‘obtenerlos. Son pues, uegosen los que lapertinencia no esnila verdadera, nila usta nila bella, ec. sino Iaeficiente: una jugadae tfenica es ebuena» cuando funciona mejor y/o cuando gasta menos que otra.» El saber y la educacién en las sociedades P. 27-44 remite a una muliplicidad de intereses irreductibles. Lo cual significa que la mayor parte de las actividades que llevan a cabo los receptores esta sujeta a las frecuentes modificaciones © reformas que unos pocos emisores, considerados expertos y propietarios, operan sobre aquellos referentes queseencuentran bajosu gobierno, y queestin destinados a la oferta de servicios: el saber es un servido, debe ante todo ser itil o servir. Performatividad dominante que no implica, como puede notarse, que los planos de observacién y de obligacién desaparezcan, sino que, por el contratio, propende por sa multiplicacién; lo que ocurre es que las funciones denotativas y las prescriptivas se encuentran relativamente integradas y condicionadas por los eédigos que tigen los planos de operaciones, razén por la cual la relativa integridad de una sociedad postindustrial no esespeculativa ni moral, sino técnica, Al mostrar que el predominio del criterio de eficiencia es la tltima via para concebir el conjunto de la sociedades como tun todo unitario y homogéneo, Lyotard no sblosefala una nueva condicién del saber, sino también la forma de expresién de una cierta politica, de una cierta estrategia puesta en ptlctica por las instizuciones del contemporinco, para hacer de los hombres piezas de un circuito de acciones, bienes y servicios. En efecto, quiz4 uno de los temas mis importantes del andlisis de Lyotard consista en concebir el saber como la forma de expresién de unas relaciones sociales entre fuerzas, relaciones que sin embargo son irreductibles al orden del discurso, puesto que lo vinculan con formas de visibilidad complementarias a los enunciados (¢ eedela referencialidad). Mas allS de su aspecto lingiifstico © formal, los ejemplos que el fildsofo nos da para distinguir los tipos de enunciados y los juegos de lenguaje destacan todos una fancién polémica entre un emisor y un receptor, cada uno de los cuales tiene Siempre un estatuto en relaci6n con el otro (profesor, rector, estudiante),en un campo de visibilidad (la universidad): la tipificacién de los enunciados sefiala distintos modos de actualizacién de unas relaciones de poder en este campo, es decir, dstintas manerasen que los actos de palabra de los emisores pueden afectar alos de los receptores, y distintas posibilidades de reaccién de los receptores en relacidn con lo dicho por los emisores. En todo caso, el lenguaje siempre remitir4, implicita 0 explicitamente, a obligaciones sociales y polis, porque su préctica exige la enunciacién, ora de descripciones, ora de prescripciones, ora de actuaciones, entre los cemisores y receptores inscritos en tal 0 cual formacida institucional. Por ello, ladistincién de los tipos de enunciados sigue siendo formal, puramente lingiiistica, si no se la relaciona politica o funcionalmente con el espaciosiempo hist6rico, con el campo social en el que extos enunciados son producidos. CCreemos, con Lyotard, que las instituciones de nuestra época dan al saber un caricter ceminentemente operativo, entendiendo quela transmisin de los enunciados depende cada vyez mis de las miquinas de informacion y comunicacién, yen este sentido la difusion de las descripciones, las prescripciones, las imerrogaciones,etc.,est4sujetaen gran medida alas operaciones dela informitca, latclernética y la cibernética; pero es evidente que esta ‘operatividad no se explica tanto por la forma de los juegos de lenguaje, por la tipifcacién rigurosa de los enunciados, cuanto por un singular régimen de poder que relaciona las fuerzas de las sociedades a través de tales a (Cetions de Flesofia. No. 7 Aiio 2005 ISSN 0123-5095 Tunjz-Colombia miquinas, modificando los campos de visibilidad en la actualidad. De cualquier manera, la performatividad actual del saber muestra que el proyecto de emancipacidn, tanto en su vertienteespeculativa canto en su vertiente prictica 0 voluntarista, yanno puede sostenerse. Es cierto que, desde tun principio, el aleance de ese proyecto en el plano de los hechos estuvo restringido a los mites de los Estados nacionales, pues, en efecto, latarea de organizar las actividades de una poblacién hacia la consccucién de un interés comtin a todos|los ciudadanos, ha sido Ja funcién propia de las instituciones estatales desde finales de siglo XVI y comienzos del XIX Es precisamente en este momento, yen relacién con tal propésito, que adquiere todo su sentido la estrategia de la educacion prin: cada aparato de Estado asume la funcién de hacer ciudadanos, de formar individuos mediante el gobierno de las competencias requeridas para enriquecer la vida de la poblacién; el saber es presentado entonces como un patrimonio nacional (ambien de la humanidad), y la educacién aparece como un derecho del pueblo garantizado por las politicasestatales. Mientras la transmision del saber estuvo reglamentada, en tkimainstancia, por los aparatos de Estado, el proyecto de emancipacién posefa todavia alguna credibilidad y ciertaeficacia. Perotalesaparatos han perdido fuerza en la difusién del saber desde el momento en questa funcién se hizo dependiente de un soporte tecnologico proporcionado por las empresas de las ;desdeel momentoen que, por esto mismo, el saber ha adquirido el estavuto de mercancia, en calidad de informacién, y el capital se ha concentrado en torno a la actividad de las corporaciones mulinacionales. Pues,en cuanto informacién, clsaber ha dejado de sere codigo que inscribe alos hombres en el eno deun territorio local, obien estatal, ytiende aconvertirseen una red global de flujos de conocimiento, que s6lo se despliega en cuanto los conjuga con la ireulacién deflujs de dinero,circulacién que, desde la segunda postguerra y, més intensamente, con el derrumbe del modelo del Estado de bienestar, se encuentra impulsada por las empresas trasnacionales, y porlasinstituciones inancierasque programan cl crecimiento de su capital en el plano internacional (Banco Mundial, FMI, BID). En este panorama, el interés social de todo saber, el valor de odo juego de lenguaje parece que reside exclusivamente en su adaptabilidad a las condiciones del mercado mundial, es decir, en el grado de probabilidad con que puede ser utilizado para optimizar las actuaciones del proceso de acumulacién capitalista. El saber vale en la medida en que se vende, y vale tanto mis, en cuanto mis se aga por él, en cuanto crece su demanda; de modo que forma un circuito andlogo al de la moneda, segin el cual se divide, como ésta, en informaciones de pago e informaciones de crédito o de inversion. La educacién deja de ser un derecho piblico y asume la forma deuna propiedad intelocnsal; la formacién del ciudadano como politica estatal que garantiza Ja participacién de la persona en el espiritu de la nacién, se encuentra subordinada a la informacién precisada por el usuario para participar del capital acumulado. Y como el proceso de acumulacién ya no esth dirigido por una politica estatal de proteccién de las inversiones nacionales, sino por una politica comercial y financiera a cargo de los agentes que detertan el capital mulinacional, ocurre entonces que la transmisién del saber est condicionada por una serie de programas cuyo El saber y la educacién en as sociedades P. 27-44 _& Xinico criterio es la eficiencia de los circuitos internacionales que abastecen el mercado mundial, «El antiguo principio de que la adquisicién del saber es indisociable de la_ formacion (Bildhamg) del espizva, eincluso dela persona, cae y caer4 todavia més en desuso»!. En resumen, el saber deja de ser experimentado como el cddigo que integra a Jos hombres en un espacio-tiempo social limitado, en un territorio formado por lazos locales, y tiende a exteriorizarse cada vez. mis en un conjunto heteromorfo de técnicas, conjunto que sblo integra alos hombres en la medida en que hace de ellos piczas de tal © cual crcuito de capital, al mismo tiempo que los divide, los opone entre si, en tanto que motiva a cada uno a competir con los otros ‘en términos de fuerza y de dinero; todo ello en nombre de la conquista, siempre relativa, de una parte del mereado mundial. En este sentido, Lyotard afirma que el saber tiende a ser legitimado, gencralmente, por una funcién performativa, autorizado fundamentalmente por enunciados operatives. 2. Las estrategias de la educacién en el capitalismo: disciplinas y control ‘Hemos dicho quela operatividad caracteristica del saber en la civilizacién mundial expresa una transformacion de las estrategias del capitalismo. gEn qué consiste, mas precisamente, tal transformacién? Michel Foucault ha mostrado cémo desde el siglo XVIII las instituciones de las sociedades coccidentales se han caracterizado por cierto modo de gjercicio de poder que ya no tiene 8 Lyctard, op. cit, ibid, p. 16. por funcién, como en las sociedades feudales yy absolutistas, extraer fuerzas y productos de ‘unterritorio, de una comunidad, ni por forma de expresién un derecho soberano de dar smerteo dejar con vida; en cambio, lafuncién de este modo de ¢jercer el poder es la de sconstituir una fuerza productiva cuyo efecto deba ser superior a la suma de las fuerzas clementales que la componen»? objetivo que s6lo puede ser alcanzado empleando tacticas para administrar la vida de los hombres y, en caso de que éstos no se acoplen a aquellas, abandonarlos a la muerte. El derecho a la vida y los derechos del hombre, el derecho a la ‘educacién, expresiones tan invocadas por los sistemas juridicos modernos, deben sin duda su aparicién al desarrollo de este modo de gjercicio de poder, a la expansién de esta estratepia®. Foucault ha mostrado que, desde finales del siglo XVI, una estrategin de gobierno, dedicada a administrar la vida, va superponiéndose poco a poco a la antigua cestrategia de soberanfa (lade matar con justicia), hasta llegar a dominarla casi por completo a finales del siglo XVII y en cl siglo XIX. Lo cual no significa, sin embargo, que la soberania desaparezca ni ain en nuestros dias (pues los Estados actuales son todavia instituciones 9 Foucault, Michel, Viger asia Nacimient de la ‘priién, ed. Siglo XX, «Il Diseiplnas, Cap. 1. «Los cuerpos déciless,p. 168. 1OCI, Foucault, Historiedela sxwaidad 1:La volun desaber, ed. Siglo XXI, «V. Derecho de muerte y poder sobre Ia vida», p. 175-176: «El ederecho» ala Vida, al cuerpo, a la salud, a la felicidad, a la satisfaccibn delas necesidades; cl derechow, mis alla de todas las opresioneso «alienaciones-,a encontrar Jo que uno es y todo lo que uno puede ser, este «derecho» tan incomprensible parael sistema juridico clisico, fue la réplica politica a todos los auevos procedimientosde poder que, por suparte, tampoco dependen del derecho tradicional de la soberaniae, (Cuesiones de Fleafia. No. 7 Afio 2005 ISSN 0123-5095 ‘Tunja-Colombia soberanas), sino que desde el siglo XVII, precisamente desde el momento en que ‘empiezan allamarse nacional los Estados han tenido que modificarse radicalmente en funcidn de la organizaciin de la vida de los hombres, delaadministracin de su conducta, de tal manera que el jercicio de la soberanfa hha exado sujeto a la prictica del gobierno", Se ve claramente que este acontecimiento sefiala la emergencia del capitalismo industrial, el surgimiento de un nuevo modo de cexplotacién del hombre por el hombre, que Marx descubriée con su genioirénico ycritico, Sin duda Foucauk presupone el anilisis de Marx en torno a las relaciones sociales de produccién determinantes en la edad del capitalismo (0 mejor, en sus edades); supone el problema estructural de la dependencia econSmica ¥ de la diferencia politica entre las clases sociales, Pero también ha ido mis lejos: hha mostrado como ese modo de produecién amado capicalismo (industrial) esel efecto de ‘conjunto de una serie de tacticas politicas de origen muy diverso ~algunas inventadas por Ialglesia cristiana (catdlica y protestante), otras creadas en la milicia, otras, finalmente, en el mundo burgués-, que se han desplegado y conjugado en el espacio-tiempo de las sociedades curopeas, desde finales del siglo XVI hasta nuestros dias. Se podrfa decir que Foucault analiza la historia de las tacticas, siempre politicas, que han dado lugar a la aparicién del capitalismo, y que no se confunden con la organizacién de las clases al interior de los Estados nacionales, sino que integran el teido micro-social del que emerge 11. Ck. Foucault, «La ‘gubernamentalidad’s, en kia, Ei y Hementaics, ed. Pais, traduccion de Angel Gabilondo, Obras esencales vol 3, p.175- 197, cesta organizacion, Se trata de wn andlisis que permite pensar las relaciones politicas mis alla (o mis aca) de los problemas de la macroeconomia y del derecho, ¥ stuarlas en todos los espacios de interaccién social: no solamente el Estado y los partidos, sino también la familia, la empresa, la escuela, funcionan articulando relaciones de poder, relaciones que s6lo en viima instancia se conjugan en un aparsto politico centralizado y jerarquizado, Llamaremos estrategia, con Foucault, a la serie concertada de técticas que relaciona ls fuerzas en un campo social. Asi pues, siguiendo a Foucault, en los siglos XVII y XIX una estrategia de gobiemo se superpone, predomina sobre la antigua estrategia de soberania. Pero existen dos maneras complementarias de ejercer el gobierno en la modernidad, dos maneras distintas de administra la vida, incluso serfa major hablar de dos estrategias correlativas: de un lado, la prictica de la diciplina, que se cencarga de provocar ala vez la mayor utilidad y la mayor docilidad de una mmultiplicidad de cuerpos, organizando su actividad en un espacio cerrado de vigilancia; y del otro, la prictica del enped, cuya funcidn es la de gestionar la vida de una poblacién, mediante el registro y el acondicionamiento de sus divers actividades particulars en un espacio abierto de informacién y de comunicacién Gmportancia de la estadistica). La disciplina y el control son las dos estrategias que transformaron a las sociedades feudales en sociedades capitalistas. No obstante su complementariedad, la disciplina es anterior alcontrol, puesto que éste ha requerido, desde sunacimiento, una poblacién disciplinada: ha sido nevesario que los cuerpos de los hombres se encontraran i ‘en ciertos espacios turbanos de encierro (a familia, la escuela, el EL saber y la educaciéa em las sociedades P. 27-44 cuarte, Ia fibrica y, en Ultima instancia, la prisién), para que fuese posible evar a cabo el registro de las actividades que realizaban en ‘masa. Durante los siglos XVIII, XIX, y ain ddurantela primera mitad del XX, los espacios de encierro en Occidente fueron los focos ‘primordiales de intervencién al momento de tratar los fendmenos de natalidad, de alfabetizacién, de produccién, etc.; las instituciones occidentales de este periodo cjerclan sus funciones a través de pricticas eminentemente disciplinarias, de las que derivaban las pricticas de control. Habré que esperar a la segunda mitad del siglo XX para que la disciplina se encuentre subordinada al gjercicio del control, es decir, para que la dindmica de los cuerpos vigilados comience a depender de los dispositives de registro a distancia, Peroaunqueel control consolide cada amis fuertementesu hegemonia,ladiscplina serd por mucho tiempo su complemento indispensable. Volvamos al caso especifico de la educacién. Desde el sigh XVII el cumplimiento de esta funcién social ha exigido: 1) agrupar y disribuir unos cucrpos (los de los estudiantes, pero también de los profesores) en unos espacios cerrados (la escuela, el aula, el laboratorio, etc}; 2) determinar Ia actividad gue cada grupo debe realizar (escribir, ler, cuantificar, etc), y el modo de realizarla (Gentados con las manos en la mesa, por cjemplo); 3) organizar esta actividad con otras ex el tiempo bajo la inspeccién constante, aunque discontinua, de una serie de autoridades (inspeccién de los profesores sobre los estudiantes, como minimo, pero también de los directores de departamento sobre los profesores, del rector sobre los directores, etc). Siguiendo este modelo cisciplinario, cada autoridad educativa gobierna tuna etapa del proceso de ensefianza al queesté sujeta una multiplicidad de individuos, regulando la actividad de esta multiplicidad en un espacio cerrado de vigiancia, durante unlapso de tiempo deter minado.La vigilancia «s constante, pues asegura que los cuerpos realicen sin pausa una actividad particular, y no otra, hasta el momento en que la autoridad lo considere suficiente, Pero la vigilancia también es discontinva, pues precisa de una larga serie de relevos en el tiempo, que haga posible el desplazamiento de la autoridad de un individuo a otro sagiin los rangos o grados de responsabilidad (caso del monitor, por cjemplo), y el cambio de la actividad en el paso de un espacio a otro (del aula al aboratorio, por ejemplo). De este modo, el régimen de vigilancia dispone los cuerpos en tun espacio celular, individualizante, donde la actividad realizada por cada uno esta sujta al lugar, al modo y al momento sefialados por tuna autoridad; pero este régimen precisa que exe espacio seencuentreantficialmenteaislado de una exterioridad, y poblado en su interior por cierta multiplicidad homogénea, afin de aque la diversidad de las actividades pueda ser organizada siguiendo un orden temporal previamente establecido, es decir, recorriendo, una sola nea de tiempo ordenada en segmentos comparables y sucesivos (por cjemplo, el orden de los grados en la formacién académica) El espacio disiplinario de la escuela permite comparar la actividad de cada individuo con la de cualquier otro,y evaluarlas a panir de la linea del tiempo que debe consagrarse al institucién. Es asi como la educacién disciplinaria ha moldeado una muktplicidad de cuerpos y conciencias, sometiéndolos a un proceso predeterminado por el régimen que coordina la sucesién de dos espacios que todos esos cuerpos deben recorrer, y por el orden cronolégico que e (Gustiones de Flsofia No. 7 Aiio 2005 ISSN 0123-5095 Tunja Colombia ‘compromete a cada conciencia con una serie deactividadesidénticaspara todos Practicando ‘est’ estrategia, hace mis de dos siglos que cada ‘unade lasinstituciones occidentales (la familia, Ja escuela, el Estado) ha trabajado por la formacién de un conjunto de individuos relativamente iguales, semejantes, constituidos como cflulas de una sociedad artificialmente cerrada y homogénea ~cerrada, ain cuando pretenda ser universal, énes, ain cuando contenga una multiplicidad-. Y puede observarse que el proyecto de la modernidad sno es otra cosa que el relato legitimador de las disciplinas, el discurso que les ha brindado sa fandamento tiltimo. Ahora bien, desde la segunda mitad de siglo XX somos testigos de una crisis generalizada de los espacios de encierro: crisis dela familia, de la escuela, del cuarel, de la prisidn, del Estado @). Las cansas de este fendmeno son muy diversas, pero todas participan en la efectuacién de un doble movimiento: por un lado, el crecimiento demogrifico no se ha detenido desde el siglo XVII, pese a que las catistrofes naturales y, en especial, las provocadas por la especie humana, hayan suprimido desde entonces ms vidas que en los siglos precedentes; hecho sintomitico de que el régimen de explotacién industrial ha contribuido, para bien y para mal, a multiplicar el mimero de los seres humanos. No cabe exponer aqué minuciosamente la funcién que las vcticas disciplinarias cumplen en este proceso demogrifico, baste decir que, todavia al comienzo del siglo XXI, el capitalismo mundial conserva una «base industrials que abarca no solamente todas las maquinas que funcionan energéticamente (aquellas que permiten multiplicar una fuerza por la transformacién de una materia), sino también una inmensa reserva de hombres desocupados, un enorme ejército de fuerza humana cuyos diversos problemas de vivienda, de alimentacién, de salud, de ceducacién, etc, han de ser atendidos y tratados por las instituciones, con el fin de asegurar el desarrollo y la expansién de los ciclos de la produccién. Las disciplinas han sido indispensables para concentrar los grupos humanos en las grandes ciudades, para calificar sus fuerzas de acuerdo con las cexigencias de la economia fabril, y para -mantener estas fuerzasen condiciones tales que ssu ejercicio fuese cada vez mas dil; ast comprendidas, resulta evidente que han alimentado en gran medida la explosion demografica. Sin embargo, hoy dia la poblacién mundial es tan numerosa que excede en sumo grado la capacidad fisica de losespacios urbanosde encierro,elerecimiento de las poblaciones que la explotacién industrial ha provocado en las ciudades del mundo entero se ha convertido, paradéjicamente, en. uno de losprincipales factores que desestabiliza has instituciones disciplinarias, sobre todo porquepermite constatar queestasinstivuciones no solamente han sido productoras de riqueza, en virtud del artificio del encierro y del cordenamiento del tiempo, sino también cextraordinarias productoras de miseria, en tanto que convocan, fuera de ellas y ante sus ppuertas,atunaenorme masa pobre eignorante, En a actualidad, el régimen de la disciplina parece estar dedicado, casi exclusivamente, al tratamiento de la miseria, bien a incorporarla al funcionamiento de los complejos industriales, 0 bien a climinarla cuando esta incorporacién no es posible (las sociedades disciplinarias por excelencia de nuestros dias son las organizaciones militares). “Elsegundo movimiento que conduce ala crisis de kas instituciones disciplinarias concierne, es El saber y la educacién en las sociedades P. 27-44 cevidente, al desarrollo de las nuevastecnalogfas cde la imagen, ya que, como contrapeso a la crisis de gobierno generada por el crecimiento demogrifico, el uso masivo de estas tecnologias propende por el establecimiento de un tipo de gobierno que no encuentra obsticulo ni condicin de funcionamientoen loslugares de encierro, ino que se jerce sobre una multiplicidad demasiado numerosa para ser encerrada y vigilada. Recordemos que el espacio de a disciplina es celular, analtico, en tanto que individualiza los elementos de una multiplicidad de cuerpos encerrados: cada cuerpo aparece relativamente aislado en su propio lugar, en un espacio tabicado que permite comparar su actividad con la de cualquier otro sometido al mismo semen de Vigilancia, y este régimen garantiza que los cuerpos en cuestidn atraviesen un nico proceso comin, d proceso, Pero si bien cada encierro cumple una funcién semejante a la de los demas, en cuanto todos obedecen aun mismo modelo, el movimiento de un lugar a ‘oxro siempre supone un cambio de actividad, y el de una institucién a otra un cambio de proceso (ya no estis en la familia sro en Ja escuela, noestis en la escuela sven el efrcito)s ppor tanto, los distintos procesos han de ser ‘ordenados sucesivamente siguiendo una imagen analbgica y orginica del tiempo: los procesos son semejantes, pero cada uno termina alli donde el otro empieza, y su duracién representa una etapa del tiempo en que todos son organizados. Asi pues, la disciplina se realiza en un espacio analitico, relativamente cerrado, y durante un tiempo sucesivo,analdgicoy orginico, Es este espacio- tiempo disciplinario lo que va a ser destituido con el uso masivo de las miquinas de informacién y comunicacién, en la medida en que estas maquinas permiten gobernar la actividad de los cuerpos, no a partir de un. lugar de vigilancia capar de aislarlos y contenerlos, sino a través de una red de dispositivos que los relaciona a distancia, inciténdolos a realizar ciertas tareas, a cumplir Giertos «logros», lmargen dd lagar material que cake tono oxipa en redacién con a de es dems espacio-tiempo disciplinario se encuentra entonces «agujereador por unos canales de informacién. La disciplina no desaparece del todo, pero viene a cumplir una funcién subordinada a la prictica del control. En efecto, bajo el régimen de control Ja actividad de los cuerpos es modulada en un espacio abierto de geomettia variable, donde &tos pueden cambiar de posicién o de kgar aleatoriamente, moverse «al sire libre» o «en su hogar», sin que su conducta deje de responder a las exigencias de una serie de centros de gestion: la radio y la television sefialan el advenimiento del régimen de control, pues estos medios sefialan el comienzo de una edad en la que todo gobierno exige concentrar la atencién de una mayorla, informarla, comunicando entre si los elementos de una multiplicidad dispersa. En segundo lugar, el dominio que esos centros gjercen sobre tal o cual multiplicidad no individualiza en el espacio los cuerpos que la componen, sino que aglutina sus acciones en el tiempo con a objetivo de fijar, a partir de &tas, las condiciones de existencia de una comunidad de usuarios: es decir que los cuerpos no son controlados en calidad de individuos semejantes, sino como elementos dispersos que proporcionan datos sobre el comportamiento de una masa difusa, y que sirven de soporte ala constitucién de bancos deiinformacién, Por ikime, si bien un centro cualquiera de gestién dirige el proceso que ha de ser realizado por una multiplicidad de ‘usuarios, ocurre que este proceso nunca ai (Cuestions de Filonfia No. 7 Afio 2005 ISSN 0123-5095 Tanja Colombia termina sino que se prolonga indefinidamente, por cuanto cl centro del que depende demanda permanentemente nuevas acciones 0 productosaaleanzar para conservarlajerarula entre los elementos controlados: se trata de tuna tictica de gestién que, ademis de asegurar que estos elementos realicen el mismo proceso, hace posible que cada cuerpo controlado esté sujeto al migno tionpo 2 la direccién de dos 0 ‘mis centrosde gestion, hallindose obligado a seguir varios procesos simulténeamente. En el régimen de control, Ia jerarquia de los ‘usuarios no se establece siguiendo las funciones especificas de una organizacién destinada a aislar los cuerpos en el espacio, y a ordenar sucesivamente sus distintas actividades en el tiempo (comoenel regimen disciplinari), sino ‘que pasa por un sistema de variacién continma que permite, por un lado, medir el mimero deaccioneselectuadaso productos adquiridos por los usuarios en una misma linea de actividad, agrupindolos a todos en el espacio virtual deun bance; y por otro lado, coordinar losdistintos procesos hastael punto de hacerlos indiscernibles ene tiempo, pues bienes cierto que la distancia entre un usuario y otro puede ser evaluada segrin el grado de competencia o rendimiento alcanzado por cada uno en el proceso compartido por ambos, también es Gierto que todo elemento controlado est4 sujeto simulténeamente a una diversidad de pprocesoso lineas de actividacs en las sociedadles de control, cada cuerpo ¢s, al margen de su localizacién material, usuario de varias ineas de servicio a la vez: estudia mientras trabaja, compra mientras se vende, aprende inglés mientras duerme. Se ve, pues, que el espacio. del control no es analitico y celular, como el deladisciplina, sino sineticoyerebelatoria,en tanto (que agin instontdrecament ls dementes de 1a smudapliclad disperser vivoad dev maovioiontode fictnocernunixiins y sstiempono es sxcesivo, analégico y orginico, sino que se presenta ‘como un sistema de simadtaneidad, nuemérico € irersiv ntantorpicoordinuinsentéomementea serie de proces cocnistentes cas tno de les cuaes se prdbrgidlinfotoensatlinesdearionasydeser kis. ‘Como bien lo ha mostrado Gilles Delewze, el expacioviempo fill de la disciplina, cede su ugar al espaciotiempo enpresaid del control. Se puede apreciar (este acontecimiento} sin dificuktad en los problemas de los salar: la fibrica cra un cuerpo cuyasfuerzasinteriores debian aeanzar un punto de euilirio, o ais alto posible para la produeci6a, lo mis bajo posible para los salarios; en una sociedad de contro, la fabrica es susttuida por la empresa, ‘ylaempres esun alm, esetérea. Es cierto que yall fibrica utlizabs el sistema dels primas y losincentivos, pero la empresase esfuerza con mayor profundidad para imponer una ‘madulaciénde cadasalaro,en estados siempre metaestables que admiten confrontaciones, conewrsos premiosentremadamente cbmicos. [.-JELprincipio modulador de que ossalarios deben corresponderse con los mirtos tenta inchaso a la enseianza ptblic: de hecho, igual {que la empresa toma el relevo dela fri, la foracingoraone tiende a sustitir la escuela, y el control continuo tiende a sustivuir al ‘examen. Lo que es el medio mis seguro para poner la escuela en manos de la empresa” Ea suma, en el capitalismo contempordneo todas lasinstituciones tienden crecientemente a abandonar el modelo de gobierno propio de un sistema cerrado (la fabrics), para convertirse en centros de gestidn de concentrar la atencién de mukiplicidades dispersas, comuunicar entre {los elementos de estas multiplicidades a través de circuitos de informacién, y hacer de cada proceso una linea de acciones y de servicios prolongable al 12 Deleuze, Gilles, «Post-scriptum cobre las sociedades de control, en Carcesacones traduccin de José Luis Pardo, ed. Pretextos, p. 279-280. El saber y la educacién en las sociedades P. 27-44 infinito; los centros de gestién son los nudos de una red de comunicacién cuyo paradigma estructural es la empresa, es decir, un circuito decompradeacciones y de venta de servicios. La familia es un centro de gestién, porque constituye el modulador «atémnico» por el que pasa la conquista de uno 0 més mereadas; n0 encierra asus miembros con el propésito de protegerlos de y prepararlos para encierros faturos, como ocurria hasta la primera mitad del siglo XX, sino que los iatger Bjando su atencién en una serie de productos necesarios para mantener la «calidad de vidar en los medios sociales de intimidad: el centro de atencién y estimulo del hogar yanoesel padre de familia sino el televisor. Se comprende centonces por qué la estrategia comercial que impera en nuestra civilizacién tiende a descomponer a la familia en su estructura cerrada, pues lejos de contribuir al fortalecimiento delos azos de intimidad entre sus miembros, lejos de participar en la formacion de una comunidad solidaria anivel local, las tacticas de publicidad y mercadeo desarrolladas a través de los medios de comunicacién promueven en los familiares la adquisicién de unos productos o servicios que se ofrecen en mercados distintos, introduciendoa menudo entre ellos diferencias irreductibles muchos padtesse horrorizan, por ejemplo, ante la ropa que gusta a sus hijos adolescentes, pero no tienen més remedio que ‘pagar por ella si quieren que étos no vivan ‘en sociedad, ¥ ax{sucede con todos los aspectos, no son los padres quienes proporcionan el modelo de vida alos nifios y adolescentes de una sociedad cerrada, son los departamentos de publicidad quienes informan a los padres sobre el modo de vida «que sushijos deben evar para responder alas, exigencias de unas sociedades abiertas 0 de mercado. ‘Ni qué decir de la escuela, la universidad, el efército y el Estado. ‘Todas estas instivuciones se constituyen cada dfa mis como empresas. La escuela y la universidad son instancias presadoras de servicios, redes mediante las cuales se gestiona la compra y la venta de la informacién requerida para ingresar a un mercado labora. El jército s, ante todo, una red de compra y venta de armas a partir de la cual se presta un servicio de seguridad, servicio que en realidad no es otra cosa que la préctica violenta a través de la cual Ios gobiernos cesatales configuran unos mercados que no pueden ser configurados de otra manera (incluido el propio mercado de armas). Finalmente, el Estado es un complejo de empresas prestadoras de servicios puiblicos 0 sociales, que integra localmente as acciones de tuna poblaci6n nacional, para constituir una de las tantas Bolsas entre las que se reparte el mercado mundial. Por todas partes la organizacién analégica y sucesiva de la disciplina vaa ser desplazada port integracién numérica y simultinea del control, cesplazamiento quesefiaala susinaci6n de una politica de produccién por una palticadecrdiar en efecto, aquella era tuna estrategia dirigida a inowmentar la fuerza de wna multiplicidad de ‘cuerposen unattotalidad relativamente corrada ‘yorganizada;ésta,en cambio, se dedica a pretar Tesercices requeridos para arecntarlacecided depagp de una multplicidad integrada en un banco de datos, de modo que el iaené por el crecimiento de esta capacidad recuinda en el aumento de futuros préstamos 0 deudas a contraer; dicho en otras palabras, los créditos son inversiones programadas y los pagos deudas saldadss, pero cada pago supone un aumento en la éapacidad de endeudarniento ¥ por consiguiemte, exige la obtencin de un muevo crédito. Asi las cosas, d proceso se converte en una linea de servicios y de pagos Be Goestiones de Filaafia No. 7 Afio 2005 ISSN 0123-5095 Tv prolongable al infinito, tal como la Mialla China se extiendeante el paseante que a recore. Se vislumbra entonces en qué queda convertido el proceso de educacién, Es previsible que la educacién deje de sez Drogresivamente un compartimentoesanco[un ‘encicrro} diferente del compartimento esanco profesional y que ambos desaparezcan en provecho de una terrible formacién ‘permanente, uncontroleontinuo que scjeroers sobreel obrero-estudiame de secundaria osobre i directivo universiario. Se nos quiere hacer ‘reer en una reforma educativa, pero se trata dde-una liquidaci6n, En un régimen de control znada se termina nunca”. Conclusién: acreditacién y formacién permanente Ennnuestros dias lasinstituciones de ensefianza piblica no son todavia, en estricto sentido, empresas capitalistas, yal vez eto explique la ctisis que atraviesan. No obstante, funcionan, siguiendo el régimen empresarial: no ofrecen ‘materi: 0 contenidos organizados en funcién, desu proximidad y de su sucesién, sino adic, ‘es decir, médulos integrados en funcién de las miiltiples actividades que los usuarios- estudiantes han de llevar a cabo simultineamente;no disponen los cuerposen epucios de formacién, sino que aglutinan sus acciones en torno a unos aanmes de informacion Gncluso las aulas ylos aboratorios se convierten encentrosde extraccién de datos}; finalmente, no reglarnentan el proceso educativo apelando tena aatoridad cargo de ua socialad acaderica ends (autoridad académica), sino invocando taxssirscarcisdecmntrolecernocpecdiiantacditad de sus servities, y cuyos procedienientos de 13 Deleuze, Gilles,«Controly devenip, op cit, ibid, p. 273.274, evaluacién no obedecen exclusivamente a criterios académmicos, sino también a criterios administrativos (on los comités de acreditacién). La institucién de ensefianza (piblica © privads) aparece entonces como una matriz. que integra diversas sociedades de conocimiento, diversos circuitos de informacién sometidos a unas instancias de control o gestién, cada una de las cuales no deja de fijarle ciertas metas, de exigitle el cumplimiento de ciertas condiciones técnicas y sociales, consideradas necesarias para acreditar el buen funcionamiento de tao cual irouito, Y no es dificil notar que las instancias de acreditacién cumplen la funcién de comprometer los procesos educativos con la dindmica de las empresas capitalistas. Objecién de potenciales detractores: todo lo ‘expuesto hasta aqu{ parece muy interesante y quiz sea acertado, pero, gpor qué hacer un diagnéstico de las condiciones actuales del saber y de la educacién a través de un andlisis tan imitado como el de las relaciones politicas (0 estrategias de poder, como Foucault las llama), cuando quienes trabajan en el campo de la educacién deberfan estar mis preocupades por resolver problemas académicos y pedagdgicos? {No elude usted la exigencia de proponer alternativas de ensefianza que permitan fortalecer loslazos locales, al margen de los comerciales y los financieros, a fin de reconstituir una sociedad en la que todos los hombres compartan los mismos valores y tengan los mismos derechos, oportunidades y obligaciones? Respondo brevemente: pensamos (con Lyotard, Foucault y Deleuze, entre otros) que la educacién es en principio una funcién politica y no un dominio de conocimiento cientifico, con la condicién de entender por «politica» no simplemente la dimensién de las luchas por «tomar el poder» El saber y la educacién en las sociedades P. 27-44 © por conservarlo, sino también y ante todo Ia serie de técticas en virtud de las cuales las fuerzas de una sociedad se retnen y se diferencian (de una comunidad dedicada a transmitir conocimientos cientificos, por cjemplo):toda sociedad educaasus miembros mis jévenes, ¢s decir, ordena sus fucrzas a partir de ciertastacticas que imponen el modo en que cada uno puede afectar y er afectado por sus projimos, para ser reconocido como parte de la misma comunidad, incluso en los casos en que las sociedades no disponen de conocimientos cientificos sino de saberes no formalizados (las comunidades primitivas ‘educan a sus évenes tanto comolas sociedades de control a los suyos; lo que cambia de unas aorrasesel conjunto desus dominios de aber y dl régimen politico que lo determina). Por consiguiente, el que la educacién se defina frecuentemente comoun conjunto de pricticas destinadas a transmitir_y promover conocimientos, no debe hacernos olvidar que estos conocimientos no son meras verdades que han de ser reconocidas por todo ser humano, sino enunciados que sefialan lo que se puede decir y lo que se puede ver en el seno de una formacién social, y que sirven de soportea los ejercicios de poder en virtud de os cuales sus fuerzas se relacionan. ‘Actualmente, la mayor parte del discurso pedagdgico aborda los problemas de la educacién limicindose a plantear, ora el modelo diddctico que debe aplicarse en los espacios de ensefianza (del que los métodos de evaluacién hacen parte), ora la forma en quelos distintos programas deben ofrecer sus contenidos (la estructura curricular mis apropiada), ora, finalmente, las condiciones fisicas y técnicas que una institucién educativa debe cumplir para garantizar la buena calidad desusservicios (lo relaivo a su infraestructara y asu organizacion administrativa); pero, en todo caso, estos planteamientos dejan delado, sea por desconocimiento o bien por simple complicidad con , el régimen de dominacién que Vincula alas instituciones de ensefianzacon Is instancias encargadas de dirigir el resto de los procesos sociales, y al que obedecen los modelos didécticos, curriculares, fisicos y técnicos imperantes en dichas instituciones. Nosotros no offecemas este tipo de modelos, pero creemos que dar a conocer el régimen de dominacién que se impone en nuestras sociedades es también una actividad pedagg Recibido 29/11/05. Aprobado 16/12/05 (Cuestiones de Flosfia, No. 7 Afio 2005 ISSN 0123-5095 Tunj-Colombia

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