Cadernos de Estudos Linglisticos
Nimero 6, 1984
Paginas 229 - 235
DIGLOSIA EN LA SOCIEDAD ESCOLAR DE LA FRONTERA URUGUAYA
CON BRASIL: MATRIZ SOCIAL DEL BILINGUISMO (1)
Luis Ernesto Bekares
Universidad de ta Repubtica (Uruguay)
1. La frontera uruguaya con Brasil ha sido objeto de investigacién dia
lectolégica desde fines de 1a década del cincuenta, al constatarse la existencia de
“dialectos fronterizos" tanto de base portuguesa como de base espaiiola. En general ,los
estudios acerca del problema no salieron de la descripcidn fonolagica: se destaca el
trabajo pionero de Rona (1958), quien estableci el catlago de las variedades en fun
clon geoorafica y tinglistica. Esta tarea fue completada en profundidad para una de
Jas variedades (1a de Rivera) por Hensey (1975). E1 Departamento de Lingllistica de la
Universidad de Montevideo se encuentra actualmente realizando estudios en el campo mor
folagico-sintactico, en base a un corpus que comprende varias de las zonas delimi tadas
por Rona.
En varias ocasiones, los dialectdlogos de Rio Grande do Sul (e.g. Bunse,
1969; D'Almeida Nagalhdes, 1968) han visto la necesidad de no detener 1a investigacion
dialectal del portugués en 1a frontera; pero, hasta ahora, esta tarea no ha pasado de
Ja intencién.
En los departamentos uruguayos de Artigas, Rivera y Cerro Larco se ha
bla vorbad desde e1 siglo XVIII y no hace aun cier afios que se habla espanol en si
tuacién de segunda lengua. Este bilingismo aparece dentro de una estructura sociolin
giTstica extrenadamente compleja: se entremexclan alli complicados mecanismos de inter
ferencia, distribuctidn estratificative y actitudes, sunados a un trasiego recurrente
desde y hacia cada una de las lenguas implicadas en una inestabilidad extrema. Siguien
do datos de Hensey (1972) y ETizaincin (1973, 1976) podemos caracterizar 1a situactén
de la siguiente manera. Existen dos matrices de 811 inglismo:
1, matriz correspondiente a las clases bajas, caracterizada por 1a presencia de
tun dialecto del portugués cono lengua primaria y el espafiol estandar como len
gua "superpuesta";
2. matriz correspondiente a las clases medias y altas, caracterizadas por el espa
jiol como primera lengua y el portugués cono lengua secundaria.
En el primer caso no existe diglosia salvo en forma latente; en el segundo,la diglosia
presenta conjuntos de funciones bien establecidas.Entre estas dos matrices oscila la realidad sociolinglfstica de la re
La adquisicién del espafiol est Tigada en todos Tos casos a la educa
cin. £1 nifio de 1a clase baja To a en la escuela y el de las clases media o al
ta To adquiere de sus padres que hi oLed eset de educacién superior. Si hay bilin
glismo, es porque la escuela ha Nevado adelante una labor intensa y fructifera la Ley
de Educacién General de 1875. Ha introducido una lengua nueva y desconocida para los
habitantes, aunque el consenso general (no 1a Constitucién que carece de un articulo
espectfico sobre e? tema) 1a consagre cono lengua oficial, y ha empobrecido el vernacu
Jar hasta transformarlo en un “laberinto". €1 método utilizado fue, siempre e invaria
blemente, 1a imposiciOn inflexible de? espanol y tr del portugués. Esta practi
ca centenaria, no obstante, no acabé con el portugd¥® En cambio, ha creado graves con
flictos. Parece acertado prestar Ta maxima atenciGn 2 Tos problemas educativos implica
dos. Elizaincin (1976 y 1976a) y Garcta de Lorenzo (1975) se han referido y a algunas
particularidades de esta problemitica, fundamentalmente los conflictos de actitudes de
parte de Tos maestros. Nuestro trabajo pretende dar una visi@n exhaustive y definitiva
desde e1 punto de vista descriptivo, prestando especial atencién a Tos aspectos comuni
cativos, los que determinan la eficacia de socializacién espectfica 0 educativa.
2. £1 la sociedad escolar® de 1a frontera se consignan dos Tenguas
afiol y portugués. €1 espafiol es utilizado en el aula y en la camunicacién de ninds
con docentes fuera del aula; el portugués predomina en los juegos infantiles y activi
dades no vigiladas (cuando son vigilados utilizam el espanol callan). Oebe tenerse
en cuenta que e] portugués es reprimido por las autoridades con mayor o menor severi-
dad, al punto de que algunos nifios sientan verdadera imposibilidad de hablar portugués
sin turbarse ante los entrevistadores que se dirigian a ellos en portugués.
De este cuadro de funciones se desprenden las caracteristicas fundamen
tales de ambas lenguas. £1 espaiiol es extremadamente formal, no admite expontaneidad .
su creatividad y vitalidad es minima y su estructura sintactica muy estable,de acuerdo
a modelos fijos. £1 portugues es utilizado con informalidad y espontaneidad, es alta
mente vital y creativo, su estructura sintactica es inestable y carece de modelos, su
lexico esta circunscripto @ actividades no especificas (carencia de Véxico técnica)? .
En los lugares donde penetra la "Televisdo Gaucha” o existe contacto intenso (usualmen.
te comercial) con Brasil, se produce una relexicalizacién de la variedad portuguesa ,
ast como un notorio asentamiento de los modelos sintacticos*. De lo contrario, se cons
tata una pobreza creciente de la misma’,
Podr¥a hablarse de diglosia en la sociedad escolar, aunque nuestros ca
sos difieren bastante de los cuatro expuestos por Ferguson (1959). En efecto, encontra
mos diferencias con respecto a la caracterizacion muy general que este autor hizo del
es,
fendmeno diglosia.
En primer lugar, el espafiol no es, a esta altura de 1a eyolucién del
problema, una "variedad superpuesta" para todos los nifios. Solo los nifios de las clases
= 230 ~bajas (y algunos de las medias) 10 experimentan camo tal. Para 1a mayoria de los nifos
de clase media y alta es 1a lengua primaria aprendida de sus padres; en cambio, experi
mentan como una lengua nueva (desde el punto de vista de 1a produccian sobre todo) la
variedad portuguesa, con la cual "se contagian™ precisamente en las escuelas. En este
aspecto, pareceria ser que 1a situacién diglésica es diferente para ambos grupos de ni
ios.
En segundo lugar, Ta variedad portuguesa no parece ser ya auténona res
pecto al espaiiol, sino mas bien parece ser que e7 espafiol compronete 1a homogeneidad
de la variedad portuguesa, sobre todo en aquellos lugares aislados del contacto con el
mundo Tusohablante.
No obs; Ja situacion se presenta como diglésica y bilinglle, aunque
existan diferencias en'i®natriz de cada grupo social. Segiin Elizaincin (1975:26), 1a
diferencia entre e1 bilingllismo de los adultos de clase alta y baja radica en una mayor
conciencia de los primeros en relacién a la utilidad y dominio de uso de cada lengua.
£1 bilinglismo infantil, en cambio, antepone a la situacién linglfstica estable propia
del adulto, una dindmica adquisitiva en lenta y progresiva estabilizacion.
La lengua nativa de unos es el espafiol y Ja de otros el dialecto portu
gu@s; unos aprenden portugués como segunda lengua por necesidades ambientales y otros
aprenden espafiol cono segunda lengua por necesidades de socializacién. Es evidente que
el status del espafiol y del portugués es diferente para ambos, Tomando en cuenta los
atributos de Stewart (1974:227) y las consideraciones que sobre ellos hace Fishman
(1974:1639) podriamos tener e1 siguiente cuadro que consigna las diferencias para am
bos grupos de nifios (deben enterderse 1,2,3 como rasgos objetivos-generales y 4,5,6 co
mo subjetivos-particulares).
cuadro. +
2 3 4 | modo de adquisicion
z | 3 |zeles
| & |g ]22| 3g | 3
§ | 2/8: ]22| 2
2 | 2 /ehi se] ¢ | 3
zs | § |e | 8 x :
& a | 8 3 x
3 g 2
~ —
nifios clase media{ : + + : +
~ o alta
Espafiol
nifios clase baja + + + - + | 7
ninios clase media| 4 - | - - + -
a o alta
Portugués |—
nifos clase baja + - | - + - +
- 231La situacién del portugués(o de 10 que queda de @1, mis bien) para los
nifios de Ya clase alta se asemeja a un "pidgin" (ademas, la conciencia de Tos hablan
tes lo reconoce como tal®); para los nifios de clase baja es un vernacular en el que
aprenden a "senantizar" e1 mundo,
£1 espafio) es lengua estandar para ambos grupos, con la sola diferencia
de as formas de adquisicién en ambos casos, determinadoras de importantes implicacio
nes educativas anavizadas en 4,
3. La variedad portuguesa tiene un 1éxico abierto. Absorve de 1a varie
dad espariola gran parte de su vocabulario y 1o modula de acuerdo a artificios morfold
gicos. Sie] nind no conoce Ta palabra portuguesa para “pizarron" (lousa, quadro negro,
etc), ya que esta palabra se aprende generainente dentro del conjunto de ditiles escola
res, con gran facilidad adaptara e1 término espaiiol a las convenciones morfofonémicas
del portugués; tendremos asi [pisaFao), [pisarac) 0 [pisaFao}. de acuerdo a la matriz
fonolégica del portugués que el nifio posea.
La sintaxis es altamente permeable. Un nifio construys las siguientes
oraciones "No me tenbro, olvidei isu", "Eu vo a ver a Televisa", "Mia mai trapatha en
el centro", "fica alf, pertu d'aquel autu", "Us lune botan a mita", “as vez en cuando
vo a casa dela”. Saltan a la vista las interpolaciones de 1a gramitica espajiola en el
portugués de este nifio.
Dentro de un mismo grupo de nifios es posible encontrar quienes _posean
una morfologia verbal de 3 personas (tenhu, tein, temus o tengu, tein, tenemis), quie
nes solo utilicen dos (tenhu, tein o tein, tewus) y aun quienes solo tengan una forma
(tein).
Es claro que la estabilidad es minima, porque la estandarizacién es mi
nima y 1a presién externa es muy grande. Para el nifio de clase media o alta esto signi
fica una facilidad my grande para la adquisicién del “pidgin” que le permitiré inte
ractuar con sus compaiieros (a 10 sumo puede repercutir en su normatividad en espafiol);
para el nifio de clase baja esto significa un proceso de anoia creciente.
4. Los problemas educativos que trae aparejados esta situacién no son
pocos. Dejando de lado aspectos de escasa importancia como los que corresponden a Ya
alfabetizacién en espafiol (que acaparan el interés de los maestros que les dedican es
tadTsticas y dems), explicables por el empefio de utilizar metodolog7a de una primera
Jengua para ensefiar una segunda lengua, es claro que lo mas grave es la traba impuesta
al proceso de socializacién.
La adquisicion del Tenguaje no es un proceso aistado. EI nito va pro
gresivamente adquiriendo Ya competencia linglTstica al tiempo que desarrolla todas sus
aptitudes sociales. Aprender a hablar y aprender a comportarse en la sociedad,aprender
a emitir enunciados adecuados en ta situacién y aprender a manipular Jas cosas en Ta
situacion, son un mismo proceso. Hemos sostenido esta aserciGn con exhaustividad en
otros trabajos (Behares y Elizaincin, e.p. y Behares y Cordery, e.p.).£n esos trabajos
= 232 =comparamos 1a situacién de los adquirentes monolingles y bilingles en diferentes contex
tos sociales.
Cuando un nifio ingresa en a sociedad escolar, esta o debe estar en con
diciones de adquirir un amplio repertorio de estilos (i.e. moldes mediante los cuales
su Tenguaje se adapta a la forma de comunicacién, 1a situactén y el interlocutor). La
adquisici@n de Ja capacidad exhaustiva de verbalizar, el desarrollo de 1a concientiza
cin de los roles sociales y de los procesos metalingUTsticos, son requisitos imprescin
dibles para 1a alfabetizacién y el ingreso al mundo de 1a educacién. En los nifios de
Jas sociedades monolinges esto se cumple satisfactoriamente en 1a etapa preescolar. Lo
mismo sucede con grupos de nifios de Tas sociedades bilinglles de nuestra frontera perte
necientes a 1a clase media, asT como tambien en otros lugares (cfr. Zentella 1978,
Oksaar 1971 y Huerta 1977). En el caso de os nifios de clase media de nuestra frontera
hemos comprobado que reprimiendo sistendticamente 1a variedad no-esténdar, el nino ad-
quiere sin dificuldad 1a “estilstica" de su lengua primaria o nativa que es el espanol.
En los casos descriptos por Zentella, Oksaar y Huerta el procedimiento llamado cambio
de cBdigo ("Code switching") actua como regulador de un bilingtlismo que es anbientalnen
te deseado y alentado’.
Em ambos casos, el nin esta apto para introducirse en el mundo nuevo de
Ja aducacién, que requerir un rapido asentamiento de su Tengua (o Tenguas) y un domi
nio absoluto de las posibilidades sociolinglisticas de las mismas.
En el caso de los nifios de clase baja de Frontera, 1a situacién es otra.
Ingresan en Ta escuela sin ninguna consciencia de sus posibilidades estilisticas y con
tuna lengua que va a ser reprimida. Comienza la socializacin en una lengua nueva en 1a
que no lograra expresarse y mucho menos variar de estilo. Ser un hablante de espaiiol
de un estilo: un estilo formal al que ha Megado artifialmente. Por otro lado, su portu
‘gués no podr nunca pasar de un estilo familiar 2 causa de 1a necesidad de ocultarlo.No
podria verbalizar naturalmente y, menos aun, realizar operaciones metalinglisticas:esta
es la verdadera razén de las deficiencias en 1a "alfabetizactn en espaiiol”.
La etapa escolar de estos nifios quarda muchas afinidades con las descrip
ciones de Bernstein y Henderson (1972) de los nifios de 1a clase obrera inglesa. La len
gua espafiola es un cOdigo demasiado elaborado para ser manejado por ellos, que provie
nen de un dialecto anémico y defectivo. Este hecho determina grandes dificultades en
cuanto a la socializacion de nifios de clase baja de la frontera.
Como es evidente, con solo enfocar criticamente los problemas educativos
a que hacemos referencia ya estamos en camino de soluciones valederas. Pero, esto pare
ce aun muy poco probable, dado e] estado actual de las actitudes docentes (mas o menos
oficiales) muy lejanas de reconocer la descripcion tecnica de la situaci6n.
NOTAS
« Este trabajo resume observaciones directas en catorce escuelas, en una extension ter.
ritorial que va desde Ta Ciudad de Artigas hasta 1a de Rio Branco. Se tuvo en cuenta
+ 233 -aqui: 1) datos aportados por los maestros, 2) datos aportados por los nifios, 3) ob
servacién directa de actividades cumplidas dentro de las escuelas y 4) entrevistas
dialectolégicas grabadas (52 informantes). Esta investigacién es parte de un proye
cto mayor que prevé la descripcién sociolingbfstica de 1a zona y que se realiza
en el Departamento de Linglistica de 1a Universidad de Ta Repiblica (Montevideo )
con el financiamiento de 1a Direccién de Extension Universitaria.
2. Consideramos sociedad escolar 1a comunidad de intereses nifio-maestro, cuya funcién
es la realizacion de la prosecucién educativa. Sumamos 2 ésta la sociedad infantil
que le es inherente.
3. Dada la cercana estructural entre las dos lenguas, el léxico no ofrece, mayormente,
sistemiticas oposiciones, sino, ms bien, complementariedades. Se trata, sin dudas,
de un "dialecto bilinglle”.
4. E1 caso mas notorio parece ser el de Rivera.
5. Un caso extremo: 1a pequefia poblacién de Sequeira (mil habs.) perdida en el interior
de} departamento de Artigas.
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