R. Dahl La igvaldad palites. 2006 II. GLA IGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? ‘St SUPONEMOS dos cosas, ambas dificiles de rechazar en un discur- so piiblico abierto y razonable, el caso de la igualdad politica y la democracia se vuelve extraordinariamente poderoso. La primera es el juicio moral por el que todos los seres humanos tienen el mismo valor intrinseco, que ninguna persona es intrinsecamente superior a otra, y que se le debe dar igual consideraci6n al bien 0 alos intereses de cada persona.’ Llamaré a esto la suposici6n dela igualdad intrinseca. Incluso si aceptamos este juicio moral, surge de inmediato una pregunta sumamente problematica: equién o qué grupo esta mejor calificado para decidir cual es el bien o cuales son los inte- reses de una persona en realidad? Desde luego, la respuesta variard dependiendo de la situacién, de los tipos de decisiones y centramos nuestra aten- cién en el gobierno de un Estado, entonces me parece que la suposicién més segura y prudente seria algo asf: entre adultos ninguna persona esta sin duda mejor calificada que otra para gobernar como para que se le deba encomendar el gobierno del Estado con autoridad absoluta y definitiva. Aunque de manera razonable podrfamos agregar mejoras y perfeccionar este juicio prudencial, es dificil ver c6mo se podria sostener cualquier propuesta sustancialmente diferente al menos por tres razones. Para empezar, la famosa y tan citada proposicién de Acton parece expresar una verdad fundamental sobre los seres humanos: el poder corrompe, y el poder absolu- " Aquf y en otras partes he recurrido a Stanley I. Benn, “Egalitarianism and the Equal Consideration of Interests”, en J. R. Equality (Nomos 1%), Nueva York, Atherton Press, 1967, pp. 61-78. 19sejoRDouiop 105 uoqop ‘souoromsuy seis sosod sosyed soise onb ws ‘ore of 10d “ee -owp ered sereso2ou se>ispq SOUOEMIASUY Se os udp UID uo uauan sepoy anb seonyjod souoromansut se ‘o1mes of 30d ‘seme -oUap sepo) Uos wRONION & wows “ELIOVEBUy ‘SOpMN SopEIsA So} ‘ojdurafe sod :orreniqze auourend © azeqnout pues oisrureuozex Onsanu ‘pepyear ve] reredwi0o Teno e[ Woo eept Jap UgIodaouOD euN soureSua) aonb sousut V ‘sofeaa seuraisis sosroarp sereduros a[qisod sa anb jo woo ojepour un euorosodoad Jeapr eoeiourp vun ap ugiodrassap B| ‘sopvar seutsisis seoyIsep ered sofeapr souoIoMaNsuOD san, shs aIqUOsep [Nn ONUODUA sefsoisEy onb souozer seUISTUT Sv] 40g "eIDEID0UIEP op [eapt uN ap ordosu0> [> UIS BLIOOEFsHES wroueul ap seungoad seise Japuodsex sourspod ou anb 0219, Popyvas v] pssu0o poop? 1 gsouoronsnsut seso gnb sod X? ¢eisepourap eun ouL0 anbyyes oonsfod euraists un onb esed setresooou uos seonyfod. souofoninsur anO? “eDeD0UISp wun so vonsfod peprensr ey ap seonyfod souotomnsur sns < peprurngay ns eatiop anb opeisy, un geusaqo# exed oonyjod eurmsis oo1um jp onb z199p ouresa0ou $9 ON cepezuEsTE 91gIS0d so OLHOD? ‘(seHEUMY SauOIDEIDOSE se] sepor ue aioUrELIesoD0u ou anbune) opeisy un rewI9q0R Te aqusreauos so eonyfod peprengr vy onb sourmpuos 1s viovasowaa 4 VorLyI0d avaTynoy ‘a[qeuoze: £ ayustiaauos [eapt o oA Peprenat ej & oXode orsony un wos9330 sof -piouaprud £ saperour sorom! soy anb o81p a1uaurajdunig ‘opp ay anb seuozes set s1uou! ud uejuar eonsjod pepjensr so ‘spod 98 nb of ap conpiowiap ofyn tn ap pepiomion bod NOLL Spt 29 -2red opernsas , ssondsop o1quas0 uosqeD “S6IT ei Te Ose ft SEIA ZI ap ex sontesmauco sot sopon ap Tediounid opeultxoide omMoqe> [9 an OUAMESP eoqnoqy> 80] 3p reonsspenso seqant 9p ou oun OpeztTea! 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Uno es ayudar en la teoria empirica o cientifica. El otro, ayudarnos a realizar juicios morales al proporcionar un fin u objetivo ideal. Ambos se confunden con frecuencia, en el primer sentido no implica necesaria- mente un “ideal” en el otro. En la teorfa empirica, la funcién de un sistema ideal con- siste en describir las caracterfsticas 0 la operacién de ese sis- tema bajo un conjunto de condiciones perfectas (ideales). Galileo infirié la velocidad con la cual un' objeto caeria en el vacio -por ejemplo, bajo condiciones ideales- al medir la velo- cidad de una canica rodando en un plano inclinado. Obviamente no midié y no pudo haber medido su velocidad al caer en el vacio. ‘Sin embargo, su ley de la caida de los cuerpos contintia siendo vélida hoy en dia. En fisica es frecuente formular hipstesis sobre la conducta de un objeto 0 fuerza bajo condiciones jideales que no se pueden alcanzar a la perfeccién en experi- mentos reales, pero que se pueden aproximar de manera satis- factoria. De manera similar, cuando el socidlogo aleman Max Weber describié los “tres tipos puros de autoridad legitima”, comenté que aungue un “ideal a utilidad de esta divisién s6lo puede mostrarla el movimiento sistemtico que con ella se busca [...]. Ninguno de los tres tipos ideales [...] acostumbra a darse puro en la realidad hist6rica, no debe impedir aqui, como en parte alguna, la fijacién conceptual en la forma mas pura posible de su construccién.* Un ideal en el segundo sentido se entiende como un objetivo conveniente, uno que probablemente no se alcanza a la per- °) Max Weber, The Theory of Social ard Economic Organization, trad. de A. M, Henderson y Talcott Parsons, Nueva York, Oxford University Press, 1947, pp. 228 y 329 [trad. esp Economia y sociedad, trad. de José Medina Echavarria, México, Fondo de Cultura Econémica, 1944]. gLA IGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? 23 fecci6n en la practica, pero es un nivel al que debemos aspirar, y con el cual podemos medir el bien o el valor de lo que se ha logrado, de lo que existe en realidad. Una definicién y descripcién de democracia puede tener la intencién de servir s6lo al primer propésito; 0 podria servir también al segundo. Como ayuda para la teoria empirica, la concepcién de la democracia puede no provenir de un defen- sor sino de un crftico para quien incluso el ideal es insatisfac- torio, o simplemente irrelevante, para la experiencia humana debido a la enorme distancia entre el objetivo y cualquier posibilidad de una aproximacién satisfactoria. La democracia ideal Aunque una democracia ideal se puede describir de muchas formas distintas, un punto de partida util es el origen etimo- logico del término: demos + kratia, gobierno del “pueblo”. Para dejar abierta la pregunta: acerca de a qué “pueblo” se le ha proporcionado igualdad politica total, en lugar de “el pueblo” utilizaré mejor el término més neutral “demos”. Creo que una democracia ideal requeriria como mfnimo estas caracteristicas: + Participacién efectiva. Antes de que una politica sea adop- tada por una asociacién, todos los miembros del demos deben tener oportunidades iguales y efectivas para hacer saber a los otros miembros sus puntos de vista sobre lo que deberia ser la politica. + Igualdad en la votacién. Cuando legue el momento en el cual finalmente se tomara la decisién, cada miembro debe tener una oportunidad igual y efectiva de votar, y todos los votos deben ser contados por igual. + Adquisicién de conocimiento iluminativo. Dentro de un periodo de tiempo razonable, cada miembro tendré opor- tunidades iguales y efectivas de aprender sobre politicas alternativas relevantes y sus consecuencias probables.-uasoadai soo P190Ul9p Sous ap o[ouresop |e ered settes -200u woraTy 5: NSU ap oL19s uN “esayaur eqey, ap sasyed soy & edoing ue ‘xx & XIX SOpSIS Sof ap OBsE] Of ¥ VALLVINASSWdTY VIOVYOOWAC VI AC SVOLLFTOA SANOIOALIISNI SV] ‘souepried soyonur neues peso] ueY ou se1s9 OWIOD souondo ‘oBIequia UIg “oLIOIIP -exU09 $9 vauDIUasaddas DIZDL20WAp OUTULID [2 anb Us “701905 oresuoD JP Ua Neassnoy OUI. ‘UsISISUI s200A seUNB[E sax -osuajop saiuataiay spur sns gnb tod & ‘oanequasardar eutoists un anb [eopt [e euvouso seu ETpeY as wISjalquTese wIoeID0WLap ef anb esuard 9s sea2a seyanur anb od ‘ssouoqs ‘9A [1993 Sf “eloxew ¥] ap 50104 So] asopugruoduny ‘jen 1od Sopor sojopuyiuoo ‘soioa sns mmruIo UeLIpod ‘ouoWTeULy row -odoud ‘tepusuiue ‘mgeqop ‘mnostp uerpod sojqvuozex oduion, ap sou] 2p oxuep ‘TeNNoU Jopesspour un ap wns vy ofeq ‘EY ‘ea ePBUT eA ap o[gend un ua oyoruENMAe [> “eIDOuIA up Jeong o1eleY [P “PUY UD OUOg |9 ‘SeUDY UD xtug sTUOUE P siuatueAuOD JeENy UN UE asiTUNaL UEJIpOg “seNO aNUe ‘se) ~qoso soquany reyMMsuO9 £ sopeuLozUY 10four URIS UBIApISUCD anb sorquierur sol © woTSeULIOJUT pod ‘souepepnisuos sns oo seasandoud & seonrod stnostp uepspog sre1uasoid & wea sof as anb svisendoad se] 21qos uezarpnd onb of opor asiezoyua ap sougy] UeLI2s souEpEpNID SOT “,o[qand [ap oUEIG03,, un ap sor ~ismbax soy ua{duino anb souoronipsur outos ayuaTUaAUOoUT UTS 494 ueppod as wIs}oIquTEse eISeD0UIap E| ap SeoN[od sou -maysut sel ‘vary ue A oxouMU Ua euaNbed so peprun wun 1g ‘O[epnp UIs efoesoUrep uoreUIe|] of ‘soreTN] sono & worpwiy U2 sox soYDnUr OUIOD ‘soprun, SopEisy soy uo a[ffsonbooy, opuens o ‘[eapr ours [ear eIe1D0Wap UN OU. sroges e- eulaisis ns ¥ eIDeD0UFap UoLeUIET] SoON[od soyOsoTy, & ‘sozapy ‘Souepepnio soy opuens seuary u> uosatory of onb ou. -18eury aut ow0D ‘Teopr [2 efoeY Osed ueIa UN UEP souOTOMINSUT St é{TAVNOZV OALLAFAO Na Sa YOULJTOd avarvnor wT? se] ‘oBrequia UIg “Teapr o wioayred eFoeIDOWNp vT TezuEOTE eed soquaoyns ‘up19s OU aNb OmMBas Ise so OYDeY op “195 OU LEP -ond ‘oye siioureanepad wfeIDOUISp 9p [PAU UN soueDTe oon, -yjod euiaists un onb ered spupsazau 19s uspand sapear Seer -owrsp se ap seonsjod sauoronansur se] anbuny “[eapt [ep sor -ismbax so] opoi [ap e[dump [eos oonsjod euraisis undutu onb aiqeqoad so anb us [esouss o] 10d opnsisur uey ‘spndsap une A nwassnoy Bisey sa[pigisity apsep soonyfod soyosoyy soundly sappas sooupioowap sDiUie1sis “sojequsurepuny soysarep ap BuO. -s{s un ‘qqUSUIRLIeSa90u ‘S9 UDIqUIBL, “sooNIod sosa20xd UD 019s OU ‘s2uOjUA ‘aISISUOD eDEDOUIAP eT] “EpUase e| 21G0s yeuy jonuos [a z019f9 [e souRpepntouos soy uoD peprensr ap SoUO!ORIAL Ue rediorted v OYparop [P & “epuade e ue 01 -unse [9 s9puaiue ered oLres990U OyUDTUNTDOUOD [2 TeasNq e ‘oypozep [2 “SpUIap So| ap [2 anb [enay a1uoNs as oun ap o10a [p anb e oyparsp [2 ‘wedionred & oysexep Jp :[eopr eIDeID -oulop uN ep uepio [ep eLTesad9u opted eum Js UD so onb oyparop un aquosaid [eap! eloe:20urep BUN op seETesssou seons}ioiowsNo Se] ap BUN ped “sa[eIusUTEpUNy sOYyDaIEg «+ “epuo3e e] 1qos Jeuy jonucs jep oppouafa Je A sowunse soy ep oaneuur =nyf oyuayur]D0ueD uN ap epanbsng ‘Uo!eI0A ¥[ uD Pepfensr ‘eaoaye ugredionied :seyosep eA seurioy se] ua Tedion, -red v oypazap vipua soulsp [pp OrquioIUK epeD “UoISNSU + soxquiofur sns 1s ‘soulap [a 10d o1quies [e seLOIge uELTEIso aadwiols uproeisose vy] ap seonsfod sey “yrene9 os eounu salouiajue seopspaeres san se[ uarambax anb oonvs> -ourap oseooad 9 ‘sy “epusse v] ap oxted uyzewti0} sojunse anb woro/81[9 sosquiaqur sns (1s £) ow99 4IpIoap ap waIsnIOXe pepiunuiodo | y1puar sowsp [a “epuase vj ap [euy jonuoy youriod avatvaol v1 ve26 LA IGUALDAD POLITICA tativos, que tomadas como un todo, fue enteramente nueva en a historia de la humanidad.¢ A pesar de las diferencias impor- tantes en las estructuras constitucionales, estas instituciones politicas basicas son similares en sus perfiles generales. Los mas importantes son: + Las decisiones y politicas gubernamentales importantes son directa o indirectamente adoptadas por, o bajo la responsa- bilidad de, los oficiales favorecidos en = Los ciudadanos tienen el derecho a participar libremente en elecciones justas y razonablemente frecuentes en las cuales Ia coaccién no sea comtin. + Los ciudadanos tienen el derecho a postularse y servir en cargos electivos, aunque se pueden imponer requisitos tales como la edad y el lugar: + Los ciudadanos pueden expresarse de manera piiblica sobre una amplia variedad de temas politicamente relevantes, sin peligro de recibir un castigo severo. + Todos los ciudadanos tienen el derecho a buscar fuentes de informacién independientes sobre otros ciudadanos, en periédicos y en muchos otros materiales; ademas, existen fuentes de informacién que no estén bajo el control del gobierno o de ningtin grupo en particular, y la ley protege con eficacia su expresién. + En completo contraste con aquella opinién imperante en las primeras democracias y repiiblicas acerca de que las “faccio- nes” politicas eran un peligro que se debia evitar, tanto la teorfa como la practica llegaron a insistir en que para que los ciudadanos obtengan sus diversos derechos deben poseer un derecho ms para formar y participar en asociaciones y organizaciones relativamente independientes, incluyendo partidos politicos y grupos de intereses independientes. 4 Vease Bernard Manin, The Principles of Representative Government, Nueva York, Cambridge University Press, 1997 (trad. esp.: Los principios del gobiemo representativo, Madrid, Alianza, 1998). gLAIGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? 27 Instituciones politicas como éstas se desarrollaron en diferentes paises bajo diversas circunstancias politicas ¢ hist6ricas, y no fueron necesariamente promovidas s6lo por impulsos democra- icos. Sin embargo, se haria cada vez més evidente que eran ins- es necesarias para alcanzar un nivel satisfactorio de demasiado grande para una democracia asambl La relacién entre las instituciones de una d (a gran escala) y los requisitos de una democraci den resumir asi: En una unidad tan grande como un para satisfacer estos ‘son necesarias estas instituciones criterios de democracia ideal Participacién efectiva Representantes elegidos ris oo Control de la agenda Voto igualitario 2. Blecciones libres, justas y frecuentes came e Participacién efectiva Participacién efectiva 3. Libertad de expresién Conocimiento iluminativo Contral'de la. agenda Participacién efectiva 4, Fuentes de informacién alternativas _ Conocimiento iluminativo Control de la agenda Partie Conocimiento ilurninativo Control de la agenda 5, Autonomia de asociacion Participacién efectiva del demos 6. Inclusién de todos los miembros Voto igualitar del demos~sodns ‘eqrue) eonsjod peprengr e] xezuespe ered orpour un outo> o[9s opeoynsnl ¥ise eJsOKeUT PT ap OUIDIGO3 [> 1S « Deplengr e epreuep souesos9u soysorsp soy e ssuo!e] -O14 © souoloeBou seyso ‘ConpiooWI9p eUIaISIS UN Ieuep TY « oonpisowiop oonyjod eur -s]SIs un wpreUEp sorTeso0aU SoyDaI9p SOIS9 EIOIA O.TeZON « ranb apuonue es ssouoig, ‘oonp0Ulap oonsfod ewarsis un o1uoUNe}a|duI09 rexBOT ered (saqua1yns ou onbune) sonresaoou Uos soysarep SOLIDI A “p “vonyjod peprenst ey xezuepe wred (ayuaroyns ou onbune) eLresa09u UO!oxpuOD BUM $9 OoREIIOWEp OoNIod PUIAISIS UA “¢ vonsjod peprensr e[ 1ezueope ered orpour un ou1o9 oj9s opeoynsnt ¥1so eysoseu vy 2p oUIDIGOS [gq “7 “aqua & stustuaauos oanafgo un so eonyjod peprenst ey zezues[y “1 ‘onb sourtuunse 1s ‘eyouss spur eroueur aq “eonsjod Peprendi P| ap ordroutsd Jo 10d ojs sepeoynisnf upise souotsoe seAno seyoxeur se] tod sopejota syusureumnro] 9s uopond ou vis20wap v] Div souDseoaU seppIusUpUR) Soyse.ep 50} aonb ofago aooxed vo189] a[duns ap orunse un owos ‘nbe re8 -91| 08sap anb oj 2p yIre Spur eLTeAaT] sou OLUNse [ap osofonuTUT uourexe un onbuny “sejiodeur se] 9p [euoronmnsuos X peBol Pepuione eT ap exeny 1e90[09 uapand as uaiq & seuMNBo] 198 uopand ou soysozep sois9 ueEINNsap osnpout anb o ajusurean, -eoytuils uesrenfiqep onb sauo‘sor se anb aonpap as soouoIUD ‘eanequasasdas viseoourop e[ vied selies20u UOs ‘uarombar enb soysaiap so] uoo orumf ‘opeuorousws ay onb sauoronynsut Se[ Is & ‘e[eoso ues ¥ soonsjod seurorsts so] exed waneuasaidar 1DeISOWUSP ¥] 2p PEPITIGeIA K e1uaTUaAUOD BI Ua sOUTDAID 1 Soupsooeu sooupssowap soyoa.eq 6¢ ex #VNOZVa OATLALAO Nn sa VOLLFTOd avarwndt VT? 75-91 "dd "9661 ‘outa opm eq consis sispue unsure wzIMD “\Ghe “A ‘OLBI ‘seid AON sBpaquieg ‘aBpuquies “po xz ‘Muowuiotos) pis) Jo SOSPOAL OM $4207 (CP2) nose] 91a) ,0180 PP NFoUoD & zeMIDe v OYalEp [> auaN eUOKeU ef END PP ua ‘oonypod odians un equowour as9 uo uaoey A uBsOdLIOoU 9s opous 989 9p ‘Ot “191908 0 peprunuios eun 20s w uapande SaiquioY ap axUINL uN OPEN, ¢ gsowop [ap sosqurayur soy ap puodou ef op pepuome e| e ‘awoureyax9u0D spur f ‘SoKa] reBPUL -oad exed soutap [ap pepriome e| e epensope exsueUI ap 12u0d uopond 2s sexy gnb? ‘suoureyoIeysnes oproayqeisa ueY, 98 sepresooou seonyjod souoroninsut sey A sow.sp [2p sorqurorar Soy sopor anb sourtumse 1s :erunBaud exysanu & OpuarafoA sTMbE O1mMse fo Uo ou sorsp ‘seuID|qord ap aoares ou eLioceur eI op ousIgo# J9 anbuny “soonsjod sof -en3{ owos sopeen 9s ¥ OYarep UsU9H soURpEpNIo So] Sopor anb ap ojsendns [2 09 s1uarstsu09 9s aoared oWZoIgO8 O.n0 UNE. “Uru anb pep o1eINb o9s “ej1oseU v] ap OUIDIgOa Jo Toys! ‘opuaiaad ou ‘aiuasard Jo eisey a0] uYoE apsop a1us9UTAUOD ‘au ‘€ osopepmo srst[ZuE ap eur) oprs EY UOIeOgNsNf ns £ sepiogeur ap ousa1gos ap ordioutd Ja anbiog “oane|stB9] odzano [p We saueiuasardox sns ap eproxeur e] ap PT ‘SoAneiUasa.dar Seula}sis Ue O ‘souEpepNID So] ap eELOKeUE PI ap ODsop [> -INBOS 2qap woIstap E] anb s2 soopy.DOULDp seUIDISTS So] UO TeNIIqeY e -sandsax ey ¢2009,eaaud vred eperdorde ey epras sougib op wor -do ep? ‘seonyfod set ue opranse ap uyiso ou somepepnin so} sowap Jap 4pod jap sownnSa] somes] Vou Tod avatar v1 ae30 LA IGUALDAD POLITICA cin 2), el principio del gobierno de la mayoria no puede justificar razonablemente acciones que infligen un dafio a los derechos necesarios en un sistema democratico. No seria inconsistente con las creencias democraticas, enton- ces, imponer limites a la autoridad de una mayoria para emprender acciones que destruirian una institucién como la libertad de expresi6n, necesaria para la existencia de un siste- ma democratico. Este es el propésito, por ejemplo, de una Declaracién de Derechos arraigada en una constitucién que no pueden alterar Jas mayorfas ordinarias del 50% mas uno, sino que en su lugar requiere que las enmiendas sean aproba- das por stiper mayorias. Es légico, por supuesto, que incluso los miembros de la stiper mayoria necesaria que se requiere para un cambio cons- titucional no podrian creer en la conveniencia de la democra- cia y, al mismo tiempo, apoyar una enmienda constitucional que con severidad afectaria o destruiria uno de sus requisitos, como la libertad de expresién, elecciones libres y justas, y otras antes mencionadas. Aqui cruzamos el umbral del deber ser al ser. En el mundo de la realidad empirica, si una mayoria preponderante de ciu- dadanos activos en un pais democratico persiste en creer que un derecho necesario para la democracia no es conveniente y que se deberia limitar o abolir, entonces es muy probable que se restrinja ese derecho. Incluso un sistema juridico indepen- diente seria incapaz de contener una corriente fuerte que avanza sin cesar contra los derechos democraticos. Cuando un demos deja de creer que los derechos necesarios para la democracia son convenientes, su democracia pronto se con- vertiré en una oligarquia o en una tirania. Sin embargo, hay otra ruta més insidiosa de la democra- cia hacia la oligarquia. Incluso si la mayoria de los miembros del demos contintia creyendo en la conveniencia de estos derechos fundamentales, pueden fracasar al emprender las acciones politicas que serian necesarias para proteger y preservar estos | gLA IGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? 31 derechos de las violaciones impuestas por lideres politicos que poseen mas recursos para obtener sus propios fines politicos. ¢La igualdad politica es un objetivo viable? Estas observaciones plantean una pregunta fundamental y pertur- badora. Incluso si creemos que la igualdad politica es un obje- tivo sumamente conveniente, facilmente alcanzable en un sis- tema politico democratico, gel objetivo en realidad se puede alcanzar, aun en un sistema democratico? ¢O algunos aspec- tos fundamentales de los seres humanos y de la sociedad humana presentan barreras tan altas a la igualdad politica que para propésitos practicos el objetivo esta y seguiré estando tan lejano que deberiamos abandonar los esfuerzos para alcanzarlo? Los Estados Unidos proporcionan ejemplos contundentes de la enorme distancia entre la ret6rica y la realidad de la igualdad politica. En el segundo pérrafo de un documento que es por lo dems una lista bastante tediosa de los “repetidos agravios y usurpaciones” que caus6 el rey de Gran Bretafia, se encuentra la famosa afirmaci6n de una verdad supuestamente manifiesta, que dice que todos los hombres fueron creados por igual. Los autores de la Declaracién de la Independencia de los Estados Unidos y los 55 delegados del Segundo Congreso Continental que votaron para adoptarla en julio de 1776, fue- ron, por supuesto, todos hombres, y ninguno de ellos tuvo la menor intenci6n de extender el sufragio 0 muchos otros dere- chos politicos y civiles basicos a las mujeres, quienes, en con- templacién legal, esencialmente fueron propiedad de sus padres 0 esposos. “De las mujeres”, escribe Rogers Smith en su obra maes- tra sobre la ciudadanfa estadounidense, la Constitucién no dice nada directamente. Sin embargo, utiliza pronombres masculinos treinta veces para describir a los repre- sentantes, a los senadores, al vicepresidente y al presidente de los‘Sepeparoy seonoyid ue “eploseur esuauruy ns uo “2asts “Yoo onb [euoroeu omoutEpTed fo uD wife BIeWIED eUN op OUST ~oxwUE OSOIqUIOSP Jp OANIHeUT EUTIAIg WeID ‘opunuT fo Ud oon, ~epoulap syed ono Jomnbjend ap wpouaiaytp & ‘soue sovod avy PISeH “uoTensturupe Py X “elonsnf vl < oYDaxap [2 opuacnput ‘souorsayoad se] ‘oorUPILig [AID O1ptalag a[qestumpe fo ‘roLadns ugroeonpe ue s1uSura[qeiOU ‘sexoUeUI seLTEA ap UeToLTESOp 2 294 NS B anb ‘smieiso { aselp ap serouaayIp ap euxI0} eI ofeq soqet90s sopepjensisep sey ap ojustuitusTUeUL [> 10d feIUapIs90 cadome syed ono unsuru us onb ugised 1ofeur 09 opesar “SUT Wey 9s “eueIaIg UeID ‘opunuT [ap sopezueat spUI soanPID -ourap sasfed so] ap oun ap seuosiad sey so/Sts soyjonu sod onb ue opienoe ap uepreisa soadoina soysnyy ‘soanpisourop sosyed sono ap soyduwiafo sojqeioumuut reuorr0doxd oj|1ouss e19§ e8n] ono unSuTU Ud opearasqo uesqey anb ve] ap axiony spur peprenst vj sod uorsed eun zen "SOW! 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Y slo dos pafses “democraticos” ~Nueva Zelanda y Australia~ habfan extendido el sufragio a las muje- tes en elecciones nacionales antes de la década de 1920. En Francia y Bélgica, las mujeres no ganaron el sufragio en elec- ciones nacionales sino hasta después de la Segunda Guerra Mundial. En Suiza, donde el sufragio masculino universal fue establecido por hombres en 1848, las mujeres no garantizaron el derecho al voto sino hasta 1971 Hasta aqui el compromiso ret6rico de la igualdad politica tantas veces reivindicado por Iideres y por muchos ciudada- nos, ciudadanos masculinos, en pafses “democraticos”, La distancia histérica entre EL CRECIMIENTO DE LA IGUALDAD POLITICA A pesar de que es evidente que en la préctica se ha negado con frecuencia la igualdad en muchos lugares, es sorprendente que en los tiltimos siglos muchas demandas de igualdad, incluyendo Ja de igualdad politica, se han afirmado con soli- dez gracias a las instituciones, las précticas y la conducta. ‘Aunque este movimiento histérico monumental es en algunos aspectos mundial, quizé se ha manifestado més en paises democraticos como Gran Bretafia, Francia, los Estados Unidos, los paises escandinavos, Holanda y muchos otros. En las paginas iniciales del primer volumen de La demo- cracia en América, Tocqueville sefialé el inexorable crecimien- to de la igualdad de condiciones entre sus compatriotas fran- ceses “en intervalos de cincuenta afios, a partir del siglo x1". Esta revolucién no sélo se Hevaba a cabo en su propio pais: “A donde quiera que miremos”, escribié, “seremos testigos de la misma revolucién que contintia a lo largo de toda la cristiandad”. gLA IGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? 35, “El desarrollo gradual de la igualdad de condiciones”, con- tina, “es [...] un hecho providencial, y posee todas las caracteristicas de un decreto divino: es universal, es duradero, constantemente elude toda interferencia humana, y todos los acontecimientos, as{ como todos los hombres, contribuyen a su desarrollo”.* Le podemos conceder a Tocqueville una cierta medida de hipérbole en este pasaje. También podemos notar que en su segundo volumen, varios afios mas tarde, estaba més preocupa- do por lo que vio como algunas de las consecuencias no con- venientes de la democracia y la igualdad. Incluso asi, no dud6 de que el avance continuo de la democracia y la igualdad era inevitable. Si hoy miramos hacia atrés los cambios ocurridos desde su tiempo, nosotros, como Tocqueville en su momento, podemos asombrarnos de cuanto han avanzado las ideas y las practicas que respetan y promueven la igualdad politica en gran parte del mundo, y, en realidad, también aspectos mas amplios de la igualdad humana. En cuanto a la igualdad politica, consideremos la incref- ble difusion de las ideas, instituciones y practicas democrati- cas durante el siglo que acaba de terminar. En 1900, 48 paises eran paises completa 0 moderadamente independientes. De Estos, s6lo ocho posefan todas las otras instituciones basicas de una democracia representativa, y en sélo uno de ellos, Nueva Zelanda, las mujeres habian obtenido el derecho al voto. Ademis, estos ocho paises contenian no mas del 10% al 12% de la poblacién mundial. Al inicio del presente siglo, las instituciones y las practicas politicas de la democracia repre- sentativa moderna, incluyendo el sufragio universal, existen en cerca de 85 de alrededor de 190 pases, a niveles equipara- bles a los de Gran Bretafa, Europa occidental y los Estados ° Alexis de Tocqueville. Democracy in America, trad. de Henry Reeve, Nueva York, Schocken Books, 1961, vol. f, 3001 [trad. esp.: La democracia en América, Madrid, Aguilar, 1989)‘E61 4 “poor ‘ssaug AsrOA 2feK “UBAEH MON tssHOLegrT remLnnyoAy RIOWY Y promar "WO}SSYG PUD soMNOg UO JBzEM [PRYDHW 9p (OlWaIUrEIpodts) musuuaeodute & (upIoedioueWD) LoYediotmu Ip SOIPPOUL SOI SSUtEGA “SHB OItos aud anb 0} uo otojduioo 10d syqneduioo o1sd “evunssp UoIDePMUNIO} Cun wed ,, S9PTHT 2p errewory ej uo owsyzeu Jap seuiSop oj ‘ereIy Ue wis!Ose] EULNDOP P| “eONgIAOS UOIUN FT ue oursrurus|-owspareut fal “o}Bo[IaLd [e £ zopod fe peprumrsoy zep ered opiates ey a[qeuonsonou: 2 vonpuxop eopoopr wun. ‘somuajoar sovren[e0} souSUNIBon Ug “[eLaduN BUIYD ef UD souR 9p soffit soprea Jod o1osqeaaud anb ‘oustueionjuos Jo om109 “eIoyo eYosory vun sod reUrNB9] uapand os oVBapatid [o£ embresof ef ‘soseo soungye ug “eonsjod peprenst ej ap vapr v| woo zemonted uo eqezneduns ou sajrorsiay opezopour spu [> Osnppur o18q “uore|g 2p oses oxpaooiddult 9 osoUTEy [2 OWOD ‘arf &| ap oure1goR [op esuayop ¥I w UasngNUOD UDTqUIE) Soy -os9|y SOT] ‘seaxeuour so] ap ousiqo8 [2 zeoyTisnf ered edomng uo otis sop81s soyonur sod anb ‘,saKa1 so] 9p outarp oysarep P, Ouios “Toren orenso [ep souquidIUL setUsTUI seT[> ‘ses -o¥@yea sopepuiome ‘tod sepearo opis wey yzmb X ‘ua uecode as seutnsop svisa ‘erousnsayy uoD “pepLorodns ns ueoyusnfanb seutnoop sey waiedsax as anb ussey osnjour ‘uapand opuens ‘< uekode ‘aramb 28 1s ‘seorurUOD9 £ s9qeID08 ‘seOLIF[od SOMt|a SEL “peporoos Bun op soperiopiand spux souquianus soy ‘ooidn so oWlo uuoop v] 40d opvorfusnt pisa oepaud 131 svossooad jap vonyuronbsa ugroduosap wun ze1uasaid oem ‘sopersoptianid sor ~Bnse So] ap saropiadns sosmoax so] ap zesed v vonyjod peprensr PL e1oey orquies [9 oszep apend outys iopuaiua e soutepnce weg VoL 10d avaTvn9! 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Sin embargo, a pesar de los esfuerzos fervientes de para promover opiniones con la intencién de dar legitimidad a su poder, a su posicién social superior y a su propia creen- cia incuestionable de lo justo de sus derechos, entre muchos miembros de los grupos subordinados surge la duda de si las. posiciones inferiores que les asignaron sus autoproclamados superiores estan realmente justificadas. James Scott ha mostrado de manera muy convincente que es mucho menos probable que las personas a las que la histo- ria, la estructura y los sistemas de creencia de la elite han rele- gado a una posicién social subordinada sean incluidas por la ideologia dominante de lo que los miembros de los estratos superiores tienden a creer. Como ejemplo, escribe que ja convincente de dominacién de las entre los intocables de la India existe evider que las doctrinas hindwes que legitimaria castas son invalidadas, reinterpretadas 0 ignoradas. Las castas regulares tienden menos que los brahmanes a creer que la doc- trina del karma explica su condicién actual; en cambio, atribu- yen su posicién social a su pobreza y a un original y miftico acto de injus 12 James Scott, Domination and the Arts of Resistance, New Haven, Yale University Press, 1990, p. eLAIGUALDAD POLITICA ES UN OBJETIVO RAZONABLE? 39 Condiciones mas favorables Debido al rechazo, abierto o disimulado, de miembros de los grupos subordinados a la ideologia de la elite, un cambio de condiciones, ya sea de ideas, creencias, estructuras o generacio- hes, entre otras, ofrece a los grupos subordinados nuevas opor- tunidades para expresar sus quejas. Por varias razones, los bri- tanicos fueron incapaces de imponer sus estructuras politicas, econémicas y sociales a los colonos que emigraron a América en los siglos xvi y xvuu. La pura distancia al cruzar el Atléntico, la disponibilidad de propiedad de la tierra en las colonias, nue- vas oportunidades en el comercio y las finanzas, el crecimiento resultante de una clase numerosa de agricultores, comerciantes y artesanos independientes, y otras diferencias entre la América colonial y su madre patria ofrecieron a los colonos mayores oportunidades de las que habfan gozado en Gran Bretafia para comprometerse con eficacia en la vida politica. Presiones cada vez mds mayores para el cambio Con el surgimiento de estas nuevas oportunidades y conduci- dos por la rabia, el resentimiento, una sensacién de injusticia, a posibilidad de mayores oportunidades individuales 0 grupa- les, la lealtad al grupo, o demas motivos, algunos miembros de los grupos subordinados comienzan a insistir en el cambio por cualquier medio disponible. Por ejemplo, después de la introduccién de la democracia en la India, los miembros de las castas més bajas pronto comenzaron a aprovechar las nue- vas oportunidades de mejorar su posicién socialT Bian *2¢9 d “6961 soxkray, 9p JOHEM “UIPEET "| “On ‘amuauiopg Lep pom 2 ‘TPBOA preusog < 19BIIqUIAS uresnoodsox ‘967'hI [9 A gI'L [2 woreiuaune sauorzodosd ‘epodeur e| 9p ated opts uysqy so[eiauad sou -o198j so1se anb oais ‘oq9UIULIOUD JeLIeA Uspond sofas souL “nym so] uo sasyed soi) ua oprnmoo uey anb eonslod pepjendt ¥[ e1oeY sorqures so] ap seoyssads souorsi9A se] onbuny “SOprup] SopeIsA So] UD OsouBUOD jap USO" A [eu -orompsuos epuotuiua sod & ‘soadoma sassed sono & ‘eIeng ‘euvieig ueig uD omourepIed [ap sore so] sod orFexyns PP UpIsuarxe ¥] OUIOD ‘eoysed A fenpesB spur eULIOY euN ap e81aVNOZVa OALLArEO Nn Sa VoLLTOd avartvast VT? 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