R. Dahl Le domocracia y WS of as , 1992. Capitulo 22 LA DEMOCRACIA EN EL MUNDO DEL MANANA propias elecciones. Por la segura (aunque en modo alguno sea perfecta) de que disponen los ser humanos para proteger y promove es y bienes que comparter desarrollo humano y la protec- ;partidos, presuponeasimismo Idad moral intrinseca de todos losindividuos;-uonoag eyuey uo> opejade ueiqey opersa ap Sajal so] eperusUINsop BUEISTY, | po} ua eounyY “sauDUNZar sns B pepRUIpIsa] seB1010 ap uy e ,oqand [9p ows21q08, Jap Pap! v| 1e0Idx2 20d ‘sooyeIDOWp ou souDLEyBar ap SO] sopinut ‘oj$is aise ap souy ap sojueuzaqos so] ap jessonrun jse> ouadura [> 59 UUDUINJOA 2)59 9p ,UO!ISM POUL, P| UD OP: “Sono so] v wsuaiayar aAaiq eSey anb auisseyyuuiod eioye ‘elses20UIap 1 ap sapepinaisod X sai so] vd ofqure> ajs9 ap upIDe>yuss P| sour PoXnp>x@ ayusuiajqetreauy emuepepnDy ns { ‘sose so] ap Jofaut [9 Ua so]SIs soun a1uemnp ‘opunut [ap saze8nj sovod soun ua uoiaisaiede o19s 0] opuiens ‘soanp.Dowap sopersg So] XX O85 fo FISeY “SOoLgISTY sOfeqATE sosiaalp ouyns seonpsoulap sensed & seapt se] ap PzIaNY Pf UIQ Ig soonppusouap ou sas So] Wo vlowscowap ¥] 2p svaxysadsizg anvaynSis omajdeo Jo exed e030] opuefap ‘sapeptiqisod sesoustid sop se] ap arednoo aur opmasdeo 0189 ua, ‘conpisowap ou osoooud un ups sepiau ueia sour anb sowueroduat souorsmnsut v oapsi20Wap ‘osaz0id [op uorsuarxe wun ap 0 ‘SouEPepAID $0} ap soogyjod sosinzar Xf sopepizedeo se] ap upzeiedinba z0Keus wun ap zjex ¥ EaNE!DOWOP spi pepapos wun a1funs eypod ‘ojdwofo sog “semnbieyod sod sop, ~euroqo# Koy sasted sounsje wo vonyjod epra b| eonessowap spur seus01 eanginues uespod sopeisos mpuar.uao w| K stinzonageo so uo Sorque) “oongssowiap ose 1d & somes] soy ‘Spur Za4 PUR ‘ajuourepunjoad zexay7e pia [ap nprase Bua soiquie> “yerpunur wope|god e] ap aired 1oKeu ej ursseqe anb sasjed e asteydure eupod ‘owanxe ano [a ua ‘saiqeioaey ayuaut sepeuranx uewuosaid 2s sou ses9 anb ua sasjed sozed soun ® ‘ppnpat asian vyipod vnbreyjod | ‘onsadso jap ouranxa un ug “sem -~teyjod op pepnuvs v| ua orquies un ses0naxd uepod sasted s2itiatay1p\ so| ua embserjod wun aunejsut as anb wied seuowypuco se] ua sorquie |t ~ ‘on pDoUap uoPeUTTOJSUEN wun UDB rep ap saved S9Iq\s0d solquae sai reUnUteXS BLTbaESp ‘sePpUDaApE sE}S9 BIUAND Ya OpuDTUD, “year opunus |p ua [rapt asa amzysuod ‘2jqisodurt 0 “joyIp spur ouspyonu so anb oyuosd {6c6woeyeu jp opunus fs ue epeisOUp eT ‘Anu waaqnosop [eat epeDouop wun uoREUIBeUIT ns UD UaKnNSHOD Pi “Ey PUR) Uo sousinb £ ‘seambso uensanus as sqezzteuaye SouO!IN|OS 0] o1od seopt 0} eas opow unSe ap seuI0) ap sezueiadso sepouasjuasop onumuos ap e[numnse peprtear ef jeapryaanue ajqedjed ersuedasasip oj anb soumzoua & setago ue} uos jenise ePeDourap sombyen> ap sauo|>>9}s0dust $0] 1wop} opeunsaussap as9 10d aprus se] a8 1g ‘up}oesadsasop B& us -pioourap sopeisy-sepepni> se] Ua soysnUt So] ap oUs9Iq08 Ja Ua UoIeéode aan K semmonnse seaanu gaia A ‘esuea eun o embseSijo je wun ‘embseuou! eun ap pu )p0gSap EIHIOWP id €] “Sopapuaosen w A “eI>ua!>UoD esa K seaMaNNSD -ap woIsta vf ‘sesoutoad sns u9 epeso yeULI0} | 9 [eIDOS PPSUBTOUOD P| sa[eI>0s seanuNAse se] ap EpIpOUI Ue! va wapuadap saynuiy sns & sap Shig “UDUTEDLOsIY s9}euOI>IPUOD soueumy $3125 so] © A seotigisty seuoIpuoD se] P wudle “eam pEpRuD ‘ouro> ‘eounu oprishs vy ru ‘mnsp@apand ou conpi>0Wap osad0ad [2 0104. 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Hiaca una terceratransformacién cia a las ideas democriticas para legitimarse, aunque sélo fuese para ju jierno autoritario sobre la base de que era necesarioa finde juro hacia una democracia auténtica 0 purificada. Otro cambio es el grado con que los paises democraticos que poseen sociedades modernas, dinamicas y pluralistas suministran al resto del ‘mundo imagenes —ya que no exactamente modelos—de un futuro desea- ble, aunque tal vez lejano. El hecho de que la poliarquia y las sociedades MDP se hayan vuelto més atractivas es atribuible no s6lo a sus propios logros sinoa las fallas de las principales alternativas:regimenes autoritarios y economias de conduccién central Finalmente, un tercer cambio digno de menciénes la enorme influencia yy poder directos que han Ilegado a tener los paises con gobiernos polidrqui- ssociedades MDP en las actividades econémicas mundiales, litares y de seguridad, la cultura popular y de elite y muchas otras éreas. "or obra de esa influencia, su apoyo al desarrollo de la democracia en los patses no democraticosse ha vuelto potencialmente mucho més importante que antes, pero también es mayor la influencia negativa de su indiferencia 1 oposicién. Los futuros de la poliarquia Es dable imaginar varios futuros admisibles para la poliarquia en el mundo. Un panorama optimista preveria su expansion constante a largo plazo, a medida que las instituciones politicas de un nimero cada vez. mayor de paises no democriticos se transformen en poliarquias. Uno pesimista vislumbrarfa una decadencia a largo plazosilas condiciones para la vigencia de la poliarquia se tornaran més desfavorables, en particular en Tos paises que sélo hace poco que la han instaurado o reinstaurado. Otra posibilidad es que los paises marginales oscilen entre la poliarquia y regimenes no democriticos (cf. Huntington, 1984), y otra que algunos paises con regimenes no democraticos se vuelvan poliarquias pero al mismo tiempo algunas poliarquias recientes sean reemplazadas por regi- menes no democraticos; asf, en un futuro previsible, la cantidad de poliar- quias oscilarfa en torno de una cifra limite que ya esta préxima. Reflexionemos un poco sobre la posibilidad de que la tendencia al aumento del ntimero de poliarquias que prevalecié en los tiltimos cien afios continge de manera mas 0 menos indefinida. Es de presumir que si la tendencia persiste es porque las condiciones favorables a la poliarquia se intensifican en més y més paises. Como resultado, en muchos hasta ahora gobernados por regimenes no poliérquicos, nos6lo apareceria la poliarquia sino que ésta se consolidaria en un sistema estable. sugeri en el capitulo 18, las condiciones més favorables para una poliarquia estable son las cinco siguientes: los dirigentes no recurren a los principales instrumentos de coaccién violenta, en particular las fuerzas La democraca en el mundo del mafians 377 policiales y militares, para ganar'o mantener el poder; existe una sociedad moderna, dinémica y pluralista en el aspecto organizativo; los conflictos, smo subcultural se mantienen en un nivel 5, ¥ en especial en su estrato polit activo, hay una cultura pol se difundan la idea de la democracia y la instituciones de la poliarqui Iosefectos dela inluenca oelcontol extranjeror sono bien deedenbles © bien positives. asa siexaminamos el mundo en busca de paises en que todas estas 1s estén presentes con relativa fuerza pero existe un régimen no ico? El ndimero de esos paises es demasiado pequefio, me parece, car el precipitado optimismo del primer panorama. 2Qué decir del segundo? 2Entraré la poliarquia en una decadencia a sndente que prevalecié en el siglo I, necesitamos distinguir dos quias “antiguas” o “maduras”, 0 sea, en paises donde sus it llevan més de una generacién, o cuando acontece en poliargt .0 568, en pases en que Ia pollarquia existe desde hace menos de una igeneracién. El célebre argumento de Tocqueville en La democraciaen América puede considerarse una conjetura segiin la cual, sise da un tiempo suficiente como para que las fuerzas de la igualdad obren su efect ticos tienden a volverse autodestructivos por la conexién forzosa entre igualdad y democracia, de un lado, y las consecuencias de la igualdad a largo plazo, del otro.‘ Para muchos observadores, el colapso de las it ciones democriticas y su reemplazo por regimenes autoritarios en Italia, ‘Alemania, Austria y Espafi entre 1923 y 1936 parecié convalidar la conje- tura de Tocquev Como sefialé en el capitulo 17, tras varias décadas de 0 de la poliarquia en estos paises parecia presagiar una decadencia continua de la democracia enel mundo. No obstante, vimos que esa reversin fue s6lo temporaria, y que desde la década de 1940 la cantidad de poliarquias se increment6 enormemente, ‘Cuando examinamos los tos sobre la quiebra de los regimenes de- a Ia vista este hecho: esa quiebra y la loritario ha sido extraordinariamente rara irquicas existian desde més de veinte afios. atrés.* Por supuesto, en varios paises una poliarquia estable fue reemplaza- da por un régimen no democratico impuesto por una fuerza militar, como en Bélgica, Dinamarca, Holanda y Noruega durante la Segunda Guerra Mundial; pero tan pronto la fuerza militar fordnea abandoné esos paises, la poliarquia fue restaurada. La otra cara de la moneda, obviamente, es que la ruptura del orden. democratico se da, tipicamente, en las poliarquias nuevas, vale decir, en alli donde las instituciones p-euiny soysazap “uo!>eanpa ‘UoezHaqesTe :selasip|nuIAse apand o ‘sen -poulape.d sauornansut sayueHodurt u2isr9 anb ua opesS fo ounspynUL een apand soopps0ulap ou soUat 1 ua anb wuaND ua JeWO, sowregap anb rye acy —soj3is souen squauesitdue o [ex0u! uos sontsadas Anus souauuiBas so] wsainbis IN, -euoid embreyod e eey suzy osed eezueae anb ooimbustiod tse>sjed une _aquafeamba s9 ou uoisaadas B wpey ayuowzojaa eztsap 2s anb ned ua “oyquars rap ou wound un P250UU9P SOLBTD So] ‘onpisowap wal Jom SU Se] ap eUNSuFU a1S1x9 ou apuOp UD sasjed Key OMLaN*D O30 > tuo eurjoua 40d upiso anb sano vo outen seanpmoUap Ue) |se9 Uos se>n}}od ‘Teaqun jop ofeqep sod uso anb sasjed 3059 3p sounS}eu2 oun tq “pepatiea auuz0uo run ap uos Bua|d embserjod eun 1459 ajqeuozes equim un ap oleqap sod upyse anb soj anb sour -eptzqnasap ‘Soon pIoowap So1saI}9 Jod of95 souopup/Sta sasyed so] v sou! erpnyens opuens une ‘onbiod (so>eoqaut Seanyjod w uaS40 ep Ba}Ua}pUD) A epensopeur syuouyexour oyu} 0] 1od 4) esourua aquawseatsduse 53 ~zeoyout ayuou yuousyexows so vonbrueus nprDOUTAp OU sauaLUTaL ee ee ia el pe un opunut jap eotsiduta & yexous peptfjdisos ej edauodust zopensoy 53 ‘UatuInjOn 2159 ap SOU 0] UO UODEFAY eIDA3Ip + auranb soisadse sovrea sans oxamb ‘o1adurg "epooayo 929 ‘exajua aiqi|un etianbar as eyunfaid esa. eyzas ejsandsas wunep eed {S09HPDOUIap OU souaUN Sau so] a1qos 2esuad & uuea anb < ougo? ‘sersessoutap-ou { sepeisowrap 10d opejqod opunu un ua stata Butea seieso9utap so} 1s‘oRrequIA UIGsosApIIOWOp OU SeUISIS ap ‘sel fe sod 9sed 15e0 oxad ‘seoneDoWEP snopad A seapt se] ap seidoad sezaqnns se] ap seysmur opeziteue a} i> ~e20urap-olLK efaexDoWap Ua sapeprtiqisod sel ap OS19ATUM [2 }ptalp OYpor| ap ‘souojsuaiaid sns & afejainy [e uomUDe eySMUT Opeyserd ay UaIG IS ‘Soopgisouap ou souaUsya Sof qos souopaUEY, Gee suey op epunus p u2 PRDOWNP eT soanpis0wop ou sua} 1od soprusogos upras sasyed soynur orad ‘pepruin 89] ns 3p oqwaurepury owo> ,ojqand fap ousaiqo8, Jp opto aur uprenunuo> ‘soone:dowr9p ou 0 soonpsoowr9p souausta1 10d ‘sopeuiaqoS ugise anb eas es ‘sasted so] ap PyoAeure| ap sazapiy So] /OpURL P Uo epuanguy aunious ns opueArasuos pimas sojqeise semeIDOWAP ap o9p9pu9’soje10U08 seouy| Uo o}>aLI0> Jas ensanwap eueIOUe S015 “sopemessur 91 -uouojuatoat soap pizouiap sousaiqo3 so] eur uapand uaiq s9]qes0.Aejs0P sauops1puod se] sounSje ua ‘essaaUt e] e's9}quise seIMbuerjod ap oa}9pU Te }se asopupums “asrezmqeisa A asreprjosuoo osnpput apand enbieriod x] 'sos0d soun ua ‘esieyue|dust pipod 169 apua sod K ‘upseoysuaut a6 esmbsetjod 2] © s9]qesoany souorarpuo> se 'SooApHDOWap OU SoudLH}Bo1 40d sopeusaqo® sosjed sounge ua sodn soquie ap souopeuoysuen UpApUaAalqOs a}UDu ~einios s9]qeso seppes20U19p ap O9]20U also ap sop10q 50] Wa -uoHeIDUas un 9p spuiod seonpisowop souoromnsut optqey ey anb ua sasjed 30 3p ‘oo[amu ues8 aus premunuo> embse ajonu xiang vun oepeBuojoxd epunyoid roraiguosa sisiz> vun owo> ‘2}02159}e9 wun epaons anb oAjes ‘se}paxion uvas visnurtsad v] mx eistumdo eansadsiad ej mu aiuourjqrqoad anb ap uotspuas v oftes1x9 areled ap ojana e eurmioued ais9 act woo ueron ou yerouad xd sa anb ua eprpaut 1] Wa) A soyuosunp soy ap [ek 30389 ap epoxeut ‘ua ‘spurap 0} 04 yen eynbaeqo bun ‘soseo $0] ap 2ofaut [9 ua “e19 oproaisap wast fo anb outs “u aquopar ns ap eidoid pepe v1 uepaped ojos ou seonpimowop sou -ofong] su Se ‘ght Ua wIqUIO|OD Ua & gg6T U9 eUNUABLY we] ua Ow. “soLTEA bigeY “EZ61 U2 TTD Ue 0 STL ® EZ6T P PNTEA] Ue OUFOD ‘SON UA “saoHIod souparap ss opmuaigo uejqey anb o2od peu ebreBho wun ap ofnas}> oxponss jap wong uoqeise amb sasorisodo soonyjod sopnzed soy "IDE ouap ¥] 2p sosdejoo og] anb ua sosyed soune a — [evo NpEN ouND 9p oueiomne wow99u un— ooppisowp ou ewaysts un e opezedusoas eIqey anb odwiay o20d epey oopypowap ousaigo3 Ja ‘eruewATy Ua ‘Eg6L UD ‘o[d yes SepUOY ap FROWN BITAIAD wun OPETLAsESHp qe 9s ‘wosed o1pao pjoei20wap P| apuop Ua sasjed so] ap SOYDRUL ‘euny| eoupury edosng ue osnpput oad sa[euosiad sepesDoyne K sazey|!W sseimpeoip 20d ‘sauoradaoxa stod uod ‘soprpaons epinSasua se> UeaNJ sojequojo> souaunjex so] v uoreze|duraar anb seysuejuaureped sewaisis So] ES Epor uo anb (sajqeioaey Anu ‘souor>tpuoD sputap se] sepor FYUIND Lup w2uian 95 15 oper a1qos) ropuasdios op 9 ON “so|qopuD sa2yeI UOFOIAM] soonppouiap seonzeid £ sonigry 50} ‘soqyo ap esoceur wy ua “Seon =II0UrIP sauopAyAsUT se] uo eUaLadxa ap SOUP ayUTaA ap souaUT UatIAR anb sasyed ‘vppeuuoysuen e101 uN PPLE BLE2350, Hacia una terceratransformacin modificaciones introducidas por un régimen no de- rio allanen el camino a la eventual aparicién de un las condiciones que favorecen la poliarquia, legoa la conclusién de que, en el corto plazo, la capacidad de los paises democré- ticos para transformar los regimenes no democraticos en poliarquias esta-_ bles es muy limitada. Una intervenci6n exitosa requiere una inusualconjung* ‘inde condiciones propicias, como las que presentaron Alemania, Austria yy Jap6n para la intervenciGn de los Aliados luego de la Segunda Guerra Mundial. ‘Noobstante, los paises dem Aticos pueden gravitara largo plazo,creo, si persiguen tenazmente una politica de apoyo de los cambios que apuntan ala democracia y desalientan los que van en sentido contrario. Si Estados Unidos hubiese adoptado en forma coherente una politica asi en America latina durante el siglo XX, sospecho que las instituciones democriticas se habrian implantado con mayor firmeza, en una poca anterior y en un mayor ntimero de paises. Pero no actu6 asf; por el contrario, a menudo sit it6 el desarrollo de las instituciones democraticas en América latina. ‘Aunque Estados Unidos y otros paises democraticos adoptasen politicas ‘mis favorables para la evolcién de la democraciaen los paises no democra- ticos, los cambios en las condiciones esenciales seguirfan siendo lentos. No ‘es probable que los dirigentes politicos y militares habituales desde hace mucho al uso de a fuerza para obtener sus fines sacrifiquen en el altarde la democracia sus recursos politicos superiores. También es lenta la transfor- maci6n de las estructuras s ayuda econémica externa es que el desa requiere algo mds que asistencia externa: depende de condiciones previas, incluidos ciertos factores culturales, atin no bien comprendidos. Tampoco surge de la noche a la mafana un sistema de creencias y una cultura democraticos. Andlogamente, las raices de los conflictos subculturales suelen estar muy hondas como para ser erradicadas merced a una interven- ci6n fordnea, Asi pues, seria sensato que los ciudadanos de los pafses democraticos reconociesen que en el futuro previsible muchos de los patses del mundo, sino la mayoria, no serén democréticos. La enorme variedad de regi existentes en los paises no democriticos empirica y moral, y echazar de plano el dualismo maniqueo. La capacidad de los paises democraticos para contribuir a que se instaure la democracia enotros paises segui fanayudarasudemocra- tizacién adoptando en forma continuada, a lo largo de muchos aftos, politicas centradas en los cambios de las condiciones que sustentan una poliarquia estable. La democracia en el mundo del mafiana 381 Cambios en la escala de la vida politica tado nacional, las formas directas de participacién debieron: zadas en alto grado por la representacion. Ya no era posible una participa- cién directa del demos en la sanciOn de leyes nacionales mediante el debate mn en asambleas donde todos se conocian, aunqu barreras te6ricas vinculadas con el tamafio de la unidad politica democré- tica. Ahora el imperio del derecho podia abarcar un pais entero, lo cual de -a de la antigua ciudad-Estado era imposible. Un conjunto ‘er6nico’ de las cit -ocomén que era p e intereses, que, segiin pudo comprobarse, a veces podian cor camente. Por otra parte, como temia Rousseau y como Tocqus as, sociales, econémicas y cultura- les. Las antiguas visiones de la democracia monista chocaban con la reali- nflicto politico era algo a todas luces ineludible; como nes politicas, como los partidos, desconocidas en las antiguas ciudades-euipod osn}>u ‘eapstod epra epeyuos f esoo$ta wun Koy uaqnypxe seadamna sepenoutap seuanbad se] ap seysnut ‘sasjed sono ua anb eptpaw s0%eu Ua axepp sauonsano argos jonuo> ns ap opeyanpe URY as so[euO!DRUIANIT serouaiod anb aiueisqo ON “soperte sns op soiuorpuadap sp < sano ap Luoiseaut ee s2]qez0ujna sput.i9s uojons sosjed sovanbad soy eamprpeur sod jpyawo> jap souEPEpND sns ap oarw9UOD® Teys=UaIg J2 apuadap spur ‘sjed un sa opezuene & ouanbad spu1 oquen> ‘eioua3 Ug -uiafa un sousensturums uapand seadoma se}>es20wap seyanbad ‘aIqnsonozu0d so sasted sojUnsip ua ,eI>e20WEP BI aP PEPI|e>,,¥| aIgos uopeuye epoy.euroucmne ap opes8 ns v ajusuresartp asielnoits aDosed ou sjed un ua eisessoulap ¥| ap PepiTe> e| ‘eso!Sipoad vuno} ua opeten ‘ey soon E.DoWap soprisa So] ap PAREIAL eIUIOUOME P| (eistureysoud owio> oneyeysaid sped ap owe} Sezueuy se] ‘ue1eyesap as anb ap oultjad 12 apsop eplonpar O14 as ‘Ueapoa o] anb soury20 so] 10d wp ‘soptun soptisg ap ejtiouomne P| osn/pu“edoing ua ajuauseL -o1eu sopersy So] uo> o1rauODe OWsRU O7 -asipuedra je Sou ‘oidope eounu eotjqndar 2 o1ad ‘opeisg-pepn eun osdey axaug un aquesnp: ‘any ewoy “sopeyje soung}e us osode o>snq sauoiseso sepnadas ua K sasjed jauio> jap opel sun anb seus 08} bia seuary eidoid e7 “jorto> unutu 0 oseose weIUay sajend se] a1qos Seu ~tapx9 svziany ap s21go jap asopuednaoaidsop ‘ewouo Me PU0} UD.IEMIe uaiaipnd waunu sosnepowsp sopeisg sol ’sond ssy “sasyed so} anua se -spueuy sauorsejau se} & ofsxewiod [9 UPIqUIEY OUTS ‘SOpEISY So] ap Se12\UOY se] uoresedaigos s0721{U0> 50] 0195 ON “ou 0 soaHBDOWIap ‘sopEIsa So} ap wuouoine 2 eajdurosut ea ound anb eysey auaureUsaye opensowap. luby ‘season se} ‘sezueye A sopepr[eau so} ‘sapeuoreusayut S0}21j7UOD $07] ‘sojaisu0> soy>ay anb sau’ Is uouons [euO_EU OpErsy ‘pyurouoyne e| anb seps0D—1 soulaqap ‘ejpauio9 eanoadsiad wun ap anuap o1qie 2)so 1eIsesed ‘ofsequiO UIs, “ueyodunt aj anb soyuse 1e’sted un ap sowtap ja anb woyjdut ojj2 ‘o8p anb 0] owat> 9918 oad ‘oane> ~yqu3is oood ofopuysapsuos euraiqoud jo 1eE>sep & (Inbe epapUdyap 93e1 -uaqUt ou) ugnutdo "sa uo> asredazostp apand ‘ofon| apsaq_‘seUOPUALL ap cogese anb seus Sou upIeRUIUOD aad oamny [2 ua opm! rut v ‘seuraqqord aiqmiaaur 89 eisuapuay sa anb zvjard ueneisa ou seuosiod ‘seunsyomus anb ‘soatsanxa $0}S09 UIs 3]qys19A04 S915 Bas o— ajqtss9A9131 OU © $9 epuapulay v} 1s 1exaprsuo> azamnbas ayUeBoxsayUT asa e wysandsax e] {8¢ wweyeu pp opunus ja us eieisousp & Leperourap ef ap sopeprliqisod £ sa so] ‘saouoqua “eoypoUu! ve>s9 ap o1quIED oxanu ais9 eisUeUL anb acy? ‘owougyne oopgsrowap opeisy [9p om Ty 1820] SoUraIgo8 ua opuaRIIAUOD UBS 23s sasyed so] ap souseiqo8 soy ‘ep!paur eusstur vso ug “TPuOIZeU oULaIqo3 rns aqueypaus ersuepiodut peta sojja ered uaystaad anb ssuonsano se] aigos Jonuod aaiafo exed syed un ap souepepnl> so] ap peploede> vj aBumnsar Teuopeusuen uapio [2 ua sauoisep ap & sapepranse ap uopesastjord soussigoS sns ayuerpour emueyodum [eA soqle |PUNUL vjEds9 v epeddT] UOHEULIOJsUEN epUNgas vf OWIOD Ise O8}e s> Jonuod 9 s9aiafo vied ru Ou.a}go8 ns v zEEm>au wapand ou SOUIap Jap SOIquIarU ns w wIDANP UNIO} UD sepHOWOS ou ‘sjed Top sornLT, so] . 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Cameron, 1978). Estrategias adaptativas Estas reflexiones nos sugieren diversas maneras de adapter la idea democratica al nuevo cambio de escala. La més obvia es reproducir la segunda transformacién en una escala mayor, pasando de la democracia en el Estado nacional la democracia en el Estado transnacional. No obstante, ica es harlo imperfecta como para pert ista, pues en los ceonciencia s en los proxis Solo la Comunidad Europea muestra sefiales de albergar un “gen” de crecimiento supranacior pueden atisbarse en forma incipiente la i jca transnacional “democratica”. Seria factible que emergiera poco 2 poco una suerte de poliarguia transnacional. Sibien su ciudadania seria mucho mas amplia que a de un pais como Estados Unidos, el gobierno central de la Comunidad no estaria més distante de esos ciudadanos que io esté el gobierno norteame- Ficano actualmente respecto de sus habitantes, y las ideas y pricticas democriticas podrian entonces asumir gradualmente una importancia semejante, Pero aparte de la Comunidad Europea, las perspectivas aun de los, gobiernos moderadamente transnacionales parecen e cionales fuesen muy fortalecidos, durante largo tiempo es de prever que las decisiones seran tomadas por los representantes que designan los gobier- los y el demos continuars siendo tenue, yy el proceso democritico se verd asi més atenuado adn que en las actuales potiarquias, En lo tocante a las decisiones en los asuntos internacionales ‘en lugar de dar origena una ampliacion de ta idea democratica mas alla det ynal, marque la victoria de facto del tutelaje. Esta posit inte significa que para mantener ia vitalidad del proceso democritico habra que perfeccionar las instituciones democréticas dentro de los paises. En primer lugar, instituciones democraticas fortaleci- das ejercerdn el méximo contro! posible sobre la autoridad delegada por los democréticos impediran que la delegacion se convierta en enajenacién. Ademés, siendo més fuertes, las instituciones democriticas contribuirén a sanear la vide politica dentro de nel mundo del mafiasa 385, a amplia esfera de autonomia relativa que seguirin disfrutando los paises, democriticos. En este sentide, es slentadora Ia experiencia de las democra- cias curopeas mas pequehas. Asi como éstas lograron conservar una vida a firme y segura de: ad y su dependencia en el jos los patses democréticos se verdn desafiados a hallar forma de mante- ner y robustecer el proceso democratico mientras se adaptan a jas fuerzas do, si bien podra percerse libertad y control en en otros frentes ritica en pequenas Lamayoreseala de de mayor impotenci nes de ejercer un—seayoniseie> souaus ou ‘oulepnp ou ‘uezas pepranonpaud & pepianzara ‘oquanwuinans‘eruatoyo ap eisar eu us sefsuansosuo> se} &— reyeise uotsaido X vansjod peprendisop owo> eyreututia) eapyjod pepjensiv] ap aiquiou ue gzadura anb 07 soiBojiaud & opod ordoad ns sejuoumne exed sezopejnSou sepeyin2e} seueulpioenxa sns ‘uesesn ‘eqnbreaa{ ej spun ap 50} 2emnonsed ua ‘owsaigo’ ap soureuorsuny so] anb aupadunt ap seoedes uasony souepepnia sns anb 0312 on “wonsqod peplendi | sausjueur expod ‘opeisg ja 10d wpeinias oyund jo) eisey “ef -ajduiaa ayteisog & eyture pepaisos eun 09 sted un owige 8a ou:opyyn aa jen3} uopso un ins epod eraueu gnb 2p stignosop 0280] ou opreurSeust uo aatonjse ou anb oynuu sod :ualg exo“ squataeuins 5903x0140 2}50 ua ,eaneynbe BuLtoj UB, 2p OP ‘oua}ape oyeipourut ap anbune) Souepepnio so} sopo3 anuo ea ¥ua sopinginsip uasanj soonyjod sosinaar so] sopoy anb opeisy [o sod sep 2inor stuaurepensope ue) uasetanyso sesmionsise sep [en je ua sted UR roy siqzou0e ap seen sowypod “upisn}su0d eys9 ajuasatd opuaTa | ‘mod pepjensi ap seonmod £ seonuouoss ‘sajeis0s seamjonzsa sms 3) Inox opezueavooupisowap syed unsseorjqnd seonstod 2) Cun & UEAd|] aw ssUOKAyas seasg aid oamany un ua m9s0%a uetipod vaakr nb ap ataqnasep opend ou ojseuiSewt ua aatangsa aut anb ovjomu sod & P opewrxoade uedey as sejeaBe sopeparros seua!> a4 [es anbune) e03sIy 21 Ua on spx9 sptue|n4s9 owros opeinSaxs0)ne oMe}1en3} UapLO Un ‘a;HeISIO 1d pepjenst ere anb ajqipnjour se anb je sosinoas op peprenst ‘ud ‘courtuodse opout aj so seidoud se] [et ug "senn29I09 souotsipap sp ua salen owoo aedioiuied exed uestooud anb sosinoai Soj ‘Souepepn> soj sopor e “eanEWloIne euLIO} Ue uosokng “Esp ‘opersg jap eunsje uo!seiniar urs ‘seanuUoD9 { sapeisos seamaanstse se] anb ua sjed un seuSeu ap amen soweypod 29s of anb ajqisod sq? -oonyjod ourjd 2 ua sopendi uvos ‘sted un ap souepepnta soy ‘srueniqey ‘je050 eal ua pepopos eun ‘ajuaindisuos od “seisasoud soulasong) ‘oueuiny 195 [ap sordosd sazojea soy & feuostad ofjousesop [2 ‘PeLoaHL & eyoduay uotednsoaud tur “eopjtod peptenst & pedn2oaid mu waiq is anb saouolu9 opou 3 uosiad onozesp o red send sopeprunyioda 2] zezuvoqe ap opor -uaurepeiaqy|ap' Se P eaneiar ‘uo! | sowepod anb js ua uy un ‘sand ‘sa ou eanyfod peprensi pur jopor aiqos’peiaqy] jp120U1ap Osaroud [aupIsa OfTAIaS vy uenuanouaas eonriod pepjenste| & XE opersene conynewop sed wn eied slonbsog ono & sojejuawepuny souoig so} anus :o\soupiiday “seansa[o> sauo's!>ap ‘se v soyalns sonpiay & sa 8ay01d ap omnos spur -2iuaroyut o8}e owo> sope>yisn! pepren3y ef mu ‘opuay poprenst vy ured od teprosar souraqap ‘a}uemnSisuo>.104 “epinsqe od ueseurT sasap eX sou. eprenst epeurr epia | ua sedionied ered sajqesuadstpur si | OpezZUEAR ODHEIIOUIEP 5H quapanb 2orp & jexour uapi0.p s9ugisnsuo> epunsas (Ferme: jsod & soynusy so] ead setouansosu0> saueriod) 2B] ‘orsta somay unBag “ppeDs9 UeAS UD souraIqo$ BI Ua a20ulap pepazos wun seaue|d sowapod ou ‘oruey o| uvas sowsaigo$ soso anb arqrasap sq “e[e0s9 wes ue sousaIgo8 URaInbas anb sasted eXey anb osozioy sq “sewiougine & seuanbad Amu seonsjod sapeprun sod ojsancison is oxpranbopumurun agiqaaien saontvouee ommde> ja ua soureqssre anb e| ¥ uoisn|pu0. e| znaday ouys aoey ou A “pep 1 B| EPE|NDUIA piso exoUNtUd w “seuOISN|>UOD sepIAID ap soLEeUed anb ajqeuozer so ‘sazouaiue souopeiusuniie sensonu op anied y “sapeprniqisod sesod seunspe 8 K esoused einpeBiasua wun ap so UoHSIAD ‘as Zeupuay opedse gnb? ‘—epecueae eopyis0wap pepasos tun ‘eas o— sazojea sns & epses20uiap b] ap ar8o] oWCPUr j9 aserTIDe] ‘seUBUIMY SUED ‘8 ap auap ‘anb peparsos ap odn un zefanbsoq soueagipnd 1g aezogso opand seuad: OdVZNVAY ODILVYOONAA SIvd No vulva sofandsoa ez omydes,rensformacin Consideraciones de esta indole me llevana una cuarti conclusi6n:a rafz: de las restricciones impuestas porla realidad y de las soluciones transaccio- nales entre diversos valores, aunsise alcanzara en un grado maximola meta de la igualdad politica en una sociedad democritica avanzada, restarian desigualdades significativas entre sus habitantes en lo que respecta a sus recursos, capacidades y oportunidades politicas, Esta conclusién me lleva como de la manoa una quinta: dado quees més sencillo descubrir la forma de reducirla desiguatdad que la de alcanzar una igualdad perfecta (no importa lo que esto signifique), una sociedad de- mocritica avanzada se empefiaria en reducir las causas remediables de las desigualdades politicas més groseras. tudles son, entonces, las causas remediables de las desigualdades intentarlo, es itil repasar tres causas universales de la desigualdad politica (yporende de la que existe en materia de libertad, de las oportunidades para €l desarrollo personal, y de la proteccién y promocién de los intereses diferencias en los recursos y posibilidades para emplear la las diferencias de posicién, recursos y oportunidades ion viol econdmicas; y as diferencias de conocimientes, informacién y capacidad cognitiva. Enel eapitulo 17 ya hemos examinado las formas de remediarlas primeras. Por més que ese examen fue incompleto, no diré nada mas al respecto, yencambio me centraré en las otras dos clases de diferencias, pues sostengo —y ésta es mi sexta conclusién— que un pais democrético avan- zado procuraré activamente reducir las desigualdades notorias en la capa- cidad y las posibilidades de los ciudadanos para participar en la vida politica causadas, en alto grado, por la distribucin de las posicios 1308 y oportunidades econémicas,y porladistribucién del conoc to, la informacion y la capacidad cognitiva. Reflexiones sobre el sistema econdmico de un pats democrético avanzado Cabria objetar que la soluciénal problema que plantea la distribucion de posiciones, recursos y oportunidades econémicas esté aia vista: gacaso una sociedad MDP no es en esencia democritica? ‘Como vimos en el caj to que una sociedad MDP favorece a las inst enesa misma medida a la democracia, y aunque su dinamica produce algunas de las condiciones indispensables para la poliarquia, por motivos de los que me ocuparé en un momento no genera en forma espontanea las condiciones necesarias para lades econdmicas esti en su mayor parte a cargo (al de los duefios, y las personas por éstos elegidas son Boequejos para un pais democrtice avanzado 389 responsablesante ellos. Otra caracteristica tipica es quela actividad produc- tiva de la empresa se orienta al mercado. A esta clase de régimen econémico suele denomindrselo “capitalismo”, pero Charles E. Lindblom, més preci- sament sma sistema de empresa privada orientada al mercado pags. 107 y sigs.). Sea como fuere, esta categorfa incl variedad de casos: desde Ios primitivos sistemas industriales de laissez {faire propios del siglo XIX hasta los sistemas altamente regulados, con hhincapié en la asistencia social, del periodo industrial tardio o postindus- trial propios del siglo XX. Incluso los regimenes “asistencialistas” de nuestro siglo varian muchisimo, desde los sistemas escandinavos, que son redistributivos, con altos impuestos y sistemas de seguridad social de gran cobertura, y neocorporativistas en sus convenios colectivos, hasta los sis- temas muy poco redistributivos, de impuestos moderados, limitada cober- tura social y convenios colectivos no muy poderosos propios de Estados Unidos y Japén. Seria erréneo, pues, sostener que el sistema econémico de un pais demo- ccritico con una sociedad MDP plantea en todos los casos idénticos proble- mas a la democratizaci6n, 0 requiere soluciones idénticas. No obstante, pueden sugerirse algunos elementos comunes de una solucién satisfac- toria Perspectives tebricas en pugna ‘Comenzaré por mi séptima conclusion: en un pats democrético avanza- do el sistema econdmico debe entenderse como un instrumento no sélo de la de producci6n y distribucién de bienes y servicios, sino de una gama mucho mds amplia de valores, incluidos los valores democraticos. Debe considerarse que el sistema econémico pretende estar al servicio no s6lo de 1ode los seres humanos, en todas aquellas activi caer en una simplificacién lindante con la caricatura, permitaseme trazara grandes rasgos esos puntos de vista divergentes. La concepcién te6rica de la democracia se centr6 en los hombres en su calidad de ciudadanos —mas adelante, lo hizo en los hombres y mujeres en sucalidad de ciudedanos—, mientras quella interpretacién te6rica corriente de la econom{a tan rigurosamente avalada en la teoria econémica clasica y neoclisica se centra en los hombres y mujeres como productores y consu- midores de bienes y servicios. Por cierto que la perspectiva democratica no puede soslayar el hecho elemental de que los ciudadanos son también productores y consumidores; e implicita 0 explicitamente, la perspectiva21 v gepessowap e| sysix2 apand owos? ‘ops uapand ou 1s 4 oonriod ‘ued [a ua sojendi 49s souepepnis so] ueispod ousoa? “eansyinbe eulio} ua sopmgpnstp sosinoa: So}so upyse ous &"soanytod sossnas upiqure) UOS seuosrad se] ap eorusouo29 uotosod e| ezanbu v ‘ososSut j915:uaIg eIOYY inbo 7159 sopo} 9p osaxfur yo anb (oiqeqosdun dos sazopruunsuas so] anb 0704 BL ap sejqmas sexawud sey jen3t ap aur uoduut od ‘aquosns osodurey orad aknpaxo ou anb -sodsau yesynau $9 aquatsioo e303) ¥] UaIg 15 'Sa10} aeyadurasap esed saiqesuodstpur y eiqoapouewins.e0n ap uy e sosopraiduia snsuooseeUOD Jopnunsuos|ap [euo!>es ,Ox azo, J9s9s0peleqes fa) swoprleges so] 9p S01 “aponpoad exed sajqesuadstpur sosimoar 50] ap uoPismbpe ua K s & souaiq sayei ap e1s2]0 ns ue inaduro> ered souesaidua so] ap 's01>1ar0s { sauaig sosraaip anuo 21299 exed sazoprusnsuo> so] ap pewiaql :opearaut |p ue uopoo|a ap viewed pewaqy| | opoy ayue s9 oDRNOUODA rUIOYSIS Lum up epezureoye peyagy BI ‘a1va1LI0> Porw9’ED® UOIDdaduIOD B| UNs9S “osanoud aso P sayuayayt Sapesaqr] SPIO SP] OUWO> JS ruajapomne ap euewiid \do ap opour ap sosins01 1p ay PK OWS) “wIDUAAIAUOD sua asiajautos uvasap zay>y1e9 |e Ud sojend se] v seuMoU-K Saka Sey apugioures e[ ua soonjod sayenSr ouroo sediopsed v oypasap uo souepEpnI> 028A seANS2IO9 souoIspap seidope ex agpematmepomesp: e sep 218 apaose as anb e peusaqit ef ‘estpsDOUIsp UoHDdaouo9 ef UN BIg ‘oe 0] anb exadso as ru ‘sapuodsas apand ou ey109) 8108 ua ‘anb souon sano uosopeazaUs fap seziany Se] ap sayueIMSas osaiSut ja & wzanbu ef ap upDNqUASIP wwe (uadeY of oud anb rASeY A) wosaysaiut anb ap 0 ’2}2e320wWop v| 9p B1UaHI09 UpIodaou0D eso LUISE 59] anb seazei se] ou 0 uepuasduse soonrjod sonua8tuIp soy anb ap o4>a4 [2 ‘oxaq sopeozaut So] ap oquanuTeuor>uny Ja exed sajqesiadstpur seuLIOU ‘seI> -uiantuuos se} & pepatdoad e] ‘soyesiU09 So] uals anb seussou e ye89] wZIaT aayuo> £ opour unsife ap apaiqnise opeisy [9 ‘e>IgUODD PUIRNSTS [ap "1S -pppoau & wotse[> uoista v| ua “wontiod pepyens ecey anb exed (sopezuEoye aquaureuajd wos 1s ‘saquaioyns osnpput sezmb 4) souresagau ‘sauorseSy{q0 & soprpumuode ‘soysazap souar> sopo) e uasqueres anb ‘[eHa] eA sod ee opezuene ysowep sted un sted solonboog, ouresonau 19s 9p osvo ua sopruoroues & voiand uot aod sopekode ‘53 (uuoo un & paoiout Te & sonfiquie ‘saiqedjeduay uey souawiquay ap asiednso ap pepisas0u ununs uaa ou sooise|200u se) sTwOUNDa $0] 0UE} O] 104 “sa euoIDEs S32013" soy aquaurazqyy ueziqear anb soyenuo> & soiquresiaqut so] uedn20 o| sen] 1g pepliome o 1epod ap seuornejay uaysixa ou ‘oprosaus 21g fe EPIL py ua ‘orqure9 ug," ‘oysta sowiay ouso> sa vonsjod pepjen3i ap e208 anb uauan says9 and ‘sou -epepnysso] sopoy anua sepinguasip ajuaweaneinba.zejsaueriaqapous}ss ‘opeisa Jap owiaigo’ jp. tua sepod Jaaiafa ap sopey uoradaoues ey 59 0u osad ‘saquatsie9 & saunuso> SouBLUMY $9195 So] ¥O PEpIatignd 9 Fst] -e1vadso un v ‘oBojomos un v ‘ope1oysty un v ajesoiaiut uapand euosiod bun ap sopeyjea] Se] 'sejou sapeprqan sns seziwpcew ap opowt ap ego { sojeurieu septpuad & sersueued snsap sosioaid soquawasouy opueyno}e> A opuereduios oduran jo opor esed anb ‘pepireuorses ewaidns ap ope -ndwo> eun—eanoaga pep! i931 woroeurSeul! ef uo— so zoprunsue>/0)anpoad fq ‘sejeuorseuu sayeypiowd seuaaio 4 soze| ap ouisnuise auataoad pi 19s uapand souoze8y seisa “uel ‘unwo> opesed ns & ‘seaquansso> & seogopid sns v soupumy s912s ap oayoadsa ayuaute>}0:5I ‘qunfuoa un ap oejnanied opeysy nsapanuap Uaata anb spulap so} s0poi & {exmm20 ise e12u28 0| 104 4) opel paquas as ouepepniy un anb auunsasd ag “ued |2 opar seozeqe apand odioutid uaanb ‘opruyapur seus “opeatwiiop ” Souaui oni ooruiouose ewaisis uN ap oxUap UaIsHx9 SaoprtunsuoD & saxon poud 507 "9 ap wiany o anuap eiatanysoanb ap uerpuodap [ena epe> ap sauolzeayjgo se & pepyendie ‘pe ‘exo anb equsuod 2 B ‘ano [2 U2 OU A so}aadse sop $0] ap oun ua gideoury avy souodazuea seisa ap eun epe> o1eq —ooapDowap Uapio un ap souRpEpni> culos ib “[Bapt Ose3 [a Uo— oDtisjod eusaisIs ap odn ungje ap osuap arduaais asp saiopnansues £ sazcpnpozd so] anb apouie2a3 ajuatiio9 vor90D9 ppeuojcues einie; sun sDeH _O6E392 Hiacia una terceratraneformacion inversa, sila democracia ha de existir y los ciudadanos han de disfrutar de igualdad politica, zno se requerira algo distinto de una economia de em- presas privadas orientadas al mercado, o por lo menos una modificacion bastante drastica de este sistema? El gobierno de las entidades econémicas Demécratas entusiastas han argiido a veces que en una sociedad vverdaderamente democritica todas las asoctaciones serian democréticas Este punto de vista parece equivocado. La justficacién del proceso de- mocratico presentada en este libro (capitulos 6-9) no nos obliga, por cierto, a establecer que toda asociacién debe ser gobernada democraticamente. Que lo sea 0 no depende de la aplicabilidad de ciertas premisas (véase el lo 8). Si en el caso de una asociacion determinada no se cumplen premisas, no podemos aducir razonablemente (al menos sobre la base de esas premisas) que la asociacion debe gobernarse democraticamen- te. A la inversa, empero, si estimamos que las premisas son aplicables, estamos obligados a suponer que la asociacién debe gobernarse de acuerdo con el proceso democritico. De hecho, si se cumplen las premisas, los miembros dela asociacion tienen derecho a pretender que exista un proceso democrat Por este motivo, los ciudadanos de una sociedad democratica avanzada estimarén importante analizarcuidadosamente esta pregunta: ;Qué asocia- parte del Estado, deben ser gobernadas mediante el proceso ico, y cudles otras no pueden o no deben serio? En un pais de ico avanzado con una sociedad MDP, las mas evidentes candidatas, aserlo son las empresas o,en términos generales, las entidades econémicas: ya que, en el caso tipico, si bien en todas las sociedades MDP estas “rganizaciones no tienen una inmensa importancia en la vida cotidiana de ciudadanos, se caracterizan porque su conduccién no es igen por sistemas de tutelaje, en el mejor de los casos, 0 constituye un método justifiable para el gobierno del Estado, sin embargo el tutelaje (que a veces degenera en despotismo) parece ser la forma predilecta de conduccién de las entidades econdmicas. Este contraste sugiere la conveniencia de una reflexion pitblica, pese a lo cual, en gene- ral, la creencia de que los sistemas no democ son los mejores para la conduccién de las empresas. parece ser objeto de muchos cuestiona- mientos. ¢Por qué los ciudadanos de un pais democratico avanzado deberian preocuparse porel gobierno intemo de las empresas? Mejor serfa formular la pregunta asi: ;COmo es posible que no se preacupen de eso? El trabajo Bosquejos para un pais democritico avanzada 399 ocupa un jugar central en la vida de la mayoria de la gente y le insume més tiempo que cualquier otra actividad, afectando —a menudo en forma /a—su ingreso, consumo, ahorro, posicién social, amistades, tiempo vvejez, sentido de realizaci6n personal y de bienestar, libertad y desarrol personal, autodeterminaciOn, y otros innumerables intereses y valores oly poderenquese ve ia, persistente e impor- imo, enone eben eis erament a mprets cope ciotes Digo inormamente por supongo,sinsometerlo discs que lasontidades economizasesturinsujtaseaigan control del Etado,0delos diversosorganismos de gobierno del Estado. Aunen una economia en que predominat las empress privadatorentadas al mercado, el gobiero del Entado regula algunas de sus actividades, como lo hace en los pases demorrteos, St ur pas democratco instaur alguna ver una economia Soctlita e obvioque debert pele aveglacionofial delas empresas. Para aca os valores democriicoe ya ver un buen grado de ence ln mayorad Severin peer cn ado. Ea sua, el Gnco tipo general de sistema econdmico soc Congruente conta democracn yf eficienciaseria un sistema relavamente tno de merendo (scase entre oes, Nove, BS: Setacty 197) Bao unsocialsme de merado comotaeleapialsm, las empress endian que oblemo el Estado. Enno Yoh sistema el grado 1 requrios sean ojo de reas Youponge que vararian argo dl imp dun patsdemacrético 4 onantesque eanestascuesiones,yaurvquesin lugaradUdas eid teoriaypactcademocratcas,no puedo examina. las aqui. {Esté justificado implantar el proceso democritico fen las entidades econdmicas? Nome cabe la menor duda de que muchos rechazarén sin mas la idea de hacer extensive el proceso democritico a las empresas, considerindola necia y carente de tiempo la mayoria consideraba necio y carente de realismo, a los ojos del sentido comin, aplicar el proceso democratic nacional. Asi lo crefan, por un lado, las elites antidemocraticas de todo elcuayayaur anb sey uo sesouduia se seuzaqo8 oypazep uatisn sarosronuy so] anb aap v ajeainbe ou ofeqen ns ap sony ‘So] P o4Da29p UaLAR SOMPIAPUL So anb ar>ap ‘oun ojos seuIO3 wIeg “SOT our sesuarajut ap Pui sopeaud soumaidosd sns 10d sepejonuo> sasusqap: 19 seuxapoUut se] anb ap uowsisodozd ef e esed pepaidoud e] e yezau98 oypazap jep anb ugPewownaze yf ‘oun 40d "004 O08 un P OYDazap asazAry OUejeIdoud-30p -ofeqen epee & ‘ugar Bun asarany (Leardosd-sopeleqea ua asinZaAuo> ‘ured opeajdura 495 ap saouojua Byefap anb) soys9 ap oun epe> anb [ea opour ap sopea|dure so] » pepaidoad e opuatysuen se>quguoss sapepaus Se] ap ot121903 [2 ua oan pID0UIOp oseDaId un astanourord eyipod zuptsaidxe ‘so apuariua 98 anb ua Temiqey PUL} BI UD ,seISIUOIDE so] ap P>TIT -owap,, #59 epeidosde ugronyos e] anb eszin3as as ou ol[a ap ‘sourejatdosd soy ¥aytiousearsn|axe apuodsaiz09 59] (ayuoureusayUt) sesazdura se] seuiaqo3 ap oypaisp [2 anb ap estuiad esopnp vf aseidose as anb spur 10g “sapepiinn sns ua aedjopied ered ua2ey 0} :sesardura set ap ouraiqo’ ja ua zedionsed ap pep 19 B| Yoo sauo}pae UeIduIaD seUOsiad se0d anb vf ‘ustxa Zan eunSye anb sesadso vied soagou Avy ou A “uequaysns seq anb souorsxpuod se] 09 “odurey owas ‘uayspc ou souoImmynSut sesa aig eiOYY "eaHEDOUIEP OPES -pepni> b| ap sauoromyAsU se] ‘euanbad wsazdua eun ua anbune 012d 159 owoD UOPINIOS ‘eun o1as uo ueaqueld ,sesIuopp2e so] ap v>EHOUWEP,, e| ap sazopeusndord sol ap sosod & ROA UR AS9IARY PISTOIDDE PPE anb ospaud epias ‘onpioulap asteurey] exzpod anb osasaid un ajueypaur es “arduia ns uaseuzaqo8 seispuo1e so] anb exarpuayaud 25g uinuorn o.ed “pyyand epe> [en3 sod erendusos 9s 1s osia>e}snes eupod ou anb oxtsinbax ‘oato aoinbjeno ap [e [ent ayuana souRpepnD $0] ap oun vpeo ap oo. fo anb 8p vpeDowap P7 ‘souRPePND sof ap 104 ap pepjens v| :ooNpI20UIap osssoud Jap [EURUTEpUNS MAILS UN eUEOIA eULUODIe UODEdInIEd | unas saqon so] seUZIse anb PA ‘UoIOUIRO UN ‘uoDIIp ap vny uN 59 ,SmsTuO}DOF So] ap PPEDOWE,, uoTsardxa pj ‘oUTULIM JouILId UA “SeTTES seiien euasaid oyaundue 2359 anb oas>,SEisTUOIDIP SO] ap PEEDOUEP, ‘bun ap | eas ‘ope18 un3pe ua 0139s apand anb so 1s ‘seoruouose sapepHus se] 8 eDEDOUIEp ap Pept B] ajqeoy|de eas anb us euOy vonEN | anb ‘soupjaidoad sns oajes “esoudusa wun xeusaqo8 ap oys2.2p suan aipeu anb lua uaysisul soonpis sounsije ‘ousoiqo8 un ap peptserau e| opuatparuo> ‘ourzigo8 oy>ip aszmaAsuo ap vy oUIg? 1e}UNSaid v (sopEattqo sourNse ‘ane sput) oysaiap sowauay ‘seananposd sapepianoe se| ua uedionred anb seuosiad se] ap ouiaiqo8 um uauniosuoo anb pepuioine & spod ap apanuowe|nonred se -gep Sones opus 6¢_opezzene oonyDounp sed un ered solonbsog souoperas vftxaelfo anb fm opour ap ‘oBey 01 of our0 “eonuiguos9 pepHUd P| ‘9q}2u00 2515 aia ‘Sasopefeqen { sopeajduua so} ‘ayuausfeuo|se2 K eueyUR|OA ‘aagy uedionied onb ua sorqureaz9jut 9 sorenUOD so] ¥ ayuoureZOUN Udon pos 9s sois9 :pepuoine & Japod ap sopeiop soLmeuOPUN) ap o1un{uo> Un /,ou -aaigo$,, un e7f2 ue ekey anb assisop apand ou anb ef ‘2yu1eAa} uunduyu eaiure[d ou esturquaze pepnua vun ap ousaru} oua1go8 f epqurouose uppradiain e unas ‘ojdusafa 104 -ounde owioiqo8 Key ou pijaua anbiod ~“oonessouiap ousaigoS un ap pepisaaau Key ou esoaduia bun ua anb tausnsos soho soungie ‘sezadwso ered ‘opeisg jap ow91403 Te epeowap ey aeonde ap vapt vf eNuUoD uvzje as anb sej uo (ysPzinb ‘ou 0?) aqusuraqropuardios ‘ojorered uepren8 seoquguoss sapepinua se] 9p ousaiqoS fe e1zei20Wp P| Palsuayx® 12>2y ap Pap} vB sauo!DaIqO se] cegnbuerjod ap sattopominsut sey v reuaisns vied wos spiqepua ovsey wos o sajuasne uPiso souoroIpuoD s9[e (pupra Ua ‘BOSE 21) sosred soyonun ua ‘ofnydeo oun pp [a Ua Ha8ns unBos & ‘souoreypuED sepla armbar enbreyod y] “eap! e| ap eUsapou! 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Pues si no rige entre los miem- bros de una empresa el Principio Categérico de la Igualdad, no podemos establecer como conclusion que tienen derecho a autogobernarse por el proceso democratico. Segtin hemos visto en este libro, en dicho principio descansa la eleccién entre democracia y tutelaje. Aceptarlo es dar un gran paso hacia la adopcién det proceso democratico; rechazarlo, volearse en. je. A raiz del peso abrumador de las instituciones e ideolo- €s probable que la mayoria de las personas, incluidas muchas reflexivas, encuentren poco crejble que los empleados de lasempresas estén calificados para conducirlas. La aplicacion del Principio Categérico de la Idad a los lugares de trabajo les parecer dudosa, y por el contrario se Comoocurreenel casodel Est resolverla satisfactoriamente aqui nas de las razones por las cuales la defens: fundamentada de lo que comiinmente se pi Para empezar, conviene recordar que ei Principio Categérico de la Igualdad no exige que los ciudadanos sean idéneos en todas las cuestiones, porque pueden delegar en otros las des temas, Salvo en las empresas muy pequei sensato efectuar esta delegaci6n, En las mé buena parte de su autoridad en tna junta o 0 tivo, que en el caso tipico probablemente cuente con autoridad para escoger y remover a los, directivos. ‘También debemos tener presente que en las sociedades MDP la empresa no es esa entidad econémica idealizada, empefiada en alcanzar la maxima ‘que nos propone la teoria:es una sociedad anénima privadacuya soberanfa esté nominalmente en manos de los accionistas, pero éstos afrontan de ordinario insuperables dificultades para contradecir una deci- —y dependen totalmente de los gerentes en cuanto a la formaciOn necesaria para tomar las decisiones—. Una de las seftales listintivas de la poliarquia, el derecho efectivo de ejercer la oposicion, no existe en las empresas. Siel problema se redujera meramente a sabersi los empleados esténo no ipleja, yno pretendo laseme sugerir algu- ‘esté mucho menos ‘osqucjoe para un pais democritico avanzado 397 calificados, en lineas generales, para administrar las empresas en igual Ta que son duencs, como aabamos de d tas no es solo una contradiccén en los tmpresa por sus actonisas es un mito, Si ben los gerents pueden Sdministrr las empresas en beneficio delosacionstas (al menos en parte Ideas decisones fundamentales, tes y no de aquélos 3 empleados de as empress son jen delogerdn gran parte desu tan idneos para clgira los gerenes, en quien delegarn gran par autovdad en las grandes empresas, Come los accionstas,o ble, para ser ts realistas, como los propios gerentes, quienes de hecho son os que tligena sus pares ysucesores por cooptaion. Aung hay cada vex mis pruebas en favor de esta idea, en un pals democritico avanzado seria Fazonable que los cludadanos prefiriern procter por via experimental pura dar respuesta esta yottascuestiones sobre la democratizacion de las 'No estoy en condiciones de aseguratcusl puede sera future para todas lasentdadesexonomicaso para todos los patses democr fico pero me parece innegablequeenuna sociedad democratica avanzada $s ludadanos concederan un ugar dep altemadel gobierno de dichasentidades Para jus proceso democraticoensuconducelon,notienen por que es Iasempresasedministradas democrdicamente uneionan mi pardmetros economcos, 4 Ranconasen igual, ya que enfonces, fomando en cuen Serfan superiors a ls convencionals, pues en Su ca50 inelnaria on favor de les valores atadidos del proceso demo Ipuien podiia conceder odo estoy aunastnegar qe lade las emdades economic, Act como sigue erteos de i {Temoceaia para el gobierno del Estado insisten en que la dominacion de tina minora es inevitable sean cuales fueren las normas constitucionaes, Stes sone qu decane eres a guery rs éotas son fan inapropiadas para aplicaries la democracia que la ominacign de una minora es en ells inedible. Si bien no puede des- denarsea i ligera este argumento, cuando sondeames por debaj de su superficie demuestra ser poco convincente Fen las empresas, como en el Estado, la democratizacion demanda que no surgen en forma espontanea, inevitable 0 eben se cteadas. Ast como en muchos paises no apaTeci democraciaenel gobierno del Estado, obienapareci pero Tuegosucumbis, tnmayorgrade auinlaseconomiasdelassociedades MDP hansido Ae incontablesinentos de democratiza los agares de taboo. Esto posils9] anb opnuas p ua ;(upielg eed sopmouoasap soulapout sous) Bie ‘,tenasajaqUT aseP 0 OVENS’, ‘,ssjeMD2]a)UL, OUTUID! J9 oajduTg sa]en}D9[>}UF So] :opeu -Sndoud jg 104 afejaym ap euraysis jap oypedsar sezuesodso upset v o1p anb ‘aqzaurestoaid ‘any anb ajuany eun ap epascid aiquunysta of anb osijod [2 anb ajuapuaidios was ou zaa 1, “soyepadse sojuanusf>0ue> ap ugisasod 2] ap outs “eo!uqUOse UO!ENYS e| ap o Ezenbis Bj ap OU /sepeALlOp JOP -epofou sapod & seoigzeus9 souoroisod ‘sosinsay ap sapeplensisap se] 10d fa PIDBIDOUIOP 2] ap seannadsiad se] anb sesuad e opeurpout Aoisa sond ‘ajqeprusoy spur e1aepoy asared aut anb 110 Key osad ‘opeoyidutos eurayqosd un $9 395g ‘oongpipoulap osaro1d [2 e>29ye120) anb osnuquoDe euraisis UN AezuE>Ie ap opoUl JoloUt fe UHI” ap rweafoid ns ua pepuoud euep opezueae oogpszowap sted un anb 2p ‘a}uaura|duns ‘aseq ef ap anid v oa mnbe “vonsod epra y| ua si Soporpu So} ap uo!sewAess ayuapiaa e| 30d £ ‘sazosuayap so] ap aed dod uomuaye wue oprraisur ueY seuia|qoid SoD ‘sosaudut a wzanbi esa ap upure ‘pepatdoad e| £ ofeqen 9 oo sopejnouta salo|ea ap pnyninut eNO ue upIquIE) oUIS ‘seuosiAd sel ap sosarul ezanbus e| ua sajefoueysns sapep|endisap opey|nsa ouo> ep 0/98 Ou eUIa}SIS lene [2 onb ef “sexqwiguose sapepnua se] ap uormnpuos & pepardoad aod asiednooaid wied peuorpe oarou un a2a40 ‘eonsiod peprenst | a apua.sod & ‘exopepo8ou pepioede> { se>1Z9xeNs9 souoPisod ‘sosIn201 so] ap uotNgENsIp ey] Us oDnMOUOSe UaUIIB9r [9p SeI>LIOND9SUOD Se] pepardoid e| ap opedas onjdure souaw ou un Jap. -uaidura ostpaid e1a eoiqndas eun ap oquarunsaigeyso [a exed ajqusuedsiput zepod jap uorsnyip eyduze eun seinZose ap ug e [end o| Jod ‘souDUt eni0a | ezeuawie eum aXnynsuos sootuiuos9 SosIn2al SO] Ud Pe} -eKeiqns uey ouvargndar £ oaneipowap ow91q08 [ap aqua urunwopaid anb sapeprensisap se] ap epeidosde uosepionye eu, ‘pepienst lepuaso op aid un uo eonytod epia pj ua sedensed uasarpnd souepepnis 30] 1en> {2 uo oonsod uounpu UN ap uo!rdasuioa enSque e| uorseuMsIOD s9 une ‘eonsjod popenisap e| ap eouaysisiod pepaos 9 Pasog ‘uoHRDe vf eued sein owlod & seotaydure ssuo1>duissop owioo seuojpejsnesur ueylnsal seLioa1 seiso “61 ofmidea [o uo sopezyfeue 140d ‘orequia wig “pHOUIUI PUN ap UO!eUIWOP v| a1G0s seT209 joa ered ouan apues ajuawayuaygns of 52 OuDATduLT 0 sBou ap sopod ap X seaiSa1ens9 souoroisod ap ‘soausiod 66 opezunas oonpisowep syed un sad solonboog, sosimoau ap peprengisap e| ’so12 ua osn|au “soogiz0up sasted so} sopoy ua aquaysisiad 4 euias peyjnoyip eun sasouepepnia soj ap prpjensisap ey ‘Opes [2p ow1aiqo8 jap 2 anb une sopeurruge spur eurajqoid un wee Ose OseD 1m ua o1ad ‘seonuouoos sapeprua se| ap uoronpuod ap seoneis0U!pHue SeuNNOJ se] aUE eNYDOWP sPUI eAHeUIAY[E BUN Jeiauas UeLpod sou “epepnp so epezitene eoqeis0u1ep peparsos un us anb ua souepand s2u0}n] sowispout so] A vpiousu oun ap ugroounuop v] ‘vovss0Wap ry wonsed 2] Ue epeysoyueUr epnp UIs anb setqey sey v asad seopuoUosa sepepud se 2p owsa1qo3 [a ua osaoaad oytp ueLIeAode epezuear EONeIOUIaP PEpa!Dos eunap souepepnis so] uziquiey Ise sajeuesns souo!s9yadumt ata anb ap sepuaiqes v opeisg [ap ousaiqo$ jue osn p:>0Wap osss0ad je osode Os) SaNU sourepung owoD Ise X ‘sopeisy So] ap Owsa!qo8 [a ua saxtiasiA seonpIDOWAP semonnse sei anb eprpout [enSi us soualn o spur oone:s0ulap osaacid ep sonayn eS SeDIWOUODD SapePHUD se| ap OUIDIGOS Jo UD seonpusoulap seamionansa se anb zwradsa ajqeuozes 59 ‘ajuvysqo ou ‘s0%99}9 ns preigo seueuiny sauotzeztuei0 se{ ua e}IoUnU euM ap UO!reUTWOP e| & eszeatun ersuepuay el ‘oprrsg jap ¥] Ua ou0D sesaiduia se] ap Up!2onpLuOD e| lua jue} ‘0919 104 “seoTwUQUOD9 sopepHUD Se] ap OUA9IqG08 ap oonEIDOWSP. pu rur9}sIs un spmponut eupUdy anb serouansasuod se} £ sozopeleqen so} 2 BUPIPHOD vpta vf U2 SeLIE}LLOINY sOUOIIMAL SUI SEI ap eI>UEYOdUNE BY 2eU “Rsogns oouga vas ‘aquoWeSopUY “salPrAiN opis ueXey seisuaNDasuOD sns anb roydury ou soprsq so] ap ouPDoWap ousaIgo8 je ua seysand sepeoynsnfur sezueiadsa sei opeyereqsap uedey as anb ‘seiouew sepor ac] “sorpaya sayqeqoad sns rexaexa uajans ‘pepnua exo Jinbjeno ap o opriss, [op vas ef ‘uo}pezte:20Wap vj ap sa1o}!sodo so] oUoa saz0sti}ap SO} ONE, seaneisodxa sepeiseutap viouag sesaiduia se] ap oan gs0Utap oWiaIqo3 [ap Pept e|‘opersy jap ousaiqo3 jauo> axin90 oworanb souresp ‘ayLour oul 1 Stonwouosa sapepHua sej Ua eI>eIDOUIDp P| J12nPoRUT ap sostaaid SO}UOIU! 50] 9p soysnu ap osesey je epipous eydute uo opimguiucs wy oXode 9p seprpaut svysa ap erouasne ey sonanu ap ojjousesap [9 ua vsaidua e] v ansise ap saoedea sauory A (saquaia8 soy ap auaunejnanied) uppesede ap seuesgosd ‘oupaio ap sepensape sajuany owo> ‘ofade ap seu sesaudura se] ap uotezneiowiap P| o10<9 1924 ered ipeuesogesqejed 2P PeHAAET P| UNO scoIsyq SoYDaIaP aseznUeTeS anb ‘eansos9 PULLO} va epeuopues £ epensape UODAyT|sUOD BUN J8ua} LesIaqap sean BIZOUL9 sesaiduro sey ‘sasted soy anb yendt ry ‘ajjey sesaadiua sey ap owssiqod [2 sezptwoursp ap eaneiuay epoy anb ajqeqosd Anut so ‘ourayxa & Ou “tour oXode ap sopensape seuiaisis uis anb uensanuap sosesey soyqesout uppewioysu sro} eur eB EEY gE