You are on page 1of 3
Kamiya, Aleandea Lowes eridasambin son el borg Aldea Kamiya «1 ein, Gina AutSnoma de Bens Aes: Bajo La Luna, 2016. Tap: 215% 135m. ISBN 974-987-1803-80-4 1, Cuenta. Talo cD Ass Primera ripen: mayo 2016 (© Akjandea Kari, 2015 © BAJOLALUNA, 2015, 2016 "hv, Contents A709, 70. 72 v4 Cid de Buenos Ales Replica Argentina bona com 1B 978.987-1805-804 Queda ech depo que estblec ey 11.723 Times en Arenina Phd a erin uci in miso er di “Fea devcos redo Desaytino perfecto No vas a esperar a que se cuele la luz por la ventana. Vas a mirara Takashi dormir a tu lado. Vas a pensar que es bueno que descanse porque lo espera un largo dia de trabajo. Vas a levantarte del futdn sin hacer ruido, y levisima vas a andar por el rarami hasta la cocina, donde te vas a vestir para no rasgar el suefio de papel de Hiro y de Takashi. Un desayuno perfecto requiere pescado fresco y el pes- cado més fresco esté en los alrededores del mercado de Tsu Ikij, Es temporada de caballa. Vas a iren tren a Tsukiji por una caballa perfect. Una ver alli todas te van a parecer bellas. Ese reflejo azul, las lineas de tigre en negro mojado, siempre moja do, como un recuerdo que nunca se seca, un recuerdo del ockano, ‘Vas a cerrar los ojos y vas a elegir. No te vas a dejar llevar s6lo por lo que veas. ‘Vas a hacer el viaje de regreso a casa con la caballa per- fecta en una bolse, deseando que no se produzca ninguna demora, Serta una pérdida de frescura. Una grieta en la lisura de ew plan, ‘Una ver. en casa, vas a cortar la caballa a la mitad y la vasa salar, para que retenga en ella su espiricu del mar. Vas a poner el arroz en remojo, después de haberte lavado las ‘manos con ese jabén de coco que te regalé Mariko, Qué afortunada. ;Cudntas japonesas se lavan por la mafiana la cara las manos con un jabén de cocos? Vas a imaginar una playa como las de los avisos de agencias de viaje y vas a acercar tu imaginacién a la punta de las palmeras: vasa ver los cocos, con los que hicieron el jabén para que tus manos sean suaves esta mafiana. Vas a ddesear que algo de esa playa y esa blancura del coco pase al arroz a través de tus manos cuando lo laves y lo dejes en reposo. El reposo es importante. En todo. Para hacer el muito shire vas a perfumar el agua con pe- ‘quefias anchoas secas. Vas a imaginar la danza del dulzor del coco con el sabor salado de las anchoas. Como si ese mar que acaricia los pies de las palmeras volviera a hacerlo en Tokio, en tu casa ‘No vasa poner muchas anchoas en el agua porque sino esa danza de sabores se transformarfa en una lucha Vas a abrir el natto, y el paquete de mori, ese que com- praste después de ahorrar. Nori de una negrura perfecta, como una muerte. Sin los atisbos de verde de las algas co- Hay algo de soberbia en este gesto y te vas a avergonzat, pero Ia idea de un desayuno perfecto va a volver a con- vencerte de que hiciste bien, de que un solo elemento de otra calidad echarla a perder el trabajo puesto en todos los demés. Por eso también vas a usar el té del primer brote, ese ddl sur del Japén. Vas a retirar el agua del Fuego ances de hervir, vs @ humedecer apenas las hojas y luego de echar el agua las vas a dejar reposar. Se van a desperezar y van a dejar salir su sabor, su perfume, su esencia verde en tu cocina gris. Vas a ira la habieaci6ri de tu hijo. Vasa quedarte arrodillada junto al fusén mirando su respiracién. Podrias pasar todo el tiempo del mundo ast. Qué egoista. Podrias dejar que el

You might also like