ge aes wh Like Nancy Pontet Purtscher El perfil uruguayo y su historia editorial FIN DE SIGLOchain ai yel“gritag délosorientalts: ne ere fi a¥e)-22VY Se En el proceso de gestaci6n de nuestra identidad como na ylaactuaci6n de Artigas, cin, la revolucion " marcaror ‘ oriental N una etapa de notorio fortalecimiento, El poder de convocatoria de José Artigas sigue Presente entre los uruguayo: en su rol de “procer” o lider politico de un pueblo, mas alla de que su Eee federal haya tenido o no andamiento en la organizacién definitiva del pais. Desprendiéndonos, tanto de la “leyenda negra” (elaborada por Saenz de Cavia a pedido bonaerense) como del “culto al héroe”, se considera que José Artigas, como hombre de su €poca, supo interpretar las necesidades y valores de su pueblo, dirigir la lucha independentista y otorgarle a ésta un contenido politico, econdmico y social. La dimensién real de su gestién y pensamiento sigue siendo tema de indagaci6n y discusi6n. En cuanto a su anhelo politico de crear una “patria grande”, si bien no se concret6 exactamente, es uno de los antecedentes hist6ricos del actual Mercado Comin del Sur. En los capitulos que siguen (IV y V) se pone de manifiesto la fuerza de un pueblo que, a pesar de sus distintos intereses, lucha por sus ideales federales Primero, y soporta el domino luso-brasilefio después, a la espera del momento de una nueva definicién politica para su destino.729 CONTENIDO DEL CAPITULO La semilla independentista bonaerense germina en campos orientales El movimiento juntista de Buenos Aires de 1810 Elapoyo de la campafia oriental y su porqué Laoriginalidad dela Revolucion Oriental La postura de Montevideo frente ala revolucién y su porqué 1) Los primeros aconteceres de la Revoluci6n a través de lecturas Grito de Asencio Las Piedras Primer sitio de Montevideo ElArmisticio de Octubre Los orientales muestran su voz Los orientales deciden emigrar IN) Dos concepciones de una misma Revolucion IM). Primera evaluacién de la Revolucién: los efectos econdmicos En la campaita En Montevideo VW) _Laradicalizaci6n ideol6gica de la Revolucion Artigas y su ideario politico Las “instrucciones” de nuestros diputados Tres pilares: Independencia, Repdblica y Federacin Documento: transcripcién de las Instrucciones Artigas y su politica econémica El pensamiento artiguista para el Protectorado El pensamiento artiguista para la Provincia Oriental a) El gobierno de Canelones b) “Reglamento provisorio de la Provincia Oriental para el fomento de Ia campatia y seguridad de sus hacendados": 10 de setiembre de 1815 V) LaLiga Federal Ladifusi6n del federalismo y el Congreso de Oriente como alianza politica Evaluacién del capitulo El movimiento juntista de Buenos Aires La campafia oriental apoya la revolucion "Grito de Aser Se establece el primer Triunvirato en Buenos Aires Proclama de Mercedes Batalla de Las Piedras Sitio de Montevideo Asambleas Orientales imiento del pueblo oriental en el Ayut oct. Segundo Triunvirato de tendencia provincialista Llamado a las Provincias para integrar una Asamblea Gral. Constituyent® Ruptura del Armisticio ‘Segundo Sitio de Montevideo Congreso de Tres Cruces Las Instrucciones Gobierno de Canelones Rechazo de diputados orientales por la Asamblea Gral. Constituyent® Dominacién portefia de la Provincia Oriental Régimen politico de Buenos Aires: Directorio ‘Administraci6n artiguista - Reglamento de Aranceles 7 Reglamento de tierras - Expansi6n del Federalism: Congreso de Orien'=Pe Sie rctt leanne jo XIN uajoconsigo W cris la colonteaci raaigl HSA beat vr ela sana CON : ea ences ween palais rt en grande oleadasevolelonais omiblonds Amérion dal Su ‘wee ue doterminaron ol surgimiento ; arate Hee Ti ruta. umvawayo ¥ su austoRtAa y 73 os contrarentos en Lo que sucedis en ef Ro de ta Plata, ajhares et siglo NIX comenzaron yr tos atbowrs a surgiren América tos pri Bs ae primeros movimientos juntistas ata 88 TUNES ao spa tesla como un fara de autogobiemoy on ete Fil aa coe gs {NENTS franoeseslieradox por Napoledn Bonaparte, Port antl qe stat aeienn aparece Hy Uigada a tos acontecimientos politicos ocurridos en Europ 4 a. ren pst merase baba adopiad o 2 aya onaparte, se dio la invasion a Espafia en 1808, casino al ay Stee ne a ‘aon esi de an nev ey de mln anes en Tapia Tose Bonepar a exo reacions con avr w pes de estar soo y mal equipado sr aenan : Hocantjoa una férmuta de autogobiemo y organizacién de Ia guer conta Saree wins, Pkt every teaitmaron el sentiment de nai espaol de sus abitnts 8 te rsa ptica para rigs y digs colons en edo de adversidad inadvertitl Espatabrinds el modelo de autodeterminacién que Tas cotonias estaban necesitando esegpernda mente Jo cual estudiaremos a continuacién, pasionaist00 EI movimiento juntista espafiol ante a presencia francesa en su pafs, se constituirfa en una buena {nna para Hispanoamérica, Montevideo fue la primera ciudad que se lanzé a la formacién de una Junta, La ambigua actitud del virrey Liniors sobre si aceptarfa a Fernando VII 0 a José Bonaparte como autoridad de Espafa, Ilevé al gobernador Elfo a denunciarlo como “afrancesado” y brazo ejocutor del dominio francés sobre las ‘colonias de Espaiia en América, Pidié su deposicién rodeado de una poblacién enardecida de sentimiento localista frente a Buenos Aires siempre competidora y %5 con la destitucién de Liniers y su sustitucién por Cisneros (que serfael agresiva El canflicto termin iitme de los virreyes del Plata), de acuerdo a una orden de Ia Junta Central de Cédiz, que ademas i el esonocimento nla actuaciGn de la Junta de Montevideo y af mismo tiempo la indicacién apres de dsolverla sin duda por el inminente peligro que ese modelo juntista signifieaba para el poder espaiiol en América. I Con ie eae La semilla independentista bonaerense germina en campos orientales El movimiento juntista de Buenos Aires de 1810 con Moxtovid Hist fines de 1809 el nico movimiento juntistaroplatense protagonizado en Montevitt» hubitenido por cometido mantener I fielidad al rey de Espoht queseconsiderabe Cards Vil, y la repulsign a todo aquello que pareciera “afrancesado”. Pero el aio rer ie rts Fao maduracién de ideas independentistas que se manifestaron en Ja Junta de Mayo Tes, de Defunciones ‘oriano realiz6en el Libro, a qtuultareveladora la anotacién queel cura parroco de S Aa 25 de Mayo de 1810:74 @ Nancy Pontet Purtscher “El dia. 25 de este mes de Mayo expiré en esta provincia del Rio de la Plata a de los virreyes, la dominacién déspota de la Peninsula Espafiolay el escandalog Anica juni maja og espafioles. " Esta muerte tan particular anotada por el cura pérroco de ideas netamente inj respondfa a los sucesos acaecidos en Espaifia. Phe Alléen Espaiahabianrenacido los localismos, la poblacin orgenizab sus poi juntas provincialesen los que el pueblo todo, participaba del autogobiemno. Reclutagr a armas y recursos e hicieron tratativa para conseguir l ayuda de los ngleses medias tng colectivo e impersonal. hare Esta orgaizacion comespondi a a primera etapa del resistencia espaola conta ig. francesa. Vas Sin embargo, dada la magnitud dela lucha se necesitaba una unidad que no poan bind sobiemos provinciles. Asi se formé una Junta Central Gubernativa del Reino, integrad prt representantes de cada provincia que se instal6 en Aranjuez en 1808, Esta Junta vioconbeneaiag Ja labor de la Junta de Montevideo ya mencionada y cre6 en 1810 un Consejo de Regencia, Aqui comienza la estrecha relacién entre los hechos espafioles y rioplatenses. Veamos la. opinién bonaerense sobre dicho Consejo de Regencia. “..Por més que lo querfan ocultar, mientras hacfan venir fuerzas de Cérdoba y Montevideo, todo se ha descubierto al fin por los barcos que han legado de Montevideo. La Central ha caido: toda Espafia est jorobada y perdida. ;Creerés que los del pueblito de Cédiz se han propuesto damos gobierno a los americanos, inventando una regencia; y que nos gobiernen como si fuéramos sus esclavos...”? Esta situaci6n determinar4 que en Buenos Aires surjan tres tendencias politicas: la oficialisa, la moderada y la juntista, que fue la que logré la mayor aceptacién. Las personas que abrazaban la postura juntista eran hacendados que exportaban a Inglaterra, hombres de letras imbuidos de las Nuevas Ideas, representantes del alto comercio y oficiales de mnilicias destacados durante las invasiones inglesas. Este grupo, representativo del patriciado urbano Portefio, sostenfa que el gobierno legitimo espafiol habia cafdo, y por lo tanto las colonias, de hechoy de derecho, siguiendo las ideas contractualistas del filésofo politico inglés John Locke, eran independientes y con derecho a reasumir la soberanfa. Los “juntistas”, movidos por estas ideas Presionaron al virrey Cisneros para convocar a un Cabildo Abierto. En ese Cabildo que se reunié en mayo de 1810, se enfrentaron distintas tendencias: mLa tendencia espafiolista defendia que mientras existiera un trozo de tierra gobernada is espafioles en Espafia, ese trozo dominarfa a América, al igual que mientras quedase un ae ss en América, éste debia gobernar a los americanos. El pueblo de Buenos Aires por sis 6. tenia derecho para decidir la legitimidad del Consejo de Regencia sino en uni6n Cor representantes nacionales, y mucho menos erigir su propio gobierno separado. jo de Hisoris 1. Joxé Lt Romero: “Gran Historia de Latinoamétice,Pucblo y Ptses" T 1. Citdo por Ia “Gla de ex Americana y Nacional N* 9" de Ana Romero, Nora Rodriguez y Alba Marin Ed, Monteverde, pévina Ss, 2. Carta de Buenaventura Arzara Mariano Horma del 20 de mayo de 1810. Recop. de Vicente Lépen, “La eran Soy, Mayo". Citado por Ana Romero, Nora Rodriguez y Alba Marian! en “Guta de estudio de Historia Ameri cit. pagina 18. 4ndencia revolucional fa falta 0 de Regen ae Sire man omennt 4 ws mannn 9 TS all QUE SUS Allender, dene ie repreventaciGn americana en Ia eleccion del emer, ia; por Jo tanto el puchlo americano tenta el dencch, de Peumir su soberanta ¢insiuir un gobjerne Propio que te 4 Weave vepuridad. Por qué negarle ala capital del Vrreinato dc la Plata tener su gobicrno mientras se le pestnitia.a ie Prinsumns hea Sita be Sharyn | (0 Cone) de Cadiz no siendo cabeza de ninguna jurisdiceson mllepeaitesse temitorial? marvin tomers — Vey lm Vas, Sa hres Vers | cconlicio no daba tiempo para consular alas otras partes del oneonaee 1 vinginato era necesario aclUar or CUenIa propia y tomar decisiones feta Frenne mde | vineace un hermano mayor que defiende tos derechos y | smauonycusiey” | come des des familia cuando faltan los padres. tae Dare | se Cabildo bonaerense decidié finalmente subrogaro sustituir la tad del virrey Cisneros por una Junta de Gobierno integrada vina “calificada” representaciGn del patriciado portefio que ba el momento para tomar el poder y enarbolaba la soberanfa spular como dogma de una revoluciin que estallariaenel Rio dela Plata. Entre los integrantes de la Junta se destacaban: Saavedra, Castelli, Belgrano, Azcuénaga, Alberti, Matéu, Larrea, Paso y la piedra en el para los centralistas bonaerenses, Mariano Moreno, con sus ideas federales que luego Artigas tomarfa como propias. autor Prontamente surgieron dos corrientes dentro de la Junta, una |iderada por Mariano Moreno y otra por Saavedra. El primero de ellos luchaba por vencer al viejo régimen espafiolista para implantar otro nuevo asado en la conveniencia de las provincias; éstas crearfan separadamente una Constitucién que velara por los intereses de cada una, poniendo limites a los gobernantes como forma de asegurar el respeto a la soberanfa popular y la libertad. En el aspecto econémico, era contrario a las grandes fortunas concentradas en pocas manos y especialmente a las derivadas de las minas de oro, que consideraba debian pertenecer a la Naci6n. Prevenia a los americanos respecto de los extranjeros: segtin él era necesario aprender de su cultura, vender nuestros productos, pero cuidarmos de ser esclavizados. Por su parte, Saavedra pretendia mantener las caracteristicas de! régimen hisp4nico aunque derogando ciertos privilegios peninsulares que beneficiaban a un grupo de afincados vecinos del Virreinato representados en Ia Junta. No era partidario de una verdadera revolucién econémico-social, pues temia el desborde de la misma y - con éste la imposibilidad de obtener las ventajas econémicas que esperaba. Representaba una tendencia conservadora, angléfila, idcadora del Cabildo Abierto, no de la revolucion. La tendencia que triunf6 fue esta tiltima al punto que Moreno éebié renunciar. “Yo me voy, pero la cola que dejo es muy larga.” eae : Tins Mocan GE pra angler, 24 de cee de 181, chad en “Gta de md Hs ASSASTSY Nacional”. Ob. cit., pag. 22.~~ puratista, anglomla (0868 CON BAN afd ha centralis onto asu plan revolucionarig aphiee ila in ndamiento a su plan re licandy (tinh eta" de Buenos Aires para dar noticias ya! act * i a “ ndeando” con convicgi mg eninsula, “fernal iccion, “fia | rs a fae Mie Espafia, y ademas buscando el apy. ‘eens 5 ony ental despues: Vides necesario promover el levantamiento de gicy, rin ei, APES ond UeNLES acauditjags “Pay “sujetos” de presligios Artigas Y Rondeau, segin g} crite nta bonaerense. v exible coin 0 7 ju aa eats “con fia oriental y su reemiecomneses*Y | gy apoyo de la campana 0° . i Poe rangers 1 Po La campafia recibié con agrado y divulg6 con pre " SteZa lag + revelusionarias que epudiaban el orden establecidg, * iy de propaganda polfica donde se discutfan las dstnts nog; ropuestas de la Junta de Mayo. Las reuniones que se daban en lag ite anata gauchos y patrones permitieron que la noticia del brote. Tevohucion 3 as , dex en un medio con comunicaciones cuya velocidad no excedfa al iciaron de centro% Lapulperfas off sobre unirse 0110 a Jos contactos entre corriera con asombrosa rapi allo. . : oe .s no satisfechas ¢ ignoradas en la campafia por las autoridades hispénicas E jecesidades ; =| oa poo oben propicio para que el brote independentista y revolucionario se desarrollara en 8 el campo. Porque cran los habitantes del campo oriental quienes trataban de sobrevivir en medio de las graves dificultades y las contradicciones que se les presentaban y que sorteaban con mayor o menor Gxito, Entre esos problemas estaba la indefinicién de la frontera con el consiguiente contrabando;e| | conflicto entre Jos latifundistas y los ocupantes que se afincaban en la tierra sin permiso: la desarticulacién administrativa; la falta de trabajo sedentario y por lo tanto la presenciade numerosos hombres sueltos que vagaban por los campos; el conflicto entre los latifundistas y las autoridadesque deseaban colonizar la campajia con la fundacién de pequefios poblados y la carencia de jueces que impartieran una justicia expeditiva. A esta situacién debemos sumarle la actitud del gobierno de Montevideo sobre su jurisdiccién: enviaba tropas para mantenerla sometida pero habfa que brindarles alojamiento y donativos para su mantenimiento. Sin embargo los propietarios no obtenfan seguridad en la campaiia con estas tropas y si lograban algan beneficio de esas operaciones, éste era confiscado por el gobierno al imponet la ‘eeularizaciOn inmediata de los titulos de tierras asf como contribuciones o donativos forzosos. También estaba el descrédito de sus Cabildos no reg ili ae Gent sei ear spetados por los Comandantes Militares, y el despojo de El hecho de que la Constituy6, sin duda, Aires, betel de la campafia fuera mayoritariamente criolla, indigena y mestiZ ‘actor para aceptar la propuesta revolucionaria de la Junta de Buens Campo y ciudad montevi a lontevids ie . Algo que se revelaré con tng ostitufan dos Ambitos distintos, hablaban dos idiomas diferent® con te iti Los espafioles eae nitidez en la revolucién de la Banda, feos at res se ‘i Poltcos, militares o ecesidstion ett especialmente en Montevideo donde asumfan cues intereses g icos . u "us $°8 S¢ conectaron siem, Y se dedicaban al comercio, las barracas o las curtiembres. Pre coy i isto. cin! AmP0 no habia capac et MONOPOlO Comercial espafioly se beneficiaron de 5™ "rona 0 pobla 7 Mteresante fi 7 « su estane! Montevideo Poblada y con itereses a Wecel ai eon) pero sf para el oe ce ails i ajenos a los que movian a los co! FeDentro de esta poblacién de la campafia se jos hacendados bonaerenses que cruzaba lofablecer sus estancias, especialmente en “rrisdiccion de Buenos Aires. juris encontraban, ademas, in a esta Banda para el litoral, dentro de la Estos hacendados, sin duda, aceptaron y rasmitieron el Mayo” y con ellos sus peonadas, al mejor estilo medieey, soot blacidn del campo en su conjunto es antimonopolista mstceiaas Libre Comercio para conectarse, especialmente con inelan vender sus CUeTOS, Brasa, Sebo, etc., a cambio de ae mi? ahastecimiento que permita satisfacer sus necesidades sin tere aon recurrir al contrabando. 2 de La campafia estaba ya impregnada en todos sus sectores sociales raciales de un odio al extranjero, al “godo”, que serd imposible acallar hacia 1811. Cada sector lo odia a su manera por distintos motivos dandole a la reaccién independentista distint staciones que 1 t tas manife: Iuego Artigas tendré la enorme virtud de saber interpretar y canalizar, La originalidad de la Revolucién Oriental Laoriginalidad de la Revolucién oriental reside en su doblecondicién derural y multitudinaria. Segiin A. Zum Felde, para la mayorfa de los integrantes del ejército oriental, la revolucidn fue una “rebelién de instintos” en la que se actuaba por un odio que no pasaba por la raz6n, salfa de lo mas fntimo y tomaba distintas formas en la gran variedad de sectores sociales que integraban las filas del ejército oriental. Eran las multitudes del campo quienes levaban adelante el movimiento. Artigas se uniré luego para conducir a un pueblo que hacfa su propia lucha y dejaba su propia huella. ¢Por qué decimos que fue un movimiento rural? Toda la” organizaci6n del ejército oriental reflejaré la estructura social del campo del momento. En las jerarquias superiores se destacard el gran estanciero que ejercfa influencia sobre las peonadas, ocupantes, esclavos, agregados ¢ incluso sobre vecinos de menor importancia que dependfan de la defensa que él les brindara, especialmente en Zonas fronterizas, a la mejor manera del sefior feudal del medioevo. Las partidas de. changadores y contrabandistas se incorporaron con Su propia organizacin “militar” al igual que los charréas que sobrevivian en su tierra y aportaron sus armas, su forma de pelear Y Sus jefes, No debemos olvidar la participacién numerosa de los Curas pérrocos y las mujeres en el llamado “ejército nuevo”. Estos distintos sectores sociales revolucionarios que le infundfan Nuevas y originales caracterfsticas a la lucha, revelaban su condicién Policlasista, esponténea, sin orden ni disciplina, juntandose en forma ‘umultuosa, con un cardcter de protesta social en que cada sector tenfa sus necesidades, intereses y sus reclamos alas autoridades contra “Elodio al Godo” “Una palabra mégica va cundiendo por las cuchillas ‘desiertas, de estancia en estancia, de rancherfo en rancherfo, de monte en monte: iGuerra al Godo! ¥ a su conjuro, €l peén deja ta estancia, sale el ‘matrero de la espesura del Blancos, rubios, morenos, indios, negros, pardos, viejos, muchachos y mujeres, semidesnudos, hirsutos, desmelenados, montando redomones, blandiendo lanzas y ccuchillos, empufiando viejos twabucos, voceando, envueltos ‘en polvaredas, salidos no se sabe de dénde, como paridos por la tierra, legan de todas partes. UAdénde van? {Por qué se ‘mueven? El levantamiento de la ‘campafia contra el poder espafiol es una ‘rebelién de instintos’ . Nada sabe el gaucho de régimen de gobierno, ni de leyes de Indias, ni de derechos politicos, ni de libertad ‘econémica, ni de autonomta nacional; s6lo sabe una cosa: Odiaal Godo. El godo es, para él, la dominacién orgutlosa, la autoridad arbitraria, el despojo de la libertad y de la tierra. Para lindio es ta conquista que lo arroja de su suelo; para el rmatrero la poticfa que persigue, encarcela y mata; para el peén es Ia altanerfa patronal que relega y humilla; para todos es la injusticia opresora que se impone por la fuerza. Todos los sentimientos de separacién y de aversi6n que se han ido formando en Ia masa rural ‘contra la autotidad espafiola, estallan al fin en un Jevantamiento general”. ‘Tomado de Alberto Zum Felde, “Proceso histérico de! Uruguay”. Ediciones Arca, 1978, 7 edicin, pag. 40.ae a ta protesta social nacig agp. Jas que se rebel rip transcurrié e} roca ae de mayo ei una radicalizacion cada vez mas tt se pee pues fueron quedando los que nada tentan pada @ integra sna campafia arrasada y en crisis, los Mecesitage Pera medio de cada vez mayor. Se buscaron entonces Soluciongt Sigg un apwyo las ideas de Ta guerra de la Tndependene 44 alguien ismo, una nueva politica de tierras y jg CXaltacig. “ica Labor Al inicio, la unién de toda la poblacign de fg ot de, igualdac oa al transcurrir el tiempo, para el hacendadg © qu Dag fie doef cansancio fue grande, pues estaban perdience citien tet algo, ae de afios por una lucha que no tenfa una Clara finayi Ode Mi a de las personas que intervinieron en e] Con, "acing, ee is que abrirén las puertas de la Banda a Jog & Ig)3 Pottefigg ya los portugueses en 1816. Otro rasgo de originalidad de la re i cticas militares espafig iginali oluci6n, fue la mezcla de ti : ti - las de los indigenas, changadores y Contrabandistas, através del Cuerpo de Blandengues, con hangad Conocig, ra de hacer la : ‘Asf surge la téctica de la montonera como una nueva maner SETA, Propia dea época. is res armados de fusil y bayoneta que venfan Ce eae sere tia en ciertas circunstancias de combate, Gussie ee eae es formaban un orden unido, y siempre iban dispersos como cazadores; formaban en parejas y para ello hacfan servir sus amistades y relaciones personales, de Modo que tenfan ese vinculo més para protegerse y no abandonarse en el combate. Ante la presencia del enemigo, y sin desmontarse, se desplegaban en Tegado a la distancia conveniente echaban pie a tierra, quedando uno con | el compajiero algunos pasos para hacer fuego, el que continuaba mi Algunas veces se conservaba a caballo el uno, teniendo de las riend: desmontado, Sieran cargados y se vefan Precisados a perder terreno, y antes de un minuto habfan desaparecido; si por el cont velocidad para Perseguirle; y entonces obraban como c: menos adecuadas”4 guerrillas, y cuando habian los dos caballos, yavanzando lentras se crefa conveniente, las el caballo del que estaba saltaban en sus caballos con rara destreza, trario hufa el enemigo montaban con igual ‘aballeria, por més que sus armas fuesen lasE qura de Montevideo frente a la Revolucién y su porqué esi uRuauavo ¥ su mistoRta ¥ 79 rg el marco de beneriCiOs otorgados por los reyes Borbones a Dat ‘fideo por 108 que crecié como ciudad y puerto, es facil ponte (ura hostil con respecto a la Junta de Mayo y a nder SU Revolucion que rechaz6 frontalmente, y su transformacion en oe an hispanic gue la llevaron a tal posici6n, son varias: cavsas : Las “Bena elesiatico ere ave 15 E1 puerto habla sido convertido en Apostadero Naval con ton queen el comsionsto funciones MUY especificas: cuidar los territorios espafioles de 2 mer pretuma ave hasce : cai el pense puto gwances extranjeros, en especial portugueses, franceses 0 abd prea papaly ingleses, ode cualquier otro peligro. Por lo tanto no debia unirse ons eiacaaenrees inate. teconocemes las Cones jg Montevideo habia sido traniforiiado én Pociig Mayer /(l ve wat daa por al pat on endole unenriquecimiento que derivaba de eseprivlegio. fj mo ao te acu ya fidelidad a dicha Corona espaol. contagido de as pervert tmaximas de a Joma 15 Su poblaci6n era mayoritariamente espafiola y nose unirfaalos ff fevolucionaria.” sriollos en su lucha independentista, pues estaba ampliamente “ vie cone! monopolo aplicado por Espaia. Noapoyarfan Oficio de Salazar, abril de 1811, una revoluciOn que hablaba de Libre Comerci i sg Las autoridades montevideanas, por su parte, no tenfan interés ‘en unirse a su eterna rival para crear un nuevo pais que se filaba sometido a la voluntad de Buenos Aires. Montevideo aspiraba a dominar toda la Banda para sf. I pins te eee Los primeros aconteceres de la Revolucién a través de lecturas Grito de Asencio “Un pufiado de patriotas orientales, cansado ya de humillaciones, habja decretado su libertad en la villa de Mercedes, Ilena la medida de sufrimiento por unos procedimientos Jos mas escandalosos del déspota que le oprimia, habfan librado solo a sus brazos el triunfo de la justicia[...] Asf se verificé eg6 a Buenos Aires fue acompafiada prodigiosamente, y la primera voz de Jos vecinos orientales que dela victoria del 28 de febrero de 1811; dia memorable que habia sefialado la Providencia para sellar losprimeros pasos de la libertad de este territori, y dia ue no podré recordarse sin emociGn, cualquiera que sea nuestra suerte”.* La presencia de Venancio Benavidez y Pedro vencieron en Asencio, demuestra que Artigas no acompafia y conduce a un pueblo que es el protagonista. José Viera, los caudillos de la primera hora que es el jefe que inicia la Revolucién sino el que Las Piedras _ “Luego del llamado ‘Grito de Asencio’, [--Jocuparo® cen el mismo dia, la villa de Mercedes y al siguiente, Santo Domingo de Soriano. Poco después, San Salvador © Dolores[...] y Pedro Viera marchaba en direccién a Paysandé, mientras en Belén otra partida patriota... Se pronunciaban por la Revoluciénf...] Entretanto, el 20 de abril Benavidez se habfa apoderado del pueblo del Colla del His Sele ernest SW Merona, V-Trochder “La Revolucion Oriental”. Editorial Monteverde, pig 13.eae spat ova CoUHIS POF MANU Aig ie 80 9 Nae lo Vaboras yt . Rosato ye we i Ate, x tvs pk a Te Man igh AM | — y Jose ‘ i 1 Baus iv Hay ata Sa ONE Fan ce ete 08 ity nat eH EN Taya Rode a Pate dead ene de TA ata gy ao, VN) sya inetuntabsle que o quienes él erefa “algunas po . Moy) Aaindudable aubestitt Iv acelin de aqlonen 69 ng a ee do Nadvongys Mg natvncquvesnt a uta mann ce Poa pr Lenarticular 1 ext Conny ent fs anayo co TXT 08 campo ds Law Plog“ enortces eMC uelvo ws cl asto (aver HY en Se aaa gf a maa fev a AOC Y 1.00 py Lal a east cM ACHE TO ISS ICN 960 ogy Ay censu mayoriatcon ete egpniles VenehlOs. comensd las 01 consti iti video imer sitio de Montevid bi a nados en un sitio de cerca de ciaco meses en que rnil y my pat lontey ro nfo, tpedas pertcones mir eq Fe tan, per sin Heerasatémine ya porque ct General en es cre gue epg pees . ‘an dificultades invencibles, o que debian esperar ordones sefaladas para tentativas de CHUA Clano, yy falta de municiones, ya finalmente porque Hogd una fuerza extranjera a Hamar nuestra Alencdy" tf De esta manera, a pedido de Elfo, fuerza portuguesas comandadas Por Diego de So ala Banda con $.000 hombres para ayudar a Espafa en la represidn de la revolucién de |o “Ast nos vimos emnpe privaron de que se coronasen nest 2A entrar D8 Oriental, El Armisticio de Octubre Buenos Aires estaba al frente de ta lucha independentista en Alto Perd contra as fyerzy regentistas espaftolas y en el Rfo de la Plata, contra el bastién espafiol situado en Montevideo, Pero se corrfa el riesgo de que los portugueses, ante el pedido de ayuda espaftol, cortaran la comunicacin de la Banda con el litoral, y se temfa un ataque paralelo de la escuadra montevideana al Puerto de Buenos Aires que bloqueura los rfos Uruguay y Parand, En consecuencia, se hacfa necesaria ung tregua para no tener dos frentes de lucha y poder reforzar el del Pert Por tales motivos Buenoy Aires, sin consultar a los orientales, acuerda cl tratado de paz sobre la base de 1a suspensién de hostilidades, el retiro de las fuerzas revolucionarias del sitio de Montevideo y de toda la Banda Oriental y Iaaceptacidn de la autoridad de El(o sobre dicha Banda; la contrapartida era e!levantamiento del bloqueo de Buenos Aires y el retiro de las tropas portuguesas de la Banda Oriental en la medida en que se fueran cumpliendo los requisitos anteriores, 4Cémo retirar las fuerzas de Rondeau y Artigas con prontitud? Se enviaron comisionados dando las érdenes y ofteciendo a Artigas el cargo de Gobernador de! Yapeys con un retiro inmediato. Los orientales muestran su voz ae Rondeau y Artigas recibieron la comunicacién del Acuerdo Preliminar resolvieron allel punto ntti en el Cuartel General, a media legua de la plaza, en la Panaderta de Vil: a cite 2 Se pronuncié en Contra de levantar el sitio y propuso seguirlo solo, mientras el restante PScH0 revolucionari dirigido por Rondeau persegufa a las fuerzas de De Souza. “La significacién d Dares ee armas oyendo © esta reunién radica en que ella fue la primera vez. en que el vecindario los hombres ‘notable Rvcann iva, sefial6 und conducta y reclamé por sus eae y de consejo’, exterioriz6 su voluntad colectiva, sef 6 Reyes Adie a its yl Feder M. Maronna, Y, ‘Trochon: “La Revolucion BWR 1 Rio de Ia Plat, Ed, de Ia Banda Oriental, 1987, pigs. 14 75. eyes Abadi “Artigas y ef Federalismo Oriental”, Editorial Monteverde, » pag 13. en el Rio de Ia Plata”, Ed. de In Bande Oriental, 1987, pag. 81.ajustes del tratado con Elio segus ; are exis Ios orientales, 6st se eons nconsa pole pero en la Quinta de La Paraguaya donde " Rondeau ruse elos con Buenos Aires, desconocieron ia suterann ee ol mtevideoY erigicron su propio gobierno representado en. a lad de Me Gervaso Aias =e “Jefe de los Orientales™ J jnombramiento obtUVOsignificacién pot : Cea “Asamblea realizada en Paso de Ia Aree, aa de cre enla nies trascendentales como seguir la guerra solos, repudi ron} aestfo abandonar la Banda antes de sufi las ctidaa on ampentrin as autridades espafolas en represalia al ica ro, Sonos prmeras pasos dena emigracin, dl “xo” de io unido y armado, ahora con un “gobierno inmediato” en la 1 caudillo José Artigas. decision Los orientales deciden EMIGRAR Deacuerdo alo establecido en el Armisticio de Octubre, las fuerzas trios debian levantar el sitio y proceder a su retiro. Rondeau Frandon6 la Banda con su ejécito y algunas familias orientales,y se tmbare6 enel puerto del Sauce, hoy Juan Lacaze, hacia Buenos Aires, Por otro lado, Artigas se preparé a partir rumbo al Yapeyti donde recibirfa el cargo de Teniente Gobernador. Cuando inicié su marcha hacia el norte, sus filas se fueron engrosando hasta convertirse, en poco tiempo, en una emigracién de todo el pueblo oriental que los paisanos llamaron “redota” por “derrota” yqueel mismo Artigas trat6 de evitar por la responsabilidad de caminar con gentes de todas las edades y estados fisicos hacia un destino plagado de peligros ¢ inseguridad. No marcharfa con un ejército sino fon una enorme familia de mds de 4.000 personas que debfa amparar ante ataques portugueses, espafioles ¢ indigenas, cuyo miedo a la represalia segura de las autoridades espafiolas ante la cual no tenfan garantias, fue lo mas fuerte. La marcha, ya muy lenta, se retrasaba ain més con la incor- poracién constante, tanto de familias y soldados del ejército bonaerense, como de indigenas. Tuvieron que soportar las atrocidades de los ortugueses que los atacaban a medida que avanzaban, las carencias de dinero, alimentos, armas, medicinas, cirujanos, sacerdotes, lo cual hizo muy diffcil mantener el orden en ese estado de necesidad. El recorrido se inicia en el arroyo Monz6n, donde Artigas y su pueblo se separan de Rondeau y contintian hacia el norte por la costa del Perdido y las puntas del Colol6. Se cruz6. el rio Negro por el paso de Yapeyd, se siguié rumbo a Paysandé, cruzando el Queguay, el aroyo Quebracho y el Chapicuy, y el 7 de Diciembre de 1811 se acampé en Dayman. A principios de 1812 cruzaron el rio Uruguay hacia Salto Chico occidental donde permanecieron hasta abril, y @ Partir de entonces se trasladaron a la desembocadura del arroy® Ayut £0 cuyas inmediaciones se quedaron hasta setiembre, mes en que Comenzarfan el regreso a su tierra. ie eT ne Ev ren PERFIL URUGUAYO Y SU musToRIA y 81 is ter oso familias, perids los i sxabsie odo ante an Tao. enepados last tmismos.;que podia esperarse los vient sna ge uchando con sus infortunios,eeiesen al fin at peso de ellos [17 Lal ellos se resuelven a dejar preciosa vidas antes que sobrevivir al oprobio e ignominia aque se les destinaba 1 Ellos lo han resueltoy ya ‘Yeo que van a verificarlo: cada da miro con admiracién sux rasgos singulares de heroicidad y constancia: unos quemando sus casas y los muebles que no podian conducir, otras caminando leguas a pi por falta de auxilios [1] mujeres, pérvulas inocentes acompatian esta marcha, manifestando todos la mayor energia y resignacidn en medio de todas las privaciones en breve a pueblo de héroes y al frente de seis mil deellos que obrando ‘como soldados de Ia patria, sabrén conservar sus glorias en cualquier parte, dando continuos twiunfos a su libertad. All, cesperaré nuevas érdenes y auxilios de vestuarios y dineros y trabajaré gustoso en propender a la realizacién de sus grandes votos”. W. Reyes Abadie, O. Bruschera y T. Melogno: “Documentos de Historia Nacional y Americana El Ciclo Artiguista". Editorial Medina, 1951. Doc n° 28, pigs 85 y 86,pomnes Pcie ber en el Ayut Artigas trat6 de conectarse,e, 2.» Nancy? tanta del Paraguay, al igual que con los caus py, cae Rios que participaban de la idea federalista. Desa 0, ided su plan de acci6n tratando de mantener bajo sy ally Ani, ‘de mérgenes del rfo Uruguay puesto que prevefa | a. ‘tay sobre Paraguay y Buenos Aires; en su intento Constante Ponty, tran causes del Exodon aor ifiesta la desconfi u -p1 vecindario de la cam ay en Ja lucha, manifi esconfianza que ¢ W° Mire Pam ey vent le enfan a Bucnos Aires. Etectivamente xistian dog | Petia 7 ? ; i ®t apc de Ia revolucién que se vieron con claridad cuandg gr’ ate ime, Artigas en el Ayut. Vising 3 ae quella época. ee ia hasta por los poros... POF eer ‘Memorias de Ramin de Céceres. Citado por M. Maronna, Y- Trochén. Ob. cit, pig 14. mm Dos concepciones de una misma Revolucigg Desde Buenos Aires, el Triunvrato, gobierno compu, integrantes de tendencia Portefiista, vefa con pavor las dimer Ys que la autoridad de Artigas habia alcanzado. E1 pet nos especialmente en las ideas federalistas por las que luch, Sida alcentralismo y unitarismo que defendtael obiemo de Buns aa v {Qué razones considera como Por lo tanto, una vez instalados enel Ayui, los orientales Fecibj nds elevanes para unirse al a enviados desde la capital, por ejemplo a Sarratea, Presidente de Exodo? Triunvirato bonaerense y General en Jefe de las jones ent Banda Oriental, quien fue con objetivos muy precisos: desacredtars figura de Artigas y dividir su ejército que ya ‘no era fundamental en una mmueva lucha contra el regentismo, Mediante halagos y ascensos ne? convencer a varios dirigentes militares de cambiar de cuartel; lleys familias, presbiteros, figuras civiles del patriciado, ocasionando una indignacién general en el campamento oriental, Piense qué otro movimiento de Historia de fa Humanidad. Las ideologias del Plata estaban enfrentadas: la “cola larga” federalista, que decia dejar Mari Moreno cuando se iba a Inglaterra, se ergufa frente al unitarismo centralista bonaerense que deseaba tener bajo control a la revolucién independentista. La tendencia unitaria, adoptada por el Triunvirato de Buenos Aires, concebia al Rio de la Plata como una Unica entidad, con Buenos Aires como lider indiscutible y Capital, en franca oposiciénala igualdad que pedian las provincias, Puesto que Ia Naturalezate habia dado un puerto, clima y ‘campos Superiores a los provinciales, Esta desigualdad fisica no podia cambiarse Y por lo tanto, hacia a la capital merecedora de este rango. Toda acti Politica o econémica tenia que pasar por la decisién bonaerense, lémese impuestos, entrada o sali 7 on Z a 0 salida. lades econdmicas o ejército, ida de productos, dinero para el fomento de activid La tendencia federal : i 7 Provincia tenta el derecho en nai Consideraba que una vez separadas de Espata, ca Buenos Ai Meats Seetin sus intereses y necesidades. La asociacin con puss quet vn nee Caliertad yen pe de igualdad econémvica y juridica, no de subordinaci6n demas provincias que preter sc 2 “*Pital dependifa exclusivamente de la produccién y trabajo de ls amen de evn omelet Era necesaiodividir los armamentoe los aduanerts 7 le evitar que Buenos Aires fuera la capital del pats que naciera de larevoluci6n.EL Peat FIL URUGUAYO Y SU HISTORIA ¥ 83 igas sigue afi \ mn ne reds 1812. seit 1 postura ideol6gica federal, 4 paragua one que también explica las , como lo revela la carta envi . Buenos Aires. razones por las que no pod ada fT ; ' fa cor wp Jsiel eee i De aa cubierto de las glorias de haber: nfiar ; je trasmit , 10a pacer so eT ua ree ome ia inerenl conere cmt PT destine a erica la ai oe dea vost cla ide conseavaria cash s a cadenas de sus conveci ire carter de auxiliadoras fs, /ecinos. i ras conservaron or si, no existiendo hasta ahora un pacto expreso erecting Pesmy se ai ederaciOn 18 administraci6n de su soberania”? que deposite en otro pueblo de la an las expresiones de la Precision del Yi y del . : seen ‘Artigas reafirma su postura ee eer ere ae i afios 1812 y 1813 ocuenta yale} co alguno de nosotros, porque sabemos muy bien a immpartime érdenes{] isamente el triunfo de la intrigal...] El pueblo de Buenos Aires es y s Fae obedecimiento haré so nunca su gobierno actual [...] yo no soy el agresor ni a us er ae mucstro! hermano articular de Jos pueblos seré precisamente declarada y ostentada See ea acm mucin”: 0 Dadas las intenciones de Buenos Aires de dominar en su i inci i oder espafiol, Artigas concibié la independencia i ts Om confederacion. Esto signific6 que para que fuera factible nuestra autonomia, debia contarse an jindependencia de las demas provincias y con un gobierno central que a su vez Jas uniera; en pocas alabras, el ‘nico sistema viable para el contexto platense era el federal. Pero para Jograrlo era Je expandir esta propuesta de independencia y posterior organizacién federal entre las jmprescindibl provincias sometidas a la capital. En Buenos Aires, entretanto, cambié el gobierno a’ causa del pronunciamiento cfvico-militar del 8 deoctubre de 1 g12quedio nacimiento al segundo Triunvirat , de tendencia provincial. Y éste convocd ‘Asamblea General Constituyente; allf irén a delegados de todas las provincias para integrar una i “jnstrucciones”, @ discutir las caracteristicas del gobierno jiputados con sus NO negociables futuro. A su vez S& jnicié el segundo sitio de Montevideo gracias al alivio recibido desde el frente del Norte con la victoria de Belgrano sobre los espafioles en Tucumén. .n el Triunvirato y SU regreso a Buenos Aires desde el Ayut, Larenuncia de Sarratea a su puesto el eran al sitio de Montevideo en febrero de 1812. contribuyeron a que Jos orientales se uni Abadie. 0. ie ee i 1812, tomado: de W. Reyes: nest i Og pet, of 21.68 scones igi a: Mein fast. Doc. NY