COMPRENSION LECTORA
1.E. 31554
ENTREGA DE FICHA DE
EVALUACION A LAS 4 PM
JUEVES 24 DE JUNIO 2021wando Paco Yunque y su madre llegaron a la puerta del colegio, los ninos estaban
Jugando en el patio, La madre lo dejé y se fue. Paco, paso a paso, fue adelantandose
al centro del patio con su libro, su cuaderno y su lapiz, Paco estaba con miedo,
porque era la primera vez que veia un colegio.
Paco) Yunque}
Varios alunos, pequefios como é1, se le acercaron y Paco, cada vez mas timido, se pegd a
la\pared y se puso colorado. iGué listos evan todos esos chicos! iGué desenvueltos! Como si
estuyiesen en su casa, gritaban,
: rN
corrfan. refan hasta veventar, @
salfaban, se daban de puhetazos. ‘ s
Eso era.un enredo, /_~ d
Paco estaba también atolondrado oe
wque en el campo No oy6 nunca F &
pora Po no oy 7
sonar tantas voces de personas a
la vez. En el campo hablaba primero
uno, después otro, después otro y
después otro. A veces, oyo hablar
hasta cuatro o cinco personas
juntas, eran su padre, su madre,
don José, | cojo.Anseimoy a
Tornasa, Y ahorasi que esto del 1
colegio era una bulla fuerte, de
muchos. Paco estaba asordado.De diver-sos grupos se separaban los alumnos y venian a ver
a Paco, haciéndole muchas preguntas. Pero Paco no podia oir
nada por la griteria de los demés.
En ese momento, soné la campana y todos entraron a los
salones de clase.
Dos nihos, los hermanos Zumiga, tomaron de una y otra mano
a Paco ylo condujeron ala sala de primer af. Paco no quiso
seguirlos al principio, pero luego obedecio porque vio que
todos hacian lo mismo. Al entrar en el salon se puso pdlido.Todo quedo repentinamente en silencio y este silencio le dio miedo a Paco. Los Zumiga lo
estaban jalando, el uno para un lado y el otro para el otro lado, cuando de pronto lo soltaron
y lo dejaron solo.
El profesor entré. Todos los nifios estaban de pie, con la mano derecha levantada a la altura
de la sien, saludando en silencio y muy Paco sin soltar su libro, su cuaderno y su lépiz,
se habia quedado pavado en medio del sal6n, entve las primeras carpetas de los alurnnos y
el pupitre del profesor. Un remolino se le hacia en la cabeza: nifios, paredes amarillas, grupo
de ninos, Yoeeri9, silencio, una tracalada de sillas, el profesor. Ahi, solo, parado en el colegio.
Queria llorar. E| profesor lo tomé de la mano y lo llev6 a instalarse en una de las carpetas
delanteras junto a un nifio de su mismo tamafo. El profesor le pregunté:
—3Como se llama usted?
Con voz temblorosa, Paco dijo muy bajito:
—Paco.
—2Y su apellido? Diga usted todo su nombre.
Paco Yunque.
(= Qoteria
| 5) Lematedn aneete:if
El profesor se sent6 y durante unos momentos escribio en unos libros, Paco
Yunque tenia ain en la mano su libro, su cuaderno y su lapiz. Su compahero de
carpeta le dijo’ i |
—Pon tus cosas, como yo, en a carpeta,
Paco Yunque seguia muy aturrdido y no le hizo caso. Su compafero le quitd
entonces sus libros y los puso en la carpeta. Después, le dijo alegremente:
=Yo también me llamo Paco, Paco Farina. No tengas pena. Vamos a jugar
con mi fablero. Tiene torres negras. Me lo ha comprado mi tia Susana.
Donde esta tu familia?
Paco Yunque no respondia nada, Este otro Paco le molestaba, Como este, eran
seguramente todos los demds ninos: habladores, contentos y no les daba miedo
el colegio. 3Por qué eran asi? Y él, Paco Yunque, 2por qué tenia tanto miedo?
Miraba a hurtadillas al profesor y al muro que habia detras del profesor.Sonaron unos pasos de carrera en el patio y apareci6 en la puerta del salon,
| Humberto, el hijo del senior Dorian Grieve, un inglés, patron de los Yunque, gerente
de los ferrocarriles de la «Peruvian Corporation» y alcalde del pueblo. Precisamente
Paco le habian hecho venir del campo para que acompahase al colegio a Humber to
y para que jugara con él, pues ambos tenian la misma edad,
El profesor, al ver a Humberto Grieve, le dijo:
—dHoy otra vez tarde?
Humberto con gran desenfado, respondio:
—Que me he quedado dormido.
—Bueno —dijo el profesor—. Que esta sea la Gltima vez. Pase a sentarse.
Grieve se acercé donde estaba Paco Yunque. Y le dijo imperiosamente:
Ven ami carpeta.Paco‘Fanina le dijo a Humberto Grieve:
—No. Porque’el'senor Io ha puesto aqui.
-2Y a ti qué te importa? —le increpé Grieve violentamente, arrastrando a Yunque por un
brazo a su carpeta.
—iSenor! —grit6 entonces Farina—, Grieve se est llevando a Paco Yunque a su carpeta,
El profesor @888 de escribir y pregunté con voz energie’:
—iVamos a ver'! iSilencio! 2ué pasa abi?
Faria volvi6 a decir:
Grieve se ha \levado a su carpeta a Paco Yunque.
Humberto Grieve, instalado ya en su carpeta con Paco Yunque, le
dijo al profesor:
Si, sefor. Porque Paco Yunque es mi muchacho, Por eso.El profesor sabia esto perfectamente y le dijo a Humberto Grieve con
tono algo.
—Muy bien, pero yo lo he colocado con Paco Farifia para que
atienda mejor las explicaciones. Dé jelo que vuelva a su sitio.
Todos los alumnos miraban en silencio al profesor, a Humberto Grieve
ya Paco Yunque,
Faria fue y tomé a Paco Yunque por la mano y quiso volverlo a traer
su carpeta, pero Grieve lo tomo por el otro brazo y no lo dejo
moverse.
aa OH fern,El profesor le dijo otra vez a Grieve:
—iGvieve! {Quées esto?
Humber to Grieve, colorado de coleva, di
—No, sefior. Yo quievo que Yunque se quede.
—Dé jelo, le he dicho,
—No, sefior.
—2Como?
—No.
El profesor estaba idighade y repetia:
iGrieve! iGrieve!Humberto Grieve sujetaba fuer temente a Paco Yunque, el cual estaba Yaellaiité y se dejaba
Jala como un trapo por Farina y por Grieve. Paco Yunque tenia ahora més miedo a Humberto
Grieve que al profesor y que a todos los demas nifios. El profesor lo tom6 por el brazo y lo
condujo ala carpeta de Farina,
Grieve se puso a llovar y a patalear en el suelo.
De nuevo se oyeron pasos y otro alumno, Antonio Gesdres, hijo de un albanil, apareci6 en la
puerta del salon. El profesor le dijo: mae
—2Por qué llega usted tarde? a
—Ful a comprar pan para el desayuno porque mama esta i
enferma y papa se fue al trabajo. i
—Bueno —dijo el profesor—. Parese ahi, Y, ademas, tiene usted
una hora de castigo.
Farina le decia a Yunque en secreto:
—Grieve ha llegado tarde y no lo castigan porque su papa tiene
plata. 2Vives con él? é
=e) Afurdido, conbenctices
ar potadtnc wn al Sele coy
Neat PH capa.
=Yunque respondio:
—Yo vivo con mi mama.
—2En la casa de Humberto Grieve?
—€s una casa muy bonita. Ahi est
y el patron. Ahi esté mi mama. Yo estoy con mi
mama.
Humberto Grieve, desde su banco del otro lado del
salon, miraba con colera a Paco Yunque y le ensenaba
los pufios porque se dejo llevar ala carpeta de Paco
Farina.
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“Paco Yunque no sabia qué hacer. Le pegaria otra vez el nino
Humberto porque no se quedo con él en su carpeta, Cuando
Idrian del colegio, el nifio Humberto le daria un empujon
| pecho y una patada en la pierna. El nifio Humberto
era malo y pegaba pronto, a cada rato, en la calle, en el
corredor también. Y en la escalera. Y también en la cocina,
delante de su mama y delante de la patrona. Ahora le iba a
pegar porque le estaba ensefiando los pufos y lo miraba con
Qjos blancos. Yunque le dijo a Farifia:
—Me voy a la carpeta del nifio Humberto.
Y Paco Faria le decta: E
—No vayas. No seas zonzo. El sefor te va a castigar.6 aver a Grieve y este le ensehid también a él os purios, refunfuriando a escondidas
del profesor. a
—iSenor! —grit6 Farina—. Ahi, ese Grieve me estd ensefiando los pufos.
El profesor dijo: a
ilencio! ‘Vamos a ver! Vamos a hablar hoy de los peces y después
10S a hacer un ejercicio escrito en una hoja del cuaderno, y después
los daran para verlos. Quiero ver quien hace mejor el ejercicio,
que su nombre sea colocado en e| cuaderno de honor del colegio.
han oido bien?
Los alumnos respondieron en coro:
i, sehor.
—Muy bien —dijo el profesor—. Vamos a ver. Hablaremos ahora de los
peces. La
7 ec WPoemarar, graiieVarios ninos quisieron hablar. El profesor le dijo a uno de los Zumiga que hablase.
—Sefor, —dijo Zumiga— habia en la playa mucha arena. Un dia nos metimos
Ja. arena y encontramos un pez medio vivo y lo llevamos a mi casa. Pero
se murio en el camino...
Humberto Grieve dijo:
—Sefior. yo he cogido muchos peces y los he llevado a mi casa y los he sol
enmisalén y no se mueren nunca.
El profesor pregunté: !
—Pero... 310s deja usted en alguna vasija con agua? EB
—No, senor. Estan sueltos entve los muebles. |
aurTodos los nifios se echaron a reir.
Paco Farina se moria de risa. Los Zumiga también. El chico rubio y gordo, de chaqueta blanca, y
el otro, cara redonda y chaqueta verde, se refan ruidosamente:
i
—iQué Grieve tan divertido! iLos peces en ! iéntve lo
Era'una gran mentira lo que contaba Grieve, oe ai excla
~~ =Ja, ja, ja... iMiente, sefior! Ja, ja, ja... iMentira! iMentiral —
to Grieve se enaj6 porque no crefan lo que contaba. Todos se burlaban de lo que habia
. Pero Grieve recordaba que trajo dos peces a su casa y los solt6 en el salon y ahi
estuvieron varios dias. No estaba seguro si vivieron muchos dias o murieron pronto.
fe de todos modos queria que le creyeran. Le dijo a uno de los Zumiga:
—IClaro! Porque mi papa tiene mucha plata. Y me ha dicho que va a llevar a mi casa todos
los peces del mar. Para que juegue con ellos en mi salon grande.
César Valleyo
(Fragments adaptodo}