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DOMINACION ETNICA Y RACISMO DISCURSIVO EN ESPANA Y AMERICA LATINA Alvernatva aI globalizacién econémica Un eps oro Internacional bre Glbaliaién Cépsulas Mari Bunge Poe qué gente odiaExtados Unidos? ‘Teun A. van Dijk “isin Seay Mer Wy Davies La mena judeotobia lee Ande Tie? Por una causa comin “Bin poral died 'NorberBibeny ‘Cuando la realidad rompe hablar ‘Conjtneycviatanes dea flisafo (©2009 Ten Av Di duce: Mone Batt Dio de abe: Epo Caria Primer en septembre de 2003, Brelons Deseo era as toi econ en atelno (© Bitori Gra, SA Paco Banana, 9-1 (022 Bacco, pts muna Clie elec pigeon ep rege. com 9 94.7002.997-8 Dept np B 3789-2003 peo por Caveat Ca ERipdee In on Bape Pd Sin pct eros pac gor lie meio de presi, ret noc, nena 0 mois en Cela en cng oo Hoe Indice Agradecimientos 5 Prélogo B 1, Raciamo y discurso de élite en Espaiia Introdvecign «2.2... . » Contexts hisricos =. IN at Inmigraionyracimo contemporineos en Espaia ss. 24 Polen sovsicssss a 31 Los medios de comnicacibn 250 Racsmo ene abijo a (Ora formas de racimo dete » Conclusion. a 2. Racism y dscurso de dite on Latinoamérica Inwroduccién . » Discurso de dite y racismo en Latinoamérica 108 une ns Y HMO DANCER Tt a ¥ Anca Lad en ee nee eee ea Racismo diseusivo - 3 Discurso politico 47 Discurso paramentaio mexicano sobre pacbls in 119 Discurso politico y medistico en Argentina... 132 Discurso mediitico en Chile 7 145, Discurso de élite y racismo en Brasil : 156 ‘Otros pases 5 2176 Conclusiones 189 Bibliografia ce 193 Agradecimientos Durante a preparacién de este libro he tenido ayuda y consejos de muchas personas. Agradezco a Luisa Martin Rojo, Antonio Bain y Xavier Torrens la lectura critica y las numerosss su ge= rencias pata el capitulo sobre Expais. Para el capitulo sobre América Latina he recibido cuantiosos, ‘datos, consejos, sugerencia, bibliografia y comentarios criticos de tantos amigos, amigas y colegas que es imposible mencionar- Tosa todos y rods. ‘Agradezco a Corina Courts los ejemplos, la bibliograiay las iscusiones sobre el racismo en Argentina. ‘Maria Eugenia Merino y Berta San Martin leyeron la seccién sobre los periédicos chilenos, y me mandaron correcciones dt les. Giovanni Parodi, Miguel Faria y Guillermo Soto me pro- pporcionaron importantes contactos pata mi investigacién en Chile. De Cecilia Quintrleo aprendi mucho sobre el racismo contra el pueblo mapuche. Falvia Rosemberg hizo algunas observaciones critics impor tantes sobre mi descripcin del racismo en Brasil, y Paulo Bap- tista da Silva no solamente reaizé comentarios sobre la misma seccién, sino que también me mand6 una bibliografia muy Gul eat rch Y MEHNO CURD Bn ER ¥ Audie Laine 1g) Dover roc v strive ncuron rev Annes Laie de tess braslefis sobre racsmo, De Ménica Conrado aprendi mucho sobre racismo en Brasil. Mis agradecimientos por as cat- tas, sugerencias, ejemplos y otras ayudas a Sénia Irene Silva do ‘Carmo, Francisco Gomes de Matos, ime Pinsky, Luiz Antonio ‘Marcushi,Livio Sansone, Enrique Cunha Je, Ana Cétia da Sila, Carlos Vogt, Maria Batista Lima, Jonathan Warren, Maria Céia [Lima-Hernandes, Maria Lcia Mexias, Odi Ramos da Costa, Leda Verdiani Trouni, Vera Menezes y Beatriz Protti Christina Gracias a Adriana Bolivar, en Venezuela, por ss trabajos so bre racismo, y a Ligia Montafiés por sus buenos conejo. ‘como a Chatles Briggs, quien me expicé varios rasgos del racs- ‘mo antindigena en Venezuels Para la informacién sobre racismo en Colombia me ha sido de gran utilidad la deuallada bibliograa sobre afrocolombianot {que me mand6 Eduardo Restrepo, asi como las sugerencias de Jaime Arocha y Consuelo Posada, los comentarios de Peter ‘Wade y la ayuda de Francisco Zuluaga. ‘Tomis Gonzales no solamente me envi6 st tess sobre el ra- «smo en Bolivia, sino que también hizo un valioso comentario cde mis paaes sobre ese pas Alicia Castellanos me mandé sugerencias,bibliografa y co- ‘mentarios sobre Ia seccién mexicana, y Rainer Hamel, Irene Fonte y Teresa Carbé me propiciaron buenos contactor en M&- Seguramente olvido a varias personas de la muchas que ge nnerosamente me ayudaron en América Latina. Aqui, coleciva- ‘mente, quiero mostrar mi agradecimiento a todas ella, como también alas coordinadoras y miembros de los equipor que aho- sestin involucrados en nuestro proyecto sabre discursoy rai ‘mo en varios paises de América Latina, (Quisiera agradecer también a mis colegas dela Universidad Pompeu Fabra, y sobre todo a aquéllas de Is linea de Anslisis del Discurso, su hospitalidad y cooperacién durante los afos que he estado con ellos Finalmente, mil gracias a Flavia Limone, mi mujer, no sola- ‘mente por todo lo que he aprendide con ella sobre Chile y ‘América Latina (asi como sobre tantos otros tem), sino tam~ ‘ign por su amor y por los afios de felicidad y pasién que han sido el contexto de produccién de este libro. A ella dedico este estudio, Prélogo Ete libro fue escrito como estudio complementario de mi obra ~originariamente publicads en inglés en 1993~ Racismo y discu- 10 de as ite (Gedisa, 2003), ya que, desafortunadamente, ta no inclu datos y andlss sobre racismo y etnicismo en Espaia y Latinoamérica, Por eso estoy contento de que Gedisa haya acep- tado publicar también el presente estudio, que permite 210s es- tudiants investigadoresesptiolesy atinoamericanos acceder a ‘mis contribuciones mis recientes en el imbito de los estudios sobre racismo también en sus propios pases. Etat contribuciones son muy modestas y me remito a los muchos studios citados en la bibliografia, donde los lectores en contrarin mis informaciones y referencias a otras investigacio- nes. Para Espaiay, desde luego, especialmente para los muchos paises latinoamericanos serfan necesarias muchas mis investiga~ cones de numerosos equipos para poder comenzara entender la ‘complejidad dela dominacién étnica y rail y la dsigualdad en ‘el mundo iberoamericano. Lo que espero seré una contribuci6n nueva en este breve tudio ¢ el examen ~ahora también para Espa y Latinoaméri- ca~ de algunas relaciones entre etnicsmo y racismo por un lado, 4_Domacién trav meso oscunsv it Enh ¥ Andes Lara ¥ por el otro, del discurso, del uso del lenguaje y de Ia comuni- cacién. Aunque los prejuciose ideologas racists se adoptan en ¢gran medida del discurso piblico y a pea de que el propio dit- curso racist es una forma de discriminacién y parte dl sistema de desigualdad étnica y racial, en la mayoria de los estudiospsi- colbgicosy sociolégicos sobre racismo casi siempre se pas6 por alto el dscurso. Por eso espero que esta investigacién limitadaestimule a los estudiantes invesigadoresespaolesy ltinosmericanos en hu ‘manidades y ciencia sociales a emprender investgaciones mu cho mis detalladas en los diferentes paises y sobre las dstintas formas de discurso y de insttuciones sociales. Hay aqui suge- rencias para centenares de monografis, tess dactorale yartcu~ los, por ejemplo, sobre debates parlamentarios, programas y pro- paganda de partidos y otras formas del dscurso politico, sobre informativos, talk shous, peliculas y publicidad en television, in- formacionesy aticulos de opinién de la prensa periédica, libros de texto escolaes¢ investigaciones cieniicas, sobre novels, te- lenovela y otros géneros de fiecién y literatura, sobre conversa~ ciones cotidianas, dilogos en organizaciones ¢ insttuciones y muchos otros tipos de discurso en los que el racismo se exprest 'y reproduce a diario en los diferentes paises, stuaciones socia- lesyy conta los mis diversos grupos énicos. Puesto que las pocas observaciones en este libro sobre Lati- rnoamérica son obviamente insuficientes para dar cuenta de las muchas formas de desigualdad étnica y racial en los divertos paises Iatinoamericanos, entretanto he tomado la iniciatva de promover un proyecto internacional con equipos ubicados en ‘América Latina que trabajarin sobre discurso racismo en sus respectvos paises. Espero que pronto estemos en condiciones de publicar los resultados de esta investgacin colectiva en for~ sa de libro, Después de haber ejercido la docencia durante mis de 25 aftos en la mayoria de os paises ltinoamericanosy resiiendo en rtnoco 5 Espatia desde hace cuatro aiios, no me considero un observador ¥yertico externo al situacin nica y racial del mundo iberoa- tmericano, Al contratio, se tata de un estudio crtico de «nuestra propia» sociedad, es decir, de una sociedad en la que me he sen fido mis en eas y donde tengo muchos mis amigos que en mi pais natal. De todos modos, esta sociedad enuestrae también es tuna sociedad en la que, desgraciadament, ha prevalecido duran te sglos el (euro) raciemo «blanco», como también ocusre en el resto de Europa y en Norteamérica. En ots palabras, me ocu~ ppo de un problema may general y fundamental, un problema ‘que no se limita a Espa y Latinoamérica, aunque sus formas ‘arian evidentemente de un pa 3 oto. Espero que est y otros estudiossucesivos me permitan unir— sme y apoyat a aquellos investigadores en Espatiay Latinoaméri- ca ~y también a todos los otros de las propias comunidades de ‘minorias o inmigrante:~ que luchan expliciamente con sus ideas, obra yacciones contra la dominacién éenicay el racismo. En eite libro no comentamos con detalle la teoria del racs ‘mo ni los métodos de anilisis del discurso y los estudios sobre raciamo diseursivo en otros palses. Refiero par ello a mis otras publicaciones, algunas citadas en Ia bibiogealia, al final de este bro, Los que desean hacer comentarios o sugerencias sobre este lis bro pueden enviarme su mensaje ala siguiente direccin del co- treo electrénico: vandijk@dicourse-insociery.org. Para mis informaciones sobre mis invstigaciones, publ ciones y otros trabajos sobre anlisis del dscurso, por for visi- ten mi pigina web www.discourse-in-societyor Barcelona, 1 de julio 2003, ‘Teun A. wan Di 1 Racismo y discurso de élite en Espatia Introducci6n ‘Aunque una buena parte del racismo en América Latina tiene sus races histérias en el colonialismo y en la conguita, la desi- jualdad étnica la dominacién actuals en Espafa y América {Latina son tan distineas que precisan ser tratadae en capitulo se- parados. rasta ahora, mi investigacién sobre el racismo en Espaita ha sido limitada, por lo que voy a apoyarme en los estdios acadé- rmicos y ls experiencias personales de otros. No obstante, na gran parte de este material no se relacionaespecificamente con el dicurso, sino que se trata de documentos sobre el racismo en general, de modo que deberé deducir qué propiedades dixcursi- vas pueden desprenderse de estas formas de racismo (véate las referencias a continuacion). Ademis de estos brevesresimenes de investgaciones anteriores, presentaré algunos nuevos ansli- ss de datos obtenidos de diseursos. Aunque la mayor parte de los studios sobre inmigracisn y racsmo en Espafa sean socil6gi- cos, existe en la actualidad un nimero creciente de estudios 3o- bre el discurso que pueden aporta anlisis e informaciones mis deulldos de los que pueda offecer este capitulo (véase, por «ejemplo, Martin Rojo, Gémez Esteba, Arranz Lozano y Gabi- Tondo Pujol, 1994; Bain Hernindez, 1996, 2002: para una puesta al dia de referencias puede consularse Bain Hernindez, 2002). Por ta parte, un nico capitulo slo puede offecer una informacin limiada sobte el racism discursivo de élite en to- os los Ambitos de la sociedad, ‘A fin de organizar In ingente cantidad de datos recabados en este capitulo, sepin la investigacin levada a cabo por otros ade~ mis de mis observaciones propia, pot lo que respect al racismo en Espatia se pueden formulae deude un principio las tendencias _peneraes siguientes: *+ Como en otras partes de Europa, son vatios los tpos de a= cismo de lite que estin en auge en Espaia, a pesar de no exis partidos racisas de extrema derecha. El racsmo en Espaita es complejo y esti cambiando ri ddamente,debido especialmente a ls consecuencias de los cambios socioeconémicos que han convertido Espafia en tun pais de inmigracién después de haber sido un pais de cemigracion durante silos, ‘+ Como en otras partes de Europa, ef auge del racismo se re- laciona con el aumento de poder de los partidos conserva ores, en Espaiaconcretamente representado por el Parti do Popular (PP), con Aznat como presidente y con una ‘mayorfapalamentariaabsoluta desde las itimas elecciones en el ato 2000, + La inmigracin en Espaia ha cambiado ripidamente, pa sando de ser un fendmeno menot an proceso social, Po- litco y cultural mucho mis relevant, que precisa de pro~ fandos cambios tanto en su politica de inmigraci6n como de integracin, por ejemplo en los émbitos de la cultura, a lengua y la eligi, Rucao cum De TEM MARA, mn Contextos histéricos Las modilidades del racismo actual en Espafa no constituyen un fendmeno nuevo que deba estadiarse en el mareo mis amplio de tuna Europa que, desde la posguerra, empez6 a reaccionar contra lot inmigrantes del Sur, En Espa las propiedades de uno de estos racismos deriva de la concienciahistrica de haber sido la ‘muralla sur de la fortaleza europea fente alas simvasiones abes ‘© musulmanas que no tiene relcién alguna con el racismo an- tafticano mis reciente o con el racismo contra lo atinoameri- Existen, ademas, otras extructuras y procesos histricos que explican la coherencia de los diversosracismos contemporineos en Espaita y en Europa. No es por azar que algunos de estot ‘procesos tengan sus origenes en Ia Expafia del siglo xv. El eato- licismo intolerant, la conquista colonial y la Reconquista in- Aayeron entre si y se reforzaron mucuamente en Ia incipiente ddominacién de los espatles y europeos sobre érabes, judios, gitano, indi americanos y subaharianor, que fueron subordi- fnados y marginados lo mismo que sus descendientes en las Ami xa es la compleja dimensim hittrica de racismo en Espa fia que, por motivos de espacio, no podeé precisar en detalle. Recordemos que hace solamente diez afos, Espa celebraba el 500 aniversario del «descubrimientos de América por Colén, evento que a a sazén conformé los cimientos del racismo en Latinoamérica y que trataremos en el siguiente capitulo, ala vez que el 500 aniversrio de I expulsin de lor emoroes de Espaia, ‘cuando los Reyes Catélicos tomaron Granada, el sltimo basin frabe después de 700 afios de ocupacion de buena parte de la peninsula, Con lo cual 1492 marca el final y el principio de una era de encuentros éticos o «racials» com lot eotrose,cuyos efectos di ‘aderos han influido notablemente sobre la conciencia colectiva ‘expafiola, Los silos de colonialismo expafiol han dejado su hue~ Iz en las actitudes racists de los colonizadores y de su descen- = Fania ai como un puesto de control pars todos os sistemas, sup son sto, yu tealizado, de 2.074 millones de psetas, el 64 por ‘lento del cual ha sido Snanciado por los fondos Fede. En In ac~ Racin ¥ Decanter Ee 7 tualdad se estén eealizando obras en Ceuta para conseguir imp meabilizar la fonter e imped el paso de personas y mercanciss, de caricer legal (Mayor Ores, pigs. 10.716-17, 18-12-1997) tro tépico que Martin Rojo ha encontrado en el diseurto politico conservador es el tema del trifico de inmigrantes, el cual se prestafiilmente a la asociacion de la inmigracién con actividades ilegales, y donde, por consiguiente, se culpa una vez amis als vietimas Los responsables de estas muerte son los que tian con Is vida de ess persons, fndamentalmente,y lor que esti ongeni> zando ese rfc ileal de persona y, dee lego, el Gobierno de spat hari todo lo que tenga que hacer (Arenas Bocanegra, P, ig. 5.203, 2409-1997), A partir desu anlsis, Martin Rojo lega a Ja conclusign de que, a pesar de centrase en el control y en la asociacin de la inmigracién con actividades ilegales, el discurso conservador de quel momento no era explicitamente racist, El PP tiene buen cuidado en no formular poscionamientos que pudieran recordar cl pasado falangista de algunos de sus fundadores y miembros y se asegura de no adoptar porturs relacionadas con el racism, ‘Sean cuales fueren las medidas adopeadas y aplicadss para conto= Jarl inmigracin, se hace mencién explicita de su relacién con Jn antigua ley de inmigracién aprobada por el PSOE. Tanto la derecha como la inquierda en sus respectivosdiscurts politicos, ‘no tiizan ciertas metiforss como savalancha»u woleadaeasocia- das al peligro de trombas de agua como es habitual en otro pai- ses para referirse ala inmigracion, sino que sesuele elegr Ia p2~ Jabra flujo» que resulta mucho menos negativa. También es cierto que el léxico aplicado alos sotros¢ es mis moderado que em otras partes; las palabras empleadas con mayor frecuencia para referrse a ellos son sinmigrantese,eextranjeros,epersonasse n= jg Dotan nach veo cin AA AEA LAM,

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