ENTRE FUTURO Y
PROGRESO
PATRICIO DEL REAL os icenciado en
Artes y Ciencias por la Uriversidad de
Washington en St, Louis, magister en
‘Arquitectura por la Universidad oe Har
vard, y obtuve el doctoraco en Filosofia
or a Universidad de Columbia, Nue
York, com la tesis “Bulling 8 Continent:
The idea of Latin American Architecture
In the early postwar’
Investiga sobre ia arqitectura
maxiema de América Latina y sus co-
nexiones con insttuciones cutuales de
PATRICIO DEL REAL
Estados Unidos, yescrbe sobre tomas
relacionados con la poitica dela pos-
ueray la arguitectura, la historiografia
de la modemidad y la postica del espa
cio, Es asistante curatorial del MoMA en
Nuova York, fue cocurador dela muestra
‘Latin Ameria in Construction: Arehtes=
ture 1855-1980", y actualmente trabais
en un bro sobre as exposiciones rala-
tivas ala arquitectura en América Latina
que se decarrollaron en ol museo.167
No debe sorprender que la exposicin “Latin America in Construction: Architecture
1955-1980” se inicie con la ecuacién del desarrollo de Carlos Gomez Gavazzo, pues
cesta extraordinaria obra, entre maquina caleuladora y artefacto jerogltico, presenta
cabalmente la vitalidad, el optimismo y el impetu creativo de los arquitectos lati-
‘noamericanos durante el period del desarrollismo, lo que es uno de los propositos
fundamentales dela exposicién. Este enigmético artefacto de Gomez, enmarcado junto
ala propuesta de Paulo Mendes da Rocha para el puerto industrial de Tieté en Brasil,
revela la fe en el progreso como una de las caracteristicas de los arquitectos del periodo
y presenta el futuro como escenario fundamental del arte de proyectar, En el caso de
Geez, este se manifiesta como un futuro complejo, casi enigmético, pero a la vez
cuantificable y por ende posible
La importante vanguardia arquitectonica uruguaya hace acto de presencia en Ia
primera galeria de la exposicién, “A Region in Motion” (“Una region en movimien-
to”), propuesta a modo de predmbulo que deja en evidencia cémo la arquitectura
moderna tiene una rica y larga historia en América Latina. La arquitectura de esta
vanguardia, presentada de forma sintética con el Hospital de Clinicas de Carlos Su-
rraco, el plan de Punta del Este de Gémez Gavazzo y con una copiosa compilacion
de filmes del perfodo sobre el desarrollo de Montevideo, nos recuerdan el juego de
escalas entre intervenciones arquitect6nicas y urbanas, el cosmopolitisimo de los
arquitectos racionalistas uruguayos, y cémo la arquitectura moderna que se desa-
rrollé a principio del siglo XX, principalmente en Montevideo, fue parte de una
‘modernizacién promovida por el Estado. Este temprano repertorio arquitectonico,
junto con las propuestas de Juan O'Gorman en México, sitve en la exposicién para
darle profundidad historica a la relacién de la arquitectura moderna con el Estado
desarrollista en América Latina.
El sorprendente impacto de la arquitectura brasilefia, la cual sent6 nuevos rum-
bos para la arquitectura mundial a mediados de siglo, sirvi6 para fomentar nuevas
propuestas espaciales y estructurales que vemos ensayadas en el Uruguay. El elegante
Edificio Panamericano de Rail Sichero, por ejemplo, con sus vigorosos pilots en
forma de “V", pone de manifesto la internacionalizacién dela arquitectura brasi-
lefia. Apoyado en un cabal profesionalismo, Sichero desarrolla, en un edificio-barra
destinado a vivienda, experimentaciones estructurales y formales en hormigén que
sustentaban a su ver las nuevas abstracciones de! muro cortina del International Style
de la segunda posguerra. Es en esta compleja relacién y participacion en una conver
sacién internacional en las que tecnologias como el muro cortina no se utilizan como
simples ready-mades, sino como detonantes de un modo de imaginacion y de wns
labor proyectual que sinteti2an miltiples corrientes y las afirman localmente. En este
sentido, la exposici6n presenta las refinadas construcciones de Luis Garcia Pardo,
‘como lo son los edificios Positano y El Pilar. Este intenso didlogo también da sus fro-
tos en las propuestas para el concurso del Edificio Peugeot en Buenos Aires. Apors-
dos en una sélida disciplina que gestiona con vigor formal una nueva dimension pars
la ciudad—véase la propuesta original del Panamericano—y a caballo de los comple-
jos sistemas de propaganda internacionalizacién de una posguerca liderads por Is168
hegemonia del mercado estadounidense, en este concurso los arquitectos uruguayos
‘demuestran una audacia formal y experimental sin paralelo, con formas novedosas
‘que se distancian decisivamente del escenario brasilefio y abren nuevos caminos.
Las propuestas de Garcia Pardoy Alfredo Nebel con su rascacielos contorsionado,
Enrique Monestier con su dindrica torre de volimenes desplazados y Estudio Cinco
con sus tres torres que generan un impactante vacfo central, constituyeron originales
‘aportes no ensayados hasta hoy. La pujante voracidad por crear un futuro posible =
través de formas nos recuerda la capacidad de la arquitectura para gestionar nuevas
tecnologias constructivas.
‘Asilo-vimos en a singular obra de Nelson Bayardo, el urnatio para el Cementerio del
Norte, que presenta nuevamente la cercania de lo mejor de la arquivectura brasilena y
la extraordinaria Escuela de Arquitectura y Urbanismo de San Pablo, Brasil, fundads
por Jodo Vilanova-Artgas, Esta evocativa relacin se pone en escena en la exposicion
al relacionar sendas maquetas de dichas obras, dejando en evidencia cuestionamien~
tos formales y estructurales comunes y que también se manifiestan en obras como la
CEPAL del chileno Emilio Duhat, con sus pilares piramidales sobre los cuales flota el
anillo de oficinas. La propuesta del urnario va mas alld de la evidente afinidad formal @
festructural con la obra de Artigas, pues la caja de hormigén que flora sobre una suave
colina en el Cementerio deviene una de las operaciones paisajisticas més complejas y
refinadas de las obras presentadis en la exposicin, dejando en evidencia la elegancia
formal y contextual del brutalismo Iatinoamericano. Vemos de este modo una afirma-
cién local de tendencias generaes.
Eladio Dieste marcé un importantisimo contrarcitmo en la manifesta tendencia hacia
Ja industrializacién y la creciente escala de las obras y propuestas del periodo. Las
iglesias de Atlantida y Durazno hicieron patente el virtuosismo de una tecnologia
discreta, Su casa, presentada en la galeria “At Home with the Architect” (“En casa
con el arquitecto”), que mostraba casas de arquitectos disefiadas para ellos mismos,
revela la dimensién critica de Dieste pues es alli donde mejor articula una contra
propuesta al tema fundamental de la arquitectura moderna: el espacio abierto y
uido. En su habitar, Dieste crea un complejo paisaje de intimidades ambientales que
resiscen las vertiginosas circulaciones propias de la modernizacion y recupera, como
€l mismo dijo, “la ancestral sensacién de abrigo” demolida por la creciente moderni-
zacién, Con similares preocupaciones propone Payssé Reyes sus cuantiosos estudios
para la fachada del Seminario Arquidiocesano, que dieron vigencia a la preocupacion
por erear formas y espacios que se comuniquen con la interioridad del ser humano,
rmarcando asi una postura critiza ante la idea del progreso sin abandonar la afitma
cién sobre el futuro.
Las posibilidades de sintesis formal y constructiva dentro de la responsabilidad so-
cial del arquitecto presentes en cl Complejo Bulevar Artigas disefiado por Bascans,
Sprechmann, Viglieca y Villaamil fue una verdadera revelacién; alli vemos c6mo,
ide manera indirecta, las dindmicas mallas abstractas de la méquina de Gémez
Gavazzo se despliegan en el espacio urbano para acoger y dar forma al vivir diario
a través del complejisimo tema de la vivienda, La extraordinaria propuesta social
ddel modelo de las cooperativas de vivienda sirvi6 como un importante contrapunto
para el mas conocido ¥ celebrado Proyecto Experimental de Vivienda (PREVI) en
Lima, Peri. El desarrollo de una arquitectura social y activista de autoconstruc-
1a por Miguel Cecilio, Sadi Irureta y Mario Spallanzani, conjuntamente con el
movimiento cooperativista, marcaron una transicién fundamental en el problema
de la vivienda, que pas6 de ser un tema elaborado por la burocracia del Estado169
esarrollista a uno de participacién social. Fste desarrollo y cambio de registro fae
presentado en el “Housing Wall” (*Muro de la vivienda”) de la sala principal de la
texposici6n, acompaiiado de tna eronologia que rescataba los hitos politicos mas
televantes del periodo.
Con el Unitor de Justino Serralta inaugurando la tiltima sala de la exposicidn, llamada
‘eaparece la densa trama de ideas y formas manifiestas en la ecuaciOn del de-