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Quimica Teorica y Computacional Juan Beltran PDF
Quimica Teorica y Computacional Juan Beltran PDF
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QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
BIBLIOTECA DE LA UNIVERSITÄT JAUME I. Dades catalogràfiques
ISBN: 978-84-15443-27-8
84-8021-312-4
DOI: http://dx.doi.org/10.6035/CienciesExperimentals.2000.2
Dipòsit legal: CS-539-2000
V
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
PRÓLOGO
VII
En el primer capítulo se presentan los fundamentos de la química teórica, tanto
los de mecánica cuántica como los de mecánica estadística, poniéndose especial
énfasis en la formulación matemática. En el segundo se exponen los métodos de la
química cuántica, insistiéndose particularmente en los métodos post Hartree-Fock y
en la teoría del funcional de la densidad. En el tercer capítulo se hace una iniciación
a la programación científica. El objetivo de este primer bloque es establecer unas
sólidas bases en química teórica, mientras que el objetivo de los capítulos restantes
es ilustrar algunas de las posibles aplicaciones químicas.
En cada uno de los siguientes capítulos, antes de exponer una determinada apli
cación, se desarrollan los métodos adecuados para su tratamiento. Las propiedades
de los sólidos y de las superficies, así como su participación en la catálisis heterogé
nea, se estudian en el capítulo cuarto. A la dinámica de las reacciones químicas se le
dedican dos capítulos. En el quinto se presentan los tratamientos de dinámica mole
cular y en el sexto la teoría del estado de transición. Los dos capítulos siguientes se
refieren a la espectroscopia, mereciendo especial atención los estados vibracionales
altamente excitados en el séptimo y los estados electrónicos excitados en el octavo.
Finalmente, se dedica el último capítulo a la modelización molecular, prestándose
especial atención a los fenómenos de solvatación y a la catálisis enzimàtica.
Los químicos teóricos de este país tienen una elevada presencia en todos los
campos de la química. Los diferentes grupos gozan de un gran prestigio interna
cional y publican regularmente en las revistas de mayor índice de impacto. Sin
embargo, no se ha pretendido, en este libro y en el curso intensivo impartido, explo
rar toda la riqueza de las aplicaciones computacionales, sino ilustrar con algunos
ejemplos que la química teórica es auténtica química. Más aún, se ha pretendido
mostrar que la química teórica es uno de los motores fundamentales en diferentes
campos de la química. Como decía la Academia de Ciencias Sueca al otorgar el pre
mio Nobel de Química de 1998 a W. Kohn y J. A. Pople «la química ha dejado de
ser una ciencia puramente experimental». Por ello, un químico que no domine la
química computacional no responde al perfil de un químico del siglo xxi.
Si siempre ha sido verdad la frase del reciente premio Príncipe de Asturias,
Umberto Eco, en El nombre de la rosa, de que «los libros no están hechos para ser
creídos sino para ser discutidos», más cierto lo es en el caso de un libro que pre
tende ser una iniciación a la investigación. El propósito fundamental de este libro es
suscitar un diálogo, una discusión, que permita a los jóvenes investigadores ensan
char las fronteras del conocimiento.
No quisiéramos terminar sin expresar nuestro profundo agradecimiento a BAN-
CAIXA, Fundació Caixa Castello, por haber financiado la edición de este libro. Los
autores y editores de este libro confiamos que sea útil no sólo a los que cursan el
programa de doctorado de «química teórica y computacional», sino también para
todos los especialistas en este campo.
Los editores
VIII
SOBRE LOS AUTORES
IX
Miquel Solá, nació en Fonteta (Girona) el año 1964. Se formó como químico en
la Universidad Autónoma de Barcelona en la que se licenció en el año 1986 consi
guiendo el Premio Extraordinario de Licenciatura. Su Tesis Doctoral, realizada en
la misma Universidad y dirigida por los Profesores Juan Bertrán y Agustí Lledós,
obtuvo el Premio Extraordinario de Doctorado y el Premio Sant Albert concedido
por el Colegio de Químicos de Cataluña. Después de trabajar durante unos meses
como consultor informático en una compañía privada, en 1993 ingresó como técni
co de investigación en la Universidad de Girona. En 1994 y 1995 realizó estancias
postdoctorales en los laboratorios de los Profesores Evert Jan Baerends en
Amsterdam y Tom Ziegler en Calgary. En 1997 consiguió una plaza de Profesor
Titular en la Universidad de Girona. Su investigación se ha centrado en el estudio
teórico de mecanismos de reacción y en el uso de medidas de semejanza molecular
cuántica para el análisis de densidades moleculares.
X
interés en Astroquímica. Entre sus aficiones destacan la lectura, diversas activida
des deportivas (tenis, baloncesto, bicicleta, etc.) y disfrutar con sus dos hijos.
Josep Manel Rícart Pía, nació en Lleida (1958), estudió, se licenció (1981) y
doctoró (1985) en Química en la Universidad de Barcelona, donde inició su actividad
docente e investigadora. Sus primeros trabajos consistieron en el estudio estructural
de biomoléculas y en el desarrollo de un método semiempírico dentro del formalis
mo de la teoría de bandas. Actualmente es Profesor Titular del Departamento de
Química Física e Inorgánica de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona y vice
decano de la Facultad de Química. Ha realizado diversas estancias en Torino, Milano,
Toulouse y París. Sus intereses científicos actuales se centran en el estudio teórico de
superficies, utilizando modelos de cluster, y la adsorción de moléculas, analizando el
enlace y su reactividad como etapas relevantes en catálisis heterogénea. Casado y
padre de dos hijos, enamorado de su familia, es aficionado a la música, la montaña, la
informática y al bricolage. Le gustaría disponer de más tiempo libre.
José María Alvariño. Fue Profesor Titular en la Universidad del País Vasco
(1972-1984) y en la Universidad de Salamanca (1984-1990). Actualmente es
Catedrático de Química Física en la Universidad de Salamanca desde 1990. Realizó
estancias postdoctorales en la Universidad de Mainz (1970-1971), Universidad de
Freiburg (1978-1979), Universidad de Perugia (1988, 1991, 1996). Sus líneas de
investigación comprenden el estudio de las superficies de energía potencial para
reacciones químicas y la dinámica de las reacciones elementales. Sus aficiones son
la lectura (poesía y novela), visitas (museos, arquitectura románica y barroca),
exposiciones (pintura y escultura) y escuchar música (opera y jazz).
XI
Gobierno de la UAB entre 1992 y 1996. Ha dirigido 15 tesis doctorales y 20 “tesi
nas” ya defendidas. Ha publicado hasta ahora más de 150 trabajos de investigación
en el campo de la Química Teórica. Campo actual de investigación: Dinámica y
mecanismos de las reacciones químicas, con especial atención a los fenómenos
cuánticos asociados a los movimientos nucleares, las transferencias protónicas
fotoinducidas, las reacciones de la química atmosférica y las reacciones enzimáti-
cas. Actualmente (2000) es el coordinador de la “Xarxa temàtica de Química
Teòrica de Catalunya” y el Delegado del Rector para asuntos académicos y Centros
Adscritos de la UAB. Aficiones principales: la lectura y la práctica de los deportes,
muy especialmente del atletismo.
XII
grado de doctor con la presentación de su Tesis Doctoral que fue dirigida por el
Profesor Juan Bertrán. Realizó estancias postdoctorales (1984-1985) en las
Universidades de Nancy y Toulouse (Francia) bajo la dirección de los Profesores
Jean-Louis Rivail y Jean-Claude Barthelat, respectivamente. En 1987 obtuvo una
plaza de Profesor Titular de Química Física en la Universidad de Sevilla. Con pos
terioridad ha realizado diversas estancias de investigación en diferentes
Universidades europeas (Salónica, Eindhoven, Oxford), así como en Fuentes de
Radiación Sincrotrón (SRS-Daresbury, LURE-Orsay, ESRF-Grenoble). Sus líneas
de trabajo se han centrado en el estudio teórico por medios cuánticos y estadísticos
de disoluciones, particularmente iónicas, asi como en la medida de éstas por medio
de Espectroscopias de Absorción de Rayos X. Ha recibido el premio de investiga
ción de la “Real Academia de Ciencias de Sevilla”. En la actualidad es Catedrático
de Química Física en la Universidad de Sevilla (2000). Algunas de sus aficiones son
la práctica de carreras de medio fondo por el Parque de María Luisa, la cría de cana
rios “gloster”, y el gregoriano y la musica barroca.
XIII
ÍNDICE
CAPÍTULO 1. FUNDAMENTOS
(L Nebot-Gil y J. M. Ugalde)
XV
1.2.1 Producto interno y ortogonalidad de funciones....................................... 13
1.2.1.1 Series de Fourier.............................................................................13
1.2.2 Expansión en términos de funciones ortonorm ales................................ 14
1.2.3 Relación entre funciones y v ecto res.........................................................15
1.2.4 Funciones propias ......................................................................................15
1.2.5 Conjuntos de bases ortonormales. Algunas funciones especiales.......... 15
1.2.6 Operadores locales, no locales, Hermíticos, normales, de
proyección y de p a rid a d .............................................................................16
1.2.6.1 Operadores locales y no locales .................................................. 16
1.2.6.2 Operadores Hermíticos, anti hermíticos ynormales .................. 16
1.2.6.3 Operadores de proyección ........................................................... 18
1.2.6.4 Operador de paridad ....................................................................19
XVI
1.4 M omento angular. El e s p ín ................................................................... ............27
1.4.1 Operadores asociados al momento an g u lar..............................................27
1.4.2 Relaciones de conmutación entre los operadores del
momento an g u la r................................................. .......................................27
1.4.2.1 Conmutadores entre componentes del momento angular.......... 27
1.4.2.2 Conmutadores entre cada una de las componentes
del momento angular y L2 ..............................................................28
1.4.2.3 Conmutadores entre las componentes del momento
angular y é s t e ..................................................................................28
1.4.3 Valores propios del momento angular.......................................................29
1.4.3.1 Operadores escalera .......................................................................29
1.4.3.2 Algunas relaciones útiles entre los operadores
escalera y de éstos con los del momento angular........................29
1.4.3.3 Valores propios del momento a n g u la r......................................... 29
1.4.4 Funciones propias del momento angular...................................... ............ 31
1.4.5 El e s p ín ........................................................................................................32
1.4.6 Acoplamiento de momentos an g u lares.....................................................33
1.4.7 Conservación del momento a n g u la r......................................................... 34
XVII
1.6.2 Aproximación de Born-Oppenheimer......................................................42
1.6.3 Superficies adiabáticas y diabáticas ........................................................ 44
1.6.4 Funciones de onda para sistemas polielectrónicos ............................... 44
1.6.5 Principio de antisimetría ........................... ...............................................45
1.6.6 Aproximación o rb ita l................................................................................ 45
1.6.7 Determinantes de Slater ..........................................................................46
1.6.7.1 Productos de Hartree ................................................................... 46
1.6.7.2 Determinante de Slater ..................................................................47
1.6.8 Expansión de la función de estado exacta. F C I ...................................... 48
1.6.9 Configuraciones adaptadas de e s p ín ........................................................ 48
1.6.9.1 Determinantes restringidosy no restringidos......... .................... 48
1.6.9.2 Configuraciones adaptadas de espín ............................................ 48
XVIII
1.8 Introducción a la Mecánica E s ta d ís tic a ........................................................55
1.8.1 Introducción................................................................................................. 55
1.8.2 La construcción de la Termodinámica .................................................... 56
1.8.2.1 La primera L e y .............................................................................. 56
1.8.2.2 La segunda Ley ............................................................................56
1.8.2.3 La formulación variacionalde la segunda Ley ...........................57
1.8.2.4 Funciones auxiliares. Transformada de Legendre ..................... 58
1.8.2.5 Ecuaciones de Maxwell ............................................................... 59
1.8.2.6 La ecuación de Gibbs-Duhem.............................. .......................60
1.8.2.7 Equilibrio y estabilidad.............................................................. .61
1.8.2.8 Equilibrio m ultifásico.................................................................... 61
1.8.2.9 E stabilidad..................................................................................... 62
1.8.3 Mecánica E stadística.......................................................... .......................63
1.8.3.1 Colectivos........................................................................................ 63
1.8.3.2 Colectivo Microcanónico ............................................................. 64
1.8.3.3 Colectivo Canónico ...................................................................... 65
1.8.3.4 Conjunto grand-canónico ............................................................. 68
1.8.4 Sistemas de partículas que no interaccionan entre s í .............................. 68
1.8.4.1 El gas de fotones ...........................................................................69
1.8.4.2 Gas de fo n o n es..................................................................... .. .70
1.8.4.3 B o so n e s..........................................................................................70
1.8.4.4 Fermiones................................................. .......................................71
1.8.4.5 Electrones en m e tale s.................................................................... 71
1.8.5 Método de Monte C a rio ............................................................ ................72
1.8.5.1 Propiedades promedio ......... ......................................... .............. 73
1.8.5.2 Trayectorias Monte C a r io ............................................................. 73
1.8.5.3 La estrategia Monte C ario ............................................................. 74
1.8.5.4 Umbrella sam pling..........................................................................\ .77
XIX
CAPÍTULO 2. MÉTODOS DE LA QUÍMICA CUÁNTICA
(R. Caballol y M. Solá)
XX
23.2.2 Correcciones a la energía y a la función .....................................98
23.2.3 Separabilidad de las correcciones..............................................100
23.2.4 Partición M0ller-Plesset ............................................................. 102
2.3.3 La aproximación Coupled Cluster ......................................................... 103
2.3.3.1 Estructura exponencial de la función de o n d a .......................... 103
2.3.3.2 Separabilidad de la función C C .................................................. 105
2.3.3.3 Aproximación CCSD ..................................................................105
XXI
2.4.6.2 Aproximación de la densidad de espín local (LSDA) ............ 134
2.4.6.3 Correcciones de gradiente generalizado a la energía
de correlación-intercambio (G G A )........................................... 135
2.4.6.4 La conexión adiabática. Métodos híbridos .................................138
2.4.6.S. Ventajas e inconvenientes de la teoría del funcional
de la densidad .............................................................................140
XXII
3.3.10 Lectura y escritura con fo rm ato ................................................. 161
3.3.11 Lectura y escritura empleando ficheros en disco .....................164
3.3.12 Programas principales y subprogramas .....................................165
3.3.13 Librerías de subrutinas y funciones ........................................... 169
XXIII
3.63.2 Método del gradiente ..................................................................195
3.Ó.3.3 Método de Newton-Raphson....................................................... 196
3.6.4 Optimización de funciones devarias variab les.....................................198
3.6.4.1 Método S im plex................................................... ....................... 199
3.6.4.2 Métodos basados en el gradiente y el Hessiano ..................... 200
3.6.4.3 Simulated an n ealin g .....................................................................201
XXIV
4.2.3 Modelos periódicos .................................................................................225
4.2.3.1 Conceptos básicos de cristalografía........................................... 225
4.2.3.2 Teorema de B lo c h ........................................................................228
4.2.3.3 Modelo del gas de electrones .................................................... 231
4.2.3.4 Método de Hückel aplicado a un polieno c íc lic o ................... 235
4.2.3.5 Método de Extended Hückel p erió d ico .................................... 238
4.2.3.6 Método Hartree-Fock periódico ............................................... 244
4.2.3.7 Métodos periódicos que utilizan ondas planas
y el formalismo del funcional de la densidad ......................... 249
B ib liografía.............................................................................................................278
XXV
CAPÍTULO 5. DINÁMICA
DE LAS REACCIONES QUÍMICAS I
(J. M. Alvariño)
B ib liografía.............................................................................. ................................310
XXVI
6.2 Teoría variacional del estado de tra n sició n ............................................... 330
6.2.1 Coordenadas cartesianas ponderadas ....................................................330
6.2.2 Camino de reacción de mínima energía ............................................ .331
6.2.3 Estados de transición generalizados...................................................... 333
6.2.4 Cálculo de la constante de velocidad canónica variacional................ 336
6.2.5 Algoritmo R O D S ..................................................................................... 342
B ibliografía..............................................................................................................347
B ib liografía.............................................................................................................. 376
XXVII
CAPÍTULO 8. ESPECTROSCOPÍAII:
INTRODUCCIÓN AL CÁLCULO TEÓRICO DE
ESTADOS EXCITADOS ELECTRÓNICOS MEDIANTE
MÉTODOS MULTICONFIGURACIONALES
(M. Merchán)
8.4 C uestiones..........................................................................................................388
XXVIII
8.12 Cálculo de los momentos de transición y de la fuerza-del
oscilador ..................................................................................... .402
XXIX
9.2.1 Bases de la mecánica m olecular.............................................................427
9.2.2 Clasificación de los campos de fuerza ..................................................428
9.2.3 Campos de fuerza experimentales ........................................................ 429
9.2.3.1 MM3 (Molecular Mechanics 3) ............................................... 429
9.2.3.2 AMBER (Assiled Model Building and Energy Refinement) .439
9.2.3.3 OPLS (Optimized Potential for Liquid Sim ulations)........... .441
9.2.3.4 CHARMM (Chemistry at HARvard
Macromolecular Mechanics ...................................................... 442
9.2.3.5 MM4 (Molecular Mechanics 4) ............................................... 442
9.2.4 Campos de fuerza universales ............................................................... 443
9.2.4.1 D reiding........................................................................................444
9.2.5 Campos de fuerza mecano-cuánticos .................................................... 445
9.2.5.1 QMFF (Quantum Mechanical Force F ie ld )..............................446
9.2.5.2 CFF93 (Consistent Force Field 9 3 ) ........................................... 447
9.2.6 MMFF94 (Merck Molecular Force Field 94) .......................................447
9.2.7 Conclusiones. Aplicaciones y limitaciones de los
campos de fu e rz a ......................................................................................449
XXX
9A.2.2 Aproximación de cargas superficiales aparentes . ...................471
9.4.2.3 Definición de la cav id ad ............................................................. 473
9.4.2.4 Ecuaciones de Born generalizadas ........................................... 474
9.4.3 Modelos mixtos discreto-continuos o semicontinuos ......................... 475
B ibliografía.............................................................................................................. 521
XXXI
Capítulo 1
Fundamentos
1.1.1 Matrices
1.1.1.1 Definiciones sobre matrices.
Definiremos:
Matriz: Un conjunto de N x M números ordenados en forma de tabla con N
A \\ A \2 ................... A im
A 21 A 22 .......................... A 2M
filas y M columnas: A =
A n i A n 2 .................... A n m
Elemento de una matriz: Sea A%j = (A )¿. el elemento (i, j) en la que i es el
índice de fila y j el de columna.
Matriz cuadrada: Aquélla en la que M = N
Producto de matrices: En general, el producto de dos matrices no es conmuta
tivo, así A B B A . Se dice que dos matrices son compatibles para el producto si el
número de columnas de la primera es igual al número de filas de la segunda. De esta
forma, la matriz producto tendrá el mismo número de filas que la primera matriz y el
mismo número decolumnas que la segunda, esdecir, A ( N x M ) 0 B (M xp ) =
C(JVxP)
Matriz columna: También llamada vector, aquélla en la que M = 1. El pro
ducto de una matriz por un vector resulta en un vector: A ( N x M ) ® a (M x 1) =
b ( N x 1) =* bi = Z j L i M ja j ; Í = 1 , 2 . . . N
1
Índice
Capítulo 1
(A B )f = B fA f (1.1)
2
Índice
Capítulo 1
1.1.2 Determinantes
Para toda matriz cuadrada es posible definir su determinante asociado, cuyo valor
es un escalar: A -» det (A) = |A | = *Pí { A u , A 22 , • • • A n n }
Vi es un operador capaz de generar una de las NI permutaciones entre los N
índices de columna del conjunto de números a su derecha a partir de una ordenación
preestablecida o canónica.
Pi es el número de intercambio de dos índices de columna de números contiguos
necesario para restituir el orden canónico.
N
| a) = 5 » * (1.2)
Í= 1
en la que será la componente del vector |a) en la dirección |i). Dado que V es
complejo se podrá definir el adjunto de cualquier vector al que llamaremos bra y
escribiremos como (a\ = (|a )^ . Correspondientemente, existirá un conjunto de base
debras, {{ í \} n (i\ — (K)) de tal forma que
N
<a| = 5 > i ( i | (1.3)
Í= 1
1Recuérdese que el producto de escalares es conmutativo
3
Índice
Capítulo 1
1.1.3.2 Vectores.
producto escalar entre dos vectores \a) y |6) se definirá como la operación entre un
bra y un ket que resulta en un escalar:
N
(a | b) = a^b = ^ a*6¿ (1.4)
i—1
Así, la longitud, módulo o norma de un vector se define como la raíz positiva del
producto escalar de un vector por sí mismo (a | a) = a^a = a\ ai — H ii 1^1
para que el último miembro de la ecuación (1.5) sea igual al último de la ecuación
(1.4) es necesario que el producto (i | j) sea nulo si ¿ / j y valga 1 si i = j. Se define
0 S% % "=r— 7
{ . . . , que resume
1 si %= j
4 Índice
Capítulo 1
E l i ) (¿1 = 1 = ! (i-9)
2Estrictamente hablando, no es necesario que el conjunto de base sea ortonormal, sin embargo, las
ventajas prácticas de elegirlos ortonormales y la posibilidad de ortogonalizar y normalizar cualquier
conjunto que se escoja, hace que, de hecho, se utilicen siempre los conjuntos de base ortonormales.
3Hay que recordar la diferencia entre la componente de un vector |a) en una dirección |i), que es
a¿, un escalar, y la proyección del vector \a) sobre la dirección |í), que es |¿) a¿, un vector.
5
Índice
Capítulo 1
3
de¡ = ; i = 1 ’ 2 >3 i 1 -11)
j= i
en la que Oji significa la componente del vector 0~e¡ en la dirección ej. Como la
ecuación (1.11) puede escribirse para los tres vectores de la base, existe un conjunto
de 9 números Oji que pueden escribirse en forma ordenada como una matriz 3 x 3 ,
O, que constituye la representación del operador en la base.
6
Índice
Capítulo 1
Índice
Capítulo 1
(c | b) y, ya que (6 | c) = (c \ b)*, entonces (o| C?t |c) = (c| Ó |a)*. Esta expresión
vale para cualquier par de vectores del espacio vectorial, por tanto, también para dos
cualesquiera de los vectores de una base, así que (z| \j) = { j \ 0 |¿)* o (o * ) =
(0 )* ¿ que corresponde a la definición de la matriz adjunta.
u ia = { i \ a ) (1.15)
Índice
Capítulo 1
d \ P ) = u ) P \P) (1.17)
multiplicando la ecuación (1.17) por la izquierda por (f3\ y la ecuación (1.18) por la
derecha por |/3) se obtiene, teniendo en cuenta que el operador es Hermítico y que,
9
Índice
Capítulo 1
y {¡3\ Ó = (/3\ u;p, donde üüa ^ up, por hipótesis, y se ha tenido en cuenta que
el operador es Hermítico y que los valores propios son reales. Multiplicando la
primera por la izquierda por {(3\ y la segunda por la derecha por |a) se obtiene:
í (P\ O \a) — Cüa {(3 | a) 1 ( \ ¡o \ \ n / \ / n
l[ {(31
/ r\ O i r l \ Jí ^ (Lüa ~ 10^ (ft \ a ) — 0? como (cua —up)
ñ \ \a)\ = ujp((3\a) 0 =¿>
((3 | a) = 0.
¿Que pasa si los vectores son degenerados? Sea un conjunto de vectores degenerados
de dimensión M , {|o¿)}M que, en principio no son ortogonales (V | a ) , |(3) G {\ot)}M
(a \ (3) = S ap): se pueden “ortogonalizar”. Los métodos de ortogonalización se
basan en la siguiente propiedad de los vectores degenerados: Cualquier combinación
lineal de vectores propios degenerados de un operador Hermítico es también un vec
tor propio del mismo operador y con el mismo valor propio asociado.
10
Índice
Capítulo 1
que siempre es posible formar un conjunto ortonormal a partir del conjunto de los
vectores propios de un operador Hermítico.
11 Índice
Capítulo 1
UJ = V ^ O \J (1.20)
Además, los elementos de la matriz U están ligados entre sí por la misma definición
de matriz unitaria U ^U = 1.Así, los 4 elementos de la matriz U están ligados entre
sí por 3 ecuaciones, porlo que únicamente existe 1 grado de libertad. Podemos tomar
una matriz unitaria que dependa de un parámetro 9 como, por ejemplo, la matriz de
TT eos9 sin# TT ^
rotaciones: U = . ^ . . Utilizando esta matriz en la ecuación (1.20) se
sin v —eos u v / .
llega a los siguientes resultados:
1. A partir de los elementos de fuera de la diagonal de U ^O U , que han de ser
nulos para que cu sea diagonal, se puede obtener el valor de 9, que llamaremos
6>o, que es: 0O = \ arctan 0 ?°-6 22 '
2. Con este valor de 9q, a partir de los dos elementos diagonales de O U , se cal-
^ 1 = O 1 1 eos2 9o + O 22 sin2 9q + Oi2 sin 29o
culan los valores propios :
^2 = 0 11 sin2 9q + 022 eos2 9q - O 12 sin 290
12 Índice
Capítulo 1
(1.21)
Esta última expresión constituye además una definición implícita del producto escalar
de dos funciones g (x) y h (x), definidas en el mismo intervalo, g (x) f (x) dx,
que se denomina producto interno. La función / (x) se puede desarrollar como
combinación lineal de las funciones de la base:
oo
/ (x) = Z CiUi (1.22)
Reflexionando un poco, el concepto es el mismo que el que se utiliza para el ajuste
de funciones a polinomios, donde las funciones de base serían las potencias de x
(debidamente ortonormalizadas).
13
Índice
Capítulo 1
Fourier y el resultado8 es: / (x) = ^ sin (x) + | sin (3x) + ^ sin (5x) + • ■
en la que los componentes, a¿, pueden calcularse como: aj = frb aa ^ (x ) a (x) dx.
Sustituyendo esta última expresión en la ecuación (1.24) se obtiene:
rb
a (x) =(x ) / ix ') a (x>) dx' = f (xr) dx 1
Ja Ja
14
Índice
Capítulo 1
15
Índice
Capítulo 1
Sea un operador O tal que O a (x) = b(x). Se dice que un operador es local cuando,
para calcular el valor de b (x = xo), es decir, el valor de la función para un punto da
do, se requiere conocer la función a (x) únicamente en el entorno de xo, por ejemplo
el operador O —
Un operador es no local cuando, para el cálculo del valor de b (x = xo), requiere
conocer la función a(x) en todo el intervalo de existencia [x i,x 2 ]. Típicamente
se trata de operadores integrales y su regla de operación se escribe como: b (x) =
Ixi O (x, x') a (xr) dx'. Un ejemplo clásico es la función <5de Dirac.
Definiciones:
- Se dice que un operador es Hermítico si 0 = 0^.
- Se dice que un operador es antihermítico si O = — .
- Se dice que un operador A es normal si conmuta con su adjunto A, /U = 0. Es
evidente que todo operador Hermítico es normal, la inversa, en cambio, no es cierta.
Igual que todo número complejo se puede descomponer en la suma de una parte
real y otra imaginaria, c = a + ib, siendo a y b dos números reales, un operador
cualquiera se puede descomponer en la suma de una parte Hermítica y otra anti-
hermítica. Dado que i puede considerarse como un operador antihermítico, ya que
¿t — — —i 9para un operador cualquiera, A:
A = A + iB (1.27)
16
Índice
Capítulo 1
10Existe también el teorema inverso, es decir, que si existe un conjunto completo de funciones propias
de dos operadores Hermíticos, entonces estos operadores conmutan, pero este teorema es menos útil y
su demostración se deja al lector curioso (y avezado). En todo caso sería prudente una consulta al libro
de F.L.Pilar (véase las referencias bibliográficas de este capítulo).
17
Índice
Capítulo 1
2. Idempotentes: V 2 = V
V 2 = E f í i I*) (¿I E j i l Ió) 01 = E i E ¿ \i) Si, 01 = E¿ l¿) (¿I = v
18
Índice
Capítulo 1
Valores y vectores propios de II: Tomemos la ecuación de valores propios del ope
rador paridad: U g ( x , y , z ) = Cig(x,y,z). Como, evidentemente U2f (x, y, z) =
n / ( —x, —y, —z) = f (x, y, z), podemos concluir que el valor propio de tí 2 es 1 ,
así que cf = 1 , por lo que = ± 1 , de esta forma, g (x, y, z) = ±g (—x, —y, —2).
Diremos, pues, que existen funciones pares (valor propio +1) e impares (valor propio
-1). Podemos estudiar la relación de conmutación de II con el operador Hamilto-
niano H = T + V. Como T incluye las coordenadas (x, y, z) al cuadrado, II
y T conmutan. Así que ? í,n = . Si V es una función par, entonces
¡V, ñ = 0, puesto que: UV (x, y , z) f (x , y,z) = V ( - x , - y , - z ) f ( - x , - y , - z )
= V (x, y, z) f ( - x , - y , - z ) = V (x, y , z) U f (x, y, z).
Por tanto, cuando V es par, T i y H conmutan, por lo que las funciones propias de
Tí tendrán comportamiento de paridad. Como veremos en el apartado siguiente, el
hecho de conmutar con el operador Hamiltoniano implica una ley de conservación,
que constituye una de las leyes fundamentales de la Física (Leyes de conservación o
de violación de la paridad). En cualquier caso, el comportamiento de paridad tiene
una aplicación práctica, puesto que las integrales de funciones impares son nulas.
19
Índice
Capítulo 1
direcciones privilegiadas del espacio, así que en este caso se llega a un nuevo vector
paralelo al original.
4. El estado |0) no representa ningún estado con sentido físico, aunque puede ser
objeto de una definición operativa.
Definamos:
Sistema: Un sistema (o más generalmente hablando, el modelo que considere
mos del sistema) vendrá definido por:
- las partículas que lo constituyan
- las interacciones que se consideren entre ellas
- los campos externos que sean importantes y que actúen sobre el mismo.
Las partículas vendrán definidas por su masa y por aquellas otras propiedades
relevantes para considerar las interacciones: la carga y, eventualmente, el espín.
Variable dinámica: Toda propiedad mecánica del sistema.
Observable: Toda variable dinámica que pueda medirse experimentalmente.12
Estado del sistema: Viene definido por los valores de los observables que pueden
medirse simultáneamente.13 Hay muchos posibles estados y tipos de estado.
Estados: A cada estado del sistema se le hace corresponder una función (vector).
De tal forma establecemos una correspondencia entre el conjunto de estados y el de
funciones, que los términos función y estado se usan como sinónimos uno de otro.
12En este caso la afirmación es estricta, así que no valen los gendaken experiment o experimentos
mentales, aunque los proponga Einstein.
13Esta definición de estado no es válida únicamente para la Física Cuántica, ya que, por ejemplo, el
estado de n moles de un gas también viene definido por las variables que pueden medirse simultánea
mente, que son 2 de entre (p, V, T ), pero es en la teoría de la medida en Física Cuántica cuando cobra
todo su sentido, ya que, como veremos, no todos los observables pueden medirse simultáneamente.
14De esta forma, sus valores propios serán reales.
20
Índice
Capítulo 1
Medidas de los observables: Dado un observable A , los estados posibles del sis
tema respecto de dicho observable serán sus funciones propias: 15 A\</>i) = a¿ |
Los valores propios asociados a cada función propia son los únicos valores posibles
de cualquier medida de un observable. Si el sistema está en un estado </>¿ la medida
de A será, necesariamente, a¿.
Lo que sigue es una exposición de algunos aspectos de lo que se conoce como Inter
pretación de Copenhage de la Mecánica Cuántica.16 En el libro de Cohen-Tannoudji
se presenta una magnífica discusión de toda la teoría de la medida.
Supongamos al sistema inicialmente en un estado |ip).
21
Índice
Capítulo 1
22
Índice
Capítulo 1
23
Índice
Capítulo 1
0< A (1.29)
F = f ~ ( f )
I ( i ( j ^ G — G ^^Ÿ ) • Supongamos que siendo / y g dos opera
Q = 9 - {9)
= (A /r
dores Hermíticos. Así, y P G — G ^T = [/>#]• Sustituyen-
= (A g f
do en la inecuación (1.29), se obtiene: (A / ) 2 (A<y) 2 > I (* [ / , ? ] ) =» A /A g >
\ ^ / >5 ) > que es la expresión del principio de indeterminación de Heisenberg.
La interpretación de esta expresión es que dos observables, / y g, pueden medirse
simultáneamente con absoluta precisión si sus operadores conmutan. 19
dF \2 dT d(j>2 \
>2 ) + T 4>2 ) + ( 4>\
dt = (<¿1
4
dt \ dt dt /
Aun hay otro caso en el que A fA g = 0, que es cuando, aunque f,9 no sea nulo, su valor
promedio para un estado dado sí lo es, f ,9 0, aunque esta situación puede considerarse como
anecdótica.
24
Índice
Capítulo 1
d£
las funciones y se llega a: = ^<?>i dt (f>2 ) ■En el caso de
que el operador no dependa del tiempo, ^ = i(* <p2 ), que, para toda
la matriz, se puede escribir como
dF
(1.30)
ä t = - n ^ F1
que se conoce como ecuación dei movimiento de Heisenberg y es equivalente a la
ecuación de Schrödinger en su formulación alternativa de la mecánica cuántica.
d (F ) _
= 0 (1.31)
dt
que es el teorema del hipervirial: El valor promedio de cualquier operador Hermítico
independiente del tiempo no varía con el tiempo en estado estacionario.
25
Índice
Capítulo 1
Demostración: Desarrollemos:
HT
como queríamos demostrar.
2 (T) = ( r - W )
que se conoce como el teorema del virial en mecánica cuántica.20En el caso de que el
operador de energía potencial se pueda expresar como una potencia de r, por ejemplo,
V — krn, donde k es una constante, el teorema del virial adopta una expresión
particularmente sencilla, que es: 2 (T ) = n (V ), por ejemplo, en el caso del átomo
de hidrógeno V = £ y, por tanto, n — —1 , así que 2 (T) = — (V ), en cambio, en el
oscilador armónico V — \ k x 2 y entonces n = 2, así que (T) = (F).
Además, en estos casos, puesto que la energía se puede escribir como E — (T) +
(V), podemos resolver un sistema de dos ecuaciones con dos incógnitas, obteniendo
(T) y (V) en función de E, como (T) = ^ y (V")
Existe también el teorema del virial en mecánica clásica, a partir de la cual se deduce, por ejemplo,
la ecuación del virial (como no podía ser de otro modo) de los gases reales.
26
Índice
Capítulo 1
(ipn | ipn) = 1 , resulta que ^ (ipn \ tjjn) = (jjfc \ ijjn) + (i>n | ^ f ) = 0, así que:
9En dH
— ( 071 'Ipn
dX dX
que es el teorema de Hellmann-Feynman, que nos dice que la variación de la energía
con cualquier parámetro del operador Hamiltoniano viene dada por el valor promedio
de Se utiliza, por ejemplo, para calcular los gradientes que permiten optimizar
las geometrías moleculares.
27 Índice
Capítulo 1
1 .4.2.2 Conmutadores entre cada una de las componentes del momento angular y
a
El operador correspondiente al cuadrado del momento angular conmuta con los ope
radores de cada una de sus tres componentes:
[cXiE¿\=Q-,\cy,E¿ = o „ ^ ] = 0 (1.33)
Z £? €? £ = 0 (1.36)
(1.37)
28
Índice
Capítulo 1
1.4.3.2 Algunas relaciones útiles entre los operadores escalera y de éstos con los
del momento angular.
La aplicación sucesiva de los operadores ascenso y descenso en los dos órdenes posi
bles lleva a las siguientes expresiones:
£ + £ _ = £? - £?z + Cz ; £ _ £ + = C 2 -£ ? Z - C Z (1.39)
Demostración: £+£_ = (c x + i C y J [ c x — i ¿ y ^j = £ 2+ C y + i Cx =
C? — £?z + £ z. La segunda relación en (1.39) se deduce de forma análoga.
Otras expresiones útiles resultan de multiplicar £ + y £ _ por Cz por la izquierda.
Demostración: C ZC + = C ZC X + i C zC y = C+ + C+Cz = C+ (¿ z + lj ,
donde se ha tenido en cuenta, a partir de los conmutadores (1.32), que: CZCX =
%Zy + CXCZ y JÍzCy = - iCx.
Además, puesto que £ 2 conmuta con Cx y Cy, también lo hará con £ + y £ - .
29 Índice
Capítulo 1
que lleva a:
¡3¿> m ( m + l) (1.42)
y, análogamente, para £ _ |Y^m) se llega a — m 2 + m > 0. Sumando ambas
expresiones se obtiene
Pe > m 2 (1.43)
así que \m\ < \[Pt, quiere decir que para un valor dado de existirán dos valores
extremos de ra, uno máximo que llamaremos fñ = y otro mínimo que será
ra = —\fP i = —ra. Para que la relación (1.43) se mantenga, se debe cumplir
que : £ + |Y¿¿ñ) = 0 y £ _ |Y¿im) = 0 , es decir que al operador ascenso no se le
permite incrementar ra más allá del valor máximo y al operador descenso no se le
permite decrementar ra más allá del valor mínimo. Así, los valores permitidos para
m serán m = ra, ra + 1, . . . , ra — 1 , ra, distribuidos simétricamente en torno a cero
30
Índice
Capítulo 1
Pt = £(£ + 1) (1.44)
me = - i -£ + 1,£ (1.45)
c± = [£(£ + 1) - m e (me±i)}¿
e { - m - + ' c o tS - d f ) = 0
1 dQpp 1 1
___________ M = ---------- 1 rzr H (1.46)
0^ ^ cot 9 dd d<j)
ya que dos funciones distintas de variables independientes que son iguales entre sí
para todos los valores posibles de las dos variables, necesariamente han de ser iguales
a una constante, que llamamos í. La solución de la ecuación diferencial que se ob
tiene del segundo y tercer miembro de (1.46) es: ^ en
la que, para asegurar la continuidad de la función, es necesario que í sea un número
entero. La solución de la ecuación diferencial, d (ln &£/) = id [ln (sin Q)\, que se ob
tiene del primer y tercer miembro de (1.46) es: sin£ 9 =
L2 (2 £\) _
en la que, de nuevo, las condiciones de contorno exigen que í sea un número entero
21Este último requisito no se deriva del desarrollo que se ha expuesto, sino de las condiciones de
resolución de la ecuación diferencial.
22Se encuentra que el momento angular (análogo al momento angular clásico) corresponde siempre
a valores enteros de rñ. Como se verá en los apartados sucesivos, existen momentos angulares en Física
Cuántica que no tienen análogos clásicos y que pueden corresponder tanto a valores enteros como semi
enteros de rñ.
31
Índice
Capítulo 1
i (2 1 + 1 )! sm
y positivo. Por tanto, Y¿¿ = 2e£! Ahora, aplicando repetida
4 tv
(2 £ + ! ) ( £ — \m¿\)\
Yt,- 47r (£ + \m¿\)\
\me|
(y ) e
1^ 1
donde y = cosé?, ( 1 —y 2) 2 = sin# y (y) son los funciones asociadas de
Legendre de grado ¿ y orden ra ¿ . 23
1.4.5 El espín
El espín es una propiedad intrínseca de las partículas,24 al mismo nivel que la carga
o la masa25 que se introdujo para poder interpretar dos experimentos cruciales en la
historia de la Física Cuántica: el efecto Zeeman y el experimento de Stern y Gerlach.
Stern y Gerlach hacen pasar un haz de átomos de plata a través de un campo mag
nético no homogéneo, encontrando que el haz se divide en dos en la dirección del
campo, poniendo de manifiesto la existencia de dos tipos de átomos que poseen mo
mentos magnéticos de igual módulo y distinto signo. Dicho módulo vale:
que se conoce como magnetón de Bohr. En 1925, Goudsmit y Uhlenbeck26, en su in
terpretación del experimento de Stern y Gerlach y del efecto Zeeman, proponen que
el electrón posee un momento angular implícito, que conlleva un momento mag
nético ~ft = —# 2 m c ^ ? cuyo módulo es \!?\ = y/s (s + l)fi y —s < m s < 5 , donde
s es el número cuántico de espín. Para el electrón en el átomo de hidrógeno, s = ^
y g = 2, que se conoce como factor g de Landé. La interpretación completa se debe
a Dirac en 1928, quien establece la ecuación del átomo de hidrógeno correcta desde
el punto de vista relativista, incluyendo cuatro dimensiones y, por tanto, un cuarto
número cuántico que posee sólo dos valores posibles \ y — que corresponden a
rrts. El factor g se predice también correctamente. Sin embargo, el tratamiento del
espín en Química Cuántica es más simple, introduciéndolo en forma de postulados
23 Las expresiones concretas de los armónicos esféricos pueden encontrarse en muchos textos de
Química y Física Cuántica, incluso de Química Física, además de Ecuaciones Diferenciales o Matemáti
cas para la Física.
24El autor quiere estimular a los lectores, si se dedican a la enseñanza de la Química, a refutar la
interpretación simplista del espín que aparece en muchos libros de texto de Química, en el sentido de
que el electrón “gira” sobre sí mismo. La relación entre el límite superior del radio del electrón y la
magnitud del momento magnético experimental hace imposible tal relación siendo la velocidad de la
luz constante y con el valor conocido.
25Para caracterizar las partículas, los físicos utilizan un conjunto de propiedades con valores
definidos, como las mencionadas, además de otras como el encanto, la extrañeza, el sabor o el color.
26S. Goudsmit y G.E. Uhlenbeck, Naturwiss., 13, 953 (1925); Nature, 117, 264 (1962)
32
Índice
Capítulo 1
i
1
*O
O
’ 1 ^ _ 1 1 ’
se deducen los demás: s 2 = + sz (sz + 1 ) = § &x — 2
1—
5
O
O
1
r
1
-i
0
y sy . De esta forma se puede verificar el resultado de aplicar estos
i 0
operadores sobre |a) y \(3):
33 Índice
Capítulo 1
relativa de giro sea adecuada, el vector suma será compatible con las condiciones que
impone la Mecánica Cuántica. En todo caso, la componente z del vector suma será
la suma de las componentes z de los vectores sumandos, así que: L z — L Zl + L Z2
y, por tanto, m¿ — m + m¿2. Los valores posibles de í se calculan haciendo uso de
las reglas de Clebsch-Gordan27 según las cuales í puede tomar cualquier valor de la
serie: t — í \ + + h ~ 1 , • • •, \h ~ h \*
Dada una función normalizada que satisfaga las condiciones de contorno apro
piadas, típicamente que se anule en los límites del sistema, el valor promedio de H
calculado con es un límite superior a la energía exacta del estado fundamental.
Es decir, si ( $ | <3>) = 1, se cumple que ( $ H $ ) > £ q.
27Cuya deducción es tan complicada que remitimos al lector a textos especializados, como el libro
de Condon y Shortley, por ejemplo.
28 r
En otros casos, como en las moléculas lineales, que poseen simetría cilindrica, H,Cz 0y
sólo se conserva L z .
34
Índice
Capítulo 1
Demostración:
1 = ( $ | $ ) = £ Q( $ | 0 ($Q|$ ) = £ I$
$ $ ) = £ Q/3 (<&|$a)(<Í> n $ ^ p \ V = E a So I$
Restando las dos expresiones anteriores:
d (H ) 9 (H )
= 0 = 0 (1.47)
dX dfi
35 Índice
Capítulo 1
Problema: Buscar los valores de los {cí}n que hacen que (Ti) sea mínima, sujeta
a la restricción de que | = 1. La última frase indica que los coeficientes en
(Ti) no son independientes entre sí, por lo que la mera aplicación de las expresiones
(1.47) no resuelve el problema.
36 Índice
Capítulo 1
Demostración:
1 = £ a |( $ « I $ / } | 2 = £ a ^0 => £l — Ect^O
donde se ha excluido el sumando para el que a = 0 , puesto que es nulo.
37
Índice
Capítulo 1
resolver. Podemos considerar pues, que nuestro sistema de interés es éste último
perturbado: Tí = H q+H ' y, por tanto, H f — H+Í-Lq será el operador de perturbación.
Por ejemplo, para el oscilador anarmónico, V = \ k x 2 + a x 3 + 6 x 3 + • • •. Para
el oscilador armónico, que podemos resolver exactamente, Vq = \ k x 2. Podremos
entonces considerar que un oscilador anarmónico es V = Vo + a x 3 + bx 3 + • • •, o
sea, un oscilador armónico perturbado. Con esta formulación se describe el sistema
perturbado a partir de las soluciones del sistema sin perturbar. Es decir, el sistema
sin perturbar permite elaborar un lenguaje más simple con el que describir el sistema
perturbado, más complejo.
Desarrollo: Sea li. |$¿) = |$¿) la ecuación de valores propios del sistema per-
turbado, cuyas soluciones no se conocen, y Tío (0 )^ (0) la del sis-
tema sin perturbar, cuyas soluciones son conocidas, y que llamaremos de orden cero
Tomaremos 7i — Tío + ATí7 en la que A es un parámetro arbitrario, cuyo valor fijare
mos a posteriori, a nuestra conveniencia. Desarrollemos en serie de Taylor sobre A
la función y la energía del sisteipa perturbado: = E¡°^ + AE ¡XJ + A2 E¡Az?(2)) +
(0 )
o sea, E)(i) Ho H!
Utilizando el principio de superposición para la función de orden n con las fun
ciones de orden cero:
^ n)) =(0) E¿ n)
4 donde hay que señalar que: =
(i)
\Err
(°) i
% x ] = 0. Así,
-
Ho C^ E ¡ 0) 0 y, por tanto, E¡(i)
(0)
H! *f>).
38
Índice
Capítulo 1
39
Índice
Capítulo 1
por *(°) , con 1 < m < n, perteneciente, por tanto, al conjunto degenerado, des
componiendo el sumatorio en dos, = YX=\ + EfcLn+i lleva, para el primer
miembro a:
n oo
1<p+)
= cos f \(pi) + sin § 1^ 2 ) 2 |Wial
de forma que donde tan 9 = E1 +WH— E2—W22
\<P-) = Sin ; \ifii) + eos I \<p2)
con 0 < 6 < 7r. Podemos considerar varios casos posibles:
29Que puede ser una perturbación externa o bien un término adicional del Hamiltoniano que repre
sente un refinamiento del modelo y puede además depender del tiempo, induciendo transiciones entre
b i ) y | ^ 2 ).
40
Índice
Capítulo 1
£+ = E i <-►|<¿>+ ) =
1 . Sin acoplamiento: W = 0 . Solución trivial.
£_ = E 2 <->• |</>_) = 1^ 2 )
41
Índice
Capítulo 1
_ ÍW = E ÍÍJ l é 1
'i; sr^N J
Los núcleos son pesados con relación a los electrones30 por lo que podemos suponer
que si repartimos equitativamente la energía entre núcleos y electrones, éstos últi-
30Como mínimo 1840 veces en el caso del átomo de hidrógeno.
42
Índice
Capítulo 1
mos se moverán mucho más rápidamente que aquéllos, en promedio. De esta for
ma, podemos suponer que un electrón realizará todo su ciclo de movimiento antes
de que los núcleos hayan variado apreciablemente su posición, lo que permite de
sacoplar los movimientos de los núcleos y electrones, permitiendo separar la ecuación
de Schrödinger. El movimiento de los electrones, más ligeros, estará condicionado
por la posición en cada instante de los núcleos. Tomemos Ti = Te + Tn + Vee +
V n n + Vejv, cuya función propia, desconocida, escribiremos como: $ (r, R) =
F (r, R) G (i?), donde representamos simbólicamente por r las coordenadas de to
dos los electrones y por R las de todos los núcleos. Esta forma de la ecuación de
estado no representa ninguna aproximación y por tanto no supone ninguna pérdida
de generalidad. Sustituyendo el operador y la función en la ecuación de valores pro
pios de Tí y teniendo en cuenta cuáles de sus términos operan sobre G (R) o sobre
F (r, R), se obtiene: G JR ) f eF (r, R) + TN F (r, R) G (R) + VNeF (r, R) G (R) +
G (R) VeeF (r, R) + V n n F (r, R) G (R) = £ F (r, R) G (R). Teniendo en cuenta
que Tn F (r , R ) G (R) = GTNF + F T N G - ^ iGa^ iF , sustituyendo y divi-
diendo por el producto FG: j?TeF + ^ TjsfG + ^ T ^ F — ^ iF +
jjVN eF + -pVeeF + Vn n = Estrictamente hablando, la aproximación de Born-
Oppenheimer supone hacer que ^ j F = 0. Es decir, que la variación de la función
de onda electrónica con la posición de los núcleos es nula. Dos son las principales
consecuencias. Con la introducción de la aproximación, en la función F (r, R) las
coordenadas nucleares R dejan de ser variables para convertirse en parámetros, por
lo que la escribiremos F (r; R). Además, los términos ^ Y li -^/F y
pT/v-F serán nulos. Queda pues, j?TeF + -gTpjG + -pVpjeF + ^ V eeF + V n n = £•
Separando variables, teniendo en cuenta que en F (r; R), R ya no es una variable,
p (Te + VjVe + Vee^) F + V n n = £ — ¿ T nG = £ '. Igualando el primer y ter
cer miembro podremos pues escribir una ecuación de valores propios electrónica:
(fe + VjVe + V e e ) F = ( s 1 - V n n ) F = S eF, donde £' = £ e + VNN. Con
el segundo y tercer miembros escribiremos la ecuación de valores propios nuclear,
(T¡s¡ + £'^j G — £G. Entonces, definiremos £' como la energía potencial a la que
están sometidos los núcleos. Como depende de las coordenadas de los núcleos, que
son en total 3M , se le llama Hipersuperficie de energía potencial (HSEP).
Definimos también el operador Hamiltoniano electrónico Tíe = Te + VNe + Vee,
de forma que Tíe [R] F% (r ; R ) = [R] F% (r ; R ), donde se ha puesto explícita
mente el supraíndice e para indicar que se trata de magnitudes electrónicas, n es el
índice que numera las soluciones de la ecuación de valores propios del Hamiltoniano
electrónico. Puesto que £ fn [i?] = [R] + V n n , podremos resolver la ecuación para
los núcleos: (T n + £'n [-R]) Gv,n (R) = £v,nGv,n (R).
- F% (r; R): representa el estado n de los electrones. Hay una solución para cada
valor de R.
Índice
Capítulo 1
44
Índice
Capítulo 1
Debido a la existencia del operador Vee = Y^icj r73l i *a ecuación de valores pro
pios H e [i?] F* (r; R ) = [R] F% (r ; R) no es separable y, por tanto, no se puede
resolver. Buscaremos una aproximación que sustituye Vee por una suma de opera
dores efectivos monoelectrónicos. Así, probaremos a separar variables definiendo
para dos electrones, por ejemplo, una función de estado que sea producto, debida
mente antisimetrizado, de dos funciones monoelectrónicas (función de a?): |^ ) =
*Axi (%í) X2 (^2)- Las funciones x (~^) se denominan espinorbitales, cuya defini
ción, por tanto, es: Un espinorbital es la función de estado de un electrón sometido a
un potencial monoelectrónico, real o efectivo. A es un operador antisimetrizador, que
proyecta la función x i (^ í) X 2 (#2), que no tiene comportamiento simétrico definido,
45
Índice
Capítulo 1
46
Índice
Capítulo 1
47
Índice
Capítulo 1
tos. Por convenio, llamaremos |\&o) al determinante de referencia con los N espinor
bitales de energía más baja ocupados; a, 6 , . . . serán las etiquetas de los espinorbitales
ocupados en \^o); r, s , .. . las de los que no lo estén y, por fin, j . . . se utilizarán
como etiquetas genéricas de los espinorbitales, sin referencia a su carácter de ocupa
dos o virtuales. De esta forma, un determinante monoexcitado en relación a \^q), en
el que se ha sustituido el espinorbital ocupado a por el virtual r se denotará por 1^ ) ,
uno diexcitado será, por ejemplo, | Con este convenio de nomenclatura, la ex
pansión de la función de un estado molecular en términos de todos los determinantes
que se pueden construir, conocida como interacción de configuraciones comple
ta (FCI, full configuration interaction) y que será la solución exacta para la base
escogida de dimensión K , será |<E>) = o 0) + Lar ca l^a) + T ,abrs caí l^aí) + " '
Llamaremos determinantes restringidos a ' ' ' 'tpk'&k)’ donde 'i¡;i equi
vale a ipi |/3), en los que los espinorbitales son acordes con la definición restringi
da (apartado 1.6.6). De forma análoga, llamaremos determinantes no restringidos a
íjjf i'&f+i'tpPi+i **• en l°s l°s espinorbitales son no restringidos.
48 Índice
Capítulo 1
Funciones propias de «S2: Conviene utilizar una de las expresiones (1.39), como,
por ejemplo, S 2 |\&) = (S -S + + §1 + S z) |$ ) = S - S + |^ ) + | (N a - N p )2 |^ ) +
\ (N a - Np) I#). Ya que <S_<S+ = Y p 5 - (p) s+ (/*) + E ^t« , * - (ß) * + en_
tonces, (¡i) 5 + (/x) |tf) = Np |$ ) y Y p f r « - (**) *+ iy) I®) = E p ^ a/J l^),
con V apOi ( 1 ) ß (2 ) = a ( 2 ) ß ( 1 ) y la suma se extiende a todos los intercambios
a x ß . Así, ^ |*> = (Np + Y p V a p + \ ( N a - N p )2 + ± ( N a - Np)) |^>. Por
tanto, |^ ) sólo será función propia de S 2 si lo es de 'Pap, lo que sucede (cuando
N a > Np) si Np es igual al número de capas cerradas, si no es así aparecerán otros
determinantes distintos de |\I/ ) . 33
El diagrama de ramificación da, en un sistema cualquiera, el número de estados
posibles de cada multiplicidad según el número de electrones desapareados. Cada
uno de los números en el diagrama se obtiene sumando los dos que hay a su izquierda,
en las líneas inmediatamente superior e inferior.
Veamos por ejemplo la molécula de hidrógeno en base mínima, para la cual ten
dremos dos electrones en dos orbitales moleculares. Con los dos electrones se pueden
33Si N a < Np la condición es que el número de espinorbitales de tipo a sea igual al número de
capas cerradas.
49
Índice
Capítulo 1
4>2 I T L 1 TI
4>i TI
V¡/2
j. t_ i \If22
l *>- - |*o> 1 |*l) |*f 11
M s -= 0 0 1 - 1
M s = m Sl + m.S2
S z a cualquiera de los determinantes. El diagrama de ramificación nos indica que
con dos electrones desapareados obtendremos un singulete y un triplete. La apli
cación de S 2 a los diferentes determinantes lleva a la conclusión de que \^o),
$ f ) y ^ 2 2 \ son funciones propias con valores propios de 0 , 2 , 2 y 0 , respecti-
50
Índice
Capítulo 1
34L o s operadores que se definen en este apartado se refieren a fermiones. Existe un desarrollo alter
nativo para bosones. Para mayor información el lector interesado puede consultar, por ejemplo, el libro
de Avery o el de Lindgren.
51 Índice
Capítulo 1
a\ a\ = ~a¡a¡ = 0 (1.50)
es decir, no se pueden crear dos electrones en el mismo espinorbital.Por tanto, la
expresión (1.50) implica el principio de exclusión.
Relación entre aj y a¿: Tomemos+ a^a^j |X k " ' Xl)• Pueden presentarse
tres casos:
- xí y Xi están ambos ocupados en \xk *• *xO*
- X¿ y Xi están ambos vacíos en \xk **• X/)-
“ X¿ y Xi están uno ocupado y el otro vacío en \xk • • *Xz)-
En los tres casos resulta que: |xfc ***Xz) = 0* P°r tanto, se puede
resumir como |a¿, = 0.
Las dos expresiones obtenidas pueden resumirse en una sola:
52 Índice
Capítulo 1
Definiremos el estado del vacío como un determinante normalizado con todos los
espinorbitales vacíos, | ), por tanto, ( | ) — 1. De esta forma a¿ | ) = 0 = ( | aj.
53
Índice
Capítulo 1
Hay que destacar que las sumas se hacen sobre el número de espinorbitales, por lo
que las expresiones (1.54) son independientes del número de electrones, siendo muy
convenientes para sistemas extensos, como por ejemplo, para estado sólido. También
hay que señalar que en las expresiones de los operadores aparecen explícitamente las
integrales sobre los espinorbitales.
54
Índice
Capítulo 1
[ K Ox L ) = Z?j { i \ h \ j ) { K a\ a3apam K ) .
Con (1.53): ( K o\ 0>jQ'pQ'm K ^ — ñjpfiim-
Entonces: ( K <5l L ) = Yd,j (i\h \j) Sjpóim = (m |/i| p).
K o2 L ) = \ T.fjkl ( v i k l) { K a¡a¡aiaka la m K
Con (1.53): { K a¡aja¿afca|,am
-f-ófcp Sj i ¿kp^jm ^il-
1
Entonces, ( K 0 2 \ " 3VJ IIjp
~ h2 E¿ - f/ j {m J )f ! + I 52 £ ¿ V {im I ip)
+\ E f (mj Ipj) - 5 £ f Ipi) == Eí^
] (n»¿ I pi)
3. |K ) y \L) difieren en dos espinorbitales: si |L) = o ^ a |a nam |K )
K O i £ ) = £ £nj< * N i ) ( *
4
Con (1.53): (ütT - aj apaqc k ) = 0.
K 02 L ) = ^ f j k i ( i j \ k l ) { K a\a^aiaka la \a nam K ) .
Se obtiene: ^ K ala^aiaka^a^anam K^j — $lp$kq$in$jm $lp$kq$jn$im
^kp^l q&in&jm “í~ $kp$lq$jn$im
Ó 2 l ) = (m n II pq).
K o2 L) = 0.
1.8.1 Introducción
La mecánica estadística es la teoría mediante la cual estudiamos el comportamiento
e implicaciones de las fluctuaciones naturales espontáneas. Las fluctuaciones son
importantes, ya que sin ellas los líquidos nunca hervirían, el cielo no difractaría la
luz solar, todos los procesos dinámicos de la vida cesarían, etc. Las fluctuaciones
conducen a un estado de caos creciente.
La mecánica estadística estudia las magnitudes y las escalas de tiempo de las fluc
tuaciones y las estabilidades o inestabilidades de las estructuras que las fluctuaciones
espontáneas inevitablemente destruyen.
55
Índice
Capítulo 1
Sea E la energía interna, esto es la energía total de un sistema, por tanto obedecerá
dos propiedades señaladas, (i) Será extensiva y (ii) Se conserva. Escribamos, pues,
la energía interna como,
d E = dQ + d W (1.55)
donde, el trabajo es d W = f-<iX, siendo f el conjunto de fuerzas generalizadas y X el
conjunto de las variables mecánicas extensivas asociadas a las fuerzas. La definición
del calor, dQ, no estará completa hasta que no hayamos descrito algún procedimien
to para controlarlo. A saber, las paredes adiabáticas. Estas son restricciones que
impiden el paso de calor.
Es preciso remarcar que tanto el calor como el trabajo son formas de transferencia
de energía. Así, existe una cantidad E , pero no existen ni W ni Q, aunque dE =
dQ + dW .
La experiencia científica ha corroborado que los sistemas aislados evolucionan
hacia unos determinados estados terminales, cuya descripción es sencilla. Dichos
estados se llaman de equilibrio y de hecho pueden ser caracterizados por un conjunto
reducido de variables extensivas, tales como E y X.
56
Índice
Capítulo 1
La entropía en una función de estado, esto es está definida para aquellos estados
caracterizables mediante las variables extensivas del sistema, E y X, aquellos que
llamamos estados de equilibrio.
Las variaciones de la entropía, por tanto, se escribirán como
(1.56)
dS = +
(1) E
+ f
dE)* .
dX (1.57)
Como para los procesos reversibles (dQ)rev = 0, y además hemos demostrado que
también la variación de entropía es cero, tenemos que,
(\ d- X) j E = f (1.58)
dE)*
Recordemos que la segunda ley impone que la entropía debe ser una función
monótonamente creciente de E, por tanto la siguiente derivada asegura que la tem
peratura, que se define en la ecuación (1.59), será positiva,
t H ‘ (\d—s)x
) >o
- (1.59)
dS = - d E ■dX (1.60)
o bien
d E = T d S + f ■dX (1.61)
En definitiva, que la energía es una función de la entropía y de las variables extensivas
del sistema.
57
Índice
Capítulo 1
vw V(2)
Figura 1.2: Cambios en la entropía para un proceso en el que se manipulan las re
stricciones internas.
R estricción Interna
S’
P ro c eso de
relajación
Por tanto,
r
(1.64)
58
Índice
Capítulo 1
Lo cual nos indica que la energía es una función natural de las variables extensi
vas, (5, V, (rii)l=1). Supongamos que deseemos caracterizar el sistema mediante,
por ejemplo: (T, V, (n¿)¿=1). Es tal caracterización posible ?. Cuál el la función
termodinámica equivalente a E que es función de (T, V, (n¿)¿=1)?.
Sea / = f ( x i , xn), por tanto,
(1.65)
(1.69)
Por tanto, ya que nuestras funciones termodinámicas son regulares deben satisfacer
esta condición. Así, de dA = —S d T — pdV + fidn, se obtiene,
(1.70)
59
Índice
Capítulo 1
Comencemos con el teorema de Euler para funciones homogéneas. Sea / una función
homogénea de grado 1. Esto es, para el escalamiento lineal U{ — \ x ¿,Vz, de las
variables de / se satisface que,
# = t ( £ ) ** (1 ^ )
i= 1
tenemos que
f(x = Xi (1.75)
i —1 1 xj ¥:í
60
Índice
Capítulo 1
Hasta ahora hemos analizado, someramente, las condiciones y las propiedades de los
sistemas en equilibrio. Ahora analizaremos la respuesta que estos sistemas producen
frente a perturbaciones que los alejan del equilibrio. Estas perturbaciones serán pro
ducidas por restricciones internas. Esto es, modificando el reparto de las variables
extensivas en el sistema, pero manteniendo el total constante. La segunda ley obliga
a que dichos cambios lleven a estados de menor entropía o mayor energía.
Demostraremos que mantener T , p y ¡i constantes en todo sistema equivale a
asegurar que la entropía adquiere un valor extremo respecto a la repartición de las
variables extensivas. Sin embargo para distinguir entre máximo y mínimo debemos
continuar el análisis hasta averiguar el signo de la curvatura en esos puntos extremos.
Esto nos conducirá a las condiciones de estabilidad. Por ejemplo, para muchos sis
temas estables se tiene que ( d T / d S ) Vn > 0 o (.d p / d V ) Tn < 0 .
Como vemos, las condiciones de estabilidad afectan a los signos de las derivadas
de variables intesivas respecto a sus correspondientes variables extensivas conjugadas
o bien, recordando las ecuaciones de Maxwell a las segundas derivadas de la la en
ergías libres respecto a las variables extensivas del sistema.
SVV = -SVM ; V = ]T V a
a= 1
2
ó rij1^ = - S rij^ ; n j — ^ 2 n j
a=l
Por tanto, empleando la forma de SE, (ecuación (1.61)), para cada una de las
fases y teniendo en cuenta que E es extensiva, (5 E ) s y tm — ^ ^ s y n i + ^ ^ s v n 2y
61 Índice
Capítulo 1
obtendremos que,
m s ,v „ = ( t M - T W ) 6S M
Lo cual garantiza que (¿I ? ) 5 v = 0, para los desplazamientos que alejen al sistema
del equilibrio.
1.8.2.9 Estabilidad
( S2 E ) > 0 (1.82)
V Js,V,ni - V '
§2E = (<52 e ) X+ (5 2 e ) 2
j.(l) j>(2 )
+
r'-'"U
(l)
1 1
(1.85)
= Í ( {S(1,)2r r (l)
+
c y(v2)
y debido a que la división en los subsistemas es arbritaria, la condición (52 E ) sy,n >
0 implica que,
T_
a
1 1
+ >0 & >o ( 1.86)
_Lsy
En definitiva, los sistemas estables tienen la capacidad calorífica a volumen constante
positiva. Esta es una condición de estabilidad derivada a partir de la ecuación (1.83).
1.8.3.1 Colectivos
Imaginemos que pudiéramos escudriñar un conjunto de muchas partículas en un esta
do macroscópico determinado. Asignemos un punto a cada estado, micro.cópico, del
conjunto de las partículas del sistema. Esto es, si se trata de una descripción clásica,
asigneremos el punto = ( f i , . . . , f / v ; p i , . . . , p n ), siendo r¿ y pi el vec
tor de posición y del momento lineal de la partícula i. Estos dos vectores describen,
clásicamente de forma completa el estado dinámico de la partícula i, esto es su estado
microscópico. El conjunto de todos los puntos ( r N N ^J, constituye el espacio de
las fases del sistema. Cada uno de los puntos del espacio de las fases, describe com
pletamente el estado dinámico clásico del sistema, y el devenir del sistema en este
espacio está determinado por las ecuaciones dinámicas que obedecen las partículas
del sistema y caracteriza su estado macroscópico. Un concepto básico de la mecánica
63 Índice
Capítulo 1
estadística es que si esperamos el tiempo suficiente el sistema discurrirá por todos los
puntos del estado de las fases que sean compatibles con las restricciones que hemos
impuesto al sistema.
Sean Ga los valores de una propiedad G en todos y cada uno de los estados {a}^f 9
visitados por el sistema. Por tanto el valor promedio de la propiedad G será,
Gobs - Y ! Ga (1.87)
a=1
Esta suma se puede expresar de una manera más conveniente como,
64 Índice
Capítulo 1
\ n Ü { E - E v) = l n ü ( E ) - E „ + ... (1.94)
\ Oh J Ny
Q ( P , N , V ) = ¿2e-<3E" (1.97)
y
es la función de partición canónica.
La función de partición determina el valor promedio de la energía. En efecto,
„ T E p~@Eu
(E) = (£„) =
= - ( Í ) w. v 5 = - ( ^ ) w.v (L98)
Así como las fluctuaciones de la energía en el sistema, esto es,
{(SE)2) = ( E 2 ) - { E )2 = Y ,P „ E 2v - ( j T P ^
i ( d 2Q \ _ J _ ( d Q \ 2
Q \d(32 ) N V Q2 \d (3jNy
■ <■«
La amplitud de las fluctuaciones espontáneas esta relacionada con la velocidad de
cambio de la energía debida a las alteraciones en la temperatura.
Asimismo, se puede demostrar fácilmente la siguiente relación entre la función
de partición y la energía libre de Helmholtz: Q = exp (—/3Á).
Índice
66
Capítulo 1
fie = ln ( — - l ) 4* ^ = —g ( 1 .1 0 2 )
H \m ) N l + eP£ v ’
y por tanto,
<B>=m
£=rS» (L103)
• Apliquemos el conjunto canónico. Para ello partimos de las propiedades de la
función de partición (ecuación (1.97)), esto es, —(3A = ln Q = ln
donde,
Q( f i , N) = £ e ~ ^ U ^ = Y, n f = 1 e“ ^
n i,...,n ]v =0,l ni ,...,njv=0,l
= n f=i ^ e ^/3Críj j = n i= i ( X+ e - » « )
= (1 + e~ P e)N (1.104)
Así pues,
- f i A = N ln ( l + e-/?£) (1.105)
con lo cual obtenemos
ee -/3e . Ne
(1.106)
1 + e-
La misma expresión que la obtenida con el conjunto microcónico.
Índice
Capítulo 1
= ln O (E , X ) - E up - Í X V (1.107)
para obetener la última expresión nos hemosquedado solo con los términos lineales
del desarrollo y hemos tenido en cuenta que d S / k s = d l n í i = (3dE + £dX. Con
todo ello, es claro que,
Pu oc elnü = (1.108)
y si normalizamos esta probabilidad obtendremos que,
-(3E U- £ X U
Pu = ------ 5 ------ (1.109)
<S = - k B J P^
V
2 ( - lnS - PE * - Zx v) = k 'B (InS + P( E) + S( X) ) (1.111)
ln Z = (3pV (1*112)
las fluctuaciones y cuando T —* 0, solo aquellos estados para los que la energía por
partícula sea igual a la energía por partícula del estado fundamental, serán accesibles.
El primer paso para analizar cualquier modelo es la clasificación de sus microes-
tados. Para sistemas de partículas que no interaccionan entre sí, tendremos que ca
da una de las partículas estará en alguno de sus estados posibles y la descripción
del conjunto de partículas podrá hacerse, especificando una por una el estado de las
partículas del sistema. Alternativamente, para sistemas de partículas indistinguibles
especificando cuantas partículas del total N están el estado 1, cuantas en el 2, y así
sucesivamente hasta llegar al último accesible a las partículas del sistema, habremos
llevado a cabo la misma descripción. Así el estado v del sistema, estará completa
mente especificado dando las lista de números v = ( n i , . . . , tij, ...). Obviamente,
Nv = 12j nj y E u = Y j ej nj son el número de partículas y la energía del estado v.
Existen dos clases de partículas. Unas, llamadas fermiones, pueden existir sola
mente cada una en su estado (cuántico), y las otras, llamadas bosones pueden existir
tantas como queramos en cualquier estado (cuántico). Esto es, los números de ocu
pación de los estados j son 0 o 1 para los fermiones y cualquier número entero, menor
o igual que el número total de partículas, para los bosones.
e-PA = Q =
V 711,...=0
= %í ( r d = s 7) (U13)
El valor promedio del número de partículas del estado j , esto es su ocupación prome
dio, será,
, - S -n je -g S . aing
69 Índice
Capítulo 1
1 .8.4.2 Gasdefonones
1.8.4.3 Bosones
S = £ = n,- ( J f r .. , ) ( 1 .1 2 2 )
W =S <1123>
Observemos que cuando = /i el número de partículas, de ese estado diverge.
Esto es, todas las partículas se apilan en dicho estado cuya energía es igual al poten
cial químico. Este es el fenómeno conocido como condensación de Bose.
1.8.4.4 Fermiones
“ ~ ^ donde, rij G {0 , 1 }
ni,ri2 ,—= 0
= 11, í J 2 e -P te -r t j = n j ( l + (1.124)
\ nj = 0 /
o bien
PpV = InH = £ ) l n ( l + (1.125)
3
71 Índice
Capítulo 1
{N ) = (L 1 2 8 )
La simulación es una técnica que ha adquirido gran importancia en las últimas dé
cadas. La idea básica es que con un computador uno puede seguir explícitamente las
trayectorias de un sistema con ^ 1 0 4 grados de libertad. Si el sistema se construye
de manera apropiada, entonces puede servir para simular el comportamiento de un
sistema real, al cual representa, y el análsis estadístico de las trayectorias predecirá
las propiedades del sistema.
Hay dos clases de métodos de simulación. Uno, llamado dinámica molecular,
calcula las trayectorias resolviendo las ecuaciones de movimiento de Newton para
el conjunto de partículas. Este procedimiento proporciona información dinámica
además de información acerca del estado de equilibrio. El otro, llamado método
de Monte Cario, es más general, pero no proporciona de una manera explícita in
formación dinámica acerca del sistema. Sin embargo, puede extenderse a sistemas
cuánticos mucho más fácilmente que el anterior y además puede aplicarse a prob
lemas reticulares de una forma natural. En este capítulo daremos una descripción
somera del método de Monte Cario.
72 Índice
Capítulo 1
La ecuación (1.89) nos dice que para calcular el promedio sobre el colectivo de la
propiedad G, tenemos que saber dos cosas: (i) el valor esperado de G en los estados
v y (ii) la probabilidad de todos esos estados v. El método de Monte Cario, calcula
(G) de esta forma, pero en vez de extender la suma sobre todos los estados, lo hace
sobre una muestra representátiva, de forma que el promedio sobre esta muestra sea
igual que el promedio sobre el total. La generación de dicha muestra es pues, la tarea
crucial de método de Monte Cario.
Comenzemos por definir una trayectoria como una secuencia ordenada de con
figuraciones o estados del sistema. Pensemos en una disposición lineal de N molécu
las, fijas en sus posiciones y que pueden estar, cada una de ellas en uno de los estados
de spin accesibles propios de la molécula. La lista v = (si, 5 2 , . . . , sp¡) que dice el
estado de spin de todas y cada una de las N moléculas, especifica uno de los estados
(configuraciones) del sistema. Un paso en este espacio significa variar alguno o var
ios de los estados de spin sj para generar una nueva configuración. Pues bien, una
secuencia ordenada de dichos cambios es una trayectoria. Sea T una trayectoria de
T pasos, el valor promedio de G sobre la trayectoria T será,
1 T
(G)T = - ^ G y(í) (1.129)
t= 1
Supongamos el caso más simple, aquel en que todas las configuraciones tienen la
misma probabilidad. En este caso el método de Monte Cario implica al final evaluar
un sumatorio de la forma,
/ = (L131)
i —1
es, generamos una trayectoria de N pasos que va desde el menor X{ hasta el mayor x¿.
La forma de generar esta trayectoria es mediante un generador de números aleatorios
(random). Existen rutinas (normalmente llamadas RAN) que generan estos números
aleatorios y en general todos los compiladores de FORTRAN traen el suyo. Sin
embargo, cito textualmente:36 "If all scientific papers whose results are in doubt
because o f bad RANs were to disappear from library shelves, there would be a gap
o f each shelf as big as a your fist. Por tanto, hay que ser cuidadoso con el empleo de
esas rutinas.
El método de Monte Cario, a diferencia de la ecuación (1.131), se basa en que
no todas las configuraciones tienen la misma probabilidad. Esto es, dicha probabil
idad responde a una distrubución de Boltzmann. Veamos como podemos generar
trayectorias tales que la distubución de sus configuraciones responda a una distribu
ción deseada w(x). Consideremos la función oj (x ), normalizada a la unidad en el
intervalo de la variable x que nos interesa. Hagamos el cambio de variable x —» y
siguiente,
(1.132)
(1.133)
e n d do
g a v e = s u m /n
p r i n t * , ' I n t e g r a l = ' , gave
end
re a l function ran(dseed)
C D e v u e lv e un n u m ero ra n d o m u n ifo r m e m e n te d i s t r i b u i d o en
tre 0 y 1 .
d o u b le p r e c i s i ó n d s e e d
d o u b le p r e c i s i ó n d 2 p 3 1 m ,d 2 p 3 1
d a ta d2p31m/2147483647.dO/
d a t a d 2p31 / 2 1 4 7 4 8 3 7 1 1 . d O /
dseed=mod(16807.d0*dseed,d2p31m )
ra n = d s e e d /d 2 p 3 1
retu rn
end
caso hemos sido capaces de invertir la ecuación (1.132) con w(x) = exp (—x) para
obtener x = —ln ( 1 —y), en general en muy difícil, cuando no imposible, obtener
la solución de la ecuación (1.132) analiticamente. El algortimo de Metrópolis es una
alternativa a este dilema, ya que genera de una manera sencilla trayectorias que re
sponden a la distribución que se emplea para discriminar la aceptación de las nuevas
configuraciones generadas. Esto es, en la formulación anterior (ver sección 1.8.5.2)
de este método las trayectorias responderán a la distibución ex p (—/?AE vv>). En
otras palabras, a la distribución de equilibrio.
Índice
76
Capítulo 1
donde,
(1.135)
< G>
Q
Qo E„ G y e - ^ e - ^
Q Qo
Estas ecuaciones son la base del procedimiento llamado umbrella sampling, en la
cual se emplean trayectorias de Monte Cario para calcular promedios de magnitudes
en situaciones alejadas del equilibrio.
Este procedimiento se emplea frecuentemente para evaluar propiedades promedio
a lo largo de todo el camino de reacción. Es claro que solo los reactivos y produc
tos reponden a situaciones en las cuales las configuraciones de las trayectorias que
vayamos a empelar para el cálculo de las propiedades promedio tendrán una distibu-
ción de equilibrio. Todos los demas puntos de la coordenada de reacción tendrán
configuraciones con una distribución que no necesariamente responderá a la de equi
librio y por lo tanto su cálculo deberá llevarse a cabo mediante la ecuación (1.136).
Bibliografía
A R F K E N , G. (1985): Mathematical Methods for Physicists, London, Academic Press.
A TK IN S, P.W. y R.S. FRIED M A N (1997): Molecular Quantum Medíanles, 3a Ed.,
Oxford, Oxford University Press.
AVERY, J. (1976): Creation and Annihilation Operators, London, McGraw-Hill.
Índice
77
Capítulo 1
Índice
78
Capítulo 2. Métodos de la química cuántica
Rosa Caballol
Departamento de Química Física e Inorgánica, Universidad Rovira i Virgili, Pl. Imperial
Tarraco, 1, 43005 Tarragona.
M iquel Sola
Instituto de Química Computacional y Departamento de Química, Universidad de Girona,
Campus de Montilivi, 17071 Girona.
Índice
79
Capítulo 2
Por otra parte, en 1964, Hohenberg y Kohn, al demostrar que para el estado
fundamental la energía depende únicamente de la densidad electrónica, sentaron la
base de la Teoría del Funcional de la Densidad (DFT). Las ecuaciones de Kohn y
Sham, un año más tarde, posibilitaron su aplicación práctica. En los últimos años las
aplicaciones de la DFT han crecido espectacularmente, ya que proporciona buenos
resultados a un coste reducido. Actualmente es el método más usado para el estudio
de los sistemas de gran tamaño.
y (2.4)
A B>A *AB
Índice
80
Capítulo 2
Un razonamiento algebraico conduce a una forma general más correcta para una
función aproximada. Supongamos que tenemos un conjunto completo de funciones
monoelectrónicas, que podemos por tanto tomar como conjunto de base. Cualquier
función de un solo electrón puede expandirse de forma exacta mediante la base:
<E>(xI) = J a ¡X¡(Xl) (2.9)
1'
donde { aj sonlos coeficientes de la combinación lineal. Supongamos ahora una
función de dos electrones, de momento con la segunda coordenada fijada, x2.
Podremos expresar la función:
3>(X1>x2) = 2 a¡(x2 )x¡ (Xi) = 2 büXj (x2)Xi .(*1 ) (2.10)
i y
La aplicación del principio de antisimetría convierte la expansión anterior en una
combinación lineal de determinantes:
Índice
82
Capítulo 2
Índice
83
Capítulo 2
tí ¡,ÍXi
É = I ( i lh| j ' K aj + 1 /2 2 ^ ^ ( y l w ) (2.19)
Reglas de Slater-Condon
N N
0 2<a|h|a) l/22Y(ab||ab)-
a a o
1 a^ r <alhlr) £(abH
' 2IZl 0 <abH
>2 0 0
Índice
Capítulo 2
En general, en los sistemas de capa abierta, es decir los que tienen electrones
desapareados, un solo determinante restringido no suele ser función propia de S2 y
es necesario generar combinaciones lineales adaptadas de espín. Una solución
alternativa es no adoptar esta restricción y utilizar la forma no restringida, en la
que no coinciden las partes espaciales para los espinorbitales a o p:
‘P r(r)-X i(x ) = cpr(rMí0) = cpr y q>j(r)-*Xj(x) = q^(r)p(w) = 9? (2.21)
La ortogonalidad de los espinorbitales de distinto espín se garantiza por la
ortogonalidad de la parte de espín, ya que los orbitales espaciales a y p no suelen
ser ortogonales: ^cp“ tp^ = S“|! * 0 . Estos determinantes no son función propia de
S2y el valor esperado correspondiente depende de cuánto se alejen de la
ortogonalidad las dos series de orbitales espaciales.
Índice
Capítulo 2
O «W 0 (2 .2 2 )
Ya hemos visto antes la expresión del valor esperado de la energíapara una
función deonda de este tipo, suponiendo el determinante normalizado:
E 0 - ( % | H | % ) = 2 ( a N a) + l / 2 Í Í ( a b ||a b ) (2.23)
La aplicación del método variacional nos conducirá a minimizar E0. Dado que
los espinorbitales constituyen una base ortogonal y que el operador es hermítico:
8 E0 = 2(8'F 0 |H|W 0) = 0 (2.24)
La variación 6W0 será producida por la variación de los espinorbitales que deben
mantenerse ortogonales. Dado que éstos constituyen una base ortonormalizada, la
variación del espinorbital %a puede expresarse en función de la base y para asegurar
la ortogonalidad, habrá que restringir la suma al subespacio complementario:
8 Xa = 2 C arXr = ^ C (2 '2 5 )
r r* a ,b ,...
Precisemos que el; teorema sólo se cumple para la configuración que minimiza la
energía.
Índice
86
Capítulo 2
Las reglas de Slater nos indican que la expresión de las integrales anteriores es:
( ^ | H |W 0) = (r|h |a) + |( r b ||a b )
Índice
87
Capítulo 2
Índice
88
Capítulo 2
N/2
donde P, a = 2 ^ CbxCbo son ^os elementos de la matriz densidad P, y ([iv |Xa) es
Eo = l / 2 2 I Pv ,(H“; e+ F v J (2-40)
V \l
La base de orbitales atómicos no suele ser ortogonal, por lo que hay que
efectuar una transformación, equivalente a ortogonalizar la base, para transformar
la ecuación (2.36) en una de valores y vectores propios. La transformación más
conocida es la transformación de Lowdin:
F = ST1/2FST1/2 (2.41)
y la resolución de la ecuación
Índice
89
Capítulo 2
Como se verá más adelante, una vez determinada la matriz densidad, se pueden
calcular muchas propiedades del sistema, y en particular efectuar un análisis de
densidad electrónica. El análisis de población de Mulliken, aunque representa una
partición grosera de la distribución electrónica, puede efectuarse fácilmente, ya que
se verifica:
N -^ P S S ^ -M P S ) (2.44)
ho = 2 ° CbCt*Cba (2-48)
b
Índice
90
Capítulo 2
Na *Np *
P,aa = 2 C c“a , P l = 2 4 4 y P = P“+Pp (2.50)
b b
que hay que resolver conjuntamente porque las dos matrices de Fock dependen de
la matriz densidad total, P. Al análisis de población puede añadirse en este caso el
de la densidad de espín:
p S = p a _ p fS
Si utilizamos una base mínima para describir la molécula, la simetría Dooh nos
permite expresar los orbitales moleculares en función de los atómicos:
o g = l / V 2 ( S ^ ( s A + SB) y o u = 1 /-y/2(l- SAB) (sA - sB) (2.52)
La energía electrónica del sistema:
Eo - 2 H hh ) + , °.<>. a - 53)
El solapamiento SAB-* 0, para r -» y E0 se convierte en:
E 0 = ((sA + sB)|h |(sA + s B)) + l/4 ((s A + sB)(sA + sB)|(sA + sB)(sA + sB)) (2.54)
Para r oo, todas las integrales bicéntricas tienden a anularse, con lo cual:
^ 0 (^- 2 ) = 2(sa |h |sA) + l/2 ^ s AsA|sAsA) = 2E 0 (H) + l/2 ^ sAsA|sAsA^ , r —> 00 (2.55)
La energía de disociación de la molécula se sobrestima pues en l/2 ^ sAsA|sAsA) .
Índice
91
Capítulo 2
Índice
92
Capítulo 2
Esta expresión indica que las diexcitaciones tienen un peso predominante, siempre
que el coeficiente c0 del determinante fundamental sea grande. No obstante, esta
importante conclusión no autoriza a incluir solamente lasdiexcitaciones en la
función, ya que en lafunción exacta, los valores de los coeficientesdependen de
las interacciones con otras excitaciones.
con E 0 = 2 ( a g |h |a g) + (2.62)
Índice
93
Capítulo 2
(2.64)
y cD - Kgu /(Ecorr - 2A) , con 2A —ED—E 0 (2.65)
La diferencia de energía entre las dos configuraciones es:
2A = ED - E0 = 2 ( a u |h |a u} - 2 (o g |h |a g) + - J0g0g (2.66)
Todas las integrales bielectrónicas tienden a l/2 ^ sAsA|sAsA)para r -> oo? con lo
que A -* 0 y Ecorr -»■ - l / 2 ( s AsA|sAsA) . Por tanto, E = E 0 + Ecorr = 2E(H) y puede
concluirse que la correlación restituye la energía correcta de los fragmentos.
-» E = 2E;
cDi - cÜ2 ;cc - cD]
Ecorr(2H2) = 2 (A -(A 2 + K^ )
\l/2 \
J = 2Ecorr(H2) (2.68)
Índice
94
Capítulo 2
E0 Kgu Kgu ^
Kgu E 0 +2A 0 Edci = E 0 + A - ( A2 + 2KgU)’ /2 (2.70)
Kgu 0 E 0 +2A
lo que implica que para n -> oo la energía de correlación por monómero tiende a
cero. De este simple ejemplo se concluye que la SDCI no se puede utilizar sin
grandes precauciones o corrigiendo de alguna forma el error de size-consistency.
Puede generalizarse el problema a todas las ICs truncadas a unnivel de excitación
dado. Existen algunas correcciones, con distinto nivel de sofisticación para
solventar este problema.
Índice
95
Capítulo 2
2.3.1.3. Correcciones
Otras correcciones más sofisticadas son por ejemplo la denominada SC 2CI, self-
consistent size-consistent CI, que incorpora correcciones de forma autoconsistente
a los elementos diagonales de la matriz H, sea cual sea el tipo de selección o de
truncamiento. La técnica es naturalmente más cara, pero mucho más correcta, y
tiene la ventaja sobre otros métodos que aseguran una correcta separabilidad como
los métodos de Coupled Cluster de no apartarse de la resolución de un sistema de
ecuaciones lineales.
Hay que indicar por otra parte que la necesidad de recurrir a funciones de onda
multireferenciales subsiste cuando se añade la correlación electrónica: si el sistema
no está bien descrito a orden cero mediante un determinante, tampoco lo estará
mediante una función que parta de un solo determinante como referencia para
generar la función <J>SDCI. En estos casos, hay que recurrir a funciones <Í>SDCI
multireferenciales. Si por ejemplo la función de referencia ha de describirse
mediante el determinante fundamental y una doble excitación, la función MRSDCI
incluirá todas las diexcitaciones respecto al fundamental y respecto a la
diexcitación de la referencia. Incluirá pues cuadriexcitaciones. El problema formal
de la mala separabilidad subsiste en este caso y las correcciones antes indicadas
son igualmente aplicables.
Índice
97
Capítulo 2
> i > = K })^+ 1 [(Eí0) - Ho)_1 Q(V + E<0) - E¡)]k |<D|0)) (2.89a)
es decir
u ,,,,
i 1 / .A
k,j*i (Ef0) - E (k0))(E[0) - E ^ ) I k
< 2 -1 0 2 )
Índice
99
Capítulo 2
y para la energía:
í2103,
Z¡ ( E f }- E f } ) 2 K¿-Mó)
Es importante señalar que la degeneración ocasional entre las energías de orden
cero de los estados excitados y el estado de referencia conduciría a contribuciones
exageradas que ocasionarían la divergencia de la serie. Para una buena estimación
de las correcciones, es necesario que no exista degeneración. Si existe, el orden
cero monoreferencial no sería adecuado. Cuando el sistema requiere un
tratamiento multireferencial, una solución consiste en construir un Hamiltoniano
efectivo Hef hasta el orden de perturbación deseado. El espacio de referencia, S,
está constituido por los determinantes que dan una descripción correcta a orden
cero. A los elementos matriciales del Hamiltoniano en esta base, se van añadiendo
correcciones. Así, por ejemplo, a segundo orden de perturbación, si x¥ l y Wj son
dos determinantes del espacio de referencia y Wa un determinante del espacio
complementario:
Heuf =H(0)+H(2)
IJ u
(2.104)
v '
con
St E¡0)-E<0) I J
Una vez corregidos todos los elementos de matriz, por diagonalización del
hamiltoniano efectivo obtendremos la energía correspondiente.
de H2 sin interacción.
Índice
100
Capítulo 2
Y Aj Bj
Sustituyendo en (2.99):
(2) ^ ( < )lii(B?|(vA + VB) | | ( v A+ v B
Bi ES>+ E g)-(E ^> .+ £(“>)
e P - 2
ü(0) __P(0)
J*i Bi Bj
,v M
\
? IVAIW£>
Al | A |
) Nf<j$
AJ / \ AJ IIVAIA | ¡A1 / /O 1 1 1 \
Z E(0) _ E(0) • >
Índice
Capítulo 2
Las funciones de orden cero son los determinantes y las energías de orden cero la
suma de energías monoelectrónicas:
| o | 0)) = |W0 ) , | o i 0)) = |Wk>, con|V k) = |xpXq- ) (2.78) y (2.79)
(2.116)
(2.117)
r< s
y (2.118)
r< s r< s
Una vez más se observa que la degeneración de las energías de orden cero tiene
una traducción sencilla a nivel orbital; la degeneración entre orbitales ocupados y
virtuales. Cuando no existe una buena separación entre orbitales ocupados y
virtuales, no es adecuado este tratamiento. Los órdenes superiores presentan,
naturalmente, el mismo problema.
Índice
102
Capítulo 2
_E<1) (2 U 9 )
a<b ( £ a + 8 b ” 8 r ” 8s )
Índice
103
Capítulo 2
donde t[ , t™b, t^c, ... son las amplitudes de cluster. Expandiendo la exponencial en
serie:
ef = Q = 1 + T + — f 2 + —T3 +... (2.127)
2! 3! v ’
e igualando los términos con igual orden de excitación, se obtienen las relaciones:
q=Ti Tj = c,
c2 = í 2 + ^ í2 t 2 = c 2~~cf
C3 = f 3 + f , f 2 + ^ f ,3 f 3 = C3 - C,C 2 + I c ? (2.128)
C4 = t 4 + I f 22 +í]73 + i f 2 f 2 + l f ,4 T4 = C4 - i c 2 - Q C 3 +C fC 2 - ± C f
Índice
104
Capítulo 2
Índice
105
Capítulo 2
= trsE
ab con (2.139)
( ^ | H | ^ b)t^tsb = ( ( ^ o |H |^ sb) t sb )n
(2.140)
Índice
106
Capítulo 2
La Teoría del Funcional de la Densidad (DFT) (Parr, 1989) representa una forma
alternativa a la de los métodos ab initio convencionales de introducir los efectos de la
correlación electrónica en la resolución de la ecuación de Schrödinger electrónica. De
acuerdo con la DFT, la energía del estado fundamental de un sistema polielectrónico
puede expresarse a partir de la densidad electrónica, y de hecho el uso de la densidad
electrónica en lugar de la función de onda para el cálculo de la energía constituye la
base fundamental de la DFT. Por desgracia, la fórmula matemática exacta que
relaciona la energía con la densidad electrónica no es conocida, y es necesario recurrir
a expresiones aproximadas. Estas expresiones acostumbran a proporcionar resultados
sorprendentemente buenos si uno considera las aproximaciones en las que éstas se
basan. El principal inconveniente de estos métodos se encuentra en el hecho de que
para sistemas en que DFT da resultados erróneos no hay forma sistemática de
mejorarlos. Aún así, los métodos basados en la DFT se han popularizado en la última
década para el cálculo de sistemas de cierto tamaño, y en especial para los complejos
de metales de transición, a partir de la introducción de funcionales de correlación-
intercambio que proporcionan resultados de calidad comparable o superior a la que
ofrece el método MP2. En los apartados que siguen a continuación se discuten los
fundamentos y la formulación práctica de la DFT.
107
Capítulo 2
108
Capítulo 2
en cuenta que:
N(N-1) = (Na+Np)(Na+ Nr l) = Na (Na-1) + NaNp + NpNa + Np(Nr l) (2.152)
se puede demostrar por simple sustitución que se verifica la ecuación (2.149).
Índice
109
Capítulo 2
En este apartado vamos a desarrollar las expresiones que se obtienen para las
funciones y matrices densidad de primer y segundo orden para un sistema de N
electrones descrito por funciones de onda constituidas por un solo determinante de
Slater. Distinguiremos entre el caso de un determinante para un sistema restringido a
capa cerrada, en el que:
2.4.1.3.1. D e t e r m in a n t e d e s l a t e r r e s t r in g id o d e c a p a c e r r a d a
P in ) •
áwWz,(1)í,0- •
á w j w ••
(2.163)
y por tanto:
N N
P - 164)
De la misma manera, para la matriz densidad de primer orden tenemos:
N_
p fó )= 2 2 (2-166)
i= I f . I V fi V
N
2
donde Pv/i = 2 ^ CfMCvi son elementos de una matriz hermítica que es la matriz
densidad P.
Por lo que respecta a la función de pares partiendo de (2.147) y (2.148) y
siguiendo el mismo procedimiento obtenemos la expresión:
Índice
110
Capítulo 2
N N
~2 2
Y & h ) = 4^ ^ X i ( ñ ) X j ( r 2)X¡ ft)Xj(r2)-^X *(ñ)x](r2)Xj(ñ)Xi (?2) j (2.167)
se obtiene finalmente:
Y Á ^ r .2) = Z
Yj Z
Yj Z
Yj Z2j ) & * (F2 )0ct<7i)0af ë ) (2-170)
ß V <7 A
2.4.1.3.2. D e t e r m in a n t e d e s l a t e r n o - r e s t r in g id o
/>« = y c *.c . pa
vu 2 j ^ Vl
(2.173)
,1 ;
Para la matriz densidad de primer orden tenemos:
K ^ - p ^ pí - p m (2.178)
Obviamente tenemos expresiones idénticas para el caso de dos electrones |3
simplemente cambiando a por P en las ecuaciones (2.175) a (2.178). Para el caso
de un electrón de tipo a e n r j otro (3 en r 2 nos queda:
Na Na +N p
y f (Fi ,r2) = y y , x ' ) * ! (A)X¡ Q\)X, ( r2) = P° ( Á ) p /J (f2) (2.179)
m y 4 r+i
yf(A^2)= 2 r ^ A^ ^ ^ ^ ^ ( F2 ) (2-180)
livoX
K L = pX (2-181>
^ j ^ l = P(r1, f 2) (2.183)
P ( ri)
se obtiene la densidad de probabilidad condicional, P(r ,r :), que nos da la densidad
de probabilidad de encontrar un electrón en r2 cuando ya hay uno en rr Esto se ve
más claro cuando se reordena (2.183) a:
Índice
112
Capítulo 2
(2-186)
p ir i)
pxc(rpr2) recibe el nombre de hueco de correlación-intercambio o de Fermi-Coulomb.
Según (2.185) el hueco de correlación-intercambio es el término de corrección que
hay que añadir a la probabilidad no condicional para obtener la probabilidad
condicional. No es más que la región alrededor del electrón en la que la presencia de
otros electrones está excluida en mayor o menor grado. Sustituyendo (2.185) en
(2.184) se tiene que:
Y 2 (Fi >F2 ) = p fó )P(r2) + p ( f x) p xc (rx, r2) (2.187)
De la misma forma que la ecuación (2.149) separa la densidad bielectrónica para
cada par de puntos en cuatro contribuciones, también es posible separar las
contribuciones a pxc(r 1?r2). Así:
r T (?,, f2) - p " (?, ) p " ñ ) + r " (i;, r2) p . 188)
1- ¿ % ^ - P " \ r lJ 2) - p \ r i ) + Y^ % ^ . p \ r 1) + p í ( f ¡, f 1) (2.190)
p to ) p ir i)
p“,!xc(rpr2) es el denominado hueco de Coulomb y nos daría la zona en la que la
presencia de un electrón [3 está excluida o favorecida en el caso que tengamos un
electrón de referencia con espín a situado en r r
p£ft.ri)—P“(rí) (2.192)
A partir de (2.150) y (2.145) se demuestra fácilmente que:
-W. -1 (2.193)
y a partir de (2.151) y (2.145) de forma equivalente se encuentra:
f y ? ( 7 „ 7 2)d72 . N l P °(7t) (2.194)
Partiendo de (2.190) y utilizando (2.194) se verifica que:
JP xf (7i>F2)dr2 = f p % ( r \ , r 2) dr2 = 0 (2.195)
De forma parecida, partiendo de (2.189) y usando (2.193) se llega a:
fp Z (r,A )* 2 — i (2.196)
Dado que para un electrón a cualquiera:
Pxc (ri») = Pxc (ri’r2)+ Pxc (n’rz ) (2.197)
se llega por sustitución a:
j*P xc (^lJ^2) ^2 = —1 (2.198)
lo que constituye la denominada regla de la suma. Así, un electrón situado en r
crea a su alrededor un hueco, un déficit de carga, siendo la carga que desplaza
exactamente igual a la de un electrón positivo. Este hueco sigue al electrón en su
movimiento.
Índice
114
Capítulo 2
Hueco
de Fermi
Hueco de
Coulomb
Hueco
total
115
Capítulo 2
Índice
116
Capítulo 2
W ) = Ì l i ^ 1,2)Y 2^ ^ (2.207)
H„
(2.209)
Sustituyendo (2.187) en la ecuación anterior nos queda:
Índice
117
Capítulo 2
Por funcional entendemos una expresión matemática que asocia un número a una
función. Se suele escribir entre corchetes. Un ejemplo clásico es el de la integral
variacional,
(2.212)
Dada una función el resultado de aplicar (2.212) es una energía, y por tanto la
energía es un funcional de la función de onda. Los funcionales pueden
diferenciarse y derivarse.
(2.213)
(2.214)
« V =V„,\p + S p ] - v M - f v f f ) S P d r - f - ^ - S p d r (2.217)
por lo que:
Índice
118
Capítulo 2
ÖV
— ^ = v(r) (2.218)
dp
Para demostrar este teorema en primer lugar demostraremos que dada una
densidad p(r), el potencial externo queda determinado excepto en una constante
aditiva. La demostración la haremos por el absurdo, suponiendo que lo dicho no es
cierto y llegando a una contradicción.
Índice
119
Capítulo 2
Dado que p(r) determina el número total de electrones del sistema a partir de
(2.144) y también fija v (r) según el primer teorema de Hohenberg-Kohn, se concluye
que p(r) determina el hamiltoniano (excepto en una constante aditiva) y la función de
onda del estado fundamental, y por extensión todas las propiedades observables del
estado fundamental, incluyendo la energía cinética de los electrones, la repulsión
coulómbica, etc. En particular, E=E[p]. Así pues, hay una relación directa entre la
densidad y la función de onda a través del potencial externo:
p(r) v (r) - > H (2 .2 2 2 )
p ( r ) <^> ip (2.223)
Es importante señalar que la demostración es únicamente válida para estados
fundamentales no degenerados y siempre y cuando p(r) sea N-representable y v-
representable. Que sea N-representable se refiere básicamente a que p(r) debe ser una
función definida positiva en todo el espacio y que su integral debe ser igual al número
total de electrones del sistema:
p (r) > 0 y Jp{r)dr = N (2.224)
Que sea v-representable significa que existe un potencial externo a partir del cual
puede derivarse la densidad p(r). Esta condición es más difícil de comprobar y, de
hecho, se ha demostrado que existen densidades de prueba razonables que no pueden
derivarse de ningún potencial externo. En los demás casos, las desigualdades (2.219)
y (2.220) no tienen porque cumplirse. Para los casos en que este teorema es válido
tenemos que:
E[p]=TTp]+VJp]+VJp] ( + V J (2.225)
T[p] y V Jp ] son funcionales universales, dadoque no dependen del potencial
externo. Habitualmente se engloban dentro del funcional FHK[p] con lo que:
E v [ p ] = $ p ( j ) v { r ) d r + F Hk
(2.226)
donde Ev[p] indica que para un potencial externo v(r) determinado la energía es un
funcional de la densidad.
Índice
120
Capítulo 2
= 0 (2.231)
Sp
por lo que:
ip T + V„. ■Vo)+ J P o ( r ) v n(r)dr
Po
(2.233)
Dado que M*, y conducen por integración a la misma densidad po, los términos
de interacción electrón-núcleo a cada lado de la desigualdad son idénticos, y por tanto:
Po
T + V„. x¡) Po]> \Vo T + K, (2.234)
Así pues, del conjunto de funciones de onda que por integración dan pQ,\p p }, la
es la que minimiza el valor esperado de T + Vée. Es, por tanto, posible determinar
únicamente a partir del conocimiento de po, por minimización restringida dentro
del conjunto {p p }del valor esperado de f + Vee:
Por otro lado, los estados degenerados dejan de ser un problema dado que en la
búsqueda restringida nos limitamos a una de las funciones degeneradas, la que
corresponde a la densidad que nos interesa. Para dos estados degenerados con Wí y
W2 tendríamos:
(2.236)
P i { r ) - ^ v n( r ) ^ H ^ x p 2 (2.237)
En la formulación de Hohenberg y Kohn, no se puede establecer la relación biunívoca
directamente entre pí y puesto que al pasar por un potencial idéntico, ésta se
pierde. En la formulación de Levy restringida esto sí es posible dado que restringimos
la minimización al conjunto de funciones W que por integración dan p 1 (entre las
cuales precisamente no se encuentra W2 dado que por integración da p^, y por tanto,
esta formulación permite generalizar el primer teorema de Hohenberg y Kohn a
estados fundamentales degenerados.
Índice
122
Capítulo 2
f 6¿p ( ^ óp óp =0 (2.241)
y reagrupando:
(2.242)
1 ^ (0 J
lo que proporciona la condición de minimización restringida y permite obtener el
valor de u en el mínimo:
(2.243)
Índice
123
Capítulo 2
(2.244)
(2.245)
(2.246)
La densidad exacta y la energía cinética exacta para este sistema son, respectivamente:
N,
(2.247)
(2.248)
(2.249)
óp( r ) óp(r)
Índice
124
Capítulo 2
con:
E v\ p \ = ^ i = Ts [ p \ + S P ( f ) v s (?)dr (2.250)
(2.253)
(2.255)
Con estas consideraciones la ecuación de la energía (2.251) nos queda:
Índice
125
Capítulo 2
o bien:
^ M + v ^ ( r ) = íi (2.261)
óp ( r )
Comparando (2.261) con (2.249) podemos concluir que la ecuación a resolver para un
sistema de electrones con interacción es la misma que para un sistema de electrones
sin interacción sometidos a un potencial veff(r). En consecuencia, la solución a la
ecuación (2.261) es la misma que para (2.249), cambiando vs(r) por veff(r). Las
ecuaciones a resolver con:
126
Capítulo 2
E hf = ( w hf H W hf
C,KS
Figura 2.2. La energía de correlación es mayor en valor absoluto en DFT que en HF.
127
Capítulo 2
128
Capítulo 2
d N =f S p ( r ) d r (2.269)
Sustituyendo (2.268) y (2.269) en (2.267) llegamos a:
SE \
(2.270)
La comparación de (2.270) con (2.266) nos lleva a una nueva definición para ¡x:
SE \ (dE\
br?=\
váp(O Jv =h d =
\ d N )v
(2-271)
La ecuación (2.271) nos dice que u=n[N,v] es la derivada de la energía respecto al
número total de electrones. Nos indica cómo cambia la energía al variar el número de
electrones, y de ahí que reciba el nombre de potencial químico, dado que esta
definición es análoga a la del potencial químico en termodinámica clásica.
dpi \ ( 5 2E \ dP ( r ) \
{ ó2£ ) (2.278)
f( ñ - [Óv(r)dN j K8 N 6 v ( r ) J
I m o JN dN Jv
se llega a:
Índice
129
Capítulo 2
* (2-281)
Índice
130
Capítulo 2
2.4.5.2. La dureza
(2.285)
La ecuación (2.286) nos muestra que la dureza no es más que la diferencia energética
entre HOMO y LUMO. Es previsible que, en general, una diferencia energética
grande corresponda a sistemas estables y poco reactivos, mientras que cuando la
diferencia de energía HOMO-LUMO sea pequeña es de esperar que el sistema sea
poco estable y altamente reactivo.
La definición dada en la ecuación (2.278) de la función de Fukui nos dice que ésta
se puede interpretar o bien como una medida de la sensibilidad del potencial químico
de un sistema ante un cambio en el potencial externo, o bien como una medida de
cómo varía la densidad electrónica al aumentar el número de electrones del sistema.
Esta última definición:
Índice
131
Capítulo 2
(a) (b)
Figura 2.3. Dibujo del contorno de 0.01 u.a. de las funciones de Fukui (a) f y (b) f
para la molécula de formaldehido.
Índice
132
Capítulo 2
(2.293)
dp( r ) dp( r )
relacionan la energía y el potencial de correlación-intercambio total con la energía de
correlación intercambio por partícula, bxc, y con la energía de correlación-intercambio
por unidad de volumen, exc.
(2.295)
con lo que:
4
(2.296)
y:
(2.297)
Índice
133
Capítulo 2
Índice
134
Capítulo 2
-V (2.299)
2 Xi
2
T*[p a ] = % \ Xi
(2.302)
se tiene que:
£x I
Tomando el límite cuando r=|r 1-r2| tiende a infinito, donde se puede considerar que el
denominador de (2.309) se mantiene constante en una primera aproximación, y
utilizando la regla de la suma (2.198), se ve que el comportamiento asintótico exacto
de la energía de intercambio es:
limex [ p \ = ~ (2.310)
r->oo 2r
(2.317)
Para cualquiera de estas tres funciones se puede demostrar a partir de (2.314) y
teniendo en cuenta (2.315) que poseen el comportamiento asintótico correcto dado por
(2.310). Sin embargo, Becke mostró que la última con (3=0.0042 es la que da el mejor
ajuste respecto a densidades de intercambio exactas para una serie de átomos.
Con las correcciones GGA se mejoran las geometrías, las frecuencias y las
densidades de carga LDA. Se obtienen errores promedio de 6 kcal/mol en tests
termoquímicos y funciona razonablemente bien para sistemas con enlaces por
puente de hidrógeno, aunque continúa fallando en la descripción de complejos de
van der Waals.
Índice
137
Capítulo 2
H ‘r (2.319)
E ( 1) = Ts [ p ] + J p ( f ) v n (r ) dr + —J j * p zr drldr2 + E xc [p ] (2.321)
(2.322)
Por otra parte, el teorema de Hellmann-Feyman nos permite escribir:
dE dH ‘
-íp dr (2.323)
dk J ' dk
por lo que utilizando la derivada respecto a A. de (2.318):
dE dHx , A \ , X
= (ip' 1P' (2.324)
dk dk / =\ dk I J> 1 r ¡j
Dado que:
1 dEx
f ^ - d k =E(l)-E(0) (2.325)
Jn d k
y sustituyendo (2.323) en (2.325) y haciendo uso de (2.207) que nos da el valor
esperado de un operador bielectrónico en función de la densidad bielectrónica
llegamos a:
Índice
138
Capítulo 2
\dE
m - m ■dÁ = I (xi)'' , - j p <2 3 2 6 >
^ dk
Sustituyendo (2.187) en la ecuación anterior tenemos:
(2.327)
Integrando respecto a X:
E x c b ] = \w £ \p \+ \w ¡ ;? \p \ (2.331)
Como principales ventajas que ofrece este método con respecto a HF podríamos
citar: a) se obtienen buenas geometrías, buenos momentos dipolares, excelentes
frecuencias vibracionales, y una buena estimación de la termoquímica y barreras de
reacción con un coste similar al de HF, introduciendo correlación electrónica a un
coste muy reducido; b) la contaminación de espín en cálculos no restringidos UKS es
normalmente inferior a la de los cálculos UHF; c) la densidad DFT presenta
características típicas de las densidades que se obtienen con métodos ab initio de nivel
alto; y d) DFT proporciona excelentes resultados para moléculas tradicionalmente mal
descritas a nivel HF (FOOF, FON, metales de la primera serie de transición...) siendo
el método más utilizado en la actualidad para tratar sistemas organometálicos y
bioinorgánicos.
Como principales inconvenientes hay que citar que trata de forma incorrecta en
general: a) los sistemas con un único electrón (dado que la energía de correlación-
intercambio es diferente de cero); b) sistemas con enlaces débiles como complejos de
van der Waals y complejos por transferencia de carga; y c) disociación de enlaces en
especies iónicas radicalarias en las que la carga y el espín están separados en distintos
fragmentos o localizados en el mismo fragmento. Por otro lado, tampoco hay
demasiada experiencia en el tratamiento de estados excitados y estados claramente
multideterminantales. Con todo, el principal inconveniente de la DFT se encuentra en
el hecho de que, si el potencial de correlación-intercambio usado no da los resultados
esperados, no hay forma sistemática de mejorarlos. No obstante, hay que esperar que,
en el futuro, el trabajo actual de muchos científicos que se dedican a mejorar los
potenciales de correlación-intercambio existentes dé sus frutos y que finalmente el
químico teórico disponga de un procedimiento para mejorar los cálculos DFT de
forma sistemática, pasando por distintos niveles de aproximación.
Índice
140
Capítulo 2
b i b l i o g r a f Ia
Índice
141
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
Capítulo 3. Técnicas computacionales
3.1. IN TR O D U C C IÓ N
3.2.1 Ordenadores
143
Índice
Capítulo 3
144
Índice
Capítulo 3
Debido a que los circuitos de los ordenadores se han diseñado para ser
capaces de distinguir el paso o no de corriente, toda la información que existe en un
ordenador (datos+programas) se haya codificada de forma binaria, es decir, bajo la
forma de conjuntos de ceros y unos. La unidad mínima de información es un bit
(acrónimo de binary digit), que puede contener un dígito binario (un cero o un
uno). A efectos de su tratamiento más efectivo, la unidad mínima de
almacenamiento es un byte, formado por una serie de 8 bits y representado por la B
mayúscula. El conjunto de 1024 bytes recibe el nombre de kilobyte (1 kB),
mientras que el conjunto de 1024x1024 bytes (aproximadamente 106) bytes es un
megabyte (1 MB), y el de 1024x1024x1024 (aproximadamente igual a 109 bytes)
es un gigabyte (1 GB).
La forma en que se almacena en código binario la información depende del
tipo de información que se quiere guardar:
Números enteros: Traducción de decimal a binaria. Por ejemplo, el 4
decimal equivale al 000100, si se emplean seis dígitos binarios. Esta
representación es exacta.
Números reales: Se representa el número real mediante un par (mantisa,
exponente), y cada parte se representa como si fuese un número entero.
Así, el número real 102.35 tiene la forma (mantisa, exponente) de
+0.10235xl0+3. La mantisa es +10235, mientras que el exponente es +3.
Los dos signos son importantes. Definida la mantisa y el exponente, cada
parte se codifica como un número entero. Esta representación no es
exacta, dado que siempre se pierde precisión en la parte de la mantisa para
números muy grandes o muy pequeños. Esta pérdida de precisión da lugar
a la propagación de errores en los cálculos numéricos.
Números complejos: Se representa como un par (mantisa, exponente) para
la parte real y otro para la parte imaginaria.
Caracteres alfanuméricos: Se guardan carácter a carácter, codificados
como enteros siguiendo el convenio ASCII.
Variables lógicas: Se almacenan en un bit, de forma que el resultado
.TRUE. o .FALSE. se identifica por un 0 o un 1.
145
Índice
Capítulo 3
146
Índice
Capítulo 3
147
Índice
Capítulo 3
148
Índice
Capítulo 3
149
Índice
Capítulo 3
150
Índice
Capítulo 3
151
Índice
Capítulo 3
152
Índice
Capítulo 3
153
Índice
Capítulo 3
154
Índice
Capítulo 3
155
Índice
Capítulo 3
Siempre es posible escribir una condición para que no exista el bloque asociado al
incumplimiento de la condición.
156
Índice
Capítulo 3
negativos, o cero. Una práctica general es hacer que la última de las sentencias del
bloque a repetir sea la sentencia CONTINUE. Así sucede, por ejemplo, en el
siguiente conjunto de instrucciones, que permiten calcular el factorial de un
número entero
READ(5,*) N
FAC=1.0
DO 10 1=2,N,1
FAC=FAC*I
10 CONTINUE
WRITE (6 ,*) 'EL FACTORIAL DE ', N, ' VALE', FAC
STOP
END
En este programa el bloque DO se inicia con el valor N=2. Se incrementa en 1 y se
repite dicho bloque hasta que I es mayor que N (es decir I=N+1), momento en el
que se ejecuta la sentencia posterior a la de la etiqueta que cierra el bloque DO (en
este caso la sentencia WRITE).
Existen varias restricciones en el diseño de bloques DO. La primera es que
no se puede variar el valor de la variable que sirve de índice desde dentro de las
sentencias del bloque DO, como sucede en el caso
DO 10 I =1,N
1= 1+1
10 CONTINUE
Una sentencia como esta cambiaría el valor del índice dentro del bloque de
sentencias a ejecutar y carece de lógica. El compilador comprueba que no se
produzca este tipo de errores y, cuando se producen, se los indica al programador
(los considera como errores de FORTRAN, aunque se trata de errores en la lógica
del programa).
Otro error común es el que se produce cuando existe un DO dentro de otro
(se denominan DO anidados), como en el caso:
DO 10 1=1, N
DO 20 J=1,N
20 CONTINUE
10 CONTINUE
En este caso, los dos DO están correctamente anidados, es decir, el más interno
está completamente contenido en el más externo. Sin embargo, si las dos
instrucciones CONTINUE del final se cambiasen de orden, se produciría un cruce
157
Índice
Capítulo 3
158
Índice
Capítulo 3
159
Índice
Capítulo 3
160
Índice
Capítulo 3
Lectura en bloques:
Todo lo descrito para lectura de datos puede emplearse para escritura de datos, con
sólo sustituir el comando READ por WRITE y cambiar el periférico de lectura (5,
en este caso) por el de escritura (6 , por ejemplo).
161
Índice
Capítulo 3
162
Índice
Capítulo 3
163
Índice
Capítulo 3
164
Índice
Capítulo 3
cali getenv('file3',nombre)
165
Índice
Capítulo 3
realizan una tarea específica con unos datos de entrada, devolviendo al programa
del que depende los resultados de dicha tarea. Este concepto de dependencia y
entrada salida de datos se ilustra en la Figura 1. Un programa principal puede
llamar a varios subprogramas, que a su vez pueden llamar a otros subprogramas.
Igualmente, un mismo subprograma puede ser llamado más de una vez por su
programa llamador.
En FORTRAN-77 existen dos tipos de subprogramas, denominados
SUBGRUTINE y FUNCTION, cuya única diferencia es la forma en la que se pasa
la información entre dichos subprogramas y los programas llamadores. Las
instrucciones que forman parte de ambos tipos de subprogramas son aquellas que
se encuentran entre la instrucción que identifica el subprograma y el primer END
encontrado en la secuencia de instrucciones. Normalmente, antes de el primer END
debería de existir una instrucción del tipo
RETURN
que devuelve el control al programa llamador y le pasa los datos. Sin embargo,
pueden existir casos en que dicha instrucción deliberadamente se sustituye por una
instrucción STOP, en cuyo caso el programa para su ejecución y termina.
SUBROUTINE
166
Índice
Capítulo 3
C PROGRAMA PRINCIPAL
DIMENSION A(20,20),B(20,20)
167
Índice
Capítulo 3
COMMON/MAT/N,M
C
C LEE EL NUMERO DE FILAS (N) Y COLUMNAS (M) DE LAS
C MATRICES
C
READ(5,*)N,M
C
C LEE LA SUBRUTINA A
C
CALL LEE(A)
C
C LEE LA SUBRUTINA B
,C
CALL LEE(B)
STOP
END
C
C SUBRUTINA LEE
SUBROUTINE LEE(A)
COMMON/MAT/NF,NC
DIMENSION A(20,20)
DO 10 1=1,NF
10 READ(5,*)(A(I,J),J=1,NC)
RETURN
END
F U N C T IO N
168
Índice
Capítulo 3
Debe existir una correspondencia entre los parámetros del programa llamador y los
del subprograma FUNCTION o si no se producen errores en la ejecución. Un
ejemplo de todo esto puede verse con la siguiente función, que devuelve el valor de
la función y=ax2+b, dados los valores de x:
C PROGRAMA PRINCIPAL
C
COMMON/D ATO/A,B
C CALCULA LA PARABOLA EN X=2.
C
Y=PARAB(2.)
STOP
END
C
C FUNCION PARAB
C
C FUNCTION PARAB(X)
COMMON/D ATO/A,B
PARAB=A*X*X+B
RETURN
END
169
Índice
Capítulo 3
\ a m l a m2 *•** a m nl
au a12 .. ■ a ln
«21 a 22 ■•• a 2n
det A =
a nl a n2 ■.. cinn
que se evalúa como:
170
Índice
Capítulo 3
au 0 ... 0 ^
0 a 22 ••• 0
Un caso especial es el de matriz unidad (I), para la cual el elemento genérico es Sy,
esto es, una matriz diagonal cuyos elementos no nulos son todos iguales a 1 .
Una matriz, cuadrada o no, con todos sus elementos nulos, se denomina
matriz nula (0). Por último, la traza de una matriz es la suma de sus elementos
diagonales:
T rA = \a ü
/ =1
• La suma y resta se definen sólo para matrices del mismo tipo, con el mismo
número de filas y columnas:
C = A ± B se define por c-± = a¡k ± b¡k
• El producto de un escalar, X, por una matriz A, es una matriz cuyo elemento
general es Xa¡k
• Multiplicación de matrices. Se define para matrices cuyas dimensiones sean
tales que el número de columnas de la primera coincida con el de filas de la
segunda: A(m,n) y B(n,p).
n
C —A B, ^ cifr bjrfc
r-1
Aunque BA esté igualmente definida y sea del mismo tipo que AB(m=n=p),
en general no se verifica la propiedad conmutativa: BA*AB.
Por otra parte existe la matriz unidad, I cuyos elementos son (I)ik=&ik, tal que
AI=IA=A. Si C= AB, se puede demostrar que detC = detA detB
• Transposición de matrices. Consiste en cambiar sus filas por sus columnas. La
denotaremos por A1: (At)ik=(A)k¡
• Conjugada de una matriz, A*: matriz cuyos elementos son los conjugados de A.
La matriz transpuesta de la conjugada la denotaremos: (A*)t=(At)*=A+.
• Inversión de matrices. Se define la matriz inversa (sólo cuando es regular, ver
definición más abajo) como aquella qué cumple A A -1 = A -1 A = I, es decir
su producto nos da la matriz unidad. Se cumple que A " 1 = (detA)"1 A a. La
171
Índice
Capítulo 3
a ir a jr ~ j
r
(el producto de dos filas vale 1 o 0 según que ambas filas coincidan o no).
Para una matriz ortogonal su inversa coincide con la transpuesta: At=A_1.
Además el producto de dos matrices ortogonales es otra matriz ortogonal,
y también se verifica que el determinante de una matriz ortogonal vale + 1
ó- 1.
Matriz hermítica: Se dice que una matriz es hermítica cuando es igual a la
transpuesta de su conjugada A = (A1)* = A+
En matrices reales esto significa que es simétrica. Una matriz es
antihermítica cuando A+ = -A.
172
Índice
Capítulo 3
TrAm = ^ X i m
i= 1
Si a partir de una matriz dada A se forma otra B mediante B = S' 1 A S, donde
S es una matriz regular, se dice que se ha efectuado una transformación de
se m e ja n za , y cumple las condiciones características de las relaciones de
equivalencia. Se puede demostrar que la ecuación secular es invariante para tales
transformaciones, ya que
det (B-XI) = det [S_1 (A-XI) S] = det S"1 det (A-XI) det S = det (A-XI)
(teniendo en cuenta que det S "1 det S = det (S' 1 S) = 1). Por lo tanto A y B tienen
los mismos valores propios.
173
Índice
Capítulo 3
Vn = V! Vi + V 2 V 2 + .. .+ Vn-l Vn_i + a n
donde Xb \xu ..., vn-i designan coeficientes que se pueden determinar de manera que
cada vector v¡ sea ortogonal a los vectores vi, v2, ..., v¡_i.
De la condición v2l vj = 0 se deduce Xi v / vi + a2l vj = 0, de donde se
obtiene
Xi = - (a2l vi / v/V i)
Análogamente: v3l Vi = 0 y v3l v 2 = 0, de donde se deduce
174
Índice
Capítulo 3
¡¿i Vi1 Vi + a 3l vi = 0
¡¿2 y2 V2 + a 3l V2 = 0
que permiten obtener \i\ y \i2. En general se obtiene
i-1
v¡ = a¡ - { ^ (a¡‘ vk / vk*vk) } vk
k= l
de tal manera que v^ Vk = 0 si i ^k. Estas ecuaciones se pueden escribir en forma
matricial V B = A donde V = (vj, v2, v k) y A = (ab a2, a k), y B es la matriz
/I h l h3 — h n \
0 1 ¿23 b2n
B 0 0 1 ... b3n
xo 0 0 ... 1
con bjk = (vjl ak / vjl vj). Esta tecnica se conoce como metodo de ortogonalizaciön
de Gram-Schmidt.
175
Índice
Capítulo 3
(1 ) an xt + au x2 + a13x3 = ^
(3 ) a 3 i xi + a32x2 + <3 3 3 X3 = b3
donde al menos uno de los coeficientes arn, a2i, <231 es distinto de cero. Si a'n=0
reacomodamos las ecuaciones de tal manera que el coeficiente de x\ la primera
ecuación sea distinto de cero. En el primer paso, definimos un multiplicador m2:
&2l
an
y multiplicamos (1) por m2 y restamos dicho producto de la segunda ecuación, es
decir, hacemos (2) -m2(l), con lo que se obtiene una nueva ecuación
(4 ) (au - m2an ) x 1 + (a22 - m2al2 ) x 2 + ( a23 - m2al3) x 3 = b2 - m 2bl
! ! f
0 a22 a23 b2
a 22 = a 22 ~ m 2 a 12
a 23=¡a2 3 ~ m2a 13
¿ 2 = ¿ 2 - m2 ^
con lo que la ecuación (4) se convierte en:
Jí U UW
f ! 1
0 a32 a33 b3
176
Índice
Capítulo 3
(8) a2 2 x 2 + ¿ 2 3 x3 = b2
(9 ) d3 2 x 2 + d3 3 x 3 = b3
Este sistema presenta la ventaja de que x\ aparece únicamente en la primera
ecuación.
Podemos ahora eliminar x2 de una de las dos últimas ecuaciones. Tomamos
ahora (si es cero se intercambian dos ecuaciones), a este elemento por el que
divide se le conoce como pivote.
Definimos:
m3 = ~ ^ " i = 3)
a 22 a 22
0 a3 3 b3
I! I I I
a33 = a33 ~ m3a23
b3 =b 3 - m 3 b2
Sustituimos (9) por (10) de forma que queda:
(1 1 ) ( z ^ + a ^ +a ^ ^ b i
(12) a 2 2 x 2 + a2 3 x 3 = b2
(13) 0 3 3 X3 = b3
Debido a su apariencia este sistema de ecuaciones se denomina triangular.
Ahora es un proceso directo resolver el problema. En (13) se despeja x3 y su
valor se sustituye en ( 1 2 ) determinando y finalmente sustituyendo x2 y X3 en ( 1 1 )
se determina x\. Este proceso se denomina sustitución inversa:
177
Índice
Capítulo 3
h
X 3 = — ir-
«33
b2 - a23x 3
JCn — i
«22
^ - a13*3 - an x 2
X1 =
« 11
I II
Recordemos que 0, a 2 2 ^ 0 . Si (233 = 0 significa que el sistema original
es singular.
El método desarrollado es el de eliminación de Gauss con sustitución
inversa. Podemos generalizarlo sin dificultades para el caso de n ecuaciones con n
incógnitas.
Existe una modificación del método, debida a Jordán, en la cual la
eliminación se realiza no sólo en las ecuaciones de debajo sino también en las de
arriba. Así obtenemos finalmente una matriz de coeficientes diagonal (e incluso
unidad habitualmente) y se posee la solución sin nuevos cálculos.
Por otra parte el método de Gauss-Jordan (Press, 1992) produce
simultáneamente la solución de las ecuaciones y la matriz inversa. La matriz
inversa se puede obtener adicionalmente en el método de Gauss sin más que
considerar el conjunto de sistemas de ecuaciones:
Ax = I
tratando las columnas de I simultáneamente como n vectores b, con las columnas
de x como vectores solución correspondiente (x=A_1).
Veamos la aplicación del método de Gauss-Jordan a la inversión de
matrices.
A matriz cuadrada (n,n)
Problema: determinar X tal que AX = I
xi,x 2 ,...,xn vectores primera columna , segunda columna, etc de X.
In análogo (vectores unitarios).
AX = I puede ser sustituido por n sistemas de ecuaciones lineales, todos con
la misma matriz de coeficientes
Axr = Ir (r =l,2,..,n)
Todos estos sistemas tienen soluciones únicas (detA^O)
178
Índice
Capítulo 3
<
-l a pk
p~X
ajk ~ aj k 1 ~ aJp
' aUPP
p~l
(1 ) 1 0 ... 0 a“l^
p + l •” n“ l,n
p an a\ 2 **• tfp 0 ”. 0
(2 ) 0 1 ... 0 na2,p+l
p — >n 2,n
p a21 a 22 **. a p p 0 .... 0
(P) o 0 ... 1 np np
p , p +1 “ • p,n < 1 < 2 •.. oFPtP 0 .. . 0
n n,p+l
p ” ■ n n,n
p
'w'
O
O
179
Índice
Capítulo 3
180
Índice
Capítulo 3
se tiene:
siendo
2 2
da = aa eos cp + 2aik sen cp eos cp + akk sen cp
dik = dki = ~ (aa ~ akk)se n 9 C0SCP + aik ( c o s 2 <P " sen 2 cp)
2 2
dkk = a¡¡ sen cp - 2 aik sen 9? + akk cos cp
Ahora elegimos el ángulo cp tal que d,k = dk¡ = 0, lo que se consigue cuando,
t 2o cp = ------*
tg 2ai
aii ^kk
Esta ecuación proporciona 4 valores diferentes de cp. Para trabajar con giros lo más
Jt Jt
pequeños posibles, tom am os---- <cp ^
4 4
181
Índice
Capítulo 3
Haciendo:
1 si au s akk i
R = J ( a l¿ - a kk f +4afk y cr
1 si an < akk j
obtenemos:
sen 2 q) = 2 a aik /
cos2<J9 = o (an - a kk) / R
donde el valor de la función arctg se toma entre —jr/2 y n/2. De dichas ecuaciones
se llega a:
dü ^ ( aü +akk + ° R)
i
dkk= ^i.an +ak k - ° R)
di k = dk i = °
182
Índice
Capítulo 3
3-5. C ALC U LO IN TE G R A L
3.5.1 Introducción
como el área bajo la curva f(x) frente a x entre x=a y x=b9 nos dirige de forma
natural al cálculo de la integral de forma numérica.
183
Índice
Capítulo 3
Un primer paso para aproximar el área bajo la curva consiste en suponer que
la función está compuesta de pequeños segmentos rectilíneos. La regla de los
trapecios se basa pues en aproximar la función por segmentos rectilíneos. Una línea
recta es la aproximación más sencilla y puede dar buenos resultados si se toman
intervalos pequeños.
En el método de los trapecios se aproxima una integral mediante la suma del
área de n trapecios. El procedimiento a seguir es el siguiente:
• Se divide el intervalo de integración [a,b] en n intervalos iguales de longitud h
b- a
h = -------
n
• Si uno de estos pequeños intervalos está definido por las abscisas x¡ y x/+y, el
área bajo la curvay=f(x) comprendido entre x¡ y x¡+i será:
184
Índice
Capítulo 3
■*;+i
Ii = / f{ x ) d x
Ky¡ + y,-+i)
h~
De esta forma la integral puede determinarse como suma de las áreas de los n
trapecios formados, es decir:
b n-1
I = f f ( x ) d x ~ J j Ii =
i=0
1 1 1 1
2 ■
h(yo+ yú + 2 h(yi + yz) + - + - K y n-2 + yn- 1 ) + 2 h(jn- 1 + :
i
~Kyo + + 2 y2 + + 2^„_2 + 2 yn_1 + y n)
185
Índice
Capítulo 3
f ( x ) = ax + b x + c
Se divide el intervalo de integración [a ,b ] en n intervalos iguales (siendo n un
número p a r) de longitud h, h = (b -a )/n . Se consideran dos intervalos consecutivos, y se
calcula el área bajo la curva
mediante la fórmula:
h i i
A = f (a x 2 + bx + c)dx = —(2 ah2 + 6c) =—\ f ( h ) + f ( - h ) + 4 /( 0 ) ]
J,
-h
3 3
siendo
f ( h) = ah 2 +bh + c
f { - h ) = a/i2 - b h + c
/ ( 0) = c
186
Índice
Capítulo 3
n-2 n-1
A =-h Oo + yn) + 2 2 yi + A 2 ^ '
3 i=2 M
k:par k: impar
*0,n
/= 0
? = f(x,y)
X *o) = ^0
187
Índice
Capítulo 3
h
y m+1 = y m + + 2 ^2+ 2 ^3 + ^4)
h = f ( xm>ym)
1 t< h hh \
h = f ( xm + 2 ^ m + - ^ )
7 í, h hk2 .
k3 = f ( x m + 2 ’ym + ~2~^
h = f ( xm +h,ym+ hk3)
De esta manera se pueden ir obteniendo sucesivos puntos ym+i a partir del punto
precedente ym (recuérdese que se dispone de la condición inicial y(x0)). Conduce al
método de Simpson para funciones f que sólo dependen de x
f(x,y) = F(x)
Se tiene entonces:
ym = + m h ) = X * o + 2mP )
Definimos ahora
Yj =y(xo + jp )
de forma que
ym ^2 /n
Entonces la expresión:
h
y m+1 = y m + + 2&2+ 2^3 + ^4)
se convierte en:
188
Índice
Capítulo 3
en donde m = 0, 1,2,..., n-1 (para asegurar un número par de intervalos), con casos
particulares
l 2 - * o = f ( ^ o + 4F 1 + F2)
Í 4 - Í 2 = f ( ^ 2 + 4 F 3 + F4)
* 2 « -2 " *2rc-4 = ^ ( E2 n - 4 + 4 ^ 2 n -3 + E2 n - 2 )
X
y( x) = j F ( x ) d x
xo
siendo x = x 0 + nh.
El método clásico de Runge-Kutta de 4o orden constituye una generalización
de la regla de Simpson consistiendo esta generalización en no restringirse a
funciones de una variable.
189
Índice
Capítulo 3
que se calcula la función, como los factores de peso, se elegían de forma que la
precisión total fuera la óptima. Si en la aproximación de la integral se emplean los
valores de la función en los puntos x0, x \ 9 ...,xn tenemos un total de 2 n + 2
((n+l)+(n+l)) parámetros a determinar (los (n+l)x¡ y sus correspondientes factores
de peso (o¡). Sabiendo que un polinomio de grado N tiene N+l coeficientes, el
algoritmo de Gauss correspondiente a n+l puntos debe dar un resultado exacto
para cualquier polinomio de grado N=2n+1 o menor (N+l=2n+2 =s> N=2n+1).
El primer paso que hay que dar es transformar un integral genérica entre
unos límites de integración a y b en una integral entre los límites - 1 y + 1 :
b +1
a -1
b- a
a =-m + n m=
2
b = m +n
a +b
n =
2
con lo que
y
b +1 +1
+1
/ g(z)dz - co0g(z0) +(0\g{zi) +... + cong(zn)
-1
190
Índice
Capítulo 3
tenga la precisión óptima. Por ejemplo, para n=l hay que determinar 4 parámetros
(Do, coi, zo, z¡:
+1
f g(z)dz - <w0 SOo) +®l«(«l)
-1
Estos parámetros deberán cumplir la condición siguiente: la función g(z) debe ser
exacta para un polinomio de grado 3 o menor, aplicando esta condición
sucesivamente a las funciones a, az, az2 y az3 obtenemos las siguientes relaciones:
+1
Jadz = 2a = > ü c ú q + a c o i = > cúq + o ) \ = 2
-1
+1
J azdz = O => atüQZQ + => + =O
-1
+1 ^
2 2 2 2 2
faz dz = —a=> ücoqzq + cho\Z\ => <«ozO + =T
i 3 3
+l
^ 'i 'í
J a z dz = 0=> ücoqZq + => cü0 Zo + ^ 1^ 1 = O
-l
COq = =1
f s ( z y z . S( - J ¡ ) + g( ^ )
donde
191
Índice
Capítulo 3
1 1 , ,i-a 1 ¿ +a
SW 3 ^ 2 ^ 2 V3 + 2
es decir,
b
I = J f ( x) dx = área bajo la curva
a
192
Índice
Capítulo 3
193
Índice
Capítulo 3
3.6.1 Introducción
d2f / d x 2
\
194
Índice
Capítulo 3
Supongamos que la función f(x) tiene un mínimo entre los puntos x ’k=xk-hk
y x»k=xk+hk, para unos valores dados de xk y hk. Designaremos a los valores de la
función en xk, x ’k y x»k por f 0 k, fik y ^2k, respectivamente. Suponiendo que
aproximadamente la función es parabólica en el intervalo, y dado que se conocen
tres puntos en dicha parábola, el punto mínimo se puede obtener a partir de la
fórmula de interpolación:
Xk+i = xk -[hk (fiu-fiO/2 (f2k-2fok+fik)]
Tomamos ahora hk+i<hk (en general se suelen tomar criterios del tipo hk=hk.
i/ak, con a=2, 3) y repetimos el proceso hasta que vayamos acotando sucesivamente
el mínimo en una región muy pequeña, dentro de un criterio de precisión
previamente fijado. El método en concreto se conoce como interpolación
cuadrática.
195
Índice
Capítulo 3
196
Índice
Capítulo 3
Se puede demostrar que dk+i = - dk2 g" (xk)/2g’(xk), es decir que el método
converge cuadráticamente, ya que el error original dk se ha sustituido por un error
dk2. De esta manera cerca de la raíz el número de cifras significativas
aproximadamente se dobla en cada etapa. Esta convergencia hace que el método
sea muy eficiente. El precio a pagar es el cálculo de la derivada en cada etapa. En
los casos en que esto sea un problema se puede aplicar una diferencia numérica
para calcular aproximadamente la derivada local
g ,(x) _ g(x + d x ) - g ( x )
dx
n
(xj,k+i ~ Xjh) (dg/dxj)x=xk = - gi(x0 i=1,2 ... n
h 1
o, en forma matricial
Jóxk=-gk
197
Índice
Capítulo 3
198
Índice
Capítulo 3
199
Índice
Capítulo 3
200
Índice
Capítulo 3
1987; Jensen, 1999). Por ejemplo, uno de los algoritmos más habituales, conocido
como Davidon-Fletcher-Powell, (Fletcher, 1963) utiliza la siguiente expresión para
actualizar el Hessiano:
201
Índice
Capítulo 3
202
Índice
Capítulo 3
(Pi 1 Pn
o2
(°l) ' P\n\
P21 Pl2 ' '• P2n
D= -
203
Índice
Capítulo 3
Los elementos diagonales de dicha matriz (C¡¡) son la varianza de cada una de las
propiedades (es decir, nos miden la dispersión de los valores de cada propiedad),
mientras que los valores de fuera de la diagonal nos miden el grado de
acoplamiento entre las propiedades (cuanto mayor en elemento C¡j, mas acopladas
las propiedades i y j). Se puede normalizar la covarianza, obteniéndose así la
denominada matriz de correlación R , que se define como
204
Índice
Capítulo 3
peso = f^ li xlOO
/ =1
Así, si los valores propios para un sistema de tres propiedades son 30.17, 3.22 y
1.36 , sabemos que un 8 6 % de las propiedades queda representado por la
combinación de propiedades que se muestra en el primer vector propio, un 9.3%
con el segundo vector propio, y un 3.9% con el tercero. En un caso como este,
quiere decir que la combinación de propiedades que conforman el primer vector
propio es capaz de describir las propiedades del conjunto de objetos con un mínimo
de pérdida de información. Esta es la gran utilidad del análisis de factores.
Tiene por objetivo buscar agrupar los objetos en grupos que presenten
propiedades similares. Para ello, trata cada conjunto de propiedades de un objeto 0¡
como un vector de propiedades y calcula las distancias euclídeas entre dichos
vectores (xy), definidas mediante la expresión:
205
Índice
Capítulo 3
3.8. O P T IM IZ A C IÓ N Y P A R A L E L IZ A C IÓ N D E PR O G R A M A S
FO RTR A N
206
Índice
Capítulo 3
207
Índice
Capítulo 3
AA=X*A/Y
BB=X*B/Y
es mejor escribir
AA=A*(X/Y)
BB=B*(X/Y)
DO 10 J=1,N
A(J)=X(J)**2+Y(J)**2
10 CONTINUE
IF(IFLAG.EQ.O) THEN
DO 20 J= 1,N
20 A(J)=A(J)+DELT A
ENDIF
que escribir
DO 10 J=1,N
A(J)= X(J)**2+Y(J)**2
IF(IFLAG.EQ.O) A(J)=A(J)+DELTA
10 CONTINUE
208
Índice
Capítulo 3
C(I,J)=0.0
DO 10 K=1,N
10 C(I,J)=C(I,J)+A(I,K)*B(K,J)
S=0.0
DO 10 K=1,N
10 S=S+A(I,K)*B(K,J)
C(I,J)=S
209
Índice
Capítulo 3
sus tareas en un tiempo similar. Debido a ello, hay pocos tiempos muertos en cada
uno de los procesadores esclavos. En este caso, se dice que el proceso paralelo está
bien balanceado. Puede suceder, sin embargo, que la carga de uno o varios de los
procesadores sea muy baja frente a la de los demás, con lo que los primeros
permanecen parados mientras que esperan que el mas lento acabe. En este caso, el
proceso paralelo está mal balanceado y el rendimiento de la paralelización será
bajo, tanto mas bajo cuanto mayor sea el tiempo de espera. Esto se ilustra
gráficamente en la Figura 3.3:
PARALELO PARALELO
SECUENCIAL BIÉN BALANCEADO M AL BALANCEADO
DO 100 1=1,10000
A(I)=B(I)+C(I)
100 CONTINUE
210
Índice
Capitulo 3
211
Índice
Capítulo 3
aceleración = ------------- j
(1 + /) + Z
P
en la que f es la fracción de código paralelo y p es el número de procesadores
empleados en el proceso paralelo. Si f=0.75 (es decir, el código está paralelizado en
un 75%) y p=4, la aceleración que se alcanza es 2.28, es decir, casi la mitad de los
4 procesadores están parados durante la ejecución en cuatro procesadores de un
proceso con una paralelización del 75%. La ecuación anterior también nos dice que
la aceleración será muy pequeña con códigos poco paralelos, y que la eficiencia
disminuye a medida que aumentamos el número de procesadores.
En la actualidad existen dos tipos de ordenadores paralelos: los de memoria
distribuida, y los de memoria compartida. En el primer caso, la memoria de cada
procesador sólo puede ser usada por dicho procesador, mientras que en el segundo
caso, la memoria es utilizable simultáneamente por todos los procesadores. Una
arquitectura de memoria compartida es mejor que la de memoria distribuida, dado
que en el primer caso la información no se debe enviar entre nodos para su
ejecución, y cuando un procesador deja libre la memoria los otros la pueden usar.
Ejemplos de ordenadores paralelos con memoria compartida son los 0rigin-200 y
0rigin-2000 de Silicon Graphics, mientras que los Cray T3E y Cray T3D son
ejemplos de ordenadores paralelos con memoria distribuida.
212
Índice
Capítulo 3
Además de esta instrucción existen otras instrucciones que nos permiten controlar
el tipo de ejecución paralela (C$MP_SCHEDTYPE) el tamaño del bloque paralelo
(C$CHUNK) o copiar valores almacenados entre COMMON paralelos
(C$COPYIN). Cada instrucción C$DOACROSS se aplica a un único bucle DO.
La forma con que se lleva a cabo la paralelización es la siguiente: el
compilador genera una subrutina paralela cada vez que se encuentra un
C$DOACROSS. Dicha subrutina se ejecuta en tantos procesadores como
especifiquemos (sino se toma la opción por defecto), y cuando se acaba el DO se
termina la subrutina paralela, devolviendo el control al programa llamador, que se
ejecutaba en el procesador dueño. El usuario debe de preocuparse, para el buen
funcionamiento de la subrutina paralela, de pasar los valores de las variables
necesarios para la ejecución de dicha subrutina. Así, si se quiere paralelizar un
bloque DO como el que sigue:
DO 10 1=1,N
X=SQRT(A(F)
B(I)=X*C(I)+X*(D(I)
10 CONTINUE
213
Índice
Capítulo 3
mientras que I y X son variables locales dentro de cada procesador esclavo. Estas
indicaciones se hacen mediante el siguiente código FORTRAN paralelo:
Cómo se ve, basta una instrucción para paralelizar dicho bucle DO. Siguiendo un
procedimiento analítico semejante, es posible repetir el proceso de paralelización
con tantos DO como se quiera.. La única restricción para paralelizar un bucle DO,
como ya se ha indicado antes, es que los valores que se calculan en un procesador
deben de ser independientes de los calculados en los otros procesadores. De otra
forma, el proceso no es paralelizable. Como consecuencia de esta restricción, no es
posible paralelizar bucles DO anidados (por ejemplo, dobles DO que corren sobre
las filas y columnas de una matriz). En este caso concreto, se opta por paralelizar el
bucle DO mas externo, dado que es el que realiza mas trabajo.
Es importante indicar aquí que no es rentable paralelizar bucles DO con
longitud menor a 100. Este hecho es debido a que por debajo de dichos valores no
se compensa la ganancia de velocidad provocada por la paralelización con el
overhead necesario para llevarla a cabo. Para evitar la paralelización de bucles
menores a 100 pueden emplearse controles. Así, para el ejemplo de paralelización
desarrollado anteriormente, puede controlarse mediante la siguiente instrucción
Los ejemplos aquí presentados pretenden dar sólo una idea de los fundamentos de
la paralelización, y de que la paralelización manual es sencilla y aplicable a
cualquier programa, tras un análisis de su estructura. Estas líneas no pretenden
describir todas las opciones de paralelización, como, por ejemplo, las que controlan
el número de procesadores asignados al cálculo paralelo. Para ello, se recomienda
al estudiante interesado leerse el manual de paralelización del ordenador paralelo
en el que se quiera trabajar.
214
Índice
Capítulo 3
BIBLIO G R A FÍA
215
Índice
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
4. Química cuántica en materia condensada:
aplicación al estudio de superficies,
quimisorción, catálisis heterogénea y
propiedades de sólidos
F r a n c e s c I l la s1 y J o s e p M a n e l R i c a r t 2
4.1 Introducción
217 Índice
Capítulo 4
218 Índice
Capítulo 4
219 Índice
Capítulo 4
220 Índice
Capítulo 4
En el caso de sistemas altamente iónicos como MgO resulta obvio que reducir
el cristal a un número pequeño de cationes y aniones puede comportar problemas
importantes debidos al potencial electrostático de largo alcance o de Madelung. Sin
embargo introducir los efectos que se derivan del potencial de Madelung en un
modelo finito para un cristal iónico es terriblemente simple, y a que basta rodear el
modelo de una red de cargas puntuales que representen de manera adecuada el
potencial de Madelung. La red de cargas puntuales se construye utilizando
directamente la geometría experimental del cristal y cargas formales u optimizadas
al efecto. En el primer caso es conveniente utilizar el esquema de cargas
fraccionarias de Evjen para asegurar la convergencia del potencial de Madelung
con un número razonablemente pequeño de cargas puntuales. La inclusión de la red
de cargas puntuales permite tener en cuenta el potencial de Madelung pero puede
añadir efectos indeseables si no se procede con cautela. Es posible que algunos de
los aniones del modelo estén directamente rodeados por una o más cargas
puntuales positivas. En ese caso la densidad electrónica de los aniones se polariza
artificialmente hacia las cargas puntuales pudiendo distorsionar notablemente la
respuesta del modelo. Una solución fácil a este problema consiste en introducir
potenciales iónicos totales, TIP, entre el modelo finito y la red de cargas. En la
práctica una buena representación de los TIP se consigue usando pseudopotenciales
para los átomos que se quiera representar como TIP pero omitiendo los electrones
de los mismos y manteniendo su carga nuclear. Una mejor aproximación se
consigue utilizando los denominados potenciales modelo ab initio o AIMP.
• * * ♦ * ;
* ^ íÍ' * \ * *
o * *■ * *, * I f f Üfe v ^
*
** |W >.
, v 6 * * ; i ^ * '
:§&* TSSfflSBggBff L
w * * * ’ . *
* ~ * A *
m
221 Índice
Capítulo 4
222 Índice
Capítulo 4
4.2.1.3 Metales
223 Índice
Capítulo 4
en los casos discutidos previamente, los átomos en el borde del modelo no son
equivalentes a los del resto del modelo lo cual puede ocasionar artefactos en la
descripción de propiedades. Sin embargo, a diferencia de sólidos iónicos y
covalentes, no existe un modo sencillo de tener en cuenta el resto del cristal si bien
lian sido propuestos en la literatura diferentes métodos de embedding (Whitten,
1996). En ocasiones, es posible ampliar el modelo siguiendo una estrategia similar
a la descrita en la sección anterior para sólidos covalentes y que consiste en dividir
el modelo, usualmente de superficie, en una parte local y una parte externa que se
tratan a un distinto nivel. Así, los átomos de la región local pueden ser descritos
mediante una base más extensa e incluir todos los electrones de cada uno de estos
átomos o utilizar una descripción mediante un pseudopotencial que describa un
buen número de electrones en forma explícita. En este caso los átomos de la región
externa se describen mediante una base más restringida y con un pseudopotencial
que incluya el mayor número de electrones en el core. En el caso límite se utilizan
pseudopotenciales que convierten a átomos tipo Cu, Ag, Au, Ni y Pt en
pseudoátomos con un sólo electrón. La idea central es incluir de manera
aproximada el efecto de la banda de conducción del metal en la estructura
electrónica del modelo.
224 Índice
Capítulo 4
225 Índice
Capítulo 4
0 m
a.
226 Índice
Capítulo 4
T = n1a¡ + n2a2 + n3a3 es un vector de la red directa, la red recíproca viene definida
por
K = rrijbj + m2b2 + m3b3, donde Ui • Bj = 2 jzó¿j . (4.1)
Puede verse que, siendo V = 2 1 - 3 2 X 2 3 el volumen de la celda elemental del
retículo directo, se tiene:
r* 2n t* 2 jt . t* 2iti
b, = ( y ) a 2 x a 3; b 2 = (— )aj x a 3; b 3 = ( - ) a , x a 2(4.2)
La propiedades más importantes que podemos destacar en este momento són las
siguientes:
• El vector (h,k,l) de la red recíproca es perpendicular a la familia de planos
(h,k,l) y su módulo es igual a 2n veces el recíproco de la distancia interplanar
en la familia (h,k,l): |K^kI|=2n(dhJ 1
• V* = (2 k)3V '\ donde V* y V son los volúmenes de la celda elemental del
espacio recíproco y el directo, respectivamente.
• Si las componentes de los vectores T y K , en la red directa y recíproca, son
números enteros, es decir corresponden a puntos reticulares, se demuestra
fácilmente que exp( iK T ) = 1
• Si k y k' difieren en un vector K (de componentes enteras) se cumple:
e x p ( i k ’. T ) = e x p ( i ( k + K ) * T ) = e x p ( i k • T ) (4.3)
227 Índice
Capítulo 4
Figura 4.8. Zonas de Brillouin para una red cúbica centrada en las
caras(fcc) y para una cúbica centrada en el cuerpo (bcc).
Este teorema es de gran importancia, puesto que define las funciones de Bloch,
adaptadas a la simetría del cristal (Ver Pisani et al., 1996). El papel de las mismas
es equivalente al de los orbitales adaptados a la simetría en un cálculo molecular.
228 Índice
Capítulo 4
229 Índice
Capítulo 4
v l ( ? ) = ^ c % z<t>lBZ(? ) (4.H)
A*
donde los coeficientes se determinan utilizando el principio variacional resolviendo
las ecuaciones:
f j k Bz C kBZ = g h z q £bz E hz (4 .12)
( C hz ) +S h zC hz = / (4.13)
donde se ha supuesto un hamiltoniano de tipo monoelectrónico, e.g. Extended
Hückel, operador de Fock o de Kohn-Sham. Como resultado, obtendremos los
orbitales cristalinos ylas energías monoelectrónicas correspondientes. El problema
230 Índice
Capítulo 4
se resuelve para los distintos valores de k . Como las funciones de Bloch son
representaciones irreducibles del grupo de las traslaciones, los elementos de matriz
correspondientes a k distintos son cero. De este modo hemos conseguido
transformar un problema infinito en N (número de celdas del cristal) problemas de
dimensión M (funciones de base de la celda elemental). Aunque N sea muy grande,
el hecho de que los valores propios de la energía varían con continuidad con k ,
permite que el problema pueda resolverse en un número reducido de puntos
haciendo las interpolaciones necesarias.
El modelo más sencillo que puede utilizarse para describir un sistema periódico
simple, como un metal, es el gas de electrones libres o modelo de jellium.
Supongamos que cada electrón del metal se comporta de modo independiente,
sintiendo un campo promedio debido al resto de electrones más los iones positivos
y que estos efectos se cancelan. El resultado es un electrón libre confinado en un
volumen V de dimensiones LxLyLz. Dado que el potencial efectivo es cero, la
ecuación de Schrödinger será:
231
Índice
Capítulo 4
(4.18)
dE K 2n 3
n(E) representa el número de electrones por unidad de volumen con una energía
entre E y E+dE por unidad de variación de energía.
La representación de n(E) en función de la energía es una parábola:
Índice
Capítulo 4
Ef
La integral f n( E )dE = N es el número total de electrones. En realidad, la
o
densidad de estados no es más que el equivalente a un diagrama de niveles de
energía en un sistema molecular y puede ser obtenida experimentalmente mediante
espectroscopia de rayos X.
Si asumimos las condiciones de contorno y por tanto, la periodicidad en k , la
parábola puede centrarse en k = 0 , 2 rc, o bien, teniendo en cuenta las
redundancias, la representación puede efectuarse en la primera zona de Brillouin,
que en este caso corresponde al intervalo [-jc,3i]. Esta es, justamente la
representación más usual de la estructura de bandas. La primera banda corresponde
a la parte de la parábola en la primera zona, la segunda a la de la segunda, etc.
233 Índice
Capítulo 4
234 Índice
Capítulo 4
r n h r
235 Índice
Capítulo 4
PCNm + ( a ~ Em)cIm + f c 2m = 0
Pcim + ( a - E m)c2m + pc3m =0
(4.19)
a-E p 0 0 0 P
p a -E p 0 0 0 (4.20)
0 P a -E p
0 0 p ...
... P 0 0
...a-E p 0
0 0 0 p a-E p
P o 0 p P a-E
con
236 Índice
Capítulo 4
dimensión creciente:
a-2(3
a-|3
a+(3
a+2|3
I
3 4 6 10 12 25 50 100 oo
a-23 r n m
a /
.....................
q qqqqqíhN—B
I T T I T lin í
*x'/*oi+2j3
-K 0 Jt
Finalmente, la-densidad de estados (DOS) muestra que existen más estados por
unidad de energía en los extremos (en energía) de la banda. En el centro, la DOS es
más plana, correspondiente a menos estados y a una zona de la banda de mayor
pendiente. La densidad de estados representa un retorno al espacio directo en el
sentido que es paralela a un diagrama de energía discreta de una molécula
La conclusión de este ejercicio, donde no se han utilizado en absoluto los
conceptos de los apartados anteriores es que obtenemos resultados ya conocidos.
237 Índice
Capítulo 4
= { x , ( r ) \ H eff\Xv ( r ) ) + ^ + (4.27)
exp(-ikna ) ( x ß ( r - na) \ H eff \x v ( r ))
y
e x p ( i k n a ( r ) \ xv ( r - na,))
N
5 £v = { x lt( r ) \ x y ( r ) ) + ' ^ i + (4.28)
n=l
exp( -ikna ( r - na ) ¡xv ( r ))
238 Índice
Capítulo 4
0 n/a
Figura 4.21. Representación de la energía correspondiente a las bandas pz, s y
px=py Para un sistema bidimensional con un átomo por celda en la
aproximación Extended Hückel.
Se han dibujado esquemáticamente los orbitales para k=0 y k=2jt/a. La
dispersión (intervalo de energía) de las bandas (no representada a escala)
depende del parámetro |3, es decir de la interacción entre los orbitales.
239 Índice
Capítulo 4
V=0 a 00
-a
2
-e - -O - -O
p,
Figura 4.23. Esquema de una red unidimensional con dos átomos por celda.
Se indican dos tipos de integral de resonancia.
240 Índice
Capítulo 4
( a, + a 2) \ { a , - a 2Y
e¡( k ) = + + @2 +2I3jI32 coska (4.33)
2 V 4
Podemos analizar algunos casos particulares:
a j= a 2=a; (3^132=(3: Los dos átomos son iguales y equidistantes; la situación es
la del sistema de un átomo por celda, si hubiéramos considerado una celda de
dimensión doble. La energía será:
O • o o •
o • o o •
o o o o
O O I O O I o o
Figura 4.24. Bandas correspondientes a dos átomos iguales por celda unidad.
Se han representado los orbitales cristalinos para k=0 y para k=jc/a. Nótese la
degeneración en este punto.
241 Índice
Capítulo 4
Consideremos ahora una distorsión que acerca los dos átomos en cada celda
como se muestra en la figura siguiente:
0 a
242 Índice
Capítulo 4
Y M
Figura 4.28. Zona de Brillouin para una red plana rectangular y esquema de
la representación de una banda hipotética según r-»X -> M -»Y -> r.
243 Índice
Capítulo 4
OOOOI o#o#
oooo Io#o#
oooo Iomom
r x
Y M
# # # # ! # 0 # 0
ooool o#o#
Figura 4.29. Representación esquemática de los orbitales cristalinos
en algunos puntos de la zona de Brillouin.
244 Índice
Capítulo 4
(4.40)
FA=SAE (4.41)
orden, donde la suma se extiende a los N/2 orbitales doblemente ocupados de más
baja energia. jjt,v,X,p, son orbitales atómicos y (jxv | Xp) una integral bielectrónica.
La introducción de la simetría traslacional supone la consideración de un
potencial periódico y la resolución parte de la ecuación básica
(4.44)
donde
(4.45)
(4.46)
Puesto que el operador HF conmuta con los operadores de traslación, y cada
función de Bloch corresponde a una representación irreducible distinta, los
elementos matriciales entre orbitales cristalinos que difieren en k son nulos:
245 Índice
Capítulo 4
Resulta, de este modo, que las matrices tienen una estructura de bloques
diagonales, es decir, F = F ^ ó ( k - k r ) . Las ecuaciones matriciales de Roothan-
Hartree-Fock pueden resolverse independientemente en cada punto k de la primera
zona de Brillouin:
F ( k )A (k ) = S (k )A (k )E( k ) (4.47)
Las dimensiones de las matrices son iguales para cada k e iguales al número de
orbitales atómicos en la celda elemental.
Analizaremos a continuación la forma de los elementos de matriz. Para la
matriz S se tiene:
g ,pp
JT
( 4 ' 5 0 )
' i i /i
KF\<pl(¡¿>r ) ) = (q>] ( P , r ' ) \ \ r - r f \ < p ¡( E' xt y<Pj ( l c, r) )
246 Índice
Capítulo 4
de traslación en la red directa. Forman parte de esta suma aquellos estados cuya
energía es inferior al nivel de Fermi:
donde
. (4.55)
Los sumatorios sobre vectores de la red directa incluyen infinitos términos: uno
de los problemas centrales del cálculo será el modo de truncar eficazmente los
sumatorios sin pérdida de información física.
Aunque el problema de Hartree-Fock se resuelva, según la ecuación (4.47) en
modo independiente para cada punto del retículo recíproco y aunque las cantidades
de interés estén definidas en ese espacio, es necesario definir algunas en el espacio
directo, sobre todo teniendo que, de este modo, algunos esquemas derazonamiento
que se aplican habitualmente a sistemas moleculares, podránser aplicados a
sistemas periódicos de modo inmediato.
Así, la ecuación (4.44) define los orbitales de Bloch y la transformación inversa
es:
x l = —y — J d k - e x p ( - i k l (4.56)
FBZ
247 Índice
Capítulo 4
248 Índice
Capítulo 4
249 Índice
Capítulo 4
250 Índice
Capítulo 4
(4.69)
j
donde H es el Hamiltoniano Kohn-Sham, ~H%pi el gradiente del funcional que
representa la fuerza y el término de multiplicadores añade fuerzas que aseguran la
ortogonalidad. La restricción de ortogonalidad es muy importante, pero su
conservación en todo momento haría los cálculos muy costosos. En la práctica se
supone muy pequeña la variación de los multiplicadores durante cada intervalo de
tiempo y se aproxima a una constante realizando la ortonormalización en un paso
posterior. Otra posibilidad es utilizar las ecuaciones de movimiento con
restricciones parciales. Para ello, se aproximan los multiplicadores por los valores
esperados de la energía de los estados, y¿, donde y. con lo cual las
ecuaciones del movimiento son:
fiiPi = - ( H - y ¡ )ip¡ (4.70)
consiguiendo, de este modo, que la aceleración de cada estado electrónico se
mantenga ortogonal a ese estado. La aceleración, es decir, la fuerza, será cero
cuando la función de onda sea un estado propio exacto. La integración de las
ecuaciones de movimiento se realiza según el algoritmo de Verlet y después de este
paso se procede a ortogonalizar las funciones de onda.
El procedimiento de Car-Parinello presenta dificultades cuando el sistema en
estudio es muy extenso, debido a inestabilidades y fluctuaciones de la energía,
habiéndose desarrollado procedimientos alternativos más eficientes, como la
utilización del método de gradientes conjugados para minimizar directamente el
funcional de la energía.
El método de Car-Parinello puede utilizarse para optimizar conjuntamente la
función de onda y la geometría del sistema. El proceso es más simple que una
simulación dinámica, puesto que únicamente es de interés el estado final del
sistema, siendo irrelevante el camino recorrido. La lagrangiana de Car-Parinello
tiene la forma:
l I V
251 Índice
Capítulo 4
JF
(4*73)
dav
De este modo, las ecuaciones de movimiento para la dinámica de núcleos, celda
unidad y estados electrónicos pueden integrarse al mismo tiempo, siendo la base de
la simulación dinámica ab-initio.
Sin embargo, la integración de las anteriores ecuaciones no es simple debido a
que las fuerzas sobre los núcleos sólo son correctas si las funciones son propias del
Hamitoniano (Teorema de Hellmann-Feynmann). De este modo, las fuerzas no se
pueden calcular hasta que las funciones de onda estén cerca del estado
fundamental. Por otra parte, existe un término adicional que contribuye a las
fuerzas denominado fuerza de Pulay y que es fuente de otro error. Esta fuerza es
cero si las funciones de base son ondas planas, representando una gran ventaja,
pero no ocurre lo mismo para la celda elemental puesto que cambios en la misma
puede hacer cambiar el parámetro de corte de las ondas planas. La magnitud de los
errores en las fuerzas se reduce cuando el sistema se aproxima a un mínimo local y
la configuración electrónica se aproxima cada vez más al estado fundamental. Esta
formulación es equivalente, en definitiva, a la utilización de la aproximación de
Born-Oppenheimer.
Ejemplos de códigos que utilizan algunas de las metodologías descritas son:
CASTEP (Cambridge Serial Total Energy Package) , VASP (Vienna ab initio
simulation páckage), VIEN97, ADF-BAND (Amsterdam Density Functional
program for periodic structures), PWSCF y Car-Parinello PAW.
252 Índice
Capítulo 4
253 Índice
Capítulo 4
y-
)..^ | ^ ) .i^ ..^ ^"0$ I "^ )■
m
Figura 4.32. Modelo de multiestratos para el estudio de superficies.
254 Índice
Capítulo 4
En sólidos iónicos cuyos cationes son metales de transición es muy posible que
exista una capa d incompleta. La existencia de electrones no apareados, conlleva
propiedades magnéticas y, a baja temperatura, orden magnético en tres
dimensiones. Compuestos como NiO o KNiF3 están constituidos por cationes Ni2+
en una ordenación cúbica. La simetría cúbica rompe la degeneración de la capa d y
da lugar a orbitales de simetría t y e , respectivamente. La configuración
electrónica de un catión Ni2+ es d8 que, en un entorno cúbico da lugar a una
configuración electrónica t2g6eg2 y, de acuerdo con las reglas de Hund, el estado
fundamental corresponde al término espectral 3A 2. Cada uno de los cationes Ni2+ se
encuentra rodeado de otros seis cationes en las tres direcciones del espacio y
separados por aniones óxido o fluoruro que juegan un papel importante en el orden
magnético resultante. Cada catión puede ser contemplado como una partícula con
momento angular de spin total S=1 y puede interaccionar con sus vecinos mediante
una constante de acoplamiento J según las reglas de interacción de momentos
angulares. Una situación similar se encuentra en el La2C u0 4 y compuestos padre de
la serie de cupratos que pueden presentar superconductividad de alta temperatura
crítica en condiciones de dopaje bien determinadas. En estos cupratos, formados
por planos Cu-O bien caracterizados, el catión Cu2+ presenta una configuración
electrónica d9 y el electrón no apareado se encuentra generalmente en un orbital de
simetría d x2_y2 donde se ha considerado que los planos Cu-0 se encuentran
precisamente en el plano xy. A diferencia de los casos comentados anteriormente el
spin total resultante en cada catión Cu2+es ahora S=Vi.
La interacción resultante se suele describir desde un punto de vista
fenomenólogico mediante un hamiltoniano de spin, siendo el modelo de
Heisenberg de primeros vecinos el más comúnmente utilizado. La forma general de
este operador es
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Capítulo 4
256 Índice
Capítulo 4
257 Índice
Capítulo 4
258 Índice
Capítulo 4
Volvamos por un momento a nuestro modelo finito para La2C u0 4 para desarrollar
las ideas básicas de esta aproximación no restringida al cálculo del acoplamiento
magnético. Como se ha comentado anteriormente, para poder llevar a cabo el
cálculo del acoplamiento magnético mediante un método no restringido, i.e. UHF,
es necesario utilizar un solo determinante para describir el estado de máxima
multiplicidad y también para el singulete. Para el estado de máxima multiplicidad,
triplete en el caso que nos ocupa, no existe ningún problema puesto que este estado
siempre puede ser descrito mediante un solo determinante aunque la función
resultante tenga necesariamente algo de contaminación de spin ya que no es propia
del cuadrado del operador de spin total, § 2. En el caso del singulete el problema es
mucho más grave ya que no existe forma posible de representar un singulete de
capa abierta mediante un solo determinante. Una posible solución consiste en
utilizar una función de simetría rota donde los orbitales de capa abierta se localizan
en cada centro magnético pero sin existir una equivalencia entre ambos. Es posible
demostrar que en el límite de recubrimiento cero entre orbitales alfa y beta (nótese
que en un cálculo no restringido los orbitales alfa y beta no son ortogonales) dicha
función de onda corresponde a una mezcla al 50% del estado triplete y del estado
singulete por lo que es posible deducir el valor de J. Este razonamiento puede ser
fácilmente extendido si uno considera que el estado de máxima multiplicidad
corresponde a un estado ferromagnético, F, y el de baja multiplicidad a uno
antiferromagnético, AF, y que ambos estados son funciones propias del operador
que corresponde a la componente z del spin total. Ambos estados son además
funciones propias del hamiltoniano de Ising
259 Índice
Capítulo 4
jjexacto jjHeisenberg
260 Índice
Capítulo 4
Las transiciones d—>d no son las únicas que se observan en los espectros de este
tipo de cristales. Existen otras transiciones espectroscopias denominadas de
transferencia de carga y que pueden ser descritas como la transición de un electrón
de uno de los aniones a la capa d incompleta. En cristales puros estas transiciones
261 Índice
Capítulo 4
262 Índice
Capítulo 4
oxígeno. Sin embargo, la inestabilidad del anión óxido en fase gas hace que los
átomos de oxígeno que escapan de la red cristalina lo hagan bien como átomos
neutros bien como aniones O de modo que existen electrones que quedan
atrapados en la red cristalina para así mantener la neutralidad eléctrica del cristal.
Estos electrones atrapados suelen tener una estructura electrónica bastante
localizada y se denominan centros de color o centros F ya que son los responsables
de la aparición de color en los óxidos en atmósferas pobres en oxígeno. El carácter
local de los centros F permite, en principio, estudiar las transiciones
espectroscópicas que implican estos electrones mediante modelos finitos. El
estudio teórico de las transiciones espectroscópicas en centros F se ha abordado
tradicionalmente mediante métodos de tipo semiempírico y solo en los últimos dos
años han aparecido estudios basados en métodos más sofisticados (Pacchioni,
1997).
263 Índice
Capítulo 4
que derivan de la interacción de un adsorbato con una superficie dada pueden ser
de tipo local o no dependiendo, como es lógico, de la propiedad a estudiar.
Nuevamente, la estructura geométrica ordenada de una fase adsorbida se puede
abordar de modo más natural mediante la utilización de modelos periódicos. Este
es también el caso cuando se pretende estudiar la estabilidad relativa de diferentes
fases adsorbidas o la variación de estabilidad con respecto a la proporción de
átomos ó moléculas en la superficie del sólido. Sin embargo, la geometría, y en
algunos casos, la energía de interacción, de una molécula sobre una superficie es
una propiedad local que puede ser estudiada mediante un modelo finito.
La elección de un u otro modelo y, no menos importante, de un determinado
método es de gran importancia para una correcta descripción del fenómeno físico o
químico que se pretenda estudiar. Un ejemplo muy ilustrativo de este hecho se
encuentra en la interacción de CO sobre la superficie MgO(lOO). Este es a primera
vista un sistema sencillo en el que cualquier método y cualquier modelo debiera
dar la misma respuesta. Sin embargo, han sido necesarios 30 años de trabajo y más
de 40 artículos tanto experimentales como teóricos para poder llegar a una
conclusión definitiva. Es importante recalcar el hecho de que modelos finitos,
modelos periódicos y experimento están en perfecto acuerdo siempre y cuando los
cálculos incluyan energía de correlación de forma explícita, se incluyan
correcciones de gradiente si se usa la teoría del funcional de la densidad, se tenga
en cuenta el efecto de superposición de base si se utilizan bases de tipo gaussiano y
se incluya un embedding adecuado si se utilizan modelos finitos. Por otra parte los
experimentos deben ser en monocristal con las superficies preparadas directamente
en ultra alto vacío y no generadas por deposición sobre una película metálica. Una
descripción completa de la historia de esta interacción será publicada en uno de los
próximos números de la revista Surface Review and Letters.
A continuación se describen algunos aspectos de la ciencia de superficies que
son especialmente relevantes en el campo de la química. Estos incluye el análisis
del enlace de quimisorción, una breve discusión sobre la geometría de especies
adsorbidas, el análisis del desplazamiento de los niveles internos y su relación con
la interpretación de espectros de fotoemisión, el análisis de desplazamientos de
niveles vibracionales y, finalmente, algunos sistemas que tienen particular
relevancia en el estudio de los mecanismos moleculares de la catálisis heterogénea.
4.4.1 Análisis del enlace de quimisorción
264 Índice
Capítulo 4
mediante técnicas que se basan en la utilización de una base de orbitales, esto es,
Hartree-Fock, HF, mono- o multi-configuracional, y teoría del funcional de la
densidad, DFT, basada en la formulación de Kohn y Sham. En la técnica CSOV se
obtienen en primer lugar los orbitales moleculares de los dos fragmentos que
interaccionan. En el caso que nos ocupa, orbitales del modelo de superficie, MS, y
del adsorbato, AD. Una vez obtenidos estos orbitales se construye un primer
conjunto de orbitales para el sistema MS+AD superponiendo los de cada fragmento
y ortogonalizando el conjunto resultante. La energía, HF o DFT, obtenida mediante
este conjunto de orbitales es generalmente superior a la de la suma de los
fragmentos puesto que la densidad resultante está fijada de antemano. La energía
de interacción resultante da como resultado la repulsión de Pauli, excepto en la
eventualidad de que los fragmentos se encuentren cargados en cuyo caso la energía
de interacción incluye también la contribución electrostática entre los fragmentos.
A partir de esta densidad, o función de onda inicial, se puede obtener la solución
variacional no restringida y de la energía correspondiente la energía de interacción
total. Sin embargo es posible llegar a la solución variacional en etapas sucesivas en
las que sólo se permite variar a los orbitales ocupados de MS o AD y, además, en
el espacio orbital virtual de sólo MS o AD o en el espacio virtual total. De este
modo se descompone la energía de interacción contribuciones intra- o inter-
fragmento. En el primer caso se obtiene la polarización de cada fragmento, Pol. MS
o Pol. AD, en respuesta a la presencia del otro y en el segundo las donaciones de
carga o enlace químico entre fragmentos, MD—>AD o AD ^M D, respectivamente.
Si la energía calculada después de estas es muy parecida a la que se obtiene del
cálculo variacional sin restricciones la descomposición de la energía de interacción
es significativa. En algunas ocasiones, sin embargo, se requiere un segundo ciclo
de tipo CSOV y se pierde la simplicidad del análisis.
A continuación se discute la aplicación de la técnica CSOV a la interacción
entre la molécula de CO y un modelo Pt13 que representa la superficie P t(lll). Los
resultados se muestran en la tabla siguiente donde AE(I) representa la contribución
de la etapa I de la descomposición CSOV a la energía de interacción total, en eV, y
AE(DFT-HF, I) representa la diferencia entre la contribución obtenida mediante el
método HF y la contribución obtenida mediante la aplicación de los métodos DFT,
usando los funcionales de intercambio y correlación BLYP y B3LYP, en la etapa I
de la descomposición.
El primer resultado importante que se desprende de los resultados en la tabla
que se muestra a continuación es que la diferencia de energía entre la que
corresponde a la última etapa de la descomposición y la que corresponde al cálculo
variacional sin restricciones es insignificante respecto al resto de las contribuciones
lo cual indica que la descomposición realizada tiene significado físico. El segundo
aspecto es que la repulsión de Pauli es distinta en los tres casos lo cual proviene
única y exclusivamente de la diferencia en las densidades electrónicas de cada
fragmento obtenidas por los distintos métodos. Sin embargo, y a pesar de las
diferencias entre métodos, la importancia relativa de las diferentes contribuciones
al enlace de quimisorción predichas por diferentes métodos es cualitativamente la
misma. La polarización de la superficie inducida por la presencia del adsorbato es,
265 Índice
Capítulo 4
HF BLYP B3LYP
AE(I) AE(I) AE(DFT-HF,I) AE(I) AE(DFT-HF, I)
Rep. de +4.82 +4.42 -0.40 +4.40 -0.42
Pauli
Pol. MS -1.75 -2.74 -0.99 -1.67 +0.08
M S^A D -1.40 -1.76 -0.36 -1.74 -0.34
Pol. AD -0.23 -0.39 -0.13 -0.37 -0.14
AD->MS -0.95 -1.21 -0.26 -1.19 -0.24
Resto -0.22 -0.35 -0.12 -0.35 -0.13
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Capítulo 4
B Pt13
11 Pt4
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Capítulo 4
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Capítulo 4
275 Índice
Capítulo 4
Dos posibles mecanismos han sido invocados para explicar el origen del efecto
promotor. La primera hipótesis sugiere que el aumento de reactividad de la
superficie proviene de la disminución de la función de trabajo de la superficie
provocada por la adsorción del alcalino. En la segunda hipótesis se atribuye el
efecto promotor a una interacción directa entre el C 02 y los átomos de metal
alcalino. Distinguir entre ambas hipótesis mediante estudios de tipo experimental
no resulta nada fácil. Sin embargo, es posible llevar a cabo experimentos
computacionales que permiten solucionar este conflicto. En efecto, si la primera
hipótesis es correcta no es necesario que el átomo de alcalino se encuentre cerca de
la molécula de C 02. Para poder utilizar el mismo modelo en ambos casos, y evitar
de este modo posibles artefactos, se han llevado a cabo cálculos en los que, a
diferencial de la estructura que se muestra en la figura 4.35, K y C 02se encuentran
adsorbido en las dos superficies distintas del modelo Pt16. Si el efecto promotor del
K es debido simplemente a la disminución de la función de trabajo ambos modelos
deben dar lugar al mismo resultado. No obstante, la molécula de C 02 no se adsorbe
en Pt16-K cuando el átomo de K se encuentra en la otra superficie del modelo. Este
resultado conlleva una clara indicación de que la segunda hipótesis es más
verosímil y permite, una vez más, mostrar la utilidad combinada de teoría y
experimento.
Existen muchos más ejemplos en los que los cálculos teóricos permiten verificar
la validez de un determinado mecanismo. Un ejemplo especialmente atractivo
proviene de los estudios de dimerización de alquinos en superficies metálicas. Es
conocido que el etino trimeriza en P d (lll) dando como resultado mayoritario
benceno. El mecanismo de trimerización propuesto incluye una primera etapa en la
que se forma un intermedio de tipo C4H4 y una segunda etapa en la que este
intermedio reacciona con otra molécula de etino para dar lugar al producto final.
Existen indicaciones experimentales de que tal intermedio existe pero no una
confirmación directa ya que tal intermedio no puede ser aislado. Las indicaciones
proceden del espectro EELS obtenido en las condiciones de la reacción en la que
existen una serie de picos vibracionales que no corresponden a reactivos ni a
productos y que parecen ser debidos a este intermedio. Un estudio teórico basado
en la utilización de modelos finitos revela que el intermedio C4H4 es estable sobre
la superficie metálica en cuestión y el cálculo de las frecuencias de vibración de
esta especie adsorbida confirma la asignación del espectro EELS experimental.
Finalmente, comentar brevemente que aunque la utilización de técnicas
computacionales permite obtener información más y más fiable sobre sistemas de
interés en catálisis heterogénea, es necesario mantener un espíritu crítico frente a
actitudes en exceso triunfalistas sobre la capacidad de determinados métodos o
modelos frente a otros. La interacción metal-soporte es uno de los campos de
interés en catálisis heterogénea toda vez que los metales soportados constituyen
uno de los sistemas catalíticos más empleados. Este interés ha propiciado un buen
número de estudios teóricos sobre este tipo de interacción. La utilización de
métodos diversos —métodos DFT con distintas parametrizaciones de los
funcionales de intercambio y correlación frente a métodos que se basan en la
obtención de funciones que incluyen de manera explícita los efectos de correlación
276 Índice
Capítulo 4
277 Índice
Capítulo 4
A gradecim ientos
Bibliografía
278 Índice
Capítulo 4
Artículos relevantes:
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279 Índice
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
Capítulo 5. Dinámica de las reacciones químicas. I
José María Alvariño
Departamento de Química Física,
Universidad de Salamanca, 37008 Salamanca
5.1 Introducción
L a s c o l i s i o n e s q u e la F í s i c a d e p a r t í c u l a s d i r í a " d e b a j a e n e r g í a " ( n o r m a l m e n
te, i n f e r i o r a a l g u n o s c i e n t o s d e k j m o l - 1 o, c u a n d o p u e d e d e f i n i r s e , t e m p e r a
t u r a inferior a p o c o s m i l e s d e K ) e n t r e á t o m o s y m o l é c u l a s n e u t r o s o c a r g a d o s
(iones) p u e d e n p r o d u c i r u n a re d i s t r i b u c i ó n d e l c o n j u n t o d e el ec tr on es s o b r e
el s i s t e m a d e n ú c l e o s , n o r m a l m e n t e " e s p e c t a d o r e s " d e l c h o q u e e n l o q u e r e s
p e c t a a s u estructura. E l e s t u d i o d e la t r a n s f o r m a c i ó n d e la m a t e r i a a e s t a s
q u e el c h o q u e h a s i d o e l á s t i c o o i n e l á s t i c o 1 e n v e z d e r e a c t i v o . C h o q u e s d e l o s
t r e s t i p o s c o n c u r r e n e n el t i e m p o y e n el e s p a c i o y d e t o d o s h a y q u e e n t e n d e r
r e c o n o c i m i e n t o d e e s t a r e a l i d a d - g e n e r a l m e n t e n o a s u m i d a p o r la C i n é t i c a
q u í m i c a ( C Q ) - h a o r i g i n a d o el n a c i m i e n t o y c o n s o l i d a c i ó n d e la D i n á m i c a
r a z ó n d e la Q u í m i c a " [2]. E n D Q s e e s t u d i a e x p e r i m e n t a l y t e ó r i c a m e n t e la
r e a c c i ó n q u í m i c a e l e m e n t a l a i s l a d a , e s d e c i r , s e c o n s i d e r a s ó l o la i n t e r a c c i ó n
d e las ( g e n e r a l m e n t e 2) e s p e c i e s a t ó m i c a s o m o l e c u l a r e s q u e i n t e r v i e n e n e n
la e t a p a e l e m e n t a l i n v e s t i g a d a .
M u c h o s e x p e r i m e n t o s - e s p e c i a l m e n t e si i n t e r v i e n e n e s p e c i e s p o l i a t ó m i c a s
o si s e l l e v a n a c a b o e n f a s e s c o n d e n s a d a s - p r o p o r c i o n a n u n a i n f o r m a c i ó n
que en D Q , e n el l í m i t e s ó l o el c o e f i c i e n t e d e v e l o c i d a d k ( T ) . L a a p r o x i m a
c i ó n te ó r i c a a p r o p i a d a e n e s t o s c a s o s p u e d e b a s a r s e e n teor ía s estadísticas,
c o m o la t e o r í a d e l e s t a d o d e t r a n s i c i ó n ( T S T ) . L a T S T s e r á c o n s i d e r a d a e n el
c a p í t u l o s i g u i e n t e m i e n t r a s e n é s t e e s t u d i a r e m o s el p u n t o d e v i s t a m i c r o s c ó
281 Índice
Capítulo 5
pico. P o r e v i d e n t e s r a z o n e s d e e s p a c i o se h a r á u n e s t u d i o m u y limitado d e
D Q c e n t r a d o e n : 1) el e x p e r i m e n t o p a r a d i g m á t i c o ( h a c e s m o l e c u l a r e s c r u z a
l a i n t e r p r e t a c i ó n d e e s e e x p e r i m e n t o y s u c o n e x i ó n c o n la t e o r í a p o r m e d i o
d e los d i a g r a m a s d e v e l o c i d a d e s o d e N e w t o n y 3 ) el m é t o d o t e ó r i c o b á s i c o
d e n s u p l i r s e c o n l a s refs. [1, 3 , 4 ] , t e x t o s d e c o n s u l t a y e s t u d i o r e c o m e n d a d o s
t a m b i é n p a r a c o m p l e m e n t a r el m a t e r i a l q u e e n e s t e c a p í t u l o s e r e c o g e .
+ C c o n el á t o m o A e n el e s t a d o c u á n t i c o { ¿ } ( r e p r e s e n t a n d o u n a colección
de números c u á n t i c o s i d ó n e a p a r a e s p e c i f i c a r el e s t a d o d e e n e r g í a i n t e r n a )
c o n f o r m a c i ó n d e los p r o d u c t o s A B y C e n l o s e s t a d o s c u á n t i c o s {/ } y {m }
y velocidades vab y vc, respectivamente ? S e p r e g u n t a , e n otras palabras,
s o b r e la v i a b i l i d a d e x p e r i m e n t a l d e l p r o c e s o " d e e s t a d o a e s t a d o " ,
q u e i m p o n e el p r i n c i p i o d e i n d e t e r m i n a c i ó n . D e h e c h o , h o y e n día, las té c
ni ca s e x p e r i m e n t a l e s e n D i n á m i c a q u í m i c a s o n v a r i a d a s y p e r m i t e n obtener,
c o n d i f e r e n t e g r a d o d e d e t a l l e , i n f o r m a c i ó n a c e r c a d e la r e a c t i v i d a d a e s c a
la m o l e c u l a r . P e r o la t é c n i c a e x p e r i m e n t a l p a r a d i g m á t i c a d e la D Q e s la d e
m a c i ó n s o b r e la r e a c t i v i d a d " d e e s t a d o a e s t a d o " a q u e a l u d e el i n t e r r o g a n t e
u n a g r a n " c á m a r a d e d i s p e r s i ó n " 3 d o n d e t i e n e l u g a r la c o l i s i ó n e n t r e l o s d o s
n e r a l m e n t e , s ó l o e n el p l a n o d e l o s h a c e s ; v e r a b a j o ) . L a c á m a r a s e m a n t i e n e a
alto v a c í o ( p r e s i ó n d e l o r d e n d e 1 0 - 7 m b a r ) d e m a n e r a q u e las m o l é c u l a s q u e
282
Índice
Capítulo 5
f o r m a n lo s h a c e s n o c o l i s i o n e n a p r e c i a b l e m e n t e c o n las m o l é c u l a s d e l g a s r e
s i d u a l (aire, s o b r e t o d o , y d e r i v a d o s d e la d e s o r c i ó n d e l a s p a r e d e s m e t á l i c a s
i n t e r i o r e s d e l a p a r a t o y d e la p r e s i ó n d e v a p o r d e l a c e i t e u s a d o e n l a s v a r i a s
s i m o v o l u m e n d e reacción, A V ( d e l o r d e n d e l m m 3 ). L o s h a c e s m o l e c u l a r e s
las p a r t í c u l a s d e l h a z s e a m u y g r a n d e y é s t a s n o i n t e r a c c i o n e n e n t r e sí. B a j o
e s t a s c o n d i c i o n e s , l a s m o l é c u l a s t i e n e n u n a a l t a p r o b a b i l i d a d d e a l c a n z a r la
z o n a d e c r u c e m a n t e n i é n d o s e i m p e r t u r b a d a s , e s d e ci r, c o n s e r v a n d o l a s m i s
m a s c o n d i c i o n e s e n e r g é t i c a s y e s p a c i a l e s e n l a s q u e h a n s i d o g e n e r a d a s e n la
en buena me dida la s c o n d i c i o n e s p a r a e s t u d i a r l a s c o l i s i o n e s i n d e p e n d i e n
e s p o s i b l e c o n t r o l a r la v e l o c i d a d d e l a s p a r t í c u l a s e n l o s h a c e s . Además, es
p o s i b l e s e l e c c i o n a r el e s t a d o e n e r g é t i c o y la o r i e n t a c i ó n d e l a s m o l é c u l a s e n
la f u e n t e d e h a c e s m o l e c u l a r e s u t i l i z a n d o l á s e r e s y c a m p o s e l é c t r i c o s y m a g
n é t i c o s [7]. C o m o c o n s e c u e n c i a d e la c o l i s i ó n , l a s m o l é c u l a s y á t o m o s p r o d u
c i d o s e n la r e a c c i ó n s e d i s p e r s a n e n el e s p a c i o . L o s p r o d u c t o s s o n r e c o g i d o s
p o r u n d e t e c t o r r o t a n t e ( e n la f i g u r a e s e v i d e n t e s u u b i c a c i ó n e n u n ángulo
0 r e s p e c t o al h a z d e A ) , c o p l a n a r c o n l o s h a c e s d e r e a c t i v o s , q u e l o s i d e n t i
fica q u í m i c a m e n t e ( g e n e r a l m e n t e p o r e s p e c t r o m e t r í a d e m a s a s a c u a d r u p o l o
tras i o n i z a c i ó n p o r b o m b a r d e o el ec tr ón ic o) y d e t e r m i n a s u e s t a d o e n e r g é t i
u n a p a r t e d e la d i s p e r s i ó n o c u r r e e n el p l a n o f o r m a d o p o r l o s d o s h a c e s , l o s
cial al salir d e la r e s p e c t i v a f u e n t e ( p r e c o l i s i o n a l ) e s c o m p l e t a m e n t e a l e a t o r i a .
E n e s t e c a s o , l o s p r o d u c t o s s e p r o d u c e n c o n i s o t r o p í a a z i m u t a l e n t o r n o al
e j e d e la v e l o c i d a d r e l a t i v a y e s p o s i b l e r e c o b r a r la n e c e s a r i a i n f o r m a c i ó n tri
r e g i ó n d e d e t e c c i ó n h a d e s e r e v a c u a d a a ú n m e j o r q u e el v o l u m e n g e n e r a l d e
la c á m a r a , d e m o d o q u e la p r e s i ó n r e s i d u a l s e a allí d e l o r d e n d e 1 0 “ 11 m b a r .
no q u e , a d e m á s , p u e d e o b s e r v a r s e la r e a c c i ó n " d e e s t a d o a e s t a d o " e n f u n
y a q u e la d i r e c c i o n a l i d a d y la a n i s o t r o p í a s o n r a s g o s f u n d a m e n t a l e s d e la s
cuantitativos.
C o n r e f e r e n c i a a la r e a c c i ó n d e e s t a d o a e s t a d o , ec. (1), s e e n c u e n t r a q u e
Índice
Capítulo 5
F i g u r a 1: E s q u e m a d e u n a p a r a t o d e h a c e s m o l e c u l a r e s c r u z a d o s . V e r te xto.
el n ú m e r o d e p a r t í c u l a s d e l p r o d u c t o A B e n el e s t a d o i n t e r n o d a d o p o r ({/})
p l a n o d e los h a c e s m o l e c u l a r e s e n u n a d i r e c c i ó n q u e f o r m a u n á n g u l o 0 con
la d i r e c c i ó n d e u n o d e l o s h a c e s y q u e c u b r e ( s u b t i e n d e o " v e " ) u n e l e m e n t o
d e á n g u l o sólido d O es
284
Índice
Capítulo 5
d e l p r o c e s o r e a c t i v o d e e s t a d o a e s t a d o d o > / d f ¿ , la i n f o r m a c i ó n m á s d e t a l l a d a
5 s o b r e u n a co li s i ón reactiva.
E n e s t e p u n t o d e b e n h a c e r s e d o s p r e c i s i o n e s . P r i m e r a , la D C S es u n a m a g
n i t u d r e s u l t a n t e d e la o b s e r v a c i ó n (e s u n observable) o d e l p e r t i n e n t e cálculo
f e r i d a s al e x p e r i m e n t o o l a b o r a t o r i o ( L A B , v e r m á s adelante). U t i l i z a n d o la
c o n s e r v a c i ó n d e l fl u j o e n c u a l q u i e r s i s t e m a d e r e f e r e n c i a y r e l a c i o n e s t r i g o n o
m é t r i c a s a p r o p i a d a s s e o b t i e n e el jacobiano [1] c o n c u y a a y u d a p u e d e c o n v e r
s ó l i d o p o r d w ( c f . [3]).
A p a r t i r d e la s e c c i ó n e f i c a z d i f e r e n c i a l e s p o s i b l e o b t e n e r , p o r i n t e g r a c i ó n
a t o d o el á n g u l o s ó l i d o , la s e c c i ó n e f i c a z r e a c t i v a t o t a l
(5.3)
Esta m a g n i t u d i n t e g r a d a es u n a me di da de la r e a c t i v i d a d c o l i s i o n a l d e l a s
ello s i n r e st ri cc io ne s e s pa ci al es .
c i d a d e s va y vb c p e r f e c t a m e n t e definidas. P e r o e n e x p e r i m e n t o s reales se
d e b e n h a c e r c o r r e c c i o n e s p o r la a n c h u r a finita d e l a s d i s t r i b u c i o n e s f(t>A) y
f(^Bc)/ las c u a l e s p o d e m o s , s i n p é r d i d a d e g e n e r a l i d a d y c o n el o b j e t i v o d e
c o n e c t a r c o n la C i n é t i c a q u í m i c a , i m a g i n a r d e M a x w e l l - B o l t z m a n n y p a r a -
m e t r i z a d a s , p o r t a n t o , p o r u n a t e m p e r a t u r a , T. S i a h o r a q u i s i é r a m o s c a l c u l a r
e n t o d o el e s p a c i o y p a r a t o d o s l o s e s t a d o s i n t e r n o s d e r e a c t i v o s y p r o d u c
t o s ( e n p a r t i c u l a r , p o r t a n t o , p a r a t o d o {¿}, e s d e c i r , s i n d i s c r i m i n a r el e s t a d o
interno d e A B ) a c c e s i b l e s a la c i t a d a t e m p e r a t u r a T, p o d r í a m o s p a r t i r d e la
285 Índice
Capítulo 5
sección eficaz reactiva a la velocidad relativa vrei fija (es decir, a la energía de
colisión fija Ere¿ = (1/2)¡iv^el)f promediando a los estados internos de reacti
vos y sumando a los estados internos de productos, todo ello a la temperatura
T.
286 Índice
Capítulo 5
Por una parte, se puede deducir de aquí una interpretación física de una mag
nitud relevante en Cinética química, la "energía de activación", definida por
F _ V d¿nk(T)
a~~ B d(l/T)
287 Índice
Capítulo 5
Para completar, en cierta forma, esta sección del capítulo nos parece opor
tuno referimos a las relaciones cuantitativas entre la reactividad micro y ma
croscópica de reacciones opuestas. Efectivamente, la reactividad microscópi
ca (secciones eficaces) y macroscópica (coeficientes de velocidad) de la reac
ción AB + C —>A +BC, opuesta a A + BC —>AB + C, no están desligadas de las
de ésta. En efecto, la invariancia de las ecuaciones dinámicas (tanto de Schro-
dinger como de Newton) a la inversión temporal (t—>-t) implica una relación
entre ambas DCS (reversibilidad microscópica). Promediando adecuadamente
en línea con las ideas pergeñadas en los anteriores párrafos se encuentran
relaciones análogas entre ambos coeficientes de velocidad (balance detallado).
Cuando el promediado de éstos se lleva a todos los grados de libertad, la rela
ción entre los coeficientes ("térmicos) de velocidad de las reacciones opuestas
es la conocida k_»(T)/k<_(T)=K(T), constante de equilibrio [2, 3]. Las relacio
nes precisas y otros detalles pueden verse en el texto de Smith [3].
288 Índice
Capítulo 5
PA “ - P bc
o sea,
h ia u a = -m B c U R C (5.10)
mc uc = —h i a b u a b (5.11)
Dado que en experimentos se usa el sistema LAB mientras los cálculos usan
el sistema CM, es preciso relacionar LAB y CM para comparar medidas y
cálculos. ¿ Cómo están relacionadas las v y las u ? Para cada partícula (X=A,
BC, C, AB) es
ux = vx - c (5.12)
siendo
H Ia V a + m BCVBC
(5.13)
C_ M
la velocidad del centro de masas (o centroide) en LAB.
Por tanto, LAB y CM están relacionados por una transformación de Gali-
leo [12]. En efecto, dado que ningún proceso físico, como el de dispersión
289 Índice
Capítulo 5
v íel = V AB “ VC = UAB “ UC
con un reparto análogo de v 'el entre uc y uab* Con todo ésto, pueden fá
cilmente (ver detalles en el Ap. A de [8]) escribirse relaciones que dan las 4
velocidades en LAB en función de vrei y v 'el, bajando, así, de 12 a 6 el nú
mero de variables significativas. El número puede reducirse a solo 2 (vTe\, el
módulo de la velocidad relativa de reactivos y 0 = cos-1 (vrei.v'el), el ángu
lo de scattering) si se reconoce la simetría rotacional y azimutal del proceso
(para reactivos no polarizados) y se usa, en fin, la conservación de la energía.
Por tanto, el proceso (1) con reactivos no polarizados puede describirse en
función solo de la energía de colisión y del ángulo de scattering. Justamente,
éstas son las variables que figuran como argumento de la DCS en ec. (2) que
resulta, así, consistente con el resultado obtenido. La DCS es un observable,
pero en colisiones "individuales" (es decir, estrictamente de 2 cuerpos) hay
que añadir a esas dos variables el parámetro de impacto, separación entre los
vectores u a y u Bc que no es distinguida en CM.
Las relaciones vectoriales anteriores se prestan claramente a una represen
tación gráfica. En ella quedará claro, además, cómo simples consideraciones
cinemáticas imponen limitaciones a la viabilidad o no de un previsto experi
mento. Estamos hablando del llamado diagram a cinemático o de velocida
des o, más corrientemente, diagrama de Newton. Se trata de un diagrama
vectorial en LAB y en CM de las velocidades de las partículas participantes
en una colisión antes y despues de ésta. Estas composiciones vectoriales de
velocidades no plantean problema alguno en un marco mecano-clásico, pe
ro una cuestión previa que surge, derivada de la posible incompatibilidad
290 Índice
Capítulo 5
es decir el choque elástico es aquel que ocurre sin cambio químico y sin cam
bio en los estados de energía interna y cinética de los colisionantes. No hay
cambios en las magnitudes escalares y los únicos cambios posibles afectan a
las magnitudes vectoriales, v a y vbc* Veamos cómo se formula ésto en LAB
y en CM.
Usando las ecs. (13) para c y (14) para v rei se escribe la energía cinética total
(1/2) Me2 + (1/2) ^ 2rel = (1/2) Me2 + (1/2) ^ ' 2rel (5.18)
291 Índice
Capítulo 5
En una colisión inelástica no hay tampoco cambio químico pero algún es
tado interno y /o la energía cinética de los colisionantes debe cambiar en el
choque. En esquema, en el caso más general
292 Índice
Capítulo 5
\\
S
293
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Capítulo 5
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296
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Capítulo 5
297
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Capítulo 5
298
Índice
Capítulo 5
trayectorias clásicas.
Entre los varios programas comerciales de QCT distribuidos por el QCPE
(Quantum Chemistry Program Exchange) han sido muy populares los de Muc
kerman [24] (usado en nuestro grupo en [25, 26]) y Bunker y col. [27] ( que
usamos en [28]), pero en la actualidad se utiliza profusamente Venus, creado
por Hase y col. [29]. La principal diferencia entre ellos radica en los sistemas
de coordenadas utilizados: Venus y el programa de Muckerman definen co
mo eje Z el eje de la velocidad relativa inicial, vre¿, mientras que el programa
de Bunker usa a tal fin el vector de Jacobi inicial que une los centros de masas
de los reactivos, R. Por otro lado , para una reacción N-atómica, Venus pro
paga las 2 x 3N ecuaciones de Hamilton, mientras los programas de Bunker
y M uckerman (ver más abajo) eliminan del cálculo el movimiento del centro
de masas del sistema por lo que trabajan con 2 x (3N-3) ecuaciones. Final
mente, Venus produce directamente un output menos elaborado pero de gran
generalidad (el punto fásico o conjunto de coordenadas y momentos conjuga
dos del sistema) que implica leer ese fichero resultante mediante programas
creados por el usuario para sus necesidades. Los resultados de los otros pro
gramas son menos generales. Aquí, la presentación de los fundamentos del
método QCT se va a realizar siguiendo la formulación de Muckerman que
guarda semejanzas con Venus. Más detalles en [26, 30,31].
El hamiltoniano clásico para nuestro sistema reactivo genérico del tipo A
+ BC se expresa en el sistema CM de coordenadas de Jacobi, {Q }, como la
suma de un término de energía potencial, V({Q}), y un término de energía
cinética, T({P}), siendo {P } el conjunto de momentos conjugados [12] a las
coordenadas {Q}:
= h± ( -
H { { Q )' { P ) ) = \ p?
^ + 2 , kBC ' 2M
+ v (n ( { Q } ) , rj ({<?}), O ({<?})) (5-25)
donde
m Bm c m A (m B + m c ) ^ ,,c
MBC = -------;------- t¿A,BC = ------ ----------;------- M = m A + m B + m c (5.26)
mB + me mA + mB + mc
y las coordenadas de Jacobi tienen el siguiente significado: Qi, Q 2, Qz repre
sentan las coordenadas del átomo C respecto al átomo B, es decir, las com
ponentes del vector rec/ mientras que Q 4, Qr,. Q& corresponden a las coorde
nadas del átomo A respecto al centro de masas de la molécula BC, o sea, las
componentes del vector R a -b c -
299
Índice
Capítulo 5
mc
\E
n Qi ^2+3 (5.27)
i=1 mB + rriQ
r2 = (5.28)
2=1
3
mb
r3 =
\
E
2=1 mB + mc
Qi Qi+s (5.29)
que son, por tanto, las formas explícitas de las funciones ({£?}) ('¿ =1,2,3)
en la parte potencial del hamiltoniano.
La evolución tem poral del sistema viene dada por las ecuaciones de Hamil
ton:
d Qi dH dT
Qi = di W i~ 8 P i
(5.30)
dP dH dV _ ^ f d V \ f d r k\
Pi = EZÍ (\ dfírr k, J) (\ 9 . .,6
di dQi dQ. Q i J)
fin, 1
El estado del sistema en cada instante viene unívocamente determ inado por
la posición y la velocidad de las partículas que lo constituyen. El conocimien
to de la evolución temporal del punto Pi} en el espacio fásico supone
resolver simultáneamente las doce ecuaciones (5.30) de la siguiente forma:
rt-\-h
Q i (t + h) Q Qidt (5.31)
' ^ + Jt {
rt+ h .
Pi (t + h) — Pi (t ) + J Pidt i = 1,..., 6 (5.32)
donde las derivadas (Qi y Pi) se evalúan usando los últimos miembros de
las ecuaciones (5.30). Los algoritmos utilizados para resolver numéricamen
te las ecuaciones diferenciales (30) y (31) son los de Runge-Kutta-Gill y de
Adams-Moulton [32, 33]. La elección de estos métodos se debe a su capaci
dad para mantener el error de integración muy pequeño a lo largo de toda la
trayectoria. A cambio, precisan un esfuerzo computacional apreciable.
300
Índice
Capítulo 5
1. Distancia p.
Es la distancia entre el átomo A y el centro de masas de la molécula BC
al inicio de la trayectoria. Es decir, es el m ódulo del vector R de Jacobi.
2. Parámetro de impacto b.
Distancia mínima a la que pasaría el átomo A del centro de masas de la
molécula BC si no variase la dirección de la velocidad inicial (por tanto,
en ausencia de interacción). Coincide con la componente y de R .
3. Angulo 9 y
4. Angulo (f).
Son, respectivamente, el ángulo polar y el ángulo azimutal iniciales del
eje internuclear de la molécula BC, r.
301 Índice
Capítulo 5
5. Angulo rj.
Indica la orientación del momento angular rotacional inicial de BC, j.
Es el ángulo formado por los vectores j y r x k , donde k es el vector
unitario a lo largo del eje Z, eje paralelo a la velocidad relativa inicial,
"Vreí •
6. Angulo £.
Indica la fase de la vibración de la molécula BC. Su valor es cero en el
punto de retom o clásico interior y ir en el exterior.
302 Índice
Capítulo 5
donde
(P °)2 = . (5.35)
r±
ya que solamente tiene la componente del momento angular.
Una vez establecidos los valores iniciales de las coordenadas y de los mo
mentos se procede a integrar las ecuaciones de Hamilton empleando los al
goritmos numéricos señalados previamente. La integración se efectúa hasta
que alguna de las distancias internucleares se hace lo suficientemente grande
como para poder considerar que se ha alcanzado una situación asintótica, es
decir, un átomo y una molécula diatómica suficientemente separados para
poder considerar nula la interacción entre ellos. Dependiendo de los valores
finales de las distancias internucleares la trayectoria, que se inicia con la con
figuración A + BC, puede clasificarse como un proceso inelástico (compren
diendo el caso elástico, como particular) si las especies finales son también A
+ BC, como un proceso reactivo si se producen AB + C o AC + B, o como un
proceso disociativo si se llega a los 3 átomos separados, A + B + C.
Al finalizar una trayectoria, se obtiene un conjunto de valores para las coor
denadas y sus momentos conjugados. Conviene recordar que este conjunto
está formado por seis coordenadas (Qi,..,Qe) y sus seis momentos conjugados
(Pi,..,Pe); tres coordenadas y sus tres momentos conjugados indican la posi
ción y la velocidad del átomo C respecto al átomo B, mientras que las otras
303 Índice
Capítulo 5
E « « ) 2 (5.38)
^C,AB
304 Índice
Capítulo 5
(5.40)
(5.42)
305 Índice
Capítulo 5
da = 2nbdb
306 Índice
Capítulo 5
(5.46)
307 Índice
Capítulo 5
■■-,*¥) (5.47)
Í=1
En el método de trayectorias, la función / corresponde a la probabilidad
TV y, puesto que sólo puede valer cero o uno, la suma en (5.47) representa
el número de trayectorias reactivas N r del total de trayectorias N calculadas.
Así pues, la sección eficaz de reacción para una energía traslacional E tl y un
estado vibrorrotacional (v, j) de la molécula de reactivos viene dada por:
í t? -\ 1,2 N r(ETe\,v, j)
¿•V’J) = *b™* NiEnljVj ) <5-48>
y la estimación del error por:
308 Índice
Capítulo 5
P ,(6 .) = ^ (5-51)
Por otra parte, como se ha destacado desde el prim er momento en este ca
pítulo, una propiedad que permite obtener mucha información sobre la diná
mica de una reacción (o sea, sobre la PES) es la distribución angular, es decir
la distribución reactiva de ángulos de dispersión o de scattering. Frecuente
mente se toma como referencia para la definición de dicho ángulo el vector
velocidad del átomo colisionante (el haz de A en la Fig. 1) y también es fre
cuente que la especie observada sea la molécula diatómica producto, AB (o
AC, en su caso). Así, el ángulo de scattering sería, precisamente, el formado
309
Índice
Capítulo 5
5.6 Agradecimientos
A DGICYT y DGESIC del MEC por la continuada financiación de nuestra
investigación en DQ. A Javi y Jojo Alvariño por la "dirección artística" de la
parte gráfica. A mi atento lector Antonio Ceballos por su eficaz corrección
del manuscrito.
Bibliografía
[1] Levine, R.D. y R.B. Bernstein (1987): Molecular Reaction Dynamics and
Chemical Reactivity. Oxford University Press.
10Nótese que, como en una pareja colisionante la velocidad relativa es paralela/antiparalela
a la velocidad de la partícula más ligera/pesada, la definición 0 = cos- 1 (v rei.v 'el) solo coin
cide con la presente si A y AB son más ligeras o más pesadas que BC y C, respectivamente. Si
no, las dos definiciones determinan ángulos suplementarios.
310
Índice
Capítulo 5
[2] Atkins, P. W. (1998): Physical Chemistry, 6-. ed., Oxford University Press.
[4] Steinfeld, J.I, J.S. Francisco y W.L. Hase (1999):Chemical Kinetics and Dy
namics, 2-. ed., Prentice Hall.
[5] Lee, Y.T. (1987): Chem.Scr., 27, 215 ; Polanyi, J.C. (1987): ibid., 27, 229 ;
Herschbach, D.R. (1987): ibid, 27, 327.
[6] Scoles, G. Ed.(1988): Atomic and Molecular Beam Methods., Oxford Uni
versity P ress.
[8] Shafer-Ray, N . E . , A.J. Orr-Ewing y R.N. Zare (1995):/. Phys. Chem., 99,
7591.
311
Índice
Capítulo 5
[22] Martínez, T., M.L. Hernández, J.M. Alvariño, A. Lagaña, F.J. Aoiz, M.
Menéndez y E. Verdasco (2000): Phys. Chem. Chem. Phys. 2,589.
[26] Ochoa de Aspuru, G. (1996): Tesis Doctoral, Universidad del Pais Vasco.
[28] Hernández, M.L. (1985): Tesis Doctoral, Universidad del Pais Vasco.
[33] Preuss, W.H., S.A. Teukolsky, W.T. Vetterling y B.P. Flannery (1992): Nu
merical Recipes in Fortran., 2-. ed., Cambridge University Press.
[34] Aoiz, F.J., V.J. Herrero y V. Sáez Rábanos (1992):/. Chem. Phys. 97, 7423.
312
Índice
Capítulo 6. Dinámica de las reacciones
químicas II: Teoría del estado de transición
José M. Lluch
Departament de Química, UniversitätAutónoma de Barcelona, 08193 Bellaterra (Barcelona)
313 Índice
Capítulo 6
314
Índice
Capítulo 6
La teoría canónica del estado del transición se aplica cuando los reactivos
están en equilibrio térmico a una temperatura T, es decir, cuando las moléculas de
reactivos se distribuyen entre todos los estados posibles según una distribución tipo
Maxwell-Boltzmann. Para deducir la expresión de la constante de velocidad k(T) se
necesitan dos hipótesis, la primera de las cuales recibe el nombre de hipótesis
fundamental:
1) Las supermoléculas que han cruzado el estado de transición en el sentido reactivos
- productos no pueden volver atrás (y formar otra vez los reactivos) y llegan
finalmente a formar los productos. Se entiende por supermolécula el resultado de
considerar como un todo el conjunto de los núcleos y electrones de las moléculas que
intervienen en la reacción.
2) En el estado de transición el movimiento a lo largo del camino de reacción (es
decir, en la dirección que lleva desde los reactivos a los productos) puede ser
separado de los demás movimientos y tratado como una traslación clásica.
Supongamos una reacción bimolecular entre los reactivos A y B. En el punto
silla se construye la superficie de división ortogonal al camino de reacción. Hay que
determinar la concentración de supermoléculas en un pequeño entorno de la
superficie de división. Por ejemplo, consideremos la concentración de *
supermoléculas que en un instante dado tienen configuraciones nucleares que se
sitúan entre dos superficies paralelas a la superficie de división, la primera
315
Índice
Capítulo 6
donde Kitot es la constante de equilibrio entre los reactivos y las supermoléculas del
estado de transición, q \ot es la función de partición del estado de transición, qA y qB
son las funciones de partición de los reactivos A y B, respectivamente, V es el
volumen, AE0 es la diferencia entre el nivel de más baja energía del estado de
transición y el nivel de menor energía de los reactivos (es decir, la diferencia entre
los respectivos niveles de energía de punto cero), &Bes la constante de Boltzmann y,
finalmente, las concentraciones de todas las especies que intervienen están dadas en
moléculas por unidad de volumen. El origen de energías de cada función de partición
se sitúa en el nivel más bajo de cada especie, es decir, en su nivel de punto cero.
Si se espera el tiempo suficiente, la reacción alcanza la situación de
equilibrio entre reactivos y productos. En estas condiciones, en un instante dado,
existen dos tipos de moléculas en el estado de transición: las que se mueven en el
sentido reactivos - productos (con una concentración p) y las que mueven en
sentido contrario (con una concentración iV*P„R), de modo que
(.)
66
Evidentemente, en esta situación de equilibrio la velocidad de la reacción directa
debe ser igual a la velocidad de la reacción inversa. Por tanto,
^R-P - ^P-R —-W* / 2 (6.7)
Supongamos que repentinamente se eliminan todos los productos. Si se cumple la
hipótesis fundamental (no recruzamiento de la superficie de división), la ausencia de
los productos no alterará en absoluto el valor de p (no es posible que ninguna
supermolécula que contribuya a A^R_p provenga en realidad de los productos y que
esté contando dentro de A^R_Pdebido a una inversión del sentido de su trayectoria que
provoque un recruzamiento), y todas las supermoléculas que se incluyan en N*R_P
llegarán a formar productos. Por tanto, la velocidad de la reacción directa depende
de iV*R^P, concentración que mantiene el valor que tenía cuando había equilibrio con
los productos (ecuación 6.7). La velocidad de la reacción (medida en moléculas por
unidad de tiempo y unidad de volumen), es decir, la velocidad con la cual las
supermoléculas atraviesan la superficie de división en el sentido adecuado, será
316
Índice
Capítulo 6
dN JV*
-----= R P (6 .8)
d t d t
donde 61 es el tiempo medio que necesitan las supermoléculas para cruzar la
superficie de división, el cual, a su vez, es igual a la anchura 6 dividida por la
velocidad media v con la cual atraviesan el estado de transición:
* = =<5
dt (6.9)
v
Suponiendo que las velocidades sigan una distribución de equilibrio térmico,
¡xs2
/ ve n ‘Tdv i
v =-&
W2
B±
( 2 k BT V
1 (6.10)
JtfÁ
2k n T
e dv
0
donde v es la velocidad de cada supermolécula y [á, es la masa reducida
correspondiente al movimiento a lo largo del camino de reacción.
Si ahora se aplica la segunda hipótesis, la separabilidad de los movimientos
conduce a
qL=q,qi (6-n)
siendo qt la función de partición clásica correspondiente a un movimiento
traslacional unidimensional atravesando el estado de transición de anchura 6, y qt la
función de partición para todos los restantes 3^-lgrados de libertad en el estado de
transición, donde n es el número total de núcleos de la supermolécula. De la
termodinámica estadística se obtiene la expresión de qt :
h
donde h es la constante de Planck.
Combinando la ecuación 6.5 con las ecuaciones 6.7 a 6.12 se obtiene
j l AEo
dN k fíT q &r r T n l
----- = F - 1------ -— e B \ A \ B \ (6.13)
dt h q Aq B 1 1 1
en la cual los parámetros indefinidos 6 y // ya no aparecen pues se han cancelado al
combinar las ecuaciones.
Puesto que la ecuación de velocidad (en moléculas por unidad de tiempo y unidad
de volumen) experimental para una reacción bimolecular es
317
Índice
Capítulo 6
(6.14)
k ( T ) = V kBT qX e (6.15)
h q Aq B
Si el volumen se da en litros, las unidades de esta constante de velocidad canónica
son litro molécula'1 s'1. Si la ecuación 6.15 se multiplica por el número de Avogadro
las unidades son litro mol'1 s'1. Si se trata de una reacción unimolecular (realizada en
condiciones tales que la teoría canónica del estado de transición sea aplicable), la
ecuación 6.15 queda
(6.16)
de modo que, para un grado de libertad, el volumen del espacio de fases asociado a
un único estado es h. Asumiendo que los reactivos están en equilibrio térmico, la
relación entre el número de supermoléculas que hay en dos regiones diferentes del
espacio de fases viene dada por el cociente entre la probabilidad de ocupación del
318
Índice
Capítulo 6
conjunto de estados de cada región. Teniendo en cuenta que no todos los estados son
igualmente probables, no es suficiente con contar el número de estados que hay en
cada región, sino que hay que introducir el factor peso
H
e keT (6.19)
donde H , que depende de las coordenadas y momentos, es la función Hamiltoniana
clásica de la supermolécula (es decir, la energía total). Evidentemente, todos los
estados de un mismo diferencial de volumen tienen igual valor de H. De este modo,
el cociente entre el número de supermoléculas (dN*) que están en el diferencial de
volumen de la ecuación 6.17 ligado a la superficie de división, y el número de
supermoléculas (N) que pueden calificarse como reactivos da
H
siempre y cuando
319
Índice
Capítulo 6
Ef = (6.25)
320
Índice
Capítulo 6
(4 H'
k(T ) = — _____L * * L = y k B T 4* ~t ¡ t (6 2 9 )
k(T> [A\B]V d, h qiq, e (6'29)
que es precisamente la misma expresión que ya se obtuvo en el apartado 6 . 1 . 1 para
una reacción bimolecular.
321
Índice
Capítulo 6
k {T) = ih L K x (6.31)
V ’ h
donde
AF
K \ = LV - 2 — (6.32)
Qa Qb
es una pseudoconstante de equilibrio entre los reactivos y las supermoléculas del
estado de transición en las que se ha eliminado el grado de libertad correspondiente
al camino de reacción (sólo tienen 3^-lgrados de libertad: 3 de traslación, 3 de
rotación y 3n-7 correspondientes a los grados de libertad de la superficie de división
si la estructura del estado de transición no es lineal). La ausencia de este grado de
libertad es lo que hace que no pueda hablarse de una auténtica constante de
equilibrio.
A partir de K y utilizando expresiones análogas a las termodinámicas se
obtienen una serie de magnitudes pseudotermodinámicas como la energía de Gibbs
estándar de activación
(6.33)
(6.34)
dT
donde K~ es el cociente de las presiones de los estados estándar de las especies en
pseudoequilibrio y K *es la pseudoconstante de equilibrio en la escala de presiones
entre los reactivos y las supermoléculas del estado de transición en las que se ha
eliminado el grado de libertad correspondiente al camino de reacción, con
(suponiendo gases ideales)
(6.35)
para una reacción bimolecular y
322
Índice
Capítulo 6
K¡=K> (6.36)
para una reacción unimolecular. Finalmente, la entropía estándar de activación se
obtiene a partir de las anteriores magnitudes pseudotermodinámicas:
323
Índice
Capítulo 6
d ( a g ío / t )
A H t o = - T 2 - ^ - ---------- l -RT (6.39)
dT
que se deduce combinando las ecuaciones 6.33 a 6.35; finalmente, AStQ(T) se calcula
mediante la ecuación 6.37 (aunque hay que decir que la dependencia de AStQcon la
temperatura suele ser muy pequeña).
Por otra parte hay que tener en cuenta que los cálculos teóricos permiten
obtener la constante de velocidad canónica a partir de magnitudes moleculares y, por
tanto, utilizan directamente la ecuación 6.30 y no la 6.38. De hecho, AGÍ2(7),
AHtQ(T) y ASÍ2 (7) pueden calcularse teóricamente, pero sólo a partir precisamente
de las funciones de partición que aparecen en la ecuación 6.30.
El problema del estado estándar es una fuente de error muy común cuando
se utiliza la formulación termodinámica para calcular teóricamente las constantes de
velocidad en fase gas. En termodinámica el estado estándar a temperatura T se elige
como aquel en el que p- - 1 bar y el gas se comporta como un gas ideal ( 1 bar = 1 0 5
Pa = 0,986923 atm = 750,062 torr). En cambio, como ya se ha mencionado más
arriba, en cinética el estado estándar, tanto para gases como para disoluciones, es 1
mol litro 1. Las entalpias de los gases ideales sólo dependen de la T, por lo que
A //Í2(7) es la misma tanto si el estado estándar es p Q= 1 bar como si es c~ = 1 mol
litro'1. Sin embargo la contribución traslacional de la entropía depende del volumen,
ya que contiene un término aditivo que para 1 mol e s R ln V .S i el estado estándar
es 1 mol litro '1 el volumen que corresponde a 1 mol es precisamente V = 1 litro, con
lo cual R ln V es cero. Pero si el estado estándar fuera p- = 1 atm, para un mol
(asumiendo comportamiento de gas ideal)
D T
R l n V = R \ h ----- (6.40)
P
lo que daría un valor de, por ejemplo, 6,35 cal mol'1 K'1 a 298,15 K. Un programa
como GAUSSIAN calcula los valores de GQtermodinámicos de los reactivos y los
GtQ pseudotermodinámicos de los estados de transición tomando como estado
estándar p- = 1 atm (esta es también la opción implícita en GAUSSIAN98, aunque
en esta última versión se puede entrar un valor distinto de la presión). Si para una
reacción unimolecular en fase gas se calcula AGtQcomo diferencia de los valores de
la energía de Gibbs correspondientes al estado de transición y al reactivo, se comete
el mismo error (un exceso de entropía de 6,35 cal mol'1 K' 1 a 298,15 K) en el
minuendo y en el sustraendo, por lo que el error global es nulo. Sin embargo, para
una reacción bimolecular en fase gas este procedimiento da un exceso de entropía de
6,35 cal mol"1 K '1 a 298,15 K al conjunto de los dos reactivos en comparación con el
estado de transición, lo que eleva AGtQ 1,89 kcal mol'1 por encima del valor correcto
a 298,15 K.
324
Índice
Capítulo 6
Combinando ahora las ecuaciones 6.44 y 6.31 se obtiene la siguiente relación para
una reacción en disolución (al menos para una reacción no iónica),
independientemente de su molecularidad:
m to~ E a - R T (6.45)
Sustituyendo cualquiera de las ecuaciones 6.42, 6.43 o 6.45 en la segunda
igualdad de la ecuación 6.38 y comparando con la ecuación de Arrhenius 6.3 se
325
Índice
Capítulo 6
A = - ^ — K ° e me R (6.46)
h
donde el exponente m es igual al valor numérico que multiplica a (-RT) en las
correspondientes ecuaciones 6.42, 6.43 o 6.45. Es decir, para reacciones en fase gas
m es igual a la molecularidad de la reacción (m = 1 para unimoleculares, m = 2 para
bimoleculares), mientras que para reacciones en disolución m = 1
independientemente de la molecularidad. La ecuación 6.46 muestra que A será
pequeño para reacciones con AStQ claramente negativo. Este es el caso de las
reacciones bimoleculares en las que en la evolución desde dos moléculas separadas
de reactivos hacia el estado de transición se pierde entropía, puesto que se pierden
grados de libertad traslacionales y rotacionales que se transforman en vibracionales,
cuyo espaciado energético es bastante mayor. En consecuencia, los factores pre-
exponenciales de las reacciones bimoleculares acostumbran a ser numéricamente
varios órdenes de magnitud menores que los de las reacciones unimoleculares.
es el número total de estados que pueden existir con todas las combinaciones
posibles de coordenadas q¿ y momentos conjugados pero con la restricción de que
la energía total H esté comprendida entre 0 y E. Se trata de un simple cuenteo de
estados, no de una probabilidad por lo cual no hay que introducir el factor peso de
326
Índice
Capítulo 6
la ecuación 6.19.
La derivada de G(E) es la densidad de estados N(E):
327
Índice
Capítulo 6
energía total E. El problema ahora es que los reactivos pueden distribuir dicha
energía E de cualquier modo entre sus grados de libertad y en cambio las
supermoléculas en el estado de transición tienen la restricción de que una parte AE0
de la energía total E ya no está disponible por el simple hecho de haber alcanzado la
superficie de división, lo cual disminuye el número de estados posibles (sólo cuentan
los estados compatibles con dicha restricción) y, por tanto, reduce el cociente de la
ecuación 6.49.
Derivando la ecuación 6.49 respecto al tiempo, utilizando la igualdad de la
ecuación 6.23, y N ^N ANB(idl como se describe antes de la ecuación 6.21), queda
(6.50)
Aplicando la hipótesis fundamental, todas las supermoléculas en la superficie de
división con p * > 0 contribuyen a la velocidad de la reacción. No se puede integrar
sobre d p * entre 0 e porque la energía traslacional E * está limitada. Por ello,
diferenciando la ecuación 6.25,
nt
dE¡ = — dp\ (6.51)
Mí
y sustituyendo en la ecuación 6.50 se puede integrar sobre d E * entre el valor mínimo
( E * = 0, no hay energía traslacional) y el valor máximo ( E * = E - A E 0 , no queda
energía para los 3n-l grados de libertad ortogonales al camino de reacción) para
obtener la velocidad de la reacción:
dt hN (E )
(6.52)
con lo que se llega a
H = E -A E 0
328
Índice
Capítulo 6
k*(/ Ej-i\) = r 1
T
1 dN G H E-ÁE
---------= V — v , x
q) (6.54)
v ' [ A j 5 ] V dt hN {E )
donde G^E-AEg) es adimensional, mientras qm N(E) tiene unidades de energía'1. Por
tanto, si el volumen se da en litros las unidades de esta constante de velocidad
microcanónica son litro molécula'1 s'1. Si la ecuación 6.54 se multiplica por el
número de Avogadro (L) las unidades son litro mol'1 s"1. Si se trata de una reacción
unimolecular, la ecuación 6.54 queda
, v gH e-^eA
k( E ) = ------------------- i— ° ' (6.55)
v ’ hN(E) V '
d ó n d e la con sta n te de v e lo c id a d v ie n e dada en s"1. E v id en tem en te k(E) = 0 si E <
AEo-
La constante de velocidad canónica de una reacción en equilibrio térmico
también se puede obtener mediante la teoría microcanónica. Basta con aplicar la
teoría microcanónica a cada uno de los conjuntos de estados de los reactivos que
corresponden a cada energía total H = E determinada. Es decir, hay que calcular k(E)
para cada nivel de energía. Un promedio tipo Boltzmann de las constantes de
velocidad microcanónicas dará la constante de velocidad canónica a la temperatura
T:
00
r ( E ) = ^ E)eJ ( « 7)
r°N(E)e k»T dE
;o
Sustituyendo las ecuaciones 6.54 y 6.57 en la ecuación 6.56 y realizando algunas
operaciones matemáticas, se llega a la constante de velocidad canónica k(T) ya dada
en la ecuación 6.15. Evidentemente, en caso de equilibrio térmico para obtener la
k(T) es mejor utilizar directamente la ecuación 6.15, no habiendo ninguna necesidad
329
Índice
Capítulo 6
de pasar por la teoría microcanónica (ecuaciones 6.54, 6.56 y 6.57), a menos que se
quiera obtener una información detallada, nivel por nivel, de las diferentes
contribuciones a la k(T).
330
Índice
Capítulo 6
2 2
(6.59)
(6.60)
331
Índice
Capítulo 6
Como el punto silla es estacionario, el camino debe comenzar con un pequeño paso
en la dirección del vector propio (vector de transición) asociado al único valor propio
negativo de la matriz de constantes de fuerza, en un sentido iniciando el camino
hacia los reactivos, y en sentido contrario hacia los productos. El problema es que
tanto el vector de transición como el gradiente no son en general invariantes ante un
cambio en el sistema de coordenadas. Cada sistema de coordenadas dará lugar a un
camino de reacción que, en general, será físicamente distinto del obtenido con otro
sistema de coordenadas.
Sin embargo hay un camino de reacción que tiene una especial relevancia
dinámica: el que corresponde a un movimiento clásico de una supermolécula que se
mueve hacia abajo a una velocidad infinitesimalmente próxima a cero. Es decir, a
medida que en cada paso infinitesimal disminuye la energía potencial y se crea
energía cinética nuclear, se elimina la velocidad de los núcleos que se va generando.
En el límite correspondería a un movimiento (movimiento intrínseco) cuya energía
sería siempre sólo energía potencial (la energía total en cada punto del camino
coincidiría con V). Partiendo de las ecuaciones clásicas de movimiento de Hamilton
en coordenadas cartesianas
dH dRiy dH dpiy
V i, y (6.62)
d p iy dt d R iy dt
donde p iy son los momentos conjugados de las coordenadas Riy del camino de
reacción, teniendo en cuenta que sólo la parte potencial de H depende de R iy y que
p ¡r = m¡ dRiy / dt, la integración de la segunda igualdad de la ecuación 6.62 a lo largo
de un intervalo de tiempo infinitesimal dt
(¿ni~dtL A d R iy \
\ dt d m , — — =-fJ+<1‘ --------dt
dV
V ij (6.63)
Jo 1 dt ) J> d R iy
donde se ha supuesto que en cualquier momento t a lo largo del camino la velocidad
dRiy / dt es cero, conduce a
m iy- = — ^ — d t V i, y (6.64)
' dt d R iy
y de aquí se obtiene el sistema de ecuaciones diferenciales simultáneas en
coordenadas cartesianas
m ^ R iy mvdRiY
(6.65)
dV dV
dR¡ r dR iy
Dividiendo ahora el numerador y denominador de cada fracción por m, llegamos
332
Índice
Capítulo 6
333
Índice
Capítulo 6
(6.67)
334
Índice
Capítulo 6
(6.68)
donde qGT(T) s)cs la función de partición para la superficie de división generalizada
(sin el grado de libertad correspondiente al camino de reacción) que pasa por el punto
5 del MEP con el origen de energía en VMEP(s) y con todos los números de simetría
rotacionales reducidos al valor 1. VMEP(s) es la energía potencial a lo largo del MEP.
Naturalmente VMEP(s = 0) = V*.
La constante de velocidad canónica variacional para una temperatura.dada
se obtendrá minimizando kGT(T,s) sobre el conjunto de estados de transición
generalizados que se construyen a lo largo del MEP:
* CVT ( T ) - min i 'CT (T,s) - k eT ( t , sc, t (T)) (6.69)
donde scvt(T) indica la localización a lo largo del MEP del estado de transición
canónico variacional para la temperatura T. Es interesante resaltar que la posición del
estado de transición variacional varía con la temperatura (en contraposición con el
estado de transición convencional que está fijo en s = 0 para todas las temperaturas).
Por otra parte la generalización de la formulación termodinámica conduce
a una pseudoconstante de equilibrio generalizada análoga a la de la ecuación 6.32
(ahora no se incluye el número de Avogadro ya que en la teoría variacional se suele
tomar como estado estándar una concentración de 1 molécula/cm3, con lo cual las
constantes de velocidad para reacciones bimoleculares se dan en unidades de cm3
molécula"1 s"1):
(6.70)
(6.71)
335
Índice
Capítulo 6
Combinando la ecuación 6.68 con las ecuaciones 6.70 y 6.71 se llega a la constante
de velocidad generalizada
AG Gr’°(7\s)
(6.72)
con
A G gt’°(T, s) = RT W 0 _ i
(6.73)
k BT
L T <Pr l( rtr \)K°
v rO
(6.74)
X
donde x*corresponde a la geometría del punto silla. El conjunto de coordenadas
normales Qm que diagonalizan la matriz F cumplen las ecuaciones clásicas del
movimiento
(6.75)
336
Índice
Capítulo 6
(6.77)
donde el superindice T indica que hay que trasponer la correspondiente matriz o
vector(los vectores se darán como vectores columna, y si se trasponen, como
vectores fila); L(x*) es una matriz unitaria cuyas columnas Lm(x*) son los vectores
propios (que indican las direcciones de los modos normales) de F en el punto silla
asociados a los valores propios Xm(s = 0) (los cuales son los elementos diagonales de
la matriz diagonal A(x*)). Las frecuencias de los modos normales son
(6.78)
337
Índice
Capítulo 6
/ V y ' ( 5 ) = v í y ( s /
) v í 'y ' ( s ) + m +m
6 .„,
“ yy
+
y
a , O, L Jota'
ea'p-Y'^.-'Y'í5) ’ (6'8°)
a,p>a',p'
= x ,y ,z
Si la supermolécula es lineal sólo hay dos grados de libertad de rotación, pero hay
un grado de libertad adicional de vibración. Si suponemos que el eje de la
supermolécula coincide con el eje z, los elementos del proyector serán
338
Índice
Capítulo 6
/ M - j t a W j <6-84)
i-1
Como en la ecuación 6.77, la matriz de constantes de fuerza proyectada
puede diagonalizarse mediante una transformación unitaria
[L o r ( s ) j F p(s)L(,,'(S) - A ( S) (6.85)
donde LGT(s) es una matriz unitaria cuyas columnas son los vectores
propios (que indican las direcciones de los modos normales generalizados) de F(s)
asociados a los valores propios Xm(s) (los cuales son los elementos diagonales de la
matriz diagonal A(s)). Las frecuencias de los modos normales generalizados son
V <6'88>
a
339
Índice
Capítulo 6
<6-90)
m =1
donde Qm(s) es la coordenada normal correspondiente al modo normal generalizado
m cuando la supermolécula está en x:
2 m( s ) = [ x - x ( s ) ] » L * r ( s ) (6-91)
Las energías de los estados vibracionales correspondientes a la energía potencial de
la ecuación 6.90 son
£íl{ni>--->nF- V s ) = ^ E G
J bm (nm, s ) = y2 ( n m + y W ( s ) (6.92)
m=1 m=l¿*
donde el número natural nmes el número cuántico de vibración del modo m. Puesto
que en la aproximación armónica la función de partición vibracional es separable
<M 3)
m =1
con
340
Índice
Capítulo 6
_ k lH
2k BT
í w U ^ ) ----------^ (6-95)
l-e keT
En cuanto a la parte rotacional, puesto que los niveles energéticos
rotacionales están muy próximos, la función de partición rotacional puede evaluarse
clásicamente. Así para una supermolécula lineal
<6-96>
donde I(s) se obtiene mediante la ecuación 6.84. Si la supermolécula no es lineal
2i.r
Jll A s ) l A s ) l As ) (6.97)
ñ2
K f(T )- 2 <6'101>
qT y q T son ^as Unciones de partición para los grados internos de libertad de los
reactivos A y B (excluyendo por tanto el movimiento traslacional), respectivamente.
Si A es una molécula el proceso de cálculo de q ¿ 1 es similar al descrito para las
qGT(T,s), aunque más sencillo ya que no hay que proyectar la matriz de constantes de
fuerza, teniendo en cuenta que sólo los valores propios de dicha matriz asociados a
341
Índice
Capítulo 6
(6.104)
eG(5) = 2 e wm K = 0>s ) = 2 h ^ Vm^
m =1 m =1
es la energía de punto cero total de la supermolécula. En contraposición a la energía
potencial adiabática (que en realidad ya contiene el término cinético nuclear
correspondiente a la vibración de punto cero), la V también recibe el nombre de
energía potencial clásica.
342
Índice
Capítulo 6
Para calcular AG GT’ °{ t , k , ñ (&)) hay que proceder como sigue. Suponiendo una
aproximación armónica, la energía potencial en un punto cercano a x(k) se puede
obtener a partir del siguiente desarrollo en serie de Taylor:
donde
r = x-x(k) (6.108)
Para un valor de k determinado y una orientación definida por ñ(&)hay que
encontrar el punto de mínima energía del hiperplano correspondiente(en el caso del
GTS ortogonal al MEP el punto de mínima energía es precisamente el punto de
intersección). Para ello se define la matriz de constantes de fuerza proyectada
F p (k , ñ ) = (l - ñ ñ T )(l - P RT )F [x (k ) | l - P RT )(l - ñ ñ r ) (6.109)
donde PRT proyecta sobre las rotaciones y las traslaciones (ver ecuaciones 6.80 y
6.83). Si ñ (£ ) es precisamente un vector unitario en la dirección del gradiente, la
ecuación 6.109 es equivalente a la 6.79. Además se puede definir el vector gradiente
proyectado
343
Índice
Capítulo 6
r " = - [ F p( M ) ] V ( M ) (6112)
Naturalmente si ñ (fc ) es un vector unitario en la dirección del gradiente, rM= 0. La
energía potencial en el mínimo del hiperplano será
permite obtener la función de partición q GT ( t , k , ñ (&)) para el GTS que pasa por
el punto x(&) y está orientado según ñ (k ) . Mediante una ecuación análoga a la 6.73,
344
Índice
Capítulo 6
(6.115)
(6.116)
OO
345
Índice
Capítulo 6
1
E ‘un< ; E < V AG
1 26 £ ’ 0
P{ E) ~, 1+ e (6.118)
tun
1 - P ¡ 2 V ag - e }, V ag ^ E ^ 2Vag - E 0
1, 2V AG- E ‘u n < E
donde
= m a x jV / (s = (5 = co)] (6.119)
(6.120)
es la integral de acción, siendo s¡ y s2 los puntos de retorno clásicos, es decir, los
puntos en los cuales (s ) = E . Como se ha dicho más arriba en coordenadas
cartesianas ponderadas la de la ecuación 6.120 toma el valorlsin dimensiones.
La segunda línea de la 6.118 corresponde al túnel, mientras que la tercera
línea es el resultado de la reflexión cuántica. Como resultado de estas ecuaciones,
k CVT/ZCT(j > 1 ? c o n K CVT/ZCT( r _ 0 ) y k CVT/ZCT( 7% oo)
346
Índice
Capítulo 6
incluyendo hasta 10 -15 núcleos los resultados pueden llegar a ser muy exactos). La
obtención de valores numéricos fiables de las constantes de velocidad puede ser un
objetivo en sí mismo, pero es un requerimiento indispensable para poder predecir
mecanismos de reacciones complejas, especialmente en aquellos casos en los que las
medidas experimentales son muy difíciles y de precisión incierta.
En este capítulo hemos realizado un primer acercamiento elemental a la
teoría del estado de transición, aunque por la limitación del espacio disponible,
hemos dejado muchos puntos sin tratar. Hay que tener en cuenta que incluso si se
conociera a la perfección la hipersuperficie de potencial de una reacción (o al menos,
el conjunto de puntos estacionarios de una reacción), la deducción del valor de la
constante de velocidad muchas veces no sería en absoluto directa. Es decir, los
cálculos electrónicos son el primer paso fpero sólo el primer pasolpara la
determinación de las constantes de velocidad, pero a partir de ellos hay que aplicar
tratamientos a veces bastante elaborados (como, por ejemplo, la teoría estadística
unificada canónica para reacciones con múltiples cuellos de botella cinéticos) para
obtener las constantes de velocidad. Por otra parte, la teoría convencional del estado
de transición sólo es aplicable para reacciones cuya hipersuperficie de energía
potencial tiene un punto silla. Si no existe una barrera de energía potencial (aunque
sí, evidentemente, existirá una barrera de energía de Gibbs) sólo la teoría variacional
del estado de transición permite obtener un valor de la correspondiente constante de
velocidad.
Los cálculos descritos en este capítulo pueden realizarse con el programa
POLYRATE (cuya versión más reciente, a marzo de 2000, es la 8.4) del grupo de
Donald G. Truhlar (University of Minnesota, Minneapolis, Minnesota, USA), un
programa en constante evolución.
Finalmente, hay que remarcar que aunque aún hay que introducir mejoras
adicionales en la teoría del estado de transición y en la forma práctica de aplicarla
(no sólo en fase gas, sino que también hay que extenderla desde el punto de vista
práctico a las reacciones en disolución y a las reacciones enzimáticas), el principal
problema que afecta a la exactitud de los resultados és la carencia hoy en día de un
método suficientemente exacto y práctico para resolver la ecuación de Schródinger
electrónica. Hay que tener en cuenta que las constantes de velocidad tienen
dependencias exponenciales respecto a las energías, por lo que pequeños errores en
éstas producen grandes errores en aquéllas.
Bibliografía
347
Índice
Capítulo 6
Garrett, en "Theory of Chemical Reaction Dynamics", Vol. IV, Ed. M. Baer (CRC
Press, Boca Raton, FL, USA, 1985, p. 65 - 137).
4. J.C. Corchado, E.L. Coitiño, Y.-Y. Chuang, P.L. Fast y D.G. Truhlar, J. Phys.
Chem. A 1998,102, 2424 - 2438.
Índice
7 ESPECTROSCOPIA I: ESPECTROSCOPIA Y
DINÁM ICA DE ESTADOS ALTAMENTE EX
CITADOS VIB RACIONALM ENTE
F . B o ro n d o
7.1 In tro d u c c ió n
349 Índice
Capítulo 7
350 Índice
Capítulo 7
351
Índice
Capítulo 7
352
Índice
Capítulo 7
7 .2 T é c n ic a s E x p e r i m e n t a l e s
7.2.1 E xcitación de sob reto n o s en infrarrojo
En este apartado describiremos sucintamente algunos experimentos clási
cos de excitación alta de sobretonos. Como ya indicamos en la Introducción,
en estas experiencias se pone en juego una energía vibracional suficientemente
alta como para poder acceder a regiones de la superficie de energía potencial
donde la dinámica corresponde a movimientos de gran amplitud, incluso cer
canos a las posibles barreras para transformaciones químicas unimoleculares
(isomerización, etc.). En estas zonas las interacciones y anarmonicidades son
lo suficientemente im portantes como para inducir rápidos procesos de trans
ferencia intramolecular de energía.
En primer lugar mencionaremos los trabajos pioneros de Berry y col. so
bre la excitación de sobretonos de la tensión (de alta frecuencia) C — H(D)
en benceno vapor a tem peratura ambiente [30], en los que se llegó a niveles
tan altos como vqh = 9 ^ 0 . Estos autores desarrollaron un sensible método
fotoacústico intracavidad (ver ilustración en la figura 7.1) con el que midieron
la anchura correspondiente a las distintas transiciones. Las medidas arrojaron
353 Índice
Capítulo 7
valores bastante grandes (30-110 cm "1) que dependían de una forma no monó
tona del número de cuantos excitados, creciendo en el intervalo vch — 4 0
a UcH - 7 o y decreciendo para v c h — 8 0 y v c h — 9 f - 0. Además
esta tendencia depende muy sensiblemente de la sustitución isotópica H / D ,
lo que sugiere la presencia de resonancias vibracionales de bajo orden entre
la tensión C — H(D) y otros modos del benceno. De los valores de las an
churas puede derivarse, utilizando razonamientos basados en el principio de
incertidumbre, los tiempos característicos de decaimiento de estas excitaciones
debido al acoplamiento con otros modos, resultando así que la transferencia
de energía en este caso es muy rápida, por debajo del picosegundo.
Más tarde, estos experimentos fueron explicados teóricamente por Sibert,
Eeinhardt y Hynes [31], que identificaron la fuente de la anchura de las líneas
en la resonancia (no lineal) de Fermi 2:1 entre la tensión C —H (D ) y la flexión
de enlaces C —C — H (D ).
O tros trabajos que merecen ser citados en este campo son los del grupo
de Quack [32] sobre la espectroscopia de sobretonos en metanos sustituidos,
C H X 3 , (X — D^F^Cl^Br^CF^). Aquí también existe una im portante reso
nancia de Fermi 2:1 entre tensión y flexión (^flexión ~ 1500 cm - 1 , te n sió n ~
3000 cm -1 ) [3 3 ], que define una serie de estados cuasiresonantes flexión-
tensión en la vecindad del estado “brillante” inicial que satisfacen la expressión:
354
Índice
Capítulo 7
F r e c u e n c i a (cm )
355 Índice
Capítulo 7
en el espectro. Así, en el caso más general sólo son posibles tres valores del
momento angular rotacional, J , del estado final, de forma que la asignación
de las líneas resultantes no es complicada.
Una segunda ventaja de la espectroscopia BEE es que consigue una gran
selectividad en los modos vibracionales excitados. Habitualmente la geometría
de equilibrio de los estados electrónicos excitados es muy distinta a la del
fundamental. Esto hace que, debido al principio Franck-Condon, los elementos
de la m atriz de transición sólo sean im portantes para aquellos estados finales
activos en el número, en general pequeño, de modos vibracionales que reflejan
este cambio de geometría. Por otra parte y debido a la misma causa, la
población de niveles en los modos activos puede extenderse a estados bastante
excitados (1.0-3.5 eV), lo que en moléculas poliatómicas puede implicar un
cambio en varios órdenes de magnitud de la densidad de estados.
Por último mencionaremos que desde el punto de vista teórico la espectros
copia BEE es muy interesante. Al igual que en la técnica de fotoextracción
de electrones que se describirá en la sección siguiente, los experimentos de
BEE se basan en la preparación de un paquete de ondas no estacionario cuya
evolución dinámica corresponde al movimiento colectivo de los estados esta-
356 Índice
Capítulo 7
357
Índice
Capítulo 7
normales. Dado que es una molécula tetratóm ica lineal, tendrá siete números
cuánticos vibracionales: (ui, ü2 , t?3 , U4 , / 4 , U5 , ¿5 ) correspondientes a las tensiones
C — H, C = C, C — H , y flexiones ¿rans (z/4 ) y (z/5 ), respectivamente. Los
números I4 y ¿5 indican el carácter de momento angular vibracional asociado
con estas flexiones doblemente degeneradas [43]. Las resonancias más impor
tantes son una de tipo Darling-Dennison 2 :2 entre las tensiones v\ y z/3 , otra
con las mismas características entre las flexiones y varias interacciones cuár-
ticas 1 : 1 + 1 + 1 donde un cuanto de una de las tensiones C — H {y\ ó z/3 ) se
intercam bia por un cuanto en la tensión C = C (v2 ) más dos cuantos de las
flexiones z/4 y z/5 . La existencia de estas ocho resonancias en el acetileno, cada
una de las cuales destruiría en principio un número cuántico, nos haría pensar
que no existen números cuánticos razonablemente buenos para los correspon
dientes estados vibracionales. Sin embargo, esto no es así ya que no todas
las resonancias anteriores son linealmente independientes. Si representamos
cada una de ellas por un vector heptadimensional en el espacio de los números
cuánticos, de forma que por ejemplo la resonancia Darling-Dennison entre
tensiones, &1133Q 1Q 3 , y la cuártica 3:2+4+5, &3245 Q 3 Q 2 Q 4 O 5 ? vengan dadas
por los vectores (A ^i, Aü 2 , Aü 3 , Aü 4 , Aug, A A U 7 ) = (2 ,0 ,- 2 ,0 ,0 ,0 ,0 ) y (0 , 1 ,-
1 , 1 ,0 , 1 ,0 ) respectivamente, es un ejercicio fácil de álgebra lineal encontrar un
conjunto de vectores m utuam ente ortogonales que sean a su vez ortogonales
con las resonancias anteriores, y que corresponden a buenos números cuánticos
(ignorando el efecto de resonancias más débiles) para nuestro problema. Estos
valores resultan ser:
358
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Capítulo 7
359
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Capítulo 7
—1
F recu en c ia (cm )
360
Índice
Capítulo 7
361
Índice
Capítulo 7
( a)
362
Índice
, ---------- 1---------------------4 _____________l_____________ 1
Capítulo 7
i —i...i... r...
l
i
l
i
% -
i i i i
r 1 T T i 1 T r
1
..i .......r ...... i . i , .... i i I I 1 l1 ^ i t l i i
i r 1 f— 1 I I 1
l i l i _ i .i i i. - * « i i —1— i I \
resonancia 3:1 entre los modos de flexión y de tensión C — iV, y por Wodtke
y col. que registraron el espectro BEE [52]. Desde el punto de vista teórico
W yatt y col. simularon este espectro [53] encontrando resultados en perfecto
acuerdo con las conclusiones experimentales.
El ion molecular . Carrington y Kennedy [54] midieron el espectro de
fotodisociación de esta especie registrando más de 27000 líneas en el rango
860-1100 cm "1, que corresponden a resonancias que decaen a través de la
barrera correspondiente a la rotación total de la molécula. El suavizamiento
de las 2 0 0 0 líneas más intensas de este espectro da cuatro bandas de ~ 4 cm " 1
de ancho separadas ~53 cm - 1 , que corresponden a una órbita periódica de
“herradura” en la que el protón pasa por el centro del enlace H —H cuando este
está en su máxima elongación y manteniendo la dirección del vector momento
angular total paralelo en todo momento a la velocidad de aquel, de forma que
se conserve la sim etría C 2 v Las cicatrices correspondientes a esta órbita en
algunas autofunciones del se muestran en la figura 7.6 [55].
Ozono. El espectro de fotoabsorción (D 1^ —> X 1 A±) del Os m uestra una
banda ancha intensa (banda de Hartley) que tiene superpuesta una serie de
oscilaciones llamativas y o tra banda más débil (banda de Huggins) a energías
363
Índice
Capítulo 7
364
Índice
Capítulo 7
365 Índice
Capítulo 7
experimental.
En la figura 7.9 (a) se muestran los resultados obtenidos mediante esta
técnica para la reacción / + H I donde se observan tres picos bastante marca
dos, superpuestos a un fondo sin estructura, que corresponden (de derecha a
izquierda) a la progresión: 0 f - 0 , l f - 0 , 2 ^—0 , en uno de los modos vibracionales
del complejo de transición [IHI]$. Este modo corresponde al movimiento
asimétrico de tensión en el que el átomo ligero, if , oscila entre los más pesa
dos y lentos, / . Debido a la gran diferencia de masas existente en este sistema
se puede hacer una separación adiabática (análoga a la de Born-Oppenheimer
para el # 2 "), y construir curvas de potencial efectivas para la dinámica del
átomo H en función de la distancia I — I. Las curvas adiabáticas de potencial
relevantes para el experimento anterior se presentan en la figura 7.9.
7 .3 F o r m u la c ió n D e p e n d i e n t e d e l T i e m p o d e la E s p e c t r o s c o p ia
366
Índice
Capítulo 7
E n e r g ía C i n é t i c a ( e V )
3.5 4 ,0 4 ,5
367
Índice
& mmmmm
Capítulo 7
f
roo roo
= / dt eiEt/ n{<f>i{t = 0)\<f>i(t)) = / d t é Ei!h C{t) (7.8)
J—oo J —OO
donde C(t) es la función de correlación del estado inicial. E sta formulación
dependiente del tiempo de la espectroscopia tiene numerosas ventajas ya que,
por ejemplo, permite utilizar diferentes operadores o promedios en la función
de correlación dependiendo del tipo, o de las condiciones, en las que se simule
/
el espectro.
Por otra parte, y en relación con los resultados de la sección anterior,
hay que indicar que la expresión (7.8) también permite establecer una relación
entre I ( E ) y los correspondientes cálculos de trayectorias clásicas. Esto,se hace
patente sin más que expresar la probabilidad de supervivencia, S(t) = |C (¿)|2,
en función del operador densidad:
= E H p(Q) K t) \n ) = T r p Wp ( t ) (7.9)
n
La construcción de un equivalente clásico para esta expresión es sencilla, ya
que basta con hacer las siguientes sustituciones:
(7.10)
368
Índice
Capítulo 7
369 Índice
Capítulo 7
7 .4 E je m p lo s
370
Índice
Capítulo 7
H = 9- - ^ — + f ^------1
— WI + P ¡ + V( R, 6) (7.11)
2l^Li-CN \ 2 Hl í - C n R 2 ¡ I c - N ? 2,)
371 Índice
Capítulo 7
donde (Rq, 9q) determ ina la posición inicial del mismo, y los parám etros c¿r
y olq se eligen (8.03 y 7.51 respectivamente) de forma que el paquete presente
mínima incertidumbre (A q • A P = Ti). La propagación del paquete puede
realizarse de forma muy sencilla en nuestro caso (en que todas las coordenadas
tienen una parte ligada) proyectando sobre los autoestados, |n), del sistema,
de m anera que:
372
Índice
Capítulo 7
373
Índice
Capítulo 7
(t) ¡¡O.; M (
' % <C)'
«
«4
M : ^ <•>
7**
11 ■-"¿í
H
J
i 1 / iy i
\ f
d
1 J L lI d Jijlllll
4000 6000 , 0000-, 7000 B000
E(cm )
374
Índice
Capítulo 7
La
ib uáa
0 199 4M m <0°
A g r a d e c i m ie n t o s
Este trabajo ha sido financiado por la DGES a través de los proyectos No. PB96-
76 y PB98-115.
375
Índice
Capítulo 7
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379
Índice
«Ciéncies experimentáis»
Núm. 2
QUÍMICA TEÓRICA
Y COMPUTACIONAL
Juan Andrés, Juan Beltrán
(Editores)
si
UNIVERSITAT
JAUME‘ I
CAPÍTULO 8
Espectroscopia II: Introducción al Cálculo
Teórico de Estados Excitados Electrónicos
mediante Métodos Multiconfiguracionales
Manuela Merchán
Departamento de Química Física
Universität de Valencia
Dr. Moliner 50, Burjassot, 46100 Valencia
8.1. Introducción
381
Índice
Capítulo 8
382
Índice
Capítulo 8
8.2. Cuestiones
383
Índice
Capítulo 8
8.3. Se suele decir que los orbitales virtuales canónicos obtenidos de un cálculo
RHF para un sistema molecular neutro son muy difusos: ¿por qué?
(Merchán, 1987).
8.4. Enumerar las clases dé conjuntos de bases monoelectrónicas y
multielectrónicas que se conozcan.
8.5. Recordar los fundamentos del formalismo de la segunda cuantización
(Szabo, 1982).
8 . 6 . ¿Qué es un operador de proyección? Ilustrar sus propiedades mediante
ejemplos.
8.7. Correlación electrónica: sentido físico y su (posible) definición matemática.
Particiones factibles de los efectos de la correlación electrónica. ¿Qué se
entiende por correlación izquierda-derecha? Y, ¿correlación de valencia?
8 .8 . Recordar brevemente los fundamentos del método variacional y de la teoría
de perturbaciones (Levine, 1977). ¿Qué entendemos por un cálculo SDCI?
Y, ¿MP2? Qué significado tienen los correspondientes acrónimos. (Como
ya se habrá observado, he seguido el criterio de mantener la estructura de
las siglas en inglés, tal y como se manejan en el trabajo diario, evitando así
posibles confusiones innecesarias.)
8.9. El reciente libro de texto de Veszprémi y Fehér titulado “Quantum
Chemistry: Fundamentáis to Applications”, dedica el capítulo 17 al estudio
de estados electrónicos excitados (Veszprémi, 1999). Comparando el
contenido de dicho capítulo con la introducción precedente, enumerar qué
métodos no he mencionado, describiendo brevemente sus características.
(8.5)
donde los índices corren ahora sobre los orbitales moleculares. En la expresión
(8.5) los elementos h.. incluyen la energía cinética de los electrones y los
384
Índice
Capítulo 8
Tj rtrn ¡ jT I rtrn
385
Índice
Capítulo 8
de las técnicas (Werner, 1987; Shepard, 1987;; Roos, 1987). Una excelente
introducción a las mismas se puede encontrar en el material de la escuela de
verano ESQC “European Summer School in Quantum Chemistry” (Roos, 1992,
1994).
Hemos supuesto hasta ahora quq la base N-electrónica está constituida por
determinantes de Slater. No obstante, tanto el Hamiltoniano como las rotaciones
orbitales se pueden expresar en términos de los operadores de excitación orbital
(8.1). Además, los operadores de excitación conmutan con los operadores de
espín (ver cuestión 8.14). Por tanto, es posible trabajar enteramente en una base
N-electrónica formada por funciones de estado configuracionales adaptadas de
espín, “configuration state functions” (CSFs). Hay muchas formas de obtener
funciones propias de los operadores de espín a partir de determinantes de Slater.
Entre ellos destaca el “graphical unitary group approach ” (GUGA). De hecho
los operadores de excitación cumplen las mismas relaciones de conmutación que
los generadores del grupo unitario de dimensión n, y por eso a menudo se les
denomina generadores. Trabajar en base de CSFs lleva a expansiones CI más
cortas, aunque en base de determinantes de Slater los algoritmos CI son más
eficientes (ver por ejemplo Olsen, 1990). La conveniencia del tipo de base N-
electrónica (CSFs o determinates de Slater) en los algoritmos MCSCF y CI ha
sido objeto de grandes debates en el pasado. Hoy en día, se ha llegado a un cierto
consenso con gran lógica, cual es hacer uso práctico de las ventajas de ambos
tipos de base. Así, por ejemplo, los algoritmos implementados de hecho en el
programa MOLCAS realizan la parte CI en base de determinantes y las
rotaciones orbitales en base de CSFs, asegurando de esta forma que la función
N-electrónica sea función propia de espín. Para ello, es necesario disponer de una
forma eficiente y sencilla de realizar el cambio de base CSFs ^determ inantes de
Slater (Grabenstetter, 1976).
386
Índice
Capítulo 8
Con objeto de obtener varios estados de una simetría dada se suele realizar
cálculos CASSCF promediados, donde se define un funcional de energía que es
un promedio de varios estados (1=1, M)
Epromcdiü= ( 8 .8 )
donde co, son los factores de peso relativo para cada estado. El resultado de un
cálculo CASSCF promediado es un conjunto único de orbitales promedio y un
número de funciones de onda CI igual al número de raíces usadas en el cálculo
promedio. Este tipo de cálculo permite soslayar en ocasiones el problema de
“root flipping”, intercambio o salto de raíces. Para cada simetría espacial y de
espín de interés, el cálculo de estados excitados se suele realizar mediante el
proceso CASSCF promediado. Sobre el papel también es factible realizar un
cálculo CASSCF de un raíz alta I > 1, optimizando sólo ese estado. No obstante, la
experiencia muestra que en la mayoría de los casos, en la práctica, tan sólo se
puede lograr para 1=2 , la segunda raíz de una simetría dada.
387
Índice
Capítulo 8
8.4. Cuestiones
a,o'
8.12. Comprobar que la expresión de la energía (8.7) para el caso de una
función compuesta de un solo determinante capa cerrada da el conocido
valor en primera cuantización:
E = 2 ^ ( a | h | a) + X{2(aa | bb) - (ab | ba)}.
a ab
8.13. Sea S = |y)(x|-|x)(y|. Calcular Sf. ¿Qué tipo de matriz es S? ¿Qué tipo de
matriz es exp(S)?
8.14. Expresar los operadores de espín Sz y S2 en términos de los operadores de
creación y aniquilación. Mostrar entonces que los operadores E..
conmutan con los operadores de espín.
8.15. Para el’estado fundamental de un sistema con un número par de electrones,
los orbitales naturales homólogos a los orbitales virtuales canónicos que se
obtienen de un cálculo CASSCF de valencia son comparativamente más
compactos (menos difusos). Racionalizar este hecho mediante una
respuesta razonada.
388
Índice
Capítulo 8
(8.14)
por lo que, tenemos:
(8.15)
(8.16)
La corrección de primer orden a la función de onda viene dada por
'P(1) = R(0) (E0 ) - H ,) |vI'(o)) (8.17)
donde R(0) es la resolvente reducida:
R (0) = ( i - 1v p O ))(^ (o ) | j ( h » _ . (8.18)
389
Índice
Capítulo 8
390
Índice
Capítulo 8
<8-23>
Los elementos diagonales de (8.23) corresponden a diferencias de energías. Si p
representa un orbital inactivo entonces fpp es la diferencia de energía entre el
sistema, representado por |o), y su ion positivo. En el caso de que p se refiera a
un orbital secundario, fpp es la diferencia de energía entre el ion negativo y el
sistema neutro. Para orbitales parcialmente ocupados en |o) fpp corresponde a la
interpolación entre los dos extremos anteriores. La evaluación de (8.23) conduce
a la siguiente expresión para los elementos matriciales fpq:
fm = h P« + J D kl [ ( ^ I pq) _ ^ ( k p I lq ) l ’ ( 8 '2 4 )
Un operador del tipo de Fock generalizado, FT, se puede escribir como suma de
la parte diagonal, FD, y de la parte no diagonal, FN:
FT = FD+FN, (8.25)
donde
FD= J epÉpp ( £p = fpp) (8-26)
y
Fn = + fj;Éti] + ^ [ f X , + f,IÉJ + J [ f ' É a¡ + f 'É J (8.27)
siendo fpq=S pqep para índices que se refieran al mismo subespacio orbital
(inactivo, activo, secundario). Los índices i, t, a, y p corren sobre los orbitales
inactivos, activos, secundarios y sobre el espacio orbital completo,
respectivamente.
391
Índice
Capítulo 8
m ^ ^
392
Índice
Capítulo 8
393
Índice
Capítulo 8
8.6. Cuestiones
394
Índice
Capítulo 8
(8.42)
(8.43)
(8.44)
(8.46)
donde co es el peso de la función de referencia CASSCF en el cálculo CASPT2
desplazado. Así, la'energía de segundo orden corregida, E(¿}, es igual a la energía
estándar CASPT2, E(2), hasta primer orden en e :
E(2) ~ É (2) - £ f 4 - l | = E<¿> ' (8.47)
Veo /
Solamente en el caso de que la condición (k.t - E (0)) » e no se cumpla, es decir,
cuando aparecen estados intrusos en el espacio de interacción de primer orden, la
energía E(¿} diferirá de E(2). Es altamente recomendable verificar la tendencia
correcta de E(¿} en un rango amplio de valores de e . Normalmente, el análisis de
los resultados para e = 0.0, 0.1, 0.2, 0.3, 0.4 a.u. es suficiente para comprobar la
adecuada dependencia de los resultados LS-CASPT2 respecto a los valores de e .
Si solo se hace un cálculo con un valor de e dado se corre un alto riesgo, pues
accidentalmente podrían aparecer singularidades, precisamente para ese valor de
e , y el resultado LS-CASPT2 no sería fiable. Con el calibrado sugerido, variando
el valor de e, se podrá evitar fácilmente dicho riesgo. También es de señalar que
la técnica del “level-shift” imaginario (Forsberg, 1997) ofrece la completa
desaparición de las mencionadas singularidades accidentales.
395 Índice
Capítulo 8
La energía E(¿} se obtiene como EfJ - É(2). Como se observa de la ec. (8.47), E(¿}
solamente depende (hasta primer orden) del valor de co.
8 .8 . El método MS-CASPT2
Índice
Capítulo 8
Finalmente queda:
= (% | H | ^ ) - 6 , E¡ + ±(e.. + t f ) + i ( E ‘°> + E<°>)S¡j. (8.56)
La ecuación secular correspondiente resulta
(H - E S) C = 0, (8.57)
que mediante una transformación de ortogonalización simétrica toma la forma
(Hx - E1)C1 = 0 (8.58)
siendo C 1 =S1/2C y H1 = S"1/2HS"1/2. En la base ortogonal (simbolizada por ± ) los
elementos del Hamiltoniano truncado a segundo orden son:
Hj = 8 ¡j E, + ~ ( e¡j + ej¡). (8.59)
397
Índice
Capítulo 8
hV = £ .------——- (8.62)
1 (n - 6 )
donde es la energía de ionización hacia la cual la serie converge, R representa
la constante de Rydberg, n es un número entero (correspondiente al número
cuántico principal en el hidrógeno) y se relaciona con el número cuántico
principal del orbital Rydberg implicado en la transición, y 8 es el llamado
defecto cuántico, que nos muestra la desviación del comportamiento puramente
hidrogenoide (5 = 0 para el átomo de hidrógeno). Los estados Rydberg de
moléculas se nombran dando el número cuántico n seguido del símbolo (s, p, d
...) correspondiente al número cuántico acimutal del estado atómico al que se
parece. Así, se puede hablar de estados Rydberg 3s, 3d, 4p, etc. El defecto
cuántico 5 toma valores típicos dependiendo del caso: 0.6-0.8 para ns, 0.95-1.1
para np, y -0.05-0.15 para estados Rydberg nd. Las fuerzas de oscilador de las
transiciones a estados Rydberg son generalmente de un orden de magnitud
menor respecto de las transiciones intensas a estados excitados de valencia. Los
estados Rydberg son por ello más difíciles de detectar en el espectro de
absorción. No obstante, se pueden observar mediante espectroscopia de
ionización multifotónica, dado que las transiciones a estados Rydberg son
entonces bastante intensas (ver por ejemplo Merchán, 1996a). El carácter
intrínseco de los estados Rydberg los hace susceptibles de ser afectados por
perturbaciones externas; por ejemplo, se observa un ensanchamiento de las
bandas por efecto de las colisiones al aumentar la temperatura, no se detectan en
fases condensadas, etc.
398
Índice
Capítulo 8
momento cartesiano (<x2>; <y2>; <z2>) nos permite determinar de forma sencilla
la naturaleza del estado excitado; resultados cercanos a los correspondientes al
estado fundamental indican la naturaleza de valencia del estado excitado y nos
identifica el tipo concreto de extensión espacial de los estados Rydberg. En
ciertos casos se calculan estados con mezcla valencia-Rydberg. El determinar si
son estados reales de tipo intermedio valencia-Rydberg o bien dicha mezcla se
debe a un artefacto del cálculo truncado a un cierto nivel de teoría, no es obvio y
depende del caso. En este sentido, los resultados obtenidos con el método MS-
CASPT2 suelen ser esclarecedores.
399
Índice
Capítulo 8
Desde el punto de vista del tipo de configuraciones por las que queda descrito
mayoritariamente un estado excitado, en relación al estado fundamental, se
pueden denominar uniexcitados, biexcitados, etc. Los estados Rydberg quedan
generalmente bien descritos por una sola configuración uniexcitada (son
monoconfiguracionales). Los estados multiconfiguracionales singlete con una
gran contribución de biexcitaciones son del tipo covalente. Los estados
zwitteriónicos singlete están descritos por una o varias configuraciones
uniexcitadas y se caracterizan por la importante contribución de la correlación
dinámica en el cómputo de la energía de excitación; es decir, a nivel CASSCF las
energías de excitación suelen quedar muy altas y pueden bajar en más de 2 eV a
nivel CASPT2. Los estados zwitteriónicos son los “difíciles” de tratar para
cualquier tipo de metodología ab initio. Con objeto de obtener resultados
precisos se requiere el tratamiento de la correlación diferencial a gran escala. Por
otro lado, la falta de flexibilidad intrínseca de ciertas metodologías previene (e
incluso ignora) el tratamiento de los estados biexcitados. Es de destacar que para
el método CASSCF/CASPT2 todos ellos se tratan con la misma flexibilidad y
resultan igualmente “difíciles” (o “fáciles”) de calcular, rindiendo energías de
excitación verticales con una precisión media a nivel CASPT2 de ±0.2 eV,
cuando es posible la comparación con hallazgos experimentales apropiados. No
obstante, la mezcla valencia-Rydberg que ocurre en ciertas simetrías,
dependiendo del sistema molecular, hace que en esos casos los resultados no
hayan sido tan precisos llegando a desviaciones de ±0.3-0.4 eV al mismo nivel de
cálculo. Parece ser que dichas situaciones se podrán resolver en el futuro de
forma mucho más favorable, utilizando el método MS-CASPT2 recientemente
desarrollado; los resultados obtenidos hasta la fecha a dicho nivel de cálculo son
realmente prometedores, si bien la extensión de la mezcla valencia-Rydberg
depende de la base monoelectrónica y de la geometría.
Las bases de orbitales atómicos naturales ANO ( “atomic natural orbital”) están
expresamente ideadas para tratar efectos de correlación (Almlóf, 1987). Son
bases con contracción general. Están constituidas por orbitales atómicos naturales
generados a partir de cálculos atómicos correlacionados. En concreto, las bases
ANO incluidas en el programa MOLCAS se han construido promediando los
orbitales de distintos estados atómicos con objeto de asegurar su posterior
flexibilidad a distintas situaciones moleculares (Widmark, 1990, 1991; Pou-
Amérigo, 1995b; Pierloot, 1995). El número de primitivas de los denominados
ANO-L consta de (14s9p4d3f) para los átomos Li-Ne y (8s4p3d) para el átomo
de hidrógeno. La contracción a emplear deberá mostrar cierto balance entre
calidad y eficacia de cálculo. Se debe utilizar un conjunto contraído de al menos
X[3s2pld]/H[2s] (X=Li-Ne) con objeto de obtener resultados representativos.
Generalmente, en estudios espectroscópicos de sistemas orgánicos de tamaño
medio hemos utilizado la contracción C[4s3pld]/H[2slp] obteniendo resultados
cuantitativos (ver por ejemplo Merchán, 1999a y referencias allí citadas).
Similares comentarios son válidos para las bases ANO-S, que constan de un
número ligeramente inferior, por lo que son indicadas para el estudio de sistemas
moleculares con un mayor número de átomos (ver por ejemplo, Serrano-Andrés,
1998; Rubio, 1999).
400
Índice
Capítulo 8
401
Índice
Capítulo 8
Especial precaución hay que tener al comparar los resultados teóricos con las
estructuras determinadas por difracción de rayos X en fase sólida, pues dicha
técnica tienden a infravalorar los enlaces múltiples. Sistemas donde se ha dado
esta circunstancia son octatetraeno (Serrano-Andrés, 1993b) y estilbeno (Molina,
1997, 1999).
402
Índice
Capítulo 8
403
Índice
Capítulo 8
Como regla general podemos decir que el espacio deberá contener aquellos
orbitales cuyos números de ocupación varíen significativamente de dos y cero
durante el proceso considerado. Orbitales con números de ocupación cercanos a
dos deben trasladarse al conjunto de inactivos y los que tengan dichos valores
404
Índice
Capítulo 8
casi cero deben tratarse como virtuales. El análisis de los números de ocupación
de los orbitales naturales a nivel MP2, SDCI, o los obtenidos a partir de funciones
“restricted active space SC F ” RASSCF (extensión de la función CASSCF, ver
Olsen, 1988), puede ayudar a plantear el espacio activo para construir una
función de onda CASSCF (ver ilustración en González-Luque, 1993). Se podría
pensar que el espacio activo de valencia brinda la flexibilidad para moverse a
través de gran parte de la hipersuperficie de un sistema molecular dado, lo cual
sería especialmente valorado en estudios de reactividad química. Si bien lo dicho
es cierto en muchas ocasiones, no es en absoluto general. Baste pensar en la
molécula de agua, para la que tenemos ocho electrones de valencia y solamente
dos orbitales de correlación disponibles (4a! y 2b2) (Roos, 1992: pag. 193). Con
solamente los dos orbitales virtuales de valencia, la correlación se introduce
preferentemente en el par solitario correspondiente (3a^ y el orbital enlazante
OH ( lb 2). Los orbitales 2&x y Ib! se han dejado sin correlacionar, por lo que el
tratamiento a nivel CASSCF de valencia no queda balanceado; de hecho, a este
nivel, la molécula resulta asimétrica (con enlaces OH diferentes). Este problema
se resuelve ampliando el espacio activo de valencia con dos orbitales: 5aj y 2 b!.
La ocupación de estos orbitales resulta que no es inferior a la de los orbitales de
correlación de valencia. Es por ello, que en este contexto se considera como
espacio activo ideal el que incluye un orbital de correlación por cada orbital
ocupado, e incluso el doblamiento de los últimos (dos orbitales de correlación
por cada orbital fuertemente ocupado) con objeto de evitar problemas de ruptura
de simetría (McLean, 1985). No obstante, en la mayoría de las ocasiones, los
espacios activos resultantes se hacen difíciles de manejar por imposibilidad
técnica y dicho criterio dista de ser una solución general.
Descendamos ahora al caso concreto de la selección del espacio activo del eteno,
como representante de las situaciones que se encuentran en los estudios teóricos
de espectros de sistemas orgánicos. En base a argumentos cualitativos y en vista
de lo adecuado de la aproximación g-jt para sistemas orgánicos planos, el
espacio activo debería incluir los orbitales xc de valencia junto a los nueve
orbitales Rydberg. En el caso de las transiciones verticales del eteno equivale a
realizar un CASSCF(11 MOs/2 elec.), es decir, once orbitales activos con dos
electrones activos, el cual nos brinda la flexibilidad para tratar los siguientes
estados: estado fundamental, ^„(jnt*) (estado de valencia V), y los nueve estados
Rydberg jt->3s, 3px, 3py, 3pz, 3dx2_y2, 3dz2, 3dxz, 3dyz, 3dxy? donde el orbital n es
el HOMO. No obstante, la inclusión simultánea de todos los orbitales te de
valencia y los nueve orbitales Rydberg no se puede realizar en sistemas jt-
electrónicos de mayor tamaño. Es esos casos es posible usar un conjunto
diferente de orbitales activos para estados de distinta simetría. Como energía de
referencia para el cálculo de la energía de excitación tomaremos la del estado
fundamental obtenida con el mismo espacio activo. Concretamente, para el
cálculo de los estados !Blu del eteno, el espacio activo jt de valencia junto con el
orbital Rydberg 3dxz, CASSCF(3 MOs/2 elec.) sería suficiente para describir el
estado excitado de valencia nn y el estado Rydberg Jt-^3dxz. Con elecciones
apropiadas: orbitales tí de valencia + orbitales Rydberg de una simetría dada, se
pueden describir el resto de los estados Rydberg. Supongamos que nuestro
interés se centra ahora en la construcción de las curvas de energía potencial de
405
Índice
Capítulo 8
8.14. Cuestiones
Una vez analizados los datos de entrada y la salida con ellos producida por el
programa MOLCAS, procedamos a inspeccionar los resultados, los cuales se
compilan en la Tabla VIII. 1.
Comparando los valores del segundo momento de los estados excitados con los
obtenidos para el estado fundamental, l'Ag, con el mismo espacio activo (11.8;
9.2, 9.2 a.u.), el estado 2'B lu se puede clasificar claramente como Rydberg 3dxz.
Hay cierta mezcla valencia-Rydberg, mayor en la función de onda CASSCF que
en la PMCAS- CI, la cual se refleja tanto en los valores de la fuerza de oscilador,
como en los valores del segundo momento, y en las energías de excitación.
406
Índice
Capítulo 8
Tabla VIII. 1. Energía de excitación vertical y otras propiedades para los estados
11B 1|1 y 2'B ludel eteno obtenidas a diferentes niveles de cálculo.
CASPT2
AE (eV) 8.36 9.28
f 0.1700 0.0818
0) 0.9128 0.9169
PMCAS-CI
AE (eV) 8.26 8.87
f 0.2215 0.0206
(<x 2>;<y2>;<z2>) (a.u.) 36.6; 16.0; 34.9 178.6; 63.2; 175.2
MS-CASPT2
AE (eV) 8.26 9.37
f 0.2217 0.0218
407
Índice
Capítulo 8
408
Índice
Capítulo 8
8.17. Agradecimientos
Este trabajo ha sido financiado por la DGES a través del proyecto PB97-1377.
Deseo expresar mi más profundo agradecimiento a las personas con las que he
tenido el placer y el honor de colaborar. Mucho del material que se recopila en
este manuscrito constituye el bagaje cultural del grupo de trabajo, adquirido en el
transcurso de un buen número de difíciles e interesantes aplicaciones.
8.18. Bibliografía
Andersson, K.; Malmqvist, P.-Á.; Roos, B.O.; Sadlej, A.J.; Wolinski, K. (1990):
“Second-order perturbation theory with a CASSCF reference function ”,
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Andersson, K.^ Blomberg, M.R.A.; Fülscher, M.P.; Karlström, G.; Lindh, R.;
Malmqvist, P.-A.; Neogrády, P.; Olsen, J.; Roos, B.O.; Sadlej, A.J.; Schütz, M.;
Seijo, L.; Serrano-Andrés, L.; Siegbahn, P.E.M.; Widmark, P.-O. (1997):
MOLCAS, version 4.0\ Department of Theoretical Chemistry, Chemical Centre,
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409
Índice
Capítulo 8
Herzberg, G. (1966):
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electronic structure o f polyatomic molecules ”,
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Índice
Capítulo 8
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monodeterminantal a la función de onda”, Valencia, Universität de Valéncia.
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Índice
Capítulo 8
Pou-Amérigo, R.; Merchán, M.; Nebot-Gil, I.; Malmqvist, P.-Ä.; Roos, B.O.
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Índice
Capítulo 8
Pou-Amerigo, R.; Merchän, M.; Nebot-Gil, I.; Widmark, P.-O.; Roos, B.O.
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Índice
Capítulo 8
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Índice
Capítulo 8
Serrano-Andrés, L. (1994b):
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Shepard, R. (1987):
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Ltd., Advances in Chemical Physics 69, 63-200.
415
Índice
Capítulo 8
416
Índice
Capítulo 9. Modelización Molecular
J. Frau*, E, Sánchez M arcosb y J. Andrésc5
a Universität liles Balears, Departament de Química, Crta. Valldemossa, km
7.5 Palma de Mallorca 07071
b Departamento de Química Física. Universidad de Sevilla. 41012-Sevilla
c Departament de Ciencies Experimentáis, Universität Jaume I, D.P. 224,
12080 Castellón.
417
Índice
Capítulo 9
9.1.2.1Energía Electrostática
Esta interacción se da entre especies cargadas y también entre especies sin
carga neta, pero que presentan un momento dipolar permanente. Se trata de
418
Índice
Capítulo 9
419
Índice
Capítulo 9
<U>,,0 = • (9.3)
kT(4jie0) r
TT _ 140^0g
<U> 00 - - (9.4)
5kT(4K80) r
M-ind = a E (9.5)
420
Índice
Capítulo 9
(9.8)
Índice
Capítulo 9
423
Índice
Capítulo 9
U(r) = 00 r<o
U(r) = 0 r>a (9.12)
U(r) = £ [ — W ] (9.14)
n -m \ r j n - m ^ r
U(r) = [A exp (-Br) - C/r6] - ----- —---- [ — exp a [1 - r/rm)]- (r / rm)‘6] (9.15)
(1-6/a) a
Investigaciones recientes apuntan a potenciales con un mayor número de
parámetros, los cuales permiten obtener descripciones más adecuadas y flexibles. Así
424
Índice
Capítulo 9
por ejemplo, la función de Barker y Pompe contiene hasta nueve términos, además
de e y rm:
425
Índice
Capítulo 9
pares a-a y b-b, es a menudo muy útil tener una expresión aproximada para las
interacciones a-b basada en las interacciones a-a y b-b.
Así las expresiones para o ab y eab en función de los valores para los
sustancias puras se obtienen a partir de reglas de combinación. Las más utilizadas
son las reglas de Lorentz-Berthelot, en las cuales el diámetro de colisión se calcula a
partir de la media aritmética y la profundidad del pozo a partir de la media
geométrica de los valores para las especies puras. En aquellos casos en que las
interacciones entre moléculas diferentes pueden determinarse experimentalmente, la
media geométrica a menudo sobrestima £ab, especialmente cuando los pozos de
potencial de las sustancias puras son muy diferentes. Por este motivo se han sugerido
otras combinaciones, como por ejemplo la media armónica para sab:
J. 1 1
(9.19)
'ab 2 £ aa £ bb
C6 C6 C6 (3 c o s 0 a c o s 0 h c o s 0 c + 1)
u,K= - f * 4 - * ~ f + v .t* -------- 7------- — - (9.20)
*ab **bc *ac v a b * b c * a c /
426
Índice
Capítulo 9
427
Índice
Capítulo 9
428
Índice
Capítulo 9
campos de fuerza:
■ Clase I. Se caracterizan por no contener términos cruzados y además porque los
términos de flexión y tensión vienen descritos mediante funciones armónicas (p.
e.: AMBER, CHARMM, MM2 y CVFF, aunque estos dos últimos poseen
algunos términos cruzados pero son en esencia clase I).
■ Clase II. Estos campos de fuerza ya consideran términos cúbicos y superiores
para describir las energías de tensión y flexión, así como términos cruzados. Un
campo de fuerza del tipo II debe reproducir adecuadamente las propiedades de
moléculas aisladas pequeñas (propiedades estructurales, termodinámicas, datos
espectroscópicos y momentos dipolares), de fases condensadas (energías de
sublimación, calores de vaporización de líquidos) y de sistemas
macromoleculares. Como ejemplos más significativos podemos indicar los
campos de fuerza MM3 y CFF93.
■ Clase III. Consideran no sólo los términos mecánicos señalados en el campo de
fuerza de clase II, sino también incluyen efectos químicos como la
electronegatividad y la hiperconjugación (p. e., MM4).
429
Índice
Capítulo 9
^total = 2 ^ + 2 + 2 + 2 + 2 ^ vdw +
enlaces ángulos diedros ángulos fuera del plano
a) Tensión
Este término describe el cambio energético asociado al alargamiento o
acortamiento de un enlace en una molécula. Dicha variación puede describirse
adecuadamente mediante el potencial de Morse (ver figura 9.3):
430
Índice
Capítulo 9
Con el objeto de mejorar esta deficiencia, el campo de fuerza MM3 emplea una
función de cuarto orden que además representa más adecuadamente el potencial de
Morse (ver figura 9.3)
b) Flexión
Para describir la energía asociada al aumento o disminución del ángulo de
enlace era corriente el empleo de funciones de potencial armónicas. En la mayoría de
431
Índice
Capítulo 9
c) Torsión
El término de energía de torsión está representado por una expansión de
Fourier en serie de cosenos:
N
432
Índice
Capítulo 9
a) Diedro de Wilson, Decius y Cross, se define como el ángulo (x) entre cualquier
enlace que se extiende desde el átomo central y el plano definido por los otros dos
enlaces. Esta definición es la que se emplea en el MM3 y utiliza una función
armónica para describir las interacciones:
E5c= V 2k x X 2 . (9.28)
b) La piramídalidad del átomo central se define como la distancia desde ese átomo al
plano formado por los otros tres átomos unidos al central (x1). La energía de este
movimiento normalmente se representa con la expresión:
Ex = l t l \ t 2 (9-29)
c) El diedro impropio se define como el ángulo formado por dos planos que
contienen al átomo central y a otros dos átomos. La denominación de impropio es
debido a que considera cuatro átomos como si estuvieran enlazados de la misma
forma que un verdadero ángulo de torsión. Esta es la mejor definición para la
433
Índice
Capítulo 9
434
Índice
Capítulo 9
f) Energía electrostática
Históricamente ha sido descrita mediante la aproximación dipolar o bien
mediante la aproximación monopolar.
La aproximación dipolar es la más antigua y consiste en asignar dipolos
puntuales a enlaces entre diferentes tipos de átomos y calcular la energía
electrostática a partir de las interacciones dipolo-dipolo, de acuerdo con la expresión
de Jeans:
VMM3dipolo = ¡iABMcd (eos X -3 eos otABcosoccd)/ Dr,/ (9.34)
donde, |iAB y |¿CD son los momentos dipolares de los dos enlaces, % es el ángulo
diedro entre ellos, r es la distancia entre sus puntos medios y ocAB y a CD son los
ángulos entre los enlaces y la línea que une sus puntos medios, siendo D la constante
dieléctrica efectiva (figura 9.7),
Sin embargo esta aproximación puede que no simule adecuadamente
sistemas muy polares o cargados y además ralentiza los cálculos en sistemas con una
elevada cantidad de átomos. Por tanto se optó por utilizar cargas atómicas parciales
localizadas sobre cada átomo, de manera que permitieran determinar adecuadamente
los momentos dipolares experimentales. De esta forma, la energía electrostática se
calcula a partir de la expresión de Coulomb.
435
Índice
Capítulo 9
UiUj
D rij (9-35)
g) Términos Cruzados
La influencia de los átomos y grupos químicos vecinos sobre las distancias
de enlace, ángulos de enlace y ángulos diedro conduce a la introducción de los
términos cruzados. Así, por ejemplo, cuando un ángulo de enlace se hace más
pequeño, las distancias de enlace tienden a aumentar para que los átomos no se
aproximen tanto. Evidentemente, la dependencia es pequeña pero debe ser
considerada en la descripción del campo de fuerza si se pretende reproducir
correctamente las frecuencias vibracionales. En principio, cada movimiento en la
molécula está asociado a los restantes movimientos con un término cruzado. Sin
embargo, si dos movimientos están muy alejados entre sí en la molécula, el término
cruzado será prácticamente despreciable. La mayoría de los campos de fuerza para
sistemas biológicos omiten estos términos.
La importancia de estos términos radica en que incrementan la precisión del
campo de fuerza, debido a que su inclusión permite que las constantes de tensión,
flexión ..., no presenten contribuciones de enlaces vecinos, yaque estas interacciones
son consideradas en el término cruzado correspondiente.
El método MM3 considera términos cruzados del tipo (figura 9.8):
Interacción tensión-flexión.
436
Índice
Capítulo 9
Parametrización
El punto más delicado en el proceso de desarrollo de un campo de fuerza es
la parametrización. Una vez que tenemos las funciones analíticas que determinan las
diferentes contribuciones a la energía total, deben calcularse las constantes de estas
ecuaciones de manera que los resultados obtenidos reproduzcan lo mejor posible la
geometría, la energía y otras propiedades moleculares.
Si analizamos el proceso de parametrización en un campo de fuerza
experimental como el MM3, podemos apreciar la existencia de algunos problemas
considerables. Uno de ellos es la elección de los datos experimentales, así por
ejemplo, la distancia de enlace (AH) calculada para una misma molécula mediante
técnicas de difracción (difracción de electrones o rayos X) es distinta de la obtenida
437
Índice
Capítulo 9
438
Índice
Capítulo 9
que de esta forma se obtendrán unos parámetros muy ajustados para las estructuras
originales, pero no tanto para la descripción de otras estructuras.
439
Índice
Capítulo 9
(9.40)
Las características más importantes de esta ecuación de la energía, radican en
que los términos de tensión y flexión utilizan funciones de segundo grado y además
no se incluyen términos cruzados. Se trata por tanto de un campo de fuerza de la
clase I.
El término torsional incluye parámetros generales, específicos e impropios.
Otra diferencia importante con respecto al MM3 es que los parámetros torsionales
dependen únicamente de los átomos centrales.
El término de van der Waals se describe mediante una función del tipo 12-6,
mientras que las cargas atómicas del término electrostático se derivan a partir de
cálculos mecano-cuánticos, utilizando bases del tipo STO-3G. Este método permite
el uso de una constante dieléctrica que depende de la distancia cuyo objetivo es el de
mimetizar el efecto de polarización en las interacciones atractivas dando un mayor
peso a las interacciones más próximas y también el de ayudar a compensar la falta de
solvatación explícita. Sin embargo, en sistemas en fase gas y para sistemas
moleculares con moléculas explícitas de disolvente sería más apropiado utilizar un
dieléctrico constante (ver apartado 9.7). Tanto las interacciones de van der Waals
como las interacciones electrostáticas se calculan entre átomos separados por al
menos tres enlaces.
Como se ha comentado anteriormente, se incluye un término explícito para
representar el enlace por puente de hidrógeno que permite una mejor descripción
tanto energética como estructural de este tipo de interacción tan importante en los
sistemas biológicos. Este término reemplaza al de van der Waals al analizar las
440
Índice
Capítulo 9
441
Índice
Capítulo 9
los parámetros de van der Waals han sido mejorados y las cargas han sido obtenidas
empíricamente a partir, principalmente, de las propiedades de los líquidos
442
Índice
Capítulo 9
La expresión de la energía total del campó de fuerza MM4 viene dada como
un sumatorio de quince términos energéticos, algunos de los cuales son nuevos, otros
han sufrido algunas modificaciones con respecto al MM3 y finalmente otros
coinciden con los del campo de fuerza MM3. Los términos idénticos a los del MM3
engloban los de tensión, flexión, torsión, van der Waals, electrostático (utiliza
interacciones dipolo-dipolo por defecto y permite interacciones carga-carga e
interacciones carga-dipolo), flexión-flexión y tensión-flexión. Por otra parte, el
término de torsiones impropias reemplaza al término de flexiones fuera del plano
utilizado en MM3, debido a una simplicidad de cálculo. El otro tipo de interacción
que sufre una modificación es la tensión-torsión. En el campo de fuerza MM4
existen dos casos en los cuales se tiene en cuenta este término. El primero hace
referencia a la variación de la longitud del enlace central de un ángulo diedro, y el
segundo caso se refiere a la variación de la longitud de un enlace terminal en un
ángulo diedro. Este término es importante en compuestos con pares de electrones
solitarios (efecto Bohlmann) y en compuestos con dobles enlaces conjugados
(hiperconjugación). Finalmente, este campo de fuerza introduce seis términos
cruzados que no habían sido considerados anteriormente: flexión-torsión-flexión,
torsión impropia-torsión-torsión impropia, tensión-tensión, flexión-torsión, torsión-
torsión impropia y finalmente, torsión-torsión.
La inclusión de estos términos cruzados constituye una mejora fundamental
con respecto al MM3 en el estudio estructural de moléculas que presentan mucha
tensión y en la reproducción de frecuencias vibracionales.
443
Índice
Capítulo 9
inorgánicos. Uno de los ejemplos más utilizados dentro de estos modelos es el campo
de fuerza YETI (Vedani, 1988; Vedani and Huhta, 1990).
Sin embargo, ya que los campos de fuerza no enlazantes requieren un
especial tratamiento de las fuerzas electrostáticas y de van der Waals, que a la postre
limita la transferibilidad de los parámetros, muchos autores han optado por
desarrollar modelos enlazantes. En estos modelos, se debe establecer explícitamente
un enlace entre el metal y los ligandos. Evidentemente esta situación plantea una
problemática importante. Estos campos de fuerza deben ser capaces de tratar con
diferentes números de coordinación, además deben tener en cuenta la rotación sobre
los enlaces metal-ligando al parametrizar el término torsional, también tienen que
considerar el tratar con múltiples ángulos ligando-metal-ligando y finalmente donde
colocar el enlace. Dentro de este nuevo modelo destacan los campos de fuerza
DREIDING (Mayo et al., 1990), UFF (Rappé et al., 1992) y los campos de fuerza
SHAPES y VALBOND desarrollados por el grupo de Landis (Allured et al., 1991;
Root et al., 1993).
Estos campos de fuerza también son conocidos con el nombre de universales
ya que son válidos tanto para el estudio de compuestos orgánicos como de
compuestos inorgánicos y estructuras formadas con complejos de metales de
transición.
Estos nuevos métodos universales utilizan constantes de fuerza generales y
parámetros geométricos basados en consideraciones simples como la hibridación, de
forma que la cantidad de tipos de átomos disminuye considerablemente. Obviamente
se pierde precisión, pero la parametrización es más sencilla y el campo puede
utilizarse para hacer predicciones sobre combinaciones infrecuentes de elementos. En
contrapartida, debido a la simplicidad del campo de fuerza, estos no constituyen un
método válido para la determinación de las frecuencias vibracionales.
Para aquel lector que desee profundizar más en esta nueva área en expansión
de los campos de fuerza, le remitimos a dos extensos reviews sobre los campos de
fuerza para la modelización de compuestos inorgánicos y órganometálicos que han
sido publicados recientemente por Zimmer (1995) y Landis (Landis et al., 1995).
9.2.4.1 DREIDING
Apoyándose en la filosofía indicada anteriormente, todas las distancias de
enlace se derivan de radios atómicos, existe únicamente una constante de fuerza para
los términos de tensión, flexión, e inversiones y sólo seis valores diferentes para las
444
Índice
Capítulo 9
X Eeleot + X EpteH ( 9 .4 1 )
elect puentes de hidrógeno
445
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Capítulo 9
(9.44)
447
Índice
Capítulo 9
+flexión fuera
£ delExplano +enlaceX/ ángulo
Eee (9'45)
Los términos de tensión y flexión utilizan una función de cuarto orden y una
expansión cúbica respectivamente. El término de torsión está descrito con las mismas
expresiones utilizadas en el campo de fuerza MM3 y de igual forma los parámetros
torsionales dependen de los cuatro átomos que forman el diedro.
Para describir la flexión fuera del plano en centros tricoordinados, MMFF94
utiliza una expresión armónica análoga a la ecuación 9.28.
Las interacciones tensión-flexión se describen mediante una expresión
similar a la del campo de fuerza MM3. La diferencia estriba en que el campo de
fuerza MM3 utiliza la misma constante de fuerza al considerar la influencia de
flexión sobre los dos enlaces (ec. 9.36) mientras que en el MMFF94 las dos
constantes pueden ser diferentes.
Las interacciones de van der Waals son descritas a partir de la forma "14-7-
amortiguada". Esta terminología deriva de la dependencia en las potencias 14 y 7
utilizadas para el término repulsivo y atractivo que se obtendría si las constantes de
amortiguación (r¡j*) fuesen eliminadas del denominador. La forma del potencial se
muestra en la siguiente expresión:
7
ü
J-'vdW
M MFF94 _
—
c
b ij
1.07 r j \ (
1.12r;a*7_ _ 2\ (9.46)
r8 + 0.07^ ;
r-y + 0 . 1 2 r-ij
448
Índice
Capítulo 9
449
Índice
Capítulo 9
450
Índice
Capítulo 9
451
Índice
Capítulo 9
de los sustituyentes del sistema aromático (se trata de una medida concisa de las
propiedades electrónicas de la molécula):
452
Índice
Capítulo 9
453
Índice
Capítulo 9
454
Índice
Capítulo 9
455
Índice
Capítulo 9
9 3 .5 .3D-QSAR
Se trata de un área bastante novedosa del diseño molecular asistido por
ordenador (CAMD) caracterizada por la determinación de una relación
computacional explícita entre la actividad biológica y las propiedades moleculares
2D y 3D.
Entre las diferentes, metodologías RI 3D-QSAR en las cuales no se conoce la
geometría del receptor podemos destacar:
■ CoMFA (Comparative Molecular Field Analysis) (Cramer et al., 1988)
El punto de partida en un análisis CoMFA es un conjunto de conformaciones, una
para cada molécula, biológicamente activas. A continuación, se superponen las
conformaciones de acuerdo con el modelo de interacción propuesto y posteriormente
se calcula el campo molecular que rodea a cada molécula colocando grupos de
interacción ("probé’1) en diferentes zonas generando una red regular.
La actividad puede calcularse a partir de:
N P
Actividad = C + S 2 C ijSü (9-54)
ra j=i
C¡j es el coeficiente que corresponde al grupo ’’probe” j en la posición i de la red.
Esta relación se determina mediante una proceso de mínimos cuadrados parciales
(PLS) ya que normalmente habrá miles de puntos en la red y del orden de 30
compuestos. Los coeficientes generados muestran la aportación de cada punto de la
red sobre la actividad.
La aproximación CoMFA es sensible a diferentes factores: selección de los
compuestos activos, tipos de "probe”, el campo de fuerza utilizado para describir las
interacciones entre la "probe” y cada compuesto, el tamaño y espaciado de los puntos
de la red y la manera en que se realiza la regresión.
456
Índice
Capítulo 9
que forma la molécula. Además hay que tener presente el hecho de que al considerar
la forma molecular biológicamente relevante, los términos energéticos
intermoleculares ligando-receptor pueden estabilizar una conformación que no es la
más estable tanto en fase gaseosa como en solución. De esta forma, un análisis MSA
consta de los siguientes pasos: analizar las posibilidades conformacionales,
hipotetizar la conformación activa, seleccionar un compuesto de referencia, realizar
superposiciones moleculares, medir la forma molecular, determinar otras
características moleculares, construir un QSAR de prueba y utilizar el QSAR
optimizado para el diseño de ligandos.
a) Inhibición Enzimàtica
Los datos in vitro de inhibición enzimàtica pueden correlacionarse
fácilmente con las propiedades físico-químicas ya que las interacciones en el sitio
activo no están influenciadas por el transporte y otros procesos, tales como la
absorción, distribución, metabolismo y/o eliminación. Además, la precisión y
reproducibilidad de los estudios in vitro es mucho mejor que la de estudios animales
ya que se ha eliminado la variabilidad biológica.
457
Índice
Capítulo 9
log 1/K¡ app = 0.31 (±0.11) Jt3>4 - 0.88 (±0.24) log ((3 ÍO*3’^ 1) + 0.95 (±0.21) MR'3,4
+ 5.32
log (3 = -1.33 Jtopt = 1.05
(n=42; r = 0.876; s=0.222) (9.56)
b) Desarrollo de fármacos
El ácido nalidíxico (figura 9.11a) es un compuesto usado en el tratamiento de
infecciones urinarias, pero cuya actividad es relativamente débil. La compañía
farmacéutica Kyorin intentó mejorar su potencia y su espectro de actividad.
458
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Capítulo 9
Variación en 1
log (1/MIC) = -0.49 (Lj) 2 + 4.10 Lj - 2.00
n = 8 ; s =0.13; r2 = 0.91 ; F = 25.78 Lt (opt) = 4.2 Á
Variación en 6
log (1/MIC) = -3.32 (Es(6 ) ) 2 - 4.37 Es(6 ) + 3.92
n = 8 ; s =0.11; r2 = 0.98 ; F= 112.29 Es (opt) (6 ) = -0.66
í
Variación en 7
log (1/MIC). = -0.24 (Jijf - 0.68 tc7 - 0.711(7N-CO) + 5.99
n = 22; s = 0.24; r2 = 0.89 ; F = 47.97 jc7 (opt) = -1.38 Á
Variación en 8
log (1/MIC) = -1.00 (B4(8 ))2 + 3.73 B4(8 ) + 1.3
n = 7; s =0.22; r2 = 0.96 ; F = 44.05 B4 (opt) (8 ) = 1.83 Á
459
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Capítulo 9
460
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Capítulo 9
461
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Capítulo 9
Se pueden diseñar dos grandes vías para abordar tratamientos que describan
los efectos del disolvente (Tapia, 1982). Una es la aproximación física, en la cual el
sistema completo se define a partir de todos los núcleos y electrones que lo
constituyen, y se resuelve la correspondiente ecuación de Schrödinger para obtener
toda la información del sistema, añadiéndose posteriormente la dependencia de la
temperatura por métodos mecano-estadísticos si es necesario. Aunque el
procedimiento está claramente definido, su puesta en práctica es inviable sin la
introducción de fuertes restricciones en el número de partículas que compongan el
sistema. La otra aproximación toma una perspectiva química, en el sentido que
reconoce la existencia de moléculas: N moléculas de disolvente (cada una con nd
electrones y má núcleos) y una o varias moléculas de soluto (cada una con ns
electrones y ras núcleos). El hamiltoniano del sistema se aproxima suponiendo que
hay una separación clásica entre las distintas moléculas ( H s y H d , representan los
hamiltonianos de las moléculas de soluto y disolvente respectivamente) que se
H = H S + H d+ H s_d (9.58)
La ecuación (9.58) puede describir un amplio grupo de sistemas. Para derivar una
ecuación efectiva de Schrödinger hay que recurrir a hipótesis cualitativas que definan
razonablemente el problema químico bajo estudio. Así uno de los presupuestos más
empleados es trabajar con un único soluto que interacciona con un conjunto de
moléculas de disolvente, así que modelamos una disolución diluida. Cuando el soluto
perturba la distribución espacial y la estructura electrónica del disolvente, y
recíprocamente el disolvente perturba al soluto se produce una compleja
reorganización global que queda reflejada a nivel energético en las distintas energías
de solvatación. En ocasiones se encuentra que un volumen pequeño alrededor del
soluto es el que experimenta una importante reorganización con respecto a lo que es
la estructura del disolvente puro, esta región se denomina cibotaxis, y podría
asimilarse a la primera o primeras (según el grado de perturbación) capas de
solvatación (Tapia, 1982). En suma, el subsistema de interés puede tratarse
suponiéndolo inmerso en una región cibotáctica que a su vez está incluida en un
462
Índice
Capítulo 9
Con esta partición, el potencial efectivo creado por la densidad de carga molecular en
el medio puede descomponerse en dos términos. En el primero se incluyen las
moléculas de disolvente en la cibotaxis y en el segundo se incluyen las moléculas de
disolvente restantes o del bulk. Así, la ecuación de Schrödinger efectiva para obtener
a c ib o ta x IS A DUlK A
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Capítulo 9
9.4.1 M o d e l o s Discretos
464
Índice
Capítulo 9
465
Índice
Capítulo 9
1 El statu quo de la energía es el de una energía libre de Helmholtz (AA) ya que el proceso
está diseñado de forma que se realiza a volumen y temperatura constante. No obstante, si es
preciso puede obtenerse la variación de energía libre de Gibbs utilizando relaciones
termodinámicas [ver por ejemplo Tomasi y col. J. Am.Chem.Soc., 1984,106, 1945].
466
Índice
Capítulo 9
ii.2) La variación de energía libre debida al proceso de carga del soluto dentro de la
cavidad en la presencia de un continuo dieléctrico polarizable. Esta se acostumbra
a denominar .contribución electrostática, AAelec. El campo eléctrico creado por la
distribución de carga del soluto polariza al continuo que en consecuencia crea un
potencial electrostático dentro de la cavidad que se denomina Potencial de
Reacción2 (y al campo eléctrico asociado Campo de Reacción). La interacción
entre la distribución de carga del soluto y este potencial de reacción es el origen de
esta contribución,
De este modb, la variación de energía libre asociada al proceso de
solvatación dentro del modelo continuo puede expresarse por
v( R) = y
núcleos r - ra electrones R-r.
moleculares, y que podría ser, por ejemplo el baricentro de cargas. Esto da lugar a la
expansión multipolar que permite representar la distribución de carga molecular, que
tiene naturaleza multicéntrica, en una serie de multipolos, M™ (carga o monopolo
£=0, dipolo £=1, cuadrupolo £=2 , octupolo £ -3, etc.) colocados en el origen del
sistema. El momento multipolar de orden £ tiene 2£+l componentes que se pueden
definir a partir de los armónicos esféricos (M™ = r í Y¡n ). Cuando la distribución de
carga está muy expandida, el desarrollo multipolar puede tener problemas de
convergencia y también se han propuesto expansiones multicéntricas multipolares,
en las cuales se habla de Multipolos Distribuidos entre distintos centros (Stone,
1996).
La polarización eléctrica de un fluido continuo, cuando se supone una
respuesta lineal, está caracterizada por la constante dieléctrica £. En el sistema
internacional se utiliza la constante dieléctrica relativa, sr (er = e/s0) con respecto a la
del vacío £0. La polarización del medio, P , como consecuencia del establecimiento
de un campo eléctrico estático y uniforme E puede expresarse por
P = {e - e 0) É = (9.62)
Índice
Capítulo 9
r ? = 2V Jrrf . f F W ( 9 -64)
1 (^+l)(g-l)
a 2M { l + \ ) e + l
Suponiendo que la densidad de carga debida al soluto es despreciable fuera
de la cavidad, la variación de energía libre debida al proceso de creación de la
distribución de cargas en el dieléctrico respecto de vacío viene dada por
electrostática clásica
A A ^. = 1
2 cavity <9-66)
( 9 '6 7 )
Índice
Capítulo 9
contribuciones más allá de 1-1 todavía son importantes indica que el desarrollo
multipolar puede presentar problemas de convergencia.
La introducción en el hamiltoniano del sistema del término de interacción
soluto-continuo dieléctrico nos conduce a la siguiente forma para los elementos ¿uv
de la matriz de Hartree-Fock correspondiente a la resolución de la función de onda
del soluto inmerso en la cavidad
470
Índice
Capítulo 9
o ( P ) =^ — - V V ( P ) ñ (9.71)
4jter
expresa
471
Índice
Capítulo 9
V( P) = Vs (P) + Vd(P) (9 -7 2 )
para calcular el potencial de reacción en P es preciso integrar sobre toda la superficie
(9 .7 3 )
472
Índice
Capítulo 9
Teoría del Funcional de la Densidad; así como respuestas no lineales del disolvente
(Rivail et al., 1996, Tomasi et al., 1994, Tapia et al., 1996, Aguilar et al., 1995)
473
Índice
Capítulo 9
formas que puede adoptar la cavidad según el modelo elegido (esfera, elipsoide,
vdw). El volumen de la cavidad es un segundo aspecto de la definición de la cavidad
que tampoco tiene una solución única. Una alternativa es asociar éste al volumen
molar del soluto, o en el caso de solutos neutros a su volumen molar parcial cuando
se dispone de datos experimentales. En caso de no disponer de esta información se
puede interpolar en correlaciones entre volúmenes experimentales y volúmenes de
van der Waals de compuestos relacionados conocidos. Otra alternativa, establecida
por el método PCM, es definir un volumen que corresponda a la cavidad formada por
la superposición de esferas centradas sobre los átomos que constituyen la molécula
donde el radio de cada una de estas esferas se multiplica por un factor 1.2 (Tomasi et
al., 1994). En el caso de sistemas cargados la definición es aún menos clara ya que
según se trate de cationes o aniones la extensión de la distribución de carga del soluto
respecto a los núcleos es distinta, y generalmente se recurre a correcciones
específicas para cada caso, con la regla general de que en el caso de aniones el
volumen de la cavidad debe ser mayor que el de su correspondiente catión, ya que
una excesiva extensión de la función de onda electrónica puede conducir a problemas
con la cantidad de carga del soluto fuera de la cavidad.
er } U f ith rt 2^ s,)Ha,
generalizada, ecuación (9.74) que calcula la diferencia de energía libre electrostática
para la creación de un conjunto de N cargas {g¡}, separadas entre sí por distancias rVp
en el vacío y en un medio de permitividad dieléctrica relativa eT con unos radios
asociados para las esferas de Born {a¡}. Si se adopta un cálculo no variacional de ésta
474
Índice
Capítulo 9
475
Índice
Capítulo 9
agregado. La estructura del agregado contiene unos espacios propios, aquéllos que
son característicos de la estructura de la disolución, que no pueden adscribirse a
ninguna de las moléculas que conforman el agregado. Otra limitación, quizás más
profunda, es la indeterminación en el número de moléculas de disolvente precisas
para satisfacer las interacciones específicas, así como sus orientaciones. Estos puntos
están íntimamente relacionados a la necesidad de introducir aspectos estadísticos en
los cálculos cuando se aumenta el número de partículas en el sistema (Sánchez
Marcos et al., 1991). Es por ello que su aplicabilidad, al igual que en los modelos
presentados anteriormente, esté limitada aun cuando la información que de su uso
pueda obtenerse en muchos casos resulte de enorme utilidad (Cramer et al., 1999).
Un aspecto interesante que resultá de esta aproximación es la idea física que sostiene,
en el sentido de reconocer que en disolución más que un único tipo de moléculas de
disolvente hay una cierta variedad de ellas en la medida que la perturbación del
disolvente a nivel microscópico en la región cibotáctica en cierta forma las hace
moléculas de disolvente distintas. Esto ha conducido al desarrollo de una serie de
técnicas donde hay modelos de solvatación implícitos que en distintas formas
introducen la región cibotáctica, dando así una componente de especifidad a la
interacción soluto-disolvente (Cramer et al., 1999). Una de las primeras formas de
éstos se basa en aplicar una permitividad dieléctrica distinta al medio en las
proximidades del soluto, con lo cual se introduce el fenómeno de la saturación
dieléctrica, o de forma más general el concepto de constante dieléctrica “local” que
será menor a la correspondiente al bulk (Tomasi et al., 1994, Contreras et al., 1985).
Se han desarrollando métodos más sofisticados durante los últimos años que incluyen
las contribuciones de dispersión y de repulsión-cavitación dentro del modelo,
adoptando formulaciones semiempíricas (Cramer et al., 1999).
476
Índice
Capítulo 9
to d o s lo s
estad os
477
Índice
Capítulo 9
478
Índice
Capítulo 9
(.A } = f f A ( p NJ Ny p ( p N, r N) d p Nd r N (9.78)
Q E(pN ’rN)/kT !
p ( p N, r N) =------ ------ donde QNVT = — w f f c ÁTdpNd r N (9.79)
479
Índice
Capítulo 9
{a ) - T „ (9.80)
que la media estadística sobre un colectivo o conjunto es igual a su media temporal
(Leach, 1996).
En otros términos puede expresarse esta hipótesis afirmando que para un proceso
estacionario de carácter aleatorio, un gran número de observaciones hechas sobre
un único sistema en N instantes arbitrarios de tiempo, tienen las mismas
propiedades estadísticas como observar en el mismo tiempo N sistemas elegidos
aleatoriamente a partir de un colectivo de sistemas similares (McQuarrie, 1976).
Una de las mayores limitaciones de los métodos de simulación es que una
simulación no puede describir una evolución durante un tiempo infinito. La
observación temporal está limitada a tiempos finitos, por lo que habrá que
muestrear y contentarse con .Para un sistema dado, el espacio definido por
el conjunto de variables de posición ({ r N }) para todas las partículas se denomina
“Espacio Configuracional”, mientras que el espacio de dimensión 6 N formado por
el conjunto de variables de posición y momento ({ r N} , { p N }) se llama “Espacio
de Fase”. Como se ha indicado previamente, cualquier estado adoptado por el
sistema corresponderá a un punto, tanto en el Espacio de Fase como en el
Configuracional. Las técnicas de simulación tratan de realizar un muestreo
adecuado de estos espacios para las condiciones del sistema bajo estudio. En
definitiva, el problema es cómo propagar el sistema a través del espacio de fase (o
configuracional). Los métodos de simulación que van a examinarse abordan el
problema desde dos perspectivas diferentes, la Dinámica Molecular es un método
determinista, mientras que el método de Monte Carlo-Metropolis hace uso de
procesos estocásticos.
(9.81)
Para sistemas reales, los potenciales de interacción son continuos y la fuerza que
actúa sobre cada partícula cambiará cuando la partícula cambie de posición o cuando
cualquier otra partícula lo haga. Este acoplamiento lleva a que la integración de las
ecuaciones de movimiento se realice utilizando un método de diferencias finitas: las
ecuaciones de movimiento se integran en intervalos de tiempo muy cortos, At - “time
step”-. Típicamente se dan valores del orden del femtosegundo (lfs=10'15s), aunque
481
Índice
Capítulo 9
1 9
r(t + At) = r(t) + v(t)At + —a(t)(At) +... (9.86a)
Esta ecuación indica que para predecir la nueva posición de una partícula se requiere
conocer su posición en las dos etapas anteriores y la aceleración. Este algoritmo de
integración no solamente es uno de los más sencillos sino que en cierta forma es
generalmente uno de los que presenta más estabilidad. No obstante, pueden señalarse
como inconvenientes los problemas de redondeo numérico que en ocasiones
aparecen debidos a que en la ecuación (9.87) se muestra que para obtener la nueva
482
Índice
Capítulo 9
posición hay que sumar una cantidad pequeña, a(t)(At)2 (hay que recordar que At es
del orden del femtosegundo), a la diferencia entre dos términos grandes como son las
posiciones precedentes de la partícula. La velocidad no tiene que calcularse
explícitamente para determinar la evolución del sistema, pero puede obtenerse de una
cualquiera de las dos formas indicadas a continuación,
(9.88 a) (9.88 b)
Hay varios algoritmos equivalentes al esquema de Verlet, entre los cuales el más
sencillo es el del “salto de rana” (“leapfrog”) (Hockney et al., 1981). Este algoritmo
1
f (t + At) = r ( t ) + v(t + — Ai) Ai (9.89)
evalúa las velocidades en la mitad de los intervalos de integración y utiliza éstas para
calcular las nuevas posiciones.4 A partir de la ecuación (9.88b) se puede calcular la
nueva posición de la partícula,
Para calcular las velocidades en los tiempos correspondientes a intervalos completos
se utiliza la expresión
v(0 = ^- v (í + 1 a í ) + v (í - Í a O (9 .9 i)
4 El nombre del método proviene justamente de esta alternancia entre etapas (saltos) donde la
velocidad y la posición están desfasados por medio intervalo. Es decir, las velocidades hacen
un “salto de rana” sobre las posiciones para dar valores en t+At/2.
483
Índice
Capítulo 9
Las velocidades calculadas por medio de la ecuación (9.93) se estiman mejor que con
el algoritmo de Verlet, en consecuencia la conservación de la energía total del
sistema es mejor ya que la componente cinética se calcula con mayor precisión en el
transcurso de la simulación. Este esquema de integración es más costoso.
Índice
Capítulo 9
aleatoria tome ciertos valores a tiempos dados. Cuando una variable aleatoria alcanza
un cierto valor se dice que el sistema físico está en determinado “estado” y su
evolución temporal se imagina como una progresión de un estado a otro. Cuando la
probabilidad de que se dé un proceso estocástico desde un estado del espacio
configuracional a otro solamente depende del estado de partida se dice que el proceso
es de tipo Markov. El proceso de Markov es el análogo probabilístico a la dinámica
intrínseca. Esta aproximación tiene la ventaja de permitir la simulación de modelos
que no tienen una dinámica intrínseca.
El método de Monte Cario genera configuraciones del sistema
aleatoriamente y utiliza un conjunto de criterios especiales para decidir si se acepta o
no se acepta una nueva configuración. Estos criterios son tales que aseguran que la
probabilidad de obtener una configuración dada es igual a su factor de Boltzmann,
-v(?Ny
e /kT donde V (r ) se calcula mediante la función energía potencial. De este
modo los estados con baja energía se generan con probabilidad superior que las
configuraciones de alta energía. Para cada configuración que se acepta se calculan
(9.94)
los valores de las propiedades investigadas y al final del cálculo el promedio de estas
propiedades se obtiene a partir de los M valores calculados de la propiedad,
Es más apropiado referirse a las simulaciones de Monte Cario de sistemas
moleculares en sistemas condensados como cálculos de “Monte Cario Metropolis”
ya que fueron Metropolis y colaboradores (Metropolis et al., 1953) los que
propusieron el método en Los Alamos, como una de las primeras aplicaciones no
armamentísticas de las máquinas de cálculo electrónico. En una simulación de Monte
Cario cada nueva configuración del sistema se puede generar moviendo
aleatoriamente un átomo o molécula; aunque en algunos casos puede conseguirse la
nueva configuración mediante el movimiento de varios átomos o moléculas o por la
rotación de una parte de la molécula entorno a un enlace. Si la energía de la nueva
configuración es más alta que la energía de su predecesora entonces el factor de
Boltzmann de la diferencia de energía se calcula por medio de la expresión
485
Índice
Capítulo 9
-\v
II nueva (rN)-
V / V ■(rN)1/
previa \' J Jr
F =e /kT (9.95)
Asimismo se genera un número aleatorio entre 0 y 1, Naleat, y se compara su valor
con F. Hay dos posibilidades,
a)N aleat s> F el movimiento se rechaza, se conserva la configuración
original.
b) Naleat < F el movimiento se acepta y la nueva configuración es el
nuevo estado.
Este proceso permite movimientos hacia estados de energía más altas, es decir, no
siempre el sistema evoluciona hacia estados de más baja energía. Hay que destacar
que conforme más pequeña sea la diferencia de energía (Vnueva - Vprevia) mayor será la
probabilidad de que se acepte el movimiento.
5 Este ejemplo es una adaptación “nacional” del dado por Frenkel y Smit en su libro (Frenkel
et al, 1996).
486
Índice
Capítulo 9
487
Índice
Capítulo 9
488
Índice
Capítulo 9
esperado del cuadrado de las desviaciones, <(E - <E>)2>, dado que <E2> y <E>2
son números muy grandes y pueden dar lugar a errores serios de redondeo.
Para el cálculo de la presión se recurre al virial, W = ^ x iPx >donde x¡ es
i
(9.98)
(9.99)
(9.100)
489
Índice
Capítulo 9
distancia r de un átomo dado (Figura 9.18). El volumen de esta capa esférica será
donde se ha supuesto que el espesor de la capa esférica es suficientemente pequeño
como para hacer despreciable las potencias superiores a uno de 6 r. Si el número de
partículas por unidad de volumen es p, entonces el número total de partículas en
esa capa esférica será 4jtpr2Sr con lo cual el número total de partículas varía como
r2. La función dedistribución de pares, g(r), da la probabilidad de encontrar un
átomo omolécula a una distancia r de otro átomo o molécula comparada a la
distribución de un gas ideal. g(f) es adimensional. Aunque pueden definirse
funciones de distribución de orden superior, es decir, involucrando tres, cuatro, o
más partículas; en general, son las funciones de distribución de pares las que
reciben una atención mayor.
h ?
‘V
RcxM
',i
Figura 9.19a Figura 9.19b
En la Figura 9.19a se muestra la probabilidad de encontrar dos átomos
separados una distancia r para un típico metal en polvo (Murrel et al., 1994),
mientras que la Figura 9.19b muestra la probabilidad de encontrar un átomo de
490
Índice
Capítulo 9
Índice
Capítulo 9
(9 .1 0 3 )
Para moléculas, además de las FDR es preciso manejar la orientación de forma que
hay que hablar de “funciones de distribución orientacional”. Alternativamente, para
moléculas poliatómicas pueden determinarse un conjunto de FDR entre distintas
posiciones características (“s/te”) de la molécula.
(9 .1 0 4 )
< xy >
c (9 .1 0 5 )
492
Índice
Capítulo 9
que en el caso de que las funciones x e y sean la misma función se definen como
“función de autocorrelación”. Este tipo de función de autocorrelación indica la
extensión en la cual un sistema retiene la memoria de sus valores previos. Una de las
(9 .1 0 7 )
(9 .1 0 8 )
00
3D=j{v(t)-v(0)}dt (9 .1 0 9 )
o
autocorrelación de velocidades,
La integración de la función de autocorrelación a tiempo infinito es 3 veces el
coeficiente de difusión. También es posible calcular D por medio de la relación de
Einstein mediante el cálculo de los desplazamientos cuadráticos medios,
(9 .1 1 0 )
Índice
Capítulo 9
494
Índice
Capítulo 9
j v‘ * -Ir *L
v <3 1 J
í00 O-frO*-
a O• .*" i
de la caja central en tres dimensiones:
----------------
495
Índice
Capítulo 9
496
Índice
Capítulo 9
Para un fluido sin ninguna estructura regular, Ar2(t) aumenta gradualmente con el
tiempo; sin embargo, para un sólido esta magnitud debe oscilar entorno a un valor
medio.
499
Índice
Capítulo 9
500
Índice
Capítulo 9
506
Índice
Capítulo 9
entornó
507
Índice
Capítulo 9
J V K ( r ; Ä „ , (9-100)
E = (9.101)
Índice
Capítulo 9
por el Hamiltoniano H c c .
Las fuerzas sobre los núcleos QM, Fa y los átomos MM, FM, se obtienen
derivando la ecuación (9.101) respecto a las coordenadas cartesianas de los
núcleos y los átomos:
F = - — Fm = ~ (9-104)
" ¿IH.a M SRU
H mm ) =: E Mm ) (9.105)
509
Índice
Capítulo 9
donde los subíndices “ i 55 hacen referencia a los electrones de los átomos QM,
los subíndices “a ” a los núcleos de los átomos QM y los subíndices “M ” a los
átomos MM. El primer término de la ecuación (9. 106) representa las
interacciones electrostáticas entre los átomos MM y los electrones de los átomos
QM. El segundo término representa las interacciones electrostáticas entre los
átomos MM y los núcleos de los átomos QM. El tercer término describe las
interacciones de van der Waals, siendo necesario incluirlo ya que algunos
átomos MM no tienen carga, y de otro modo resultarían invisibles a los átomos
QM. Los dos últimos términos de la ecuación (9. 106) son constantes, ya que
no incluyen coordenadas electrónicas, de modo que pueden ser calculados y
sumados directamente a la energía total. Sin embargo, el primer término sí que
incluye coordenadas electrónicas por lo que debe tratarse en el procedimiento
SCF.
La energía total es la suma de los valores de cada término en el
hamiltoniano:
E = E qm + E um + E qMÍMM + E cc ( 9 . 107)
510
Índice
Capítulo 9
QM H qM /
+ £ MM (9. 108)
511
Índice
Capítulo 9
es muy grande. En estos casos hay enlaces covalentes entre los átomos QM y
MM.
R egión Q M
512
Índice
Capítulo 9
COO-
-ooc
coo-
O
HO
O
OH OH
Figura 9.14
515
Índice
Capítulo 9
ée1S A é t w th
A X
core
Corlsmato
Figura 9.15
R TS R TS
dc-o 1.447 (1.445) 1.874 ( 1.775) ' 1.443 (1.453) 1.869 (1.944)
T abla 9.2 Distancias de enlace que se rompen (d c.0 en Á), distancias de enlace
que se forman (dc_c en Á), y el ángulo que describe la orientación del grupo
hidroxilo respecto el anillo ((j>oH en grados) obtenidos para R y TS en disolución
acuosa y en medio enzimàtico mediante AM1/CHARMM/GRACE. Entre
paréntesis se muestran los valores medios obtenidos con los cálculos estadísticos
QM/MM de Dynamo.
Una comparación de los valores obtenidos por los dos métodos son similares,
excepto el ángulo, §0H, asociado a la orientación del grupo hidroxilo con
respecto al anillo. Este grupo es mucho más flexible, en particular en disolución
acuosa. Los valores calculados para las energías de activación, AE*, así como los
valores de energías libres de activación, AG*, presentadas en la tabla 9.3, están de
acuerdo con el efecto catalítico de la presencia de las moléculas de agua y de la
enzima. La partición realizada en la metodología QM/MM permite
descomponer la energías de activación, AE*, en tres términos:
517
Índice
Capítulo 9
Vacío 5 2 .7 4 8 .9 —
Disolución acuosa 4 4 .1 3 8 .0 2 4 .5
Medio Enzimàtico 3 5 .7 2 9 .3 1 5 .4
Disolución acuosa
E t AE* AF 1 A E lnt A E ^
R -6411.3 0 .0 0 .0 0 .0 0 .0
Medio enzimàtico
E t AE* AF 1 A E int AEmm
R -3547.9 0 .0 ■0 .0 0 .0 0 .0
518
Índice
Capítulo 9
primeras filas pueden ser calculadas con mejor exactitud que las obtenidas
mediante el experimento. Esta disponibilidad abre al químico muchas
posibilidades que no son accesibles realmente por medidas experimentales.
Intermedios de reacción de vida corta, estados excitados e incluso puntos de
silla de reacción pueden ahora ser conocidos, al menos para moléculas
poliatómicas sencillas”.
Uno de los campos en los que mejor se aprecian las dificultades y, en
consecuencia, la importancia de las técnicas de la Química Teórica y
Computacional es en el estudio de la reactividad química, utilizando el concepto
de SEP y caracterizando la ET asociada a la transformación química. En
ausencia de datos estructurales obtenidos de forma experimental, es difícil de
juzgar si una ET es correcta o no. A pesar del gran valor de la teoría para
obtener información detallada del fenómeno químico, no sólo en el área de la
reactividad química, el papel fundamental de la teoría debe entenderse como
una herramienta complementaria con la experiencia: deben actuar de forma
cooperativa, el objetivo no debe consistir en obtener una respuesta en lugar de
realizar un experimento, sino en conseguir un conocimiento profundo que
permita interpretar los resultados experimentales obtenidos de una forma
adecuada y plantear otros nuevos. Las predicciones teóricas deben ser
contrastadas con datos experimentales y esta cooperación permite diseñar
experimentos útiles, eficientes y efectivos.
Hemos comprobado que reacciones químicas muy complejas pueden
ser descritas de una forma privilegiada caracterizando la ET. El cálculo
mecanocuántico de la ET en modelos de los sistemas reaccionantes puede ser
racionalizado de acuerdo con los principios y procedimientos de la Química-
Física. La relevancia de estos resultados permitirá dilucidar cómo se produce
una reacción química tanto en los sistemas químicos sencillos (moléculas
aisladas en fase gas) y entender la estrategia de la catálisis en sistemas tan
complejos como las enzimas.
520
Índice
Capítulo 9
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Índice
Capítulo 9
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531
Índice
Capítulo 9
532
Índice
ÍNDICE DE MATERIAS
3D-QSAR, 456
aceleración, 211
acoplamiento débil, 42
acoplamiento espín-órbita, 46
acoplamiento fuerte, 42
acoplamientos, 40
actividad, 451-460
algoritmo, 143
algoritmo de Verlet, 422-484, 486, 498, 505
algoritmo RODS, 342-344
análisis de agrupaciones, 205
análisis de factores, 203
anarmonicidad, 349, 350, 353
ANO, 400, 406, 412,413, 415
anticonmutador, 7
aproximación de Born-Oppenheimer, 27, 42, 44, 252, 288, 297, 315, 339, 349, 366, 381
aproximación de Born-Von Karman, 230, 250
aproximación de Koopmans, 130
aproximación de gradiente generalizado (GGA), 133, 135, 137
aproximación de la densidad local (LDA), 133-137 136, 137
aproximación orbital, 45
Arrhenius, ecuación de, 313, 325
átomo de hidrógeno, 26 .
balanceado de un programa, 2 1 0 -2 1 1
barrera de energía estándar, 325
barrera de energía potencial, 334
bit, 145
BLYP, 139, 265, 266, 277
BPW91, 277
Brillouin, 227, 228, 230, 233-235, 237-239, 243, 246-248
B3LYP, 260, 265, 266, 277
Born, ecuación de, 474
bosones, 45
bra, 3
bulk, 463, 466, 475, 476, 495
byte, 145
cambio de base, 8
Índice
camino de reacción de mínima energía, 331-334
campo autoconsistente, 88
campo de fuerza AMBER, 429, 439-441, 450
campo de fuerza CFF93, 429, 446
campo de fuerza CHARMM, 429, 442, 510
campo de fuerzas DREIDING, 445
campo de fuerzas MM3, 429-438
campo de fuerzas MM4, 429, 442, 443
campo de fuerzas MMFF94, 447-449, 450
campo de fuerzas OPLS, 429, 441, 442, 448
campo de fuerzas QMFF, 446, 447
campos de fuerza, 428-449
campo de reacción, 465-475
capa abierta, 46, 48
capa cerrada, 46, 48, 89, 110
capacidad calorífica, 488
CASCI, 258
CASPT2, 261, 382, 383, 387-390, 394, 395-397, 399, 400-403, 407-409
CASSCF, 261, 382-384, 386-389, 394-397, 400-403, 405-407, 409, 410, 413
CASSI, 403
CCOC, 25
CCSD, 277
cibotaxis, 462, 463, 465
cicatriz, 352, 363, 372
cluster analysis, 205
codificación binaria de la información, 145, 146
coeficiente de transmisión semiclásico, 344-345
colapso de la función, 2 2
(colisión/choque), 281, 285, 288-294, 301-309
compilador, 146
componente de un vector, 5
computador, 143
configuración diexcitada, 53
configuración electrónica, 53
configuración monoexcitada, 53
configuraciones adaptadas de espín, 48
conjugada de una matriz, 171
conjunto canónico, 87
conjunto de base, 3
conjuntos de base completos, 5
conjuntos de base ortonormales, 4
conmutador, 7
constante de movimiento, 25
constantes de velocidad, 314, 318, 321, 323, 329, 334, 335
control de reacciones químicas, 350, 351
coordenada de reacción intrínseca (IRC), 333,515-516
coordenada distinguida, 342
coordenadas cartesianas ponderadas, 330, 336, 342
coordenadas normales, 336, 340
534
Índice
correlación (matriz), 204
correlación electrónica, 92, 97
correlación-intercambio, 133-140
covarianza (matriz), 204
coupled cluster (CC), 79, 85, 92, 96, 103-106
CPU, 144
cuadratura de Gauss, 189-192
535
Índice
energía potencial clásica, 342
energía umbral cuántica, 346
entalpia estándar de activación, 322
entropía estándar de activación, 323
ergódico, 352
espacio de fase, 351-353, 372, 375
espectros caóticos, 357, 359, 370, 373
espectroscopia por bombeo de emisión estimulada, 350, 355-357, 359-361, 363, 364
espectroscopia por fotoextracción de electrones, 350, 356, 364, 365, 367
espectroscopia vibracional, 349
espín, 32, 85, 111, 140
espinorbital, 45
espinorbital generalizado, 46
espinorbital restringido, 46
espinorbitales no restringidos, 46
espinorbitales ocupados, 48
espinorbitales virtuales, 48
estadística de Bose-Einstein, 45
estadística de Fermi-Dirac, 45
estadística de niveles, 373
estadística de niveles (distribución de Porter-Thomas) 359
estadística de niveles (distribución de Wigner) 359
estado, 2 0
estado del vacío, 53
estado de transición, 314, 382
estados de transición generalizados, 333-336
estado estacionario, 25
estado estándar, 324
estado excitado, 36, 399, 400, 402, 405, 407
estados degenerados, 39
estructura de bandas, 233, 242, 249
estructura de transición, 519-526
estructuras lógicas de algoritmos, 147
eteno, 383, 399, 401, 405-407
experimento de Stern-Gerlach, 32
536
Índice
función antisimétrica, 45
función de correlación, 368, 369
función de estado electrónica, 43
función de estado exacta, 48
función densidad, 107, 116
función de Fukui, 128-132
función de onda, 82
función de onda exacta, 83
función de partición, 317, 334, 339-342
función propia, 15, 17, 21
función simétrica, 45
función de Bloch, 230, 228, 231, 238, 240, 245
funcional de la densidad, 120, 124, 483, 509
funcional de la energía, 250
funciones de matrices, 12
funciones impares, 19
funciones ortonormales, 14
funciones pares, 19
funciones propias de espín, 33
ket, 3
537
Índice
interacción de configuraciones, 79, 82, 85, 92, 95, 103, 104, 217
interacciones intermoleculares, 418. 423
interpretación de Copenhage, 21
inversión dé matrices, 171, 175
jellium, 231
jerarquía del caos, 352
Madelung, 221
magnetón de Bohr, 32
matrices en FORTRAN, 158-161
matriz, 1
matriz adjunta, 2
matriz columna, 1
matriz cuadrada, 1
matriz de constantes de fuerza proyectada, 338, 343
matriz de Fock, 89, 91
matriz densidad, 90, 107, 109, 111, 117
matriz diagonal, 2, 9, 11
matriz hermítica, 2, 110, 172
matriz Hessiana 194
matriz inversa, 2
matriz ortogonal, 2, 172
matriz ragular, 172
matriz simétrica, 2, 172
matriz transpuesta, 2
matriz unidad, 2
matriz unitaria, 2, 8 , 9, 11, 172
Maxwell-Boltzmann, 285-287, 315, 345
Mclver y Komornicki, condiciones de, 315
MCSCF, 382-386, 412
mecánica clásica, 351, 357, 364, 375
mecánica molecular, 427- 451
media, 204-205
medida, 2 0 , 21
memoria central, 144
memoria compartida, 2 1 2
memoria distribuida, 2 1 2
método de Beeman, 493
método de Car-Parinello, 252, 277
538
Índice
__
norma de un vector, 4
normalización intermedia, 38
notación de Dirac, 3, 15
observable, 2 0 , 21
operador, 6 , 7, 15
operador adjunto, 7, 17
operador antihermítico, 16
operador antisimetrizador, 20, 45, 47, 49
operador de aniquilación, 20, 51
539
Índice
operador de ascenso, 29
operador de cluster, 104
operador de Coulomb, 89
operador de creación, 2 0 , 51
operador de descenso, 29
operador de escalera, 256
operador de excitación, 53
operador de Fock, 87, 8 8 , 89, 90, 97, 102, 127, 230
operador de intercambio, 20, 89
operador de Kohn-Sham, 127, 230
operador de paridad, 19
operador de perturbación, 38
operador de proyección, 18
operador efectivo, 88
operador Hamiltoniano, 82
operador Hamiltoniano molecular, 42
operador Hermítico, 8 , 9, 15, 16
operador idempotente, 18
operador lineal, 6
operador local, 16
operador no local, 16
operador normal, 16
operadores de espín, 33
operadores en segunda cuantización, 54
operadores escalera, 29
optimización de funciones, 194
optimización de programas, 206-209
orbital, 81
orbital activo, 91, 382, 387, 389, 405, 406
orbital cristalino, 245
orbital de Bloch, 240, 245, 247, 258
orbital de valencia, 398, 407
orbitales moleculares, 236, 381, 384-387, 397, 399, 401, 411
orbitales naturales, 388, 405, 412
orbitales Rydberg, 398, 405
orbital espacial, 46
orbital Kohn-Sham, 126, 127, 135
órbita periódica, 352, 361-364, 372, 375
ordenador, 143
ortogonalización canónica, 10
ortogonalización de Schmidt, 10
ortogonalización de vectores, 10
ortogonalización jerárquica, 10
ortogonalización simétrica, 10
oscilador anarmónico, 38
oscilador armónico, 26, 38
paquetes de onda, 351, 353, 356, 357, 359, 365, 368-370, 372-375
paralelización, 213-215
540
Índice
paralelización de programas, 209-214
parametrización, 437, 438, 443, 444, 4445, 447
parámetro variacional, 35
partículas indistinguibles, 44
Pauli, 52, 113, 114
PCM, 472, 474
periférico de almacenamiento, 144
periférico de entrada/salida, 144
polarización, 464-472
poliada, 354, 358-360, 364
POLYRATE, 347
potencial químico, 128, 130, 131
principio de antisimetría, 45, 47, 50, 52
principio de Ehrenfest, 370
principio de exclusión, 47, 51, 52
principio de Franck-Condon, 356, 366
principio de indeterminación, 23, 44
principio de superposición, 19, 21, 38
principio variacional, 34, 119, 120, 121, 122
probabilidad de transmisión cuántica, 345-346
probabilidad de supervivencia, 364, 368, 375
proceso de Markov, 485
procesador dueño, 2 1 0
procesador esclavo, 2 1 0
producto de matrices, 1
producto de operadores, 6 , 7
producto diádico, 5
producto escalar, 4
producto escalar de funciones, 15
producto interno, 13, 15
producto por un escalar de una matriz, 171
productos de Hartree, 46
programa, 146
programación estructurada 148
programa principal, 165
proyector de espín, 50
punto silla, 315
QSAR, 451-460
541
Índice
representación de un operador, 6 -8 , 15
representación de un vector, 4
resolución de la identidad, 5, 8 , 11
resonancia, 351, 354, 358, 363, 364, 373, 374
resonancia Darling-Dennison, 358
resonancia de Fermi, 354
resonancia no lineal, 354
RHF, 8 8 , 89, 91, 383, 384, 387
Roothaan, 89, 90
SCRF, 470-474
sección eficaz, 285, 286
sección eficaz diferencial (DCS), 284, 285, 288, 290, 294, 309
segunda cuantización, 50, 384
series de Clebsch-Gordan, 34
series de Fourier, 13
series de Taylor, 38
singulete, 48, 50
sistema, 20
sistema secular, 11
sistemas de dos niveles, 40
size-extensive, 387 •
size-consistency, 94, 95, 96, 103
sobretono, 349-357, 364
software, 143
speed-up, 211
subprogramas, 165-169
subrutinas, 166-168
suma y resta de matrices, 171
superelastico/a (colision/choque), 295
superficie adiabática, 44
superficie de energia potencial (PES, SEP), 288, 296, 297, 309, 371, 505-508, 513-518
superficie de división, 315, 333
suma clásica de estados, 326
superficie diabàtica, 44
542
Índice
teoría del estado de transición convencional, 314-330
teoría del estado de transición, deducción dinámica, 318-321
teoría del estado de transición, formulación termodinámica, 321-324
teoría del estado de transición, hipótesis fundamental, 315
teoría del estado de transición, microcanónica, 326-330
teoría del estado de transición variacional, 330-344
teoría de perturbaciones, 37, 85, 96, 97, 103, 382-384, 388, 389, 393, 395, 396, 401
teorema electrostático, 27
término cruzado, 436
término de flexión, 431
término de flexión fuera del plano, 433
término de tensión, 433, 437
término de torsión, 432
término, electrostático, 422, 425, 435, 436, 447
transferencia intramolecular de energía, 350, 353, 354, 358, 359
transformación de Lowdin, 89
transformación de semejanza, 174
transformada de Fourier, 247
transición orden-caos, 359
transposición de matrices, 172
trayectorias clásicas, 282, 285, 297, 298, 307, 308
traza de una matriz, 2, 8
triplete, 50
Uhlenbeck, 32
543
Índice