Capitulo III
INSTITUCIONES
JURIDICO-SOCIALES
Las instituciones juridico-sociales de los chibchas como la
familia, el matrimonio, el tibyn, el trabajo, etc., correspon-
den a formas sociales organizadas desde épocas
inmemoriales y constituyen la estructura fundamental del
ordenamiento juridico. De su naturaleza comunitaria se
derivan la mayor parte de las relaciones juridicas que
integraron el ‘derecho chibcha tradicional; sin embargo, en
ellas se encuentran también elementos relativamente re-
cientes, como los estamentos sociales y el derecho premial,
que obedecen a nuevas realidades de la sociedad, como la
progresiva division social dei trabajo, el avance de las
técnicas y ciertas tendencias del derecho hacia el recono-
cimiento del individuo como protagonista en Ja vida social.
De todas maneras. el derecho chibcha, reflejo de un orden
social comunitario. profundamente impregnado de lo reli-
gioso y lo ético. respondia adecuadamente a la estructura
y a las necesidades de la sociedad.
1.- EL CLAN GENTILICIO O TIBYN
El clan gentilicio o linaje de los chibchas, tibyn o zibyn,
llamado también capitania o parcialidad, era una gran
familia ampliada, formada por un grupo de familias biol6-
givcas —entre diez y cien. aproximadamente—, ligadas
Anmande Suescinentre si por vinculos consanguineos de parentesco real o
mitolégico, de posesién comunitaria del territorio donde
vivian, de religion e idioma comunes, poderosos vinculos
que las aglutinaban en una unidad integrada, compacta y
con vida propia. Sus miembros se consideraban hermanos
entre si, descendientes de un antepasado comun, represen-
tado en un totem, simbolo de sus dioses, con el que se
comunicaban en forma mistica, y actuaban de conformi-
dad con esa creencia en todos los actos de la vida. Dentro
de esa gran familia, el hombre nacia, se formaba, trabajaba,
se reproducia y moria, por lo cual constituia un contexto
social, econdémico y cultural mas importante que el forma-
do por la familia biolégica. Por otra parte. era una agrupa-
cién casi hermética a la cual solo se podia entrar por el
matrimonio con uno de sus miembros y de la cual no se
podia salir sino por el destierro o el exilio voluntario.
eventos estos Ultimos de muy rara ocurrencia.
La autoridad del tibyn era ejercida por un riba o capitan,
generalmente el mas sabio. prudente y valiente de sus
integrantes, elegido de por vida por todos los miembros de
lacomunidad. Es importante subrayar el espiritu democra-
tico en la institucién basica de la sociedad chibcha y el
periodo vitalicio. Refiriéndose a los clanes existentes entre
los iroqueses de los Estados Unidos, cuya estructura era
comun a todos los clanes indigenas de América. el socié-
logo norteamericano Morgan decia: “Todos sus miembros
son individuos libres, obligados a proteger cada uno la
libertad de los otros; son iguales en derechos personales; ni
los sachem (sacerdotes) ni los caudillos pretenden tener
ninguna especie de preeminencia; todos forman unacolec-
tividad fraternal, unida por vinculos de sangre, libertad,
igualdad, fraternidad: esos son, aunque nunca formulados,
122 &! Derecho Chibcna
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Eelos principios cardinales de la gens, y esta Ultima es, a su
vez, la unidad de todo un sistema social, la base de la
sociedad india organizada. Eso explica el indomable espi-
ritu de independencia y la dignidad que todo el mundo nota
en los indios”'. La existencia de elementos como la igual-
dad real entre todos sus miembros, la libertad de que
disfrutaban, la confraternidad operante en todos los actos
de la vida y la eleccién popular y vitalicia de su principal
autoridad, el tiba, permiten afirmar que enel tibyn chibcha
se daba una forma embrionaria de democracia local.
El sibyn, como unidad fundamental de lasociedad chibcha,
fue uno de los elementos que determiné con mayor inci-
dencia su naturaleza comunitaria, le dio una caracteriza-
cién especifica e imprimié un sentido peculiar a sus
instituciones juridicas. La sociedad chibcha estaba inte-
grada por un conjunto de tibynes y no por un conjunto de
individuos; eran aquellos los actores de la vida social ylos
principales sujetos de derecho.
El tibyn tenia un esquema de poblamiento disperso dentro
de una comarca rural, pero a veces tan nutrido, que daba la
apariencia de una aldea; era una forma de vivir que corres-
pondia a las condiciones del medio geografico, a la nece-
sidad de convivir los unos cerca de los otros, de permane-
cer proximos a sus sementeras, pero no concentrados en
un solo lugar 0 aldea. No hubo entre los chibchas ciudades
0 aglomeraciones urbanas, como entre los aztecas y los
incas, salvo el caso de Hunza, que constituyé su mas
considerable concentracion humana; fundada por
Hunzahua, el primer zaque de la dinastia, tomo su nombre
en memoria de su fundador, que los espafioles cambiaron
por Tunza o Tunja.
Armando SuescunMapa No. 2
Hunza, la Ciudad de los Zaques
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German Villate Santander- Investigacién Historica.
Jaime Gutiérrez Wilches - Cartografia y Diseno. !
124 1 Derecho ChibchaEse factor de residencia compartida desarrollaba en todos
los miembros del tibyn un alto grado de solidaridad y de
cooperacién; asi mismo, el hecho de pertenecera un grupo
social fuerte y bien definido, daba a todos sus miembros
una seguridad econémica y una estabilidad social y psico-
légica. Cuando el numero de sus miembros soprepasaba
determinada cifra y se hacia demasiado grande, de manera
que la preservacién de su unidad se tornaba dificil, se
presentaba la tendencia a la disgregacién del ribyn original
a través de la formacién de otro u otros nuevos.
2.- LA FAMILIA
La familia biolégica, primera unidad de la organizacién
social chibcha, se formaba mediante el matrimonio de un
hombre y una mujer o de un hombre y varias mujeres,
pertenecientes siempre a distintos r/bynes o clanes; en ella,
el centro de unién familiar y la persona que ejercia la
direccién y mando era el marido, tanto en el caso de las
uniones monogamicas como en el de las poligamicas,
razon por la cual, la familia recién constituida se instalaba
siempre en el tibyn del marido, lo cual le daba un caracter
patrilocal; sin embargo, cuando el marido fallecia o los
hijos alcanzaban la edad adulta, éstos retomnaban al ribynde
la madre?.
La familia era no sdélo la unidad basica de la sociedad,
encargada de su reproduccién y conservaci6n, sino tam-
bién la primera unidad de produccién econémica; al cons-
tituirse por el matrimonio, recibia del tibyn una parcela de
tierra, gtieta, donde debia construir su vivienda y cultivar
los productos més necesarios para su subsistencia; todos
Amando Suescin 125los miembros de la familia, de acuerdo a su edad y sexo,
trabajaban en las labores agricolas y del hogar, en la
elaboracién de mantas de algodon, cria de animales do-
mésticos, etc., para colaborar en el sostenimiento de la
familia y al pago del tributo. Los nifios respetaban a sus
padres y no se separaban de ellos; su educacion consistia
en imitar a sus padres en todo, en aprender los oficios que
ellos les ensefiaban y en observar y seguir los usos y
costumbres del entorno social.
2.1.- El régimen de parentesco
Elrégimen de filiaciénen la sociedad chibcha se establecia
de madre a hijo, y no de padre a hijo. y la linea de sucesion
por causa de muerte, de tio a sobrino, hijo de hermana,
prefiriendo los mayores alos menores, y a faltadeestos, los
hermanos del occiso. Este sistema de filiacion matrilineal
era sin duda, mas seguro que el de la filiacién de padre a
hijo, pues la maternidad de la mujer es un hecho cierto y
facilmente comprobable, mientras que la paternidad del
marido no siempre lo es en la misma forma; no es seguro
que el supuesto hijo de un padre lo sea realmente y que, por
tanto, lleve su sangre; en cambio si lo es que el hijo de su
hermana lleve la misma sangre del tio porque la materni-
dad de clla es constatable. Sobre esa base.indiscutible se
establecié la linea de sucesién en la sociedad chibcha. en
virtud de la cual el que heredaba era el sobrino hijo de
hermana, o en su defecto el hermano, pero no el hijo del
marido.
Don Juan de Castellanos fue el primero de los cronistas de
Indias en registrar el sistema de filiacién cognaticia y de
sucesion matrilineal cuando escribi
126 El Derecho Chibcha
pana ati*Hechas pues las infames ceremonias
en este funeral de Nemequene,
los principes y Jeques se juntaron
para constituir en estado al sucesor,
que no puede ser hijo, sino sobrino, hijo de hermana,
y en defecto de no tener sobrino,
hermano del sefior es heredero,
siendo los demas dias (sic) preferidos’
Todos los demas cronistas coinciden en afirmar esta insti-
tucién que se prolong6 hasta bien entrada la época de la
colonizacién espafiola; Rodriguez Freyle anota que don
Juan, uzaque de Guatavita, después de la conquista espa-
fiola, “era sobrino de que aquel que hallaron los espafioles
en la silla al tiempo que conquistaron este reino, el cual
sucedié luego su tio, porque entre ellos heredaban los
sobrinos, hijos de hermana, y se guarda esta costumbre
hasta hoy dia’.
Esta institucion de la filiacion por linea materna o uterina,
indica el caracter matriarcal de la sociedad chibcha, que
predominé en sus primeras €pocas y que todavia persistia
en las ltimas, aunque ya atempérado por la reciente
preeminencia del padre. El matriarcado determiné el régi-
men de parentesco y otras instituciones juridico-sociales,
pero en ningun momento logr6 establecer su predominio
en las juridico-politicas, que siempre estuvieron domina-
das por los hombres.
3.- EL MATRIMONIO
El matrimonio era un contrato solemne, en virtud del cual,
un hombre y una mujer, pertenecientes a ribynes diferen-
Armando Suescun 127tes, se comprometian a vivir juntos para acompafiarse,
amarse, procrear y ayudarse mutuamente durante toda la
vida. Su importancia como institucion radicaba en que era
la base de la formacién de unidades familiares estables y.
por tanto, del crecimiento de la poblacion y del manteni-
miento del orden social; su caracter institucional le otorga-
ba un reconocimiento social y propiciaba su duracién y
estabilidad. El matrimonio era obligatorio para todos los
hombres y mujeres adultos que no tuvieran impedimentos
fisicos 0 juridicos, por cuanto aseguraba la conservacion y
crecimiento de la sociedad y permitia satisfacer las nece-
sidades sexuales, de mutua ayuda y compafiia de los
conyuges.
3.1-Requisitos
Los requisitos indispensables para contraer matrimonio
eran varios: a) pertenecer a tibynes diferentes: b) haber
sobrepasado la pubertad. es decir, haber cumplido el
hombre los 16 afios y la mujer los 13; c) haber pagado por
parte del novio la dote acordada con la familia de la novia.
3.2.- Clases de matrimonios
Existian dos clases de matrimonios: el que realizaba el
hombre por primera vez, que implicaba su incorporacion
a la edad adulta y la constitucién de una nueva unidad
familiar, y estaba rodeado de solemnidades exigentes; y
los subsiguientes que el hombre podia realizar, de acuerdo
a su posicién social o a sus posibilidades econémicas, que
solamente ampliaban la unidad familiar ya constituida;
estos exigian menores solemnidades. ~
128 EI Derecho Chibcha3
- Solemnidades
Los matrimonios chibchas se celebraban mediante el cum-
plimiento de determinadas ceremonias, detalladamente
descritas por los cronistas de Indias: “El estilo que obser-
vaban en sus desposorios era que el var6n pediaal padre (o
persona que le sustituia) la mujer a quien se inclinaba para
casarse con ella, ofreciendo cierta cantidad de hacienda
para ella, segtin su caudal, y si se la negaba ofrecia otra
tanta més hasta la tercera vez, y si todavia no se la daban,
desistia de la pretensién para siempre, pero si aceptaban la
oferta, tenia algunos dias la mujer a su disposicién y si le
parecia bien se casaba con ella, y si no la volvia a sus
padres, y en esta forma se casaban con tantas mujeres
cuantas podia sustentar la posibilidad de cada uno. Con
hermanas, primas y sobrinas no se casaban, antes lo tenian
por prohibido, aunque fuesen reyes, y en esta atencion y
respeto al parentesco de sanguinidad excedieron los reyes
de Bogota a los incas, que se casaban con sus mismas
hermanas y parientas mds cercanas’*.
“En cuanto a matrimonio, no tenian los moscas (muiscas
o chibchas) ceremonia alguna en su celebracion si no era
cuando casaban con la primera mujer. porque entonces se
hacian por manos de los sacerdotes, los cuales ponianensu
presencia a los contrayentes (teniéndolos reciprocamente
el uno al otro echado el brazo sobre los hombros) y
preguntabanle a la mujer si habia de querer mas al Bochica
que asu marido y respondiendo que si, volvianle a pregun-
tar si habia de querer mas a su marido que a los hijos que
tuviese de él. y respondiendo que si, proseguia el sacerdote
si tendria mas amor a los hijos que a si misma, y diciendo
también que si. preguntabanle mas: si estando muerto de
129
Armando Suescinhambre su marido ella no comeria, y respondiendo que no,
le preguntaban finalmente si daba su palabra de no ira la
cama de su marido si €] no la llamase primero, y hecha la
promesa de que no iria. volvia el sacerdote al marido y
deciale si queria por mujer a aquella que tenia abrazada.
que lo dijese claramente y a voces, de suerte que todos lo
entendiesen, y é] entonces levantaba la voz y decia tres 0
cuatro veces si quiero, si quiero, con lo cual quedaba
celebrado el matrimonio, y después podia casarse sin tal
ceremonia con cuantas otras mujeres pudiese sustentar”®,
Los matrimonios subsiguientes que el hombre podia rea-
lizar no requerian las mismas solemnidades del primero
pero si generaban los mismos derechos y obligaciones
entre los conyuges. Fray Pedro Simon los describe de la
siguiente manera: “Estas eran las comunes leyes que tenian
puestos los bogotaes a todo sureino, sobre las cuales habia
otras costumbres comunes y particulares de cada pueblo.
en especial acerca de casarse, porque el que queria tratar de
eso, ya que tenia determinado con quien hablaba. sin poner
casamenteros ni otras ceremonias por su persona, con
alguna de las que tenian a su cargo y debajo de su amparo
a la que pretendia, ora fuesen padres 0 parientes. con quien
trataba el precio que habia de dar por ella. Y si lo que
ofrecia no les parecia bastante, afiadia por dos veces la
mitad de lo que prometié primero. Y si a la tercera no
bastaba, buscaba mujer mas barata. Pero si en estos con-
ciertos quedaba satisfecha y contenta la parte de la novia,
entregabansela sin mas ritos ni dilaciones, quedandose
ellos con la paga que el novio habia dado, sin que ella
llevase mas dote que algunas quince o veinte mucuras de
chicha y algunas alhajuelas usuales de la casa”.
1 Derecho Chibcha
ANUAAAHHANAAAG*Y mas adelante agrega: “No eran las que hemos dicho leyes
comunes a todos los casamientos, pues en algunos pueblos
se usaba que el pretendiente enviaba, sin hablar con nadie,
a los parientes 0 padres de la que pretendia una manta y si
no se la volvian a enviar, luego volvia enviando otra y una
carga de maiz, y medio venado, si era gente a la quien le
estaba concedido por los caciques comerlo, porque esta
carne no se podia comer sin este privilegio (...) Aquella
noche siguiente de como habia enviado esto, se iba al
ruuiper el alba, y se asentaba a la puerta de sus suegros, sin
hacer mas ruido que el que bastase para que entendieran
que alli estaba. Los cuales, en sintiéndolo, decian desde
dentro: “Quién esta alla afuera? Es por ventura algun
ladron que viene a hurtar 0 buscar carne a mi? Pues yo no
debo a nadie nada. ni convido huéspedes”. A que no
respondia el pretendiente sino que con silencio estaba
aguardando a que saliese la desposada, que no tardaba
mucho, con una totuma grande de chicha. Y llegando junto
aél. la probaba ella primero y dandoselaa él, bebia cuanta
podia, con que quedaba hecho el casamiento y le entrega-
ban la desposada; aunque ya sabian los padres y parientes
era trabajador y podia sustentarla’’®.
Notese en este caso la delicadeza del trato que los padres
de la muchacha daban al pretendiente rechazado al hacerle
saber su determinacion, no con razones y parlamentos.
siempre hirientes, sino devolviendole los presentes que
este les enviaba. La aceptacion de los presentes. en cambio,
le indicaba que sus pretensiones eran bien recibidas.
Como en casi todas las sociedades indigenas —y en
muchos pueblos europeos como losromanos, los germanos
y espafioles— el contrato matrimonial de los chibchas
Armando Svescin 131implicaba el pago de un precio 0 de una dote por la espo
esa dote significaba, entre otras cosas, el reconocimiento
de una especie de indemnizacién a la familia de la esposa
por la pérdida de los servicios de la hija que abandonabasu
hogar paterno y por la renuncia de su familia alos derechos
sobre los hijos del nuevo matrimonio. Pero es necesario
aclarar que el pago de esa dote o precio por la esposa no
significaba una situacién degradante paraesta, que conser-
vaba indemne su condicion de persona y de esposa. Antes
bien, la esposa adquiria derechos que hoy podrian califi-
carse de exorbitantes como era el de sefialar, a su muerte,
periodos obligatorios de castidad al marido:
‘Mas es para anotar una costumbre
que tienen cuando muere una sefiora
principal que la casa gobernaba,
Ves que puede mandar a su marido
que no tenga carnal ayuntamiento
dentro del término que le senala;
pero la ley limita que no pueda
pasar la castidad del afio quinto
v menos lo que quiere la difunta.
y asi, mediante ruegos y regalos,
buenas obras y buenos tratamientos
que el marido le pone por delante
haberle hecho desde que se casaron
aleanza de ella que le disminuya
todolo mds que puede del espacio
determinado para continencia’”
Asi mismo, eran las esposas las Unicas autorizadas a
castigar con su propia mano a los caciques cuando come-
tian algun delito, como lo relata el obispo Fernandez de
Piedrahita: “....y es digno de saber que los delitos de los
caciques los podian castigar las mujeres de los mismos
caciques delincuentes, porque decian los moscas que aque-
llos eran hombres como ellos, y que pues los vasallos por
132 I Derecho Chibcha
ANTAAAAAKTASAATSAserlos caciques sus sefioresno los podian castigar, erajusto
que para que las culpas no quedaren sin pena, se Ja diesen
sus mujeres, lo cual ellas hacian famosamene en las ocasio-
nes que les venian a las manos de ser jueces de los pobres
maridos. Pero no podia pasar esa pena de azotes, aunque el
delito fuese digno de muerte...”!2,
3.4.- La exogamia
Como ya se ha dicho, el tibyn o clan chibcha estaba
formado por un grupo mas o menos grande de familias
bioldgicas, ligadas entre si por vinculos consanguineos de
parentesco real o mitolégico,cuyos miembros se conside-
raban descendientes de un mismo antepasado comun, y por
lo tanto, hermanos entre si. Los matrimonios entre los
chibchas no podian realizarse entre personas pertenecien-
tes a un mismo sibyn. como lo observaron los cronistas de
Indias Femandez de Piedrahita quien anotaba que “con
hermanas, primas y sobrinas no se casaban”! 'y Jiménezde
Quesada quien advertia que “es prohibido el matrimonio
en el primer grado y en algunas partes del Nuevo Reino en
el segundo grado también”!?. Esta prohibicién de casarse
con hermanas, primas y sobrinas, significaba que no po-
dian hacerlo con personas pertenecientes al mismo tibyn o
familia ampliada, Por cuanto se consideraban hermanos
entre si, sino con personas de otro. esto es. que el matrimo-
nio de los chibchas era de cardcter exogamico. En la
observancia de esta prohibicién juridica los chibchas fue-
ron muy estrictos; en el caso de que alguien contrajera
matrimonioconotra persona perteneciente al mismo ¢ibyn,
se consideraba que incurria en el delito de incesto, castiga-
do con severas penas.
Armanao SuescunEl amaifio
Era de usanza entre los chibchas que el hombre. jovenentre
dieciocho y veinte afios, hiciera vida en comin por varios
meses con una joven de quince afios, previa licencia de los
padres, con la obligacion de mantenerla y vestirla: si al
cabo de este tiempo le satisfacia para esposa, se casabacon
ella; si no la encontrabaa su gusto y ella no habia quedado
embarazada, pues en tal caso era obligatorio el matrimo-
nio, la devolviaa sus padres, dejandole la ropa que le habia
regalado'>. Esta sabia institucion pre-matrimonial llamada
amafio, existié no sdlo en la sociedad chibcha sino en casi
todas las culturas andinas de América; entre los incas se
denomin6 “pantafiaco” en algunas provincias y en otras
“tincunacuspa”.
3.6.- El sororado
Aunque los chibchas fueron muy estrictos en hacer cum-
plir la prohibicion de contraer matrimonio entre parientes
consanguineos, entre los cuales se encontraban no sola-
mente los padres, hijos. hermanos, tios. primos, etc.. sino
también todas las personas pertenecientes al mismo tibyn.
no lo fuergn en cambio. para permitir el matrimonio de un
hombre con varias hermanas entre sipertenecientes a otro
tibyn. Fernandez de Piedrahita afirma que “en el parentes-
co de afinidad eran tan poco atentos que no reparaban en
apetecer y tener muchas hermanas”. (...) “Aum en los
tiempos presentes, agrega el cronista, hacen poco escriipu-
lo de juntarse con sus cufiadas, con harta lastima del poco
remedio que en efecto hay y del mucho dafio que se sigue
para sus almas’’'*_
134 1 Derecho Chibcha
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=3.7.- La poligamia
EI matrimonio de un hombre con varias o muchas mujeres
no era un fenédmeno generalizado pero si se presentaba
entre los altos dignatarios y con menor frecuencia entre
personas de mediano rango social. Los zaques, zipas y
uzaques, por lo general, tenfan varias mujeres y disfruta-
ban de un privilegio especial paralaescogenciade esposas.
“Cuando el cacique sabia de algunas doncellas de buen
parecer, las pedia a sus padres, que sin condicion se las
traian a su casa, donde andaban desnudas hasta que dormia
con ellas, porque después se vestian el traje de las demas
que tenia. de las cuales siempre era una la mas Principal y
estimada del cacique” '%; segtin los cronistas, el zipa de
Bacata tenia 20 o 30 esposas, Hamadas riguyes.
Las actus de las visitas realizadas por funcionarios
espafoles alas tribus del altiplano, pocos afios des-
pués de la conquista, dan cuenta de casos de indigenas
particulares casados con dos, tres 0 mas esposas, con
todas las cuales convivian armoniosamente; sin em-
bargo, aunque las esposas contribuian eficazmente en
las labores productivas de la unidad familiar y no
representaban una carga econdmica, no todos se
podian dar el lujo de tener una esposa de mas. En la
practica, la poligamia era una institucion reservada a.
los altos dignatarios del Estado 0 a los stibditos mas
pudientes. Por lo general, los matrimonios poligémicos
vivian en casas separadas pero cercanas, se ayudaban
mutuamente y convivian en paz: el marido estaba
obligado a convivir con cada una de sus esposas por
fo menos un dia de lasemanayarealizar durante él los
trabajos necesarios para el sostenimiento de ese ho-
gar:
Armando Suescin 135En los casos de matrimonios plu amicos, la
primera esposa era la principal y la que ejercia preeminen-
cia en las relaciones sociales y en la administracién fami-
liar; las esposas subsiguientes. para serlo. debian contar
con su aquiescencia previa, lo cual no siempre era dificil,
porque ellas representaban una eficaz ayuda en las labores
productivas y domésticas de la unidad familiar. El proble-
ma era mas bien para el marido porque si las diferentes
esposas no congeniaban entre si, tenia que enfrentar algo
asi como una guerra familiar, y si congeniaban. tenia que
habérselas con una oposicion femenina organizada.
3.8.- El divorcio
Aunque los cronistas se cuidaron de hablar sobre el tema
del divorcio entre los chibchas, por ser una institucién
anatematizada por lareligiéncatolica y no dejaronninguna
referencia al respecto, es evidente que el caracter contrac-
tual del matrimonio implicaba la existencia del divorcio.
que no era cosa distinta que su rescision o anulacién: el
incumplimiento de los términos del contrato matrimonial
por cualquiera de las partes anulaba el contrato. Cuando los
conyuges no podian convivir armoniosa y satisfactoria-
mente, sino que su vida en comun se convertia en una
especie de guerra privada, el divorcio era el procedimiento
por el cual podian terminar el contrato matrimonial y
quedar libres para buscar una nueva oportunidad.
4.- LOS ESTAMENTOS SOCIALES
La sociedad chibcha era igualitaria pero no homogénea.
Existian grupos o estamentos sociales diferenciados y
136 I Derecho Chibcha
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