UMBRAL . Revista de Educacién, Cultura y Snciedad
FACHSE (UNPRG) Lambayeque. Afio TV N° 7 diciembre 2004 pp 122-126
Maria Rosa Sandéval y/o Maria Bashkirtseff
WB Teodoro Rivero-Ayllén
Trujillo
De “Mi Ananké y dos Diarios intimos”
el nuevo libro de Rivero-Ayllén
‘Nos es grato anunciarla proxima, inminente publicaci6n del libro Mi Ananké y dos
Diarios intimos, en que Teodoro Rivero-Ayilén recoge dos diarios del poeta Francisco
Xandéval, su maestro, y las paginas olvidadas de un tetcero correspondiente a Maria
Rosa Sandéval, hetmana de aquél, y conocida por su vinculacién sentimental con el
poeta César Vallejo.
Xandéval dejé inéditos a su muerte -ocurrida en Trujillo e1 26 de noviembre del 1960-,
dos diarios. Databa el uno -Mi Ananké (Mi destino)- del afio 1925 y fue escrito en
Chimbote. El otro, de 1946, escrito en Trujillo.
Como una primicia, el autor -distinguido colaborador de UMBRAL-, nos permite hoy
difandi las paginas de Maria Rosa, asi como la nota introductoria que Rivero-Ayllén le
‘consagra en su libro “Mi Ananké y Dos Diatios intimos”, proximo a sali publicado por
Impresiones Peruanas de Trujillo, que dirige Martin Neyra Orbegoso.
NER.
AU
NANKELos amigos del grupo la Hamaban Maria
Bashkirtseff. Como la célebre rasa (1860-1884), Ma-
tia Rosa Sand6val,laamada de Vallejo, levaba igual-
mente un Diario Intino de su vida.
Pero hay algo ain més que identifica a estos dos
destinos, como si fuera una encarnacién de la tra
Maria Rosa Sandéval nace el 7 de noviembre de
1894, a 10 afios de la muerte de Matia Bashkittseff,
Ja rasa, nacida también en el mes de noviembre, el
1. Padecen ambas el sino de una vida dolorosa y
breve, y mueren una y otta victimas de la tisis
pulmonar. Y sorpresa: también a los 24 afios de
‘edad cada una.
Nacié Marfa Rosa, como su hermano el poeta
Francisco Xandéval,én Ascope.
Fue su padre, el capitin de Ejército don Alvaro
Gabino Sand6val (sic) y su madre, dona Manuela
Bustamante y Castafieda, «preceptora de instraccién
primava, aqural de Trjlloy vecina de esta ciudad
de Ascopen,
Francisco, el poeta, recordar al padre, y evocard
su propia infancia desvalida:
Mipeadrefue um soldado vaiente, Hho tres cru
es
de guerra por kazaiasen combats tremendes;
pero munié de oid, miréndonosentorno
sin pra en gut estar nuestro atl debe
sos
eee
Polo que recuerdo, don Francisco me confesé
que su padre era oriundo del Cusco y que se firma-
ba ast: Sandéval.
En cuanto a Maria Rosa, quienes la conocieron
descrfbenla como un serde excepcién. Bella de ros-
troy de cuerpo. Juan Espejo Asturtizaga dice que
‘eta cuna muchacha atractiva y de muchas simpatias.
Posecdora de un espiritu fino y cultivado. Amante
de lapoesia ycuriosaginteresada por toda clase de
actividades artisticas» :
Y afiade: De todas las chicas que interesaron a
‘Vallejo, durante su etapa de estudiante en Trujillo, Fae
éstala mis inteligente, la mis comprensiva de su ato
espitinas
"Tanto César Vallejo, como Matia Rosa, vivian en
el mismo bartio, el de Santa Ana. César, en el Hotel
del Arco; Marfa Rosa —ya huérfana de padte y ma-
dte-, frente a la soledosa plazuela de Santa Ana, en
casa que atin se conserva, en la esquina de Mariscal
de Orbegoso 195 y Zepita 513,
Paral verano de 1917—‘ltimo de su estanciaen
‘Trujllo-, Vallejo ha dejado de verla desde setiembre
del pasado afio, victima ya del irremediable mal que
laconsume,
‘Huérfano de amor, en visperas de su retorno a
Santiago, Vallejo esctibiri:
Verano, ya me voy. Y me dan pena
Jas manitassumisas de tus tars
Liegas devotament;ligas vg;
_yya no encontrards en moi alma a nad
Veranol Y pasanis por mis bakones
om gran rosario de amatistasy ors,
conan obispo triste que legara
de jos a buscar bendeir
Jos rotos aras desenos muertos novos.
‘Ya mo lores, Verano! En aguelsurco
Maria Rosa Sandéval y/o Marta Bashkirtseff.
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‘mere ma rsa que renace macho
tee
Muere Matia Rosa el 10 de febrero de 1918, en.
las serranias de Otuzco, adonde los familiares la han
conducido para que se restableciera dela tsis,y donde
tendri por leal compafiera de sus momentos ilti-
‘mos. la seftorita Maria Magdalena Villacorta, her-
‘mana del Dr. Manuel Antonio Villacorta Corcuera.
‘Yaido Vallejo a Lima ~desde fines de diciembre
del 17-4 po deja de inquire por ella, por wa pobre
Mario.
‘Cuando Federico Esquerre, contertalio del gru-
po, le escribe dindole la mala nueva de su deceso,
Vallejo pergefiara cl poema que tanto le ha celebra-
do Gonzalez Prada. Poema breve, dolorido y rebel-
de:
Dios mol Esty Uorando el ser que vito!
{iMe pesa haber tomédote tu pan!
Pero este pobre barra pensatvo
‘noes costa fermeentada emt co
{tno tenes Marias que evant
Este poemita, que con carta de respuesta recibe
Federico Esquerte, sera publicado en el primer ni-
mero dea Semana» (sibado 23 de marzo de 1918),
hebdomadario ditigido por Antenor Orrego, el fu
turo prologuista de Tri
Ya wo lores, Verano! En agnor
mnere un rosa que renace mucho.
LA MADRE
Trujillo (Pert), febrero 18 de 1915
10 te levarta, te meteria
en casa de mi madre!
(Cantar de los Cantares de Salomén)
He salido sola ala caida de este sol de febreso,
pasear por el Ovalo, Es la barriada extrema de la
ciudad donde comicnza el campo.
Me siento bajo los sauces, en la umbria de este
camino que mira hacia el poniente. En lo lejano,
surgen las torres de la iglesia del pueblo.
Hacia alld est Mansiche, con sus chozas pajizas,
sus huertas y sus argos tapiales. Hacia al vala huella,
emis pasos; por ella ambulaaiin mi alma de colegial,
en el camino innumerable del recuerdo, bajo los
mismos arboles que me vieron un dia, entonces de
quince afios, cuando tenia el pensamiento poblado
de encantadoras fantasias o cuando hendié mi
corazén el primer amor.
Entonces tenia yo el espittu henchido de javentad.
Era una nif. (Quién tornara, locuela, ala época de
las primeras caticias! Pero ya, es tarde para cl
recomienzo. Tarde —iquién lo ditial~ a los veintivin
Madre velaba entonces por mi alegeia, por mi
sustento, por mi pureza de muchacha pobre. Mi
hemano menor y yo éramos dos cosas alegres en la
casa.
“Madre era extraordinariamente buens, dolida y
mansa, Era mAs que las otras: Madre, hermana y
amiga, No era culta, pero en la frente llevaba el sello,
del espitiva. Era erguida y suftida, varonil y arrogante.
Para mi es su recuerdo algo as{ como una cancién
antigua que hemos ofdo siempre y nos endulza el
corazdn; una canciGn no aprendida jams y no sentida
desde siempre en el alma, dulce como el nombre de
| Virgen Maria; misica que nace en el fondo, se data
enlas venas, hinche las sienes y conducelos pasos de
sus hijos como enuna eterna y cariiosa vigilia,
‘Yo era no mis la sombra de mi madre, el eco, el
compas, el remedo.
‘Madre mientras cosfa, desanudaba mis conjeturas
como el hilo de una madeja. Madee era dulce; su.
nombre no lo he podido comprender en todo su
sentido sino cuando hubo muerto, Madre era santa,
santa, santa!
Para ti, madre, mis quetidas flores, las rosas de
mi jardin, Para ti cultivo el jazmin del patio. La
entedadera de la ventana ha crecido mucho y est
linda, Para ties la mata de violetas que sembré en
diciembre, en el aniversario de tu muerte. Cuando
después de misa, Frank, mi hermanito, me trajo tierra
fresca de la casa de Emilia*, me dijo: «Para mama,
hetmanita, zquieres>s y ahora ha verdecido y est
ena de cérdenas y humildes flores, como a ti te
sgustaban,
ara ti preparo el porvenir, Madee.
Por tiexcito a mi hermano en el sentido de las
buenas acciones, de la caridad y amor. Pero él es,
‘muy chico todavia y se distrae de tu recuerdo. Undia volvera lo ojos a ti, cuando ame o cuando sufra,
Y tomnari a ver que esta tu asiento vacio desde hace
tiempo. A su esposa, a sus hijos (sean benditos desde
ahora) consagrara seguramente lo que tu muerte
prematura no le permitié consagrara tu nombre.
Y siyo, jMadrel me prolongo en la vida y de mi
vientre surgen otras generaciones, he de Mevarles tu
recuerdo a lo largo del tiempo, de sangre a sangre,
hasta lenar el émbito, porque tu sombra augusta ha
domado hasta hoy toda la jerarquia de mis suefios!
Ts triunfas, madre! (Bendigo 2 Dios, en ti, por
todas las hijas y por todas las madres del mundo!
LA AMIGA
Febrero 20 de 1915,
~<¥ ye comenzaste el diario? me pregunté ayer
Lola Benites*, excitada cutiosamente por el deseo
de ver glosadas nuestras zonceras de muchachas,
~Si, pero... No es posible; me salen tonterias. No
sé escribir.
{Ti siempre con Jo mismo! Ya te lo han dicho
todos. Haz.
Jo, Maty..
~Escribitia, pero no tengo libertad. En casa todo
es burla, célera, bien lo sabes. Y como me conocen
susceptible... Tia Maria... Mita, yo no sé qué pensar,
parece mala, Ayer todos me miraron con ojos raros.
Me preguntaron: -»2Y qué escribes?». ~Mi diario—
contesté avergonzada.—Bah! Ociosidades, con diatios
no se manda ala plaza! Fue el brutal comentario. Ya
tives,
Pero debes sobreponerte. ;Cémo! gAsfes que
‘ti no haces valer tuindependencia?
~dlndependencia, Lola..2 Mira, ti ves las cosas
desde fuera, juzgas por lo exterior. Ah, Lolita, tivives
libre, muelle, cmoda. Conchita y ti, tén buenas,
dos hermanas modelo. La vida las ha dejado solas,
pero les ha dado felicidad,
~iOb, n0, Marial Desde cudndo se Hama al
fastiio felicidad?
—Conque te abutres? Bien. Se ve que la vida no
perdonaa nadie. Pero hasta t abutrimiento es grato.
Fastidio de felpa, entre cojines. Fastidio de llamar al
sitviente, de presionar un timbre...
—iNo exagetes, por Dios! -pide Lola, carifiosay
agitindose en la mecedora con eve tanto de
satisfaccin,
2s
Pero yo... Ah, casita, casital Las cosas clas, El
infiemo no esti en los circulos del Dante; esta en mi
casa, Este pan, casi de prestado, que se recibe de
quienes no nos aman... ¥ mis pobres hermanos! Si
no fuera porque la vide nos compensa en cierta
maneta... Bueno; he aqui la primera pagina de mi
Diatio, equieres?
—Listo! Qué lindo! ~salta Lol loca y contenta
Y leo, excitada y nerviosa, el apunte anterior.
Cuando termino, Lola tiene humedecidos sus
Vinguidos ojos negros. ;Pobre chica! Sus recuerdos
sehilvanan alos mios; tienen similitudes muestras vidas.
—iOh, qué bien, muy bonito! jY qué inteligente
eres! Ti eres buena, Manuf, jpero may buena! -Canta,
casi musical, mi amiga, lena de sinceridad, y luego
meabraza,
‘Yo, netviosisima le castigo la boca con un beso
violento,
EL AMOR
Febrero 24 de 1915
‘Tres horas antes del amanecer.
Frotate, feta ls piemas, como el viejo Sécrates,
porque te han quitado los grillos y ahora sientes el
placer del dolor, el dolor y el placer altemativamente.
gBn qué mundos vacilabas ahora? ,Dénde
‘conociste la direccién del suefio? gCuando variaste
los conceptos?
iFrétate, mésate las pieenas!
eNo es, pues, que cambian tragicamente los
aspectos en la hora terrible?
¢Badénde moran las esencias?
@No eta que estébamos en Ia sima del Tartaro y
ahora vamos tigiendo el carro de Eros?
Carmela cumple afios hoy. Vengo de verla.
El chal al cuelio, con el cansancio de la fiesta, he
soltado mi cabellera bajo la noche de verano, con
leve aire de felicidad. (Me acuerdo que «éb» se
complacta en verme asi, tendida, con cl eabello suctto,
teclinada en la hamaca, como me veo ahora en el
rapido parpadeo de este instante).
Seentroniza el recuerdo. Catmela y yo soliamos
((qué lejano, Dios mio, el pais de los suetios!) ir por
Jas tardes a Mansiche a recoger geranios. Madre
gustaba de los geranios encendidos y grandes para
Nuestra Sefiora del Carmen: pero nosotras nosprestabamos ala cita,
Ella y yo. jCarmela, mi querida Carmela!
[Nuestros novios de entonces eran dos mocetones
fuertes, de alegre porte y aire sencilloy basto. Amor
irreflexivo, apasionado y ciego de nuestros
candorosos quince aiios!
La vida gira, cambia; no somos las mismas. Se
complica el juego bajo nuevos aspectos,y,en la total
incertidumbte de nuestra cuit, somos asinsatisfechas
perennes, las rosas abatidas de la tristeza que no
hallaremos sianca nuestro porque.
‘Heahi que hoy veo la vida esencial y pura, penetro
el sentido obscuro de las cosas (a mi modo de ver),
yen el mis intimo silencio, constato que la emociéa,
de entonces ya no responde a la emocién actual.
Aquel hombre, el minuto distante, la dicha transetinte
de aquellos dias, ya no son, ya no sern jamais,
‘Y me pierdo en el mundo ambiguo, lejano y vago
dela incertidumbre.
@Volveremos a amar, amiga mia?
Porque mis suefios no son, ahora, sino fruto de
‘una terrible reflexion,
ero, com todo, wn dia voleré a ser la de
antes
No hepertido la gracia, no be perdido el
camer.
Soy la dia del mando de las dilos
distantes.
Y¥ mi euerpo es el témolo de la orquesta
mayer
MICUERPO
_ Marzo 15 de 1915
Hoy me ha sorprendido verme desnuda, de
‘cuerpo entero, en elespejo.
He visto mis hombros; mis brazos firmes ylargos,
is dos senos. He mirado con atencién mis muslos,
fuselados y fuertes; el dingulo, en fino dombo, de las
caderas; el sexo, mis pies pequeios y giles.
En tanto, xepaso el aire de mi frente, antigua y
‘mada, vista todos los dias. Noto la expresi6n de mis
ojos, son negros. Observo el cerco umbrio de las.
pestaiias de donde pende el suefio.
Bien; no soy hermosa, ya lo sabia.
Ahora me detengo en las manos, Las mito: Estas
son, pues mis manos, las mismas; las conozco de
siempre. Las muevo y hablan; cogen, aprehenden,
viven,
éMis manos? ;Qué raro! Son distintas, son otra
cosa. Ahora miro con extratieza, y el concepto, el
hilo, la forma se evaporan, ¢Mis manos? Veo
filamentos, hebras, aragias. Manos .. signos... manos.
manos... signos... arafias... manos... La palabra ha
perdido el sentido, Siento un leve desmayo. Sélo veo
mi cuerpo, largo, en el espejo, como si fuera una
persona distinta.
‘Me rubotizo y paso tipidamente a vestirme. (Qué
tontal
0
Pero, con todo, hoy he sentido un terror extrafio:
‘no quertia morir. Mi cuerpo es joven y desea nutrtse.
Yo amo. Yoamaba. Yo amaria. Conjugacién del
verbo: jamébamos, amabamos, amabamos!
Me siento tranquila. Pero mi cuerpo cederi
mafiana, bajo los afios.
Quedarin los rosales. En el jardin, las rosas
volverin a brotar. Habri otros nifios y otros amantes,
El dia, el sol, el aire; todo estari lo mismo, Peto mi
cuerpo cederi con los afios
Conjugacién: pretérito del verbo: amaba, te
amaba, me amabas... Peto ya sett tarde, cuando el
tiempo, el cuerpo, el suefio ylos rosales se destifian.
overt.
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