primers edicién en expanol, 1977, DB siglo xxi de espana editores, ddecamoterceraedilon en espaol, 1999 Siglo xsieditoren 1 dee {yn 68.95.0291.8 (obs completa) ‘Sha 868.28-0788-x eohomen ) Béeditione galinard ‘Salo original futoe del philophie 2 “Eeoyepéde dela plade Derechos reservados canforme aa ley Ipresoy hecho en tadxicofprintd snd made in mexico ee ee HISTORIA DE. LA. FILOSOFIA = 5 Siglo-veintiuno Volumen 7 LA FILOSOFIA ALEMANA, DE LEIBNIZ A HEGEL Bajo la direccién de Yvon Belaval PABLO F. 01 LEOA. Hrtos Georg Wilhelm Friedrich Hegel nacié en Stuttgart €1 27 de agosto de 1770. Su padre, que pertenecia a la equefia burguesfa suaba, era funcionario de Hacienda, Hizo estudios eclesiésticor en el Stift de Tubinga (1788- 1793): dos afios de filosoffa, que incluian hebreo, mate- maticas y fisica, y tres afios de teologia. Més tarde, el 24 de diciembre de 1794, eseribird a Schelling: «Mien- tras alguien como Reinhold o Fichte no ocupe la cite dea de Tubinga, no se obtendré allf ningsin resultado po- sitive. En ninguna parte hay tanta fidelidad al viejo De 1793 a 1796 es preceptor en Berne, donde redacta unas notas sobre problemas religiosos que fueron publi- ceadas en 1907 por H. Nohl bajo el titulo Escritos teolé: agicos juveniles de Hegel (Hegels theologische Jungschrif fen), y entre los cuales se cuenta una Vide de fests. Desde 1797 hasta 1800 es preceptor en Frankfort. Fueron afios penotos en lor que se sintié deprimido. Continud escribiendo sobre cuestiones religiosss y poll ticas, como, por ejemplo, El expiritu del cristianismo 9 su destino’ (Der Geist’ des Christentums und sein Schicksal) En Jena (1801-1807) es Privatdozent y después pro- fesor. Escribe, entre 1801 y 1802, La Constitucidn del Imperio alemin (Die Verfassung des deutschen Reichs, publicada por G, Mollat en 1893). En 1801 publica la Diferencia entre los sistemas filosbficos de Fichte y Schelling (Differenz des Fichte'schen und Schelling schew 242 Systems der Philosophie). Del mismo afio es la Inaugu valdiszertation: Dissertatio philosophica de orbitis pla- tuetarum con doce Disputationssdtze. ‘En 1802 colabora con Schelling en el Kritisches. Jour nal der Philosophie, y en él publica: Sobre la naturaleza de Ia critica filoséfica (Ober das Wesen der pbilosopbis- chen Kritik), Como entiende la filosofia el entendi- ‘miento bumano vulgar (Wie der gemeine Menschenver- stand die Philosophie nebme), Relacién del eseepticismo ‘con la filbsofia (Verbaliniss des Skepticismus zur Philos bie), Creer » saber 0 la filosofia reflexive de la subje- tividad (Glauben und Wissen, oder die Reflexionsphi- losopbie der Subjectivitat), Sobre las maneras cientificas de tratar el derecho natural (Ober die wissenschaftlichen Bebendlungearten des Naturrechis). El Sistema de la eti- cided (System der Sittlichheit) se publicd en 1893. Los ‘cursos de Jena se han publicado en Ia edicién Lasson. En 1807 aparece la Fenomenologia del espiritu (Pha- nomenologie des Geistes). Después de la batalla de Jena, Hegel fue tedactorjefe de ls Bamberger Zeitung de Bamberg y, més tarde, de 1808 a 1816, directér del gim- nasio y profesor de filosofia en Nuremberg. A esta épo- cea pertenecen Ia Propedéutica filoséjica (Philosopbische Propadeutik) y diversos cursos, informes y conferencias EI 16 de septiembre de 1811’ contrae matrimonio con Maria von Tucher. Entre 1812 y 1816 aparece lo que ssucle Hamarse la «Gran Légicaw: Ciencia de la Logica (Wissenschaft der Logik). De 1816 2 1818 fue profesor en Heidelberg. Por en- tonces, en 1817, publics por primera vez la Enciclopedia de ciencias filosificas (Enzyklopadie der philosopbischen Wissenschaften). También en 1817 aparecieron las Dis cusiones en la reunién de lor estedos del reino de Watt temberg en los aitos 1815 9 1816 (Verbandlugen in der Versammlung der Landstande des Kinigreichs Witter berg in Jabre 1813 und 1816). 243En 1818 fue nombrado profesor de filosofia en la Universidad de Berlin y rector de la misma Universidad durante los afios 1829 y 1830. El 22 de octubre de 1818 pronuncié un importante Discurso inaugural. En 1821 faparecen las Lineas fundamentales de la filosofia del derecho (Grundlinien der Philosophie des Rechts). En 1822 prologa un libro de Hinrichs sobre la. re ligidn y la ciencia, en donde se opone a Schleiermacher Entre 1827 y 1831 aparecen numerosas recensiones en los Jabrbiicher fiir wissenschaftliche Kritik y cuatro grandes articulos entre los que se encuentra el ttulado , por una intuicién mistica. Hace falta un mécodo riguroso, scientificor, como el de Kant y Fichte. La equivocacin de éstos ha’sido la de no levar ef método hasta el final, la de no sobrepasar la finitad, la oposicién entre el yo 248 y el noyo. «En cuanta a mf, me he propuesta clevar Ia Filosofia al nivel de la ciencia. Este es el vnioo objetivo de_mis trabajos, que, en parte, son imperfectos y, en parte, incompletos» (Hegel a Duboc, 30 de julio de 1822) El problema del sentido de Ia historia har reflexionar igualmente a Hegel. Este problema fue objeto de una consideraci6n més explicita al final del siglo xvin. Se dlistinguen las etapas de Ia educacién del hombre: in- Fancia, adolescencia y edad madura de la humanidad. Ast, segiin Lessing, el Antiguo Testamento corresponde a It ceducacién del nifio a través de recompensas y castigos. Luego el nifio es enviado 2 un medio més instruido: es la cautividad de Babilonia. Cristo aparece como un pe dagogo superior. Finalmente, el hombre eleanza su me. urez y, en adelante, haré el bien por sf mismo y no por tuna recompensa. Kant, en 1784, ve en la historia el desarrollo de las facultades del hombre, de sv persons: Jidad moral, desarrollo que culmina en el Estado. Cree que el antagonismo social, al igual que la narursleza, constituyen el medio de este desarrollo. Schiter, cuyas Cartas robre la educacién estética del hombre (Briefe liber die arthetische Erziehung des Menschen) apasecen en 1795, prolongs, a la vez, a Herder y Rousseau y sub- raya en lz historia el papel educador de la separacién y del desgarramiento. El estado primitivo del hombre era cl de Ia inoceneia, del instinto y de la unidad simple. El desarrollo cultural engendra inmediatamente un es tado contra la naturaleza. La culture perturba Ia ingcen cia primera. Pero esta oposiciSn se supera en el estado final, en el que el hombre cultivado encuentra Ia con- iencia plena de s{ mismo. Igualmente, desde el punto de vista de la conciencia religiosa, le Redencién repara Ie caida ode ello va bosquejando le concepcién wdialécticar de Is historia en Hegel y también la recapitulacin por el individuo de Ins etapas etenciales del devenir histérico 247de Ia humanidad. Para Hegel este desarrollo histérico de la religién va desde Ja religién griega, a través del judafsmo (méximo de oposicién), hasta el cristianismo, la religién «absolutas. En este desarrollo insertaré las religiones orientales, cuando las conozea mejor. Pero este desarrollo englobar4 también progresivamente toda la historia politica, social, econémica y artistica El amétodon dialéctico Comprender la realidad consiste en extraer Ia inteli gibilidad que contiene y en no aplicarle un métode inventado @ priori, Asi, no hay un emétodo» hegeliano ai una filosofia hegeliana, como tampoco una «moral» hhegeliana o una «politica» hegeliane. Hay «la» filosofia ‘que se ha desarrollado en la historia y que Hegel quiere simplemente: comprender. Hegel quiete comprender lo gue es, desentranar su sentido y su direccién. Y si juzga To que existe, lo hard desde dentro, en viewad del sentido que descubre en cello, Ia realisacién concreta e integral de la personalidad, Hegel, como Arist6teles, comprendié {que el movimiento es el alma de las cosas porque en 0: das partes existe una tendencia, un conflicto a resolver, tunas negaciones que superar. En este sentido, lo que suele lamatse método dialéctico no es otra cosa que el movimiento intrinseco de la sealidad y de lo que se trata es de captarlo conceptualmente. "Tampoco puede ser la dialéctica hegeliana un método para prever el futuro, para «deducirlo», porque la reali dad se inventa sin cesar. Por lo tanto, no se puede comprender la realidad més que una vez acsecidos los hhechos; s6lo eabe anslizar las sintesis que se operan en al devenir histérico, Retrospectivamente, se comprende ‘que clertas siuaciones histérieas implicaban conflictos y ‘contradicciones y cémo han sido éstas resueltas por nue+ ves situaciones. La filosofia es la historia comprendida, 248 pero evidentemente se trata de In historia pesada. El Buh de Minerva emprende sy wuclo sl al aardcer, ‘no mega en modo alguno el principio formal de contradiccitin, pero piensa que no existen oposiciones absolutas. Toda’ oposicién es, en efecto, wna relecisn ¥ suporie una cierta unided entre los opuestos. ‘Toda cosa finita es una «diferencia» (ein Unterscbied). Excluye a otra y, por consiguiente, debe incluisla de el guna manera pata poder oponerse a ella. Incluye ideal mente lo que excluye realmente, Lo singular es un uni versal paticularizado, Po i ens ln ms oto Sg eee arc gre oe eee i Say ates mee ep aceis inte ek Seen t oe Sika tena a aces win sve a cea een, bee Eeocad ge ahen te a ne Exc fava taters oat 4e donde reali, Lo cals una tastologn porque de oie sods op ma eon e os att Pe ee So ees ee Shh pes Sariee ae Ghai Sane: etc ae LheS wa SPanee mere Derr Aree t rvs poe ee tee Boat eee ers El momento esencial es la «conciliacida», sintesis de los opuestos. Es la unidad que subyace « la oposiciSn y Ia permite. En un sentido religioso, se muere para vie vig; Cristo se aniquila para resucitar’y reconciliar « los epuestos Hegel expresa a menudo Ja conciliacién por el téemi no Aufbebung, qe, an vex, es supresion y conserve 249Aatuben dar Artebohnt (deta) x uno ds ome cee ‘mis Unportantee ‘de la filosofia, una determinacién funda- Se ee ee eit alice Specimen Si ee ee : PPLE TPN Se rica dagieliee ea ee sh Vem a, “lion Ee Br ee ee emt, ear ay Ee emo, ‘Gene Todavia en Hf la deverminucléa de donde procede. Aufbeben ee ae cotide denice tate, ome Se ee ee eae, Wat iano taco te ees oe ne Tac eaten ae ae re tae ys ee Sateen eee i ean ine tall ee ar rin es ee eee ape reat ae Sach FE principio fundamental ex que In parte (ser © con- cxpto} no manifir wu verdad tas que en el todo por tila cxipido y debe renunclar a plantearse isladamente Ei etuciodo dalécticor ae identifi con su contenido Es uo erfor consideralo separadamente 9 creer que es Slompre el mismo y generals, por ejemplo, la oposicion nue el scr y noser con que da comienzo la Lope Rese ce cortelcin, determina ¢Inlio"n0 sem fone neccsariamente ares ténminos. Ex tanto mis Fico FTeomplejo cuanto mie or clevamos en la jeracgula de Io cet n todo avo quiere reproduce al movimiento trismo de ln realidad sin imponer eategorias exteinsecas, fu gue esto seria precisamente cl formalismo combatido Dor'Hegel A. pestr de tna leyenda bastante eatendidn, oc se encuent, por cjemplo, en ln Miseria de le fi Iiofia, de Tea Mare, le trada terieanetenosineess no ts al mnétodo egeliano : Fre gut algunos, términos que expresan_frecuente monte of movimiento dialactico, La sunidad diséctica» frame vole la selacion de lo particular con la tral Ghd Ts la buena infinitad opera a la mala (indefinido Spclal © temporal incapar de consumers). Ast, lo b> Stlato, cn el buen sentido, ex To que etd totalmente 250 determinado desde dentro y no desde fuera; es lo que ‘no tiene que pasar a otra cosa, Es lo incondicionsdo, lo. libre (lo. que se-determina por si mismo y sno desde fuera). Es Ia buena unidad por oposicidn a la mala (uni dad sislada, inmediata 0 coordinacién puremente exte. riot). Es It universalidad en el buen sentido, la viva uunidad de sus momentos, por oposicién a la mela uni. versalidad, universalidad vacia y formal. Es el universal concreto que contiene a los inferiores en los que se realiza, Es el concepto unide a Ia intuicién por medio de una unidad viva y concrets, Es la idea que se en. cearna en el fendmeno y cuya inteligibilidad constituye, Es la verdad de Io que ha sido superado, La «unidad abstractay y, por consiguiente, mala, es Is pura inferiorided privada de su manifestacién exte. rior o la pura exterioridad, Es el puto deber ser, Soller, ‘que exige la conciliacién, sin lograrla jamés, Es cl ab. soluto sin el movimiento que produce su reflexion; es Ie inmediatez, Ia indiferencia, La «totalizacién» de lo abstracto se expres por me- dio de los términos de construccisn, deduccién, realiza. cia de Lo ideal, reflexién (en el buen sentido), esto es, retorno hacia sf mismo después de haberse reflejado co. su opuesto, reconciliacién, justificacién, mediacidn, teo- dicea, Bildung (cultura, tétmino de Herder) ‘Ax sich, fur sich, an und fir sich, son expresiones de Is dialéctica, pero no son algo privilegiado, sino que su sentido cambia. Muchos se han equivocado viendo en ellas unas formas sfgidas, ‘An sich y fiir sich equivelen a veces explicitamente @ la oposicién aristorélica entre potencia y acto: disposi cle, capaci, set en germen opucsts Ia atatdad in sich tiene casi siempre un sentido peyorativo: 10 abstracto, lo inmediato, lo finito. Pur sich, © incluso an und fiir sich, tienen a veces este mal sentido: aisle. miento, egofsmo, separscién del esi sustancial. Far uns es'la actualidad que nosotros (el fildsofo) pereibi 251‘mos, pero que, en Ia cos misma, existe sélo en potencia fo no e percibida. Par sich, en el buen sentido, designa el ser que, en tun primer momento, ha salido de si, que se ha negedo, ‘que ha pasado al ser fir anderes (para el otro) y que des pués vuelve a si y nicga la negacién de si, En este Sentido es sindnima de reflektiert fir sich selbst. Puede esignar al ser consciente de sf, pero también a momen- Bastante tardiamente Hegel emplea esta tsiada para designar tres estados del ser espiritual. En primer lugar, fan sich, el individuo que es todavia naturaleza, inmedia fez, sin conciencia de si. En segundo lugar, fiir sich felacién con otro, diferencia, En tercer lugar, an und far Sich: sintesis de los dos primeros, unidad de una dife rencia Nétese que el segundo y el rercero tienden a Confundirse en virtad de la positivided de la negatividad, Entendimiento 9 raxén En Kant el entendimiento (Verstand) conse lo dado subaumicnds las intlcones ‘enaibles en las eategorias J constnayends ast la experiencia. La razén (Vermanf®) LW faeulted de lo incondicionado y, gracias In ideas, hifles el conccimiento empirco sin scr ela misma co TEI eneendimiento es pata Hegel el pensamiento ito. sEl pensamiento, como intelecto, se cette eterminacion rigida y la eferencia de ésta con otras; tH producto.abstracto y Hnntado vale para el inceleeto Sou existentey subsistente por sl» (Enellopedia, § 80) SS Feld dl unter siento, Dea nen os foches Ue sigides y exttcher que se suelcn lanzar TEHlwofia, Pero el enicndimiento, sin embargo, es in Tispensables tance en ln vida prética como en el con Gecaro, hace fait precision. «A la flosofie corespon 252 de ante todo ave cada penmminto sen capi en entera precisién y no dsjar nada cn ln vaguedad en Ja indeterminacién.» oa. a razdn dialéctica © negativa ex el momento dialée- tico: «El momento dialécico es el suprimirse. por af Imismas (sich aufbeben] dichas _determinaciones fink tas y se paso alae opuestas.» El envendimiento cee aque Ia dialéctica acaba en el eicepticismo. Pero. «todo {init tiene esta propiedad, que te suprime a sf mismo. La dialectca forma, pues, el lina mote del progreso iemifico, y es el prinelpio snico por el cual solameme ia conexién ‘inmanente yl. necesided entran en el contenido de la ciencia: asf como en ella, sobre todo, ee Th ender, 90 ction leva cob fo nitoe. Abt resiia a verdad del escepticiumo. antigua, que no era una simple docirina dela dude, sino ‘que fenia ‘una perfecta certeea sobre lo que tataba, esto en, de la nada de todo lo finito. No hay que confundis con el esceptcismo moderno que se afeta a lo inmediato y renuncia a la verdad suprasensible. ‘Negando asf lo finito, el espisee manifesta su libertad La razin especulativa o positive: «Lo. expeculativo consiste en captar los opucstos en su unided 0 lo po sitivo en lo. negativo» (Ciencia de le Légiee). Lo. que «propio del entendimiento permanece en los concepton tn la medica en que éstor quedan fijos en sus determi faciones y en su dstineion secjproca. Le dialéctica muca. tra eémo los conceptor salen de vi mismos y se resucl ven. Lo especulaivo 0 racional capta su unidad en au misma opesicin o lo que hay de pesitivo en esta te. Solin y salida de at mismos El’ pensamiento.especulative ex conereto, «La filo. sofia no tiene nada que hacer con meray abserwcciones © con pensamicitos formales, sino s6lo con penvamicn. tos conereton.» El hombre inculto no capta més que un aspecto de las cones. El amo grovero que trate a st 253criado como si no fuera més que un criado, se queda ‘en lo abstracto, en un predicado universal. “ «Lo verdadero.es el todo.» La filosoffa especulativa de fluides y movimiento alo que esté fijo. «Lo verdadero cel torbellino béquico en el que no hay ningtin miem- bbro que no esté ebrio. ¥, como cualquiera de ellos, si se sepats, te disuelve inmediatamente, este torbellino es igualmente cl reposo transparente y simple.» Es, pues, cierto que hay que romper las paredes, que Is parte no’es teal més que en el todo, y lo finito, en lo infinite, Pero el movimiento inverso, el que va del todo fla parte, de lo infinite a lo finito, es igualmente ne- cesatio. Un todo sin partes, un infinito aislado de lo finito no estaria vivo. Los Ifmites que plantea el enten- dimiento tienen asf su 026n de ser. El entendimiento, fen el mal tentida de Ja palabra, es una facultad de Siseccién, mata la vidi al querer analizarla, es una forma apliceds a lo real desde fuera segin el forme: lismo de la Reflexionsphilosopbie. Es necesario unit ambos aspectos. {2Qué es la Reflexionsphilosophie? No es una filosotia reflexiva, sino una filosoffa de la subjetivided escindida, endurecida en sus productos e incapaz de volver # través de ellos a'si misma, a su unidad originaria. ‘Tegel, cansado del entusiasmo roméntico, critica las filosofias del saber inmediato que pretenden alcanzar el absoluto por una especie de intuicién mistica. Hegel pre: tende alcanzar la totalidad cientificamente. La ciencia es el movimiento de lo finito hacia Io infinito, del enten- Gimiento limitada hacia Ia razdn libre y total, de la Giferencia hacia la conciliacién, La reflexién (en el buen sentido) es el movimiento espiritual por el que el en- tendimiento, conducido por la razén, se supera a sf mis- mo. La reflexién puede llevar a cabo esta superacién porgue es un aspecto de In razén viviente y asf tiene Felacién con lo absolute. La razén es Ja fuerza interior ‘que permite al hombre superarse, desbordar wu ser It 254 mitado y unirse a las fuerzas activas del ser objetivo. El entendimiento empuja al hombre a conocer lo finito y-aquedarse en-él. Estas limitaciones, al mismo tiempo, son necesarias para el- proceso vital considerado en su. | conjunto y deben ser superadas por la razén en Ja me- dida en que la razén es el «si mismo» profundo de este | pensamiento. Todo pensamiento finito esté sbocado a la | contradiccién, pero, al experimentar la contradiceién, se manifiesta el ser profundo del entendimiento, La ne. gaciGn de sf de Io finito resulta asf un proceso cientifico de realizacién del todo. El todo es un set viviente que constituye Ia unidad de sus érganor, de sus momentos. El sujeto finito estd inserto en este devenir, EL espiritw El espfritu no et una cosa, un ser, una sustancia en cl sentido spinozista. El error fundamental de Spinoza —Hiegel lo repite a menudo— consistié en detenerse en la categoria de «sustancia» y no llegar a Ia de (que corresponde al entendimiento) del juicio, puesto que la ‘tctividad de lot términos del juicio no’ puede. ser uno de esos mismos términos. El taciocinio, asimismo, debe ser entendido «especu- lativamente» como el movimiento del universal que, de- terminado por una diferencia, se convierte de particular tn individual. Los diferentes modos de raciocinio corres- ponderén a los diferentes movimientos del pensamiento entre esos términos. . El concepto Hegel transformé el concepto al integrar en él la actividad espititual. Concepto (Begriff) viene a ser si ‘nénimo de espiritu, de razén y de dialéctica. Ast resulta ue el concepto por exeelencia es el espiritu lo que es preciso entender no reduciendo la nocién de espfritu al Fentido stricto. dado usualmente al término concepto, ‘ino ensanchando el concepto @ las dimensiones del es pitiea I concepto, en la medida en que ba logredo.une existence que co de gaye libre, 20 e¢ orta coe més que el yo 0 la pure Shclencin de st. Cleremente yo tengo conceptos, 0 =) cO0- ‘Epucs determinedor; pero el yo es el puro coneepto misino gue, 259