Teli 4 0000 00177335 9 Nikolaus Pevsner Breve historia de la arquitectura europea Versién espaiola de: Maria Corniero Fernandez y Fabian Chueca Crespo Alianza Editorialan Vrchitecture Reservados todos los derechos. De conformidad con lo dispuesto en el articulo 534-bis del Cadigo Penal vigente, podrin ser castigados con penas de multa y privacién de libertad quienes reproduje- ren o plagiaten, en todo o en parte, una obra literaria, arvistica o clentilica fijada en cualquier tipo de soporte sin la preceptiva autorizacion. © Nikolaus Pevsner, 1943 © Ed. cast.; Alianza Editorial, S. A., Madrid, 1994 Calle Juan Ignacio Luca de Tena, 15; 28027 Madrid; tel€. 741 66 00 ISBN: 84-206-7 125.6 Depésito legal: M. 9.636-1994 Compuesto en: FER Fotocomposicién, S.A. Lenguas, 18; 28021 Madrid Impreso en Closas-Oreoyen, §. L. Poligono Igarsa Paracuellos de Jarama (Madrid) Printed in SpainIndice Prehis sqeeswscnnwsccawan seewses meen TETRA RE Kerem 11 Prefacio a la séptima edicion inglesa ........- 00. 02-0e0eee eee ee eee eees 13 Tntroduccién on evene cons ere concen nes 0610 80s bei bieleisia Seite sie e dsle's 08 15 1. Creptsculo y amanecer. Del siglo tv al siglo x . 19 2. Bl estilo rominico, ¢c. 1000-c. 1200 . 51 3. Los estilo gético primitivo y gético puro, « 81 4. El estilo gdtico tardio, c. 1250-c. 1500 115 5, Renacimiento y manierismo, ¢. 1420-c. 1600 .............-.--------- 153 6. El barroco en los paises catdlicos, ¢, 1600-c. 1760 . 60... eevee eee eee eee 205 7. Inglaterra y Francia del siglo xvi al siglo XVI .....-- ++. eeeee rere ones 247 8. Movimiento romantico, historicismo y comienzos del movimiento modemo. 1760-1914 2... .cceeee eee . 299 9. Arquitectura contemporain lidad 343 Epilogo americano . 371 BUliegedlla. sz aneeass sexes omeomneomeneerew seem romnawans 383 Fuentes de las ilustraciones 4... .0seeeeseeeueeeeueeeeneesseeesseetens 397 Glosario ...... cece cence ce eeeeeeeeeeeeeeeaeeceaeeeuneeeaneesaness 399 Indice analitico ......... Peete aura planar cece cece eee eeeeee ee -- 403Introduccion Una caseta para guardar bicicletas es un edificio; la catedral de Lincoln es una obra arquitectonica. Practicamente, cualquier cosa que circunde un espacio de escala suficien- te para que un ser humano se mueva cn ¢l cs un edificio, en tanto que el término arquitectura s6lo es aplicable a los edificios concebidos para agradar estéticamente. Tres son las vias por las que un edificio puede suscitar scnsaciones estéticas, En primer lugar, mediante el tratamiento de los muros, las proporciones de las ventanas, la relacién entre cl espacio de los muros y cl de las ventanas 0 entre las diversas plantas, y mediante la ornamentacién, como la traceria de las ventanas del siglo XIV o las guirnaldas de hojas y frutas de los pérticos de Wren. En segundo lugar, el tratamiento de conjunto del exte- rior del edificio posee un significado estético en virtud del contraste entre los cucrpos adyacentes, del efecto de una cubierta plana o inclinada o de una cupula, del ritmo de saledizos y recesos. En tercer lugar, también tiene efecto en nuestros sentidos cl trata- miento del interior, la secuencia de habitaciones, el ensanchamiento de una nave mayor enel crucere 0 e] movimiento majestuoso de una escalera barroca. Los efectos del primer tipo son bidimensionales; pertenecen al ambito pictérico. Los del segundo tipo son tridimensionales, ya que en csc plano el edificio se concibe como volumen, como unidad plistica, a la manera del escultor. Los del tercer tipo también son tridimensionales, con la pacticularidad de que, en este caso, el espacio es el elemento fundamental; éste es, mas que ningun otro, el campo de la arquitecrura en sentido estricto. Lo que distingue a la arquitectura de la pintura y de la escultura son sus cualidades espaciales. En este aspecto, y sdlo en él, ningun artista puede emular a un arquitecto. Asi pues, la historia de la arquitectura es fundamentalmente la historia del hombre que moldea el espacio, y el historiador que la investigue debe situar siempre los problemas espaciales en primer término. Esto explica por qué un libro de arquitectura sin ilustracio- nes de las plantas de los edificios, aun cuando alcance gran popularidad, scra irremedia- blemente un fracaso. La arquitcctura es basica, pero no exclusivamente, espacial. Al proyectar un edificio, el arquitecto no sdlo cierra un espacio, sino que también da forma a los voltimenes y16 Breve historia de la arquitectura europea proyecta las superficics, por ejemplo, al disefiar el exterior y disponer las paredes indivi- duales. Por ello, un buen arquitecto debe afiadir la vision del escultor y del pintor a su propia imaginacién espacial. La arquitectura, en consecuencia, es la mis global de las artes plisticas, y puede reivindicar st superioridad sobre las demés. La superioridad estética se ve completada, asiraismo, por la superioridad social. La escultura y la pintura, aunque fundadas sobre instintos creativos e imitativos elementales, no son una presencia tan constante como la arquitectura, ni influyen cn nosotros con tanta persistencia ni ubicuidad. Si lo deseamos, podemos eludir el contacto con lo que suele denominarse las Bellas Artes, pero no asf evizar los edificios y los efectos sutiles y penetrantes de su cardcter, grandioso o humilde, sencillo u ostentoso, auténtico 0 enga- fioso. Cabe concebir una época en la que no existiera la pintura, ciertamente indeseable para cualquiera que crea en la funcién vitalizadora del arte. Una época sin pintura sobre licnzo resulta atin mas ficil de imaginar e incluso d> desear si se piensa en el predominio alcanzado por esta clase de pintura en el siglo xIx. Una época sin arquitectura es y sera un imposible en tanto que el ser humano siga poblando la tierra, El hecho de que en el siglo XIX floreciera la pintura sobre licnzo en detrimento de la pintura mural y, en dltima instancia, de la arquitecrara, demuestra la decadencia en que habian caido las artes (y la civilizacién occidental). Y cl hecho de que hoy en dia las Bellas Artes parezcan estar recuperando su caricter arquitecténico nos permite albergar iertas esperanzas con respecto al futuro, Pues era la arquitectura la que dominaba cuan- do el arte griego y cl medicval se desarrollaron y alcanzaron sus cotas mais altas; Rafael y Miguel Angel atin pensaban en términos de equilibrio entre la arquitectura y la pintura. No asi Tiziano, ni Rembrandt, ni Velazquez. Con la pintura sobre lienzo pueden conse- guirsc grandes logros estéticos, pero son logros separados del mbito de la vida cotidiana. El arte del siglo xix y, atin més rotundamente, algunas tendencias artisticas recientes, han puesto al descubierto los peligros que entrafia la actitud de «asi es porque asi lo quiero» del pintor independiente y autosuficiente. La salvacién sélo puede provenir de la arquitectura, en su calidad de arte firmemente vinculado a las necesidades vitales, de uso inmediato y con fundamentos funcionales y estructurales Con esto no pretende decirse que la cvolucién arquitectnica esté movida por la funcionalidad y la construccién. Los estilos artisticos pertenecen al mundo intelectual y al material, Nuevos objetivos podrén dar lugar a nuevos modelos de construccién, pero la labor del arquitecto consiste en conseguir que esos modelos sean satisfactorios tanto desde el punto de vista estético como desde cl funcional; aunque ése sea el caso en nuestros tiempos, no en todas épocas se ha considerado la solidez funcional elemento indispensable del placer estético. Lo mismo puede decirse con respecto a los materiales, La aparicién de nuevos materiales hace posible, e incluso exige, el desarrollo de nuevas formas. Esto parece justificar la insistencia en resaltar su importancia en muchas obras arquitecténicas (sobre todo inglesas), Si en este libro se han relegado intencionadamente a un segundo plano, el motivo es que los materiales s6lo cobran efectividad desde cl punto de vista arquitecténico cuando cl arquitecto los dota de un significado estético. La arquitectura no es el producto de los materiales ni de los objetivos —ni tampoco, dicho sea de paso, de las condiciones sociales— sino del espiritu cambiante de la evolucion histérica, El espiritu de una época impregna la vida social, la religion, el saber y las artes, El estilo gotico no nacié como consecuencia de la irvencién de la boveda de cruceria; el movimiento moderno no adquirié entidad porque se hubieran inventado los armazonesIntroduccién 17 de acero ni la construccién de hormigén armado; ambos se crearon porque el nuevo espiritu imperante asi lo requeria Por estos motivos, en los proximos capitulos la historia de la arquitectura europea se tratard como una historia de la expresién, y fundamentalmente de la expresién espacial.