En 1857 ol inglés Richard B. Hughes adquirié
20.000 cuadras de campo entre los arroyos Negro
y Rabén alos sucesores de Juan De Almagro. Punto
estratégico y las mejores tierras de la zona, donde
establecié su estancia que denomind «La Paz»
(foto). Alli pastaron los primeros ejemplares de la
raza Durham que llegaron al pais desde Inglaterra
para mestizar ol ganado criollo,
El casco de la estancia data de 1863, mante-
niendo su estilo original hasta hoy. También posee
‘una capilla («del Buen Pastor») con vitrales del si-
gio XIK.
En la actualidad, parte de sus instalaciones son
ullizadas como «Hosteria-Estanciam.
66Los saladeros:
«mitad fabrica, mitad estancia»
El primer saladero habria sido «El Colla»,
de Francisco Medina, fundado en 1781
en el departamento de Colonia,
Sogtin el Ing. Agr. Juan Cabris: «en 1808
el espartol Bartolomé Ortiz, oriundo de
Santander, solicit al comandante de
Paysandti, Capittin Agustin de la Rosa, @
ceesién de ‘un terreno para formar matanzas
ysalazén de carnes' siéndole efectivamente
oforgada una ‘chacra en el rinedn que
forman el San Francisco con el Uruguay’
‘como dice un documento de la época.
‘Testimonio de los Hnos. Mulhall
‘Los periodistas ingleses M. G, y Eduardo
‘T Mulhall, redactores del «Standard» de
Buenos Aires, en 1876 recomendaban la
visita a «las ruinas del padre Solano,
que consistian en un saladero subterrdneo,
distante media legua de Paysandui, donde
se podian atin observar las piezas de su
maquinaria traidas de Inglaterra,
en cuya colocacion habia empleado
treinta operarios».
‘Tareas en ol Saladero
«Los animales pasaban de un corral grande
«@ otro chico de forma cireular el brete —
donde no caben mas de diez vacunos; un
peo parado en la plataforma que eireunda
Ia pared exterior del corral enlaza el
animal elegido y lo alza por medio de una
roldana; una vez sujeto, el desnucador, lo
‘mata de una cuchillada; ae la res sobre
una vagoneta que sale del brete por una
‘compuerta especial, y finaliza la matanza,
de gran celeridad, pues bastan pocas horas
para sacrificar mil y dos mil vaeunos.
Un vagén leva al animal muerto a ta
playa, lugar techado y de piso firme, donde
se hace el deguello y ia euereada. La earne
se troza en tiras largas de unos euatro
‘contimetros de espesor, que previo oreado de
hora y media van a depésitos de salmuera,
por breve tiempo. Después que escurrié el
exceso de liquid, se apilan las tiras sobre
de astas en camadas que llegan a cuatro
‘metros; entre camadas van eapas de sal
Cuarenta 0 cincuenta dias mas tarde esta
listo el tasajo, pero en el laps deben
deshacerse y volverse a armar las pilas,
luego de asoleadas unas diez veces».
Horacio C. E. Gibert!Piles de cuoros y varales en el saladero de Jalme Ciblls. Ox de ote Hoavet
ORIGEN
La salazon de carnes surge en la Banda Orien-
talen la segunda mitad del siglo XVI con el fin de
‘aprovechar la care que quedaba tirada en los
campos,
‘AI surgir los saladeros, la carne se preparaba
para exportar, en forma de tasajo, el cual consistia
en came salada, seca y magra. Los principales
consumidores eran los esclavos de Brasil y Cuba,
Cconstituyendo el asajo la base de su alimentacién.
Los principales saladeros estuvieron ubicados
sobre la Bahia de Montevideo y en el Litoral del fo
Uruguay, alos efectos de facilitar la eliminacion de
los desechos y a la vez de contar con una via para
la exportacion de sus productos. Esta relacién sa-
ladero-ro fue una solucion para abaratar el trans-
porte y mejorar la higiene del establecimiento.
LOS SALADEROS DE PAYSANDU
La actividad saladeril en Paysandii, se inicié al-
rededor de 1812\Los saladeros mas antiguos fue-
ron el de Bartolomé Ortiz, en el Rincon que forma
el arroyo San Francisco con el rlo Uruguay en 1808;
el de Juan de Almagro en Casa Blanca entre 1811
y 1812, considerado el primer saladero de Casa
Blanca: el del Padre Solano Garcia, alrededor de
os
El saladero «fue la unica industria
importante que tuvimos en el siglo XIX,
la tiniea fiabrica’: onvirtié la carne en
tasajo, salé el cuero, aprovech6 la grasa,
los huesos, la sangre, el estiéreal
Todo en medio de un primitivismo
teenolégico donde predominaba el
cuchillo y la destreza personal, y cuya
tunica excepeién eran los digeridores de
grasa accionados por mdquinas a vapor.
Fue por tanto, mitad fabrica y mitad
‘estancia, asi como sus trabajadores
‘mitad obreros y mitad peones.
Fue, finalmente la respuesta mas
nacional que el medio pudo ofrecer
‘al mereado exterior que requeria
‘nuestros productos»
José Pedro Barran y Benjamin Nahum.
1826, conocido como «Los Tapiales» ubicado en
las hoy calles Soriano y Zorrilla de San Martin, y el
de Pedro Larraud alrededor del afio 1829, ubicado
en la desembocadura del arroyo Sacra. Este sala-
dero tuvo un fin tragico, ya que fue arrasado por
tna creciente al igual que su propietario y muchos
de sus ayudantes.PERIODO FLORECIENTE
Lo vivieron los saladeros de Paysandii desde
1862 a 1913; no obstante tuvo periodos de altiba-
jos como consecuencia de las Guerras Civiles, asi
‘como de factores externos que afectaron la indus-
tria del tasajo.
Enire 1865 y 1875 se fundaron algunos de los
mas importantes saladeros de Paysandi. Ells fue-
ron: «Sacra», «Argenté» 0 «Quemado», «La Olla»
Guerrero», «Aguirre», «El Hervidero», «Guaviya,
«Nuevo Paysandu» y «Casa Blanca».
«Sacra»
Probablemente el primero de esta serie fue ol
«Sacra», propiedad del capitalista Vizconde de
Maud. Estaba situado en la deseibocadurd del
arroyo Sacra en el fo Uruguay, donde se destaca-
ba el largo muelle que partia desde el estableci-
miento y legaba hasta el canal del rio. Seguin Ba-
Trios Pintos, «se hallaba a unas 30 cuadras al cen-
to de la ciudad, al Sur Fabricaba lenguas, canes
conservadas, extracio, pero en 1895 habia cesa-
do sus faenas».
Seguin Setembrino Pereda, el saladero «Sacra»