Arcana imperii y democracia
Una batalla por la memoria publica
Camilo Vicente Ovalle
‘AL MARGEN DE LOS REFLECTORES ¥ AL FINAL DEL INDICE de
los grandes problemas nacionales, se desarrolla una pe-
quefia y silenciosa batalla: el acceso a los archivos hist6-
rioos contemporineos.
Desde la aprobaci6n de 1a Ley Federal de Archivos
(Lea) en 2012, que introdujo al Iécico archivistico la abe-
rracién. conceptual “documento histérico confidencial’,
hasta las modificaciones al acceso y consulta del fondo
documental de fa Direccién Federal de Seguridad (oF),
resguardada en la Galeria 1 del Archivo General de la
Naci6n (AGN), Jas iniciativas gubernamentales sobre los
archivos que contienen Ia documentaci6n producto de la
actividad estatal contemporinea han estado dirigidas a li-
mitar o cancelar el acceso.
El acceso a los archivos hist6ricos, como Io seniala la
historiadora Kirsten Weld en su libro sobre los archivos
de la dictadura guatemalteca, Paper Cadavers, guarda una
vinculacién directa con Ta calidad de la democracia de un
Estado; en tiltima instancia, dice, losdebates sobre el acceso
a los archivos son un debate sobre la naturaleza del Estado
autoritario y postautoritario.
{Qué nosdice sobre la naturaleza del Estado mexicano
una norma que determina que el acceso alos denominadosdocumentos “histérico confidenciales”sélo podra realizarse 30 0.70 afios despuésde
su creacién, como lo sefala el articulo 27 de laura?!
Aunque los directivos del aGw se han empefado, desde principios de 2015;.en
reducir el debate a cuestiones meramente técnicas, lo que se abre a discusién no son
asuntos meramente ténico-normativas, ni procedimientos de consulta, sino temas
de la calidad de la democracia que se quiere construir para México. Conservar la im-
punidad, mediante leyes y normas que restringen el acceso efectivo y de calidad a la
informacién publica gubernamental, ademés de minar las posibilidades de accién
democritica de los ciudadanos, es simple y sencillamente prolongar los mecanis-
mos de un régimen autoritario que, se supone, habia sido superado.
Los archivos de la represién
Por alguna razén, que no ha quedado clara, el fondo documental de la prs
fue el primero en ser sujeto a los criterios perversos del articulo 27 de la ura, impi-
diendo el acceso directo y efectivo ala informacién. Hasta 2014, 1 procedimiento
general de consulta del fondo decumental de la prs,administrado por personal del
‘c1sen, permitia la consulta directa de los documentos, incluso se podia hacer regis-
to fotogrifico: Asi fue como periodistas, investigadores, familiares de victimas de
Ia represi6n, o ciudadanos con el interés de saber y ejerciendo su derecho a la in-
formacién y la verdad, pudimos conocer la forma en que el Estado mexicano actud
frente a ladisidencia hasta la década de 1980.
2Qué resguardael archivo dela prs que resulté imperioso parael gobiemo fede-
ral imponer el criterio de los 30 070 afios para la consulta libre de su documentacién?
De acuerdo a las autoridades del aGN, en ese archive existe informacién per-
sonal cuya difusién pdblica puede afectar la esfera intima de los individuos a los
que se refiere. Efectivamente, en los documentos de la prs existe una gran can-
tidad de informacién personal de miles de ciudadanos mexicanos y extranjeros
"Ley Federal de Archivos: hitpe/ivwwsdiputados.gobms/LeyesBibia/pdPlic pd”
Es importante recordar que cl aGw cs la dependencia encargada de discitar la politica sobre archivos
a nivel nacional.
* Los archivos dela ors se abricron al publice por primera vez en 2002, una vez quc fueron entregados
por la Secretaria de Gobernacién al an, acatando un mandato presidencial emitido en 2001. La in-
formacion de este archivo va de 1947 a 1985,
‘Ege procedimiento se encuentra descrito en los “Lincamientos para Ia apertura de los archivos, ¢pe-
dientesc informacin que fueron transferidos al Archivo General de Ia Naciéin, en cumplimiento del
acuerdo por cl que se disponen diversas medidas para la procuracién de justicia por dclitos cometidos
‘contra personas vinculadas con movimientos sociales y politicos del pasado”. ft rudofgnh mayandex.
PhpZyear=2002crmonth=O6elay=18
10) | casadel tiempoque,sin conocimiento o por coercién, les fue arrancada esa informacién que aho-
ra dicen proteger.
En los documentos de la vrs se encuentra, entre otros tipos, informacién so-
bre personas que fueron detenidas,torturadasy desaparecidas por agentes el Estado.
‘mexicano durante la década de 1970. Informacién que por largos aos los familiares
de los detenidos desaparecidos han buscado y han exigido que se haga del conoct
miento publico.
Entonces, ¢s inevitable preguntarse: {la “esfera intima” de quién se protege? ZEl
nombre de un desaparecido es un dato sensible? :E1 nombre de un“desaparecedor”
es un dato sensible? gLa situacién en que una persona fue desaparecida es un dato.
sensible? 2Para quién y de qué manera es un riesgo conocer estos datos? Pareciera
que lo que no pudieron hacer los cuerpos operatives de la prs ahora quisieran com
dluirlo en los archivos.
No hay que perder de vista que la prs formaba parte de la estructura politi
co-militar cuyos objetivos estaban vinculados a la vigilancia,control y eliminacion de
aquellos considerados enemigos politicos, Ademds, esa estructura represiva también,
contribuyé a la manipulacién de la sociedad mediante la mentira o la distorsién de
Ios hechos, con el objetive de mantener a salvo el régimen autoritario y los privile
ios de su elite politica y econémica.
Lo que se resguarda en el archivo de la brs no son simplemente datos perso-
rales, En esencia, se resguarda una parte importante de la memoria institucional y
los arcana imperi, los secretas de Estado, del régimen autoritario. Veamos un frag:
mento de esa memoria.
De la lucha por la tierra en el municipio de Juchitén, Qaxaca, surgié un movi
miento popular con un gran impacto regional y nacional a mediados de la década
de 1970. Este movimiento, organizado en torno a la Coalicién Obrera Campesina
Estudiantil del Istmo (cocet), conquist6 el gobierno municipal en 1981, primer muni
cipio en el pafs que fue gobernado por Ia izquierda. No les fue perdonada tal osadia.
En el verano de 1983, ante las nuevas elecciones municipales, el pri local y es
tatal, las élites comerciales y terratenientes, arreciaron el acoso al ayuntamiento-
encaberado por la coce1. El gobierno federal valoré cuidadosamente las posibilida-
des para dar por terminado la experiencia del Ayuntamiento Popular, pues no lo-
habjan conseguido oon el estrangulamiento econémico ni-con el uso de grupos de
choque y paramilitares. En un documento elaborado por la prs, el 23 de octubre
de 1983, se presentaron las valoraciones para dar una solucién definitiva. La com
lusién fue el necesario desalojo del palacio municipal, desalojo que“inicamente
el Ejército puede hacer’, y el control de la poblacidn, Las recomendaciones finales
profanos y grafiteros | 1]del dacumento son una sfntesis de los procedimientos autoritarios del Estado mexi-
cano en esas décadas:
1, Estricto y controlado manejo de la prensa sobre los hechos del desalojo,
2. Cuidar completamente la imagen de los Gobiernos Federal y Estatal duran-
te los hechos, evitando actos de rapifia o de brutalidad durante el desalojo
y las aprehensiones.
3. Prepararun“paquete” con pistolas, escopetas, carabinas, cartuchos de dina-
ita, etc., que pueda ser necesario para justificar ante la opinién publica.
Se podria incluir propaganda subversiva de Centroamérica.
bel
4, Los servicios migratorios podrian detener un néimero considerable de ex
tranjeros indocumentados (en la localidad existen numerosas mujeres
centroamericanas que ejercen la prostitucién), sefiakindolos como prote-
gidos por el Ayuntamiento Popular?
La intervenci6n policiaco-militar tuvo lugar el 13 de diciembre de 1983. El resultado:
desconacimiento y desaparicién de poderes, entrada del ejércitoy desalojo del pala-
cio municipal, cientos de detenidos, la militarizacién de Juchitén y la persecucién y
detencién-desaparicién temporal de militantes de la Coce1 que se habian dirigido a
la Ciudad de México para protestar por el desalojo. Y, por supuesto, desacreditacién
puiblica mediante mentiras y distorsién de los hechos.
Las argucias de la transparencia
Las batallas por el acceso a la informacién pablica gubernamental vienen de
tiempo atras y han acompafiado las luchas contra el régimen. autoritario. La ulti-
ma de estas batallas comeng6 en 2015, cuando se pusieron en marcha restricciones
para la consulta de los archivos de la prs. A partir enero de 2015, el procedimiento
de consulta directa fue eliminado,y toda solicitud ahora se debe hacer mediante el
sistema Infomex, y es alli donde comienzan las argucias de la transparencia, Pues
ahora resulta mds cémode negar la existencia de informacién u ocultarla a grados
del absurdo.
xa, Fond prs, “Panorama dela situaci6n actual en Juchitn, Ox", 23 de octubre, 1983, expedien-
te 0204054 00.
2 | casadel tiempo|migenes de as pgnasy 13a marcadss cn os nimeros 297 y 298 petenecen 3
Informe det 2¢e noviembre ge 9rs aeerea de un tangrema envadoper friars
(Gedetanideecemparelea an Sinaia pendent a Repel
Sinaia. a pagina mareada cone! nlmere296 fete stuacin policaen Sra
bsarvan tad osname deo, ees pics
Vel pescanee dea alice. £| aumento localiza ena expagernsverscn
fe Afonso. late, qulen fue gohernadordeSinalez 19752198
e
E115 de abril de 2015, solicité al acw informacién sabre los reglamentos u otro
tipo de normas que regularon a la prs y la Direccién General de Investigaciones
Politicas y Sociales (oc1rs). A esta solicitud el AGN respondié que no localizé la in-
formacién, por lo que interpuse un recurso de revisién ante el Instituto Nacional
de Acceso a la Informaci6n (1x1), pues la dependencia est obligada a declarar si
existe 0 no existe la informacién, y en su caso explicar la inexistencia de ésta. El re
‘curso de revisién qued6 en manos de la avmisionada Ximena Puente de la Mora.
En su resolucién, que no puedo sino calificar de actitud ingenua por parte de la
Respuesta a I wolicitud de informacién com folio O49SOOODIS6LS, Todas ls solicitudesyy las respucs
tas de las dependencias (sujtos obligados) pueden consultarse de manera publica en el enlace hips:
ayer rgam/gobierfedera/modiloPubica fn odulePubicoaction. Solo se nesesita colocar cl
dela walicitua,comisionada y del propio 1xa1, confirmé la versiin del aGn, diciendo que, pese
haber manifestado en mi solicitud que la informacién se encuentra en los fondos
documentales de la prsy la pG1es, lo cierto es que en dicho fondo no se localizé
la. informacién requerida’, asi en negritas en el original?
zAcaso no existen reglamentos 0 normas internas de la DFS y DGIPS en los
fondos documentales que resguarda el AGN? Basta s6lo revisar el instrumento de
consulta del fondo documental de la pcirs, instrumento que ¢s puiblico, para darse
cuenta que alguien en el AGN o en el 1Na1 est mintiendo 0 no esti haciendo bien
su trabajo. Al menos hay dos normas internas localizadas en ese fondo: un Manual
‘de Organizaci6n de 1980 una Gufa del Investigador.
Nossuficiente con restringir el derechoa la informacién, ahora el iat también
ejerce la facultad de veto respectoa la libertad de investigacién.
E121 de abril de 2015, solicité informacién sobre el ex gobemador de Sinaloa
Alfonso G. Calderén (1974-1981). Coma respuesta, el AGN me entreg6 una versién,
publica en la que se testaron (tacharon en negro) nombres y cargos de funciona-
rios publicos, nombres de municipios, de ranchos, de empresarios, de representan-
tes de cleccién popular... hasta el absurdo: se testé el nombre del presidente de la
Reptiblica, Por ello, interpuse otro recurso de revisién.
De acuerdo con el articulo 30 de la regresiva Lea, hay algunas excepciones por
las cuales se podria conceder el acceso a documentos “hist6rico-confidenciales” (ha-
bria que insistir en el absurdo de esta clasificaci6n), entre ellas que la investigacién
‘o estudio para la cual se solicite informaci6n “se considere relevante para el pais”. El
comisionado Francisco Acuiia, quien fue el encargado de dar respuesta a mi recurso,
us6 este criterio para justificarla negativa de acceso a informacién: “Lo anterior, de-
bido a que el particular no acredité que requeria tener acceso a dicha informacién
para realizar una investigacién o estudio que se considere relevante para el pais...”
En efecto, no presenté ningtin elemento para demostrar la “relevancia’ de mi inves-
tigacién ante el iat, pero; épor qué habria de hacerlo ante ese Instituto?
Ante tal argumento, solicité al evar que me informara sobre los sriterios y
procedimientos con los que determina Ia “relevancia” para el pais de un estudio o
investigacién.? La respuesta concreta fixe que el sat: “no cuenta con un documen-
toespecifico que establezca los critetios y procedimientos por las que este Instituto
*Rewurse de revision contra el acn, expediente kms 2734/15. Tanto el recurso interpuesto como la r=
solucin emitida por el 1wa1, con todos los argumentos y referencias documentales, se pueden consul
tarendl siguiente enlace: ipionailas ai argmaSesimessp colocando el mimero de expediente: xo.
2736 La resolucion al recurso aoa 2736/15,
* Resolucion al recurso de revision 2oA 2624/15. La tesolucion s6lo me dio razon parcial, y ordem6 at
Ack que hiciera una tevisién piblica en la que‘no se tacharan nombres de Funcionariss, pero amiss
tempo insista en que no podia tenet acceso a las documentos *histGricos canfidencia les”
* Solicitud de informacion del 4 de agasto de 2015, folio O67 3800183415.
A | casa cel tiempodetermina si una investigacién o estudio es relevante o no para el pals..." Al no
‘contar con criterios claros, predeterminados y piiblicos, todo se reduce a la mera
discrecionalidad del funcionario que en ese momento tenga que responder un re
curso de revisién.
Esta discrecionalidad se confirmé en una resolucién del 25 de mayo de 2016
a un recurso de revisin interpuesto por un estudiante de posgrado, por la negat-
va del AGN de permitirle el acceso a las fotograffas de detenidos-desaparecidos. En
‘su recurso de revisién apelé al articulo 30 de la tra, enviando documentos de su
institucién para mostrar Ia relevancia de su investigaci6n. La respuesta fue que el
acceso a las fotografias “quedaria sujeto” a que de su revisién no se “muestren de
Aalles especificos de su mbito privado” Cabe aclarar que muchas de las fotograffas
‘muestran a los detenides después de haber sido torturados, eso-lo considera el Nat
‘como del “imbito privado”: Lo més absurdo de esta resoluci6n es que el encargado
de hacer dicha revisi6n es el AGN, es decir, la misma institucién que negé en prime
ra instancia el acceso.”
Es necesario sefialar, ademas, que en todas estas resoluciones el 1Nat se ha cui-
dado de invocar la Ley General de Transparencia, que en sus articulos 4,5 y 148
-claramente sefiala que no se puede reservar ni clasificar como confidencial aquella
informacién vinculada a graves violaciones a derechos humanos, como las desapa-
riciones forzadas y la tortura.
Lainvestigaci6n académica tiene un marco institucional muy definido,y meca-
‘nismos de evaluacin determinados por criterios académicos: la consistencia de una
investigacién est determinada y juzgada por sus planteamientos te6ricos, metodo
égicos y por su contribucién especifica al campo de conocimiento en el que este
situada. ¥ la evaluacién de esos elementos se lleva a cabo por pares en Grganos cole
giados. El 1war no sélo no tiene atribuciones para la evaluacién académica como lo
reconocié,no cuenta siquiera con criterios minimos para una valoracién de este tipo.
Por otra parte, tanto la autonomfa de las instituciones de educacién superior
‘como la libertad de investigacién son garantias constitucionales, asi esté establecido
‘ena fraccién VII del articulo 3¢ de la Constitucién. El iwat parece no estar enter
do de este precepto:
Las universidadesy lasdemsinstitucionesde educaci6n superior alas quela ley atorgue
autonomia tendran la facultad y la responsabilidad de gobemnarse a si mismas; realiza-
‘rin sus fines de educar, investigar y difundit la cultura de acuerdo con los principios de
este articulo, respetando la libertad de cétedra e investigacién y de libre examen y dis-
cusion de las ideas,
* Respuesta del ina, 18 de agosta de 2015 mediante cl oficio INAVCAI/48/15
"Resolucién ant 483/16 del 25 de mayo de 2016.
profanos y grafiteras | 15En medio de solicitudes de informacién, de recursos de revision, de demandas
puiblicas, de encuentros y desencuentros puiblicos con los directivos del AGN,
escribi dos cartas al posgrado en Historia de la una, al cual me encuentro,
adscrito,al Instituto de Investigaciones Hist6ricasy ala Facultad de Filosofia y
Letras de la misma universidad, dando cuenta de estos retrocesos para la investi-
gacién de la historia contemporénea de Miéxico.... Silencio. No hubo respuesta.
4No es este un clare ejemplo de esos momentos en los que Ia Academia
debe participar, por su propio interés y por interés general, de los asuntos
paiblicos? Al parecer, las instituciones dedicadasa la investigacién historica op
‘nan que ne. Ne han hecho ninguna manifestacién piiblica sobre el tema.Con
Jo que también contribuyen a resguardar intactos 1a memoria y los secretos
del régimen autoritario.
La batalla por la memoria puiblica
Latea noaplicas6loal fondo nrs,sino que rige sobre los archives contem-
porineos del gobiemo federal: los enengéticos, los agrarios, de gobemnacién, de
salud, etcétera. Come lo he seftalado, el interés no ests en proteger datos per
sonales de los ciudadanos, sino los arcana imperii del régimen autoritario.Con
esta Ley, en términos pricticos, se cierra el acceso a una fuente, entre otras ¢o-
sas, para reconstruir la historia del siglo xx mexicano incluso, y de permanecer
este criteria de la ley, hasta del sigloxxt. {Tendrén que pasar 70 afios para que
podamos revisar los documentos relacionados con la reforma energética o Ia
reforma educativa, o la guerra contra el narco? Ya no digamos de la garantia
deimpunidad que esto significa sobre delitos, crimenes de Estadoy graves vio-
laciones a los derechos humanos.
Frente a los grandes conifictos por los que atravesamos, el asunto de los
archivos historicas contemporéneos parece peccata minula. ¥ quizd lo sea en
términos econémicos o de Ia violencia, temas que Ilevan Ia delantera en las
preocupaciones nacionales. Sin embargo, no debe ser pasado por alto que el
‘ocultamiento o destruccién de la informacién publica gubernamental, nos6lo
tiene que ver con impedir el derecho democritico de pedirle cuentas alos gober
‘nantes. El ocultamiento de informaci6n garantiza la hegemonia en el espacio
publico de la memoria autoritaria. Restringir el derecho a la informacién,y a
la verdad, es negar la posibilidad de cuestionar la narrativa autoritaria y cons
‘muir otras narrativas democriticas.
La batalla por los archivos no essélo una batalla por el acceso adocumen-
taci6n, es una batalla por la memoria. La memoria no es estética, la memoria
es una disputa hegemsnica que se da en el Ambito publico, disputa en la que
se sigue imponiendo la memoria autoritaria. sma
16 | casaccel tiempo