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s . COLECCION Conjunciones Violencia social - Violencia escolar De la puesta de limites a la construcci6n de legalidades Silvia Bleichmar | moved am, COLECCIGN Conjunciones ‘Siglo XX. La violencia sociales un fenémeno cotidiano, ya se hha naturalizado, ya no sorprende. La violencia escolar es noticia diaria en los medios de comunicaci6n. ZEs ella un refleo de la violencia social? Silvia Bleichmar abord6 en sus escritos, en sus conferencias, en sus reportajes, con su profunda implicaci6n y su acostumbrada lucider, estos temas. Planteabs en ellos que “las formas actuales de la violencia dan cuenta de procesos muy Severos de desubjetivaci6n en el pals, y de procesos profundos cde impunidad y resentimiento acumulados”. Proponta un cambio fen el orden del dia de las agendas de los funcionarios de los distintos estamentos del Estado: en lugar de poner el acento en : a $ l arbre am Violencia escolar Siva Bleich stata “Hy que teminar cane mito de i 1a vtenca es podito de la pobrem. La yllencla 4s producto de dos costs: por un lado, el resentinlento pols: L promesos incumplides ypor el otro, afta de perspective de os {ture Que educar no sea una propuesta idealist de hacer De la puesta de limites a la todos.n pact dellenamosbienyentenderos sine de entender tesinetosprofindes que hay entre una cuturaque durante cos props el note melts! mientas se asesinab el semelante.¥ que se continud después en un individualismo de ‘salvarse solo, 4 costa de lo que sa’ convetido én un princi de vida yuna attra como forma de pcardis que se conti en modelo de tiecclo seca. reo que nosotes tenemas'que parth de » reconocer el pais que construimos o que desconstruimos para poder educara los jévenes en el pafs que queremos construir”. COLECCION Conjunciones rassaze2 N [ noveduc I www.noveduc.com oaserssse2e i ton o7a.e7.598-2282 Rag SWS llchmar, Savio ‘Vlench soca, victenele escolar la pussta do limes ata consimenée do logaidades 1a od Buenos Ares: Cento de, Moa pera cm. (Gonpnetonee: 1) oN 976-087-538-228-2 4. Vlaria Escolar. | To cop arie2 Coleccién Conjunciones Directore: Marcela Pereira Edicion: Ardea G. Kaplan isgramacio: Parca Loguizamén ‘Correceidn do estio: Susana Pardo Disero de pertada:Analia Kaplan Ze indice I editor, octibre.de 2 | Prélogo por Marla del Carmen Feijob | Sobre la puesta de limites y la construcci6n de legalidades © Novedue libros é ‘Av. Confientes 4345, Almagro (1195) Cludad de Buenos Aires, Argentina ‘al: (64-1) 4867-2020 - Fax: (8 11) 4887-0220 | Laconstruccién de legalidades como principio educativo Evmalt: contacto@noveduc.com /- ww:neveduc.com i Ediciones Novedades Educativas de México S.A. de C.V. | Larecuperacién de la justicia como base del pacto intersubjetivo. aA Instituto Técnico Industrial # 234 (Circuito Interior) Oficina # 2- Planta Alta (Ref: Metro Estaci8n Normal) Colonia Agricultura. Deleg. Miguel Hidalgo México, D. F.- C. P. 11960 - TelFax: 53 96 59 96 / 53 96 60 20 E-mail: info@novernex.com.mx./ novernex@noveduc.com Carmen de Patagones: la patologia singular en el marco de Ia violencia social y escolar LS.BN. N° 978-967-538-228-2 ‘Subjetividad en riesgo: herramientas para su rescate 1 ‘Queda hecho el depésito que establece la Ley 11.723 Laproteccién de nifios y jévenes. Sexualidad y pautacién 14l Impreso en Argentina - Printed in Argentina No we parte la reproduc pari! tl, almacenarianto, lagi, ta ransmision ols ransfoma- ‘Sen de este fro, en cuolquer toma 0 por cuslguer medi, sea slctnicao mecdnico, madantefloco- ‘ee, digtiizaclonu otros mitods, sn ol perisn previ escro da edi. Su raccén ext pena por Ins loyes 11.723 725448, Poner palabras al horror. Etica y subjetividad en el mbito carcelario .. 161 ‘Suva Brxtcumtan nacié en Bahia Blanca en 1944. AUC transcurtié su infania entre la Escuela Nocmal Mita y a Bibloteca Rivadavia. Migraién mediante a l Capita, esu- dia socolgi y lego psicologaen la Universidad de Buenos Ace, donde parcpaaci- vamente del movimiento esudianil de los aos 60.A causa dela detadara mili, dec- de emigary se radicaen México en 1976, Completa el docorado en Peicoandlss en la Universidad de Pais VIL, bajo a dicecci6n de Jean Laplanche, Retorna a su pals Argentina, en 1986, Profesora de diversas universdadesnacionalesy del exterior, entre sus actividades cxt-acaémice e cuenta I direcion de los proyectos de UNICEF de asistencia a las victimas del terremoto de México de 1985 y el proyecto de ayuda psico- A6gic los afectador por la bomba que destay la AMIA en 1994. En 2006, obtiene el Diploma de Honor y, potteormente, el Premio de Platino en Psicologh de ta Fundaciéa Konex. Poco después, en mayo de 2007, es nombrada, por unanimidad de a Legisarara porve, Ciudadana Tune def ciudad de Buenos Aires. Ha coaborado con publiceconesnacioales y eran mediante ariuloscenicos ens de acraidad, Sus libros ms conocido son Els erigene del xe, ‘La fundacibn de lo inconsients, Clinica poiconnaliticay neagines, raducios a port sues yal anc, Le sbjrvidd en rego y Dolor pat te kim cliicado pola ci Sea como “un profindo y comprometio ensayo sobre ia ela argentina y x impac to en la mubjeividad”. Bsa mis cia ha expresio: “tanto en su produccién cenif- cx como ens trabajos sobre la realidad socal, hay, en Siva Bleichmar, una indaudica- ble acttad de bésqueda y un profindorechazo al iracionalsmo, al pensamiento que se sostiene en Ia pura creenca,y afina 4 eto una enorme libertad e expen que la hace crgina”. En 2006 publics dor libros que resultaren bestseller; Paradejar de ls Seeualided masclinay No me hubera gutade mori enor 90 sa obra péstur, Dolor airy depuis. en novembre de 2007. Silvia Blichmar filleis el 15 de agosto de 2007. LuchS durante vatis aos contra un cncer, con dignidad y fortaleza, trabajando hasta sue kimos das en su pric clinica, dando cates en su Seminario y ecbiendo, ZS pio, 5 Bajofel titulo “Violencia Social - Violencia Escolar”, los textos que se presentan a continuacién abren una ventana parar mirar no sélo el espa- cio de la escuela y sus problemas, sino el conjunto de la sociedad argen- tina. Sus contenidos surgen de un marco conceptual, de un desarrollo teérico y de una metodologfa de trabajo que estuvieron siempre orien- tados por los principics profundamente democriticos y democratizados ‘que constituyeron la marca de la escritura, la clinica y la préctica ciuda- dana de Silvia Bleichmar. En s{ntesis, llevan la impronta de le forma en ‘que ella se colocé ante el anilisis y la construccién de la realidad argen- tina y latinoamericana de los iiltimos cincuenta afios. Una vida que, ‘como ella misma dice, se orienté por los principios que formulaba en tér- minos de “mantener la mente abierta y, junto con la mente abierta, los principios claros”. Y no hay duda de que cumplié tal como lo habia sofia do, sin apartarse nunca de esos preceptos. ¥ que nos dio el placer de dis- J I] tena sci - Vee xoar cutir y discrepar con ella, disfrutarla y tener oportunidad de atisbar la profundidad de su compromiso con Ja condicién humana. Sin imposta- ciones, a veces suftiendo dolores de pafs-, a veces irénica, siempre espe- ranzada. Como en toda su obra, la interrogacién de ésta esté dirigida a pensar la sociedad desde la perspectiva de los procesos de-constitucion de sub- jetividades y la relaci6n que ellos han tenido con los procesos de devas- tacién politica y moral que atraves6 nuestro pais en los tiltimos teinta afios, y sus efectos. En este contexto, el tema de la violencia es un eje fun- damental, como historia y como presente, en tanto la violencia marc6 nuestras vidas hasta extremos que todavia hoy no identificamos suficien- temente. La herencia de la violencia se manifiesta en las relaciones inter- personales, en los sistemas de dominacién social, en los espacios ¢ insti- tuciones en que interactuamos y, por supuesto, en el espacio de la escue- lay la familia. ¥ se retroalimenta en las nuevas formas de violencia que van més alld de los esporédicos estallidos en las aulas y las instituciones escolares. Por todo ello, por la centralidad manifiesta y latente que ha tenido en la configuracién de nuestro presente, proceder a analizar las situaciones de violencia requiere asumir algunas decisiones de critica epistemol6gica y te6rica. En el caso de Bleichmar, en primer término, se trata de la rup- tura del determinismo. Un determinismo que, como resultado del dete- rioro de las condiciones de vida de las mayorfes populares, es determi- nismo economicista y, a la vez, perspectiva naturalista y naturalizadora de Jas condiciones que producen la violencia. Presagiando en esas lecturas la formulacién de andlisis biopoliticos, su posicign es clara al respecto cuan- do sefiala la necesidad de terminar con el mito)de que la violencia es pro- ducto de la pobreza. Mas profundo que eso és su enfoque: “la violencia ¢s producto de dos cosas, por un lado el resentimiento por las promesas incumplidas y, por el otro, la falta de perspectiva de faruro”. En segundo lugar, postula la ruptura del facilismo. El abandono de la pobreza como tinica o predominante clave explicativa de los problemas sociales ~de los que, sin duda, los més impactantes son los ligados con la violencia 0 los abusos sexuales- implica la ruptura de una lectura ficil de esos eventos. Fécil, porque el diagnéstico leva implicita una solucién Maria del Carmen Feljod | Prélogo también ficil, la de que el mejoramiento de las condiciones dé vida serfa el camino de superaci6n de la violencia. Otra de las formas del facilismo es la de la explicacién psicologista, particularizada en un nifio, en una nia, con determinadas caracteristicas personales, en una institucién, en un pueblo o barrio, cuyas tramas se cruzarfan de manera tal que termi- narian convirtiendo a la victima de un conjunto de determinaciones en victimaria, Como siempre, Silvia nos dice que la reali Tan compleja que, desde el plano analitico, requiere dejar a un lado el practicismo pedestre, ese tercer rasgo contra el que combate y que con- siste en biisqueda bienintencionada de soluciones sencillas, construidas sobre la super-simplificacién de los problemas y que s6lo se puede supe- rar con la reivindicacién de la teorfa Por eso, cuando estallan episodios de violencia, ella nos dirige una invi- tacién a mirar por fuera del engafioso limite analitico del escenario insti- fucional (lo que pasa en la escuela) y/o las caracteristicas personales de Jos protagonistas (Io que les pasa a los sujetos), para entenderlos en tér- minos de su articulacién con procesos més amplios, més distantes, pero activamente operantes sobre esos sujetos. Sobre todo, en esas rupruras con el sentido comtin, nos invita a dejar aun lado la patologizacién de la vida cotidiana, que es otra de las formas que adopta el modelo de las explicaciones “ficiles”. | ‘Volvamos entonces el foco a la falta de perspectiva de futuro yel resen- timiento por las promesas incumplidas. Al hablar del futuro, introduce el tiempo en el anilisis, un tiempo que no es cualquier tiempo, sino el que las ciencias sociales denominarfan de “larga duraci6n”, el que ha dejado un sedimento de sucesos y procesos que, como los de la violencia, siguen operando aunque estén aparentemente replegados en el olvido, El tema del tiempo hist6rico y su articulacién con la construccién de subjetivida- des ha sido una constante en la obra de Silvia. Como evidencia, recorde- mos simplemente el titulo: No me hubiera gustado morir en las 90. Pero este tiempo del futuro tiene impactos determinantes en dichas construc- ciones. Como no hay proyecto, se manifiesta como un tiempo eterna- ‘mente presente y que se consume en la anécdota del dia tras dia -el tiem- &

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