You are on page 1of 15
ENSAYOS CRITICS: Modos del ensayo De Borges a Piglia techn sey rata Alberto Giordano BIBLIOTECA SEE tte e/ louse 7 — BEATRIZ VITERBO EDITORA Giordano, Alberto ‘Moos del ensiyo : de Bors «Pi Viterbo Bator, 2005, 288 p. 20u14 em aed. -Rovaio = Beatriz ISBN 950.645-166-1 1. Celica Litera Titulo cop aor. Biblioteca: Bnsayos eriticos Hlustracién de tapa: Daniel Garcia Primera edicign de Modos del ensayo. Jorge Luis Borges ~ Osear Masotta: octubre 1981 Primera edicion de Modos del ensayo De Borges a Piglia noviembre 2008 © Alborto Giordano © Beatriz Viterbo Rditora Espana 1150 (S2000DBX) Rosario, Argentina wwwebeatrizviterbo.com.ar info@beatrieviterbo.com ar IMPRESO EN ARGENTINA / PRINTED TN ARGENTINA = Del ensayo -permitazeme sugerit yes una idea gue | tomo on pristama de Roland Barthes~ que si me siento escribir velato de sodas fos veces que ‘he “levantado la enbeza” provocado por fa Lectura, eso en ensayo. Y esto transfarmarta al ‘aneayo on wna eopecie de aulobiografia de ecturas: no tonto onl sentido de Toe bros 2 ‘mi vida’, sina mds Bien en cl de fos libros que ‘han apattado af ensayista de "ou" oda: ‘gue lohan hecho escribir, derramae ‘sue lecturas gobre ol rund. Bduardo Griner Del ensayo como ‘nico modo de dialogar ‘con Ia literatura La afirmacién ~me aprosuro a reconocerlo~ puede pare- | cor excosiva, Prefiero, de todos modos, no reducir su énfest yensayar algunos argumentos en los que pueda soportarse, El ensayo (denominado"literario® ~sélo a él voy a referir- ‘me-) como didlogo con la literatura, “Dislogo” debe tomar: aqui on un sentido préximo al de la “conversacion” | heideggeriana (que se diferencia de Ia mera “charla” tanto tome to diferencia el ensayo de ls “causerie”), es decir al de ‘ina interpelacin que se realiza no desde fuera, al amparo | do un exterior en ol que eneventra repose quicn interpela (iseria do los metalenguajes) sino en el interior del campo | interpelado, comportandose “segin su modo”. I.a busqueda | del ensayo, on la que el didlogo se instituye, “acompafia” al ‘movimiento de la literatura, To dupliea, y encuentra on esa ‘stratogia mimética la oeasion de dar (estimonio de Io que 2a eats on juego -paraaseo a Bianchot~ por ol hecho de ue a palera come in Mtrara se enue oF en ee Mhenpalacion qu eo; lla misina, Leerature? Uy Sincagna hap ye etalisede “ensayo do lecture’ antipn mnpeesta Bl enayescome dsogs enon ons00 J lot raquo una fxtura se snnaye io signifcn gue os fotos ‘an proviso, que Soan abo gttines xbov0, que pe F———C srngo alone Cana monnafiyn rato) lt dian Biman de lecture alarion mo corrsponde —parastn Borger sino ala soiion oa caanci,aunen Ia hoe sere Ta ensayo: ale busqueda Ia iteratara, ge ‘Cegntenra incnrstomentoy ae Heme minis gue el Mists Dieho de otro made un ensaye de Tetars x saan ne no scapemiento, es falta de conus, reir sino enncll a lontura por deiieon proviara Ip que enna ecbra se leva om fa, cards Muvontar fo que aula ene so rabre ‘Sin tzo propio quel falta de alga, pore slo pa cer ue om praia Ie proporsions, Po esrbe on Ts Seer Sinetbrn, ln oetonsion de ae tas a rogers, [x'gran do papel mee poge ave sus oias"ponsmienon Gheleectara le suglre Banaewcarg”parecen no eta Stina, on an comionz, min que a quien lan eeibe Bh rss tina minmos"s deal a andacin yale qu es crate a =r 1 Sta letras eos ponsement ecitn Las agrup, De Sanlemente os rene cuprme signe, agregs sto 1 Fublice on ol ete do Hfarginatia Seba eho que Poe pu Tins ean nots po intr sonic, pore here qu cata hein de aecion pode nsinare, Se pueden cont rare otoranea Parola ert on aoe cocenremce 9 24 episodio un destizamiento propio del ensayista, deslizamiento reapecto del lector que é1 mismo es al que se refiere Barthes cen las Gitimas paginas de Critica y verdad. El ensayista (Barthes habla del “eritico", pero lo piensa como onsayista) ao sdlo lee sino quo, ademas, escribe su lectura, la publica (a hace pablica) la “dercama’ sobre el muade. “Habla” con sus palabras lo Iefdo, lo redupliea por au eseritura, y su de- seo ya np e3 el de In obra, el de “querer ser la obra", sino el desu propio lenguaje. Del leer al escribir se juega, entonce tun deslizamiento “smoroso” por el que el ensayista, devol- viendo “Ia obra al doseo de la eseritura, del cual habia sali do", logra transmitir eierta verdad de la literatura, de la que ‘] tormino “pasion” da la medida. Del ensayo se han sefialado siompre la heterogencidad de sus miateriales y de sus procedimientos, la difieultad para clasificarlo o definirlo. Hs conocida la alegoria por la que Jaime Rest To llamé “cuarto en el reeaveeo", Lo que aqat de ‘omino “ensayo” no es ajeno a esas determinaciones empi aa, pero no se reduce a ellas. Asi como Ia brevedad de an fexto, su tono conversado, cierta displicencia teérica, no nos {garantizan que en él se ensaye una lectura,es posible locali- varla en los margenes de una monografia 9 en Ia totalidad de un texto que la tradici6n redujo a doctrina, En todos os ‘aos, la determinacion de un texto como ensayo depende de ‘un ensayo de lectura que lo Jea como tal, Se ha dicho que “no hay meta-leetura de la lectura”, Repite la formula: no hay meta-ensayo det ensayo, Dijo antes que me referiré exclusivamente al ensaya lite- rario, Una aclaracién mas: “Iiterario" no debe ser tomaddo aqui en un sentido puramente temético, Tal como la entiendo, la “literariedad” de un ensayo depende no tanta de sa tema como de que en él se realice Ia puesta en acto de una legelidad ‘ropin de la literatura, de un modo de “conocer” literario, | Los onsayos borgianos de toma filos6fieo 0 twoléxico, La ed 225 mara lieida de Barthes, yor ejemplo, seréa consideradoe ood cota perspec vee Legos sigue, un conto denotes do Lotara destin dan anaes Cones enrasteres del ensayo, sus general areas satan eortsTogares desde donde prose Su head La respuesta auténtica siempre es Ya vida de la pregunta. ‘Maurice Blanchot tn a eran e un ensayo abr noel, Blanchot re 1 peat antaconea ne protnden reslverningén seen Thames, pore enters suerte de los 9 rea itat Banyo a que me eoir,"La nova, obra Shanti Teoma sot sesame Mc dge fo minno gu ol isc del testo aoe rece basquedn del nsayo no conelye no en aes Se lain qu, rebrectivement, rong fina Se tant antondns san seopuesta(upuestaYerdae aaa ese in marthe abires porn progunta sin se ae a nese buwquadn oe de sa sguarind tal Pr encontrar agi mostrar hull no inven aa ee develarun sentido nine, mllpiende ls Seeing ere muy panacea ese eat do oe punton de vst a sonnet eens sob in sore en Tempe ef roman ieee el seerido do Poin «parr de sus agunan 8 se esobticatoe qu no pao sorteat co or 8 226 | | | por general, se enfront6 sin saberlo, Su eatratogia, sin em- ‘argo, no es critica Blanchot no descalifica la marcha de Pouillon, por inge= uu 0 equivoca quo ella sea, sino que, por el contrario, Ia prosigue, desviéndola, para recomenzar alls una vez mas (pero tambien, en algun sentido, por primera vez, por unica vyez) la marcha “propia”, Para Pouillon ~segiin la resenia do su libro que hace Blan- chot~ la novela pono (debe poner) en eacena los diferentes ‘modos que los hombres tienen de conacerse a si mismios y de conocer a los otros, de tomar coneiencia de si mismos y de los otros; su tinica finalidad es restituir, aplicéndolos, esos modos de conocer. Blanchot reafirma, a su vez, lo esencial del vineulo novela-conocimiento, pero lo somete a un des- plazamiento sutil, Mientras que Pouillon apoya su estudio en los desarrollos de disciplinas que, desde fuera de la lite- ratura, se aan ceupado del conocimiento, Blanchot busca es- pecificar un modo literario de conocer, que no se reduzea a Jn“toma de concioncia" sino que, tal ver, a exceda, Se trata, para Blanchot, de prestar atencién a la “transformacion ra dical” que se opera en la palabra literaria, de no desconocer {quo ol lenguaje de la novela no es el de las disetplinas (lea- |guaje que supone represemtar eores reales) sino el de la fic idn (longuaje gue presenta sores imaginarins, seres ausen- tes, que los presenta en su ausencia y como ausentes), La Dusqueda se abre, entonces,a la interrogacién por las eondi- ciones de posibilidad de Ia fiecién y del acto de imaginar. Blanchot se pregunta "qué os una ficcién, como es posible y ‘qué actitudes supone en quienes participan en ella, credn- ola al escribir 0 produciéndola leyendo", y al ensayar una respuesta entredice nuevas preguntas, dirigidas aun lector por venir, de un orden de razones tambien nuevo. ;Bn qué sentido Ia novela capta -segin lo dice Blanchot~ "el sentido del mundo humnano en su conjunto"? {Cusl es “el sentido de oor so que 0s ma verdadero que hase aparicin “en el ea mont veto de Ia fsin"? ree toe gn etal ein de Blanco os ora trove deta cit esayita que na sabi sstoner ar cae ee tan a a Teido en una interrogacin dads re nts audi, os doin na respuesta que ala vex aan aeretitayeoncapan de covarse sobre sv interop ‘ijptporo pare presen, concorvandol existe aht wna laguna que se nos invita no a reparar bien 0 mal, sino, por el contrario, a vespetan Marthe Robert

You might also like