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terapia 16 Manual elinico de psi © Describié como, en este inconsciente, se encuentra el universo de acontecimientos que nos rigen, De las terapias que se offecen actualmente a las personas que bus- can resolver sus conflictos y sus problemas, algunas enfatizan la honestidad, otras la intimidad, otras el aqui y el ahora, algunas otras 1a cmpatia del psicoterapeuta, y otras més las interacciones mente cuerpo. Algunas de estas corrientes subrayan la importancia del mundo interno, mrentras que otras le dan preponderancia a las experiencias externas. Las preparaciGn necesaria para ejercer una u otra varia enor- ‘memente. La psicoterapia psicoanalitica defiende la postura que ase- ura que entender estos conceptos y tener Ia experiencia personal de su significado es una labor muy compleja y responsable. Al igual que elescalpelo de un cirajano, una terapia no esta libre de riesgo, iatroge- nia o mal uso. La habilidad para manejar Ia intensidad de estos prace- 505, y analizarlos en lugar de actuarlos inadecuadamente, estard alta- monic limitada por el tipo de preparacisn que el terapeuta haya tenido, y por la profundidad de su propia experiencia terapéutica, Me gustaria concluir con las palabras tle Miguel de Cervantes Saa- vedra en la voz de Don Quijote, quien dice: “La libertad, Sancho, es mo de los més preciados dones que a fos hombres dieron los cielos Con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar encubre; por ta libertad ast como por la honra, se puede y debe aventurar ta vida. Bibliografia 1. Appelmaum AS, Effecting Change in Psychotherapy Jason Aronson, 1881 2, Brown D. Pedder. introduction to Paychotherapy. University Press, England, 1979, 3. Fitzgerald RY. Conersarions in Peychotherapy. Jason Aronson, England, 1992. 4. SzyloD, Beristiin. Para entonderla Psicoterapia. CEPAC Edtores, México, 1997, 5. Velasco AF Manual dle Téenica Psicoanaltice. Editorial Planeta Mexicans, S. A. de C. V, México, 1996, CAPITULO 1 {QUE ES EL APARATO PS{QUICO? Dr, Miguel Kotieniuk Dificilmemte puiera encontrarse en el campo de la medicina una no- cidn més compleja y controvertida que la de aparato psiquico. Acos- ‘tumbrados 2 una concepeién organicista de los procesos vitales, a lidiar con el cerebro como estructura anatGmica y sus multiples funciones clectrometabdlicas y neuroquimicas, los médicos suelen resistirse a ‘mangjar un concepto tan abstcaviu y sisibdliev como el de aparate psi- quico, mismo que ubican mas en ios terrenos de la psicologfa que en 84 propio campo. Laensefianza médica suele concentrarse en el aprendizaje cada vez ‘mas preciso de los procesos patalégicos con el auxilio de los avances tecnol6gicos més sofisticadas, asi como de los procedimnientos ter Péuticos mis eficaces. A la luz de resultados concretos cada vez ma evidentes, las medicina en particular y las ciencias biol6gicas en gene- ral, han tendido a descuidar el estudio del aparato psiquico por consi- derarlo un concepto “vago”, “acientifica”, . "metafisico” e insuscepti- ble de medicién y andlisis cuamtitativo. En el mejor de los casos lo consideran objeto de estudio de la psicologfa, el psicoundlisis o de In Psiguiatrfa no cientifica, dado que para Ja ensefianza médica actual, s6lo Ia psiquiatria biol6gica mereceria el calificative de ciemtifica. Asi, todos Jos procesos involucrados en Ja vida mental, tanto nor ‘males como patolégicos, que constituyen la base tanto del suftimiento como del bienestar psiquico, tienden actualmente a ocupar un lugar ‘muy periférico y secundario en dicha enseftanza. Lo que no pudiera ser explicado en términos de niveles de acumulaci6n de neurotransmiso- 168, ode trastornos fisiometabslicos del sistema nervioso o endacrino, quedarfa fuera del interés médico. 18 Manual elinico de psicoterapia Por otra parte, llama la atencién el reducido niimero de horas deci ado al estudio de la psicopatologia dentro del programa de formacién médica. Estas y otras miltiples razones han contribuido al desarrollo de una concepcisn de la medicina cada vez més tecnol6gica y deshu- manizada, més cercana a la ingenieria que a sus raices hipocriticas. Por ello, resulta fundamental una exposiciGn general de la concepcidn psi- coanalitica actual del aparato psiquico, que abarque desde sus funda- mentos originados en la obra de Freud hasta las contribuciones mais importantes aportadas por sus seguidores mas reconocidas. Desde e- 0, un trabajo asf excederfa los limites de este capitulo, sin embargo, la presentaciéin de un resumen esquemdtico y orientadar de dicho des- arrollo conceptual me parece indispensable para hacer ver la importan- cia de la nocién de aparato psiquico no solo dentro del campo de la psicoterapia y el psicoanilisis, sino dentro de la psiquiatria y la medi- cina en general Por consiguiente, el capitulo se centrari en la exposicién de la ‘estructura y funcionamiento del aparato psiquico en sus lineamientos ‘mis generales. Recogerd la formulaciGn hecha por Freud, que es, por asi decitlo, “el padre” de la nocién de aparato psiquico y mencionari aquellas contribuciones que han enriquecido el concepto a lo largo del desarrollo det pensamiento psiccanalitico El aparato psiquico es tan antiguo como la civilizacton occidental. ‘Yallos griegos habian descubierio el irreductible mundo de la experien- cia subjetiva, esa entidad “animada” responsable de Ia percepcién y la sensibilidad y la llamaron “alma”. Descubrieron, ademés, que dentro de esa" alma” perceptual y sensible, existia una actividad superior que Ja constitufa como esencialmente humana: cl intelecto 0 razén. E| cristianismo emparent6 el “alma” con la divinidad, confirién- dole esa cualidad metafisica que suele acompafiar al concepto. Sin embargo, Descartes vuelve a dotarla de nuevo de una sustancialidad propia, al concebirla como 1a “sustancia pensante” o “mente”. una sus- ‘ancia tan real como el cuerpo o la materia, Adem, Descartes intro- dujo el problema filos6ico que, hasta Ia fecha, sigue atravesando ala psicolog(a y a la medicina, a saber, ia todavia misteriosa relacin exis tente enire la mente y el cuerpo. Para [a concepciGn médica sélo existi- 1a unasola sustancia: el cuerpo. La mente seriael resultado del funcio- w {Qué es el aparato psi namiento complejo del sistema nervioso central. Sin embargo, desde los griegos, y desde luego, después de Descartes, resulta imposible negar laexistencia de ese universo que no es material y que constituye el mundo de la experiencia subjetiva, Mis alld de la correlacién que pudiera establecerse entre e! mundo de la experiencia subjetiva y el funcionamiento del sistema nervioso, es necesario reconocer que ios contenidos de dicho mundo, como son, las percepciones, las representaciones, los afectos, los recuerdos, el pensamiento, las motivaciones ¥ las pulsiones, son de un orden distinto alos diversos componentes del sistema nervioso, como por ejemplo: las neuronas, los neurotransmisores, etc. Mientras que los primeros pertenecen al universo intrasubjetivo, los segundos pertenecen al mun- do extrasuibjetivo 0 mundo de la realidad externa, Asf pues, es necesario establecer que el aparato psiquico seré el cconcepto que propondra Freud para dar razén de este universo com- pplajo que constitye la experiencia subjeliva y para consiniruna teorta general de su funcionamiento normal y patolégico. ‘Sin embargo, la teorfa freudiana del funcionamiento psiquico reba- sa los limites de una teoria psicolégiea més, ya que fue disefiada para abordar el estudio de esa regién del psiquismo habitualmente ignorada por la psicologia académica y Ja medicina y que constituye la parte esencial de la vida psiquica: el inconsciente. Si bien ese territorio inex- plorado habja sido intuido, e incluso abordado por fil6sofos y poetas, comesponde a Freud el mérito de haber sido el primero en haberlo con- vertido en objeto de estudio sistematico y en haber fundado una nueva disciplina consagrada a su estudio: el psicoandlisis. Ladimensién inconsciente del aparato psiqjico es Ia que va.a expli- car la psicopatologfa a través del surgimiento de los sintomas a partir del retorno de lo reprimido, y es Ia que va a permitir vincularel funcio- ‘namiento normal con el anormal. Por tratarse del estudio de una regién del psiquismo que va més allé del dominio de la conciencia acotado hhabitualmente por la psicologfa, Freud propuso denominar metapsico- Jogia a su teor‘a general del funcionamiento del aparata psiquico a la luz de sus procesos inconscientes. Asf frente ala psicologia académica y frenteal “organicismo médico”, Freud creé una “metapsicologia” del aparato psiquico, es decir, introdujo el eslabén intermedio que hacia 20 Manual elinico de psicoterapia falta para unit laconciencia con el cuerpo (Descartes). Dehecho, Freud realiza.una verdadera aportaci6n ala medicina psicosomitica a lui nar ese territorio obscure e impreciso de la relaci6n entre lo psiquico y lo somdtico, con su descubrimiento del inconseiente, y tal como é] mismo lo afirma, también cred el puente que permite vincular la psi- uiatria con la psicologia parael estudio de las enfermedades mentales, A grandes rasgos, podria afirmarse que toda ia obra de Freud es realmente un estudio cada vex més profundo y minucioso del aparato psiquico. Sin embargo, para nuestro propésito, vamos a centrarnos en luna sintesis de su teorfa metapsicoldgica, Por razones didécticas va- ‘mos a dividir Ia investigacién freudiana en dos fases separadas por un periodo de transicion a. La primera t6pica, o primera subdivisién del aparavo psfquico, que comprende la distincién intersistémica: consciente-pre- consciente-inconsciente, y , La segunda t6pica o segunda subdivision del aparato psiquico, que comprende la introduccién de las tres instaneias psiquicas el Yo, el Elio y el Stiper Yo. La primera fase abarca todas sus trabajos publicados hasta 1915, en especial los Trabajos de Metapsicologta. Después de un periodo de transicidn, la segunda fase queda establecida por la publicacién de El Yo yel Ello, en 1923 y contintia hasta su muerte, en 1939. No pademos delinear en esie capitulo los detalles conceptuales de esta compleja evolucién, que abre mis caminos de los que resuclve, Sin embargo, para nuestros fines expositivos, privilegiaremos los aspectos més sin. {éticos y organizados del tema, aclarando que nada sustituye ta incur- sign minuciosa en el texto freudiano. Freud concibe el aparato psfquico como un complejo funcional ubi- cado en un espacio virtual localizado cn el “interior” del sujeto que denomina “el espacio ps{quico”, No se trata de un espacio real, exte- Flor, medible, en el que se encuentran los objetos materiales. Ms bien se trata de un espacio virtual, interno, sin extensién, que, desde dentro del sujeto, es sede de los procesos de simbolizacién, pensamiento y ra- bajo energético-pulsional que constituye cl vasto universo de la vida mental tanto consciente como inconsciente, {Quées el aparato psiquico? 21 Inspirado en las “imagenes virtuales” de Ia Optica, asf como en el concepto Kantiano del “espacio”, quien lo ubica como una forma pura @ priori de la sensibilidad dentro del sujeto, Freud decide acuftar el concepto del “espacio psiquico" para poder ubicarel “sitio imaginario" enel que ocurrirén los diferentes procesos de simbolizacién energética caracterfsticos del trabajo psiquico, No hay que olvidar que Freud habfa abandonado la posicién localizacionista de la neurologia de su tiempo que pretendia ubicar las éreas cerebrales especificas responsa- bles de las diversas funciones perceptuales y motoras. A diferencia de Jos localizacionistas, Freud consideré que ni el aparato psiguico ni el inconsciente, podfan ser ubicados en alguna regién especifica del cere- bro. Por ello, decidié ubicarlo en el “espacio psiquico”, en vez de hacerlo en el espacio neuronal, y es esta “ubicacién psiquica” la que lo divoreié de la neurologfa para convertilo en el fundador del psicoa- nilisis. Por consiguiente, para Freud, el aparato psiquico se encuentra ubivady eu el espacio psiquico y consiste en una compleja organiza cidn funcional de vivencias y experiencias subjetivas, tales como per- cepciones, recuerdos, emociones, fantastas, afectos e impulsos cuyas vicisitudes van a configurar los miiltiples estados de Ia vida mental La primera gran aportacisn de Freud en su primera fase fue el haber descubierto la existencia simultinea y paralela de un registro de la vida psfquica que ocurria fuera de la conciencia y que incluso determinaba en forma inexplicable muchos de sus contenidos. Llum6 inconsciente esta actividad mental, y para estudiarla subdividi6 el espacio psiquico en tres regiones o localidades: L. Bl inconsciente, 2. El preconsciente. 3. El consciente. Para Freud, el aparato psiquico provesa solo wes elementos: 1. Las percepeiones externas e internas, 2. Las representaciones © huellas mnémicas. 3. Las energias pulsionales y sus derivados: los afectos. La vida psiquicaes concebida como el resultado del complejo inter- Juego que ocurre entre estos tres componentes fundamentales. 22 Manual elinieo de psicoterapia Las percepciones son conjuntos integrados de impresiones senso- rales que se producen por el estimulo de la presencia del objeto. Cesan cuando desaparece éste, y constituyen un flujo inimterrumpido de informacién. Su procesamiento esté a cargo del sistema percepcin- conciencia. Las representaciones son conjuntos también integrados de impresiones sensoriales que se constituyen como huellas mnémicas luna vez que el objeto de la percepcién ha desaparecido de ella. Las ‘epresentaciones constituyen el registro de la memoria del aparato pst. quico y son las responsables del trabajo de simbolizacién. Mientras ue las percepciones sélo pueden ocurtir por la presencia del objeto, las representaciones se inscriben y reactivan s6lo baja su ausencia, Freud va a distinguir s6lo dos clases de representaciones: * Las representaciones~cosa: representaciones. predominante- mente visuales, imagenes, ° Representaciones-palabra: tas palabras como unidades del lenguye. El sistema preconsciente contiene los conjuntos de representacio- nnes~cosa ligados a sus respectivas representaciones-palabra, mich. tras que el sistema inconsciente trabaja tinicamente con las representa Las energéas pulsionales provienen de las fuetzas llamadas pulsio- res. La fuente de esta energtia proviene de los procesos biolégicns y st estudio no pertenece al psicoanslisi, sino la biologi. Env principio Freud definis dos clases de pulsiones: las pulsiones sexualesy las pul Sones del Yo o de autoconservacién. Sin embargo, més tarde las susti- luy6 por las pulsiones de vida y tas pudsiones de nuerte al percatarse del cardcter parcial ¢insatisfactorio de su primera clasificacién. Sewin Gl autor, fas prilsiones tienen una magnitud de fuerza variable que “empuja” hacia la descarga, tienen un fin que es la descarga de la ten- ‘umulada y utilizan un “medio” que es el objeto de la pulsién, Freud considera que el objeto es lo mis variable de la pulsidn, casi cualquier persona, animal 0 cosa puede funcionar como tal, diganlo 0 no, 1a gran variedad de perversiones que se encuentran en la clinica {Latendencia a la descarga de la tensién psfquica, ta lamé principio del placer y constituye uno de los tres principios de funcionamiento {Qué es el aparato psiquico? 23 el aparato psiquico. El segundo principio sera el principio de reali- dad que se encarga de la uilizacién de la energia no descargada para la creacién de los proceso de pensamiento conducentes al conaci- miento de la realidad y ala accién planificada. El principio de realidad se desarrolla a partir de la demora, de ta inhibicidn de la descarga pul- sional gobernada por el principio del placer. EI principio de Nirvana, introducido tardiamente por Freud, ¢s el que gobernard el funciona- miento de la pulsién de muerte, y el que se encargaré de reducir la ten- sin psfquica hasta su nivel “cero”, es decir, el que se ocupard de la des- imtegracidn del apararo psiquico. Las pulsiones son, entonces, las responsables de los procesos de descarga energética por medio del vinculo del ¥o‘con sus objeios. Son la fuente de la vida emocional porque contribuyen en la constitucién de los afectos. Para Freud, los afectos son derivados representativos de las pulsiones y son organizadores de las relaciones objetales. Por Gltim, a nivel intrupsiquico, las energias pulsionales son las cencargadas de realizarcl trabajo de simbolizacién de laexperiencia que ocurre simulténeamente en los sistemas consciente, preconsciente inconsciente, Dicho trabajo consiste en la creacién de nuevos enlaces, asociativos entre las representaciones inscritas en la memoria de acuet- do a dos mecanismos de asociacidn diferentes; el proceso primario (fabricacién imaginaria) y el proceso secundario (pensamiento racio- nal). Ambos procesos seran explicadlos mas adelante. El sistema consciente, e! mis conocido por la psicologia acadé- mica, es el encargado del registro de las percepciones provenientes tanto del mundo externa, como del mundo interna. Este sistema se nu- tre de la informacién proveniente de nuestros drganos sensoriales, a través de la estimulacién de nuestros receptores exteroceptivas, pro- Pioceptivos e interoceptivos. Es también el responsable de la percep- Cién de nuestros estados de conciencia, asi como de las cualidades psf- ‘quicas placer y dolor asociadas a nuestras experiencias. En suma, es et receptor de la informacién perceptual ¢ introspectiva, por ello Freud Io llamé sistema percepcién-conciencia, El sistema preconsciente es el portador de los recuerdos reversi- bles, es decir; almacena todos aquellos recuerdos susceptibles de con- ciencia, Contiene informacién almacenada en huellas mnémicas recu- ico de psicoterapia perables y funciona como un banco de informacién disponible para auwiliar al sistema consciente en sus funciones. También el sistema reconsciente ha sido estudiado por la psicologia académica, En cam- bio, en el sistema inconsciente los recuerdos no son susceptibles de conciencia porque se opone a ello Ia barrera de la “represidn”. Freud Mam6 asia una barrera permeable y dindmica que funciona como fron- tera divisoria ubicada entre los sistemas preconsciente c inconsciente. Elsistema inconsciente contiene recuerdos de experiencias traumé- ticas de la mds diversa indole. Dentro de él, la informacién no se pro- cesa de acuerdo a las leyes de la tégica, el tiempo y In causalidad. Los recuerdos més antiguos pueden ser procesados y recombinados con los ‘mas recientes sin tomar en consideracién el orden temporal. Las repre- sentaciones mis disimbolas y heterogéneas puecien ser conectadas sin tomaren cuenta la ligica, la coherencia y la causalidad, Una planta, un ‘animal, un objeto o una fantasfa pueden ser agrupados asociativamente sin considarar racionatidad alguna. Aeeste tipo de pracesamiento de la informacién que construyeenla~ ces asociativos entre las representaciones inscritas como huellas mné- micas y que origina sin cesar nuevas imagenes al margen de las leyes de la légica, lo denoming Freud proceso primario, para distinguirlo del proceso secundario, el sistema de ordenacién légica, causal y temporal de la informacién que impera en el proceso de pensamiento racional. ara distinguis especificamente el modo de funcionamiento prima rio (fabricacién imaginaria) dentro del aparato psiquico de su modo de funcionamiento secundario, mas familiar para nosotros, Freud postulé le distinciGn intersistémica de su primera t6pica: El sistema incons- cciente seré la sede del funcionamiento en proceso primario, mientras que los sistemas preconsciente y consciente, funcionarén en proceso secundaria. Ambos procesos se separan ¢ inlercomunican a través de Ja barrera de la represién, Los enlaces asociativos realizados por el proceso primario (fabri- cacién imaginaria) obedecen a tres leyes de funcionamiento distintas la l6gica: a. La condensacién (aglutinacién de representaciones). b. El desplacamiento (creacién de cadenas asociativas secundarias) iQuées el aparato psiquico? 25 ©. La figuracién por imagen (uso de imagenes predominante- mente visuales), Es decit, dos representaciones cualesquiera pueden entrar en rela- cién ya sea por semejanza, por contiglidad, por simultaneidad, por ‘continuidad y hasta por oposicién, al grado en que sera posible “con- densar” un ciimulo de representaciones diversas para formar una sola imagen, o “desplazar” el centro de la importancia de una representa- cidn creando ramas colaterales derivadas. Tal es el caso del paciente que puede sofiar con tna imagen femenina compuesta por el cabello de la abuela, el vestido de una maestra y los zapatos de una vecina o de otro paciente que desarrolla una inexplicable fobia a las escaleras eléciricas. Sélo a través de la explicitacién de las cadenas asociativas ‘efectuadas por el proceso primario del aparato psiquico del paciente, ser posible dilucidar el sentido de ambas imagenes. Aqui radica la grandeza del descubrimiento de Freud. Al ubicar dentro del aparato ps{quico el sistema inconsciente que funciona el proceso primario “por debajo” del sistema consciente y preconsciente, crea la posibilidad de explicar coherentemente aquellos productos derivados de aqué! que aban aparecido hasta entonces conio fendimenos inconexos e irracio- nales, esto es, los suefios, Los actos fallidos, los chistes, 1os sintomas nncuréticos y psicéticos, los mites, junto con las diversas manifestacio- nes de la creatividad, el arte, la filosoffa, Ia ciencia y la cultura E] proceso primario del funcionamiento inconsciente sera el pivote, la piedra angular en la bisqueda del sentido de los actos fall dos, Jos sueios y los sfatomas. Gracias a este descubrimiento resulta posible ahora encontrar el sentido del discurso psicotico, entender un delitio, comprender una alucinaci6n. Gracias a Freud, Ia enfermedad ‘mental nos resulta mas comprensible, més verosimil y menos demo- nfaca. El descubsimiento del inconseiente constituye, pues, el hallaago crucial que nos permite ahora elaborar un conocimiento més légico y racional de las enfermedades mentales y las actividades creativas, asi como del enigmético mundo de Ia irracionalidad humana. El segundo gran descubrimiento realizado por Freud durante el periodo de la primera t6pica es el de la sexualidad infantil y sus vicisi- tudes en la vida adulta normal y patolégica. Contrariamente a lo que 26 Manual elinico de psicoterapia se suele pensar vulgarmente, la sexnalidad no es un instinto biol6gico ‘que aparece en la pubertad cuya tnica funci6n especifica es la repro- duccidn de la especie. Mas bien se trata de un “haa ramificado” de pul- siones sexuales parciales, vinculadas a zonas erdgenas especfficas (piel, mucosa de los orificios corporales, genitales, etc.) cuya finalidad és Ia excitacisn y ta descarga placentera, antes que la reproduccién. Freud llam6 libido a a energia de tas pulsiones sexuales. Este haz rami. icado de pulsiones parciales que constituye la sexualidad no aparece como cree la opinién corriente, en Ia pubertad, sino més bien, surge desde el momento mismo del nacimiento, hecho que puede ser consta- {ado en las actividades autoerdticas buscadoras de placer. La sexualidad experimenta un desarrollo en “dos tiempos”: un pri- ‘mer periodo que comprende aproximadamente los cinco primetos afios, de vida en el que es posible distinguir tres fases subsecuentes y coexis- tentes: Ia fase oral, la anal y la félica y un segundo periodo de integra- ign de las fases bajo Ta primacia genital. que se inicia en In purbertad y culmina en la adolescencia, Entre ambos periodos Freud ubica un periodo de “Iatencia” comprendido aproximadamente entre los seis y los once ates. Eltercer gran descubrimiento que realizé Freud en esta época es la vinculacion de la energia proveniente de la sexualidad infantil con la actividad de la fantasia, Ya en La Interpretacién de los Suefios Freud habia descubierto la existencia dentro del aparato psiquico de un meca- hismo de gratificacién sustitutiva de las tensiones generadas por la acu- mulacidn de energia pulsional no descargada durante la vigilia. Lo actividad inconsciente del trauma —+ retoro de lo reprimido + compulsién de la repeti- cién + segunda respuesta defensiva del Yo (otros mecanismos, de defensa) —+ formaciones de compromiso (sintomas) —+ los diferentes cuadros clinicos que estudia la psicopatologia, La diferencia entre salud y enfermedad va a depender tinicamente de factores cuantitativas, es decir, estard en {uncién del equilibrio di mico interestructural, resultante de la interaccién del Yo, el Elio, el iper Yo y ta realidad exterior. Cuando éste equilibrio'se rompe, surge Ja enfermedad. Desde esta concepcién dindmica, la salud se concibe como un estado de homeostasis relativa capaz de ser alterada por el incremento decualquiera de sus fuerzas componentes, mientras que la enfermedad se entiende como la alteracién no autorregulada de dicha homeostasis, A la luz de estas concepciones de salud y enfermedad, podemos ubicar por finel papel de la psicoterapia dentro del abordaje terapéutico de las enfermedades mentales. Se trata de un conjunto de procedimien- tos técnicos orientados al restablecimiento del equilibro dindmico alte- rado por los procesos patégenos. La psicoterapia intenta asf, comregir la falla homeostatica provocada por Ia enfermedad. En suma, la concepcién dindmica del aparato psiquico es la base tedrica indispensable para el estudio del campo de la salud mental, hace posible la comprensién del funcionamiento normal de ta vida psiquiea ‘y proporciona los elementos tedricos que permiten explicar la enferme- dad mental. Ademds, ofrece el fundamento para sustentar los procedi- Imientos técnicos orientados a combatila, Uno de estos procedimien- tos es la psicoterapia 36 Manual etinico de psicoterapia liogratia Bion W, Aprondiando de ta Experiencia. Ed, Paidés, Buenos Aires, 1962. 1915), Lo Inconscionte, Ed, Amerrerti, Buenos Aire, 197, (1900). La tmerpretacin de for Suaos. Ed, Amporromu, Buends Aires Freud Freud S (1905), Tres Ensayos sobre una Teoria Sexval Bd, Amorrorts, Buenos Altes, 1976, Frevd S (1914), furoduccidn of Narcisismo. Ed, Amorrorty, Buenos Aires, 1976. Freud § (1917). Duelo y Melancolia. Ed. Amorrort, Buenos Aires, 1376 Freud § (1923). él Yo yet ilo, Bd, Amomrarts, Buenos Aires, 1976, Freud § (1911). Las Dos Principis sobre el Acaecer Poiquico. Ed. Amorrort Buenos Aires, 1976 Freud $ (927). El Afafestaren la Cultura, Bd. Amerromt, Buenos Aites, 1976, Kemberg 0. a Toriadelas Relaciones Objetales ye Pstcoandlsis Clinica. Ed Pais, Buenos Aires, 1976, Klein M. Obras Completa. Ed. Paldés, Buenos Aires, 1987 Winnicow WD, Esertosde Pediarriay Psicoandlicis Fi ain Rareelons, 158. CAPITULO HE LOS MECANISMOS DE DEFENSA Dr. Vietor Manuel Ata Lapalabra “defensa” fue primeramente usada por Freud 1894en suira- bajo, “Las neuro-psi donde nos dice “por razones ‘que pronto serin evidentes yo llamaré esta forma de defensa histérica recutriendo a este término para distinguirlo de la histeria de retencién y In histeria hipnética. “Los pacientes pueden recordar tan precisa ‘com seit posible lus esfuer2os de la defensa, sv intencién de hacer a un lado pensamientos dolorosos, no pensar en ellos, suprimiclos”. Eo su trabajo escrito con Breuer en 1893 titulado “Comunicaciones preli rminares” habla de las memorias asociadas a traumas psfquicos que no han sido suficientemente comunicadas porque el paciente desea preci samente olvidarlos y por lo tanto son reprimidas intencionalmente de su pensamiento consciente e inhibidos y suprimidos No fue hasta la publicacidn de su trabajo Inkibicion, sfntoma angustia, en 1926, cuando Freud aciara la diferencia entre lo que es “defensa y represién” diciéndonas: Al discutir el problema de la angus- tia yo he revivido un concepto o para ponerlo mas modestamente un ténmino, al que hace 30 afios recurrf y que lo empece a estudiar pero ‘que posteriormente lo abandoné. Me refiero al término “proceso defen- sivo”. Posteriormente lo reemplacé por la palabra represion, pero la relacién entre ambos permanecié incierta. Considero que es de gran ventaja el recobrar el viejo concepto de “delensa" siempre y cuando Jo empleamos explicitamente como una designacién general para todas aquellas técnicas que el Yo utiliza para el manejo de los conflic~ tos que ilevan al paciente a la neurosis, mientras que la palabra “tepre- sidn” seria ese méiodo especial de defensa que consiste en suprimir hacia et inconsciente aquello poco aceptado.

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