Ignacio Martin BardSie pasado sigh fc comer poe Hannah Arend como elsiglo mas ervel dela historia, los dacos que nos iene ofe ‘Sendo e acral no ananelan pecisamente una correcchon ‘teva tendenca No vaa estar fai superar la mara de ‘dos gueras mundiles, pro cabeholgadamenre la pos liad de qe el mera de personas qe aga vita de Iasdiverea modaliades de violencia no tenga nada que en- vida as dl siglo pasado. Esa herencia mas sombria aoe Tegamos ls generaione venideras Taio Marinard svi en una saciodad en Ia gue la violencia pas a foomae pare del mismo ordenamiemo spit, enuin medio qu, entre otros, enconts en Ia el ture dela violencia uno de ss ms lids sopates, vivo ‘nun pal ewremecdo por una guera civil durante una ‘Ueda, Por eva ras, ua de sus wayectorasintlectae lex mst continuadas exo dirigida a dar respuesta a ese enameno, hacendolo desde un marco epetemologio en th queel principio de realidad hiserica se impone como punto de partida y como marco par lanl de cual- ‘Quer manifestacin del comportamientohamano, yen el. {he la acca silent se ve acompafada sempre de un {onde ideolagic que lasotene, que la dirge, qc le da sentido, que la bre y a adorna de signifeados, que la justia y haa la epiPoder, ideologia y violenciaPoder, ideologiay violencia Ignacio Maria-Bar6 Edicion, noduccign y nots de “AmlioBlancoy Ls de la CoteEOLECCION ESTRUCTURAS ¥ PROCESOS Seve Pesan Picptseginy Pagar © tor ate SA, 2009 Fev 55 26008 Need Tidone #1 42 oot Foc 91 S43 1 8 mal ohne ‘iments lyase Mas, 2008 one, 2003 {2 hiro Bane y ui sensu sise-a-e pe aga 90288-2053 Maso inprern St CONTENIDO Introduces. clogs soil de ls violencia la puspectv de ge ‘io Martin-Bas: Ama Blanco y Lats de a Cove 14s aes estRUCTORALES DE LA OLENA 1. Wolenciay agresn wot ens 2. Plarizacén soci y vilendia ee 1 soRDEN POLO, LITO SOCAL Y MRR 3. H piclogo sci ae la guerre : °c ae far, 5, Reprsion policy terorsno: ss consecuenispicoiss. 6 Goertay trauma ct aie vvesseesvessseceseesssesene 7. Goert y sad mew : Bitogste Indi “ ae 15 ae a9 as En 7sInveoduecién PSICOLOGIA SOCIAL DE LA VIOLENCIA: INTRODUCCION, ‘ALLA PERSPECTIVA DE IGNACIO MARTIN-BARO Amalio Blanco y Luis de ta Corte 1A PSICOLOGER SOCIAL ¥ LAS «ARMAS DELINTELECTUAL® En alg rine de su ensayo Bl laberint del soledad, Octavio Paz abl del intlecrly de ls que, etn, stempee fron ss Prit= ciples carta, a saber las del sexamen>y la eco. La caacte= ‘tach rua penetrate luminadors per sobre todo os iene perfeta para presenta Ignacio Mart Bar, tl veo uno de los "entificosscaies que con mis intensidad y enteya personal shan ompromtido con ale ines or lo pronto, feel mismo Marti-Bar6 quien defini su pers peti psico-social como una prspetna etic, Aunque conv ne adver desde el principio que para Mari-Bar la cra no es Sélo una exigencia interna aura pina ileal que pretende subsana sus vcios ms arraigados sto sobre odo, un inperaivo moral (en si caso, de races eligon), Porque lo cierto es qua v= Ges alenentare 3 ete sialon Iie como las qe lie tno ivi, el into sos everd obliga a opr ent la fsa newtalidad o a belgerancia dca que nace de ls indignacin ance los horrors de ete mundo. Porque e ls obssi6n por cir ase ca paren nterprtatins, ex etlequia que prom la emineia Un crica deo socialmenteesubleio, ln que en demasadas oc sions somete ala cies soci Jos exclusives neeses de quienes dena el poder dea manera mis voraz ghia. Por es miso, DMartn-Bar sempre pens que es alin de nsttalidadtaicioba en alguna medial propio original qu justice nacimiento de tes clenia socials, Probublements nol faba ran. Tod ee‘haya recortido la historia del pensamicnto social de los dos dltimos, siglos reconoverd que la mayorta de ss protagonists dedicaron 5 vida intelectual al esi de la realidad socal animados por la ex: peranza de poder contribur asia acelerar el cambio social Uno de los ejemplos mis signiicativos en exte sentido, y los propics ojos de Martin-Baré fue, indidablemente, el de Karl Marx, quien ha- biendo criticado a Ios fl6sofos por la inficacia de sus teoras para ‘cambiar el mundo (los flésofes no han hecho mis que inerpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transfor marlo», sein la Tesis 11 sobte Feuerbach), consumié la mayor par te de si vida en formular una teoria social propia que fuera dtl no slo para explicar el cambio social, cosa que tl vex lograron alg ‘as teorfas anteriores, sino para converir st Teoria en el principal ‘stimulo que incase dicho cambio, Preciamente, el modo en que ‘Manx y otra figuras insgnes de la primera ciencia social pensaron, {que la teoria podria cealizar esa virtd transformadora fue el dela srftica, Dicho en otras palabras, en la medida en la que ls esfuerzos del centfico por comprender {a realidad socal se apoyasen sobre tun critrioérco, la cienca ervicia para poner de mantliesto las con tradicciones morales que caracterizasen ala sociedad, operand as sobre la conciencia moral de sus cidadanos, La urgencia de Ia critica resulta mucho més evidenre en deter- rminados contexts sociales marcados por I volenda, la excisién socal o la pobreza; preisamente las tres notas que mejor resumen la reciente historia de Iberoamérical. Esa misma historia, pensar 1 ead iene ea! ic, obey vlna gue aldiamos ol olinen antir Mara 1938, 0) doe op pts {Sport ton de rua oe pos nears en Cntr de atin: Essen meio cus bee sss dl lr ineanetce Eton se dace mers que mrp sade paper hence, are, ‘moet ecto, nica sido CELANG 197725) Una Stein gue aes por ont rine onl sant se bor dele Fain pce pcteeacal yor ln pres Mar Bar Toner: ars ‘hepa ls stuse inauma gu se enorme anes mayor de ot bo Iniscumeraonpne Se maser lsrcer porno dels ‘Src sora aque eaiiea oclogscmcne co once eae: Sot oligemens como esctns peers, yrs poce nr Fale a pesorme ra ar 19, oy doen pa te oe Sten ed {Tre spade de venous desi ens pane dev yeh scar gto train del pes steve i ue eto, en crt Sova hrem gue os ncjetwacion deh tien y esa aco Ara lavor den vid de os hoses gues conten lead eanerl 7 10 Marco-Sar, er la gue cligaba moranente a propio pitlgo Horeamercao x asmiel papel Je nell tc ats gee Ar nero enperto orc. Eat fe dc hohe verdaer seid det propia fobe uns Pcologs gi eonnar los aeanes que ahaa sido realzndos en otros Sts del permaminto eltco Tetoamercano como ld la feaggi del primi, la Sociologia Ur te dependencs ol elo dee Horacio, fel sentido Sha Biologia dels Wocclon. Las eoordenadas cs Sl pense Ti heron one ra conc y semen un fncipie fundamen: sop por unas mayoras populares as Pier ua a wore, sprees ba tocado nepal pa BEV van A prs de once ein abra a rs ui opin mica qu conto a coisa (Sintra ona diya nt acomodanen 4 ote fecal que paint bs ened ns condom {lc Ren see rn mio mis ponon ln pan {Gin ens map ool acuta la ayn Pobre yon fe ae ee tN es a ng ta de pon fee gatas oe ree ee Sc Senera kx ne noe seo cela deo adele esacon de orunorno egies acpi des oo, onde el ined depos no exis a desman de odo (Marien, 98,7 LAIMPORTANCIA DEL ANALISIS Jato al oficio de la etic, volvamos a recordarlo, Ocavio Paz hax bia propugnado también Ia necesidad del examen rigaroso. Habria {que empezar preguntindose si ol compromiso éico al que Mari ‘Barétrataba de ajustar su actividad intelectual no seria conteadico- to con esta pretensin de abjetvidad: «Si Ia Psicologia asume un fon también deforma uniwerstars, fue desenmascarr la meni, fetsobre lls no we puede edifcar ninguna sociedad jase SobiNo, 1982, 254), Preciamens 7 oma tend Ia opr de comprare propio lector de ese volume, los procesos de sinstitucionalizacién Ge la mensra» y de ocukacin de la realidad social consituyeron un tipo de pricticas a las que Marsin-Baré acibuyé una enorme in- flgencia sobre la evolucion dela guera civil salvadorefa Gereament, la guerta civil slvadorefi ba spuesto una agravacin dela mensis colectv,es ecg, del ceutamiento de a edad y de Iori sinc eo cone po ae el poser ‘xublecdo que ha agusisado la exqezofrenis dele poblacin ene lo que vive coriianamente yl defini socal el objeto de su vi- ‘eat Sin embargo, est mens socal en lo que ene de deter ante es nce, sino que e part cel oedenamseno estructural ‘el pais, La seas social constaye la claboracionSeoliea deb tealdad en forma tal qu sea compatible con Io inerests de acs 4 dominante, fando sao lites en qoe ee puede mover Ia con- ‘Sencacolectiva low mninos de eonienia pole en cad Sus 56a) (Marin Bar, 1998, 138) 5 ae nei hs Boba ieecan neers Se tscat otra ences cate ttre eigenen Seite eeaemenn rs oeroeeeans Se oer nemercacaeniare eee reece sro ees aac ae Rp beet cota teeter Smeweanret arena ea cen 1BEstas afrmaciones deben ser tomadis muy en cuentas $e quie- re entender correctamente lo que separa # los trabajos de Martin Bard de otras recientes propuests para una Psicologia socal critica, Mientras que nuestro autor concibe a -verdad como tna exigen- cia y un objetivo irrenunciables para el eienifico social, algunos de los actuales defensores de una neva Psicologia socal critica} pose ‘moderna niegan de hecho la conveniencia de seguir apelando a esa vieja nocicn epistemoldgica (ver Parker y Shotter, 1990; Ibiter © Iiguez, 1997; Doménech e Thine, 1998 Cabrujs, 1998). Asi, en palabras de uno de los mds incsivos defensores de est otra co ‘iente critica, se impondsfa ante todo la necesidad de asumi una Posicionrelativista 5 por consiguiente: Es obvio que al decatanos relative demos patents lo eos gue cstamos de creer en la verdad et decr manifestamos macs te havo ala creenciaenlaposbiad de dacriminat entre diferentes ‘munciado en fancion d's valor de verdad (Doménech « Tae, 1995, 17), Desde esta poscion ala ver critica y posmoderna ante el pro- blema del conocimiento, se nlegaentonces que la ciencia constitaya ninguna perspectia privilegiada sobre el mundo ni que lo deseriba, con mayor precision que cualquier otto tipo de dscirso. Los c tios de verdad ya s6lo se conciben como producto direco de las, ‘contingencias y convenciones socio-hitéricse props del contexto bajo cuya infuencia han sido formulades. En consécuencia, no exis ‘te modo alguno de fundamentar el conocimientocientifico, sino que ste se considera un sjuego de lenguaje» mas cuyo valor depende SGnicamente del tipo de prdcticas sociales que la teoria misma ayude ‘generar’, Pero, indudablement, el echazo a la nociGn de verdad implica también wna negativa a analiza las realidades problemétias con las que habitualmente ha venido enftentandose el cientica so ial, tal y como apunta el socidlogo Manuel Castells (1998), Si no hay verdad, tampoco habeé andlsis verdadero ni fable; de manera ‘que el propio anilss se vuelve un propésico pricticamente inti, nis bien, ilusorio. Eso es lo que pareee sugerit en agin momento tno de los primerospsicdlogossociles que tomaron la opcicn por ! posmodernismo, Kenneth Gergen. Hablndonos de su propia ver sién de una Psicologia posmoderna, el construccioniso sotal, 4. Sobve sto pad vee el concepo de ors psa sufado por Geren 930), 4 ‘Gergen no tiene inconvenient en reconocer el desincerés con el que sat propuesta tedrica observa cualquier otro aspecto de Ia realidad Social que quede mas lla de los limites del lengua (por lo visto, el finico objeto de estado letimo para el psicdlogo social del futuro) 1 objec ui que se placa al constuccionsmo —a menudo compatada por una sonta de complaeri ola exibicon de una indtgnactn fstfeads—~ sla desu apaent absurd ante ura ‘ealial ostna El eonstroeionismo no wigs qe haya ex ions ylrecy meen mde mis re mde cee ee eee Bee ae al contrainte es ntolgcrents mado (Gergen, 1996, 98) En sums, el construccionista socal no se atreve a nega ni ‘mar nada, més bien podria decir que se dispone a enmudecer*. A “Martin-Bar6,en cambio, los gestos de indignacdn alos qe Gergen hhace referencia le hubieran parecido plenamentejusificacos ante el hhorror de un mundo como al de El Salvador, con sus miles de asesi- natos, toruras y vilaciones, acontecimientos frente a los que el ientifico social estaria obligado a pronuncarse, Pero que Martin-Bar6 no comulgase con certs postulados del relativismo radical y que siguera axpirando ala verdad no significa ‘que no tomara coneencia de los problemas epistemol6gicos que ‘desde varia décadas atrs se le venianplanteandoa la cencia soca 5. Una precast sobre consi bi y elim spnosceics soca oencomtramor ee sna ue dees cnet ‘fecen Eo Lan de Epes, Jose Mara Gonslesy Cratibl Tore: pr ‘na, por spac x gu una er sepa gues alba ene lca fins cn ca tepada ge nob eros cpa el ce ssp {ie taroco cl daca sobre ldap ner sleet dv sep eer gon mere at fora es ‘co gu pede tenes sentient ocr sa aman "no Sy veld Ales" que sume deus ens parson, tol elenca pee giinosaa 4: Epis, Gone y Toc, 194,140), Fane Kala, qe atado como a. ‘deel das cel sao ea modern (Ue a roan denon ec Du oer senda Hanna Areas ice Gana Janoch leew eto say con vcaion de ont: Sus eso son conmvedorament nen les Dice uted made as inpresones ques ass ern em ed qe _xontedaenor lar ots mma ners, Act td el and ce ee Sara [ofa exert elas impress lr sented ‘Snel mero de pia lindo” Todss ee sor carton pr ‘Sabra dal suchor Uanouth G. Comenacoe cor Rafa, Hasna: Dean, 1997.56, 15De hecho, s0 propo enfogue tas de aor alguns de eos po- Sema, aunque fera de asad, ues els manonalcsbana a Postliad de detarollac una verdader propecia ein en cl limbic dea Psicologia socal En ee pune a Picolgt soc et tea de Mactin-Bar implica como peso previo na crtea dea far clogs social egeménica, Fl problema episemolico que reoeupa a Marcin Bar6 ex el dela supuea univer de le Pincipos ols leyeseabecida por la Psicologia social Ea real Aad lo que agus crime ese modelo de ractonaidad desde el que itezpretemos la aportacones de nucsradcpina Como ha sefalado Stephen Tolmin 2001), una de las mis pe sadas herencias que hemos reibido de nuestro pao intelectual, se paso al que solemos lamar «Moderndads, ha sido mueste Dredieein tebie por lo abstract rete alo coneer lo univer. Sal frente lo particle yl asempora frenceao temporal. Apa. tie de un enfoque semejantey omo correspond sl vig nocén de verdad, ness torasdberan ser abanacas,gendres 9 per dlacables,aplcables a toda cranstanca istic, toda relied Social y humana. Pero esta sprains una razon pars univers Ya cicada por flésfos como Dilthey u Ortega j Gacy nes ba hecho eaer + los cenfios sociale en incontabes eros aly com el propio Marin Bar econoce, Al scvndcar una Piolo socal ate als parclrcs condones hrs den realidad centoumericina, Mar-Bars tat de hacer frente alos rege de tna diiplin Gentes afecada de also, siempre icinda 8 torgar cacdter unveil as alargosy teri, ast como as bestmar con demasiado deparpj la dependence de agus rs Peco a sus contexos de deveubrimientoy jusfensin Poe const Balen al vcjo ideal de una arn yuna Yerdad aborac, user ¥ aermporalconvendrtaconraponerel modelo de una seacionall dad istrica, expeson de dans resonancas omepanas que Marti-Bar egn x emplear en alguna de los textos que agu sere cope (er epigrafe Sad mental pars un pueblos ex el dio ce ilo de exe volumen) 1, Posolar un malo de ins ities (Marna hla sie ‘ald soil 1998, 303360), dunn aon os sade osc pa Aescenier concrsons etd a ein, Devas Marcin at, ce ots Cos Serato, mu digisn ene wile manars de nope slo etalon es epizate “Cones de evens en el epi )cate levis nga ila drvadn (er pial cote soci a a sli inbér del aptlo primer). Eo anni Ndr spon om 16 or or pare, elidel gue Marina repro la epi donate en ambit de m propia siplinn ha aare Pott difeatiades. nly de a berenca alia en ln colo Social puede amin recoosers en nuestra vis cosumbre de Stmundo dese as ea, desde sexe eur preva, in Huedanmente seria macho ins scone proceder de manera Sores mando a la ideas dee el mn yjngando a alas bee de te, Eta edocs deo real alo eal puede empebre- Mis prspectin ysuctar graves dizorione en el ands expe ere ss ean Gu xen te clean ‘eigen yc de apliacon son tn notables cono ls gue dnguen = raocedadsatadorena des soedad norteamercana, La medida DMart-Bar propone pas spre ese seis retodlop- se oma de manera tan sella como sigue (Que no seen ls concepts los que convogus a ela sin a ‘calidad In que bosque sls conceptes; eno sean las eri la ‘pe definan los problems de massa siuacin, sino que sean ls Droblenas los que relamen , po as decrloy jan propia tor + a Ore, lla shins conscoencs la avers qe ease [etiam haran land del bone ene ua soneaes Hi fo Eillaer obliga a“ todo lox cooepron referent eneno ie (pale lida arama y someon un al stoic (gs, 1947, 539) {Ear postion qu Mar tars serbia pleonments ben qe por motos my Ua ond Orgs osc gu uo xl wa ora de ber ym de sda cn ch pun de in eo por misma er necro sat rca el onccinio cose mo petenet vente era unter ie elocaly arc Mass, nestor la hsora ena Pcl t= ha demic acne atl le fexemeaoe co eg formas ye. eens sempre (Martine, 198, a neces de stv cose oes daecr dep patie cplncelige creas tion ‘Specie del ber de ar ena oss pene fandomeraicnt de ‘Sec horcdd el se uno» Mra, 1998, 328, De bho, el mi (Er de on metre lor gc te eran clin mee prec fee ol den hora polis en lela pers de a es tes wes (lo de uno ce ls eae del eaptal 3 dePolo dee Tec Ma Toms, 1958) gue see oes +s clog ators Sid nl ysperacia del meron er (ror ot el cap 7) Foe oe Dostrs conta. En eta chase? de sepsombre de 1958, oh sus de st {mein letra con tra conicin a crc dee gue aes co Tamer las ems, no pce vrs esses tact, sino cs ear induc hiram | Yo topo quer antec istray en ooh eenepopind pier a mipte apap mePnaT ET ame quite dec ave po parte oy pariarn,y no Bebe connie ane veces oat) cont de bea 7‘ci, Se rata, en tts palabras, de cambiar muesto tradicional ‘elim metodlopico en un realm crito (De hecho] orp Soot aint nonce sw bes a reales, er d et min eldad que apobiay sagt at mayors po Palate. Pores, Tos enone que me piden una bloga ‘ada vez que tienen sue analiza un problema les eeconiends he rinero se dejenimpactar por el problema mismo, gue secnbelan Ae realidad cotcana gue vven las maoriasslvtdoechany alo despues se pregame acre de lox conceeoy, eats mrs ‘onde ands (Marin-Bao, 1998, 31), En sua, el punto de partida de la actividad ciemtiiea de Mar- tin-Bar6 fu la propia realidad circundante’, Su pasion por la Pico logia social fue en verdad esa misma «pasiGn por la realidad que, Segin Robere Nishe, también definis a los autores clsicos de iencia soil. Por eso, s6lo partiendo del violento mundo en el que Marsin-Bar6 se vio inmerso podremos legar a dar leno sentido 3 2guelloeabsjos suyos que eh orno a ese mismo ema oftecemosen BL SALVADOR: LA VIOLENCIA QUE NO CESA ‘Cuando el joven Ignacio Martin-Baré pis6 por ver primera tierra ‘entroamericana, la vida poltica slvadoreta se hallaba en plena cullicin, Airis quedaba una sucesién de gobiernos cuyo ejteiio ‘munea persigai6 otto objetivo que el de preservar el poder dela vi. 2, im eid gs cro no pede tra mer ele Slo des ial go de cobra: nbdcorolo eons, impertanes neces ‘ opsin ops ia dcininane el tains mucin face ato xptasinywolotsou su aes ms ator Y Is fonder dt. ines crc, kta, duno de loans ccs or pte tts scp sexta voi emis de or che amen Teds ‘deh at der ste te vlaen Syn en leer er ca denims y nous 1,2) 9 de cpio ty 6 Pol de kei, Cc puro de parle rled esotnee ld un ate oc oa pare de scl es Pls pasos ‘ecm (Mart Sn, 199), Rend Sacre (pecans concen A lc ec: ve eral connor ace oe acs see ‘se prmeo) me ween conartcnssocl lq ade Boe set nabs sen Pa clopor che e o "rats del conic de She fee ns pt Se a caption soe oe Tl er ora el cape “ 18 quia cfetlera que, desde finale del siglo x0, habia conse- facapararel control de la produccién, la exportacién, la tierra Flos sistemas politico y financiero del pas, con el inestimable y hae ‘apoyo de Is fuereas armadase incluso de un sector importa ide la Iglesia (ver Browning, 1971; Menjivar, 1980; Montobbio, 1999; De la Corte, 20013). Sin peligro de exagerar, podsiadecirse n verdad que, desde finales del siglo xix hasta finales del siglo 2X, falvadorefos no han conocido mds que un Gnico régimen potti- de cardcterautortatio, por mucho que a veces adoptaa la apa ia de una democracia, y cuya auténtca élite retora jams dud templear la violencia cada ver que el pueblo tuviera el atevi- o de sentirse indignado ante sus flagrantes ahuson de poder. sire como dustracion del dexpotsme sangriento de us gober- Ye ss fueassarmadas desta a matana de unas 30.000 nas (496 dels polacnsalvadorea) con la gue el gobi fo dcatrial del general Maximilian Herder Marne: relic puna movlizaioncampesna promovida por el pacido comic, os nacimos medio muereon en 1932, escbifa despus el por- ta elvadoreno Rogue Dalton, tratando de precise significado Bo iepesa a bxona de ox pats cout aqucla wats, conversa | tnalmbolo de a coidians violencia represva que sued alos he- -chos de 1932 en forma de detenciones injustificadas, torturas, se- ests, violciones asesiatoe u otras matanaecoecsias ceca das por el eri las aeras de orden pblico (extensiGn natural efit) 0 también por grupos paramlitaresgeneralmente cons fides por mitre en activa o en algunos casts ereadosy finan salespe Tn ligargu latifundia (os triterentefmowon seus | drones de la muerte) PV nforme dela Comise de eral dea wn ane capa aaa ‘Beto eAeita eos waar dla Mees (ONU, 198517220), ye ‘ir as ones de ctecsn Lo ae en hos sens emis oN be da ‘que lo gue seh caegrzade como halos perpen por ks excuaones, ‘et ere en ons rary alors on cat pista del we fot de ‘oer en Sarsdoren lot aor 90031991, Ls Cont de Verda ec tas amps laformacé de ennai de lls tga leet eros ‘ienbros de Rnren Aude y mies ees de le earned mae ‘ies ation y elon su pain en Ins fs aks nels de oor ‘Mean, oe} Nnansenia (| Ls ead ado esrtrs 6 [als por partkpucin acta opr ler slenaron ua onl deal nt Jez que schrepat or nels denn ado arial as converting Jnncumento de terory depres stem de ean fla de pears Po 9El tiempo que transcurre entre el primer camacto de Martin- Bard con terras salvadorefias —afios sesenta— y la década de los fochenta, petiodo durante el que se elaboran la mayoria de los tae ‘jos agurecogidos, es un tiempo de transcién hacia la guerra ch vil, Entretanro, en Ei Salvador se irs fraguando la consolidacion de dos tipos de fuerzas de oposicién al regimen esablecido, unas de x ict ordinatio, en forma de nuevos partides politicos, y otis de fndole potico-militar, muy influidas en este dkimo caso por el Ex to de larevolucién cubana de 1959 y por laconsiguient prolifera ‘én de movimientos guerilleos por toda Theroamerics. A medida ‘que las fuerzas de opesicién politica ordinara fueron acumulando fracatos, debido a las negativas de los oligarcs y les altos mandos militares a reconocer su Exitos electorales, el apoyo populac ala op ‘in revolucionaria se rf incrementado paulatinamente incluso un ierto sector del ejérito até en algin momento de forza ef cam= bio de régimen, por ejemplo, partcipando con la mayoria de las, ‘otras fuerza sociales y politcas de opesicion en el lamado -golpe. de los capitanes» (15 de ocrubre de 1979) que impuso una santa CCivico-Miltar»y prometé la apicacibn inmediata de un «plan de ‘emergencias encaminado a reyonerar Ia vida politica del pas y acs ‘imular ou desarrollo econémico y socal. Pero el ensayo fracas ‘Les militares reformistas fueron incapaces de imponer si valuntad sobre los sectores mis retrégrados del ejrcito, empenados en hos- tigar y reprimir con violenca las protests y reivindicaciones pati ficas protagonizadas por as organizacones populace. Y ash mien- tras se fue gestando la radicaizacién de aquellas organizaciones su unifieaciOn con los movimientos armados ya existente, la ma yoria de los miembros cviles del gobierno abandonsrom pid mente la Junta, frenando asi los planes de reforma y devolviendo, todo el poder ala vieja ite militar yeafetaler. Y si el 22 de ene- +0,de 1980 el eército masacré en San Salvador a la maltitud de par- ticipantes en una manifestaciGn, dot meses después el 24 de mar- lc p18, De were qu Edo de Saad a ads de eae de rlebrs deFuerea Ards lode ancionain cee eps de ber Partido, romovidoy toad lfaxconumseao clos unos a met ‘que atcarn de fora lps seme dea plea cs 18) Sean seer ee es orc i cde mur pera ‘on a guera pels (et cape Se ete volume, en peel el eipal ‘a per pare). Ava Inertial ys habla pc dade eee ss ‘lg er Antes neato El Saar Dead Spies A Gnerment Se ‘ep Loni Ate sermons Paton, 1988) 20 al arzobispo Romero remariassxinado en plena mist, on “Ba despots de haber pronunciado ou mis famoro sen. @Qs or ceplicacion de exe crimen que la que nox aporta as palabras fom ita wn pone de is pcs, yen ome de io pucblocuyos laments saben sat slo cada da mae r oso, es spices arg, les orden en nombre de Dis: In wepreatals (Sbriny MartirBard y Cardna), 1980, 1). Eps an guerra bia sera evn de mess, meses de eh on exo eta qu Marin Bard prepa con lei 5, Genciio en Sacer, se scala que ee el 15 de 0 | fare de 197, fecha dl golpe de loscapitans ba nals de 1980 | Gerepnraron 10540 denuncas de oro ao sso content zas militares y paramiltaes. Por sa parte, el informe de la Co ion de la Verdad de la ONU indica que entre 1979 y 1981 se pro jeron notificaciones formales de unas 30.000 asesinatos politicos "se obturo noticia de que unas 500,000 personas se conviteron en lazadors, es decir, decidieron huir de aus lugares habituales de -residencia por temor a perder a vida por motivos politicos (ONU, 1993), Desechada toda alternativa ala insurreccin, el 10 de enero ‘de 1981 la coalicign del FDR y el FMLN inicia su primera gran “ofensiva y principia la guerra abierta “Para comprender Ia guerra civil de los aos ochenta hay que to- mar en consideracién dos importants claves de poltica internacio- nal. La primera, el éxito electoral de Ronald Reagan a principios de -aguella década. La segunda, el triunfo del movimiento sandinisa. "Con Reagan, y a consceuencia de lo aeaecido en Nicaragua, El Sal se converte en un frente primordial para dirimr la confron- | takién Este-Ocste. Desde entonces, y en palabras del seretario de -_Bitado norteamericano, Alexander Haig, la politica estadounidense onvierte a Centroamrica, y mis concretamente a El Salvador, en ‘nes de un mapa de guerra oficiosa contra la samenaza sovitico-cu- banae. De repente, Centroamérica se habfa transformado en we lu- ‘gat més importante del mundo para Esados Unidos» (ctado en Montobbio, 1999, 87), segin declaracionesrealizadas en 1981 por eane Kickparrick, primera embsjadora del gobierno Reagan ante la ‘ONU, Habia que impedir por cualquier medio que ninguna fuerza ‘evolucionaria supuestamente sufragada por Cuba y la URRSS ob- tuviera un solo triunfo mis en cualquier otro pals centroamericano ‘entorno ala ardiente cuenca del Caribe (Haig, 1984; Montobbio, a