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ENSAYO

¿DIOS EXISTE?

CRISTIAN CAMILO PIEDRAHITA MONTOYA


(cpiedrahita)

FILOSOFÍA MODERNA

Presentado a:
LUIS JAVIER TOBÓN

FUNDACIÓN UNIVERSITARIA CATÓLICA DEL NORTE


LICENCIATURA EN FILOSOFÍA Y EDUCACIÓN RELIGIOSA
BOGOTÁ D.C.
10 de Agosto de 2010
¿DIOS EXISTE?

La existencia de Dios siempre ha generado diversidad de debates y posiciones


que han generado una gran cantidad de explicaciones y razones para decir si
existe o no ese ser Divino y Omnipotente. A partir del racionalismo se han
tratado de desmontar una gran cantidad de estructuras ideológicas anteriores a
su aparición buscando ante todo acabar con los antiguos prejuicios de la
escolástica y con el método empirista que se cimentaba en las experiencias
sensoriales, por lo tanto es importante que desde la razón busquemos
entender, comprobar o negar la existencia de Dios.

En primer lugar es importante que se entienda que podría generar en ustedes o


en mi la idea de la existencia o la negación de un ser supremo. Cuando
tenemos una idea sobre algo o alguien se entiende que ha podido ser
generada por una causa, ya sea externa o por uno mismo, y que por lo tanto
están en la mente por alguna razón. Por esto ante la idea de Dios es
importante cuestionarse cuál es su origen en mí, o sea su causa.

Cuando normalmente se define a Dios se le considera un ser Todopoderoso,


infinito, omnipresente, creador de todo cuanto existe… por lo tanto surge la
pregunta de si es posible que sea uno mismo quien genere esa idea teniendo
en cuenta que se es un ser finito y contingente y por lo tanto no se poseen
cualidades similares a las atribuidas a la idea de Dios ya que la causa y el
efecto deben poseer una misma realidad esencial.

Aquí se hacen presentes dos cuestiones importantes que se deben tener en


cuenta, en primer lugar la conciencia de nuestra propia finitud y contingencia,
de nuestra necesidad de trascendencia y la nostalgia de la eternidad y en
segundo lugar de que el solo hecho que se genere en uno mismo la idea del
Ser Omnipotente es sinónimo de que solo puede ser Él mismo quien implante
la idea dentro de cada uno.

Por ésta primeras razones se podría concluir que es inevitable creer y entender
que Dios exista, es la llamada prueba Gnoseológica cartesiana de la existencia
de Dios; pues se concluye que ya que uno como ser finito no puede ser la
causa de la idea de Dios, es por lo tanto seguro que la misma idea ha sido
implantada en uno por Dios mismo.

Aquí surge la cuestión de si sería posible que sin depender de Dios sería
posible tener su idea en el interior, ante lo cual surgen posibilidades como el de
que por los azares químicos y físicos del cosmos se haya dado la existencia de
ustedes y la mía y así mismo se haya implantado la idea de Dios desde ésta
misma realidad. Ésta posibilidad es bastante improbable ya que la idea de un
ser perfecto no es posible que se origine solo por cuestiones biológicas.

Otra de las posibilidades afirma que el origen de la existencia se hubiera dado


por medio de unos entes superiores a nosotros pero inferiores a lo que
entendemos como Dios, y por lo tanto ésta idea abría sido implantada por ellos
y a su vez en ellos se generaría la idea del ser infinito y perfecto porque así
mismo lo perciben ellos en su existencia, por lo tanto se confirmaría que Dios
existe.

Otra de las posibilidades es que nosotros mismos damos origen a nuestra


existencia y por lo tanto nosotros mismo somos quienes implantamos la idea de
un ser todopoderoso en nosotros mismos. según esta posibilidad se caería en
la contradicción de ser el origen, tanto de la propia existencia como de ser la
causa de la idea de un ser infinito, pues al ser concientes de nuestra finitud ni
podemos dar origen a la idea del ser perfecto sin participar de su esencia y por
ésta misma razón al no poseer infinitud y perfección es imposible ser los
causantes de nuestra propia existencia.

Al pensar en un ser perfecto como Dios inevitablemente se tiene la idea de su


existencia ya que sin una existencia real ya no existiría perfección. La
perfección de este ser no puede limitarse a una simple imagen o pensamiento
sino que debe implicar una existencia real e infinita que le brinde éste atributo.

Dentro de ésta dinámica se concluye desde la lógica racional que si se piensa


en Dios por ésta misma lógica ha de concluirse que Él existe, ya que no sería
posible tener la idea de un ser perfecto al cual le falte la existencia verdadera,
sería una contradicción.

Ante éstas evidencia que nos ha legado Descartes y su método racionalista se


podría concluir que por medio de la razón se prueba la existencia de Dios, pues
por lógica se concluiría que el solo hecho de detenerse en la idea de la
posibilidad de la existencia de un ser infinito y todopoderoso es la garantía de
su existencia.

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