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4 días, y dexametasona 40 mg cada 2 días durante 12 días, así objetivado mediante ETEST® (Biomérieux Lab, Estados
como radioterapia y autotrasplante de progenitores hema- Unidos).
topoyéticos. En 2015 presentó una nueva recaída, por lo Se procedió a iniciar tratamiento antifúngico intensivo
que se decidió intentar un alotrasplante de intensidad redu- con voriconazol a dosis de 400 mg de carga, con manteni-
cida (mini-ALO con terapia de acondicionamiento reducida miento posterior de 200 mg cada 12 horas y anidulafungina
FLUMEL-ATG, consistente en melfalán 70 mg/m2 , fludara- (200 mg intravenosos de carga, con pauta posterior de
bina 30 mg/m2 /d, bortezomib 1,3 mg/m2 y timoglobulina 100 mg cada 24 h). A los 3 días el paciente comenzó con
2 mg/m2 ) con incremento de la dosis de quimioterapia con un cuadro de hemiparesia derecha. Se realizó estudio de
melfalán, infundiendo hasta 150 mg/m2 . extensión con tomografía computarizada (TC) de tórax,
Cuarenta días después del trasplante fue valorado por evidenciándose lesiones cavitadas en el lóbulo pulmonar
dermatología al presentar de forma súbita nódulos sub- superior derecho no conocidas previamente (fig. 3A) y una
cutáneos eritematosos e indoloros en la cara anterior TC cerebral (fig. 3B) donde se observaron 2 lesiones avascu-
de los muslos, de aproximadamente 3 cm de diámetro, lares frontales compatibles con ictus secundario a proceso
en ambas extremidades inferiores, así como en el flanco infeccioso. Se decidió secuenciar el tratamiento a anfote-
izquierdo abdominal (fig. 1 A). Una de las lesiones, loca- ricina B (400 mg intravenosos cada 24 h ajustado por peso).
lizada en la cara lateral del codo izquierdo, presentaba No obstante, a los 7 días comenzó con un cuadro de disnea
una ampolla tensa de 1,5 cm de tamaño, de contenido san- grave dependiente de oxígeno, afasia y deterioro del estado
guinopurulento, con nivel hidroaéreo (fig. 1 B). No refería general. Una nueva TC craneal mostró múltiples imágenes
otra sintomatología en la anamnesis. Coincidiendo con esta similares a la previa, pero en todo el parénquima cerebral. El
clínica había presentado una elevación progresiva del galac- paciente falleció 2 días después de esta nueva presentación
tomanano sérico hasta llegar a un índice de antigenemia de clínica. Por voluntad de la familia no se realizó necropsia,
0,9, con niveles previos indetectables. no pudiéndose recuperar tejido cerebral para correlación
Teniendo en cuenta la clínica y el contexto del paciente microbiológica.
se procedió a realizar una biopsia cutánea para estudio Aspergillus sp. es una familia de hongos eumicetos,
histopatológico y microbiológico. El primero, realizado de generalmente presentes en el ambiente y con potencial
la lesión en el codo, evidenció una ampolla subepidér- patogénico oportunista en pacientes inmunosuprimidos2,3 ,
mica de contenido purulento y un infiltrado subyacente especialmente en aquellos con un recuento bajo de
de abundantes leucocitos polimorfonucleares produciendo neutrófilos4 . Las especies responsables con mayor fre-
gran destrucción tisular, con desvitalización de estructu- cuencia son Aspergillus fumigatus y Aspergillus flavus3 .
ras, desestructuración de haces colágenos y borramiento de Aspergillus sp. se encuentra de manera ubicua en el suelo
los anejos (fig. 2 A). A mayor detalle, con tinción de PAS, y en la vegetación2 . Aunque la afectación pulmonar es
se podía observar estructuras lineales septadas y bifurca- la más frecuente5 , el hígado, el cerebro y la piel pueden
das en ángulo agudo a 45◦ en todo el espesor de la dermis verse también comprometidos3 , presentándose la última
hasta llegar a las porciones más superficiales del tejido celu- situación en el 5-27% de los pacientes con aspergilosis
lar subcutáneo, de aproximadamente 3 m de diámetro y invasiva3,6 . La aspergilosis cutánea puede ser primaria o
de hasta 80 m de longitud en algunos cortes, compatibles secundaria2,7 . La clave diagnóstica la da la localización y
con hialohifomicosis (fig. 2 B). El estudio microbiológico en la extensión de las lesiones, siendo generalizada en esta
medio de agar Sabouraud demostró crecimiento de Aspergi- última2,3,7 . La aspergilosis cutánea secundaria suele tener
llus flavus con sensibilidad a voriconazol y equinocandinas, como foco primario el pulmonar1 , siendo otros focos como
Figura 1 Presentación clínica del paciente. A. Nódulo eritematoso en región del flanco abdominal izquierdo, no doloroso y no
fluctuante. B. Pústula sobre base eritematosa indurada, con nivel hidroaéreo y restos hemorrágicos en su interior.
CARTAS CIENTÍFICO-CLÍNICAS 289
Figura 2 Estudio histológico de la pústula por biopsia incisional. A. Gran ampolla subepidérmica con gran destrucción tisular
subyacente abarcando la dermis y el tejido celular subcutáneo (tinción de hematoxilina y eosina × 2, magnificación × 20). B. Se
observa un infiltrado neutrofílico denso con destrucción del colágeno dérmico y vasculitis asociada (tinción de hematoxilina y eosina
× 10, magnificación × 100). C. Detalle en el que se observan neutrófilos infiltrando densamente la dermis y rodeando estructuras
filamentosas discretamente perceptibles (tinción de hematoxilina y eosina × 20, magnificación × 200). D. A mayor detalle y con
tinción de PAS se visualizan estructuras lineales tabicadas y en ángulo agudo compatible con el diagnóstico clínico y microbiológico
de aspergilosis cutánea (tinción de PAS × 40 magnificación × 400).
Figura 3 Estudio radiológico del paciente tras 3 días de evolución de las lesiones. A. Corte de TC craneal en el que se objetiva una
lesión avascular en la región parietal derecha parasagital, con puntos hemorrágicos internos e importante efecto masa intracraneal,
compatible con cerebritis (*). B. Corte de TC-body a nivel torácico en el que se objetiva un nódulo cavitado en segmento anterior
de lóbulo superior derecho, compatible con aspergiloma (+).
290 CARTAS CIENTÍFICO-CLÍNICAS
los senos paranasales o el tracto respiratorio superior más infection in allogeneic haematopoietic stem cell transplanta-
infrecuentes. Por el contrario, la aspergilosis primaria tion. J Pak Med Assoc. 2007;57:324---6.
se suele adquirir mediante la inoculación directa en un 2. Perusquía-Ortiz AM, Vázquez-González D, Bonifaz A. Oppor-
foco cutáneo a través de heridas producidas con objetos tunistic filamentous mycoses: aspergillosis, mucormycosis,
phaeohyphomycosis and hyalohyphomycosis. J Dtsch Dermatol
contaminados, vías endovenosas1 en zonas accesibles para
Ges. 2012;10, 611-21-2.
venopunción en extremidades superiores e incluso apósitos
3. Galimberti R, Kowalczuk A, Hidalgo Parra I, Gonzalez Ramos
en zonas de piel maceradas y para fijar catéteres en M, Flores V. Cutaneous aspergillosis: A report of six cases. Br J
pacientes que requieran procedimientos invasivos8 . Dermatol. 1998;139:522---6.
Clínicamente se suele manifestar como pápulas y mácu- 4. Chacon AH, Farooq U, Shiman MI, Nolan B, Elgart GW. Cuta-
las eritematosas que evolucionan a nódulos5 , con formación neous aspergillosis masquerading as Sweet’s syndrome in a
posterior de úlceras con necrosis central3,7 . Es infrecuente patient with acute myelogenous leukemia. J Cutan Pathol.
la presentación en forma de ampollas, presentando oca- 2013;40:66---8.
sionalmente contenido purulento, como en el caso aquí 5. Braun-Falco M, Ring J. Nodular erythema as early sign
expuesto4 . El diagnóstico por procedimientos habituales se of systemic aspergillosis. J Eur Acad Dermatol Venereol.
2006;20:610---2.
hace con examinación por KOH o técnicas similares, así
6. Schimmelpfennig C, Naumann R, Zuberbier T, Ordemann R,
como la biopsia cutánea, que debe hacerse incisional y con
Baurmann H, Beyer J, et al. Skin involvement as the first mani-
profundidad suficiente2,7 ; esta mostrará presencia de hifas festation of systemic aspergillosis in patients after allogeneic
septadas de 3-5 m de diámetro y de entre 50-100 m de hematopoietic cell transplantation. Bone Marrow Transplant.
longitud, en ángulo de 45◦ sin vesiculación en tinciones de 2001;27:753---5.
PAS o Gomori e intensa afectación e infiltrado polimorfonu- 7. Blanco Barrios S, Morán Estefanía M, Sierra Pacho M, Giménez
clear de toda la pared, con necrosis angiocéntrica en muchos Cortés ME, Martín Pascual A. Aspergilosis cutánea secun-
casos4 . Se debe realizar detección de galactomanano sérico daria en paciente inmunodeprimido. Actas Dermosifiliogr.
si se sospecha infección por Aspergillus9 . Su elevación pro- 2002;93:511---3.
gresiva superando niveles de 0,5 en muestras seriadas, 8. Furlan KC, Pires MC, Kakizaki P, Chartuni JCN, Valente NYS.
Primary cutaneous aspergillosis and idiopathic bone marrow
especialmente en pacientes inmunosuprimidos, orienta al
aplasia. An Bras Dermatol. 2016;91:381-3.
diagnóstico de aspergilosis broncopulmonar invasiva o asper-
9. Mennink-Kersten MA, Donnelly JP, Verweij PE. Detection of cir-
gilosis sistémica9 . La PCR para Aspergillus es confirmatoria culating galactomannan for the diagnosis and management of
de infección. El tratamiento consiste en la administración de invasive aspergillosis. Lancet Infect Dis. 2004;4:349---57.
anfotericina B (dosis de 5 mg/kg cada 24 h), en combinación 10. Ullmann AJ. Review of the safety, tolerability, and drug
con equinocandinas (dosis de 50-100 mg/día) o voriconazol interactions of the new antifungal agents caspofungin and vori-
(dosis de 200 mg/12 h)10 . Es importante desbridar las lesio- conazole. Curr Med Res Opin. 2003;19:263---71.
nes que tengan aspecto necrótico e intentar restablecer la
inmunidad del paciente cuanto antes2,7 . P. Fonda-Pascual a,b,∗ , P. Fernández-González a,b ,
En resumen, presentamos un caso de aspergilosis cutá- O.M. Moreno-Arrones a,b
nea secundaria con presentación en forma de pústula en un y L. Miguel-Gómez a
paciente inmunosuprimido. a
Servicio de Dermatología, Hospital Universitario Ramón y
Cajal , Madrid, España
Conflicto de intereses b
Grupo de Dermatología Experimental y Biología Cutánea,
Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria (IRYCIS),
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses. Hospital Universitario Ramón y Cajal, Madrid, España
Agradecimientos
∗
Autor para correspondencia.
Correo electrónico: pfondap@gmail.com (P. Fonda-Pascual).
Agradecemos la colaboración de la Dra. Carmen Moreno de https://doi.org/10.1016/j.ad.2017.07.004
Anatomía Patológica, así como la del Servicio de Radiodiag- 0001-7310/
nóstico del Hospital Ramón y Cajal. © 2017 AEDV.
Publicado por Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.
Bibliografía