VIII. ECOFEMINISMO Y EL CONSUMO.
DE ANIMALES"
Carol J. Adams
Jean: Pensarias que violar a una mujer
csc bien si le ocurtea ella y noa
Barbie: No, me sentrfa como si
biera pasado a mi
Jean: Bueno, af es como algunas de no-
‘otras nos sentimos con respecto de los
animales.
1976 conversacién sobre feminismo y
vegetarianismo,
hue
Bl ecofeminismo identifica una serie de dualsmos: culeura/maturae
Jeza; masculinolfemenino; yolotro; razén/emocién. Algunas incla-
yen en esta sere el dualismo bumano/animal. De acuerdo con la e-
ria ecofeminista, la naturaleza esti dominada por la culeura; lo
emenino esté dominado por lo masculino; la emocién esth domi-
nada por a razén, los animales
{Qué pasa con los animaleren la eoriay prcticaecoferninista!
Fe priate ee eno aterormence en ds coneeneiassEofemint
sno: La Conexion Moje! Tier, abil d 1990, n Douglas Calg (espaldado
for Rutgers Secl Of Lave Newark y Women's Righs Law Reports) y en Los
Sundos dels Mojees Reads yPosibiidaden, Curt Congtso ined
pinto ncnaconal sobre Mujer junio de 1990 ex Hunt College Gracias 2
Kare J. Waren, Nancy Tuan, Melind Vas, Mar Khe, Bara Bauman, Grea
‘Gaurd Tom Regan, Nea Basu, y Te Waoughby potlo que han refieonado
yea sobre ee
TEL punto de arrange de ete esiy noe In tala de ls derechos anim
lesen que se ofesenconsidracioner mole Tes animales de acer asin
ters enimicnton,y sma comes huanoe. Mis texto xn dsr por
195Seis opciones ecofeministas
Los animales son parte de I natualeza. El ecofeminismo plantea
aque la dominacin de la naturaleza est vinculada ala dominacién
dela mujer y que ambas dominaciones deben ser eliminadas, Silos
tnimales son parte de la naturaleva,entonces por qué no son una
parte intinseta del anlssecoferinsta,ysuliberaién del insu
Imentaismo humano uma parce integral de la teorfa ecofeminisa?
Hay sis posbls respuesas que, a continuacién, debao.
‘Sos arguments, per agin punto de srangue et ecofesnismo, inte
to de sesbar con lie penises de ar dominations gia ques funda eh le
‘borin ineconecada dea mujer y de arr. Pol ano, desde
ta posture econonce en problemas, demi él de la suboedinacdn de lo an
trace Mi enuyo surge apc el echo de que el ands enfin nee,
enc de a dics ores subordinaidn dea macula, un espacio veal pe
tal tema delos anak, De modo que no ex vineland sor animales co
os de derechos uranos, sno que examin lugar qu os anaes enen eb
‘Unio dela es ecfeminists un punto de arangue que sume quel expo
tacgn de a oaccalers ine mls aspecto parte dl dela exploracén de lo ani
ales
En én ensayo hago hinceplé en a iol La ideoogla que determina om
solgimente oases, que los Ua rerminlen porge los considera er
ot coment, recede a lr cueone stoi on el dcuse de derechos an
‘aera loca eofeminisa Quiero poner eta idolgi al descubirto, ao 4
‘evds elo qu as ecofeminisasy ecologists enenden como ety de dete
‘hos anaes ene que oaranconsdencion: ea dels humaros alos an
‘male sino wavs del edie dees resuledes que dl dualisto humane animal
Fs octsonido, Ent algunos deere resltados eno la aparicion del mov
‘miento de derechos sna, como ls posure que rie a desde derechos i
‘mses y que sendin pc una manera ds bia deenende ls problemas de ln
‘prs de In arralea El problem esque eada vex qu ldacarso medioar
‘Sint biScoconidr os animaler come cuerposcomecle,pucbs certs,
low rzaamienae de las argumentoe que defend lor derechos interees de os
snmaes porque ext fndindoe ene dslismo humanofanial,y por oto
‘sldando la dsl del ie de la dominaein, quelle misma supone
rechanan,
196
El ecofemismo aborda la dominacién de los animales
cexplicitamente
Hay ezzones para argumentar que, de hecho, el ecofeminisme abor-
da el tema del sultimiento animal y o incorpora dentto de una cr-
‘ica general al maltrato del mundo natural. Por ejemplo, en el ni-
mero «Natures, de la revista Woman of Power: A Magazine of
Eeminion, Spirituality and Politics (1988), hay ariculos sobre los
derechos animales (NEWKIRK); sobre dies vegeearanas para niios
(MORAN); una critica feminisca sobre Ia idea de wderechossanima-
Jes que plancea que a mejor manera para ayudar alos animale es
adopeando valores ecofeminitas (SALAMONE); una entrevista con la
coordinadora de una organizacién no convencional por la defensa
de animales (ALBION); y la emotiva descripcién que Alice Walker
hhace de lo que significa para el animal humano entender Ia navure-
leva existencil del animal no humano.* Ademds de ests aticulos
se publieé una lista de compafias, cuyos productos esin testadas
‘en animales, para que sean boicoteadas; una lisa de products p
dlucidos sin crueldad a animales; yuna lstacon las direcciones de
diferentes grupos, vegtarianos, contra la vviseccién y por la defen-
sa animal. Estas listasimpliciamente denotan que la préctca es un
aspecto importante del ecofeminismo.
‘Otros ejemplos son: una dela antologas de ecofeminismo mis
tempranas, y una dela himas. Reclaim the arch (Reclama la Ti
tra) (1983) tiene ensayos que hablan de la degradacién medioam-
biental: la salud dela mujer; la industria quimicg; la era nuclear; la
salud publica; la ecologla de los guetos negeos a naturalza en las
CGucdades el movimiento Chipko, y ambien un ensayo sobre ls de-
zechos animales (BENNEY, 1983). Reweaving the World Re-entra-
‘mando el Mundo) (1990), la antologia mis recente tiene un ensa-
2, Le que Walker viene decir qu los sees humanes enen que entender
Inindividaldad, sents yunida nea qu eds anal poses ea st mis00
‘ynoem latory que no dsbe de ver ls animales come imigenero aliments Ep
Jawa eine dl coneeeo de peronsdad es problemi, as que no
plea ee vrinc, ung ro ue ecto que se ere Walle xando he
Unde la mauler existence edna.
197yoeen el. que se sugiere que wel rio y la religin pueden haber surgi-
do de la necesidad de aplacar la matanza de animales» (ABBOTT,
1990, p. 36), y en el ensayo de Marti Kheel se plantea que en la ca
2, los animales son ineteumentos paral autodefinicion de los hom
bees (KHEEL, 1990), En 1993, se publicé otra antologia, Ezofmim
Women, Animal, Nature (Ecofeminismo: Mujeres, Animales, Nacu-
raleza) de Greta Gaard, en ésa los animales forman ye una parte
central de a teorfa ecofeminisa,
“Hay mis evidencias del compromiso ecofeminista con los ani-
males para que se los considere como seres vivos y no sean instru-
rmentalizados. Greca Gaard afirma que el vegetarianismo es una de
las prcticas de ecofeminismo, jano con el ancimilarismo, la agri-
cultura sostenble, la medicina holistic, y la conservacién de la di-
versidad (GARD, 1988). Algunas eofeministas portaron una pan-
carta en la Marcha por los Animales de 1990 en Washington D. C.
Fl comité central dela organizaciones feministas han empezado @
incroducir el tema del iberacién animal como parte esencial de st
programa. El Grupo Operativo Ecofeminista dela Asociacién Na-
ional de Estudios de Mujeres (NWSA) recomendé en 1990 que la
‘oordinadora adoprar la politica de no servr productos de origen
animal en sus conferenciss sobre temas de ecologa, salud y huma~
‘Noes soprendente que as ecofeministas insistan en prcticas que
favorecen el bienestar de los animales. Los origenes del ecofeminismo
cen ese pals provienen de comunidades feministas-vegetarianas. Char-
lene Sperenak sea tres caminos que comunidades feminists radi
lesde los srentatomaron hacia la creacin del eofeminismo: el estu-
dio de la tora e historia politica, larelgin basada en la naturaeza,
especialmente la eligdn de diosas, la preocupacién medioarnbien-
tal (SPERTNAK, 1990, pp. 5-6). Un buen ejemplo de esas comunida-
desc el de Cambridge-Boston. Las eministas que tomaban clases de
ica feminista con Mary Daly en el Boston College estudiaron uno
de os primeros textos ecofeminisas, Le feminism ou le more (El Fe-
rinismo ola Muerte) (1974) de Frangoise d’Eaubonne. Ese mismo
af, se public, y se dscutié con interés en esa misma comunidad, e
lib A Different Heaven and Earth (Un Cielo yuna Tierra Diferentes)
de Sheila Collins. Collins planteaba que wel racsmo, el sexismo, la ex-
198
plotacién de case y la destruccién ecoldgica» son epilaesincrrla-
‘ionados sobre los que descansa el patriarcado» (COLLINS, 1974,
p. 161). En 1975 también se acogié con interés ef libro New Wo.
‘mantNew Earth (Nueva Mujer/Nueva Tierra) de Rosemary Radford
Ruether. Ruether vinculaba la crisis ecolégica con la situacién de la
‘mujer, proponiendo que se uniran ls demandas del movimiento de
la mujer con las del movimiento ecolbgico. La géneis dels libros
ccofeminisas que vineulan ala mujer con los animales se origina en
estos aos, en esta comunidad y en asociacién con Daly?
‘Vatias entrevista con miembros de la comunidad de mujeres de
‘Cambridge-Boston ponen de manifiesto que el ecofeminismo pro-
toripo ineluye alos animales dentro desu andliss. Una ferinista
dijo wa los animales, la cera y las mujeres se los ha objervado, y se
Jos ha tratado del mismo modos. Oxra explicé que ella estaba vem
pezando a establecerlazos aectivos con fa tierra, como si fuera una
hhermana, y a vera los animales como sujetos y no como objetos.
En el Ambito conceptual, se puede decir gue la conexién entre
cl vegetatianismo y el feminismo surge dentro de un marco ecofe-
‘minista, Las cuatro condiciones minimas planteadas por Karen J.
‘Warren (1987) para que el ecofemninismo se genere, apelan ala préc-
tica vegetarians que las activists ecofeministas de 1976 articulaban
y quehoy contintian vigences.
5 Tncluo, n propio lib, Th Sexual Plier of Mes (La poles oa de
‘ams) (Adame, 1973), surgi partie de an wabsjo gue propar para ls cass de
‘en Femina gue Daly inact En el io The Rape ofthe Wild (a vain de
te aula), Anite Collard, una buena amiga de Day, apical lasofa ese
rsa de Daly sobre labial anima. Ya en el ao 1975, Cll anaiaba
In tlacign de a ope de a mje con la opresi de os animales
“En 1976 ented ds de 70 jee egetrians ene ics de et co-
munided de Boson Ear enrvias son un esimonio de que a tela ofei-
‘ist, como su stoi, ex claramene del lado dels animale. Tambien son
‘na prusbs dela mnporcancia que ene entrain en primera persona ca e-
borin de la ceva (comin (vr Waren, 1990). Ene as ened h-
‘aaetvsasy eseritors coma dy Norn y Wendy Sanford del Cole Boe
son Womens Health Book, Lis Leghorn, Kate Cloud, Karen Lindsy Pa Hynes,
‘Mary Sue Hifi, Ksthy Maio, Sas Leigh Say muchas os
199El ecofeminismo defiende la exstencia de una conexidn impor-
‘ante entre la dominacién de a mujer y lade la naturaleza. Las mue
jeres que yo entrevstévefan a los animales como una parte de la nae
turalera dominada, y entendian [a condicién que mujeres y
animales comparten, en el que a ambos se es considera sujetos ala
‘utorided y al control de otros, o sea seres subordinados:
Mira cémo se ha teatado a las mujeres. Nos han controlado
completamente, violado, no se nos ha dado credibilidad, ni co-
‘mado en serio, Lo mismo pasa con los animales. Los hemos mu-
tilado, domesticado. Sus ciclo, su existencia misma escd ajusa-
daa las necesidades humanas. Eso es lo que los hombres han
hecho con la mujer y la derra.
El ecofeminismo se ha desarrollado por tres vias, el eminismo
socialist, el feminisoa radical, y el eminismo espiritual. Las ecofe-
rministas de 1976, dependienda de la via con que se identificasen,
desarrollaron diferentes discursos para incluir alos animales. Las fe-
‘minista socialists vincularon el consumo de animales con las for-
‘mas capitalistas de produccin y con la nacuraleza clasista de este
consumo; para les feminists epiricuales la prictica del respero por
los animales surge de la adoracién de diosas, la creencia en el ma-
triarcado y en la armonia con el medio ambient; las ferinistas ra-
dicaes asociaron la opresin de ls mujeres con la de los animales; y
tras sostvieron la poscura del «feminismo natural» en el que se
afirma que las mujeres tienen una naturaleza més sensible hacia los
animales
a segunda de las condiciones planteadas por Warren para que
el ecofersinismo se geneze es la necesidad de entender las conexio-
nes que exsten ene la opresidn a la mujer y la opeesidn ala navura~
leza, Para ello debemos criticat vel tipo de pensamiento que sancig-
na la opeesién» (WARREN 1987, p. 6), 0 sea, lo que Warten describe
como pensamiento patriarcalflsamente justficado por una wldgica
de dominacién, de acuerdo a la cual «la superioridad justifica la
subordinaci6n,» (WARREN, 1987, p. 1990). Las mujeres que yo en-
teevisté se oponfan a que la wlégica de dominaciéns jusificae la ma-
‘anaa de animales: una manera ginocéntria real de se es existien-
200
do en armon(a con la itt, y en armonia con el propio cuerpo,
‘sta armoni no puede inci la matana de aimesn
Los testimonios de ls mujeres que yo entrevisté pueden servir
para desarollar na epistemologiafeminizt radical, donde a incu-
{én y la experiencia Sean una fuente importante de conocimientos
con ls que cusionare a itorsione de aici patire
‘Muchas mujeres debatian siempre eseuchando asa propio cuerpo
tpreaian de ee. Consideraban el vgeaimo como sunt ex
presidn de la bisqueda e investigacin de lo que soy Io que me
fustn. Esa paride aqu, donde surge la identificacin con los ani-
thas, Esta idencificacin significa una redefnicign dela relacion
on los animales, que dejan de ser intrumentos, medos para nue
tos fies, ye catierten en sres que merecen vii, los que re-
petamos sn necesidad de ener que entabla amistad con ellos.
Las erinista se dan cuenta de lo que significa ser explotada. A
Jas mujeres como objetos sexuales, 2 los animales como objetos
ccomestibles. A las mujeres ls convierten en madres pattarcales,
ya las vacas en méquinas de dar leche. Es lo mismo. Creo que
las mujeres no son canibales innatas. Yo no como cazne por los
:mismos motivos que no como acero. En mi consciencia ya no
‘existe la posbilidad de poder comer animales. Igual que cuando
tengo hambre no me como rai propia mano.
(Otra mujer describia el proceso de identificacién as:
La objetivacién de la mujer, las mecdforas que describen sas
mujeres como pedazos de carne, aqui est este objeto para que
lo exploten camo quieran. Esra me ofende. Lo identifico espe-
cialmente con el modo en el que exploran a las vacas ya los po-
Hoe. La manera en la que los engordan y arruinan sus euerpos
para venderlos en el mercado capitalise Esto me molesta del
‘mismo modo que me molesta que me exploten.
Esa partir de este proceso de identificacin con as experiencias
de los animales y con su uso instrumental, que surge el apoyo ecofe-
minista de los animales: no es sélo que participamos en una jerar-
201quia de valores en la que situames alos humanos por encima de los
animales, 0 que ahora debamos concededle derechos alos animales,
Sino que hemos sido incapaces de entender lo que significa ser un
ser vivoo. Esta es la introspectiva que influenci6 a Alice Walker
afios mis tarde exando describe econocimienco dela nauraeza
tistencial del animal no humano (ver nota 3). Hacerse vegetariana
después de reconocer, ideniicarse con la naturaleza existence de
Jos animales, es una experiencia cotidiana, aqui descrta por una
mujer en 1976:
‘Cuando me di cuenta de que los animales viven, caminan, le
dan la bienvenida al di, laran, tienen lazos afectivos, gustos,
me dio asco pensar en la matanza de animales, cocinarls y co-
éemelos
‘A través de este tipo de descripciones de los animales, las mje
res reconocieron a los animales como fines en s{ mismos en ver de
simplemente como medios.
La tercera aportcidn ecofeminisa de Warcen afiema que la teo-
tfay la pricticafeministadebe incuir una perspectiva ecologist. EL
‘cofeminismo promueve una ica basada en la préctie porque las
acciones de uno cevelan sus creencias. Si crees que la mujer estésub-
‘ordinada hichards por su liberacin; si crees que la naturaleza, entre
otras costs, est dominada,juagards la aportacién de cu propio com-
portamiento personal ala explotacién de la navuraleza. En este sen-
Fido, el convincentelibeo Diet for a Small Planer (Dieta para un pla-
‘eta pequefio) de Frances Moore Lappé ha influ 2 muchas de ls
feminisas que enttevisté, porque oftecia una explicacin clara de
los costes medioambientaes del consumo de carne. Una mujer dij:
«Cuando cseribla mi ensayo sobre ecology feminismo entendl el
concepro de mujer como tierra, que los hombres han explotado la
tiera del mismo modo que han exploado alas mujeres, que consu-
miendo carne se expla a a tierra, y que ser feminista significa no
aceptar la ética de la exploraciéne. Lo que ella reconoce es que et
ccofeminismo ha de waar el hecho de que esta cultura, que fomen-
tal consumo de carne, he conseguido separar las conscuencias del
consumo de cane dela experiencia misma de comer carne?
202
Las consecuencias medioambientales del consumo
de came
Uno de los asibutos dl ecofeminismo ex su interés por las conse
cuencias dela dominacién de a tera. Reconoce que la filosofa pa-
trarcal que vineula a la mujer con la naturalea, tiene efectos nega
tivos medibles, y étos deben identificarse y se debe intervenit.
Cuando consideramos las consecuencias de la produccién de carne
yas formas en las que el consumidor de care se implica en esas
consceuencias— el ecofeminismo tiene que decantarse:jelegiré el
ecocido y los desastres medioambientales asociados al consumo de
carne ola sabidutia medioambiental del vegetaianismo%
La relacin entree consumo de carne y los desastres medioam-
bientales puede medirse.” Los defensores del vegearianismo han
5. Fleurs punto de Waren, qu los movinenos eso ben ince
ries ein, no sue tn pene on rented en 1976, EL
fowininto de bers animal ene sales nl i Liban Aina de Be
ter Singer (1975) demodo qu ei amin de te maven noe pene
{en 1976 el movimzn en sapenar ers pends. Texto eit poreso-
tes cen und crea feminist del movimeneo de iberacin animal, aungue
compara la peemisn de qu expla arma ene que se demand Khe
Called, Core, Donovan, Shimon, La pla de identeacin sua crea
{efi que se fen ls aguenos que deinen ls anial, basins en
les lomfise domints, porque no intents ctibleer nga esterio pars ose
tlece ls duaimos que el ecofeinizo itera elimina Laas
tonomta te adquere hando se seta independientemente deca
idelogi.
Elecafeminimoafrma que los indviduos pueden cambie,
que tavés de los cambion auras nue acon con me-
dio ambiente. Esta capaciad de cambio nw confi el pode ura
y neces para aboard tema del stuacon de ls animales en
hues vidas, Se pueden etblar muchas cnexoner entre noe
comida y nace medio ablent ence noc poe y nuts
vida personal. Esenciaent I exerci de anaes erie x
prigmiia de una era cerminal ala que neviablement dems
Contre
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