El involucramiento de Rusia en Latinoamérica no es una política nueva
sino que refleja desde mucho tiempo atrás la aspiración a el poder Global y avanzar en la idea de un mundo multipolar. La idea central del texto trata sobre la estrategia y proceso de Rusia por incursionar su política en Latinoamérica la cual viene siendo en última instancia una política Americana con el fin de democratizar las relaciones Internacionales acelerar el crecimiento de multipolaridad en el mundo. Dicha estrategia es fundamentalmente una estrategia geopolítica direccionada en contra de los E.U con un componente económico el cual inició hace unos años atrás con la venta de armamento por lo que la política actual representa la continuación y expansión de intentos mas tempranos.
A pesar de los intentos de Rusia en incursionar en America Latina, se
puede observar como varios países Latinoamericanos se oponen a ser arrastrados hacia la rivalidad Ruso-Americana para convertirse en un campo de batalla como es el CIS, para America Latina una cosa es aumentar las relaciones de comercio con Rusia pero otra cosa muy diferente y rechazable es convertirse en objeto de una nueva quasi- guerra fría.
A parte de los países como Venezuela, Nicaragua cuba y Bolivia, los
países Latinoamericanos claramente evalúan no solo la oportunidad de entrar al Mercado Ruso, pero también para promover su campaña de introducir a los E.U a retornar a una política de Multilateralismo y preocupación por los intereses de seguridad que tanto afectan a America Latina. Sin embargo Rusia no está interesado en devolver a Latinoamérica a la vanguardia de confrontación este-oeste especialmente debido a que Rusia claramente intenta utilizar los estados antiamericanos izquierdistas como Venezuela para sus propios fines algo muy diferente a lo que la mayoría de estados quiere, los cuales prefieren que America Latina sea ¨impermeable a las amenazas globales¨ tal como lo señala el ministro de Brasil Robeto Mangaberra, el cual dice que su país no está interesado en compra un sistema de defensa que a diferencia de otros países Suramericanos están interesados en el balance de políticas de poder para contener a los E.U , a Brasil solo le interesa tener relaciones amistosas con los E.U por lo cual así Brasil incremente su cooperación técnica militar con Rusia dicha cooperación no afectará su política externa significativamente.
Al mencionar el interés de integración de organizaciones como el
Mercosur con Rusia , se trataría principalmente de una relación bilateral donde su enfoque sería solo mutuos beneficios económicos e intentos de identificar posiciones políticas compartidas. En este sentido se asemejaría a la política China de Ruisa la cual tiene un interés como instrumento para atraer a Washington mas cerca de sí. Sin embargo este logro con el Mercosur haría a Rusia retroceder hacia el compromiso prioritario con E.U, en consecuencia, la participación Rusia con América Latina no está relacionada con la resolución de cualquiera de los retos de seguridad de America Latina, ya que Moscú no tiene la vision para el continente y sus políticas podrían fácilmente agravar los problemas que son profundos, en el continente Americano.
En resumidas cuentas, puede decirse que aunque Rusia tiene un
genuino interés en America Latina ese interés es comercial y político, el primero siendo un medio para asegurar el último. En lo que respecta a Venezuela, Cuba y Nicaragua, los intereses son mas estratégicos y abiertamente dirigidos a contrarrestar la influencia de E.U. en America Latina.
CONCLUSIONES
Al analizar la naturaleza de las relaciones de Rusia con America Latina
se pueden sacar las siguientes conclusiones:
Los motivos principales de Moscú en incursionar en America Latina son
claramente geopolíticos y vinculados a mostrar a Rusia ante el mundo como una superpotencia mundial y rival de E. U.
Mientras Rusia continuará expandiendo su lazos con America Latina, su
capacidad para involucrarse en profundidad es menor de la que quiere, así como es la habilidad de Latinoamérica de apoyar los objetivos de Rusia, esto es especialmente dado en el caso de Venezuela que depende de la energía y de los ingresos de sus productos, su capacidad también ha declinado, dado a la crisis económica, por tanto se estima que Rusia se encontrará parcialmente con las expectativas de soporte inclusive en economías afectadas como Cuba. Se estima que las compañías Rusas que han desarrollado ciertas relaciones con America Latina recientemente determinaron que poca o ninguna expansión económica ocurrirá en un corto plazo debido a que las compañías Rusas no tienen liquidez ni activos suficientes para invertir en America Latina en relación a compañías de Gas y petróleo en que se proyectaban para incursionar en Venezuela.
Por ultimo el problema de seguridad que tanto le preocupa a
Latinoamérica puede ser facilitado por Washington al regenerar su propia economía, y simultáneamente abriendo mercados de comercio y eliminando las barreras a las exportaciones de Latinoamérica, mejorando el multilateralismo e interoperatividad entre las fuerzas de defensa tal como lo ha requerido la fuerza militar de America Latina.