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Representacién en Ciencia y en Arte Compilacién German Casetta - Andoni Ibarra EBiitorial sraje Bullester Tey, Femando Bahr, Denis Baranger, tin Berti, Emmanuel Biset, Carlos Bonantini, El Ariela Battén Horenstein, lena Bossi, Jorge Bracamonte, Cordova Quero, Claudio Diaz, Mercedes Doffi, Susana Falguera, Fernando Ferrari, Susana Ferrucci, Emilio Dante Duero, José L. cin y selece luis 1. Garcia, Adriana Gonzalo, Liliana Guzmdn, Andoni Ibarra, Maria rae sla, Pedro Karezmarezyk, Victor Longs, César Lorenzano, Danicla Mattn, Z ‘= Minho, Maria Angelica Moller, Antonio A, Passos Videira,’ Germén Pereno, sido post 2 Perez, Alejandra Perié, Luis Miguel Peris Vii iNé, Pablo Ponza, Sandra Luefa vitee Sanchez, Victor Rodriguez, Aarén Saal, Julio Schvartzman, Luis A. Urtubey, figuel Vedda, Nicolds Ventureli Feprtsatasn ncn y at /Gamdn Cast: Aras comple soe ‘amin aaa fon urate "Coes Boon 1 Eclitorial Brujas Impreso en Argentina SBN: ISBN 978-987-591-370.7 Queda hecho el depésito que marca la ley 11.723, ‘Ninguna parte de esa publica, incido el seo de tap, puede ser reproduc Gide, almacenad transmit porringin medio, ass cetoncn cemeen Inecinic, 6ptieo, de grabacén o por fotoopla sin autorizacion Prev, sal Brujastlemto de le CAMARA | EGov arias eerie ON | ‘.editorialbrujas.com.ar publicaciones@editorialbrujas.com.ar (0351) 4606044 / 4691616 Pasaje Fspafia 1485 Cérdoba - Argentina, Cuerpo propio y movimiento en el medio acuatico: reflejos fenomenolégicos. Alejandro Universidad de Bueno que ‘Presente nuestro cuerpo y la necesidad de movernos Para sobrevivir, Llevaremos a _-descripcién del fendmeno del movimien to del cuerpo HF propésito de evaluar la pertinencia de fy Para una adecuada descripcién del mis ‘herramientas provenientes de autores Propio en el agua atendiendo al algunos conceptos fenomenolégicos merleauponijanos Smo ¢ intentar enriquecer los concepts utilizad contempordneos, doble fos cor Keywords: cuerpo propio, agua, movimiento, Merleau-Pony descripcion 1. Introduccién al, con ni sae PO Propio que nos resulta sefialadamente familiar, llevando a cabo mecinu Que no nos presentan mayores complicacioy demasiado en la fuerza que debemos aplic sin calcular expresa y precisamente la pres #) Sobre la superficie de los dientes, sin tener de cada una de nuestras piezas dentarias = Simplemente llevamos a cabo una tarea hal f°? Que efectuamos dicha tarea, nos sumergimos en la aceidn Merleau-Ponty sefiala que al considerar el ¢: Yer cémo es que el cuerpo habita cl espacio (Merleau-Ponty, 1957:110). El ang _Fenomenolégico nos permitiré ocuparnos tanto de laconsting in del ‘como de su modo de habitar el mundo. Parte d “Para poner de manifiesto la pertinencia de #€ de casos de patologias psiquidtricas, E be Fecubre dos importantes caracteristicas FP pueden experimentar el contacto de st cu nes. Nos lavamos los dientes sin pens: ar con los misculos de nuestros si6n que debemos ejercer con presente claramente la posicion © de nuestras manos tomando el cepi bitual sin percatarnos demasiado del moc braz uerpo én movimiento pode eto pror lel método que sigue el autor france la descripcisn fenomenolégica es ocup ‘N nuestro caso, la eleccién del fenémen en primer lugar, todos los seres bnemano erpo con el agua, todos podemos habits 666 Representacién en Ciencia y en Arte cl medio acuatico, ya que como sefiala Merleau-Ponty, nuestro cuerpo nos permite habitat todos los medios del mundo (Merleau-Ponty,1957:345), y en segundo lugar, sefialadamente como en ningiin otro fendmeno, se hace presente la necesidad de | moverse para sobrevivir en el agua. El fendmeno del habitar el medio acudtico nos permite desplazarnos de nuestra experiencia habitual para de esta manera intentar poner de relieve las consideraciones fenomenol6gicas que nos pasan desapercibidas. en la dinamica cotidiana. De este modo nos planteamos dos objetivos: por un lado, evaluar la pertinen- cia de algunos conceptos fenomenolégicos merleaupontyanos para llevar a cabo una descripcién adecuada del fenémeno del habitar y moverse en el agua: y por otro lado, intentar enriquecer los conceptos proporcionados por Merleau-Ponty con las herra- Mientas que proporciona Maxine Sheets-Johnstone para el andlisis fenomenol6gico del movimiento. Siguiendo el precepto merleaupontyano de atender filosGficamente __ ci contacto ingenuo que mantenemos con el mundo, pasaremos a ocupamnos dela halada preponderancia del sentido del tacto al habitar el medio acudtico y las q caracteristicas especiales que se muestran en la descripcién del fenémeno. El esclarecimiento del habitar el medio acudtico exige la descripcién del modo en que nos orientamos en el mismo y trazamos los ejes cardinales vitales, Una vez descripta la relacién del cuerpo propio con el espacio vivido en el agua a nos ocuparemos de la descripcién del movimiento de nuestro cuerpo en el agua y idas Bravedad le imponga. O podemos dejar que ese flujo de agua nos toque las manos podemos poner nuestra atencién en el contorno de nuestras manos, en el espacio Entre los dedos, en el espacio que separa las ufas de las yemas de los dedos, en los pliegues que la cafda acuosa provoca. Podemos tocar el agua, 0 podemos ser tocados por ella. Estas posibilidades que surgen al tener contacto con el agua manifiesta la | lmportante caracterfstica de la reversibilidad 0 las “sensaciones dobles” del sentido | del tacto. Cuando somos tocados Por el agua y se nos hace presente el contorno de | huestras manos, experimentamos un “tacto Pasivo", si en cambio, nuestro sentido del tacto nos lanza a la exploracién del mundo estamos experimentando un “tacto " cognoscente”. Esta diferencia se Puede ver mas claramente si en lugar de ocuparnos _ del fenémeno de lavarnos las manos nos dirigimos a una situacién en la que todo _ fuestro cuerpo es envuelto por el agua, como Puede ser dentro de una pileta de nataci6n. Esta situacién entraffa una caracterfstica fenomenol6gica notable -y diffcil- mente igualable por algtin otro fenémeno: nuestro cuerpo al ser envuelto totalmente Por el agua nos proporciona la activacién tact de toda su superficie, nos permite _ Percatarnos de todo el contorno del mismo. Si bien la atencién no puede dirigitse a toda la superficie en el mismo instante, todos nuestros limites superficiales se encuentran tocados por el agua y por ello estimulados ‘Y presentes'. Junto con esta caracterfstica se nos hace presente una Segunda: podemos percibir partes del cuerpo ue habitualmente nos son desapercibidas tales como el interior de las orejas, los arificios nasales, el espacio de las axilas, y se nos tornan presentes de un modo | distinto aquellas zonas de nuestro cuerpo que habitualmente cubrimos con ropa. __ También cabe sefialar que se nos Presentardn partes del cuerpo que no podemos Percibir directamente con el sentido visual, tales como la nuca y la espald? Podrfamos decir que si la vista es el sentido del espectéculo, el que pode- mos observar habitando el medio acuatico es muy pobre, pero por el contratio, la experiencia y la percatacién del propio cuerpo seré cuantiosa, Surge la tentacién de ‘elaclonar el agua con un gran espejo que nos devuelve una imageri como a Narciso, ETO no es este el camino merleaupontyano, No nos vemos reflejados en el agua como Narciso, sino que somos en el agua, vivenciamos nuestro cuerpo en el espejo. Dird el autor francés que hay una simbiosis con el medio, podemos decir que nos fundimos con el fenémeno, mas como Alicia detrés del espejo que como Narciso contemplando su reflejo. Veamos ahora cémo nos orientamos en ese mundo 667 668 Representacién en Ciencia en Arte 3. Espacio vivido en el medio acuético. Merleau-Ponty presenta al cuerpo propio como sistema de acciones actuales 0 posibles, como vehiculo de ser en el mundo. Esta polarizacién hacia el mundo sefiala la diferencia entre una espacialidad de posicién tal como la que habitan los objetos inanimados y una espacialidad de situacién tal como la que habitamos nosotros. El espacio corporal puede ser distinto y envolver las partes extra partes del espacio exterior. Como expresa Merleau-Ponty “El contorno de mi cuerpo es una frontera que las relaciones ordinarias de espacio no franquean” (Merleau-Ponty, 1957:105).. Siempre existimos situados y por ello el espacio vivido es practicamente valorado, en vistas a las tareas o acciones que se inscriben en torno a nuestro cuerpo y nuestras intenciones motrices (Merleau-Ponty, 1957:156). El arriba, el abajo, el cercano 0 lejano, siempre va a tener como centro el cuerpo propio y serfan términos carentes de sentido sin un cuerpo que los experi- mente (Merleau-Ponty, 1957:108). Y es justamente la centralidad ocupada por nuestro. cuerpo en esta descripcién fenomenolégica del espacio por lo que podemos sefialar dos puntos en los que el espacio que habitamos en el medio acuatico se diferencia de nuestro espacio vivido habitual. Primero, retomamos un punto ya sefialado previamente, las implicancias del predominio del sentido del tacto por sobre el sentido visual. Y segundo, el corrimiento del eje vital desde el plano horizontal en el que nos manejamos habi tualmente tal como lo sefiala Merleau-Ponty, al eje vertical (Merleau-Ponty, 1957:24). Despleguemos brevemente estos puntos. El autor francés sefiala que el sentido visual tiene gran preponderancia a la hora de proporcionarnos el fondo del movimiento (Merleau-Ponty, 1957:125), nos proporciona mayor amplitud que el sentido del tacto. De hecho, afirma que el tacto por estar adherido a la superficie de nuestro cuerpo no puede desplegar el espacio ante nosotros (Merleau-Ponty, 1957:350). Por lo que ‘a forma de trazar los ejes vitales también van a ser distintos al modo en que orien- tamos habitualmente el espacio. Al situarnos en nuestro fenémeno, encontrarnos que todas las tareas y acciones que podamos llevar a cabo van a estar fuertemente condicionadas por un \ctor presente tanto en nuestro cuerpo orgénico como en nuestro cuerpo habitual: la espiracién. El eje vital se verticaliza porque respirar 0 no poder respirar va a depender de estar por encima 0 por debajo de la linea de flotacién, del horizonte. En ningdn fendmeno como en este, el horizonte, se torna horizonte vital. Entonces, “arriba”, puede querer significar “tener las vias respiratorias por encima-del horizonte”. Sino hubiera un sujeto psicofisico que habitase el agua, ningtin sentido tendria hablar de arriba 0 abajo, también en el medio acuatico la orientacién va a depender del cuerpo propio. Sefialamos previamente que la respiraci6n atraviesa tanto el cuerpo orgénico como el podeme Tespirac podamo rias deb No disp orgénicc a futuras ser cons partir de de ser re de deter sentido y en el m nuestro clenciac esas exp 1994:107 mundo. | capacide postura, como a conoce cién que el espaci crea las « El andlisi cuatro ct lineal, ar seftalar « analitica de sensa Ate cfiala jetos: 0s. El paclo. ntera 105). 0, en» stras. ro el peti esto. ialar as y Fun sla ider gin ba’, ino rde Po nico 669 como el habitual porque a pesar de ser la expresién de un reflejo orgénico, también podemos mantener un control activo parcial de la misma. Podemos “aguantar” la fespiraci6n, espirar o inspirar cuando queramos, pero con ciertos Ifmites. Diffcilmente Podamos inspirar, aunque asf lo quisiéramos, manteniendo nuestras vias respirato- ras debajo del agua. El cuerpo orgénico pareciera predominar en estas situaciones. No disponemos del espacio para abordar la interesante relacién entre el “cuerpo organico” y el “cuerpo habitual” en el presente trabajo pero queda abierta la puerta a futuras investigaciones. En todo caso, podemos seiialar que la respiracién podria ser considerada el primer movimiento del ser en el mundo. De este modo, el cuerpo propio es quien orienta el espacio en el agua a partir de sus necesidades vitales como condicionamiento de todas las tareas posibles de ser realizadas en el medio, tareas que a su vez carecerdn de precisién a la hora de determinar la posicién corporal debido a la escasa informacién proveniente del sentido visual. A pesar de ello, las posibilidades de experimentar distintas posturas en el medio acuatico son inmensamente mayores a las que podemos realizar en nuestro medio habitual. 4, Dimensiones cualitativas del movimiento. Merleau-Ponty afirma que el esquema corporal no es la imagen ni la con- clencia de las partes del cuerpo experimentadas, sino que es la integracién activa de sas experiencias valoradas en razén de los proyectos del existente (Merleau-Ponty, 1994:107). El “esquema corporal” es una forma de manifestar que el Cuerpo es en el mundo. No es una percepcién, una representaci6n, ni una creencia’; es un sistema de capacidades motrices y habilidades que nos permiten movernos y mantener nuestra Postura. La motricidad es la expresi6n de un “yo-puedo", no de un "yo-pienso-aue’ © como sefiala Maxine Sheets-Johnstone, desde el principio todos somos desafiados a conocer nuestros cuerpos (Sheets-Johnstone, 1999:143). Si tenemos en cuenta estas observaciones, resulta claro el llamado de aten- ci6n que hace Sheets-Johnstone acerca de pensar que el movimiento tiene lugar en el espacio, por el contrario, creamos el espacio al movernos, y el propio movimiento crea las cualidades que encarna y que experimentamos (Sheets-Johnstone, 1999:143) El andlisis del fenémeno dinémico del movimiento que hace Sheets-Johnstone muestra cuatro cualidades que son parte de una totalidad dinamicamente sentida: tensional, lineal, areal y proyectual (Sheets-Johnstone, 1999:141, 2010:224). Resulta importante sefialar que se trata de una experiencia kinestésica que integra un todo dindmico analiticamente distinguible en estas cuatro cualidades, y no es cuestién de sucesién de sensaciones (Sheets-Johnstone, 2010:225). La cualidad tensional, especifica la intensidad sentida del movimiento, la 670 Representacién en Cienciay en Arte {uerza que realizamos y el esfuerzo que nos exige. La cualidad lineal describe los ejes corporales como los patrones lineales del movimiento. La cualidad oe expresa la amplitud del movimiento, cudn expansivo 0 contraido es. Por diltimo, | cis cualidad proyectual expresa el modo en que la cualidad tensional se manifiesta, el ict modo en que se sostiene el movimiento: regular, abrupto, balistico, etc. (Sheets- erm Johnstone, 2010:225). condi Ingres 5. Moviéndonos en el agua e inte Al ocuparnos del aspecto dindmico del fenémeno salen a nuestro encuentro el modo de concebir el conocimiento motriz y el aprendizaje de las técnicas corpo- rales relacionadas con el medio acudtico. Marcel Mauss presenta el modo en que _ adquirimos socialmente las técnicas del zambullirse y del nadar (podemos pensar en ue tes ‘a cantidad de cambios en los estilos de natacién a lo largo del tiempo) y presenta itcee precursoramente la necesidad de un analisis integral de de estos fenémenos teniendo. Sins cuenta una perspectiva fisiolégica 0 mecénica, sociolégica y psicol6gica. Vamos Comp 2 descontar con que tenemos contacto con técnicas sociales de nado y zambullida, aquell ce hecho al situarnos en una pileta ya estamos dando por supuesto todo el aparato” ecu social que implica y que nos excede en este andlisis. Lo que nos va a interesar es. ee Qué tipo de movimiento vamos a realizar en el agua, si es uno ya consagrado oes el ‘ocupa intento de llevar a cabo una nueva técnica. profar Retomemos el fendmeno de flotar en la parte profunda de la pileta. Si el larest Sujeto que flota, ya tiene contacto habitual con el aguay tiene destreza al estar ine aflote merso en ella, la cualidad de su movimiento expresard determinadas caracteristicas. Binet Posiblemente sea un movimiento que se realice sin demasiado esfuerzo (cualidad experi ensional), mantendré la verticalidad de su eje y los brazos se moverdn horizontal= vin mente (cualidad lineal), no serd un movimiento contraido sino expansivo en relacién abord: 2 la relajaciin (cualidad areal) y por ctimo, se realizar de manera probablemente. sostenida (cualidad proyectual) : imagir Para percibir la pertinencia de los conceptos para la descripcién pod flétar ahora ocuparnos de un sujeto inexperto en el medio acudtico que se ha lanzado ala a ¢ intenta flotar: sus movimientos se realizaran con mucho esfuerzo (tensién), dificil- param mente mantenga la verticalidad y el eje corporal oscilard buscéndola (linealidad); con movimiento puede ser o bien contraido o bien muy expansivo , descontrolado (area Rey y por dltimo, posiblemente se realice de manera discontinua y abrupta (pro proyec Asi, vemos Que la matriz analftica nos resulta «til para distinguir aspec ide She relevantes de la cualidad dindmica sentida de la experiencia de dos sujetos distinto en situaciones distintas. Pero también nos sirve para dar cuenta de las distintas ex periencias de un mismo sujeto. Si el mismo sujeto habituado al medio acudtico, clestrezas y habilidades, en vez de flotar en una pileta se encuentra nadando en ‘n en Ciencia y en 67 ineal describe ta >. La cualidad a Jo es. Por tiltimo, nal se manifiesta, {stico, etc. (Shee far en una tempestad, los movimientos que realice investiran una dindmica sentida ualitativamente diferente. El movimiento serd esforzado, la linealidad horizontal lel nado se verd afectada por la continua ondulacién marina, el movimiento no po- dré ser muy extendido debido a los golpes irregulares de las aguas y la proyeccién erd intermitente por las mismas razones. Tendré que aprender a moverse en esas condiciones, cambiard la linea de flotacién, el eje horizontal, el modo de mover ¢ ingresar los brazos al agua debido al oleaje. Tendré que aprender a nadar en el mat ¢ integrar esas posibilidades a su esquema. a nuestro encuent : las técnicas corpe i 6. Aprender un movimiento. nta el modo en au (podemos pensar tiempo) y preset fendmenos tenien psicolégica. Vami Estas distinciones cualitativas no sdlo nos permiten describir esta diversidad de fendmenos, sino que también nos permite dar cuenta de los cambios que ocurren luego de la consagracién motriz de un nuevo movimiento a un esquema corporal. La ‘consagraci6n motriz de un movimiento ocurre cuando nuestro cuerpo lo comprende. Comprender un movimiento es para Merleau-Ponty “experimentar el acuerdo entre nado y zambullids quello a lo que apuntamos y aquello que nos es dado” (Merleau-Ponty, 1957:157) Sto todo el apara ns dice que una vez consagrado un nuevo movimiento (supongamos un nuevo estilo. 0s va a inleresat de nado), se ensancha nuestro “arco intencional” (Merleau-Pont, [957:148). SI nos consagrado © €5 ocypamos nuevamente de la situacién de quien no sabta nadary se lanz6 a la parte | profunda podemos observar que, teniendo también en cuenta las observaciones sobre : de la peta. Si ig respiracin y el cuerpo orgénico, lo primero que vaa intentarlograr es mantenerse lestreza al estar its ote, Diremos que aprendié a “flotar” cuando pueda mantener sostenidamente, das caracter(sticala| menos su cabeza, fuera del agua, Su arco intencional se veré ensanchado cuando esfuerz0 (cualid®-experimente la coincidencta entre su querer flotar y el lograrlo a través de algin roverdn horizontal movimiento cardcteristico. La descripcidn de esta consagracién también podemos pansivo en relacié abordarla teniendo en cuenta la cualidad sentida de la dindmica era probablement Un movimiento nuevo (aun no consagrado) implica mayor esfuerzo, podemos imaginar que el valiente inexperto abocard todas sus fuerzas para intentar aprendei scripcién podem¢ gear “ha lanzado al agus ¢g 4 0 (tensién), difich lola (linealidad),¢ sin que lo tengan que ayudar. Se ubica en los extremos de la amplitud ya que muy contraido o muy extendido debido a la falta de precisién y la ausencia de pardmetros con los que comparar los movimientos que se estén realizando antes de la consagraci6n. La linealidad no estaré controlada, ya que dificilmente logre man- controlado (areall tener la vertical hasta no equilibrar los impulsos que efectde con brazos y piemas, Tupta (Proyectual proyectualmente carecerd de regularidad y armonta mel6dica (por tomar una metifora distinguir aspectd de Sheets-Johnstone). En cambio, una vez consagrada la intencién motriz de flotar » sujetos distinta y ya incorporada como habilidad al esquema corporal, su realizacién demandar de las distintas €) menos esfuerzo, se podrd controlar la amplitud y linealidad del mismo, asi como dio acuatico, cd yariar el ritmo de su ejecuctén, tra nadando en ¢ Representacién en Ciencia y en Arte 7. Tipos de movimiento en el medio acuatico. Hemos visto que podemos “saber” o “no saber” flotar en el agua, es una habilidad que se adquiere, es un tipo de movimiento que se puede efectuar en el agua, uno entre otros. Existen distintos “estilos” de movimiento en el agua, “estilos de andar en el agua’, ya sea que nuestro cuerpo sea tratado como un mero objeto por el medio o que nos lancemos en intenciones motrices a movernos en el mismo. Podemos movernos o ser movidos. Presentemos brevemente algunas posibilidades eniendo en cuenta las distinciones cualitativas previamente presentadas. Comencemos con los tipos de movimiento en que somos movidos por el agua. Teniendo en cuenta la linealidad del movimientoy el nivel de flotaci6n, cuando somos movidos predominantemente en el eje vertical, podemos decir que el cuerpo flota” cuando permanecen las vias respiratorias fuera del agua sostenidamente. y que se “hunde” o esta “hundido” cuando se aleja de esta posibilidad vital. El caso intermedio en que el cuerpo se mantiene a media agua flotando y hundiéndose alternativamente lo denominamos “boyar”. Ahora bien, cuando el eje predominante es el horizontal decimos que el cuerpo “deriva’, y esto puede deberse a las corrientes, al viento 0 al oleaje, y puede ocurrir en cualquiera de los tres niveles propuestos respecto al nivel de flotaci6n. Si ya no estamos pasivamente en el agua sino que tomamos en cuenta las posibles intenciones motrices vamos a poder considerar mas aspectos del movimiento. =| permanecer mediante el movimiento concreto del cuerpo propio también lo deno- minamos “flotar”, pero ahora presenta mayor diversidad en sus modos de ejecucién. La proyeccién del movimiento puede ser regular, por ejemplo al lograrse mediante el movimiento continuo de brazos y piernas, o puede ser cfclica si s6lo responde al impulso alternado de las piernas, donde cada vez que se patee el cuerpo saldra mas flote y cada recuperacién del movimiento se hunda mas. El "boyar” debido al movi miento propio probablemente se deba ala falta de consagracién motriz del “flotar”.y se puede adjudicar a personas inexpertas que no logran mantenerse a flote. El alejarse tencionadamente del nivel de flotacién ya no se tratard de un hundimiento, sino de un “sumergirse”. Este movimiento ya implica una mayor complejidad y mayor destreza, un esquema corporal més complejo, ya que su amplitud es mayor y la linealidad del movimiento puede variar constantemente, dando por supuesto que ademds se debe mantener’ la respiracién. Podemos observar que el espacio vivido en el agua por una persona que sepa hacer apneay bucear serd muy diferente de alguien que apenas pueda flotar. Si bien el “arriba” no cambiaré y seguird ubicdndose por encima de la linea respirable, el “abajo” adquiere una complejidad y riqueza mucho mayor para quien posea mayor destreza en el agua. Habitarén mundos distintos. Por iiltimo consideremos la posibilidad de desplazarnos en el agua: lo denor “buce carac nas c: sus ni nadar notarr de ex se ale posibl to, se poden del cu alach encuet Tana, t el esp: y motr trado ¢ sentidc desple poder tos por el med las dim que car ser exp experie una des bién, n dindmis un esar “estilos cen Ciencia y en Arte 0. t n el agua, es una :de efectuar en el: n el agua, “estilos © un mero objeto} ros en el mismo. inas posibilidades :ntadas. 's movidos por el flotacién, cuando scir que el cuerpo} sostenidamente, y dad vital. El caso} oy hundiéndose eje predominante € a las corrientes,| veles propuestos nos en. cuenta las} s del movimiento, | también lo deno-| dos de ejecucién.| ograrse mediante} solo responde all uerpo saldré mds, debido al movi-) iriz del “flotar’, y 1 flote. El alejarse| Jimiento, sino de) y mayor destreza, ‘la linealidad del, -ademds se debe o en el agua por pulen que apenas} por encima de la ucho mayor paral 5s. Sen el agua: lo 673 denominamos “nadar* cuando se lleva a cabo sobre el ee de la linea de flotacién y “bucear” cuando lo se lleva a cabo por debajo de la misma. Se aplican las mismas Caracteristicas del andlisis previo, pero podemos encontrar en su descripcién algu- nas caracter(sticas Interesantes. Términos habituales que los entrenadores dicen a Sus nadadores son que naden “sueltos”, que naden “largo”. Nadar “suelto” significa nadar sin tensiones innecesarias. El nado es més efectivo cuanto mas telajado, y otamos que la cualidad dinémica sentida tensional encuentra un lugar Privilegiado de expresién. Nadar “largo” implica estirar el cuerpo lo més posible, que la mano se aleje lo mas posible de los pies a la hora de ingresar al agua, y se acerque lo més Posible a los mismo a la hora de salir, esto provoca mayor eficacia en el movimien- to, se agatra més agua, Es ahora la cualidad areal la que se manifiesta. Por dltimo podemos sefalar que la regulardad del movimiento permite que se mantenga el cje del cuerpo sobre el nivel de flotacién mas estable y por lo tanto también contribuya a la eficacia del mismo, por lo que las cualidades lineales y proyectuales también se encuentran expresadas. Resta sefialar que la utilizacién de elementos tales como manoplas, patas de Fana, tubos de oxigeno y trajes especiales modifican el esquema corporal y amplian ¢l espacio vivido por el cuerpo habitual. El desarrollo de esta ampliacién sensorial J motriz. queda presentada para ser retomada en futuras investigaciones 8. Conclusién ‘Al abordar el fenémeno del movimiento del cuerpo en el agua hemos encon- trado que el andlisis merleaupontyano de las “sensaciones dobles” que presentan e sentido del tacto, el tocar y el ser tocado, encuentra un fructifero campo donde ser desplegado. Nos permitié destacar la seftalada caracteristica en nuestro fenémenc poder otorgarnos la totalidad del contorno superficial de nuestro cuerpo al ser envuel ‘os por el agua. Hemos descripto el modo en que organizamos el espacio vivido en cl medio acudtico a partir del cuerpo propio y la respiracién. Luego hemos abordado las dimensiones cualitativas de la dindmica sentida para dar cuenta de las cualidades Que cada movimiento particular en cada situaci6n particular guarda al momento de ser experimentado. Este andlisis nos permitié ahondar en la cualidad dinémica de la experiencia sentida por distintos existentes en distintas situaciones y proporcionar una descripcién més adecuada que si no dispusiéramos de tales conceptos. Asi tam bién, nos permitié presentar un posible camino de andlisis de la descripcién de ls dinmica cualitativa del aprendizaje y consagracién de un determinado movimiento 2 un esquema corporal. Por titimo presentamos brevemente una tipologfa de posibles “estilos de andar en el agua” teniendo en cuenta los andlisis anteriores. De este modo, el fenémeno del movimiento del cuerpo en el agua muestra 674 Representacin en Clenclay en Arte | aue el abordaje fenomenolégico merleaupontyano elegido es adecuado y que las herramientas proporcionadas por Sheets-lohnstone para abordar la cualidad dindmica sentida del movimiento permite hacer una descripcién més precisa. Quedan abiertas las vias de investigacién sobre la relaci6n entre “cuerpo organico”, “cuerpo habitual” 1 respiracin en el medio acustico, la nocién de “profundidad!” en relaclén con ae teniendo en cuenta la apropiacién motriz de accesorios. Creemos que el campo es amplio y la descripcién fenomenolégica tiene mucho que decir al respecto. Notas Cf, Serrano de Haro, A. (1997) “Fundamentos del andlisis fenomenolégico del cuerpo” en La posibilidad de la fenomenologta, Madrid, Editorial Complutense, pp. 185-216.EI profesor Serrano de Haro sefiala que “el cuerpo solo puede constituirse como tal en la tactilidad” (p.207) la tactilidad constituye una “protocorporalidad”. Siendo asf, el fendmeno del cuerpo en el agua reviste una gran importancia para su posible determinacién. ~Tncluso cabe sefialar que los nadadores profesionales se depilan todo el cuerpo para tener mayor bilidad y poder ejecutar }os movimientos mAs eficazmente. Ci. Gallagher, Shaun (1995) “Body Image and Body Schema in a Deafferented Subject” en Welton, Donn (Ed.), Body and Flesh: a philosophical reader, Oxford, Blackwell, 1995, pp. 131- 147 (traduccién propia). También versién preprint digital disponible en hitp://pegassus.cc.ucf. cedu/-gallaghr/gallé&cole95.html Referencias Gallagher, Shaun (1995), “Body Image and Body Schema in a Deafferented Subject” en Welton, Donn (Ed.), Body and Flesh: a philosophical reader, Oxford: Blackwell, pp. 131-147. ‘Mauss, M. (1936) “Técnicas y movimientos corporales” en Journal de Psycologie, XXXII, mimeros 3-4. Merleau-Ponty, M. (1959) Las relaciones del nifio con los otros, Cordoba, Argentina: Facultad de Filosofia y humanidades Universidad Nacional de Cérdoba. Merleau-Ponty, M. (1957) Fenomenologia de la Percepcién, trad. E, Uranga, México: FCE. Merleau-Ponty, M. (2003) El mundo de la Percepcién, Bs. As.FCE. Merleau-Ponty, M. (1977) El ojo y el espiritu, Bs. As.:Paidés. Serrano de Haro, Agustin (1997) “Fundamentos del andlisis fenomenolégico del cu- en Cienciay en Arte uado y que las ualidad dindmica, Quedan abiertas cuerpo habitual” | relacién con el indar en el agua 2ue el campo es pecto. 675 erpo” en La posibilidad de la fenomenologia, Madrid: Editorial Complutense. pp. 185-216, _ Serrano de Haro, Agustin (2007) La precisién del cuerpo, Madrid: Ed.Trotta, Sheets-Johnstone, M.(1999) The primacy of movement, Philadelphia:John Benjamins Publishinf Company. Sheets-Johnstone, M. (2010) “Body and Movement: Basic Dynamic Principles” en Gallagher, S. y Schmicking (eds.) Handbook of Phenomenology and Cognitive Science, Springer, pp. 217-234. » del cuerpo” en 16.E1 profesor ctilidad” (p.207) uerpo en el agua para tener mayor ited Subject” en I, 1995, pp. 131- -gassus.cc.ucf, nted Subject” ider, Oxford: e Psycologie, Argentina: irdoba, nga, México: Alejandro Rafael Laregina alaregina@hotmail.com

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