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ARTÍCULO DE PROGRESO
PUBLICADO EN LÍNEA: 13 DE OCTUBRE DE 2013 |DOI: 10.1038/NGEO1920

Depósitos de minerales gigantes formados por

alineaciones óptimas y combinaciones de procesos geológico
Jeremy P Richards

Los depósitos de mineral gigantes contienen cantidades anómalamente grandes de metal y son objetivos prioritarios para las empresas de
exploración de minerales. Se debate si estos depósitos gigantes tienen un modo único de formación. Alternativamente, pueden representar
simplemente el extremo de un espectro de tamaños de depósitos, formados por una coincidencia óptima de procesos geológicos comunes
para construir acumulaciones de metal inusualmente grandes. Si se forman por procesos únicos, la aparición de depósitos de minerales gigantes puede se
Por el contrario, si se forman por procesos comunes, comprender los mecanismos que conducen a las circunstancias óptimas para los
depósitos de metales gigantes podría ayudar con la exploración. Una revisión de varios pórfidos gigantes de cobre, molibdeno, oro y oro epitermal.
Los depósitos de plata revelan que muchos tienen características consistentes con la formación durante la optimización de los procesos
normales de formación de minerales. En varios casos, el gran tamaño del depósito refleja factores específicos, como distintas configuraciones
tectónicas, rocas hospedantes reactivas o flujo de fluido concentrado, que no son inusuales por sí mismos pero han ayudado a mejorar el proceso general
Por lo tanto, sugiero que la exploración efectiva de depósitos gigantes debe buscar condiciones distintas dentro de entornos geológicos
fundamentalmente prospectivos que puedan conducir a procesos mejorados de formación de minerales.

porque contienen la mayor cantidad de metal y pueden extraerse
Las empresas de exploración
potencialmente minera
para buscan
obtener depósitos
la mayor de minerales
ganancia gigantes
(Cuadro 1). Pero existe un
debate considerable entre los geólogos económicos en cuanto a la definición y los
controles sobre la formación de depósitos de minerales gigantes. Se han propuesto
varios criterios para la clasificación del tamaño del depósito. Por ejemplo, los depósitos
de oro (Au) y cobre (Cu) se han definido como 'gigantes' si contienen >100 t (toneladas)
de Au o >2 Mt de Cu, respectivamente1 ; pero otra definición usa números tres veces
estos valores2 . El desacuerdo más fuerte, sin embargo, se relaciona con si los
depósitos gigantes son únicos en su modo de formación o simplemente representan
miembros finales de procesos normales que han operado a niveles y eficiencia máximos,
y/o mediante procesos acumulativos óptimos, para construir depósitos inusualmente
grandes. acumulaciones de metal.
En cada clase de yacimiento mineral existe una gama de tamaños, desde
subeconómicos hasta los ejemplos más grandes conocidos, algunos de los cuales
pueden clasificarse como gigantes. Sin embargo, cada depósito también es único en
sus detalles. Muchos yacimientos de minerales gigantes muestran ciertas características
que difieren de los modelos estándar para la formación de pórfidos de cobre-molibdeno-
depósitos de oro (Cu±Mo±Au) y epitermales de oro-plata (Au-Ag) (ver Información
complementaria). A continuación argumento, utilizando como ejemplos depósitos
epitermales y de pórfidos relacionados con mag máticos —formados a partir de fluidos
hidrotermales de temperatura alta y baja liberados por magmas enfriándose,
respectivamente— que los modelos estándar pueden producir un depósito grande
típico. Sin embargo, se pueden requerir uno o más procesos adicionales o específicos
para sobrecargar el sistema para formar un depósito gigante.
Estos procesos no son necesariamente inusuales y pueden ser simplemente
componentes o variantes de los modelos estándar que se han mejorado de manera
inusual. Por lo tanto, es la convergencia fortuita de procesos que operan con la máxima
eficiencia y en una secuencia óptima lo que conduce a la formación de depósitos
gigantes a partir de sistemas subyacentes que, por lo demás, son normales. Muchos
de estos procesos son predecibles o fáciles de detectar. Por lo tanto, pueden usarse
para refinar las estrategias de exploración para el descubrimiento de depósitos de
minerales gigantes dentro de regiones generalmente prospectivas.
es, caliente, acuoso) fluidos. Los depósitos de pórfido se forman a partir de fluidos a
alta temperatura (300–700 °C). Los fluidos se disuelven a partir del enfriamiento de los
magmas emplazados en la corteza superior, típicamente en entornos de arco volcánico
por encima de las zonas de subducción. Contienen Cu, Mo y Au, presentes
principalmente como los minerales sulfurados calcopirita y molibdenita. En cambio, los
depósitos epitermales se forman a temperaturas más bajas (ÿ300 °C), a partir de fluidos
que pueden o no estar relacionados con el magmatismo. Los depósitos epitermales
comúnmente contienen Au y Ag como elementos nativos, o dentro de sulfuro y otros
minerales (consulte la Información complementaria para obtener descripciones más
detalladas de estos tipos de depósitos y referencias de respaldo).
Ambos tipos de depósitos se pueden subdividir según el inventario de metales, el
estilo de alteración (que refleja la química de los fluidos), el entorno tectónico o la
química de los magmas asociados. Los límites entre estos subtipos suelen ser borrosos
y también existen relaciones de transición entre los principales tipos de depósitos. Por
lo tanto, la definición de una característica inusual en un depósito específico como
única, o simplemente como parte del espectro conocido de características, es subjetiva.
Sin embargo, en muchos casos, los miembros gigantes de estos grupos exhiben ciertas
características que marcan su formación como anómala, si no única. Estas
características se analizan caso por caso a continuación.
Depósitos de pórfido gigante Cu±Mo±Au
Varios ejemplos gigantes de depósitos de pórfido 'estándar' ocurren en el cinturón de
pórfido de Laramide del Mesozoico tardío / Cenozoico temprano del oeste de los
Estados Unidos (por ejemplo, los depósitos de Butte, Bagdad, Morenci y Sierrita) y el
norte de México (por ejemplo, los depósitos de Cananea y La Caridad). ), y el cinturón
de pórfidos del Eoceno-Oligoceno del norte de Chile (por ejemplo, los depósitos de
Collahuasi, Chuquicamata y La Escondida) (Fig. 1). Vale la pena señalar, sin embargo,
que varios de los pórfidos estándar más grandes, como los depósitos de Chuquicamata
y La Escondida, deben su condición de gigante, al menos en parte, a procesos de
enriquecimiento secundario posteriores a la formación original del mineral; estos
procesos no se discuten aquí.

Depósitos de pórfidos y epitermales Existen varios otros depósitos de pórfidos gigantes que solo se ajustan parcialmente
Los depósitos de pórfido de Cu±Mo±Au y epitermales de Au–Ag están formados por la al modelo estándar. A continuación se analizan cuatro ejemplos (consulte la Tabla
precipitación de minerales de origen hidrotermal (que complementaria S1 para conocer las estimaciones de reservas).

Departamento de Ciencias Atmosféricas y de la Tierra, Universidad de Alberta, Edmonton, Alberta, Canadá, T6G 2E3. correo electrónico: Jeremy.Richards@ualberta.ca

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ARTÍCULO DE PROGRESO
Caja 1 | En minería, más grande es mejor
El propósito de la exploración minera es encontrar volúmenes de roca lo suficientemente
enriquecidos en un elemento o mineral en particular, y de tamaño suficiente para ser
extraídos económicamente. Cuanto más rico sea el depósito (ley), y cuanto mayor sea el
volumen de roca mineralizada (tonelaje), mayor será la ganancia que se puede obtener y
más tiempo se puede explotar el depósito con una ganancia. Los grandes yacimientos
también se benefician de las economías de escala durante la extracción, la centralización
del trabajo administrativo y de planificación y el uso de equipos a gran escala, lo que
reduce los costos. De manera similar, la larga vida útil de las minas justifica los altos
gastos de capital requeridos para la construcción de infraestructura a gran escala y de
larga duración. Además, las economías de escala suelen reducir el impacto ambiental
(por unidad de producto) a través de la eficiencia energética y el aislamiento de la
perturbación de la tierra, al tiempo que localizan la perturbación en las comunidades. Por
lo tanto, la mayoría de las empresas de exploración buscan yacimientos grandes o
'gigantes' que ofrezcan el máximo rendimiento de la inversión, la perspectiva de
rendimientos continuos durante largos períodos de tiempo y mínimos impactos ambientales
y sociales.
Las reservas minerales para un depósito de mineral generalmente se informan en
términos de ley promedio del mineral (en porcentaje de peso para elementos abundantes,
o gramo por tonelada (g t–1) para elementos raros como el oro) y las toneladas de roca
que contiene ese mineral ( comúnmente informado en millones o miles de millones de
toneladas: Mt o Gt). El metal contenido total se calcula en base a estas cifras de tonelaje
y ley. Los depósitos más rentables suelen tener leyes y tonelajes altos, pero los depósitos
individuales en realidad tienen una amplia gama de leyes reales. Por lo tanto, las
estimaciones de 'reservas' se calculan sobre la base de la combinación óptima de tipos
de minerales que permitirán el diseño de mina más eficiente y rentable, y la extracción
final de la mayor cantidad posible del metal contenido. Por lo general, también se informa
una 'ley de corte', que indica la ley de mineralización más baja que se puede extraer
económicamente; esta ley de corte y las cifras de reservas resultantes pueden fluctuar
con los precios mundiales de los metales. Esto puede hacer que los minerales de menor
ley no sean rentables cuando los precios caen, o puede permitir la extracción económica
de materiales que antes se consideraban desechos cuando los precios de los metales
suben. Los costos de producción pueden tener efectos similares si, por ejemplo, el precio
del combustible sube o baja.
Depósito de pórfido de Cu–Au–Mo de Bingham Canyon, Utah, EE. UU.
Después de más de un siglo de minería, el depósito de pórfido de Bingham (Fig. S1
complementaria) todavía contiene reservas de más de 4 Mt Cu.
El depósito se encuentra a varios cientos de kilómetros al noreste del principal cinturón de
pórfido relacionado con el arco de Laramide en Arizona, y está alojado por stocks monzoníticos
del Eoceno intrusos en areniscas y calizas del Carbonífero tardío. El tamaño gigante del
depósito puede deberse a una combinación de factores, incluido el gran tamaño de un batolito
fuente subyacente inferido, el carácter levemente alcalino de los magmas asociados, la
profundidad de emplazamiento adecuada (2–3 km de profundidad) y la profundidad focalizada.
emplazamiento de magmas dentro de un corredor estructural dilatante3 . Ninguna de estas
características es exclusiva de Bingham.
Por el contrario, existe alguna evidencia de la existencia de magmas máficos anormalmente
ricos en Cu en el distrito de Bingham, que pueden haber inyectado Cu en el batolito
subyacente4,5. Más recientemente, se ha sugerido que los magmas de Bingham procedían
de la antigua litosfera continental metasomatizada y no estaban relacionados con la subducción
activa6 . Por lo tanto, parece haber algunos factores únicos que distinguen a este depósito
gigante de los sistemas de pórfido convencionales. Por otro lado, Bingham puede ser, en
cambio, un ejemplo de una subclase recientemente reconocida de depósitos de pórfido
posteriores a la subducción7–9.
Yacimiento de pórfidos de Cu-Mo El Teniente, Chile. El Mioceno tardío/
El depósito El Teniente del Plioceno temprano es uno de los pórfidos más grandes del mundo.
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yacimientos de cobre, que contienen más de 94 Mt de Cu (ref. 10). Existe cierto debate en la
literatura sobre si El Teniente debe clasificarse
como un depósito de pórfido10 o un depósito alojado en brechas11. Pero el estilo principal de
mineralización es la calcopirita diseminada en rocas de pared máficas biotizadas, lo que
implica un control químico local importante sobre la deposición de minerales (por ejemplo,
sulfuración de óxidos de Fe en la roca de pared12,13). Se ha sugerido a partir de estudios
geoquímicos de fluidos que el depósito debe su tamaño inusualmente grande a "la inyección
desde la profundidad de una fase volátil excepcionalmente rica en Cu, Mo, Li y, probablemente,
también en S en una fase magmática de la corteza superior que ya está evolucionando
activamente". sistema hidrotermal”14. Otros autores han sugerido que una larga duración de
la actividad magmática e hidrotermal, alrededor de 0,7 millones de años, condujo a la
acumulación progresiva de Cu en el depósito13,15. Sin embargo, otros se han centrado en
los controles tectonomagmáticos sobre la formación de minerales, señalando que los magmas
de origen se formaron al final de un período prolongado de magmatismo de arco cuando el
ángulo de subducción se redujo. El hundimiento de la losa de subducción puede haber
causado una liberación voluminosa de líquido debido a la descomposición de los minerales
hidratados16. La hidratación extensiva del manto en la zona de suprasubducción puede haber
sido importante para generar magmas hidratados, oxidados y fértiles17. Alternativamente, el
derretimiento por deshidratación de acumulaciones de arco de la corteza profunda durante el
engrosamiento de la corteza puede haber sido responsable de la fertilidad del magma18.
Claramente El Teniente es inusual en varios aspectos. La característica clave de su
tamaño gigante, sin embargo, es probablemente la presencia de paredes rocosas máficas
particularmente receptivas que atraparon químicamente más del 80% de la mineralización12.
En este sentido, El Teniente es similar al depósito de pórfido gigante de Resolución en
Arizona, donde la mineralización de alta ley (>1% Cu) también está alojada en paredes
rocosas máficas (doleríticas)19,20.
Depósito de pórfido de Grasberg Cu–Au–Ag, Papúa, Indonesia. El complejo de pórfidos
de Grasberg contiene reservas de más de 24 Mt Cu y 2000 t Au, que incluso después de 40
años de explotación todavía representa la mayor reserva explotable de Cu y Au del mundo.
Grasberg está relacionado con un complejo intrusivo monzonítico que tiene unos 3 millones
de años. Fue emplazado en secuencias de carbonato de la plataforma continental del
Cretácico-Paleoceno levantadas, luego de la colisión de terrenos de arco con el margen
nororiental de Australasia21. Grasberg es un ejemplo de un sistema de pórfido posterior a la
subducción, probablemente generado por la removilización de la litosfera modificada por la
subducción durante los reajustes tectónicos posteriores a la colisión22. La localización del
emplazamiento del magma de la corteza superior en una estructura de separación sinistral
fue fundamental para concentrar la actividad magmática e hidrotermal23, y los gradientes
térmicos pronunciados (~500 °C km–1) a poca profundidad de emplazamiento (<1 km) dieron
como resultado una precipitación rápida y concentrada de minerales minerales24.
La naturaleza rica en carbonato de las rocas del país también proporcionó trampas químicas
reactivas para la mineralización tipo skarn de Cu-Au de alta ley25.
Depósito de pórfido de Cu–Au de Oyu Tolgoi, Mongolia. El yacimiento Oyu Tolgoi es uno
de los yacimientos de Cu-Au más grandes del mundo, con reservas de 13 Mt Cu y 528 t Au.
Se encuentra en un Paleozoico tardío
Terreno de arco insular, ahora incrustado en Asia central luego de una colisión continental
en el Pérmico26,27. Oyu Tolgoi es un grupo de ocho depósitos de pórfido separados a lo
largo de una tendencia de 22 km de largo, asociados con intrusiones monzodioríticas del
Devónico tardío28,29. La mineralización de muy alto grado (>2,5 % Cu, 0,5–2 g t–1 Au; ref.
28) ocurre en el depósito profundamente cubierto de Hugo Dummett. La mineralización difiere
del modelo de pórfido estándar porque se asocia en gran medida con una alteración arcillosa
avanzada y se caracteriza por conjuntos minerales de alta sulfuración de bornita, calcopirita,
covelita y enargita con pirita (consulte la Información complementaria para obtener una
definición de los términos). Se ha interpretado que esta relación refleja la superposición
descendente de alteración y mineralización de estilo de alta sulfuración en un sistema anterior
de tipo pórfido28,29.
Los muy altos grados de mineralización de Cu-Au reflejan en parte este evento de
sobreimpresión. Sin embargo, la etapa de pórfido de la mineralización también estuvo muy
bien desarrollada, con zonas intensas de veteado laminado30
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(Fig. S2 complementaria), lo que sugiere un enfoque estructural estrecho del flujo
de fluido hidrotermal sobre una gran fuente magmática.
Controles sobre la formación de depósitos de pórfidos gigantes. Cada uno
de estos cuatro ejemplos de depósitos de pórfidos gigantes es anómalo con
respecto al modelo estándar de formación de pórfidos. Los depósitos difieren en
términos de su configuración tectonomagmática (possubducción o colisión), el
papel propuesto de magmas inusualmente ricos en Cu, la presencia de trampas
químicas particularmente reactivas en las paredes rocosas, o eventos de flujo de
fluidos múltiples, prolongados o altamente concentrados (Tabla 1).
Sin estos atributos distintivos, es posible que solo se hubieran formado depósitos
de tamaño normal, o tal vez ninguna mineralización económica en absoluto.
Así, aunque cada depósito se reconoce fácilmente como perteneciente a la
familia de los pórfidos, las condiciones o procesos específicos han generado
enriquecimientos y tonelajes de metales excepcionales.
En el otro extremo del espectro, el potencial para la formación de minerales
puede perderse o destruirse por varias razones, incluidas, de abajo hacia arriba:
volumen o duración insuficientes del magmatismo del arco; reducción de las
condiciones en el manto o en la litosfera profunda, lo que da como resultado un
fraccionamiento temprano de sulfuros y la pérdida de metales del magma;
contenido de agua magmática insuficiente para generar un gran sistema
hidrotermal magmático; emplazamiento de magma a demasiada profundidad o
en rocas impermeables del país, sofocando la circulación hidrotermal; erupción
voluminosa en la superficie que da lugar a la ventilación del sistema hidrotérmico;
o falta de concentración del flujo de fluido hidrotermal, lo que lleva a una
mineralización difusa de bajo grado.
Para que un sistema magmático genere un gran depósito de pórfido, debe
cumplir secuencialmente una serie de pasos y condiciones esenciales. La
omisión de cualquier paso puede resultar en la pérdida del potencial de formación
de minerales. Pero la formación de un depósito gigante puede requerir procesos
adicionales o mejorados para elevar el tonelaje y el grado de mineralización más
allá del rango de los sistemas estándar.
Depósitos epitermales gigantes de Au-Ag
Los depósitos epitermales gigantes de Au-Ag son menos comunes que los
depósitos de pórfido gigante de Cu±Mo±Au (~20 versus ~100 a nivel mundial, aunqueinusualmente altos de mineralización36.
Arroyo en abundancia
Valle de las tierras altas
Guijarro
Bingham
Sierrita
Pueblo viejo
Cananea
Yanacocha
Chuquicamata
El indio
El Teniente
Depósitos de pórfido
Depósitos epitermales
Figura 1 | Depósitos de minerales gigantes. Ubicaciones de depósitos de minerales gigantes discutidos en este documento y cinturones metalogénicos significativos relacionados con arcos
(líneas moradas). Mapa base modificado de World of Maps™ (© Bruce Jones Design, 2010, con autorización).
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esto es obviamente una función de los criterios utilizados para la clasificación31).
Deben su estatus de gigantes (>100 t de Au contenido) ya sea a una gran
abundancia de vetas y vetillas de grado moderado que se pueden extraer
económicamente a granel, o a leyes de mineral espectacularmente altas
("bonanza") en una o más vetas grandes sistemas (Cuadro 1). Como
generalización, los depósitos epitermales de Au-Ag de alta sulfuración (HS) y
sulfuración intermedia (IS) caen más comúnmente en la primera categoría,
mientras que las leyes de mineral de bonanza se encuentran más comúnmente
en depósitos de baja sulfuración (LS) (ver Complemento Información para
descripciones de estos subtipos de depósito). En una revisión de depósitos
epitermales32, cuatro de los ocho depósitos y distritos de oro epitermales
gigantes descritos son de carácter HS o HS-IS, y cuatro son IS o IS-LS. Tres de
los depósitos HS-IS más grandes son Pueblo Viejo en la República Dominicana,
y los depósitos Pascua-Lama y Veladero en el cinturón El Indio de Chile, mientras
que el depósito Porgera en Papúa Nueva Guinea es de tipo alcalino (un subtipo
de LS) (ver la Tabla Suplementaria S1 para estimaciones de reservas). Estos
depósitos se analizan brevemente a continuación.
Yacimiento Pueblo Viejo HS Au–Ag–Cu, República Dominicana.
El yacimiento Pueblo Viejo contiene reservas de 717 t Au (ref. 33).
El depósito se está explotando como una operación a cielo abierto y explota la
mineralización diseminada y alojada en vetas en un gran volumen (3 × 10 km)
de roca intensamente alterada por ácido. Las leyes altas de Au (hasta 21 g t–1)
ocurren en las vetas tardías, pero la mayor parte del mineral se presenta como
ley más baja (2–3 g t–1 Au), mineralización diseminada en rocas sedimentarias
carbonáceas34. Pueblo Viejo es inusual porque está alojado en una secuencia
de arco de islas, mientras que la mayoría de los depósitos grandes de HS Au-Ag
ocurren en secuencias volcánicas de arco continental más félsicas. Se discute la
relación exacta entre el depósito y sus rocas anfitrionas, al igual que los
principales controles sobre la formación de minerales. El gran tamaño del
depósito puede deberse a la presencia de una gruesa secuencia de rocas
volcánicas sedimentarias ricas en Fe y carbónicas, que proporcionaron una
trampa química eficiente para la mineralización de Au-Ag35. Alternativamente,
un casquete de piedra caliza impermeable puede haber sellado el sistema
hidrotermal, conduciendo a estilos de alteración de alta temperatura y grados
Oyu Tolgoi
Majdanpek
Qulong
Hishikari
Sar Jeshmeh Tampakan
Reko Diq Grasberg
Porgera
Lihir
Batu Hijau
Cadia
3
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Tabla 1 | Características de algunos pórfidos gigantes de Cu±Mo±Au y depósitos epitermales de Au–Ag en comparación con sistemas 'estándar'
Característica Depósitos 'estándar' Depósitos gigantes*

Yacimientos de pórfido Cu±Mo± Au20,43–48

entorno tectónico Arco volcánico sobre la zona de subducción Subducción similar o poco profunda, retroarco, colisión o post-subducción

asociación magmática Calco-alcalino a ligeramente alcalino Similar

Contenido de metal del magma Típicamente <100 ppm Cu (ref. 49) Similar; enriquecido en algunos casos? (hasta 125 ppm Cu; ref. 4)

Duración de la actividad hidrotermal Típicamente ÿ0.1 Myr para un solo evento de formación de mineral Hasta 0,7 Myr en múltiples eventos de formación de minerales
(ref. 15)

rocas anfitrionas Rocas sedimentarias volcánicas y clásticas Rocas ígneas máficas similares, ± químicamente reactivas, rocas
carbonatadas

Fluidos hidrotermales 700–300 °C fluidos acuosos salinos de origen Similar; inusualmente metalífero en algunos casos?
magmático

Flujo de fluido hidrotermal Enfocado sobre plutón poco profundo Altamente enfocado en corredores estructurales

Depósitos epitermales de Au–Ag50–55

entorno tectónico HS–IS: arco volcánico sobre la zona de subducción HS-IS: arco de isla de transición, subducción superficial

LS/alkalic: Configuraciones extensionales o back-arc LS/alcalino: rifting continental; transtensión de arco posterior
poscolisión

asociación magmática HS–IS: Calco-alcalino Similar

LS: Bimodal (felsic + mafic) o sin asociación

Alcalino: Alcalino

rocas anfitrionas Rocas sedimentarias volcánicas y clásticas Similares, ± rocas carbonáceas volcánicas-sedimentarias, rocas
carbonatadas

Fuente de fluidos hidrotermales HS–IS: Fluido magmático Similar

LS: predominantemente agua subterránea

Alcalino: Posiblemente fluido magmático

Naturaleza de los fluidos hidrotermales HS–IS: vapores altamente ácidos Similar

LS: agua diluida de pH neutro

Alcalino: pH neutro agua diluida + minor CO2

Flujo de fluido hidrotermal Enfocado estructuralmente Alto grado de enfoque estructural; activación sísmica del
flujo de fluidos

Procesos de depósito de minerales HS–IS: mezcla de fluidos, ebullición Eficiencia de procesos similar, pero inusual, especialmente
LS: Ebullición ebullición repentina inducida por sismicidad
Alcalino: separación de fases H2O-CO2

*No todas estas características anómalas están presentes en un depósito determinado. Consulte la Información complementaria para obtener información adicional sobre los procesos de formación de minerales. HS, alta sulfuración; IS,
sulfuración intermedia; LS, baja sulfuración.

El Indio HS Cinturón Au-Ag Chile. El cinturón de El Indio contiene varios
sistemas individuales de HS Au-Ag, incluidos los depósitos gigantes de Pascua-
Lama (508 t Au) y Veladero (301 t Au)33.
La mineralización está asociada con el vulcanismo calcoalcalino del Mioceno-
Plioceno, pero está restringida a un estrecho intervalo de tiempo de 9,4 a 6,2
millones de años atrás37. La alteración hidrotermal ocurre a lo largo de la
sucesión volcánica, pero solo se mineralizan los sistemas del Mioceno tardío. Las
explicaciones para la restricción de la mineralización epitermal de Au-Ag a este
período incluyen: liberación de fluidos debido a la ruptura de minerales hídricos
por encima de una zona de subducción poco profunda16; incisión en el paisaje,
lo que resulta en la disminución del nivel freático regional con la consiguiente
mezcla y ebullición de fluidos37; hidratación directa y fusión parcial de anfibolitas
de la corteza inferior durante la subducción plana38; y un cambio de estratovolcán
andesítico a formación de domo dacítico, asociado con un cambio en el estado
de estrés litosférico39. Esta amplia gama de explicaciones para la formación de
varios grandes depósitos de mineral en una región restringida espacial y
temporalmente de los Andes Centrales destaca las dificultades para precisar un
solo proceso causal dentro de un entorno de formación de mineral generalmente
favorable.
Yacimiento de Au de tipo alcalino Porgera, Papúa Nueva Guinea. El
yacimiento de Au Porgera (600 t de Au pasada producción más reservas40) pertenecereconocibles
a la
subconjunto alcalino de depósitos epitermales LS. En este caso, el depósito está
asociado con un conjunto de stocks y diques máficos, sódicos (hawaiíticos a
mugearíticos) emplazados en sedimentos de la plataforma mesozoica levantados
en el margen nororiental de Australasia. El momento del magmatismo y la
formación de minerales hace 6 millones de años se correlaciona con la colisión
de parte del arco de Nueva Bretaña con el margen continental. Esta colisión
resultó en una fusión parcial de pequeño volumen del manto previamente
modificado por subducción en un entorno de arco posterior41. Los fundidos
parciales alcalinos y máficos se emplazaron en la corteza poco profunda a lo
largo de un sistema de fallas transtensionales de arco posterior oblicuo orógeno.
El depósito de oro de Porgera fue excepcional al contener una gran zona de
mineralización de oro controlada por fallas de ley muy alta (Figura complementaria
S3; las reservas iniciales al comienzo de la extracción en 1990 eran de 51,5 Mt
con una ley de 6,5 g t–1, con leyes de rebajes localmente en exceso de 300 g t–
1 Au). La deposición de oro de alta ley fue causada por la canalización eficiente
de fluidos hacia la zona de la falla, combinada con la ebullición repentina durante
el movimiento de la falla sísmica en un rango vertical extendido (mejorado por los
contenidos elevados de CO2 en los fluidos formadores de minerales)40,42.
Controles sobre la formación de depósitos epitermales gigantes Al igual
que con los cuatro ejemplos de depósitos de pórfidos gigantes discutidos
anteriormente, estos tres depósitos epitermales gigantes son todos miembros
de la familia epitermal establecida. Los controles sobre la formación de minerales,

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Entorno de arco volcánico
Depósitos epitermales de Au HS-IS
Enfoque estructural
Yacimiento de pórfido Cu
Rocas huésped reactivas
Múltiples eventos de formación de minerales
Fuente batolito de la corteza superior ¿Magmas y/o fluidos ricos en Cu?
Cambio tectónico
SChe
matiC
subduc
tintineo
plate
Figura 2 | Características clave de los depósitos de minerales gigantes. La figura ilustra esquemáticamente los modos generales de formación de los depósitos de pórfido Cu y Au
epitermal. LS, baja sulfuración. Los recuadros morados resaltan características o procesos que pueden resultar en la sobrealimentación de estos sistemas para formar depósitos gigantes.
ejemplo, la reacción de wallrock, el flujo de fluidos estructuralmente enfocado o la
ebullición de fluidos, no son únicos y las rocas ígneas asociadas no son
particularmente inusuales (excepto para el grupo alcalino). Sin embargo, son
evidentes para los tres depósitos configuraciones tectónicas transitorias o distintas,
como un arco de islas de transición, subducción poco profunda o transtensión de
arco posterior posterior a la colisión. Estos entornos tectónicos pueden haber dado
lugar a la liberación de volúmenes inusualmente grandes de fluido formador de
minerales oa una concentración excepcionalmente estrecha del flujo de fluido hacia
arriba en una sola estructura de extensión. El sellado hidrotermal y las paredes
rocosas reactivas también son controles localmente importantes en la formación de minerales.
La optimización de los procesos normales de formación de minerales.
Varios de los depósitos de pórfido de Cu±Mo±Au y epitermales de Au–Ag más
grandes del mundo son claramente reconocibles como parte del espectro aceptado
de sistemas de pórfido y epitermales. Sin embargo, cada uno también tiene uno o
más rasgos distintivos que fueron responsables de su tamaño anómalamente grande
y/o altos grados de mineralización (Cuadro 1). Estas características distintivas no
son inusuales por sí mismas, pero en combinación con procesos de formación de
minerales más comunes pueden resultar en la formación de depósitos
excepcionalmente grandes (Fig. 2).
Tales características incluyen, por ejemplo, configuraciones tectónicas distintas y
quizás transitorias dentro de entornos de subducción o colisión que pueden
desencadenar o localizar magmatismo fértil. Las rocas de campo particularmente
reactivas también pueden actuar como trampas químicas para la precipitación de
minerales. Además, el enfoque o el sellado del flujo de fluidos puede conducir a la
formación de minerales de alta ley estructuralmente controlados o al atrapamiento
de fluidos debajo de rocas impermeables. Muchas de estas condiciones, o su
potencial de ocurrencia, pueden reconocerse a partir de un estudio cuidadoso de la
historia tectónica y magmática de una región determinada. Por lo tanto, se puede
predecir la probabilidad de formación de depósitos gigantes.
Si, de hecho, los procesos de formación de minerales positivos deben alinearse
fortuitamente para permitir la formación de minerales gigantes, entonces la ausencia,
el momento menos que óptimo o la ineficiencia de cualquier paso clave reducirá o
destruirá el potencial metalogénico. Esto se confirma por el hecho de que los
sistemas de pórfidos y epitermales de baja ley o estériles son la norma: según una
regla general común, solo 1 de cada 1000 objetivos de exploración resultará
económico.
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ARTÍCULO DE PROGRESO
Ajuste de arco trasero o grieta
tipo alcalino
epitermal LS epitermal
Depósito de au Depósito de au
Rocas huésped reactivas
Flash-ebullición, mezcla
Enfoque estructural
intrusión alcalina
Yacimiento
Cambio tectónico
agua subterránea
fluido
magmático
Culpa
La predicción de la ubicación de depósitos de minerales excepcionales es difícil,
pero no imposible. Se pueden identificar distintas condiciones que parecen haber
ayudado a mejorar los procesos de depósito generales durante la formación de
varios depósitos de pórfido y epitermales. Por lo tanto, al centrarse en entornos
geológicos generalmente prometedores que también muestren evidencia de estas
condiciones distintas, la exploración de depósitos gigantes podría hacerse más
eficiente.
Recibido el 8 de febrero de 2013; aceptado el 17 de julio de 2013; publicado en línea el
13 de octubre de 2013.
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Agradecimientos
Agradezco el apoyo de una Discovery Grant del Consejo de Investigación de Ciencias
Naturales e Ingeniería de Canadá.
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La información complementaria acompaña a este documento en www.nature.com/naturegeoscience.
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Conflicto de intereses financieros
El autor declara no tener intereses financieros en competencia.