El concepto erróneo llamado Virus.
Sarampión como ejemplo.
Dr. Stephan Lanka
Al contrario de lo que cree la mayoría de
la gente, no hay virus patógenos. Las
afirmaciones sobre la existencia de virus y
enfermedades virales se basan en malas
interpretaciones históricas y no, como
pensé en el pasado, en fraudes o engaños
deliberados. No tenemos nuevas mejores,
en el sentido positivo, "científico"
descubierto y explicaciones para el origen,
la terapia y la prevención no sólo de las
enfermedades "virales".
El fenómeno de aparición simultánea o
posterior de síntomas en distintas
personas, que hasta ahora se interpretaba
como contagio y se creía que estaba
provocado por la transmisión de
patógenos, ahora también es fácil de
comprender a través de nuevos
descubrimientos. Por tanto, ahora
tenemos una nueva visión de la vida (cuya
realidad es una visión antigua) y de la
integración cosmológica de los procesos
biológicos.
La perspectiva “nueva”, más bien
redescubierta, sólo podría originarse fuera
de la “ciencia” oficial; una de las razones
de esto es que las personas involucradas
en las instituciones científicas no cumplen
con su primer y más importante deber
científico: dudar permanentemente y
verificar dos veces cada teoría. De lo
contrario, ya habrían descubierto que la
mala interpretación ya se había estado
produciendo durante mucho tiempo y se
había convertido en un dogma solo por
actividades extremadamente poco
científicas en los años 1858, 1953 y 1954.
La transición a una nueva explicación de la
salud, la enfermedad y la curación solo
tendrá éxito porque todos los terapeutas
y científicos interesados pueden salvar las
apariencias. Desde la historia y la nueva
perspectiva de la biología y la vida, ahora
también tenemos explicaciones para las
emociones, la ignorancia y todo tipo de
comportamiento humano. Salir de un
callejón sin salida y perdonar los errores
del pasado puede ser incluso más eficaz
cuanto más se comprenda lo que pasó y
se aprenda para el futuro.
Sé que las personas directamente
involucradas, como médicos, virólogos
profesionales de la salud, y sobre todo
para las personas afectadas por el
sistema, que sufren de diagnósticos
erróneos o que incluso han perdido
familiares por ello, puede ser difícil
aceptar intelectualmente el explicación de
la realidad que ofreceré en este artículo.
Para que la teoría de los gérmenes no se
convierta en un impulso peligroso, como
fue el caso del SIDA, la BSE, el MERS, el
SARS, el Corona y varios otros casos de
gripe animal, o incluso que provoque la
ruptura del orden público, les estoy
preguntando amablemente a todos las
personas que recién están descubriendo
los hechos sobre la “inexistencia” de los
presuntos virus para discutir el tema de
manera objetiva y sin emociones.
La situación actual
Todas las afirmaciones sobre virus como patógenos son
erróneas y se basan en interpretaciones erróneas
fácilmente reconocibles, comprensibles y verificables. Las
causas reales de las enfermedades y los fenómenos que se
atribuyen a los virus ya se han descubierto e investigado;
este conocimiento ya está disponible. Todos los científicos
que piensan que están trabajando con virus en laboratorios
en realidad están trabajando con partículas típicas de
tejidos o células moribundos específicos que se prepararon
de una manera especial. Creen que esos tejidos y células
están muriendo porque fueron infectados por un virus. En
realidad, esos tejidos y células preparados están muriendo
porque murieron de hambre y envenenados como
consecuencia de los experimentos en el laboratorio.
Los virólogos creen en los virus, porque agregan al tejido y
cultivo celular sangre, saliva u otros fluidos corporales
supuestamente infectados, después de haber retirado los
nutrientes del cultivo celular respectivo y después de haber
comenzado a envenenarlo con antibióticos tóxicos. Creen
que los virus destruyen el cultivo celular. Sin embargo, la
muerte del tejido y las células ocurre exactamente de la
misma manera cuando no se agrega ningún material
genético "infectado". Los virólogos aparentemente no han
notado este hecho. De acuerdo con la lógica científica y las
reglas de conducta científica, deberían haberse realizado
experimentos de control. Para confirmar el método
recientemente descubierto de la llamada "propagación de
virus", para ver si no fue el método en sí el que causó o
falsificó el resultado, los científicos habrían tenido que
realizar experimentos adicionales, llamados experimentos
de control negativo. , en el que agregarían sustancias
estériles o sustancias de personas y animales sanos al
cultivo celular.
Estos experimentos de control nunca han sido realizados
por la "ciencia" oficial hasta el día de hoy. Durante el
ensayo del virus del sarampión, | encargó a un laboratorio
independiente realizar este experimento de control y el
resultado fue que los tejidos y las células mueren debido a
las condiciones del laboratorio exactamente de la misma
manera que cuando entran en contacto con material
supuestamente “infectado”.
El propósito de los experimentos de control es excluir la
posibilidad de que sea el método o la técnica aplicada el
que pueda causar el resultado. Los experimentos de control
son el deber más alto de la ciencia y también la base
exclusiva para afirmar que la conclusión de uno es
científica. Durante el ensayo del virus del sarampión, fue el
experto legalmente designado quien afirmó que los
documentos que son cruciales para toda la virología no
contienen experimentos de control. Aprendemos de esto
que los científicos respectivos trabajan de manera
extremadamente acientífica, sin darse cuenta.
Este enfoque completamente acientífico se originó en junio
de 1954, cuando se publicó un artículo especulativo no
científico y refutable, según el cual la muerte de tejido en
un tubo de ensayo se consideraba una posible evidencia de
la presencia de un virus. Seis meses después, el 10 de
diciembre de 1954, el autor principal de esta opinión
recibió el Premio Nobel de Medicina por otra teoría
igualmente especulativa. La especulación de junio de 1954
se elevó luego a un hecho científico y se convirtió en un
dogma que nunca ha sido cuestionado hasta la fecha.
Desde junio de 1954, la muerte de tejidos y células en un
tubo de ensayo se considera una prueba de la existencia de
un virus.
La supuesta evidencia de la existencia de virus.
La muerte de tejidos / células también se considera como el
aislamiento de un virus, porque afirman que algo del
exterior, de otro organismo, fue llevado al laboratorio,
aunque nunca se ha aislado un virus según el significado de
la palabra aislamiento. , y nunca ha sido fotografiado ni
caracterizado bioquímicamente como una estructura única.
Las micrografías electrónicas de los presuntos virus
muestran en realidad partículas celulares bastante
normales de tejidos y células moribundos, y la mayoría de
las fotos muestran sólo un modelo de computadora (CGI,
imágenes generadas por computadora). Debido a que las
partes involucradas también CREEN que el tejido y las
células que mueren se convierten en virus, su muerte
también se considera una propagación del virus. Las partes
involucradas todavía creen esto porque el descubridor de
este método fue galardonado con el Premio Nobel y sus
artículos siguen siendo los artículos de referencia sobre
“virus”. Más sobre esto a continuación.
Sin haber purificado este brebaje formado por tejido y
células moribundas de monos, fetos bovinos y antibióticos
tóxicos, esta mezcla se utiliza como vacuna "viva", porque
se supone que está formada por los denominados virus
"atenuados". La muerte de tejidos y células - por inanición y
envenenamiento y no por una supuesta infección - se ha
malinterpretado continuamente como prueba de la
existencia de virus, como prueba de su aislamiento y como
prueba de su propagación.
Así, la mezcla tóxica resultante llena de proteínas extrañas,
ácidos nucleicos extraños (ADN / ARN), antibióticos
citotóxicos, microbios y esporas de todo tipo se está
etiquetando como una “vacuna viva”. Se implanta en los
niños mediante vacunación principalmente en los
músculos, en una cantidad que si se inyectara en las venas
conduciría inmediatamente a una muerte segura. Sólo las
personas ignorantes que confían ciegamente en las
autoridades estatales que están “probando” y aprobando
las vacunas pueden considerar la vacunación como un
“pequeño pinchazo inofensivo”. Los hechos verificables
demuestran el peligro y la negligencia de estos científicos y
políticos, que afirman que las vacunas son seguras, tienen
pocos o ningún efecto secundario y protegerían de una
enfermedad. Ninguna de estas afirmaciones es verdadera y
científica, al contrario: tras un análisis científico preciso,
uno encuentra que las vacunas son inútiles y la literatura
respectiva admite la falta de cualquier evidencia a su favor.
Las moléculas individuales se extraen de las partículas de
tejido y células muertas, se malinterpretan como partes de
un virus y, en teoría, se unen en un modelo de virus. Un
virus real y completo no aparece en ninguna parte de toda
la literatura "científica". El proceso de búsqueda de
consenso para el “virus” del sarampión, en el que los
participantes debatieron para determinar qué pertenecía al
virus y qué no, duró décadas. »
 La llamada inyección Las células mueren
Faltan experimentos de control y, por lo tanto, se ha de sangre o saliva de de hambre y
ignorado que solo hay una evidencia hipotética e personas enfermas envenenamiento
imaginaria para virus y ninguna evidencia científica
material.

Cortar Antibiótico venenoso que

nutrientes. mata las células

Experimento La falsa creencia de

infeccioso que las células mueren

Las células mueren

Sin infección.
por hambre y
envenenamiento

Las celdas son Se supone que los

planteadas para antibióticos excluyen
convertirse que la muerte
"Hambriento" en esperada de las
orden para células es causada
absorber más por bacterias.
fácilmente los
presuntos virus.
"Experimentos de control" Realidad:
Hasta la fecha, ninguno de los Las células mueren de
medicamentos ni la "ciencia" ha hambre y
llevado fuera de los experimentos envenenamiento.
de control.

Con el aparentemente nuevo Coronavirus de China 2019
(2019- nCoV, mientras tanto, renombrado), este proceso de
búsqueda de consenso dura solo unos pocos clics del
mouse.
Con solo unos pocos clics del mouse, un programa puede
crear cualquier virus al juntar moléculas de partes cortas de
ácidos nucleicos de tejido muerto y células con una
composición bioquímica determinada, ordenándolas como
se desee en un genotipo más largo que luego se declara
como ser el genoma completo del nuevo virus. En realidad,
ni siquiera esta manipulación, denominada "alineación",
puede dar como resultado el material genético "completo"
de un virus que podría entonces denominarse genoma.
Los científicos chinos que ahora afirman que los ácidos
nucleicos a partir de los cuales se construyó teóricamente
el genoma del nuevo Corona-virus2019 probablemente
provienen de serpientes venenosas, también son víctimas
de este concepto erróneo mundial actual sobre los “virus”,
como todos lo somos. Cuanto más se inventan las
“secuencias de ADN” virales, más “descubren” similitudes
con todo. Estos errores ocurren metódicamente. Gran
parte de nuestra ciencia académica funciona así: Se inventa
una teoría, siempre se argumenta dentro de la teoría, y la
llaman ciencia y afirman que esta representa la realidad. En
realidad, solo representa la teoría postulada. »

En este proceso de construcción teórica del “ADN viral”,

aquellas secuencias que no encajan se “suavizan” y se
agregan las que faltan. Así, se inventa una secuencia de
ADN que no existe en la realidad y que nunca fue
descubierta y demostrada científicamente en su conjunto.
En pocas palabras: a partir de fragmentos cortos,
teóricamente y según un modelo de ADN de un virus,
también se fabrica teóricamente una pieza más grande, que
en realidad no existe. Por ejemplo, a la construcción
"teórica" del ADN del virus del sarampión con sus pequeños
fragmentos de partículas celulares le falta más de la mitad
de las secuencias de moléculas que representarían un virus
completo. Estos se crean en parte artificialmente mediante
métodos bioquímicos y el resto simplemente se inventan.
 Cómo se construye hipotéticamente una secuencia de ADN viral a partir de moléculas celulares típicas y cómo se probó
durante el ensayo del virus del sarampión que los "virus" son sólo modelos imaginarios artificiales.
Células Aislamiento de
moribundas partículas
específicas (ácidos
nucleicos)
Componentes Un virus nunca ha
típicos de las apareció ni se ha
células visto en un
muertas. humano.
Las pruebas de virus
Debido a la falta de experimentos de control negativo, a los
científicos involucrados aún no se les ha ocurrido que todas
las pruebas de "virus" resultarán en un cierto número de
"positivos", dependiendo de la sensibilidad de la calibración
del equipo de prueba. Las "plantillas" que utilizan en las
pruebas para encontrar los supuestos "virus" no provienen
de "virus", sino de tejidos, células y suero fetal (sangre sin
componentes específicos) proveniente de animales,
principalmente monos y terneros. Debido a que estos
animales son bioquímicamente muy similares a los
humanos, está claro que tales partículas, que se
malinterpretan como partículas virales, se pueden encontrar
en todos los humanos mediante “pruebas de virus”. Algunos
"virus" y sus "vacunas", no el "virus" del sarampión, en
realidad se originan en fetos humanos abortados. Es
especialmente revelador aquí que todas las pruebas
detectan moléculas que existen en cada ser humano y que
las vacunas pueden causar reacciones alérgicas
particularmente peligrosas, que se han denominado
"enfermedades autoinmunes".
Uno de los componentes más contaminados e impuros de
las vacunas es el suero fetal bovino, sin el cual el tejido y las
células en el laboratorio no crecen en absoluto o no crece lo
suficientemente rápido, y que se extrae de la forma más
espantosa de los fetos. Sin anestesia. Contiene todo tipo de
microbios conocidos y desconocidos, sus esporas y una gran
cantidad de proteínas desconocidas. Además de las
partículas de tejido renal de mono, también son partículas
de este suero fetal las que los científicos están extrayendo y
analizando cuando creen que están formando un "virus",
que no existe y nunca fue probado en toda la literatura
"científica". Como un “virus” completo.
Determinación Las partículas pequeñas son
de la teóricamente añadidas a un
composición. modelo de virus.
Los científicos creen Las personas involucradas creyeron
que las partículas que este modelo imaginario
celulares son piezas representa un "virus", aunque este el
de un virus. modelo nunca fue encontrado en la
vida real.
El hecho de que las vacunas se fabrican exclusivamente a
partir de estas sustancias explica por qué son especialmente
las personas vacunadas las que dan "positivo" a todos estos
"virus" imaginarios a partir de los cuales se fabrican las
vacunas. Las pruebas solo reaccionan a partículas animales
de los supuestos virus, proteínas animales o ácidos nucleicos
que a menudo son idénticos o muy similares a las proteínas
y ácidos nucleicos humanos. Las pruebas de virus no
encuentran nada específico, ciertamente nada “viral” y por
eso no valen nada. Sin embargo, las consecuencias, como
hemos visto con el ébola, el VIH, la gripe, etc., son que las
personas se paralizan por el miedo y mueren a menudo
debido a un tratamiento muy peligroso.
Cabe señalar que ninguna de las llamadas "pruebas de virus"
tiene un resultado de "sí" o "no", sino que están calibradas
de manera que puedan interpretarse como "positivas" sólo
después de que se haya alcanzado un nivel de concentración
particular. Por lo tanto, de acuerdo con la calibración del kit
de prueba, se puede obtener arbitrariamente una prueba
“positiva” en sólo unas pocas personas, muchas personas,
ninguna o todas las personas y animales. La dimensión de
toda esta ilusión científica se vuelve clara tan pronto como
entendemos que los síntomas "normales" de otra manera
silenciosos sólo se diagnostican como SIDA, EEB, gripe,
sarampión, etc. si hay una prueba "positiva" para ello.
Detalles cruciales.
Hasta 1952, los virólogos creían que un virus era una
proteína o enzima tóxica que envenenaba directamente el
cuerpo, y que de alguna manera el cuerpo mismo lo
multiplicaba y se propagaba tanto en el cuerpo como entre
las personas y entre los animales.
La medicina y la ciencia abandonaron esta idea en 1951,
porque el virus sospechoso nunca se había visto en un
microscopio electrónico y, sobre todo, nunca se habían
llevado a cabo experimentos de control. Se reconoció que
incluso los animales, órganos y tejidos sanos liberarían
durante el proceso de descomposición los mismos productos
de descomposición que anteriormente se habían
malinterpretado como “virus”. La virología se había refutado
a sí misma.
Sin embargo, cuando la esposa del posterior premio Nobel
Crick dibujó una doble hélice y este dibujo fue publicado en
la famosa revista científica Nature como un supuesto
modelo desarrollado científicamente del supuesto ADN,
comenzó una nueva y muy exitosa exageración, la llamada
genética molecular. A partir de ese momento, se pensó que
las causas de la enfermedad estaban en los genes. La idea de
un virus cambió y de la noche a la mañana un virus ya no era
una toxina, sino una secuencia genética peligrosa, un ADN
peligroso, una cadena viral peligrosa, etc. Esta nueva
virología genética fue fundada por jóvenes químicos que no
tenían ni idea de biología y medicina. , pero tenían dinero
ilimitado para la investigación. Y no sabían que la vieja
virología ya se había refutado.
Durante más de 2000 años tenemos el dicho: perdónalos,
porque no saben lo que hacen. Desde 1995, desde que
hicimos las preguntas sobre la evidencia y publicamos las
respuestas, podemos agregar: porque no pueden admitir
que lo que han aprendido y practicado no es cierto y, más
que eso, es peligroso o incluso letal. Como nadie hasta ahora
entendía todo el contexto y tenía el valor de decir la verdad,
ahora tenemos aún más hipótesis subsidiarias, como el
“sistema inmunológico” o la “epigenética”, para mantener
las teorías ficticias.
La idea de un virus surgió de la lógica forzada del dogma de
la teoría celular. Luego vino la idea de las bacterias
patógenas, las toxinas bacterianas, luego las toxinas virales,
hasta que finalmente se abandonó esta idea en 1952. A
partir de 1953, la idea de Virchow de una enfermedad
venenosa (latín = virus) se convirtió en el virus genético, que
en A su vez, nació la idea de los genes del cáncer, luego se
fundó la “guerra contra el cáncer” en la era Nixon, y más
tarde apareció la idea de los genes para todo. En el año
2000, sin embargo, también se refutó toda la teoría
genética, después de que se publicaran los datos
contradictorios del llamado proyecto del genoma humano
junto con la vergonzosa afirmación de que se había
cartografiado todo el genoma humano, aunque más de la
mitad de fue completamente inventado. (7) La gente no es
consciente de que es muy difícil para los respectivos
académicos admitir que estuvieron involucrados en tales
conceptos erróneos.
Los llamados comedores de bacterias
El modelo para la idea de un virus genético en humanos,
animales y plantas, que comenzó a desarrollarse a partir de
1953, fueron los denominados comedores de bacterias,
llamados (bacterio) fagos, que habían llamado la atención de
los científicos desde 1915. Desde En 1938, cuando los
microscopios electrónicos disponibles comercialmente se
aplicaron a la investigación, estos fagos pudieron
fotografiarse, aislarse como partículas completas y todos sus
componentes pudieron determinarse y caracterizarse
bioquímicamente. Aislarlas, es decir, concentrar las
partículas y separarlas de todos los demás componentes (=
aislamiento), fotografiarlas inmediatamente en estado
aislado y caracterizarlas bioquímicamente todas de una vez;
esto, sin embargo, nunca ha sucedido con los presuntos
virus de humanos, animales y plantas porque estos no
existen.
Los científicos que investigan bacterias y fagos, que
trabajaron con estructuras reales existentes, proporcionaron
un modelo sobre cómo podrían verse los virus humanos,
animales y vegetales. Sin embargo, los "expertos en fagos"
han pasado por alto por su mala interpretación de los fagos
como comedores de bacterias que el fenómeno de la
formación de estas partículas es causado por la endogamia
extrema de bacterias. Este efecto, es decir, la formación y
liberación de fagos (comedores de bacterias, también
conocidos como virus de bacterias), no existe con bacterias
puras recién extraídas de un organismo o del medio
ambiente. Cuando sus nutrientes se retiran lentamente o sus
condiciones de vida se vuelven imposibles, las bacterias
normales, es decir, las bacterias que no se cultivan en el
laboratorio, crean las formas de supervivencia conocidas, las
esporas, que pueden sobrevivir durante mucho tiempo o
incluso "eternamente". A partir de las esporas, aparecen
nuevas bacterias tan pronto como mejoran las condiciones
de vida.
Sin embargo, las bacterias aisladas, cuando se cultivan en el
laboratorio, pierden todas las características y habilidades.
Muchos de ellos no mueren automáticamente a través de
esta endogamia, sino que se convierten repentina y
completamente en pequeñas partículas, que en la
perspectiva de la teoría del “bien contra el mal” han sido
malinterpretadas como comedores de bacterias. En realidad,
las bacterias se originan a partir de estos "fagos" exactos y
vuelven a convertirse en estas formas de vida cuando las
condiciones de vida ya no están disponibles. Gúnther
Enderlein (1827-1968) describió exactamente estos
procesos: cómo aparecen las bacterias a partir de
estructuras invisibles, su desarrollo en formas más complejas
y viceversa. Es por eso que Enderlein no estaba de acuerdo
con la teoría celular, según la cual la vida surge de las células
y se organiza a nivel celular. * Cuando era un joven
estudiante, yo mismo aislé una estructura de "fagos" de este
tipo de un alga marina y creí en ese momento haber
descubierto el primer virus inofensivo, el primer “sistema
anfitrión de virus” estable.
La idea de que las bacterias existen como organismos viables
individuales, que pueden existir solos sin ninguna otra forma
de vida, es incorrecta. De forma aislada, mueren
automáticamente después de un tiempo. Esto nunca se les
ocurrió a los científicos, porque después de un "aislamiento"
exitoso de una bacteria, una parte de ella se congela y se
puede trabajar con ella en el laboratorio décadas más tarde.
La idea de que las bacterias sean estructuras independientes
vivas que pueden sobrevivir por sí mismas es un artefacto de
laboratorio, una mala interpretación.
Por tanto, la afirmación de que las bacterias son inmortales
es errónea. Las bacterias son inmortales sólo en simbiosis
con un gran número de otras bacterias, hongos y
probablemente muchas más formas de vida desconocidas
que son difíciles de caracterizar, como por ejemplo la
ameba. Las amebas, las bacterias y los hongos forman
esporas tan pronto como su entorno de vida desaparece y
reaparecen una vez que vuelven las condiciones de vida. Si
uno compara eso con los humanos, tenemos la misma
perspectiva: sin un entorno de vida, desde y con el cual
vivimos, nada puede existir. »
Sin embargo, estos descubrimientos son mucho más
profundos. No solo se está disolviendo todo el concepto de
especie, sino también la idea y la afirmación sobre la
supuesta existencia de materia muerta. Las observaciones y
conclusiones sobre una "materia activa" viviente (como la
llaman los físicos) se descartan como vitalismo no científico.
Sin embargo, existen evidencias considerables de que todos
aquellos elementos que la “opinión dominante” en “ciencia”
no considera vivos se originan y se desarrollan realmente a
partir de la membrana del agua, es decir, la “Ursubstanz”
(10), la fuente primordial de vida. . Estos elementos luego
crean los ácidos nucleicos, y alrededor de los ácidos
nucleicos crean la vida biológica en forma de amebas,
bacterias, tardígrados y formas de vida más compleja.
Tenemos dos confirmaciones distintas sobre esta
perspectiva. Uno de ellos puede ser observado por cada
persona tanto por sí mismo como por otras personas, i.e.
que la vida biológica en la forma de nuestro cuerpo es en
realidad una materialización de los elementos de una
conciencia existente. Podemos nombrarlos y sabemos la
forma exacta en que nuestros órganos y psique interactúan
e influyen entre sí a través de la información (por ejemplo,
una sola palabra que puede dañar o resolver un conflicto),
podemos verificar todos estos aspectos porque son
predecibles. De este modo, se cumplen los tres criterios de
la investigación científica. * Estos hallazgos y el
conocimiento de cómo se relacionan entre sí nos liberan del
miedo, así como de la mentalidad del “bien contra el mal”
que induce al miedo y de los patrones de comportamiento
que se derivan de ella. Estos reveladores descubrimientos
científicos aclaran también los procesos de enfermedad,
curación, la "crisis curativa", la curación suspendida y el
fenómeno de enfermedades posteriores (también conocido
como el antiguo concepto de "contagio"). Virus, es hora de
irse”. (12)
La pesadilla de la ciencia materialista parece hacerse
realidad: incluso la materia aparentemente muerta está viva,
es vital. El vitalismo, según el cual hay una fuerza vital en
todas las cosas, fue refutado por los filósofos griegos
Demokrit y Epikur y los seguidores de su doctrina. Su
principal argumento era que querían castigar cualquier
abuso de fe y evitar que se repitiera. Su intención
aparentemente era buena, sin embargo, ignoraron que al
negar los conceptos de conciencia y espíritu y todos los
niveles de manifestación de estas fuerzas, se convirtieron
involuntariamente en destructores de la vida y enemigos del
pueblo.
Estas interpretaciones del “bien contra el mal”, que fueron
descubiertas y descritas por Silvio Gesell (13) (en general) e
Ivan Illich (14) (en medicina), aumentan constantemente
debido a la sed de lucro y sus fatales consecuencias. Las
consecuencias de la compulsión inherente de nuestro
sistema monetario a un crecimiento aún mayor, a un
crecimiento permanente, que genera catástrofes cíclicas y
trae ganadores aún más poderosos y, al mismo tiempo, un
empobrecimiento y sufrimiento en constante aumento, está
siendo interpretado por todas las personas involucradas
como prueba de una independencia. Principio del mal,
porque estas personas no conocen los tenaces mecanismos
inherentes del sistema monetario, determinados
matemáticamente. Parece que la gente del lado ganador,
que es éticamente correcto, considera el beneficio generado
matemáticamente obligatorio como evidencia de su piedad
y excepcionalidad. Esta no fue solo la base del maniqueísmo
(Maní fue el fundador babilónico de esta religión, cuyos
seguidores se llaman maniqueos), sino que siempre ha sido
la fuerza impulsora de los aspectos y efectos peligrosos de la
industrialización, como descubrieron Max Weber y otros.
La reanimación de la virología a través del premio Nobel
john Franklin Enders
Hemos explicado en varios artículos de nuestra revista
“WissenschafitPlus” a partir del año 2014 el marco mayor
del desencaminado desarrollo de la biología y la medicina, el
dogma insostenible de la llamada teoría celular, que
afirmaba que el cuerpo se desarrolla a partir de células y no
de los tejidos. La teoría celular de la vida, la "patología
celular", inventada por Rudolf Virchow en 1858, que hasta la
fecha es la base exclusiva de la biología y la medicina, afirma
que todas las enfermedades (así como toda la vida) se
originan en una sola célula, que es de alguna manera
secuestrado por un virus, comienza a deteriorarse y luego
propaga ese virus. Dos aspectos cruciales sirvieron como
condición previa y base para la actual aceptación global de la
patología celular, a partir de la cual se han desarrollado la
teoría infecciosa, la genética, la inmunológica y la del cáncer.
a. La teoría celular solo se implementó porque Rudolf
Virchow suprimió descubrimientos cruciales sobre los
tejidos. Los hallazgos y conocimientos con respecto a la
estructura, función e importancia central de los tejidos en la
creación y desarrollo de la vida, que ya se conocían en 1858,
refutan de manera integral la teoría celular y las teorías
genéticas, inmunes y del cáncer derivadas posteriormente.
**
b. Las teorías de la infección solo se establecieron como un
dogma global a través de la política concreta y la eugenesia
del Tercer Reich. Antes de 1933, los científicos se atrevieron
a contradecir esta teoría; después de 1933, estos científicos
críticos fueron silenciados”.
Para trabajar con “virus” y realizar los denominados
experimentos infecciosos, antes de que se abandonara el
concepto de virología en 1952, los “virólogos” se vieron
obligados a disolver y filtrar tejidos “enfermos” y
putrefactos. El filtrado concentrado, según creían, contenía
un patógeno, una toxina, que pensaban que sería producida
constantemente por las células infectadas. Hasta 1952, un
“virus” se definía como un veneno patógeno en forma de
proteína, que como un La enzima causó daño de una manera
desconocida, causaría enfermedad y sería transmisible.
Después de 1953, año en el que se anunció públicamente el
supuesto ADN en forma de una supuesta hélice alfa, la idea
de un virus se convirtió en un genotipo maligno envuelto en
proteínas. Así, se produjo un cambio de paradigma entre
1952 y 1954 con respecto a la imagen de un virus.
Se llevaron a cabo “experimentos infecciosos” con animales
con los fluidos filtrados de organismos putrefactos o de
fluidos que supuestamente contenían las proteínas /
enzimas que supuestamente representaban al virus. Los
resultados estaban destinados a probar que un virus estaba
presente y causaría la enfermedad que se le atribuye. Sin
embargo, lo que nunca se menciona públicamente es que los
síntomas supuestamente causados en seres humanos por un
virus nunca podrían replicarse en experimentos con
animales, sino que siempre hubo síntomas “similares”, que
luego afirmaron ser idénticos a la enfermedad en humanos.
Sin embargo, nada de esto ha sido probado científicamente.
Hasta la fecha, a todos los "experimentos infecciosos" les
faltan los experimentos de control, i.e. la prueba de que los
síntomas no son causados por el “tratamiento” del material
genético en el llamado experimento infeccioso. »
Para excluir que no fueron los fluidos del tejido enfermo los
que causaron los síntomas, se habría tenido que hacer un
experimento idéntico, solo con otros fluidos o con fluidos
esterilizados. Sin embargo, eso nunca ha sucedido.
Hasta la fecha se llevan a cabo experimentos con animales
extremadamente crueles, por ejemplo, para demostrar la
transmisibilidad del sarampión; Durante estos experimentos,
los monos son atados e inmovilizados en una cámara de
vacío con un tubo en la nariz y luego torturados por
científicos que insertan los fluidos supuestamente infectados
a través del tubo en la tráquea y los pulmones de los monos.
Exactamente el mismo daño sería causado por solución
salina esterilizada, sangre esterilizada, pus o saliva. Los
síntomas inducidos, que son sólo "similares" al sarampión,
se dice que son sarampión.
Dado que los fluidos supuestamente infectados se presionan
a través de un filtro que supuestamente filtra las bacterias y
se calientan ligeramente, los científicos afirman que el
sufrimiento y la muerte de los animales en esos
experimentos no pueden ser causados por bacterias, sino
por "patógenos" más pequeños virus. Los científicos
involucrados ignoraron el hecho ya reconocido en ese
momento de que hay muchísimas más bacterias
desconocidas que conocidas, que muchas bacterias son
resistentes al calor y que forman esporas que no se pueden
filtrar. Es importante mencionar aquí que tampoco existe
evidencia alguna de que las bacterias causen alguna
enfermedad. Por supuesto, a menudo están presentes en el
proceso de la enfermedad, como los bomberos que apagan
el fuego. Las bacterias no causan enfermedades, sino que
participan en procesos de reparación biológicos
significativos. Al igual que con los virus, la única evidencia
del papel aparentemente negativo de las bacterias son los
horribles experimentos con animales que carecen por
completo de sentido, ya que faltan todos los experimentos
de control.
Enders y Polio
Hasta el año 1949, los “virólogos” cultivaron sus “virus”
(proteínas) sospechosos colocando un trozo de material
genético en putrefacción, extraído de un tejido
supuestamente infectado por un virus, sobre una rodaja de “
tejido sano ”del mismo tipo. La visible intensificación del
proceso de putrefacción, que se transmitía del tejido
“enfermo” al tejido “sano”, se malinterpretaba como
proliferación y propagación del virus, del veneno patógeno.
Debido a los experimentos de control con tejido sano
llevados a cabo por primera vez en 1951, los virólogos
descubrieron que lo que veían eran procesos bastante
normales de descomposición tisular y no un virus que solo
estaría presente en el tejido “enfermo”.
Enders "descubrió" por casualidad en 1949, porque no tenía
tejido nervioso "sano" fresco disponible, que otros tipos de
tejido también comenzaban a descomponerse si se colocaba
sobre él un trozo de cerebro de una persona que murió de
polio. Anteriormente, los virólogos habían creído que cada
virus solo podía propagarse en el material genético que
también dañaría. Por el supuesto descubrimiento de que los
“virus” se propagan también en otros tejidos, que no dañan
en seres humanos vivos, Enders y los demás académicos
involucrados recibieron el Premio Nobel de Medicina el 10
de junio de 1954-
A partir de entonces, el presunto “virus de la poliomielitis”
se propagó mezclando tejido de piel y músculo fetal humano
con sustancia cerebral de personas que habían muerto de
“poliomielitis”, induciendo así la descomposición total. Se
consideró que el filtrado de esta mezcla contenía un virus. El
famoso Jonas Salk adoptó esta idea exacta sin nombrar al
inventor. Salk usó el filtrado de tejido fetal humano
descompuesto como vacuna contra la polio, el New York
Times declaró que la vacuna funcionó y sería seguro y Salk
generó millones de dólares con la vacuna contra la polio, sin
compartir nada con el verdadero inventor de la idea de usar
fetos humanos en descomposición. *
Por estas razones, Enders trabajó duro para desarrollar otra
técnica, de la que pudo atribuirse el mérito desde el
principio. Eligió la segunda área más lucrativa de la teoría de
los gérmenes de la enfermedad, a saber, la de los síntomas
llamados sarampión. Enders utilizó las mismas ideas y
métodos de bacteriología (en la que se había graduado) y
creía que los fagos eran virus de bacterias.
De manera análoga a esta técnica de demostrar cómo los
fagos supuestamente destruyen las bacterias en una placa
de Petri, desarrolló una línea de tejido en la que se colocó un
líquido supuestamente infectado. De manera análoga a la
desaparición de la bacteria, se afirmó que la desaparición de
la línea de tejido era al mismo tiempo la presencia del virus
sospechoso, la prueba de su existencia, su aislamiento y su
propagación. Este protocolo preciso todavía se aplica hasta
la fecha en casos de sarampión y, ligeramente modificado,
como "evidencia" de todos los virus patógenos. La mezcla de
células / tejidos moribundos o muertos ahora se denomina
"vacuna viva". Si en las vacunas se utilizan partículas
individuales de tejido muerto o moléculas producidas
sintéticamente, los expertos lo llaman "vacuna muerta" o
"vacuna inactivada".
Enders culpó a la contaminación de la vacuna por el número
sorprendentemente alto de muertes y lesiones que la
vacuna contra la polio Salk causó en la población, por lo que
trabajó en su laboratorio con tejidos de riñones de mono y
suero fetal de caballos y terneros no nacidos.
Hay cuatro diferencias sorprendentes y cruciales entre la
evidencia de los (bacteria) fagos existentes y la supuesta
evidencia de Enders de los "virus" hipotéticos en humanos y
animales. Estas diferencias aclaran las suposiciones erróneas
de Enders, ya que olvidó por completo sus dudas expresadas
anteriormente con claridad una vez que recibió el Premio
Nobel, por lo que llevó a todos sus colegas y, en
consecuencia, al mundo entero (ver Pánico de Corona) por el
camino equivocado. El mundo entero, excepto una bonita
pero terca aldea schwabian cerca del lago Konstanz (donde
vive el Dr. Lanka):
1 De hecho, las (bacteria) fagos se han aislado en el sentido
de la palabra "aislamiento" con métodos estándar
(centrifugación en gradiente de densidad). Inmediatamente
después del aislamiento se han fotografiado en un
microscopio electrónico, se determina su pureza y luego se
han descrito bioquímicamente sus componentes, sus
proteínas y su ADN de una vez, en un solo trabajo.
2. Con respecto a todos los “virus” de humanos, animales o
plantas, nunca se aisló, fotografió en forma aislada ningún
virus y sus componentes nunca se caracterizaron
bioquímicamente todos a la vez, a partir del “aislado”. »>
En realidad, hubo un proceso de consenso durante años, en
el que las partículas individuales de células muertas se
atribuyeron teóricamente a un modelo de virus). Los fagos
sirvieron de modelo para todo este proceso de
interpretación, como podemos ver claramente en los
primeros dibujos de un “virus”.
3. Los tejidos y células utilizados para la “prueba y
propagación” de los “virus” se preparan de manera muy
especial antes del acto de la supuesta “infección”. Se les
extrae el 80% de sus nutrientes, para que puedan “tener
hambre” y absorber mejor los “virus”. Se tratan con
antibióticos para excluir la posibilidad de que las bacterias,
que están presentes siempre y en todas partes, en todos los
tejidos y sueros, puedan causar la muerte esperada de las
células. Los expertos en bioquímica no reconocieron hasta
1972 que esos antibióticos dañaban y mataban las células
por sí mismos, un hecho que los virólogos habían ignorado
previamente. El “hambre” y el “envenenamiento” es lo que
mata las células, pero esto fue y aún se malinterpreta como
la presencia, aislamiento, efecto y propagación de los virus
hipotéticos.
4. Los experimentos de control que son cruciales y
requeridos por la ciencia hasta la fecha no se han llevado a
cabo con respecto a los virus; podrían excluir la posibilidad
de que, en lugar de un virus, las partículas celulares típicas
se malinterpretaran como virus. Sin embargo, se llevaron a
cabo todos los experimentos de control relacionados con el
aislamiento, la descripción bioquímica y las micrografías
electrónicas de los fagos.
Por tanto, ¿las especulaciones de Enders del 1 de junio de
1954? sobre la posible prueba de un "agente" que
"posiblemente" podría desempeñar un papel en el
sarampión se convirtió en un hecho aparentemente
"científico" y la base exclusiva para toda la nueva virología
genética después de 1952, todo debido a su premio Nobel
por el "feto humano / vacuna contra el virus de la polio en
diciembre de 1954. Pocos meses después de haber recibido
el premio Nobel, Enders olvidó o suprimió las discrepancias y
dudas que él mismo había mencionado en su artículo de
1954. Aun sufriendo por el plagio cometido por Jonas Salk,
quien le había robado la idea de la vacuna contra la polio,
Enders afirmó que todos los desarrollos futuros de una
vacuna contra el sarampión tendrían que basarse en su
técnica (de Enders).
Enders mató sus cultivos de tejidos él mismo mediante el
tratamiento con antibióticos (sin experimentos de control
negativo, y este es un aspecto crucial en el contexto de la
vacunación obligatoria contra el sarampión). Desde que
Enders experimentó con tejido de un niño llamado David
Edmonston, el primer modelo de un "virus" del sarampión
(hipotéticamente elaborado a partir de partículas de tejido
muerto) se ha denominado la "cepa de Edmonston".
También se afirma que la vacuna contra el sarampión, como
suma tóxica de todos esos trozos de tejido en
descomposición, contiene la "cepa de Edmonston". Una
parte de esa mezcla que contiene tejido de mono muerto y
suero fetal bovino se congela constantemente y luego se
utiliza regularmente para "inocular" otros tejidos / células
moribundos con el fin de crear "virus del sarampión" y
"vacunas vivas".
La importancia de ganar el ensayo del virus del sarampión
Las opiniones de expertos, protocolos y fallos cruciales del
ensayo del virus del sarampión (2012-2017) que | a las que
se referirá a continuación están disponibles gratuitamente
en Internet www.wissen-schafftplus.de/blog. En las
ediciones de la revista WissenschafftPlus de 2014 a 2017 se
publican más dictámenes periciales y refutaciones de las
afirmaciones sobre el virus del sarampión, que el Tribunal no
tuvo en cuenta.
El antecedente del ensayo del virus del sarampión, que
comenzó en 2011, fue prevenir las vacunas obligatorias
contra el sarampión previsto. Un exministro de Justicia
Federal había llamado me y pidió datos científicos para
ayudar a detener la introducción de la vacunación
obligatoria. Un destacado fiscal del estado nos dio la idea de
ofrecer un premio por la prueba del “virus del sarampión” y,
en el juicio civil posterior, establecer legalmente que no hay
evidencia científica para las afirmaciones de que existe el
virus del sarampión y que las vacunas eran seguros y
eficaces. Nuestro plan fue completamente exitoso. Esto es
fácilmente comprensible si se sabe por qué el artículo de
John Franklin Enders et al. con fecha del 1 de junio de 1954
se convirtió en la base única y exclusiva de toda la nueva
virología genética de la producción de la vacuna de “virus
vivo” después de que la virología anterior hubiera muerto de
muerte natural en 1951-1952.
Sabiendo que el Instituto Robert Koch (RKI), en contra de su
deber legal, no había publicado un solo trabajo sobre la
supuesta existencia del virus del sarampión, | ofreció un
premio de 100.000 euros por un artículo científico del RKI
que contiene la evidencia científica de la existencia del virus
del sarampión. Un joven médico de Saarland me presentó
seis documentos, pero ninguno del RKI; los artículos fueron:
el de Enders con fecha del 1 de junio de 1954 y otros cinco,
basados exclusivamente en el artículo de Enders, siendo uno
de ellos la revisión más completa de otros artículos sobre el
virus del sarampión. En esta “revisión” describen el laborioso
proceso de construcción de consenso que duró décadas e
incluyó dilemas como qué partes del tejido muerto se
atribuirían al modelo del virus del sarampión y también
cómo el modelo del virus del sarampión debía modificarse
constantemente.
Le respondí al joven médico (quien me recomendó
urgentemente que renunciara a la (de hecho) costosa
"disputa legal" y que le pagara inmediatamente el dinero del
premio) que en ninguna de las seis publicaciones había una
estructura viral identificable, sino una típica estructura
fácilmente reconocible partículas y estructuras celulares.
Acto seguido, presentó una demanda ante el Tribunal Local
de Ravensburg, sin embargo, sin presentar las seis
publicaciones al tribunal. El Tribunal de Ravensburg decidió
en mi contra, aunque las seis publicaciones nunca
aparecieron en los archivos legales. Aparte de eso, el
veredicto del Tribunal Local de Ravenburg se produjo en
circunstancias más que inusuales.
El demandante admitió ante el juez durante la apelación en
el Tribunal Superior de Stuttgart que él mismo nunca había
leído las seis publicaciones. Así que planeaba cerrarme y así
silenciar la refutación central de la vacunación a través de la
tediosa batalla legal. Él mismo pudo haber sido víctima de la
falsa creencia en los virus, porque probablemente confiaba
en sus maestros, quienes no tenían idea del desarrollo
erróneo de la medicina desde 1858 y no hicieron ninguna
investigación histórica con respecto a sus falsas creencias,
convirtiéndose así simultáneamente culpables y víctimas de
su fe fatal en las teorías de los gérmenes y su confianza en
las vacunas. »
Es plausible que el demandante no haya leído las seis 3- Informes y asesoría sobre lo que ya se ha hecho para
publicaciones que me presentó, pero no al tribunal. Al revertir la ley de vacunación obligatoria contra el sarampión.
menos está claro que no los buscó él mismo, porque son las Seguirá en la próxima edición WissenschafftPlus 2/2020.
únicas publicaciones en todo el campo de unos 30.000
artículos técnicos sobre “sarampión” en los que se hace
referencia a la existencia aceptada del virus del sarampión.
Sin embargo, todas las toneladas de otros trabajos, que
nadie puede terminar de leer, asumen “a priori” la existencia
del virus del sarampión y siempre se refieren a citas de citas,
que se basan final y exclusivamente en las supuestas
“pruebas” aportadas por Enders. El 1 de junio de 1954.

El Tribunal Local de Ravensburg decidió en 2014 aceptar la

demanda del Dr. Bardens y concluyó que el dinero del
premio debía pagarse incluso sin ninguna publicación del
RKI. Aparte de eso, el Tribunal Local de Ravensburg decidió
que no sería necesario que la evidencia científica de la
existencia del virus del sarampión se publicara en un solo
artículo, sino que el total de 3366 artículos (la suma de todos
los artículos citados en las seis publicaciones presentadas)
de 1954 a 2007 debía aceptarse como prueba.

El experto designado legalmente, el profesor Podbielski de

Rostock, argumentó en consecuencia (o el tribunal local
ajustó su decisión de apertura a la opinión del experto):
“Tengo que aclarar expresamente que uno no puede
proporcionar evidencia en el sentido clásico en biología
como se puede en matemáticas o física. En biología, solo se
pueden recopilar pistas, que luego en su totalidad se
vuelven concluyentes. *? *

Sobre la base de esta afirmación extremadamente poco

científica que surge de la falta de argumentos de Podbielski y
su parcialidad debido a las discrepancias entre la realidad y
las creencias que tanto le gustan, sucedió algo que los
científicos del comportamiento denominan
"desplazamiento". Podbielski inventó una excusa
desesperada, a saber, que la biología y la medicina también
se basan en ella | ya que las vacunas son en sí no científicas
y sin evidencia, sin prueba: en su opinión, solo una colección
de pistas podría “algún día” y “de alguna manera”
(prácticamente) ser válida. Nunca se ha expresado con tanta
claridad una admisión más explícita de la naturaleza
acientífica existente de la biología y la medicina actuales.

Lo más importante en la actualidad es hacer un uso legal de

todas estas evidencias para el carácter acientífico de la
teoría de la infección y las políticas de vacunación, que ya
están impactando nuestros derechos constitucionales.
Necesitamos hacer que la vacunación obligatoria contra el
sarampión, votada e implementada en Alemania a partir del
1 de marzo de 2020, simplemente desaparezca.

Se publicará más información sobre esto en nuestro boletín.

Continuación de este artículo:

1. El deber de la ciencia de realizar experimentos de control.

Las declaraciones dadas al protocolo por el profesor
Podbielski durante el ensayo del virus del sarampión de que
todas las publicaciones cruciales sobre la existencia del virus
del sarampión y todas las publicaciones posteriores,
contrariamente a su opinión escrita experta, no contienen
un solo experimento de control.

2. La importancia crucial de la sentencia judicial del Tribunal

Superior del Estado de Stuttgart del 16/02/2016, artículo 12
U 63/15 para las políticas de virología y vacunación.