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Bloque 2

Teoría y Técnica Psicoanalítica

Lectura
Tratamientos psicológicos
(I). Terapéutica de
orientación psicodinámica

Aguillaume Torres, R. (2000). Capítulo 42. Tratamientos


psicológicos (I). Terapéutica de orientación psicodinámica. Tratado
de psiquiatría. España: ediciones Aran S. A., pp.740-745.
Material compilado con fines académicos, se prohíbe su reproducción
total o parcial sin la autorización de cada autor.
TRATADO DE PSIQUIATRÍA

EL MODELO DE LAS RELACIONES so evolutivo en que las ansiedades habituales e ine-


DE OBJETO vitables, pueden propiciar puntos de fijación o mo-
mentos regresivos que explicarían los diferentes
Uno de los modelos teóricos que más ha contri- cuadros patológicos. Así pues, la ansiedad va a ser
buido a que la dimensión terapéutica del psicoanáli- la situación emocional en torno a la cual se organi-
sis pudiera salir del marco estricto de las neurosis ha cen las defensas y se expresen los síntomas. La psi-
sido la teoría de las relaciones objetales. coterapia dinámica actuaría pues, desectructurando
La teoría de las relaciones objetales enfatiza el pa- defensas y propiciando modalidades de disolución,
pel que en la estructuración del psiquismo tienen las o de control más evolucionado, de la ansiedad.
experiencias relacionales del niño con las figuras pa- La primera teoría de la ansiedad surgió en la obra
rentales. El intercambio emocional y cognitivo con de Freud como explicando dicho estado emocional
los padres y con los adultos de la primera infancia, motivado por la represión y, fundamentalmente, por
moldea y organiza el psiquismo. Ya no va a ser la la represión sexual. Posteriormente la ansiedad fue
pulsión sexual o agresiva la que construya el mundo, considerada como la señal de alarma que, ante un
aquí va a ser ese mundo externo el que condicione y, peligro, permite al psiquismo organizar sus actitudes
en algunas orientaciones, organice la realidad psíqui- defensivas.
ca. Desde Melanie Klein, (9) en los comienzos, hasta
la teoría de Kohut (10) en la actualidad, son tributa-
rios de esta orientación que algunos autores denomi- EL MODELO RELACIONAL
nan relacional. En cualquier caso, conviene tener en
cuenta que en la teoría de las relaciones objetales El último de los modelos en que consideramos
nos estamos refiriendo a estructuras intrapsíquicas, fundada la psicoterapia dinámica es el que se deno-
esto es, a objetos internos y no a relaciones con ob- mina modelo relacional, interpersonal o intersubjeti-
jetos externos. Es de particular importancia, sobre vo.
todo en la práctica de las psicoterapias dinámicas, “El modelo relacional se basa en la premisa de
que las relaciones que establece el paciente con el que los esquemas repetitivos de la experiencia huma-
mundo real sean consideradas como el reflejo de una na no se derivan (como en el modelo pulsional) de la
estructura interna complejamente organizada y des- búsqueda de la gratificación de presiones y placeres
conocida para el sujeto. inherentes (ni, como en la interpretación de Freud
Se describen, a grandes rasgos, dos modalidades posterior a 1920, del funcionamiento automático del
de relación de objeto: pregenitales y genitales. instinto de muerte) sino de una tendencia general a
La relación de objeto pregenital se caracteriza por conservar la continuidad, las conexiones y la familia-
una forma de dependencia extrema. El objeto no es ridad del mundo personal e interactivo. Existe una
reconocido en sus características de autonomía e in- poderosa necesidad de conservar el sentimiento du-
dependencia, sino como proveedor y sostén de las radero de uno mismo relacionado con una matriz de
necesidades del sujeto. En esta situación pregenital otras personas y con referencia a ellas, en términos
las proyecciones sobre el objeto constituyen la mo- de transacciones reales y de presencias internas” (1).
dalidad de relación casi en exclusividad. El terror a la Para los autores de esta orientación, ni el objeto
pérdida del objeto marca, igualmente la modalidad determina la estructura psíquica, como en el caso de
de control en la relación. Este tipo de relación es típi- las relaciones objetales, ni las experiencias de satis-
ca de las psicosis, fronterizos y en las etapas regresi- facción frustración, como en el modelo pulsional, se-
vas del tratamiento psicoanalítico. La expresividad rán exclusivas.
emocional es intensa, pasional y de difícil manejo en En la actualidad se empieza a prestar atención a
la situación terapéutica. este modelo que, en su día, fundamentalmente con
En la relación de objeto genital el sujeto presenta Sullivan y la orientación interpersonal fueron dura-
una estructura libidinal más estable; el objeto es dis- mente criticados. Sí es cierto, que cuesta trabajo, por
criminado en su independencia y autonomía sin que la cantidad de modificaciones conceptuales y técni-
las proyecciones le perturben y distorsionen excesi- cas que introduce, el asimilarlo a los referentes teóri-
vamente. cos, tanto del campo que define al psicoanálisis co-
Aquí la dependencia del objeto no se fundamen- mo a la técnica que lo sustenta.
ta, ni en la exclusividad, ni en la necesidad absolu-
ta, ni en la elección que el sujeto puede realizar. El
temor a la pérdida del objeto no se convierte en el Psicoanálisis: esbozo del tratamiento
centro de la preocupación relacional. Aquí el mun- psicoanalítico
do emocional está más atemperado y su manejo,
desde el punto de vista terapéutico, se hace posi- Aunque no exento de críticas y de orientaciones teó-
ble. Se considera por tanto, la relación de objeto ricas distintas, el psicoanálisis ha desarrollado un
genital como la relación madura, pero teniendo en modelo técnico, unos objetivos e incluso, unas indi-
cuenta, que la relación de objeto es todo un proce- caciones precisas.

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TRATAMIENTOS PSICOLÓGICOS (I). TERAPÉUTICA DE ORIENTACIÓN PSICODINÁMICA

Desde el punto de vista de sus objetivos, el psicoa- El encuadre facilita la transferencia porque las ac-
nálisis pretende modificaciones estructurales del psi- titudes del pasado tienden a ser repetidas en el pre-
quismo que, más allá de que se consigan o no en un sente y dicho presente suele ser percibido en térmi-
caso concreto, continúan siendo la finalidad exclusiva nos del pasado; el factor que se opone a esta
del tratamiento. Un cambio estructural se define como distorsión sería lo que denominamos “prueba de rea-
la modificación básica de la organización psíquica de lidad”.
un sujeto, ya sea esta conceptualizada en términos de El encuadre psicoanalítico evita al máximo la
la teoría pulsional, de las relaciones de objeto o del “prueba realidad” con lo que las distorsiones transfe-
modelo relacional. Todas las modificaciones y desarro- renciales emergen de forma inmediata.
llos de la técnica han ido encaminadas a este objetivo. En las relaciones normales las transferencias que
Las siguientes condiciones son fijas y no pueden recaen sobre una persona son corregidas por esta ac-
ser alteradas dentro del esquema de la técnica psico- tuando de forma tal que se corrijan o puede actuar de
analítica. acuerdo con el papel transferencial que se la adjudica.
1. Número de sesiones: 4 o más sesiones a la se- El analista se presta a las distorsiones transferen-
mana. ciales al no prestarse a la prueba de realidad y, a la
2. Duración de las sesiones: 45-50 minutos. vez no acepta el papel que le adjudica el paciente.
3. Tratamiento pagado por el paciente. Ambas actitudes permiten la exploración de los de-
4. Utilización clásica del diván. terminantes irracionales de la transferencia.
5. Regla de abstinencia. El analista como espejo y la regla de abstinencia
6. Asociación libre. son las dos actitudes técnicas que mejor permiten el
7. Interpretación transferencial. desarrollo de la transferencia. En el primer caso, el
8. Incompatibilidad con otros tratamientos psico- analista refleja al paciente lo que este le ha manifes-
terapeúticos simultáneos (11). tado, mientras que la regla de abstinencia se basa en
no conceder satisfacciones sustitutivas al paciente
que le tranquilicen en sus síntomas (que le empujan
Proceso psicoanalítico: la neurosis al tratamiento) y que propicien una huida a la salud.
de transferencia y el cambio estructural Los síntomas se componen en parte de instintos
escondidos que buscan satisfacción. La frustración
Las etapas y las modificaciones que se producen a prolongada induce al paciente a la regresión de for-
lo largo del proceso psicoanalítico se escapan un tanto ma que su neurosis se vuelve a vivir en la transferen-
de los fines de este capítulo. No obstante, el concepto cia, en la neurosis de transferencia. Por tanto para
de cambio estructural, que en definitiva es el que se conservar una motivación suficiente es necesario que
proponen el psicoanálisis, sí puede ser reflejado. el psicoanalista señale constantemente la satisfac-
Las condiciones del encuadre psicoanalítico que ción infantil y nada realista que busca.
hemos señalado más arriba, tienen como finalidad el La “regla de abstinencia” extrema se opone a la
establecimiento de una neurosis transferencial, con- alianza de trabajo, que es un concepto introducido
dición que clásicamente se considera imprescindible por E. Zetzel en 1956 para definir un aspecto de la
para lograr el cambio estructural. relación analítica no estrictamente transferencial, “la
Lo primero que diremos con todos los autores es relación racional y relativamente no neurótica que
que la neurosis de transferencia es un artefacto, una tiene el paciente con su analista”... “que hace posi-
creación artificial, una herramienta, un procedimien- ble para el paciente trabajar con determinación en la
to técnico que nos va a permitir un acceso mayor a situación analítica” (12).
la realidad del paciente. Quiere decirse, que a partir de esta definición sólo
Desde el punto de vista de su definición podemos van a ser analizables los pacientes con capacidad de
decir que la neurosis de transferencia es aquella que establecer una alianza terapéutica, o en otros térmi-
se estructura en la relación analítica y que tiene al te- nos, los pacientes con un yo observador capaz de es-
rapeuta como objeto de todas las situaciones conflic- tablecer una alianza o identificación con el yo anali-
tivas. ¿Cómo es posible que un paciente que acude a zador del analista.
consulta con una sintomatología, una problemática Desde el punto de vista teórico, el problema será
que gira en torno a su vida de relación, transforme considerar, o no, la alianza terapéutica como algo
todo ello en una situación de conflicto con un perso- distinto a la transferencia positiva sublimada, como
naje, el terapeuta, al que desconoce totalmente hasta la veía Freud. El concepto plantea la necesidad de
el mismo momento en que comienza el tratamiento? atender a un aspecto de la relación de objeto que ha-
Esa posibilidad se da gracias a la interpretación siste- ga posible el tratamiento.
mática de la transferencia, lo cual es posible dentro Greenson, como Zetzel, consideran que la alianza
de un encuadre adecuado. terapéutica debe surgir al comienzo del análisis, de
El encuadre provee las condiciones que fomentan los tres a los seis meses de análisis, gracias a la “at-
el desarrollo de la transferencia y permite la observa- mósfera analítica” (Greenson) o por “respuestas ins-
ción del fenómeno de forma no contaminada. tintivas adaptables” (Zetzel).

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TRATADO DE PSIQUIATRÍA

Psicoterapia psicoanalítica: punto de vista diagnóstico como por ser en estos pri-
técnica y proceso terapéutico meros momentos donde el tratamiento se inicia y
donde el paciente toma contacto por vez primera con
Introducción este tipo de tratamiento. Para algunos autores las pri-
meras entrevistas marcan el futuro del tratamiento.
No habría riesgo en señalar que la gran mayoría La primera entrevista psicoterapéutica marca una
de los tratamientos psicoterapeúticos son tratamien- diferencia esencial con la consulta médica y tal dife-
tos de psicoterapia psicoanalítica. Una de las razo- rencia debe ser captada por el paciente. No será una
nes fundamentales es la amplitud de indicaciones y la consulta donde el terapeuta pregunte y el paciente
flexibilidad de las reglas técnicas. La psicoterapia psi- responda. El paciente debe ser estimulado a contar
coanalítica se ha ido desarrollando de forma conti- su historia con la menor participación, en lo posible
nua, contribuyendo, en parte, al progreso de la teo- del terapeuta. Una adecuada entrevista, además,
ría psicoanalítica. Desde el punto de vista asistencial permite que la indicación del tipo de psicoterapia
el número de pacientes que se pueden beneficiar de –psicoanálisis, psicoanálisis analítico o psicoterapia
este tipo de tratamiento es considerablemente mayor de apoyo– sea posible.
que en el caso del psicoanálisis. La poca participación del terapeuta o mejor di-
cho, una actitud de neutralidad tiene como objetivo
Condiciones técnicas: encuadre fundamental crear las condiciones adecuadas para
que los fenómenos transferencia-contratransferencia
Aunque las reglas técnicas en la psicoterapia psico- puedan ser observados desde un principio.
analítica son menos estrictas que en el psicoanálisis, Dichos fenómenos junto a la historia que va rela-
no, por ello, dejan de tener una gran importancia. tando el paciente deben permitir una intervención, no
En principio, el número de sesiones habitualmen- interpretativa del terapeuta, pero que sí capte alguno
te no suele pasar de dos y su duración, como en el de los conflictos más básicos del paciente y que, en
psicoanálisis, es de 45 a 50 minutos. una entrevista bien estructurada, deben surgir (14).
Algunos autores manejan el número de sesiones, e Para algunos autores la entrevista puede ser dirigi-
incluso su duración, para modular la intensidad de los da, esto es, con preguntas e intervenciones encami-
fenómenos transferenciales. Se considera –sobre to- nadas a lograr un diagnóstico y un tipo determinado
do desde los trabajos de Alexander (13) sobre la “Ex- de relación desde el primer momento.
periencia emocional correctiva”– que, en ocasiones, Una segunda entrevista –ya dirigida activamente
el aumento del número de sesiones fijan al paciente al por el terapeuta– conocimiento de aspectos psicopa-
tratamiento, mientras que en otras circunstancias, co- tológicos, biográficos, etc. y en cualquier caso para
mo ante el peligro de la utilización de la terapia con fijar las condiciones del tratamiento: indicación del
fines de beneficio secundario, deben ser disminuidas. tratamiento, número de sesiones, etc. Un número
La utilización del diván es motivo de controversia mayor de entrevistas no suelen ser recomendables
para algunos autores. En cualquier caso el paciente porque estabilizan una comunicación, preguntas,
tumbado y el analista detrás es la imagen clásica del respuestas, que dificultarán el paso a un modelo psi-
psicoanálisis, pero desde un punto de vista técnico la coterapéutico.
utilización del diván no implica la regresión inevitable
del paciente. De cualquier manera no hay que olvi-
dar que la utilización del diván se debió a la comodi- La fase inicial del tratamiento
dad que Freud necesitaba para no ser escudriñado
por los pacientes. La comodidad continúa siendo La fase inicial del tratamiento no se agota con las
una necesidad de los analistas de la que se benefician primeras entrevistas sino que es precisamente, a par-
los pacientes. La comunicación entre paciente y te- tir de ellas, como debe comenzar el tratamiento. El
rapeuta debe quedar a la espontaneidad y libertad de comienzo de un tratamiento en la psicoterapia analí-
aquel mientras que la posición de este debe centrarse tica tiene, al menos, que centrarse en los siguientes
en la focalización de los distintos conflictos. El silen- aspectos:
cio prolongado del terapeuta no tiene justificación 1. Permitir el desarrollo, o la aparición, de aspec-
sistemática en esta modalidad terapéutica. tos transferenciales básicos.
2. Delimitación de las áreas de conflicto y de los
conflictos responsables de la psicopatología del pa-
Proceso terapéutico: etapas en el curso ciente.
del tratamiento 3. “Aprendizaje” por parte del paciente del mode-
lo convencional psicoterapéutico. El “aprendizaje” se
Primeras entrevistas realiza a partir de las intervenciones del terapeuta in-
terpretación, confrontación, etc.) y en ningún caso
Las primeras entrevistas son de una gran impor- transmitiendo un conocimiento teórico en forma de
tancia en la psicoterapia dinámica, tanto desde el “clases”.

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TRATAMIENTOS PSICOLÓGICOS (I). TERAPÉUTICA DE ORIENTACIÓN PSICODINÁMICA

4. En cualquier caso el paciente debería moverse, 2. Evolución transferencial imposible de resolver


en esta primera fase, dentro de su realidad psíquica y y, en cualquier caso, que vaya en detrimento de la
en contacto con todas las manifestaciones de la mis- salud mental del paciente.
ma (sueños, impulsos, transferencias, lapsus, etc.). 3. Cuando la evolución del tratamiento aconseje
Debería diferenciar claramente los conflictos psíqui- el cambio de técnica. Ya sea hacia un tratamiento
cos de los problemas reales. exclusivamente farmacológico o hacia otro tipo de
psicoterapia (psicoanálisis, psicoterapia de apoyo).
4. Circunstancias externas que impidan la conti-
La fase media del tratamiento nuación del tratamiento (cambio geográfico, proble-
mas económicos, etc.).
b) Criterios positivos de terminación de trata-
Esta fase es difícil de delimitar. El propio Freud se- miento:
ñalaba en su metáfora con el ajedrez que se pueden Una psicoterapia psicoanalítica por definición y
señalar características de apertura y características por limitaciones técnicas no puede pretender un
de finalización del tratamiento, pero lo que ocurre en
cambio estructural tal y como pretende un tratamien-
medio, a lo largo del tratamiento o del juego es difícil
to psicoanalítico. Sin embargo, los efectos terapéuti-
de determinar no obstante se pueden señalar dos ni-
cos de la psicoterapia analítica no deben ser desde-
veles de fenómenos centrales en esta etapa: los que
ñados, ni en su profundidad, ni en su persistencia:
tienen que ver con el reconocimiento de conflictos y 1. Modificaciones significativas en la sintomatolo-
causas de los mismos, esto es el insight, y los proce- gía que trajeron al paciente y que en un tiempo pru-
sos elaborativos posteriores. dencial indican su desaparición.
En la actualidad, tanto en la práctica psicoanalítica 2. Reconocimiento por parte del paciente de as-
como en la psicoterapia se discuten cuales son los pectos suficientes de su realidad psíquica.
factores curativos o de cambio. Si el cambio se debe 3. Capacidad de autoanálisis, a partir de una iden-
al tipo de relación que se establece con el terapeuta. tificación instrumental con el terapeuta.
La relación con el terapeuta –evidentemente se refie- En el final del tratamiento suelen ser frecuentes la
re a la relación terapéutica, no de otro tipo– es un aparición de lo que en el tratamiento psicoanalítico
factor esencial en las modificaciones que una psico- se denominan indicadores y fenómenos.
terapia pretenda lograr. El propio Freud señala la Los indicadores en tanto lo son de la “disolución”
conveniencia de que cualquier tipo de interpretación del vínculo transferencial van a estar muy mitigados
no debe ser realizada hasta que la relación con el pa- en la psicología analítica. Sin embargo, los fenóme-
ciente no sea suficientemente positiva (transferencia nos del fin de tratamiento, –reactivación de la sinto-
positiva). Actividad interpretativa y modelo de vincu- matología y fenómenos de pérdida de objeto– sí sue-
lación serán, por tanto, los dos campos donde se de- len estar presentes y son responsables de la
sarrolle la terapia y especialmente en esta fase media prolongación indefinida de muchos tratamiento.
del tratamiento.

Indicaciones y contraindicaciones
Fase final del tratamiento de la psicoterapia psicoanalítica

¿Cuándo debe terminarse una psicoterapia? La Si tenemos en cuenta que la creencia básica de la
respuesta más sencilla sería, cuando el paciente se técnica de la Psicoterapia analítica es que la expre-
haya curado. Pero no siempre coinciden curación y sión verbal de pensamientos y sentimientos, en las
terminación del tratamiento. condiciones adecuadas, consigue manejos racionales
En principio los criterios de curación debería dife- y no, necesariamente deben ser actuados los pensa-
renciarse en criterios generales, y criterios específi- mientos o los sentimientos, nos encontraríamos con
cos para un paciente concreto, en cualquier caso la primera indicación y contraindicación: la reactiva-
una cura sintomática debería ser un criterio razona- ción de situaciones conflictivas en aquellos pacientes
ble, aunque en ocasiones no se pueda lograr. con una estructura psicológica capaz de tolerar la
Un tratamiento de psicoterapia no debe ser indefi- tensión que un tratamiento de esta índole conlleva.
nido por lo que algunos criterios de terminación se Así pues, la indicación y contraindicación no va a de-
deben adoptar. Se pueden dividir en dos grupos los pender tanto del cuadro clínico que presente el pa-
criterios de terminación: criterios negativos y crite- ciente sino de la estructura psicológica del mismo.
rios positivos. No obstante, algunos autores, como Kernberg, con-
a) Criterios negativos de terminación de una sideran, por ejemplo, a los pacientes antisociales co-
psicoterapia: mo contraindicación absoluta de la psicoterapia ana-
1. Cuando el tratamiento sostenga una situación lítica.
social claramente injusta (beneficios económicos, Se tendrá en cuenta que la psicoterapia analítica
prolongación indefinida de baja laboral, etc.). puede ser practicada exclusivamente, o junto, a tra-

743
TRATADO DE PSIQUIATRÍA

tamientos psicofarmacológicos, lo cual aumenta con- lada) pero si va a ser tenida en cuenta como fenó-
siderablemente su campo de aplicación. meno universal.
La contratransferencia, también en un sentido
amplio debe ser igualmente tenido en cuenta. La psi-
PSICOTERAPIA DE APOYO coterapia de apoyo necesita para su realización un
vínculo con el terapeuta que le permita ejercer la su-
INTRODUCCIÓN gestión. El terapeuta necesita ser reconocido por el
paciente ocupando un lugar de autoridad desde don-
Se suele considerar, erróneamente que la psicote- de poder ejercer el tratamiento. Este lugar debe ser
rapia de apoyo, es la práctica psicoterapéutica más conquistado o al menos reconocido y sobre todo no
sencilla de realizar y que, por tanto, no requiere un debe ser confundido sistemáticamente con el del
manejo técnico concreto y puede ser ejercida por ideal del Yo. En el ejercicio de la psicoterapia de
cualquier estudiante, tanto en el medio hospitalario apoyo no siempre la figura idealizada del terapeuta
como en la práctica privada. Quizá sea esta la razón es más eficaz en sus intervenciones, ni la actitud hu-
por lo que la bibliografía sobre esta técnica sea tan mana y paterna es garantía de eficacia terapéutica.
escasa. Los trabajos de Schilder (1938) pasan por Es por todo ello que consideramos el interjuego
ser los primeros en señalar técnicas de apoyo, aun- transferencia-contratransferencia como un elemento
que no podríamos decir que, ya en este autor se en- central en la práctica de esta modalidad terapéutica
cuentra una definición clara e individualizada de la y, en ningún caso, una modalidad de rango inferior
psicoterapia de apoyo. Este autor definió actitudes que cualquiera puede practicar.
como la sugestión, brindar consejo, apelar a la fuer-
za de voluntad, etc., como prácticas necesarias en el
ejercicio de la psicoterapia. CONDICIONES TÉCNICAS Y OBJETIVOS
Se suele definir la psicoterapia de apoyo como un DE LA PSICOTERAPIA DE APOYO
método de tratamiento psicológico en que el tera-
peuta se convierte en sostén emocional ante los con- El encuadre psicoanalítico, es decir, el conjunto de
flictos del paciente, que desde esta posición sugestiva reglas que hacen posible un tratamiento psicotera-
interviene para su resolución. péutico tiene en la psicoterapia de apoyo indicacio-
Es un tratamiento cuya indicación queda muy des- nes menos estrictas que en el tratamiento psicoanalí-
dibujada: desde adultos jóvenes, adolescentes, pa- tico clásico.
cientes muy graves con rigidez de defensa, o a otros En principio, el número de sesiones no tiene por-
en que las condiciones culturales o sociales no les qué ser elevado, ni responder a una frecuencia fija.
permite otro tipo de psicoterapia. También se pres- Lo habitual suele ser una sesión semanal o quince-
cribe como terapia complementaria para pacientes nal. Una posibilidad que se contempla en la psicote-
con tratamiento psicofarmacológico. rapia de apoyo es manejar el número de sesiones en
De cualquier manera la psicoterapia de apoyo se función de la situación transferencial para intensifi-
centra, como el psicoanálisis o la psicoterapia psico- carla, aumentando su número, o disminuirla, redu-
analítica en torno a dos conceptos básicos: el conflic- ciéndolo.
to psíquico y la transferencia. El espacio físico donde se realiza la terapia de apo-
La realidad psíquica del sujeto e, incluso, el con- yo debe ser constante aunque las hospitalizaciones u
flicto psíquico continúa siendo el objetivo central de otras circunstancias obliguen a cambios de lugar ine-
la psicoterapia de apoyo. Si no fuera así, y se conci- vitables. En cualquier caso y, dado que este tipo de
biera el conflicto como algo exterior, debido a la rea- psicoterapia está muy cerca a una relación real con el
lidad externa, no nos encontraríamos en el campo paciente, se debe evitar al máximo el poder transmitir
de la psicoterapia, sino en el del asesoramiento, ayu- una imagen del “todo vale” en el ejercicio práctico.
da psicológica, etc. En este sentido, los contactos extraterapéuticos de-
En cuanto a la transferencia recordaríamos que ben evitarse como en cualquier tratamiento de psico-
es la actualización sobre la figura del terapeuta de terapia.
la realidad psíquica. La psicoterapia de apoyo tiene Dado que en la psicoterapia de apoyo se trabaja
en cuenta la transferencia en tanto en cuanto es un con material consciente-preconsciente el modelo de
fenómeno universal; y lo tiene en cuenta para co- comunicación se moverá entre la asociación libre del
nocer cuál va a ser presumiblemente la actitud que psicoanálisis clásico y la comunicación social. La
el paciente va a adoptar en el tratamiento y, por asociación libre, ni es posible, ni es deseable en un
tanto tomar las medidas adecuadas. El concebir la encuadre como el de la psicoterapia de apoyo, pero
transferencia en este aspecto amplio permite ela- tampoco la comunicación social debe fomentarse. El
borar estrategias que de otra manera serían imposi- paciente debe tener la idea de que realiza una tarea
bles. Por tanto la transferencia no va a ser intensifi- activa y con una finalidad concreta, que gira en tor-
cada en la psicoterapia de apoyo, no va a ser no a sus conflictos en la vida real, como expresión
interpretada (aunque en ocasiones sí debe ser seña- de su organización psíquica, objetivo de la terapia.

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TRATAMIENTOS PSICOLÓGICOS (I). TERAPÉUTICA DE ORIENTACIÓN PSICODINÁMICA

Por tanto, el terapeuta y el paciente, deben tener en Suele ser clásica la situación del paciente ambiva-
cuenta que el encuentro terapéutico tiene unas re- lente que no puede decidir por miedo a equivocarse.
glas y unos objetivos concretos y no produce efectos La labor del terapeuta no consiste en decirle que de-
curativos sin más. cisión debe tomar, sino en mostrarle ese mecanismo
Un problema adicional, en la psicoterapia de apo- por el cual el paciente no se enfrenta a la ansiedad
yo es la ganancia secundaria que tiene a perpetuar el depresiva que la renuncia implica. El consejo desde
tratamiento cuando las ayudas sociales –pensiones, la sugestión pretende que el paciente elija, pero la
subvenciones, etc.– están presentes. elección como aspecto de la realidad es asunto suyo.
Las intervenciones del terapeuta, en principio
pueden ser todas las que habitualmente se realizan
en el tratamiento psicoanalítico, pero predominan- INDICACIONES Y CONTRAINDICACIONES
do, de forma casi exclusiva la sugestión, abreacción DE LA PSICOTERAPIA DE APOYO
y consejo.
1. Sugestión. Se pretende influir en el paciente y Se indicará cuando, pacientes con buena estructu-
producir cambios por el prestigio y autoridad que po- ra yoica, no puedan realizar un tratamiento más radi-
see el terapeuta. cal –psicoanálisis o psicoterapia analítica– por razo-
2. Abreacción. Facilita al paciente la descarga nes psicológicas (falta de deseo...) o sociales
emocional de sus afectos a través de la verbalización, (económicas, de tiempo, etc.). No obstante debería
etc. Se suele emplear en trastornos emocionales cro- evitarse indicar la psicoterapia de apoyo desde posi-
nificados. ciones negativas como las indicadas. Evidentemente
3. Consejo. El problema de como aconsejar y so- esta modalidad de indicación es legítima, pero se de-
bre qué aconsejar es un tema debatido en la psicote- bería, primeramente, determinar qué características
rapia de apoyo. En principio podríamos decir que son las necesarias para indicar una psicoterapia de
no es labor del terapeuta aconsejar al paciente so- apoyo. En la actualidad sin embargo, sigue siendo
bre toma de decisiones que tienen que ver con su vi- esta modalidad de indicación la que prevalece. No
da real. La función del terapeuta gira en torno a obstante, parece que hay unanimidad en considerar
mostrar al paciente cómo su conducta repetitiva ex- la indicación más precisa para la intervención en cri-
presa actitudes defensivas patológicas que debe sis y para los pacientes límites, pero no así para los
cambiar. Luego, los consejos son en torno a cam- antisociales que tenderían, según algunos autores
bios de actitud psicológica y no de conducta sobre la (15), una contraindicación absoluta de las psicotera-
realidad. pias dinámicas.

Bibliografía
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Bloque 2
Teoría y Técnica Psicoanalítica

Lectura
Técnica de la Entrevista
Psicodinámica

Díaz, P. I. (1994). Técnica de la Entrevista Psicodinámica.


México: Editorial Pax México. Pág. 59-60, 79-92
Material compilado con fines académicos, se prohíbe su reproducción
total o parcial sin la autorización de cada autor.
Bloque 2
Teoría y Técnica Psicoanalítica

Lectura
Conceptos fundamentales del
psicoanálisis freudiano

Samat, J. (2006). Conceptos fundamentales del psicoanálisis freudiano.


Universidad católica de Cuyo facultad de filosofía y humanidades.
Consultado el 03 de mayo 2016. Recuperado de https://www.uccuyo.edu.
ar/ucc3/images/archivos/filosofia/biblioteca/contribuciones/CONCEPTOS_
FUNDAMENTALES_DEL_PSICOANALISIS_FREUDIANO.pdf pág. 12-20
Material compilado con fines académicos, se prohíbe su reproducción
total o parcial sin la autorización de cada autor.
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 12

Formaciones del inconsciente (formations de l'inconscient): término muy usado por


Lacan, aunque tiene su origen en Freud, y que designa los fenómenos en que las leyes
del Icc se ven con mayor claridad: el chiste, el sueño, el síntoma, el lapsus. Freud
caracterizó los mecanismos fundamentales en las formaciones del Icc como "las leyes
del inconsciente": son la condensación y el desplazamiento, que Lacan redefine como
metáfora y metonimia. El sueño, el chiste, la agudeza, el lapsus, el olvido de nombre, el
acto fallido, el síntoma en tanto depende del significante, todos provienen, como dice
Lacan, del "Otro, lugar de esa memoria que Freud ha descubierto bajo el nombre de
inconsciente".

Retorno de lo reprimido: proceso en virtud del cual los elementos reprimidos, al no


quedar nunca abolidos por la represión, tienden a reaparecer y lo hacen de un modo
deformado, en forma de transacción. Freud insistió siempre en el carácter
"indestructible" de los contenidos inconscientes. Los elementos reprimidos no sólo no
desaparecen, sino que tienden incesantemente a reaparecer en la conciencia, por
caminos más o menos desviados y por intermedio de formaciones más o menos difíciles
de reconocer: los derivados o retoños del inconsciente. Ese retorno se cumple siempre a
través de formaciones de transacción o compromiso entre la represión y lo reprimido.

Formación de compromiso: forma que adopta lo reprimido para ser admitido en el


consciente, reapareciendo en el síntoma, en el sueño y, de un modo más general, en toda
producción del inconsciente: las representaciones reprimidas se hallan deformadas por
la defensa hasta resultar irreconocibles. De este modo, en la misma formación, pueden
satisfacerse (en una misma transacción) a la vez el deseo inconsciente y las exigencias
defensivas.

Formación sustitutiva: Designa los síntomas o formaciones equivalentes, como los


actos fallidos, los chistes, etc., en tanto reemplazan a los contenidos inconscientes. Esta
sustitución debe entenderse en un doble sentido: económico, por cuanto el síntoma
aporta una satisfacción que reemplaza al deseo inconsciente; simbólico, al ser sustituído
el contenido inconsciente por otro siguiendo ciertas líneas asociativas.

(Los términos mencionados anteriormente se refieren a los mismos fenómenos: lo que


se expresa en la conciencia o en la conducta del inconsciente reprimido, que siempre
tiende a "retornar" o a expresarse. Sólo que expresan diferentes aspectos: "retoño" o
"derivado" acentúa el origen inconsciente de ciertas conductas; "formaciones del
inconsciente" alude a que en su conformación se destaca la legalidad propia del
inconsciente; "compromiso" o "transacción" a que lo inconsciente no se manifiesta en
forma pura, ni tampoco queda totalmente abolido, sino que lo que aparece es la
resultante de dos fuerzas contrapuestas, lo reprimido y lo represor; "formación
sustitutiva" alude a que reemplaza a lo reprimido, lo sustituye en el Prcc-Cc y en la
conducta, etc.).

Actos fallidos, sueños, recuerdos encubridores

Acto fallido (parapraxis, en inglés): acto en el cual no se obtiene el resultado


explícitamente perseguido, sino que se encuentra reemplazado por otro. Se habla de
actos fallidos no para designar el conjunto de los errores de la palabra, de la memoria y
de la acción, sino aludiendo a aquellas conductas que el individuo habitualmente es
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 13

capaz de realizar con éxito, y cuyo fallo tiende a atribuir a la falta de atención o al azar.
Freud demostró que los actos fallidos son, como los síntomas, formaciones de
compromiso entre la intención consciente del sujeto y lo reprimido.

Sueño (Traum): actividad psíquica que se produce cuando el sujeto duerme y que
emana de lo reprimido. El psicoanálisis ha hecho de ellos uno de los mayores accesos al
conocimiento del inconsciente; para Freud, son la "vía regia" que conduce hacia él. Para
este autor, son "el cumplimiento de un deseo", o, más precisamente, "el cumplimiento
disfrazado de un deseo infantil reprimido."

Contenido manifiesto: el sueño antes de haber sido sometido a la investigación


analítica, tal como se presenta al sujeto soñador que efectúa la narración del mismo. Por
extensión de habla del contenido manifiesto de toda producción verbalizada (desde la
fantasía hasta la obra literaria) que se intenta interpretar por medio del método analítico.

Contenido latente: conjunto de significaciones a las que conduce el análisis de una


producción del inconsciente, especialmente el sueño. Una vez descifrado, el sueño no
aparece ya como una narración formada por imágenes, sino como una organización de
pensamientos, un discurso, expresando uno o varios deseos. Al contenido latente
también se lo denomina pensamientos del sueño.

Deformación (Entstellung): efecto global del trabajo del sueño: las ideas latentes se
transforman en un producto manifiesto difícil de reconocer.

Trabajo del sueño (Traumarbeit): conjunto de operaciones que transforman los


materiales del sueño (estímulos corporales, restos diurnos, pensamientos del sueño) en
un producto: el sueño manifiesto. El efecto de este trabajo es la deformación.

Restos diurnos: dentro de la teoría del sueño, elementos del estado de vigilia del día
anterior que se encuentran en la narración del sueño y en las asociaciones libres del
individuo que ha soñado; se hallan en una relación más o menos lejana con el deseo
inconsciente que se realiza en el sueño. Pueden encontrarse todos los grados
intermedios entre dos extremos: cuando la presencia de un determinado resto diurno
parece motivada, por lo menos en un primer análisis, por una preocupación o un deseo
de la vigilia, y cuando se eligen elementos diurnos, de apariencia insignificante, por su
conexión asociativa con el deseo del sueño.

Simbolismo: A)En un sentido amplio, modo de representación indirecta y figurada de


una idea, de un conflicto, de un deseo inconscientes; en este sentido, puede considerarse
en psicoanálisis como simbólica toda formación sustitutiva.
B) Modo de representación caracterizado principalmente por la constancia de la relación
entre el símbolo y lo simbolizado inconsciente, comprobándose dicha constancia no
solamente en el mismo individuo y de un individuo a otro, sino también en los más
diversos terrenos (mito, religión, folklore, lenguaje, etc.) y en las áreas culturales más
alejadas entre sí. Por ejemplo, objetos alargados pueden simbolizar al pene.

Recuerdo encubridor: recuerdo infantil que se caracteriza a la vez por su singular


nitidez y la aparente insignificancia de su contenido. Su análisis conduce al
descubrimiento de experiencias infantiles importantes y de fantasmas inconscientes. Al
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 14

igual que el síntoma, el recuerdo encubridor constituye una formación de compromiso


entre los elementos reprimidos y la defensa.

 La primera tópica de Freud, estructurada alrededor de 1900 (La interpretación


de los sueños, especialmente su capítulo VII) considera al aparato psíquico
dividido en tres sistemas.
 El primero es el Inconsciente (Icc), cuyos contenidos son representantes de las
pulsiones y elementos reprimidos. Su modo de funcionamiento es el proceso
primario, regido por el principio del placer, y se caracteriza por la búsqueda de
la identidad de percepción y la representación de cosa. Son especialmente los
deseos infantiles los que encuentran una fijación en él. El Inconsciente siempre
presiona para manifestarse en la conciencia y la motilidad.
 El Preconsciente (Prcc) comprende contenidos accesibles a la conciencia, y su
modo de funcionamiento es el proceso secundario, regido por el principio de
realidad, la identidad de pensamiento y la representación de palabra.
 El Consciente (Cc) forma en realidad un solo sistema con el Prcc y es la parte
que produce la advertencia de los contenidos mediante investiduras de atención.
 La dinámica de la lucha entre lo reprimido inconsciente y las fuerzas represoras
del Prcc-Cc producen diversas "formaciones del inconsciente" que tienen un
carácter de transacciones; entre ellos, síntomas, sueños, actos fallidos,
recuerdos encubridores, chistes o agudezas, etc., que son retoños más o menos
deformados de lo reprimido.

El deseo inconsciente

Desamparo o desvalimiento (Hilflosigkeit): palabra del lenguaje corriente que


adquiere un sentido específico en la teoría freudiana: estado del lactante que,
dependiendo totalmente de otra persona para la satisfacción de sus necesidades (sed,
hambre), se halla impotente para realizar la acción específica adecuada para poner fin a
la tensión interna. Para el adulto, el desamparo constituye el prototipo de la situación
traumática generadora de angustia.

Acción específica: término utilizado por Freud en algunos de sus primeros trabajos,
para designar el conjunto del proceso necesario para la resolución de la tensión interna
creada por la necesidad: intervención externa adecuada y conjunto de reacciones
preformadas del organismo que permiten la consumación del acto.

Vivencia o experiencia de satisfacción: tipo de experiencia originaria postulado por


Freud, consistente en el apaciguamiento, en el lactante, gracias a una intervención
exterior, de una tensión interna creada por la necesidad. La imagen del objeto que
satisface adquiere entonces un valor electivo en la constitución del deseo del sujeto.
Podrá ser reinvestida en ausencia del objeto real (satisfacción alucinatoria del deseo).
Guiará constantemente la búsqueda ulterior del objeto que satisface.

Alucinación: según la psicología patológica clásica, una falsa percepción: el sujeto cree
percibir un objeto que está totalmente ausente. Es la percepción de un deseo, un
pensamiento, un recuerdo, incluso un castigo o una amenaza también provenientes del
acervo mnémico, como si provinieran del mundo exterior, registrados (como cualquier
percepción, y por lo tanto otorgándoles creencia de realidad) por el aparato perceptual
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 15

(PeCc). Freud y el psicoanálisis han planteado el problema de la alucinación en


términos de la prueba o examen de realidad y en relación con la noción de realización
imaginaria del deseo. De este modo se define el fantasma como "satisfacción
alucinatoria del deseo".

Deseo (Wunsch): en la concepción dinámica freudiana, uno de los polos del conflicto
defensivo: el deseo inconsciente tiende a realizarse (cumplirse) restableciendo, según
las leyes del proceso primario, los signos ligados a las primeras experiencias de
satisfacción. El psicoanálisis ha mostrado, basándose en el modelo del sueño, cómo el
deseo se encuentra también en los síntomas en forma de una transacción. Dice Freud en
La interpretación de los sueños: "...la imagen mnémica de una determinada percepción
permanece asociada a la huella de la excitación resultante de la necesidad. Al
presentarse de nuevo esta necesidad, se producirá, en virtud de la conexión establecida,
un movimiento psíquico dirigido a recargar la imagen mnémica de dicha percepción e
incluso a evocar ésta, es decir, a restablecer la situación de la primera satisfacción: tal
movimiento es el que nosotros llamamos deseo; la reaparición de la percepción es la
'realización de deseo'".

Realización (cumplimiento) de deseo: formación psicológica en la cual el deseo se


presenta imaginariamente como realizado. Las producciones del inconsciente (sueño,
síntoma y, por excelencia, el fantasma) constituyen realizaciones de deseo en las que
éste se expresa en una forma más o menos disfrazada. Téngase en cuenta que el deseo
se realiza o se cumple, mientras que la necesidad se satisface. La necesidad es biológica
y nace de un estado de tensión interna que encuentra su satisfacción a través de la
acción específica que procura el objeto adecuado (p.ej., el hambre se satisface con el
alimento, la tensión se resuelve); el deseo inconsciente, ligado a signos infantiles
indestructibles, no puede satisfacerse sino que encuentra su cumplimiento (Erfüllung)
en la reproducción alucinatoria de las percepciones que se han convertido en signos de
la satisfacción.

 El bebé, por su estado primitivo de desamparo, depende totalmente de un otro


adulto auxiliar que ejecute la acción específica que necesita para satisfacer sus
necesidades biológicas
 Este otro auxiliar percibe las descargas motrices (llanto, pataleo) del infante y
las interpreta, dando una respuesta adecuada la mayor parte de las veces.
 La experiencia de satisfacción que se produce al satisfacer la necesidad lleva a
que la próxima vez que ella surja se intente reinvestir la percepción originaria,
es decir, lograr una identidad de percepción.
 El movimiento destinado a restablecer la situación de la primera satisfacción es
el deseo. Este deseo de recuperar el objeto que alguna vez se tuvo y se perdió
puede sólo cumplirse o realizarse alucinatoriamente, y no satisfacerse como la
necesidad biológica. Mientras que el objeto de la necesidad es el naturalmente
adecuado (p.ej., oxígeno para la respiración), el objeto del deseo se halla
perdido para siempre, es irrecuperable, aunque el aparato psíquico se mueva
para intentar recuperarlo.
 El deseo inconsciente, indestructible al no poder satisfacerse jamás, se cumple a
través de las formaciones del inconsciente y principalmente de la fantasía (el
fantasma).
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 16

Represión e identificación

Represión (Verdrängung): A) En sentido propio: operación por medio de la cual el


sujeto intenta rechazar o mantener en el inconsciente representaciones (pensamientos,
imágenes, recuerdos) ligados a una pulsión. La represión se produce en aquellos casos
en que la satisfacción de una pulsión (susceptible de provocar por sí misma placer)
ofrecería el peligro de provocar displacer en virtud de otras exigencias.
La represión es particularmente manifiesta en la histeria, si bien desempeña
también un papel importante en las restantes afecciones mentales, así como en la
psicología normal. Puede considerarse como un proceso psíquico universal, en cuanto
se hallaría en el origen de la constitución del inconsciente como dominio separado del
resto del psiquismo.
B) En un sentido más vago, el término "represión" es utilizado en ocasiones por
Freud en una acepción que lo aproxima al de "defensa", debido, por una parte, a que la
operación de la represión en el sentido A, se encuentra, al menos como un tiempo, en
numerosos procesos defensivos complejos (en cuyo caso la parte es tomada por el todo)
y, por otra parte, a que el modelo teórico de la represión es utilizado por Freud como el
prototipo de otras operaciones defensivas.

Represión primaria, primordial u originaria (Urverdrängung): Proceso hipotético


descripto por Freud como primer tiempo de la operación de la represión. Tiene por
efecto la formación de cierto número de representaciones inconscientes o "reprimido
primario". Los núcleos inconscientes así constituidos contribuyen seguidamente a la
represión propiamente dicha, por la atracción que ejercen sobre los contenidos a
reprimir, junto con la repulsión proveniente de las instancias superiores.

Represión secundaria, represión propiamente dicha, posrepresión, represión


posterior, esfuerzo de dar caza (Nachdrängen): Es la represión a la que comúnmente
nos referimos, observable en la clínica, una defensa yoica ante las pulsiones del ello;
más específicamente, ante los derivados o retoños de lo reprimido primordial. Es el
segundo de los tres tiempos de la represión (el primero es la represión primaria y el
tercero el retorno de lo reprimido) y concierne a las ramificaciones psíquicas del
representante reprimido o a las cadenas de ideas que, viviendo de otra parte, se han
asociado a ese representante. Clínicamente produce olvidos y "blancos" en la memoria y
el pensamiento, o bien, a través de su fracaso (retorno de lo reprimido), lapsus, actos
fallidos, síntomas, sueños, etc., que expresan la "filtración" de lo reprimido a través de
una represión no totalmente lograda.

Retorno de lo reprimido: Proceso en virtud del cual los elementos reprimidos, al no


quedar nunca abolidos por la represión, tienden a reaparecer y lo hacen de un modo
deformado, en forma de transacción.

Sofocación o supresión (Unterdrückung): A) En un sentido amplio: operación


psíquica que tiende a hacer desaparecer de la conciencia un contenido displacentero o
inoportuno: idea, afecto, etc. En este sentido, la represión sería un tipo especial de
supresión.
B) En un sentido más estricto, designa ciertas operaciones del sentido A distintas de la
represión:
a) Ya sea por el carácter consciente de la operación y por el hecho de que el contenido
suprimido se convierte simplemente en preconsciente y no en inconsciente;
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 17

b) Ya sea, en el caso de la supresión de un afecto, porque éste no es traspasado al


inconsciente, sino inhibido, abolido.

Juicio de condenación, de repudio o desestimación (Verurteilung,


Urteilsverwerfung): operación o actitud mediante la cual el sujeto, aun cuando toma
conciencia de un deseo, se prohíbe su realización, principalmente por razones morales o
de oportunidad. Freud ve en ello un modo de defensa más elaborado y más adaptado
que la represión. El juicio de condenación implica una aceptación de la existencia de la
pulsión; a ésta, aunque considerada como propia, se le impide el pasaje a la acción. Se
diferencia de la represión: ésta implica un desconocimiento representacional, en cambio
el juicio de condenación es un proceso secundario que implica conocimiento, un yo
eligiendo y dominando la satisfacción o no de sus pulsiones.

Identificación: Proceso psicológico mediante el cual un sujeto asimila un aspecto, una


propiedad, un atributo de otro y se transforma, total o parcialmente, sobre el modelo de
éste. A través de él, un individuo se vuelve semejante a otro, lo "copia", en todo o en
parte. La personalidad se constituye y se diferencia mediante una serie de
identificaciones.
La identificación es un proceso inconsciente, no una simple imitación (aunque
tenga puntos de contacto con ella), sino una apropiación, expresa un "igual que" y se
refiere a algo en común que permanece en lo inconsciente.

Identificación primaria (primäre Identifizierung): Modo primitivo de constitución


del sujeto sobre el modelo del otro, que no es secundario a una relación previamente
establecida en la cual el objeto se presentaría desde un principio como independiente.
La identificación primaria es íntimamente correlativa de la relación llamada
incorporación oral. Freud llama así a aquella identificación que se origina
principalmente en los primeros períodos de la vida, antes de la investidura de objeto o
reconocimiento de éste como fuente de placer. Es una identificación sin previa elección
de objeto.

Incorporación: Proceso en virtud del cual el sujeto, de un modo más o menos


fantasmático, introduce y guarda un objeto dentro de su cuerpo. La incorporación es un
fin o meta pulsional y un modo de relación de objeto propio de la fase oral: si bien
guarda una relación primordial con la actividad bucal y la ingestión de alimento,
también puede vivirse en relación con otras zonas erógenas y otras funciones.
Constituye el prototipo corporal de la introyección y de la identificación. Implica
fantasías como las de meter dentro del cuerpo propio, comer, tragar, ingerir, dejar
guardado dentro de uno, asimilarse las cualidades de un objeto ("consustanciarse" con
él).

Introyección: Proceso puesto en evidencia por la investigación analítica: el sujeto hace


pasar, en forma fantasmática, de "fuera" a "dentro", objetos y cualidades inherentes a
estos objetos. La introyección guarda relación con la incorporación, que constituye el
prototipo corporal de aquélla, pero no implica necesariamente una referencia al límite
corporal (introyección en el yo, el ideal del yo, etc.). Guarda íntima relación con la
identificación.

Interiorización, internalización: a) Término utilizado a menudo como sinónimo de


introyección. B) En un sentido más específico, proceso en virtud del cual las relaciones
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 18

intersubjetivas se transforman en relaciones intrasubjetivas (interiorización de un


conflicto, de una prohibición, etc.).

Exteriorización, externalización: términos utilizados en psicoanálisis como opuesto al


de interiorización, en el que elementos del mundo interno se trasladan al mundo externo
y se los vive como exteriores. La proyección sería una forma de externalización.

 Dos procesos muy importantes en la conformación del aparato psíquico son la


represión y la identificación.
 La represión es una operación por la cual una representación ligada a una
pulsión es desalojada del Preconsciente-consciente y mantenida, mediante
contrainvestiduras, en el Inconsciente. Tiene tres tiempos: la represión
primordial, que determina la existencia de núcleos reprimidos arcaicos que
atraerán desde el Icc a los contenidos advenidos al aparato; la represión
secundaria o propiamente dicha, que se ejerce sobre las representaciones que se
conectan con lo reprimido anterior; y el retorno de lo reprimido. La represión
se halla en el origen de la constitución del Inconsciente, en tanto que separado
del resto del psiquismo.
 La identificación es la asimilación por parte del sujeto de otro o parte de ese
otro, con lo cual se transforma sobre el modelo de este. Las identificaciones más
primitivas, anteriores a la elección de objeto, se denominan "primarias". La
identificación está relacionada con la incorporación (meta pulsional oral que
introduce en la fantasía algo dentro del cuerpo) y la introyección (proceso cuyo
prototipo es la incorporación pero que no se limita a la internalización
fantasmática en el cuerpo).

La realidad psíquica. Complejo, fantasma

Complejo: Conjunto organizado de representaciones y de recuerdos dotados de intenso


valor afectivo, parcial o totalmente inconscientes. Un complejo se forma a partir de las
relaciones interpersonales de la historia infantil; puede estructurar todos los niveles
psicológicos: emociones, actitudes, conductas adaptadas. Esta palabra -introducida
fundamentalmente por la escuela de Zurich, en especial por Jung- ha hallado gran
difusión en el lenguaje corriente. En cambio, los psicoanalistas han ido abandonándola
progresivamente, si exceptuamos las expresiones "complejo de Edipo" y "complejo de
castración".

Imago (palabra latina): prototipo inconsciente de personajes que orienta electivamente


la forma en que el sujeto aprehende a los demás; se elabora a partir de las primeras
relaciones intersubjetivas reales y fantasmáticas con el ambiente familiar; se habla así
de imago materna, paterna, fraterna. No debe entenderse como un fiel reflejo de lo real;
es por ello que la imago de un padre terrible puede muy bien corresponder a un padre
real débil. Es también un concepto que debemos a Jung.

Fantasma (Phantasie): Escenificación imaginaria en la que se halla presente el sujeto y


que representa, en forma más o menos deformada por los procesos defensivos, la
realización de un deseo y , en último término, de un deseo inconsciente.
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 19

El fantasma se presenta bajo distintas modalidades: fantasías conscientes o


sueños diurnos, fantasmas inconscientes que descubre el análisis como estructuras
subyacentes a un contenido manifiesto, y fantasmas originarios.
Mientras que en francés se utiliza más la expresión fantasme, en inglés se
utilizan fantasy o phantasy. En castellano puede hablarse de "fantasía" o de "fantasma"

Sueño diurno, devaneo (Tagtraum): fantasías (sobre todo conscientes, pero también
preconscientes e incluso inconscientes, cuando por su contenido o por sus conexiones
deben ser reprimidos) durante la vida de vigilia, escenificación imaginaria de la vida
diurna, que en la expresión usada en primer término señala la analogía con el sueño
nocturno. Es, como éste, una realización de deseo; sus mecanismos de formación son
idénticos, con predominio de la elaboración secundaria.

Novela familiar: expresión creada por Freud para designar fantasías mediante las que el
sujeto modifica imaginariamente sus lazos con sus padres (imaginando, por ejemplo,
que es un niño encontrado, que sus padres verdaderos son otros, etc.). Tales fantasías
tienen su fundamento en el complejo de Edipo.

Fantasmas originarios, Fantasías primordiales (Urphantasien): Fantasías


universales heredadas. Estructuras fantasmáticas típicas (vida intrauterina, escena
primitiva, castración, seducción) que el psicoanálisis reconoce como organizadoras de
la vida fantasmática, cualesquiera que sean las experiencias personales de los
individuos; según Freud, la universalidad de estos fantasmas se explica por el hecho de
que constituirían un patrimonio trasmitido filogenéticamente. Por ejemplo, la escena
primaria (Urszene) es una fantasía primordial en que se figura la escena de relación
sexual entre los padres, observada o supuesta basándose en ciertos indicios y fantaseada
por el niño. Éste la interpreta generalmente como un acto de violencia por parte del
padre.

Introversión: Término introducido por Jung para designar, de un modo general, el


desprendimiento de la libido de sus objetos exteriores y su retirada hacia el mundo
interno del sujeto. Freud recogió el término, pero limitando su utilización a una retirada
de la libido que conduce a la carga de formaciones intrapsíquicas imaginarias, lo cual se
debería diferenciar de una retirada de la libido hacia el yo (narcisismo secundario).
Tiene para Freud un papel muy importante en la génesis del síntoma neurótico, ya que
merced a una frustración proveniente de la realidad, la libido se aparta de ésta y se
vuelve hacia la vida fantasmática, invistiendo fantasmas, complejos e imagos de objetos
propios de la realidad interna (introversión de la libido), lo que probablemente
conduzca a la regresión.

Realidad psíquica: Término utilizado frecuentemente por Freud para designar lo que,
en el psiquismo del sujeto, presenta una coherencia y una resistencia comparables a las
de la realidad material; se trata fundamentalmente del deseo inconsciente y los
fantasmas con él relacionados. "Los fantasmas poseen una realidad psíquica opuesta a la
realidad material...en el mundo de las neurosis, el principal papel corresponde a la
realidad psíquica" (Conferencias de Introducción al Psicoanálisis).
CONCEPTOS FUNDAMENTALES DEL PSICOANÁLISIS FREUDIANO 20

 Freud descubre un mundo interior que, diferente de la realidad material


externa, no por ello es menos "real" para el sujeto. Esta "realidad psíquica" está
relacionada básicamente con el deseo inconsciente y sus derivados.
 Las fantasías o fantasmas escenifican imaginariamente estos deseos y las
angustias y defensas que derivan de ellos. Estas fantasías son en su mayor parte
inconscientes, y a veces predominantemente preconscientes (sueños diurnos).
 Existen también estructuras fantasmáticas típicas y universales que organizan la
experiencia individual: los fantasmas originarios.
 Un conjunto de representaciones y afectos intrincados en relación a temáticas
fantasmáticas y a imagos que determinan cómo reaccionamos frente al
ambiente cuando los estímulos provenientes de éste los tocan en algún punto
son los complejos, de los cuales los más importantes son los de Edipo y de
castración.

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