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RE V I S I Ó N

Regeneración de las
lesiones de furca
mandibulares de clase II.
Revisión de la literatura
Beatriz de Tapia, Carolina Mor, Georgina Arnau, Javier Calvo, José Nart

Palabras clave: Furcas de clase II mandibulares, regeneración tisular guiada, membrana no reabsorbible, membrana reabsorbible, proteínas derivadas de la matriz del
esmalte, plasma rico en plaquetas, factores de crecimiento derivados de plaquetas, matriz dérmica acelular.

Resumen: Las lesiones de furca tienen una gran importancia clínica debido a la complejidad que presenta su abordaje. Los objetivos del tratamiento son los mismos que
en la terapia periodontal convencional, pero las características anatómicas propias de la zona limitan el acceso. Estudios clínicos han demostrado mejoras en la reducción
de la profundidad de sondaje, ganancia de inserción clínica vertical y horizontal y relleno óseo del defecto, mediante el uso de membranas no reabsorbibles, reabsorbibles,
con o sin material de relleno óseo. Tras revisar la literatura podemos observar que las membranas reabsorbibles ofrecen resultados clínicos superiores o similares cuando
se comparan con las membranas no reabsorbibles. La colocación de un injerto mejora los parámetros clínicos de ganancia de inserción ósea vertical y horizontal y aporta
mayor estabilidad a largo plazo en la regeneración de furcas mandibulares de clase II. Como alternativa se proponen las proteínas derivadas de la matriz del esmalte
REVISIÓN

(PDME), el plasma rico en plaquetas (PRP) y los factores de crecimiento derivados de plaquetas (rhPDGF). Con PDME se observa una ganancia de inserción horizontal
mayor o comparable a las membranas reabsorbibles. El uso de PRP en combinación con una membrana podría estimular una mayor formación de nuevo cemento y
favorecer la mineralización ósea. Los rhPDGF han demostrado mejorar los parámetros clínicos al añadirse al uso de una membrana o a un aloinjerto. Deben tenerse en
cuenta las limitaciones anatómicas, las características del defecto óseo, hueso interproximal mesial y distal y los tejidos blandos para el abordaje quirúrgico con enfoque
regenerativo de estas lesiones.

INTRODUCCIÓN y supervivencia del diente (McGuire


y Nunn 1996; Cattabrigay cols. 2000;
Las lesiones de furca son un hallazgo Pretzl y cols. 2008). Se consideran
frecuente en los pacientes periodonta- factores predisponentes las caries y res-
Beatriz de Tapia les. Estudios sobre cadáveres humanos tauraciones situadas en la proximidad
Licenciada en Odontología, Universidad refieren que la prevalencia de molares de la furca (Wang y cols. 1993) y el
de San Pablo CEU. Alumna del Máster con afectación furcal varía del 26 al trauma oclusal, ya que se ha observa-
de Periodoncia de la Universidad
30 % (Bissada y Abdelmalek 1973), do que el hueso en las áreas de furca-
Internacional de Catalunya.
mientras que estudios longitudinales ción sufre una tensión por las fuerzas
Carolina Mor aportan datos más elevados, llegando a oclusales excesivas y que la pérdida de
Georgina Arnau presentarse en un 35 % de los molares inserción en las áreas de furcación se
Javier Calvo
Máster en Periodoncia, Universidad
mandibulares y hasta en un 90 % en relaciona con estas fuerzas (Glickman
Internacional de Cataluña. Profesor del molares maxilares (Ross y Thompson y cols. 1962).
Máster de Periodoncia de la Universidad 1980). Las furcas pueden verse afecta- Hoy en día existen numerosas cla-
Internacional de Cataluña. das a causa de la progresión de la perio- sificaciones. Glickman (Glickman,
José Nart dontitis o por la afectación de canales 1953) clasificó la severidad del de-
Doctor en Odontología. Director del área pulpares laterales en el área de la fur- fecto en diferentes grados, de I a IV:
de Periodoncia, Universidad Internacional cación, presentes en el 46-59 % de los el grado I es una pérdida inicial; el
de Cataluña.
casos (Gutmann 1978). Tienen una grado II fue definido como un defec-
Correspondencia a: elevada importancia clínica porque su to horizontal establecido, resultante
Beatriz de Tapia Pastor, Facultad de presencia va unida a una mayor difi- en un área sondable, pero con hueso
Odontología, Departamento de Periodoncia, cultad para la higienización por parte presente en el área de la furca, y los
Hospital General de Cataluña. Josep
Trueta s/n. 08195-Sant Cugat del Vallés,
del paciente y del clínico, un mayor grados III y IV se refieren a situaciones
Barcelona, España. Tel: +34 935042000 riesgo de caries, y un peor pronóstico donde no hay tejido duro en el área de

Volumen 24, Número 2, 2014 139


Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

Tabla 1. Clasificación de lesiones de furca


entre un 62 % y un 82 % de los mola-
res con afectación de furca de clase II
Glickman, 1958 I: lesión inicial de furca. No hay destrucción significativa de tejido duro (Machtei y cols. 1997).
R E V I S I Ó N

ni blando.
II: cul-de-sac. Existe destrucción horizontal del área de la furcación,
Los objetivos de la terapia en mo-
puede haber o no componente de pérdida vertical. lares con afectación de furca de clase
III: destrucción horizontal de lado a lado de los tejidos duros y blandos I y II son los mismos que en la terapia
periodontales en el área de la furcación. La lesión de furca no es visi-
ble, el tejido gingival cubre la entrada a la furca.
periodontal convencional: detener el
IV: destrucción horizontal de lado a lado. La lesión es visible, el tejido proceso de la enfermedad periodon-
gingival ha migrado apicalmente dejando expuesta la entrada de la tal, restaurar la pérdida de los tejidos
furcación.
y, por último, mantener el diente en
Hamp, 1975 I: la pérdida horizontal de soporte no excede 3 mm del ancho del condiciones de salud y función (Al-
diente.
Shammari y cols. 2001).
II: cul-de-sac. La pérdida horizontal excede 3 mm del ancho del diente
sin abarcar la totalidad del área de la furcación. La regeneración tisular guiada
III: destrucción horizontal de lado a lado de los tejidos periodontales en (RTG) se basa en la colocación de una
el área de la furcación.
membrana que aísle el tejido conecti-
Goldman, 1958 Grado I: incipiente. vo y el epitelio del defecto infraóseo
Grado II: cul-de-sac. a regenerar para evitar que las células
Grado III: de lado a lado.
epiteliales y de tejido conectivo, que
Ramfjord y Ash, Clase I: inicial, < 2 mm (< 1/3 de la anchura). tienen un mayor potencial de proli-
1979 Clase II: cul-de-sac, > 2 mm (> 1/3 de la anchura) sin traspasar.
feración, lleguen en primer lugar al
Clase III: de lado a lado.
defecto, facilitando una migración se-
Fedi, 1985 Combina la clasificación de Glickman, pero subdivide el grado II en lectiva de las células procedentes del
1 (< 3 mm) y 2 (> 3 mm).
ligamento periodontal, las cuales po-
Ricchetti, 1982 Clase I: 1 mm de pérdida de soporte. seen la capacidad de regenerar el perio-
Clase Ia: 1-2 mm de pérdida horizontal.
donto (Nyman y cols. 1982; Gottlow
Clase II: 2-4 mm de pérdida horizontal.
Clase IIa: 4-6 mm de pérdida horizontal. y cols. 1984).
Clase III: 6 mm de pérdida horizontal. Histológicamente se ha observado
Tarnow y Fletcher, Subclasificación basada en la pérdida vertical:
la formación de una nueva inserción
1984 en áreas de furcación tanto con la uti-
Subclase A: 0-3 mm. lización de membranas no reabsorbi-
Sublcase B: 4-6 mm.
Subclase C: > 7 mm.
bles (Gottlow y cols. 1986) como con
membranas reabsorbibles (Van Swol
Eskow y Kapin, 1984 Mismas subclases que Tarnow y Fletcher, por tercios.
y cols. 1993; Harris 2002); además,
con estas últimas también se observa
formación de nuevo hueso, cemento y
la furca, y en el grado IV se da además La extensión del grado de furca- ligamento periodontal (Stoller y cols.
una migración apical del tejido gingi- ción es difícil de diagnosticar, por lo 2001; Harris 2002).
val que deja expuesta la entrada de la que deberemos basarnos en las radio- La RTG en molares maxilares tie-
furcación. Hamp (Hamp y cols. 1975) grafías, el sondaje clínico utilizando la ne una aplicación limitada. Se ha ob-
realizó una clasificación más cuantita- sonda de Nabers y el sondaje a hueso. servado ganancia de inserción clínica
tiva, con tres grados de afectación: el Los molares con afectación de fur- y de relleno óseo en las furcas vestibu-
grado I se refiere a pérdida horizontal ca responden de una manera menos lares de clase II de molares maxilares,
menor de 3 mm; el grado II presenta favorable al tratamiento periodon- pero poca o ausencia de regeneración
una pérdida del componente horizon- tal no quirúrgico que los molares sin en lesiones de furca interproximales
tal mayor de 3 mm, pero no afecta a la afectación de furca, presentando clí- (Pontoriero y Lindhe 1995; Metzler
totalidad de la furca, y finalmente el nicamente un mayor riesgo de pérdida y cols. 1991). Se han relacionado las
grado III hace referencia a las lesiones de inserción (Nordland y cols. 1987; diferencias en el éxito del tratamiento
completas que van de lado a lado, a las Loos y cols. 1989; Claffey y Egelberg con la anatomía de los defectos, la pre-
furcas permeables. 1994) debido a las características ana- sencia de surcos profundos, el acceso
El componente vertical fue delimi- tómicas de las áreas de furcación, como limitado y la dificultad de colocar una
tado más tarde por Tarnow y Fletcher son los surcos del tronco radicular, de membrana en estas zonas.
(Tarnow y Fletcher 1984) en subclases, 1,12 mm y 1,05 mm de media en los
basándose en la profundidad de sonda- primeros y segundos molares mandibu- OBJETIVO
je: la subclase A mostraba una profundi- lares, respectivamente (Villaça y cols.
dad de sondaje de 0 a 3 mm; la B entre 2004), las concavidades radiculares Este artículo tiene como objetivo revi-
4 y 6 mm, y la C una profundidad de en el área de la furcación o las perlas sar y actualizar la literatura disponible
sondaje mayor de 7 mm (tabla 1). y proyecciones de esmalte, presentes sobre los diferentes tratamientos para

140 Periodoncia y Osteointegración


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la regeneración periodontal en furcas Tabla 2. Factores asociados a la regeneración


mandibulares de clase II, valorar si la
combinación de alguno de estos trata- PAL-H ≤ 4 mm cierres completos: 90 %.

R E V I S I Ó N
≥ 5 mm cierres completos: 53 %.
mientos aporta mejoras clínicas signi-
ficativas, describir los aspectos clínicos Longitud tronco radicular ≥ 5-6 mm más cierres completos (100 %).
a considerar, y la predictibilidad y es- ≤ 4 mm cierres completos: 71 %.

tabilidad de estos tratamientos a largo Concavidades 38 % cierres incompletos (versus 20 % sin concavidades).
plazo.
Fórnix-base defecto óseo ≥ 4 mm cierres completos: 63 %.

Fórnix-cresta ósea ≤ 2 mm > 90 % cierre completo.


MATERIALES Y MÉTODOS ≥ 3 mm 70 % cierre completo.

Se realizó una búsqueda bibliográfica Hueso interproximal Mismo nivel o coronal al fórnix 94 % cierres completos
de revistas indexadas en la base de (versus 70 % si apical al fórnix).

datos Medline-Pubmed relacionadas Cresta-base defecto


con el tratamiento de regeneración
Divergencia radicular a nivel ≥ 4 mm cierres completos: 61 %.
de furcas mandibulares de clase II, pu- de la cresta ósea ≤ 3 mm cierres completos: 93 %.
blicados hasta mayo de 2013. Se uti-
lizaron las palabras clave siguientes: Bowers 2003.
PAL-H: pérdida de inserción a nivel horizontal.
(gtr[All Fields] OR (periodontal[All
Fields] AND ((“regeneration”[MeSH
Terms] OR “regeneration”[All Fields]) la zona de la furcación (Blumenthal mientras que para divergencias menores
AND ((“regeneration”[MeSH Terms] 1993); para que estas paredes adyacen- o iguales a 3 mm, se obtuvo un 93 % de
OR “regeneration”[All Fields]) AND tes de hueso interproximal sean una cierres completos (Bowers y cols. 2003).
Fields[All Fields]))) AND (furca[All fuente adicional en el aporte de células La profundidad de sondaje hori-
Fields] OR furca/periapical[All Fields] del ligamento periodontal, debe existir zontal a nivel de la cresta ósea tam-
OR furca1[All Fields] OR furcally[All un mínimo de 1-2 mm de encía quera- bién se presenta como un factor im-
Fields] OR furcas[All Fields] OR tinizada para una mejor manipulación portante a la hora de predecir el éxito
furcated[All Fields] OR furcation[All clínica del colgajo y cicatrización. de la regeneración. Sondajes menores
Fields] OR furcation/periapical[All Además, se ha observado que colgajos o iguales a 4 mm tendrán un 84 % de
Fields] OR furcation’s[All Fields] de grosor > 1 mm presentan menor probabilidades de cierre completo,
OR furcational[All Fields] OR recesión al realizarse tratamientos de mientras que si el sondaje supera los
furcations[All Fields])) AND RTG en furcaciones vestibulares man- 5 mm, únicamente se producirá un
(class[All Fields] AND II[All Fields]). dibulares o maxilares de clase I o II, al cierre completo en el 52 % de los casos
facilitar la manipulación y mantener la (Bowers y cols. 2003).
RESULTADOS vascularidad (Anderegg y cols. 1995). Por otra parte, Pontoriero (Pon-
Los parámetros clínicos que in- toriero y Lindhe, 1995) demostró que
Tras la búsqueda bibliográfica realizada fluyen más significativamente en el existía un mayor índice de regenera-
al respecto, se obtuvieron 79 referen- éxito clínico de la regeneración son: ción en furcas mandibulares de clase II
cias. Las referencias seleccionadas, un la pérdida de inserción horizontal, cuando la altura del defecto intrafurcal
total de 71, siguieron los siguientes la divergencia radicular a nivel de la no excedía los 3 mm (tabla 2).
criterios de inclusión: artículos publi- cresta ósea y la profundidad de sonda-
cados en inglés hasta mayo de 2013, je horizontal a nivel de la cresta ósea Factores del diente. La anatomía del
estudios clínicos realizados en huma- (Bowers y cols. 2003). molar también puede influir notable-
nos, ensayos clínicos aleatorizados, Furcaciones con una pérdida de mente en el resultado de la regenera-
metaanálisis, estudios multicéntricos inserción clínica horizontal menor o ción: las concavidades radiculares en el
y revisiones sistemáticas publicadas en igual a 4 mm obtenían un cierre com- área de la furcación, el surco del tronco
revistas odontológicas. pleto en el 90 % de los casos, mientras radicular, así como la entrada de la fur-
que cuando este valor era de 5 mm o ca van a influenciar la adaptación de
DISCUSIÓN más, el porcentaje de cierre se reducía la membrana. Bower (Bower 1979) in-
al 53 % (Bowers y cols. 2003). formó de que el diámetro de media de
De la misma manera sucede con entrada de la furca, teniendo en cuen-
FACTORES ASOCIADOS
la divergencia radicular a nivel de la ta todas las furcas, tanto mandibulares
A LA REGENERACIÓN
cresta ósea. A medida que aumenta la como maxilares, era menor de 1 mm
Parámetros clínicos. Como factor divergencia, la probabilidad de cierre en el 81 % de los casos, y en concreto
determinante se ha encontrado que completo disminuye: para divergencias las furcas mandibulares presentaban
la altura ósea interproximal debe ser de 4 mm o más, la completa regenera- uno menor de 0,75 mm en un 50 % de
coronal a la altura de la cresta ósea en ción se produjo en el 61 % de los casos, los casos, de los cuales un 63 % se co-

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Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

rresponden con la furca vestibular y un un mal acceso para la higiene por parte una ganancia de inserción horizontal
37 % con la furca lingual. La media de del paciente, perforaciones endodón- para las membranas no reabsorbibles
la anchura de la parte activa de las cu- ticas en el área de la furca o las raíces, de 1,4 ± 2,2 mm (Blumenthal 1993) y
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retas es de 0,75 a 1,1 mm, por lo que en alargamientos de corona que hayan 1,8 mm (Hugoson y cols. 1995) versus
muchas ocasiones podemos no acceder invadido el área de la furca, proximi- 2,2 ± 2 mm y 2,5 mm para las mem-
completamente al área de la furcación, dades radiculares intratables, amplias branas reabsorbibles, respectivamente.
lo que puede resultar en una instru- recesiones gingivales, caries profundas Garret y cols. (1997), en un estudio
mentación con curetas inadecuada. que involucren la raíz, lesiones endo- multicéntrico, observaron que la me-
También Bower (Bower 1979) observó periodontales intratables y fracturas dia de ganancia de inserción horizontal
concavidades presentes en el 100 % de longitudinales de alguna de las raíces. era de 2,1 mm para ambas membranas.
los casos en la cara mesial de las furcas De la misma manera, las membra-
mandibulares, con una profundidad de ENFOQUES EN EL TRATAMIENTO nas reabsorbibles demuestran superio-
DE REGENERACIÓN DE FURCAS
0,7 mm, y en un 99 % en la cara distal, ridad o resultados clínicos similares a
MANDIBULARES DE CLASE II
con una profundidad media de 0,5 mm. las no reabsorbiles para la ganancia de
Las crestas de bifurcación son otro Algunos clínicos han demostrado inserción vertical. El estudio de Pruthi
factor a tener en cuenta, ya que son mejoras clínicas en la reducción de la (Pruthi y cols. 2002) observa, en la
otra zona importante en la acumula- profundidad de sondaje, ganancia de in- reentrada a los 12 meses, una mayor
ción de placa. Everett (Everett y cols. serción clínica vertical y horizontal, y ganancia tras el uso de membranas de
1958) mostró una incidencia del 73 % relleno del defecto óseo mediante el uso colágeno (0,81 ± 1,80) al comparar-
en molares mandibulares. de membranas no reabsorbibles, reab- las con las de PTFE-e (–1,00 ± 2,03).
Las proyecciones cervicales del sorbibles, con o sin material de relleno También un reciente metaanálisis (Ki-
esmalte y las perlas de esmalte se han óseo o mediante la utilización de proteí- naia y cols. 2011), al comparar estudios
descrito en la literatura como factores nas de la matriz del esmalte, plasma rico con ambos tipos de membranas, con-
predisponentes en las lesiones de furca. en plaquetas y matriz dérmica acelular. cluye que existe una mayor ganancia
Masters y Hoskins (Masters y Hoskins La RTG ofrece mejores resultados del nivel óseo en sentido vertical con el
1964) refirieron la presencia de estas clínicos que el colgajo de acceso o el uso de membranas reabsorbibles. Des-
proyecciones en un 28,6 % de los mo- uso de injertos óseos solos en furcas tacan que estas diferencias, aun siendo
lares mandibulares, siendo más preva- mandibulares de clase II (Machtei y estadísticamente significativas, no lo
lentes en los segundos. Schallhorn 1995). En una revisión son clínicamente (1,49 ± 0,30 para las
Las infecciones endodónticas pue- sistemática reciente, la supervivencia membranas reabsorbibles, versus 0,75 ±
den llevar a una afectación periodon- de dientes multirradiculares tratados 0,16 para las no reabsorbibles).
tal, lo que podría afectar a la cicatri- mediante RTG es del 83-100 % a los Los resultados obtenidos tras el
zación tras la cirugía de regeneración. 5-12 años (Huynh-Ba y cols. 2009). uso de membranas reabsorbibles y no
Sin embargo, estudios recientes (Cor- reabsorbibles han demostrado ser es-
tellini y Tonetti 2001; De Miranda y MEMBRANAS NO REABSORBIBLES tables a largo plazo. Así se demuestra
VERSUS MEMBRANAS REABSORBIBLES
cols. 2013) observan que la realización en el estudio de Eickholz, en el que la
del tratamiento endodóntico antes de Cuando comparamos diversos estu- ganancia de inserción horizontal en
la cirugía no interfiere en la curación dios atendiendo al uso de membranas furcas de clase II mandibulares fue es-
de los tejidos periodontales. reabsorbibles frente a membranas no table a 10 años en el 83 % de los casos
Wheeler (Wheeler 1968) reportó reabsorbibles, la mayoría de estudios (Eickholz y cols. 2006).
las longitudes medias de los troncos clínicos no refieren diferencias clínicas Aun resultando exitosa la utilización
radiculares de molares mandibulares significativas entre ambas membranas de membranas de PTFE-e para la rege-
y observó una media de 3 mm para la para períodos de tiempo entre cinco y neración periodontal, la necesidad de su
furca vestibular y 4 mm para la furca seis meses (Christgau 1995; Eickholz y remoción en una segunda cirugía, la ma-
lingual. Los molares con tronco radi- cols. 1997), 12 meses (Caffesse y cols. yor incidencia de abscesos y supuración
cular corto presentaban mayor riesgo 1997; Garret y cols. 1997) o 24 meses y la mayor recesión del margen gingival
de desarrollar lesiones de furca y tam- (Eickholz y cols. 1998). asociada postratamiento, han dirigido la
bién presentaban un menor potencial De hecho, las membranas reabsor- práctica clínica hacia el uso de membra-
de regeneración. Los troncos ≤ 4 mm bibles han demostrado superioridad nas reabsorbibles (Caffesse y cols. 1997;
presentaban el 71 % de cierres com- o resultados clínicos similares a las Garret y cols. 1997) (tabla 3).
pletos, mientras que en los troncos ≥ membranas no reabsorbibles, en cuan-
5-6 mm, la prevalencia ascendía al to a ganancia de inserción horizontal
100 % (Bowers y cols. 2003). (Black y cols. 1994; Yukna y Yukna TERAPIA COMBINADA, MEMBRANA
Novaes (Novaes y Novaes 1992) 1996; Eickholz y cols. 2006), sin em- + INJERTO ÓSEO
establecieron diversas situaciones en bargo, los estudios de Blumenthal 1993 Sculean y cols. (2008) sugieren que
las que la RTG quedaría contraindi- y Hugoson y cols. 1995 encontraron di- la combinación de tratamientos no
cada para furcas de clase II, entre ellas ferencias significativas, observándose aporta beneficios significativos en el

142 Periodoncia y Osteointegración


Tabla 3. Comparación de los resultados clínicos de membranas reabsorbibles versus no reabsorbibles

Autor Tipo de estudio Tiempo Pacientes Defecto Tratamiento Cambios nivel Cambios nivel Relleno Relleno Cierre
inserción de inserción defecto defecto Furcación
horizontal vertical horizontal vertical

Christgrau y cols. Ensayo clínico aleatorizado 5 meses 10 Furca II Polylactic acid 2,0 - - - 2/5
1995 PTFE-e 2,0 - - - 0

Eickholz y cols. Ensayo clínico aleatorizado 6 meses 20 12 pares de Polyglactin 910 2,00 ± 0,82 1,78 ± 1,27 - 0,76 ± 0,79 -
1997 furcas II PTFE-e 1,60 ± 0,72 1,46 ± 1,35 - 0,41 ± 0,72 -

Caffesse y cols. Ensayo clínico aleatorizado 12 meses 12 6 pares de Polylactic/ 1,5 ± 0,5 2,5 ± 0,4 - - -
1997 furcas II Polyglicolic 1,2 ± 0,3 2,7 ± 0,3 - - -
PTFE-e

Eickholz y cols. Ensayo clínico aleatorizado 24 meses 23 11 pares de Polyglactin 910 2,22 ± 0,94 1,33 ± 0,94 - 2,10 ± 1,92
1998 furcas II PTFE-e 1,86 ± 0,60 0,92 ± 1,47 - 1,24 ± 2,04

Black y cols. Ensayo clínico aleatorizado 6 meses 26 Furca II X-bovine collagen 1,5 0,9 2,0 - 5/13
1994 PTFE-e - 1,11 1,1 1,5 3/13

Pruthi y cols. Ensayo clínico aleatorizado 12 meses 17 Furca II Colágeno 1,00 ± 1,22 0,41 ± 0,71 0,81 ± 1,80
2002 (CollaTec) 0,47 ± 1,81 0,41 ± 0,62 1,0 ± 2,03
PTFE-e

Yukna y Yukna Ensayo clínico aleatorizado 12 meses 27 Furca II Bovine collagen 1,0 ± 1,7 1,7 ± 2,0 - 8 (13,6 %)
1996 Multicéntrico (10 mb) PTFE-e 0,4 ± 1,4 1,7 ± 1,9 - 1

Eickholz y cols. Ensayo clínico aleatorizado 10 años 18 Furca II Polyglactin 910 1,1 1,7 ± 1,4 - -
2006 PTFE-e 0,3 -1,1 ± 1,3 - -

Blumenthal y Ensayo clínico aleatorizado 12 meses 24 Furca II X-Bovine collagen 2,5 1,8 2,5 1,6 0
cols. 1993 PTFE-e 1,8 1,1 1,7 1,0 0

Hugoson y cols. Ensayo clínico aleatorizado 12 meses 76 Furca II Polylactic acid 2,2 ± 2 0,8 - - -
1995 PTFE-e 1,4 ± 2,2 0,4 - - -

Garret y cols. Serie de casos 12 meses 162 Furca II Polylactic acid 2,1 2,0 -
1997 Estudio multicéntrico (mb y mx) PTFE-e 2,1 1,6 -

Kinaia y cols. Metaanálisis Reabsorbible 1,39 ± 0,18 1,85 ± 0,32 1,49 ± 0,30 -
2011 No reabsorbible 1,35 ± 0,18 1,54 ± 0,27 0,75 ± 0,16 -
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Volumen 24, Número 2, 2014


PTFE-e: membrana de politetrafluoretileno expandido.
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Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

tratamiento de defectos infraóseos encuentran una mayor proporción y grupo control reveló una menor forma-
contenidos, como son los defectos de estabilidad de los cierres completos de ción de cemento y hueso (Lekovic y
3 paredes, furcas de clase II mandibu- la furcación, así como de la reducción Kenney 1993).
R E V I S I Ó N

lares o fenestraciones. A pesar de esto, del sondaje horizontal y vertical, a los La literatura en este aspecto puede
en el caso de las furcaciones de clase 5 años de seguimiento al combinar ser contradictoria, mostrando discre-
II mandibulares, la literatura parece una membrana con material de injer- pancias que pueden ser atribuibles a di-
coincidir en que el uso combinado de to óseo. ferentes criterios de selección, la selec-
membranas con materiales sustitutos Son diversos los estudios que de- ción de las variables clínicas o incluso
de hueso mejora los resultados del tra- muestran mejores resultados en la re- factores locales y sistémicos, pero los
tamiento de regeneración a nivel ho- ducción del defecto, tanto en sentido últimos estudios clínicos indican un
rizontal y vertical (Kinaia y cols. 2011; horizontal como vertical, con la com- beneficio al adjuntar un injerto óseo
Murphy y Gunsolley 2003; Kinaia y binación de membrana con injerto (De a la regeneración tisular guiada sobre
cols. 2011; Giusto 2005; Rosen y cols. Leonardis y cols. 1999; Luepke y cols. furcas (tabla 4).
1997; McClain y Schallhorn 1993). 1997; Simonpietri y cols. 2000) a nivel
Por otro lado, la cantidad de tejido de profundidad de sondaje e inserción PROTEÍNAS DERIVADAS
DE LA MATRIZ DEL ESMALTE
regenerado está limitada por la canti- clínica (Wallace y cols. 1994; Luepke
dad de espacio disponible debajo de la y cols. 1997; Lekovic y cols. 1990) y a Un tratamiento alternativo a la RTG
membrana. Una manera de evitar el nivel de relleno óseo del defecto (Le- en lesiones de furca de clase II parece
colapso de esta membrana y compen- kovic y cols. 1990; Simonpietri y cols. ser el tratamiento con proteínas deriva-
sar la falta de rigidez de las membranas 2000). Además, al combinar membra- das de la matriz del esmalte (PDME),
reabsorbibles es la combinación de na e injerto, se observó una menor re- las cuales han demostrado mejorar
estas con materiales de relleno. En de- cesión del margen gingival (Lekovic y significativamente los tratamientos de
fectos infraóseos no contenidos se ob- cols. 1990). regeneración periodontal. Estas proteí-
serva una mayor ganancia de inserción De igual modo, en una revisión nas tienen la capacidad de promover
clínica con la combinación de mem- sistemática llevada a cabo por Mur- la proliferación de las células del liga-
brana más injerto óseo versus el uso phy y Gunsolley (Murphy y Gunsolley mento periodontal, incrementando la
de injertos o membranas de colágeno 2003), y también en el metaanálisis síntesis de proteínas y la producción de
solamente (Blumenthal 1990; Paolan- de Kinaia (Kinaia 2011), se obtienen sustancias mineralizadas. También pro-
tonio 2002; Blumenthal y cols. 2003). mejores resultados con la combinación mueven una reducción en la flora pato-
Sin embargo, en defectos contenidos de una membrana con un material de génica local, creando un ambiente más
y limitados no se encuentran diferen- relleno óseo. favorable para la regeneración perio-
cias significativas en la regeneración La combinación de membranas dontal (Haase y Bartold 2001; Sculean
periodontal desde el punto de vista y materiales de relleno para el tra- y cols. 2001; Arweiler y cols. 2002; Mi-
histológico, al comparar membranas tamiento de lesiones de furca man- zutani y cols. 2003; Keila y cols. 2004;
en solitario o la combinación de estas dibulares de tipo II ha sido evaluada Galli y cols. 2006; Walter y cols. 2006).
con injertos de hueso, lo que lleva a histológicamente en dos estudios en El uso de PDME obtiene resulta-
sugerir que el principal mecanismo por modelos preclínicos experimentales. dos superiores que los tratamientos
el que los injertos óseos promueven la Caffesse y colaboradores compararon convencionales de colgajo de acceso,
regeneración es por su capacidad de el uso de una membrana PTFE-e con y resultados comparables al uso de
mantener el espacio, más que por sus la combinación de esta membrana membranas reabsorbibles. Varios au-
propiedades osteoconductivas (Kim y con un aloinjerto de hueso liofilizado. tores observan una respuesta favorable
cols. 1998; Polimeni y cols. 2004). El patrón de cicatrización y regenera- en cuanto a la reducción del sondaje
Según una revisión realizada por ción fue idéntico para ambos proce- horizontal (Donos y cols. 2003; Jepsen
Bowers, tanto la RTG, es decir, la co- dimientos, se formaron nuevas fibras y cols. 2004; Casarin y cols. 2008; Ca-
locación de una membrana sola, como periodontales insertadas sobre nuevo sarin y cols. 2010), aunque, al igual
la combinación de membrana e injerto cemento y formación de nuevo hueso que sucede con el uso de membranas,
óseo, son las terapias que más tasa de alveolar (Caffesse y cols. 1993). Leko- no muestran un cierre completo de la
éxito tienen en cerrar el defecto en vic y Kenney realizaron un estudio en furcación predecible.
sentido horizontal (Bowers 2003). Re- perros mongrel en los que evaluaban Estos beneficios, obtenidos tanto
fiere que la regeneración tisular guiada el efecto de 4 membranas diferentes en defectos infraóseos como en lesio-
es capaz de rellenar el defecto horizon- junto con gránulos de beta-fosfato nes de furca, han demostrado ser es-
tal en furcas mandibulares de tipo II tricálcico versus un grupo control, en tables a largo plazo, con períodos de
en un 39,13 % ± 20,5 %, mientras que el que se llevó a cabo un colgajo de seguimiento de hasta 10 años (Jepsen
la terapia combinada lo hacía en un acceso. Los cuatro grupos test demos- y cols. 2004; Hoffmann y cols. 2006;
46,36 ± 15,50 %. traron resultados histomorfométricos Sculean y cols. 2006).
En el estudio de McClain y Schall- muy similares en cuanto a formación Los resultados de dos ensayos
horn (McClain y Schallhorn 1993), de nuevo cemento y nuevo hueso, y el clínicos aleatorizados, en los que se

144 Periodoncia y Osteointegración


Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

compara el uso de PDME con el uso

completos
de membranas reabsorbibles para el

Cierres
tratamiento de furcas de clase II man-

3/10

R E V I S I Ó N
2/7
dibulares, refieren mejoras clínicas

25
2

0
0
-
-

-
-

-
-
significativas tras el tratamiento con
PDME. Jepsen observó una reducción

0,13 ± 0,26
2,27 ± 0,18

0,53 ± 0,90

1,60 ± 1,50
1,80 ± 2,11
1,23 ± l,03
de la profundidad de sondaje hori-
zontal de 2,6 ± 1,0 mm con PDME

defecto
vertical
Relleno
frente a una reducción de 1,0 ± 1,41,

3,7
5,2

PTFE-e: membrana de politetrafluoretileno expandido; HA porosa: hidroxiapatita porosa; DFDBA: aloinjerto de hueso desmineralizado desecado y congelado; XB: xenoinjerto de origen bovino.
0-2,8 mm cuando se llevó a cabo la

-
-

-
-
RTG, y obtuvieron un cierre completo

Relleno defecto
de la furcación en 8 de los 45 casos

0,13 ± 0,09
1,60 ± 0,21

1,80 ± 1,26
2,10 ± 1,12

2,47 ± 0,99
3,27 ± 1,39
horizontal
tratados con PDME y 3 de los 45 tra-
tados con RTG (Jepsen y cols. 2004).

2,1
2,1
Meyle observó una menor recesión

-
-

-
-
con PDME y no encontró reabsor-
Cambios clínicos

ción de la cresta ósea en la reentrada


2,40 ± 0,48
2,93 ± 0,64

1,37 ± 0,83
1,83 ± 1,36

1,27 ± 1,44
1,07 ± 1,03
quirúrgica a los 14 meses. Se observó
verticales

1,8 ± 2,5
4,0 ± 1,9
en los casos tratados con PDME una
reducción media de profundidad de

0,1
0,8

1,8
2,4
sondaje a nivel vertical de 3,5 mm a
3 mm, frente a los 3,25 a 3 mm de re-

1,13 ± 1,08
1,70 ± 1,22
horizontales

ducción que se produjo tras la RTG, y


2,0 ± 2,4
4,0 ± 1,6

una ganancia media de nivel de inser-


Cambios
Tabla 4. Comparación de parámetros clínicos en estudios mediante RTG con y sin sustitutos de hueso

clínicos

ción vertical 7,5 a 7 mm, mientras que

2,0
2,3
con RTG la media fue de 7,38 a 7 mm
-
-

-
-

-
-
(Meyle y cols. 2004).

Polylactic acid
Polylactic acid

celulosa + XB
Hoffmann y cols. (2006) determi-
Tratamiento

PTFE-e + HA

10 PTFE-e +

Membrana

Membrana
combinada
57 terapia

naron que en sujetos de mayor edad

+ DFDBA
7 PTFE-e

PTFE-e +

celulosa
19 RTG

DFDBA

DFDBA
porosa
PTFE-e

PTFE-e

(> 54 años) y en sujetos con mal con-


trol de placa, el uso de PDME obtenía
mejores resultados clínicos y estadísti-
cos que la RTG.
En una revisión realizada por
Defecto

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II
Trombelli y Farina (2008), se eviden-
ció que el uso de proteínas derivadas
del esmalte ofrecía beneficios adicio-
nales al compararlo con la cirugía de
14 pacientes

12 pacientes
15 pares de

14 pares de

12 pares de

15 pares de
6 pacientes

acceso en cuanto al sondaje horizontal


Pacientes

76 furcas

17 furcas

y vertical, y en algunos casos al com-


furcas

furcas

furcas

furcas

pararlo con la RTG (Araujo y Lindhe


1998; Donos y cols. 2003), aunque la
mayoría de estudios no demuestran
beneficios al combinar ambas terapias
12 meses
6 meses

6 meses

6 meses

6 meses

(Meyle y cols. 2004; Jepsen y cols.


Tiempo

5 años

2004; Hoffmann y cols. 2006; Chitsazi


y cols. 2007) (tabla 5).
Ensayo clínico

Ensayo clínico

Ensayo clínico

Ensayo clínico

Ensayo clínico

Ensayo clínico

MATRIZ DÉRMICA ACELULAR (MDA)


aleatorizado

aleatorizado

aleatorizado

aleatorizado

aleatorizado

aleatorizado

La matriz dérmica acelular es un mate-


estudio
Tipo de

rial que se obtiene de la piel humana.


Se ha usado en algunos estudios como
membrana para la regeneración ósea
Lekovick y cols.

Wallace y cols.

Luepke y cols.

De Leonardis

Simonpietri-C
y cols. 1999

y cols. 2000

guiada en rebordes edéntulos y asociada


Schallhorn
McClain y

a la colocación inmediata de implan-


Autor

1990

1993

1994

1997

tes, sugiriendo que este material puede


actuar como barrera (Novaes y Souza

Volumen 24, Número 2, 2014 145


Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

completos 2001; Novaes y cols. 2002; Luczyszyn y


cols. 2005; Griffin y cols. 2004).
Cierres

Según la literatura, este material


R E V I S I Ó N

no se coloniza tan significativamente

3
8

0
1
por bacterias periodontopatógenas,

1,04 ± 1,12
0,82 ± 1,82
incluso si se deja totalmente expuesto

0,5 ± 0,9
0,6 ± 1,2
en la cavidad oral, por lo que se sugiere
defecto
vertical
Relleno

que el riesgo de infección disminuye

0,85
1,25
notablemente al compararlo con las
membranas no reabsorbibles y reabsor-
bibles (Novaes y Souza 2001; Novaes

1,00 ± 1,79
1,17 ± 1,38
horizontal

1,9 ± 1,4
2,6 ± 1,8

0,6 ± 1,7
1,0 ± 1,2
y cols. 2002; Luczyszyn y cols. 2005).
defecto
Relleno

En un estudio realizado en furcas


0,8
2,0
mandibulares sobre seis perros mongrel
(De Andrade y cols. 2007) en el que
se comparaba la regeneración tisular
0,39 ± 1,00
0,54 ± 0,95

0,34 ± 0,74
0,85 ± 0,31
2,12 ± 1,07
guiada con membranas de ácido poli-
verticales

1,3 ± 1,8
1,2 ± 1,6

1,0 ± 1,3
Cambios

1,9±1,6
clínicos

glicólico versus la MDA, se obtuvieron


0,25

1,45

resultados similares en cuanto a la re-


0,5

0,9

generación. Sin embargo, se observó


una mayor ganancia de la anchura de
1,21 ± 2,28
1,36 ± 1,26

1,50 ± 0,52
2,10 ± 0,99
horizontales

0,5 ± 0,70
la encía queratinizada con la MDA
0,5 ± 1,1
1,4 ± 1,4

0,7 ± 1,3
1,4 ± 0,9
Cambios

(2,40 versus 1,74). Histológicamente,


clínicos

a los tres meses se hallaron en am-


0,6
1,9

bos grupos nuevas fibras de colágeno


EMD: proteínas derivadas de la matriz del esmalte; GTR: regeneración tisular guiada; OFD: colgajo de acceso; BG: injerto óseo.

orientadas oblicuamente e insertadas


GTR + BG + EMD
EMD (vestibular)

en nuevo cemento celular, y se halló


EMD (lingual)
Tratamiento

hueso principalmente medular y nue-


GTR + BG

vas zonas de formación ósea.


EMD

EMD

EMD

EMD

EMD
GTR

GTR

OFD

OFD

OFD

OFD

PLASMA RICO EN PLAQUETAS


Y FACTORES DE CRECIMIENTO
Tabla 5. Comparación de parámetros clínicos con EMD versus otras terapias

El plasma rico en plaquetas (PRP)


Defecto

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

Furca II

es un producto derivado de la sangre


autógena rico en factores de creci-
miento. Se sugiere que el PRP es el
(8 linguales, 8
mandibulares

complemento ideal para los injertos,


10 pacientes

51 pacientes

48 pacientes

10 pacientes

15 pacientes

12 pacientes

30 pacientes
vestibulares)

12 pares de
Pacientes

ya que compacta y retiene el material


16 furcas

90 furcas

96 furcas

20 furcas

de relleno, siendo además un excelen-


furcas

te osteoconductor y osteoinductor, por


lo que favorece la maduración de los
injertos óseos promoviendo la madura-
ción osteoblástica (Goto y cols. 2006).
36 meses

14 meses

14 meses

24 meses

12 meses
6 meses

6 meses
Tiempo

Una manera de obtener una alta


concentración de factores de creci-
miento es preparando plasma rico en
plaquetas autólogo. Se ha observado
que la aplicación de este plasma eleva
Serie de casos

Ensayo clínico

Ensayo clínico
Ensayo clínico

Ensayo clínico

Ensayo clínico
Ensayo clínico
multicéntrico

multicéntrico
aleatorizado.

aleatorizado.

aleatorizado
aleatorizado

aleatorizado
aleatorizado

la concentración de plaquetas hasta


en un 338 %. Al estudiar los efectos
Estudio

Estudio

Estudio

de la aplicación del plasma en la co-


locación de injertos óseos, se observó
que proporciona una tasa de madura-
Chitsazi 2007

Casarin 2010
Casarin 2008

Jaiswal 2013
Jepsen 2004
Donos 2003

ción del injerto de 1,62 a 2,16 veces


Meyle 2004

más rápida y una mayor densidad ósea,


Autor

74,0 % ± 11 %, frente a 55,1 ± 8 %


(p = 0,005) cuando este plasma no se

146 Periodoncia y Osteointegración


Beatriz de Tapia y cols. Regeneración de las lesiones de furca mandibulares de clase II. Revisión de la literatura

aplicó (Marx y cols. 1998). Con el ob- Recientemente se está estudiando el La combinación de una membrana
jetivo de valorar el efecto aislado del PDGF recombinante humano (rhPD- con un injerto óseo mejora los paráme-
plasma rico en factores de crecimiento GF) y su uso como adjunto en la rege- tros clínicos de ganancia de inserción

R E V I S I Ó N
en regeneraciones de furcas de tipo II neración periodontal. Existen diferentes y ósea vertical y aporta mayor estabili-
mandibulares, Pradeep y cols. (Pradeep estudios que muestran éxito al evaluar dad a largo plazo en la regeneración de
y cols. 2009) llevaron a cabo un estu- su efecto en la regeneración de defec- furcas mandibulares de clase II.
dio en el que concluyeron que, aunque tos infraóseos y furcas (Howell y cols. El uso de EMD aporta resultados
existen beneficios frente al colgajo de 1997). También cuando se combina clínicos similares a la terapia de RTG.
acceso, en ningún caso se observó un con un aloinjerto los resultados son fa- El uso de plasma rico en plaquetas
cierre completo de las furcas de tipo II, vorables en la regeneración de furcas de no aporta beneficios a la terapia cuan-
lo que nos limita el uso de este mate- clase II (Nevins y cols. 2003). Camelo do es usado en solitario. Sin embargo,
rial a la hora de usarlo en solitario para y colaboradores, en un estudio clínico en combinación con una membrana o
procesos regenerativos. e histológico en humanos, evaluaron el con un injerto y una membrana podría
Más recientemente, en el 2012, se efecto de la terapia rhPDGF-BB + DFD- estimular una mayor formación de ce-
ha evaluado el efecto del PRP en un BA en defectos de furca de tipo II. La mento nuevo y proporcionar un hueso
estudio histomorfométrico sobre pe- aplicación de rhPDGF-BB mejoró sus- más mineralizado. Los factores de cre-
rros, llegando a la conclusión de que tancialmente los niveles de inserción cimiento derivados de plaquetas han
el complemento del PRP al RTG e horizontal y vertical, así como disminu- demostrado mejorar los parámetros
injerto de hueso, frente al grupo con- yó la profundidad de sondaje. En este es- clínicos al adjuntarlo a RTG o a un
trol, RTG e injerto de hueso sin PRP, tudio, la histología reveló regeneración aloinjerto.
estimula la formación de una mayor periodontal (Camelo y cols. 2003). Es importante destacar que exis-
cantidad de cemento nuevo y propor- ten muchos factores clínicos y anató-
ciona un hueso más mineralizado en CONCLUSIONES micos que pueden influir en el resul-
las evaluaciones realizadas a los 45 y tado final de la terapia regenerativa
90 días (Suaid y cols. 2012). En furcas mandibulares de clase II la de las furcas mandibulares de clase II,
Últimamente ha aumentado el in- RTG ha demostrado mejorar el nivel y que deben tenerse en cuenta antes
terés por los factores de crecimiento de inserción vertical y horizontal y el de iniciar la cirugía, ya que podrían
derivados de plaquetas (PDGF), me- relleno óseo vertical y horizontal. contraindicarla.
diadores biológicos que tienen el po- Las membranas reabsorbibles ofre-
tencial de regular la proliferación ce- cen resultados clínicos superiores o CONFLICTO DE INTERESES
lular, la quimiotaxis y la diferenciación sin diferencias significativas cuando
celular incluso en pequeña proporción se comparan con las membranas no No se ha recibido apoyo en forma de
(Green y cols. 1997). reabsorbibles. subvenciones, equipos o fármacos.

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Volumen 24, Número 2, 2014 147


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