EJE TAURO - ESCORPIO

NODO NORTE EN TAURO O EN II – NODO SUR EN ESCORPIO O EN VIII

Este eje se vincula a la MATERIA y la ENERGÍA, a diferencia del eje Aries-Libra que se refiere a la
circulación del deseo. En el eje Tauro-Escorpio hay una desinteligencia profunda entre energía y
materia. Aquí el aprendizaje es entender la complementariedad de esta relación.

La persona con este eje nodal tiene una convicción inconsciente de que no puede generar
materialmente y que carece de capacidad generadora. Inconsciente o inconscientemente, se queda
“pegado a otros” para tomar de su energía. De ahí viene la acusación de “mago negro”. En realidad,
el mago negro es un “punguista energético”. Como está seguro de que no genera, debe agarrar de
algún lado. Entonces saca un poco de acá, otro poco de allá porque siente que no tiene potencia
suficiente para generar. Ya sea porque es neptuniano, uraniano, lo que fuera, la sensación es que no
tiene potencia suficiente para generar. Entonces como no genera necesita energía y se fusiona con
otros para hacerlo. Obviamente que así pierde mucha más energía que la que obtiene, pero eso lo
descubrirá luego con el aprendizaje que implica este eje nodal.

El problema acá es esta sensación de falta de potencia generadora y materializadora. Suele haber
temáticas con la materia en general, con la potencia material (recursos, dinero), incluso con la
corporalidad, la sexualidad. Algo no fluye y la potencia se bloquea. También suele haber temas con
el disfrute y el placer pues la persona se enrosca, se conflictúa, se queda pegada porque se fusiona.
Los otros se le quedan pegados porque inconscientemente se fusiona. Se fusiona por esta misma
sensación de no ser generadora.

Generalmente, lo más visible en este eje es que hay PROBLEMAS ECONÓMICOS. No hay dinero
suficiente o el dinero es heredado o es de los otros (del marido, de la familia, etc.), pero la persona
no genera por sí misma. El trabajo aquí consiste en limpiar esa convicción profunda de que uno no
es bueno generando.

En la fase II esta persona va a decir “no es cierto que no genero, yo genero pero lo hago mal, pierdo
más dinero del que gano”. En realidad, la persona no está convencida de que puede generar. En la
primera fase, las personas eligen ser poetas, psíquicos, amas de casa, algo que no tiene nada que
ver con la materia, y por supuesto no les va bien. En la segunda fase, suelen elegir cosas más
materiales pero no les va bien porque aún no están convencidos de que pueden generar. Como si
ganar dinero fuera una obligación. Estar en la materia hay que aceptarlo porque es así, pero no hay
un verdadero disfrute por la materia, por el dinero, por el cuerpo, por estar instalado en la tierra. Por
eso, para estas personas todo lo que tenga que ver con la materia y la tierra es muy importante.
Hacia ese lugar va este eje: a que la persona le guste la materia, disfrute con ella.

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Cuando se empieza a resolver este eje nodal, la persona no se transforma en materialista pero sí en
alguien que ama la naturaleza, el cuerpo, la vida y el dinero forma parte de todo eso.

El grito del alma aunque parezca paradójico es que “puedo generar por mí mismo”. Parece
paradójico porque uno dice, ¿cómo va a ser un grito del alma darse cuenta de que puedo generar?
Se trata aquí de romper una convicción profunda de que no puede hacerlo.

Generalmente hasta la fase II estas personas suelen ser “gasoleras”, le tienen pánico a la pérdida y
suelen desconocer una ley básica del dinero y las finanzas que es la que dice que le entra más
dinero al que lo hace circular más rápido. En un principio, estas personas no quieren gastar “por las
dudas”. Porque tienen una convicción muy inconsciente que dice que “si tienen plata, la tienen que
cuidar por las dudas, hay que cuidar que no se acabe”. Si tuviesen la convicción de que son
generadores, la gastarían porque saben que si la pierden la pueden generar.

El problema es que no están convencidos de que son generadores, entonces ahorran (que en
realidad implica que estancan su energía, no la hacen circular). Esta energía estancada –vinculada
también a la sexualidad - empieza a perderse con lo cual corroboran su falsa teoría de que tendrían
que haber ahorrado más y gastado menos. Acá todo suele cambiar cuando se convencen de que son
grandes generadores, que pueden producir, generar y empiezan a tener placer por hacerlo y así se
convencen que son productores. Pero convencerse de esto no es fácil porque siempre tienden a
achicar. Esto es típico de personas que les gusta trabajar gratis, son muy “desinteresadas” con su
trabajo, gastan horas que nadie les paga para otros. La dificultad es la sensación de potencia, de lo
que se defienden es de la sensación de potencia generadora.

Este eje no empieza a fluir hasta que la persona no se convenza de que es generadora y no valore
su trabajo. El tema es que convencerse de esto implica salirse por completo del esquema que la
persona armó. Es muy común que sean “ángeles caídos” o “mentes perfectas que quedaron
estancadas en este mundo terrenal inferior”, “seres de una lucidez cósmica que quedaron atrapados
en un mundo material”. Hay mitos inconscientes de este tipo en lo profundo, con lo cual no pueden
convencerse fácilmente de que son potencias generadoras: de vida, de abundancia. La persona tiene
que cambiar de “ángel caído a fuerza de la naturaleza”, entrar en sintonía con la tierra y convertirse
en un SER terrestre lleno de potencia y no un gasolero que agarra energía de cualquier lado. El
narcisismo de estas personas es que inconsciente o conscientemente, se sienten “superior a la
materia”. Para ellas, lo material es banal, terrenal.

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Hay una potencia generadora muy grande en ellos que debe florecer. La persona, sin embargo, se
cree que funciona con poco y que así está bien. Es una posición “anti taurina”. Generar, disfrutar,
tener, son todas cosas para otros, no para sí misma, la persona se achica.

Aquí hay un problema con la materia y al principio la potencia de generar es algo oscuro para las
personas con esta dirección del eje. Obviamente que en lo profundo estas personas son muy
generadoras. Cuando el eje se empieza a destrabar son individuos que aportan mucha energía a los
demás. Y cada tanto puede que pierda dinero, energía, pero en esta instancia a la persona ya no le
importa porque tiene convicción de que va a volver a generarla. Aprende que la pérdida forma parte
de la potencia vital. Una persona generadora constantemente experimenta la generosidad: reparte
por abundancia, porque le da placer y también cada tanto pierde. Forma parte del juego.

Antes de llegar a esta instancia, la persona tiene que descubrir cómo el miedo a la pérdida –sobre
todo en el plano económico es muy visible- lo deja desvitalizado y achicado. La única forma de
trabajar este miedo es poniendo el cuerpo y sintiendo la vitalidad de generar. Las personas con este
eje nodal en un principio suelen estar por debajo de su vitalidad por estos mitos de base.

En el eje nodal, hay información sutil y sobre todo hay un desenmascaramiento de trampas que uno
mismo se ha construido. El secreto es revelar cómo la persona plantea mal sus problemas. Como los
plantea mal, no puede encontrar una solución.

Mientras no descubra que el punto de partida del planteo es el incorrecto, el eje no se empieza a
destrabar. El destrabe implica tocar con la potencia y la vitalidad en general, no sólo con el dinero. El
dinero es el síntoma más claro pero no es el único, abarca otros planos esta temática.

Nodo Norte en Tauro, Nodo Sur en Escorpio

- El tema es la inercia.
- Cuesta definir y generar lo propio (y lo de los demás).
- Incorrecto sentido de la “propiedad” de la energía.
- Poca claridad en qué es lo de uno y qué es lo del otro.
- Miedo profundo a la propia capacidad para generar y a la propia potencia.
- Miedo a la apropiación de las cosas.
- La potencia está puesta en absorber energía de otro y en ser absorbido.
- La fantasía es que los recursos sólo vienen compartidos.
- Desconfianza muy grande a materializar por cuenta propia.
- Soy llevado a generar mis propios recursos.

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NODO NORTE EN ESCORPIO O EN VIII – NODO SUR EN TAURO O EN II

En esta otra dirección del eje hay un anhelo de apropiarse de las cosas. Hay un deseo de
apropiación muy fuerte en el inconsciente de la persona con Nodo Sur en Tauro. Es visible un
destino muy claro: cada vez que se quieren apropiar de algo, lo pierden.

En realidad, lo tendrían que compartir para no perderlo, pero la sensación que les da compartir es la
de perder.

El Nodo Norte en Escorpio tiene que ver con aprender a generar energía junto a los otros. Esto
implica aprender a renunciar a tener lo propio. ¿Por qué? Porque lo propio de esta dirección nodal es
lo compartido. Por supuesto, no es sencillo de hacer, pero el destino va a ir en esa dirección. El
destino siempre va en la dirección del Nodo Norte y si esto no se comprende, produce desequilibrio y
sufrimiento, porque uno no entiende por qué está donde está o qué error está cometiendo, donde
está haciendo un movimiento equivocado o recurrente.

La clave de este eje es compartir lo propio para que circule. Hay algo que retiene energía por mucho
miedo a perderla. La persona se quiere apropiar y el misterio que tiene que aprender es el de
compartir energía. Cuanto más comparte energía, más tiene esta persona, pero compartir energía
para esta persona, significa perder energía.

En un primer nivel, es perder dinero o temas con la propiedad, luego también se juega en niveles
más sutiles como la sexualidad, los bienes en común, etc. Es normal que personas con este eje
nodal tengan pérdidas: de herencias y de propiedades que suponían que les correspondían. Si
profundizamos un poco, no es que lo pierden, sino que tienen que compartirlo, pero no quieren. Acá
está el misterio de compartir energía.

En la medida que la persona suelta la necesidad de apropiarse de las cosas y aprende a

compartirlas, lo cual le dará la sensación de que no las tiene como propias nunca, este es el
aprendizaje de Escorpio. ¿Qué es “lo propio” en Escorpio? Es el arquetipo de los bienes gananciales.
¿Qué es lo propio? Lo que se genera juntos. Y la sensación taurina con esto es “juntos ni loco”, esto
“es mío y esto es tuyo". Generar juntos da mucho vértigo. No se entiende qué significa. Esta persona
va a tener que aprender a generar con otros, lo cual implica perder lo propio.

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En la medida que los dos ejes se van soltando, la temática es la misma. Los dos van a aprender a: 1)
generar y compartir; 2) generar y hacer circular; 3) generar y perder. Porque ese es el circuito Tauro-
Escorpio.

Esto pasa en todos los ejes nodales, en la medida que se van destrabando, la problemática es
prácticamente idéntica en las dos direcciones. El arranque, por otra parte, sí es distinto en cada
dirección, porque empiezan al revés. En el caso de este eje (Nodo sur en Escorpio, Nodo Norte en
Tauro) la persona se enfrenta al misterio de que cree que no sabe generar. En el caso del otro eje
(Nodo Sur en Tauro, Nodo Norte en Escorpio), se enfrenta a que no puede apropiarse de lo que
quiere, sino que tiene que compartir y la sensación es de perderlo.

Lo más rico de los ejes nodales es poder desarmar algún razonamiento con que uno justifica la
posición del Nodo Sur. Uno se aferra al Nodo Sur y encuentra justificativos, pero debe encontrar el
problema está mal razonado. Desarmar el planteo del problema es fundamental para que circule la
energía del eje nodal.

En síntesis: en una dirección de este eje nodal, la temática es la confianza en generar (Nodo Norte
en Tauro), en la otra dirección la confianza en compartir, de que compartiendo no se pierde sino que
se multiplica (Nodo Norte en Escorpio). La imagen sería: si antes de comer yo le doy a los demás, en
mi plato aumenta la cantidad de comida, es algo “mágico”, difícil de aceptarlo, pero es así. Estas
personas más tienen cuanto más comparten. Vencer ese miedo a la pérdida y entregarse a compartir
es algo vertiginoso.

El punto de arranque en la otra dirección (Nodo Norte en Tauro), es la creencia de que no voy a
generar, por eso tengo que tomar energía de otros. Trato de vivir de la herencia, agarrarme de algo,
empequeñezco porque temo generar por mí mismo. Una vez que genero ¿Qué va a pasar
automáticamente? Pierdo y comparto. Entro en la lógica del otro lado. Es inevitable en Tauro-
Escorpio perder. No se puede “no perder” en Tauro-Escorpio.

Si uno tiene Escorpio fuerte en la carta natal y no quiere perder, no se puede jugar, es una
constipación psíquica, hay que soltar, que se vaya, y compartir, y vuelve. El ejercicio es “soltar que
vuelve”, cuanto más comparto en este eje nodal, más viene, pero tengo que soltar. Para estas
personas, no es lo mismo cuando retienen que cuando sueltan. Apenas sueltan todo se hace mucho
más fluido.

La carta con este eje nodal está obligada a articularse mucho con otros. Y hay una parte de uno que
no quiere articularse con nadie. Con este eje nodal, es necesario articularte con otros porque si no,
por más que te “guardes comida”, siempre va a ser muy poquito.

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En esta dirección, la vida me lleva a compartir y a disfrutar el compartir, a disfrutar de generar entre
muchos. No importa entre quiénes (sociedades, parejas, lo que sea). La vida los lleva a aceptar la
energía de los otros y a disfrutar profundamente el generar con otros. En ese compartir, la persona
genera mucho más que antes. El punto de partida es la sensación de “que los otros me quitan
energía” entonces la persona se guarda energía y no se vincula profundamente con los demás.

En esta dirección del eje nodal la vida va a pedir que uno se vincule con los otros muy a fondo. Con
los ejes nodales hay que ir profundo porque son temas tejidos muy por debajo y suelen tener mucha
argumentación.

En las dos direcciones, hay algo retentivo, cuesta soltar. Soltar para no compartir, soltar por miedo a
no generar, por miedo a la pérdida. La idea con los ejes nodales es que la persona sigue la inercia
del Nodo Sur, y la vida se achica y pierde potencia. La ampliación en la vida se vincula a soltar el
Nodo Sur. No es que uno no vuelve al Nodo Sur, pero lo hace después de haber pasado por el Nodo
Norte. Por ejemplo “comparto” y tengo, pero si no comparto, tengo menos y pierdo mucho. Así es la
lógica en todas las polaridades. Voy hacia una dirección primero y luego vuelvo a la del punto de
partida pero potenciado.

En el caso de este eje nodal, una vez desatados los dos nudos iniciales, las dos direcciones generan
y comparten y pierden y no les importa porque confían en que van a volver a generar.

Nodo Norte en Escorpio, Nodo Sur en Tauro

- Hay un exagerado sentido de la propiedad: “todo es mío”. Por eso, el destino lleva a “pérdidas”.
- La persona no quiere perder lo suyo. Se apropia todo lo que puede, porque siente que no puede
generar con otros.
- El destino lleva a pérdidas para aprender a compartir y generar con otros.
- Es llevado a perder, para despreocuparse por la pérdida.
- El aprendizaje profundo de que sólo genera menos que con otros.
- Recibe una herencia y la pierde porque debe aprender esto: cuanto más viene, más circula. Cuanto
más circula, más viene.
- Disfrutar el compartir y que circule más energía.