Professional Documents
Culture Documents
Aspectos Generales Del Derecho Penal
Aspectos Generales Del Derecho Penal
LA CONDUCTA DELICTUAL
En primer término, designa aquella parte del ordenamiento jurídico que trata
acerca del delito y de sus consecuencias jurídicas (básicamente la pena); y
que generalmente recibe el nombre de derecho penal objetivo.
En segundo lugar, alude a la facultad que tiene el Estado para crear delitos y
para sancionar a quienes los cometen. Desde este punto de vista, se habla
de derecho penal subjetivo (o de "iuspuniendi").
El nombre más generalizado para referirse a este sector del derecho es,
precisamente, derecho penal. Sin embargo, hay países como los de tradición
anglosajona, en los cuales predomina la expresión derecho criminal. Ambas
denominaciones son igualmente correctas. Sólo se diferencian en que la primera
pone énfasis en la pena y la segunda, en el delito (crimen); es decir, en uno y
otro caso se destaca alguno de los dos objetos principales de nuestro estudio: el
delito y la pena.
El derecho penal consta de dos partes: una parte llamada general, que
trata del delito y de la pena como conceptos generales; y una parte denominada
especial, que trata de cada uno de los delitos que contempla el ordenamiento
jurídico, en particular. Esta distinción, como es obvio, resulta aplicable tanto al
derecho penal objetivo, como a la ciencia del derecho penal. En el plano de la
enseñanza, los dos cursos en que normalmente se divide la asignatura de
derecho penal, corresponden a la parte general, el primero, y a la parte especial,
el segundo.
Las normas que el Código Penal destina a la parte general son aplicables
tanto a los delitos particulares que ese mismo Código contempla, como también a
los delitos tipificados en otros Códigos y en leyes especiales. De manera que
todo aquello que no esté expresamente regulado en esos textos particulares se
rige por las disposiciones generales del Código Penal. Por esto, las normas de
este último reciben el nombre de derecho penal común.
Entre las disciplinas jurídicas, hay tres que se ocupan específicamente del
fenómeno delictual: el derecho penal substantivo, el derecho penal adjetivo y el
derecho penal ejecutivo. Veamos en qué consiste cada una de ellas.
b) La criminología1
La criminología surgió hacia fines del siglo XIX como una disciplina
encargada de examinar el delito y el delincuente desde un punto de vista
biológico y social. De este modo, asumió el estudio de las causas o factores que
inciden en la delincuencia (etiología criminal); y de las formas de prevenir la
criminalidad y de tratar al delincuente. Consistía, en realidad, en un análisis
multidisciplinario que aplicaba la metodología y los conocimientos provenientes
de diversas disciplinas particulares; básicamente de la sociología, la antropología,
la estadística, la biología y la psicología. Así, cada uno de estos ámbitos de
conocimiento daba lugar a lo que solía denominarse "ramas" de la criminología
(sociología criminal, antropología criminal, etc). Esta forma de concebir la
criminología, denominada clásica, parte de la base de que la delincuencia es un
fenómeno patológico, en cuya base hay causas biológicas, psicológicas o
sociales. Por esta razón, estudia el delito como una realidad natural
independiente de aquellas normas. Sin embargo, paradójicamente, analizaba el
delito únicamente a partir de lo que esas mismas normas consideraban como
delictivo.
1 Párrafos extractados de Cobo Del Rosal - Vives Antón: Derecho Penal, pp. 112-116, y Muñoz Conde -
García Arán: Derecho Penal, pp. 180- 183.
atribuir una importancia autónoma, debe extender su interés más allá de los
estrictos límites de las normas jurídico-penales. Por ello en la actualidad la
criminología asume como objeto de estudio no el delito, sino la "conducta
desviada" (aquella que se aparta de lo que es de esperar desde el punto de vista
de una convivencia social armónica), y los "mecanismos de control social" frente
a tales conductas, uno de los cuales (pero no el único, como tendremos ocasión
de ver más adelante) es el propio derecho penal.
Puesto que el derecho penal es una parte del derecho público, sus
relaciones son mucho más próximas con las ramas que integran este sector del
ordenamiento jurídico, que con las ramas del derecho privado.
a) Función de protección2
2 Párrafo extractado de Muñoz Conde - García Arán: Derecho Penal, pp. 53-61
b) Función de motivación.
LA CONDUCTA DELICTUAL
1. La conducta
2. La tipicidad
3. La antijuridicidad
4. La culpabilidad
El artículo 1º del Código Penal define el delito como una acción u omisión
voluntaria penada por la ley. En general se sostiene que existe una concordancia
entre los elementos que expresa esta definición y aquellos que integran el
concepto dogmático de delito.
El primer elemento del delito -la conducta- aparece, desde luego señalado
a través de las expresiones "acción u omisión", que son las dos modalidades que
puede revestir el comportamiento humano que sirve de base al delito.
Por su parte, el artículo 10 del Código Penal, que contempla las eximentes
de responsabilidad, constituye también un reconocimiento legislativo de las
nociones de antijuridicidad y culpabilidad, porque en la medida en que señala que
bajo determinados supuestos queda exento de pena quien incurre en
comportamientos lícitos o inculpables, implícitamente reconoce que la
antijuridicidad (o ilicitud) y la culpabilidad son elementos necesarios para que se
configure el delito.
MODULO II
DERECHO PENAL, TEORIA DEL DELITO Y TIPOLOGIA
DE LA CONDUCTA DELICTUAL
La expresión iter criminis significa camino o curso del delito, y alude al proceso
que lleva a su total consumación.
1. La proposición
Es el acto por el cual la persona que ha resuelto cometer un delito plantea a otro
individuo su ejecución (art. 8º CP.) Obviamente, es algo más que un simple
intercambio de opiniones o el solo hecho de comunicar a otra persona lo que uno
ha resuelto. La proposición sólo es castigada en los delitos contra la seguridad
del Estado.
2. La conspiración
2. Criterio escéptico
Plantea que es imposible encontrar una fórmula para trazar la distinción. Esta
debe quedar entregada al juez de manera discrecional. Difiere del criterio anterior,
en cuanto reconoce la necesidad de efectuar el distingo entre ambas clases de
actos.
3. Criterio subjetivo
Sostiene que debe atenderse al plan del autor. Cuando el sujeto sólo quiere
preparar, pero aún no tiene la voluntad final de ejecutar la conducta, el acto es
preparatorio; si, en cambio, posee tal voluntad final, el acto es ejecutivo. En la
práctica, implica entregar la decisión al propio autor del hecho.
4. Criterio objetivo-pragmático
Plantea que son preparatorios, los actos equívocos, es decir, aquellos que
considerados objetivamente, pueden estar encaminados tanto a la obtención de
un resultado típico, como a una consecuencia jurídicamente irrelevante. Son
ejecutivos, por el contrario, los actos unívocos, es decir, aquellos que sólo pueden
estar orientados a la ejecución de un delito. La decisión debe adoptarse tomando
como referencia el punto de vista de un observador objetivo. Si bien, los
tribunales suelen tomar en consideración este criterio, la doctrina generalmente lo
impugna, en razón de que no ofrece pautas seguras para trazar la distinción: en
muchos casos, un mismo acto es unívoco en relación con un delito, pero es
equívoco respecto de otro.
5. Criterio objetivo-formal
Postula que son actos ejecutivos aquellos que están directamente vinculados con
el núcleo del tipo. Se parte del supuesto de que el principio de ejecución a que
alude el inciso final del artículo 7º CP., es principio de ejecución de la conducta
típica. De modo que el acto que no obstante encontrarse subjetivamente
orientado a la comisión del delito, todavía no realiza la acción descrita por el tipo,
debe ser considerado como preparatorio.
Sostiene que son actos de ejecución aquellos que importan, al menos, un peligro
para el bien jurídico. Se critica esta fórmula, porque importa utilizar un parámetro
relacionado con la antijuridicidad, en circunstancias que la determinación acerca
de si un acto es preparatorio o ejecutivo tiene que ver con la tipicidad.
IV. LA TENTATIVA
Artículo 7º, inciso 3º, CP.: "Hay tentativa cuando el culpable da principio a la
ejecución del crimen o simple delito por hechos directos, pero faltan uno o más
para su complemento".
b) Que los actos ejecutados sean directos. Esta exigencia supone dos cosas:
que los hechos estén encaminados a la consumación del delito y que sean aptos
o idóneos para lograrlo.
c) Que falten otros actos para la consumación del delito, de modo que tadavía
no pueda estimarse completa la ejecución de la conducta o de todas las
conductas que el tipo exige. En caso que la conducta sea una sola, esta
exigencia supone que ella sea fragmentable. En otras palabras, sólo admiten
tentativa las conductas susceptibles de fragmentación.
V. EL DELITO FRUSTRADO
Artículo 7º, inciso 2º, CP.: "Hay crimen o simple delito frustrado cuando el
delincuente pone de su parte todo lo necesario para que el crimen o simple delito
se consume y esto no se verifica por causas independientes de su voluntad."
Como esta disposición exige que el delicuente haya hecho todo lo que el tipo
respectivo exige de su parte, será necesario que aquél haya realizado la
conducta o las conductas exigidas. En consecuencia, desde el punto de vista de
la acción, no hay diferencias entre un delito frustrado y uno consumado.
c) Debe ser definitivo, lo cual quiere decir que el sujeto debe haber desechado
su plan. No hay un abandono efectivo si aquél decide posponer la ejecución
para otra oportunidad (aunque hay quienes sostienen una posición diversa).
2. El arrepentimiento
De aceptarse los criterios reseñados bajo las letras b) y c), no es posible justificar
la diferenciación entre tentativa y delito frustrado, porque en ambas figuras se da
la expresión de una voluntad de rebeldía, la cual no admite medición en términos
de mayor o menor intensidad.
Sin embargo, puesto que el derecho nacional conserva el distingo entre tentativa
y delito frustrado, sólo cabe concluir que en Chile el castigo de estas figuras se
funda en un criterio objetivo, es decir, aquel que considera el riesgo
experimentado por el bien jurídico.
VIII. LA TENTATIVA INIDONEA
a) La inexistencia del bien jurídico que se pretende lesionar (por ejemplo, disparo
sobre el cuerpo de una persona muerta).
c) La falta de eficacia de los medios utilizados para lesionar el bien jurídico (tomo
un revólver y disparo en contra de la víctima, pero el arma está descargada).
Una primera posición sostiene que debe castigarse toda tentativa, tanto la
idónea como la inidónea, porque en ambos casos hay manifestación de una
voluntad de rebeldía en contra del ordenamiento jurídico. Esta corriente de
opinión se basa en los siguientes argumentos:
El tema de la tentativa inidónea está muy relacionado con las figuras que la
doctrina denomina delito putativo y delito imposible.
a) El delito putativo es un delito que sólo existe en la imaginación de un
individuo. El sujeto que actúa conoce todos los elementos del tipo, pero
está equivocado acerca de ilicitud de la conducta ejecutada: cree realizar
algo ilícito, cuando en realidad es lícito (error de prohibición al revés).
b) El delito imposible es otra denominación para designar lo que
anteriormente llamamos tentativa absolutamente inidónea. El sujeto, en
este caso, se equivoca respecto de un elemento del tipo, creyendo que
concurre, cuando en realidad no es así (error de tipo al revés).
LA CONDUCTA DELICTUAL
“Autoría y Participación”
AUTORIA Y PARTICIPACION
I. INTRODUCCION
Pero eso no es todo, pues además resulta necesario ponderar las diversas
aportaciones al delito conjunto, estableciendo alguna diferenciación en cuanto a
su gravedad, porque no parece que al mero colaborador en el delito se le deba
castigar con una pena igual a la que se impone a quien realiza por sí mismo la
acción delictiva. Tal diferenciación se concreta en las categorías de autor y
partícipe, empleadas universalmente, y que será preciso deslindar.
Si bien desde un punto de vista puramente causal cabría afirmar que toda
intervención en el delito aporta un elemento en la cadena de hechos que llevan a
su realización, lo cierto es que, como hemos advertido, es preciso distinguir entre
aportaciones más o menos importantes del hecho, con el fin de asignar una pena
proporcional a cada modo de intervención. Tal distinción da origen a las
categorías de autoría y participación.
Pero para trazar la línea divisoria entre una y otra clase de intervención y
aportación al hecho, es necesario fijar un criterio que permita discernir entre
ambas. Entre las diversas posiciones doctrinales sobre este punto, cabe citar las
siguientes:
2. Criterio subjetivo
1. Formas de autoría
Tiene el dominio directo del hecho quien realiza por sí mismo la conducta
delictiva. Este supuesto incluye el de quien, mediante fuerza física, utiliza como
mero objeto a un tercero para obtener la realización del delito. La autoría
directa aparece descrita en cada tipo penal, de modo que no constituye un
supuesto problemático.
b) Dominio indirecto del hecho
El dominio indirecto del hecho se da cuando alguien posee tal dominio por
la influencia que ejerce sobre la voluntad de un tercero. En este caso, el sujeto
es capaz de determinar la realización del hecho delictivo, utilizando como
instrumento suyo a otro individuo, que actúa sin dolo o sin culpabilidad, y cuya
voluntad puede, por tanto, manejar. Esta situación recibe el nombre autoría
mediata.
Esta relación de dominio requiere una total pérdida de autonomía por parte
de la persona instrumentalizada. Por eso, en estos casos hay un solo
interviniente punible (el autor mediato), ya que, por definición, el instrumento ha
de encontrarse en alguna de las siguientes situaciones que excluyen a su
respecto el delito: error de tipo, inimputabilidad, error de prohibición o
inexigibilidad. Por ejemplo, quien se vale de un niño para cometer un delito, o el
médico que engaña a la enfermera haciéndole creer que lo que inyecta al
paciente es insulina en lugar de glucosa, o quien amenaza de muerte al cajero
para que le entregue el dinero del banco, son autores mediatos, pues se valen de
un sujeto que actúa sin dolo o sin culpabilidad, y que, por lo tanto, no incurre en
delito. Este punto marca una diferencia esencial entre la autoría mediata y la
instigación.
En este caso, se trata de un dominio compartido por todos los sujetos que
ostentan a un mismo tiempo el dominio sobre la ejecución del hecho, quienes se
han dividido la realización del delito. Este dominio compartido da lugar a la
coautoría.
1. Formas de participación
a) La instigación
b) La complicidad
Además, para ser tal, esta colaboración debe ser anterior o simultánea a la
ejecución del delito, pues una vez que éste ha sido consumado ya no es posible
colaborar ni participar en él. En realidad, tanto la autoría como la participación,
en cualquiera de sus formas, suponen un aporte a la producción del hecho
común, de modo que ni la una ni la otra pueden tener lugar una vez consumado
éste. De ahí que el encubrimiento, que por esencia es posterior a la
consumación, no pueda ser entendido como una forma de participación en el
delito, a la manera como lo concibe nuestro Código, sino que deba ser enfocado
como un delito autónomo contra la administración de justicia.
a) El principio de accesoriedad
Por una parte, entonces, el principio implica que el castigo del cómplice o
del instigador dependerá de que el o los autores lleguen a dar comienzo a la
ejecución del delito. No es necesario que el hecho alcance la consumación, pero
sí se requiere como mínimo que haya alcanzado la fase de tentativa. Pero,
además, el referido principio expresa una exigencia relativa a la calidad jurídica
del hecho principal. Pues, obviamente, si el acto principal ejecutado es irrelevante
desde el punto de vista penal, no podrá haber castigo para quienes colaboraron a
él.
- También es revelador el hecho que los arts. 72 y 456 bis contemplan como
circunstancia de agravación el actuar con personas inculpables; en el
primer caso, por tratarse de menores de edad, y en el segundo, por
tratarse de sujetos exentos de responsabilidad penal en conformidad al
Nº1 del art.10 del C. Penal. En ambos supuestos, el autor del hecho podría
ser el individuo inculpable, obrando el otro como mero partícipe, lo que
demuestra que puede castigarse a este último sin necesidad de que el
autor actúe con culpabilidad.
b) El principio de convergencia
La dificultad que se plantea en este punto viene dada por los llamados
excesos delictivos, es decir, aquellas desviaciones del plan delictivo que se
traducen en la ejecución por parte de los autores de un delito más grave o de
otros delitos asociados con el que había sido objeto de acuerdo. Al respecto, la
doctrina propone distinguir según si la desviación es esencial o no. Si la
divergencia no es esencial, sea ésta cualitativa, como cuando se planea un hurto,
pero el autor comete un robo con fuerza en las cosas, o bien sea meramente
cuantitativa, como cuando se acuerda un delito de lesiones menos graves, pero
resultan lesiones de mayor entidad, el hecho más grave ejecutado por el autor
será imputable al partícipe, pues podrá entenderse comprendido en su dolo.
V. LA AUTORIA EN EL CODIGO PENAL CHILENO
En concordancia con lo expuesto por autores como Labatut, Novoa y Cury, la casi
totalidad de la jurisprudencia nacional es partidaria de una interpretación que
podemos denominar extensiva del artículo 15.
De este modo, todo aquel que, mediando un acuerdo con los demás
autores, proporcione uno de los medios empleados para cometerlo, o
simplemente lo presencie, tendría que ser considerado autor, de conformidad con
este precepto.
VII. EL ENCUBRIMIENTO
2. La solución mayoritaria
Sobre esta base, la posición mayoritaria distingue entre delitos especiales propios
e impropios:
3. Otras soluciones
LA CONDUCTA DELICTUAL
“Concurso de Delitos”
CONCURSO DE DELITOS
Sin adentrarnos en las distintas teorías intentadas para establecer cuándo existe
unidad y cuándo pluralidad de hechos o acciones, indiquemos únicamente que, para
BUSTOS, debe atenderse a lo que le da sentido y significación al hecho, la acción o la
omisión, que se configura desde un punto de vista psicológico-valorativo. Visto así, el
ámbito situacional que recoge el tipo penal, independientemente de que esté
compuesto de una o varias acciones u omisiones, o bien de la combinación de una(s)
y otra(s), debe implicar un sólo momento de resolución ejecutiva del sujeto contra el
ordenamiento jurídico, sin que entren en consideración las normas infringidas ni los
resultados producidos.
Según GARRIDO MONTT, existe concurso real de delitos "cuando un mismo sujeto ha
realizado dos o más acciones que constituyen, a su vez, uno o más delitos
independientes no conectados entre sí y sin que en relación a ninguno de ellos se
haya dictado sentencia condenatoria".
ARTICULO 74.- Al culpable de dos o más delitos se le impondrán todas las penas
correspondientes a las diversas infracciones.
Art. 351. Reiteración de crímenes o simples delitos de una misma especie. En los
casos de reiteración de crímenes o simples delitos de una misma especie se impondrá
la pena correspondiente a las diversas infracciones, estimadas como un solo delito,
aumentándola en uno o dos grados.
Si, por la naturaleza de las diversas infracciones, éstas no pudieren estimarse como
un solo delito, el tribunal aplicará la pena señalada a aquella que, considerada
aisladamente, con las circunstancias del caso, tuviere asignada una pena mayor,
aumentándola en uno o dos grados, según fuere el número de los delitos.
Podrá, con todo, aplicarse las penas en la forma establecida en el artículo 74 del
Código Penal si, de seguirse este procedimiento, hubiere de corresponder al
condenado una pena menor.
Para los efectos de este artículo, se considerará delitos de una misma especie
aquellos que afectaren al mismo bien jurídico.
c) Absorción de la Pena. Cuando uno de los delitos ha sido el medio necesario para
cometer el otro. Se impone la pena mayor asignada al delito más grave. Este concurso
real recibe el nombre de concurso medial. Para un sector importante de la doctrina,
este concurso no es real, sino que un concurso ideal impropio, ya que recibe el mismo
tratamiento punitivo del concurso ideal. La norma aplicable es la segunda parte del
inciso primero del artículo 75 del Código Penal.
Por el contrario, el concurso ideal será heterogéneo, "cuando con un solo hecho se
satisfacen las exigencias de distintos tipos penales, como, por ejemplo, si para yacer
con ella se violenta a una hermana casada", en cuyo caso estaremos en presencia de
los delitos de violación e incesto.
En estos casos sólo se impondrá la pena mayor asignada al delito más grave.
Existe doctrina y jurisprudencia pacífica en orden a considerar que el delito más grave
es el que tiene la pena más elevada.
Si bien no por los mismos fundamentos, la doctrina coincide en que el objetivo del
artículo 75 del Código Penal, es dar al concurso ideal un tratamiento más benigno que
el dado al concurso real.
Sin embargo, aun cuando fue esta la finalidad del legislador, es posible en muchos
casos que el tratamiento punitivo dado al concurso ideal resulte bastante más gravoso
que la mera acumulación material de penas del concurso real.
Así por ejemplo, si entran en concurso dos delitos, uno penado con presidio mayor en
su grado mínimo a medio y el otro sancionado únicamente con presidio menor en su
grado mínimo, en aplicación de la absorción jurídica del artículo 75 del Código Penal,
el Tribunal debiera sancionar únicamente con presidio mayor en su grado medio, esto
es, de 10 años y 1 día a 15años. En cambio, la acumulación material de penas
prevista para el concurso real, permitiría al tribunal condenar a 5 años y 1 día, más 61
días, es decir, 5 años y 62 días.
Destaquemos que la doctrina propone esta solución aun en ausencia de texto legal
explícito, pues en este caso no existe el reenvío del artículo 351del Código Procesal
Penal al artículo 74 del Código Penal. Se trataría entonces de una aplicación por
analogía en beneficio del imputado.
Sin embargo, bien lo dice ETCHEBERRY, la mayor dificultad reside es distinguir entre
un concurso ideal y un concurso aparente de leyes penales, pues, "el cada vez más
fino análisis de los tipos penales y sus relaciones entre sí ha ido reduciendo la
importancia práctica del concurso ideal, ya que gran parte de las situaciones que en
otro tiempo solían ser tratadas como tal han resultado ser concursos aparentes de
leyes".
La doctrina suele mencionar cuatro principios interpretativos, de los cuales dos son los
relevantes, siendo los demás derivaciones de aquellos.
No se castiga la tentativa de robo y luego el robo consumado por separado, sino sólo
el robo consumado. Ej. No se castiga separadamente violación de domicilio, daño y
hurto, sino que se castiga el robo en lugar habitado, pues este tipo penal consume
todas las otras figuras ya consideradas en él.
LA CONDUCTA DELICTUAL
Características
Se dice que las circunstancias modificatorias aparecen definidas por tres rasgos
fundamentales: el de ser ocasionales o extraordinarias; el de ser accidentales y el de ser
accesorias o secundarias.
El carácter ocasional o extraordinario de esta clase de elementos deriva del hecho de que
ellos pueden o no concurrir en cada caso concreto, de suerte que si tal cosa no sucede, la
responsabilidad que deriva de la comisión del delito no se ve afectada o alterada en cuanto a su
magnitud o intensidad.
El carácter accidental, por su parte, implica que tales circunstancias no son constitutivas
de lo injusto del hecho, ni de la culpabilidad del individuo, sino que están dirigidas a una mejor
consideración de la intensidad de las valoraciones que componen lo injusto o que determinan la
responsabilidad.
Finalmente, el carácter accesorio o secundario deriva de que ellas presuponen un tipo
penal que ha de servirles de base y cuya configuración no se ve afectada por la concurrencia de
alguna de estas circunstancias.
Criterios de clasificación
El principal esquema de clasificación es aquel que atiende a los efectos que dichas
circunstancias producen sobre la pena. En este sentido, se acostumbra a distinguir entre
circunstancias atenuantes, agravantes y mixtas, según aumenten o disminuyan la intensidad de
la reacción sancionatoria; reservándose la última denominación para aquellas figuras que
producen, alternativamente, uno y otro efecto, dependiendo de la naturaleza del delito al cual
acceden.
Atendiendo al momento en que ocurre el hecho o situación que sirve de base a las
circunstancias, estas suelen clasificarse en antecedentes, concomitantes y consiguientes, según si
aquél tiene lugar antes de la ejecución de la conducta típica, con ocasión de ésta o bien con
posterioridad a la misma.
Incomunicabilidad de las circunstancias personales
1. La alevosía
ART. 12 Nº 1: Cometer el delito contra las personas con alevosía, entendiéndose que la hay cuando
se obra a traición o sobre seguro.
El precepto legal utiliza dos expresiones -actuar a traición y sobre seguro- que giran en torno a la
misma idea: la de facilitar la ejecución de hecho, a través del estado de indefensión de la víctima.
Obra a traición, quien oculta o disimula sus propósitos frente a la persona ofendida; obra sobre
seguro, quien aprovecha determinadas circunstancias materiales que favorecen el éxito de la
empresa criminal en desmedro de las posibilidades defensivas de la víctima. La traición y el obrar
sobre seguro son conceptos perfectamente conciliables entre sí, no sólo en razón del efecto de
indefensión que ambos suponen, sino porque en muchos casos pueden coincidir en la ejecución
de un mismo hecho delictivo.
Lo que realmente interesa, en cambio, es determinar si los medios utilizados para la
ejecución del hecho importaron o no un estado de indefensión para la víctima, requisito que suele
hacerse consistir en la imposibilidad de que ella misma o un tercero pueda emprender una
reacción defensiva en contra del agresor. Tal estado de indefensión, obviamente, en la mayor
parte de los casos implica menos riesgo para el agresor, sin embargo esto último, en tanto que
consecuencia de aquello -y no siendo expresamente exigido en el texto de la ley- no debiera ser
considerado un elemento concluyente acerca de la existencia de alevosía.
Art. 12 Nº 5, segunda parte: En los delitos contra las personas,...emplear astucia, fraude o
disfraz.
Art. 12 Nº6: Abusar el delincuente de la superioridad de su sexo, de sus fuerzas o de las armas,
en términos que el ofendido no pudiera defenderse con probabilidades de repeler la ofensa.
Art. 12 Nº11: Ejecutarlo con auxilio de gente armada o de personas que aseguren o
proporcionen la impunidad.
2. Precio, recompensa o promesa
Es ésta una circunstancia que, al igual que las anteriores, se funda en el desvalor que representa el
empleo de un medio específico de comisión. Sin embargo, a diferencia de éstas, la agravante que
ahora nos ocupa no considera la incidencia de tales medios en la indefensión de la víctima, sino en
las mayores posibilidades de éxito que van implícitas en el uso de dicho medio.
El problema que, sin lugar a dudas, ha suscitado la polémica más ardua es el de si esta
circunstancia surte efecto agravatorio tanto respecto de quien entrega o promete una
compensación, como de quien la recibe; o si, por el contrario únicamente afecta al segundo.
b) Que el sentido que corresponde atribuir al termino mediante es en razón de, o bien en atención
a, porque de entendérselo como sinónimo de por medio de, si bien quedaría incluido quien paga
la compensación, implicaría excluir al ejecutor material, que sería precisamente la persona a
quien indudablemente está dirigida la agravante.
c) Que la motivación reprobable -esto es, la codicia- sólo se da en quien recibe la recompensa,
siendo perfectamente posible que quien la da u ofrece, aparezca impulsado por un motivo
honorable.
El aplicarla respecto del primero, en modo alguno importa vulnerar el principio non bis
ídem, porque el fundamento de su castigo a título de instigador radica en el poder corruptor que
ejerce respecto de otra persona y el de la agravación de su responsabilidad, en cambio, en el
empleo de un medio específico; De ahí, que pueda aplicarse la agravante respecto de él aunque
su responsabilidad se base en un título, de autoría o participación, diverso al de instigación.
El vocablo mediante, por su parte, y al margen de sus connotaciones semánticas o
etimológicas, ha de ser entendido según la forma como en Chile más corrientemente se lo utiliza
en el lenguaje cotidiano, es decir, como una exigencia de que haya mediado un determinado
elemento a propósito de la verificación de un acontecimiento. Y nadie podría discutir que en un
delito realizado en las circunstancias exigidas por la norma, el precio o la oferta han mediado
tanto para quien la da como para quien la recibe.
Finalmente, no debemos olvidar que la circunstancia que nos ocupa consiste en cometer
el delito en una forma determinada, y más precisamente, utilizando el pago de una recompensa
como medio de ejecución, lo cual deja en evidencia, no sólo que las motivaciones carecen de
trascendencia como fundamento, si también que el principal destinario de la norma es,
precisamente, quien realiza el pago o formula la oferta.
3. Ensañamiento
Art. 12 Nº 4: Aumentar deliberadamente el mal del delito causando otros males innecesarios para
su ejecución.
Al describir la figura de homicidio calificado, el artículo 391 Nº 1, circunstancia cuarta, exige que el
delincuente actúe "aumentando deliberada e inhumanamente el dolor al ofendido". Es común
que la doctrina y, en mayor medida aún, la jurisprudencia, hagan extensivas tales exigencias a la
agravante que ahora nos ocupa. Es cierto que un aumento del dolor de la víctima
indudablemente puede ser considerado un mal innecesario para la ejecución del delito, en los
términos del artículo 12 Nº 4, pero en modo alguno ha de estimarse que esta disposición requiere
que se cause efectivamente un dolor a la víctima. El texto de la disposición, en efecto, no se
refiere a ella, sino al mal del delito, expresión que indudablemente alude al resultado del hecho
delictivo y en modo alguno se vincula con los sentimientos que pueda despertar su causación. De
ahí que nos parezca injustificada la exigencia que algunos formulan en orden a que la víctima
necesariamente ha de percatarse del mal. Por la misma razón, nos parece erróneo el
planteamiento de que, tratándose de un homicidio -y pensando, por cierto, en la aplicación de la
agravante que ahora nos ocupa-, la causación de males innecesarios ha de tener lugar antes de la
muerte de la víctima.
Por cierto que si la causación de males innecesarios para la ejecución del hecho delictivo
da lugar a la configuración de un delito específico, éste deberá penarse de acuerdo con la relación
concursal que específicamente se dé, y en tal caso resulta improcedente aplicar la agravante que
ahora nos ocupa. Desde el punto de vista subjetivo, el empleo de la expresión deliberadamente ha
de ser interpretado como una exigencia de dolo directo, en el sentido de que el autor debe haber
tenido entre sus propósitos la mayor intensidad del resultado obtenido. No incluye, sin embargo,
ninguna exigencia adicional, como podría ser la de algún ánimo o motivación específicos.
De conformidad con lo que hasta aquí hemos expresado, queda de manifiesto que la
relación existente entre la agravante del artículo 12 Nº 4 y la calificante contemplada en el artículo
391 Nº 1, es de género a especie. De ahí que si bien no procede la aplicación conjunta de ambas
figuras frente a un mismo hecho delictivo, es perfectamente posible aplicar la primera respecto
de un homicidio en el cual, si bien no hubo un aumento deliberado e inhumano del dolor del
ofendido, sí haya existido, por ejemplo, la causación de males innecesarios para la obtención de la
muerte.
4. Premeditación
Art. 12 Nº 5, primera parte: En los delitos contra las personas, obrar con premeditación conocida...
Generalmente se plantea que correspondería exactamente a lo que la ciencia penal entiende por
dolo directo, y, por esto mismo, algunos han llegado a sostener que la agravante simplemente
carece de fundamento.
c) criterio psicológico, atiende a la actitud anímica que ha revelado el sujeto durante el período
que media entre el momento en que se adopta la resolución de delinquir y aquel en que
comienza efectivamente su ejecución, y que generalmente se identifica con una actitud de
frialdad y tranquilidad; y
En cuanto a la exigencia de que la premeditación sea conocida, que muchos consideran inútil o
superflua, para algunos tiene la virtud de excluir la posibilidad de que aquélla se pruebe
exclusivamente sobre la base de presunciones y para otros, tiene el efecto de subrayar que la
premeditación no puede deducirse del simple transcurso de un lapso entre el momento de la
ideación y el de la comisión efectiva del delito.
5. Reincidencia
a) Reincidencia impropia:
Art. 12 Nº 14: Cometer el delito mientras cumple una condena o después de haberla quebrantado
y dentro del plazo en que puede ser castigado por el quebrantamiento.
Respecto de la segunda hipótesis, suele afirmarse que esta circunstancia no podrá surtir su efecto
agravatorio, pues el quebrantamiento de condena constituye en sí mismo un delito, sancionado
con una pena específica, que se agrega a la pena del delito por el cual se cumplía la condena, o
siendo más grave, se sustituye a ella; todo lo anterior en virtud del artículo 63 del Código Penal.
b) Reincidencia genérica
Art. 12 Nº 15: Haber sido castigado el culpable anteriormente por delitos a que la ley señale igual
o mayor pena.
Acerca de la forma en que debe determinarse cuándo un delito es merecedor de igual o mayor
pena, la doctrina de modo uniforme considera que para estos efectos la severidad de los hechos
punibles se enjuicia en abstracto, es decir, atendiendo a la pena con que los amenaza la ley, no a
la que en concreto se impuso en la sentencia
Respecto de si es necesario que el sujeto haya cumplido la sentencia anterior, es preciso
recurrir al texto del artículo 92 CP., el cual despeja cualquier posibilidad de duda, al declarar que la
reincidencia se perfecciona después de haber cumplido el delincuente una condena.
c) Reincidencia específica:
Prescripción de la reincidencia:
Art. 104: Las circunstancias agravantes comprendidas en los números 15 y 16 del artículo 12 no se
tomarán en cuenta tratándose de crímenes, después de diez años, a contar desde la fecha en que
tuvo lugar el hecho, ni después de cinco, en los casos de simples delitos.
De la simple lectura de este precepto se desprende que la ley ha establecido plazo para la
cesación del efecto agravatorio de la reincidencia, únicamente respecto de las circunstancias
previstas en los números 15 y 16 del artículo 12 del Código Penal, y en tales casos, únicamente
respecto de los crímenes y simples delitos, no así respecto de las faltas.
Otras agravantes
Ignominia Art. 12 Nº 9
1. Eximentes incompletas
Para los efectos de determinar qué eximentes de las enumeradas en el artículo 10 son
susceptibles de transformarse en atenuante, la doctrina tradicionalmente acude al criterio
formulado por Pacheco, quien distingue tres clases de eximentes: a) las que consisten en un solo
hecho material; b) las que consisten en un hecho intelectualmente divisible, y c) las que constan
de varios requisitos por disposición expresa de la ley.
La jurisprudencia chilena en un principio se inclinó por aceptar sólo aquellas que tenían
requisitos enumerados en la ley. Apoya este criterio el pensamiento de los miembros de la
Comisión Redactora, quienes en el acta de la sesión séptima, dejaron constancia de su parecer en
tal sentido. Sin embargo, actualmente la jurisprudencia acepta y aplica de modo uniforme el
criterio contrario, el cual es compartido por la generalidad de la doctrina, que hace aplicable la
disposición del artículo 11 Nº 1 a las eximentes de locura o demencia, al trastorno mental
transitorio, al miedo insuperable, a la fuerza moral irresistible, al ejercicio legítimo de un derecho,
al cumplimiento de un deber, a la omisión por causa insuperable o legítima y a la obediencia
debida.
El principal campo de aplicación de esta categoría de eximentes anómalas es la
enajenación incompleta o privación parcial de razón. Con el avance de la psiquiatría se ha podido
demostrar que existen varios grados intermedios entre la locura y la salud mental. Respecto de la
embriaguez alcohólica, en España se contempla una atenuante (art. 9 Nº 2) referida a la
embriaguez no habitual, siempre que no se haya producido con propósito de delinquir. Nuestro
Código no contiene una circunstancia semejante, por lo que hay que ver si ésta cabe dentro de la
eximente incompleta referida al trastorno mental transitorio. Si bien no hay duda de que queda
comprendida la que es involuntaria, en el resto de los casos Cury y Novoa se pronuncian por la
negativa de aceptarla como eximente incompleta, porque la ley alude expresamente a que ha de
serlo por causa independiente de la voluntad del hechor, por lo que no es aceptable la embriaguez
culposa o intencional. Las mismas soluciones se han adoptado respecto del consumo de drogas.
En relación con los efectos que produce la concurrencia de una eximente incompleta es
preciso distinguir, de conformidad con lo que dispone el art. 73, dos situaciones:
a) si concurre la mayor parte de los requisitos (dos de tres, tres de cuatro) el tribunal puede
rebajar la pena en uno, dos o tres grados, respecto del mínimo señalado en la ley. En este caso la
doctrina suele hablar de atenuante privilegiada, porque sus efectos son más intensos que los del
común de las atenuantes;
b) si no se da esa situación, la eximente incompleta produce los efectos normales previstos para
las atenuantes, y en tal virtud, por regla general, no implican rebaja de grado de la pena.
a) Provocación o amenaza
Art. 11 Nº 5: La de obrar por estímulos tan poderosos que naturalmente hayan producido arrebato
y obcecación.
3. Otras atenuantes
Entre las varias dificultades que ofrece esta circunstancia, es preciso analizar, en primer
término, la de si es obligatorio para el tribunal conceder al parentesco el efecto de atenuante o
agravante, o si por el contrario, aquél está facultado para prescindir de este antecedente en un
caso concreto, absteniéndose de otorgarle cualquier efecto en tal sentido
Por lo pronto del simple examen de los términos en que aparece redactada la disposición,
se desprende que la circunstancia allí consignada sólo puede ser referida a aquellos delitos que
afecten a una persona natural, a través de la lesión o puesta en peligro de un bien jurídico de su
pertenencia, o bien aunque no tenga la titularidad de dicho bien, cuando el agravio proviene de la
propia ejecución de la conducta delictiva.
Tanto en razón de la naturaleza como de los accidentes del delito, es factible que el
tribunal decida no conceder al parentesco efecto atenuatorio ni agravatorio. Así, por lo demás, lo
ha entendido con mucha prudencia la Corte Suprema, porque si puede tener ambos sentidos, es
lógico que en algún caso las razones que los determinan se compensen y equilibren, con lo cual el
parentesco podrá no ser estimado ni para aumentar ni para disminuir la responsabilidad, como
expresamente lo ha reconocido el tribunal supremo español.
En lo que dice relación ahora, específicamente con la naturaleza del delito, existe una
tendencia generalizada por afirmar que en los delitos contra el honor y contra la libertad, el
parentesco no opera ni como agravante ni como atenuante.
En relación con los accidentes del delito existe en la doctrina española una tendencia por
afirmar que la circunstancia no es procedente cuando el parentesco no posee una real
significación o no es motivo dotado de la suficiente intensidad y aunque se trate de delitos en los
cuales en otras ocasiones se estime la circunstancia. Este planteamiento incluso ha encontrado
acogida en la jurisprudencia del Tribunal Supremo de España.
Algunos estiman que la circunstancia opera como agravante cuando el agravio lo infiere
un inferior a un superior y como atenuante cuando es al revés.
MODULO II
DERECHO PENAL, TEORIA DEL DELITO Y TIPOLOGIA DE
LA CONDUCTA DELICTUAL
I. EXPLICACION GENERAL
1. La escuela clásica
2. La escuela positiva
"El espectacular progreso de las ciencias naturales a lo largo del siglo XIX
–y en oposición al racionalismo hasta entonces imperante– determinó una
profunda transformación del método científico. Se afirmó, en consecuencia, la
supremacía de la experimentación, en la inteligencia de que sólo sobre el hecho
comprobado era posible la elaboración de un saber científico. Tal corriente de
pensamiento inundó todos los sectores de la investigación, con la intención de
otorgar fundamentos positivos a toda ciencia. Por obra de la escuela positiva, se
hace sentir el impacto del positivismo metodológico en el campo del derecho
penal".
A partir de la década de los años treinta del siglo XX, la actitud dogmática
ha tenido absoluta primacía en nuestro medio cultural (hasta el punto que la
expresión "dogmática penal" se utiliza hoy como sinónimo de "ciencia del derecho
penal") y ha permitido un desarrollo científico de la disciplina, especialmente en lo
que concierne a la teoría del delito, que no tiene equivalente en ninguna otra
rama del derecho. A diferencia de lo que ocurrió en el período llamado de las
escuelas penales, en que se advierte un marcado predominio de la doctrina
italiana, en la etapa que ahora nos ocupa el liderazgo ha correspondido,
indiscutiblemente, a la doctrina alemana.
1. El sistema clásico
La acción sigue siendo concebida en términos muy similares a los del sistema
anterior. Es decir, como un movimiento corporal voluntario; y el contenido de
la voluntad es materia que ha de examinarse a nivel de la culpabilidad. Sin
embargo, respecto de la omisión se introduce un componente de orden
normativo, pues se la concibe como dejar de hacer una acción debida o
esperada. Como la omisión no encuadra dentro de la idea de movimiento
corporal, los partidarios del sistema causalista prefieren denominar "conducta"
a este primer elemento del delito. Tal denominación es lo suficientemente
amplia como para cubrir la acción (entendida en términos naturales) y la
omisión (entendida en un sentido normativo).
Esta concepción parte de la base de que todo acto humano, por el solo
hecho de ser tal, tiene un componente externo materializado en un movimiento
corporal y un componente interno que se traduce en la finalidad (o voluntad final)
que preside y orienta todo comportamiento del hombre. De manera que si el
delito es un acto humano, no puede la teoría pasar por alto (o falsear) esta
realidad, la cual se impone frente a cualquier propósito de sistematización de la
estructura del hecho delictivo.
4. El post-finalismo
b) El dolo y la culpa siguen formando parte del tipo, pero no por razones
ontológicas -como lo proponía el finalismo-, basadas en que el tipo debía reflejar
la realidad de la estructura del comportamiento humano, sino por razones
valorativas: el tipo contiene la materia de la prohibición y ésta sólo puede referirse
a hechos dolosos o culposos. Se advierte, asimismo, una opción por el sistema
denominado de la doble posición del dolo, el cual lo considera, al mismo tiempo,
elemento del tipo y de la culpabilidad.
c) Se hace cada vez más difusa la distinción entre los elementos tipicidad y
antijuridicidad, los que tienden a ser examinados en forma conjunta.
1.- Introducción.
Contenidos en el título VIII del Libro II del Código Penal llamado “Crímenes y simples
delitos contra las personas”. En este título se sancionan los delitos contra la vida (en
donde el bien jurídico protegido es la existencia humana como ente viviente) y aquellos
que afectan la integridad física de las personas (en donde el bien jurídico no es la existencia
física sino que la integridad del cuerpo humano). En este título además se sanciona el
duelo y su incitación, las injurias y las calumnias por lo que esté título protege, según el
profesor Garrido Montt, no solo el ente físico del ser humano sino que también su faceta
espiritual.
Los delitos contra la integridad física se refieren principalmente a las lesiones corporales
(Artículos 395 y siguientes del Código Penal) dentro de los cuales se encuentran las
mutilaciones, las lesiones, la remisión de encomiendas que puedan afectar a las personas y
en general las conductas dañosas contra el cuerpo humano.
La forma en la cual están construidos estos tipos penales se encuentra superado por el
tiempo requiriendo de forma urgente una actualización en la forma que se describen las
conductas y una adecuación a la vida moderna en donde actividades socialmente
aceptadas y valiosas, como la actividad médica, pueden subsumirse en algunos de estos
tipos penales siendo necesaria una regulación específica al respecto, principalmente
respecto a la disponibilidad de estos bienes jurídicos en pos de un resultado deseado y
valioso (cirugías estéticas).
Por último, cabe señalar que, primero, en este párrafo se regulan los delitos que atentan
contra la salud individual y no la salud pública a la que se refieren otros tipos penales
como aquellos descritos en la ley 20.000 sobre el tráfico ilícito de estupefacientes, y
segundo, no solo en este título hay referencia a la salud individual ya que en otros tipos
penales ajenos a este título se protege este bien jurídico (como el robo con violencia en
donde se ampara, como delito pluri ofensivo, la propiedad y la salud individual) pero en
este título el bien jurídico salud individual es el exclusivo objeto de protección.
-Lesiones propiamente tales (Arts. 397 a 403 y art. 494 Nº 5) las que se sub clasifican en:
+Lesiones graves, las que pueden ser graves gravísimas (Art. 397 Nº 1) o simplemente
graves (Art. 397) y aquellas relativas a la administración desustancias nocivas (Art. 398)
Se regulan entre los artículos 397 a 403 del Código Penal. Respecto de ellas pueden
señalarse tres características.
-La forma de comisión es herir, golpear o maltratar. Excepcionalmente admite una forma
distinta de comisión en la figura del artículo 398 a través desustancias o bebidas nocivas.
A diferencia de las mutilaciones, este delito puede cometerse con dolo directo, indirecto o
eventual y también a través de culpa.
Además es un delito de resultado por lo cual es posible encontrar las distintas etapas del
iter criminis.
Señala que los maltratos de obra que provoquen un sufrimiento constituyen lesiones aun
cuando no dejen marcas o rasgos. En este orden de ideas invoca el verbo rector que es
herir, golpear o maltratar y el artículo 397 que señala que “si de resultas de las lesiones
queda el ofendido…” por lo que el legislador, a su juicio, haría una distinción entre la
conducta del verbo rector y el resultado.
Poderosas objeciones pueden hacérsele a esta tesis toda vez que si se analizan los
verbos rectores de las lesiones graves, estos se refieren a herir, golpear o maltratar a otro,
todas conductas que necesariamente indican conductas activas por parte del agente para
que este pueda incurrir en ellas. El tipo penal junto con señalar la necesidad de un
resultado lesiones además señala y restringe mediante determinados verbos rectores la
forma de comisión exigida para este tipo penal. Por tanto en opinión personal, se discrepa
del profesor Garrido Montt y se señala que teniendo en cuenta el principio de reserva
legal, la descripción típica de los delitos de lesiones graves al incluir los verbos rectores
“herir”, “golpear” y “maltratar” impide que estos puedan ser cometidos mediante omisión
toda vez que dichas formas verbales implican comportamientos activos. El hecho de que
puedan causarse lesiones graves por omisión es un hecho pero la forma de comisión
está restringida a conductas activas.
Las formas verbales señaladas por la ley para la realización del tipo penal de lesiones son los
mencionados herir, golpear y maltratar, esto además de la figura del artículo 398 que se
refiere a la administración de bebidas o sustancias nocivas. Sin embargo, se acepta de
manera más o menos unánime en doctrina que se permiten otros verbos rectores (sin
perjuicio del problema anterior relativo a la omisión). Esto se desprende de la norma del
artículo 399 relativa a las lesiones menos graves en donde se señala que las lesiones no
comprendidas en los artículos precedentes se sancionarán como menos graves. Parece
coincidirse con este punto toda vez que al señalar el tipo penal que “las lesiones no
comprendidas en los artículos anteriores…” lo que pretende el legislador y es señalar que
toda otra lesión no causada de la forma descrita en los artículos anteriores o realizada de
una manera distinta a la señalada en dichos tipos penales (Herir, golpear o maltratar)
constituirían lesiones menos graves. En este orden de ideas, por tanto, todo daño causado de
manera efectiva en otra persona que se realice de una manera distinta podría sancionarse
a título de lesiones menos graves (y por tanto, es aquí donde cabria colocar las lesiones
por omisión aun cuando por su gravedad puedan subsumirse en los tipos penales de
lesiones graves).
El profesor Mario Garrido Montt apunta, acertadamente, a que sin perjuicio de que el
artículo 399 parece muy amplio en la forma de comisión de las lesiones, estas no podrían
extenderse a ciertas situaciones como por ejemplo el contagio de enfermedades (por vía
venérea por ejemplo). Este tipo de conductas podrían subsumirse en el tipo penal del
artículo 398 si cumple con todos sus requisitos, en particular en lo relativo al
aprovechamiento de la credulidad o flaqueza de espíritu (ya que un contagio de
enfermedad resulta dudoso en su subsunción a la forma verbal “administrar”).
-Golpear es dirigir un objeto material para encontrarse con el cuerpo de la víctima en forma
repentina y violenta.
Por tanto lo que determina la punibilidad, bastante alta por lo demás, de este delito es que la
conducta realizada a través de alguno de los verbos rectores produce en la víctima
alguno de los cinco resultados señalados, lo cual haría de esta figura en cierta forma una
forma penal calificada por el resultado, cuestión que choca con el principio de culpabilidad.
La pena a aplicar a este delito es la de presidio mayor en su grado mínimo (5años y 1 día a
10 años).
Reguladas en el Nº 2 del artículo 397 del Código Penal que se refiere a aquellas cuyo
resultado es que produzca en el ofendido enfermedad o incapacidad para el trabajo por
más de treinta días.
Sobre la penalidad, estas lesiones se sancionan con presidio menor en su grado medios
(541 días a 3 años)
Las lesiones menos graves están referidas en el artículo 399 del Código Penal y constituye
una noción residual respecto de los demás tipos penales de lesiones al definirse como
aquellas lesiones no comprendidas en los artículos anteriores.
Las lesiones menos graves deben satisfacer tres características, dos positiva y una negativa:
-Es un tipo subsidiario que puede cometerse de cualquier forma sin que este limitado a los
verbos rectores del artículo 397 por lo que se admite su comisión por omisión.
-Estas lesiones deben causar una enfermedad o incapacidad para el trabajo que no puede
sobrepasar los 30 días.
Las lesiones leves, por su parte, están reguladas en el artículo 494 Nº 5 del Código Penal
constituyendo una falta penal con pena pecuniaria (multa de 1 a4 UTM). La particularidad es
que el criterio para determinar la presencia de lesiones leves es que serán leves las
lesiones que en concepto del tribunal no estén contenidas dentro del artículo 399
atendidas la calidad de las personas y circunstancias del hecho.
Atendido esto, una lesión leve es una lesión menos grave que en concepto de los
tribunales atendidos las circunstancias particulares del caso, deben sancionarse como
leves. Este sistema de determinación ha sido criticado pues le entrega al tribunal la facultad
de calificar un resultado clínico.
Cabe señalar que la ley 20.066 sobre Violencia Intrafamiliar modifica el artículo 494 Nº 5
impidiendo al juez calificar en caso alguno las lesiones causadas en el marco jurídico de
una situación regulada por la Ley de Violencia Intrafamiliar como leves. Por tanto, todas
las lesiones causadas en el marco de la Ley 20.066 serán, como mínimo, menos graves.
Respecto del tipo subjetivo el delito de lesiones menos graves admite dolo y culpa (artículos
399 en relación al artículo 490) pero no así las lesiones leves que, como falta, no admiten
comisión por culpa según lo expresadamente señalado en el artículo 10 Nº 13 en relación al
mismo artículo 490.
Se establece en el artículo 400 del Código Penal originalmente pero fue modificada por la
ley 20.066 sobre Violencia Intrafamiliar. Señala que si los delitos de este título se realizan
sobre cualquier persona de las mencionadas en el artículo 5 de dicha ley (el cual establece
respecto de quién se entiende que existe violencia intrafamiliar, señalando grados de
parentesco e incluyendo además el concubinato) o con las circunstancias Segunda (premio
o promesa remuneratoria), Tercera (Mediante veneno) o Cuarta (con ensañamiento,
aumentando innecesariamente el sufrimiento de la víctima) del Nº 1 del artículo 391
(sobre el homicidio calificado), las penas se aumentaran en un grado.
Por tanto, se aumentan en un grado desde su mínimo legal las lesiones causadas en el
marco de la violencia intrafamiliar según los preceptos de la ley 20.066 o si se causan con
alguna de las calificantes señaladas que pertenecen a la regulación del homicidio
calificado.
Antes de la ley 20.066 la circunstancia agravante era la de causar lesiones a alguna de las
personas mencionadas en el artículo 390 que regula el delito de parricidio.
Figura procesal análoga a la del homicidio en riña por lo que todo lo procedente para dicha
figura se aplica a esta institución reglada en los artículos 402 y 403 del Código Penal.
Es una figura de índole procesal que permite sancionar las lesiones causadas en una riña
cuando no es posible determinar de forma cierta qué partícipe causó cuales lesiones.
El ya fallecido profesor Sergio Yánez planteada un ejemplo muy claro para el cual se creó
esta figura tanto como su análoga respecto del homicidio: en las películas de Western, en
una cantina se arma una reyerta de proporciones y cuando todo acaba hay lesionados
respecto de los cuales no es determinable a ciencia cierta quien les causó las lesiones
particulares.
Bien jurídico protegido: Vida Humana. Definir VIDA excede al Derecho Penal, debido a
que corresponde al ámbito filosófico la conceptualización, por consiguiente solo se
establecen límites por el legislador para ver qué se entiende por VIDA.
Vida Humana: Para efectos del Derecho Penal la VIDA COMIENZA desde la concepción,
denominada DEPENDIENTE protegida por la figura del aborto, y desde el PARTO, proceso
de expulsión del feto, hay VIDA INDEPENDIENTE, protegida por la figura del
HOMICIDIO, todo lo anterior hasta la muerte.
2. Clasificación:
2.1.4. Infanticidio
2.2. Delitos contra la vida humana dependiente:
o Art. 391. El que mate a otro y no esté comprendido en el artículo anterior, será penado:
Definición: Es una figura residual de los artículos 390, 391 N°1 y 394 CP. Matar a otro sin
que concurran las condiciones especiales constitutivas del parricidio, femicidio, infanticidio u
homicidio calificado. (Politoff/Grisolía/Bustos)
Es una figura básica, “matar a otro sin que concurran las condiciones de los crímenes o
delitos mencionados”. El legislador no lo definió, sino se contempla en el Código Penal de
manera residual de las figuras especiales impropias.
Doctrina. Este delito debió tener un artículo propio al ser el más importante, pero el
legislador lo trató como figura residual, es decir, siempre que no concurran circunstancias
que configuren otro delito de homicidio. El homicidio simple lo llamó así la doctrina, y no el
legislador. En el Derecho Comparado lo denominan asesinato.
Tipicidad:
2.1. Sujetos
2.1.1. Sujeto activo: “El que mata a otro”, significando ser un Delito acción, por tal puede ser
cualquier persona, no hay exigencia particular. La excepción es que éste delito sea en
comisión por omisión, se exige al sujeto activo se encuentre en posición de garante, es
decir, ser garante del bien jurídico vida.
1. La ley
2. El contrato
3. Las dos primeras son reconocidas por el legislador y doctrina mayoritaria, pero además,
se vislumbra cierta inclinación legislativa en orden a considerar que está en posición de
garante quien, con su conducta precedente, ha creado un estado peligroso para ciertos
bienes jurídicos. Ejemplo, Persona que para plantar un poste cavó un hoyo, y no vislumbró
que por no taparlo, una persona cae en él.
4. El parentesco
Son garantes del bien jurídico VIDA, a modo de ejemplo, El médico que no presta ayuda en
el hospital. El salvavidas en el ejercicio de su trabajo. Instructor de paracaidismo.
Persona que crea un riesgo y no precavió los posibles accidentes.
2.1.2. Sujeto pasivo: Cualquier otra persona humana con vida independiente hasta antes
de la muerte. Se confunde con el objeto material. Excluye al muerto por ser un delito
imposible, debido para sancionar, tendría que extender el bien jurídico afectado al hombre
aparentemente vivo de acuerdo a Politoff/Grisolía/Bustos, y al que está por nacer porque si
así fuere, la calificación sería delito de aborto.
2.1.3. Delimitación de la vida humana dependiente e independiente, para distinguir
quienes son sujetos vivos. El Artículo 1° de la CPR1, Atribuye el carácter de persona,
“sujeto de derechos” en el artículo 19 CPR a todas las personas.
“Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.
Se entiende, por tal, que nuestro ordenamiento jurídico reconoce a la vida humana
independiente principia en relación al artículo 394 CP “después del parto”. Éste es un
argumento de texto, a partir de la figura del Infanticidio.
o Art. 394. Cometen infanticidio el padre, la madre o los demás ascendientes legítimos
o ilegítimos que dentro de las cuarenta y ocho horas después del parto, matan al hijo o
descendiente, y serán penados con presidio mayor en su grado mínimo a medio.
Ésta norma señala que si se mata a una persona después del parto y antes de 48 horas.
Antes, durante el parto es delito de aborto, y después del parto hasta antes de 48 horas
es infanticidio.
o Art. 74 CC. La existencia legal de toda persona principal al nacer, esto es, al
separarse completamente de su madre.
La criatura que muere en el vientre materno, o que perece antes de estar completamente
separada de su madre, o que no haya sobrevivido a la separación un momento siquiera,
se reputará no haber existido jamás.
o Art. 55 CC. Son personas todos los individuos de la especie humana, cualquiera que
sea su edad, sexo, estirpe o condición. Divídense en chilenos y extranjeros.
A.- La doctrina mayoritaria señala que esto se encuentra actualmente superado, debido a
esta discusión se entiende que son conceptos civiles para efectos de ciertos bienes
jurídicos determinados, reconocimiento de derechos, y no son aplicables al Derecho
Penal
C.- Si se estimara que hay parido no nacido, el autor no comprendido en el artículo 394
CP no cometería delito alguno (Politoff/Grisolía/Bustos)
La vida principia desde después del parto hasta cuando cesan los signos positivos de
vida, la respiración, circulación y actividad cerebral. SIEMPRE DEBE EXISTIR UN
CERTIFICADO MÉDICO.
Además, se puede relacionar con el principio de lesividad, en cuanto, para estar frente a un
delito debe existir un bien jurídico protegido, y el homicidio protege la vida, y no, la no vida
humana o muerte, ergo, si estamos frente a un muerto no hay bien jurídico protegido.
Vida síquica, Conciencia de la propia existencia y del mundo que nos rodea. Vida orgánica,
Físico-biológica, funciones respiratorias y circulatorias.
Los signos negativos de muerte: Ley 19.451 de 1996 define muerte para los efectos de
trasplante (Art. 11).
o Art. 11. Para los efectos previstos en esta ley, la muerte se acreditará mediante
certificación unánime e inequívoca, otorgada pon un equipo de médicos, uno de cuyos
integrantes, al menos, deberá desempeñarse en el campo de la neurología o neurocirugía.
Los médicos que otorguen la certificación no podrán formar parte del equipo que vaya a
efectuar el trasplante.
2.2.1. No hay limitación de medios, incluye medios morales o inmateriales, como el temor y
otras impresiones psíquicas análogas, Politoff/Grisolía/Bustos. Además, hay otras formas de
conducta, autoría mediata y comisión por omisión.
Otro medio es el veneno, pero queda excluido de “cualquier medio”, debido a que se
transforma en homicidio calificado.
2.2.2. Dolo: Dolo directo, El sujeto está en conocimiento del tipo penal y su voluntad está
en alcanzar el resultado. Además, con dolo eventual (eventualidad aceptada), el sujeto
acepta el resultado como posibilidad no cierta y actúa con indiferencia al resultado. Los
delitos en general, se pueden cometer con ambos dolos, a menos el tipo penal incluya un
elemento subjetivo, “Dolo directo; maliciosamente, intencionalmente, con el ánimo de, con el
propósito” – “Si nada señala se entiende puede ser cometidos con ambos tipos de
dolo”.
Si el delito es cometido con culpa, estaremos frente a cuasidelito de homicidio artículo 490
CP:
o Art. 490. El que por imprudencia temeraria ejecutare un hecho que, si mediara malicia,
constituiría un crimen o un simple delito contra las personas, será penado:
1° Con reclusión o relegación menores en sus grados mínimos a medios, cuando el hecho
importare crimen.
2° Con reclusión o relegación menores en sus grados mínimos o multa de once a veinte
unidades tributarias mensuales, cuando importare simple delito.
Dolo de Weber: Precisar si resultado es abarcado por dolo eventual. Si lo es, homicidio
simple (se representa la posibilidad de la sobrevivencia de su víctima y decide enterrarla
de todos modos), si no, homicidio frustrado y homicidio culposo en concurso real.
Aberratio ictus: Precisar si resultado es abarcado por dolo eventual. Si lo es, homicidio
simple (si la muerte de una persona distinta de su objetivo le ha sido diferente), si no,
homicidio frustrado y homicidio culposo (si representándose el resultado mortal en una
persona diferente, ha actualizado en su conducta su intención de no herirla), en concurso
ideal.
o Art. 75. La disposición del artículo anterior no es aplicable en el caso de que un solo
hecho constituya dos o más delitos, o cuando uno de ellos sea el medio necesario para
cometer otro.
En estos casos sólo se impondrá la pena mayor asignada al delito más grave.
Casos problemáticos:
“Homicidio concausal”: Queda fuera del ámbito de la acción típica los antecedentes y
consecuencias extraordinarios (extra típicos) no dominados por el agente y con que éste
no contaba (Politoff/Grisolía/Bustos).
Los delitos concausal: Son aquellos en que el sujeto realiza una conducta que no es
suficiente para realizar la muerte, pero ésta se produce porque existe una concausa que el
sujeto desconoce. Ejemplo, El sujeto activo realiza la conducta de cortar la pierna del
sujeto pasivo, y éste fallece producto de hemofilia.
5. Tiene lugar toda vez que, con intención de matar, el agente ejecuta un hecho que por sí
solo es insuficiente para producir la muerte, la que sobreviene por la concurrencia de
causas preexistentes concomitantes o supervinientes, ajenas a la voluntad del hechor.
Labatut.
o Art. 391 CP: El que mate a otro y no esté comprendido en el artículo anterior, será
penado:
Etcheberry: Matar a otro con alguna de las circunstancias del art. 391 N° 1 CP, sin que
concurran los requisitos propios del parricidio o del infanticidio.
2. Circunstancias calificantes.
o Art.12 N° 1 CP. Cometer el delito contra las personas con alevosía, entendiendo que la
hay cuando se obra a traición o sobre seguro.
Sobreseguro: Consiste en actuar de una manera tal que el sujeto activo minimiza el riego
que supone cometer el delito. Ocultándose a sí mismo (el cuerpo) o los medios de que
piensa valerse para cometer el delito, de manera que al momento de cometer el hecho, el
autor se encuentre sin riesgo para sí. Ejemplo, La emboscada.
La doctrina además señala que el uso del medio de veneno es alevosía, debido se
actuaría sobre seguro, “se minimizo el riesgo en el actuar de la víctima”.
Fundamento agravación: Mayor disvalor de acción al matar a alguien por fin pecuniario
que por algún otro motivo, que no consista en otra calificante. El ánimo o carácter vil de
actuar del sicario y peligro de profesionalización del crimen.
o Delito de participación necesaria, ambos responden a este título como coautores. Hay
mayor injusto respecto de ambos (Politoff/Grisolía/Bustos).
Otros señalan, Que en virtud del actuar sobre seguro también cometería homicidio
calificado por alevosía, debido mandó matar a otro por medio de un mandatario.
Diferencia Art. 12 n° 2 CP: No están redactadas de la misma manera, lo que podría llevar a
pensar que las agravantes contempladas en el artículo 12 CP son iguales a las calificantes
del artículo 391 CP. También hay discusión sobre el “por premio y recompensa
remuneratoria”, al señalar lo que es pecuniario es la promesa y no el premio.
2.3. Veneno:
Prácticamente cualquier sustancia con efectos tóxicos y letales, todo depende de la dosis y
forma de administración. Ejemplo, Cloro, licor, etc.
Toda sustancia que suministrada a la víctima pueda ocasionarle la muerte, cualquiera sea la
vía de introducción al cuerpo, deglución, inyección, absorción, respiración, etc., es
veneno si se ha hecho en forma insidiosa, esto es, alevoso (Politoff/Bustos/Grisolía), de
modo tal que la víctima no la advierta.
El veneno como agravantes: Es distinto a la calificante, porque ésta última es una sustancia
tóxica, y el de la agravante, está entendido en sentido catastrófico, daño a muchas
personas.
o Art. 12 N° 3 CP: Ejecutar el delito por medio de inundación, incendio, veneno u otro
artificio que pueda ocasionar grandes estragos o dañar a otras personas.
Lo importante más allá del dolo directo es se aumente inhumana y deliberado, intencional
en la víctima. El sujeto activo aumenta inhumanamente e intencionalmente.
o Art. 12 N° 4 CP: Aumentar deliberadamente el mal del delito causando otros males
innecesarios para su ejecución.
“Inhumanamente”: No alude sólo al exceso de dolor, sino también al carácter y ánimo del
hecho, intencionalidad en el sujeto activo, quién actúa de forma insensible y despiadado
(Politoff/Bustos/Grisolía. Ejemplo, Lanzar víctima agonizante a matorral de zarzas.
Etcheberry distingue un elemento objetivo: El aumento del dolor, y uno subjetivo, la
deliberación "tranquilidad de ánimo" y la inhumanidad, falta de sensibilidad.
C. Frialdad y tranquilidad del ánimo, porque quién premedita va preparado al hecho que
perpetrará. Etcheberry: La frialdad no se refiere al temperamento, sino al cálculo, que
puede darse en la mente de una persona apasionada.
Críticas: Indistinguible del dolo homicida, cuando hay mayor reproche se encuentra
implícita en la alevosía, veneno o premio o promesa remuneratoria.
Cabe recordar que las cinco calificantes basta que concurra una para que el homicidio
sea calificado. En virtud que concurran dos o más calificantes, se podría pensar usar una
de ellas como agravante, pero en función del artículo 63 CP, se vulneraría el principio de
NON BIS IN IDEM. Además en aplicación del principio PRO REO se debe utilizar la
interpretación que favorece al imputado
o Art. 63. No producen el efecto de aumentar la pena las circunstancias agravantes que
por sí mismas constituyen un delito especialmente penado por la ley, o que ésta haya
expresado al describirlo y penarlo.
o Art. 12 N° 5 CP: En los delitos contra las personas, obrar con premeditación
conocida o emplear astucia, fraude o disfraz.
Las que consistan en la ejecución material del hecho o en los medios empleados para
realizarlo, servirán para atenuar o agravar la responsabilidad únicamente de los que
tuvieren conocimiento de ellas antes o en el momento de la acción o de su cooperación
para el delito.
5. Concurso circunstancias:
o Art. 69. Dentro de los límites de cada grado el tribunal determinará la cuantía de la pena
en atención al número y entidad de las circunstancias atenuantes y agravantes y a la mayor o
menor extensión del mal producido por el delito.
III. PARRICIDIO.
El que mate a un pariente en línea recta y no colateral, padre, madre, hijo o a cualquier
otro ascendiente o descendiente, o a quien haya sido su cónyuge o conviviente, y
además, a quién ha sido cónyuge o conviviente, estos últimos incorporados en
modificaciones recientes.
o Art. 390 CP: El que, conociendo las relaciones que los ligan, mate a su padre, madre
o hijo, a cualquier otro de sus ascendientes o descendientes o a quien es o ha sido su
cónyuge o su conviviente, será castigado, como parricida, con la pena de presidio mayor en
su grado máximo a presidio perpetuo calificado.
1. Críticas: Difícil justificación más allá del reproche moral por atentado contra propia
sangre o lazos de confianza mutua derivados del matrimonio.
El fundamento para que la sanción del parricidio sea mayor a otro homicidio.
c.- No se incluyen los hijos adoptados en la tipificación del delito, por tal se considerará
para efectos civiles los hijos adoptados para efectos de la filiación.
d.- G. Montt ve mayor injusto por ser una consagración en derecho penal de texto
constitucional “familia núcleo fundamental de sociedad”.
Derecho comparado: Optan por no contemplar en parricidio, y lo califican dependiendo si
concurren o no las calificantes del homicidio calificado, sino será homicidio simple con
agravante mixta del parentesco, artículo 13 CP.
Ser el agraviado cónyuge, pariente legítimo por consanguinidad o afinidad en toda la línea
recta y en la colateral hasta el segundo grado inclusive, padre o hijo natural o ilegítimo
reconocido del ofensor.
o Art. 37 ley 19.620: La adopción confiere al adoptado el estado civil de hijo de los
adoptantes, con todos los derechos y deberes recíprocos establecidos en la ley, y extingue
sus vínculos de filiación de origen, para todos los efectos civiles, salvo los impedimentos
para contraer matrimonio establecidos en el artículo 5° de la Ley de Matrimonio Civil, los
que subsistirán.
3. Parricidio por omisión: Afecta non bis in ídem. Está descrito como delito de acción, y si el
sujeto activo está en posición de garante, suscita lo siguiente. Lo anterior involucraría
considerar el parentesco para configurar la posición de garante y para fundar el parricidio.
Ejemplo. La madre que deja morir a su hijo, se le aplicaría el parentesco para el parricidio y
para la posición de garante, ergo se configuraría el homicidio simple por omisión (figura
residual, debido el ser la figura más amplia).
Etcheberry sería una referencia superflua, que no innova respecto a la regla general de
presunción de dolo. Admite el dolo eventual.
5. Error:
Error respecto de distintas víctimas del art. 390 CP: G. Montt parricidio;
Matus/Politoff/Ramírez Homicidio
Aberratioictus (madre que se interpone ante riña de hijo con un tercero): Etcheberry art.
1.3 CP, homicidio simple6; Matus/Politoff/Ram homicidio culposo de la madre.
6. Participación (comunicabilidad):
Etcheberry: Se opone a la comunicabilidad invocando al art. 64 CP, y a ser las relaciones del
art. 390 CP meras circunstancias.
o Art. 390 CP: El que, conociendo las relaciones que los ligan, mate a su padre, madre o
hijo, a cualquier otro de sus ascendientes o descendientes o a quien es o ha sido su cónyuge
o su conviviente, será castigado, como parricida, con la pena de presidio mayor en su grado
máximo a presidio perpetuo calificado.
6.4. intraneus autor mediato, extraneus instrumento: intraneus parricidio, extraneus sin
responsabilidad (agente doloso homicidio)
IV. FEMICIDIO
o Art. 390 CP: El que, conociendo las relaciones que los ligan, mate a su padre, madre o
hijo, a cualquier otro de sus ascendientes o descendientes o a quien es o ha sido su cónyuge
o su conviviente, será castigado, como parricida, con la pena de presidio mayor en su grado
máximo a presidio perpetuo calificado.
En el artículo 390:
b) Incorporase el siguiente inciso segundo: "Si la víctima del delito descrito en el inciso
precedente es o ha sido la cónyuge o la conviviente de su autor, el delito tendrá el nombre
de femicidio".
Sujeto pasivo: El inciso 1° del art. 390 CP incluye ex cónyuges y ex convivientes, hombres y
mujeres, pero si la víctima es mujer, será femicidio, y si es hombre será parricidio
(Santibáñez Torres/Vargas Pinto)
Si bien la convivencia se considera o interpreta con las mismas calidades que la relación
conyugal en cuanta permanencia, afectividad y entidad de la relación, no ocurre lo mismo
con la diferencia entre hombre y mujer. La relación de convivencia no supone por esencia,
como lo hace el matrimonio, una relación entre un hombre y una mujer. De modo que
puede ser sancionada como femicida una mujer que mate a su conviviente mujer actual o
pasada.
5. Críticas:
V. INFANTICIDIO
Padre, madre o ascendientes legítimos e ilegítimos, que matan al hijo o al recién nacido
dentro de las 48 horas después del parto.
o Art. 390 CP: Cometen infanticidio el padre, la madre o los demás ascendientes
legítimos o ilegítimos que dentro de las cuarenta y ocho horas después del parto, matan al
hijo o descendiente, y serán penados con presidio mayor en sus grados mínimo a medio.
3. No se funda en estado puerperal, dolores propios del parto u hormonal (incluye otros
parientes8) ni en móvil de honor (según antecedentes históricos de su regulación9), sino
simplemente en la apreciación de un menor desvalor por el legislador
(Politoff/Grisolía/Bustos)
4. Conducta: Se cuestiona el infanticidio por omisión impropia. Se acepta sólo por ser
privilegiada, para descartar homicidio calificado (veneno). No viola non bis in ídem por
favorecer al reo.
5. Participación: Matius/Politoff/sostienen que extraneusse sanciona también por infanticidio
sea que sepa o no que es un infanticidio, en este último caso, por aplicación analógica de
Art. 1.3 CP, pues si desconoce la circunstancia objetiva que atenúa su responsabilidad,
no contradice el principio de culpabilidad el imputársela en su beneficio. Agregan que,
“admitido el carácter irracional de este privilegio, menos racional aún parece hacerlo efectivo
en todo caso a quienes tiene un deber especial de cuidado sobre la víctima de esta
clase de delitos, impidiendo su apreciación a quienes –con menos obligaciones (y por tanto,
menos responsabilidades)- participan junto a él.”10
El bien jurídico: Protegido es la vida humana dependiente. Ser que está por nacer, vida
intrauterina.
1. Clasificación:
2. Sujeto pasivo:
G. Montt adhiere por razones de política criminal, atendido el empleo masivo de métodos
anticonceptivos en nuestra comunidad, autorizados y promovidos por el Estado.
Politoff/Bustos/Grisolía estiman que objeto material y sujeto pasivo del atentado es el fruto
de la concepción, sin definir el momento inicial en la fecundación o anidación.
- El texto legal exige una mujer embarazada, esto es, aquella de quien depende, producto
de la anidación del blastocisto en el endometrio, la vida del que está por nacer. Esto
excluye destrucción o abandono de embriones no utilizados en procedimientos de
fertilización in vitro.
- No comprende atentados contra la salud (lesiones) del feto, salvo que se sancione el
aborto frustrado debidamente probada la conducta de lesiones. Tampoco se consideran
las figuras de peligro en contra de la vida de éste (Politof, Bustos, Grisolía).
o Art. 344 CP. La mujer que causare su aborto o consintiere que otra persona se lo
cause, será castigada con presidio menor en su grado máximo.
1. Sujeto activo:
El aborto causado para ocultar la deshonra u onoris causa, Es una atenuante especial,
que conlleva una rebaja en la penalidad. Genera discusión jurídica, apoyo como a su vez
es cuestionado, debido a se protege un bien jurídico menor importante como es la honra
por sobre la vida humana dependiente. El argumento histórico es la deshonra que causaba
antiguamente el tener hijos fuera de la estructura familiar, hoy no se acepta por tribunales.
Actualmente se contempla por la doctrina esta figura, ante la agresión sexual de violación
a la mujer y ella decidiera abortar, podría invocar ésta causal.
1.2. En aborto consentido: Es la mujer embarazada y un tercero. Es un delito de
participación necesaria de un tercero. El tercero sancionado por artículo 342 n° 3, cuando no
es facultativo médico, y se sanciona a la mujer que consiente en el aborto.
La mujer que consiente en el aborto, reviste una penalidad mayor respecto del tercero,
esto porque si conducta es más disvaliosa respecto del tercero, esto significa, se encuentra
en un doble rol, estado de garante, y además, es sujeto activo del delito de aborto.
2° Con la de presidio menor en su grado máximo, si, aunque no la ejerza, obrare sin
consentimiento de la mujer.
Según cifras del SENAME, sólo en 2011 fueron atendidos 1.168 menores en los programas
para tratar a víctimas de Explotación Sexual Comercial Infantil y Adolescente (ESCI) en todo
el país. De estos, 842 casos corresponden a menores de edades comprendidas entre los 12 y
los 17 años (81,4% son mujeres y 18,6% varones, proporción que se repite en todas las
regiones). Contra toda suposición, un porcentaje cercano al 99,1% de los niños/as y
adolescentes atendidos en estos programas no registra una “situación de calle”, es decir,
los ataques sexuales a menores en un alto porcentaje, no sólo tienen lugar contra niños en
situación de vulneración social extrema, sino que se trata de un fenómeno que atraviesa
transversalmente todo los estratos socioeconómicos.
A mayor abundamiento, de acuerdo a United Nations Office on Drugs and Crime (UNODC),
Chile ocupa en el tercer puesto a nivel mundial en la tasa de denuncias por abuso sexual
infantil cada 100 mil habitantes, con 68,5 casos en 2012 -fecha en que todos los países
informaron los registros de sus policías-, siendo sólo superado por Suecia y Jamaica.
Además, a nivel sudamericano, es el primero en la tasa de denuncias por este ilícito.
Las agresiones sexuales a menores, constituyen un acto violento que supone una
imposición de poder del agresor respecto del menor víctima de la agresión y que de
acuerdo a nuestro tratamiento positivo se las define el artículo 366 ter del Código Penal
como cualquier acto de significación sexual y de relevancia realizado mediante contacto
corporal con la víctima, o que haya afectado los genitales, el ano o la boca de la víctima,
aun cuando no hubiere contacto corporal con ella. La gravedad de estas conductas
contiene un disvalor mayor cuando las víctimas son menores de edad, precisamente por la
imposibilidad o escasa posibilidad de aquellos para repeler el ataque o manifestar una
voluntad formada, para acceder o reaccionar a un requerimiento o acto de significación
sexual. Es por ello que estos delitos merecen el máximo repudio por parte de la sociedad, ya
que se fundan en la violencia y en el abuso de una relación de poder, tal y como lo ha
señalado la definición de abuso sexual dada por UNICEF.
Los delitos sexuales son todos aquellos actos que atentan contra la libertad sexual y la
indemnidad sexual de las personas, independientemente de su edad, estrato social, raza,
etnia, sexo o nacionalidad.
Los niños y niñas son más vulnerables a ser víctimas de estos delitos por parte de una
persona mayor, ya que muchas veces se ocupa la fuerza física, la presión o el engaño.
En la mayoría de los casos, los delitos sexuales ocurren a través de un proceso gradual y no
en un evento único.
La violación consiste en acceder carnalmente, por vía vaginal, anal o bucal. El abuso
sexual, por su parte, es la realización de una acción sexual, distinta del acceso carnal,
como por ejemplo: tocaciones o besos en área de connotación sexual; simulación de acto
sexual; exhibir o registrar material pornográfico particularmente a menores de edad o
presenciar espectáculos del mismo carácter, entre otros.
DELITOS VINCULADOS CON EL TRÁFICO DE ESTUPERFACIENTES
DELITOS CONTRA LA PROPIEDAD
o Art.432 CP. El que sin la voluntad de su dueño y con ánimo de lucrarse se apropia
cosa mueble ajena usando de violencia o intimidación en las personas o de fuerza en las
cosas, comete robo; si faltan la violencia, la intimidación y la fuerza, el delito se califica
hurto.
Concepto de propiedad más amplio que el Civil, artículo 582 CC. Se extiende a la
propiedad dominical como a la propiedad entendida como el vínculo que une al sujeto con
todos los derechos de que es titular y que sean económicamente apreciables.53 Abarca
dominio, posesión, otros derechos reales e incluso derechos personales. Por eso se
prefiere el concepto de patrimonio, por su mayor amplitud. Algunas figuras protegen
además otros bienes personalísimos como la vida y la libertad personal.
La doctrina discute debido a dentro del título noveno hay delitos cuyo bien jurídico no es la
propiedad. Se protege la tenencia material de una cosa. Ejemplo, artículo 471 N° 1,
"Delito de hurto de posesión".
o Art. 471. Será castigado con presidio o relegación menores en sus grados mínimos o
multas de once a veinte unidades tributarias mensuales:
o Art. 457 inciso primero. Al que con violencia en las personas ocupare una cosa
inmueble o usurpare un derecho real que otro poseyere o tuviere legítimamente, y al que,
hecha la ocupación en ausencia del legítimo poseedor o tenedor, vuelto éste le repeliere,
además de las penas en que incurra por la violencia que causare, se le aplicará una multa
de once a veinte unidades tributarias mensuales.
B. Apoderamiento sin violencia personas: y con fuerza en las cosas: Robo con fuerza en
las cosas.
Distinción:
I. HURTO SIMPLE.
1. Definición: Artículo 432 CP, sin que concurran las circunstancias que la ley define
como fuerza en las cosas o violencia o intimidación en las personas.
o Art. 432 El que sin la voluntad de su dueño y con ánimo de lucrarse se apropia cosa
mueble ajena usando de violencia o intimidación en las personas o de fuerza en las cosas,
comete robo; si faltan la violencia, la intimidación y la fuerza, el delito se califica hurto.
Este artículo define hurto y robo, por tal a partir de esta norma se extrae el concepto.
Concepto Hurto: Apropiación de cosa mueble ajena con ánimo de lucro y sin la voluntad
de su dueño.
Hurto falta artículo 494 bis: Si la cosa hurtada no pasa la media unidad tributaria
mensual, se denominará hurto falta. Esto permite que una de las faltas pueda ser
sancionada en su etapa de frustrada, debido a la regla general solo se sancionen
consumadas.
o Artículo 494 bis.- Los autores de hurto serán castigados con prisión en su grado
mínimo a medio y multa de una a cuatro unidades tributarias mensuales, si el valor de la
cosa hurtada no pasa de media unidad tributaria mensual.
La falta de que trata este artículo se castigará con multa de una a cuatro unidades
tributarias mensuales, si se encuentra en grado de frustrada. En estos casos, el tribunal
podrá conmutar la multa por la realización de trabajos determinados en beneficio de la
comunidad, señalando expresamente el tipo de trabajo, el lugar donde deba realizarse, su
duración y la persona o institución encargada de controlar su cumplimiento. Los trabajos
se realizarán, de preferencia, sin afectar la jornada laboral o de estudio que tenga el
infractor, con un máximo de ocho horas semanales. La no realización cabal y oportuna de
los trabajos determinados por el tribunal dejará sin efecto la conmutación por el solo
ministerio de la ley, y deberá cumplirse íntegramente la sanción primitivamente aplicada.
2. Determinación de pena: La pena del hurto esta designada según el valor de la
cosa hurtada, está establecido en el artículo 446 CP. Siempre que la cosa tenga
un valor superior a media UTM, sino será Hurto Falta sancionado por el artículo 494 bis.
4.1 Sujetos:
Activo: Cualquier persona, salvo artículo 489 CP y dueño de la cosa. "Excusa legal
absolutoria por razón de política criminal"
o Art. 489 CP. Están exentos de responsabilidad criminal y sujetos únicamente a la civil
por los hurtos, defraudaciones o daños que recíprocamente se causaren:
4° DEROGADO.
5° Los cónyuges.
La excepción de este artículo no es aplicable a los extraños que participaren del delito, ni
tampoco entre cónyuges cuando se trate de los delitos de daños indicados en el párrafo
anterior.
Además, esta exención no será aplicable cuando la víctima sea una persona mayor de
sesenta años.
Situaciones especiales: Artículo 471 n° 1 Código Penal (hurto de posesión) y artículo
494 n° 20 Código Penal (realización arbitraria del derecho propio). Excusa legal
absolutoria en el caso de ser el sujeto activo cónyuge o pariente.
o Art. 471 n° 1 CP Será castigado con presidio o relegación menores en sus grados
mínimos o multas de once a veinte unidades tributarias mensuales: El dueño de una cosa
mueble que la sustrajere de quien la tenga legítimamente en su poder, con perjuicio de
éste o de un tercero.
o Art. 494 n° 20 CP. El que con violencia se apoderare de una cosa perteneciente a su
deudor para hacerse pago con ella.
Sujeto Pasivo: Cualquier persona que tenga una relación jurídicamente protegida con la
cosa.
4.2. Objeto material: Cosa corporal mueble ajena susceptible de avaluarse en dinero.
No se considera ajena: La res nullius (no pertenecen a nadie) o res derelictae (cosas
abandonadas), las que la naturaleza ha hecho comunes a todos los hombres, los bienes
nacionales de uso público57; los cuerpos o partes de ellos vivos,58 ni de los cadáveres59;
cosas en copropiedad60. Si el socio sustrae cosas de la sociedad es hurto, salvo el
administrador que incurre en 470 n° 1 CP.
Avaluable en dinero: Valor económico o de mercado, no se considera valor de
afectación. Respecto de documentos de pago o que representen una cantidad de dinero
exigible contra su presentación (cheques, vales vista, boleto de lotería premiado), debe
atenerse al valor que representa sobre su materialidad.
Corporal: La cosa debe poder ser aprehendida.
4.3. Conducta: La apropiación del objeto material, sin que medie uso de la fuerza,
violencia o intimidación que configura los delitos de robo con fuerza y robo con
violencia o intimidación. Ejemplo, Fuerza para salir del inmueble.
Concepto de Apropiación: Deben estar presente los siguientes cuatro elementos para
estar frente al delito de hurto, la carencia de alguno llevaría a estar frente a un acto lícito.
A.- Elemento objetivo: Es la apoderación o la sustracción de la cosa
B.- Elemento subjetivo: Ánimo de señor y dueño. Es indiferente el medio usado para la
sustracción.
Etcheberry: Elementos de la apropiación: material –sustraer- y psíquico –ánimo de señor y
dueño-.
Por la sustracción se adquiere la posesión, no el dominio, al no ser título traslaticio de
dominio. Hay una adquisición de hecho, no de derecho, de las facultades propias del
dominio (Etcheberry)
Se requiere por el autor el ánimo de comportarse como dueño de la cosa, animus rem
sibihabendi.
C.- La apropiación contiene el ánimo de lucro (Politoff), Al buscarse obtener una ventaja
patrimonial de carácter económica. No es necesario que se logre el propósito (delito de
tendencia) debido a solo se requiere el ánimo.
Puede darse por dos vías, contra la voluntad del dueño o sin la voluntad del dueño:
Ambas formas dan lugar al delito de hurto.
Si hay voluntad del dueño estamos frente a la atipicidad, por consiguiente no hay delito.
Etcheberry, Elimina la antijuridicidad.
61 Etcheberry: Comprende tanto los casos de ausencia de conocimiento como los casos de
contravención directa a la voluntad ya expresada.
El consentimiento lo puede entregar quien tenga poder de disposición sobre la cosa. El
consentimiento no se presume. Etcheberry: Puede ser expreso o tácito, pero debe existir
efectivamente. La ratificación posterior no elimina la ilicitud inicial. La voluntad puede ser
expresa o tácita, esta última por medio de la tolerancia.
El consentimiento viciado impide la incriminación por hurto: Si hay fuerza, es robo o
extorsión, si hay engaño, será estafa (Etcheberry).
Si el consentimiento del sujeto que entrega es irrelevante para el derecho, como demente o
infante, hay estafa o hurto, si el tercero induce a entregar la cosa sin desprenderse de la
propiedad (ej. préstamo momentáneo), o si el tercero induce a que se la obsequie,
respectivamente (Etcheberry).
En los delitos de robo y hurto, la pena correspondiente será elevada en un grado cuando los
culpables hagan uso de armas o sean portadores de ellas.
Para determinar cuando el robo o hurto se comete con armas, se estará a lo dispuesto en el
artículo 132.
Doctrina
o Etcheberry utiliza la misma teoría de ablatio, para distinguir los actos preparatorios de
los ejecutivos, señalando que habrá comienzo de ejecución toda vez que se penetre en la
esfera de custodia o resguardo del titular de la cosa.
7. Participación:
Ya fue visto en cuanto a los sujetos. Cualquier sujeto y sus respectivas excepciones, en
los artículos 454, 456 bis n° 3, y 489 CP
8. Concursos:
o Artículo 451.- En los casos de reiteración de hurtos, aunque se trate de faltas, a una
misma persona, o a distintas personas en una misma casa, establecimiento comercio,
centro comercial, feria, recinto o lugar el tribunal calificará el ilícito y hará la regulación de la
pena tomando por base el importe total de los objetos sustraídos, y la impondrá al
delincuente en su grado superior.
1º Con presidio menor en sus grados medio a máximo y multa de once a quince unidades
tributarias mensuales, si el valor de la cosa hurtada excediera de cuarenta unidades
tributarias mensuales.
2º Con presidio menor en su grado medio y multa de seis a diez unidades tributarias
mensuales, si el valor excediere de cuatro unidades tributarias mensuales y no pasare de
cuarenta unidades tributarias mensuales.
3º Con presidio menor en su grado mínimo y multa de cinco unidades tributarias
mensuales, si excediere de media unidad tributaria mensual y no pasare de cuatro unidades
tributarias mensuales.
El mismo núcleo básico del hurto, pero en este caso el valor de la cosa no debe exceder
de media unidad tributaria mensual tratado en el artículo 494 bis.
o Artículo 494 bis.- Los autores de hurto serán castigados con prisión en su grado
mínimo a medio y multa de una a cuatro unidades tributarias mensuales, si el valor de la
cosa hurtada no pasa de media unidad tributaria mensual.
La falta de que trata este artículo se castigará con multa de una a cuatro unidades
tributarias mensuales, si se encuentra en grado de frustrada. En estos casos, el tribunal
podrá conmutar la multa por la realización de trabajos determinados en beneficio de la
comunidad, señalando expresamente el tipo de trabajo, el lugar donde deba realizarse, su
duración y la persona o institución encargada de controlar su cumplimiento. Los trabajos
se realizarán, de preferencia, sin afectar la jornada laboral o de estudio que tenga el
infractor, con un máximo de ocho horas semanales. La no realización cabal y oportuna de
los trabajos determinados por el tribunal dejará sin efecto la conmutación por el solo
ministerio de la ley, y deberá cumplirse íntegramente la sanción primitivamente aplicada.
A. Reincidencia, en el tercer inciso del artículo 494 bis, señala agravación al sujeto que es
reincidente
B. Participación de adultos y menores.
El mismo núcleo del hurto pero se agrava o aumenta la penalidad, debido al sujeto activo
está en una mayor cercanía a la cosa y abusa de esa confianza.
o Art. 447. En los casos del artículo anterior podrá aplicarse la pena inmediatamente
superior en grado:
3° Si se cometiere por el posadero, fondista u otra persona que hospede gentes en cosas
que hubieren llevado a la posada o fonda.
Hurto de cosas que forman parte de las redes de suministros de servicios públicos o
domiciliarios. Además, se agrava si causa efectos respectos de terceros, inciso segundo de
la norma.
o Art. 447 bis.- El hurto de cosas que forman parte de redes de suministro de servicios
públicos o domiciliarios, tales como electricidad, gas, agua, alcantarillado, colectores de
aguas lluvia o telefonía, será castigado con presidio menor en sus grados medio a
máximo.
Si con ocasión de alguna de las conductas señaladas en este artículo se produce la
interrupción o interferencia del servicio, la pena se aplicará en su grado máximo.
o Artículo 137 DFL 1 de 1982 del M. Minería: El que sustrajere energía eléctrica, directa
o indirectamente mediante conexiones clandestinas o fraudulentas, incurrirá en las penas
señaladas en el artículo 446º del Código Penal. En los casos de reiteración, se procederá
en conformidad a lo prevenido en el artículo 451º del Código.
1. Sujeto pasivo: Sólo compañías eléctricas reguladas en el DFL 1/1982
a.- Se habla de sustracción en vez de apropiación, por las dudas sobre el poder que se
tiene sobre la energía, aunque el consumo es una forma de uso y disposición. No se
exige ánimo de lucro (Etcheberry)
b.- Conexión clandestina que es igual a oculta; conexión fraudulenta, no autorizadas por la
empresa respectiva o la autoridad pública, aunque no se oculten (Etcheberry)
4. Aspecto subjetivo: en cuanto a la conexión clandestina o fraudulenta, dolo directo.
5. Concursos:
o Art. 4 Ley 5.507 (971171934): Será castigado con la pena de reclusión menor en su
grado mínimo y multa de $ 100 a $ 1,000, el que substrajere, hurtare, robare o destruyere
un expediente o proceso administrativo o judicial, que estuviere en tramitación o afinado.
En la substanciación y fallo de los procesos por la investigación de estos delitos, los
Tribunales apreciarán la prueba en conciencia.
1. Sujeto activo: Cualquiera. Si es funcionario público puede estimarse una agravante,
salvo art. 193 n° 8 Código Penal, en que prima pena más grave por principio de
subsidiariedad.
o Art. 193 Código Penal: Será castigado con presidio menor en su grado máximo a
presidio mayor en su grado mínimo el empleado público que, abusando de su oficio,
cometiere falsedad: 8° Ocultando en perjuicio del Estado o de un particular cualquier
documento oficial.
2. Objeto material: Expedientes o procesos administrativos o judiciales.
3. Conducta: Substraer, hurtar, robar o destruir. Debe ejecutarse con dolo directo.
4. Concurso:
a.- Con robo con fuerza o violencia o intimidación: Se castiga como robo, conforme al
principio de subsidiariedad.
b.- Si lo comete funcionario público, 193 n° 8 Código Penal -eventual delito prevaricación-.
c.- Si se dan presupuestos de 470 n° 5 Código Penal, el que tenga pena más grave por
principio de subsidiariedad.
La conducta acá no es el núcleo básico. Es la omisión. El que encuentre una cosa con un
valor que exceda una UTM y no la entregue a la autoridad o a su dueño. En el inciso
segundo se trata una figura especial respecto al hurto por hallazgo.
o Art. 448. El que hallándose una especie mueble al parecer perdida, cuyo valor exceda
de una unidad tributaria mensual, no la entregare a la autoridad o a su dueño, siempre
que le conste quién sea éste por hechos coexistentes o posteriores al hallazgo, será
castigado con presidio menor en su grado mínimo y multa de cinco unidades tributarias
mensuales.
También será castigado con presidio menor en su grado mínimo y multa de cinco unidades
tributarias mensuales el que se hallare especies, al parecer perdidas o abandonadas a
consecuencia de naufragio, inundación, incendio, terremoto, accidente en ferrocarril u otra
causa análoga, cuyo valor exceda la cantidad mencionada en el inciso anterior, y no las
entregare a los dueños o a la autoridad en su defecto.
Etcheberry: Hay apropiación sin sustracción porque las cosas ya salieron de la esfera de
custodia de su propietario o detentador.
a.- Cosas perdidas son las extraviadas y las olvidadas. No así las abandonadas
(derelictae). Las circunstancias de hecho determinarán la calificación (Etcheberry).
o Art. 727 CC: La posesión de la cosa mueble no se entiende perdida mientras se halla
bajo el poder del poseedor, aunque éste ignore accidentalmente su paradero.
c.- Si hay apropiación de cosa “dejada”, sabiendo ello, se comete hurto. Si hay
apropiación creyéndola perdida, es hurto de hallazgo. Si se cree que es abandonada, es
impune (Etcheberry).
d.- Debe constar al autor quién es el dueño, y se entrega a éste o a la autoridad. Si se
entrega a la autoridad, debe indicarse quién es el dueño, si ello se omite –sabiéndolo- se
comete igualmente el delito (Etcheberry)
e.- La cosa debe valer más de 1 unidad tributaria mensual, si vale menos falta del art. 494
n° 19 Código Penal.
f.- La expresión “hallar” la cosa, debe entenderse como “apropiarse” de ella, como
hallazgo del art. 624 CC, y por ser una variedad del hurto (Etcheberry)
Inciso 2°:
o Art. 635 CC: Si naufragare algún buque en las cosas de la República, o si el mar
arrojare a ellas los fragmentos de un buque, o efectos pertenecientes, según las
apariencias, al aparejo o carga de un buque, las personas que lo vean o sepan,
denunciarán el hecho a la autoridad competente, asegurando entre tanto los efectos que
sea posible salvar para restituirlos a quien de derecho corresponda.
Comparte el mismo núcleo básico que el hurto, pero en este caso, el sujeto activo ejerce
fuerza sobre los resguardos de la cosa. Ejemplo, El PC que está en la sala de clases,
para que se lo apropien, requiere fuerza respecto de la puerta de la sala de clases.
1. Bien jurídico:
2. Fuerza:
Fuerza ficta: Está última, si bien, no es fuerza propiamente tal, el legislador la considera
como una forma de fuerza, por ejemplo 440 N°3. Mediante seducción del doméstico.
o Art. 440 CP. El culpable de robo con fuerza en las cosas efectuado en lugar habitado
o destinado a la habitación o en sus dependencias, sufrirá la pena de presidio mayor en su
grado mínimo si cometiere el delito:
3° Introduciéndose en el lugar del robo mediante la seducción de algún doméstico, o a
favor de nombres supuestos o simulación de autoridad.
Fuerza real: Energía requerida para vencer las defensas o resguardos de la cosa y que,
además, esté prevista en uno de los casos que el legislador ha señalado.
Etcheberry, Para este autor, arrancar o cortar un árbol es hurto, ya que la fuerza utilizada
ha sido simplemente exigida por la naturaleza y característica de la cosa, y no para
vencer una especial protección dispuesta por su propietario.
La fuerza debe emplearse en la sustracción.
3. Clasificación:
Las formas de fuerza están taxativamente señaladas por el legislador, y son seis (6), ergo, si
se ejerce una fuerza distinta a las previstas, será aplicada la figura residual, hurto.
El robo con fuerza en las cosas, se clasifica tradicionalmente en tres (3) en categorías. La
siguiente clasificación reviste importancia en relación a la penalidad, debido esta depende
del LUGAR DONDE SE COMETIÓ, es decir, si se cometió en lugar habitado, no habitado o
bien de uso público.
1. Robo con fuerza en lugar habitado o destinado a la habitación o en sus dependencias,
440 CP
2. Robo con fuerza en lugar no habitado, 442 CP
3. Robo con fuerza en sitio no destinado a la habitación o bien nacional de uso público,
443 CP
Formas de fuerza
a.- Escalamiento, artículo 440 N°1 CP. Formas de sortear los resguardos que la cosa
tiene.
o Art. 440 Código Penal: N°1 Con escalamiento, entendiéndose que lo hay cuando se
entra por vía no destinada al efecto, por forado o con rompimiento de pared o techos, o
fractura de puertas o ventanas.
b.- Uso de llave falsa, verdadera sustraída o ganzúa, artículo 440 N2 CP. No se encuentra
definida que se debe entender por llave falsa. La jurisprudencia ha señalado que es LA
NO AUTORIZADA. Ejemplo, El uso de tarjeta de hotel adulterada es calificada por llave
falsa.
o Art. 440 Código Penal: N°2 Haciendo uso de llaves falsas, o verdaderas que hubiese
sido substraída, de ganzúas u otros instrumentos semejantes para entrar en el lugar del
robo.
c.- Introducción mediante seducción 440 N°3 CP. Sortear mediante seducción a quien
resguarda la cosa, no requiere la consumación. No se debe confundir con el artículo 223
CP, prevaricación.
o Art. 440 Código Penal N°3. Introduciéndose en el lugar del robo mediante la
seducción de algún doméstico, o a favor de nombres supuestos o simulación de autoridad.
1° Cuando a sabiendas fallaren contra ley expresa y vigente en causa criminal o civil.
o Art. 442. El robo en lugar no habitado, se castigará con presidio menor en sus grados
medio a máximo siempre que concurra alguna de las circunstancias siguientes:
1a. Escalamiento.
2a. Fractura de puertas interiores, armarios, arcas u otra clase de muebles u objetos
cerrados o sellados.
Profesor Juan Francisco Rivera, Derecho Penal Especial - Apuntes comunes y apoyo de
clases, transcritas por Aldo Vargas UDLA 2013
3a. Haber hecho uso de llaves falsas, o verdadera que se hubiere substraído, de ganzúas u
otros instrumentos semejantes para entrar en el lugar del robo o abrir los muebles
cerrados.
e.- Fractura de dispositivos de protección, Se encuentra tratado respecto del robo en los
bienes de uso público, artículo 443 CP. Ejemplos, Candados, vidrios, desactivar una
alarma, tapara una cámara, etc.
o Art. 443. Con la misma pena señalada en el artículo anterior se castigará el robo de
cosas que se encuentren en bienes nacionales de uso público o en sitio no destinado a la
habitación si el autor hace uso de llaves falsas o verdaderas que se hayan substraído, de
ganzúas u otros instrumentos semejantes o si se procede, mediante fractura de puertas,
vidrios, cierros, candados u otros dispositivos de protección o si se utilizan medios de
tracción.
Si el delito a que se refiere el inciso precedente recayere sobre un vehículo motorizado,
se impondrá la pena de presidio menor en su grado máximo.
Este tipo de robo permite la comisión con tres (3) formas de fuerza, señaladas en el
artículo 440 CP. Es la figura con penalidad más alta de las tres (3) en la clasificación, por el
mayor disvalor de la conducta del sujeto activo.
o Art. 440 CP: El culpable de robo con fuerza en las cosas efectuado en lugar habitado
o destinado a la habitación o en sus dependencias, sufrirá la pena de presidio mayor en su
grado mínimo si cometiere el delito:
1° Con escalamiento, entendiéndose que lo hay cuando se entra por vía no destinada al
efecto, por forado o con rompimiento de pared o techos, o fractura de puertas o ventanas.
2° Haciendo uso de llaves falsas, o verdadera que hubiere sido substraída, de ganzúas u
otros instrumentos semejantes para entrar en el lugar del robo.
3° Introduciéndose en el lugar del robo mediante la seducción de algún doméstico, o a
favor de nombres supuestos o simulación de autoridad.
1. Pena: No atiende al valor de lo sustraído.
2. Tipicidad:
Postura tres: Lugar destinado a la habitación: Indica el objeto a que se dedica un lugar,
apreciado en el momento del robo, no alude al objeto que un lugar tengo dentro de los
propósitos de quien lo construyó o de su propietario (Etcheberry).64
Etcheberry: La expresión “lugar habitado o destinado a la habitación” comprende en
consecuencia todos aquellos lugares en que una persona o grupo de personas tiene su
hogar doméstico en el momento del robo. Se comprende tanto el caso en que el grupo de
personas en cuestión se encontrara efectivamente viviendo en el lugar en el momento del
robo (lugar habitado) o estuviera accidental o temporalmente ausente (lugar destinado a la
habitación).
Algunos autores usan un concepto funcional
2. Dependencias:
Postura uno: Lugar delimitado que sirva funcionalmente (esté dentro del uno que se le da
habitualmente a ese recinto) para el lugar habitado o destinado a la habitación.
Postura dos: Son recintos cerrados con comunicación interna con el lugar principal, sobre los
cuales ejerce su derecho el titular de la casa principal, y que se destina a alguna función
complementaria de la actividad que se desarrolla en el hogar doméstico, que es el lugar
principal.65
64 Labatut: estima que es aquél cuya finalidad normal es servir de morada, aunque en el
momento de perpetrarse el delito no esté habitado, ej. casa de veraneo. Incluye ausencia
transitoria –en el momento del robo- como temporal de moradores.
65 Politoff/Matus/Ramírez: lugar unido, contiguo, directamente comunicado con el lugar
habitado, y que se encuentran dentro de una misma esfera de resguardo que sólo pueda
burlarse por alguno de los medios del art. 440. Ej. patio, garaje, almacén, ubicados al
interior del perímetro enrejado de una casa-habitación, o que sean piezas de ella. Hay un
mayor peligro que autoriza la agravación.
2.2. Conducta:
Delito perfecto en dos actos: Entrar con fuerza en las cosas y sustraer.
Medios de ingreso:
Vía no destinada al efecto: Depende del destino efectivo que a tales vías se les dé por los
moradores del lugar (Etcheberry). Para entrar, no incluye escalamiento interno.
b) Uso de llaves falsas, ganzúas u otros instrumentos semejantes:
El medio de protección es la cerradura, el que se abre con una llave (el candado es una
especie particular de cerradura, Etcheberry). Por ello se excluye los cierros interiores
como picaportes o barras (se asimila a rompimiento de pared, Etcheberry), y los
dispositivos electrónicos o magnéticos (si comprende las tarjetas rígidas perforadas al
actuar mecánicamente)
b.1. Llaves falsas: Llave verdadera es la que corresponde, en su origen, al mecanismo de
la cerradura de que se trata y se encuentra destinada por los habitantes del lugar a dicho
efecto. Son falsas (Etcheberry):
Llaves maestras y no destinadas por propietario para abrir la cerradura.
Las que constituyan duplicados de las llaves verdaderas, obtenidas sin la voluntad de su
propietario.67
67 Si la sirviente entrega la llave que le ha sido confiada a un tercero, y ella se queda con
copia, el tercero tiene una llave falsa, porque es el carácter de supernumeraria lo que le
confiere en este caso el carácter de falsa (Etcheberry).
b.2. Verdaderas sustraídas
Problemas especiales:
Llave extraviada: Labatut y Etcheberry (no hay sustracción), no es llave falsa. Para otros,
pierde su destino.
Llave indebidamente retenida: Es llave falsa. Lo mismo si se obtiene mediante engaño y se
niega la restitución (de lo contrario, hurto) 68
Lave dejada en lugar seguro: Es llave sustraída, pues se encontraba en la esfera de
protección.
Llave del empleado facilitada a un tercero: Es llave falsa, porque el dueño la destinó
sólo al uso del empleado.
Llave del arrendador/arrendatario: Si la contraparte no tiene conocimiento de su
conservación, es falsa.
b.3. Uso de ganzúa u otro instrumento semejante: debe imitar la función de la llave en la
cerradura (se excluye tarjeta introducida entre pestaña y puerta que hace retroceder el
pestillo y abrirse la puerta, Carrara)
Trabajadora deja entrar amante, sabiendo propósito autor: Si deja abierta puerta, 446 con
agravante 12 n° 7 la trabajadora. Si deja abierta ventana, 440 n° 1 con agravante 12 n° 7 la
trabajadora.
c.2. Usar de nombre supuesto: No impone usar un nombre propiamente tal, basta, por
ejemplo, “soy el primo del dueño”, con lo que se atribuye una identidad falsa.
c.3. Simulación de autoridad: No es necesario que se revista de apariencias externas,
según las circunstancias.70
68 En ambos casos para Etcheberry, no es falsa porque no hay sustracción.
1) Violación de morada,
Las formas de fuerza que contempla el legislador para éste delito están en el artículo 442
CP
o Art, 442 CP. El robo en lugar no habitado, se castigará con presidio menor en sus
grados medio a máximo siempre que concurra alguna de las circunstancias siguientes:
1a. Escalamiento.
2a. Fractura de puertas interiores, armarios, arcas u otra clase de muebles u objetos
cerrados o sellados.
3a. Haber hecho uso de llaves falsas, o verdadera que se hubiere substraído, de ganzúas u
otros instrumentos semejantes para entrar en el lugar del robo o abrir los muebles
cerrados.
1. Diferencia punitiva se justifica porque hay una disminución del riesgo de encuentro del
sujeto activo con otras personas en el lugar.
2. Tipicidad:
Postura Uno: En el momento del robo no sirven de morada a nadie, pero por su naturaleza
pueden servir de habitación, es decir lugar no habitado pero habitable. Se refiere
siempre a un recinto cerrado, esto es, a una porción del espacio comprendida dentro de
ciertos límites y protegida por reparos (paredes, cercos, techos, etc.), que impiden el
acceso libre e indiscriminado. La entrada debe lograrse a través de ciertas vías
especialmente destinadas a ello, y utilizando eventualmente determinados instrumentos
(llaves). (Etcheberry71).Es irrelevante la presencia física de personas.
Postura del profesor: Lugar que en momento del robo no hay personas.
2.2. Fuerza:
c.- Llaves falsas: Presenta una diferencia "o para abrir muebles cerrados".
c) Uso de llaves falsas, verdaderas sustraídas y otros instrumentos: si la llave falsa se usa
para abrir puerta interior es hurto.
71 Este autor da como ejemplo la residencia veraniega durante la temporada invernal.
o Art. 443 CP: Con la misma pena señalada en el artículo anterior se castigará el robo de
cosas que se encuentren en bienes nacionales de uso público o en sitio no destinado a la
habitación si el autor hace uso de llaves falsas o verdaderas que se hayan substraído, de
ganzúas u otros instrumentos semejantes o si se procede, mediante fractura de puertas,
vidrios, cierros, candados u otros dispositivos de protección o si se utilizan medios de
tracción.
1.1. Lugar: Debe reunir los siguientes dos elementos, ser un;
La fuerza se aplica directamente sobre la cosa objeto del robo o a los medios que la
protegen
72 En este delito, para calificar normativamente el lugar de comisión, debe atenderse al
espacio en que se emplaza ya sea, directamente “la misma cosa apropiada”, o “el recinto,
cubículo o móvil” en que se encuentra dicha cosa. Ejemplo de cosa ubicada directamente en
bien nacional de uso público, es la bicicleta que se sujeta a un árbol con una cadena en la
vía pública (la cosa sustraída no está dentro de un recinto, sino directamente en un bien
nacional de uso público). Ejemplos de cosa apropiada ubicada en un recinto, cubículo o
móvil emplazado éstos en bien nacional de uso público o en sitio no destinado a la
habitación, son los siguientes: se sustrae mercadería de un pequeño kiosco ubicado en la
vía pública, aquí el delito se comete en bien nacional de uso público, porque debemos
fijarnos en el espacio en que se ubica el kiosco –vía pública-, más que a la naturaleza
del kiosco mismo, el cual no es habitado ni habitable (En igual situación se encuentra el
vehículo estacionado en la calle o el cubículo de peaje de carretera concesionada). Lo
mismo respecto de la boletería del metro, ésta se ubica en un sitio no destinado a la
habitación –la estación de metro-, circunstancia a la cual debe atenderse, por sobre la
naturaleza de la boletería misma, sin perjuicio de que ella no es un lugar habitado ni
habitable.
73 Es decir, el sitio no destinado a la habitación puede o no ser un lugar cerrado, y puede o
no tener resguardos (el bien nacional de uso público generalmente será abierto y sin
resguardos), atendido que, por ejemplo, un cementerio (respecto de objetos sustraídos de un
mausoleo) o un predio agrícola (respecto de objetos sustraídos de una pequeña
bodega emplazada en su interior), pueden estar delimitados y resguardados
perimetralmente por algún tipo de cerco, reja o muralla, y ambos constituyen un sitio no
destinado a la habitación, y se comete el delito del art. 443 inc. 1° del Código Penal si se
realiza la apropiación utilizando alguno de los tipos de fuerza que describe dicha norma. Lo
mismo puede decirse de una maestranza, una bodega, etc. Se discrepa por tanto de
Politoff/Matus/Ramírez, para quienes la sustracción no se comete dentro de un lugar
determinado, sino sobre una extensión de terreno carente de resguardos que impidan la
entrada no autorizada. Añaden estos autores –en esta parte sí concordamos- que esta
extensión no estará delimitada si se trata de bienes nacionales de uso público, y sí podrá
estarlo tratándose de sitio no destinado a la habitación (como sucede típicamente en los
predios rurales delimitados sólo por cercos).
Dispositivo de protección son los artificios que constituyan en sí impedimentos para que
un tercero pueda tener acceso a la cosa o trasladarla físicamente, excluyendo la alarma
automática (Etcheberry)
Medios de tracción: tracción es arrastre o tiro, debe emplearse algún método que
aumente su simple fuerza física (Etcheberry)
1.3. Objeto
2. Agravación especial:
o Art. 447 bis.- El hurto de cosas que forman parte de redes de suministro de
servicios públicos o domiciliarios, tales como electricidad, gas, agua, alcantarillado,
colectores de aguas lluvia o telefonía, será castigado con presidio menor en sus grados
medio a máximo.
Si con ocasión de alguna de las conductas señaladas en este artículo se produce la
interrupción o interferencia del servicio, la pena se aplicará en su grado máximo.
IV. ROBO DE DISPENSADORES DE DINERO
o Art. 443 bis Código Penal: El robo con fuerza de cajeros automáticos, dispensadores
o contenedores de dinero, o del dinero y valores contenidos en ellos, será sancionado
con la pena de presidio menor en su grado máximo. Para los efectos del presente artículo
se entenderá que hay fuerza en las cosas si se ha procedido con alguno de los
medios señalados en el artículo 440, Nos 1° y 2°; si se ha fracturado, destruido o dañado el
cajero automático o dispensador o sus dispositivos de protección o sujeción mediante el
uso de instrumentos contundentes o cortantes de cualquier tipo, incluyendo el empleo de
medios químicos; o si se utilizan medios de tracción.
o Art. 436 Código Penal: Fuera de los casos previstos en los artículos precedentes, los
robos ejecutados con violencia o intimidación en las personas, serán penados con presidio
mayor en sus grados mínimo a máximo, cualquiera que sea el valor de las especies
substraídas.
1. Bien jurídico: Delito pluriofensivo.
4.1. Violencia: Energía o fuerza física empleada sobre la víctima, los malos tratos para
hacer que se manifiesten o entreguen las cosas o para impedir la resistencia a que se
quiten (Art. 439).
Según Etcheberry, hay violencia en la persona cuando se aplica energía física
directamente sobre la persona de la víctima, v.gr., se le golpea, se le ata, se le amordaza, se
le sujeta, se le hiere, se le da muerte por un medio vulnerante, etc. Puede emplearse
también un medio: v.gr. un animal, una trampa, que produzca los mismos efectos. También
es violencia el empleo sobre le víctima de una energía lesionadora que no la alcanza
(disparo que yerra el blanco)
4.2. Intimidación:
Concepto amplio de intimidar, no sólo la amenaza explícita. Debe distinguirse de la
amenaza condicionada.
74Oo. Politoff/Matus/Ramírez: no comprende cualquier acto violento, debe tratarse de un
significativo atentado contra la integridad o la seguridad personal. Debe constituir al
menos 399 Código Penal, o una lesión efectiva y seria a la seguridad de las personas
mediante su privación de libertad.
Debe reunir los requisitos del art. 296 Código Penal y algo más:
o Art. 296. El que amenazare seriamente a otro con causar a él mismo o a su familia, en
su persona, honra o propiedad, un mal que constituya delito, siempre que por los
antecedentes aparezca verosímil la consumación del hecho, será castigado:
1º. Con presidio menor en sus grados medio a máximo, si hubiere hecho la amenaza
exigiendo una cantidad o imponiendo ilegítimamente cualquiera otra condición y el culpable
hubiere conseguido su propósito.
2° Con presidio menor en sus grados mínimos a medio, si hecha la amenaza bajo
condición el culpable no hubiere conseguido su propósito.
3° Con presidio menor en su grado mínimo, si la amenaza no fuere condicional; a no ser
que merezca mayor pena el hecho consumado, caso en el cual se impondrá ésta.
Cuando las amenazas se hicieren por escrito o por medio de emisarios, éstas se estimarán
como circunstancias agravantes.
Para los efectos de este artículo se entiende por familia el cónyuge, los parientes en la
línea recta de consanguinidad o afinidad legítima, los padres e hijos naturales y la
descendencia legítima de éstos, los hijos ilegítimos reconocidos y los colaterales hasta el
tercer grado de consanguinidad o afinidad legítimas.
Seriedad: Debe existir la amenaza, explícita o implícitamente.
Gravedad del mal amenazado: Ataque contra la vida, salud o integridad del amenazado o de
otra persona relacionada que se encuentre presente (y al alcance del hechor), o una
privación de libertad superior al tiempo de la que importa la amenaza. Excluye los daños
materiales.
Verosimilitud del mal amenazado: El mal amenazado debe parecer posible de
realizarse a los ojos del ofendido (posibilidad relativa), conforme a un juicio ex ante de un
tercero puesto en la concreta situación fáctica de que se trate (no se exige que sea
verdadero). Situación arma de juguete o inexistente (para Politoff/Matus/Ramírez se excluye
la punibilidad a este título si el mal es absolutamente imposible de causar)
La amenaza debe ser concreta: El mal amenazado es inmediato o inminente. De lo
contrario, 296 n° 1 Código Penal.
4.3. Violencia ficta como forma de intimidación o engaño:
Art. 439 Código Penal parte final: Hará también violencia el que para obtener la entrega o
manifestación alegare orden falsa de alguna autoridad, o la diere por sí fingiéndose
ministro de justicia o funcionario público.
Según Etcheberry, la diferencia con el art. 440 n° 3 Código Penal, es que en éste el medio
engañoso es para “entrar” al lugar, mientras en el art. 439 Código Penal, es para “obtener la
entrega o manifestación” de la cosa (en el primero quien se hace pasar por receptor entra
y se lleva la cosa, mientras en el segundo, como receptor pide la entrega de la cosa.
75 Etcheberry: al señalar el art. 439 del Código Penal, “cualquier otro acto que pueda
intimidar o forzar a la manifestación o entrega”, es suficiente la simulación de violencia
efectiva, si ella es idónea (amenazar con revólver descargado, o con un puñal de utilería),
pues tales actos producen en la víctima la misma reacción paralizante que la violencia
efectiva o su amenaza.
ART. 433 N° 1 CP
o Art. 433 Código Penal: El culpable de robo con violencia o intimidación en las
personas, sea que la violencia o la intimidación tenga lugar antes del robo para facilitar su
ejecución, en el acto de cometerlo o después de cometido para favorecer su impunidad,
será castigado:
1° Con presidio mayor en su grado medio a presidio perpetuo calificado cuando, con
motivo u ocasión del robo, se cometiere, además, homicidio, violación o alguna de las
lesiones comprendidas en los artículos 395, 396 y 397, N° 1°.
2° Con presidio mayor en su grado medio a máximo, cuando las víctimas fueren retenidas
bajo rescate o por más de un día, o se cometieren lesiones de las que trata el N° 2° del
artículo 397.
Con motivo: El homicidio se comete para robar, se busca lograr o facilitar el robo.
77Oo. Etcheberry: si se trata de alguna de las otras tres calificantes –n° 2, 3 y 4 del art.
391 n° 1 del Código Penal-, se tienen en cuenta para efectos del art. 69 del Código Penal, y
no como agravantes del art. 12. Ello lo colige “por exclusión”, ya que el art. 456 bis del
Código Penal sólo autoriza la aplicación de las agravantes de alevosía y premeditación y
no las demás. El art. 456 bis debía hacer esta habilitación para aplicar las agravantes de
alevosía y premeditación porque el art. 12 las limita a los delitos contra las personas, en
circunstancias que aquí nos encontramos con delitos contra la propiedad o patrimonio, por lo
que respecto de las otras agravantes –recompensa, veneno, ensañamiento-, que no se
limitan a los delitos contra las personas, no era necesario realizar tal habilitación legal.
78 Etcheberry estima que hay concurso de robo y parricidio (si ha habido otras violencias
que no sean las constitutivas del parricidio mismo; si no las ha habido, el concurso será
entre hurto y parricidio).
Iter criminis:
o Art. 450 incisos 1 y 2. Los delitos a que se refiere el Párrafo y el artículo 440 del
Párrafo 3 de este Título se castigarán como consumados desde que se encuentren en
grado de tentativa.
En los delitos de robo y hurto, la pena correspondiente será elevada en un grado cuando
los culpables hagan uso de armas o sean portadores de ellas.
Tentativa: Debe verificarse el dolo respecto de las dos conductas. Etcheberry precisa
que, objetivamente, y por el carácter de conexión ideológica que ambos delitos tienen, en
que uno es el medio para el otro, si se ha comenzado a ejecutar el homicidio para robar,
ya hay tentativa de robo con homicidio. Pero si se ha comenzado a ejecutar solamente la
apropiación, mas no hay comienzo de ejecución del homicidio, hay solamente tentativa de
robo simple, pero no de robo con homicidio. La consumación del delito supone la
consumación completa tanto de la apropiación como del homicidio (sin perjuicio de art.
450 Código Penal)
Participación:
Debe atenderse al dolo de los partícipes. En los partícipes en que no concurre ni siquiera el
dolo eventual respecto del homicidio, responden sólo por robo simple.
Etcheberry explica que este problema puede presentarse en general con respecto a los
robos simples, caso en el cual la circunstancia de concurrir violencia afectará o no a los
distintos participantes, según haya o no concierto previo para ella –art. 15 n° 3 cp-, o, de
no haberlo, en conformidad a lo que resulte de la aplicación de la regla del art. 64 inc. 2°
del Código Penal.
Cúmulo de homicidios: Se sanciona un 433 n° 1. Es un caso de tipicidad reforzada, se
aplica art. 69 Código Penal.
o Art. 433. El culpable de robo con violencia o intimidación en las personas, sea que la
violencia o la intimidación tenga lugar antes del robo para facilitar su ejecución, en el acto
de cometerlo o después de cometido para favorecer su impunidad, será castigado:
1° Con presidio mayor en su grado medio a presidio perpetuo calificado cuando, con
motivo u ocasión del robo, se cometiere, además, homicidio, violación o alguna de las
lesiones comprendidas en los artículos 395, 396 y 397, N° 1°.
2° Con presidio mayor en su grado medio a máximo, cuando las víctimas fueren retenidas
bajo rescate o por más de un día, o se cometieren lesiones de las que trata el N° 2° del
artículo 397.
ABIGEATO Y RECEPTACIÓN
I. ABIGEATO
o Artículo 448 bis. El que robe o hurte uno o más caballos o bestias de silla o carga, o
especies de ganado mayor o menor, comete abigeato y será castigado con las penas
señaladas en los párrafos 2, 3 y 4.
Asimismo, se considerará autor del delito de abigeato al que sin el consentimiento de
quienes pueden disponer del ganado:
1°. Altere o elimine marcas o señales en animales ajenos.
3°. Expida o porte certificados falsos para obtener guías o formularios o haga conducir
animales ajenos sin estar debidamente autorizado.
Se regula en el párrafo 4 bis.
Figura del artículo 448 bis inc. 1°: No es una figura delictiva independiente, sino una
agravación obligatoria a los delitos de robo o hurto, una vez determinada la pena concreta.
Objeto material:
Uno o más, caballos o bestias de silla o carga, o especies de ganado mayor o menor.
Recae sobre animales vivos, y el art. 448 bis inc. 4° se refiere a animales muertos
(beneficiar –descuartizar una res- o destruir –darle muerte y separar partes de ella-).
Figuras especiales: 448 bis inc. 2°, 448 ter inc. 4°, 448 ter inc. 1°: problemas
determinación de pena (¿qué pena se toma como base, robo o hurto?) y problemas de
culpabilidad (¿es necesario conocer el robo o hurto de los animales o sus partes?)
o Art. 456 bis A Código Penal: El que conociendo su origen o no pudiendo menos que
conocerlo, tenga en su poder, a cualquier título, especies hurtadas, robadas u objeto de
abigeato, de receptación o de apropiación indebida del artículo 470, número 1°, las
transporte, compre, venda, transforme o comercialice en cualquier forma, aun cuando ya
hubiese dispuesto de ellas, sufrirá la pena de presidio menor en cualquiera de sus grados y
multa de cinco a cien unidades tributarias mensuales.
Para la determinación de la pena aplicable el tribunal tendrá especialmente en cuenta el
valor de las especies, así como la gravedad del delito en que se obtuvieron, si éste era
conocido por el autor.
Cuando el objeto de la receptación sean cosas que forman parte de redes de suministro de
servicios públicos o domiciliarios, tales como electricidad, gas, agua, alcantarillado,
colectores de aguas lluvia o telefonía, se impondrá la pena de presidio menor en su grado
máximo y multa de cinco a veinte unidades tributarias mensuales. La sentencia
condenatoria por delitos de este inciso dispondrá el comiso de los instrumentos,
herramientas o medios empleados para cometerlos o para transformar o transportar los
elementos sustraídos. Si dichos elementos son almacenados, ocultados o transformados
en algún establecimiento de comercio con conocimiento del dueño o administrador, se podrá
decretar, además, la clausura definitiva de dicho establecimiento, oficiándose a la autoridad
competente.
Se impondrá el grado máximo de la pena establecida en el inciso primero, cuando el autor
haya incurrido en reiteración de esos hechos o sea reincidente en ellos. En los casos de
reiteración o reincidencia en la receptación de los objetos señalados en el inciso
precedente, se aplicará la pena privativa de libertad allí establecida, aumentada en un
grado.
Tratándose del delito de abigeato la multa establecida en el inciso primero será de setenta y
cinco a cien unidades tributarias mensuales y el juez podrá disponer la clausura definitiva del
establecimiento.
Se regula en el párrafo 5 bis.
Para Etcheberry esta expresión es una forma de expresar que el conocimiento del origen de
las cosas puede constar directamente (testigos, documentos, confesión) o bien
indirectamente (presunciones). El conocimiento siempre es exigido: no basta para incurrir en
esta hipótesis una ignorancia del origen derivada de negligencia para informarse.
D. Admite tentativa (no frustración81) así como complicidad y encubrimiento, por ser
figura autónoma del delito base.
E. Es delito de emprendimiento, por lo que no importa el número de actos, sin embargo, la
reiteración o reincidencia da lugar a agravación punitiva (art. 456 bis A inc. 4°)
F. Al ser una de las conductas incriminadas “tener en su poder”, abarca a quien adquiere las
cosas ignorando su mala procedencia, de la cual se entera con posterioridad (Etcheberry).
Para la determinación de la pena se tiene en cuenta el valor de las especies, así como la
gravedad del delito en que se obtuvieron, si éste era conocido por el autor. Etcheberry
critica esta parte de la norma, pues si el autor no conoce el origen de las especies o no
podía menos que conocerlo, no hay delito. * Esta parte de la norma se refiere al
conocimiento de las circunstancias específicas del delito, es decir, si el receptador sabía, por
ejemplo, que la especie se obtuvo de un robo con homicidio a dos personas, cometido dos
días atrás cerca de su domicilio, o sólo sabía que se obtuvo de un robo o hurto.
81 Oo. Politoff/Matus/Ramírez.
DELITOS CONTRA LA LIBERTAD E INDEMNIDAD SEXUAL Y LA HONESTIDAD
BIEN JURÍDICO PROTEGIDO
CLASIFICACIÓN
1. Violación
2. Estupro
183 Garrido M. precisa que en algunos casos no existe libertad sexual que vulnerar, sin
perjuicio de lo cual una misma acción puede afectar la facultad sexual en tanto bien o
valor humano, y al mismo tiempo lesionar el normal proceso de desarrollo, definición y
conformación de esa sexualidad. Dicha lesión, a juicio del legislador, amerita su amparo
penal. En su segundo sentido, la indemnidad sexual aparece como el precedente natural de
la libertad de autodeterminación, pudiendo entenderse, por ejemplo, que la lesión de esta
última constituye al menos una hipótesis de peligro respecto de la segunda. La
indemnidad sexual en su primer sentido afecta necesariamente a quienes no detentan las
facultades naturales de comprender el significado del uso de su sexualidad, alcanzando a los
incapaces absolutos y a quienes padecen de una perturbación grave de la razón o
conciencia. En el caso de los impúberes (incapaces), la indemnidad se ve lesionada en sus
dos dimensiones, en tanto el uso prematuro de su sexualidad, como a la falta de
capacidad de comprensión del acto, lo que incidirá en el desarrollo posterior de su
sexualidad.
3. Abusos sexuales
4. Corrupción de menores
4.1. Exposición del menor a actos de significación sexual (art. 366 quáter CP)
1. Conducta
2. Las distintas hipótesis (cinco). Se puede considerar como hipótesis el artículo 362 CP,
violación impropia.
o Art. 361 CP: “La violación será castigada con la pena de presidio mayor en su grado
mínimo a medio.
Comete violación el que accede carnalmente, por vía vaginal, anal o bucal, a una persona
mayor de catorce años, en alguno de los casos siguientes:
1º Cuando se usa de fuerza o intimidación.
Art. 361 n°1 CP: lo atacado es la capacidad de actuación de la víctima en materia sexual
(*libertad sexual).
Art. 361 n°2 -incapacidad de resistir de la víctima- CP: para tener capacidad de actuación en
material sexual se requieren ciertos presupuestos objetivos que aquí faltan, por lo que el bien
jurídico preferente es la intangibilidad o indemnidad sexual.
Art. 361 n° 3 –enajenación mental-: tratándose de ciertos parámetros culturalmente
determinados, la honestidad aparece como uno de los bienes jurídicos a que la ley quiere dar
protección.
2. Tipicidad:
a) Sujetos:
Sujeto activo: Sólo hombre, porque requiere acceso carnal (Si es mujer, abuso sexual184)
184 En el mismo sentido, Francisco Maldonado y Luis Rodríguez Collao. Oo. Raúl Carnevalli
y Garrido M. que incluyen a la mujer como sujeto activo. Este último atiende a la voluntad del
legislador manifestada en la historia de la ley 19.627 como a los términos utilizados en la
norma, que no descartan a la mujer como sujeto activo.
Sujeto pasivo: cualquier persona mayor de 14 años.
b) Conducta:
Acceso carnal: sólo el acceso del pene, excluyéndose otros objetos (sería abuso sexual) Se
excluye la omisión y autoría mediata.
La conducta descrita como constitutiva del delito de violación no reviste en sí carácter
ilícito, es en razón de las circunstancias que rodean su comisión, relacionadas siempre y en
forma directa con la ausencia de voluntad de la víctima, las que permiten calificarla como
prohibida (Garrido M.)
1.- Fuerza: Es de carácter físico y se ejerce sobre la persona violada (fuera de ello es
intimidación). Con el objetivo de vencer la resistencia de la víctima (no consentida).
La puede ejercer quien accede u otro (hombre o mujer)
No es necesario que la fuerza se mantenga durante toda la actividad violatoria, ni tampoco
que la resistencia sea continuada, basta que queden de manifiesto la fuerza y la voluntad
contraria.
Es insuficiente la simple vía de hecho propia de la relación sexual. Garrido M. agrega que la
fuerza debe ser intensa, o sea, tener gravedad suficiente para vencer o impedir la
resistencia de la víctima, lo que no implica exigir que sea irresistible.185
2.- Intimidación: Violencia moral o amenaza de un mal grave con que se logra el acceso
carnal contra la voluntad de la ofendida.186 El mal debe serio, real, inminente y antijurídico.
Con el objetivo de vencer la resistencia de la víctima (no consentida).
Etcheberry: El mal en qué consiste la intimidación debe significar causar un inminente
daño físico en el cuerpo, en la vida o en la salud de la propia persona afectada, o de otra
persona con la cual se encuentre ligada por vínculos afectivos, que sean de tal naturaleza que
hacen posible su intimidación.
La amenaza requiere seriedad, verosimilitud, gravedad e inmediatez.
Seria: Que exista y no sea dicha en broma o de cualquier forma que indica falta en quien la
emite de voluntad real para ejecutarla. No basta temor reverencial.
Verosímil: cualquier tercero situado en la posición de la víctima pueda dar por cierta la
realización del mal amenazado, de no acceder al acceso carnal. Incluye el “engaño
intimidatorio” serio y verosímil (ej. amenazar con arma de fogueo).
185 Precisa este autor que la víctima debe oponerse con firmeza a la realización del acto. No
hay que confundir esa oposición con la resistencia que frecuentemente opone la mujer en
virtud de razones de pudor.
Agrega que no varía la situación de fuerza, si el sujeto pasivo ha realizado concesiones
libidinosas previas al agente, o le ha hecho insinuaciones, siempre que no haya mediado
disposición para la vinculación sexual.
186 ara Garrido M. consiste en la presión psicológica de obra o de palabra que se ejerce sobre
la víctima mediante la amenaza de verse expuesta a sufrir un mal próximo, sea que el mal
recaiga en ella misma o en una persona distinta de relevancia para ella.
Grave: el mal debe ser un delito que afecte la seguridad o integridad física de la persona
ofendida o de un tercero presente con quien ésta tenga lazos de parentesco o afectividad.
Incluye la fuerza ejercida sobre las cosas que sirven de protección a la víctima (ej. romper a
golpes la puerta)
Inmediatez: Carácter actual o inminente del mal con que se amenaza, el que se dirige
contra personas presentes.
Si falta la gravedad o inmediatez, podría subsumirse en los arts. 296 ó 297 cp.
Consiste en un estado más o menos sensible y permanente que va más allá de la simple
anomalía o perturbación mental del art. 363 n° 1 cp, y debe ser de tal importancia que
impida a la víctima entender el significado del acto sexual como actividad corporal y
reproductiva a la vez.
El prevalimiento no puede darse por parte de un sujeto que se encuentra en las mismas
condiciones que la víctima.
3. Faz subjetiva:
Dolo directo. Aunque sobre el conocimiento de las circunstancias fácticas del art. 361 N°3,
requiere abuso de la situación de trastorno mental por tal no admite dolo eventual.188 En los
restantes numerales el legislador no distingue por tal se puede admitir dolo eventual. En la
práctica es bastante difícil.
4. Iter criminis:
189 Garrido M.: La referencia al acceso debe implicar algo más que el simple contacto o
frotación vaginal, anal o bucal y, al mismo tiempo, algo menos que la penetración, y
muchos menos que la inseminación. Basta la existencia de una invasión de las cavidades
mencionadas para que constituya algo más que un simple contacto, sin llegar a la exigencia
de una penetración total.
5. Autoría y participación:
Violación y otras agresiones sexuales: La violación absorberá los otros delitos (ej.
estupro), salvo que la violación quede en grado de tentativa, y la preceda abusos sexuales,
sancionándose por este último, por principio de alternatividad.190
Concurren varias circunstancias del art. 361: como tipo mixto alternativo, constituye un solo
delito.192
o Art. 362: “El que accediere carnalmente, por vía vaginal, anal o bucal, a una persona
menor de catorce años, será castigado con presidio mayor en cualquiera de sus grados,
aunque no concurra circunstancia alguna de las enumeradas en el artículo anterior”.
Bien jurídico protegido:
191 Garrido M.: la violación subsume los resultados de las lesiones menos graves.
192Garrido M.: todas las circunstancias dan cuenta de la ausencia de voluntad, por lo que la
concurrencia de más de una de ellas, no agrega ningún fundamento a la punibilidad del hecho.
Precisa este autor que el art. 362 CP asume en su disvalor delictivo las modalidades
descritas en el art. 361.
193Oo. Garrido M.: cuando son varios los sujetos y todos o algunos de ellos llevan a cabo el
acceso con una única víctima, empleando la misma fuerza o intimidación, hay un
concurso material o real de delitos, porque la acción del sujeto activo en la violación es de
carácter personalísimo.
o Art. 372 bis CP: “El que, con ocasión de violación, cometiere además homicidio en la
persona de la víctima, será castigado con presidio perpetuo a presidio perpetuo
calificado”.
Se excluye el resultado culposo, en ese caso hay concurso ideal entre la violación el
cuasidelito de homicidio.194
Garrido M.: Se requiere que el homicidio se cometa dentro del contexto fáctico de ejecución
de la violación. Si está descontextualizado fácticamente de la violación, se recurrirá a
las reglas generales del concurso para sancionar esos hechos.
Acceder carnalmente por las vías que la ley señala a une persona mayor de catorce años y
menor de edad.
Se trata de personas que están en una etapa de su vida vulnerable, desarrollo físico y
sexual, situación que un adulto se aprovecha.
Todas las hipótesis contempladas en éste artículo sanciona el ABUSO.
o Art. 363 CP: “Será castigando con presidio menor en su grado máximo a presidio
mayor en su grado mínimo, el que accediere carnalmente, por vía vaginal, anal o bucal, a
una persona menor de edad pero mayor de catorce años, concurriendo cualquiera de
las circunstancias siguientes:
Sujetos: Igual que violación, salvo que sujeto pasivo debe ser mayor de 14 y menor de 18
años.196
Si el sujeto pasivo tiene menos de 14 años, se sanciona por art. 362 CP.
Circunstancias:
Hay una relación transitoria entre el hechor y la víctima, de la cual aquél abusa, con la
amenaza latente de mantenerla en el desamparo o de no prestarle la ayuda requerida.
El legislador no distingue por tal el desamparo se debe entender de forma amplia. Ejemplo,
Desamparo económico, etc.
Garrido M.: no se distingue las causas del desamparo ni su naturaleza (económico,
afectivo, de cuidado personal)
4) Engaño.
Sólo dolo directo atendido el prevalimiento y engaño exigido por la ley (Garrido M.)
Iter criminis:
Siendo de mera actividad este delito, sólo admite la tentativa (Garrido M.)
195 Garrido M.: es la libre voluntad de la víctima, como bien jurídico, el interés amparado por
la figura, entrecruzado –en el caso de comisión por engaño- por la indemnidad sexual en el
ámbito que corresponde al normal desarrollo de la sexualidad de un menor de edad.
196Oo. Garrido M.: el sujeto activo puede ser varón o mujer.
197 Garrido M.: indica que las hipótesis de comisión se fundan en el prevalimiento (n° 1, 2 y 3),
y en el engaño (n° 4)
ABUSOS SEXUALES.
o Art. 366 CP: “El que abusivamente realizare una acción sexual distinta del acceso
carnal con una persona mayor de catorce años, será castigado con presidio menor en su
grado máximo, cuando el abuso consistiere en la concurrencia de alguna de las
circunstancias enumeradas en el artículo 361.
Igual pena se aplicará cuando el abuso consistiere en la concurrencia de alguna de las
circunstancias enumeradas en el artículo 363, siempre que la víctima fuere mayor de
catorce y menor de dieciocho años.
o Art. 366 bis CP: “El que realizare una acción sexual distinta del acceso carnal con una
persona menor de catorce años, será castigado con la pena de presidio menor en su
grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo.”
Acción sexual: descrita en el art. 366 ter CP. El legislador da parámetros, mediante
contactos corporales con la víctima, descritas en la ley. La tactación de los senos de una
mujer es un acto de relevancia sexual, ó pero deben tener connotación o significación
sexual. Conociendo el significado abstracto podemos relacionar los artículos 366 y 366
bis. El segundo artículo contempla actos de significación sexual en la víctima,
estableciendo hipótesis de la violación propia dela artículo 361 CP. Si concurren las
circunstancias del estupro se aplica el inciso segundo del artículo 366 CP. El artículo 366
bis contempla la hipótesis cuando estamos frente al delito de violación impropia.
o Art. 366 ter CP: “Para los efectos de los tres artículos anteriores, se entenderá por
acción sexual cualquier acto de significación sexual y de relevancia realizado mediante
contacto corporal con la víctima, o que haya afectado los genitales, el ano o la boca de la
víctima, aun cuando no hubiere contacto corporal con ella.”
Éste artículo contempla lo que se debe entender por ACCIÓN SEXUAL. El legislador lo
señaló en el artículo 366 ter. La conducta está descrita en este artículo, además previó el
acto de significación sexual, de relevancia sexual y desarrollada de las formas que señala el
tipo penal.
En un acto de Significación sexual:
A.- Está dada por el ánimo libidinoso del agente.199 Apetito sexual señalado por la
doctrina, pero en general se entiende que es la sociedad quién le da la connotación a los
actos y no el ánimo libidinoso. El legislador cuando ha aludido al ánimo libidinoso lo
señala expresamente en el tipo penal. Ejemplo 366 quater inciso primero.
B.- Debe ser de relevancia, de entidad en cuanto manifestación de la sexualidad
(Garrido M.)
Circunstancias:
199 Para Garrido M. esa fórmula que recurre a la motivación particular del sujeto es
discutible, debiendo atenderse a un elemento normativo, señalando en cambio, que son
aquellos actos que resultan objetivamente adecuados –dentro del medio social en que se
desarrollan- para excitar el instinto sexual de una persona.
Modalidades:
Mayor 14 años: requiere circunstancias del 361 ó 363 CP, pero en este último caso, debe ser
menor de edad. Art. 366 cp.
Faz subjetiva:
La doctrina mayoritaria requiere un elemento subjetivo –ánimo lascivo o libidinoso- diverso del
dolo.
Sujetos:
Tanto el sujeto activo como pasivo puede ser hombre o mujer.
Está dado por el aumento de pena, modalidad que involucra la introducción de objetos por vía
anal, vaginal o bucal, distintos al pene masculino.
En el proyecto se pretendía sancionar partes distintas al miembro masculino.
o Art. 365 BIS CP: “Si la acción sexual consistiere en la introducción de objetos de
cualquier índole, por vía vaginal, anal o bucal, o se utilizaren animales en ello, será
castigada:
1.- con presidio mayor en su grado mínimo a medio, si concurre cualquiera de las
circunstancias enumeradas en el artículo 361;
2.- con presidio mayor en cualquiera de sus grados, si la víctima fuere menor de catorce años,
y
3.- con presidio menor en su grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo, si
concurre alguna de las circunstancias enumeradas en el artículo 363 y la víctima es
menor de edad, pero mayor de catorce años.”
Introducción de objetos:
No incluirían los miembros corporales distintos del pene, pues ello sería una interpretación
extensiva, que por una parte, degrada la esencia del ser humano como sujeto, distinguible a
todo nivel de las cosas del mundo, y otra, podría extender la incriminación a hechos tan
comunes en la vida diaria, como la obtención de un beso forzado.
Los objetos deben introducirse en un claro contexto de abuso sexual, que dé cuenta
patentemente del ánimo libidinoso del autor y de la relevancia sexual del acto.
Utilización de animales:
CORRUPCIÓN DE MENORES:
Inciso segundo. Si, para el mismo fin de procurar su excitación sexual o la excitación
sexual de otro, determinare a una persona menor de catorce años a realizar acciones de
significación sexual delante suyo o de otro o a enviar, entregar o exhibir imágenes o
grabaciones de su persona o de otro menor de 14 años de edad, con significación sexual, la
pena será presidio menor en su grado máximo.
Inciso tercero. Quien realice alguna de las conductas descritas en los incisos anteriores
con una persona menor de edad pero mayor de catorce años, concurriendo cualquiera de las
circunstancias del numerando 1º del artículo 361 o de las enumeradas en el artículo 363 o
mediante amenazas en los términos de los artículos 296 y 297, tendrá las mismas penas
señaladas en los incisos anteriores.
Deben concurrir hipótesis del artículo 361, 363, 296 y 297.
Inciso final. Las penas señaladas en el presente artículo se aplicarán también cuando los
delitos descritos en él sean cometidos a distancia, mediante cualquier medio electrónico.
Bien jurídico: Se protege la indemnidad sexual del menor de 14 años, combinada con la
libertad del menor si se trata de uno mayor de 14 años y menor de edad.
Es un delito de peligro, no se requiere afectar la indemnidad sexual del menor involucrado
(Garrido M.)
201 ara Garrido M. la corrupción de menores, como concepto genérico, es realización de actos
que interfieren en el proceso de formación y desarrollo de la sexualidad de una persona,
poniendo en peligro la libertad en su ejercicio futuro.
Sujetos:
Faz subjetiva:
Exige un elemento subjetivo (de tendencia interna trascendente): “para procurar su excitación
sexual o la excitación sexual de otro”, definido como un móvil o ánimo de carácter
libidinoso. No se requiere para la consumación que tal excitación se haya producido. (Garrido
M.)
No se requiere ánimo de lucro si es para procurar la e.s. de otro.
o Art. 365 CP: “El que accediere carnalmente a un menor de dieciocho años de su mismo
sexo, sin que medien las circunstancias de los delitos de violación o estupro, será penado con
reclusión menor en sus grados mínimo a medio.”
Bien jurídico: El motivo que se tuvo en vista es la corrupción de menores, al entender que
esta conducta constituye un peligro potencial para el desarrollo sexual normal de los menores
de edad (indemnidad sexual). (Garrido. M.)
Se sanciona la relación homosexual entre varones, 203 siendo la víctima menor de edad y
mayor de 14 años.
o Art. 367 CP: “El que promoviere o facilitare la prostitución de menores de edad para
satisfacer los deseos de otro, sufrirá la pena de presidio menor en su grado máximo.
Activo: cualquiera
o Art. 367 ter CP: “El que, a cambio de dinero u otras prestaciones de cualquier naturaleza,
obtuviere servicios sexuales por parte de personas mayores de catorce pero menores de
dieciocho años de edad, sin que medien las circunstancias de los delitos de violación o
estupro, será castigado con presidio menor en su grado máximo.”
Bien jurídico: Afecta la idea de honestidad de la relación sexual, y muy
indirectamente permite considerarse una forma de corrupción de menores, que
libremente ofrecen sus servicios de esta clase.
Son prestaciones apreciables en dinero.
Para los efectos de este artículo y del artículo 374 bis, se entenderá por material pornográfico
en cuya elaboración hubieren sido utilizados menores de dieciocho años, toda
representación de éstos dedicados a actividades sexuales explícitas, reales o simuladas, o
toda representación de sus partes genitales con fines primordialmente sexuales o toda
representación de dichos menores en que se emplee su voz o imagen, con los mismos
fines.”
Sujeto pasivo: Menor de edad.
Participación:
Concursos:
Si las acciones realizadas por los menores constituyen otros delitos ya vistos, se sanciona por
el más grave, conforme al principio de alternatividad.208
o Art. 374 bis: “El que comercialice, importe, exporte, distribuya, difunda o exhiba material
pornográfico, cualquiera sea su soporte, en cuya elaboración hayan sido utilizados menores
de dieciocho años, será sancionado con la pena de presidio menor en su grado medio a
máximo.
Sujetos:
Activo: No puede ser a su vez un partícipe en la producción del material Art. 366
quinquies, pues para él es sólo un acto de agotamiento.
Objeto material:
Conducta:
Son conductas activas que excluye la recepción no deseada de dicho material, en tanto no
se dé inicio voluntario a su almacenamiento.
208 *Ej. si el material pornográfico consiste en un video de una menor de 14 años siendo
accedida carnalmente por un adulto, el director del video que a la vez indujo al actor
adulto, es sancionado como instigador de violación impropia del art. 362 CP, mientras el
actor adulto es autor de violación impropia.
Faz subjetiva:
LA CONDUCTA DELICTUAL
“Juzgados de Garantía”
JUZGADOS DE GARANTÍA
Los Juzgados de Garantía (JG) son tribunales penales chilenos, creados a partir de la
Reforma Procesal Penal. Cada juez ejerce unipersonalmente la potestad jurisdiccional
respecto de los asuntos que las leyes encomiendan a estos juzgados. El territorio
jurisdiccional de cada uno de los Juzgados de Garantía es una comuna o agrupación
de comunas.
Composición
Estos tribunales, que en el país son 91, están integrados por un número variable de
jueces, que en cada caso señala el Código Orgánico de Tribunales (de 1 a 17 jueces
por cada juzgado; hasta 18, desde abril de 2006). Cuentan, además, con un
administrador de tribunal y una planta de empleados, que se organizan en unidades
administrativas para el cumplimiento eficaz y eficiente de sus funciones. En las
comunas o agrupaciones de comunas que no son territorio jurisdiccional de estos
juzgados, el conocimiento de las materias de su competencia, corresponde a los
Juzgados de Letra.
Competencias
Organización
Para efectos del Diseño Organizacional de los Juzgados de Garantía, las unidades
administrativas se estructuran de la forma que sigue:
Esta unidad será responsable de desarrollar las labores relativas a ordenar las
notificaciones, al manejo de causas y registros del proceso penal en el tribunal,
incluidas las relativas al manejo delas fechas y salas para las audiencias; al archivo
judicial básico, al ingreso y número de rol de las causas nuevas; a la primera audiencia
judicial de los detenidos; a la actualización diaria de la base de datos que contenga las
causas del tribunal, a las estadísticas básicas del tribunal, además de la planificación,
preparación y apoyo al desarrollo de las audiencias.
Juzgado.
• Orientar y entregar información a los usuarios acerca de las labores propias del
tribunal y sobre el funcionamiento de procedimiento penal.
Esta unidad será responsable de proveer al tribunal de los recursos materiales para su
adecuado funcionamiento, tanto en el ámbito jurisdiccional como administrativo. En
ese marco, le corresponde llevar la contabilidad y las cuentas corrientes, además de
coordinar operativamente todas las necesidades físicas y materiales para la
realización de las audiencias y el funcionamiento del tribunal.
• Prestar apoyo técnico a los funcionarios del tribunal respecto del uso de los equipos,
sistemas y redes computacionales.
LA CONDUCTA DELICTUAL
Los Tribunales de Juicio Oral en lo Penal (TJOP) son tribunales penales chilenos,
creados a partir de la Reforma Procesal Penal.
Estos tribunales, que en todo el país son 45, tienen un número variable de jueces, que
en cada caso señala el Código Orgánico de Tribunales (de 3 a 27 jueces por cada
tribunal). Cuentan, además, un administrador de tribunal y una planta de empleados,
que se organizan en unidades administrativas para el cumplimiento eficaz y eficiente
de sus funciones.
Estos tribunales funcionan en una o más salas compuestas por tres jueces; sin
perjuicio que pueden integrar cada sala otros jueces en calidad de alternos (con el sólo
propósito de subrogar, si fuese necesario, a sus miembros que se viesen impedidos de
continuar participando en el desarrollo del juicio oral). Cada sala del tribunal es dirigida
por un juez presidente de sala. El territorio jurisdiccional de cada uno de los Tribunales
de Juicio Oral en lo Penal es una agrupación de comunas (que coincide, por lo
general, con una provincia).
Características
• Son tribunales colegiados. Están compuestos por varios jueces que intervienen
simultáneamente en el conocimiento y resolución de los asuntos sometidos a su
decisión, quienes ejercen sus funciones en un plano de igualdad. No hay
subordinación entre ellos.
• Son tribunales letrados. Los magistrados que integran estos tribunales deben
estar en posesión del título de abogado.
• Son tribunales de competencia especial, pues le corresponde conocer de las
causas por crimen o simple delito y de los demás asuntos que la ley procesal penal les
encomiende.
En un tribunal podrán existir una o más unidades de sala, cada una de las cuales
estará a cargo de un Encargado de Sala, que podrá atender a una o más salas.
Principios
• Inmediación
• Oralidad
• Concentración y continuidad
• Contradictoriedad.
• Imparcialidad (el juzgador no ha intervenido).
• Presunción de inocencia.
• Publicidad.
• Única instancia.
Funcionamiento
Los Tribunales Orales en lo Penal funcionarán en una o más salas integradas por tres
de sus miembros.
Cada sala es dirigida por un juez presidente, quien tendrá las atribuciones que indica
el Art. 92. COT y las demás de orden que la ley procesal indique
En cuanto a la distribución de las causas entre las diversas salas se hará de acuerdo a
un procedimiento objetivo y general, que deberá ser anualmente aprobado por el
comité de jueces del Tribunal Oral en lo Penal, a propuesta del juez presidente (Art. 24
letra c) correspondiéndole al administrador del TOP distribuir las causas a las salas de
acuerdo al procedimiento indicado (Art. 389 B. Letra e).
Subrogación
Debe tenerse en cuenta en esta materia que los jueces de los TOP sólo subrogan a
jueces de esos tribunales (210 A COT).
2.- A falta de éste, un juez de otro TOP de la jurisdicción de la misma Corte. A este
efecto se aplican en forma análoga los criterios de cercanía territorial prevista en el Art.
207 COT, debiendo considerarse el lugar en que debe realizarse el respectivo juicio
oral;
6.- En defecto de las reglas precedentes se aplicará el (Art. 212 COT), que se refiere a
las reglas de subrogación del juez de letras;
7.- Para el caso de no ser posible aplicar esta norma del (Art. 213), se posterga la
realización del juicio oral hasta la oportunidad más próxima en que alguna de tales
disposiciones sea aplicable;
La planta del personal de estos TOP está señalada en el Art. 7 de la Ley 19.665 y ella
es variable, pues depende del número de jueces que los forman. Así, el mínimo de
esta planta para un TOP de tres jueces, es de un total de 10 funcionarios; y el máximo
para un TOP de veintisiete jueces, es un total de 44 funcionarios, todos pertenecientes
al Escalafón del Personal de Empleados.
Acerca del informe técnico que debe evacuar la CAJ para que una C. de Apelaciones
pueda ordenar comisiones de servicio si la carga de trabajo de un TOP lo amerita,
pensamos que él se va a referir específicamente a si hay fondos disponibles para ello,
en atención a que esta comisión significa un desembolso económico para el
presupuesto del Poder Judicial, considerando que será menester pagar pasajes,
viáticos y eventualmente asignación de zona, en su caso.
Será necesario, además, entender para los efectos contenidos en el COT que las
referencias hechas a los jueces letrados o jueces de letras incluyen también a los
jueces de los TOP, a menos que la ley señale expresamente lo contrario. (Art. 248
COT)
UNIDAD DE SALA
En un tribunal podrán existir una o más unidades de sala, cada una de las cuales
estará a cargo de un Encargado de Sala que podrá atender a una o más salas.
Dependiendo de la dotación asignada al tribunal, cada Unidad de Sala estará
constituida por un Encargado de Sala, uno o más Encargados de Acta y un Ayudante
de Audiencias.
UNIDAD DE SERVICIOS
• Intentar asegurar por todos los medios legales la concurrencia de los testigos y
peritos a las audiencias.
Tal como se ha señalado, la Ley Nº 19.665 crea dos tipos de tribunales en el marco de
la Reforma Procesal Penal, Tribunales Orales en lo Penal y Juzgados de Garantía,
que en la práctica trabajarán sobre la base de distintos procedimientos, es por ello que
para efectos de definir el diseño organizacional, se les ha tratado por separado.
Capítulo I
1. INTRODUCCIÓN
Hasta antes de la entrada en vigencia del NSPP, en nuestro país no existía un verdadero juicio criminal.
Faltaban presupuestos básicos del mismo, tales como:
a- Igualdad de las partes
b- Tribunal imparcial
c- Publicidad
d- Debate probatorio: examen y contradicción sobre la misma
e- Concentración del proceso penal, por los derechos que se encuentran en juego
f- Inmediación (y no delegación en funcionarios subalternos)
Siendo los sistemas procesales penales “barómetros” de la protección de los derechos de las personas, no cabe
duda que el ASPP generaba una serie de falencias procesales y de infracción grave de garantías consagradas en la
CPR y en Tratados Internacionales vigentes en nuestro país.
Se demostraba empíricamente que las sentencias definitivas eran pronunciadas sobre la base de la etapa sumarial,
especialmente en lo referente a la prueba, convirtiendo la etapa de Plenario (que según algunos era el “verdadero
juicio criminal”) en un apéndice formal. Así se demostraba, por ejemplo, en la prueba testimonial: la práctica de esta
prueba se limitaba a una ratificación de lo declarado en el sumario.
Además de todas las deficiencias que presentaba el ASPP a la hora de analizar las garantías constitucionales, el
proceso penal como tal no cumplía su objeto o fin natural: un enorme número de causas no terminaba por la
sentencia definitiva, sino por numerosos sobreseimientos temporales o por otros medios.
Posteriormente aparece la figura del juez instructor, sin perjuicio de la falta de consideración de la víctima.
Asimismo, paulatinamente se va mejorando la posición del imputado, otorgándole la calidad de sujeto del
procedimiento penal, otorgándosele derechos y reconociéndosele garantías frente al Estado perseguidor.
Sin perjuicio de recogerse algunas de las instituciones del sistema contradictorio, América Latina no recoge en su
integridad dichos sistemas.
Razones para sustentar un reemplazo del sistema inquisitivo por uno acusatorio-contradictorio
A. Falencias del sistema inquisitivo, propio de un Estado absolutista, anterior a la Ilustración:
a. Falta de imparcialidad de un juez investigador: juez y parte
b. Se prescinde de las partes en materia probatoria
c. Procedimiento escrito y secreto
d. Prueba legal y tasada, sin permitir la inclusión de los modernos medios de prueba
e. Se dilatan injustificadamente los procesos, por la exacerbación de la doble instancia: apelación amplia y
consulta en su defecto.
B. Sistema contradictorio, se identifica con las ideas del Estado de Derecho y de la Democracia:
a. Limitación de la doble instancia
b. Acusación e investigación confiada a un ente distinto del juez: Ministerio Público
c. Igualdad de las partes en el proceso: defensa, pruebas, etc.
d. Pasividad y efectiva imparcialidad del juez
e. Libertad en la apreciación de la prueba rendida, con las limitaciones que impone la sana crítica.
f. Oralidad del juicio
g. Publicidad de las actuaciones
h. Contradictorio: tanto los cargos como las pruebas deben darse a conocer y poder ser contradichos.
Por tanto se aboga por un sistema acusatorio contradictorio, es decir que reúna ambas características, ya
que muchos argumentaban que el sistema anterior era acusatorio, siendo ello nada más que una cuestión
nominal.
3
Chile
a. Ya en el Mensaje del Código de Procedimiento Penal se reconoce la superioridad de un juicio oral y
público, lo que no se establece en dicho momento por una serie de razones de carácter práctico y
económico.
b. Existieron desde 1906 hasta el NSPP numerosos proyectos para buscar reformar el sistema del CPP. Sólo
algunas llegaron a puerto.
c. Ley 19.696 de 12 de octubre de 2000: da origen al NCPP. Con él, existen otras normas importantes que lo
vienen a complementar: LOC Ministerio Público; Ley sobre la Defensoría Penal Pública
Capítulo II
1. VISIÓN GENERAL DEL NUEVO PROCEDIMIENTO PENAL. ETAPAS DEL MISMO. PRINCIPALES
INSTITUCIONES INVOLUCRADAS.
1.1. Esquema básico de la estructura
En el ASPP, se reunían en una sola mano (la del juez del crimen), las tareas de investigar, acusar y juzgar.
En el sistema acusatorio, se separan las labores, pasando el juez a ser un tercero que resuelve de la
controversia entre la acusación y la defensa. Es por ello que el NSPP introduce al Ministerio Público, el cual
será encargado de dirigir la investigación y de formular la acusación. Como contrapartida, se crea la
Defensoría Penal Pública, la cual actuará cuando el imputado carezca de defensor privado.
Velando por las garantías constitucionales del imputado e impidiendo excesos del Fiscal, así como también
decidiendo sobre la procedencia de las medidas cautelares, sin perjuicio de las demás funciones que se
conocerán, aparece el juez de garantía.
El NSPP contempla distintas etapas de desarrollo:
A. Investigación
B. Etapa intermedia o de preparación del juicio
C. Juicio Oral que será conocido por un TJOP.
Asimismo, el NSPP consagra una serie de prerrogativas para la víctima, la cual en dicho carácter y por esa
sola condición, posee una serie de derechos y facultades. Lo anterior, sin perjuicio de su actuación como
querellante o como actor civil.
PRIMERA PARTE
1.1.1. Nota previa. Las garantías procesales que emanan del debido proceso, pueden 3 sentidos de actuación:
a- Protección de garantías penales sustanciales. De nada servirían las garantías penales sustantivas, sin una
protección de las garantías penales procesales.
b- Límite del ius puniendi
c- Requisito de legitimidad de las actuaciones procesales, dentro de un estado de derecho.
1.1.1. Análisis concreto de las garantías constitucionales en esta materia
Según el profesor Chahuán, siendo una garantía amplia, debería tenerse en cuenta que forman parte del
mismo:
1- Existencia de tribunal independiente e imparcial
2- Carácter contradictorio del proceso e igualdad de armas entre la acusación y el acusado
3- Publicidad del procedimiento
4- Solución del proceso en un plazo razonable (speedy trial en EE.UU.)
5- Presunción de inocencia
6- Garantías respecto del derecho de defensa del acusado de una infracción penal
La garantía del debido proceso sería general y subsidiaria. Además se extiende tanto a los actos de
investigación como a los del juicio mismo (preparación y juicio oral).
B. El derecho a la defensa
- Art. 19 No. 3 inciso 2º CPR: Toda persona tiene derecho a defensa jurídica…La ley arbitrará los medios para
otorgar asesoramiento y defensa jurídica a quienes no puedan procurárselos por sí mismos.
- Antes de la entrada en vigencia del NSPP, se establecían las CAJ como fuentes de defensores (postulantes que
aún no eran abogados) para quienes no podían procurárselos por sí mismos.
- Con la entrada en vigencia del NSPP, el defensor debe ser abogado (creación de la Defensoría Penal Pública).
5
C. El derecho a la igualdad
- Art. 19 No.3 CPR: “igual protección de la ley en el ejercicio de sus derechos”
- Toda persona que recurra a los tribunales debe ser atendido por esto de acuerdo a las leyes comunes para todos y
bajo un procedimiento igual y fijo.
F. Garantías procesales consagradas en tratados internacionales: en virtud del art. 5 de la CPR se encuentran
integrados al texto constitucional, diversos tratados internacionales, dentro de los cuales es posible destacar:
a. Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de la ONU: algunos puntos destacables:
i.Presunción de inocencia, mientras no se pruebe la culpabilidad
ii.Garantías durante el curso del proceso: defensa, información, asistencia
b.Convención Americana sobre Derechos Humanos (“Pacto de San José de Costa Rica”): algunos puntos
destacables: Art. 8: garantías judiciales:
i.Derecho a ser oído
ii.Presunción de inocencia
iii.Derecho irrenunciable a la defensa
iv.Derecho a recurrir del fallo ante tribunal superior
1.2. Principios Básicos del NCPP: Título I del Libro I del NCPP (Arts. 1 al 13)
B. JUEZ NATURAL
- Art. 2: Nadie puede ser juzgado por comisiones especiales, sino por el tribunal que señalare la ley y que se
hallare establecido por ésta con anterioridad a la perpetración del hecho (delictual).
- Se diferencia de la norma constitucional, ya que el tribunal, según el NCPP, debe encontrarse establecido
antes de la perpetración del hecho y, según la norma constitucional, debe encontrarse establecido antes del
inicio del juicio.
F.PROTECCIÓN DE LA VÍCTIMA
- Art. 6: impone la obligación al Ministerio Público de velar por la protección de la víctima en todas las etapas
del procedimiento.
- Asimismo, el tribunal, sea juez de garantía o juez de TJOP, deberá garantizar la vigencia de sus derechos.
- El Fiscal debe promover en el curso del procedimiento acuerdos patrimoniales, medidas cautelares u otros
mecanismos que faciliten la reparación del daño causado a la víctima. Este deber no importa el ejercicio
de las acciones civiles que puedan corresponderle a la víctima.1
- Finalmente la policía y los demás organismos auxiliares están obligados a otorgar a la víctima, un trato acorde
a su condición, facilitando al máximo su participación en los trámites en que deba intervenir.
1
Según la cita que hace el profesor Chahúan al texto de los profesores Horvitz y López, esta obligación impuesta al Fiscal,
podría desvirtuar el rol que debe cumplir el Ministerio Público, toda vez que se trata de intereses privados de la víctima.
7
- Art. 8: el imputado tiene derecho a ser defendido por un letrado desde la 1ª actuación del procedimiento
dirigido en su contra.
H. AUTORIZACIÓN JUDICIAL PREVIA.
- Art. 9: toda actuación que prive al imputado o a un tercero del ejercicio de los derechos que la CPR
asegura, o lo restringiere o perturbare, requiere de autorización judicial previa.
- El Fiscal requerirá la autorización previa del juez de garantía.
I. CAUTELA DE GARANTÍAS.
- Art. 10: En cualquier etapa del procedimiento en que el juez de garantía estimare que el imputado no está
en condiciones de ejercer los derechos que le otorgan las garantías judiciales consagradas en la CPR, en
las leyes o en los Tratados internacionales, adoptará de oficio o a petición de parte, las medidas
necesarias para permitir dicho ejercicio.
- En caso que estime que las medidas no fueren suficientes para evitar que pudiere producirse una afectación
sustancial de los derechos del imputado, el juez ordenará la suspensión del procedimiento y citará a los
intervinientes a una audiencia que se celebrará con los que asistan. Con el mérito de los antecedentes
reunidos y de lo que en dicha audiencia se expusiere, resolverá la continuación del procedimiento o
decretará el sobreseimiento temporal del mismo.
K. INTERVINIENTES.
- Art. 12: se consideran intervinientes:
i.El fiscal
ii.Al imputado
iii.Al defensor
iv.A la víctima
v.Al querellante…
… desde que realizaren cualquier actuación procesal o desde el momento en que la ley les permitiere
ejercer facultades determinadas.
- Se abandona el concepto clásico de partes.
- No se considera al actor civil.
Artículo 15. Cómputo de plazos de horas. Los plazos de horas establecidos en este Código comenzarán a
correr inmediatamente después de ocurrido el hecho que fijare su iniciación, sin interrupción.
8
Artículo 16. Plazos fatales e improrrogables. Los plazos establecidos en este Código son fatales e
improrrogables, a menos que se indicare expresamente lo contrario.
Artículo 17. Nuevo plazo. El que, se hubiere visto impedido de ejercer un derecho o desarrollar una actividad
dentro del plazo establecido por la ley, podrá solicitar al tribunal un nuevo plazo, que le podrá ser otorgado por el
mismo período.
La solicitud debe basarse en:
- Hecho no imputable
- Defecto en la notificación
- Fuerza mayor
- Caso fortuito.
Dicha solicitud deberá formularse dentro de los 5 días siguientes a aquél en que hubiere cesado el
impedimento.
Artículo 18. Renuncia de plazos. Los intervinientes en el procedimiento podrán renunciar, total o parcialmente, a
los plazos establecidos a su favor, por manifestación expresa.
Si el plazo fuere común, la abreviación o la renuncia requerirán el consentimiento de todos los intervinientes y la
aprobación del tribunal.
Tratándose de informaciones o documentos que en virtud de la ley tuvieren carácter secreto, el requerimiento se
atenderá observando las prescripciones de la ley respectiva, si las hubiere, y, en caso contrario (sin existencia de
ley), adoptándose las precauciones que aseguraren que la información no será divulgada.
Retardo o negación de envío de antecedentes: Si la autoridad requerida retardare el envío de los antecedentes
solicitados o se negare a enviarlos, a pretexto de su carácter secreto o reservado y el fiscal estimare
indispensable la realización de la actuación, (a) remitirá los antecedentes al fiscal regional quien, si compartiere
esa apreciación, solicitará a la Corte de Apelaciones respectiva que, previo informe de la autoridad de que se
tratare, recabado por la vía que considerare más rápida, resuelva la controversia. La Corte adoptará esta decisión
en cuenta. (b) Si fuere el tribunal el que requiriere la información, formulará dicha solicitud directamente ante la
Corte de Apelaciones.
Si la razón invocada por la autoridad requerida para no enviar los antecedentes solicitados fuere que su publicidad
pudiere afectar la seguridad nacional, la cuestión deberá ser resuelta por la Corte Suprema. En el mismo
sentido, el art. 209.
Aun cuando la Corte llamada a resolver la controversia rechazare el requerimiento del fiscal, por compartir el juicio
de la autoridad a la que se hubieren requerido los antecedentes, podrá ordenar que se suministren al ministerio
público o al tribunal los datos que le parecieren necesarios para la adopción de decisiones relativas a la
investigación o para el pronunciamiento de resoluciones judiciales.
Las resoluciones que los ministros de Corte pronunciaren para resolver estas materias no los inhabilitarán para
conocer, en su caso, los recursos que se dedujeren en la causa de que se tratare.
Se optó porque la Corte de Apelaciones fuera la que resolviera generalmente la controversia, debido a la
inmediatez de éstas, en relación a la Corte Suprema.
Artículo 20. Solicitudes entre tribunales. Cuando un tribunal debiere requerir de otro la realización de una
diligencia dentro del territorio jurisdiccional de éste, le dirigirá directamente la solicitud, sin más menciones que
la indicación de los antecedentes necesarios para la cabal comprensión de la solicitud y las demás expresadas en
el inciso primero del artículo anterior.
Si el tribunal requerido rechazare el cumplimiento del trámite o diligencia indicado en la solicitud, o si transcurriere
el plazo fijado para su cumplimiento sin que éste se produjere, el tribunal requirente podrá dirigirse directamente
al superior jerárquico del primero para que ordene, agilice o gestione directamente la petición.
9
Artículo 20 bis. Tramitación de solicitudes de asistencia internacional. Las solicitudes de autoridades
competentes de país extranjero para que se practiquen diligencias en Chile serán remitidas directamente al
Ministerio Público, el que solicitará la intervención del juez de garantía del lugar en que deban practicarse,
cuando la naturaleza de las diligencias lo hagan necesario de acuerdo con las disposiciones de la ley chilena.
Artículo 21. Forma de realizar las comunicaciones. Las comunicaciones señaladas en los artículos precedentes
podrán realizarse por cualquier medio idóneo, sin perjuicio del posterior envío de la documentación que fuere
pertinente.
Artículo 23. Citación del ministerio público. Cuando en el desarrollo de su actividad de investigación el fiscal
requiriere la comparecencia de una persona, podrá citarla por cualquier medio idóneo. Si la persona citada no
compareciere, el fiscal podrá ocurrir ante el juez de garantía para que lo autorice a conducirla compulsivamente
a su presencia.
Con todo, el fiscal no podrá recabar directamente la comparecencia personal de las personas o autoridades a
que se refiere el artículo 300. Si la declaración de dichas personas o autoridades fuere necesaria, procederá
siempre previa autorización del juez de garantía y conforme lo establece el artículo 301.
Art. 300: se refiere a las personas que están exentas de comparecer como testigos.
Art. 301: las personas anteriores deponen en el lugar donde ejercen sus funciones, en su domicilio o por
informe.
Artículo 35. Nulidad de las actuaciones delegadas. La delegación de funciones en empleados subalternos
para realizar actuaciones en que las leyes requirieren la intervención del juez producirá la nulidad de las
mismas.
Artículo 36. Fundamentación. Será obligación del tribunal fundamentar las resoluciones que dictare, con
excepción de aquellas que se pronunciaren sobre cuestiones de mero trámite. La fundamentación
expresará sucintamente, pero con precisión, los motivos de hecho y de derecho en que se basaren las
decisiones tomadas.
La simple relación de los documentos del procedimiento o la mención de los medios de prueba o solicitudes
de los intervinientes no sustituirá en caso alguno la fundamentación.
11
Artículo 37. Firma de las resoluciones. Las resoluciones judiciales serán suscritas por el juez o por todos
los miembros del tribunal que las dictare. Si alguno de los jueces no pudiere firmar se dejará constancia del
impedimento.
No obstante lo anterior, bastará el registro de la audiencia respecto de las resoluciones que se
dictaren en ella.
Artículo 38. Plazos generales para dictar las resoluciones.
A) Las cuestiones debatidas en una audiencia deberán ser resueltas en ella.
B) Las presentaciones escritas serán resueltas por el tribunal antes de las veinticuatro horas siguientes a su
recepción.
Artículo 42. Valor del registro del juicio oral. El registro del juicio oral demostrará:
a. El modo en que se hubiere desarrollado la audiencia;
b. La observancia de las formalidades previstas para ella;
c. Las personas que hubieren intervenido y los actos que se hubieren llevado a cabo.
Lo anterior es sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 359, en lo que corresponda.
Esto dice relación con el recurso de nulidad: en él se puede rendir prueba para acreditar la causal
respectiva
La omisión de formalidades del registro sólo lo privará de valor cuando ellas no pudieren ser suplidas con
certeza sobre la base de otros elementos contenidos en el mismo o de otros antecedentes confiables que
dieren testimonio de lo ocurrido en la audiencia.
Artículo 43. Conservación de los registros. Mientras dure la investigación o el respectivo proceso, la
conservación de los registros estará a cargo del juzgado de garantía y del tribunal de juicio oral en lo penal
respectivo, de conformidad a lo previsto en el Código Orgánico de Tribunales.
Cuando, por cualquier causa, se viere dañado el soporte material del registro afectando su contenido, el tribunal
ordenará reemplazarlo en todo o parte por una copia fiel, que obtendrá de quien la tuviere, si no dispusiere
de ella directamente.
Si no existiere copia fiel, las resoluciones se dictarán nuevamente, para lo cual el tribunal reunirá los
antecedentes que le permitan fundamentar su preexistencia y contenido, y las actuaciones se repetirán con las
formalidades previstas para cada caso.
En todo caso, no será necesario volver a dictar las resoluciones o repetir las actuaciones que sean el
antecedente de resoluciones conocidas o en etapa de cumplimiento o ejecución.
Artículo 44. Examen del registro y certificaciones. Salvas las excepciones expresamente previstas en la ley, los
intervinientes siempre tendrán acceso al contenido de los registros.
Los registros podrán también ser consultados por terceros cuando dieren cuenta de actuaciones que fueren
públicas de acuerdo con la ley, a menos que, durante la investigación o la tramitación de la causa, el tribunal
restringiere el acceso para evitar que se afecte su normal substanciación o el principio de inocencia.
En todo caso, los registros serán públicos transcurridos cinco años desde la realización de las actuaciones
consignadas en ellos.
12
A petición de un interviniente o de cualquier persona, el funcionario competente del tribunal expedirá copias
fieles de los registros o de la parte de ellos que fuere pertinente, con sujeción a lo dispuesto en los incisos
anteriores.
Además dicho funcionario certificará si se hubieren deducido recursos en contra de la sentencia definitiva.
F. COSTAS
Artículo 45. Pronunciamiento sobre costas. Toda resolución que pusiere término a la causa o decidiere un
incidente deberá pronunciarse sobre el pago de las costas del procedimiento.
Artículo 46. Contenido. Las costas del procedimiento penal comprenderán tanto las procesales como las
personales.
Artículo 47. Condena. Las costas serán de cargo del condenado.
La víctima que abandonare la acción civil soportará las costas que su intervención como parte civil hubiere
causado. También las soportará el querellante que abandonare la querella.
No obstante lo dispuesto en los incisos anteriores, el tribunal, por razones fundadas que expresará
determinadamente, podrá eximir total o parcialmente del pago de las costas, a quien debiere soportarlas.
Artículo 48. Absolución y sobreseimiento definitivo. Cuando el imputado fuere absuelto o sobreseído
definitivamente, el ministerio público será condenado en costas, salvo que hubiere formulado la acusación en
cumplimiento de la orden judicial a que se refiere el inciso segundo del artículo 462 (se refiere al caso en que el
Fiscal primitivamente requería una medida de seguridad para el caso del inimputable del 10 No.1 del CP y el
juez, desestimando el requerimiento, obligó a acusar) o cuando el tribunal estime razonable eximirle por
razones fundadas.
En dicho evento será también condenado el querellante, salvo que el tribunal lo eximiere del pago, total o
parcialmente, por razones fundadas que expresará determinadamente.
Artículo 49. Distribución de costas. Cuando fueren varios los intervinientes condenados al pago de las costas,
el tribunal fijará la parte o proporción que corresponderá soportar a cada uno de ellos.
Artículo 50. Personas exentas. Los fiscales, los abogados y los mandatarios de los intervinientes en el
procedimiento no podrán ser condenados personalmente al pago de las costas, salvo los casos de notorio
desconocimiento del derecho o de grave negligencia en el desempeño de sus funciones, en los cuales se
les podrá imponer, por resolución fundada, el pago total o parcial de las costas.
Artículo 51. Gastos. Cuando fuere necesario efectuar un gasto cuyo pago correspondiere a los intervinientes, el
tribunal estimará su monto y dispondrá su consignación anticipada.
En todo caso, el Estado soportará los gastos de los intervinientes que gozaren del privilegio de pobreza.
G. DISPOSICIONES SUPLETORIAS
Artículo 52. Aplicación de normas comunes a todo procedimiento. Serán aplicables al procedimiento penal, en
cuanto no se opusieren a lo estatuido en este Código o en leyes especiales, las normas comunes a todo
procedimiento contempladas en el Libro I del Código de Procedimiento Civil.
Al Ministerio Público le corresponde como obligación, dar información y protección a las víctimas. Por ello, el
Art. 78 del NCPP dispone que es deber de los Fiscales durante todo el procedimiento adoptar medidas, o
solicitarlas, en su caso, para proteger a las víctimas de los delitos; facilitar su intervención en el mismo y
evitar o disminuir al mínimo cualquier perturbación que hubieren de soportar con ocasión de los trámites en
que debieran intervenir. Asimismo agrega que los fiscales están obligados a realizar, entre otras, las siguientes
actividades a favor de la víctima:
a. Entregar información sobre el curso y resultado del procedimiento, sobre sus derechos y las actividades que
debe realizar para ejercerlos.
b. Ordenar por sí mismo o solicitar al tribunal las medidas destinadas a la protección de las víctimas o de sus
familias, frente a hostigamientos, amenazas o atentados.
c. Informarle sobre su eventual derecho a indemnización y remitir los antecedentes al organismo del Estado que
deba representarlo, según sea el caso.
d. Escuchar a la víctima antes de solicitar o resolver la suspensión del procedimiento o su terminación por
cualquier causa.
En caso que la víctima haya designado abogado, el Ministerio Público deberá realizar a su respecto las
actuaciones señaladas en las letras a. y d.
La forma que debe obrar el Ministerio Público se rige por el principio de la objetividad, consagrado desde ya en
su LOC: Art. 3: En el ejercicio de su función, los fiscales del Ministerio Público adecuarán sus actos a un criterio
objetivo, velando únicamente por la correcta aplicación de la ley. De acuerdo con este criterio, deberán investigar
con igual celo no sólo los hechos y circunstancias que funden o agraven la responsabilidad del imputado, sino
también los que le eximan de ella, la extingan o la atenúen.
B. ORGANIZACIÓN
La estructura y funciones del Ministerio Público, se contienen básicamente en:
i- CPR: Capítulo VII.
ii- LOC Ministerio Público
De ambos cuerpos normativos se desprenden las funciones, atribuciones, características, ubicación institucional y
organización interna del Ministerio Público:
a) El Ministerio Público es un organismo autónomo y jerarquizado que dirigirá la investigación en el NSPP y
ejercerá, en su caso, la acción penal pública.
b) Además le corresponde adoptar medidas para proteger a las víctimas y a los testigos.
c) En caso alguno podrá ejercer funciones jurisdiccionales. Art. 83 CPR/ Art. 1 LOC Ministerio Público
d) No se sujeta a la superintendencia de la Corte Suprema. En todo caso, el Fiscal Nacional tendrá la
superintendencia del Ministerio Público.
e) El Ministerio Público posee FACULTAD DE IMPERIO: pude impartir órdenes directas a la fuerza pública,
debiendo la policía cumplir sin más trámite el mandato, no pudiendo calificar el fundamento, la oportunidad, ni
la legalidad o justicia del mismo. Sin embargo, en ciertas actuaciones requerirá de la autorización judicial
previa. Sólo en tales casos, la autoridad policial requerida, podrá recabar la exhibición de dicha autorización
judicial.
f) ESTRUCTURA ORGÁNICA DEL MINISTERIO PÚBLICO:
a. Fiscal Nacional:
i. Jefe del Ministerio Público y responsable de su buen funcionamiento.
ii. Nombramiento:
1. Quina de la Corte Suprema formada previo concurso público.
2. Nombrado por el Presidente de la República
3. Acuerdo de 2/3 de los miembros en ejercicio del Senado, en sesión convocada especialmente. En
caso de no aprobarlo, se debe ingresar un nuevo nombre a la quina y se repite el procedimiento.
iii. Dura 8 años en su cargo y no puede ser reelegido para el período inmediatamente siguiente sin poder
ser removido, salvo por la Corte Suprema, por requerimiento del Presidente de la República, de la
Cámara de Diputados o de 10 de sus miembros, por incapacidad, mal comportamiento o negligencia
manifiesta en el ejercicio de sus funciones. La Corte Suprema conoce de la remoción en Pleno con la
mayoría de los miembros en ejercicio.
14
iv. Excepcionalmente, el Fiscal Nacional podrá asumir de oficio la dirección de la investigación, el
ejercicio de la acción penal pública y la protección de las víctimas o testigos, cuando la investidura de los
involucrados, sean imputados o víctimas, lo hace necesario para garantizar que dichas tareas se
cumplirán con absoluta independencia y autonomía (Art. 18 LOCMP)
v. Funciones del Fiscal Nacional: Art. 17 LOCMP
1. Fijar criterios de actuación del Ministerio Público, para el cumplimiento de sus objetivos
constitucionales y legales, oyendo previamente al Consejo General. Respecto de los delitos de mayor
conmoción social, los criterios deben referirse especialmente a la aplicación de salidas alternativas y a
las instrucciones generales relativas a las diligencias inmediatas para su investigación.
2. Ejercer la potestad disciplinaria y reglamentaria.
3. Dictar instrucciones generales necesarias para el adecuado cumplimiento de las tareas de dirección
de la investigación, ejercicio de la acción penal pública y protección de las víctimas y testigos. No
puede dar instrucciones u ordenar realizar u omitir la realización de actuaciones en casos
particulares, salvo la excepción del art. 18 LOCMP.
4. Nombrar y solicitar la remoción de los Fiscales Regionales
5. Resolver las dificultades que se susciten entre los Fiscales
6. Crear, previo informe del Consejo General,UNIDADES ESPECIALIZADAS para la persecución
de determinados delitos (Tráfico de Estupefacientes, lavado de dinero y delitos económicos, delitos
sexuales, responsabilidad penal juvenil, son algunas de las unidades creadas). Estas unidades están
dirigidas por un Director designado por el Fiscal Nacional.
7. Disponer de oficio y excepcionalmente, que un determinado Fiscal Regional asuma las funciones
de investigar, ejercer la acción y proteger a las víctimas, respecto de determinados hechos delictivos
que lo hicieren necesario por su gravedad o por la complejidad de la investigación. Asimismo puede
disponer que un Fiscal Regional distinto de aquél en cuyo territorio se han perpetrado los hechos,
tome a su cargo las tareas aludidas anteriormente cuando la necesidad de operar en varias regiones
así lo exija.
8. RENDIR CUENTA en el mes de abril de cada año. En dicha audiencia, además de rendir cuenta
deberá:
a. Dar a conocer los criterios de actuación del organismo para el año siguiente
b. Sugerir las políticas públicas y modificaciones legales necesarias para el mejoramiento del
sistema penal. Es una modificación introducida por la ley 20.074 del año 2005.
vi.Requisitos para ser Fiscal Nacional:
1. 10 años de título de abogado
2. Haber cumplido 40 años de edad
3. Ser ciudadano chileno con derecho a sufragio
4. No encontrarse sujeto a una de las incapacidades e incompatibilidades que previene la ley.
- Es importante tener presente que a al Fiscal Nacional, a los Fiscales Regionales y a los Fiscales
adjuntos, se les aplica el art. 78 de la CPR: ninguno de ellos podrá ser aprehendido sin orden del
tribunal competente, salvo en caso de crimen o simple delito flagrante y sólo para ponerlos a disposición
del tribunal que debe conocer del asunto.
e. Unidades Administrativas
i.El Ministerio Público, dentro de la Fiscalía Nacional, cuenta con 6 Unidades administrativas, con el
nombre de División.
ii.En las Fiscalías Regionales existen 5 Unidades administrativas.
iii.Especial importancia: División de Atención a las Víctimas y Testigos.
iv.Están a cargo de un Director Ejecutivo Nacional y de los gerentes de las unidades administrativas, siendo
cargos de exclusiva confianza del Fiscal Nacional.
- En cuanto a las responsabilidades que pueden afectar al Ministerio Público, éstas pueden consistir en:
a. Responsabilidad Política: se concreta en la remoción del Fiscal Nacional o de los Fiscales
Regionales.
b.Responsabilidad Penal: Art. 46 LOCMP señala quién deberá dirigir la investigación, cuando se
persiga criminalmente la responsabilidad de un funcionario: depende del rango del imputado:
a. Fiscal Nacional: deberá dirigirla el Fiscal Regional designado por sorteo en sesión del Consejo
General.
b.Fiscal Regional: Fiscal Regional que designe el Fiscal Nacional, oyendo previamente al Consejo
General.
c. Fiscal Adjunto: Fiscal Regional que designe el Fiscal Nacional.
Tratándose de delitos cometidos por un fiscal en el ejercicio de sus funciones, el fiscal a cargo de la
investigación deducirá, si procede, la respectiva querella de capítulos.
c. Responsabilidad Civil: Art. 5 LOCMP: El Estado será responsable por las conductas
injustificadamente erróneas o arbitrarias del Ministerio Público. La acción para perseguir esta
responsabilidad es de 4 años, contados desde la actuación dañina. Mediando culpa grave o dolo del
Fiscal, el Estado podrá repetir en su contra.
d.Responsabilidad Disciplinaria: puede hacerse efectiva por la autoridad superior respectiva,
imponiéndose sanciones de amonestación privada, censura por escrito, multa, suspensión y remoción.
La remoción sólo se aplica a los funcionarios que no sean el Fiscal Nacional ni los Regionales, por tener
ellos procedimientos especiales.
- Principio de la legalidad procesal penal: Art. 166 inciso 2º: Cuando el Ministerio Público tomare
conocimiento de la existencia de un hecho que revistiere caracteres de delito, con el auxilio de la policía,
promoverá la persecución penal, sin que pueda suspender, interrumpir o hacer cesar su curso, salvo en
los casos previstos por la ley.
Es un hecho irrefutable la imposibilidad de que todos los hechos que ingresan al sistema de
persecución penal, sean investigados y castigados. Los recursos son escasos y siempre existe una
llamada cifra oscura.
Es por ello que el NCPP recoge el principio de la oportunidad, como una contrapartida al principio de la
legalidad procesal penal.
- Principio de oportunidad: facultad del órgano encargado de ejercer la acción penal pública y de acusar,
para renunciar al ejercicio de la acción o suspender o hacer cesar el curso del procedimiento ya
iniciado, respecto de uno o más delitos y/o imputados, pese a la existencia de un hecho que reviste los
caracteres de delito.
Existen 2 sistemas en relación al ejercicio del principio de oportunidad:
1. Anglosajón: el fiscal es dueño de la persecución penal: oportunidad amplia.
2. Continental: legalidad prima, existiendo un principio de oportunidad restringido.
Entendiendo en un sentido extenso el concepto de “principio de oportunidad”, cabrían dentro de él una
serie de facultades que se le otorgan al Ministerio Público. Sin embargo, en su sentido restringido y
técnico, el principio de oportunidad, se limita al art. 170 NCPP.
C. Control Judicial: 169: tanto en el caso del archivo provisional, como en el caso de la facultad para no
iniciar investigación, la víctima puede provocar la intervención del juez de garantía deduciendo la
querella respectiva. En caso que el juez la admita a tramitación, el fiscal deberá seguir adelante la
investigación.
19
H.2. EL PRINCIPIO DE OPORTUNIDAD. Art. 170.
Los Fiscales del Ministerio Público pueden no iniciar la persecución penal o abandonar la ya iniciada
cuando:
A. Se trate de un hecho que no comprometa gravemente el interés público
B. La pena mínima asignada al delito no exceda la de presidio o reclusión menores en su grado
mínimo
C. No se trate de un delito cometido por funcionario público en el ejercicio de sus funciones.
El Fiscal debe emitir una decisión motivada, la cual será comunicada al juez de garantía, el cual
notificará a los intervinientes.
Dentro del plazo de los 10 días siguientes a la comunicación de la decisión del fiscal, el juez, de oficio
o a petición de cualquier interviniente, podrá dejar sin efecto dicha decisión cuando considere que ha
excedido los límites por no concurrir alguno de los requisitos antes señalados. Asimismo será dejada sin
efecto cuando, dentro del mismo plazo, la víctima manifieste de cualquier modo su interés en el inicio o
en la continuación de la persecución penal.
Transcurrido el plazo o rechazada por el juez la reclamación, los intervinientes tendrán 10 días más para
reclamar de la decisión del Fiscal ante las autoridades del Ministerio Público. Éstas deberán verificar
si la decisión del fiscal se ajusta o no a las políticas generales del servicio y a las normas dictadas al
respecto. Transcurrido este plazo o cuando las autoridades del Ministerio Público hayan rechazado la
reclamación, se entiende extinguida la acción penal. Ello no perjudica a la responsabilidad civil que se
pudiera llevar a efecto en la vía correspondiente.
Fiscal Nacional, dentro de las instrucciones intra Ministerio Público, debe dictar las instrucciones
generales que estime necesarias pata el adecuado cumplimiento de las 3 funciones analizadas del
Ministerio Público. No puede dar instrucciones en un caso particular, sin perjuicio de la facultad conocida
del art. 18 LOCMP.
El Fiscal Regional deberá dar cumplimiento a las instrucciones generales que imparte el Fiscal Nacional.
El Fiscal Regional, podrá objetar las instrucciones por razones fundadas. En tanto no sea resuelta, debe
proceder conforme a la instrucción. Resuelve la objeción el propio Fiscal Nacional. Si acoge la objeción,
se modificará la instrucción. Si la rechaza, el Regional debe cumplir sin más trámite, asumiendo el
Nacional toda la responsabilidad.
Los Fiscales adjuntos deben obedecer las instrucciones generales que, dentro de sus facultades,
impartan respectivamente el Fiscal Nacional y el Regional. Asimismo deben obedecer las instrucciones
particulares que el Fiscal Regional les dirija en un caso determinado, salvo que representen que son
arbitrarias o que atentan contra la ley o la ética profesional. Se sigue la misma lógica señalada más arriba,
en caso de ser rechazada o acogida.
Se mantiene el esquema anterior del ASPP, en cuanto a la distribución de competencia entre ambas
policías, pero a quien le toca decidir alterar la regla es al fiscal y no al juez del crimen.
Las instrucciones que recibe la policía, por parte del Ministerio Público, pueden ser de 2 clases:
a. Instrucciones particulares: se refieren al caso concreto
b. Instrucciones generales: regulan:
i. La forma en que el organismo policial cumplirá las funciones previstas;
ii. La forma de proceder frente a hechos de los que tome conocimiento y respecto de los cuales los
datos obtenidos fueren insuficientes para estimar son constituyen delito; y
iii. Relativas a la realización de diligencias inmediatas pata la investigación de ciertos delitos.
El Ministerio Público está facultado para solicitar a la policía, en cualquier momento, los registros de sus
actuaciones.
De esta manera, el Ministerio Público en relación a la policía tiene una labor de orientación más que de
dirección.
Obligación de información de la policía: recibida una denuncia, la policía informará inmediatamente y por
el medio más expedito al Ministerio Público. Sin perjuicio de ello, puede proceder a realizar las actuaciones
que no requieren orden previa, respecto de las cuales igualmente debe informar de inmediato.
Comunicaciones entre el Ministerio Público y la Policía. Las comunicaciones que dicen relación con las
actividades de investigación de un caso particular, se deben realizar en la forma y por los medios más
expeditos posibles. En todo caso se debe preferir el uso de los medios técnicos confiables y disponibles,
según instructivos. Toda comunicación, es sin perjuicio del envío posterior o simultáneo de los antecedentes
en forma convencional.
2. Practicar la detención en los casos de flagrancia (se analiza luego en la detención como medida
cautelar personal)
4. Identificar los testigos y consignar las declaraciones que éstos prestaren voluntariamente,
tratándose de los casos aludidos en los puntos 2. y 3. precedentes (detención flagrante y resguardo
del sitio del suceso)
- Se busca identificar a los testigos presentes.
- Serán aplicables las normas relativas al control de identidad del art. 85.
- Se deberán registrar todos los datos del testigo que sean útiles para su citación o contacto por otro
medio.
- Se debe informar al testigo:
i.Deber de comparecer ante el fiscal que investigue
ii.Importancia de su colaboración para el esclarecimiento de los hechos
iii.Derechos del testigo
- Se le hará saber que puede prestar desde ya la declaración en forma voluntaria ante la policía. Sí así
lo desea se le tomará declaración en la unidad policial o en el lugar que el testigo sugiera.
- En lo posible, los testigos menores de 18 años y las que sean mujeres, prestarán declaraciones ante
funcionaria mujer.
2
Se ha cuestionado la constitucionalidad de esta medida, en virtud del principio de la no autoincriminación. No existe
consentimiento del “imputado” ni tampoco autorización judicial previa.
24
pública, sin perjuicio de las facultades que correspondan a los órganos encargados de la persecución
penal. El Ministerio Público ha dictado instrucciones generales sobre esta materia:
- Se instruye para que el jefe policial haga efectiva esta atribución sólo en los casos de muerte en la vía
pública, causada por vehículo, es decir, por accidente del tránsito.
- En los casos en que la muerte se produzca por otras causas, deberá procederse conforme a las reglas
generales.
- Para el caso en que existan en un mismo lugar unidades policiales de Carabineros e Investigaciones, el
Ministerio Público instruye que se recurra primero a Carabineros.
10. Efectuar las demás actuaciones que dispusieren otros cuerpos legales.
C. PROHIBICIÓN DE INFORMAR
Sobre los funcionarios policiales, pesa la prohibición de informar a los medios de comunicación social
acerca de la identidad de personas vinculadas, o que pudieren estarlo, a la investigación del hecho punible.
D. INSTRUCCIONES GENERALES
El art. 887 permite que se impartan instrucciones generales relativas a la realización de diligencias inmediatas
para la investigación de determinados delitos.
2.3. EL IMPUTADO
A. CALIDAD DE IMPUTADO Y DERECHOS
El NCPP otorga una serie de derechos al imputado. Ya en el art. 7 se señala que las facultades, derechos y
garantías que la CPR, el NCPP y otras leyes reconocen al imputado, podrán hacerse valer por la persona a quien
se atribuyere participación en un hecho punible desde la primera actuación del procedimiento dirigido en
su contra y hasta la completa ejecución de la sentencia. A reglón seguido se expresa que se entenderá por
primera actuación del procedimiento, cualquiera diligencia o gestión, sea de investigación, de carácter cautelar o
de otra especie, que se realizare por o ante un tribunal en lo criminal, el Ministerio Público o la policía, en la que se
atribuyere a una persona responsabilidad en un hecho punible y en la que se señale a una persona como partícipe
en aquél.
El art. 8 señala que el imputado tendrá derecho a ser defendido por un letrado desde la primera actuación del
procedimiento dirigido en su contra. En la misma disposición, se señala que el imputado tendrá derecho de
formular los planteamientos y alegaciones que considere oportunos, así como intervenir en todas las actuaciones
judiciales y en las demás actuaciones del procedimiento, salvas las excepciones legales.
El art. 104 señala que el defensor puede ejercer todos los derechos y facultades que la ley reconoce al imputado,
salvo que expresamente reserve su ejercicio al imputado en forma personal.
Asimismo, no se puede pasar por alto la garantía de la presunción de inocencia con la que cuenta el imputado,
la cual se desenvuelve en distintos sentidos: medidas cautelares, derechos del imputado, declaraciones del
imputado, entre otras.
El art. 93 consagra los derechos y garantías del imputado, señalando que Todo imputado podrá hacer valer,
hasta la terminación del proceso, los derechos y garantías que le confieren las leyes. A continuación, señala una
serie de ejemplos, sin que en ningún caso, se pueda estimar como una lista taxativa:
En especial, tendrá derecho a:
a) Que se le informe de manera específica y clara acerca de los hechos que se le imputaren y los derechos que
le otorgan la Constitución y las leyes; (Derecho a la intimación)
b) Ser asistido por un abogado desde los actos iniciales de la investigación;
25
c) Solicitar de los fiscales diligencias reinvestigación destinadas a desvirtuar imputaciones que se le
formulares;
d) Solicitar directamente al juez que cite a una audiencia, a la cual podrá concurrir con su abogado o sin él, con
el fin de prestar declaración sobre los hechos materia de la investigación;
e) Solicitar que se archive la investigación y conocer su contenido, salvo en los casos en que alguna parte de
ella hubiere sido declarada secreta y sólo por el tiempo que esa declaración se prolongare;
f) Solicitar el sobreseimiento definitivo de la causa y recurrir contra la resolución que lo rechazare;
g) Guardar silencio o, en caso de consentir en prestar declaración, a no hacerlo bajo juramento;
h) No ser sometido a tortura ni a otros tratos crueles, inhumanos o degradantes; e
i) No ser juzgado en ausencia, sin perjuicio de las responsabilidades que para él derivaren de la situación de
rebeldía.
Las letras a) y e) del art. 93 deben ser concordadas con lo que dispone el art. 182 en relación al secreto de las
actuaciones de investigación. Este artículo dispone principalmente:
A. Que las actuaciones de investigación que realice el Ministerio Público y la policía son secretas para los
terceros ajenos al procedimiento.
B. El imputado y los demás intervinientes podrán examinar y obtener copias de los registros y documentos de
la investigación fiscal y podrán examinar los de la investigación policial.
C. El Fiscal puede disponer que determinadas actuaciones, registros o documentos sean mantenidas en
secreto respecto del imputado o de los demás intervinientes, cuando lo considere necesario para la eficacia
de la investigación. En dicho caso, debe identificar las piezas o actuaciones respectivas, de modo que
no se vulnere la reserva y fijar un plazo no superior a 40 días para la mantención del secreto.
D. Tanto el imputado como otro interviniente podrá solicitar al juez de garantía que ponga término al secreto o
que lo limite en cuanto a las piezas o actuaciones, a la duración o a las personas afectadas.
E. PROHIBICIÓN DE DECRETAR SECRETO:
a. Declaración del imputado
b. Otra actuación en que hubiere intervenido el imputado o tenido derecho a intervenir
c. Actuaciones en las que participare el tribunal
d. Informes evacuados por peritos, respecto del propio imputado o de su defensor.
F. Los funcionarios que han participado en la investigación y las demás personas que, por cualquier razón,
llegan a conocer de las actuaciones de la investigación, estarán obligados a guardar secreto respecto de
ellas.
Existen leyes especiales en que se establece un secreto más extremo: Ley 20.000 sobre drogas: La
investigación será secreta cuando el Ministerio Público así lo dispone, por un plazo máximo de 120 días,
renovables sucesivamente con autorización del juez de garantía por plazos de 60 días.
El art. 93, en su letra g) establece que la declaración del imputado no puede recibirse bajo juramento. La
declaración es un derecho del imputado y un medio para su defensa.
La declaración puede prestarse frente a la policía, al Fiscal, al Juez de Garantía o ante el TJOP, dependiendo
del estado del procedimiento.
B.2. Declaración del imputado ante el Ministerio Público. 193, 194, 195, 196
26
1. El imputado no está obligado a declarar ante el fiscal, sin perjuicio de la obligación de comparecer
ante él
2. Si el imputado se encuentra privado de libertad, el fiscal debe solicitar autorización al juez para que sea
conducido a su presencia. En el caso que la privación de libertad se deba a la existencia de prisión
preventiva, la autorización que dé el juez de garantía, salvo que se disponga otra cosa, servirá para que el
fiscal ordene la comparecencia del imputado a su presencia, cuantas veces fuere necesario para los fines
de la investigación, mientras se mantenga la medida señalada.
3. Declaración voluntaria del imputado: cuando el imputado se allana a prestar declaración ante el Fiscal y
se trata de su 1ª declaración, antes de comenzar el fiscal le comunica detalladamente el hecho que se le
atribuye, importando mucho las circunstancias trascendentales para la calificación jurídica, las normas
legales aplicables y los antecedentes que la investigación arroje en su contra.
4. El imputado no puede negarse a proporcionar al Ministerio Público su completa identidad, debiendo
responder las preguntas que se le dirigen a este respecto.
5. Se debe dejar constancia de la negativa del imputado a responder una o más preguntas.
6. Queda absolutamente prohibido todo método de investigación o de interrogación que menoscabe o
coarte la libertad del imputado para declarar. Sólo se admite la promesa de una ventaja que estuviera
expresamente consagrada en la ley penal o procesal penal.
7. Se prohíbe el uso de fármacos, hipnosis, cualquier método que afecte la memora, violencia, entre otros,
incluso cuando el imputado consintiere en el uso de dichos métodos.
8. Cuando se extendiera el examen por mucho tiempo o se dirigieren tantas preguntas que provoquen el
agotamiento del imputado, se le concede un tiempo para su recuperación y descanso.
Se controvierte el hecho de que una declaración prestada por el imputado antes del juicio oral, pueda llegar
“indirectamente a éste”, por medio de la prueba testimonial de otros que oyeron o presenciaron la declaración del
imputado. Nuestro Código Procesal Penal no regula la materia, pero existe un fallo de la Corte Suprema de 2004
en que se aceptó la testimonial de sujetos que presenciaron la declaración de un imputado.
D. IMPUTADO REBELDE
1. Causales de rebeldía. 99: El imputado será declarado rebelde:
a. Cuando, decretada judicialmente su detención o prisión preventiva, no fuere habido; o
b.Cuando, habiéndose formalizado la investigación en contra del que estuviere en país extranjero, no fuere
posible obtener su extradición
2. Declaración de rebeldía. 100: La declaración de rebeldía del imputado será pronunciada por el tribunal
ante el que debiere comparecer.
3. Efectos de la rebeldía. 101.
a. Las resoluciones que se dicten en el procedimiento, se tendrán por notificadas personalmente al rebelde en
la misma fecha en que se pronunciaren.
b.La investigación no se suspende por la rebeldía. El procedimiento continúa hasta la celebración de la
Audiencia de Preparación del Juicio Oral (en ella se puede sobreseer definitiva o temporalmente, según el
mérito de lo obrado);
c. Si se declara durante la etapa del juicio oral, el procedimiento se sobresee temporalmente, hasta que el
imputado compareciere o fuere habido.
d.El sobreseimiento afecta sólo al rebelde y el procedimiento continúa respecto de los presentes.
28
e. El imputado habido, pagará las costas causadas con su rebeldía, salvo que justifique debidamente su
ausencia.
A. Toda persona privada de libertad tendrá derecho a ser conducida sin demora ante un juez de garantía, con
el objeto de que examine la legalidad de su privación de libertad y, en todo caso, para que examine las
condiciones en que se encontrare, constituyéndose, si fuere necesario, en el lugar en que ella estuviere. El
juez podrá ordenar la libertad del afectado o adoptar las medidas que fueren procedentes.
B. El abogado de la persona privada de libertad, sus parientes o cualquier persona en su nombre podrán
siempre ocurrir ante el juez que conociere del caso o aquél del lugar donde aquélla se encontrare, para
solicitar que ordene que sea conducida a su presencia y se ejerzan las facultades establecidas en el inciso
anterior.
C. Con todo, si la privación de libertad hubiere sido ordenada por resolución judicial, su legalidad sólo podrá
impugnarse por los medios procesales que correspondan ante el tribunal que la hubiere dictado (recursos),
sin perjuicio de lo establecido en el artículo 21 de la CPR (Amparo constitucional).
- La consagración de este amparo no implica que la acción de amparo constitucional del art. 21 de la Carta
Fundamental desaparezca.
- La privación que se impugna con la acción del art. 95 no puede tener origen en una resolución judicial.
- De la historia del precepto, se desprende que la acción del 95 no se estableció para impugnar resoluciones
judiciales, encontrándonos hoy en día frente a un proceso contradictorio que abre las puertas en sus fases a
diversas formas de defensa.
E.1. Competencia
El amparo del art. 95 es conocido en única instancia por el Juez de Garantía.
Sin embargo, el Ministerio Público ha señalado que es posible apelar lo fallado por el Juez de Garantía, cuando
conjuntamente y conforme a las reglas generales el juez de garantía ponga término al juicio, haga imposible su
continuación o lo suspenda por más de 30 días. Ej. El juez de garantía sobresee temporalmente la causa y deja
sin efecto la detención.
E.2. Paralelo entre la Acción constitucional de Amparo y el Amparo ante el juez de garantía
2.4. LA DEFENSA
A. PRINCIPIOS Y CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES
8. Defensorías Locales
a. Son unidades operativas en que se desempeñarán los defensores locales de la Región. Si cuenta con 2
o más defensores locales, se designa un jefe.
b.Requisitos para ser defensor local:
i.Ciudadano con derecho a sufragio
ii.Tener título de abogado
iii.No encontrase sujeto a incapacidades e incompatibilidades para ingresar a la administración pública.
c. La ubicación de las Defensorías Locales, la determina el Defensor Nacional a propuesta del Defensor
Regional.
d.Puede haber hasta 80 Defensorías Locales en el país.
e. Asumirán la defensa
i.De los imputados que carezcan de abogado en la 1ª actuación del procedimiento dirigido en su contra
y, en todo caso, con anterioridad a la realización de la 1ª audiencia judicial a que fuere citado.
ii.Cuando falte abogado defensor, por cualquier causa, en cualquier etapa del procedimiento.
f. Mantienen la defensa hasta que el imputado designe defensor o hasta que fuera autorizado por el
tribunal a defenderse personalmente.
9. Normas de personal.
a. Se sujetan al Estatuto Administrativo.
b.Se prohíbe a los Defensores Nacional y Regionales, ejercer la abogacía, salvo en casos propios o de su
cónyuge.
c. Los Defensores Locales, pueden ejercerla en materias civiles en todo caos, y en materias penales en
casos propios o de su cónyuge.
13. Los defensores locales quedan sujetos a responsabilidad administrativa, sin perjuicio de la
responsabilidad civil y penal que les pueda afectar.
2.5. LA VÍCTIMA
A. CONCEPTO
En los orígenes de la sociedad, la acción penal era completamente privada y no se concebía la persecución penal
sin la existencia de la víctima.
Con el surgimiento del Estado, la idea anterior desaparece. El Estado aparece persiguiendo la responsabilidad
penal, a fin de dar vigencia a sus reglas, sin importar la existencia de la víctima o el interés de ella por ejercer la
acción. De tal forma es el Estado quien adquiere total preeminencia en el ejercicio de la acción penal.
Incluso, la víctima pasa a sufrir una nueva victimización, con la serie de cargas que se le imponen dentro del
proceso. Nadie ha planteado que se elimine la persecución estatal y que pase por completo a las víctimas. Lo que
sí se ha hecho es generar la opción para que exista un espacio entre la víctima y su interés con el interés fiscal.
El art. 108 nos otorga un concepto preciso de la víctima: Para los efectos de este Código, se considera víctima al
ofendido por el delito.
En los delitos cuya consecuencia fuere la muerte del ofendido y en los casos en que éste no pudiere ejercer los
derechos conferidos a la víctima, se considerará víctima:
a. Al cónyuge y a los hijos;
33
b. A los ascendientes;
c. Al conviviente;
d. A los hermanos;
e. Al adoptado o adoptante.
Se trata de una enumeración en orden de prelación: actuando una persona excluye a las de las categorías
siguientes.
Una de las novedades más relevantes es que se considera sujeto procesal a la víctima, aun cuando no
intervenga como querellante en el proceso, por el sólo hecho de ser víctima.
Sin perjuicio de lo anterior, se mantiene la figura del querellante particular.
En el proyecto del NCPP se establecía que el Ministerio Público debía, deducir la acción civil a favor de la víctima
cuando ésta no contara con abogado, cuestión que fue eliminada en la tramitación parlamentaria.
Art. 109. Derechos de la víctima. La víctima podrá intervenir en el procedimiento penal conforme a lo
establecido en este Código, y tendrá, entre otros, los siguientes derechos:
a)Solicitar medidas de protección frente a probables hostigamientos, amenazas o atentados en contra suya o de
su familia;
b)Presentar querella;
c) Ejercer contra el imputado acciones tendientes a perseguir las responsabilidades civiles provenientes del hecho
punible;
d)Ser oída, si lo solicitare, por el fiscal antes de que éste pidiere o se resolviere la suspensión del procedimiento o
su terminación anticipada;
e)Ser oída, si lo solicitare, por el tribunal antes de pronunciarse acerca del sobreseimiento temporal o definitivo u
otra resolución que pusiere término a la causa;
f) Impugnar el sobreseimiento temporal o definitivo o la sentencia absolutoria, aun cuando no hubiere intervenido
en el procedimiento.
Los derechos precedentemente señalados no podrán ser ejercidos por quien fuere imputado del delito
respectivo, sin perjuicio de los derechos que le correspondieren en esa calidad.
En los casos en que el delito haya acarreado la muerte del ofendido o éste copudo ejercer los derechos
otorgados, si ninguna de las personas señaladas en el art. 108 inciso 2º ha intervenido en el procedimiento,
el Ministerio Público debe informar los resultados del proceso al cónyuge del ofendido por el delito o, en defecto
de él o ella, a alguno de los hijos u otra de esas personas.
B. LA QUERELLA
B.1. Titulares, oportunidad y requisitos
a. Titulares:
1. Víctima (directa + sujetos del 108);
2. Representante legal de la víctima
3. Heredero testamentario
4. Cualquier persona capaz de parecer en juicio domiciliada en la provincia, respecto de hechos punibles
cometidos en la misma que constituyan:
a. Delitos terroristas
b.Delitos cometidos por un funcionario público que afecten derechos de las personas garantizados en la
CPR o la probidad pública
5. Los órganos y servicios públicos sólo cuando sus respectivas Leyes orgánicas les otorguen las potestades
correspondientes.
De esta manera es posible concluir que el titular de la querella es más restringido que el señalado en el
ASPP: toda persona capaz de comparecer en juicio, para el ejercicio de la acción penal pública. ¿Por qué la
limitación?:
A) Se le otorgan una serie de derechos a la víctima
B) El Ministerio Público, en virtud del principio de legalidad procesal penal, debe perseguir penalmente
todos los hechos que revistan caracteres de delito, ejerciendo la acción penal pública en su caso.
b. Oportunidad:
Se podrá presentar la querella, en cualquier momento, mientras el fiscal no declarare cerrada la
investigación. Según el Prof. Chahuán, en el caso que la investigación se reabriese (257 NCPP), también
podría interponerse.
- La querella se presenta ante el juez de garantía, el cual podrá negarse a darle tramitación. En caso que la
admita a tramitación, la remitirá al Ministerio Público.
c. Requisitos de la Querella: toda querella se debe presentar por escrito ante el juez de garantía, debiendo
contener:
a-La designación del tribunal ante el cual se entablare;
b-El nombre, apellido, profesión u oficio y domicilio del querellante;
c- El nombre, apellido, profesión u oficio y residencia del querellado, o una designación clara de su persona,
si el querellante ignorare aquellas circunstancias. Si se ignoraren dichas determinaciones, siempre se
podrá deducir querella para que se proceda a la investigación del delito y al castigo de el o de los
culpables;
d-La relación circunstanciada del hecho, con expresión del lugar, año, mes, día y hora en que se hubiere
ejecutado, si se supieren;
e-La expresión de las diligencias cuya practica se solicitare al Ministerio Público;
f- La firma del querellante o la de otra persona a su ruego, si no supiere o no pudiere firmar.
Se eliminó la exigencia que establecía el Código de Procedimiento Penal en orden a rendir fianza de
calumnia.
Prohibición de querella: No pueden querellarse entre sí, sea por delitos de acción pública o privada:
a) Los cónyuges, a no ser por delito que uno hubiera cometido contra otro o contra sus hijos, o por el delito de
bigamia; y
b) Los consanguíneos en toda la línea recta, los colaterales y afines hasta el segundo grado, a no ser por delitos
cometidos por unos contra los otros, o contra su cónyuge o hijos.
Rechazo de la querella. Cuando no se de curso a una querella en que se persiga un delito de acción pública o
previa instancia particular, por aplicación de alguna de las casuales previstas en las letras a) o b) del 114, el
juez la pondrá en conocimiento del Ministerio Público para ser tenida como denuncia, siempre que no le
constare que la investigación del hecho hubiere sido iniciada de otro modo. Es al menos cuestionable establecer
la causal de la letra a), ya que ésta precisamente se trata de un caso en que la investigación se encuentra
cerrada, razón por la cual, consta no sólo que se inició la investigación, sino que ésta está cerrada.
B.3. Desistimiento
El querellante podrá desistirse de su querella en cualquier momento del procedimiento. En tal caso, tomará a
su cargo las costas propias y quedará sujeto a la decisión general sobre las costas que dictare el tribunal al
finalizar el procedimiento.
Los efectos del desistimiento, en relación a la continuación del procedimiento, serán distintos según la clase de
acción penal de que se trate. Así por ejemplo, si estamos frente al desistimiento de una querella por delito de
acción privada, se decreta el sobreseimiento definitivo.
Derechos del querellado. El desistimiento de la querella deja a salvo el derecho del querellado para ejercer, a
su vez, la acción penal o civil a que dieren lugar la querella o acusación calumniosa, y a demandar los perjuicios
que le hubiere causado en su persona o bienes y las costas. Se exceptúa el caso en que el querellado hubiere
aceptado expresamente el desistimiento del querellante.
Declarado el abandono, el querellante queda impedido de ejercer los derechos que el Código le confiere en
tal calidad.
3
Es lógica esta citación, porque la facultad de investigar los hechos punibles recae en los fiscales y no en los tribunales.
36
- La Acción Penal pública para la persecución de todo delito que no esté sometido a regla especial debe ser
ejercida de oficio por el Ministerio Público. Además puede ser ejercida por las personas que determine la ley.
Siempre se concede acción penal pública para la persecución de los delitos cometidos contra menores de edad.
Lo que señala el art. 53 en relación a la acción penal pública, es plenamente concordante con el principio de
legalidad procesal penal.
Como se señaló anteriormente, en estos delitos no puede procederse de oficio, sin que al menos, el ofendido
por el delito haya denunciado el hecho. A falta del ofendido por el delito, podrán denunciar el hecho las personas
indicadas en el inciso 2º del art. 108, de la forma que en dicho precepto se señala.
Excepción: cuando el ofendido se encuentre imposibilitado de realizar libremente la denuncia, o cuando quienes
pudieren formularla por él se encontraren imposibilitados de hacerlo o aparecieren implicados en el hecho, el
Ministerio Público puede proceder de oficio.
Efectos relativos de la renuncia: la renuncia de la acción penal sólo afectará al renunciante y a sus sucesores,
y no a otras personas a quienes también correspondiere la acción.
37
B. SUJETO PASIVO
La acción penal, sea pública o privada, no puede entablarse sino contra las personas responsables del
delito. La responsabilidad penal sólo puede hacerse efectiva en las personas naturales. Por las personas
jurídicas responden los que hubieren intervenido en el acto punible, sin perjuicio de la responsabilidad civil
que las afectare.
De esta forma, los titulares de la acción civil restitutoria, podrán ser intervinientes o ciertos terceros.
B- Indemnizatorias:
La víctima (incluye a las personas del 108 inciso 2º), podrá deducir respecto del imputado, con arreglo a las
prescripciones del NCPP, todas las restantes acciones que tuvieren por objeto perseguir las
responsabilidades civiles derivadas del hecho punible.
La víctima también podrá deducir las citadas acciones civiles ante el tribunal civil correspondiente. Sin
embargo, admitida a tramitación una demanda civil en el procedimiento penal, no se puede deducir
nuevamente ante un tribunal civil.
Por ello, con la sola excepción de la acción civil restitutoria, las demás acciones encaminadas a obtener la
reparación de las consecuencias civiles del hecho punible, interpuestas por personas distintas de la víctima
o contra personas diferentes del imputado, deberán plantearse ante el tribunal civil que fuere
competente.
Como en el NSPP –con la sola excepción de la acción restitutoria- sólo se puede demandar al imputado,
siendo éste persona natural en todo caso (por la naturaleza misma de la responsabilidad penal), no se podrá
demandar a terceros civilmente responsables distintos del imputado, para ser indemnizados. Sólo se podrá
demandar a aquellos que no sean imputados, ante el juez civil.
6. DESISTIMIENTO Y ABANDONO
La víctima puede desistirse de su acción en cualquier estado del procedimiento. Se considera abandonada la
acción civil interpuesta en el procedimiento penal, cuando la víctima no compareciere, sin justificación, a la
audiencia de preparación del juicio oral o a la audiencia de juicio oral.
A. JUEZ DE GARANTÍA
Se entrega al juez de garantía la labor de decidir sobre la procedencia de todas aquellas intervenciones del
sistema penal en los derechos básicos de todo ciudadano, tanto en lo referente a la investigación misma, como
respecto de las medidas cautelares que se recaben respecto del imputado.
Se trata precisamente de un “garante” que puede evaluar en forma imparcial la labor del Ministerio Público y de
los funcionarios policiales.
Su función no se limita a ser un garante de los derechos, sino que tiene otras funciones como dictar sentencia en
el procedimiento abreviado, preparar el juicio oral, dictar determinadas resoluciones que se le encomiendan.
Se trata del tribunal colegiado del juicio oral, compuesto de 3 jueces profesionales.
Sus funciones son:
a. Conocer y juzgar las causas por crimen o simple delito, salvo aquellas relativas a simples delitos cuyo
conocimiento y fallo corresponda a un juez de garantía;
b. Resolver, en su caso, sobre la libertad o prisión preventiva de los acusados puestos a su disposición;
c. Resolver sobre todos los incidentes que se promueven durante el juicio oral;
d. Conocer y resolver los demás asuntos que la ley procesal les encomiende.
- El Presidente del TJOP es el que decreta la fecha para la celebración de la audiencia de juicio oral. Además
debe indicar el nombre de los jueces que integrarán el tribunal, y ordenar la citación a la audiencia de todos
quienes deban concurrir a ella.
- Funcionan en 1 o más salas integradas por 3 miembros. Cada Sala es dirigida por un juez presidente de
sala.
1. En cuanto al funcionamiento de los juzgados de letras, podemos decir que es unipersonal, sin perjuicio que su
composición sea colegiado.
2. Cada TJOP funciona en una o más salas de 3 jueces cada una. Cada TJOP tendrá desde 3 miembros hasta
27.
3. La distribución de las causas se hace por medio de un procedimiento objetivo y general.
4. Desaparece el cargo de secretario.
5. Existencia de un Comité de Jueces
a. En juzgados de garantía con 3 o más jueces; y En todo TJOP
b. En los tribunales o juzgados con menos de 5 jueces, se conforma por todos ellos. En los que tengan más
de 5 jueces, se conforma por los 5 elegidos por la mayoría.
c. Cada comité de jueces tiene un juez presidente (no confundirlo con el presidente de Sala en TJOP),
el que tiene como funciones principales:
i.Presidir el comité de jueces
ii.Velar por el correcto funcionamiento del tribunal
iii.Calificar al personal
iv.Propone el procedimiento de distribución de causas.
d. Son funciones principales del Comité de Jueces:
i.Aprobar el procedimiento objetivo y general de distribución de causas
ii.Relaciones con la administración del tribunal
6. Existencia de un Administrador General, que controla la gestión administrativa propia del funcionamiento del
tribunal.
7. Existencia de Unidades Administrativas: Sala, Atención al público, Servicios, Administración de Causas,
Testigos y Peritos (esta última, sólo en TJOP).
8. Algunas normas de competencia:
a. Es competente para conocer de un delito el tribunal en cuyo territorio se hubiere cometido el hecho que da
motivo al juicio.
b.El juzgado de garantía del lugar de comisión del hecho investigado conocerá de las gestiones a que diere
lugar el procedimiento previo al juicio oral.
c. El delito se considera cometido en el lugar donde se hubiere dado comienzo a su ejecución.
d.Cuando las gestiones deban efectuarse fuera del territorio jurisdiccional del juzgado de garantía y sean
urgente, la autorización judicial previa puede ser concedida por el juez de garantía del lugar donde
deban realizarse.
e. Si existe conflicto de competencia entre jueces de varios juzgados de garantía, cada uno de ellos estará
facultado para otorgar las autorizaciones o realizar las actuaciones urgentes, mientras no se dirima la
competencia.
f. El Ministerio Público puede agrupar o desagrupar investigaciones. Cuando agrupe: seguirá conociendo el
juez de garantía del lugar de comisión del primero de los hechos. Si luego decide desacumular la
investigación, seguirán conociendo los jueces de garantía, según las reglas generales.
9. Se agregan causales de implicancia para los jueces penales:
a. Haber intervenido anteriormente en el mismo procedimiento como fiscal o como defensor
b.Haber formulado acusación como fiscal, o haber asumido la defensa, en otro procedimiento, seguido
contra el mismo imputado;
41
c. Haber actuado el miembro del TJOP como juez de garantía en el mismo procedimiento.
Son intervinientes:
1) Fiscal
2) Imputado
3) Defensor
4) Víctima
5) Querellante…
… desde que realizaren cualquier actuación procesal o desde el momento en que la ley les permitiere ejercer
facultades determinadas.
SEGUNDA PARTE
LA ETAPA DE INVESTIGACIÓN E INSTITUCIONES VINCULADAS
1. INTRODUCCIÓN
Quizá los mayores cambios que produce la reforma procesal penal se dan en esta etapa. Asimismo, esta etapa
definirá en buena medida los éxitos del cambio del sistema procesal penal, comprometiendo en buena parte la
suerte de los casos que vayan al juicio oral por medio de las investigaciones que realiza la policía y el Ministerio
Público. Asimismo, resultará importante en esta etapa el control que ejerzan los jueces del resguardo de las
garantías de las personas.
La etapa de investigación tiene como fin fundamental, allegar antecedentes al procedimiento para fundamentar la
eventual acusación al acusado, y asimismo, le sirve a éste para sustentar su defensa. No constituyen pruebas,
salvo los casos de prueba anticipada. Ello responde al hecho de que las pruebas se rinden ante el TJOP en el
juicio oral.
Asimismo, durante esta etapa, existe la posibilidad de no llegar a un juicio oral, que se acelere la llegada a éste o
que exista un procedimiento abreviado, tal como lo pasamos a analizar.
En el marco de la investigación preliminar, la cual se inicia por denuncia, querella o de oficio por el Ministerio
Público, los principios que rigen plenamente son:
1) Oficialidad o impulso procesal Fiscal: es el Ministerio Público el que tiene la carga de realizar las diligencias
para el establecimiento de los hechos, siendo los demás intervinientes, meros ayudantes en la preparación
de la acusación fiscal.
2) Orden consecutivo discrecional: es el Fiscal el que determina la secuencia de los actos que debe llevar a
cabo en la investigación, sin perjuicio de las instrucciones generales y específicas que las autoridades del
Ministerio Público dictan.
3) Publicidad: existencia de un secreto relativo, justificado en el éxito de las diligencias de la investigación. La
publicidad se ve limitada respecto de terceros ajenos al juicio y en determinados casos, respecto del
imputado o de otros intervinientes, siempre que el juez de garantía lo autorice y sin perjuicio de ciertas
cuestiones que son de una publicidad absoluta, sin poder llegarse a limitarse.
4) No se aplica la preclusión: no existe un orden consecutivo legal y los actos son independientes entre sí.
5) Oralidad: en la investigación, la palabra es el medio de comunicación entre los intervinientes y el juez de
garantía. El registro no nos puede llevar a concluir que se aplicaría el principio de la protocolización, ya que
dicho registro sólo cumple un fin de análisis posterior y eventual de la legalidad de las actuaciones.
6) Inmediación: tanto el juez de garantía como los intervinientes conocen el material mismo de la causa y
pueden aprehender las circunstancias de hecho por sí mismos, sin necesidad de un objeto –expediente- o
de una persona que mediatice el conocimiento de las declaraciones y de las demás diligencias de
investigación.
7) Probidad y buena fe procesal en la investigación
8) Se debe aplicar la economía procesal
9) Unilateralidad de la audiencia: el Fiscal no siempre debe comunicar al afectado por un acto de investigación,
que tal diligencia se llevará a cabo. Sólo cuando se afecten derechos constitucionales, se requerirá de la
autorización del juez de garantía e incluso, en ciertos casos, éste permitirá que se puedan llevar a cabo sin
conocimiento del afectado.
Denuncia
- Cualquier persona podrá comunicar directamente al Ministerio Público el conocimiento que tuviere de la
comisión de un hecho que revistiere caracteres de delito.
- Además del Ministerio Público, son “receptores” de denuncias:
i.Los funcionarios de Carabineros de Chile
ii.Los funcionarios de Policía de Investigaciones
iii.Los funcionarios de Gendarmería de Chile en los casos de delitos cometidos dentro de recintos
penitenciarios
43
iv.Cualquier tribunal con competencia penal
- Todo receptor de la denuncia, debe hacerla llegar de inmediato al Ministerio Público
Las personas antes mencionadas deben efectuar la denuncia dentro de las 24 horas siguientes al
momento en que tomaren conocimiento del hecho criminal. Los capitanes de naves o de aeronaves,
tienen la obligación desde que arriban a puerto o aeropuerto de la República.
Los que estando obligados, omiten denunciar, serán sancionados con la pena del art. 494 CP (1 a 4 UTM) o
con las prescritas en leyes especiales. No se aplica la sanción cuando el que omitió la denuncia haya
arriesgado autoincriminarse o hacerlo respecto de su cónyuge, conviviente, ascendiente o hermanos.
Forma de la denuncia: por cualquier medio. En caso que sea verbal la denuncia, se levantará un registro en
presencia del denunciante, quien lo firmará junto con el funcionario que lo reciba. En caso que sea escrita, será
firmada por el denunciante. En ambos casos, si el denunciante no puede firmar, puede hacerlo un 3º a su ruego.
Contenido de la denuncia:
a-Identificación del denunciante
b-Señalamiento de su domicilio
c- Narración circunstanciada del hecho
d-Designación de quienes lo hubieren cometido
e-Designación de las personas que lo hubieren presenciado o que tuvieren noticia de él
Todo lo anterior en cuanto le constare al denunciante.
Derechos del denunciante: No contrae el derecho a intervenir posteriormente en el procedimiento, sin perjuicio
de las facultades que pudieren corresponderle en el caso de ser víctima del delito.
Autodenuncia.
El que hubiere sido imputado por otra persona de haber participado en la comisión de un hecho ilícito,
tendrá el derecho de concurrir ante el Ministerio Público y solicitar que se investigue la imputación de que hubiere
sido objeto.
Si el fiscal respectivo se negare a proceder, la persona imputada podrá recurrir ante las autoridades superiores del
Ministerio Público, a efecto de que revisen la decisión.
44
Actuación del Ministerio Público, en relación con la denuncia recibida.
Una vez recibida la denuncia por el Ministerio Público, sea en forma directa o por los funcionarios ya conocidos, el
encargado correspondiente debe proceder a su registro en un formulario, numerarla y ponerla a disposición del
o los fiscales encargados de evaluarla (se hace lo mismo cuando se recibe una querella remitida por el Juez de
Garantía).
Con la evaluación anteriormente señalada, el Ministerio Público puede hacer una de las siguientes 3 cosas:
A. Poner término, suspender o no continuar la tramitación del caso (con las facultades que hemos analizado);
B. Requerir información adicional (sea por sí mismo o por medio de la policía)
C. Formalizar la investigación.
3. ACTUACIONES DE LA INVESTIGACIÓN
Cuando el Ministerio Público decide llevar adelante la investigación, deberá desplegar una serie de actividades
conducentes a recopilar información útil, relevante y pertinente.
Los artículos 180 y 181 rigen en parte la investigación de los fiscales, siendo sus ideas fundamentales:
1- Los fiscales dirigirán la investigación y podrán realizar por sí mismos o encomendar a la policía las
diligencias de investigación que consideren conducentes al esclarecimiento de los hechos.
2- Dentro de las 24 horas siguientes a que tome conocimiento de la existencia de un hecho que revista los
caracteres de delito de acción penal pública por alguno de los medios que establece la ley, el fiscal debe
proceder a:
a. Practicar las diligencias pertinentes y útiles para el esclarecimiento de los hechos, de las
circunstancias relevantes para aplicar la ley penal, los partícipes del hecho y las circunstancias que
sirvan para verificar la responsabilidad de los mismos.
b. Impedir que el hecho denunciado produzca consecuencias ulteriores.
3- Los fiscales pueden exigir información de toda persona o funcionario público, los que no pueden excusarse
de proporcionarla, salvo en los casos expresamente exceptuados en la ley.
45
4- Se establece la gratuidad de los servicios de los notarios, CBR, entre otros, respecto de las actuaciones
solicitadas por el Ministerio Público.
5- Para los fines anteriores, la investigación se llevará a cabo de modo de consignar y asegurar todo cuanto
condujere a la comprobación del hecho y a la identificación de los partícipes del mismo.
6- Se hará constar el estado de las personas, las cosas y los lugares; se identificará a los testigos; se tomará
nota de las huellas, rastros; entre otros.
7- Para el cumplimiento de los fines de la investigación se podrá disponer la práctica de operaciones
científicas, la toma de fotografías, filmación o grabación y, en general, la reproducción de imágenes, voces o
sonidos por los medios técnicos que resultaren más adecuados, requiriendo la intervención de los
organismos especializados.
Sin perjuicio de lo señalado anteriormente, el fiscal puede disponer que determinadas actuaciones, registros o
documentos sean mantenidos en secreto, respecto del imputado o de los demás intervinientes, cuando lo
considere necesario para la eficacia de la investigación. En dicho caso, deberá (A) identificar las piezas o
actuaciones respectivas, de modo que no se vulnere la reserva y (B) fijar un plazo no superior a 40 días para
la mantención del secreto.
Ante dicha declaración, tanto el imputado como cualquier otro interviniente están facultados para solicitar al juez
de garantía:
A- Que ponga término al secreto
B- Que limite el secreto en cuanto a su duración
C- Que limite el secreto en cuanto a las piezas o actuaciones abarcadas por él
D- Que limite el secreto respecto de las personas a las cuales afectare
Es deber de los funcionarios que hayan participado o tenido conocimiento de diligencias de investigación, guardar
el secreto respecto de ellas.
El plazo límite de 40 días, es un plazo establecido con carácter general. Así por ejemplo, la ley 20.000 establece
como plazo máximo el de 120 días renovables por 60 días en forma sucesiva.
Asistencia a las diligencias. Durante la investigación, el fiscal puede permitir la asistencia del imputado o de los
demás intervinientes a las actuaciones o diligencias que debiere practicar, cuando lo estimare útil. En todo caso,
puede impartirles órdenes obligatorias para el adecuado desarrollo de la actuación o diligencia y puede excluirlos
de las mismas en cualquier momento.
46
Es importante relacionar esta situación con el art. 159 COT: el juez de garantía que conocía del primer hecho
cometido, será competente para conocer de los acumulados, debiendo entregarse a éste los antecedentes por los
demás jueces.
Tipos de diligencias
Las diligencias de la investigación admiten múltiples clasificaciones. Por ejemplo:
a. Actos intrusivos versus actos no intrusivos: según si afectan el derecho constitucional que asegura a las
personas el respeto y protección a la vida privada y pública, a la honra de la persona y de su familia, la
inviolabilidad del hogar y de toda forma de comunicación privada;
b. Actos de investigación que afectan derechos fundamentales versus actos que no los afectan:
importancia para los efectos de la autorización del juez de garantía (art.9)
c. Actos urgentes versus actos no urgentes: según si requieren de la intervención rápida y eficaz del
Ministerio Público y de la Policía, con el fin de que no se extraigan, pierdan o desaparezcan elementos o
antecedentes que puedan servir al esclarecimiento de los hechos.
d. Actos reservados versus actos no reservados: respecto si el afectado puede acceder al registro de la
actuación respectiva.
A pesar de la anterior clasificación, se analizarán las diligencias que no requieren de autorización judicial, las que
requieren tal autorización y las hipótesis que se pueden realizar diligencias sin conocimiento del afectado.
Si el Ministerio Público asume directamente la práctica de la actuación, debe también registrarla, tan pronto
tuviere lugar, por cualquier medio que permita garantizar la fidelidad e integridad de la información.
Dentro de las diligencias que requieren de autorización judicial previa, es posible distinguir:
A) Aquellas reguladas expresamente en el NCPP versus aquellas no reguladas expresamente
B) Aquellas que pueden solicitarse con conocimiento del afectado versus aquellas que pueden solicitarse sin
ese conocimiento
C) Aquellas que pueden solicitarse antes de la formalización de la investigación versus aquellas que pueden
solicitarse después de la formalización de la investigación
La realización de estas diligencias supone necesariamente la intervención del Ministerio Público, al menos, en
la obtención de la autorización o aprobación judicial previa, aunque la realización concreta de la diligencia recaiga
en funcionarios policiales.
Forma de otorgarse la autorización judicial. La aprobación o autorización judicial puede otorgarse en forma
verbal. Es uno de los principios del procedimiento y además, posibilita una mayor eficacia en la investigación. Ello,
sin perjuicio que las policías puedan requerir la exhibición de la orden judicial previa, la cual también podrá
requerirla el imputado o afectado con la práctica de la diligencia.
Con todo, las diversas normas del NCPP, relativas al tema, permiten sostener que la escrituración de las
autorizaciones no constituye una exigencia general.
El deber de registro de las actuaciones de la etapa de investigación, sean policiales, fiscales, o judiciales, tienen
una finalidad muy clara: revisar la legalidad de las mismas, de manera ex post. Por ello, no es posible concluir
que la obligación de registro impida la autorización verbal.
Esta norma fue modificada. Anteriormente cuando era examinado el imputado, siempre se requería de la
autorización judicial, aunque éste consintiese en someterse al examen.
48
Con la nueva regulación, y atendido el carácter incriminatorio que un examen puede tener, debe resguardarse
el derecho del imputado a negar su consentimiento, debiendo controlarse el hecho de que el imputado obre
plenamente informado de sus derechos y de sus posibles consecuencias.
Los resguardos señalados en el art. 197, sobre la necesidad de consentimiento y eventual autorización judicial, se
aplicarán a la hipótesis de los exámenes médicos a los que se alude en los arts. 198 (delitos sexuales) y
199, en los casos en que se trate de un examen corporal que realice un facultativo. En caso que se trate de un
ofendido menor de edad, el consentimiento debe prestarlo quien corresponde, conforme a la ley civil.
- Tratándose de los delitos de carácter sexual, los hospitales, clínicas y establecimiento de salud semejantes,
sean públicos o privados, deberán practicar los reconocimientos, exámenes médicos y pruebas biológicas
conducentes a acreditar el hecho punible y a identificar a los partícipes en su comisión, debiendo conservar
los antecedentes y muestras correspondientes.
- Se levanta acta del reconocimiento y de los exámenes, debiendo suscribirse por el jefe del establecimiento y
por los profesionales que lo practican. Se entregará una copia a la persona objeto del mismo (o a quien la
tenga bajo su cuidado); la otra copia y las muestras y resultados se mantienen en custodia y bajo estricta
reserva en la dirección del establecimiento de salud, por un período no inferior a un año, para remitirse al
Ministerio Público.
- Si los establecimientos no se encuentran acreditados ante el Servicio Médico Legal para determinar huellas
genéticas, tomarán las muestras biológicas y obtendrán las evidencias necesarias, procediendo a remitirlas a
la institución que corresponda, de acuerdo a la ley que crea el Sistema Nacional de Registros de ADN y su
Reglamento.
- En los delitos que fuere necesaria la realización de exámenes médicos para la determinación del hecho
punible, el fiscal puede ordenar que éstos sean llevados a cabo por el SML o por cualquier otro servicio
médico.
- Autopsias:
i.Serán practicadas en las dependencias del SML, por el legista correspondiente
ii.Donde no lo hubiere, el fiscal designa al médico encargado y el lugar en que la autopsia debe llevarse a
cabo.
- Los exámenes y pruebas biológicas destinados a la determinación de huellas genéticas sólo pueden ser
efectuadas por profesionales y técnicos que se desempeñen en el SML, o en aquellas instituciones
acreditadas ante dicho Servicio (constan en una nómina).
3-Exhumación de cadáveres: en calificados casos, cuando el fiscal considere que la exhumación del cadáver
sea de utilidad en la investigación de un hecho punible, puede solicitar la autorización judicial para la
práctica de la diligencia citada. El tribunal resolverá, como lo estime pertinente, previa citación del cónyuge o
de los parientes más cercanos del difunto. El cuerpo exhumado puede ser de la víctima del delito o de
cualquier otra persona, en la medida que puede aportar antecedentes para la investigación. En todo caso,
practicado el examen o la autopsia correspondientes se procederá a la inmediata sepultura del cadáver.
4-Pruebas caligráficas
El fiscal puede solicitar al imputado que escriba en su presencia algunas palabras o frases, a objeto de
practicar las pericias caligráficas que considere necesarias para la investigación. Si el imputado se niega a
hacerlo, el fiscal puede solicitar al juez de garantía la autorización correspondiente.
Para que sea válido el consentimiento que da el imputado, es necesario que el fiscal advierta al imputado el
objeto de la toma de muestra.
En el caso de los lugares cerrados en los cuales se puede practicar la diligencia, se debe distinguir:
a. Lugares Cerrados Ordinarios: todos aquellos lugares cerrados, distintos de los regulados en el NCPP de
modo especial.
a. Cuando se presume que el imputado, o medios de comprobación del hecho investigado, se encuentre en
un determinado edificio o lugar cerrado, se puede entrar al mismo y proceder al registro, siempre que su
propietario o encargado consienta en la práctica de la diligencia.
b. El funcionario que practique la diligencia, debe individualizarse y cuidar que la diligencia se realice
causando el menor daño y las menores molestias posibles a los ocupantes.
49
c. Se entregará al propietario o encargado, un certificado que acredite el hecho del registro, la
individualización de los funcionarios que lo han practicado y del funcionario que lo ha ordenado.
d. En caso que el propietario o encargado del edificio o el lugar no permita la entrada y registro, la
policía adoptará las medidas tendientes a evitar la posible fuga del imputado y el fiscal solicitará al juez la
autorización, haciendo saber las razones de la negativa.
Es presupuesto para la entrada y registro (allanamiento) la presunción de que el imputado o los medios
de comprobación del hecho investigado se encuentran dentro del lugar.
Debe tenerse presente el art. 213 NCPP: aun antes de la autorización del juez de garantía, el fiscal puede
disponer las medidas de vigilancia que estime convenientes para evitar la fuga del imputado o la sustracción
de documentos o cosas que constituyeren el objeto de la diligencia.
Asimismo, debemos tener presente la situación especial regulada en el art. 206, en el cual se permite la
entrada y registro sin consentimiento expreso del propietario o encargado ni autorización judicial
previa. Ello será posible en el caso que existan llamadas de auxilio de personas que se encuentren en el
interior u otros signos evidentes, que indiquen que se está cometiendo un delito. En el delito de
abigeato, la policía puede ingresar a los predios, cuando existan indicios o sospechas de que se está
perpetrando el citado ilícito, siempre que las circunstancias hagan temer que la demora en obtener la
autorización del propietario o del juez, en su caso, facilitará la concreción del mismo o la impunidad de los
hechores.
d. Lugares consulares: es similar al caso anterior, pero las personas que pueden prestar el consentimiento
para la realización de las diligencias son distintas: el jefe de la oficina consular, persona que éste designe o
el jefe de la misión diplomática del mismo Estado.
En los puntos c. y d. se toma en cuenta la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y la
Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.
2. CONTENIDO DE LA ORDEN DE REGISTRO: la orden que autoriza la entrada y registro, debe señalar:
a. El o los edificios o lugares que hubieren de ser registrados
b. El fiscal que lo hubiere solicitado
c. La autoridad encargada de practicar el registro
d. El motivo del registro y, en su caso, del ingreso nocturno.
La autorización tiene una vigencia máxima de 10 días, pudiendo ser menor, cuando el juez así lo
determine. En caso que la diligencia se haga, una vez caducada la autorización, podría ser declarada nula o
incidir en la eventual ilicitud de los medios de prueba obtenidos a partir de ella.
5. MEDIDAS DE VIGILANCIA: se pueden disponer aún antes de que el juez de garantía dicte la orden de
entrada y registro.
Casos en que la persona que tiene en su poder los objetos o documentos es distinta del imputado: el
fiscal debe:
1. Solicitar al juez de garantía que cite a la persona que tiene los objetos o documentos, bajo el
apercibimiento de:
a. Pagar las costas provocadas pro su eventual incumplimiento
b.Ser arrestado por un máximo de 24 horas
c. Ser sancionado con las penas del inciso 2º del art. 240 CPC, en caso de negarse sin justa causa.
No es posible imponer este apercibimiento a los que están exentos de prestar declaración.
2. Si la persona concurre a la citación y entrega los objetos o documentos, o si no concurre y se ordena la
incautación, o si concurriendo no los entrega, el Ministerio Público debe proceder a la práctica de la
actuación y, luego, seguirá lo señalado más arriba.
3. Si se presume que los bienes a incautar están en un lugar cerrado, se procede conforme a las normas de
dicha diligencia.
El art. 220 señala los objetos y documentos no sometidos a incautación, disponiendo que no es posible
disponerse la incautación, ni la entrega bajo el apercibimiento previsto en el inciso 2º del art. 210:
De las comunicaciones entre el imputado y las personas que pudieren abstenerse de declarar como
testigos en razón de parentesco o en virtud de los prescrito en el art. 303 (secreto)
De las notas que hubieren tomado las personas mencionadas en la letra a) precedente, sobre
comunicaciones confiadas por el imputado, o sobre cualquier circunstancia a la que se extendiere la
facultad de abstenerse de prestar declaración; y
De otros objetos o documentos, incluso los resultados de exámenes o diagnósticos relativos a la salud
del imputado, a los cuales se extendiere naturalmente la facultad de abstenerse de prestar declaración.
Estas limitaciones sólo rigen cuando las comunicaciones, notas, objetos o documentos se encuentren en
poder de las personas a las cuales la ley reconoce la facultad de no prestar declaración. En el caso de las
personas mencionadas en el art. 303, la limitación se extiende a las oficinas o establecimientos en los
cuales ellas ejercen su profesión o actividad.
Asimismo, no regirán las limitaciones, cuando:
a. Las personas facultadas para no prestar testimonio fueran imputadas por el hecho investigado
b.Se trate de objetos y documentos que puedan caer en comiso, por provenir de un hecho punible o haber
servido, en general, a la comisión de un hecho punible.
En caso que exista duda acerca de la procedencia de la incautación, el juez puede ordenarla por
resolución fundada. En tal caso, los objetos y documentos incautados deben ponerse a disposición del
juez, sin previo examen del fiscal o de la policía. El magistrado decide, teniéndolos a la vista, acerca
52
de la legalidad de la medida. Si estima que se encuentran entre los objetos y documentos no
sometidos a incautación ordenará su inmediata devolución. En caso contrario, hará entrega de los
mismos al fiscal, para los fines que éste estime convenientes.
Si en cualquier momento del procedimiento, se constata que los objetos y documentos incautados,
se encuentran entre aquéllos comprendidos en la norma analizada, no podrán ser valorados como
medios de prueba en la etapa procesal correspondiente.
7-Retención e incautación de correspondencia
a. El fiscal solicita la autorización al juez de garantía.
b. Debe existir motivo fundado que hagan previsible la utilidad para la investigación
c. El juez puede autorizar, por resolución fundada, la retención de la correspondencia (postal,
telegráfica o de otra clase) y los envíos dirigidos al imputado o remitidos por él, aun bajo nombre
supuesto, o aquellos en que se presume que emanan de él.
d. Asimismo se puede disponer la obtención de copias o respaldos de la correspondencia electrónica
dirigida al imputado o emanada de éste.
e. El fiscal examina la correspondencia y conserva los que tengan relación con el hecho objeto de la
investigación. Los que no tienen relación con el hecho, son devueltos o entregados al destinatario o
algún miembro de su familia o mandatario o representante legal.
10- Grabación de comunicaciones entre presentes, fotografía, filmación u otros medios de reproducción
de imágenes
Se requiere que el procedimiento tenga por objeto la investigación de un hecho punible que merezca pena
de crimen. Rigen además las normas del 222 al 225.
De esta forma, el art. 236 regula las diligencias que requieren de autorización judicial previa, las cuales se
pueden solicitar antes o después de la formalización de la investigación.
La RG es que las diligencias que requieren de autorización judicial previa, sean comunicadas, antes de
llevarse a cabo, al afectado.
Excepcionalmente se puede disponer que no sean comunicadas al afectado:
A. Antes de formalizarse la investigación: cuando la gravedad de los hechos o la naturaleza de la
diligencia permitan presumir que el desconocimiento por parte del afectado es indispensable para
el éxito de la actuación.
B. Después de formalizada la investigación: cuando la reserva resulte estrictamente indispensable
para la eficacia de la diligencia.
Es lógico que si la actuación no requiere de autorización judicial, se pueda llevar a cabo sin conocimiento
previo del afectado.
4. LA PRUEBA ANTICIPADA
La rendición de prueba en etapas anteriores al juicio oral puede ser también una diligencia que, para ser
realizada válidamente, requiere de autorización judicial previa otorgada por el juez de garantía.
Si la solicitud es formulada para tener efecto en la etapa de investigación, estaríamos frente a una actuación de
las ya analizadas. Sin embargo, se analiza en forma separada, toda vez que será una prueba que tendrá valor
en el juicio oral, sin perjuicio de que no se haya rendido durante éste.
La estricta aplicación de los principios de oralidad, inmediación y contradicción que informan el NSPP, en
especial en el juicio oral, deberían significar que la prueba se rinda en forma íntegra durante la o las audiencias
en que se desarrolle el citado juicio.
Sin embargo, se admite (al igual que en el sistema español y en el alemán), la introducción al juicio oral de
pruebas previamente producidas y que integran formalmente el material probatorio que puede ser valorado
por el tribunal.
Debe dejarse en claro que, las diligencias de anticipación de prueba, aunque tienen lugar antes de que se
lleve a cabo el juicio oral, en su desarrollo deben cumplir con las exigencias de un verdadero juicio:
Permitir la plena intervención de las partes interesadas. Especialmente fiscales y defensores.
Permitir la intervención del juez (de garantía)
La “prueba anticipada” respecto de la prueba testimonial, se regula durante la investigación y durante la etapa
intermedia.
En el caso de la prueba pericial, se permite anticipar la declaración del perito, cuando éste no pueda acudir al
juicio oral, para ser interrogado al tenor de su informe (petición que se puede hacer en la audiencia de
preparación del juicio oral).
La prueba testimonial anticipada se introduce al juicio oral por la vía de la lectura del registro respectivo.
En caso que, llegado al juicio oral, pueda el testigo concurrir, nada obsta a que lo haga. En tal caso, su
declaración podrá ser leída luego de que deponga, para los efectos del 332: apoyo memoria.
5. LA FORMALIZACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN
A. GENERALIDADES
La etapa de investigación es “desformalizada”, la actividad del fiscal y de la policía se desarrolla sin sujeción de
formalidades preestablecidas, ni un orden consecutivo legal, sin que opere la sanción de la preclusión. Sin
embargo, esta situación cambia cuando se procede a formalizar la investigación.
Desde dicho momento, la defensa podrá intervenir más activamente en el procedimiento (sin perjuicio, de haber
podido obrar desde la 1ª actuación del procedimiento dirigida en contra del imputado); y el Juez de Garantía,
asume más intensamente su rol de fiscalizador.
Asimismo, el Ministerio Público, tras la formalización, dispone de medios más intensos de actuación, que
puedan implicar mayores restricciones a los derechos del imputado. Así, por RG, conjuntamente a la decisión de
formalizar, irán otras solicitudes que formule el fiscal al juez de garantía. La audiencia de formalización de la
investigación, resultará trascendente para un gran cúmulo de casos que ingresarán al sistema penal.
La formalización, busca reponer una situación que resultaba gravosa para el imputado: el auto de
procesamiento. La formalización de la investigación tiene funciones de garantía. Así por ejemplo, a diferencia de
lo que ocurría con el auto de procesamiento, la formalización no acarrea, necesariamente, la prisión preventiva,
ni tampoco el prontuario (catálogo de presuntos delincuentes).
Además de la garantía que otorga esta actuación, el Ministerio Público quedará constreñido a los hechos que
incluya en los cargos formalizados, con lo cual se impide la posibilidad de una sorpresiva ampliación de los
mismos, cuando luego, deduzca la acusación (PRINCIPIO DE LA CONGRUENCIA).
Crítica a la definición: lo que en realidad se comunica son los hechos que se investigan, no siendo determinante
la calificación jurídica que se haga de los mismos.
- Requiere:
1. Individualización del imputado
2. Indicación del delito que se le atribuye
3. Fecha y lugar de comisión
4. Grado de participación asignado
- Oportunidad. La formalización de la investigación es una atribución exclusiva del Ministerio Público, no
estando obligado a formalizar si no lo desea. Así se destaca en el art. 230: El fiscal podrá formalizar la
investigación cuando considerare oportuno formalizar el procedimiento por medio de la intervención judicial.
C. LA AUDIENCIA
C.1. Desarrollo. Algunas peticiones posibles
Si el Fiscal desea formalizar la investigación, respecto de un imputado que no se encuentre detenido (en tal
caso, se aplica el art. 132: la investigación se formaliza en la audiencia de control de detención), solicita al juez
de garantía la realización de una audiencia en una fecha próxima. A la citada audiencia, se cita:
1. Al imputado
2. Al defensor del imputado
3. A los demás intervinientes en el procedimiento
1- En la audiencia, el juez ofrece la palabra al fiscal para que exponga verbalmente los cargos que presente
contra el imputado y las solicitudes que efectúe al tribunal, como podrían ser:
a. Medidas cautelares personales o reales;
b. Autorización para realizar una diligencia que puede afectar derechos garantizados en la CPR;
c. Anticipación de prueba;
d. Resolución del caso mediante el “juicio inmediato”
e. Procedimiento simplificado;
f. Suspensión condicional del procedimiento o acuerdo reparatorio;
g. Entre otras.
2- El imputado puede manifestar lo que estime conveniente.
3- El juez abre el debate sobre las demás peticiones que los intervinientes plantean.
4- El imputado puede reclamar a las autoridades del Ministerio Público, de la formalización, cuando la
considere arbitraria
Pese a que podría vislumbrarse como una excepción al principio básico de que la formalización de la
investigación es atribución exclusiva del Ministerio Público, lo cierto es que esta norma carece de una sanción
específica: no se trata de una obligación para el Ministerio Público, sin que exista sanción para el mismo en
caso que no formalice en el plazo judicial fijado.
6. EL JUICIO INMEDIATO
Es una facultad exclusiva del Fiscal. Se trata de un mecanismo de aceleración del procedimiento, ya que
implica que la causa desde la audiencia de formalización, pase de inmediato al juicio oral.
NO ES UNA SALIDA ALTERNATIVA, ya que habrá enjuiciamiento del imputado, precisamente en un juicio oral.
Lo que significa el juicio inmediato, es que, desde la perspectiva del fiscal, la investigación se encuentra agotada.
Se usa generalmente cuando estamos frente a un delito flagrante.
Cuando sea acogida la solicitud del fiscal, en la misma audiencia de formalización, el Ministerio Público
deberá formular verbalmente la acusación y ofrecer la prueba. En la misma audiencia, el querellante podrá
adherirse a la acusación del fiscal o acusar particularmente y deberá indicar las pruebas de las que piensa valerse.
El imputado puede realizar las alegaciones que correspondan y ofrecer, a su turno, prueba.
Al fin de la audiencia, el juez dictará el auto de apertura de juicio oral, sin perjuicio de la citada suspensión que
puede disponer cuando estime la indefensión del acusado.
En caso que el juez acoja la posibilidad de juicio inmediato, transformándose la audiencia de formalización de facto
en una audiencia de preparación del juicio oral ¿Se puede solicitar, además, la aplicación del procedimiento
abreviado?
A. Profesor Chahuán: antes de la ley 20.074 se inclinaba por la negativa, ya que se solicitaba el paso
a un juicio oral y el procedimiento abreviado no es un juicio oral. Hoy, estima que es posible su
58
aplicación, principalmente por la presencia del defensor en la audiencia y el control que realiza el
juez de garantía en relación al acuerdo que presta el imputado.
B. Profesora Horvitz: lo estima inaplicable.
Forma. Se dispondrá la citación, en conformidad al art. 33. De esta forma, si es desobedecida, se puede aplicar
una medida más gravosa. Exclusivamente respecto del imputado, se podría decretar el arresto, la detención o
incluso la prisión preventiva.
Improcedencia. Exclusión de otras medidas. Cuando la imputación se refiere a faltas, o delitos que la ley no
sancionare con penas privativas ni restrictivas de libertad, no se podrán ordenar medidas cautelares que
recaigan sobre la libertad del imputado, con excepción de la citación.
Antes de la modificación de la ley 19.789, tampoco era posible aplicar medidas privativas o restrictivas de libertad,
cuando las penas no excedían de las de presidio reclusión menores en su grado mínimo. Tras la
modificación, se extendió el campo de aplicación de las medidas cautelares a delitos menores.
59
Resulta paradójico que el Código de Procedimiento Penal (1906) resultara más cauteloso de las garantías
constitucionales que el actual texto. Se justificó esta modificación en la necesidad de dotar de mayor eficacia a la
persecución penal, tratándose de delitos “menores”.
El inciso 2º del art. 124 señala que lo dispuesto anteriormente (prohibición de decretar medidas cautelares
privativas o restrictivas de libertad en ciertos casos) no se aplicará:
A. En los casos a que se refiere el inciso 4º del art. 134
B. Cuando procediere el arresto por falta de comparecencia, la detención o la prisión preventiva de
acuerdo a lo dispuesto en el art. 33.
El art. 134 regula la Citación, registro y detención en caso de flagrancia. Establece que quien fuere
sorprendido por la policía in fraganti cometiendo un hecho de los señalados en el art. 124, esto es, constitutivo de
faltas, o delitos que la ley no sancionare con penas privativas ni restrictivas de libertad, será citado a la presencia
del fiscal, previa comprobación de domicilio.
La policía puede registrar las vestimentas, el equipaje o el vehículo de la persona que será citada.
Asimismo, puede conducir al imputado al recinto policial, para que se efectúe la citación en dicho lugar.
No obstante que en caso de faltas, por RG no se puede sancionar con penas privativas o restrictivas de
libertad, el imputado puede ser detenido si hubiere cometido alguna de las faltas contempladas en el
Código Penal, en los arts. 494 Nos. 4, 5 y 19, exceptuando en éste último caso los hechos descritos en los
arts. 189 y 233; 494 bis, 495 No. 21, y 496 Nos. 5 y 26.
En todos los casos señalados anteriormente, el agente policial debe informar al fiscal, de inmediato, de la
detención, para los efectos de lo dispuesto en el inciso final del art. 131. El fiscal comunicará su decisión al
defensor en el momento que la adopte.
El procedimiento que indica el inciso 1º del art. 134 (ante sorpresa in fraganti de ciertas faltas o delitos que no se
sancionen con penas privativas o restrictivas de libertad: citación a la presencia del fiscal, previa comprobación de
domicilio) puede ser también utilizado cuando, tratándose de un simple delito y no siendo posible conducir al
imputado de inmediato ante el juez, el funcionario a cargo del recinto policial considere que existen suficientes
garantías de su oportuna comparecencia. El Ministerio Público ha señalado que se refiere a vínculos fácilmente
comprobables que faciliten la ubicación del imputado y descarten razonablemente el peligro de no comparecencia.
B.2. La detención
Se diferencian 3 clases de detención, según la autoridad o persona que la decreta o realiza:
1. Detención judicial
2. Detención decretada por cualquier tribunal
3. Detención en caso de flagrancia, por la policía o por cualquier persona
60
Procedencia de la detención.
RG: Ninguna persona puede ser detenida sino por orden de funcionario público expresamente facultado por la ley
y después que dicha orden le fuere intimada en forma legal;
Excepción: Sorprendido en delito flagrante. En tal caso no es necesario cumplir con lo anterior, siendo detenido
para el único objeto de ser conducida a la autoridad que correspondiere.
Este principio concuerda con lo señalado en el art. 19 No. 7 letra c) de la CPR.
1) Detención judicial: es aquella que ha sido ordenada y que emana del juez de garantía (por RG),
atendiendo a que excepcionalmente puede decretarla el TJOP que conocerá del juicio oral. A menos que se
trate de uno de los casos del 124 (citación), el tribunal, a solicitud del Ministerio Público, puede ordenar la
detención del imputado para ser conducido a su presencia, sin previa citación, cuando de otra manera
la comparencia pudiera verse demorada o dificultada. También se decretará la detención del imputado cuya
presencia en una audiencia judicial fuere condición de ésta y que, legalmente citado, no compareciere sin
causa justificada.
Tal como se deduce del tenor literal del art. 127, la detención judicial no puede ser solicitada por la
policía ni por otros como el querellante o la víctima.
2) Detención decretada por cualquier tribunal: cualquier tribunal, aunque no ejerza jurisdicción en lo
criminal, podrá dictar órdenes de detención contra las personas que, dentro de la sala de su despacho,
cometieren algún crimen o simple delito.
b.Por la Policía:
Los agentes policiales están obligados a detener:
1) A quienes sorprenden in fraganti en la comisión de un delito;
2) Al sentenciado a penas privativas de libertad que hubiere quebrantado su condena;
3) Al que se fugare estando detenido;
4) Al que tuviere orden de detención pendiente;
5) A quien fuere sorprendido en violación flagrante de las medidas cautelares personales
6) Al que violare la condición del 238 b), impuesta para la protección de otras personas (relativa a
suspensión condicional del procedimiento).
En estos casos, la policía puede ingresar a un lugar cerrado, mueble o inmueble, cuando se encuentra en
actual persecución del individuo a quien debe detener, para el solo efecto de practicar la respectiva
detención.
b.1. Delitos sexuales: no obsta a que la policía realice la detención en caso de flagrancia, la circunstancia
de que la persecución penal requiera de instancia particular previa (también se aplica cuando la detención
flagrante la realice un particular).
b.2. Detención en flagrancia de personas sujetas a fuero. Si el aforado fuere detenido por habérsele
sorprendido en delito flagrante, el fiscal lo pondrá inmediatamente a disposición de la Corte de
Apelaciones respectiva.
b.3. Detención en flagrancia de autoridades judiciales y del Ministerio Público. Es necesario que,
respecto de los jueces, fiscales judiciales y fiscales del Ministerio Público, se deba realizar previamente el
procedimiento de la querella de capítulos (arts. 424 a 430). En caso que alguna de estas personas sea
detenida por delito flagrante, el fiscal lo pondrá de inmediato a disposición de la Corte de Apelaciones
respectiva.
61
c. Situación de flagrancia: se entiende que se encuentra en situación de flagrancia:
A. El que actualmente se encontrare cometiendo el delito
B. El que acabare de cometerlo
C. El que huyere del lugar de comisión del delito y fuere designado por el ofendido u otra persona
como autor o cómplice
D. El que, en un tiempo inmediato a la perpetración de un delito, fuere encontrado con objetos
procedentes de aquél o con señales, en sí mismo o en sus vestidos, que permitieren sospechar su
participación en él, o con las armas o instrumentos que hubieren sido empleados para cometerlo
E. El que las víctimas de un delito que reclamen auxilio, o testigos presenciales, señalen como autor o
cómplice de un delito que se hubiere cometido en un tiempo inmediato.
La nueva redacción de la letra E, es más amplia que la anterior, ya que permite que proceda la
detención por flagrancia por cualquier delito e incluso por señalamiento de un testigo presencial.
b) Detención sin orden judicial: cuando la detención se practique en virtud de los artículos 129
(detención flagrante) y 130 (situación de flagrancia), el agente policial que la realice o el agente
encargado del recinto de detención debe informar de ella al Ministerio Público dentro de un plazo
máximo de 12 horas. El fiscal puede:
a. Dejar sin efecto la detención; u
b. Ordenar que el detenido sea conducido ante el juez dentro del plazo máximo de 24 horas,
contado desde que la detención se hubiere practicado. En el mismo acto, deberá dar conocimiento
de la situación al abogado de confianza del detenido o a la Defensoría Penal Pública.
En caso que el Fiscal no se pronunciare, la policía debe presentar al detenido ante la autoridad judicial
en el plazo indicado.
Para los efectos de poner a disposición del juez al detenido, las policías cumplirán con su obligación
legal dejándolo bajo la custodia de Gendarmería del respectivo tribunal.
c) Audiencia de Control de Detención. Ampliación de la misma: a la primera audiencia judicial del detenido
debe asistir el fiscal. Si falta el fiscal (o el abogado asistente del fiscal), el detenido debe ser
liberado. La ley 20.074 introduce una modificación importante: permite que a la audiencia citada,
concurra sólo el abogado asistente del fiscal.
La citada modificación dio origen a un pronunciamiento del Tribunal Constitucional. El abogado asistente
debe haber sido designado o contratado como funcionario de Ministerio Público y no puede realizar ante los
tribunales otras gestiones que las que señale la ley.
La modificación citada sólo se introduce en el inciso 1º. Queda la duda acerca de si el abogado asistente
del fiscal puede realizar las actuaciones a las cuales se refiere el inciso 2º: formalizar investigación, solicitar
medidas cautelares, o ampliación de la detención.
El Ministerio Público, el año 2005, en uno de sus oficios señala que estima procedente que el abogado
asistente pueda realizar las actuaciones señaladas en el inciso 2º, por las siguientes razones:
A- Es lógico que así sea, porque la modificación se encaminó a mejorar la gestión del organismo. Si no fuera
así, sería necesario que existieran múltiples audiencias a cargo de distintos funcionarios del Ministerio
Público.
B- Posible inconstitucionalidad por el principio de legalidad y juridicidad: según el Ministerio Público, las
funciones que realiza el abogado asistente, no son propiamente el ejercicio de las funciones que la ley y la
CPR encomiendan al Ministerio Público: investigación y ejercicio de la acción penal pública.
En la audiencia referida, el juez de garantía controla la legalidad de la detención del individuo (por ello se
conoce como audiencia de control de detención) y el fiscal debe proceder a formalizar la investigación y
solicitar las medidas cautelares procedentes.
En caso de no ser posible proceder de la manera anterior (por faltar antecedentes o falta del defensor), el
fiscal puede solicitar ampliación del plazo de detención hasta por el plazo de 3 días4 para preparar su
presentación. La petición que formule el fiscal no obliga al juez, puesto que éste accederá si estima que los
antecedentes justifican la medida.
Es posible combinar esta facultad del Ministerio Público con la señalada en el art. 235, relativa al juicio
inmediato. Si se aceptara la procedencia de la aceleración del juicio del art. 235, podría producirse la
situación que una audiencia que comenzó como de control de detención termine como audiencia de
preparación del juicio oral.
g.Instrucciones Generales relativas a la detención y al actuar policial: algunos puntos destacados son:
1. Por la dinámica propia de los procedimientos policiales en caso de flagrancia, la definición de los casos
2. que lo constituyen corresponde al funcionario policial que tiene a cargo el procedimiento, sin perjuicio de
lo que posteriormente estime el fiscal y el juez en el control de detención.No se puede ingresar a
ningún detenido por delito flagrante en recintos penitenciarios sin previa orden del juez de
garantía, dictada luego de haber sido llevado el detenido a su presencia. Los encargados de los
recintos penitenciarios no pueden aceptar el ingreso de personas sino en virtud de órdenes judiciales.
3. Cuando una persona sea sorprendida in fraganti cometiendo una falta que no sea de aquellas
señaladas en el inciso 4º del 134, en lugar de la detención, procederá la citación a presencia del fiscal
previa comprobación de domicilio.
4
El art. 19 No. 7 letra c) señala que el plazo máximo es de 5 días y 10 para el caso de investigarse delitos terroristas.
63
en el Pacto de Derechos Civiles y Políticos como en el Pacto de San José de Costa Rica, se establece como
una medida para asegurar la comparecencia en juicio.
Se suele asignar a la prisión, la finalidad esencial de evitar la frustración del proceso impidiendo la fuga del
procesado, pero se le reconoce también como garantía para asegurar el éxito de la investigación y evitar la
ocultación de futuros medios de prueba, la reincidencia u otras conductas delictivas. Asimismo busca aquietar a la
sociedad y dar seguridad a la ciudadanía.
De estas finalidades, la de impedir la fuga del imputado es la más recurrida y a la cual se le reconoce mayor
legitimidad.
- Respecto de las pruebas, se esgrime que se afectaría el derecho de defensa.
- Respecto de la función de prevenir nuevos delitos, importa aplicar criterios de peligrosidad que son propios de
las medidas de seguridad y no de las cautelares.
- Aplicar la prisión preventiva para aquietar y darle seguridad a la sociedad, implica ciertamente anticipar la pena.
En el ASPP, la prisión preventiva, era una consecuencia casi ineludible del auto de procesamiento.
En el NSPP, la situación cambia. No podría ser consecuencia de la resolución citada, ya que ésta desaparece.
Asimismo, el NSPP, dispone de límites a la utilización de la prisión preventiva, destinados a mantener la
proporcionalidad en relación a la pena posible (cuestión mucho más patente en el NCPP original y que ha ido
perdiendo fuerza con las modificaciones). Antes de la modificación de la ley 20.074 se señalaba que si el
legislador establecía medidas alternativas, no procedía la prisión preventiva, en el entendido que resultaba un
contrasentido el que aun antes de emitirse la condena, permaneciera privado de libertad.
A) Procedencia e Improcedencia.
La RG es que toda persona tiene derecho a la libertad personal y a la seguridad individual.
Procedencia de la prisión preventiva: cuando las demás medidas cautelares personales fueren estimadas
por el juez como (a) insuficientes para asegurar las finalidades del procedimiento; (b) insuficientes para
asegurar la seguridad del ofendido; o (c) insuficientes para asegurar la seguridad de la sociedad. 139
La norma original establecía el principio de la excepcionalidad, en términos que la prisión preventiva sólo
procedía cuando las demás fueren insuficientes para asegurar los fines del procedimiento. Se producía un
problema interpretativo, al discutirse si la seguridad de la sociedad y del ofendido eran o no fines del
procedimiento. La nueva norma, buscó dejar atrás la citada discusión, aun cuando quede en estado de
pendencia su correspondencia con los tratados internacionales.
La prisión preventiva es doblemente excepcional, lo cual se deriva del juego de las siguientes normas:
A. Art. 5: estricta legalidad de las medidas cautelares personales, interpretación restrictiva y
prohibición de analogía.
B. Art. 122: las medidas cautelares en general son excepcionales, debiendo aplicarse sólo cuando sean
absolutamente indispensables para asegurar la realización de los fines del procedimiento, durando sólo
mientras exista necesidad.
C. Art. 139 ya señalada
Concordante con lo anterior, el NCPP señala los casos en que la prisión preventiva es improcedente. Antes
de la modificación del 2005, se establecía el criterio de la proporcionalidad: la prisión preventiva debía ser
proporcionada al delito, las circunstancias de su comisión y la sanción probable. La referencia a la
proporcionalidad fue eliminada.
Puede en todo caso decretarse la prisión preventiva en los eventos previstos en la letra c), cuando:
64
a- El imputado hubiere incumplido alguna de las medidas cautelares previstas en el párrafo 6º;
b- Cuando el tribunal estime que el imputado pudiere incumplir con su obligación de permanencia en el
lugar del juicio hasta su término y presentarse a los actos del procedimiento como a la ejecución de la
sentencia, inmediatamente que fuere requerido o citado de conformidad a los arts. 33 y 123.
c- El imputado no asista al juicio oral, siendo dictada la resolución en la misma audiencia de juicio oral, a
petición del fiscal o del querellante.
Antes de la modificación:
a. Se establecía expresamente la proporcionalidad
b. La prisión preventiva no procedía respecto de penas equivalentes a presidio menor en su grado
mínimo
c. La prisión preventiva no procedía respecto de los imputados que podían ser beneficiados por la ley
de cumplimiento alternativo de la pena.
ii. Libertad del imputado peligrosa para la seguridad de la sociedad: el tribunal deberá considerar
especialmente alguna de las siguientes circunstancias: gravedad de la pena asignada al delito; número
de delitos que se le imputare y carácter de los mismos; existencia de procesos pendientes; hecho de
encontrarse sujeto a medida cautelar personal, en libertad o gozando de beneficios alternativos al
cumplimiento de la ejecución; existencia de condenas anteriores cuyo cumplimiento esté pendiente; el
hecho de haber actuado en grupo o pandilla.
iii. Libertad del imputado peligrosa para la seguridad del ofendido: existencia de antecedentes
calificados que permiten presumir que éste realizará atentados contra el ofendido, su familia o sus
bienes.
Cancelación de la caución. La caución será cancelada y devueltos los bienes afectados, siempre no se
hubieren ejecutado antes:
a)Cuando el imputado fuere puesto en prisión preventiva
b)Cuando, por resolución firme, se absolviere al imputado, se sobreseyere la causa o se suspendiere
condicionalmente el procedimiento; y
c) Cuando se comenzare a ejecutar la pena privativa de libertad o se resolviere que ella no debiere ejecutarse
en forma efectiva, siempre que previamente se pagaren la multa y las costas que impusiere la sentencia.
La ley 20.074 incorporó el adverbio únicamente, para dejar en claro que el reemplazo de la prisión preventiva
por la caución, sólo procede cuando se busca asegurar la comparecencia del imputado, es decir cuando su
fundamento sea el peligro de fuga. Se estableció en tal sentido, ya que los demás objetivos de la prisión
preventiva no se pueden garantizar con caución (por ejemplo, la seguridad de la sociedad), debiéndose
caucionar por medio de una real privación de libertad.
F) Recursos
La resolución que ordena, mantiene, niega lugar o revoca una prisión preventiva es apelable cuando se ha
dictado en una audiencia. En los demás casos, no procede recurso alguno.
No obsta a la procedencia del recurso, la circunstancia de haberse decretado, a petición de interviniente, alguna
de las medidas del 155. Fue una modificación de la ley 20.074, toda vez que el agravio se producía por la
diferencia entre lo pedido y lo fallado.
Es posible que el tribunal, a petición del fiscal, restrinja o prohíba las comunicaciones del detenido o del preso
hasta por un máximo de 10 días, cuando lo considere necesario para el éxito de la investigación.
No obstante, no se puede limitar el acceso del imputado a su abogado, como entrevista privada, ni al propio
tribunal, ni a la atención médica.
El juez tendrá que instruir a la autoridad acerca de la forma de llevar a efecto la medida, la cual nunca puede
consistir en encierro en celdas de castigo.
Concedida la medida, el plazo para demandar se extiende hasta 15 días antes de la fecha para realizar la
audiencia de preparación de juicio oral. Al interponerse la demanda civil, la víctima puede solicitar que se
decreten una o más medidas. Las resoluciones que nieguen o den lugar a las medidas son apelables.
No hay un vínculo como existía anteriormente entre el auto de procesamiento y el embargo. No se puede
decretar de oficio por el juez de garantía.
El NSPP consagra la posibilidad de respuesta estatal frente a la comisión de un hecho punible que representan
un menor nivel de represión o de fuerza, buscando privilegiar la solución al conflicto que genera el delito, más
que la pura imposición de la pena.
Debe quedar claro, que las salidas alternativas no comprenden todo mecanismo destinado a descomprimir el
sistema penal, ya que precisamente lo que distingue a las salidas alternativas de otras válvulas de escape del
sistema, es que las salidas alternativas son una “respuesta” menos represiva de parte de un sistema.
De esta manera, entendiendo la salida alternativa como una respuesta alternativa, podemos decir que se trata
de una forma opcional a la imposición de una pena, como vía de solución del conflicto penal.
Si la entendemos en un sentido amplio, podríamos considerar dentro de las salidas alternativas aquellas
instituciones que constituyen modalidades alternativas al juicio oral, incluyendo las formas de terminación
anticipada del procedimiento y el procedimiento abreviado.
Nuestra legislación tradicional, contemplaba las “medidas alternativas a las penas privativas o restrictivas de
libertad” en la etapa de ejecución de tales sanciones.
Con esta medida, según muchos, se distribuyen de modo eficiente los recursos limitados de persecución penal y
junto a ello, se descongestiona el sistema judicial.
Asimismo, tiene la ventaja de otorgar la posibilidad de auxiliar a la víctima por la vía de establecer como
condición de suspensión, precisamente la reparación del daño ocasionado con el delito.
Durante el período de la suspensión y oyendo en una audiencia a todos los intervinientes que concurran a
ella, el juez puede modificar una o más de las condiciones impuestas.
B. EFECTOS
A- Durante el período, no inferior a 1 año, ni superior a 3 años fijado por el juez, no se reanuda el curso de
la prescripción de la acción penal.
B- Durante el término en que se prolonga la suspensión condicional del procedimiento se suspende el plazo
previsto en el art. 247: 2 años para el cierre de la investigación.
C- No extingue las acciones civiles de la víctima o de terceros. Sin embargo, en caso que la víctima reciba
pagos en virtud de la condición impuesta por la letra e del art. 238, ellos se imputan a la indemnización
de perjuicios que puedan corresponder.
D- No impide perseguir en sede civil las responsabilidades civiles derivadas del hecho.
E- Transcurrido el plazo que el tribunal fijó, sin que la suspensión se haya revocado, se extingue la acción
penal, debiendo el tribunal dictar de oficio o a petición departe el sobreseimiento definitivo.
C. RECURSO
Resolución que se pronuncia sobre la suspensión condicional del procedimiento: apelable por el imputado, la
víctima, el Ministerio Público y el querellante.
D. REVOCACIÓN
En caso que el imputado incumpla, sin justificación, y en forma grave y reiterada las condiciones
impuestas, o cuando fuera objeto de una nueva formalización de la investigación por hechos distintos,
el juez, a petición del fiscal o de la víctima, revocará la suspensión condicional del procedimiento. Éste deberá
continuar de acuerdo a las reglas generales. Esta resolución será apelable.
La regulación en el NCPP, viene a dar expresa cabida a los intereses de la víctima, si ésta
fundamentalmente persigue una reparación pecuniaria y, además, toma en cuenta que, si la víctima se
rehúsa a seguir colaborando con el procedimiento, el Ministerio Público difícilmente puede seguir adelante.
Asimismo, es un reconocimiento a lo que hoy en día ocurre: sobreseimientos por acuerdos extrajudiciales
en delitos de carácter culposo.
A la audiencia en que se tratare sobre los acuerdos reparatorios, serán citados los intervinientes.
2-Civiles: ejecutoriada la resolución judicial que aprueba el acuerdo reparatorio, puede solicitarse el
cumplimiento ante el juez de garantía, en conformidad a los artículos 233 y siguientes del CPC. El acuerdo
reparatorio no puede ser dejado sin efecto por ninguna acción civil.
Oportunidad para pedir y decretar la suspensión condicional del procedimiento y los acuerdos reparatorios.
Registros
Tanto la suspensión condicional del procedimiento como los acuerdos reparatorios, pueden solicitarse y
decretarse en cualquier momento posterior a la formalización de la investigación. En caso que no se plantee
en la audiencia de formalización, el juez citará a una audiencia, a la que pueden comparecer todos los
Intervinientes en el procedimiento.
5
En la redacción del NCPP se evitó definir lo que debía entenderse por ellos, permitiendo una elaboración de la jurisprudencia.
Hoy en día, no es unánime. Se intentó, con la expresión “de carácter patrimonial o susceptibles de apreciación pecuniaria”
restringir los acuerdos sólo a los delitos contra la propiedad no violentos. Sin embargo, según opinión de la profesora Horvitz,
la amplitud de la causal sigue permitiendo un espacio interpretativo amplio a los jueces para la determinación de los delitos
que se deben entender comprendidos. De especial interés son los delitos que ponen en juego los intereses fiscales. En derecho
comparado se permite la transacción en ellos, compareciendo la autoridad administrativa, en representación de los intereses del
Fisco.
6
Se critica el hecho de haberse establecido como límite sólo en virtud del resultado producido, sin considerar otros elementos
del delito.
Han existido determinados instructivos generales del Ministerio Público, en que se categorizan ciertos delitos, a fin de
encuadrarlos dentro o fuera del ámbito de los acuerdos reparatorios.
70
Declarado el cierre de la investigación, sólo podrán ser decretados en la audiencia de preparación de juicio
oral.
Lo anterior, es sin perjuicio de adoptarse en la audiencia de juicio simplificado (394).
El Ministerio Público debe llevar un registro en el cual dejará constancia de los casos en que se decretare la
suspensión condicional del procedimiento o se apruebe un acuerdo reparatorio.
El registro tiene por objeto verificar que el imputado cumpla con las condiciones que el juez impusiere al disponer
la suspensión condicional del procedimiento, o reúna los requisitos necesarios para acogerse en su caso, a una
nueva suspensión condicional o acuerdo reparatorio.
El registro será reservado, sin perjuicio del derecho de la víctima de conocer la información relativa al imputado.
Debemos tener presente el art. 335: no se puede invocar, ni dar lectura ni incorporar como medio de prueba al
juicio oral ningún antecedente que dijere relación con la proposición, discusión, aceptación, procedencia, rechazo
o revocación de una suspensión condicional del procedimiento, de un acuerdo reparatorio o de la tramitación de
un procedimiento abreviado.
9. NULIDADES PROCESALES
A. PROCEDENCIA DE LA NULIDAD
Sólo podrán anularse las actuaciones o diligencias judiciales defectuosas del procedimiento que ocasionaren
a los intervinientes un perjuicio reparable únicamente con la declaración de nulidad. Se consagra
normativamente el principio de trascendencia. “La nulidad sin perjuicio no opera”
Existencia de perjuicio: la inobservancia de las formas procesales atenta contra las posibilidades de
actuación de cualquiera de los intervinientes en el procedimiento.
Presunción de derecho del perjuicio: se presume de derecho la existencia de perjuicio, cuando la infracción
ha impedido el pleno ejercicio de las garantías y de los derechos reconocidos en la CPR y en las leyes de la
República.
D. NULIDAD DE OFICIO
Cuando el tribunal estima que se ha producido un acto viciado y la nulidad no se ha saneado aún, lo pone en
conocimiento del interviniente en el procedimiento a quien estime que la nulidad agravia, a fin de que
proceda como crea conveniente en sus derechos.
Excepcionalmente, tratándose de los casos en que se presume de derecho el perjuicio, el tribunal puede
decretar de oficio la nulidad.
E. SANEAMIENTO DE LA NULIDAD
Existen 3 causales de saneamiento:
a. El interviniente en el procedimiento perjudicado no solicita la declaración oportunamente;
b. El interviniente perjudicado acepta expresa o tácitamente los efectos del acto7;
c. Cuando, a pesar del vicio, el acto cumple su finalidad respecto de todos los interesados, salvo en
los casos del 160 (presunción de derecho del perjuicio).
El señor Binder plantea que la nulidad debe ser la última herramienta para restaurar los principios
constitucionales, cuando no ha operado el saneamiento ni la convalidación.
7
Binder señala que lo más correcto es hablar de convalidación cuando se absorbe el defecto.
71
F. EFECTOS DE LA DECLARACIÓN DE NULIDAD
La declaración de nulidad del acto conlleva la de los actos consecutivos que de él emanaren o dependieren.
El tribunal, cuando declara la nulidad, determinará concretamente cuáles son los actos a los que ella se
extendiere y, siendo posible, ordenará que se renueven, rectifiquen o ratifiquen.
La declaración de nulidad no puede retrotraer el procedimiento a etapas anteriores, para repetir el acto,
rectificar el error o cumplir el acto omitido, salvo en los casos en que ello corresponda según el recurso
de nulidad.
Así por ejemplo, cuando en la etapa de preparación del juicio oral se declare la nulidad de actuaciones
judiciales realizadas durante la investigación, el tribunal no podrá solicitar que se reabra la misma.
La solicitud de nulidad constituye preparación suficiente del recurso de nulidad pata el caso que el tribunal
no resolviere la cuestión de conformidad a lo solicitado.
En caso que el fiscal se allane a la solicitud, debe en la misma audiencia a la que citó el juez de garantía
declarar el cierre de la investigación, teniendo 10 días para deducir la acusación.
Transcurrido el plazo sin haberse deducido acusación, el juez, de oficio o a petición de alguno de los
intervinientes, cita a la audiencia del 249 y dictará sobreseimiento definitivo en la causa.
C. SOBRESEIMIENTO
Se clasifica tradicionalmente en definitivo y temporal; y en total y parcial.
Definiciones tradicionales:
- Sobreseimiento definitivo: aquel que pone término al procedimiento penal y que, firme o ejecutoriado, tiene
la autoridad de cosa juzgada.
- Sobreseimiento temporal: aquel que sólo suspende o paraliza el proceso penal, hasta que se presenten
mejores datos de investigación o cese el inconveniente legal que haya detenido la prosecución del juicio.
Del análisis del art. 252 que trata el sobreseimiento temporal en el NSPP, podemos concluir que no tiene
recepción la causal de paralizar el procedimiento “hasta que se presenten mejores datos” (en tal caso el
fiscal opta por no perseverar en la investigación).
Reapertura del procedimiento. A solicitud del fiscal o de cualquiera de los intervinientes, el juez puede
decretar la reapertura del procedimiento cuando cesare la causa que hubiere motivado el sobreseimiento
temporal.
C.3. Recursos
El sobreseimiento definitivo sólo puede impugnarse por medio del recurso de apelación.
D. REAPERTURA DE LA INVESTIGACIÓN
Dentro de los 10 días siguientes al cierre de la investigación, los intervinientes podrán reiterar la
solicitud de diligencias precisas de investigación que oportunamente hubieren formulado durante la
investigación y que el Ministerio Público hubiere rechazado o respecto de las cuales no se hubiere
pronunciado.
En caso que el juez de garantía acoja la solicitud, ordenará al fiscal reabrir la investigación y proceder al
cumplimiento de las diligencias, en el plazo que le fije. En tal caso, el fiscal puede y por una sola vez, solicitar
ampliación del mismo plazo.
Juez no decreta ni renueva las diligencias que: (similitud con las que se excluyen en la audiencia de
preparación del juicio oral).
1- En su oportunidad se hubieren ordenado a petición de los intervinientes y no se hubieren cumplido por
negligencia o hecho imputable a los mismos
2- Manifiestamente impertinentes
3- Las que tengan por objeto acreditar hechos públicos o notorios
4- Todas aquellas que hubieren sido solicitadas con fines puramente dilatorios
Vencido el plazo o su ampliación, o antes de ello cuando se han cumplido las diligencias, el fiscal cierra
nuevamente la investigación y procede en la forma del 248: acusa, solicita sobreseimiento o comunica la
decisión de no perseverar en el procedimiento.
E. FORZAMIENTO A LA ACUSACIÓN
Si existe querellante particular y se opone a la solicitud de sobreseimiento del fiscal, el juez dispone que los
antecedentes se remitan al Fiscal Regional, con el fin de que éste revise la decisión del fiscal a cargo de la
causa.
Si el Fiscal Regional, dentro de los 3 días siguientes, decide que el Ministerio Público acusará, dispone
inmediatamente si el caso debe continuar a cargo del fiscal que hasta el momento lo ha conducido, o si
designará uno distinto. En tal caso, la acusación del Ministerio Público deberá formularse dentro de los 10
días siguientes, conforme a las reglas generales.
Si el Fiscal Regional, dentro del plazo de los 3 días de recibidos los antecedentes, ratifica la decisión del fiscal
a cargo del caso, el juez podrá disponer:
a) Que la acusación correspondiente sea formulada por el querellante, quien la debe sostener en los mismos
términos que el Código establece pata el Ministerio Público
b) Decretar el sobreseimiento
E.1. Recursos
La resolución que niega lugar a una de las solicitudes que el querellante hiciere conforme a lo señalado en el
punto anterior, es inapelable, sin perjuicio de los recursos que procedan en contra de la que ponga término al
procedimiento (aquella que decreta el sobreseimiento).
TERCERA PARTE
ETAPA INTERMEDIA O DE PREPARACIÓN DEL JUICIO ORAL
1. GENERALIDADES
74
Se trata de todos los trámites que seguirán a la presentación de la acusación, normalmente efectuada por el
Ministerio Público o, excepcionalmente, por el querellante particular.
Aludir a la formalización no es gratuito: es necesario que se produzca una congruencia entre la formalización la
investigación, la acusación y la sentencia del TJOP.
La coherencia entre la acusación (hecha generalmente por escrito, salvo en los casos del juicio inmediato o en el
procedimiento abreviado donde se puede realizar o modificar verbalmente) y la formalización de la investigación
apunta directamente a garantizar la efectiva posibilidad de defensa, evitando una posible condena por hechos
respecto de los cuales el acusado no haya podido defenderse oportunamente.
En cuanto al modelo planteado por el NCPP, en el sentido de si se trata de un modelo acusatorio puro o acusatorio
formal, se observa que desde el momento en que existe un acusador –el Ministerio Público- que reclama el juicio
ante un juez imparcial, el modelo es acusatorio. Sin embargo, no es un modelo puro (como ocurre en la usanza
anglosajona), sino uno formal o mixto, cercano a la manera continental europea, donde el juez de garantía, ante la
renuencia del acusador estatal puede, en principio, instar por que se deduzca acusación.
En el caso que el Ministerio Público decida acusar, el NSPP no permite que el juez de garantía controle el mérito
de dicha actuación, ni siquiera si lo solicita la defensa.
El sistema chileno, opta por una solución acusatoria radical en términos del profesor Bofill.
Del contenido de la acusación, podemos extraer que el NSPP establece un sistema acusatorio formal, con lo cual
el TJOP puede, perfectamente, aplicar una calificación distinta a la que sostiene el Ministerio Público, por ejemplo.
Principio de Congruencia
Art. 259 inciso final: La acusación sólo podrá referirse a hechos y personas incluidos en la formalización de la
investigación, aunque se efectuare una distinta calificación jurídica.
75
La Corte Suprema en fallo de Septiembre de 2005 señaló que la falta de congruencia entre la formalización y
la acusación, produce un efecto distinto de la nulidad, toda vez que da origen a la necesidad de subsanar la
acusación conforme al modo consignado en el art. 270.
Actuación del querellante. Hasta 15 días antes de la fecha fijada para realizar la audiencia de preparación del
juicio oral, el querellante, por escrito, podrá:
a)Adherir a la acusación del Ministerio Público o acusar particularmente. En este segundo caso, puede:
a. Plantear distinta calificación de los hechos
b. Alegar otras formas de participación del acusado
c. Solicitar otra pena
d. Ampliar la acusación del fiscal, extendiéndolas a hechos o a imputados distintos, siempre que
hayan sido objeto de la formalización de la investigación
b)Señalar los vicios formales de que adolezca el escrito de acusación, requiriendo su corrección;
c) Ofrecer prueba que estime necesaria para sustentar su acusación, lo que debe hacerse en los mismos
términos analizados respecto del Ministerio Público en el 259;
d)Deducir demanda civil, cuando proceda (ser víctima, en término estricto o en los términos del 108 inciso 2º).
Plazo de notificación al acusado. Las actuaciones del querellante, las acusaciones particulares, adhesiones,
adhesiones y la demanda civil deberán ser notificadas al acusado, a más tardar, 10 días antes de la
realización de la audiencia de preparación del juicio oral.
Facultades del acusado. Hasta la víspera del inicio de la audiencia de preparación del juicio oral, por escrito,
verbalmente al inicio de la misma, el acusado puede:
A- Señalar los vicios formales de que adoleciere el escrito de acusación, requiriendo su corrección
B- Deducir excepciones de previo y especial pronunciamiento; y
C- Exponer argumentos de defensa que considere necesarios y señalar los medios de prueba cuyo examen en
el juicio oral solicitare, en los mismos términos del 259.
Sin perjuicio de lo señalado en el art. 263, en cuanto a la oportunidad para deducir las excepciones de previo y
especial pronunciamiento, si las excepciones de cosa juzgada y de extinción de responsabilidad penal no son
deducidas para discutirse en la audiencia de preparación de juicio oral, ellas podrán ser planteadas en el
juicio oral.
B. ORALIDAD E INMEDIACIÓN
Siendo además principios del juicio oral, la oralidad y la inmediación son principios aplicables a esta audiencia
de preparación: el juez de garantía la dirige y debe presenciarla en su integridad, desarrollándose oralmente y
sin permitirse la presentación de escritos en su realización.
Defensa oral. En caso que el imputado no haya ejercido por escrito las facultades del 263, el juez le otorga la
opción de efectuarlo verbalmente.
Si el Fiscal no subsana oportunamente los vicios, el juez de garantía dictará el sobreseimiento definitivo,
salvo en el caso de que exista querellante particular, que haya deducido en forma oportuna la acusación o
se ha adherido a la del fiscal. En dicho caso, el procedimiento continúa sólo con el querellante y el Ministerio
Público no puede volver a intervenir en el mismo. Además, constituye una infracción grave a los deberes
del fiscal.
Una vía que busca solucionar problemas que se han producido en la práctica, con la exclusión de la prueba
relevante de parte del juez de garantía, la incorporó la ley 20.074 en el inciso 3º del 277: En caso de excluirse,
por resolución firme, pruebas de cargo que el Ministerio Público considere esenciales para sustentar su
acusación en el juicio oral respectivo, el fiscal puede solicitar el sobreseimiento definitivo de la causa ante el
juez competente, el que lo decretará en audiencia convocada al efecto.
H. PROCEDIMIENTO ABREVIADO
En la audiencia de preparación del juicio oral, se puede también debatir, como más adelante se analiza,
acerca de la solicitud de proceder de acuerdo al procedimiento abreviado.
La citada solicitud la puede exponer el fiscal en el escrito de acusación o en forma verbal al iniciarse la
audiencia, como en cualquier etapa del procedimiento después de formalizada la investigación, en audiencia
citada especialmente al efecto, o en otra en que se plantee el asunto.
En caso de acogerse el uso del procedimiento abreviado, no se rinde prueba para fundamentar la
acusación y, la audiencia de preparación, no terminará por la dictación del auto de apertura de juicio oral.
Recursos:
El auto de apertura del juicio oral sólo será susceptible del recurso de apelación, cuando lo interpusiere el
ministerio público por la exclusión de pruebas decretada por el juez de garantía de acuerdo a lo previsto en
el inciso tercero del artículo precedente (es decir, cuando la exclusión provenga de las diligencias anuladas o
por ser ilícita). No es apelable por otros intervinientes.
Este recurso será concedido en ambos efectos.
Lo dispuesto en este inciso se entenderá sin perjuicio de la procedencia, en su caso, del recurso de nulidad en
contra de la sentencia definitiva que se dictare en el juicio oral, conforme a las reglas generales.
Buscó solucionar aquellos casos en que el fiscal era obligado a continuar el procedimiento, peses a que no tuviera
opción de obtener condena, debido a la prueba excluida.
No se señala expresamente ante cual juez debe solicitarse el sobreseimiento: el prof. Chahuán estima que procede
ante el juez de garantía.
Nuevo plazo para presentar prueba. Cuando, al término de la audiencia, el juez de garantía comprobare que el
acusado no hubiere ofrecido oportunamente prueba por causas que no le fueren imputables, podrá suspender la
audiencia hasta por un plazo de diez días.
Devolución de los documentos de la investigación. El tribunal devolverá a los intervinientes los documentos que
hubieren acompañado durante el procedimiento.
Prueba anticipada. Durante la audiencia de preparación del juicio oral también se podrá solicitar la prueba
testimonial anticipada conforme a lo previsto en el artículo 191.
79
Asimismo, se podrá solicitar la declaración de peritos en conformidad con las normas del Párrafo 6º del Título III
del Libro Segundo, cuando fuere previsible que la persona de cuya declaración se tratare se encontrará en la
imposibilidad de concurrir al juicio oral, por alguna de las razones contempladas en el inciso segundo del artículo
191.
Para los efectos de lo establecido en los incisos anteriores, el juez de garantía citará a una audiencia especial para
la recepción de la prueba anticipada. Este último inciso vino a solucionar un problema interpretativo en relación
al tribunal competente.
Unión y separación de acusaciones. Cuando el ministerio público formulare diversas acusaciones que el juez
considerare conveniente someter a un mismo juicio oral, y siempre que ello no perjudicare el derecho a defensa,
podrá unirlas y decretar la apertura de un solo juicio oral. Para ello, es necesario que las varias acusaciones,
estén vinculadas por:
a) Referirse a un mismo hecho;
b) Referirse a mismo imputado; o
c) Porque debieren ser examinadas unas mismas pruebas.
El juez de garantía podrá dictar autos de apertura del juicio oral separados, para distintos hechos o diferentes
imputados que estuvieren comprendidos en una misma acusación, cuando, de ser conocida en un solo juicio oral,
pudiere provocar graves dificultades en la organización o el desarrollo del juicio o detrimento al derecho de defensa,
y siempre que ello no implicare el riesgo de provocar decisiones contradictorias.
5. EL PROCEDIMIENTO ABREVIADO
Anteriormente se afirmó que el procedimiento abreviado es una “salida alternativa” al juicio oral, si tomamos en
sentido amplio esta expresión, ya que si se tramita un procedimiento abreviado, no existirá juicio oral.
Se trata de una eficaz herramienta para descongestionar el sistema procesal penal, de manera de precipitar una
decisión judicial: será el juez de garantía, sin necesidad de acudir al TJOP, el que dictará la absolución o
condena de una persona.
Siendo una renuncia por parte del imputado, a su derecho de juicio oral ante un tribunal colegiado como es el
TJOP, para que pueda accederse al procedimiento abreviado, se requiere del consentimiento del acusado. Es
por ello que el primer papel que debe asumir el juez de garantía, es precisamente controlar el consentimiento
en cuanto a la libertad, realidad e información con que se ha prestado por el perseguido penalmente.
Presupuestos de procedencia
a) Que, en la acusación, el Fiscal ha solicitado la imposición de una pena privativa de libertad no superior a 5
años de presidio o reclusión menores en su grado máximo, o bien cualesquiera otras penas de
distinta naturaleza, cualquiera fuere su entidad o monto, ya fueren ellas únicas conjuntas o
alternativas (ej. 5 años de presidio menor en su grado máximo y multa de 40 UTM); y
b) Que el imputado, en conocimiento de los hechos materia de la acusación y de los antecedentes de la
investigación que la fundaren,
a. Los acepte expresamente; y
b. Manifieste su conformidad con la aplicación de este procedimiento
c) Antes de resolver la solicitud del Fiscal, el juez de garantía consultará al acusado a fin de asegurarse de
que:
a. Ha prestado su conformidad al procedimiento abreviado en forma libre y voluntaria;
b. Que ha conocido de su derecho a exigir un juicio oral;
c. Que entienda los términos del acuerdo y las consecuencias que puedan significarle; y
especialmente
d. Que no hubiere sido objeto de coacciones ni presiones indebidas por parte del fiscal o de terceros.
Es decir, no se produce una aceptación de la culpabilidad como ocurre en Norteamérica, sino que se aceptan
supuestos de hecho.
80
La tasa de sentencias condenatorias en procedimientos abreviados, probablemente sea más alta que en los
juicios orales, toda vez que siendo el Ministerio Público quien tiene la “llave” para proponer este procedimiento,
abrirá el camino, cuando éste se encuentre pavimentado con buenos datos de la investigación.
No se contempla una negociación sobre la cuantía o naturaleza de las penas. El único componente del acuerdo,
dice relación con el hecho que el fiscal y eventualmente el acusador particular, deben establecer en la acusación
una solicitud de pena máxima. Con ello, se le otorga una certeza al acusado, porque el juez estará constreñido a
la solicitud que debe efectuar el fiscal.
La ley 20.074, le otorga al fiscal una nueva herramienta de rebaja de pena. La aceptación de los hechos que
hace el acusado, puede ser considerada por el fiscal como suficiente para estimar que concurre la circunstancia
atenuante del art. 11 No. 9 del Cº Penal (colaboración sustancial al esclarecimiento de los hechos), sin
perjuicio de las demás reglas que sean aplicables para la determinación de la pena.
Se trata, en concepto del prof. Chahuán, de una facultad del Fiscal estimar la mencionada atenuante, sin perjuicio
de la posterior aplicación que pueda hacer el juez de garantía.
Si existen varios acusados o se atribuyen varios delitos a un mismo acusado, se puede aplicar a ciertos acusados
o delitos respecto de los cuales concurran los presupuestos que hacen aplicable el procedimiento en estudio, y los
demás deberán continuar su curso hacia el juicio oral.
Es decir, mediante la ley 20.074, se amplían las oportunidades para solicitar el procedimiento en estudio,
pudiendo solicitarse una vez formalizada la investigación, en la misma audiencia convocada para estos efectos, o
en otra citada para resolver la solicitud de procedimiento abreviado, y hasta en la audiencia de preparación de
juicio oral, manteniéndose la opción de modificar las acusaciones y las penas requeridas, para permitir la
aplicación del procedimiento.
En caso que el juez de garantía estime que no concurre alguno de estos requisitos, o cuando considere
fundada la oposición del querellante, rechazará la solicitud de procedimiento abreviado:
a- Si la negativa se pronuncia en la audiencia de preparación del juicio oral: dictará el auto de apertura de
juicio oral. En tal evento, se tendrán por no formuladas la aceptación de los hechos por parte del acusado y
la aceptación de los antecedentes de la investigación, como tampoco las modificaciones de la acusación o
de la acusación particular hechas –por el Fiscal o el querellante- para permitir la tramitación del
procedimiento. Además, el juez debe ordenar que todos los antecedentes relativos al planteamiento,
discusión y resolución de la solicitud de proceder conforme al procedimiento abreviado sean eliminados
del registro de la audiencia;
81
b- En caso que la negativa se produzca en otra de las oportunidades (fuera de la audiencia de preparación
del juicio oral), se tendrán por no formuladas las acusaciones verbales del fiscal o del querellante, así como
las modificaciones efectuadas, procediéndose conforme al libro II.
Tramitación
Aceptado el procedimiento abreviado, el juez abre el debate, otorga la palabra al fiscal, quien debe efectuar
exposición resumida de la acusación, y actuaciones y diligencias de la investigación que la fundamenten.
Luego se otorga la palabra a los demás intervinientes.
La exposición final siempre corresponde al acusado.
El procedimiento abreviado no obsta a la concesión de alguna de las medidas alternativas consideradas en la ley.
La sentencia NO se pronuncia sobre la demanda civil que se haya interpuesto. En caso de existir actor civil,
éste no puede oponerse a la aplicación del procedimiento abreviado.
Debemos recordar el art. 68: la prescripción de la acción civil continuará interrumpida siempre que la víctima
presente su demanda ante el tribunal civil competente en el término de 60 días siguientes a aquél en que
se dispusiere la suspensión o terminación del procedimiento penal. Se tramita conforme al procedimiento
sumario.
PROCEDIMIENTO SIMPLIFICADO
1. Aplicación: se aplica respecto de:
a. Faltas
b. Simples delitos para los cuales el fiscal solicite una pena que no exceda de 540 días de privación de libertad 8
Antes de la ley 20.074 se consideraba como un procedimiento supletorio, no sólo del juicio oral sino del
procedimiento abreviado. Luego de esta ley, al art. 390 se incorpora un inciso 2º que dispone que si el fiscal
formula acusación y la pena requerida no excede de presidio o reclusión menores en su grado mínimo, la
acusación se tendrá como requerimiento, debiendo el juez disponer la continuación del procedimiento de
conformidad a las normas de este Título.
De esta forma la supletoriedad pasa a 2º plano. Así, el procedimiento abreviado, sólo será aplicable en el rango
que vaya desde los 541 días hasta los 5 años, por la modificación de la ley 20.074.
2. El requerimiento
El procedimiento simplificado se inicia por medio de la presentación de un requerimiento del Fiscal al Juez de
Garantía, solicitando la citación inmediata a una audiencia, exponiendo los antecedentes en que funda el
requerimiento.
Cuando los antecedentes lo ameriten y hasta la deducción de la acusación, el fiscal puede dejar sin efecto la
formalización de la investigación, y puede proceder conforme a las normas del procedimiento simplificado. Es
decir, se permite en forma expresa que una investigación iniciada conforme a las normas del procedimiento
ordinario, pueda continuar conforme a las normas del simplificado.
Dentro de las menciones que debe contener el requerimiento, se encuentra la indicación de la pena solicitada
por el requirente.
Con la ley 20.074 se modifica la nomenclatura y se dispone que, presentado el requerimiento en forma legal, el
juez debe citar al imputado y demás intervinientes a una audiencia y no a un “juicio”. Se trata de la audiencia del
394, ya que el juicio no necesariamente se realizará.
3. Audiencia y preparación
Se cita a la audiencia con el requerimiento, notificándose al imputado y citándose a los demás intervinientes. La
audiencia no puede tener lugar antes de 20 ni después de 40 días contados desde la resolución. El imputado debe
ser notificado con, al menos, 10 días de anticipación a la fecha de la audiencia.
Iniciada la audiencia, el juez informa a la víctima y al imputado, cuando corresponda de acuerdo a la naturaleza de
los hechos, sobre la posibilidad de celebrar un acuerdo reparatorio, así como también el fiscal puede proponer
la suspensión condicional del procedimiento.
En caso que no proceda el acuerdo reparatorio, o cuando no se produzca, el imputado puede admitir su
responsabilidad en el hecho. En tal caso, el juez de garantía fallará de inmediato, sin poder imponer una pena
superior a la del requerimiento. Se elimina la opción existente antes de la ley 20.074 en relación a la opción de
que el juez podía dilatar la dictación de la sentencia cuando existieran diligencias necesarias pendientes.
El fiscal puede modificar la pena requerida para el evento que el imputado admita su responsabilidad.
8
Es importante dejar en claro que el criterio de aplicación de la pena que se debe considerar no es uno abstracto, sino la pena
concreta que propone el fiscal en cada caso. Podría llegar a ser discutible lo anterior, debido a que el fiscal puede llegar a
determinar una apreciación de un determinado delito en el caso concreto, ayudado además por la atenuante del imputado
consistente en aceptar su responsabilidad, sin que proceda ninguna impugnación por parte del juez, con lo que el fiscal llegaría
a determinar el procedimiento y a limitar la imposición de la pena.
83
4. Realización del juicio
- Se leerá el requerimiento del fiscal y la querella, si la hubiere.
- Se oye a los comparecientes y se recibe la prueba
- Se pregunta al imputado si tiene algo más que agregar
- El juez pronuncia decisión y señala la audiencia en que se procederá a dar lectura al texto de la
sentencia
- No puede suspenderse por la falta de comparecencia de una de las partes o por no haberse rendido
prueba, salvo una excepción calificada: testigo o perito citado judicialmente cuya declaración sea
estimada indispensable
d.En el caso que una persona sea sorprendida in fraganti cometiendo una falta o un simple delito de los
que hagan procedentes el procedimiento simplificado: el fiscal puede disponer que el imputado sea
puesto a disposición del juez de garantía, para el efecto de comunicarle en la audiencia de control de la
detención, verbalmente, el requerimiento, y proceder conforme a las normas del procedimiento simplificado de
inmediato.
PROCEDIMIENTO MONITORIO
En nuestro país, el procedimiento simplificado (incluyendo la subespecie del monitorio dentro de él) es el más
aplicado, llegando a cerca del 81% de los juicios, mientras que el juicio oral sólo alcanza el 4,47% y el abreviado el
14%. De esta forma, estadísticamente hablando, el procedimiento ordinario pasa a ser la excepción y los especiales
pasan a ser lo común.
CUARTA PARTE
EL JUICIO ORAL
Estas actuaciones previas presuponen una serie de labores administrativas del tribunal, a cargo de las citadas
unidades.
Art. 291. Oralidad. La audiencia del juicio se desarrollará en forma oral… en general respecto de toda
intervención de las partes. El tribunal dictará y fundamentará sus resoluciones en forma oral y se entienden
notificadas desde el momento de su pronunciamiento.
El tribunal no admitirá argumentaciones o peticiones por escrito durante la audiencia de juicio oral.
Los que no puedan hablar o no lo sepan hacer en el idioma castellano, intervienen por escrito o por medio de
intérpretes.
El acusado sordo o que no entienda castellano, será asistido por un intérprete que le comunica el contenido de
los actos del juicio.
Inmediación
Se puede analizar desde 2 ángulos:
a) Inmediación objetiva
b) Inmediación subjetiva: el tribunal que dicte sentencia debe tomar conocimiento directo y formar de tal
manera su convicción del material probatorio que ha sido producido en su presencia. Esto sólo es posible
en un juicio oral, ya que sabemos que en los procedimientos escritos, se delegan funciones en subalternos,
sin que el juez conozca directamente de la prueba.
Este principio se garantizada en el art. 291 relativo a la oralidad y en otros específicos:
a) 340 inciso 2º: el tribunal formará su convicción sobre la base de la prueba producida durante el juicio
oral
b) 284: presencia ininterrumpida de los jueces
Continuidad y Concentración
El juicio oral se debe realizar frente a todos los sujetos procesales, desde el inicio hasta su terminación, de una
sola vez y en forma sucesiva, sin solución de continuidad, con el propósito de que exista la mayor proximidad
entre las distintas actuaciones.
9
En caso de tratarse de la hipótesis del art. 21 A COT, el juez presidente señalará la localidad en la cual funcionará y se
constituirá el TJOP: lugares en que sea necesario facilitar la aplicación oportuna de la justicia penal.
85
La audiencia de juicio oral se desarrollará en forma continua y podrá prolongarse en sesiones sucesivas,
hasta su conclusión.
Sesiones sucesivas: aquellas que tuvieren lugar en el día siguiente o subsiguiente de funcionamiento ordinario del
tribunal.
Excepción: Suspensión de la audiencia o del juicio oral:
3. El tribunal puede suspender la audiencia hasta por 2 veces sólo por razones de absoluta necesidad, por el tiempo
mínimo necesario conforme al motivo de la suspensión. Reanudación exige un breve resumen de los actos
anteriores.
4. La suspensión por un período que excede de 10 días, impide su continuación. El tribunal deberá decretar la
nulidad de lo obrado en él y decretar su reinicio.
5. Se debe tratar de motivos de absoluta necesidad o de aquellos mencionados en el 252: causales del
sobreseimiento temporal. Con todo, se puede seguir el juicio, en el caso del sobreseimiento respecto del imputado
rebelde, cuando la declaración de rebeldía se produzca respecto del imputado a quien se le ha otorgado la opción
de declarar en juicio oral, siempre que el tribunal estime que su posterior presencia no es indispensable o cuando
sólo falte la dictación de la sentencia.
6. Cuando sea necesario suspender la audiencia, el tribunal comunicará verbalmente la fecha y hora de su
continuación, lo que se tendrá como suficiente citación.
Concordante con la concentración, el art. 290 dispone que las cuestiones accesorias, que se promuevan durante
el juicio oral, deben resolverse inmediatamente, por el tribunal, sin que proceda recurso alguno respecto de las
resoluciones.
Cualquiera infracción a lo anterior, conlleva la nulidad del juicio oral y de la sentencia dictada en él.
Principio Contradictorio
Sin perjuicio de su alcance general en el NSPP, durante el juicio oral este principio rige en plenitud.
Garantiza que la producción de las pruebas se hará bajo el control de todos los sujetos procesales, con la finalidad
que ellos tengan la facultad de intervenir en la producción de la misma.
Asimismo se extiende el contradictorio, a las argumentaciones de las partes, debiendo garantizarse que ellas, en
todo momento puedan escuchar de viva voz los argumentos de la contraria, para apoyarlos o rebatirlos.
Se consagra específicamente en:
a) Normas sobre interrogatorio de testigos y peritos
b) Comunicaciones entre el acusado y su defensor
c) Presencia ininterrumpida del fiscal y del defensor
d) Presencia del acusado
Publicidad
Además de constituir una garantía, el juicio público y oral, es un mecanismo por el cual la magistratura cumple
otras funciones encomendadas por la sociedad: resolver conflictos de un modo percibido como legítimo por la
comunidad; efecto preventivo general: mensaje de la respuesta estatal frente a un delito.
10
Esto es sin perjuicio del caso especial en el cual, ante la negativa del Ministerio Público de acusar, el querellante puede ser
autorizado a sostener la acusación en juicio.
86
cualquier persona que deba tomar parte en el juicio; o evitar la divulgación de un secreto protegido en la
ley. Las medidas son:
a) Impedir el acceso u ordenar la salida de personas determinadas de la sala donde se efectuare la audiencia;
b) Impedir el acceso del público en general u ordenar la salida para la práctica de pruebas específicas;
c) Prohibir al fiscal, a los demás intervinientes y a sus abogados que entreguen información o formulen
declaraciones a los medios de comunicación social durante el desarrollo del juicio.
Los medios de comunicación social podrán fotografiar, filmar o transmitir alguna parte de la audiencia que el
tribunal determinare, salvo que las partes se opusieren a ello. Si sólo alguno de los intervinientes se opusiere, el
tribunal resolverá.
Otras normas
1-Presencia del acusado en el juicio oral
El acusado debe encontrarse presente durante toda la audiencia.
El tribunal puede autorizar la salida de la sala del acusado, cuando lo solicite, ordenando su permanencia en una
sala próxima.
Además se puede disponer que abandone la sala, cuando su comportamiento perturbare el orden.
En todo caso, el tribunal adoptará las medidas necesarias para asegurar la oportuna comparecencia del imputado.
El presidente de la sala debe informar al acusado de lo ocurrido en su ausencia, en cuanto el acusado reingrese a
la audiencia.
Sanciones
Los que infrinjan las medidas de publicidad y los deberes del 293, pueden ser sancionados conforme al COT:
amonestación, multas, arrestos o suspensión de funciones, según el caso.
Asimismo, el tribunal puede expulsar a los infractores de la sala.
Si el expulsado es el defensor o el fiscal, debe procederse a su reemplazo antes de continuar el juicio. En caso
que fuera el querellante, se procede en su ausencia y si lo fuere su abogado, deberá reemplazarlo.
4. LA PRUEBA
A. DISPOSICIONES GENERALES
A.1. Oportunidad para la recepción de prueba
En concordancia con el principio de inmediación, se exige que la prueba que haya de servir de base para dictar
la sentencia, sea rendida en la audiencia de juicio oral, salvo los casos expresamente señalados en la ley
(prueba anticipada). En estos casos excepcionales, la prueba debe incorporarse en la forma establecida en las
normas sobre desarrollo del juicio oral.
Art. 329 inciso final: Los testigos y peritos que, por algún motivo grave y difícil de superar no pudieren
comparecer a declarar a la audiencia del juicio, podrán hacerlo a través de videoconferencia o a través de
cualquier otro medio tecnológico apto para su interrogatorio y contrainterrogatorio. La parte que los presente
justificará su petición en una audiencia previa que será especialmente citada al efecto, debiendo aquéllos
comparecer ante el tribunal con competencia en materia penal más cercano al lugar donde se encuentren.
Referencia histórica
Existe una profunda vinculación histórica entre libre apreciación de la prueba y sistema acusatorio. En un
principio, el jurado (legos) sólo puede fallar apreciando libremente la prueba. Se le denominaba “sistema de
íntima convicción”, con lo cual se eximía del deber de fundamentar la apreciación realizada. De la sentencia del
Tribunal Constitucional de España de 1981, en relación a esta materia, se extrajeron algunas conclusiones
como:
1- No basta, aunque exista la sola íntima convicción del juez
2- Se requiere que las pruebas tengan un contenido objetivamente incriminatorio
3- Se deben respetar los límites conocidos.
4- Es necesario motivar la sentencia, permitiendo el control de dicha motivación por parte del Tribunal de
Casación.
2-TESTIGOS
Se trata de todos aquellos terceros (no intervinientes) en el procedimiento, que prestan declaración en el juicio
sobre hechos de controversia.
La diferencia con los peritos, es que éstos no deponen sobre su conocimiento de los hechos, sino sobre
conocimientos propios de su ciencia o arte, lo que no sucede con los testigos, salvo que se trate de la
excepcional situación de los testigos-peritos.
Generalmente, los testigos deben ser ubicados e identificados por los intervinientes (principalmente Ministerio
Público, a través de las policías), que tienen en interés en su testimonio. La mayoría de las veces, puede
tratarse de personas que no tienen un especial afán de atestiguar. Por ello, el NCPP establece una serie de
obligaciones en tal sentido, buscando en 1º lugar la comparencia y luego, la declaración.
Como contrapartida, se establecen una serie de prerrogativas para los testigos.
Citación
Para citar a los testigos, rigen las normas del párrafo 4º del Título II del Libro I: principalmente el art. 33 que
establece la opción de apercibimiento del testigo (además de imponérsele el pago de las costas provocadas por
su inasistencia). En casos urgentes, pueden ser citados por cualquier medio, haciéndose constar el motivo de
la urgencia. En tales casos, no proceden los apercibimientos del 33, sino cuando se hiciere la citación con las
formalidades legales.
Renuencia a declarar
Si el testigo se niega, sin justa causa a declarar, será sancionado con las penas que establece el inciso 2º 240
CPC:
a-Desacato
b-Reclusión menor en su grado medio a máximo
90
Las personas exceptuadas de comparecer, deben declarar conforme al art. 301: serán interrogadas en el lugar
en que ejercen sus funciones o en su domicilio. Deberán proponer la fecha y el lugar correspondientes. En
caso que no lo hagan, los fija el tribunal. En caso de inasistencia, se aplican las normas generales de
apercibimiento.
A la audiencia ante el tribunal siempre tienen derecho a asistir los intervinientes. El tribunal podrá calificar
las preguntas dirigidas al testigo, teniendo en cuenta su pertinencia con los hechos y la investidura o estado del
deponente.
Las personas que gocen de inmunidad diplomática, declaran por informe, cuando consientan a ello
voluntariamente. Al efecto, se les dirigirá un oficio respetuoso, por medio del ministerio respectivo. Es decir, en
estas personas concurren dos excepciones:
a. A comparecer
b. A declarar
Por motivos personales (parentesco, convivencia, razones de inmadurez o insuficiencia o alteración de sus
facultades mentales)
No estarán obligados a declarar el cónyuge o el conviviente del imputado, sus ascendientes o descendientes,
sus parientes colaterales hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad, su pupilo o su guardador, su
adoptante o adoptado.
Si se tratare de personas que, por su inmadurez o por insuficiencia o alteración de sus facultades
mentales, no comprendieren el significado de la facultad de abstenerse, se requerirá la decisión del
representante legal o, en su caso, de un curador designado al efecto. Si el representante interviniere en el
procedimiento, se designará un curador, quien deberá resguardar los intereses del testigo. La sola circunstancia
de que el testigo fuere menor de edad no configurará necesariamente alguna de las situaciones previstas en la
primera parte de este inciso.
Las personas comprendidas en este artículo deben ser informadas de la facultad de abstenerse, antes de
comenzar la declaración. El testigo puede retractarse en cualquier momento del consentimiento dado para
prestar su declaración.
En el caso de las personas incapaces, se debe llevar a cabo la declaración siempre en presencia del
representante legal o curador.
Juramento o promesa
Todo testigo, antes de comenzar a declarar, prestará juramento o promesa de decir la verdad sobre lo que se
le pregunte, sin ocultar ni añadir nada de lo que pudiere conducir al esclarecimiento de los hechos.
A los menores de 18 años y a aquéllos de quienes el tribunal sospeche que pueden haber tomado parte en los
hechos, no se les aplica lo anterior: se omite el juramento o promesa.
Si el tribunal lo considera necesario, deberá instruir al testigo acerca del sentido del juramento o promesa y de la
obligación de ser veraz, así como de las penas con las cuales se castiga el delito de falso testimonio.
Testigo menor de edad. El testigo menor de edad, sólo será interrogado por el presidente de la sala, debiendo
los intervinientes, dirigir las preguntas por su intermedio.
Sordos o Mudos. A los testigos sordos, se les dirigen las preguntas por escrito. A los mudos, se les permite
contestar por escrito. Si no es posible aplicar ello, se requiere de un intérprete de lenguaje de sordos o mudos,
el cual debe jurar previamente.
92
Otros derechos específicos del testigo
Testigo que carece de medios suficientes o que vive sólo de su remuneración, tiene derecho a que la persona
que lo presente lo indemnice de la pérdida que le ocasiona la comparecencia a prestar declaración y le
pague, anticipadamente, los gastos de traslado y habitación, si procediere.
Se entiende renunciado este derecho, cuando no se ejerza dentro de los 20 días siguientes a la declaración.
En caso de desacuerdo, los gastos serán regulados por el tribunal (juez de garantía o TJOP) por simple
requerimiento del interesado, sin forma de juicio ni ulterior recurso.
En caso que se trate de testigos presentados por el Ministerio Público, o por intervinientes que gozan de
beneficio de pobreza, la indemnización la paga el Fisco, debiendo en los correspondientes escritos señalarse el
nombre del testigo y el monto de la indemnización.
Lo anterior, se entiende sin perjuicio de la resolución que resuelva las costas de la causa.
La concurrencia a la audiencia del testigo, no puede ocasionarle consecuencias jurídicas adversas: laborales,
educativas o de otra naturaleza. Siempre es suficiente justificación.
3-INFORME DE PERITOS
Peritos: son terceros ajenos al juicio que procuran a los jueces el conocimiento de los cuales éstos carecen,
referidos a una determinada ciencia o arte.
Excepción: las pericias que consistan en análisis de alcoholemia, ADN y aquellas que recayeren sobre
sustancias estupefacientes o psicotrópicas, podrán ser incorporadas al juicio oral, mediante la sola
presentación del informe respectivo. Si alguna de las partes lo solicita en forma fundada, la comparecencia del
perito no podrá sustituirse. En tal caso, el informe deberá leerse y exhibirse.
Medidas de protección
En caso necesario, los peritos y otros terceros que deben intervenir en el procedimiento para efectos
probatorios, pueden pedir al Ministerio Público que adopte medidas tendientes a que se les brinde la misma
protección que se prevé para los testigos.
Luego concede la palabra al fiscal, para que exponga su acusación, al querellante para que sostenga la
acusación, así como la demanda civil si la ha interpuesto.
Alegatos de Apertura
Se trata de una facultad capital para todo litigante en el Juicio Oral. En efecto, junto a los alegatos de cierre o
clausura, constituyen la oportunidad en que cada parte puede exponer su “propia teoría del caso”: idea básica y
subyacente a la presentación del abogado en el Juicio Oral, que integra elementos legales o jurídicos con
proposiciones fácticas o de hecho.
Se trata de “armar un panorama” acerca del caso, sin establecer conclusiones, porque precisamente es de
apertura.
Interrogatorio
La declaración de los testigos se sujeta al interrogatorio de las partes. Los peritos deben exponer brevemente
el contenido y las conclusiones de su informe, y a continuación se autorizará para que sean interrogados por
las partes.
1º interroga la parte que ha ofrecido la prueba y luego las restantes.
Si en un juicio intervienen acusando el Ministerio Público y el querellante particular, o el mismo se realiza contra 2
o más acusados, se concede sucesivamente la palabra a todos los acusadores o a todos los acusados, según
corresponda.
Al final, los miembros del tribunal pueden formular preguntas al testigo o perito, para que aclaren sus dichos.
Solicitado por una de las partes, el tribunal puede autorizar un nuevo interrogatorio de los testigos o peritos que
ya han declarado en la audiencia.
Antes de declarar, los peritos y los testigos no puede comunicarse entre sí, ni ver, oír ni ser informados de lo
que ocurre en la audiencia.
De esta forma, existe un interrogatorio realizado por la parte que presenta al deponente y un contra interrogatorio
(generalmente destinado a atacar la credibilidad de la persona o del testimonio, o a obtener una declaración del
testigo que apoye sus argumentaciones o pruebas).
La ley 20.074 incorpora la posibilidad de que los peritos y testigos puedan declarar por videoconferencia o
cualquier otro medio tecnológico apto para su interrogatorio o contrainterrogatorio.
Métodos de interrogatorio
95
Las partes que hayan presentado a un testigo o perito no pueden formular preguntas inductivas
Durante el contrainterrogatorio, las partes pueden confrontar al perito o testigo con sus propios dichos u otras
versiones de los hechos presentadas en el juicio.
En ningún caso se admiten preguntas engañosas, aquellas destinadas a coacción ilegítima, ni las que carezcan
de claridad.
Una vez que el testigo haya prestado declaración, se puede leer en el interrogatorio parte de sus declaraciones
anteriores, prestadas ante el Fiscal o el juez de garantía, cuando sea necesario para:
Ayudar a la memoria;
Demostrar o superar contradicciones
Solicitar aclaraciones
Con el mismo fin, se puede leer, durante la declaración de un perito, parte del informe que él ha elaborado.
Prohibiciones
Se establecen prohibiciones derivadas de los principios generales. En especial, responden al hecho que los
antecedentes de la investigación no constituyen pruebas, sino que sólo se forma la convicción del tribunal con
la prueba rendida en el juicio oral.
RG: NO SE PUEDEN INCORPORAR O INVOCAR COMO MEDIOS DE PRUEBA NI DAR LECTURA DURANTE
EL JUICIO ORAL, A LOS REGISTROS Y DEMÁS DOCUMENTOS QUE DIEREN CUENTA DE DILIGENCIAS O
ACTUACIONES REALIZADAS POR LA POLICÍA O EL MINISTERIO PÚBLICO.
Ni aún en los casos de excepción, se pueden utilizar pruebas derivadas de actuaciones declaradas nulas o en que
se han infringido las garantías fundamentales.
A este alegato final, se le llama “de bien probado”, siendo una actuación trascendental del juicio, ya que se debe
alegar que se encuentran probadas determinadas circunstancias.
6. LA SENTENCIA DEFINITIVA
Cerrado el debate, los miembros del TJOP que hubieren asistido a él (íntegramente) pasarán a deliberar en
privado.
Excepción: audiencia de juicio se ha prolongado por más de 2 días y la complejidad del caso no permite
pronunciar la decisión inmediatamente, el tribunal puede prolongar la deliberación hasta por 24 horas, hecho
que será dado a conocer a los intervinientes en la misma audiencia, y se fija de inmediato la oportunidad en que la
decisión les será comunicada.
En caso de omitirse el pronunciamiento conforme a la forma señalada, se producirá la nulidad del juicio,
debiendo éste repetirse en el plazo más breve posible.
En caso de condena, el tribunal deberá resolver sobre las circunstancias modificatorias de responsabilidad penal
en la misma oportunidad prevista en el 343 inciso 1º. Sin embargo, tratándose de circunstancias ajenas al hecho
punible, y los demás factores relevantes para determinar y cumplir la pena, el tribunal abre debate sobre ellos,
inmediatamente después de pronunciada la decisión del inciso 1º y en la misma audiencia. En tal evento, el
tribunal recibirá los antecedentes que hagan valer los intervinientes, y el tribunal reserva su resolución para la
audiencia de lectura de sentencia.
De esta manera no es necesario citar a una nueva audiencia para discutir sobre la determinación de la pena.
Decisión de absolución o condena: simple mayoría, salvo en los casos en que ante la falta o inhabilitación del
juez integrante del TJOP, que no ha podido ser reemplazado y quedando sólo 2 jueces que han asistido a
todo el juicio, la decisión debe ser adoptada por unanimidad, so pena de nulidad.
Determinación de la pena
Antes de la ley 20.074, una vez pronunciada la decisión de condena, el tribunal podía, en caso de considerarlo
necesario, citar a una audiencia para debatir sobre la determinación y cumplimiento de la pena. Esto fue
modificado como se indicó más arriba.
NADIE PUEDE SER CONDENADO POR DELITO SINO CUANDO EL TRIBUNAL QUE LO JUZGARE
ADQUIERE, MÁS ALLÁ DE TODA DUDA RAZONABLE, LA CONVICCIÓN DE QUE REALMENTE SE
HUBIERE COMETIDO EL HECHO PUNIBLE OBJETO DE LA ACUSACIÓN Y QUE EN ÉL HUBIERE
CORRESPONDIDO AL ACUSADO UNA PARTICIPACIÓN CULPABLE Y PENADA POR LA LEY.
“Duda razonable”: es un estándar que proviene del sistema penal norteamericano, imponiendo la carga al
acusador de convencer al juez, produciendo prueba “más allá de una duda razonable” sobre cada hecho
necesario para constituir el o los delitos objeto de la acusación.
Duda razonable: es una duda que llevaría a las personas prudentes a dudar antes de actuar en materias de
importancia para ellos mismos.
Contenido de la sentencia
La sentencia definitiva contendrá:
a) La mención del tribunal y la fecha de su dictación; la identificación del acusado y la de el o los acusadores;
b) La enunciación breve de los hechos y circunstancias que hubieren sido objeto de la acusación; en su caso, los
daños cuya reparación reclamare en la demanda civil y su pretensión reparatoria, y las defensas del acusado;
c) La exposición clara, lógica y completa de cada uno de los hechos y circunstancias que se dieren por probados,
fueren ellos favorables o desfavorables al acusado, y de la valoración de los medios de prueba que
fundamentaren dichas conclusiones de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 297;
Es importante señalar que se aprecia con libertad (limitada por los cotos que establece la misma ley) y
que el tribunal debe hacerse cargo en su fundamentación, de toda la prueba, incluso la desestimada)
d) Las razones legales o doctrinales que sirvieren para calificar jurídicamente cada uno de los hechos y sus
circunstancias y para fundar el fallo;
e) La resolución que condenare o absolviere a cada uno de los acusados por cada uno de los delitos que la
acusación les hubiere atribuido; la que se pronunciare sobre la responsabilidad civil de los mismos y fijare el
monto de las indemnizaciones a que hubiere lugar;
f) El pronunciamiento sobre las costas de la causa, y
g) La firma de los jueces que la hubieren dictado.
La sentencia será siempre redactada por uno de los miembros del tribunal colegiado, designado por éste, en tanto
la disidencia o prevención será redactada por su autor. La sentencia señalará el nombre de su redactor y el del
que lo sea de la disidencia o prevención.
La Sentencia Condenatoria
Es permitido, sin embargo, que el TJOP, siempre que lo haya advertido a los intervinientes en la audiencia de
juicio oral, otorgue al hecho una calificación jurídica distinta de la contenida en la acusación o apreciar la
concurrencia de circunstancias modificatorias agravantes de la responsabilidad penal no incluidas en ella.
Si durante la deliberación uno o más jueces consideran la posibilidad de otorgar a los hechos una calificación
jurídica distinta de la establecida en la acusación, que no ha sido objeto de discusión en la audiencia, deberán
reabrirla, con el objeto de que las partes puedan debatir sobre ella.
Todo lo anterior, no hace más que permitir que se haga verbo el principio contradictorio, teniendo siempre en
cuenta el derecho de defensa.
Así podemos hacer una cadena con 3 eslabones unidos por el principio de congruencia:
La sentencia que condena a una pena temporal debe indicar con precisión el día desde el cual empieza a
contarse y fijará el tiempo de detención, prisión preventiva y privación de libertad que deba servir de abono para
su cumplimiento. Se abona a la pena impuesta un día por cada día completo, o fracción igual o superior a
12 horas, de dichas medidas cautelares que ha cumplido el condenado.
La sentencia condenatoria también dispondrá el comiso de los instrumentos o efectos del delito o su restitución,
cuando sea procedente.
Cuando se haya declarado falso en todo o parte, un instrumento público, el tribunal, junto con su devolución,
debe ordenar que se lo reconstituya, cancele o modifique de acuerdo a la sentencia.
Cuando se pronuncie la sentencia condenatoria, el tribunal puede disponer, a petición de uno de los
intervinientes, que se revisen las medidas cautelares personales, atendiendo al tiempo transcurrido y a la
pena probable. Es una de las modificaciones de la ley 20.074, otorgándose expresamente la facultad al TJOP.
La decisión absolutoria
Comunicada a las partes la decisión absolutoria, el TJOP, debe:
a)Disponer, en forma inmediata, el alzamiento de las medidas cautelares personales que se hayan decretado
en contra del acusado;
b)Ordenar que se tome nota de este alzamiento en todo índice o registro público y policial en el que puedan
figurar; y
c) Ordenar cancelar las garantías de comparecencia que se hayan otorgado.
QUINTA PARTE
LOS RECURSOS
1. BASES DEL NUEVO RÉGIMEN DE RECURSOS
A. SE DISMINUYE EL NÚMERO DE RECURSOS EN RELACIÓN AL ANTIGUO PROCEDIMIENTO PENAL
En general, se trata de recursos de derecho y tienen por objeto velar porque el juicio se haya celebrado en
cumplimiento de las garantías de orden procesa.
Ello se explica por el hecho de no querer romper con los principios que informan el nuevo sistema, ya que si
fuera posible alterar los hechos, se perdería toda inmediación.
99
Se mantiene la apelación, respecto de determinadas resoluciones del juez de garantía, en opinión del señor
Carocca, por razones políticas y culturales, más que estrictamente técnicas.
C. SE CONCIBE EL RECURSO COMO MEDIO DE IMPUGNACIÓN A SOLICITUD DE PARTE, MÁS QUE COMO
MECANISMO DE CONTROL JERÁRQUICO
El fundamento último del recurso, será la reparación del agravio producido a una de las partes, para lo cual se
debe demostrar en qué consiste dicho agravio. Asimismo, existe un fin socialmente valioso como es el que
algunas resoluciones sean dictadas correctamente.
En contra de lo afirmado, se señala que estas garantías no imponen el derecho a la doble instancia, sino la
posibilidad de un recurso ante un tribunal superior, obligación que se ve satisfecha con la institución de la vía de
impugnación que permita discutir sólo determinadas cuestiones de derecho. Extenderla a los hechos, sería
permitir un nuevo juicio oral. Así lo entendió la Comisión Interamericana de DDHH en el caso Villalobos Calvo.
De esta manera, la audiencia sólo se suspende cuando no alcance, con los jueces que conformen ese día el
tribunal, el mínimo de miembros no inhabilitados que deben intervenir en ella.
11
En los hechos, por acuerdo del Pleno de la Corte Suprema, existe un matiz respecto de esta afirmación en cuanto se establece
una relación para examinar la admisibilidad del recurso de apelación.
101
8. En cualquier momento del debate, el tribunal puede formular preguntas a los representantes de las
partes o pedirles que profundicen su argumentación o la refieran a algún aspecto específico.
9. Concluido el debate, el tribunal pronuncia la sentencia de inmediato o, si no es posible, en un día y hora que
da a conocer en la misma audiencia.
10. Es redactada por el miembro del tribunal designado y el voto disidente o la prevención, por su autor.
J. APLICACIÓN SUPLETORIA
Los Recursos se rigen por las normas del Libro III del NCPP. Supletoriamente son aplicables las normas del
Libro II, Título III (juicio oral).
5. RECURSO DE REPOSICIÓN
a) Reposición de las resoluciones dictadas fuera de audiencias. De las sentencias interlocutorias, de los
autos y de los decretos dictados fuera de audiencias, podrá pedirse reposición al tribunal que los hubiere
pronunciado. El recurso deberá interponerse dentro de tercero día y deberá ser fundado.
El tribunal se pronunciará de plano, pero podrá oír a los demás intervinientes si se hubiere deducido en un
asunto cuya complejidad así lo aconsejare.
Cuando la reposición se interpusiere respecto de una resolución que también fuere susceptible de apelación y
no se dedujere a la vez este recurso para el caso de que la reposición fuere denegada, se entenderá que la
parte renuncia a la apelación.
La reposición no tendrá efecto suspensivo, salvo cuando contra la misma resolución procediere también la
apelación en este efecto.
b) Reposición de las resoluciones dictadas dentro de audiencias orales. La reposición de las resoluciones
pronunciadas durante audiencias orales deberá promoverse tan pronto se dictaren y sólo serán admisibles
cuando no hubieren sido precedidas de debate. La tramitación se efectuará verbalmente, de inmediato, y de la
misma manera se pronunciará el fallo.
6. RECURSO DE APELACIÓN
A. RESOLUCIONES INAPELABLES
Serán inapelables las resoluciones dictadas por un tribunal de juicio oral en lo penal. Se señalaron las
razones anteriormente: principios informadores del NSPP.
La resolución que resuelve acerca de la medida cautelar de prisión preventiva, no se aplicaría, cuando la
dicta un TJOP, el art. 149, que señala que la resolución que ordena, mantiene, niega lugar o revoca la prisión
preventiva, es apelable cuando se ha dictado en audiencia.
F. RECURSO DE HECHO
Denegado el recurso de apelación, concedido siendo improcedente u otorgado con efectos no ajustados a
derecho, los intervinientes podrán ocurrir de hecho, dentro de tercero día, ante el tribunal de alzada, con el fin
de que resuelva si hubiere lugar o no al recurso y cuáles debieren ser sus efectos.
Presentado el recurso, el tribunal de alzada solicitará, cuando correspondiere, los antecedentes señalados en el
artículo 371 y luego fallará en cuenta.
Si acogiere el recurso por haberse denegado la apelación, retendrá tales antecedentes o los recabará, si no los
hubiese pedido, para pronunciarse sobre la apelación.
G. RESOLUCIONES APELABLES
Las resoluciones dictadas por el juez de garantía serán apelables en los siguientes casos:
a) Cuando pusieren término al procedimiento, hicieren imposible su prosecución o la suspendieren por más de
treinta días, y
b) Cuando la ley lo señalare expresamente.
I. ADHESIÓN A LA APELACIÓN
Es procedente en el NSPP, aun cuando no se permita expresamente, por aplicación de las normas generales.
12
Se busca evitar desistimientos que se debían a la conformación de una determinada sala, considerada desfavorable por el
recurrente.
103
A. Apelaciones relativas a la prisión preventiva de los imputados u otras medidas cautelares personales en
su contra;
B. Recursos de amparo
C. Las demás que determinen las leyes
7. EL RECURSO DE NULIDAD
Se trata de un recurso para invalidar todo el juicio oral o sólo la sentencia definitiva que en éste se pronuncia.
B. FINALIDADES
1. Respeto de las garantías y derechos fundamentales
2. Obtener la acertada interpretación de las normas de derecho
3. Lograr que la Corte Suprema uniforme la aplicación del derecho
3.Reglamentación
A. SENTENCIAS O TRÁMITES IMPUGNABLES
a. Sentencia definitiva del juicio oral
b. Juicio oral
c. Sentencia definitiva dictada en el procedimiento simplificado
d. Sentencia definitiva dictada en el procedimiento de delitos de acción penal privada
Se acoge el principio de la trascendencia: No causan nulidad los errores de la sentencia recurrida que no
influyeren en su parte dispositiva, sin perjuicio de lo cual la Corte podrá corregir los que advirtiere durante el
conocimiento del recurso.
Causales del recurso. Procederá la declaración de nulidad del juicio oral y de la sentencia:
a) Cuando, en la cualquier etapa del procedimiento o en el pronunciamiento de la sentencia, se hubieren
infringido sustancialmente derechos o garantías asegurados por la Constitución o por los tratados
internacionales ratificados por Chile que se encuentren vigentes, y
Antes de la ley 20.074, no decía “etapa del procedimiento”, sino tramitación del juicio. El objeto
perseguido es que se pueda perseguir la nulidad por infracción de las garantías en etapas anteriores al
juicio oral. En cuanto a la controversia que podría suscitar la interposición del recurso por una infracción
cometida antes del juicio oral, en cualquier etapa del procedimiento, no debemos olvidar que se mantiene
intacto el deber de preparación del recurso. Asimismo, no podría estimarse que deba anularse más allá
del juicio oral, sino que lo que más se puede llegar a obtener es la realización de un nuevo juicio oral.
b) Cuando, en el pronunciamiento de la sentencia, se hubiere hecho una errónea aplicación del derecho que
hubiere influido sustancialmente en lo dispositivo del fallo.
104
C. TRIBUNAL COMPETENTE
El conocimiento del recurso que se fundare en la causal prevista en el artículo 373, letra a), corresponderá a la
Corte Suprema.
La respectiva Corte de Apelaciones conocerá de los recursos que se fundaren en las causales señaladas en el
artículo 373, letra b), y en el artículo 374.
No obstante lo dispuesto en el inciso precedente, cuando el recurso se fundare en la causal prevista en el
artículo 373, letra b), y respecto de la materia de derecho objeto del mismo existieren distintas
interpretaciones sostenidas en diversos fallos emanados de los tribunales superiores, corresponderá
pronunciarse a la Corte Suprema.
Del mismo modo, si un recurso se fundare en distintas causales y por aplicación de las reglas contempladas en
los incisos precedentes correspondiere el conocimiento de al menos una de ellas a la Corte Suprema, ésta se
pronunciará sobre todas (fuerza atractiva). Lo mismo sucederá si se dedujeren distintos recursos de nulidad
contra la sentencia y entre las causales que los fundaren hubiere una respecto de la cual correspondiere
pronunciarse a la Corte Suprema.
E. PLAZO Y REQUISITOS
Dentro de los 10 días siguientes a la notificación de la sentencia definitiva, ante el tribunal que la ha
dictado.
Requisitos del escrito del recurso de nulidad:
A. Consignar los fundamentos del mismo y las peticiones concretas que se sometieren al fallo del tribunal.
B. Si el recurso se funda en varias causales, caso se indicará si se invocan conjunta o subsidiariamente. Cada
motivo de nulidad deberá ser fundado separadamente.
C. Cuando el recurso se fundare en la causal prevista en el artículo 373, letra b), y el recurrente sostuviere que,
por aplicación del inciso tercero del artículo 376, su conocimiento correspondiere a la Corte Suprema,
deberá, además, indicar en forma precisa los fallos en que se hubiere sostenido las distintas
interpretaciones que invocare y acompañar copia de las sentencias o de las publicaciones que se hubieren
efectuado del texto íntegro de las mismas.
105
F. EFECTOS DE LA INTERPOSICIÓN DEL RECURSO
La interposición del recurso de nulidad suspende los efectos de la sentencia condenatoria recurrida. En lo
demás, se aplicará lo dispuesto en el artículo 355.
Interpuesto el recurso, no podrán invocarse nuevas causales. Con todo, la Corte, de oficio, podrá acoger el
recurso que se hubiere deducido en favor del imputado por un motivo distinto del invocado por el recurrente,
siempre que aquél fuere alguno de los señalados en el artículo 374.
Transcurrido el plazo previsto en el artículo anterior, el tribunal ad quem se pronunciará en cuenta acerca de la
admisibilidad del recurso.
Lo declarará inadmisible:
1. Si concurrieren las razones contempladas en el artículo 380;
2. El escrito de interposición careciere de fundamentos de hecho y de derecho o de peticiones concretas, o el
recurso no se hubiere preparado oportunamente.
Sin embargo, si el recurso se hubiere deducido para ante la Corte Suprema, ella no se pronunciará sobre su
admisibilidad, sino que ordenará que sea remitido junto con sus antecedentes a la Corte de Apelaciones
respectiva para que, si lo estima admisible, entre a conocerlo y fallarlo, en los siguientes casos:
a) Si el recurso se fundare en la causal prevista en el artículo 373, letra a), y la Corte Suprema estimare que, de
ser efectivos los hechos invocados como fundamento, serían constitutivos de alguna de las causales
señaladas en el artículo 374;
b) Si, respecto del recurso fundado en la causal del artículo 373, letra b), la Corte Suprema estimare que no
existen distintas interpretaciones sobre la materia de derecho objeto del mismo o, aun existiendo, no fueren
determinantes para la decisión de la causa, y
c) Si en alguno de los casos previstos en el inciso final del artículo 376, la Corte Suprema estimare que concurre
respecto de los motivos de nulidad invocados alguna de las situaciones previstas en las letras a) y b) de
este artículo.
M. IMPROCEDENCIA DE RECURSOS
La resolución que fallare un recurso de nulidad no será susceptible de recurso alguno, sin perjuicio de la revisión
de la sentencia condenatoria firme de que se trata en este Código.
Tampoco será susceptible de recurso alguno la sentencia que se dictare en el nuevo juicio que se realizare
como consecuencia de la resolución que hubiere acogido el recurso de nulidad. No obstante, si la sentencia
fuere condenatoria y la que se hubiere anulado hubiese sido absolutoria, procederá el recurso de nulidad en
favor del acusado, conforme a las reglas generales.
Capítulo IV
Norma de la ejecución del COT: La ejecución de las resoluciones corresponde a los tribunales que las han
dictado en 1ª o única instancia.
Se hace excepción, cuando el TJOP dicta sentencia en el juicio oral: La ejecución de sentencias penales y de
las medidas de seguridad previstas en la ley procesal penal será de competencia del juzgado de garantía
que hubiere intervenido en el respectivo procedimiento penal.
Otra de las excepciones se refiere al caso en el cual se cumplen las resoluciones pronunciadas durante la
sustanciación de los recursos.
2. El principio de individualidad
a) La pena prevista para cada tipo se entiende fijada para el autor de delito consumado.
Así fluye con toda claridad de lo dispuesto por el artículo 50 del Código Penal.
b) Cuando la ley contempla una pena que se compone de varios grados, cada uno de ellos
se considera como una pena distinta.
Esta regla aparece expresamente contemplada en el artículo 57 CP. De modo que si un delito,
por ejemplo, tiene asignada como pena la de presidio mayor en sus grados mínimo a medio,
debemos entender que aquél aparece sancionados con dos penas: la de presidio mayor en su
grado mínimo y la de presidio mayor en su grado medio.
c) Cuando la ley contempla penas diversas para un mismo delito, cada una de esas penas
se considera como si fuera un grado distinto. Así lo dispone el artículo 58 CP. De suerte
que si consideramos, por ejemplo, la penalidad del delito de parricidio (art. 390 CP.), esto es,
presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado, debemos entender que
dicho marco penal consta de tres grados: presidio mayor en su grado máximo, presidio
perpetuo y presidio perpetuo calificado porque cada una de esas penas ha de ser ficticiamente
considerada como si fuera un grado.
d) La pena que en definitiva se aplique a una persona puede resultar mayor o menor que
aquella que la ley fija de modo abstracto para el delito respectivo. Si bien esta regla no
aparece expresamente consignada en el texto de la ley, ella se deduce del conjunto de
preceptos que regulan el proceso de individualización de la responsabilidad criminal. La
concurrencia de circunstancias agravantes puede conducir a la imposición de una pena más
elevada que la prevista de modo general para el delito, y la influencia de circunstancias
atenuantes -y, tambien, otros factores, como veremos enseguida- pueden conducir a aplicar
una pena inferior a la prevista en la ley.
Si por aplicación de este mecanismo llegáramos al tope máximo de la escala y todavía fuera
necesario seguir subiendo, se aplican las siguientes reglas, contempladas en el artículo 77 del
Código Penal:
- En la escala 1, debe imponerse presidio perpetuo calificado
- En las escalas 2 y 3, debe imponerse presidio perpetuo
- En las escalas 4 y 5, se impone la pena superior de la respectiva escala y además
reclusión menor en su grado medio.
Si, por el contrario, llegáramos al tope mínimo de la escala y todavía fuera necesario seguir
bajando, se impone siempre la pena de multa, cuya cuantía ha de fijarse de acuerdo con el
artículo 25 CP., atendiendo a la naturaleza de la infracción.
1. El título de castigo
Son delitos habituales aquellos en los cuales el tipo demanda la ejecución de una
misma conducta varias veces. Por ejemplo, la figura del artículo 367 del Código Penal.
Son delitos complejos aquellos en los cuales el tipo reúne dos o más conductas
diversas que, consideradas en forma aislada, de todos modos son constitutivas de delito. Por
ejemplo, la figura del artículo 372 bis del Código Penal.
Excepcionalmente, en cambio, puede suceder que un mismo sujeto haya realizado dos
o más conductas que encuadran en tipos diversos o en un mismo tipo varias veces, o bien que
una misma conducta aparezca captada por dos o más tipos o por uno mismo varias veces. Este
es el problema que se presenta en el delito continuado y en las figuras denominadas concurso
ideal de delitos, concurso material de delitos y concurso de leyes penales.
2. El delito continuado
Está constituido por dos o más acciones u omisiones separadas por un cierto tiempo
que, no obstante integrar cada una de ellas por separado la misma figura fundamental de
delito, se valoran como un solo delito en razón a la homogeneidad de sus elementos.
Ningún precepto legal se refiere en nuestro país a esta clase de delito, no obstante lo
cual puede decirse que goza de considerable reconocimiento en la jurisprudencia y en la
doctrina nacionales.
Los elementos de este delito pueden clasificarse en objetivos y subjetivos. Del primer
orden son: la pluralidad de acciones u omisiones, la unidad de ley violada y, para algunos, la
identidad del sujeto pasivo. De índole subjetiva es el requisito de unidad de designio,
propósito, intención o dolo.
Elementos objetivos:
Realización del mismo tipo básico. También es indispensable que las diversas
acciones realizadas vulneren un mismo o semejantes preceptos legales. No se
requiere, entonces, que todas las conductas merezcan idéntica calificación; basta con
que las diversas figuras sean analogables, esto es, que puedan ser comprendidas como
manifestaciones de un tipo básico. Luego podrá darse tal homogeneidad entre un hurto
y un robo.
Las múltiples posturas adoptadas al respecto puede reducirse a dos: las que reclaman
una unidad del elemento subjetivo, sea que se lo conciba como dolo, resolución, propósito o
deseo, y las que exigen una cierta continuidad entre las diversas resoluciones o dolos.
La primera alternativa, esto es, la que postula la unidad del dolo, propósito o intención,
tiene el grave inconveniente de que si el dolo es unitario, ha de serlo por abarcar de antemano
todas las acciones parciales en un propósito común. Pero si es así, esa misma perseverancia en
la intención delictiva, lejos de disminuir la reprochabilidad del hecho, la aumenta, lo cual no
concuerda con la búsqueda de un tratamiento más benigno para el procesado, a través de la
consideración unitaria de sus acciones para evitar la aplicación de las reglas agravatorias del
concurso real.
Disintiendo de este último autor, Garrido adhiere a ambas concepciones del elemento
subjetivo del delito continuado arriba descritas, esto es, tanto a la de la unidad como a la de la
continuidad u homogeneidad del dolo.
La generalidad de la doctrina indica que el concurso ideal puede ser de dos clases:
homogéneo o heterogéneo. El primer nombre se reserva para aquellos casos en que el hecho
realizado configura dos o más veces un mismo delito, mientras que se designa como
heterogéneo al concurso que se produce cuando el hecho único configura dos o más delitos
diversos. Hay, así, concurso ideal homogéneo si con un mismo artefacto explosivo se causa la
muerte de varias personas, o si a raíz de una maniobra desafortunada un conductor lesiona a
diversos individuos.
En cambio, configuran un concurso ideal heterogéneo, por ejemplo, las lesiones que se
causan con ocasión del acceso carnal de la violación, cuando por su gravedad no pueden
estimarse absorbidas por la pena de la violación (ej.: lesiones graves gravísimas art. 397 n° 1
CP.).
El art. 75 CP, que "se impondrá la pena mayor asignada al delito más grave".
La pena mayor asignada al delito más grave hace referencia, en el caso de las penas
compuestas de grados, al más alto entre éstos; y dentro de tal grado el juez procederá a fijar la
pena exacta de acuerdo al art. 69 CP.
Pero podría acontecer también que el cálculo de la pena así previsto condujera a una
penalidad superior a la suma de todas las que correspondería aplicar a las diversas figuras por
separado. Parece claro, sin embargo, que en tal situación correspondería aplicar la regla
general del art. 74 CP., respecto de la cual el art. 75 constituye una excepción, pues
indudablemente la finalidad de la ley ha sido la de otorgar un tratamiento más benévolo a las
figuras concurrentes -surgidas de un mismo hecho o ligadas en relación instrumental-, por lo
que la aplicación de la regla estudiada no puede conducir a un empeoramiento de la situación
del delincuente.
Hay concurso real cuando los diversos delitos imputados a un solo individuo tienen su
origen en hechos también diversos e independientes, ninguno de los cuales ha sido objeto de
juzgamiento.
En el concepto recién apuntado se indica, además, que los hechos deben ser
independientes entre sí, expresión ésta que suele utilizarse para excluir el caso puntual del
delito continuado, que, como vimos, es analizado como un solo delito. Con todo, nada obsta a
que entre los delitos en concurso real haya uno o más que tengan el carácter de continuados.
Tratamiento penal
- Se cumplen simultáneamente las penas que así pueden serlo. Precisando un poco
más esta categoría, puede decirse, partiendo de lo obvio, que dos penas privativas de
libertad no admiten cumplimiento conjunto. Pero tampoco lo admiten éstas cuando
concurren con restrictivas de libertad, tal como se desprende de la última parte del
precepto. También es claro que las pecuniarias son compatibles con todas las demás.
En cambio, las de inhabilitación y ciertas penas especiales que impliquen la suspensión
de un derecho, como la privación de la licencia de conducir (art. 492 CP.), deben
comenzar a computarse después del período de privación de libertad, si la hubiere,
pues sería un caso de aquellos en que la ejecución conjunta haría ilusorio el
cumplimiento de las primeras.
El inciso final del precepto indicado precisa lo que debemos entender por tales: "Para
los efectos de este artículo se considerarán delitos de una misma especie aquellos que estén
penados en un mismo Título del Código Penal o ley que los castiga".
Con razón ha sido criticado el excesivo formalismo de este criterio, pues por
encontrarse ubicados dentro del mismo título del código resultan de la misma especie figuras
tan diversas como el homicidio y las injurias, mientras que por corresponder a títulos diversos,
el aborto y el infanticidio deben considerarse especies delictivas diversas.
Si las diversas infracciones pueden estimarse como un solo delito, se impone la pena
resultante de considerarlos como un todo, pero aumentada en uno, dos o tres grados.
En la práctica, esto es posible cuando las penas contempladas para las diversas figuras
se calculan sobre una base común que puede, además, acumularse. Así acontece con las penas
fijadas sobre la base de índices pecuniarios. Entre los que pueden considerarse de la misma
especie, cabe mencionar a vía de ejemplo el hurto (446), la estafa (467), la apropiación
indebida (470 n° 1), y algunas hipótesis de incendio (477) y daños (486 y 487). De este modo,
la apreciación como un solo delito de un hurto y una apropiación indebida obligará a sumar los
valores de lo sustraído y del perjuicio, respectivamente, para así llegar a una penalidad común,
que se elevará de uno a tres grados.
El inciso tercero del art. 509 CPP. aclara expresamente un punto que ya nos había
suscitado dudas en torno a la aplicación del artículo 75 CP, esto es, si acaso ha de volverse a la
regla general del artículo 74 CP. cuando la aplicación del sistema de asperación conduzca a
penas mayores que las correspondientes a la suma de las imponibles a cada delito por
separado. La afirmativa del legislador, sin embargo, está redactada en términos facultativos,
pues indica que "podrán" aplicarse las penas conforme al art. 74 CP. No obstante ello, la
tendencia de nuestros tribunales -indudablemente correcta- es la de observar siempre la
acumulación aritmética cuando ella resulta menos gravosa para el condenado.
El art. 351 del nuevo Código Procesal Penal también regula el concurso material por
reiteración de delitos de la misma especie. Esta regulación presenta las siguientes diferencias
con respecto al art. 509 del Código de Procedimiento Penal:
a) Es aplicable sólo a los crímenes y simples delitos.
b) El aumento de pena que se prevé permite elevar ésta sólo en uno o dos grados.
c) Recogiendo la crítica que se hace al excesivo formalismo del inciso final del art. 509 del
Código de Procedimiento Penal, se consideran delitos de la misma especie aquellos que
afectaren al mismo bien jurídico.
El mencionado artículo establece una regla de aplicación muy restringida, del siguiente
tenor:
La segunda parte del inciso primero del artículo 75 CP., en efecto, se refiere a un caso
que parte de la doctrina denomina concurso ideal impropio, o -como suele hablarse en España-
concurso medial. De la lectura del precepto emana que el legislador dispensa un mismo
tratamiento, a los efectos de determinar las penas aplicables, al caso en que un hecho configura
dos o más delitos, que al evento en que "uno de ellos sea el medio necesario para cometer el
otro".
Las dudas que suscita esta parte del precepto son básicamente dos. Primero, ¿es éste
un caso de concurso ideal o, por el contrario, la norma cubre hipótesis que corresponden al
concurso real o material de delitos?, y, segunda, ¿qué significa que uno sea el medio necesario
para cometer el otro?
Por lo que respecta al alcance de la exigencia de que un hecho sea el medio necesario
para cometer el otro, es claro que dicha conexión debe apreciarse de acuerdo a la situación
concreta, pues una conexión necesaria no circunstancial, sino inherente, sólo se daría cuando
un delito nunca pudiera ser cometido sino precedido del otro, pero, en este evento, lo que en
verdad se produce es un concurso aparente de leyes penales y no una pluralidad de delitos,
como veremos más adelante.
Hay concurso aparente de leyes penales cuando, pese a configurar uno o más hechos
las hipótesis de dos o más figuras penales, una sola de éstas es suficiente para aprehender el
desvalor de todos ellos.
Ello ocurrirá cuando el o los hechos en cuestión admitan ser encuadrados en más de
una figura delictiva, no obstante lo cual razones de orden lógico o valorativo conduzcan a la
conclusión de que sólo puede tener aplicación un tipo penal, y no todos los que aparentemente
concurren en el mismo supuesto.
Principios de solución
a) El principio de especialidad
De este modo, se presentará una relación de especialidad entre dos o más preceptos
penales cuando, si bien todos cubran el supuesto de hecho, uno de ellos lo describa en mayor
detalle que los restantes. Así, la conducta del que mata a su padre puede encuadrarse
textualmente en el art. 391 Nº2 CP., que sanciona el homicidio simple, y en el art. 390 del
mismo código, que castiga el parricidio. Pero de entre ambas disposiciones, la última es la
única aplicable, pues en ella se contempla con mayor precisión el hecho juzgado.
En los casos de especialidad se da una relación lógica (género a especie) entre las
diversas hipótesis delictivas, de suerte que la más detallada supone siempre la realización de
las restantes. Así, el infanticidio (art. 394) es una subclase de parricidio, el que, a su vez, es
una subcategoría dentro del homicidio. Según la configuración de los hechos, corresponderá
siempre aplicar uno solo de ellos.
b) El principio de subsidiariedad
Este criterio tiene lugar en aquellos casos en que una determinada figura delictiva sólo
puede tener aplicación por defecto de otra, sea que ello se encuentre expresamente establecido
en la ley, o bien que pueda deducirse del sentido de sus normas.
En cambio, sí cabe apreciar subsidiariedad expresa, entre otros, en los artículos 168,
176, 183, 325 y 488 del C. Penal. El primero de los citados, por ejemplo, castiga al que, sin
haber tomado parte en la emisión o introducción al país de moneda falsificada (a que se refiere
el art. 167), se la hubiere procurado a sabiendas y la hubiere puesto en circulación.
Evidentemente, ambos preceptos describen situaciones diversas, pero no en relación de género
a especie. Por eso, si no se le hubiera dado carácter subsidiario al art. 168, éste y el art. 167
serían aplicables (en principio) al individuo que, habiendo tomado parte en la emisión del
dinero falso, lo pusiera luego en circulación.
También existe subsidiariedad expresa entre los supuestos de los artículos 15, 16 y 17
del C. Penal. y constituye consagración general y expícita de este principio, en materia de
circunstancias modificatorias, el artículo 63 CP., en cuanto prescribe que carecen de efecto
agravatorio las circunstancias incorporadas a la descripción de un delito.
- Los delitos que se configuran en el curso hacia la realización del ataque más
grave al mismo bien jurídico. Así, no se sancionan las lesiones que conducen a la muerte.
Tampoco los actos preparatorios especialmente punibles, ni la tentativa configurada en camino
a la consumación que después se produce. También son subsidiarios los delitos de peligro
respecto de los de lesión del mismo bien, siempre que el peligro no vaya más allá del
menoscabo efectivamente producido. La misma relación se da entre la comisión dolosa y
culposa de un mismo delito (como cuando el condutor imprudente deja morir con dolo al
transeúnte que acaba de arrollar).
De acuerdo a lo expuesto, casi todas las hipótesis tratadas por la doctrina nacional
como concreciones del principio de absorción, deben ser consideradas como de subsidiariedad
expresa o tácita. Pues no se trata de que un disvalor absorba a otro, sino de que, de acuerdo al
sentido de una determinada norma, se desprende que ésta deja de tener vigencia frente a
hechos subsumibles en otros preceptos que describen manifestaciones más intensas del mismo
atentado.
Este principio supone una determinada relación valorativa entre dos o más preceptos.
Según él, frente a la concurrencia de dos o más preceptos debe darse aplicación exclusiva al
tipo penal que incluya en sí el disvalor de los demás. Ello también se expresa diciendo que un
delito absorbe el injusto de los demás. En otros términos, la implicancia entre los preceptos no
es lógica, sino valorativa.
No se trata de tipicidades totalmente independientes, sino en cierto modo conectadas,
por lo que cabe pensar que el legislador ya ha considerado el desvalor de una de ellas al penar
la otra. Ello es precisamente lo que diferencia este criterio del de subsidiariedad, pues esta
última relación se da cuando un precepto es de aplicación auxiliar, es decir, cuando sólo opera
a falta de otro más grave que venga al caso. En cambio, la relación de consunción supone que
una figura comprende también el desvalor de la otra, lo cual puede establecerse con base en un
cierto nexo típico entre ambas.
Por lo general, puede apreciarse consunción respecto de los hechos típicos que acompañan
normalmente a otro más grave. Es el caso del robo, que generalmente va acompañado de
violación de morada.
En todos estos casos, la rabaja rebaja se efectúa utilizando las escalas graduales de
penas, y si un delito tiene asignadas varias penas o varios grados de una pena, la rebaja se
efectúa a partir de la pena o del grado inferior (art. 60 reglas 1ª y 2ª). Por ejemplo: si la pena es
"presidio mayor en cualquiera de sus grados" y tengo que sancionar al cómplice de delito
frustrado, efectúo la rebaja a partir del grado inferior, que es "presidio mayor en su grado
mínimo" y como debo bajar dos grados, me queda "presidio menor en su grado medio".
Respecto de las faltas hay que tener presente que sólo se castigan cuando han sido
consumadas (art. 9º); que respecto de ellas no se castiga el encubrimiento (art. 17) y que los
cómplices son castigados con una pena que no exceda de la mitad de la que corresponde a los
autores (art. 498)
Esto es sin perjuicio de las reglas especiales que en ciertos casos establece la ley (art.
55 CP.) Ejemplo: art. 450 inc. 1° CP..
En efecto, los artículos 65 a 68 CP. le señalan al juez una serie de reglas que precisan
de qué modo debe computar las circunstancias concurrentes en el hecho. Para ello, distingue
el tipo de pena a que se haya llegado en virtud de las fases anteriores de individualización de la
responsabilidad, y el número y clase de circunstancias que adjetivan el hecho concreto.
Sobre esta base, la ley desarrolla un esquema en el que al juez únicamente le otorga un
cierto margen de arbitrio en lo relativo a tres puntos bien precisos. Así frente a la concurrencia
de varias circunstancias de distinto signo, el juez debe proceder a compensarlas racionalmente,
lo cual implica que ha de atender fundamentalmente a su valor propio (arts. 66, 67 y 68,
incisos finales, CP.).
Por último, queda todavía otro reducto de discrecionalidad para el juez en lo respecta a
la determinación de la pena precisa dentro del grado a que hubiere llegado por aplicación del
todas las reglas anteriores, materia que norma el artículo 69, y que será analizado en forma
separada de cuanto concierne al efecto propio de las circunstancias modificativas de
responsabiidad penal.
En todo caso, deben tenerse presentes en este lugar las consideraciones efectuadas en
lo tocante a la inherencia de dichas circunstancias y a su comunicabilidad, como asimismo, las
reglas básicas que presiden el esquema legal de determinación de la penalidad sobre la base de
los diversos factores que inciden en ella.
Reglas legales de determinación
Como acabamos de señalar, la ley regula los efectos generales de las circunstancias
modificatorias sobre el marco de la penalidad, atendiendo a su número y, principalmente, a la
divisibilidad o indivisibilidad de la pena en cuestión.
Al respecto, son cuatro los preceptos que abordan las distintas alternativas posibles: el
art. 65, que alude al hecho sancionable con una sola pena indivisible; el art. 66, aplicable
cuando las penas imponibles al hecho sean dos indivisibles; el art. 67, que lo es en el caso que
la pena sea sólo un grado de una divisible; y el art. 68, que se pone en los eventos restantes, a
saber, cuando la penalidad corresponda a la combinación de una o más indivisibles con uno o
más grados de penas divisibles, o bien, cuando sólo consista en diversos grados de una que sí
admite división.
Conviene señalar, antes de entrar a dicho examen, una regla general implícita en toda
esta regulación, según la cual, sin perjuicio de algunas excepciones, la configuración de una
sola circunstancia, ya sea atenuante o agravante, no permite subir o bajar del marco penal
asignado al hecho, ascendiendo o descendiendo en la escala de penas respectiva.
a) Tratándose de una pena indivisible, la agravante no tendrá efecto alguno (art. 65), lo
cual es una aplicación directa de la regla implícita aludida, en orden a que una sola
circunstancia no permite exceder del marco penal aplicable al hecho. Si tal es la norma, y
atendido que la pena es indivisible, no es posible variación alguna.
c) En el supuesto de que la pena sea un grado de una divisible (art. 67), la ley ordena
imponer su mitad superior. Es decir, si la pena es presidio menor en grado máximo (3 años y
un día a 5 años), el juez está obligado a fijar una sanción superior a los 4 años, aunque dentro
de ese tramo tenga todavía cierta libertad para fijar la duración exacta del presidio.
d) En los supuestos de combinación entre divisibles e indivisibles, o simplemente de
penalidad compuesta de dos o más divisibles, a los que se refiere el art. 68 CP., el efecto de
una agravante también se acomoda a las particularidades del caso, de modo que la regla que
aquí da el legislador está redactada en términos negativos: el juez no puede imponer el grado
(incluyendo en este concepto, eventualmente, también una pena indivisible) inferior. Así, si
son dos los grados, los efectos son similares a los señalados en la letra “b)” anterior, pero si
son más, sólo se excluye el tramo mínimo de los imponibles. De este modo, si la pena fuere
presidio mayor en cualquiera de sus grados, el juez sólo se vería impedido de aplicar el grado
mínimo, pero le restarían aún los dos superiores.
Aparte de ciertos supuestos de agravantes especiales (por ej., arts. 400 y 447 CP.), que
obviamente tienen un efecto propio, más severo, la ley contempla, asimismo, un efecto más
gravoso para una circunstancia agravatoria de aplicación general, cual es la regulada en el
inciso segundo del art. 72 CP. Esta norma se pone en el evento que un individuo mayor de
edad se valga de menores de 18 años para cometer el delito; en tal caso, se aplica al primero
"la pena que le habría correspondido sin esta circunstancia, aumentada en un grado". Luego,
se trata de una elevación obligatoria al grado siguiente, si bien es el juez quien aprecia en
conciencia si acaso el adulto se ha prevalido del menor.
a) Cuando la pena es una indivisible (art. 65), tampoco puede haber efecto alguno, en
la medida en que una sola circunstancia común no modifica el grado de penalidad.
b) Si las indivisibles son dos, se produce el efecto opuesto del indicado en la letra b)
anterior, a saber: el juez debe aplicar el grado mínimo (art. 66).
Ahora bien, estas reglas generales se ven alteradas en tres casos especiales,
concernientes a atenuantes aplicables a toda clase de delitos.
Una segundo supuesto de excepción se contiene en el inciso primero del art. 72 CP.,
que regla el tratamiento penal, también privilegiado, que debe darse a los menores de 18 años
que hubieren de ser condenados, por haber delinquido con discernimiento. La pena a imponer
será la inferior en grado al mínimo de los señalados en la ley para el delito de que sea
responsable.
En caso de configurarse, o restar aún de la compensación que hubiere tenido lugar, dos
o más circunstancias agravantes, los efectos son los siguientes:
b) Si, en cambio, consta de dos grados indivisibles, y dado que el art. 66 CP. tampoco
regula esta situación, sólo se producirá el efecto contemplado para cuando concurre una sola
agravante: se impondrá el grado máximo de los previstos en la ley para el hecho.
c) De acuerdo al art. 67 inciso quinto, CP., si hay dos o más circunstancias que
agravan un hecho sancionado con una pena divisible, el tribunal puede imponer la superior en
un grado. Es decir, la elevación al grado siguiente no es obligada, aunque si no opta por ella,
cuando menos tendrá que aplicar la mitad superior de la divisible prevista para el hecho, según
hemos expuesto más arriba.
Ello es así en las hipótesis contempladas en los arts. 65, 66 y 67 CP., y se acentúa más
aun en el caso previsto en el art. 68 CP., esto es, varios grados todos divisibles o combinados
con una pena indivisible, ya que en presencia de tal penalidad el tribunal puede bajar la
sanción hasta en tres grados.
La rebaja prevista en estos artículos nunca es obligatoria para el juez. Por otra parte,
para decidir en punto al número de grados a rebajar en cada caso, los arts. 66 inciso tercero, 67
inciso cuarto, y 68 inciso tercero, CP., le señalan al juez la siguiente regla: deberá atender al
número y entidad de las circunstancias concurrentes, lo cual, en realidad, parece bastante
obvio.
Es más, quien quisiera sostener que esta parte del artículo 69 CP. resulta violatoria del
principio aludido, tendría previamente que afirmar -lo que es insostenible- que las agravantes
sólo le permiten al juez subir la pena y, en su caso, llegar al tramo superior de penalidad, pero
no lo habilitan para, dentro de ese grado, imponer otra sanción que no sea el mínimo de éste,
pues sólo partiendo de esa base cabría pensar que la estimación de las mismas agravantes para
fijar ahora la magnitud exacta de la pena pudiera ser inadmisible a la luz del mencionado
principio, en cuanto permitiría imponer cualquier pena dentro del grado correspondiente.
Finalmente, así como la mención que la norma efectúa al número de las circunstancias
que concurrieren no ofrece dificultades, sí podría presentarlas, el punto relativo a qué ha de
entenderse por entidad de las mismas. En concepto de Rivacoba, esta última expresión
permite dar cabida a una valoración del contenido de antijuridicidad o de culpabilidad de cada
circunstancia.
Respecto de este segundo factor a que debe atender el juez, Etcheberry afirma que él
comprende todas las consecuencias perjudiciales que se deriven de la infracción, "aunque no
estén consideradas en la tipificación del delito para los efectos de la penalidad".
Sosteniendo lo contrario, Rivacoba arguye que una tal interpretación de esa cláusula
conduciría a resultados violatorios del principio de legalidad, pues, en la medida en que se
trasciende el tipo penal para ponderar circunstancias, no ya propias del mismo, como sería la
entidad del resultado típico producido, sino otros elementos que nada tienen que ver con la
previsión legal de la conducta, el juez pasaría a ocupar el lugar del legislador. Esa desmedida
extensión atribuida al criterio legal mencionado acabaría por vulnerar, asimismo, el principio
de culpabilidad, puesto que no habría manera de que el delincuente llegara a abarcar con su
conocimiento y voluntad las repercusiones colaterales de su actuación antes de llevarla a cabo.
En primer lugar, la ley no alude al mal causado por la acción del autor, sino al causado
por el delito mismo, el cual de suyo, si es material, integra ya el resultado dañoso. Por
consiguiente, el mal causado por el delito no puede ser el que forma parte del mismo, sino el
que excede a él.
Junto a ello, hay otros dos elementos que refuerzan esta interpretación; el primero es
que, concordante con lo señalado, el Código no habla de la mayor o menor gravedad o
intensidad del daño, sino que se refiere a la mayor o menor extensión del mismo, lo que
nuevamente sugiere que la ley le pide al juez considerar elementos trascendentes al tipo.
Por estas consideraciones, creemos que efectivamente el artículo 69 CP, última parte,
alude a repercusiones ajenas, tanto al tipo delictivo como a las circunstancias modificativas de
responsabilidad penal. Mas, teniendo en cuenta que la consagración constitucional explícita
del principio de legalidad, e implícita del de culpabilidad, impide conceder tal amplitud
discrecional al juez para agravar la situación del procesado, pensamos que la aplicación de
aquella cláusula sólo puede repercutir en favor de éste, pudiéndosele, en consecuencia,
imponer el mínimo de la pena correspondiente aun cuando la intensidad de la lesión
representada por el delito mismo pudiere sugerir una sanción algo mayor.
Concediendo este alcance a la norma, no sólo se salvan las objeciones de
inconstitucionalidad, sino que además, es posible aplicarla bajo el criterio de la necesidad de
pena, entendiendo que la escasa entidad objetiva del daño consiguiente al delito puede
disminuir en algo la imperiosidad de aquélla, de modo que, aun en presencia de una
culpabilidad mayor del delincuente, el juez podría estimar que las necesidades de prevención
general son menores en el caso concreto juzgado, por la escasa relevancia alcanzada por las
repercusiones del hecho.
Como es sabido, de conformidad con lo que dispone el art. 21 CP., la multa es una
pena común a los crímenes, simples delitos y faltas, y el art. 25, en su inciso sexto, se encarga
de precisar su monto respecto de los crímenes, de los simples delitos y de las faltas.
El inciso primero de esta disposición señala que para la imposición de esta pena, el
tribunal podrá recorrer toda la extensión en que la ley le permite imponerla, tarea que debe
efectuar considerando exclusivamente dos parámetros, a saber: las circunstancias atenuantes o
agravantes del hecho, y "principalmente, el caudal o facultades del culpable".
De entre estos factores, es indudable que la ley confiere primacía a las facultades
económicas del delincuente. Es principalmente en atención a éstas que debe fijarse el monto a
pagar por cada individuo.
Este factor es el único que puede garantizar, respecto de la multa, una cierta igualdad
en el trato penal. De no seguirse este camino, sería ilusorio pretender que cumpliera alguna
función preventiva o retributiva.
Respecto de las circunstancias modificatorias, cabe destacar que el precepto que nos
ocupa sólo contiene una referencia genérica a tales figuras, sin vincularla, como ocurre en la
norma que lo precede, al número y entidad de las mismas. No obstante la amplitud de los
términos, nos inclinamos a pensar que el legislador alude a las contempladas en los artículos
11, 12 y 13 del C. Penal. En efecto, al consignar un catálogo de atenuantes y agravantes, la
ley lo hace de un modo general, aplicable a totalidad de las infracciones regidas por dicho
texto, cualquiera que sea la pena con que aparezcan conminadas. Luego, por mucho que la
multa quede excluida de la aplicación del sistema general de individualización de la
responsabilidad penal, el principio de taxatividad que rige en materia de circunstancias
modificatorias afecta también a los delitos sancionados con pena de multa.
La disposición en análisis, con todo, permite al tribunal imponer una multa inferior al
monto señalado en la ley, en casos calificados, siempre que no concurran circunstancias
agravantes. Asimismo, se prevé la posibilidad de que el tribunal autorice al condenado para
pagar la multa por parcialidades, dentro de un límite que no exceda de un año. En tal evento, el
no pago de una sola de las parcialidades hará exigible el total de la multa adeudada.
MODULO II
“Teoría de la Antijuridicidad”
TEORIA DE LA ANTIJURIDICIDAD
1. Concepto
2. Características
b) Es un concepto unitario. Esto quiere decir que el juicio de ilicitud es común para todo
el ordenamiento jurídico. Una conducta es ilícita para todo el ordenamiento, porque en virtud
del principio de unidad de este último, lo que está prohibido por una rama del derecho no
puede estar permitido por otra. Como consecuencia del carácter unitario de la antijuridicidad,
si se determina que un hecho es lícito éste no genera ningún tipo de responsabilidad. En esto
se diferencia de la culpabilidad, pues aunque falte este último elemento (y se excluya, por
tanto, la responsabilidad penal), el hecho sigue siendo ilícito y es posible perseguir otras
responsabilidades.
c) Es un concepto negativo. Es decir, que se obtiene a partir de la constatación de que no
concurren causales de justificación. En virtud del efecto indiciario de la tipicidad, el tribunal
no precisa fundar positivamente por qué considera que una conducta típica es antijurídica.
No es que haya dos clases de antijuridicidad. Lo formal y lo material no son sino dos
aspectos, cuya concurrencia conjunta es necesaria para que se dé este elemento del delito. De
modo que no basta una contradicción puramente formal entre la conducta y el tenor de la
norma abstracta, si no hay una efectiva lesión o puesta en peligro de un bien jurídico. Y
tampoco basta la lesión o puesta en peligro de un bien jurídico, si su protección no se ha
materializado en una norma penal.
1. Concepto
Como toda eximente, las causales de justificación son situaciones (de hecho) que
ocurren en el plano de la realidad. Pueden definirse, entonces, como aquellos supuestos
fácticos bajo los cuales el ordenamiento jurídico considera lícita la ejecución de una conducta
típica.
Supongamos que "A" mata a "B" con una motivación de venganza, sin enterarse de
que en ese mismo momento "B" apuntaba en contra suya para matarlo. De concebirse la
ilicitud en términos estrictamente objetivos, "A" realizó un acto lícito (estaría amparado por la
causal de justificación de legítima defensa). De aceptarse que la legitimación de una conducta
típica obedece a razones objetivas y subjetivas, tendríamos que concluir que "A" ejecutó un
acto antijurídico, porque no concurriría la causal de legítima de defensa.
A favor de la tesis que postula el carácter mixto de las causales de justificación (es
decir la que plantea que éstas constan de elementos objetivos y subjetivos), puede invocarse,
como argumento de texto, que el propio artículo 10 al consagrar la legítima defensa y el estado
de necesidad, exige que el individuo actúe "en" defensa de sí mismo o de otro, en el primer
caso, y "para" evitar un mal, en el segundo. Y el empleo de estas preposiciones no puede ser
entendido sino como una exigencia de que el sujeto actúe con conciencia de que se está
defendiendo o de que está evitando un mal.
III. EL CONSENTIMIENTO
1. Concepto y fundamento
Es la única causal de justificación que no figura de modo expreso entre las eximentes
que contempla el artículo 10 del C. Penal. No obstante ello, la unanimidad de la doctrina
reconoce efecto legitimante al consentimiento, por estimar que de la parte especial del Código
puede extraerse el criterio de la disponibilidad de determinados bienes jurídicos.
Así, por ejemplo, varios tipos de la parte especial contemplan de modo expreso la falta
de voluntad del titular del bien jurídico, como elemento objetivo de las figuras que ellos
establecen. Es lo que ocurre, por ejemplo, en los delitos de violación de morada (art. 144) y
hurto (art. 432).
Asimismo, respecto de varios delitos (que la ley califica como delitos de "acción
privada"), se establece que el perdón del ofendido opera como causal de extinción de
responsabilidad penal (por ejemplo, los delitos de injuria y calumnia). De allí puede deducirse
que si la voluntad del ofendido opera como excluyente de la pena, incluso después de que el
órgano jurisdiccional ha intervenido emitiendo un juicio de condena, con mayor razón habrá
de concederse aquel efecto a la autorización otorgada con anterioridad a la ejecución de la
conducta.
2. Requisitos
Aunque, en general, se admite que la vida y la salud no son disponibles (y por tanto la
voluntad de la víctima no puede operar como causal de justificación en delitos como el
homicidio y las lesiones), hay que tener presente que respecto de esos mismos bienes jurídicos
sí caben otras causales de justificación, las cuales pueden exigir dicha voluntad como requisito
para su procedencia. Así, por ejemplo, el ejercicio legítimo de la profesión de médico (art. 10
Nº 10) supone que el facultativo actúe con la autorización del paciente. Pero en esos casos, no
es el puro consentimiento lo que opera con efecto legitimante, como sucede con los bienes
jurídicos disponibles, sino la concurrencia de otros factores que van unidos a la voluntad del
afectado.
Se requiere, asimismo, que el titular actúe con plena libertad, es decir, sin ser objeto
de coacción.
En general, se acepta que el consentimiento puede ser expreso o tácito (es decir,
deducible de alguna actitud concreta del titular del bien jurídico) y que puede ser otorgado
tanto por el propio titular como por las personas que ejercen legítimamente su representación.
Esto último, sin embargo, no es admisible respecto de aquellos bienes jurídicos
personalísimos, como la libertad sexual y el honor.
3. Efectos
Por ser una causal de justificación, el efecto propio del consentimiento es impedir que
el delito se configure por faltar en él el elemento antijuridicidad.
No debemos olvidar, sin embargo, que hay situaciones en las cuales el propio tipo
exige que la conducta se ejecute sin (o contra) la voluntad del afectado. Así sucede,
explícitamente, en el hurto (art. 432) e implícitamente en la violación (art. 361). En todos esos
casos el consentimiento determinará la falta de un elemento objetivo del tipo; y, en
consecuencia, la no configuración del delito obedecerá a una causal de atipicidad y no a una
causal de justificación (resultará excluida la tipicidad, no la antijuridicidad).
IV. LA LEGITIMA DEFENSA
Obra en legítima defensa quien ejecuta una acción típica, racionalmente necesaria, para
repeler o impedir una agresión ilegítima, no suficientemente provocada por él y dirigida en
contra de su persona o derechos, o de los de un tercero.
La legítima defensa se estructura sobre la base de dos elementos: una agresión y una
reacción defensiva. A continuación examinaremos qué requisitos ha de reunir cada uno estos
dos componentes para que se configura esta causal de justificación.
1) La agresión
Es una acción humana que tiende a lesionar o poner en peligro un bien jurídicamente
protegido. En cuanto al objeto de la agresión, existe legítima defensa cualquiera sea la índole
del derecho agredido. La ley no limita la causal a los casos en que se defiende la vida o la
integridad corporal. Otros bienes, como el honor, la libertad personal, la libertad sexual, la
propiedad, el derecho a la intimidad y, en general, toda clase de derechos pueden ser
defendidos lícitamente.
a) Debe ser ilegítima, es decir, debe consistir en una acción antijurídica. No es posible
defenderse de ataques que se encuentren, a su vez, legitimados (no podría alguien, por
ejemplo, alegar legítima defensa para lesionar al policía que cumple una orden de detención).
En todo caso, no se requiere que la acción sea típica y culpable, basta con que se antijurídica.
b) Debe ser real. Esto quiere decir que debe existir como tal. Quien reacciona frente a
una agresión imaginaria o aparente no actúa justificado en virtud de una legítima defensa y,
por tanto, su conducta es antijurídica. (Aunque podría, eventualmente, resultar excluida la
culpabilidad, por faltar la conciencia acerca de la ilicitud del acto ejecutado, como veremos
más adelante).
e) Debe ser obra de una persona. Para los efectos de la legítima defensa, únicamente el
ser humano puede agredir: sólo él tiene capacidad para ejecutar acciones ilícitas. Contra
ataques de animales o frente a la fuerza de la naturaleza, no cabe invocar esta justificante,
aunque sí podría configurarse una situación de estado de necesidad.
2) La reacción defensiva
Respecto de este elemento, la ley exige que haya "necesidad racional del medio
empleado para impedir o repeler la agresión". La necesidad, como fluye del propio texto de la
ley, no es matemática, sino racional. No se trata de que frente a un ataque a golpes, me
defienda también a golpes. De lo que se trata es que el empleo del medio utilizado aparezca
como razonable, atendida la situación personal del agredido y su posición frente al agresor (un
inválido puede utilizar un revólver para defenderse de una persona fuerte y sana que lo ataca
mediante golpes de puño).
Son requisitos comunes a las tres formas de legítima defensa, la existencia de una
agresión ilegítima y la necesidad racional del medio empleado para defenderse.
Obra en estado de necesidad justificante quien ataca un bien jurídico de un tercero, con
el objeto de evitar la lesión de uno más valioso perteneciente a sí mismo o a otra persona.
Hablamos de estado de necesidad "justificante", porque la causal que ahora nos ocupa
no cubre todas las situaciones que, en estricto rigor, constituyen casos de estado de necesidad,
es decir, situaciones en las que se sacrifica un bien jurídico para salvar otro que se encuentra
en peligro. El resto de las situaciones, por no estar contempladas en la presente causal, son
antijurídicas. Sin embargo, algunas de ellas pueden quedar comprendidas en otra eximente,
denominada estado de necesidad exculpante, cuyo efecto concreto es excluir la culpabilidad.
Requisitos
b) Sacrificio de un bien jurídico. El bien jurídico sacrificado sólo puede ser la propiedad
ajena (art. 10 Nº 7) o el derecho a la intimidad (referido al hogar, art. 145). Tratándose de
delitos que, junto con atentar contra los derechos indicados, lesionan también (o ponen en
peligro) otro de mayor significación, no cabe admitir el estado de necesidad, porque la
justificante no puede ser entendida en términos más amplios que los empleados por las
disposiciones que la consagran.
c) El bien jurídico que se sacrifica ha de ser menos valioso que el que se trata de
salvar
La valoración que tiende a determinar cuándo un bien jurídico es de menor valor que otro, es
de carácter jurídico, objetivo, y relativo. Las valoraciones éticas, religiosas o de cualquier otra
índole no pueden ser tomadas en consideración; sólo han de tomarse en cuenta los criterios
valorativos que fluyen del propio ordenamiento jurídico. Tampoco debería considerarse la
posición subjetiva del individuo (lo que éste siente respecto de los bienes que están en juego),
puesto que en esta materia está comprometido no sólo su interés, sino el de otras personas y el
de la sociedad en general. En cambio, sí debe tomarse en consideración la posición objetiva
del sujeto, es decir, su situación personal respecto de los bienes en conflicto (la vivienda de
una persona humilde puede ser considerada, objetivamente, más valiosa que el lujoso
automóvil de un magnate).
Se trata aquí del ejercicio de un derecho, es decir, de una facultad que aparezca
conferida, de modo expreso o tácito, por el ordenamiento jurídico. Es el caso, por ejemplo, de
las normas que autorizan al acreedor para retener bienes del deudor, que aparece expresamente
conferida en el caso del arrendamiento. Sin embargo, el mismo derecho puede decirse que
está establecido tácitamente en el ordenamiento jurídico chileno, con un alcance más general,
sobre todo si consideramos que el propio Código Penal sanciona (en el artículo 494 Nº 20) al
que "con violencia" se apoderare de una cosa perteneciente a su deudor para hacerse pago con
ella.
La exigencia de que el ejercicio del derecho sea "legítimo" implica, en primer término,
que la facultad ha de ejercerse dentro de los supuestos y con la finalidad a la cual apunta la
autorización. Implica, asimismo, que no han de sobrepasarse los límites que la propia
autorización establece. En consecuencia, no basta que el derecho aparezca establecido en el
ordenamiento jurídico, es necesario que éste se ejerza en la oportunidad y en la forma debidas.
Tal como sucede en las dos causales anteriormente explicadas, aquí también la
legitimidad de la actuación depende de que se respeten todas las condiciones previstas, tanto
en lo relativo a la oportunidad, como en lo que dice relación con los medios utilizados y al fin
perseguido por el sujeto al actuar.
Concepto
A partir del artículo 1º de la Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público (Ley Nº
19.640), y del artículo 83 de la CPR, se puede decir es “un organismo autónomo y
jerarquizado cuya función es dirigir en forma exclusiva la investigación de los hechos
constitutivos de delitos, los que determinen la participación punible y los que acrediten la
inocencia del imputado y, en su caso, ejercer la acción penal pública en la forma prevista
por la ley”.
El Ministerio Público es uno de los órganos constitucionales de más reciente creación, y
su origen deriva de la Ley de Reforma Constitucional Nº 19.519 del año 1997.La Fiscalía
de Chile y el Ministerio Público son la misma institución.
Es un organismo autónomo, cuya función es dirigir la investigación de los delitos, llevar a
los imputados a los tribunales, si corresponde, y dar protección a víctimas y testigos.
El Ministerio Público no forma parte de ninguno de los tres Poderes del Estado. No es
parte del Gobierno o Poder Ejecutivo, del Poder Judicial ni del Poder Legislativo
(Congreso Nacional).
Organización:
Esta institución se organiza en una Fiscalía Nacional, encabezada por el Fiscal Nacional,
y 18 Fiscalías Regionales, cada una de las cuales son dirigidas por un Fiscal Regional y
un equipo directivo. Existe una en cada región del país y cuatro en la Región
Metropolitana por su extensión territorial y cantidad de habitantes.
En cada región hay Fiscalías Locales, que son las unidades operativas de las Fiscalías
Regionales, y están compuestas por fiscales adjuntos, ayudantes de fiscal, y otros
profesionales, como sicólogos y asistentes sociales; técnicos y administrativos.
La Fiscalía trabajan en colaboración con Carabineros de Chile, la Policía de
Investigaciones de Chile (PDI) y los organismos auxiliares como el Servicio Médico Legal,
el Servicio de Registro Civil e Identificación, y el Instituto de Salud Pública.
Existe también un Consejo General, que reúne al Fiscal Nacional con todos los Fiscales
Regionales y que cumple funciones de órgano consultivo y asesor.
En el sistema procesal penal, son los fiscales los que dirigen a las policías en la
investigación de los delitos. Los fiscales y sus equipos deben además proteger a las
víctimas y testigos y ejercer la acción penal pública, esto significa, llevar ante los
tribunales a los imputados y buscar que los jueces apliquen las sanciones cuando
corresponde.
La actividad de las Fiscalías se inicia normalmente cuando se recibe una denuncia. Esta
es presentada por la víctima o por un denunciante, ante la policía, los tribunales con
competencia criminal o en las Fiscalías.
El sistema busca la eficiencia en la tramitación de las causas, a través de diferentes tipos
de término de los casos: sentencias definitivas, dictadas por los tribunales; salidas
alternativas o facultades de término que aplican las propias Fiscalías.
Misión
Dirigir en forma exclusiva las investigaciones criminales, ejercer cuando resulte
procedente la acción penal pública, instando por resolver adecuada y oportunamente los
diversos casos penales, adoptando las medidas necesarias para la atención y protección
de víctimas y testigos, todo ello a fin de contribuir a la consolidación de un estado de
Derecho, con altos estándares de calidad.
Nombramiento de Fiscales
1.- Fiscal Nacional. Será designado por el Presidente de la República, a propuesta en
quina por la Corte Suprema, y con acuerdo de los dos tercios de los miembros en
ejercicio, del Senado. Si el Senado no aprobare el nombre propuesto por el Presidente, la
Corte Suprema completará la quina con otro, repitiéndose el mismo procedimiento (art. 85
CPR). Además:
i. El Fiscal Nacional deberá: (1) tener a lo menos diez años de título de abogado (2)
haber cumplido 40 años de edad, (3) tener las demás calidades para ser ciudadano con
derecho a sufragio.
ii. El Fiscal Nacional durará 8 años en el cargo, y no podrá ser designado para el
período siguiente.
iii. Cesará en sus funciones al cumplir 75 años de edad.
iv. El Fiscal nacional tendrá la superintendencia directiva, correccional y económica
del Ministerio Público, en conformidad a la ley orgánica constitucional respectiva (art. 91
CPR)
2.- Fiscales Regionales. Serán nombrados por el Fiscal nacional, a propuesta de una
terna propuesta por la Corte de Apelaciones de la respectiva región. En aquellas regiones
donde existiere más de una Corte de Apelaciones, la terna será formada por un pleno
conjunto de todas ellas, especialmente convocado al efecto por el Presidente de la Corte
de más antigua creación. Además:
i. Los Fiscales Regionales deberán: (1) tener a lo menos cinco años de título de
abogado (2) haber cumplido 30 años de edad, (3) tener las demás calidades para ser
ciudadano con derecho a sufragio.
ii. Los Fiscales Regionales durarán 8 años en el cargo, y no podrán ser designados
para el período siguiente.
iii. Existirá un Fiscal Regional en cada región, a menos que la población o la
extensión geográfica de la región hagan necesario nombrar a más de uno.
3.- Fiscales Adjuntos. Serán nombrados por el Fiscal nacional, a propuesta de una terna
propuesta por el Fiscal Regional respectivo.
Los fiscales adjuntos: (1) deberán ser abogados, y (2) deberán tener las demás calidades
para ser ciudadano con derecho a sufragio
DEFENSORÍA PENAL PÚBLICA (DPP)
Visión
"Ser una institución pública autónoma reconocida positivamente como un servicio de
defensa penal de excelencia a todo aquel que lo requiera, participando en la generación
de políticas públicas del ámbito penal."
Objetivos estratégicos
Asegurar la cobertura nacional del servicio de defensa penal pública a través de
defensores locales institucionales y defensores licitados.
Mejorar continuamente la calidad de las prestaciones del servicio de defensa penal
pública a través de los instrumentos de apoyo y control a la gestión de defensa.
Fortalecer la difusión del rol de la Defensoría Penal Pública a la comunidad, en el marco
sistema de justicia criminal, a través de la gestión del conocimiento y su política
comunicacional.
Organización
Defensor Nacional:El Defensor Nacional es el jefe superior del Servicio, a él le
corresponde dirigir, organizar y administrar la Defensoría, controlarla y velar por el
cumplimiento de sus objetivos.
Defensorías Regionales: Para cumplir su labor, la Defensoría Penal Pública atiende a
quienes requieran de sus servicios en todo Chile, a través de sus 16 Defensorías
Regionales. La Defensoría Regional es la encargada de la administración de los medios y
recursos necesarios para la prestación de la defensa penal pública en la Región a los
imputados o acusados por un crimen, simple delito o falta que sea de competencia de un
juzgado de garantía o de un tribunal de juicio oral en lo penal y de las respectivas Cortes,
en su caso, y que carezcan de abogado. De acuerdo a la Ley que rige a la Defensoría
Penal Pública existirá una Defensoría Regional en cada una de las regiones del país, con
excepción de la Región Metropolitana de Santiago, en la que habrá dos. Cada Defensoría
Regional estará a cargo de un Defensor Regional. El Defensor Regional será nombrado
por el Defensor Nacional, previo concurso público de oposición y antecedentes
Misión
“Contribuir a una sociedad más segura, garantizando el cumplimiento eficaz de la
detención preventiva y de las condenas que los Tribunales determinen, proporcionando a
los afectados un trato digno, acorde a su calidad de persona humana y desarrollando
programas de reinserción social que tiendan a disminuir las probabilidades de reincidencia
delictual”
Objetivos Estratégicos
- Garantizar el cumplimiento eficaz de la detención preventiva y de las condenas que los
Tribunales determinen, previniendo conductas y situaciones que pongan en riesgo el
cumplimiento de este objetivo.
- Proporcionar una atención y un trato digno a la población puesta bajo la custodia del
Servicio, reconociendo y respetando los derechos inalienables de las personas,
entregando un conjunto de condiciones básicas de vida que faciliten el ejercicio de los
derechos no restringidos por la reclusión.
- Fomentar conductas, habilidades, destrezas y capacidades que incrementen las
probabilidades de reinserción social de la población penal, involucrando en este proceso a
sus familias, instituciones, empresas y comunidad en general.
Productos Estratégicos
1.- Vigilancia
Acción ejercida por la Administración Penitenciaria que implica la observación activa,
atenta y personalizada de la conducta de las personas puestas a su disposición, en
cualquier condición, con el fin de prevenir toda acción que pueda atentar contra el deber
institucional de hacerlas cumplir con la pena impuesta; de ponerlas oportunamente a
disposición de los tribunales cuando éstos lo soliciten. En el caso de la población penal
con Medidas Alternativas a la Reclusión o con Beneficios Intrapenitenciarios, la vigilancia
adquiere el carácter de control del cumplimiento de las medidas restrictivas de libertad.
2.- Atención
Acción, a través de la cual el Servicio, directamente o a través de terceros, proporciona a
las personas recluidas, un conjunto de condiciones básicas en materia de: infraestructura,
higiene ambiental, alimentación, vestuario personal y ropa de cama, aseo personal,
atención de salud, facilidades de comunicación, atención espiritual, acceso a la
educación, al trabajo, a la cultura, a la información, al deporte y recreación, de las que ha
sido privada como consecuencia de la reclusión, de manera de aminorar el deterioro físico
y psicológico de ella, evitar causar daños innecesarios y facilitar el ejercicio de los
derechos no restringidos por la reclusión. Desde la perspectiva ciudadana, se entiende
por atención la entrega de información en los plazos legales, así como la entrega de las
respuestas de las solicitudes de información bajo las leyes 19.880 y 20.285 de acceso a la
información pública.
3.- Asistencia
Acción a través de la cual el Servicio, directamente o través de terceros, estimula el
desarrollo de condiciones individuales de las personas condenadas durante el período de
permanencia en el sistema penitenciario, de manera de lograr la modificación de
conductas y motivaciones que inciden en la génesis de los actos delictivos y en la
preparación del individuo para su incorporación activa en el medio libre
Establecimientos penitenciarios:
Se denominan genéricamente establecimientos penitenciarios, los recintos donde deban
permanecer custodiadas las personas privadas de libertad en razón de detención y
mientras están puestas a disposición del Tribunal pertinente; las personas sometidas a
prisión preventiva y las personas condenadas al cumplimiento de penas privativas de
libertad.
Corresponden también a esta denominación las dependencias destinadas al seguimiento,
asistencia y control de los condenados que, por un beneficio legal o reglamentario, se
encuentren en el medio libre.
Misión Institucional
Contribuir a la promoción, protección y restitución de derechos de niños, niñas y
adolescentes vulnerados/as, así como a la responsabilización y reinserción social de los
adolescentes infractores/as de ley, a través de programas ejecutados directamente o por
organismos colaboradores del servicio.
Objetivo
“Contribuir al reconocimiento y goce pleno de los derechos de niños, niñas y adolescentes
en cada una de las comunas del país, a través del fortalecimiento de la prevención,
promoción y participación sustantiva en corresponsabilidad con los actores locales como
garantes de derechos”.
Funciones:
La Unidad de Prevención, Participación y Gestión Local (UPP) tendrá como finalidad
establecer una articulación integral entre la oferta programática existente, de manera que
exista una coordinación fluida entre los programas presentes en los distintos territorios.
De esta forma, se desarrollará un soporte institucional que permita el fortalecimiento de un
Sistema Local de Protección de Derechos (SLPD). Asimismo, se impulsará la
democratización de la oferta de Sename en las principales comunas del país, de acuerdo
a criterios técnicos que permitan el acceso de los niños/as y sus familias a este tipo de
oferta. Finalmente, se favorecerá el fortalecimiento de la gestión local a través de la
participación sustantiva de niños, niñas y adolescentes.
3.- Adopción:
La adopción es la medida de protección por excelencia que se aplica en subsidio de la
familia de origen, cuando se han agotado todas las posibilidades para que un niño/a
pueda reintegrarse o permanecer bajo el cuidado personal de sus padres o familia
biológica. Es el acto jurídico mediante el cual se crea un vínculo legal de parentesco entre
una persona o pareja y el hijo/a no biológico que recibe bajo su cuidado.
El objetivo de esta medida es proporcionar a un niño, niña o adolescente que haya sido
legalmente declarado "susceptible de ser adoptado" (sea por la cesión, inhabilidad o
abandono del cuidado parental), una familia estable que le permita crecer y desarrollarse
adecuadamente, en un ambiente de protección y afecto. Con ello se espera reparar, en lo
posible, el impacto que han dejado en él o ella las experiencias asociadas al abandono.
La adopción restituye al niño/a su derecho a tener una familia definitiva, otorgándole la
calidad de hijo/a respecto de los adoptantes desde el punto de vista legal, con todos los
derechos que ello implica y sin ningún tipo de diferencia respecto de los hijos biológicos.
Funciones Principales
El Servicio Nacional de Menores, como órgano rector es el encargado de llevar un registro
de solicitantes nacionales y extranjeros declarados idóneos, asimismo como de niños/as
declarados susceptibles de ser adoptados.
Se preocupa de la acreditación, fiscalización y supervisión de organismos nacionales y
extranjeros de programas de adopción, tanto los que se encuentran en las propias
Unidades de Adopción de Sename(UADOP), como los que ejecutan los Organismos
Colaboradores Acreditados (OCAs).
También se encarga de la certificación de la no existencia de matrimonio chileno, para los
efectos de determinar la adopción internacional.
Como autoridad central, desempeña un rol instaurador y ejecutor del sistema de
cooperación para prevenir el secuestro, venta y tráfico de niños. Debe garantizar el
reconocimiento de adopciones en los demás Estados Contratantes y acredita organismos
extranjeros que deseen realizar Programas de Adopción o intervenir en ellos; además,
fiscaliza para el cumplimiento de las obligaciones que impone el Convenio de La Haya.
Penas de delitos:
Internación en régimen cerrado con programa de reinserción social;
Internación en régimen semicerrado con programa de reinserción social;
Libertad asistida especial;
Libertad asistida;
Prestación de servicios en beneficio de la comunidad, y
Reparación del daño causado.
Penas de faltas:
Prestación de servicios en beneficio de la comunidad;
Reparación del daño causado;
Multa, y
Amonestación.
Penas accesorias:
Prohibición de conducir vehículos motorizados, y
Tratamientos de rehabilitación por adicción a las drogas o al alcohol, a modo de sanción
accesoria a todas las anteriores si el juez así lo establece.
Desde 1 a 60 días:
- Prestación de servicios en beneficio de la comunidad.
- Reparación del daño causado.
- Multa.
- Amonestación.
MEDIDAS Y SANCIONES PRIVATIVAS DE LIBERTAD:
Multa
El juez podrá imponer una multa a beneficio fiscal que no exceda de 10 unidades
tributarias mensuales (421.780 pesos aprox.). Para su aplicación y fijación del monto,
además de los criterios señalados anteriormente en el artículo 24 de la ley 20.084, se
considerarán la condición y facultades económicas del infractor o de la persona que se
encuentre a su cuidado.
El juez, a petición del adolescente o de su defensor, podrá autorizar el pago de la multa
en cuotas. Esta podrá ser conmutable, a solicitud del infractor, por la sanción de servicios
en beneficio de la comunidad, a razón de 30 horas por cada tres unidades tributarias
mensuales.
Amonestación
Consiste en la reprensión enérgica al adolescente hecha por el juez, en forma oral, clara y
directa, dirigida hacerle comprender la gravedad del delito cometido y las consecuencias
que el mismo tiene o podría haber tenido, tanto para la víctima como para el propio
adolescente, instándole a cambiar de comportamiento y formulándole recomendaciones
para el futuro.
La aplicación de esta sanción requerirá una previa declaración del adolescente,
asumiendo su responsabilidad en la infracción cometida.
Los padres o guardadores serán notificados de la imposición de la sanción, en caso de no
estar presentes en la audiencia.
SANCIONES ACCESORIAS:
Tratamiento de Drogas
El juez está facultado para establecer, como sanción accesoria a todas las previstas en el
artículo 6 de esta ley anteriormente descritas, sin perjuicio que dentro de los planes
individuales o de reinserción social pueda incorporarse como una de las actividades
necesarias y siempre que sea inexcusable en atención a las circunstancias del
adolescente, la obligación de someterlo a tratamientos de rehabilitación por adicción a las
drogas o al alcohol.
La preocupación de abordar los problemas de consumo problemático de drogas y/o
alcohol de los adolescentes infractores de ley como parte del sistema penal, incorporando
la sanción accesoria a la LRPA, se fundamenta en la asociación significativa ente el
consumo de droga y la comisión de delito. Es decir, la sanción se basa en la idea que un
porcentaje importante de jóvenes infractores de ley muestra un consumo problemático de
estupefacientes y/o alcohol.
MODULO II
DERECHO PENAL, TEORIA DEL DELITO Y TIPOLOGIA DE
LA CONDUCTA DELICTUAL
Abogado
Desde que vislumbré que tendría entre mis manos el ansiado título profesional de
abogado, una de las cosas que me propuse -después de brindárselo a mis padres- fue
encaminar mis pasos hacia la sede del Colegio de Abogados, para solicitar la
incorporación a éste. Sabía que implicaba someterse voluntariamente a un estatuto
ético.
Acotando esta primera visión respecto del tema que nos ocupa, parece necesario
referirse a labor de los abogados en el nuevo sistema procesal penal, a la luz de la
ética profesional, como actores presentes en las tres labores en que se plasma el
nuevo procedimiento: juez, fiscal y defensor penal. Siempre he creído que los diversos
roles que el abogado desempeña en este nuevo sistema penal son sólo miradas
diversas de una misma labor: actuación jurídica en el ámbito penal que de alguna
manera legítima la intervención del Estado en este tema. Entonces, el sistema
funciona cuando cada actor del mismo trabaja con estricto apego a estándares de
calidad orientando su conducta en la ética que colorea toda labor humana.
Resulta necesario dar una visión panorámica y muy somera, la cual en una
aproximación nos permita vislumbrar como los mandatos de la ética del abogado
alcanzan a todos quienes profesionalmente intervienen en el proceso penal. Ha de
consignarse inicialmente que haciendo una lectura del Código Procesal Penal, éste no
ahonda mayormente en las obligaciones éticas de los abogados. Sin embargo, es
posible apreciar en las facultades disciplinarias de los jueces de garantía y los
magistrados del tribunal oral, disposiciones que le permiten orientar desde un ámbito
también ético la conducta de los intervinientes.
El tema no resulta pacífico y habrá muchos colegas que se sorprenderán con aquella
afirmación, sosteniendo al contrario que son ámbitos diferentes. Sin embargo, la
reforma constitucional aprobada implica un mandato de control ético para todos los
profesionales, al menos al nivel de directriz conductual, la cual se ilustra en el proceso
penal. Por ejemplo, en la invitación que se efectúa a los intervinientes para adecuar su
conducta en los términos expuestos en los artículos 292 y 293 de Código del ramo.
Ello no es otra cosa que la materialización del aspecto ético en la conducta de los
intervinientes y que el texto procesal sólo materializa por mandato legislativo.
En este ámbito resulta necesario dar por sentado que aunque el legislador le entrega
una herramienta disciplinaria al juez (o jueces en su caso), también respecto de éstos
pesa un mandato ético que ha de orientarlos en su calidad de hombres de derecho.
La experiencia nos dice que los mejores magistrados hacen de la sencillez una regla
de vida más que una virtud temporal. Se viene a la memoria la figura del magistrado y
profesor universitario don Mario Garrido Montt, de quien tuve el honor de ser alumno
en la Universidad de Chile. Nadie podrá decir que su sencillez le restaba autoridad e
impronta de buen juez. Otros magistrados -afortunadamente los menos- se anidan en
la arrogancia y en la prepotencia de quien quiere imponer su verdad como dogma y
sus ideas como doctrina, sin considerar que su interlocutor es un ser humano con su
misma educación y en definitiva un colega que merece un trato digno. Muchos hemos
sido testigos de tratos a colegas por parte de algunos jueces, que se alejan mucho del
ideal de atención que merece todo profesional.
EQUIDAD Y JUSTICIA
Este tema -así como a los jueces- también obliga que la conducta de los fiscales y
defensores (institucionales, licitados y privados) esté a la altura de lo que la sociedad
aspira de los mismos. Fiscales sencillos y accesibles -dentro de sus posibilidades- de
un buen trato, que den cuenta de los principios que en el Ministerio Público se
impregnan al ingresar. Profesionales al servicio de la justicia.
Es útil también señalar a los abogados que observan el presente documento que en lo
que respecta a los fiscales adjuntos, existen mecanismos internos e institucionales de
control en lo que dice relación con la conducta y probidad de dichos funcionarios,
haciendo eco esta novel institución que la prevención en este tipo de materia a la luz
de una ética de conducta permanente, es el mejor seguro para que ella se consolide y
cobije en su seno a persecutores penales ajenos a los actos antiéticos tan comunes en
la sociedad moderna.
En lo que respecta a los defensores, debe tenerse presente que existe a su respecto
ámbitos diversos de análisis, dependiendo del área en que nos encontremos. Así, si
estamos en el ámbito público están los Defensores Penales Público Institucionales por
un lado y Licitados por el otro. A este respecto y sin entrar al detalle de los
mecanismos de control institucionales o que existen en las bases de licitación, con los
comités de adjudicación -en forma previa- y los inspectores internos y las auditorias
externas, después, resultan mecanismos idóneos en los cuales también debiera existir
una cuota de control ético.
A fin de ilustrarnos en esta materia, resulta necesario abordar un estudio que efectuó
una comisión académica encabezada por el profesor Rafael Blanco en la Universidad
Alberto Hurtado, que da cuenta de diversos aspectos que los señalados defensores
han de tener presente, no obviando esta obligación -por analogía- los Defensores
Penales Privados, quienes en cumplimiento del ejercicio del derecho a la defensa
debieran cumplir con al menos estos cánones. El estudio señala someramente las
siguientes obligaciones para la defensa:
“La esencia del deber profesional, se funda en que el abogado debe tener presente
que es un servidor de la justicia y un colaborador de su administración. Debe mantener
el honor y la dignidad profesional, debiendo hacer presente la conducta moralmente
censurable de jueces y colegas. El abogado debe obrar con honradez y buena fe,
absteniéndose del empleo de recursos y formalidades legales innecesarias y éste es
libre para hacerse cargo de la defensa de un acusado, cualquiera sea su opinión
personal sobre la culpabilidad de aquél. Pero habiéndola aceptado, debe emplear en
ella todos los medios lícitos.
“Entre los abogados debe haber fraternidad que enaltezca la profesión, respetándose
recíprocamente sin dejarse influir por la animadversión de las partes. Se abstendrán
cuidadosamente de expresiones malévolas o injuriosas y de aludir a antecedentes
personales, ideológicos, políticos o de otra naturaleza de sus colegas. Un abogado
debe ser caballeroso con sus colegas y facilitarles la solución de inconvenientes
momentáneos cuando por causas que no le sean imputables estén imposibilitados. No
faltará a su concepto de la decencia y del honor”.
Una lectura serena de las indicadas ideas matrices que inspiran el Código del ramo,
dará a los abogados que ejercen sus funciones como intervinientes en el nuevo
proceso penal, señales claras, potentes y sólidas para orientar su conducta y la de los
colegas en este ámbito. Sin duda alguna existe un silencioso llamado para adecuar el
patrón ético de nuestro Colegio a las nuevas realidades que hoy nos abordan. No
obstante, dicha misión, tantas veces proclamada, aparece hoy por hoy urgente ante el
estatus que la carta fundamental nuevamente le otorga a estas instituciones, teniendo
ahora un rol ético que bien vale repensar en sus potestades y fines.
Pero es necesario reafirmar que no habrá parámetro de conducta eficaz ni regla
suficiente, si no existe un compromiso cultural y profesional en este tema. En
definitiva, la ética va de la mano con los valores y principios que cada familia sustenta
en su núcleo y por ello la esencia de las cosas es crear profesionales que sean ante
todo buenas personas, nobles y serviciales. En definitiva, abogados dignos de tener un
papel preponderante en el nuevo sistema procesal penal, cuya directriz última ha de
ser siempre servir a la sociedad a través de distintos roles que el Estado necesita para
construir justicia.