Selecciona las preguntas sobre las cuales has reflexionado en las experiencias que te han
facilitado definir tu proyecto de vida.
¿Quién soy yo?
¿Cuáles son mis principales fortalezas y debilidades? ¿Qué disfruto hacer? ¿Qué me molesta hacer? ¿Qué habilidades tengo? ¿Cuáles son las cosas que hago mejor? ¿Qué es lo que más valoro en la vida? ¿Qué tienen en común las personas que admiro y quiero imitar en mi vida? ¿Cuáles son mis intereses? ¿Por qué me admiran otras personas? ¿En qué tipo de actividades participo más activamente sin esperar recibir ninguna compensación a cambio (p. ej. actividades educativas, laborales, culturales, recreativas, deportivas, lúdicas, sociales, espirituales, ocupacionales, comunitarias, políticas)? ¿Qué actividades realizo con tanta concentración, que se me pasa el tiempo sin darme cuenta? ¿Qué actividades realizo sin temor a fracasar en el intento? ¿Qué actividades llevo a cabo aunque esté cansada/o? ¿Qué actividades me ayudan a mantenerme con ánimo para seguir viviendo? ¿Qué actividades aparecen en mis fantasías sobre mi vida en el futuro? ¿Cuáles de estas actividades realizo sin pensar cuándo se van a terminar? ¿De qué recursos personales, familiares, comunitarios dispongo para hacer lo que quiero y me propongo en la vida?