DOMINGO 4 DE PASCUA C
La celebración cíe este domingo cuarto de Pascua
centra nuestra atención en Jesucristo como Buen
Pastor. El es el Pastor que nos conoce, que nos guía,
que da su vida por nosotros.El es el centro de nuestra
vida, nos acompaña siempre. Dispongámonos, pues,
a escuchar su palabra y a celebrarla Eucaristía,
momento privilegiado de su presencia en la Iglesia y
en el mundo
ORACIÓN Dios todopoderoso y eterno,* condúcenos
a la asamblea gozosa del cielo, para que la debilidad
del rebaño llegue hasta donde lo ha precedido la
fortaleza del Pastor. Que vive y reina contigo.
Apocalipsis 7,9.l4b-l7 J
Primera lectura. La alegría del mensaje de salvación
aparece en la crónica de los Apóstoles como algo que los
hombres encuentran en la medida que se hacen creyentes,
discípulos de Jesús y se diferencian de los demás al vivir al
estilo que el Maestro lo hizo.
Hechos 13.14.43-52 En aquellos días, Pablo y Bernabé,
desde Perge siguieron hasta Antioquía de Pisidia; el
sábado entraron en la sinagoga y tomaron asiento.
Muchos judíos y prosélitos practicantes se fueron con
Pablo y Bernabé, que siguieron hablando con ellos,
exhortándolos a ser fieles a la gracia de Dios. El sábado
siguiente, casi toda la ciudad acudió a oír la palabra de
Dios. Al ver el gentío, a los judíos les dio mucha envidia y
respondían con insultos a las palabras de Pablo
.Entonces Pablo y Bernabé dijeron sin contemplaciones: -
Teníamos que anunciaros primero a vosotros la palabra
de Dios; pero como la rechazáis y no os consideráis
dignos de la vida eterna, sabed que nos dedicamos a los
gentiles. Así nos lo ha mandado el Señor: «Yo te haré luz
de los gentiles, para que lleves la salvación hasta el
extremo de la tierra».Cuando los gentiles oyeron esto, se
alegraron y alababan la palabra del Señor; y los que
estaban destinados a la vida eterna creyeron. La palabra
del Señor se iba difundiendo por toda la región. Pero los
judíos incitaron a las señoras distinguidas y devotas y a
los . principales de la ciudad, provocaron una persecución
contra Pablo y Bernabé y los expulsaron del territorio.
Ellos sacudieron el polvo de los pies, como protesta
contra la ciudad, y se fueron a Iconio. Los discípulos
quedaron llenos de alegría y de Espíritu Santo.
Salmo responsorial
Somos su pueblo y ovejas de su rebaño
Segunda lectura. El Apocalipsis en forma de figuras y
hechos simbólicos, que el autor contempla en éxtasis- hace
atisbar los designios de Dios en lo que respecta a la píeri*tud
de la salvación que nos ha ofrecido eristo.
... y YO les doy la vida eterna
Mis ovejas
Escuchan
mi voz, y
YO las conozco,
ellas me siguen
y—
Yo, Juan, vi una muchedumbre inmensa, que nadie
podría contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua, de
pie, delante del trono y del Cordero, vestidos con
vestiduras blancas y con palmas en sus manos.
Y uno de los ancianos me dijo:
-Estos son los que vienen de la gran tribulación: han
lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del
Cordero. Por eso están ante el trono de Dios, dándole
culto día y noche en su templo. El que se sienta en el
trono acampará entre ellos.
Ya no pasarán hambre ni sed, no les hará daño el sol ni
el bochorno. Porque el Cordero que está delante del
trono será su pastor, y los conducirá hacia fuentes de
aguas vivas.
Y Dios enjugará las lágrimas de sus ojos.
Evangelio. Tener experiencia interior de Jesús como pastor
nos lleva a reconocer la voz del Maestro dondequiera que
resuene. ¿Quién podrá guiamos sino aquel que nos conoce a
todos y tiene para cada uno palabras de vida eterna?
JUAN 10,27-30
En aquel tiempo, dijo Jesús:
-Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco y ellas me
siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para
siempre y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre,
que me las ha dado, supera a todos y nadie puede
arrebatarlas de la mano de mi Padre. Yo y el Padre
somos uno.
Sigue llamándonos Señor a tu servicio y haz que con tu gracia
seamos valientes y decididos para responder con generosidad a
las necesidades de nuestros hermanos.
Señor Jesús, Tú eres nuestro Buen Pastor. Contigo estamos
seguros de que nada nos falta. Tú nos conduces a fuentes
tranquilas y verdes pastos para reparar nuestras fuerzas, por eso
nos acercamos a ti con la seguridad de que también tú oirás
nuestra voz.
Mira, Señor, a los hombres que más sufren, a las ovejas más
heridas de tu rebaño.
Mira a los hombres que se vuelven como lobos para el rebaño y
hacen sufrir a sus hermanos.
Mira, Señor, a tantas ovejas que no tienen pastor y haz que
puedan tener los pastores que necesitan.
Multiplica, Señor, las vocaciones sacerdotales y religiosas para que
como los buenos pastores te hagan presente entre nosotros y
volvamos a entender que tu vara y tu cayado nos dan seguridad.
Que si tú eres nuestro Pastor nada nos podrá faltar.
Papa Francisco: Jesús dice: «Yo soy el buen pastor. El buen pastor
da su vida por las ovejas». ,
L Esta autopresentación de Jesús no puede ser reducida a una sugestión
emotiva, sin ningún efecto concreto. Jesús sana siendo un pastor que da
wcfa. Dando su vida por nosotros. Jesús le dice a cada uno: «Tu vida es tan
i
valiosa para mí, que para salvarla yo doy todo de mí mismo». Es
precisamente esta ofrenda de vida b que hace que sea el buen pastor por
excelencia, el que sana, el que nos permite vivir una vida - bella y fructífera.
2 La segunda parte de la misma página evangélica nos dice en qué
condiciones puede sananos Jesús, y puede hacer nuestra vida bella y
fecunda: «Yo soy el buen pastor, —dice Jesús— conozco a mis ovejas. las
mías me conocen a mí, como me conoce el Padre y yo conozco al Padre».
Jesús no habla de un conocimiento intelectual, sino de una relación
personal, de predilección, de ternura mutua, un reflejo de la misma relación
íntima de amor entre él y el Padre. Esta es la actitud a través de la cual se
realiza una relación viva y personal con Jesús: dejándonos conocer por él. |
No cerrándonos en nosotros mismos, sino abrimos al Señor, para que él ®
nos conozca. Él está atento a cada uno de nosotros, conoce nuestro
corazón profundamente: conoce nuestras fortalezas y nuestras debilidades,
tos proyectos que hemos logrado y las esperanzas que fueron
decepcionadas. Pero nos acepta tal como somos, nos conduce con amor,
porque de su mano podemos atravesar incluso caminos inescrutables sin
perder el rumbo. Nos acompaña
- 3. Nosotros estamos llamados a conocer a Jesús. Esto implica buscar
un encuentro con él, que despierte el deseo de seguirlo abandonando las
actitudes autonefefendaes para emprender nuevos senderos, indicados por
Cristo mismo y abiertos a vastos horizontes
Las palabras de Jesús sobre el buen Pastor
El Señor es mi pastor constituyen un revulsivo para la sociedad
El Señor es mi pastor, nada me falta: en
individualista del «cada uno a la suya» e
verdes praderas me hace recostar; me
insolidaria del «cada palo aguante su vela». Jesús
conduce hacia fuentes tranquilas y repara
es el buen Pastor, que da la vida; no simplemente
mis fuerzas; me guía por el sendero justo,
se la quita el paso inmisericorde del tiempo,
por el honor de su nombre.
cuando no el odio a todo aquello que suene a
Aunque camine por cañadas oscuras, nada
Evangelio, que de todo hay por estos mundos de
temo, porque tú vas conmigo: tu vara y tu
Dios. Y también el buen Pastor que «conoce» a sus
cayado me sosiegan.
ovejas, es decir, las «ama», porque esto significa
Preparas una mesa ante mí, ~
«conocer» en la Biblia. Supera las relaciones
enfrente de mis enemigos; me unges
anónimas y «anonimizantes» de nuestra sociedad.
la cabeza con perfume, y mi copa
Su mirada no queda limitada por las ovejas que
rebosa.
son de su redil. Va más allá: «Tengo otras
Tu bondad y tu misericordia me
ovejas», es decir, no simplemente «hay». Tienen
Acompañan todos los días de mi vida, y
que ver conmigo y yo con ellas. Nada de lo suyo
habitaré en la casa del Señor por años sin
me es ajeno. Y aspiro a un «solo rebaño y un solo
término.
pastor», a una sola familia donde, eso sí, cada
A muchos, el Señor Los llama al matrimonio... A uno sea reconocido y amado en su singularidad
otros, en cambio, ios llama a seguirlo más de cerca personal e intransferible. Las palabras de Jesús se
en el sacerdocio o en la vida consagrada.
Quéhermoso es saber que Jesús te busca, se fija en ti dirigen, evidentemente, a los pastores de la
y con su voz inconfundible te dice también a ti: comunidad. Y también a sus seguidores. Porque
«sígueme»... Para descubrir y seguir fielmente la ¿hay alguien que puejda poner en duda, sin más, que
forma de vida a la que el Señor os llama a cada uno es «guardián de su hermano»?
es indispensable permanecer en su amor como
amigos. Y ¿cómo se mantiene la amistad si no es con
el trato frecuente, la conversación, el estar juntos y el JORNADA DE LAS VOCACIONES
compartir ilusiones y pesares? PAPA BENEDICTO
XVI