Planta Medicinal Guarani :Jaguarete K´aa - Yerba del Yaguarete
Organo: Higado
Sede del enojo reprimido
Las plantas nos reúnen una vez mas para contarnos secretos que el invierno revela por medio de ellas. La madre naturaleza que es perfecta, habla en esta estación para quien quiera escucharla, a través de la raíz, el agua, el riñón, el sol interno, la depresión, la introspección y los miedos que sobrevienen al desprendimiento del otoño
Nos acercamos al tercer espíritu…a la tercera planta. Con la
Yerba de pollo trabajamos nuestro estomago…nuestro alimento diario….fuimos tomando conciencia de ello y transformando. De esta manera limpiado nuestro pensamiento, nuestro decir y por lo tanto nuestro sentir.
La Cola de Caballo trajo a baldasos la limpia de nuestros
riñones allí donde fuimos alojando los miedos mas cotidianos y antiguos. La toma de esta planta nos enfrento a ellos y hoy podemos saber cuales son, cuales nos ayudan en nuestra vida y cuales ya es tiempo de transformar.
Nuestra nueva planta la Carqueja trabajará con nuestro Higado.
El hígado es el órgano interno más grande. Sus funciones lo convierten en uno de los órganos más importantes y más complejos del organismo. Se encuentra debajo de las costillas de su lado derecho justo bajo el pulmón derecho. El hígado tiene forma de pirámide y se divide en dos lóbulos: el derecho y el izquierdo.
Los lóbulos se subdividen en segmentos. A diferencia de la
mayoría de los demás órganos, el hígado obtiene su suministro de sangre de dos fuentes: la arteria hepática suple al hígado con sangre rica en oxígeno desde el corazón y la vena porta transporta sangre rica en nutrientes desde los intestinos. Tiene la característica de que si le quitamos tres cuartas partes, seguimos vivos y es capaz de reproducirse. Las funciones del hígado son: Descompone y almacena muchos de los nutrientes que su intestino absorbe y que su cuerpo necesita para funcionar. Algunos nutrientes tienen que metabolizarse en el hígado antes de que el resto del cuerpo los use como fuente de energía o para crear y reparar los tejidos del cuerpo. Produce la mayoría de los factores de coagulación que evitan que uno sangre demasiado cuando se corta o se lastima. Segrega bilis a los intestinos para ayudar a absorber nutrientes (especialmente grasas). Filtra y descompone desechos tóxicos en la sangre.
La alteración de una de estas funciones es signo de un
problema hepático. Algunos de ellos son: ABSCESOS, CÁLCULOS BILIARES (PIEDRAS), CIRROSIS, CRISIS HEPÁTICA, HEPATITIS VIRAL, ICTERICIA y TUMORES.
El Higado es el órgano que metaboliza los alimentos , elimina
los excesos de proteínas, grasa y azúcar y purifica la sangre de sus impurezas. Es esencial en la vida.
Es en el Higado donde guardamos la ira y la frustacion. Tambien
allí almacenamos el rencor, la amargura y el enojo. Emociones altamente destructivas que logran bloquear el trabajo del hígado y por lo tanto nos genera mayor irritabilidad y molestias físicas como tensiones musculares en cuello y hombros y dolor de cabeza. Ademas puede generar depresión.
El Higado también esta vinculado con mi comportamiento y
representa la facilidad de adaptación a los acontecimientos y circunstancias de la vida. La suciedad en el higado afecta mi nivel de conexión espiritual.
Limpiar el Higado por medios fisiológicos, naturales o
energéticos nos trae calma y reconexión con nosotros mismos
Los problemas del hígado se manifiestan cuando la persona
hace demasiado, se preocupa por todo lo que sucede a su alrededor en lugar de digerirlo bien, es decir, adaptarse a los acontecimientos.
Tiene miedo de las consecuencias, sobre todo de fallar en algo.
Esta dificultad de adaptación a una situación nueva le hace
sentir mucho enojo y descontento.
Estos problemas también indican una actitud depresiva, aun
cuando sea inconsciente.
La persona afectada por los problemas hepáticos suele ser del
tipo que no se ofende porque se siente indefensa, incompetente ante las ofensas.
Se muestra en desacuerdo con los que se ofenden, sobre todo
con aquellos que pierden el control, porque ella se esfuerza mucho para no demostrar nada.
Siente amargura y tristeza.
Cuando lleva ya mucho tiempo reprimiéndose, en lugar de sufrir
un ataque de enojo y desahogarse, sufre una crisis hepática.
Debido a que el hígado tiene una función vital en la
coordinación de las diferentes funciones del cuerpo humano, un problema en este órgano indica que te estás olvidando de coordinar bien lo que sucede en tu vida. En lugar de adaptarte a los acontecimientos y a las personas, los juzgas, quieres cambiarlos y te bloqueas internamente al poner demasiada atención a lo que ocurre en tu mente. Cada enojo interno es una indicación de que te olvidas de ponerte en el lugar del otro y de que quieres tener razón. Por lo tanto, te sientes ofendido con facilidad. Tu hígado te indica que debes dedicar tiempo a acomodar dentro de ti lo que pasa a tu alrededor antes de sacar conclusiones con demasiada rapidez. También te dice que tienes todo lo necesario para defenderte.
Los dolores de hígado proceden de mi propia actitud.
Mis frustraciones acumuladas, mis odios, mis celos, mi
agresividad contenida son factores activadores de los problemas del hígado.
Estos sentimientos esconden miedos que no pueden expresarse
de otro modo.
Tengo tendencia a criticar y juzgar a los demás con facilidad.
Me quejo constantemente.
Resisto a alguien o a algo.
Vivo mucho disgusto.
Acepto difícilmente tales como son.
La alegría de vivir es frecuentemente inexistente porque tengo
envidia de los demás, lo cual me perturba y me pone triste. Sin embargo, hasta qué punto estoy listo para hacer esfuerzos, tanto en el plano material como en mi caminar espiritual? Aún no he comprendido que lo que yo reprocho al otro sólo es el reflejo de mí – mismo. Sólo es mi espejo. Me quejo constantemente y pido a los demás que cambien. ¿Dónde está mi buena voluntad? ¿Cuál es el esfuerzo por mi parte?
También carezco de alegría de vivir, simplicidad.
Podré desarrollar un cáncer de hígado si todas las emociones
que me son nefastas me “agobian” desde un buen tiempo. Frecuentemente, resulta de un conflicto con relación a la familia o al dinero, especialmente cuando tengo miedo de carecer de algo.
Es tiempo que tome consciencia que debo aceptarme tal como
soy y aprender a amarme más. Ser capaz de amor y comprensión hacia mí abre la vía a mi comprensión y al amor de los demás. Recobro la alegría de vivir. CÁLCULOS BILIARES O LITIASIS BILIAR (Piedras en….)
El cálculo biliar es generalmente uno o varios depósitos de
colesterol o de cal. En el lenguaje popular, se dice a veces “tener piedras en el hígado”. Viene de la bilis. Este líquido secretado por el hígado sirve a la digestión de los alimentos. La bilis pasa por la vesícula biliar y el cálculo formado se vuelve a encontrar en esta misma vesícula (un solo cálculo gordo o varios pequeños).
La bilis es ligeramente amarga y viscosa y manifiesta la
amargura interior, la pena, la agresividad, la insensibilidad, el rencor, la frustración o el disgusto que tengo y ciento hacía mí – mismo o hacia una o varias personas.
Los cálculos representan un dolor más profundo que los meros
síntomas en el nivel del bazo, del hígado o de la vesícula biliar.
Es energía cristalizada, sentimientos y pensamientos muy
duros, amargura, envidia e incluso celos solidificados bajo forma de guijarros, que estuvieron mantenidos y acumulados a lo largo de los años.
Los cálculos pueden estar “ocultos” desde hace tiempo, pero
una repentina emoción y violenta puede hacerlos brotar “conscientemente”, con dolores intensos.
Frecuentemente, estoy decidido a ir hacia delante, a
precipitarme con fuerza, a abrir puertas pero me para algo que me limita, me ahoga y mis acciones se realizan frecuentemente por miedo.
Entonces, estoy frustrado de la vida, manifiesto actitudes
“amargas” e irritantes con respecto a la gente, no consigo decidirme porque carezco de valor y mis fuerzas interiores están mal canalizadas.
No tengo dominio de mí – mismo. Es el motivo por el cual tengo
cálculos biliares.
¿Qué es lo que influencia mi vida?
¿Soy demasiado orgulloso? Por más que los cálculos son la expresión de una vida endurecida, debo aceptar liberarme del pasado y tener una actitud y pensamientos más suaves, una apertura diferente hacía la vida soltando el pasado, los sentimientos lejanos y las viejas emociones amargas, permitiéndome así el amor verdadero. El proceso de adaptación al nivel del corazón me ayudará a ver más claro en mi vida y a mejor descubrir el camino que mejorará mi situación. CIRROSIS – HÍGADO La cirrosis es una crisis global de las funciones fisiológicas del hígado. El alcoholismo es el factor principal (en promedio, 90% en el hombre y 75% en la mujer). Al principio, los trastornos son de orden digestivo (pérdida del apetito, digestión lenta y pesada, ardor gástrico) y de orden general (fatiga, adelgazamiento). Después los problemas se vuelven más graves y de orden vascular.
Sin embargo, como la cirrosis es la enfermedad hepática más
importante, debe tenerse en cuenta que quien la sufre ha llegado a un estado de urgencia y debe corregirse.
Su cuerpo le habla de una manera muy clara. Le dice que ha
llegado a sus límites físico, emocional y mental, y que sólo él puede remediarlo.
Su manera de ver la vida está a punto de destruirlo.
Debe dejar de rebelarse y de creer que la vida es muy injusta.
La cirrosis es una enfermedad inflamatoria del hígado causada,
entre otras cosas, por el consumo abusivo de alcohol.
La CIRROSIS se encuentra en el que se siente empujado por la
vida, por acontecimientos o ciertas situaciones que le obligan a avanzar. Sintiéndome empujado contra mi voluntad, resisto y me agarro a mis opiniones.
Vivo con rencor y agresividad.
Esta enfermedad es el reflejo de mi ira, mi resentimiento frente
a la vida y a lo que me sucede.
Estoy lleno de una agresividad interior latente y me culpo
constantemente porque tengo la convicción de haber “equivocado” mi vida.
Paso mi tiempo culpándome y criticando a los demás.
Me endurezco tanto que ya no consigo ver la luz al final del
túnel.
Para ayudarme a reanudar con la vida, acepto vivir el instante
presente y ver todo lo bueno que me está sucediendo “ahora”. Abro mi corazón y presto atención a cada gesto, en cada acción aquí y ahora y aprendo a no ser tampoco un juez severo. Siendo más tolerante conmigo mismo, lo seré también hacía los demás, lo cual me traerá mucho más armonía y felicidad en mi vida. Compruebo mis intenciones verdaderas, me mantengo abierto al amor y me perdono en lo que soy. HEPATITIS – HÍGADO
La hepatitis es una afección inflamatoria del hígado provocada
por un agente infeccioso, por algunos compuestos químicos o por un virus. Ver problemas en el hígado. Para la hepatitis infecciosa o epidémica, ver también la explicación metafísica de epidemia.
La hepatitis es una infección del hígado causada o bien por un
virus, por bacterias, por el alcohol o por medicamentos, y afecta totalmente el cuerpo.
Los síntomas son la debilidad, la ictericia, la pérdida de apetito,
las náuseas, la fiebre y el malestar abdominal.
El hígado es el “dador de vida”, limpiando la sangre de sus
venenos y excesos, y conservando nuestro estado emocional (la sangre) en un justo equilibrio. El hígado es el lugar en donde puedo acumular emociones intoxicantes y excesivo odio.
Es la sede de la ira.
Las palabras o enfermedades acabando por “itis”, como
hepatitis, indican irritación, ira.
La hepatitis puede estar vinculada con mis relaciones
personales o con una situación difícil.
Este conjunto de emociones negativas trae debilidad y
desesperación y causa ira, culpabilidad y conflictos de prioridades.
Cuando “me quemo la sangre” por nada, esto me lleva a vivir
mucha ira, rencor, rabia e incluso odio que puede llevar a la violencia contra uno – mismo, o contra los demás.
La hepatitis viral A tiene su origen en un rencor que puedo tener
frente al mismo alimento o frente a un problema de connotación alimenticia. La hepatitis viral B manifiesta un rencor vivido con algo o alguien que me ha sido impuesto. Es como si hubiese estado proyectado dentro de una situación que rechazaba. Por ejemplo, me pueden haber obligado a participar a un concurso de danza. La hepatitis viral C se produce después de un gran rencor en relación con lo desconocido. Por ejemplo, ¿Quiénes son mis padres? ¿Dónde nací?
Puedo sentir mucha resistencia frente a nuevas situaciones en
mi vida que me llevan a aportar cambios.
Puedo desear engancharme a mis prejuicios y a mis ideas
preconcebidas.
Aprovecho el tiempo de reposo que debo tomar para hacer el
balance sobre mi vida. Me libero de los prejuicios, iras que entretenía en mí. ICTERICIA – HÍGADO
La ictericia se caracteriza por un aumento en la cantidad de
bilirrubina, el pigmento que produce la coloración amarilla de las mucosas. A menudo se acompaña de una hipertrofia del bazo y de anemia. Por lo tanto, sugiero que veas la definición de problemas del hígado, problemas del bazo y anemia.
La ictericia está causada:
– Por un exceso de bilirrubina, sub – producto del hígado que
descompone las viejas células sanguíneas rojas.
– Por el exceso de bilis que entra en el flujo sanguíneo.
El resultado es una coloración amarilla de la piel y de la “parte
blanca del ojo”.
Esto se relaciona con la limpieza del sistema sanguíneo, y tengo
dificultad en “limpiar” mis emociones.
Siento emociones amargas muy intensas de envidia, disgusto,
frustración, hasta el punto de “tener una ictericia de esta situación” y me “vuelvo amarillo”.
Vivo mucho rencor.
Me vuelvo tan cortante y excesivo en mis ideas y mis opiniones
que me agarro a ellas, creando un desequilibrio en mi interior.
Debo aprender a abrirme a la gente que me rodea porque tengo
mucho que aprender de ellos.
El estado emocional y la claridad mental de una persona,
dependen de la libre circulación de la energía y la sangre. El hígado controla ambos factores, y por tanto la estabilización del estado emocional. Un hígado sano proporciona juicio claro y decisiones firmes; la acción que genera es rápida y consecuente. La emoción positiva de un hígado sano es el idealismo.
El bloqueo de la energía del hígado, crea un estado depresivo.
La tendencia psíquica negativa es la cólera, que se produce como reacción a la depresión y es acompañada por crisis de irritabilidad, mal humor y violencia. Las crisis de cólera son normalmente reprimidas hasta el momento en el cual se liberan, desembocando en verdaderas erupciones volcánicas. Esta emoción se considera la más dañina, pues condiciona todas las funciones del sistema energético. Cefaleas y migrañas, consideradas enfermedades generadas por el hígado, aparecen cuando este órgano se siente afectado y no llega a desempeñar su función de empujar y distribuir la energía hacia la cabeza y las extremidades: entonces la cabeza se congestiona y se calienta, al mismo tiempo que las manos y los pies se enfrían.
Síntomas físicos como: dificultades para asimilar alimentos,
inapetencia, dolores de cabeza luego de comer, boca pastosa, lengua blancuzca o amarillenta, sabor amargo en la boca, hinchazón de vientre, acumulación de gases, nauseas, vértigo, piel amarillenta, cutis graso, granos, catarro, estreñimiento, heces en forma de confites o poco consistentes y de color amarillento, insomnio en las primeras horas de la noche y dificultades para despertar por la mañana, picazón de piel, caspa, caída del cabello, migrañas, cefaleas, dolor en la nuca, síndrome premenstrual (catabolismo hormonal), fatiga muscular, edemas, calambres, mala circulación venosa, coloración verdosa del rostro y los ojos, fobia a la luz, dificultad para permanecer al viento, problemas de visión, afecciones oculares y precoz pérdida de la vista, son causados por un hígado cansado y sobrecargado. Una dieta que mejora la condición hepática, incrementa la capacidad visual. Dos líneas verticales en el entrecejo indican un hígado agotado.
Los desequilibrios biliares se asocian con rigidez de
pensamiento, cólera, excesiva preocupación por los detalles, frustraciones y miedo hacia lo desconocido. Decisiones y acciones quedan paralizadas.
Los síntomas físicos son: dolores de caderas, migrañas
(localizadas sobre todo en la sien derecha), boca amarga por la mañana, vómitos ácidos, tensiones en el hombro derecho, dolores en las articulaciones (rodillas en particular), cuello rígido, ansiedad e insomnio. El color de la piel suele ser pálido o amarillento, tonalidad que también se evidencia en los ojos.
El Higado descompone, almacena y reconstruye la materia. Si la
vida de una persona se desmorona, y no puede llevar a cabo la tarea de reconstruir, entonces se acumulan sensaciones de sobrecarga, sobre-exigido, lo cual puede generar odio y resentimiento. Este órgano nos indica nuestra capacidad para rehacernos a nosotros mismos, reconstruir y regenerarnos, este proceso de reciclaje o transformación necesita de toda la flexibilidad, aceptación a cada circunstancia de la vida, recordemos que nada es estático que todo está en constante movimiento y en ese ir y venir nos vamos regenerando a cada instante. También está relacionado con las necesidades básicas (almacenamiento: alimentos), cuando tenemos carencias económicas y estamos sobrecargados por las circunstancias de la vida también puede verse afectado. El hígado tiene que ver con el hambre. Si tomamos el mapa del hambre en el mundo y el mapa del cáncer de hígado, es el mismo, dado que el gen del carcinoma embrionario ha sido encontrado en África, porque allí es muy frecuente. Si tengo mucho para comer, el hígado funciona con normalidad. Si no tengo mucho, el hígado tiene que trabajar mucho para aprovechar todo lo que es posible. Por eso hay nódulos o cáncer en el hígado cuando hay historias de hambre. Porque el cáncer es:
“Necesito producir mucho hígado para absorber el máximo de
alimento”.
Por tanto vamos a buscar historias de hambrunas, como por
ejemplo, durante las guerras. Durante la guerra no hay que comer, hay el racionamiento, pero muchas veces es simbólico, estamos en la familia normalmente y hay un problema de paro. Y si hay menos dinero, vamos a comer menos. Si este conflicto supera los límites de tolerancia, aparecerá el síntoma.
Hígado es igual a hambre y a dinero, porque es gracias al dinero
que podemos comprar comida.
Hemos visto un primer conflicto, que es el hambre, las
hambrunas. Segundo, la falta de dinero. Tercer conflicto, es la familia. Hay una expresión, cuando hay una herencia en la familia y la gente pelea por ella, se dice: “me comen el hígado”, porque hay mucha sangre. El hígado también tiene función de limpiar, de filtrar. Si alguien siente que le están intoxicando por medicación que debe tomar, o por contacto con personas de carácter pesimistas o negativa (tóxicas) etc…
Necesito fabricar mucho hígado para absorber el máximo de
alimento o para poder filtrar la toxicidad del ambiente. La Caqueja es un espíritu que trae el don de la comunicación porque estimula al hígado haciendolo generar mas bilis y de ese modo nos incita a comunicar, a mover todo lo guardado para poder expresarlo y asi liberar la energía que se enquista como enojo o rabia. Su sabor amargo nos muestra nuestra propia sombra, esos sentimientos y emociones que están pero no vemos.
La Carqueja limpia el Higado y la Vesicula, llevando los
sedimentos y las piedras que allí se acumulan. Esta Limpieza limpia también nuestra mente y nos permite pensar mas claro.
Provoca un ascenso en el nivel de conciencia desde el momento
que nos ayuda a ver como nuestro, aquello que creiamos ajeno.
Esta bella planta es muy recomendada para los diabéticos ya
que disminuye el azúcar en sangre. Ayuda a nuestra digestión, es diurética y cura los desequilibrios de las vías urinarias.
Es altamente afrodisiaca, actua contra la impotencia en el
hombre y aumenta el deseo sexual.
Es también usada en tratamientos de las afecciones
respiratorias.
Es antiparasitaria.
En uso externo es usada como cicatrizante de heridas, ulceras
e inflamaciones de todo tipo.
Tambien es usada en buches para inflamaciones de boca y
garganta.
Su sabor amargo activa la energía Yang. Si este sabor nos es
desagradable es un síntoma de intoxicación si por el contrario nos resulta dulce es signo de buena salud. Observacion y Evaluacion de las Heces
Las heces son el producto final de la digestión y constan de
componentes alimentarios, jugos digestivos y células de la mucosa intestinal; aproximadamente la mitad son bacterias. En el análisis de heces, el médico evalúa las deposiciones en cuanto a su naturaleza (consistencia), color y peso. La prueba de heces puede orientarse hacia bacterias como la salmonela, shigella, yersinia, campylobacter y otras. Las muestras repetidas de heces, generalmente en tres días diferentes, aumentan la tasa de detección de los patógenos – Consistencia regular. – Pasa fácilmente. – Color marrón claro. – Olor natural, casi “terroso”, no de putrefacción. – Flota, pero tampoco requiere de varios intentos para sumergirse. °Hay heces que te dejan ver más de lo deseado…es decir, te permiten ver trozos de comida que no ha sido digerida. Esto es una señal de que existen intolerancias alimentarias, algún tipo de desorden inflamatorio en el intestino y posible falta de enzimas digestivas por congestión hepática y/o metabolismo lento (¿qué tal está tu tiroides?). ° Otra representa el intento desesperado del cuerpo por detoxificar. Incluso si tienes estreñimiento o deshidratación, tu cuerpo sacará agua de donde pueda para deshacerse de las toxinas que han sido ingeridas y pueden afectar negativamente el cuerpo. Si fluctúas entre diarrea y estreñimiento una vez al mes o más, es hora de reevaluar tu dieta. ° Otras se parecen a los excrementos de oveja o de conejo. Indica un estado alterado del intestino debido a problemas de peristalsis en el colon y deshidratación. Otra es más difícil de expulsar. Con frecuencia, este tipo es causado por comer demasiados alimentos deshidratados y procesados, especialmente barritas de proteínas y cereales. ° Otra es de color más claro (debido a su alto contenido en grasas no digeridas) y flota muy bien, por lo que puede requerir de varias cisternas para emprender su viaje satisfactoriamente. La presencia de grasa puede indicar una deficiencia de bilis, que ayuda a emulsionar las grasas y digerirlas. °Otra es muy mal oliente, aparece normalmente tras haber sido expuesto a toxinas, comida procesada y/o fármacos (especialmente tras sufrir un procedimiento quirúrgico con anestesia).
Tambien podemos ver sus colores:
Rojo
La causa más común de heces rojas brillantes en los adultos es
el sangrado de las hemorroides. En los lactantes la causa más común es una fisura anal o desgarro en el tejido que rodea el ano. Otras causas de sangre en las heces pueden ser más graves, tales como:
Infecciones de los intestinos
Enfermedad inflamatoria intestinal (enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa) Hemorragia diverticular Tumores Malformaciones arteriovenosas (comunicaciones anormales entre arterias y venas en la pared del intestino que se rompen). El sangrado abundante de una úlcera en el esófago. El estómago o el duodeno, también puede causar que las heces sean rojas en lugar de negras si no ha habido suficiente tiempo para que los glóbulos rojos sean digeridos. El colorante rojo de alimentos y la remolacha también pueden dar un tono rojizo al evacuar y el color rojo-anaranjado, se observa en personas de hábitos esencialmente carnívoros.
Amarillo
Hay una variedad de razones de porqué las heces serán
amarillas, y hay una variedad que incluso es grasosa y
maloliente. Ésta última, puede ser debido a la incapacidad del
intestino para digerir y absorber la grasa debido a
enfermedades del revestimiento intestinal (como en la
enfermedad celíaca y fibrosis quística), porque el páncreas es
incapaz de fabricar enzimas digestivas adecuadas, debido a
enfermedades como la pancreatitis crónica o el cáncer de
páncreas que bloquea el conducto pancreático, o no hay
suficiente bilis que entregar al intestino. Lo amarillo y grasoso
con olor fétido, es debido a la grasa no digerida. Hay un color
amarillo limón que también es frecuente en los vegetarianos
estrictos.
Verde biliar
Suele verse en la segunda sesión al efectuarse la limpieza del
ángulo hepático del colon en pacientes con antecedentes de enfermedad hepática y en pacientes que toman muchos medicamentos de forma crónica. El color verde es un color cambiante muy común. También, es debido al pigmento de la bilis cuando hay diarrea, ya que ésta, mueve los alimentos demasiado rápidamente a través del intestino y es así que el producto químico no se puede romper. El color verde puede deberse a ciertos alimentos como verduras verdes, verduras o colorante verde.
Negro
Si no ha habido ingestión de tintas o sangres animales,
debemos pensar en la posibilidad de que exista un problema de pérdida hemática en algún tramo del tubo digestivo alto.
Las heces negras, también son un síntoma preocupante, porque
puede ser debido a una gran cantidad de sangrado en el tracto gastrointestinal, la mayoría de las veces desde el tracto GI superior, incluyendo el esófago, el estómago y el duodeno. Los glóbulos rojos se descomponen por las enzimas digestivas en el intestino y vuelven a las heces de color negro. Tienden a ser alquitranadas (pegajosas), y olor fétido. Esto puede ser una emergencia médica. Las heces negras alquitranadas no deben ser ignoradas. La sangre de hemorragias nasales o de procedimientos dentales o lesiones en la boca, pueden ser tragadas y pueden ser la causa de heces negras, pero la cantidad de sangrado por lo general no es lo suficientemente sustancial para producirlas.
Otros: además de la tinta de chipirones o las morcillas de
sangre, nos puede despistar la ingestión de algunas verduras, (espinacas, verde), remolacha de mesa (rojo), etc.
Heces claras de color blanco o arcilla
Las de color blanco o arcilla, se observan a menudo con
enfermedades del hígado o conductos biliares. También puede ser causada por el cáncer de páncreas que bloquea los conductos biliares. La falta de bilis hace que pierdan su color marrón y hace que parezcan pálida.
Forma de las heces y su posible significado
Mucosa en las heces
La mucosa en las heces puede ser normal y puede cubrir
segmentos de heces formadas. Sin embargo, también puede ocurrir en personas con enfermedad inflamatoria intestinal o cáncer. La mucosa que también se asocia con sangre y / o dolor abdominal, no debe ser ignorada y requiere atención médica. Las personas con síndrome del intestino irritable (IBS) también pueden tener mucosas.
Heces que flotan
La mayoría de las heces flotan porque contiene una cantidad excesiva de gas. Es normal y tiene poco significado. Los cambios en la dieta pueden llevar a que éstas floten, pero como un síntoma aislado, no hay que tomar medidas, y a menudo se resuelve espontáneamente. Las heces no flotan debido a una mayor cantidad de grasa. La grasa causa gotas de aceite en el inodoro y se puede ver claramente.
Cualquier condición que cause mayores cantidades de gas
formándose en los intestinos, teóricamente puede conducir a heces flotantes, especialmente en condiciones donde hay mala absorción de nutrientes como con la intolerancia a la lactosa, enfermedad celíaca, fibrosis quística y síndrome de intestino corto.