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ep Bagonpo:Sen A. (2010): “Adam Smith and the contemporary world”,
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Adam Smith y el mundo contemporaneo.
Amartya Sen
Traduccién al castellano: Ratt Meléndez Acufia**, Especial para Raz6n Publica.
‘Amartya Sen es T. W. Lamont University professor y profesor de economia y filosofia en
la Universidad de Harvard. Ha publicado extensamente en diversas dreas de filosofia y
economia y sus contribuciones @ la economia fueron reconocidas en 1988 con el Premio
Nobel. Sus publicaciones mas recientes incluyen La idea de justicia (Allen Lane, 2008) y la
Introduccién a una nueva edicion de La teorfa de los sentimientos morales de Adam Smith
(a ser publicada en 2010).
Resumen: En este articulo se argumenta que muchas de las ideas de Adam Smith,
particularmente aquellas de su Teorfa de los sentimientos morales, tienen una pertinencia
para el pensamiento contemporaneo sobre economia y ética, que se ha subvalorado en
nuestros dias. En economia, por ejemplo, Smith se interesé no solamente por la
suficiencia de! interés propio en el momento del intercambio, sino también por las
motivaciones morales més amplias y las instituciones requeridas para sostener la
actividad econémica en general. En la ética, el concepto de Smith de un espectador
imparcial que es capaz de considerar nuestra situacién desde una distancia critica, tiene
mucho que aportar a una comprensién més completa de las reclamaciones de justicia,
particularmente a través de una comprensién de la imparcialidad como algo que va mas
alla de los inteteses y preocupaciones de un grupo contractual local. La aproximacion de
Smith a la evaluacién, que es ablerta, centrada en la realizacién y comparativa, contrasta
con lo que yo llamo "el institucionalismo trascendental’, popular en la filosoffa
contempordnea y asociado particularmente con la obra de John Rawls.
Palabras clave: sentimientos morales, Adam Smith, prudencia, interés propio, equidad,
justicia, John Rawls,
Clasifi
acién JEL: A13, B12, B31, D63, O10
Es un gran privilegio para mi unirme a otros aqui, en el lugar de accién de Adam Smith en
la Universidad de Glasgow, para celebrar un libro profundamente importante publicado por
vez primera hace 250 afios, La influencia de La feorfa de Jos sentimientos morales (1759)
en filosofia, poltica, sociologta y economia a lo largo de los titimos siglos ha sido bastante
notable, Tendré un poco que decir acerca de la naturaleza de esta influencia, pero mi
énfasis principal en esta conferencia recae sobre la pertinencia contemporanea de los
is de Smith - expuestos hace no menos de un cuarto de milenio.
pensamientos y anal
Mientras que el impacto de la Riqueza de las naciones (176) de Smith es reconocide muy
‘ampliamente, la pertinencia de muy largo alcance de las ideas de su Teorla de lossentimientos morales se pasa por alto frecuentemente en las discusiones actuales. Esta
negligencia hace que sea urgente, asi como importante, interesarse por las contribuciones
de Smith, De qué manera las contribuciones de Smith son de pertinencia
contemporénea? La pregunta es dificil de responder, principaimente porque hay muchas
formas en las que las ideas de Smith tienen intuiciones que ofrecer al mundo de hoy. Hay
na gran cantidad de alternativas que fueron propuestas por Smith, que no han sido aun
completamente asumidas, a pesar de la frecuencia con la que Smith ha sido citado en la
literatura a lo largo de los ditimos dos siglos y més. La importancia de esas alternativas
propuestas es el principal tema de esta conferencia.
La contribuci6n especifica de Adam Smith que es mas claramente celebrada hoy en dia -y
ciertamente no se la ha desdefiado - es la manera en que él ayudé a reconfigurar la
disciplina de la economia, A Smith cominmente se lo acepta como "el padre de la
economia modema'’ y se reconoce ampliamente que é! ha contribuido mas que casi nadie
al surgimiento de Ia disciplina cientifica de la economia. Soy, claro esta, consciente de que
hablar de la "disciplina cientifica® de a economia puede parecer un poco fuera de lugar en
estos momentos, dada la manera como la profesién va andando ahora mismo, '‘Cienoi
de hecho, no es precisamente la primera palabra que nos viene a la cabeza dada la
manera en que los economistas se han enredado anticipando la gigantesca crisis en que
hoy estamos atrapados y averiguando cémo podemos rescatar répidamente al muy
arruinado mundo econémico. Este nuevo escepticismo se alimenta de las viejas dudas
sobre la posibilidad de tener una "ciencia llamada "ciencia social". La economia o la
sociologia pueden ser materias dignas de especulacién y reflexién, pero pueden ellas
verdaderamente ser consideradas como parte de la disciplina de la ciencia? Es dificil no
recordar el consejo de W. H. Auden (1947) al aspirante a académico: No te sentaras con
estadisticos ni perpetrarés una ciencia social. Smith definitvamente perpetré una elencia
social - de hecho mas de una ciencia social. Y con seguridad, a partir de su obra
conocemos muchas cosas sobre las ciencias sociales en general - y sobre la economia y
Ja economia de mercado en particular -, que estaban lejos de ser claras antes y que siguen
siendo de gran valor hoy en dia.
La deuda con Smith es reconocida generosamente en los eserites econémicos
contempordneos, pero desafortunadamente algunas de sus ideas centrales no son muy
bien comprendidas en muchas de las exposiciones de sus presuntos admiradores, quienes
quieren ver a Smith solamente como el gurti de la economia de mercado: un hombre de
una sola idea, propagando unicamente la excelencia y auto-suficiencia del mercado. He
tenido ta ocasién, en un reciente ensayo en elNew York Review of Books, de quejarme de
que la popularidad de citar a Smith parece exceder en mucho la de /eerfo (Sen 20092). La‘
condensacién de Smith en la forma de una capsula de una sola idea, esta, por supuesto,
muy lejos de lo que Smith de hecho dijo. Aun cuando las investigaciones pioneras de
si
de mercado, ellas también revelaron el apoyo que los mercados necesitan de otras
instituciones para su eficacia y viabilidad. El identificé por qué los mercados pueden
necesitar restriccién, coreccién y suplemento a través de otras instituciones, para prevenit
la inestabilidad, Ia inequidad y la pobreza
‘explicaron por qué (y especialmente cémo) funcionaba el dinamismo de la economia
2
Uno de los puntos més sutiles de Smith, que parece haber sido ampliamente ignorado, es
su advertencia sobre la imposibilidad de pensar en la pobreza sin entrar, al mismo tiempo,
en el tema de la inequidad. Para cada persona, el ingreso y los recursos requeridos para
lograr los mismos funcionamientos minimos y para tener las mismas capacidades, siguen
creciendo con el progreso global de una economia y con el incremento de los ingresos de
otras personas. Por ejemplo, Smith observé que el ser capaz de "aparecer en publico sin
vergienza" puede requerir estandares mas altos de vestimenta y de otros consumos
visibles en una sociedad rica que en una pobre. Lo mismo aplica para los recursos
personales que se necesitan para participar en la vida de la comunidad y, en muchos
contextos, incluso para satisfacer los requerimientos elementales de auto-respelo. La
extensa literatura modema sobre la sociologia de la "carencia relativa" desarrolla, en lo
esencial, un punto que identificé Smith en la Riqueza de las nacionesf1]. Esto tiene
implicaciones importantes para las politicas de lucha contra la pobreza y, ciertamente, para
evaluar el proceso de desarrollo econémico. Una tendencia que se vuelve cada vez mas
comin en fa economia publica - decir que deberiamos concentramos en acabar la
pobreza, mientras que la inequidad es una cuestién muy diferente - es una posicién
Inviable debido a buenas razones Smithianas, y este es un reconocimiento de cierta
importancia para los debates actuales sobre politicas a seguir.
Acerca de un tipo diferente de cuestién, es sorprendente lo penetrante que fue Smith al
identificar las influencias destructivas de aquellos que él llamé "prodigals and
projectors (derrochadores y proyectistas)". Tal andlisis es, de hecho, profundamente
pertinente hoy en dia para la comprensién de lo que acaba de pasar en el mundo
financiero. La fe implicita en la sabiduria de la economia de mercado, que fue responsable
en buena medida de la supresi6n de las regulaciones establecidas en los Estados Unidos,
tendié a no tener en cuenta [as actividades de los derrochadores y proyectistas, de una
forma que hubiera dejado aténito al exponente pionero de la justificacién de la economia
de mercado. Es interesante anotar en este contexto que Jeremy Bentham le escribié a
‘Smith una larga carta cuestionando esta parte de su andlisis y objetando, en particular, las
observaciones de Smith acerca de los llamados "derrochadores y proyectistas" (Bentham1843a). Bentham arguyé, entre otros de sus puntos, que aquellos que Smith llamaba
“proyectistas” fueron también los innovadores y ploneros del progreso econémico, De
hecho, Bentham no logré persuadir a Smith de que cambiara su manera de pensar sobre
esta acusacién, a pesar de que Bentham siguié teniendo la esperanza de hacerlo, y en
una ocasién hasta se convencié a si mismo, con poca evidencia, de que los puntos de
vista de Smith sobre esto habian liegado a coincidir con los suyos(2]. Smith conocia muy
bien la distincién entre innovar y proyectar, y dio pocas muestras de cambiar su opinién
sobre este asunto. Ahora, después de mas de dos siglos, la distincién sigue siendo
tristemente relevante cuando tratamos de comprender la naturaleza y las causas de la
crisis que ha golpeado el mundo de las finanzas.
3
‘Smith no considers al puro mecanismo del mercado como un creador auto-suficiente de
excelencia, Tampoco concibié la motivacién de ganancia como si fuese fodo Io que se
necesitara. La importancia de motivaciones diferentes a la busqueda del provecho propio,
que van més allé incluso que la motivacién mas refinada que Smith llamaba "prudencia",
Yue esbozada por primera vez por Smith, con mucha fuerza y claridad, en la Teoria de los
sentimientos morals. Hay aqui, en realidad, dos tesis diferentes. La primera es
epistemolégica, acerca del hecho de que los seres humanos no estén invariablemente
Quiados solamente por el provecho propio o incluso por la prudencia, La segunda es de la
razon practica, e involucra la afirmacion de que hay buenas razones éticas y practicas para
motives inspiradores diferentes a los que son egolstas - ya sea en una forma cruda 0
refinada. La segunda tesis es una de las mas fuertes preocupaciones en las actuales
discusiones sobre la debacle que acabamos de vivir. Ella quiza encuentra su mas vigorosa
expresién en una parte de La teorfa de los sentimientos morales, en ia que Smith
argumenta que mientras que la "prudencia’ es "de todas las virudes, aquella que es més
til para e! individuo [..] la humanidad, la justicia, la generosidad y el espiritu publico, son
Jas cualidades mas titles para los otros” (Smith 1975 [1790], 189-190). La naturaleza de la
crisis econémica actual ilustra muy claramente la necasidad de altemativas al egoismo no
mitigado e irrestricto, para poder tener una sociedad decente: incluso John McCain, el
candidato republicano a la presidencia de los Estados Unidos, se quej6 constantemente de
“la avaricia de Wall Street" en los discursos de su campafia en el verano de 2008. En
efecto, en afios recientes ha surgido con fuerza una gran cantidad de evidencia en esa
direccién, que se suma a lo que ya sablamos a partir de estudios pasados sobre los
fracasos de la estrechez motivacional. A peser de la frecuente discusién de Smith acerca
de la importancia de motivaciones diferentes al interés propio, de alguna manera él ha
generado la reputacion de ser un defensor de la importancia nica del suto-interés para
todos los seres humanos. Por ejemplo, en dos articulos bien conocidos y vehementementeargumentados, el famoso economista de Chicago George Stigler ha presentado su "teoria
del interés propio" (incluyendo la creencia en que "el interés propio domina a la mayoria de
los hombres") como "siguiendo iineas Smithianas"[3]. Stigler no estaba siendo
idiosinerético en este diagnéstico - ésta es, de hecho, la vision estandar de Smith que ha
sido fuertemente promovida por muchos autores, quienes constantemente invocan a Smith
en defensa de su concepeisn de la sociedad. Muchos economistas estuvieron - y algunos
todavia estan - evidentemente fascinados con algo que se ha llegado a llamar "teorfa de la
eleccién racional’, en la que la racionalidad es identificada con el perseguir
inteligentemente el interés propio, Més atin, siguiendo esta moda en la economia
modema, una generacién entera de analistas politicos de la eleccién racional y de
expertos en lo que se llama “leyes y economia" han venido practicando alegremente este
mismo estrecho arte. Y han venido citando a Adam Smith como presunto apoyo para su
limitada y simplista teorfa de la racionalidad humana, Mientras que algunos hombres han
nacido pequefios y otros han logrado la pequefiez, es claro que a Adam Smith se le ha
impuesto forzadamente mucha pequefiez|4].
Una razén para la confusién interpretativa es la tendencia a no distinguir bien entre la
cuestién de la racionalidad y del caracter adecuado del interés propio como motivacién y
tuna cuestién mucho més estrecha: {Qué motivacién se necesita para explicar por qué las
personas buscan el intercambio en una economia de mercado? Smith argument6
célebremente que para explicar la motivacién para el intercambio econémico en el
mercado, no tenemos que recutrir a ningtin objetivo diferente al de perseguir el interés
propio, En el pasaje mas famoso y mas ampliamente citado de su Riqueza de las
Naciones, Smith escribié:
No es gracias a la benevolencia del camicero, el cervecero 0 el panadero que esperamos
nuestra cena, sino gracias a que ellos consideran su propio interés. Lidiamos, nosotros
mismos, no con su humanidad sino con su amor propio (Smith 1976 [1789], 26-27).
El camicero, el cervecero y el panadero quieren obtener nuestro dinero a cambio de la
came, la cerveza y el pan que hacen, y nosotros - los consumidores - queremos su came,
su cerveza y su pan, y estamos dispuestos a pagar por ellos con nuestro dinero. El
intercambio nos beneficia a todos y no tenemos que ser altruistas rabiosos para buscar tal
intercambio. Este es un muy buen punto acerca de la motivacién para el comercio, pero no
es una afirmacién acerca de la adecuacién del egoismo para el éxito econér
general. Desafortunadamente, en algunas escuelas de economia la lectura de Smith no
en
parece ir mucho més allé de estas pocas lineas, a pesar de que la discusién de Smith aqui
esta ditigida solamente a un punto muy especifico, a saber, el intercambio (y no la
distribucién o la producci6n), y, en particular, la motivacién que subyace al intercambio (y
no lo que hace que sean sostenibles los intercambios normales, como la conflanza y la femutuas). En el resto de los escritos de Smith hay extensas discusiones sobre el papel de
otras motivaciones que influyen en la accién y el comportamiento humanos, Por ejemplo,
Smith argument6:
‘Cuando la gente de cualquier pafs especifico tiene tal confianza en la fortuna, ta probidad y
la prudencia de cierto banquero, como para creer que él siempre esté preparado para
pagar, cuando se lo exijan, aquellas notas de cambio que sea probable que le sean
presentadas en cualquier momento; tales notas llegan a tener la misma circulacién que el
dinero de oro y plata, por la confianza en que tal dinero est disponible para ellos en
cualquier momento, (Smith 1976 [1789], 292)
‘Smith discuti6 por qué tal confianza no tiene que existir siempre. Aunque los detensores de
la interpretacién panadero-cervecero-carnicero de Smith, defendida en muchos libros de
economia, pueden estar algo perdidos acerca de cémo entender la crisis econémica actual
{dado que incluso hoy en dia la gente atin tiene muy buenas razones para buscar mas
comercio - sélo que tienen mucha menos oportunidad), las consecuencias devastadoras
de la suspicacia y Ia falta de confianza mutua no habrian asombrado a Smith. Smith
también subray6 que a veces nuestro comportamiento moral tiende a adoptar la forma de
simplemente seguir las convenciones establecidas. Si bien él observé que "los hombres de
reflexion y especulacién" pueden apreciar la fuerza de algunos argumentos morales mas
facilmente que "el grueso de ia humanidad” (1975 [1790], 192), no hay ninguna sugerencia
en los escritos de Smith de que la gente en general fracasa sisteméticamente en dejarse
influir por consideraciones més amplias - mas amplias que la mera busqueda del interés
propio - al escoger su comportamiento. Lo que es importante de notar, sin embargo, es el
nto de Smith de que incluso cuando nos vemos movidos por las implicaciones
reconot
de los argumentos morales, podemos no verlos en esa forma explicita y podemos percibir
nuestras decisiones en términos de un actuar conforme a algunas practicas bien
establecidas en la sociedad. Como lo formula él en La feoria de los sentimientos morales:
Hay muchos hombres que se comportan muy decentemente, y a lo largo de todas sus
vidas evitan cualquier grado considerable de culpa; ellos, sin embargo, quiz, nunca
tuvieron el sentimiento sobre la base de cuyo cardcter apropiado fundamos nuestra
aprobacién de su conducta, sino que actuaron simplemente a partir de una consideracién
jento (1975 [1790],
de lo que ellos vieron que eran las reglas establecidas de comportar
162)
Esta centralizacién en el poder de las “reglas establecidas de comportamiento" juega un
papel muy importante en ei andlisis Smithiano del comportamiento humano y sus
implicaciones sociales, Sin embargo, ni la decision especificamente razonada, ni el
‘seguimiento de las regias establecidas de comportamiento nos lleva, en el andlisis deSmith, a la biisqueda invariable del propio interés. Esto tiene enormes implicaciones para
la razén prictica, ademas de sus méritos epistémicos. Tanto el razonamiento individual,
como la convencién social pueden hacer una diferencia real en el tipo de sociedad en que
vivimos. No estamos presos en una jaula inflexible de la prioridad inoondicional del amor
propio. Los jefes ladrones de negocios perversos (tales como AIG) no estan condenados a
ninguna blisqueda inescapable del saqueo; ellos escogen robar en concordancia con sus
inclinaciones, haciendo poco uso del escrutinio racional, para no hablar del razonamiento
moral.
4
Mientras que los pensamientos de Smith son de mucha pertinencia para explicar la actual
crisis global y para sugerir maneras y medios no solamente de superarla, sino también de
construir una sociedad tolerablemente decente en el mundo, hay otras partes de los
andlisis de Smith que arrojan luz sobre nociones tan grandiosas como la justicia y la
imparcialidad, temas de permanente importancla. Dado que justamente he terminado un
libro sobre la justicia, llamado La idea de justicia(Sen 2009) que saca provecho
substancialmente de las ideas de Adam Smith, se me podtia, tal vez, perdonar por gastar
un poco de tiempo en las lineas de andlisis que, yo creo, he tomado de Smith.
‘Aun cuando el tema de la justicia social ha sido discutido a través de los tiempos, la
disciplina recibié un desarrollo especialmente fuerte durante la llustracién europea, en los
siglos XVill y XIX, alentado por el clima politico de cambio y también por la transformacion
social y econémica que tenia lugar entonces en Europa y América. Hay dos lineas de
razonamiento basicas, y divergentes, sobre la justicia entre los mas importantes fildsofos
asociados con el pensamiento radical de la llustracién, La distincién entre las dos
aproximaciones ha recibido mucha menos atencién, yo argumentaria, que la que bien
merece. Una aproximacién, guiada por la obra de Thomas Hobbes en el siglo XVI, y
continuada de diferentes maneras por tan notables lideres del pensamiento como John
Locke, Jean Jacques Rousseau ¢ Immanuel Kant, se concentré en identficar provisiones.
institucionales perfectamente justas para una sociedad. Esta apro:
‘acién, que puede ser
llamada “institucionalismo trascendenta", posse dos rasgos distintos. Primero, concentra
su atencién en lo que identifica como justicia perfecta, mas que en comparaciones
relativas de justicia ¢ injusticia, y trata de identificar caracteristicas sociales que no pueden
ser trascendidas en términos de justicia. Su énfasis no recae en comparar sociedades
Viables, todas las cuales pueden quedarse cortas en perfeccién. La indagacién apunta a
identificar la naturaleza de "lo justo", en vez de encontrar algunos oriterios para establecer
que una altemativa es ‘menos injusta" que otra. Segundo, al buscar la perfeccién, el
institucionalismo trascendental se concentra primariamente en tener las instituciones
correctas, y no se enfoca directamente en las sociedades que, de hecho, finalmente,emergerian. La naturaleza de la sociedad que resultarla de cualquier conjunto dado de
instituciones tiene, por supuesto, que depender también de rasgos no institucionales, como
los comportamientos efectivos de las personas y sus interacciones sociales. Al elaborar las
consecuencias probables de tener un conjunto de instituciones en lugar de otro, se
asumen algunos supuestos conductuales especificos (de un tipo bastante exigente). Con
estos supuestos en su lugar, la busqueda, en la aproximacién del institucionalismo
trascendental, es la de instituciones perfectamente justas, mas que de maneras y medios
de mejorar lo que de hecho ocurre en una sociedad. Estos dos rasgos se relacionan con el
modo de pensar “contractual” que Hobbes, en particular, habia iniciado y que fue
continuado por Locke, Rousseau y Kant, El "contrato social” hipotético, que se supone es
escogido, se interesa por un conjunto ideal de instituciones como una altemativa al caos
que de otro modo caracterizaria a una sociedad. El resultado global fue desarrollar teorias,
de la justicia que se concentraron en la identificacion trascendental de instituciones y
reglas ideales.
En contraste con el institucionalismo trascendental, algunos otros teéricos de la llustracién,
entre los que Adam Smith fue probablemente el analista principal, adoptaron una variedad
de aproximaciones comparativas que se preocuparon por realizaciones sociales (que
resultan de instituciones reales, el comportamiento efectivo y otras influencias efectivas) y
lo hicieron desde una perspectiva comparativa, Pueden encontrarse diferentes versiones
de tal pensamiento comparativo, por ejemplo, en las obras de Adam Smith, y en las del
Marqués de Condorcet (el fundador de la disciplina matematica de la teorla de la decision
social, que fue muy influida por la obra de Smith), Jeremy Bentham, Mary Wollstonecraft,
Karl Marx, John Stuart Mil, entre otros lideres de! pensamiento innovador en los siglos
XVII y XIX. De hecho, todos ellos estaban muy familiarizados con la aproximacién de
Smith. Manx incluso reproché a Mill el haberse atrevido a decir que estaba de acuerdo con
‘Smith: qué tan lejos irfa un pequefio hombre, se pregunté Marx, al tratar de ubicarse en la
compafiia de un grande. A pesar de que estos autores, con sus muy diferentes ideas sobre
las exigencias de justicia, propusieron maneras bien distintas de hacer comparaciones
sociales, se puede decir, corriendo el riesgo de exagerar tan solo un poco, que ellos
estaban todos involucrados en comparaciones de sociedades que existen o podrian surgir,
en lugar de limitar sus andlisis a las blsquedas trascendentales para una sociedad
perfectamente justa. Enfocados en comparaciones centradas en la rei
acién, ellos
estaban a menudo primariamente interesados en la eliminacién de injusticias manifiestas
que velan en el mundo, tales como la esclavitud, 0 la pobreza inducida a través de
politicas, 0 cédigos penales crueles y contraproducentes, 0 explotacién salvaje, 0 la
subyugacién de las mujeres.
La distancia entre las dos aproximaciones - el institucionalismo trascendental, por un lado,y la comparacion centrada en la realizacién, por el otfo - es bastante significativa. De
hecho, es la primera tradici6n (la det institucionalismo trascendental), aquella en la que se
apoya extensamente la filosofia poltica tipica de hoy, para su exploracién de la teoria de la
justicia, La més poderosa e importante exposicién de esta aproximacién a la justicia puede
encontrarse en las obras del principal filésofo politico de nuestro tiempo, John Rewlsf5]. En
efecto, los "principios de justicia” de Rawls, en su Una teoria de /a Justicia (1971), estan
pensados enteramente para identificar instituciones perfectamente justas. Algunos otros
destacados te6ricos contemporéneos de la justicia han tomado también, hablando a
grandes rasgos, la ruta trascendental institucional. Plenso aqut en Ronald Dworkin, David
Gauthier y Robert Nozick, entre otros. Sus teorfas, que han aportado diferentes - pero
respectivamente importantes - intelecciones sobre las exigencias de una "sociedad justa’,
‘comparten e! propésito comtin de identiicar reglas e instituciones justas, a pesar de que su
identificacién de éstas asume diferentes formas. La caracterizacién de instituciones
perfectamente justas ha llegado a ser el ejercicio central en las teorlas modemas de la
justicia, Esta tradicién entera es muy no-Smithiana en su aproximacién. El enfoque de
Smith se centra en realizaciones sfectivas (no solo instituciones y medidas), y en
‘comparaciones en vez de en la trascendencla. La diferencia entre las dos aproximaciones
's@ refleja en las preguntas que deben ser contestadas por una teoria de la justicia. La
concentracién primaria en la aproximacién Smithiana esta en tales preguntas como:
"4Cémo podria ser mejorada la justicia?" y no, como en la teoria de Rawls, en: "ZCémo
podlemos identificar instituciones perfectamente justas?" La aproximacién de Smith tiene el
efecto dual, primero, de tomar la ruta comparativa y no la trascendental, y segundo, de
centrarse en realizaciones efectivas en las sociedades involucradas, y no solamente en
Instituciones y regias. Dado el actual balance de énfasis en la filosofia politica
‘contempordnea, la aproximacién Smithiana exige un cambio radical en la formulacién de la
teoria de la Justicia. No me adentraré mas aquf en detallar con mayor precisién tal teoria
de la justicia, puesto que he tratado de hacer esto en mi mas reciente libro sobre la justicia
(2009b). Sin embargo, escogeré para su discusién un rasgo particular de la aproximacién
‘Smithiana, sobre el que no he comentado atin, y que es bastante importante para la teoria
que presento en mi libro. La cuestion mencionada tlene que ver con el dominio de puntos
de vista que una teoria de la justicia deberia tratar de albergar. Qué tan lejos deberiamos
tener que ir para obtener la imparcialidad que tiene que exigir una teoria de la Justicia?
El experimento mental de Adam Smith sobre la imparcialidad recurre al dispositive de un
“espectador imparciat" que puede venir tanto de lejos como de cerca, y esto difiere
sustancialmente de los puntos de vista admisibles en los que se concentra un contrato
social, 0 sea, los puntos de vista de las personas dentro de la comunidad politica en la10
que el contrato esté siendo hecho. A pesar de que en la discusién de John Rawls de lo que
61 llama un “equilibrio reflexivo", pueden ser invocadas perspectivas distantes, en su teoria
estructurada de la "justicia como equidad” los puntos de vista relevantes son aquellos de
las personas de la sociedad en la que la llamada “posicién original" esta siendo
contemplada (Rawls 1971). El recurso de Smith del espectador imparcial se inclina hacia
una “imparcialidad abierta’, en contraste con la que puede ser llamada "imparcialidad
cerrada” de la tradicién del contrato social, con su limitacién a los puntos de vista de los
partidos en el contrato social y, consecuentemente, a los comparieros ciudadanos de un
estado soberano. Con seguridad, tanto Smith como Kant tenian mucho que decir sobre la
Importancia de la imparcialidad. Aunque la exposicién de Smith de esta idea es menos
recordada entre los fildsofos morales y politicos contemporéneos, hay puntos sustanciales
de semejanza entre las aproximaciones de Kant y de Smith. De hecho, el andlisis de Smith
del "espectador imparcial" tiene algtin derecho de ser la idea pionera en el proyecto de
interpretar la imparcialidad y de formular las exigencias de equidad, que dio tanta
ocupacién al mundo de la ilustracién europea. Las ideas de Smith no solamente fueron
influyentes entre aquellos "pensadores ilustrados” como Condorcet, quien esoribié sobre
‘Smith; también Immanuel Kant estaba familiarizado con La teoria de los sentimientos
morales, como sabemos por su correspondencia con Markus Herz en 1771 (a pesar de
que Herz se refirié al orgulloso escocés como "Smith el inglés")[6]. Esto ocurrié un poco
antes de las obras clésicas de Kant, la Fundamentacién, 1785, y la Critica de la razén
practica, 1788, y parece bastante probable que Kant haya sido influido por Smith
En la discusién de ahora no estoy tan interesado en las similtudes entre Smith, por un
lado, y Kant - y Rawis -, por el otro, sino en las diferencias, La discusién interna entre los
participantes en la posici6n original Rawisiana le pareceria a Smith inadecuadamente
examinada, puesto que tenemos que mirar mas alla de los puntos de vista de otros, todos
en la misma sociedad, quienes estan comprometidos con hacer el contrato social. Como
argumento Smith:
No podemos nunca examinar nuestros propios sentimientos y motives, nunca podemos
formarnos un juicio acerca de ellos; 2 menos que nos movamos, por asi decitlo, de nuestra
propia estacién natural, y nos esforcemos por verlos como estando a cierta distancia de
nosotros. Pero no podemos hacer esto de ninguna otra manera que esforzéndonos por
verlos con fos ojos de otras personas, 0 como otras personas probablemente los verian
(1975 [1790], 110)
El interés de Rawls se centra en remover prejuicios, del tipo de los que estén relacionados
con intereses creados y puntos de vista personales, dentro de una sociedad dada, y él se
abstiene de recurrir al escrutinio de (en el lenguaje de Smith) “los ojos del resto de la
humanidad". Se necesitarfa algo mas que un “colapso de identidad” dentro de los confinesuu
del grupo focal local para enfrentarse a este problema. A este respecto, el dispositive
procedimental de la imparcialidad cerrada en la "justicia como equidad" puede ser visto
como siendo "parroquial" en su construccién. Podriamos preguntar: gPor qué es éste un
problema? De hecho, dado que muchas de las criticas a Rawls han provenido de filésofos
que son comunitaristas y particularistas culturales, podria incluso parecer que este
localismo de Rawls es una virtud y no un obstaculo a superar. Hay, en efecto, dos razones
principales para requerir que la forma de razonamiento publico sobre la Justicia deberia ir
mas alla de las fronteras de un estado o regién, y ellas estan basadas respectivamente en
(1) Ia relevancia de losintereses de otras personas - Iejanas de, asi como también
cereanas a, una sociedad dada - en aras de prevenir la inequidad hacia otros que no son
un partido en el contrato social para dicha sociedad, y (2) la pertinencia de
lasperspectivas de otras personas para ampliar nuestra propia investigacién de principios
relevantes, en aras de evitar un insuficientemente examinado parroquialismo de valores y
presunciones en la comunidad focal.
La primera razén, relacionada con la interdependencia de intereses, habria sido obvia para
‘Smith. Por ejemplo, los orimenes del régimen briténico temprano en la india, incluyendo la
desastrosa hambruna de 1770, ocuparon mucho a Smith, y no hubiera podido haber
ninguna nocién de justicia adecuada basada solamente en un contrato social entre los
briténicos, que pudiera hacer la labor de valoracién adecuadamente (en términos del
andlisis de Smith). Cuestiones similares siguen siendo muy vigentes hoy en dia, Cémo
manejan los Estados Unidos su economia influye no solamente en las vidas de los
estadounidenses, sino también en aquellas en el resto del mundo, y si hay una motivacién
que sea central para la reunién G-20, celebrada recientemente en Londres (abril de 2009),
es la importancia de dar pasos adecuados a la luz de la interdependencia del mundo
global. Similarmente, la manera como los Estados Unidos respondié a la barbarie del 11
de septiembre en Nueva York ha afectado las vidas de varios cientos de millones en todo
el mundo - no solamente en Irak y en Afganistén, sino también mucho més allé de estos
campos directos de la accién estadounidense. Mas atin, el SIDA y otras epidemias se han
trasiadado de pais @ pais, y de continente a continente, y también, por otro lado, los
medicamentos desarrollados y producidos en algunas partes del mundo, son importantes.
para las vidas y libertades de personas muy distantes. Muchas otras avenidas de
Interdependencia pueden ser identificadas, por ejemplo el desatio de que Jas pollticas
ambientales para el mundo enfrenten tales problemas como el calentamiento global. Las
interdependencias también incluyen el impacto de un sentido de la injusticia en un pais
sobre las vidas y libertades en otros. "La injusticia en cualquier parte es una amenaza para
la justicia en todas partes’, dijo el Dr. Martin Luther King, Jr. en abril de 1963, en una carta
escrita desde la prisién de Birmingham[7]. El descontento basado en la injusticia en un
pais puede propagarse rapidamente a otras tlerras. Nuestras "vecindades" estin ahora2
efectivamente esparcidas a través del mundo. Nuestras asociaciones con otros a través
del comercio y la comunicacién estén notablemente extendidas en el mundo
contemporéneo y, ademas, nuestro contacto global involucrando conexiones literarias,
attisticas y cientificas hace que sea dificil para nosotros esperar que una consideracién
adecuada de diversos intereses y preocupaciones pueda ser plausiblemente confinada a la
ciudadania de un pais dado, ignorando los demas.
Ademas de las caracteristicas globales de los intereses interdependientes, hay una
segunda razén - la de evitar la trampa del parroquialismo - para aceptar la necesidad de
adoptar una aproximacién "abierta" al examen de los requerimientos de imparcialidad. Sila
discusién de las demandas de justicia se confina a una localidad particular (un pais 0
incluso una regién mas extensa), hay un posible riesgo de ignorar o pasar por alto muchos
contraargumentos desafiantes que podrlan no haber surgido en debates politicos locales,
© no haber sido albergados en los discursos limitados a una cultura local, pero que son
eminentemente dignos de ser considerados desde una perspectiva imparcial. Es a esta
limitacién de ta confianza en el razonamiento parroquial, vinculada con tradiciones
nacionales y comprensiones regionales, a la que Smith se quiso resistir usando el recurso
del espectador imparcial, en la forma del experimento mental de preguntar cémo le
pareceria a una persona desinteresada - desde lejos o cerca - una practica 0 un
procedimiento patticulares. Smith estaba particularmente ansioso por evitar las garras del
parroquialismo en la jurisprudencia y en el razonamiento politico y moral. En un capitulo
de La Teorfa de los sentimientos morales, titulado "Sobre la influencia de la costumbre y la
moda en los sentimientos de aprobacién y desaprobacién moral, Smith da varios ejemplos
de cémo las discusiones confinadas dentro de una sociedad dada pueden estar
‘encarceladas en una comprensién muy estrecha:
[.J el asesinato de nifios recién nacidos fue una préctica permitida en casi todos los
estados de Grecit
incluso entre los bien educados y civilizados atenienses; y cuando
‘quiera que las circunstancias de los padres hicieran inconveniente que se criara al nifio, no
se consideraba censurable o digno de culpa que se fo abandonara al hambre o a las
bestias salvajes. [...] La costumbre ininterrumpida habia, por ese entonces, autorizado tan
completamente la practica, que no solamente las relajadas maximas del mundo toleraron
esta barbara prerrogativa, sino que incluso la doctrine de filésofos, que debieron ser mas
Justos y correctos, se vio extraviada por la costumbre establecida y en ésta, como en
muchas otras ocasiones, en lugar de censurar, apoyaron el horrible abuso, por medio de
consideraciones de utiidad piblica muy traidas por los cabellos. Aristételes habla de él
‘somo de lo que los magistrados deberian promover en muchas ocasiones. E! humano
Platon era de ia misma opinién, y, con todo ese amor por la humanidad que parece animar13,
todos sus escritos, no desaprueba en ninguna parte esta practica. (1975 [1790], 210)
La insistencia de Adam Smith en que tenemos que, entre otros, ver nuestros sentimientos
desde “una cierta distancia de nosotros” esté, entonces, motivada por el propdsito de
examinar no s6lo la influencia de intereses creados, sino también por la necesidad de
cuestionar la cautivante tirania de las bien arraigadas costumbres y tradiciones, Mientras
que el ejemplo de Smith del infanticidio sigue siendo tristemente relevante hoy en dia, si
bien s6lo en unas pocas sociedades, algunos de sus otros ejemplos tienen también
pertinencia para muchas otras sociedades contemporaneas. Esto se aplica, por ejemplo, a
la insistencia de Smith en que "los ojos del resto de la humanidad" deben ser invocados
para comprender si “un castigo parece justo” (Smith 1982 [1762-1763], 104). Supongo que
incluso la préctica del linchamiento de los que se identficaban como “criminales” les
parecié perfectamente justa ¢ imparcial a los fuertemente armados agentes del orden y la
decencia en el sur de los Estados Unidos, no hace mucho tiempo. Atin hoy, el escrutinio
desde una “distancia” puede ser util para considerar practicas tan diferentes como el
apedreamiento de mujeres adilleras en el Afganistan del Taliban, el aborto selective de
fetos femeninos en China, Corea y partes de la India[8}, y el amplio uso de la pena capital
en China 0 en los Estados Unidos (con o sin los jibilos pliblicos de celebracién que no son
enteramente desconocidos en algunas partes del pals). Los Estados Unidos son, dicho
sea de paso, el pals con la cuarta mayor cantidad de ejecuciones actualmente en el
mundo, después de China, iran y Arabia Saudita, y justo antes de Pakistan. La
imparcialidad cerrada carece de algo de la cualidad del compromiso intelectual que hace
que la imparcialidad - y la equidad - sea tan central para la idea de la justicia
La pertinencia de las perspectivas distantes tlene una clara incidencia en algunos debates
actuales en los Estados unidos, por ejemplo aquel en la Corte Suprema no hace mucho
tiempo, sobre si es apropiada la sentencia de muerte para crimenes cometidos por una
persona en sus afios juveniles. Las exigencias de justicia que se ve que son hechas atin
en un pais como los Estados Unidos, no pueden ignorar del todo la comprensién que se
puede originar en las preguntas acerca de cémo el problema es valorado en otros paises
del mundo, desde Europa y Brasil, hasta India y Japén. El estrecho juicio mayoritario de la
Corte, como eventualmente ocurri6, regiamento en contra del uso de la pena de muerte
para un crimen cometido en fa juventud, adn si la ejecucién ocurre luego de que la persona
llegue a la edad adulta. Al condenar esta decisién, Justice Scalia en su nota de disenso se
quejé de que la mayoria de la Corte se vio influenciada por su tendencia a "hacerle
deferencias a extranjeros con ideas similares". La mayoria de los jueces se refirieron a
concepciones de paises distintos a los Estados Unidos, y se podria preguntar si estaban
en lo correcto al hacerlo, en vez de considerar solamente puntos de vista americanos.
Central en este debate es la relevancia de la insistencia de Smith en la necesidad de14
examinar desde una
istancia", que es una parte integral del recurso del espectador
imparcial. La aparente claridad de los valores patroquiales @ menudo gira en torno a la
falta de conocimiento de lo que ha probado ser viable en las experiencias de otras gentes
La defensa inercial del infanticidio en la Antigua Grecia, sobre la cual hablé Smith, estuvo
claramente influida por la falta de conocimiento de otras sociedades en las que el
infanticidio es prohibido y que, sin embargo, no caen en el caos y Ia crisis como resultado
de no permitir esos asesinatos. A pesar de Ia indudable importancia del “conocimiento
local", el conocimiento global también tiene cierto valor, y puede contribuir a los debates
acerca de practicas y valores parroquiales. Escuchar voces distantes, que es parte de!
ejercicio de Adam Smith de invocar al “espectador Imparcial", no nos exige ser
respetuosos de todo argumento que pueda provenir del extranjero. La buena disposicién
para considerar un argumento propuesto en otro lugar esta muy lejos de una
predisposicién a aceptar todas esas propuestas. Podemos rechazar muchos de los
argumentos propuestos - a veces incluso todos ellos - y atin habria casos particulares de
razonamiento que nos podrian hacer reconsiderar nuestras propias comprensiones y
perspectivas, vinculadas con tas experiencias y convenciones arraigadas en un pais ©
cultura particular. Argumentos que a primera vista podrfan parecer “extrafios"
(especialmente cuando de hecho provienen, inicialmente, de pafses extranjeros) pueden
ayudar a enriquecer nuestro pensamiento si tratamos de vérnoslas con el razonamiento
tras estos argumentos localmente atipicos. Muchas personas en los E.U. 0 China pueden
no estar impresionadas por el mero hecho de que la pena capital no es permitida en
muchos ottos paises, por ejemplo en la mayoria de Europa y buena parte de los
continentes americanos (de hecho los Estados Unidos es el Unico pais en los continentes
americanos en el que se llevan a cabo ejecuciones civiles sistemadticas). Y, sin embargo, si
las razones son importantes, habria, en general, un buen caso a favor de examinar los
argumentos Justificatives en contra de la pena capital que son esgrimidos en otras
partes{9].
7
Debo terminar aqui. Podemos examinar las ideas de Smith por la manera como estan
relacionadas con el mundo que él observé alrededor suyo, pero también por su
pertinencia para la naturaleza de la sociedad humana en general y, por lo tanto, para
nuestro mundo de hoy. He perseguido el segundo tipo de indagacién en esta presentacion.
No dejo nunca de estar impresionado - de hecho maravillado - por el alcance de las ideas
de Smith a lo largo de los siglos, Estoy seguro de que seria acusado de ir demasiado lejos
cuando comparo, en este respecto, a Smith con Shakespeare. Pero hay algo en comin
entre los dos en su manera de alcanzar a las personas a través de las barteras del tiempo.
Si hay una profundidad inusual en esto, hay razén para que nosotros le demos a ello el15
reconocimiento que pareceria merecer.
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