You are on page 1of 14
COLECCION POLITEYA. ESTUDIOS DE POLITICA Y SOCIEDAD MIGRACION Y PARTICIPACION POLITICA ANGELES ESCRIVA, ANASTASIA BERMUDEZ Y NATALIA MORAES (EDS.) {CONSEJO SUPERIOR DE INVESTIGACIONES Cell Nae Ny | Es EN one 16 ANGELES ESCRIVA CHORDA BIBLIOGRAFIA ESCRIVA, A. (1999), "Mujeres Peruanas del Servicio Doméstico en Barcelo- na: Trayectorias Sociolaborales". Tesis doctoral, Universidad Autonoma de Barcelona. (2008), “Migracién y procesos electorales. Hacia una ciudadania politi- ca transnacional” en J. Garcia y J. Lacomba (eds.) La Inmigracién en la Sociedad Espajiola: una Radiografia Multidisciplinar. Barcelona: edicions Bellaterra, 509-524. GREGORIO, C. (1997), "Sistemas de Género y Migracién Internacional: la Emigracioén Dominicana a la Comunidad de Madrid". Tesis doctoral, Universidad Autonoma de Madrid. SO, L. (1998), La Migracién hacia Espafia de Mujeres Jefas de Hogar. Madrid: Instituto de la Mujer. PORTES, A. y J. DE WIND (2006), “A cross-Atlantic dialogue: the progress of research and theory in the study of international migration”. International Migration Review, 38: 828-851. WIMMER, A. y N. GLICK-SCHILLER (2002), “Methodological nationalism and beyond: nation-state building, migration and the social sciences". Global Networks, 2(4): 301-334. CAPITULO 1 LA POL{TICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS: REFLEXIONES SOBRE LA DIMENSION TRANSNACIONAL DE LA PARTICIPACION POLITICA DE LOS MIGRANTES' Eva Ostergaard-Nielsen Universitat Auténoma de Barcelona INTRODUCCION La participaci6n politica transfronteriza de los migrantes y refugiados en sus paises de origen ha_ ganado terreno en la investigacion sobre migracién y participacién politica en las tltimas décadas. Estos estudios informan de que asociaciones politicas de refugiados, como las de los ceilandeses, somalies y kurdos, son parte activa en conflictos inter-estatales o en disputas regiona- les de sus paises de origen (Kleist, 2007; Orjuela, 2007; Ostergaard-Nielsen, 2007b). Igualmente, grupos de migrantes como los turcos 0 marroquies, se ' Traduccion al espanol del original en inglés realizada por Angeles Escriva, con permiso de la autora, 18 EVA OSTERGAARD-NIELSEN han convertido en parte interesada en los procesos de democratizacién y de- sattollo de sus paises de origen (Lacomba, 2004; Lacroix, 2005; Ostergaar Nielsen, 203d). De hecho, se ha proclamado que la presencia en un pais de inmigrantes, didsporas 0 exiliados cuyo universo politico alcanza mas alla de las fronteras estatales hasta el pais de origen constituye un rasgo crecientemente importante de la politica interna y las relaciones interna- cionales contemporaneas (Huntington, 2004; Sheffer, 1986). No hay nada nuevo en el hecho de que los migrantes, refugiados y exiliados se involucren en_ta politica de su pais de origen desde lejos. Sin embargo, las practicas politicas transnacionales de los migrantes se inspiran en, y a la vez influyen, los procesos contemparaneos tanto de globalizacién como de localizacion de las identidades y prdcticas politjcas, y han atraido la atencién de actores estatales y no estatales, organizaciones locales e internacionales. Entre las principales observacignes a este respecto tenemos: Primero, el interés politico transnacional de los migrantes no desaparece uecesariamente con el tiempo ni es reemplazado con las preocupaciones sobre la situacion politica en el pais de residencia. La participacién politica local y transnacional no constituyen un juego de suma cero, como se ha de- mostrado en ambos lados del Atlantico (Guarnizo et al., 2003, Levitt, 2003, Ostergaard-Nielsen, 200 1b). No obsiante, éste es s6lo un punto de partida para indagar mas acerca de como una éptica transnacional sobre la identificacion y agencia politica de los migrantes puede contribuir a una comprensién mas holistica de su incorporacién politica local - y viceversa. Segundo, los migrantes juegan wi i ite en los procesos de desarrollo y democratizacién, pero también en los conflictos de sus paises de origen (Ostergaard-Nielsen, 2006). Una multitud de organizaciones in- ternacionales, agencias gubernamentales y ONGs esta interesada en sacar rendimiento del capital econémico y politico de los migrantes, o limitar y controlar esas redes y praeticas transnacionales de los migrantes que se perciben como una amenaza a la seguridad. ‘Texcero, la manera y el grado en que la politica de la patria natal importa a los migrantes entra dentro de su relacién con las instituciones paliticas del pais receptor. Esta dimensién de la orientacién politica hacia la patria natal del migrante es relevante porque los migrantes y sus descendientes se han convertido en parte integral del paisaje politico a lo largo de la Union Euro- pea. La laciones de migrantes han actuado desde hace tiempo como representantes de los varios grupos étnicos, religiosos 0 politicos de estos colectivos de migrantes. Los votantes de origen migrante se han convertido ? Para una distincién entre diaspora politica y movilizacion politi a a = an P y politica de los migrantes, ver CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS... en electores potenciales importantes para los partidos politicos en Europa. Sin embargo, la orientacién politica hacia la patria natal de los migrantes no es bienvenida de igual manera por los actores politicos del pais receptor. Por lo tanto, las practicas transnacionales de los migrantes son interesantes porque no sélo transgreden los limites de los sistemas politicos y las socie- dades, sino que también y al mismo tiempo descubren los limites politicos y discursivos de la participacién local. Finalmente, el fenémeno de la vinculacién transnacional de los migrantes ilustra la dicotomia cada vez menos acentuada entre lo doméstico y_lo inter- nacional. Las practicas politicas transnacionales de los migrantes cuestionan los supuestos sobre ciudadania y comunidades politicas ligadas al Estado sobre los que se basa mucha de la literatura en ciencias sociales (Ostergaard- Nielsen, 2001a). Esto ha conducido a reflexiones sobre como el estudio de los fendmenos transnacionales pued: warse As basicos del nacionalismo metodologico (Wimmer y Glick-Schiller, 2002) y emplear una metodologia que permita una comprension sin limites de las redes y la participacion politica transnacional y dirigida a la patria natal de los migrantes. Este capitulo revisa algunos de los elementos clave de la agenda de inves- tigacién sobre el transnacionalismo politico de los migrantes, con especial énfasis en la experiencia europea*. Las paginas siguientes buscan destacar cémo las practicas politicas de los migrantes de ningtin modo tienen lugar en un vacio politico. La participacion politica transfronteriza esta influenciada por ~ ¢ influencia - el_contexto institucional y politico tanto en los paises de origen como de destino, asi como por los otros actores no-estatales con los que las redes politicas transnacionales de los migrantes a menudo se entrelazan. En Europa, el campo de estudio sobre las practicas politica transnacio- nales de los migrantes ha estado dominado por los estudios realizados en aquellos Estados de la Union Europea con una trayectoria migratoria mas larga y con relativamente poca.atencién a los latinoamericangs. No obstante, los capitulos de este volumen mejoran nuestro conocimiento sobre cémo el transnacionalismo politico de los latinoamericanos en Espafia y otros lugares de Europa es comparable a las experiencias de otros colectivos de migrantes en Europa. De hecho, en el nivel de la investigacion empirica la presencia de grandes colectivos de migrantes de América Latina abre una amplia oportu- nidad para la comparaci6n transatlantica con el caso de Norteamérica. 8 Este articulo se basa en trabajos anteriores sobre las practicas politicas transnacionales de los migrantes, en particular referidas al caso turco y kurdo (@stergaard-Nielsen, 2003c; 20034; 2009). 20 EVA OSTERGAARD-NIELSEN Espaiia llega tarde a los estudios sobre activismo politico transnacional de los migrantes. Pero como este volumen ampliamente demuestra, los trabajos sobre transnacionalismo politico migrante en Espafia, al igual que en otros paises del sur de la Union Europea, tienen mucho que ofrecer a la agenda de investigacién europea. Lo mas importante en este contexto es que la re- lativa novedad de la migracién significa que Espaiia se encuentra todavia en el proceso de definir una ciudadania que incluya la presencia de cerca de cinco millones de migrantes. Una ciudadania que todavia lleva el distintivo de Espafia como pais de emigracién, que otorga derechos ciudadanos ple- nos a los expatriados espafioles mientras que excluye a grandes grupos de nacionales de terceros paises de la participacion en elecciones nacionales y locales. Finalmente, tanto los gobiernos nacionales, regionales como locales prestan un considerable nivel de atenci6n a las politicas de codesarrollo, que pretenden incluira los migrantes en actividades transnacionales que beneficien a las localidades de origen (Gimenez et al., 2006; Ostergaard-Nielsen, 2007a) TIPOS DE PRACTICAS POLITICAS TRANSNACIONALES DE LOS MIGRANTES Elcampo de las practicas politicas transnacionales de los migrantes es tan complejo como los procesos, estructuras y actores involucrados a todos los niveles. Los estudios sobre las didsporas ya hace tiempo han analizado las relaciones politicas entre los emigrantes 0 refugiados y sus paises de origen. Sin_embargo, estos estudios se han enfocado normalmente en una agenda mas estrecha y relacionada con el gobierno de grupos extranjeros tales como las diasporas armenia, judia y griega. A medida que la investigacién sobre migracion transnacional ha alcanzado a los estudios sobre diaspora, ¢lcam- pode las practicas politicas transnacionales de los migrantes ha necesi wna definicion mas amplia de Jo politico que incluya una_paleta mayorde actividades electorales y no-electorales. En particular, si incluimos la par- ticipacién transnacional de colectivos de migrantes a nivel local, entonces es importante no igualar el transnacionalismo politico migrante solo con la politica electoral o lo relacionado con los gobiernos nacionales, A fin de dar sentido a un campo de estudio muy disperso, algunos estudios han intentado trazar las practicas politicas transnacionales mirando qué migrantes conectan mas con la politica de sus paises de origen y bajo qué circunstancias politicas y socio-econémicas es mas probable que lo hagan (Guarnizo et al., 2003; Itzigsohn et al., 1999; Ostergaard-Nielsen, 20030). En mi propio trabajo he utilizado una definicion amplia de.“practicas politi- cas transnacionales” que distingue entre las vari articipacion transfronteriza directa de los migrantes en la politica de sus paises de origen, indirecta via las instituciones politicas del pais de asicomo su participacién indirec acogida 0 las organizaciones internacionales. La participacion transfronte- CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 21 riza directa incluye la participacién electoral o en actividades no-electorales como ser miembro de, colaborar con o contribuir a, partidos politicos u organizaciones 0 movimientos de la sociedad civil a escala nacional 0 local. Esta ligada a las estructuras de oportunidad politica g les en el pais de origen, asi como a las medidas especificas adoptadas para la participacion politica de los emigrantes (¢j.: el derecho al voto desde el exterior, los consejos consultivos para migrantes). La participacién politica transnacional indirecta denota los modos en los que la participacion politica en un pais concreto, tales como los patrones de voto o las formas de hacer lobby, esta informada por acontecimientos politicos en otro. Incluye varios tipos de cabildeo y cam- paiias informativas 0, incluso, de bloqueo al voto sobre cuestiones politicas de la tierra natal en el pais de residencia. Esta dimensi6n de la participacion politica en la patria natal esta, pues, ligada también a las estructuras de oportunidad politica del pais de residencia, en interseccién con los regimenes de incorporaci6n de los migrantes y las definiciones de ciudadania locales. Los migrantes y refugiados pueden movilizarse en torno a una multitud de_cuestiones. Una forma de categorizar éstas es distinguiendo entre “immigrant politics” (politica inmigrante), “homeland politics” (politica hacia la patria natal), “emigrant politics” (politica de emigrantes) y “local-local politics” (politica local-local)*. . “Immigrant politics”: Estas son las actividades politicas que los migrantes y refugiados llevan a cabo para mejorar su situacion en el pais receptor. Incluye hacer campafia para conseguir derechos politicos, sociales y economic luchar contra la discriminacion y el racismo o tomar parte en debates y programas de politica social sobre como conseguir que a los descendientes de los migrantes les vaya bien en el sistema educativo. Las asociaciones de migrantes y representantes politicos de los migrantes han llegado a ser im- portantes interlocutores en estos temas. . "Homeland politics”: Este termino denota las actividades politicas de migran- tes y refugiados dirigidas a la politica interna o_exterior del pais de origen. Esto significa apoyo u oposicion al régimen politico del lugar de origen. Este término se usa a menudo camo sinénimo de politica diasporica. Desde una definicion mas ajustada, la politica diaspérica se relacionaria con aquellos grupos a los que no se les permite participar en el sistema politico de su patria de origen ~ 0 que incluso no tienen un régimen politico en origen al que apoyar u oponerse (Cohen, 1997). Mas comtinmente, el uso del término diaspora o politica diasporica cubre las actividades de un amplio elenco de * Para una discusion sobre estas categorias ver Ostergaard-Nielsen (2003d). 22 EVA OSTERGAARD-NIELSEN CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 23, grupos de migrantes y refugiados®. Las actividades politicas dirigidas a la patria natal incluyen demandas de democratizacién y mejora de la gober- nanza, 0 un mayor respeto por los derechos humanos, étnicos y religiosos en el pais de origen. Y habida cuenta que los migrantes tienen a menudo un importante interés econémico en el pais de origen, pueden soli ayores esfuerzos para poner freno a la corrupcién y la burocracia. . "Emigrant politics": El dialogo de los migrantes con los actores politicos del pais natal no se refiere tinicamente a asuntos de politica interna 0 exterior, sino que también abarca la discusién sobre su propio estatus. Los migran- tes trabajan para la institucionalizacion de su estatus transnacional como residentes en el exterior y el aumento de sus derechos en el pais de origen. Los emigrantes pueden solicitar esquemas de inversion favorables, exencion de impuestos y tasas de aduana y la regulacién de los sistemas de pensiones y de beneficios por hijos en el pais de origen. Ademas, interesante en este contexto, pueden reclamar la extensién de canales de influencia en la poli- tica de alla, tales como los consejos consultivos y el derecho al voto desde el exterior y a presentarse como candidatos. “Local-local politics": Una dimensién final del transnacionalismo politico de ” Jos migrantes esta dirigida a la mejora de la situacién de la comunidad local de_donde originan. Hay casos en que los migtantes y las asociaciones de migrantes se involucran en la vida electoral y de los partidos politicos de la regin de origen (Smith, 2003). Sin embargo, una gran parte de la investiga- cién sobre participacién local-local analiza c asociaciones - hos juntan recursos para iniciar proyectos en su pueblo o region natal. Esta dimensién parece especialmente pertinente en el caso de Espana donde las politicas de codesarrollo animan a los migrantes a formular e implementar proyectos colectivamente para mejorar las condiciones locales en sus paises de origen. Esta participacion en el desarrollo de la comunidad natal se suele categorizar mas como practicas econémicas que politicas de larga distancia. No obstante, la_participacion civica colectiva de los migrantes puede tener ramificaciones polilicas mas amplias, dado que el empoderamiento de las comunidades locales sirve de catalizador del cambio politico general (Portes, 1999). En concreto, un objetivo especifico de las politicas de codesarrollo de los municipios catalanes es utilizar la participacién a distancia de los migran- tes en proyectos de desarrollo para fomentar los procesos de emancipacién civica en sus localidades de origen (Ostergaard-Nielsen, 2007a). ® Para una discusién mas extensa sobre el uso de los término didsporas y comunidades transnacionales ver Cohen (1997); Ostergaard-Nielsen (2001a; 203d). Claramente estas dimensiones de las practicas politicas transnacionales de los migrantes se solapan y mezclan unas con otras, dependiendo de la constelacién particular de intereses divergentes 0 convergentes de los prin- cipales actores involucrados. Es importante sefalar que las categorias de “immigrant politics” y “homeland politics” se solapan y entrelazan y son a veces inseparables en los procesos de movilizacién y participacién politica trans- fronteriza. Ademas, no corresponden a una dicotomia entre la participacion politica “local” y “transnacional”. No se trata de que la politica inmigrante sea “local” y la politica hacia la patria natal sea “transnacional” per se. Entre las asociaciones la politica inmigrante puede tomar una dimension transnacio- nal, a veces institucionalizada a través de las federaciones transfronterizas de asociaciones de migrantes y también tiene lugar mediante cabildeos su- pranacionales de dimension europea o instituciones intergubernamentale: En otras palabras, la politica transnacional de los migrantes yo es necesa- iamente una politica orientada_hacia Ja patria natal®. LA DURABILIDAD DE LA IDENTIFICACION TRANSNACIONAL La 6ptica transnacional ha ganado fuerte posicibn en a investigacion sobre la integracion de los migrantes en Europa. La critica sobre la propuesta transnacional es abundante: no es nueva, no es representativa de todo el colectivo de migrantes y no es duradera’. Esta tltima cuestion es muy rele- vante para el caso de varios de los importantes colectivos de migrantes en Europa, dado el mimero de descendientes de migrantes 0 refugiados. gHa decrecido el interés por la politica del pais natal a lo largo de los anos?, gestan los hijgs y nietos de_Jos migrantes menos interesados ¢ involucrados ena politica del pais natal que sus padres? o ghay otras diferencias a lo largo del tiempo o entre generaciones que debemos tener en cuenta al idear y llevar a cabo una investigacion sobre la dimensi6n transnacional de la incorporacion politica. Es importante enfatizar la falta de datos sobre la orientacion y movilizaci de los migrantes hacia la politica del pais natal, en particular de las segw das y terceras generaciones en Europa. En mi trabajo sobre las actividades politicas transnacionales de los migrantes son centrales las asociaciones de migrantes y_sus redes locales y transnacionales. Sin embargo, esta eleccion © Para mas discusién sobre el solapamlento € interrelacién entre estas categorias, incluyen- do como la politica hacia el pais de origen se institucionaliza en el extranjero entre los colectivos migrantes, ver Ostergaard-Nielsen (2003¢; 2009). ” Discusiones de tales critieas se encuentran en Portes (2001), Vertovec (2004) 24 EVA OSTERGAARD-NIELSEN metodolégica es, de algiin modo, una espada de doble filo, Al usar las aso- ciaciones de migrantes como punto de entrada a la investigacién sobre las practicas politicas transnacionales se puede dar una idea sesgada del grado deactivismo dentro del grupo de migrantes en su conjunto. El liderazgo de la organizacion se ocupara usualmente en practicas transnacionales especificas y centrales, pero puede no ser representativo del grupo amplio de inmigrantes y refugiados. Por tanto, es importante yo confluir el interés del ivo de migrantes en su totalidad con el de sus asociaciones. Hasta ahora este campo de investigacién ha estado daminado por_los estudios cualitativos que “toman la muestra en funcién de la variable de- pendiente”, es decir, estudiando el transnacionalismo migrante alli donde se manifiesta y dejando atras la cuestion de qué tan extendidas estan esas practicas (Portes, 2001). El predominio de los estudios cualitativos sobre los cuantitativos significa que hay pocas encuestas que indiquen las diferencias entre niveles de orientacién politica transnacional a lo largo del tiempo o entre la primera y la segunda generacion de migrantes. Por el contrario, hay estudios que usan diferentes colectivos de migrantes o diferentes Estados de residencia o de origen como variables independientes a fin de explicar los diferentes niveles de compromiso politico transnacional (Guarnizo et al., 2003; Koopmans y Statham, 2003; @stergaard-Nielsen, 2001b). Usando las investigaciones etnograficas 0 los estudios sociologicos mas cuantitativos se ha argumentado que Ja orientacién-politica transnacional esta relacionada con una multitud de factores, incluyendo el tipo de migra- ci6n, la duracién de la estadia y la posicion estructural de los migrantes y refugiados en los paises receptores. En la investigacion sobre migraciones en Europa mas asimilacionista han predominado dos hipétesis principales: 1) que los migrantes y sus asociaciones pierden el interés en sus paises de origen a lo largo del tiempo en favor de sus nuevos paises de asentamiento, 2) que los migrantes que se involucran en los asuntos politicos de la tierra natal se vuelven hacia ella porque no se sienten aceptados en sus paises de residencia. Yo he argumentado en otros trabajos la necesidad de desconec- tar estos factores y la actividad politica transnacional (Gstergaard-Nielsen, 2001b). Mientras que ciertamente estos factores explican parte de la activi- dad transnacional de los migrantes, son también categorias que perciben la migracion y la incorporacién de los migrantes unilinealmente. No se puede subestimar la importancia de los viajes baratos, los medios de comunicacién electronicos y la disponibilidad de prensa del pais de origen en la capacidad de los migrantes para mantenerse en contacto con sus hogares. Los migrantes en Europa pueden seguir los eventos de sus paises de origen con un toque del control remoto de la television o mediante la lectura de las noticias en los periédicos impresos habitualmente disponibles en todo lugar. Pueden conectarse a Internet y buscar e intercambiar informacion o expresar sus opiniones en blogs o foros. [a orientacién transnacional ya integracin local 9 constituyen un juego de suma cero. Los vinculos transnacionales pueden CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVIS DE LAS FRONTERAS... 25 atravesar estos factores y conseguir que los migrantes se mantengan tan involucrados en la politica del pais natal como los refugiados, los migrantes asentados tanto como los recién Ilegados, los migrantes bien integrados tan activos como quienes tienen menos arraigo en el nuevo pais de asentamiento. De hecho, Guarnizo et al., (2003) muestran que los migrantes que han obte- nido la ciudadania americana son mas activos que quienes no la tienen. Con todo, ademas de intentar explorar los cambios cuantitativos en 1a identificacion y actividad transnacional a lo largo del tiempo y entre varias ge- neraciones de migrantes, resulta tan importante amas e as diferencias cualitativas en como los migrantes se mavilizan y-participan alrededor de qué cuestiones. Por ejemplo, en el caso de los turcos y kurdos, no basta un marco analitico de la politica inmigrante y de la movilizacion politica hacia el pais natal (Ostergaard-Nielsen, 2009). Las nuevas agendas de las asociaciones tur- cas ykurdas indican que crecientemente se movilizan por, o se vinculan con, cuestiones mas amplias sabre democratizacion y derechos humanos, medio ambiente y_género, en vez de los temas de politica nacional que movilizaron a la generacion de sus padres. De acuerdo con esto, como se discutira mas abajo, el campo transnacional de movilizacion y participacién politica incluye no sélo actores no-estatales nacionales sino también regionales 0 globales. Observadores de otros grupos musulmanes hacen notar que especialmente la segunda generacién puede identificarse con movimientos iskamicos mas amplios y solidarizarse con otros grupos musulmanes de cualquier lugar, y que esto puede afectar la participacion politica local. Por ejemplo, los resul- tados de las recientes elecciones en Gran Bretafia han demostrado como la segunda generacion de musulmanes bangladesies y paquistanies estaban desilusionados con los laboristas en mayor proporcién que la primera gene- racién, debido a la participaci6n britanica en la guerra de Irak*, Asi pues, en vez de medir la orientacién politica transnacional s6lo como una funcion de la trayectoria migratoria o el proceso de integracion, he argu- mentado en favor de un enfoque orientado mas hacia Ja agencia, que coloque la movilizacion politica hacia el pais natal en el entrejuego de las ambiciones politicas de los lideres de los migrantes y las agendas de los Estados, gobiernos y partidos politicos tanto del pais de origen como del de residencia. Desde este marco analitico las practicas politicas transnacionales de los migrantes son parte de un mecanismo continuo de retroalimentacion a través del cual los migrantes influencian y son influenciados por el ambiente politico insti- tucional, transnacional y local. ® Bodi, F.: “Ties that no longer bind. A new generation of Muslims is breaking with Labour” ‘The Guardian, 5/5/2005. 26 EVA @STERGAARD-NIELSEN EL TRANSNACIONALISMO POLITICO MIGRANTE Y LAS ESTRUCTURAS DE OPORTUNIDAD POLITICA EN EL PAIS DE ORIGEN Y RESIDENCIA Las investigaciones recientes estan Ilenas de ejemplos interesantes de c6 los paises emisores (un término ambiguo, puesto que no todos los paises “envian” a sus nacionales al exterior) estan_ buscando reforzar los vinculos con sus 1 les a_poblacién diasporica en el extranjero (Brand, 2002; Guarnizo y Smith, 1998; Levitt y De la Dehesa, 2003; Mahler, 2000; Moraes etal., en este libro; Ostergaard-Nielsen, 2003b). Smith (1997) distingue entre “homeland policies”, cuando los Estados emisores crean instituciones con el objeto de orientar a los migrantes hacia el retorno, y “global nation policies”, cuando los Estados emisores pretenden animar a los migrantes que se que- dan fuera a que permanezcan en contacto. Un ntimero creciente de paises con emigracién ha pasado del primer modelo de politicas al segundo’. De hecho, en varios casos como los de México, Turquia o China, los emigrantes cuyos apuros fueron ignorados durantes afos son ahora sujetos de retarica celebratoria que los eleva a héroes por la importante contribucién que-estan haciendo a sus patrias. Esto ha venido acompanado de politicas y medidas administrativas destinadas a facilitar que los migrantes se involucren, en especial econémicamente pero también politicamente, en su pais de origen. De especial relevancia en este contexto es Ja extensién de Ja doble nacionali- dad a las poblaciones emigradas que, de otro modo, tendrian que renunciar a su nacionalidad al naturalizarse en sus paises de residencia (stergaard- Nielsen, 2003b; 2008). También aumenta la tendencia a otorgar elderecho al voto en el exterior a las poblaciones expatriadas (IDEA, 2006), lo que motiva a los partidos politicos a trasladar sus campafias electorales al extranjero a fin de asegurarse apoyos financieros y votos. Incluso en los casos en que el voto en el exterior no esta implantado, a veces los gobiernos de los paises emisores han puesto en marcha mecanismos de consulta especiales con re- presentantes de los emigrantes para reforzar el didlogo con los expatriados. De este modo, los paises de los emigrantes buscan no sélo tener acceso a los recursos econémicos de los residentes en el exterior, sino también (re) incorporarles a la politica interna y externa y apelar a su amor por - y sentido del deber hacia - su pais de origen. Porlo general se considera que el interés detras de estas politicas de al- cance ¢s economico (asegurar un influjo continuo de remesas y de inversion extranjera directa) y politico (movilizar apoyo politico y controlar la disiden- cia politica subversiva). Los andlisis comparativos de paises emisores han * Para una vasta revision comparativa de politicas piiblicas hacia las poblaciones emigran- tes de América Latina ver Vono de Vilhena (2006) CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 27 discutido los factores estructurales ¢ histéricos, internos e internacionales, que se han combinado para que algunos Estados emisores se muestren mas interesados por sus nacionales en ultramar que otros (Gamlen, en este libro; Itzigsohn, 2000; Levitt, 2001; Ostergaard-Nielsen, 2003b; Sheffer, 1986). La conclusién mas generalizada es que la migracién provee a los gobiernos de los paises emisores, tanto a aquellos posicionados centralmente como sobre todo a los posicionados periféricamente en la economia global, con nuevas opciones para reconfigurar el alcance del Estado-nacién mediante vinculos transnacio- nales econémicos, sociales y politicos con sus nacionales en el exterior. Sin embargo, es importante ng enmascarar la relacién a veces ambigua entre los emigrantes y su pais de origen. Muchos colectivos de emigrantes son escépticos acerca de las élites politicas en sus paises de origen, a las que culpan de haber hecho imposible el que permanecieran en su patria en primer lugar. Por ejemplo, las politicas oficiales para llegar hasta los emigran- tes pueden adolecer de credibilidad, puesto que no es facil convencer a una comunidad en ultramar de la sinceridad de los intereses oficiales después de afios de olvido. De hecho, casos tan diversos como los de México, Turquia € India muestran que las relaciones con la poblacién expatriada no cambian de un dia para otro (Ostergaard-Nielsen, 2003b). Se ha pregonado que los gobiernos emisores, partidos politicos y actores]¢ no-estatales son actores principales en la configuraci6n del campo de practicas: politicas transnacionales y especialmente en la amplificacion de las estructu- ras de oportunidad politica para la participacion politica transnacional de los migrantes. No obstante, el Estado receptor juega un papel central al marcar los limites de la inclusién, exclusion y ciudadania, permitiendo o prohibiendo las distintas formas de movilizacion politica dentro de sus fronteras. Se puede argumentar que este enfoque es mas dominante en Europa que al otro lado del Atlantico. Uno de los rasgos definitorios de la investigacion sobre transnaciona- lismo politico migrante en Europa es el énfasis que se ha puesto en como tales actividades se relacionan no slo con los procesos de integracion, sino también, at con la ciudadania en el pais de residencia (Ostergaard-Nielsen, 2003c). Habida cuenta las diferencias en los regimenes de ciudadania e incorpo- racion de los migrantes en distintos paises curopeos, varios estudios han intentado examinar el significado de los distintos contextos politicos de los paises receptores en las actividades politicas de los migrantes hacia la patria natal. Se ha argitido que el tipo de ciudadania y-estructura de oportunidad politica en_el pais receptor condiciona también eLaleance de las activi Ss politicas hacia la patria natal entre los migrantes. Por ejemplo, varios estudios han comparado las actividades politicas transnacionales de los migrantes turcos en Ja Alemania “exclusivista” y los Paises Bajos “inclusivistas” de la década de los noventa, concluyendo que las instituciones y actores politicos del pais receptor destacan como potentes mediadores de la actividad politica transnacional (Abadan-Unat, 1997; Koopmans y Statham, 2003; Ostergaard- Nielsen, 2001b). 28, EVA OSTERGAARD-NIELSEN Sin embargo, los regimenes de ciudadania e inco de migrantes en Europa han experimentado cambios notables en 1 Por un lado, se tiende a liberalizar el sistema de adquisicion de la ciudadania, no basandose mas en el ius sanguinis, de modo que es mas facil su adqui- sicién por los migrantes y sus descendientes. Por otro lado, se identifica un giro restrictivo 0 més asimilacionista en las politicas de incorporacion de los migrantes a lo largo y ancho de Europa (Joppke y Morawska, 2003). Las politicas y practicas sobre ciudadania en el conjunto de Estados miembros de la Union Europa responden a un nexo reforzado entre las identidades nacionales, los valores y la membresia formal. Esto esta relacionado con la ruptura en el pensamiento actual sobre como gestionar la incorporacién de los migrantes en una serie de paises europeos. Para algunos observadores, cl aumento de partidos y sentimientos anti-inmigrantes en sitios como los Paises Bajos o Dinamarca ha desafiado seriamente el concepto de multicul- turalismo. Para otros, no es culpa del concepto general, sino de una falta de politicas coherentes que ayuden especialmente a la segunda generacién de migrantes a encontrar su lugar en las sociedades de residencia. Esta convergencia en las politicas de incorporacion de los migrantes hace que la yuxtaposicién de la Alemania exclusiva y asimilacionista versus la Holanda inclusiva y multicultural, que como se mencioné antes aparece en algunos estudios comparativos sobre el transnacionalismo politico de los migrantes, sea menos clara. Seria pues relevanite reflexionar mas sobre si, y como, estos cambios en las politicas publicas influyen en las percepciones y las politicas que buscan la movilizaci6n y participaci6n politica transnacional de los migrantes hacia el pais natal. De todas maneras, los anélisis comparativos de la actividad politica hacia el terruiio en diferentes Estados miembros de la Union Europea han destacado, algo parad6jicamente, cémo la orientacién politica o las practi- cas politicas hacia la patria natal de los migrantes no son sélo una funcion de la ciudadania y las estructuras formales de oportunidad politica de su pais de residencia. Primero, es importante no equiparar estas estructuras de oportunidad politica abiertas a la participacién politica de los migrantes con la oportunidad para el cabildeo y el reclamo politico hacia el pais natal (@stergaard-Nielsen, 2001b). La construccién de la Union Europea compor- fa la promocién de membresias politicas solapadas para sus ciudadanos. Sin embargo, la movilizacin politica transfronteriza por motivos politicos, étnicos 0 religiosos resulta incémoda en los debates sobre los modos de incorporacién de los migrantes en muchos Estados miembros de la Union Europea. De hecho, especialmente la dimensién politica del transnacionalis- mo migrante, hasta qué punto los migrantes apoyan una causa, movimiento 0 partido politico fuera de su pais de residencia, resulta controvertido en la relacion entre las asociaciones de migrantes y las instituciones politicas del pais de residencia. Junto a diferentes modelos de incorporacién politica de los migrantes pueden existir actitudes bastantes similares con respecto a CAPITULO 1, LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 29 la movilizacion politica transnacional hacia el pais natal de los migrantes (@stergaard-Nielsen, 2001b). Mas aun, los _estudios que comparan el_impacto de Jas estructuras de oportunidad politica nacionales en la actividad politica transnacional de lo: migrantes no deberian generalizar acerca de los diferentes colectivos de mi- grantes. Los distintos grupos de migrantes dentro de un mismo pais receptor pueden tener acceso diferente y elegir estrategias muy distintas. Incluso dentro del mismo colectivo migrante no siempre se puede generalizar. Por ejemplo, entre los turcos y kurdos (de un mismo pais de origen, Turquia) determinadas asociaciones tienen mas facil acceso a los politicos centrales que otras. Estas son normalmente las asociaciones menos controvertidas en términos tanto de politica interna en el pais de acogida como en sus relacio- nes con Turquia. Mientras tanto, aquellas asociaciones con menos acceso, han optado por formas de mayor confrontacién como las manifetacones| (@stergaard-Nielsen, 20034). MAS ALLA DE LAS ESTRUCTURAS LOCALES DE OPORTUNIDAD POLITICA Las practicas politicas transnacionales de los migrantes han de situarse en su contexto politico institucional particular en el pais de origen y de residencia. No obstante, a fin de superar el nacionalismo metodoJogico es importante tomar en serio lo_ilimitado de la politica transnacional delos migrantes. Las asociaciones 0 movimientos politicos de_los migrantes pueden procurarse una amplia gama de recursos cuando se vinculan con otras asociaciones 0 actores politicos fuera del contexto politico local. En realidad, el fin princi- pal de las redes politicas transnacionales de los migrantes es desligarse de su contexto nacional y ser capaces de conseguir recursos de asociaciones u otros actores politicos de cualquier lugar. Por ejemplo, en el caso de los turcos y kurdos, el escenario y genealogia de las organizaciones politicas transnacionales (muchas de las cuales también ahora, o incluso antes que nada, sirven de asociaciones politicas de migrantes) se presenta muy similar en Alemania y en los Paises Bajos (0 Dinamarca), ilustrando la importancia de las redes transnacionales que los migrantes establecen con su pais de origen y, también importante, con otras asociaciones en Alemania, los Paises Bajos o Dinamarca. Las asociaciones locales estan vinculadas mediante una creciente infraestructura institucionalizada de federaciones nacionales y eu- Topeas que mantienen diversos tipos de vinculos con el pais natal. A través de estas redes, las asociaciones juntan recursos ¢ intercambian informacion sobre cuestiones politicas referidas a Jos inmigrantes y al terrujio. También celebran juntos festivales y encuentros politicos o coordinan sus campaas (Ostergaard-Nielsen, 2001b). De modo similar, cualquier andlisis sobre la movilizacién de las asociaciones de marroquies en Espaiia necesita contar 30 EVA OSTERGAARD-NIELSEN CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS, 31 con los crecientes vinculos institucionalizados con asociaciones de migrantes en Francia, Bélgica 0 los Paises Bajos. Y entre los grupos latinoamericanos hay varios ejemplos de tales redes transnacionales, incluyendo las de las asociaciones de migrantes peruanos (Escriva, 2004). Asi, los estudios com- parativos sobre la relacién entre las estructuras nacionales de oportunidad politica y las practicas politicas hacia el pais natal de los migrantes tienen limitaciones. La ciudadania y las estructuras de oportunidad politica son elementos importantes en el universo politico de los migrantes, pero también lo son Sus redes y recursos transnacionales. Asimismo, las_organizaciones y_redes internacionales pueden facilitar las_practicas politicas transnacionales de los migrantes. En particular, los grupos de migrantes 0 diaspéricos que se oponen a un Estado, que tienen fuertes aliados en sus paises de acogida o que simplemente son demasiado poderosos para que otros Estados se entrometan en sus asuntos, pueden dirigirse a las organizaciones internacionales como las Naciones Unidas (ONU), la Organizacion para la Seguridad y la Cooperacién en Europa, el Consejo Europeo y otras parecidas. Uno de los ejemplos mas clasicos fue el lobby ejercido por la OLP para el reconocimiento de Palestina como miembro de la ONU. Otro ejemplo lo constituye el de los tibetanos, quienes han de- fendido su historia de persecucién y discriminacién de mano de los chinos ante foros internacionales y no ante el Estado que los acoge, la India. Con todo, en mi experiencia investigadora he visté que sélo los grupos con mas recursos consiguen cabildear a las organizaciones internacionales a un nivel mas profesional sin ayuda. Pocos movimientos turcos y kurdos en Europa han conseguido navegar entre las instituciones politicas en el ambito euro- peo, ¢ incluso entonces su cabildeo es bastante esporadico. Por contra, las Mamadas redes de defensa trans-estatales de ONGs son muy valiosas (Keck y Sikkink, 1998). La cooptacién de las ONGs a escala nacional ¢ internacional es una estrategia muy solicitada dentro de las actividades politicas que se dirigen hacia la patria natal, ya que tales organizaciones facilitan el contac- to con niveles de elaboraci6n de politicas a los cuales de otra manera para una organizacién diaspérica seria dificil obtener acceso. De manera similar, las practicas polilicas transnacionales de los migrantes se traman dentro de tales redes de influencia. Destaca el caso de las asociaciones de kurdos que han conseguido conectar con redes de organizaciones internacionales de derechos humanos que tienen un mas facil acceso a los politicos que los propios kurdos (Ostergaard-Nielsen, 2003d). Otro rol probablemente atin mas importante de las organizaciones inter- nacionales es el de proveer un marco discursivo de referencia para aquellos grupos que abogan por agendas de democratizacion y derechos humanos. En particular, los discursos sobre derechos humanos proporcionan el lenguaje adecuado para las negociaciones entre las redes politicas transnacionales de los migrantes y los Estados, y las organizaciones internacionales aportan el sitio donde tales negociaciones pueden tener lugar (Ostergaard-Nielsen, 2001a). Por ejemplo, la investigacion sobre grupos politicos diaspéricos en los Estados Unidos ha argumentado que los grupos de migrantes asentados en los paises mas occidentales (en particular en EE.UU.) se posicionaron de acuerdo a la bipolarididad que trajo la guerra fria entre los intereses de la politica exterior de occidente y los soviéticos. Por ello, se dio la bienvenida a los migrantes que se oponian a los regimenes politicos apoyados por la Unién Soviética, mientras que aquellos que apoyaban tales regimenes fue- ron ignorados (Shain, 1999). Hoy parece haber mas espacio para el cabildeo sobre politica exterior de los migrantes, en la medida en que los ideales de democracia, pluralismo, autodeterminacién y derechos humanos son acla- madbs, en principio, como centrales en el disefo de la politica exterior de los Estados occidentales en la era post-guerra fria. Ademas, el tratamiento de las minorias se ha convertido crecientemente en un asunto transnacio- nal, con la introduccién de nuevas y mas amplias estructuras de seguridad regionales, la implementacién de normas de intervencién humanitaria y los llamamientos a la implementacion de los principios universales de los dere- chos humanos. De acuerdo con esto, en algunos casos los Estados llegan a estar mas abiertos a la idea de subordinar su politica interna al escrutinio de Estados extranjeros y organizaciones internacionales (Smith, 1999). LOS MIGRANTES Y LOS PROCESOS DE DEMOCRATIZACION Los migrantes navegan un paisaje politico complejo y multinivel cuando se involucran en la politica de su pais de origen desde lejos. La mayoria de las investigaciones se han ocupado principalmente de como las actividades politicas transfronterizas de los migrantes se vinculan con los intereses gubernamen- tales locales o nacionales en el pais de origen o de residencia, y qué tipo de membresia 0 ciudadania comporta la politica transnacional de los migrantes. Existen menos evaluaciones de qué tan influyentes son en realidad estas acti- vidades. Uno de Jos pardmetros para discutir talinfluencia, que a la vez entra en una evaluacién normativa del fenémeno, es e] modo s politicas transnacionales de los migrantes contril democraticos, tanto en el pais de origen coma enelderesidencia (Shain, 1999: Faist, 2000; Baubéck, 2003). La literatura reciente sobre las practicas trans- nacionales de los migrantes ha puesto en cuestién el discurso postnacional sobre “deterritorializacion” que caracterizé los primeros andlisis, en particular de las politicas de los paises emisores hacia sus nacionales en el extranjero (Glick-Schiller et al., 1992). Se sefalan procesos de “reterritorializacion” en la medida en que las instituciones estatales cooptan o, al menos, intentan| canalizar las practicas transnacionales de los migrantes. Igualmente impor tante es su cuestionamiento acerca de si las practicas transnacionales d los migrantes retan a las instituciones estatales 0 si, por el contrario, sirven a sus intereses (Faist, 2000; Guarnizo y Smith, 1998; Smith, 2003). 32. EVA OSTERGAARD-NIELSEN En términos del pais de origen, las investigaciones recientes se preguntan came la participacion politica desde fuera beneficia los procesos democraticos alinterior. El mismo término “transnacionalismo de las bases” implica una participacién de abajo a arriba en lo que de otro modo serian democracias de arriba a abajo. Por ejemplo, las iniciativas translocales pueden beneficiar no s6lo el pueblo o regién natal, sino también desafiar el mando politico a escala nacional (Portes, 1999). De manera similar, las redes entre asociacio- nes de migrantes en el extranjero y las organizaciones de la sociedad civil en el pais natal podrian aumentar la capacidad de éstas para cuestionar, criticar y hacer publicidad y, por lo tanto, reforzar el control democratico en casa (Ostergaard-Nielsen, 2003d). ¥ en los casos en los que los migrantes pueden votar en las elecciones desde el exterior, se entiende que poseen una plataforma desde la cual obtener informacién menos sesgada y ejercer una influencia en la politica de su pais natal que de no haber salido seria impo- sible de obtener (Baubéck, 2003). Aunque estos hallazgos son una contribuci6n valiosa a la dimensién constructiva de la relacién entre paises emisores y sus ciudadanos en el exterior, otros estudios muestran una imagen mas compleja. En términos de participacién electoral, existen ejemplos tales como el de las elecciones italianas en 2006, en los que el voto expatriado ha marcado la diferencia en el resultado electoral. Sin embargo, los niveles de participacién son por lo general bajos (IDEA, 2006), con la excepcién‘de paises como Perti donde el voto es obligatorio también para los emigrantes (Escriva, 2004). Incluso en los casos en que los migrantes han luchado duro y durante mucho tiempo por el derecho al voto, como es el caso dominicano, el dia de las elecciones el porcentaje de participacién ha sido bajo (Itzigsohn y Villacrés, 2007). El hecho de que el nivel de voto entre los emigrantes sea menor que dentro del pais se ha explicado por las particulares barreras logisticas al registro electoral en el exterior y el a menudo limitado numero de colegios electorales (IDEA, 2006). Se ha argumentado también que el derecho al voto es visto por los migrantes como un derecho simbélico que codifica su demanda de reconocimiento por el pais de origen (Itzigsohn y Villacrés, 2007). Aniadir a esto que algunos co- lectivos de migrantes estan muy poco entusiasmados con la élite politica de su pais natal, en particular a escala nacional (Ostergaard-Nielsen, 2003b). En términos de la influencia que los migrantes tratan de ejercer a través del cabildeo en el exterior, yg es facil determinar con exactitud cuanta in- fluencia los migrantes pueden ejercer presionando a los gobiernos de acogida. Cualquier anilisis de la politica estadounidense hacia el Proximo Oriente, Cuba o Irlanda del Norte seria deficiente si no considerara los esfuerzos de las didsporas judia, cubana o irlandesa, respectivamente (Cochrane, 2007; Shain, 1999). No obstante, el cabildeo politico de la diaspora raramente des- via la politica exterior fuera de los intereses nacionales ya definidos por los gobiernos, tales como las relaciones politicas econémicas o de seguridad con el pais de origen de los migrantes u otros paises de la region (Ostergaard- CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS, 33, Nielsen, 200 1a). De hecho, es importante enfatizar que pocos grupos politicos orientados_hacia el pais natal tienen éxito. Mas de una campaia politica dirigida al pais de origen es ignorada o incluso prohibida si el movimiento politico utiliza medios demasiado radicales para llamar la atencion. ‘Ademas, parte de la dificultad en calcular la contribuci6n de los migrantes a la democratizacion de la patria natal reside en la falta de transparencia de las asociaciones de migrantes y sus redes transnacionales. Puede ser dificil determinar “quién representa a quién” en términos de la organizacién politica de los migrantes. Primero, no siempre esta claro hasta qué punto las asocia- ciones diasporicas o de migrantes representan los grupos del pais de origen. Los exiliados pueden aportar una plataforma para dar voz al descontento con los regimenes totalitarios, pero algunas veces tal intervencion puede enredar mas que aliviar las disputas en la politica del pais natal. Claramente todos los gobiernos desean grupos de lobby en el extranjero que les apoyen - en particular cuando residen en paises que son influyentes en la politica global. Ahora bien, algunos paises emisores, como la India, Armenia 0 Chipre, se mantienen ambiguos sobre su deseo de que exista una influencia politica desde lejos, porque sienten que los que se fueron han perdido contacto con la realidad diaria de sus patrias y se centran sélo en cuestiones politicas mas emotivas (Ostergaard-Nielsen, 2003a) - tal y como se presenta en la descripcién de Anderson (1992) sobre el nacionalismo de larga distancia’, ELmismo tipo de argumento se ha aplicado ete de lea canes migrantes que participan en idades transnacionales mas de tipo desa rrollista a escala local. gHasta qué punto los migrantes hablan en nombre de su pueblo? (Waldinger et al., 2007). Un ntimero creciente de estudios sobre asociaciones de paisanos, especialmente de latinoamericanos residentes en los Estados Unidos, ilustra el compromiso de los migrantes en la mejora de las condiciones sociales y econdmicas de su localidad de origen. Empero, en algunos casos también cuestionan hasta qué punto los migrantes son capa- ces de desafiar las jerarquias de poder locales y proveer una contrafuerza a los procesos de exclusién socio-econémica y politica en sus pueblos natales (Itzigsohn y Villacrés, 2007). No se deberia exagerar sobre el caracter emanci- patorio y contrahegeménico de las practicas transnacionales de los migrantes, incluido su apoyo econémico (Guarnizo y Smith, 1998; Mahler, 1998). } '° En casos extremos, se advierte de las tendencias particularistas y extremistas dentro de Ja movilizacién politica hacia la patria natal de los migrantes y sus descendientes (Huntington, 2004; Kaldor et al., 2003; Leiken, 2005). La cuestién de la seguridad y las dobles lealtades esta también presente en los debates sobre el derecho a la doble nacionalidad de los migrantes, aunque la tolerancia hacia esta doble nacionalidad esta creciendo entre los Estados miembros de la Unién Europea (Ostergaard-Nielsen, 2003d; 2008) 34 EVA OSTERGAARD-NIELSEN Qtra preocupacién relacionada con la movilizacion politica hacia la patria natal de los colectivos de migrantes es si la movilizaci6n politica transnacional de los migrantes acttia como obstaculo a la incorporacion de los migrantes en sus paises de residencia. Por ejemplo, Glick Schiller y Fouron (1999) hacen notar cémo el fransnacionalismo entre los haitianos en los Estados Unidos aminora su participacion en las luchas por la justicia social de grupos de base asentados en los Estados Unidos. De manera similar, los kurdos en Londres, que pasan el dia trabajando ilegalmente durante muchas horas y en condiciones deplorables en los talleres clandestinos del norte de la ciudad, utilizan su escaso tiempo libre en movilizarse alrededor de agendas politicas del pais natal que son insostenibles incluso en el anlisis mas optimista de la politica regional turca y del Proximo Oriente. Esto no les deja tiempo para participar en reuniones para mejorar las condiciones legales y sociales de los solicitantes de asilo en el Reino Unido. Asi pues, aunque la lealtad politica por lo general no constituye un juego de suma cero entre el pais receptor y el de origen, los procesos de movilizacion politica dirigidos a la patria natal pueden servir para desviar la atencién en casos particulares. Con_tado, contamos con un _creciente climulo de evidencias que ilustran como la participacion en la politica del pais de origen refuerza la integracion politica en el pais de asentamiento (Faist, 2000; Portes, 1999). Portes (1999) argumenta que la orientacion politica transnacional de los migrantes les con- fiere una voz que de otro modo no tendrian. Esto les sirve para empoderarse, investirles con un sentido de propésito y valia y de esta manera “acttia como un antidoto efectivo contra la tendencia hacia la asimilacion descendente...” (Portes, 1999:471). En conereto, Shain (1999) arguye que las practicas po- liticas transnacionales pueden contribuir al desarrollo de una democracia multicultural en el pais de acogida. Por otro lado, la participacion en campafias para la democratizacién de su pais natal puede ofrecer a los grupos margi- nales de refugiados y migrantes un mayor punto de contacto con el sistema politico del pais de acogida (Shain, 1999). Por ejemplo, las asociaciones de migrantes turcos y kurdos en Alemania se erigen como puentes importantes entre las comunidades de migrantes y el sistema politico del pais de acogida. Su actividad politica transnacional es una plataforma desde la cual es mas facil orientarse hacia - y contribuir a - la politica del pais de asentamiento (@stergaard-Nielsen, 20034). Cualquiera que sea el impacto real sobre la democratizacion de los paises emisores 0 receptores, el fenémeno de las practicas politicas transnacionales de los migrantes contribuye a la erosién de la distincion (tenemos que admitir, bastante antigua) entre politica exterior interna. Contribuyen a lo que se ha denominado como “difusion de la politica interna” (Miller, 1981), tanto en el pais emisor como receptor. CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 35 COMENTARIOS FINALES La 6ptica transnacional sobre la participacién politica de los migrantes resalta la tension entre la movilidad de las personas, la interconexién de las socie- dades y los limites de los Estados. De hecho, como adaptar los sistemas de representacién democratica a la movilidad creciente de los ciudadanos resulta un desafio importante, tanto para los paises emisores como receptores. Las diferentes respuestas de los Estados y el derecho al voto local que se le ha otorgado a los ciudadanos de la Unién Europea significa que los diferentes colectivos de migrantes en Europa poseen conjuntos muy diferentes de de- rechos politicos. Por ejemplo, dentro del territorio espafiol los tres colectivos mas grandes de migrantes disfrutan de un muy desigual acceso a la politic: electoral. Los rumanos pueden votar, tanto en las elecciones en Rumania como en las elecciones locales en Espaiia, debido a su estatus como ciudadanos de la Union Europea. De manera similar, los ecuatorianos pueden votar en las elecciones ecuatorianas y, debido a los acuerdos bilaterales entre Ecuador y Espajia, s6lo deben demostrar dos aiios de residencia legal para solicitar la nacionalizacién espaiiola. Por el contrario, los marroquies todavia no pueden votar en su pais de origen y deben demostrar al menos diez afios de residen- cia legal para solicitar la nacionalidad. Con todo, la_agencia politica de los migrantes ng deberia igualarse sélo con Ja politica electoral. Incluso en los casos en los que los migrantes no tienen el derecho al voto ni en su pais de residencia ni en el de origen, el caso de los marroquies en Espaiia, ellos de- vienen actores en los campos politicos locales, nacionales y transnacionales| (Ostergaard-Nielsen y Moreras, 2006). Este capitulo ha remarcado la relacin dialéctica entre la actividad poli- tica transfronteriza de los migrantes y su ambiente politico a varios niveles. He defendido la necesidad de una investigacion empirica y una teorizacion de las practicas politicas transnacionales de los migrantes que los coloque en un marco que examine criticamente su rol y agencia en la politica local y global. Tal estudio se aparta de apreciar el grado de transnacionalidad de las practicas politicas de los migrantes para tomar en serio estas practicas como parte de procesos politicos locales, nacionales e internacionales. En otras palabras, afiade el “como” y el “ahora qué” a la comprensién del “porqué”. El campo de investigacién sobre las practicas politicas transnacionales de los migrantes esta todavia en ciernes. Mas investigacion comparativa, en parti- cular sobre la misma red politica transnacional de migrantes en diferentes contextos politicos o diferentes redes transnacionales de migrantes dentro del mismo contexto politico, podria aportar un entendimiento mas sistema- tico de los modos en que los diferentes contextos politicos influencian, y son influenciados por, las practicas transnacionales de los migrantes. Espaiia, como este volumen testifica, ofrece una interesante perspectiva comparativa a las experiencias de otros paises de inmigracién europeos y norteamericanos. Préximos estudios remarcaran cémo una perspectiva trans- 36 EVA @STERGAARD- NIELSEN nacional sobre la participacion politica de los migrantes se intersecta con las politicas espanolas de incorporaci6n de los migrantes y cémo estas politicas, a su vez, posibilitan o constrifien la accién transnacional de los migrantes. Al llevar a cabo esto, resulta relevante no sélo fijarse en el ambiente politico institucional de los gobiernos nacionales en el pais de origen y residencia, sino incluir también los gobiernos locales y los actores no-estatales (tales como ONGs y, por supuesto, organizaciones religiosas). Esto es especialmente im- portante para la dimensién de la participacign de Jos migrantes en proyectos translocales de codesarrollo y para la nocién de la cooperacién dentro de la sociedad civil transnacional, que es un rasgo transversal dentro de la accion transnacional de los colectivos de migrantes en Espafia (Escriva y Ribas, 2004; Ostergaard-Nielsen, 2007a). Adicionalmente, parece también relevante en el caso de Espafia no definir Ja transnacionalidad de los migrantes ex- clusivamente como sus vinculos con el pais de origen. Resulta fundamental considerar el grado de importancia de las redes transnacionales entre aso- ciaciones de migrantes en diferentes paises de inmigracion para sus procesos locales de movilizaciony reclamo. Los grupos de migrantes latinoamericanos, como este volumen sefala, parecen ser un caso adecuado para tales estudios sobre redes transtronterizas, debido a su asentamiento en toda Europa y en los Estados Unidos. Nuevas investigaciones comparativas intra-europeas 0 transatlanticas enriqueceran nuestro conocimiento sobre los modos en que un contexto politico institucional diferente en Norteamérica y Espana influye en ~y es influido por - la participacion politica local y transnacional de los migrantes. BIBLIOGRAFIA. ABADAN-UNAT, N. (1997), “Ethnic business, ethnic communities, and ethnopolitics among Turks in Europe” en E. M. Ucarer y D. J. Puchala (eds.), Migration into Western Societies: Problems and Policies. London: Pinter Publishers, 229-251. ANDERSON, B. (1992), “The new world disorder”. New Left Review, 32(193): 3-13. BAUBOCK, R. (2003), “Towards a political theory of migrant transnationalism”. International Migration Review, 37(3): 700-723. BRAND, L. (2002), “States and their Expatriates: Explaining the Develop- ment of Tunisian and Moroccan Emigration-Related Institutions”. Working Paper No. 52, Center for Comparative Immigration Studies, University of California (San Diego). CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS. 37 COCHRANE, F. (2007), “The potential of diaspora communities in peace building: the Irish case" en A. Swain (ed.), Diasporas, Armed Conflicts and Peacebuilding in their Homelands. Uppsala: Uppsala University. COHEN, R. (1997), Global Diasporas. London: UCL Press. ESCRIVA, A. (2004), “Formas y motivos de la accion transnacional. Vinculaciones de los peruanos con el pais de origen” en A. Escriva y N. Ribas (eds.), Mi- gracién y Desarrollo, Cordoba: CSIC, 149-181. ESCRIVA, A. y N. RIBAS, (eds.) (2004), Migracién y Desarrollo. Estudios sobre Remesas y otras Practicas Transnacionales en Esparia. Cordoba: CSIC, Coleccién Politeya. FAIST, T. (2000), The Volume and Dynamics of International Migration and Transnational Social Spaces. Oxford: Oxford University Press. GIMENEZ, C., J. L. M. MARTINEZ, M. F. GARCIA y A. C. MAISONAVE (2006), El Codesarrollo en Espafia: Protagonistas, Discursos y Experiencias. Ma- drid: Catarata. GLICK-SCHILLER, N., L. BASCH y C, BLANC-SZANTON (1992), “Towards a Transnational Perspective on Migration”. Annals of the New York Academy of Sciences, 645: 1-24. GUARNIZO, L. E., A. PORTES y W. HALLER (2003), “Assimilation and transnationalism: determinants of transnational political action among contemporary migrants”. American Journal of Sociology, 108(6): 1211- 1248. GUARNIZO, L. E. y M. P. SMITH (1998), “The locations of transnationalism” en M. P. Smith y L. E. Guarnizo (eds.), Transnationalism from Below. New Brunswick: Transaction Publishers, 3-34. HUNTINGTON, S. (2004), Who are we? America’s Great Debate. London: The Free Press. IDEA (2006), Voting from Abroad: The International IDEA Handbook. Stockholm: International Institute for Democracy and Electoral Assistance. ITZIGSOHN, J. (2000), “Immigration and the boundaries of citizenship”. In- ternational Migration Review, 34(4): 1126-1154. ITZIGSOMN, J., C. D. CABRAL, E. H. MEDINA y O. VAZQUEZ (1999), “Mapping 38 EVA OSTERGAARD-NIELSEN, Dominican transnationalism: narrow and broad transnational practices”. International Migration Review, 34: 316-339. ITZIGSOHN, J. y D. VILLACRES (2007), “Migrant political transnationalism and the practice of democracy”. Racial and Ethnic Studies, 31(4): 664- 686. JOPPKE, C. y E. MORAWSKA (2003), “Integrating Immigrants in Liberal Nation-States: Policies and Practices” en C. Joppke y E. Morawska (eds.), Toward Assimilation and Citizenship: Immigrants in Liberal Nation-States. Basingstoke: Palgrave MacMillan, 1-36. KALDOR, M., H. ANHEIER y M. GLASIUS (2003), “Global civil society in an era of regressive globalisation” en H. Anheier, M. Glasius y M. Kaldor (eds.), Global Civil Society 2003. Oxford: Oxford University Press. KECK, M. E. y K. SIKKINK (1998), Activists Beyond Borders: Advocacy Net- works in International Politics. London: Cornell University Press. KLEIST, N. (2007), “Spaces of Recognition. An analysis of Somali-Danish Associational Engagement and Diasporic Mobilization”. Tesis doctoral, Copenhagen University. ; KOOPMANS, R. y P. STATHAM (2003), “How national citizenship shapes transnationalism: migrant and minority claims-making in Germany, Great Britain and the Netherlands” en C. Joppke y E. Morawska (eds.), Toward Assimilation and Citizenship: Immigrants in Liberal Nation-Staies. Basingstoke: Palgrave MacMillan, 195-238. LACOMBA, J. (2004), Migraciones y Desarrollo en Marruecos. Madrid: Catarata. LACROIX, T. (2005), Les réseaux marocains du développement. Géographie du transnational et politiques du territorial. Paris: les Presses de Science Po. LEIKEN, R. S. (2005), “Europe's Mujahideen. Where Mass Immigration Meets Global Terrorism”. Report, Center for Immigration Studies. LEVITT, P. (2001), “Transnational migration: taking stock and future directions”. Global Networks, 1(3): 195-216. (2003), “Keeping feet in both worlds: transnational practices and inmigrants incorporation in the United States", en C. Joppke y E. Morawska (eds.), Toward Assimilation and Citizenship: Inmigrants in Liberal Nation-States. Basingstoke: Palgrave MacMillan. CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS, 39 LEVITT, P. y R. DE LA DEHESA (2003), “Transnational migration and the redefinition of the state: variations and explanations.” Ethnic and Racial Studies, 26(4): 587-611. MAHLER, S. J. (1998), “Theoretical and empirical contributions toward a research agenda for transnationalism” en M. P. Smith y L. E. Guarnizo (eds.), Transnationalism From Below. New Brunswick, NJ: Transaction Publishers, 64-100. (2000), “Constructing International Relations: the role of transnational migrants and other non-state Actors”. Identities, 7(2): 197-232. MILLER, M. J. (1981), Foreign Workers in Western Europe: An Emerging Political Force. New York: Praeger Publishers. ORJUELA, C. (2007), “War, peace and the Sri Lankan diaspora: complications and implications for policy” en A. Swain (ed.), Diasporas, Armed Conflicts and Peacebuilding in their Homelands. Uppsala, Department of Peace and Conflict Studies: University of Uppsala. OSTERGAARD-NIELSEN, E. (2001a), “Diasporas in global politics” en D. Josselin y W. Wallace (eds.), Non-state Actors in World Politics. Basingstoke: Palgrave, 218-234. (2001b), “Transnational political practices and the receiving state: Turks and Kurds in Germany and the Netherlands.” Global Networks, 1(3): 261- 282. (2003a), “The democratic deficit of diaspora politics: London Cypriots and the Cyprus issue.” Journal of Ethnic and Migration Studies, 29(4): 683- 700. (2003b), International Migration and Sending Countries: Perceptions, Policies and Transnational Relations. Basingstoke: Palgrave MacMillan. (2003c), “The politics of migrants’ transnational practices.” International Migration Review, 37(3): 665-690. (2003d), Transnational Politics: Turks and Kurds in Germany. London/New York: Routledge. (2008), “Codevelopment: collaboration or co-option? Catalan-based Moroc- can migrant associations’ transnational engagement in projects of develo- pment and democratisation in Northern Morocco”. Ponencia presentada 40 EVA @STERGAARD-NIELSEN en Diaspora, Development and Conflict, the Third International Workshop on the Forms and Means of Transnational Engagement, DIS, Bornholm, Denmark. (2006), “Diasporas and Conflict Resolution: part of the problem or part of the solution”, DIES Brief. Danish Institute for International Studies, Copenhagen. (2007a), “Codevelopment and citizenship, the mobilization of migrants in Spain around development in their countries of origin”, Working Group on Transnationalisation and Development(s): Towards a North-South Perspec- tive’, Center for Interdisciplinary Research (Zi), Bielefeld University, (en proceso de revision). (2007b), “The Kurds in the EU and the conflict in Turkey” en A. Schwain (ed.), Diasporas, Armed Conflicts and Peace Building in their Homelands. Uppsala: Uppsala University. (2008), “Dual Citizenship: Policy Trends and Political Participation in the European Union”. Policy paper. European Parliaments’ Committee on Constitutional Affairs, Brussels, (2009), “The end of closet transnationalism? The role of homeland politics in the political incorporation of Turks and Kurds in Europe” en J. Mollenkopf yd. Hochschild (eds.), Immigrant Political Incorporation in the United States and Europe. Ithaca: Cornell University Press (en prensa). OSTERGAARD-NIELSEN, E. y J. MORERAS (2006), “Spain” en G. Aubarell (ed.), Migrant Communities and the Internal and External Dynamics of Integration: the Potential Role of Migrants in the Euro-Mediterranean Partnership. Lisbon: Euromesco, 17-23. PORTES, A. (1999), “Conclusion: towards a new world - the origins and effects of transnational activities", Ethnic and Racial Studies, 22(2): 463-477, (2001), “Introduction: the debates and significance of immigrant transnationalism”. Global Networks, 1(3): 181-193. SHAIN, Y. (1999), Marketing the American Creed abroad, Diasporas in the U.S. and their Homelands. Cambridge: Cambridge University Press. SHEFFER, G. (ed.) (1986), Modern Diasporas in International Politics. Kent: Croom Helm. CAPITULO 1. LA POLITICA A TRAVES DE LAS FRONTERAS, 41 SMITH, G. (1999), “Transnational politics and the politics of the Russian diaspora”. Ethnic and Racial Studies, 22 (3): 500-523. SMITH, M.P. (2003), “Transnationalism, the State, and the extraterritorial citizen". Politics and Society, 31(4): 467-502. VERTOVEC, S. (2004), “Migrant transnationalism and modes of transformation”, International Migration Review, 38(3): 970-1001. VONO DE VILHENA, D. (2006), Vinculacién de los Emigrados Latinoamericanos y Cariberios con su Pais de Origen: Transnacionalismo y Politicas Ptiblicas. Santiago de Chile: CEPAL. WALDINGER, R., E. POPKIN y A. MAGANA (2008), “Conflict and contestation in the cross-border community: hometown associations reassessed”. Ethnic and Racial Studies, 31(5): 843-870. WIMMER, A. y N. GLICK-SCHILLER (2002), “Methodological nationalism and beyond: nation-state building, migration and the social sciences”. Global Networks, 2(4): 301-334.

You might also like