You are on page 1of 17
250a. Historia interna del gallego: sistema fonico y grafico, morfologia, sintaxis, Iéxico y formacién de palabras Interne Sprachgeschichte des Galicischen: Laut- und Schriftsystem, Morphologie, Syntax, Wortschatz und Wortbildung Introduccion Sistema fonico y gritico Morfologia Sintaxis Léxico Formacién de palabras Bibliografia 1. Introduccién La separacién entre historia interna y externa ( art. 4), metédica, pero no real, ¢¢ particularmente dificil en el caso de una len- gua como la gallega ya que practicamente desde los inicios la lengua escrita, tinica fuente directa para la historia remota, parece estar marcada, en mayor o menor medida, por el contacto con otras lenguas, 0 con el latin o con el castellano, No es facil, ues, especular sobre Id evolucién indepen diente, evidentemente existente, del dialecto oral primario del noroeste de la Peninsula Ibérica; asimismo es dificil— y objeto de dis- cusiones ~ determinar el grado de diferencia entre los dialectos del norte, del territorio gallego, y los de los territorios de expansin hacia el sur, en el teftitorio portugués, poli- ticamente separados ya desde els. XI e influ- enciades por el contacto con el mozérabe, sobie todo en la ciudad de Lisboa (-> art. 74). La situacion de contacto lingiiistico marca la historia interna de la lengua, y el continuo entre lengua independiente y dependiente se aplaza en las distintas fases desde la historia de la lengua escrita hacia la lengua hablada, afectando, en diferente medida y en diferentes épocas, los distintos niveles de estructuracién lingilistica, empe- zando por el léxico, parcialmente castellani- zado ya en la EM, pasando por la sintaxis y algunos marcados elementos fénicos hasta llegar a la fonética y la prosodia. Esta ero- sion interna de la lengua acentuada desde finales del s, XVIII sobre todo en ambitos urbanos y semiurbanos, provacé una reac- cion emancipadora desde els, XIX y desem- bocé, después de una historia compleja y conflictiva, en un amplio, movimiento de rei- vindicacién lingiiistica gallega a partir del Iidiké Szij | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 ~2,_.Sistema fénicoy grafico 2.2 final de la dictadura franquista en 1975 y con foco de irradiacién en el ambito urbano. Este movimiento busca la ‘depuracion’ del gallego y una cierta diferenciacién lingti Stica con respecto al espaiiol. En las gramé- ticas y las obras de referencia gallegas actua- les se refleja este alan depurador, y se pro- cura presentar un gallego comin depurado de castellanismos. La realidad linglistica corresponde en parte a los rasgos de ese Rallego comin, sobre todo en variedades poco afectadas por el castellano y las nuevas variedades urbanas, pero hay que sefialar que en algunos casos las formas descritas en las obras de referencia son claramente mino- ritarias y derivan més de criterios de planifi- ‘cacién que de descripcién. Asi, pej., se lee a menudo que el gallego, a diferencia del espa- fiol, carece de formas verbales temporales perifrdsticas gramaticalizadas; su existencia tiene, sin embargo, bastante difusién en el gallego hablado actual. Una vez mas se con- firma en este caso, pues, que la gramatica historica de una lengua no deberia descri- irs como una evolucién lineal, sino dife- enciando las distintas variedades y tradi- ciones discursivas, El sistema fonoldgico del gallego actual (ef Bello Rivas 1998) conserva, en cuanto ai vocalismo, el sistema del latin vulgar (PANE > pan); CERVU > Bepfio; MENSE > mes; FILU > fio; FoRTE > forte; TOTU > too: LUNA > Ia) ¥ no presenta ni diptongacién de las vocales abiertas e y 9 ni vocales o diptongos nasales (wane > ben; sunt > son). El vocalismo completo de’siete vocales se presenta en posicion ténica y pretonica y se reduce a las cinco vocales cardinales en posicién posté- nica y a las tres vocales a, e y o en posicién final absoluta. Sobre la evolucion regular intervienen algunos factores que condicio- nan modificaciones, estos factores son la metafonia o asimilacién a otras vocales, contacto con la semiconsonante yod, el con- tacto con iwau y él contacto con un elemento nasal. Las vocales mas estables son In u y la 2 XIII, Kommunikationsbereiche, Medien und Texttorten aus sprachgeschichtlicher Sicht 4, que se mantienen; les sigue en estabilidad Jaa, con algunos casos de inflexi6n por con- tacto con yod. Las demés voceles pueden verse afectadas por elementos de contacto pper metafonia (Meru > medo; VENI > vin); or yod: Lacte > ete; sPECULU > espello: OcuLY > ollo; OcrO > oito; PUGNU > pulfo: or wau: 1UDAEU > xudew; por nasal: CENTU > cento; LINGUA > lingua; PONTE > ponte; UNGULA > unlla. Se ha especulado sobre el posible origen comin de una tendencia observable en asturiano, galego y portugues 2 cerrar In vocal final o > u; sin embargo, esta pronuncieci6n es mucho menos mar cada en gallego, donde se suele pronunciar -o, y es més bien rara su documentacién en Ja lengua escrita medieval, donde ademés parece corresponder més bien 2 grafas lati nizantes (cf Maia 1986, 40). Los diptongos latinos o se simplifican 0 se ‘modifican; al mismo tiempo, el gallego va creando nuevos diptongos resultantes de vocalizaciones de consonantes. El diptongo «use convierteen ou: CAUSA > couse; TAURU > touro; no se registran alternancias ou-o. También legen a -ou las terminaciones latinas -avir: caNTaviT > eantou, el nexo latino al (ALTERU > outro), conservado s6lo en cultismos y semicultismos (rausu > {falso). El diptongo oes producto dela voea- lizaci6n de grupos como oks, okt, ukt 0 ult u ori (EXSUCTU > enxoito; FRUCTA > frofta; TRUCTA > trolta; MULTU > motto; CORIU > covro). El diplongo ei es resultado de ‘Avetimoldgico (varka > velga), de metatesis: PRIMARIU > primeiro; de vocalizaciones: CANTAYI > cantei, FACTU > feito; PECTU>~~ “peitc: Et diptongo eu se da en formas como TUDAEU > xudew; EGO > ew y en las formas verbales mordew, perdeu etc. El gallego man- tiene algunos hiatos latinos (rua > tia; VIA > via; LEONE > len) y ha creado hiatos nuevos en casos de pérdida de consonantes imtervocilicas: cazLu > ceo; CATENA > cadea; LUNA > lia; SOLA > soa. La base del consonantismo gallego es él sistema roménico occidental de lenicién. Las consonantes oclusivas se mantienen en posicién inicial ante vocal central o velar. La ke cominmente palatalizada ante vocal pala- lal es una africada sorda /ts/ en la lengua antigua, igual que en las lenguas vecinas, y evoluciona posteriormente, segin la zona dialectal, a una fricativa sorda (con varian- les posicionales) en las zonas occidentales (0 de seseo) 0, en los dialectos centrales y orientales, a una Iricativa interdental sorda Ndliké Szifj| Johannes Kabatek, Seiten 1-17 (caBLU > seo /ceo [6e0)). camente, la. ante vocal palatal se asibila, transformandose en una africaday posteriormente fricativa sonora que en el gallego,a diferencia del por- tugués y paralelamente a Castlla-la-Vieja, ensordece, dando como resultado un sonido prepalatal sordo [f] (GENT: > xente). Al ‘mismo resultado llega la semiconsonante jl- (ian > xa {fal}. La evolucién de /kw/- inicial varia segin la zona, siendo mas general su simplificacién a ‘una simple oclusiva (QUANDO > cando; QUAM > ca). Lo mismo acontece con el grupo /gw/- inicial de algu- hos germanismos (WARDON > gardar), En posicién intervocilica, la base de a evolucion gallega de las oclusivas es, como en las lenguas vecinas, la. simplificacion de las geminadas latinas (Vacca > vaca; LiT- TERA > letra), la sonorizacién de las sordas simples (CEPULLA > cebola; PUTRE > podre; SOCRU > s0gro) y desaparicién de las sono- as (GRADU > grao; MAGIS > méis; con excep- ciones: PLAGA > chaga), salvo en el caso de -8-. La -5- intervocilica se mantiene en la mayoria de los casos como aproximante © sonido fricativo bilabial (HABERE > aver; CABALLU > cavalo; con excepciones, como unt > u), Este sonido bilabial confluye ya en la lengua antigua con el resultado de la evolucién del sonido labiovelar saw latino (vaca > vaca; vIUU > vivo; PLUVIA > oh via) y el resultado de la sonorizacién de la-F- (PROFECTU > proveito). La diferencia entre y parece ser, pues, puramente gréfica ya‘en la lengua antigua (con confu- siones ya en los textos del s. XIII: dvito al lado de dbito, bisauolo al lado de wisanoo etc. Lorenzo 1993), a diferencia del porii-~ gués meridional. La inexistencia de’ un sonido labiodental es comiin 2 todo el norte de la Peninsula Ibérica y se da también en Gascuiia, por lo que se ha relacionado con la influencia de un posible sustrato comiin, Las muestras antiguas de [a confusién en textos gallegos y la existencia del fendmeno cn los dialectos portugueses del norte hacen rechazar ia explicacion simplista de la influ- ‘ncia castellana posterior a la EM como cul- pable de esta tendencia (y lo mismo vale para el ensordecimiento de las sibilantes) En posicidn final, las consonantes oclusi- vas latinas no tienen continuadores en el gal- lego medieval. En cuanto a las consonantes Fricativas iniciales, el gallego comparte la tendencia comuin roménica de la conserva- cidn, a diferencia del castellano también en el caso de ia & (FACERE > facer; FILIU > fillo). 2500. Historia interna del galego Lo mismo acontece con la s-, que en algunos casos se palataliza (SAPONE > xabén; SURDU > xorto) En posicién intervocalica, las fricativas geminadas del latin se simplifican y las simples se sonorizen, confluyendo la /v/ con la fbl, y la -s- sonora, desonarizada como las demas sibilantes, con la s sorda (ya en el 8 XIV hay ejemplos de cassa, cassa, cassado, pasa etc., of ib). En posicién final, la -$ (Gorda) se mantiene. ‘La /se mantiene en posicion inicial y sdio se mantiene en posicidn intervocélica como resultado de la simplificacién de -LL- latina (Gautu > galo); la -L- simple latina intervo- célica desaparece en gallego y portugues (CAELU > ceo; SALUTE > satide). La oe y la N= se mantienen en posicién inicial; en posicion intervocélica se simplifican Ins geminadas (in palatalizacién de la : Pann > pano), se mantiene la -w- y se pierde la -N- entre vocales (LUNA > lita; TENERE > ter), caracte- ristica fundamental del gallego y portugués junto con ia pérdida de la -1-. En posicion final de silaba y final absoluta, la lengua moderna presenta consonantes nasales (GanaTU > gando; GENUCULU > xeonllo; (CANE> can; SUNT > som; NON > non: IN > en): la realizacién de la nasal final en gallego moderno es una nasal velar; a diferencia del portugués Jz vocal precedente a la conso- ‘ante nasal no se nasaliza, También es velar la consonante intervocilica en el articulo indefinido 0 numeral unha, resultado de des- hnasalizacion; Ia consonante nasal velar es considerada, pues, fonema en gallego (mar- cado en-gall med. unha frente @ una, 3* pers: ‘subj. pres. de unr) La desmasalizacién gal- lega parece ser un fenomeno ya de la lengua antigua y da diferentes resultados, unas veces con insercién de una consonante nasal (pe). razdes > razéos > razds > razéns en gall, oce.), otras veces sin ella (razdes > ra sen gall. centr. y > vrasois en gall. or., Marifio Paz 1998, 11; 0 pérdida de nasalidad final: HomiNe > home; VIRGINE > virxe) La vibrante latina se conserva en posicién inicial e intervocalica y esta presente tam- bién en posicién final, Como en las lenguas vecinas, sélo en posicién intervocilica se da una oposicién entre una ‘vibrante’ simple procedente de -- latina y una vibrante mul- liple procedente de -RR- latina (cARRU > carro; CARU > caro). Como en las demas lenguas romanicas, la evolucién de los gru- os consonainticos esta marcada, en primer Iidikk Szijj | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 3 iugas, por Ia adaptacién de los grupos lati nos ala espectiva estructura silébice roma. nica, y, en segundo lugar, por la presencia continua de latin como lengua de adstrato y Ia consiguiente posiblidad de introduccion de grupos consonénticos que en Ia evolucién popular ya han sido modificados, por lo cua, en el gallego como en otras lenguas romani- cas, conviene aplicar Ia distinciOn termino- logice entre palabras patrimoniales. (chan < lat. PANU), cultas (plano) y semicultes (praia < F.acta). En gellego, se afiade el fa {or del contacto plurisecular con el espafoi como lengua cult, por lo que la presencia de los grupos cultos generalmente es indi- recta; solo en menor medida, en la cuestion de la representacion grifica, tambien juega un papel la presencia del portugues, visible, en combinacion con el argumento dela pro- nuaciacién popular de los grupos cultos,en ciertas modificaciones de Ja ultima reforma ortogrética gallega de 2003 (pe. diccionario > dicionario, ef RAG | 1LG 2004 infra), Con respecto alos étimos, la evolucién de Jos grupos consondnticos corresponde a tes tendencias: el mantenimiento, la simplifica- cin o reduccién y la modificacién (ef. Fer reiro 1995). Se mantienen, pj. los grupos iniciales de consonante oclusive 0 fricativa lebiodental mas vibrante (pe). cRUDELE > cruel, FRATRE > frade; TRUCTA > froit: fam- bién en posicin porconsondintica: ostnea > ‘astra. En posicion intervocdlica, siguiendo Ia evoiucién de las consonantes ociusivas, el primer elemento se sonoriza (APRILE > abril Puree > pode). También se mantienen, ~~ ventre otros; los nexos -RP- (CORPU >"torpd);~ “Rn (PERNA > perma), -wt- (PONTE S Font}, Yeigual queen leonés yen portugues, el grupo “huss (PALUMBA > pomba). La simpiificaci6n se da en numerosos grupos, segin Ia (enden- cia fandamental de dar preferencia a silabas del tip ev (consonante-voeal): serve > sete tse > ese; DULCE > doce; auTust > ouono; MENSA > mesa, AGNO > af; ete La modificacion mas frecuente consiste en la vocalizaeién de uno de los elementos con- Soniinticos y corresponde a Ia misma ten- dencia fundamental, asi RECTORE > reitor LACTE > leite; FRAXINU > reixo; ALTARIU > auiciro; SaLTU > souto (manteniéndose cl diptongo hasta la actualidad, como en fl portugués septentrional). El’ resultado mayortario de los grupos -UcT- y -ULT- es al lado del dialectal uir, oir, asi TRUCTA > troita; MULTU > moito Los grupos ris, ct. igual que en por- 4 ‘XIIL Kommuniketionsbereiche, Medien und Textsorten aus sprechgeschichticher Sicht tugués, se asibilan, legando a una africada {J} (@LUvIA > choiva, chuvia; CLAMARE > chamar, FLAMMA > chama) mantenida como tal haste la actualidad, igual que en los dia- lectos portugueses septentrionales. Existen numerosas formas semicultas en las que el primer elemento del grupo se mantiene (PLAGIA > praia; CLERICU > crego; FLACCU > Jraco). En posicién intervocélica, el resul- ‘ado de los nexos PL, ct y también'rL y GL es [4] (aPIcULA > abella; ocuLU > oo; see- CuLU > espello); hoy en dia Ia mayor parte del territorio gallego es ‘yeista’ en sentido fonético, es decir que la pronunciacién no es lateral [4] sino (jj; fonolégicamente no hay ‘yeismo’ ya que, diferencia del castellano, el fenémeno fonético no tiene consecuencias sobre el sistema Para terminay el apartado sobre el conso- nantisme, merece todavia especial mencién uno de los fenémenos més discutidos de la historia interna del gallego, la llamada -pheadia (0 geada), que consiste en la pronun- ciacién fricativa (o bien velar 0, como variante, glotal) de g- ante a, 0, w (ga’o {hato)). Se registra en la actualidad en el gal- lego central y occidental y parece haber tenido una extensién mayor en el pasado Existen varias hipotesis acerca de su origen, de las cuales depende la datacion (Fernén ez Rei 1990, 181-189); desde la explicacion por sustrato pasando por ia explicacion por influencia del castellano hasta la explicacion mediante tendencias fonéticas: universales que pueden haber llevado a una evolucion propia independiente. De todas las hipote- ~sis, ade la influencia del castellano parece: ser la menos probable ya que carece de fun- damento légico (existencia del fendmeno sobre todo en zonas de menor influencia del castellano; baja probabilidad de adopcién de un fonema suelto en contextos distintos) y fonético (falta de identidad fonica con el Tonema velar fricativo castellano). Ain asi, por confusidn con la ‘jota’ castellana, se han observado realizaciones ultracorrectas por lo menos desde el s. XIX. La gheada tiene luna larga historia como elemento estigmati- zado del gallego popular y revive en ia actualidad como marcador de galleguidad sobre todo en el habla de las generaciones jovenes (Fernandez Rei 2005), Al igual que en las demas lenguas romani- cas, las grafias del gallego medieval estén marcadas por ia herencia latina, por un Jado, y por la busqueda de signos para los sonidos que difieren del latin, por otro. En Idiké Szijj| Johannes Kabatek, Seiten 1-17 los documentos més antiguos, se presentan ciertas vacilaciones caracteristicas de la len- gua medieval, formando diferentes scriptae (Monjour 1995) que ya dejan percibir las primeras ligeras divergencias entre Galicia y Portugal a partir del s. XIII, siendo la iengua escrita en esta época practicamente le misma. A partir de finales del s. XIII, el portugués se aleja del gallego con la adop- cién de los grafemas provenzales y (en el area gallega las formas mas frecuentes son , , y 0 ). Las vacilaciones en parte parecen cor- responder a tendencias de la lengua hablada (pej, vacilaciones en el vocalismo atono: sobredito ~ subredito; fezemos ~ fizemos; nico: fui ~ foi,j; en parte son evidente- mente independientes de ésta (erdamento — hherdamento; ssobre ~ sobre; vylar ~ vilar; igreyia ~ igreia). En el s. XIX, el llamado Rexurdimento literario del gallego crea grafias nuevas, fun- damentalmente orientadas en la ortografia castellana, con algunas vacilaciones en el caso de los sonidos divergentes, asi varian , al lado de , | para el fonema prepalatal sordo iff; y y al lado de para el fonema velar intervocalico /n/ (Marifio Paz 2003). A par- tir de la segunda mitad del s. XIX y a inicios del s. XX se presentan algunas propuestas que postulan una mayor orientacién en el sistema portugués, por un lado, y una orto- grafia fonética, por otro. A pesar de la fun- dacion de la Academia Gallega a principios del s. XX no se lega a unificar la ortografia gallegayy sigue habiendo una cierta vacila- ion ‘hasta la ‘polémica ortografica’ én los” afios 1970, en la que compiten una serie de propuestas, formando un continuo entre luna ortografia independiente, con raices en la tradicién literaria gallega desde el s XIX y basicamente derivada de la ortografia castel- lana, y la ortografia portuguesa, pasando por una serie de sistemas intermedios de distintos grados de ‘reintegracién’ lingiii- stica gallego-portuguesa (Kabatek 1994), Con Ia oficializacién del gallego a partir de la Constitucién espaiiola de 1978, la orto- grafia del instituto da Lingua Galega, con el apoyo de la Real Academia Gallega se oficializas y después de largas discusiones, en el 2003, se introduce una reforma que algja Ia ortografia ligeramente de la castel- lana (sobre todo en la acentuacién), acer- céndola a la portuguesa en algunos casos embleméticos que afectan a nombres prov 250a. Historie interna del gallego pios como Galiza, grupos cultes como dic- cionario > dicionario, etc., siguiendo el sistema fundamental en la tradicion desde el 5 XIX: mantenimiento de etimologica; separacién sin valor fonolégico de y y de ante gy <2>; para iffy para /n/, 3. Morfologia Los cambios morfoldgicos que convierten el latin en gallego siguen la evolucién romé- nica general yen especial la iberorroménica. Por consiguiente la evolucién del sistema nominal fue més intensa que la del sistema verbal. El sistema latino hibrido de elemen- tos de relacién, formado por casos y prepo- siciones, se transforma en un sistema exclu- sivamente preposicional, quedando restos de la declinacién tan sélo en el sistema pronominal. El origen de los sustantivos y adjetivos es el caso oblicuo del latin vulgar, continuador de] acusativo del latin. Tan sélo se conservan algunos restos esporddicos de otras formas casuales, como demo o deus de os nominativos DAEMON y DEUS, 0 sustanti- vos procedentes de sintagmas construidos en diferentes casos: genitive en martes < (DIE) MARTIS, xoves < (DIE) 1oviS, fregués < FILIU ECCLESIAE, ablativo en los actuales adverbios agora < HAC HORA, hagano < HOC ANNO. También se conservan formas casua- les diferentes del acusativo en antropénimos (Carlos < nom. caroLus), patronimicos (Lopez < gen. Lurict) 0 topénimos (Monda- gen. MUNDARICI) -el-sistema- nominal quedan eemo-cate- gorlas morfolégicas e tipo, el género y el niimero, los dos primeros estrechamente relacionados. Tienen continuacién las tres declinaciones del protorromance: de la pri- mera, confluencia de la I* y 5! dectinaciones del latin clasico y de algunos elementos neu- tros de ia 2" en los que se produjo una rein- erpretacién semiintica del nimero plural, nacen los sustantivos gallegos con vocal tematica a, por regia general femeninos: 18 porta > porta, 5* MATERIE > madeira, 2+ FOLIA > folla. De la segunda, continua. dora de la 2+ y de la 4» declinaciones del latin clasico y 2 la que se juntan mas tarde algu- nos sustantivos neutros de ia 3, provienen os nombres con vocal tematica’e, normal- mente de género masculino: 2" LimRu > libro, 4° pRucTU > froito, 3 PECTU > peito. La 34 declinacién del latin clasico constituya la base de los sustantivos con vocal tematica ¢ Haliks 1 Johannes Kabatek, Seiten 1-17 5 (Pare > parte) y de los atematicos acaba- dos en consonante (voce > vor), de género masculino 0 femenino. Se alteré la vocal lemitica en los casos en que formé diptongo con la vocal anterior: REGE > rei, UDAEU > audeu. Después de Ia fase gallego-portu- guesa pasaron a ser atematicos sustantivos cuye vocal temética sufrié asimilacion y contraceién con la vocal anterior: NUDU > nuo > nuu > nu. En algunos casos la vocal lemética se conserva mejor que en por tugués: AVIOLA > avoa > port. avoo > avd, gall. avoa. El género de los sustantivos es inherente y el de los adjetivos viene condicionado por ia concordancia. Como en espaiol y portu- gués, ademds de expresar el sexo real en el ‘caso de los seres sexuados, puede expresar otras nociones: el femenino puede indicar colectividad, frente al masculino, de sentido individual (ova frente a ovo), © diferencia dimensional, generalmente un tamaiio mayor queel masculino (barca, frente a barco, deda frente a dedo, donde la palabra femenina indica “dedo del pie"). El origen de esta alternancia es que la forma singular de cier- tos sustantivos neutros se conserva como masculino y por otro lado su forma plural ‘como femenino, con reinterpretacién seman- tica del nimero plural: ovu > ovo, ova > ‘ova. En otros casos este tipo de alternancia se extendié por analogia: BaRCA > barca y de alli barco, nivu m. > rio y de alli ria, Dictru m. > dedo y de alli deda. En ciertos casos la vatiacion morfologica de género se extendié a sustantivos y adjetivos que segiin ~su~etimoiogia (terminacion ENse) pfésemtaban una forma unica’ dos géneros: en la lengua antigua seflor, pastor, espanol presentaban sincretismo, pero a finales del periodo gallego-portugués hacieron las formas femeninas especificas sefiora, pastora, espaiiola. Los sustantivos de género neutro ya en la fase protorroménica pasaron mayoritariamente al masculino (0 mar, 0 animal), existiendo ciertas diferen- cias respecto al castellano (0 leite, o mel). ‘Tambien hay otras diferencias esporddicas entre los géneros consagrados por la norma- liva entre el gallego y el castellano (0 nari 4 drbore, a cor) o entre el gallego y el portu- gués (a calor, a fin). La expresiOn del plural se realiza por medio de una s final, proveniente del acusa- tivo plural latino. Los nombres no agudos terminados en esta misma consonante no presentan la marca del plural (os martes, os lapis) 6 XIN, Komimunikationsbereiche, Medien und Textsorten aus sprachgeschichtlicher Sicht La caida de la ty W intervocélicas afect6 al sistema de las oposiciones de género y niimero, sobre todo en los nombres proce- dentes de la 3 declinacién, La caida de la Ls6lo causé irregularidad en la oposicion de niimero (INFANTILE ~ INFANTILE > infantil — infanties > infantis), pues el femenino es tar- dio y se formé afiadiendo la marca a al mas- culino (espafol, esparola). Ciertos nombres conservan la L también en el plural, con lo cual ta oposicién es regular: se trata de palabras monosilabicas como rif ries, sal sales y palabras graves de introduccién tardia en la lengua, como facil - faciles. Hay que observar también Que la tendencia popular es regularizar la formacién del plu ral: infantles, espafioles. La caida de la N or'- giné en el antiguo gallego-portugués alter- nancias del tipo leon ledes, pan - paes entre el singular y el plural. En gallego se con- servé el singular, mientras que las formas del plural tuvieron diferentes evoluciones dialectales: asimilacién en el oceidente y centro (pdes > pas > pas), con posterior escisiOn de la vocal nasal en vocal oral y consonante nasal en el occidente (pans) y desnasalizacién en el centro (pas); por otro lado, desnasalizacién y reduecién del hiato fen diptongo en el oriente (pdes > paes > pais). Como entre las variantes geogriticas fue consagrads como normativa la occiden- tal pans, se ha restablecido una relaciéa casi regular entre las formas de singular y plural En la variacion de género la caida de la Neoncierne también a los nombres dela 1+ y 2" declinaciones: entre las diferentes evol- ciones-dialaetales las mayoritarias son-cex- MANO-> rmndo"> ovcidente irmda > irma > frmdn, masculino normative, frente a norte inmd y oriente irmao; GERMAN > irmda > occidente irma > irmén, frente a norte, ori- ente y normativo irmd. Fueron escogidas por lo tanto como formas normativas ele- entos de paradigmas dialectales diferen- les, capaces de expresar la oposicion de zénero. En la formacién del femenino tardio no etimolégico de los sustantivos praceden- tes de la 3 declinacidn en ciertos casos se afiade simplemente la marca a (folgazén — Solgazana), en otros casos la lengua norma- tiva generaliza la oposicion dnt ~ 4 (alemén — alemd), con lo cual desaparece la diferencia entre los dos tipos antiguos que procedian de la 2" y de la 38 declinacion respectiva- mente. Por otro lado, la normativa prescribe Jas formas leén ~ leo, opasicion que desde el punto de vista diacronico presenta la misma evolucién que alemdn ~ alemé, Mdiké Szijj| Johannes Kabatek, Seiten |-17 Otra evolucién fonética que afecta a le vatiacién morfolégica de género y mimero es la metafonia causada por Uy 4 finales, Se trata de un fenémeno asistematico, que no afecta a todos Jos nombres que presentan Jas mismas condiciones fonéticas, y también son considerables las variaciones dialectales, pues la metafonia es més acentuada en la parte occidental del dominio lingliistico. Asi no se registra metafonia en palabras como ego < CAECU, morto < MORTUU, pero sien ‘edo < METU, nove < NOvuM (Ferreiro 1995, 29; 38). La metafonia gallega difiere de la portuguesa ante'todo en que entre el singu- lar y el plural se produce une unificacién analégica: mientras en el paradigma portu- gués de palabras como nove, sogro solo sulte inflexién la forma masculina singular (novo, ‘nova, noves, novas), en gallego contienen vyocal radical cerrada las dos formas mascii- Jinas, tanto la forma del singular, como la del lural (nove, nova, novos, novas). En los nombres afectados por la metafonia la opo- sicion de género aparece pues hipercaracte- rizada, La evolucién del sistema de los pronom- bres personales en el gallego sigue el modelo iberorroménico general: las formas proce den de pronombres personales y demostrat vvos del latin; se crea una serie de pronom- bres atonos, con funcién de complemento directo e indirecto; los ténicos comprenden los pronombres sujeto y los oblicuos, usados con preposiciones. Los pronombres sujeto provienen de las formas nominativas del Jatin, con la excepcién de tien la 2* pers. del singular, forma enalégica dela oblicuay geo srilicamente muy extendida y eles Rormativa. Los pronombres oblicuos s6lo resentan formas propias, procedentes del dativo, en la I y 2: pers. del singular (atest > min, 1781 > 1’). Los acusativos y dativos ‘tonos presentan formas divergentes en la 3* Pers. (1LLU > o, tLL > lhe), como en las otras yguas roménicas, y es una innovacién mayoritaria del dominio lingiiistico gallego {a distincién de las dos funciones también en la 2 pers. del singular: dmote pero faloche. El pronombre che, considerado normativo, proviene de la combinacién s+ re + vocal, en la cual la e se convierte en yod: pee. trae, rostjJo > traémoscho (ef. pestra > bicha), de donde se generaliza la forma pronominal aislada che. Los pronombres étonos comple- mento directo de 3* pers, (los actuales 0, a, 4, as) presentan alomorlos, como en portu- és, debido a la asimilacidn de r ys finales 250a. Historia interna del gallego de palabra a la J inicial de las formas anti- guas lo, la, los, las, fenémeno especialmente frecuente en la combinacién verbo + pro- nombre: fixemosla > fixemollo > mod. fixé- ‘molo. En gallego estos fendmenos de asimi- lacién son mas generales que en portugués, ues se practican también con los articulos determinados: facémo-la cea (en la ortogra- fia normativa se acepta también facemos a cea). También se produce Ia asimilacién (en este caso progresiva) con consonante nasal, pero el resultado gallego es diferente dei portugués: en gallego interviene la analogia en Ia distribucién de los alomorfos, y por influencia de formas antiguas como (ama- ronlo >) amaronno nace amouno, El alo- morfo con nasal se generaliza después de diptongo (canteino, faino, comereino), mien- tras en el contexto fonético en el que origi nalmente se produjo la asimilacion (ama- ronno) la n geminada se redujo y la forma resultante, amarono, no muestra el_alo- morfo. En portugués, por el contrario, se restauré la forma verbal, con lo cual e! alo- ‘morfo con nasal queda patente: amaranr-no. El sistema de los pronombres posesivos se asemeja al portugués: las antiguas formas Atonas del femenino singular (ma, 1a, sa) se erdieron y solo persisten las formas téni- ‘cas, combinadas con articulo. Por efecto de la analogia se ha regularizado el vocalismo de las formas masculinas del singular: Meu > ‘meu, teu, seu (en Jat, clas. TWu, Suu). La serie ‘mou, tou, sou, formada por generalizacién anal6gica del vocalismo de la 2 y 3 pers, se registra en muy pocos puntos dialectales. ~--La-evolucion cel sistema de los demostra- tivos sigue la tine iberorroménica general: presenta tres series: para la expresion de la localizacién respecto al hablante y al interlocutor: este > Iste, ese < Test, aquel < “accu TLE, masculinos singulares, prove- nnientes del ‘nominative. Las otras’ formas reforzadas con *Accu del gallego-portugués (aqueste, aquesse) no se conservan. Las for- mas neutras mayoritarias en el dominio lin- Ellistico son esto, eso, aguelo, pero la norma- liva recomienda las formas inflexionadas isto, io, aquilo, semejantes a las portuguesas. La evolucién del sistema verbal coincide basicamente con ia evolucién iberorromé- nica general. Han confluido la 2+ y 3* conju- gaciones del latin clasico, quedando 3 tipos de igual acentuacién, caracterizados por la vocal tematica, p.ej. amar, temer, partir. El tipo mejor caracterizado es la 1" conjuga- cidn, pues la vocal tematica aparece en casi Mdiké Szifj | Johannes Kabatek, Seiten \-17 7 todas las formas (amaba, amaches, amado, mando), mientras entre los otros dos tipos se producen neutralizaciones, o por evoli cién fonética o por analogia (emia ~ partia, femiches ~ partiches, temido ~ partido), new. tralizaciones por cierto menos comunes que en el castellano (gall. temendo ~ partindo, cast. temiendo ~ partiendo). FE) inico tipo productivo es la I* conjugacién. Los tres idiomas presentan algunas diferencias léxi- cas en la distribucién de las conjugaciones, sobre todo entre la 2: y la 34: cast. debatir, convertr, mori, gall. debater, converter, mor. fer, port. cair, der, viver, soffe, gall. caer, dicir, vivir, sufir. En general en gallego y en Portugués son més numerosos los verbos de la 2 conjugacién que en el castellano. Las formas verbales heredadas del latin son en el indicativo: presente (amo > amo), pretérito imperfecto (AMABAM > amaba), pretérito perfecto (AMAvi > amei), pluscu- amperfecto (awavERAM > amara); en el sub- juntivo: presente (AmeM > ame), pretérilo imperfecto (awavissem > amase); impera- tivo (ama > ama); participio (aMatum > mado), gerundio (AMANDO > amando),infi- nitivo (AMARE > amar) El futuro de subjun- tivo (amar), hoy inusitado, nacié por la con- uencia del futurum perfectum indicativi (Astavexo) y del praesens perfectum coni- lunctivi (aniaverts) del latin, Las formas innovadoras son el futuro de indicativo (AMARE HADEO > amare), cl condicional (AMARE HABEBAM > amaria) y el infinitivo Tiexionado, formado con los morfemas per- sonales (pj. 2 pers. amares). ~Las-vocales radicales e y o-pusdemsuftir cambios de timbre en el paradigma’ Ei 1a" conjugacion la alternancia depende de la tonicidad 0 atonicidad deta vocal: evo, leva- ‘mos. En otros verbos, sin embargo, ia vocal ‘es abierta en todas las formas y las variacio- nes dialectales también son considerables En la 2* conjugacién la variacién de timbre ya no depende dnicamente del acento: en la 1+ pers. yen el presente de subjuntivo apare- cen ey o cerradas, mientras las otras formas Tizot6nicas contienen vocal abierta: bebo, beba, pero bebes. Se trata de la morfologiza- cién de un fendmeno de inflexién vocd lca pues se generaliza el modelo verbal en el que la vocal radical abierta sufre inflexién por el efecto de Ia yod desinencial de la 1» pers: MOVEO / MOVES > mavjo move ~ moves. En la 3% conjugacién también se produjo un fend- meno semejante de inflexion, con evolucio- nes analdgicas, por lo que el Sisteme es mas 8 XI. Kommunikationsbe complejo: hay cierta asimetria entre las vocals paletales velares y ia alternancia es asistemitica: pe), durmir, durmo ~ dormes— durmimos, preferir, prefiro-~ prefires ~ prefe- rimos, pero sentir, sinto ~ sentes ~ sentimos. Esta distribucién de los tipos no corre- sponde ni a la castellana (duermes, prefie- res), ni ala portuguesa (dormes, preferes, con vocal radical abierta). En el caso de la vocal palatal la tendencia del gallego hablado es Seguir en todos los casos el paradigma de refer i ‘Las gramemas en ciertos casos son més conservadores que los portugueses o caste! lanos: aMaTis > gall. amades (formas dialee tales: amis, amds, amandes), port. amais, cast. amdis, formas en que cayé la d intervo- célice. Las evoluciones més especificas se registran en las formas del pretérito per- ecto: en la I pers, de la 2+ y 3+ conjugacio- nes y de la mayor parte de los verbos irregu- Jares aparece una n (bebin, partn,fosen), que se explica por la analogia de vent > vin. En la 2 pers. (amaches) la ch se explica por Ja evolucién fonética regular de 31 ~ yod. ej. anasteo > amasiio > amacho, con la reinterpretacién de los elementos amache 0 Lasse aiade por ser el suijo personal gene- ral de a2 pers. En la forme de la 3 pers. de los verbos ieregulares aparece una/o final (Fixo), como en el castellano, que se explica por ia generalizacién de la terminacién de antiguas formas regulares como comeo, par- tio. En la acentuacion de ciertas formas el tallego queda més cerca de latin que el por- tugués 0 el castellano: aManAMUs > amabo- imag conacentuacién paroxitona, = n= ~~ Comorerrias lenguas iberorroménicas em general, la irregularidad de la 1* pers, del presente de indicativo se generaliza normal- mente en el presente de subjuntivo (Jago, fas: Jaga, fagas) y la irregularidad del pretérito perfecto del indicativo aparece en el preté- rito pluscuamperfecto del indicativo y en el pretérito imperfecto del subjuntivo (fixen, ‘fixera, fixese). En la formacién del radical de os tiempos de perfecto tuvieron lugar tuna serie de evoluciones analégicas, la raiz acabada en consonante palatal es mas frecu- ente que en portugués: port. fizeste, dsseste, quiseste, trouxeste {3}, gall. fixeches, dixe- ches, quixeches, trouxeches 4. Sintaxis Frente al auge de los estudios de sintaxis roménica en los altimos aflos. no dispone- Ildiké Seif Johannes Kabatek, Seiten 1-17 ne, Medien und Textsorten aus sprachgeschichtlicher Sicht ‘mos atin de obras exhaustivas que apliquen las diversas tendencias actuales de la teoria sintéctica a la evolucién histérica del gallego, por lo que nos hemos de limitar a algunas observaciones generales. Una de las razones es probablemente el gran paralelismo con Jas lenguas vecinas, aunque a pesar de la gran semejanza con otras leaguas romanicas en general e iberorroménicas en particular, cl gallego también presenta una serie de ras- {gos sintécticos distintivos Es més: para algunas evoluciones sintécticas y en otros campos, el gallego, arcaico por un lado innovador por otro, oftece importantes esquemas de comparacién con las demés Ienguas iberorroménicas y posibilita, por ejemplo, Hegar 2 informacion adicional cuando se considera la diferencia entre el portugués europeo y el portugués de Brasil o la evolucién divergente entre los distintos dialectos peninsulares, El arcaismo del gal- lego permite observar procesos de gramati- calizacién aqui incipientes en otras lenguas romanicas ya han tenido un desarrollo ya mucho mas avanzado, como la gramati- calizacién de perifrasis verbales temporales (pei. cast. he estado J port. tenho estado frente a gall. estiven 0, con restricciones mucho mayores, teffo estado). Otra caracte- ristica del gallego es que incluso en la recién creada lengua estindar se aceptan rasgos que en otras lenguas, en parte como resul- tado de un plurisecular proceso de seleccion, son attibuidos a ja oralidad y quedan exclui- dos de las variedades diafésicas altas, Al igual que las demas lenguas iberorro- ‘manicas-el gallego representa el ipetingti=~ stico romanico con su iconisino gramatieal, con «determinaciones materiales internas, aradigmaticas para funciones internas, no relacionales y determinaciones materia: les externas, sinitagmaticas para funciones externas» (Coseriu 1990), de este modo, las funciones internas de nimero (home — homes); género (xenro ~ xenra) asi como otras (altisimo; casiiia) se expresan en el nivel de la palabra, mientras que las funcio- nes relacionales como los casos y Ia comps raciOn, entre otras, son expresadas a nivel sintagmatico (a cata de Xoan; Xoan é mdis «alto ca min), Como las lenguas romnicas en general, en gallego predomina el orden de constituy- entes basico SVO, bastante comin ya en los tos medievales al lado de la menos frecu- ente construccién con verbo final. Como en las otras lenguas iberorrominicas, la conti 25a, Historia interna del galego nuidad de estructuras del orden VS (etrou a muller) parece corresponder la perspectiva funcional de frase oa la seméntica de cier~ tos verbos (enuneiados téticos vs. enuncia- dos_categéricos, cf. Neumann-Holzschuh 1997). Al igual que las demés lenguas ibe- rorroménicas (salvo el portugués del Brasil), el gallego es una lengua ‘pro-drop' en a que is aparicion explicita del sujeto pronominal tiene Fanciones adicionales (contrast, cam- bio de tépico, énfasis, ete). Con algunos verbos, se han observado en certas varieds= des dei gallego dialectal usos impersonates como el chove, el venta, El xa é dia? (Aivae rez | Regueira Monteagudo 1986, 169) Este uso, a pesar de su gran interés para la sintaxis generativa, parece estar desapare- ciendo un el gallego actual. EI gallego, tal como que el portugués, no gramaticalizo, salvo dialectalmente, las formas Nos + AUTEROS / vos + ALTEKOS > nosoutras | vosoutros, siendo las formas comunes és’! vs al lado de nosoutres 1 Yosoutros con valor de referencia un grupo restringido y, contrario a la tendencia roma nica de gramaticalizacién, en decive (Alva- rez Monteagude 1994, 7, En la sintaxis del nombre, las lenguas ibe- rorromanicas presentan més unidad que en la sintexis del verbo, donde las transfor mmaciones de las lenguas desde la EM han fragmentado en parte la congruenciainical En el sintagma nominal, ala igquierda dei nicleo la funcin y el grado de obligatorie- dad del actualizador nominal (articulo definido o indefinido) corresponde practica- —menioaafunciés dad de ste en miénicas. Como en el portugues, a diferencia del castellano actual, el actualizador tam- bign aparece on combinacidn con un deter- minante posesivo prenuclear, « mina casa, siendo comunes en el galego hablado tam bien las formas sin articulo (y no sélo en casos de nombres de parentesco), tal vez por influencia del castellano. Es esporadico, pero no comiin, el empico del artculo deter. minado con nombres de persona, ya desde a lengua antigua. Como. modificadores det niicleo dela frase nominal las frases adjeti- vales concuerdan con el nombre en género y niimero. Igual que en las lenguas vecinas en las lenguas roménicas en general, In posi cién no marcada del adjetivo en Tuncion especificativa es Ia posnuclear (@ wha casa grande), mientras que Ia posicion matcada prenuclear queda reservada para usos expli- Mdiké Szitj! Johannes Kabatek, Seiten 1-17 9 cativos y ciertos especificativos valorativos (unha grande casa). El objeto directo se marca con la preposi~ cién a en casos marcados y en los casos no marcados con referente humano (a personi- ficable); la marca preposicional con nom- bres propios, no obligatoria en la lengua antigua, se esté generalizando en la lengua moderna (Onte vin a Xurxo). Existen, ade- més, otras marcas preposicionales del objeto directo: con objetos de referente continuo luna marca partitiva opeional de (comew da carne vs. comeu carne); una marca aspectual de accidn repentina de (collew de chagueta e ‘marchow); con acciones no concluidas la pre- Posicién en (comew no pan “ha comido una parte del pan"); con acciones por concluir con (tirow cou pedra e botou a correr) (Alva- rez/ Xove 2002, 978). En el caso de los com- plementos preposicionales cabe destacar el tuso local de ir en, también observado en portugues del Brasil, pero en gallego no con significado direccional sino de movimiento dentro del marco referencial (Pedro vai na cocifia “Pedro anda por la cocina”). El objeto indirecto pronominal en la lengua actual exige un antecedente clitico preverbal (Non cho dixen a tino te lo he dicho a ti") El gailego conserva hasta la actualidad Ja posicién antigua de los cliticos en-casos no marcados a la derecha del nicleo (douche “te doy"; dixome “me dijo”). La antepos- icion del’ pronombre atono con tespecto al verbo es provocada, ya en la lengua medie- val, por elementos como la negacién, la sub- ordinacién y otros factores como la presen cia de ciertos adverbios: Freme wia tenien= cia imovadora hacia la proclisis qué marco” Ja evolucién del castellano y, en parte, del portugues del Brasil, el gallego se presenta fen este caso, pues, como lengua sintactica- mente arcaica, ‘La mencionada evolucion gallega de dife renciacién entre un pronombre dativo che y tun pronombre acusativo te en el gallego medieval (donde, sin embargo, existe toda- via che con valor de dative al lado de ¢e: esto con medo cho peco vs. para mentes eno que te quero dizer, cf. Marifio Paz 1998, 120) lleva al orden no marcado micleo ~ pronombre directo - pronombre directo (doucho ‘doy-te-lo”, “te lo doy”). Desde la lengua antigua se registran usos_pragméticos del Pronombre indirecio con funcién de dativo élico 0 "pronombre de solidaridad’ (ea elles 1nd che ant y culpa neha en la version gallega de la Cronica General de Espatia, cf, Lorenzo 10 XIII, Kommunikationsbereiche, Medien und Textsorten aus sprachgeschichtlicher Sicht 1975), al lado de ‘dativos de interés’ con referencia a una persona interesada en el conenido de la predicacién. El uso del pro- nombre de solidaridad para hacer referencia al interlocutor se registra también en cl castellano popular y es muy comiin en el gal- lego hablado. Aparece como marca de galle- guidad en los primeros didlogos gallegos del s. XIX; hasta la actualidad se registran usos de deixis miiltiple (morréuchelleme a vaca 6 meu fillo, - Alvarez / Regueira / Montea- gudo 1986, 175; Mira, Xoana, a nena do meu {fillo non che lle me come res, “Mira, Xoana, la nifia de mi hijo no te ~ le - me come nada”, con che ‘de solidaridad’, referido a ia interlocutora, y He / me ‘de interés’, refer dos al hijo y # la locutora, cf. Alvarez / Mon- teagudo 1994, 9) Igual que en portugués y rumano, es comin en gallego la repeticién del verbo de luna pregunta en la respuesta (‘lenguaje- eco") 2Fuches & praia? Fun, El"gallego actual permite ciertas con- strucciones modalizadoras o focalizadoras de posposicion del verbo acompafiadas de una caida entonacional particular, sobre todo en frases con un elemento de negacién (ew nunca tanta neve vin “nunca he visto fanta nieve”; nin a dous metros se via “no se veia ni a dos metros”; na nia vida tal cousa ‘mi vida he visto tal cosa”; xa 60 é “ya esti"); asimismo, existen usos de conjuncio- hes como ou como particula model final (non chegou ainda, cou? “no ha llegado toda- via, {verdad?”). De la historia lejana de este tipo de construcciones, observables ya en la rosa (eobre. todo. en-didlogos) del s. X2X; ~ bien poco sabemes dada la-escasez de infor" macién sobre textos de concepeién oral ante- Flores al s. XIX. Alin asf, una dialectologia iberorroménica comparada que tuviera en cuenta factores como la prosodia o los ele- ‘mentos modalizadores podria ayudar en la reconstruccién de posibles origenes comu- nes de tales fenémenos. 5. Léxico El léxico gallego, como el de las demas Ienguas rominicas, esti constituido por tes componentes: palabras procedentes del latin ~ patrimoniales y cultas -, présta- mos de otras lenguas ~ entre ellos voces de sustralo y de superestrato ~ y palabras erea~ das por procedimientos internos, ante todo la derivacion y ia composicién, El léxico gal- lego presenta las caracteristicas generales Udiké Sziij| Johannes Kabatek, Seiten 1-17 Gel léxico hispanico, y posee, més especifica- mente, palabras comunes con el portugués, y especialmente con las hablas del norte de Portugal. Estas hablas también pueden coincidir en evoluciones semanticas especia- les. El gallego tiene ademas voces propias, no compartidas por el resto de las hablas ibérorroménicas y roménicas. En el caso gallego tuvo una importancia primordial la influencia del castellano, dada la plurisecu- lar situacién diglésica ya mencionada. Con Ja normativizacion intenté depurarse la len- ‘gua, eliminado los castellanismos conside- rados superfluos, y recurriendo a diferentes estrategias para substituirlos, En gallego existe, pues, una serie de voces heredadas del latin comunes con el por- tugués y et castellano y desconocidas en el resto de la Romania, procedentes del latin local hispanico. Este fondo léxieo comin tiene un carécter arcaico 0 conservador: CAMPSARE > cansar, COMEDERE > comer, METU > medo, PERCONTARE > pregumtar, pero al mismo tiempo presenta innovaciones en ls forma de las palabras y /o en ia evolucién seméntica: AMARUS “amargo” > AMARELLU > amarelo, CAPUT — cAPITIA > cabeza, CATENA “cadena” ~» CATENATU > cadeado, ‘COR —> CORATIONE > corazén, (FRATRE) GER Manu “hermano de padre y madre” > irman, (ALA) MATTIANA > mazd, MAXILLA “mandi- ula” > meixela, (RES) NATA “cosa nacida” > nada, Las lenguas iberorromanicas pueden tam- bién mostrar coincidencias con el rumano, ya que, como se sabe, hay cierta afinidad entre-las lenguas romanicas periféricas.“en” ‘comraste con el territorio central” de Te Romania: son de cardcter conservador pal- abras como FERVERE > ferver, rum. a fierbe, ROGARE > rogar, rum. @ ruga; mientras son innovaciones AFFLARE “sopar” > achar, rum. @ afta “ballar”, FORMOSU > fermoso, rum. frumos, 0 cambios semanticos como passere “gortion” > paxaro, rum. pasare “pijaro”, ct. fr. Bouillt, prier, trouver, fromage, beau, oiseau “pajaro”. Por otro lado existe un fondo comiin gallego-portugués, del que queda exciuido el castellano, con elemento latinos como AtRIU > adro “patio de la iglesia”, AcuMEN > gume “filo”, *EXCADESCERE >” esquecer “olvidar”, tanustta > xanela “ventana”, REFRIGESCERE > crrefecer “enitiar", 0 palab- tas de origen no del todo aclarado como ‘fastar “aigjar", supuesto derivado de FasT- Diu, bolborera, talvez derivado de PULYis, 250a. Historia interna del galego espir (con la variante no normativizada despir) “desnudarse”, talvez continuador de EXPEDIRE, preto “cerca”, posible derivado regresivo de APPECTORARE, orballo “rocio” (también existente en leonés), posible conti- nuador de oRBus (etimologias de DCECH), El léxico gallego-portugués también pre- senta evohuciones seménticas que le confie- ren cierta peculiaridad: DEIECTARE > dei arse “deitarse "acostarse”, FIGICARE > ficar “quedar”, Dentro del ambito gallego-portugués el leéxico gallego presenta afinidades mas estre- chas con los dialectos del norte de Portugal, especialmente con el de la region del Mifio, Existen palabras comunes para todo el horoeste peninsular, que difieren de las pal- abras de las hablas del centro y del sur: gall. ‘muxir | munguir,regién del noroeste de Por- tugal moger, mugir, mungir, con otras posi- bles variantes procedentes del mismo étimo MULGERE, frente @ ordenhar (< ORDINIARE) Portugués centromeridional; gall. ubre y noroeste de Portugal aibere, frente a mojo (con otras variantes), derivado de MuLGERE, en el centro y sur de Portugal El gallego posee voces exclusivas de ori- gen latino, cuyo étimo a veces no esta del todo esclarecido (indicaré aqui las propue- stas de DCECH). En general se trata de inmovaciones derivacionales 0 seminticas: acadar “conseguir”, derivado de RECAPI- TARE, adoitar “soler”, formado a partir de DucTUs, agarimar “quizés de *AGOREMIARE, roveniente de oremtumt “regazo”, asemade “simulténeamente”, derivado de’ sumMus, hess feje", derivado de cdevecer n epERE, doado “facil” derivado de DONATU, engalar “volar”, derivada de ala (< ALA), entrego “persona entrada en afios”, deri- vado de ANTERIOR, con influjo de enregro (< itecnu), esmorga “comilona, juerga”, derivado de AMURCA “orujo de aceituna”, facazan, formado sobre lacén (< LACONE) lésirego “relampago”, derivado. de LusTRARE, péla “rama”, derivado de put LUS, en su sentido de “yema”, pintiga “sala mandra”, derivado de *PincTaRe. En ciertos casos la derivacién que produce el cambio semantico es mas evidente: abrenie “amane- cer”, formado a partir de abrire, andazo “epidemia” (palabra existente en dialectos espaiioles y portugueses), formado a partir de amdar; fervenza “cascada”, derivado de ferver. Ciertas palabras desarrollaron senti- dos figurados peculiares, por asociacién Mdiké Szijj | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 u metaforica: engaiolar “seducir”, a partir de gaiola (< caveoua) “jaula”, hedras (< WEDE- Ras) “varices”. Puede haber elementos apa- remlemente exclusives en gallego, porque la palabra ha caido en desuso en las otras lenguas: axifa (< actA), cf. esp. ant. aina, golpe (< vurre), of. esp. ant. vulpeja, El gallego puede diferir de su lengua gemela, el portugués, en el significado de formas léxicas procedentes del mismo étimo latino, El sentido del gall. pofo coincide con cl del pollo del cast., “cris de las aves y espe- cialmente de ias gailinas”, mientras en port. ppélo significa “cria de un ave rapaz” (el sen= ido de PuLLUS era a la vez “ria de un ani- mal” y “cria de Ia gallina”), En castellano ¥ gallego la palabra pelo se usa para perso- nas y animales, mientras en port. pélo tinica- mente puede ser de los animales, Puede haber modificaciones semanticas en cadena: las tres comidas principales del dia se denominan en gall. almorzo, xantar, cea (una tltima comida puede ser la sobrecea), ‘en port. pequeno almogo, almogo, jantar (una comida ligera antes de ir a dormir se deno- mina ceia). Otras veces las diserepancias seménticas son mayores: poupar (< PaL- PARE) en port, significa “ahorrar”, mientras en gall. tiene sentidos figurados como “lisonjear” o “mecer (a un nifio En el periodo del Renacimiento y Hum: nismo se generaliza la entrada de elementos clasicos en las lenguas romanicas. Sin embargo, el gallego se encontraba ya en aquella época en situacién diglésica: ia ien- gua culta era el castellano, que incorporé una dad de-tatinismos-y.helenisiros, que-transinitla a las leaguas subordinadas En gallego estas palabras, al no tener una forma normativa fija, con frecuencia sufren alteraciones a causa de su forma fonotactica extrafia: aparecen variantes como ausoluto en ve de ubsoluto, cadeiradego por cate- drético, direicion por diveccién, ouxeto por obxecto, ete. Las palabras gallegas de origen no latino pueden ser de sustrato (algunas considera das de etimologie mas bien incierta), de los superestratos germanico y arabe u otros pré- stamos. Aparecen en el fondo comin hispé- nico voces prerromanas incorporadas por el latin local, como ARRUGIA > arroio, CAMA > cama, SARNA > sarna, asi como otros ele- mentos de sustrato no documentados en latin: bode, esquerdo, lousa, manteiga, sapo, oxo, veiga. Algunos elementos de sustrato son propios del gallego y del portugués, 12 ‘XIN, Kommmunikationsbereiche, Medien und Textsorten aus sprachgeschichllicher Sicht otros tinicamente se documentan en gallego: carballo “roble” tiene su correspondiente carvatho en portugués (la palabra aparece también en dialectos leoneses), ona “piel, ‘monda” existe en gallego y portugués y dis lectos espaiioles, mientras drgoma, “un tipo de tojo” o bisbarra “comarca” aparecen s6lo en gallego. Otras voces prerromanas, prove- nientes del céltico y ya comunes en el latin, aparecen en general en todas las lenguas roménicas occidentales: cabana, camifio, Los germanismos entraron en gallego en diferentes fases, no siempre Ficilmente identificables (indicamas Jas propuestas de DCECH). Los que fueron transmitidos por el latin vulgar, como burgo, roubar, sopa, tei xugo “tejon”, xabén “jabon”, aparecen tam- bién en otras lenguas roménicas occidenta- les. Otros llegaron con Ia invasion de los sue- vos y de los visigodos: se considera de origen suevo fabio “parral” y con menos seguridad laverca “alondra” (palabras tipicas del noroe- ste peninsular), mientras parecen ser de pro- cedencia visigética espero, espiar, ganso, luva, roupa, etc. Algunos de estos, como ganso o lua sélo aparecen en las ienguas ibéricas. Otros germanismos como arpa, banda “faja", dardo, marchar, xardin llega~ ron a través de Francia, En gallego aparcoen menos arabismos que en portugués, y sobre todo menos que en castellano. Asi a palabras castellanas como ajonjoli, alquilar corresponden gallegas como sésamo, alugar, y a portuguesas como alface, almece cotresponden galiegas como leitugefen-p 2 misma palabra ier airtipo de leciraga) sora (existene en €l norte de Portugal). Asi y todo existe en gallego un numero considerable de arabis- ‘mos comunes a las tres lengua’: aldea, azar (1) “azar”, azar (2) “azahar”, azul, barrio, cenoria, oxalé, quintal, xabaril, xinete, ete El léxico gallego y el portugués divergen sobre todo por los préstamos que cada tuno, independientemente del otro, incor- ord después de la fase gallego-portuguess comiin. Asi el portugués adopté galicismos como cachecol, eais, ecrd, guiché, que no pasaron al galicgo. Evidentemente los ele- mentos gallegos que provocan ia divergencia son esencialmente los eastellanismos A partir de finales del s. XV empiezan a aparecer en gallego castellanismos, como apattar, medrar, tertulia (también adoptados por el portugués). Mientras estas palabras, consideran como auténticos préstamos y Idiké Szijj | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 fueron consagradas por Ja lengua norma- tiva, aparecen muchos otros castellanismos considerados superfluos, como dios, dolor, iglesia, peligro, persona. Algunas palabras se adaptaron minimamente a la fonética fonotdctica gallegas, como vanidade, xene- ral, y también aparecen como variantes ver~ daderos pscudogalleguismos, como brilante, cencia, desobedente, destio, elabourar, per makiecer, zoa, etc. En otros casos el castella- nismo st manifest6 en la formacion de pals abras: por analogia de alejar del adverbio fall. onxe nace el verbo alonxar, a semejanza de ciere se forma el sustantivo peche (acep- tado por la normativa) derivado de pechar. Esporddicamente el gallego y el portu- gués pueden diferirjustamente porque fue el Portugués el que adopto un castellanismo: ort. castelhane, repolko, frente al. gall castelén, repolo Enel proceso de normativizacién el lexico estindar se fij6 en el Vocabulario Ortogrd. Jico da Lingua Galega (VOLGa) publicado en 2004 por la Real Academia Galega y el Instituto da Lingua Galega (después de una versién provisional de 1989), la base para Ja planificacién léxica que acompata las Normas ortogréficas y morfolégicas elabora- as en el seno de las mismas instituciones (RAG / 1LG 2004), Se intent6 eliminar los castellanismos ¢ introducir nuevas palabras: areaismos, como deus, persoa mediante lusismos, como dor, igrexa, perigo, vaidade, xeral dialetalismos gallegos, como brétema “niebla”, golpe “zorro” neologismos, como beirarria, bieravia, en vez de los castellanis- mosatera” (9 si~variante gailepubardar ‘aciray'y areén En gallego la estructura de los campos semdnticos puede ser diferente de la de las Jenguas vecinas, pc. a la palabra castellana timo corresponden siltimo (< utriMu) y derradeiro (derivado de 0& RETRO) “iltimo en una serie cerrada”; el esp. subir tiene como palabras correspondientes. subir rubir “subir trepando” (derivado de arriba, segin DCECH); a escalera corresponde 4a palabra patrimonial eseada “escalera de mano” y el préstamo espaiiol adaptado excaleira “escalera con peldaiios pertene- ciente al edificio” 6. Formacién de palabras Para ampliar su repertorio léxico, el gallego— como las lenguas toméinicas en general - uti- liz6 procedimientos morfolégicos, ante todo 250a. Historia interna del galiego la prefijacién, la sufijacién y Ia composi- cién, Elestudio dela derivacion puede presentar problemas, como en el caso de otras lenguas. No siempre es fécil saber si las palabras deri- vadas del gallego proceden de palabras deri- vadas ya en latin, como amador < AMATORE, compensién < COMPREHENSIONE, 0 fueron derivadas en época romance, como cofiece- ‘mento: cofecer + -mento, formosura: formoso + -wra, Por otro lado, ademés de los afijos egados por via popular, hay otros cultos: encontramos dobletes, como en el caso de -ARIU, del que se formé por via popular -eiro (padeiro), por via culta -ario (destinatario); de suB- s0- y subs (soterrar, subterrdneo); en otros casos, sin embargo, la forma del afijo no indica si se trata de una evolucién popu- lar ode un cultismo: re-,-mento, ete, Un ter cer problema es que los afijos pueden unirse 2 raices cultas, con lo cual la relacién entre base y derivado se hace opaca: leite -lcteo, veneido ~ invicto, xeral ~ xeneralidade. En el caso de otras palabras derivadas de palab- ras latinas se ha perdido la nocién de la derivacién: aRTICULU > artigo, DEFUNCT > defunto, PERCONTAR! > preguntar, PROFECTU > proveito ‘Todos los prefijos que llegaron al gallego or via popular son de origen latino, los de rocedencia griega son cultos. Los prefijos el latin clésico tuvieron en general una evolucién semejante en toda ia Romania: el acento se desplaz6 del prefijo a la base (PRIMO — deprime, RPETO > repito, excepto cuando la palabra se interpretaba como.no coMplesta: CMPAROD cainypro, Co PUTO > conto); se regutaries fa vocabradival que en latin clasico se debilitaba por apofo- nia (CONSECRARE > consacrar, RETINERE > ant. reteer, excepto cuando ya no se sentia la composicién: COMMENDARE, de MANDARE > comendiar, CONCIPERE, de CAPERE > con: cebir). En latin los prefijos estaban relacionados con las preposiciones (con excepciones: pis-, RE»), pero podian suftir ciertas modificacio nes, como la prep. cM, a la cual le corre- spondia el prelijo com-/con- / cO-, En cam- bio, elementos gallegos como dis-, ex, in pre, pro-, ree, tc, son tnicamente prelijos, Los prefijos latinos mas frecuentes eran AD-, DE, EX+, INe, PER-. Entre DE EX- y Dis- se producen confusiones ya tempranas, en parte por tener funciones semejantes (lat. clés. DePONERE J EXPONERE / DISPONERE, DEPRIMERE / EXPRIMERE, EXSOLVERE / D1SSOL- Idiké Szijf| Johannes Kabatek, Seiten 1-17 “SONU ~iNsiONIEE. Ci “cediitiento'se have més general, y en'gallego-""™ 1B ‘VERE, EXSCRIBERE / DESCRIBERE), y también Porque en latin tardio aparece con frecuen- cia Ia combinacion Dr + ex-, que se funde con pis- > des-. Ademés ya en latin clasico habia palabras précticamente sindnimas que presentaban alternancia de los prefijos mas Benerales, pues la carga seméntica de éstos menudo era escasa: COMPLERE / IMPLERE, INSURGERE / EXSURGERE. Todo ello justifica cambios de prefijos entre el latin y el gal- lego-portugués antiguo: nsconDeRs —> esconder, (LLUMINARE —> alumear, INVITARE ~> convidar. Otras veces se modifica el prin- cipio de In palabra, suponiendo un falso refijo: AUSCULTARE > escoitar, EXEMPLUM > var. ant. enxemplo. Sigue habiendo vacila- ciones hasta hoy: (d)esconxurar, (d esmaiar, (d)espertar; 0 entre palabra con prefijo o sin Gl: (a)mostrar, (a)podrecer, (a)presentar (for mas normativas: esconxurar, desmaiar, espertar, mostrar, podrecer, presentar). Por la misma razén puede haber diferen- cias en la forma del prefijo entre las lenguas iberorromances, ante todo en el caso de los prefijos mas comunes, 0 en la aparicién o no aparicion de prefijo: esp. agocar, port. esgo- tar, esp. encender (acender es anticuado), ort. acender; esp. ensuciar, port. sujar. esp erfeccionar, port. aperfeicoar, etc. Las for- ‘mas normativas gallegas presentan afinidad ora con Ja forma espafiola, ora con la por- tuguesa: exgotar, acender, ‘ensuciar, perfec- Los prelijos Ab-, 1n-, DE-, EX- podian for- mar ya en latin derivados parasinteticos: VETUS = INVETERARE, SINUS — INSINUARE. 1 ebtiempo este pro Portugués antiguo aparecen muchas crea clones como aventar, desbocar, desterrar, emagrecer, enfrear, enraizar, etc. El procedi- miento sigue siendo productive, sobre todo con los prefijos a-, en- y es: se forman ver~ bos a partir de sustantivos (agrupar) 0 de adjetivos (agravar), pero la segunda forma- cién parece menos frecuente. Nacen verbos dela I*conjugacién, excepto en a combi ci6n de prefijo, sobre todo en- + base + ecer (empobrecer, encarecer, enfraguecer). Prefijos menos frecuentes, pero al mismo tiempo de mayor peso semantico son contra- (S CONTRA), entre (< INTER), go- (= SUB), Sobre- (< SUPER), re= (< prefijo RE-), tra(s)- (< TRANS), etc.: coniraatague, entreperna, socavar, sobrevalorar, reafirmar, trastornar. En algunos casos han aparecide nuevos significados de algunos prefijos, p.ej. entre- 14 XIU, Kormunikationsbereiche, Medien und Textsorten aus sprachgeschichtlicher Sicht abrir (entr-: “a medias”), revello (re-: super lativo, pero este uso es mucho menos fre- cuente que en espaiiol), safrixir (so-: “en pequeiia medida”) Los prefijos latinos entraron en gallego también en su versién culta, conservando st. forma latina como ad-,di(s)-, ex, in, inte sub- (adxacente, discernir, exportar, inculto, interurbano, subterréneo). En la lengua moderna el elemento ex tiene también uso semiindependiente 0 independiente: ex-mi- nnistro, mi ex. El prefijo culto in- presenta homonimia: es la variante culta de en-(insa- liver, inspirar), pero también es prefijo nega- tivo (incapaz, infeliz). Algunes veces el sulijo pairimonial y el culto son intercambiables: sobrepor | superpor, sobrevivente | supervi- vente. Prefijos cultos griegos son a- (de valor negativo), anti-, argui-, hiper-, meta-, etc. (apolitico, antidemocrético, ” arquiduque, hipertensién, metalinguaxe). El prelijo argui hha cobrado sentido de superlative, como en espaiiol: arquiconecido, arquimillionario. Segiin los ejemplos anteriores, los prefijos, @ diferencia de los sufijos, no transcategorizan la palabra original caracteristica que el gal- lego comparte con las demas lenguas roma. nicas. Por eso suponen un problema — que atafie también @ otras lenguas, y no solo a las ‘roménicas ~ creaciones relativamente recientes y muy frecuentes como (aparato) antirrobo, (movemento) pro-liberdade, en las que elementos como anti-, pro- y ottos pare- cen cambiar la categoria morfoldgica de la palabra, Para resoiver este problema, dichos La mayor parte de los sufijos es de origen latino, p.ej. entre los nominales: -wne < “AMINE, -dade < ~TATE, -e=(a) < -ITHE | TIA, -mento'< -MENTU, -ume < -UMINE, -uxe < -uaine, ete. (coirame, facilidade, acidez, bai- xeza, acabamento, negrume, lanuixe). Existen sulijos de origen’ griego, transmitidos por el latin tardio, como -ismo, -ista 0 -ia, que Sustiuy6 el sufijo latino atono -ia (cortesia). Se consideran prerromanos -ego (labrego), oro (machorro), mientras se atribuye al superestrato germénico -engo (mullerengo), al ér, «i (israeli). Un sulijo frecuente de ori. gen francés o provenzal es -ase, procedente del lat. -aticu (denominal: follae, linguaxe, deverbal: aterraxe, contaxe); el sufijo patri- monial correspondiente es -ddego (aché- dego), en claro retroceso desde la época gal- Mdik6 Szijf | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 lego-portuguesa. Parece ser de transmision espatiola -exo, procedente de - 1¢ + vLU (animalexo). Es incierta la etimologia de algunos sufijos apreciativos, como -ico, -ueo. ‘Algunos sufijos de origen latino del galle- Bo-portugués se conservaron tinicamente en gallego: del lat. -EDINE proviene -én, sufijo gue ha perdido su productividad (humedén “humedad”, rubién / roibén “arrebol”) Ciertos sufijos proceden de morfemas Aexivos verbales del latin: de le terminacién -aTU tru del participio pasivo proced -ado 1 -ido (pasado, chegada, vestido, saida). Del participio de futuro pasivo proviene -ndo (dividendo, doutorando). Algunos de estos Sufijos puden afladirse a bases no verbales: camade, cebolada, etc. Lo mismo vale para sudo, procedente de la terminacion -vru del participio pasivo, que se afiade a sustan- tivos y expresa una cualidad: osudo, peludo, sisude En ciertos casos se ha producido la fusion de sufijos: del latino -aRia, por influencia del griego - anace -aria (con la var. -eria, como liberia). En otros casos ha tenido lugar una escision del sufijo: de -DiARE, que el latin adopté del griego, se forma por una parte -exar, por otra ~ear (pestanexar, asear), que en algunos casos son intercam- binbles (bracexar / bracear), otras veces pro- ducen diferentes significados 0 diferentes estructuras argumentales (festexar “cele bar”, festear “ir de fiesta”, branquear, verbo transitive, branguexar, verbo intransitivo). Los sufijos latinos pueden adquirir nue- vvos significados y funciones, haciéndose fs nAREUM, que en latin-k adjetivos relacionales 0 “sustantivo3" que? "77 indicaban_profesién, da como. resultado Patrimonial -eiro / eita, que puede expresar profesién (muifeiro), lugar donde se prac tica una accién (fiadeiro), recipiente que contiene algo (agulleira), estado (bor- racheira), sentido colectivo (carballeira), 4arbol frutal (oliveira), sufijo caracterizador (festeira), gentilicio (brasileiro), posibilidad (casadeiro}, valor peyorativo (barateiro), 0 no cambia el sentido de la base (ombreio). El sufijo -ada, formado del participio pasivo, puede significar accién, golpe, sen- lido colectivo, medida, alimento, contenido, duracion, acto caracteristico (chegada, pedrada, papelada, brazada, laranxada, cul. lerada, invernada, trasnada) Como ya en latin habia sufijos sindnimos, desde muy temprano se producen alternan. cias entre ellos. Asi palabras gellego-portt- ria interna del gallego guesas adoptan sufijos diferentes de las lati- aS: CLARITAS —> clareza, DUBITABILIS / DuBirarivus ~» duvidoso,” FORNOSITAS —> Jermosura, MUTATIO ~> mudanga, OBSCUR- TAs ~ escuridée. Se producen cambios entre el gallego-portugués antiguo y el gallego moderno: mentidor —» mentireiro ! mentiran, ousanza ~» owsadia, pobridade ~» pobreza, vendeiro > vendedor. Algunos sufijos, como ‘mento, han perdido de su productividad: perdimento > perdicién, vendimento —> venda. Hoy también existen variantes como albor { albura, baixura I baixeza, finura | Fineza, preguizoso | preguiceiro, cansazo | Después de la fase gallego-portuguesa, comin en algunos casos, el portugués y el gallego han seguido caminos diferentes: del lat. -Tupine viene la forma antigua -dde: aptido Be, multidde. Mientras en portugués este sufijo con las evoluciones fonéticas subsiguientes se convierte en -dao (aptidao, ‘multidao), en gallego, probablemente por Ja influencia del sufljo procedente de -ruTE (suventude, virude) se restaura el sulijo tude (aptitude, multitude), En gallego la palabra derivada puede contener un tema diferente del portugues: all. coflecemento, port, conhecimenta. La antigua forma galiego-portuguesa fue con- servada por el portugues, mientras el gallezo traspuso la vocal tematica verbal al sustan- tivo deverbal. Los sulijos latinos Hlegaron también por via culta al gallego: -ancia / -encia, -cidn, ie icia, -or,-tura, etc. De esta forma han doe ‘Ya en atin la derivacin deverbal regresiva (FUGERE ~ FUGA, PUGNARE — PUGHA), y el procedimiento se generaliza, esencialmente Gespués de la fase gallego-portuguesa. ‘Nacen sustantivos con vocal temética 0, a y € (descoido, emprego: conversa, muda, aleance, ataque), aparentemente indepen- diente de la vocal tematica del verbo. En gal- lego parece haber mas derivados regresivos que en espaiiol o portugues (coma, farta, ‘mata, quenta, sub), Los sufijos diminutivos son frecuentes en gallego, como en las otras lenguas ibéricas El mis productivo es -ifo, con la var. -cita El sufijo -ifo proviene del fat. -tu, que originalmente expresaba origen (DIVINUS, VICINUS), pero en latin tardio podia expresar la eria de un animal (paLumamus (Put- LUs)), de ahi la evolucién semintica que Mdiké Szifj | Johannes Kabatek, Seiten 1-17 1s conduce al dimimutivo. Este sufijo fue ya general en gallego-portugués antiguo, y se conserva también en portugués, mientras en espaiol el suijo diminutive por excelencia es ~ito (sufijo frecuente también en portu- gués, pero inexistente en gallego). El cle- mento ¢ de la forma mas larga 8p). leon- ito) procede de la ¢ que ya en latin podia aparecer con el diminutivo: el sulijo atono (AVICULA) es substituido por ef ténico (av. Ceuta), y esta misma consonante aparecer’ con el sufijo proveniente de -iNU. Existen ciertas diferencias entre el gallego y el porlu- gués en lo que se refiere a la distribucion 4e las formas mas breves y las que contienen la c. En gallego son obligatorios -cito / ito después de m final (immancifo) y facultatives después de vocal y diptongo finales (avocino/ oi, naiciéa/ nafha). En portugués las for- mas inerementadas son obligatorias después de vocal o doptongo ténico (avozinha, cha. euzinko) y facultativas en todos los demés €a80s (chavenazinha | chaveninha, florsinha | Florinka, ivrocinko | lvrinhe), con posibles diferencias idiolectales. En galego el sujo on ¢ recibe el tratamiento de un sulijo nor. mal, mientras en portugués presenta cerac- teristicas especiales: la vocal radical orginal- mente ténica se mantiene abierta (cafe. Finho), yen la flexién de género y numero se Produce modificacion de la raiz (edozinho ~ eaezinhos). En castellano las teglas que determinan la aparicion de las formas alar- gadas son tambien diferentes de las gallegas ej. aparece el sulijo alargado en palabras Gisilabicas acabadas en e, o con diptongo en sslatuiztevchecito, evencecitc), En galego "suas tminutives pueden aparceet acini lados: pouguenechito, pequenerrechino. Los suijos aumentativos son més produc- tivos que en portugués. Los dos principales son -6n ona (maletén, casona), coman con el portugués, continuador de -ONr y -aso | proveniente de -aceu / -acta (golpazo, pedraza). En portugues este iltimo es poco frecuente (barcaca), y puede presentar una vocal temitica especial (dentupa). El sufijo én | -ona tiene caracteristicas peculiares: puede cambiar el género de la base: eabezén, imatlerdn,y también se aiade a bases verba Jes: chord f ona, faltén ! ona Tal como en las otras lenguas romanicas ccidentales, el sufijo -mente, formado por la gramaticalizacion de meNs, forma adver. bios a partir de la forma femenina de los adjetivos (lindamente). Al igual que en espa. iol y portugués, en el enso de coordinacion | | | | | beeen aroma 16 ‘IIL. Kommuniketionsbereiche, Medien und Textsorten aus sprachgeschichtlicher Sicht de dos de estos adverbios se elide el primer sufi (linda e facilmente. En los pocos compuestos latinos que se han conservado se ha perdido a nocién de composicién, como en aURIFICE > ourive. La mayorie de los compuestos se ha creado pues en la época romance. Los procedimien- tos de composicién de palabras también han cambiado desde la fase latina, y en general ccoinciden con los de las otras lenguas romé- nicas, En latin habia pocas palabras compuestas y los procedimientos para la composicién eran escasos. Un tipo relativamente frecu- cente de compuestos exocéntricos conteia un elemento deverbal en segunda posicién y en primera en general el complemento directo del verbo, con une vocal i de enlace entre los dos elementos: AGRICOLA, AURIFEX, SIGNI FER (el primer elemento no es necesaria- mente complemento directo: LARGILOQUUS). Habia otros compuestos exocéntricos como ALBICAPILLUS “de pelo blanco”, que tam- bién contiene la misma vocal de enlace. Exi stian compuestos endocéntricos sintagmati- cos formados por sust. + epiteto: RESPU- BLICA, 0 por gen. + sust.: AQUAE DUCTUS. En romance estos tipos sdlo se conservan en parte. El tipo de AGRICOLA aparece ye temprano substituido por la construccién tema verbal (este primer elemento también puede tener otras interpretaciones posibles) + sust. en funcién de complemento directo. En cierto sentido el compuesto latino y el Tomiinico son parecidos, pero se ha invertido cl orden de los elementos, Estos compuestos tominicos se decumentan-ya-en-l perlodo~ gallego-portugués, perc se hacen mucho mas: frecuentes posteriormente, al igual que en las otras lenguas roménicas. Ejemplo galle- 08: lavapratos, portavo=, quebranoces *cas- canueces”, 0 con significado no deducible: escomabois “ciervo volante", furabolos “dedo indice”, matapiollos *pulgar”. El tipo de ALBICAPILLUS aparece en galle- g0-portugués y sigue en la lengua moderna: boquiaberto, rabilongo. Expresa una carac- teristica de una parte del cuerpo, contiene el elemento / pero se ha invertido el orden de los elementos respecto al latin, El tipo sintagmatico sust. + epiteto conti- nniia en la época medieval y en el gallego moderno: noiteboa, ollomol “besugo", en algunos casos en orden inverso: belas-artes, xentil-home. Un tipo nuevo, muy productive y general también en otras Ienguas romani- cas, es el apositivo: papel-moeda, lingua-nai idikké S2ij I Johannes Kabatek, Seiten 1-17 Aparecen también grupos preposicionales: arco da vella “arco iris”, cabodano “fin de aio”. En algunos casos se elide ia preposi- cién: beiramar, bocanoite, pantrige. En este lltimo tipo la vocal temética del segundo ele- mento (modificador) puede adaptarse al del niicleo del compuesto: herba-triga (“hierba de trigo”), mazd-cuca (“manzana de cueo”), pallacentea (“paja de centeno”). Pueden aparecer dos adjetivos yuxtapue- stos: épico-lirico, azul marifo (aqui el segundo elemento es modificador del pri- mero). En estos compuestos también puede aparecer la i: agridoce, branguiamarelo. En. Ia composicién de dos adjetivos el primero puede adoptar una forma apocopada inva- lable, acabada en o: franco-hispénico, labio- dental. Segin lo visto hasta ahora, en las palabras compuestas endocéntricas patrimo- niales en la lengua moderna el nicleo aparece como elemento de Ia izquierda, Aparecen, sin embargo, por influencia extranjera, algu: ‘nos compuestos ajenos a los tipos autécto- nos, con el niicleo 2 le derecha: galegofa- lante, suramericano, Los compuestos cultos también pueden contener Ia s como elemento de enlace: clari- Vidente, herbivoro, fillforme, matricida, ver~ mifugo. Como en las otras Ienguas roménicas, existen formaciones eruditas modernas que contienen un elemento greco-latino que no existe como palabra independiente: hiper- tension, macroestructura, Estas formaciones se pueden interpretar como derivados 0 como compusstos. 7. Bibliogratia Atvatez Blanco, Rosario / Monteagudo Romero, Henrique, Galego: Evolucidn lingistica interna f Gramatiea, in: LR 672 (1984), 1-21 Alvarez, Rosario / Xove, Xosé, Gramética da line ‘gua galega, Vigo, 2002 ‘Alvarez, Rosario { Regueira, Xosé Luis / Montea- gudo, Henrique, Gramasica galega, Vigo, 1986. Bello, Rivas, Maria Xests, Historia da vocelismo, ims. inéd., Santiago de Compostela, 1998. Coseriu, Eugenio, £1 arin vulgar y ef tipo linge stico romance, in: Anglada, Emilia / Bargailé, Maria, EI cambio ingtistica en fa Romania, Lids, 1990, 37-41 Fernandez Rei, Franciseo, Dialecrolosia ds lingua gega, Vigo, 1990, ~, Gheada e seseo no galego cologuial ¢ no galego ‘Guindar dos anes 90, Notas sabre a sta preseneto nas media © nos textos musieais, in: ACILG 1 (2005), vol. 2, 307-336. | 2502. Historia interna del galego " | Ferreiro, Manuel, Gramética hisr'rica galega, ‘Santiago de Compostela, 1995, Garcia, Constantino, Galego: Bvoluetén linga- ica interna IT- Léxico, in: URL 6121994), 22-34, Garcia de Diego, Vicente, lementos de gramatica histéricagallega (fondtica ~ morfologia), Burgos, 1909, Huber, Joseph, Gramdrica do Portugués Antigo, Lisboa, 1986, | Kabatek, Johannes, Galego escrito e lingua comin nat segunida metade do séeulo XX, Grial 122XXX11 (1994), 151-179. Lorenzo, Ramén, La traduccion gallega dela Cré- hhica General y de la Crénica de Casilla, Orense, 1975. ~; Algunhas consideraciéns sobre a evolucién do sistema consonéntco do galego medieval 6 moderno, in: Kabatek, Johannes / Schonberger, Axel (eds), Akten des’ 2. gemeinsomen Kolloguiums der deutschsprachigen Lusivanstik und. Katalanisrk (Berlin, 10-12. September 1992), Frankfurt, 1993, vol. |, 13-26 Maia, Clarinda de Azevedo, Histéria do galego- portugués. Edo linguistic da Galizae do Noroe~ ‘ste de Portugal desde o século XIII ao séeulo XV1, | Coimbra, 1986 Mario Paz, Ramén, Historia da lingua gulega, Santiago de Compostela, 1998, 0 idioma galego no limiar da sua renacenza, RGF, Anexo 2 (2003). Monjour, Alf, Galegische und portugiesische ‘Skriprae, in: LRL 2/2 (1995), 692-720. i ‘Neumann-Holaschub, Ingri, Die Satzgliedanord- ung. im Spanischen. Eine diachrone Analyse, ‘Tabingen, 1997, RAG / ILG = Real Academia Galega / 1 \ ‘da Lingua Galegs, Normararagrificas motfatn. ou is -xicas do idioma golega;-A-CamuianbSentioga Jem Compostela, 2004, VOLGa = Real Academia Galega / Instituto da Lingua Galega (eds. Gonzalez Gonzalez, Manuel Santamarina Femnindez Salgado, Antén), Voca- bbularo ortogréfico da lingua galege, A Coruna | Santiago de Compostela, 2008, Williams, Edwin B., Do Latin ao Portugués, Rio de janeiro, 1975, Mdiké Szif, Budapest 1 Johannes Kabatek, Tubingen Idiké Szijf| Johannes Kabatek, Seiten 1-17

You might also like