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Universidad de la Republica Facultad de Psicologia ESOS QUE LEVANTAN BORRACHOS Servicio Socio - Comunitario de Atencién Psicolégica. Doc. Responsable Lic. Gabriela Etcheverry Programa de Reduccién de Riesgos y Dafios Vinculados a las Practicas Asociadas al Consumo de Drogas Doe. Psic. Gabriel Eira Doc. Lic. Patricia Srabonian Martin Merlo indice Introduccion Curiosidad Atemorizante simetria Exploracion Latitud y longitud Guethos Negociacion Entre hamedas paredes Nosotros y ellos Intervencion Cambiar las cosas Implicacion EI muro Conclusién Erigir un discurso Bibliografia alt 11 iy 17 20 20 24 24 26 Introduccion El individuo humano se debate er el centro de un juego de fuerzas cuyo sentico ha renunciado generalmente a desentrafar y su falta total de curiosidad a este reszecto parece ser la condicié1 misma de su adaptacion sacial. André Breton. Antologia del humor negro Curiosidad. Esta frase escrita por Breton para introducir a Franz Kafka en su Antologia del humor negro refleja el espiritu de pensadores tales como Derrida, Foucault 0 Castoriadis. Y quizés también por se- enunciada por un poeta es que brinda inicio a mi reflexién. Deleuze decia que en cierto punto la filosofia es necesariamente poesia (Deleuze, 1987). El acto de reflexionar acerca de la propia situacién implica necesariamente un cuestionamiente de lo dado, ante lo cual la Unica alternativa es la creacién —poiesis-, creacién inacabada e inacabable de herramientas, teorias, sentidos (Castoriadis, 1983) EI reflexionar acerca de la propia actuacién requiere incluso a algc mas complicaco; enfrentarse a lo ya conocido; pero no para teconfirmarlo en un loop interminable de autocomplacencia, sino para ver en él cuanto hay de social y cuan poco hay de “natural” Ahora bien, sin necesidad de alcanzar los niveles de alienacién que denuncia Breton, es comtin que muchos de los sentidos y afectaciones que producen estas fuerzas en nosotros nos sean ininteligibles Esta renuncia a desentrafiar las condiciones que nos brindan posibles devenires, fue una de las afecciones mayores durante el desarrollo de la practica. El estar inmerso en estas fuerzas sociales, esto es, lo historico-social, afecta notatlemente las posibilidades de visibilidad y enunciacion de algunos fenémenos. Cabe aclarar que lo histérico-social es entendido como “...) autocreacion de la sociedad como tal y del campo histérico como tal, ni sujeto ni cosa ni concepto. Potencia o fuerza de posici6n (en lo anénimo colectivo y por lo andnimo colectivo) de significaciones imaginarias de instituciones que llevan dichas significaciones y que las animan, ya que ambas mantienen unida a la sociedad, la hacen ser sociedad y cada vez como esta sociedad particular, ambas cosas hacen ser a los individuos como individuos y cada vez como estos individuos particulares’. (Castoriadis, 1994:11) A pesar de que estos juegos, en funcién de la extrema cercania (implicarcia) como de la extrema lejania, nos hacen parecer distantes o incapaces de ser afectado y/o afectar, son los que moldean al homo sapiens en su deveni' humano. Estas fuerzas, que configuran el complejo universo humano, ese magma de significaciones sociales imaginarias que une a la sociedad, intervienen en la creacién de la identidad del irdividuo humano Entre las significaciones instituidas por cada sociedad, la mas imoortante es la que concierne a ella misma. Todas las sociedades tienen una represertacién de si como algo. Aqui hay, a nivel social, en la representacion un correspondiente externo social, de una identificacion final de cada individuo, que es también una identificaci6n a un “nosotros”, a una colectividad sentida como imperecedera (Castoriadis, 1983), What immortal hend or e Dare frame thy fearfel symetry W. Blake. The tyger Atemorizante simetria. La identidad se apoya, paraddjicamente, en la diferencia. Diferencia que se ve aumentada al disminuir la distancia. La atemorizante simetria que se advierte cuando el Otro Absoluto’ no es tan lejano como ser intuye, como se necesita, como se desea. Pensemos los primeros grupos humanos y un suceso cuya frecuencia iba en aumento: el encuentro con los miembros de otras comunidades humanas. Cuando los seres no eran vistos coma infra-humanos (esclavos de los cuales abusar) lo eran como super-humanos (dioses que venian a " Bse otro con el cual no es posible ni n punto de contacto (Jure, 2005 completar alguna profecia) El centro de la cuestién era (es, y probablemente lo seguir siendo) ver a otros seres humanos como Otros (Krotz, 1994). A partir de ahi, alteridad no es sindnimo de una simple y sencilla diferenciacion. Esta alteridad estara dirigida hacia aquellos tan similares al ser propio que ‘toda diversidad observable puede ser comparada con 'o acostumbrado, y que sin embargo, son tan distintos que la comparacion se vuelve reto”. (Krotz, 1£94:9) ‘Aqui aparece la atemorizante simetria de! Otro conmigo. Porque el ver otro ser humano, producto de una sociedad difererte, fragmento ambulante de tal sociedad, implica el remitirme a mis légicas de pertenencia grupal. Ante esto, qué soy yo, qué estoy haciendo con estos otros, estoy respetando 0 les estoy imponiendo una forma de significar sus practicas? A fin de intentar empezar a desentrafiar tales juegos de fuerzas, es que divido mi trabajo en cuatro ejes: -Exploracién; -Negociacién; -Intervencién e - Implicacién. Me declarare satisfecho logrando un acercamiento, parcial, inconcluso y siempre abierto a revisiones, a ciertas manifestaciones de tal fenémeno que me fue dado observar a lo largo del desarrollo de mi practica Me preguntas en que latitud y longitud te encuentras, no sé que son latitud y Iergitud, pero son dos palabras maravillosas L. Carroll. Alicia en el Pais de las Maravillas Latitud y longitud. Un lugar urbano puede ser definido de dos maneras (Agier, 1995). Visto desde el exterior se lo puede definir como regién moral Robert Ezra Park, uno de los fundadores de la antropologia urbana entendia la ciudad como segregada, ilustrando su pensamiento con la imagen del mosaico. Las partes de este mosaico forman pequefios mundos que se tocan sin interpenetrarse. Estos se componen de “reas de segregacién natural”, con su distribucién de poblacién especifica. Las areas naturales de segregacién engloban zonas moralmente diferenciadas (barrio de prostitutas, tugurios etc.) Desde el interior, puede definirse, partiende de la observacién etnologica de las posiciones, redes e itinerarios urbanos a través de una sere de mediaciones sociales, como el apropiarse de una esquina o un bar, sefiales de una territorialidad concentrada, focalizada. Tomando esta segunda posici6n, explorar el sentimiento de apego hacia un lugar por parte de sus habitantes es explorar como la identidad social es creada. La Ciudad Vieja como barrio pose una serie heterogénea de significados atribuidos tanto por los habitantes como por los “extranjeros’. El hecho de devenir centro de la movida nocturna vino a complejizar ain més el entramado de significaciones que se asociaban al barrio mas antiguo de la capital Pensar la ciudad en tanto factor identitario compele a tomarla como globalidad. M. Agier plantea acudir al andlisis de redes, concebido precisamente para dar cuenta de estas multiples relaciones (Agier, 1995). De esta manera, sera posible elucidar cual es la cultura que crean los mundos -elacionales urbanos?. Para alcanzar tan ambicioso objetivo se torna necesario recurrir, como plantea Augé a esa antropologia paradéjice capaz de poner al individuo en el centro de su problematica, cuando no de sus respuestas (Auge, en Agier 1995). En el plano del andlisis esto trae aparejado investigar las significaciores relativas que se brinda a los espacios de la ciudad, a fin de hallar las identidades urbenas. Asi mismo, el estudio de las sociabilidades permite esclarecer las diferentes culturas que configuran el apego 2 los lugares, as como la produccién, reproduccién y/o reinvencién de los lazos sociales en los espacios urbanos. De mas esta decir que os alcances de una tal investigacion superan con creces los alcances de este trabajo. Sin embargo, reflexionar acerca de esto brinda una herramienta para considerar el escenario donde tuvo lugar nuestra practica La Ciudad Vieja sufrié, durante los ltimos veinte efios, un proceso de pauperizacién, yendo a contramano de las tendencias mundiales, en las que es posible apreciar una revalorizacién de los espacios historicos. A partir de del 2002 el tertitorio de Ciudad Vieja fue ordenado en funcién de nuevos valores. Valores simbélicos de glamour y popularidad. En ciertos Ambitos, no ir a la Ciudad Vieja era no existir. Asi Ciudad Vieja se lleno de pubs. En un territorio, todos Ios territorios. Pero bien delimitados. La frontera es dificil de franquear. Por supuesto hay mutantes, hay viajeros. Pero las fronteras estén ahi para ser respetadas. Por eso la mayoria permanecia en su lugar. Incluso un lugar que no era ningun lugar. Con esto refiero a un fenémeno particular que descubrimos a raiz de las entrevistas participativas que realizamos en el trabajo de exploracién. Numerosos usuarios de la zona, no entraban a ningun boliche. No tenian un lugar. Su lugar era justamente no entrar. No en:rar en 2n boliches, no entrar en esquemas, no ser “caretas””. A pesar de eso estaban alli En Ciudad Vieja, en el centro de la movida. Movida de los otros, no de ellos. Una logica perfecta que por simetria reproducia eso que no queria producir. El juntarse como un rebafio, el seguir a la mayoria®, Pero no se reunian en el * Por caretase entiende a aquel que no consume di cédigos de los eonsuimidores sin serlo 3 “Los jovenes (...) cada vez operan mas por principios tipicamente territoriales como diferencias, identidades, pertenencias, marcas, orgullo (...) todo esta cubierto de zomportamientos © conducta Conduetas ritucles, conductas imitativas, comportamientos biologicamente determinados”. (Nunez, 2006:18) s, © peor aun, ¢ aquel que intenta manejar los parque Rocé o en Plaza Lafone. Lo hacian donde el caretaje se reunia. Una vez mas la atemorizante simetria. Todavia era la hora de los grupos se2arados. Incluso en aquel patio destartalado habia zonas de guetho (...) a los de su misma clase cada tipo recone y no parecia mostrar ninguna inclinaci6n a mezclarse. C. Bukowsky. Hellywood Guethos. Una concentracién tan grande en un espacio geografico tan compacto, era de por si una novedad. Las mezclas que se podian generar asi eran también innovadoras. Para ejemplificar esto: solo poco mas de setecientos metros separan a BJ de El deseo‘, habia solo poco mas de medio kilometro entre Mario Silva®_y Motosierra®. Pero la segmentarizacién cue nos fue posible visualizar a lo largo de nuestra practica demostré que, una vez mas, las fronteres seguian alli y eran respetadas (chetos por aca, rockeros por alla, cumbianchas por aculla) “La frontera, es claro, no se organiza segtn la estructura tranquila del logos, la razén o la dialéctica. (..,.) no esté estructurada come un lenguaje: esté ensamblada en une dinamica tensa, apretada y urgente, llena de miradas, de afectos, de rencores de envidias, de proximidad. La tensién es propia de la contigtiidad, de la vecindad, de la proximidad social (...). (Nufiez,2006:16) De que manera aiecta a los “nativos’ y a los “extranjeros” que se apropian de se territorio? * Boliches de tock y musica tropicel, respectivamente, * Cantante de misica tropical, nacido en Artigas. Autor de clasicos como “Hoy tengo ganas de ti” 0 *Sufro lo mismo” Banda de punk y speed metal. con canciones como “I wanna fuck nyself™ o “Life in hell” Como este nuevo significado (zona bolichera) vino a influenciar las reacciones de los nativos frente a los extranjeros que llegarian, acerca de cuales eran sus problemas, cual era el otro que necesitaba de una intervencién? En lo que respecta a este punto, la realizacién de talleres con vecinos de la zona permite elaborar algunas ideas. En un principio fue sentido en las reuniones que se mantuvizron con los vecinos del barrio, la existencia de dos categorias de problemas, los de los otros que se excedian, y la de los nifios de la calle, verdaderos otros absolutos, ininteligibles pera los vecinos. Esto puede verse en el apartado implicaci6n, en la manera en que los vecinos que tomaron parte de los talleres se definieron a si mismos al definir a los “otros”. En cuanto a esta doble problematica, el tema de los nifios de la calle es por demas interesante. Resume en buena medida las posiciones de los vecinos. Para ellos el problema de mayor afectacién no eran unos jévenes borrachos, excluyendo casos anecdoticos de puertas orinadas y/o vomitadas. Pero los nifios que mendigan, nifios que fuman pasta base, he ahi el problema. Pero en as derivas urbanas que realizamos, asi como a lo largo del posterior desarrollo de la intervercién no aparecieron estos nifios como un actor significativo Por otra parte, para los “habitantes nocturnos” el problema radicaba en los jovenes, en tanto Ics nifios practicamente no existian. Es ldgico, si consideramos que es imposible diferenciar en el fenémeno observado aquello que pertenece al fendmeno mismo y aquello otro que pertenece al observador. Los “habitantes diurnos” veian nifios de la callle, en sus callles, al volver de sus trabajos, cuando salian a realizar sus compras, a la mariana al salir hacia sus trabajos. Por lo tanto el mayor peso residia en esos nifios. En resumen, lo que mas veian era lo que mas molestaba y lo que solicitaban fuera nuestra preocupacién mayor. Personalmente solo observe un episodio de consumo de pasta base a lo largo de los mas de seis meses de trabajo, entre recorrdas exploratorias y la intervencién propiamente dicha. Por qué entonces le demanda hacia los nifios?. 7 Aquellos que trabajan la noche de Ciudad Vieja Esos nifios invertian el guetho. Eran ellos quienes cercaban a los habitantes diurnos. Ninos que no querian respetar les fronteras e insistian, con la terquedad propia de los nifios, en ser molestos, en ser visibles. En iltima instancia, en ser. Pero las fronteras no terminan alli, donde las diferencias son tan flagrantes. Fue posible hallar, en estas primeras derivas urbanas, en el mosaico de Ciudad Vieja, tres areas: una zona bolichera, la City, y el puerto con los ‘bajos”. Tomemos en cuenta que territorio puede ser definido justamente como aquello que el poder policiaco viene a ordenar (Nufiez, 2006) No esta de mas aclarar que por poder policiaco no se hace referencia Unicamente a la policta, ese “escudo de la civilizacion’, al decir de Lautreamont. Poder policiaco es, tomando a Sandino Nufiez el poder clasico, aquel que “opera sobre los cuerpos: disciplina, encauza, manipula y eventualmente castiga” (Nufez, 2006:7) Aquella primera division, a lo largo de la intervencién propiamente dicha, mostré las diferencias de ‘lujos y de valoraciones de los mismos lugares. Asi Zonas que en las primeras recorridas (a la luz del dia por decirlo asi) mostraban reas significativas que en la noche no existian y vicaversa. La division tripertita se mantuvo, desde mi punto de vista, era posible delimitar tres zonas con distintos publicos. La zona BJ, donde entraban ademas de BJ, Amok y los bares Santa Catalina y Ciudadela. Aqui se veia un ptiblico, roquero (por recurrir a una imagen simplona pero ilustrativa). Una franja intermedia que cubria el epicentro de Ciudad Vieja, Bartolomé Mitre, Sarandi, Rincén. Aqui primaban los chetos. Una tercera zona la formaban la zona de Rincon, Juncal y 25 de mayo; aqui el grupo dominante eran los adolescentes, especialmente en su version plancha No es necesario decir que el juicio acerca de cualquier grupo dice mas acerca de quien emite el juicio que del grupo juzgedo. Asi esta divisin habla mas acerca de mis propios a prioris y pre-juicios (entendidos como juicios previos). Como intento mostrar en el apartado de implicacién, estas zonas tendran diversas valencias a lo largo de la intervencién A lo largo de nuestra exploracién, en cierta medida también tomamos otro rol. El caracterizar flujos, el mapear las valencias simbdlicas de los lugares de v, participa en ese poder. Evitar quedar pegado a esta funcion, evitar devenir jueces de usos y costumbres, fue para quienes hicimos parte de este programa una actividad constante de reflexion y accion. Asi, cuando desde la Junta Nacional de Drogas se “insinué” que recogiésemos informacion acerca de ciertas practicas, a lo cual rehusamos, ya que no era nuestra funcion Como plus, la herramienta utilizada como alternativa a la planilla fiscalizadora de la JND, resulto mucho més rica, ya que fueron realizadas las entrevistas oarticipativas a las que hice mencién mas arriba 10. Muy eminentes socislogos! Inteligentes psicslogos! Tremendamente importantes politicos, bacterislogos y neurSlogos! Alli estaban, entre paredes hiimedas. R. Bradbury. Usher I] Entre paredes himedas. La interrelacién entre los sujetos se da con el telon de fondo de una estructura econémica que influencia la efectivacion de la identidad. Foucault primero, y Guattari luego, ofrecen herramientas para comprender las relaciones entre los sujetos y estas estructura socioeconémicos. Al focalizar en los fenémenos micropoliticos®, Guattari incita a reflexionar en torno a las relaciones entre individuos, complejos procesos de singularizacién marcados, es mas, consustanciados con la subjetividad capitalista®. Apunta asi, ademas de considerar al sujeto en relacién con los otros, a considerarlos también en relacién con las instituciones, cuyo caracter capitalista perfila su singularidad y determina su subjetividad. No olviderros que Guattari diferencia identidad de singularidad: “La singularidad es un concepto existencial, ya la identided es un concepto de referenciacién, de circunscripcion de la realidad a cuadros de referencia, cuedro estos que pueden ser imaginarios’ (Guattari & Rolnik, 1986:68, en Zenella, 2005). La singularidad resulta del cruce de varias formas de mi ser con relacién a las personas y las estructuras que nos cecan. En tanto la subjetividad, mas precisamente la subjetividad burguesa invade todos los aspectos de la vida social, sn sus esferas econdmicas, sociolégicas, antropolégicas, privada, publica, individual colectiva * 1a micropolitica tiene objetivos claros: “La cuestion de la micropolitica es la de cémo reproducimos (0 no) los modios de subjetividad capitalista” (Guattari, 1986:69) ” Esto es sus valores, ideologias, etc. Hasta que punto conseguimos escapar a los tentaculos de la subjetividad capitalista? Hasta que punto nuestro discurso develada ese deseo de dominar, de controlar? La necesidad de regular el consumo ha sido concomitante con el mismo consumo. Podemos interpretar los rituales chamanicos, como un mecanismo de control, una manera de reglar el consumo, el cual quedaba limitado a ocasiones especiales e incluso a sujetos especiales En nuestra sociedad, esta tendencia al control de las practicas telacionada con el consumo, cristalizé en dos modelos principales, uno el abstencionista, el otro de reduccién de riesgos y dafios. Los sustentos para apoyar uno en lugar del otro no se debe a consideraciones Unicamente sanitarias. Como plantea Fernandez Romar: “Tratar de entender la voluntad prohibicionista en materia de drogas exige una consideracién también particular de los factores que convergen en cada caso y en cada sustancia ya que razones filoséficas y religiosas suelen amalgamarse con intereses econdmicos y proyectos politicos de pequefios grupos de interés y presin” (Femandez Romar, 2000:58). Nuestra practica tuvo lugar en medio de un cambio de posicionamiento que el gobierno estaba tomando acerca de la “politica de drogas”. Se paso de solventar un modelo abstencionista para instrumentar una postura sustentada en una estrategia de reduccién de riesgos y dafios. Ciertamente, la efectivacion de tal postura disté bastante de ser una estrategia de reduccién de riesgos y dafios. Podria considerarse un hibrido, hibridacién generada por cuestiones tales como la pacateria y la infaltable busqueda de rédito politico. A fin de explicitar esto recurro a un analizador artificial: los folletos de! Abrojo. En el folleto dedicado a tratar el consumo de marihuana, se comentaba la utilidad de una pipa de agua a fin de reducir los dafios relacionados, especificamente el humo caliente. La pipa de agua o narguile es un dispositivo que, valiéndose de sencillas leyes fisicas, permite enfriar el humo, minimizando la irritacion que produce este produce en las vias respiratorias, aumentando la cantidad de THC" que es efectivamente inhalado en cada celada. Ahora bien, habiendo realizade una versi6n casera de tal aparato, en las reuniones con el Abrojo, proponemes introducirlo en los folletos. Como ya he explicado, los folletos apuntaban a un puiblico que no era de practicar un consumo consuetudinario Le publico que si realiza un consumo mas regular (que scn quienes se exponen a los riesgos del humo) no conservaba el folleto, per lo tanto era una perdida de papel. La alternativa de presentarles la manera econémica de realizar un pipa de agua podia servir para que conservaran el folleto, lo leyeran y asi completar la funcién socio-educativa que se proponia la ONG. Tras los retoques necesariss EL Abrojo lo introduce en el folleto. Al ser presentado a la Junta Nacional de Drogas (JND)"’ el presidente de la Junta lo veté por ser “apologia’, ya que presencia de tal aparato “incitaria al consumo”. Pero los folletos conservaron el esquema para armar un porro. Es posible reflexionar que quienes hacen un uso consuetudinario de marihuana_no necesitan aprender a armar. Y si no saben armrar es dificil que hagan un uso problematico y por lo tanto no pondrian en riesgo su salud. Y no es ese el objetivo al que apunta la JND y através de ella el gobierno? Cuidar de la salud de sus habitantes? Es imposible no vislumbrar la mezcla de razones ideolégicas, y econémicas a la que referia Juan Fernandez. Us, and them And after all we're only ordinary men, Me. and you R, Waters. Us and them Nosotros y ellos. Otro ejemplo de esto fue la defensa realizeda por integra s de la JND acerca de la pertinencia de ciertos mensajes. Asi "THC es la sigla para el principia activo del cannabis. "La Junta nazional de Drogas cuenta como sus integrantes a los sub-secretarios de todas las carteras y es presidida por l Lie.Jorge Vazquez, hermano del presidente proyectaban y generalizaban su experiencia con cierto publico con el cual sus estrategias habian resultados exitosas. No era el objetivo de nuestra critica quitar merito a esos logros. Solo intentébamos ponerlos en relacion al puiblico tratado y al que deberian enfrentarse ahora. En el caso los folletos habian sido un éxito en conciertos de No te va a gustar’? y La vela puerca’®. El publico mayoritario de tales grupos, especialmente el primero, se integra de pre- puberes y adolescentes. Su uso de sustancias es ocasional. Sin ser peyorativo, ho es el mismo publico que puede asistir a toques de Rey Toro’. Al marcarles que existen ciertos codigos que no pueden dejarse de lado, para graficarlo, decirle a cualquier persona con un minimo de experienc a en el consumo de cannabis, “no fumes la tuca’®” es el equivalente a decirle a un lector de novelas policiales que no lea la tiltima pagina donde se descubre el asesino. Uno se pierde lo mas interesante. Bien, la respuesta a esto por parte de la JND fue que no todos compartian estos cédigos. No difiere mucho de expresar, como lo hizo un funcionario de la JND que “hay personas que van a Ciudad Vieja a disfrutar el sabor del alcohol’. Claro que las hay. Esas personas no son ‘problema’. El “problema” son aquellos que “se dan vuelta”. Ergo, si los folletos apuntan a un publico no pueden apuntar a otro. Esto no es basado en una concepcién maniquea o dicotomica. Es pragmatismo. El folleto pierde legitimidad para el pUblico “experiente” al incluir mensajes “palomos’®”, asi como se volveria ininteligible para los otros si utilizara solo el argot de los “experientes” En las reuniones mantenidas, fue posible apreciar como lo que en un principio solo asomaba como desconocimiento del otro al cual apuntaba la accion, se volvia cada vez més un intento de enunciar de otra forma, de una manera més politicamente correcta, por asi decirlo, (o quizés mas progre) lo ya sabido. Por eso los folletos iniciaban con un “es mejor no consumir, pero si. Foucault (Foucault, 1996) plantea la existencia de dos tipos de discursos. Los irupo de ska-pop Banda de rock y ska, con evidentes referencias cannabicas: ™ Banda de heavy metal "5 Tuca es el extremo final del porto. También se llama tuca al dispositive (de cafia 0 hueso) con que se consume esta parte Entiéndase por palomo tonto, inzenuo. 14 que se dicen (que son constantes y efimeros) y los que son dichos (discursos que estan en la base de ciertos actos). Estos tltimos son los textos religiosos, juridicos, cientificos, etc. Solo pueden ser comentados, con arreglo a que los nuevos discursos digan aquello que ya estaba dicho en tales textos. Como el comentario talmidico, dice de otra manera aquello que ya estaba dicho. Sin dudas lo que mas rechina es la tosquedad el folleto empieza de la manera mas torpe posible: es mejor (para quien?, mejor que qué?) no consumir. En el caso del comentario talmudico, no es posible para los comentadores decir algo distinto a lo alli escrito ya que esa es la palabra de Dios. Quién es uno para refutar la palabra de Dios... Pero en el caso que nos incumbe, que ser superior nos dio esa certeza, tal que no puede ser rebatida? Por qué es apologia? En las reuniones se perfilaba que el cometido central de la intervencién no podia despegarse de un componente fiscalizador, enunciado claramente en la necesidad obsesiva de registrar la edad de los consumidores de alcohol en los distintos boliches. Algo que, por demas esta decirlo, esta por fuera de lo que implica una politica de reduccién de riesgos y dafios. Lo que se proponian era en cierta medida una reducci6n de riesgos y dafios lo mas liviana posible. Manteniendo en lo posible el aspecto de lucha contra las drogas que la sociedad pidié durante un periodo importante a principios del 2006" El dinero fue otro analizador privilegiado. Los recortes presupuestarios que suftié nuestro programa, quedando |imitado a solo diez intervenciones, trajeron consigo una limitacién en los alcances de nuestro trabajo (cuando empezamos a ser reconocidos de manera mas 0 menos cercana a nuestro objetivo:"esos que levantan borrachos”, termindbamos las intervenciones) EI abrojo por otra parte conto con una suma mas holgada, a fin de realizar su trabajo socio-educativo. Es menester aclarar que en un principio la triple articulacién entre JND, Abrojo y Facultad de Psicologia (caracterizada como esquema del paraguas) no llego a tomar cuerpo no solo por factores econémicos. Estos soles vienen a tomarla mas evidente. Ante los recortes que se nos impusieron y los resultados obtenidos, el dinero se mostré en su real ” Recordar solo el patético (entigndase por patético aquello sotrecargado de emocién) stceso ce las madres de la plaza y su cruzade anti-bocas. importancia. El efecto de una intervencién se basa en las ideas que las sustentan, por eso opto por terminar este apartade con un parrafo de Castoriadis “Desde el imaginario se trata de que, primero, todo problema puede ser resulto con una cantidad suficiente de dinero, pues segundo, con los dineros se compra (0 se fabrica) la técnica y con Ia técnica se resuelve todo. Hay una diferencia ertre tener una politica y una estrategia y suministrarle los medios apropiadas, por un lado y acumular los medios y no tener ninguna idea de politica y estratégica por otro” (Castoriadis, 1996: 22) Intervencién Por qué tendran que cambiar las cosas? Por qué Hlevamos la carga de deber cambiarlo todo? Sera ese desagradable deber lo que la gente Hama vida? O soy Ia tinica persona para quien eso es un deber? Yukio Mishima. Confesiones de una mascara Cambiar las cosas. En cuanto a la intervencién, considero nezesario exponer lo que implica una postura critica y ética en este Ambito atravesado (quizas més que cualquier otro) por la dimensién politica. A partir del trabajo con drogas se plantea como alternativa la reconstruccién de todas las categorias que se utilizan, valorandolas en su contexto. Asi, dejar de trabajar con adictos, drogas y otras nociones que no son sino constructos sociales, que obtienen una legalidad de hecho. El enfrentar la singularidad del acto, del encuentro con el otro nos replantea la necesidad de juzgar y decidir y como esto pertenece a lo particular conduce a consicerar la practica en salud, en tanto praxis como una practica necesariamente critica. Por praxis entience: "(..) ese hacer en el cual el oi70 0 los otros son considerados como seres auténomos y como el agente esencial de su propia autonomia. La praxis (...) es algo del todo distinto a la aplicacion de un saber previo (...). Se apoya en un saber, pero este es fragmentario y provisional (..) porque no puede haber una teoria exhaustiva del hombre y de la historia; y es provisional porque la praxis misma hace surgir constantemente un nuevo saber (...)" (Castoriadis, 1983:11) Un posicionamiento ético es el sustento ultimo de tal praxis. Aqui se imbrican una serie de cuestiones, acerca de las cuales solo puedo ofrecer ciertas lineas, a fin de elucidar los procesos que permitieron la producsion de tal praxis. La praxis en salud esta situada en un complejo entramad> de fuerzas, entagnicas a veces, superpuestas otra, naturalizadas la mas de las veces. E resultado de este entrecruce es un laberinto de dimensiones minoicas. Adentrémonos en lo estrictamente relacionado con Ia intervencion, podremos ver un problema que es a la vez medular, sin por eso dejar d2 ser cotidiano La cuestién de cuando levantar borrachos. Personalmente he tenido alguna experiencia de intoxicacion con alcohol. Pero esta seria la primera vez que deberia juzgar hasta que punto la ebriedad del otro le podria traer aparejade una complicacion sanitaria’®. Es asi que consideramos legitima nuestra intervencién cuando juzgamos (no olvidemos que el acto esta ubicado necesariamente en lo particular, no en lo universal, y por lo tanto ninguna norma puede evitarnos el enfrentar la responsabilidad de juzgar ese acto singular que se da en el encuentro con el otro, como remarco Spinoza) que el sufrimiento que el otro dice’? no poder o no querer soportar es la manifestacién de un problema con multiples plaros (legal, médico, fisiolégico, cultural, psicolégico, etc.). Sufrimiento que ademas actualmente no es atendido sino sancionado, tanto de hecho (como puede ser la accién policial) como por omisién (dejar al borracho, "total él se lo buscé') Por esto que a la hora de diagnosticar es necesario ese paso previo, que es poder visualizar la accién de la intervencién, no como un fin en si mismo, sino como un medio cuyo mévil pasa por saber que dicha accién va a repercutir en la realidad, pues toda intervencién es necesariamente politica. Los diversos atravesamientos instituidos definen el objeto con el cual trabajamos. No hay que olvidar los plantecs de M. Foucault. Sabemos que nuestra inte-vencién nunca es inocua, sino que se encuentra inscripta en complejas redes de saber-poder. Es a partir de tales redes, juegos de verdad al decir de Foucault, que la funcién del psicélogo deviene practica de control. Foucault advirtio ampliamente sobre la cualidad que tiene el discurso de crear sujetos, sobre la forma en que lo instituido se las ingenia para darle forma, para "* Quizas resalte innecesario recordar que realizamos un taller de primeros auxilios. Esta duda esta ubicada en o'ro plano. "’ Decir, por cierto, no sélo con lo verbal, con el discurso explicito, sino también e incluso en mayor medida, con el lenguaje preverbal, con el discurso implicito del cuerpo encausar a los sujetos (Foucault, 1994). Asi, por ejemplo el discurso acerca de ‘adiccién a ...” no hace mas que generar, en cierta medida, esos adictos. La actividad que desarrollamos apunto a generar nuevos discursos, donde se pudiera entender desde otro punto los fenémenos relacionados con las practicas relacionadas con el consumo de sustancias psicoactivas Sino entonces qué?; ¢devenir juez del uso correcto 0 incorrecto que puede hacerse de algo? Negar la asistencia a quienes la necesitan, alegando como hicieron paramédicos del SEMM, que ellos se lo buscaron? He aqui donde el posicionamiento critico de la propia labor se vuelve un imperativo ético. Apuntamos a un retorno reflexiv sobre si, a la interrogaci6n que no conoce ni acepta limite alguno. Tener en cuenta las dificultades que plantea el hecho de que el saber del hombre es a la vez acerca y perteneciente aél. 19 Implicacion Este es el muro tras el cual defendemos, ora nuestra autonomia, ora nuestra identidad y seguiriamos haciendolo, si nuevas reflexiones no nos obligaran a abandonarlo. J. Saramago. Todos los nombres EI muro. En la lucha por liberarse de las identidades de la nifiez se pasa por un proceso de prueba y ensayo para construir una nueva identidad, pero para esto es necesario un apuntalamiento en ciertos “valores” socialmente sancionados. El intoxicarse con alcohol es, salvando las distancias, un ritual de iniciacién en la adultez. Como plantea Durkheim “...) el encuentro colectivo que sive de base a la practica ritual, se constituye el nticleo fundamental de la produccién de la identidad colectiva, en que ia sociedad se constituye como siendo algo significative dotado de intersubjetivacién” (Durkheim, 1982:214; en Agier, 1995). Para la gesta de este proceso, el muro, el limite, donde la oposicién Nosotros/Ellcs es més clara, es el Ambito clave Ahora bien, quién es Nosotros y quién Ellos? La respuesta implica desentrafiar complejos juegos de inclusién/exclusién. Siempre Nosotros somos Ellos para otros. Este es un juego constante, expresado por Beatriz Bayce de manera perfecta “Al mirarme, el Otro limita mi libertad y me transforma en un instrumento de sus posibilidades. Pero la situacién puede invertirse, la propia subjetividad puede recuperarse. La situacion, ademas de ser intercambiable es antitética: yo soy el sujeto y el otro el objeto, 0 viceversa”. (Bayce, 1987:66) La realizacion del taller con los vecinos de Ciudad Vieja demostré esto La necesidad de organizar un relato inteligible de su situacién, especialmente frente a la situacién de los nifios, devino en racionalizacién. Esto a raiz de los profundos componentes del problema que incluyen la interpelacion de su estilo de vida por los OTROS diferentes, Esto genera un doble juego: por un lado estar tan afectados los compromete, pero esa misma afectacién obstaculiza la comprensi6n: La problematica identificada fue el consumo problematico de drogas, estos nifios que fuman pasta base. Pero el consumo y las practicas eran de Ellos, en tanto Nosotros se constituye por hacer frente a los que Ellos hacen, una especie de identidad negativa (nosotros no somos los responsables de que esos nifios estén en la calle). Percibian una realidad ajena, por no corresponder al deber-ser propio, realidad frente a la cual los participantes se ubican como espectadores afectados, desarmedos. Las practicas de los otros imposibilitan identificar problematicas propias, ya que la urgencia de los problemas insta a la inmediata toma de acciones. Es necesario notar que esto opera como cortina de humo. El problema es proyectado al Estado. Recalco una vez mas el notable parecido entre esta conducta y el episodio de las. Madres de la Plaza He aqui el inicio de una interrogacion permanente que se desarrolla en el ejercicio de nuestra practica. La manera de ser entendidos por los Otros, no solo los usuarios sino por nuestros propios compafieros. Es tambign una herramienta fundamental para entender los relacionamientos con los otros y saber de que manera serén sentidos nuestros accionares. Los otros con los cuales interactuamos fueron variando su valoracién-percepcién (doble movimiento dificil de diferenciar) en el devenir de la practica. En el apartado de exploracién referi a las zonas en las cuales nos moviamos dentro del territorio Ciudad Vieja. En cada una de elas fuimos conocidos pro distintos nombres. Caretas fue uno de los primeros (y el mas molesto). El nomenclator se completo con doctores, narcos, los del SEMM, esos que levantan borrachos. Esta “evolucién” se debi6 en gran parte al hecho de poder hablarnos. Hasta ese entonces la comunicacién acerca de nuestra funcién habia sido bastante distorsionada. Habiamos sido hablados por los otros. En los distintos medios de comunicacién, en especial durante la preparacién de la Fiesta de la X, se dieron distintas descripciones de nosctros y de lo que hariamos. Estas eran tan disimiles que parecian referirse a distintos equipos. Durante la presentacién del proyecto posterior a la _conferencia de prensa, al intercambiar con muchos de los trabajadores de los boliches, el panorama resulto similar. Desconocimiento y muchas fantasias acerca de lo que hariamos. Un cierto monto de ansiedad parenoide es entendible. Pero como sabemos, la informacién que no se posee es generadora de distorsicnes en la comunicacién. Ante esto el equipo redacto un folleto, donde se explicaba nuestra funcién, fundamentandola en los principios de la reduccién de riesgos y dafios. Esto sumado, como ya he dicho a nuestro accionar consigtio un acercamiento imperfecto quizas, pero acercamiento. Pasar de caretas a esos que levantan borrachos, es para mi un avance. Aqui podemos retomar los planteos foucaultianos a que hice referencia, pero esta vez entendiendo los juegos de fuerzas en los cuales yo me hallé envuelto al realizar mi practica. Tal como plantee arriba al referirme a la etapa de negociacién, los discursos son productos de segundas lecturas de discursos dados, ya dichos. Pero también puede darse que este uso discursivo este limitado a ciertos grupos, mediante una encriptacion, por asi decirlo. Ciertas palabras devienen de esta forma, a la usanza de las contrasefias que abrian puertas secretas, llaves para acceder a ciertas practicas, o para legitima~ su participacién en tales praciicas. Por manejar este cédigo, personalmente no entendia la reticencia de algunos usuatios a recibir asistencia en situaciones claramente definidas. Esto era basado a la desconfianza generada por esos que se acercan en la noche. Cuando los folletos que realizamos obtuvieron cierto alcance y cuando nuestro accionar en las calles generé un cierto, inconcluso y por momentos confusos, sentido de nuestra practica. Sentido que se podria resumir en unos de los epitetos que recibimos ura noche. Ahi vienen esos que levantan borrachos Se genera un sentido, los borrachos tienen derechos, deben ser atendidos. El proceso de construcci6n del rol, la aceptacién cel rol por parte de los usuarios es parte de esto Erigir un discurso donde se unen el ardor del saber, a voluntad de cambier Ia ley y el esperado jardin de las delicias M. Foucault La Voluntad de Saber Erigir un discurso. La droga es aislada, condenada como el pecador del que nos cuenta Lovecraft no simplemente a dejar de ser, sino a dejar de haber sido. Se niega su presencia, asi como su historia. Y si debe ser, que sea bien compartimentada. Dividida entre lo médico y lo legal. Entre la enfermedad y el delito. Adicto 0 celincuente, he ahi las alternativas. En eso queda encerrada, lejos de cualquier debate (el cual deviene rapidamente apologia), lejos de cualquier mirada sino la de la pena (entendida tanto como lastima cuanto castigo). Solo puede ser hablada en términos legales o cientificos. Su otra posible enunciacion se la da el argot, discursos clandestinos, circunscriptos, encriptados. Aqui se presenta otra vez Foucault, para recordamos que hasta “el menor fragmento de verdad esta sujeto a condicion oolitica” (Foucault, 197711). Hallo pertinente conceptuar la droga como un imperceptible inmanente (Castoriadis, 1996). Esto por estar presente de manera casi continua en una sociedad que la necesita a causa para justificar su situacién, tomando para esto multiples formas aunque con igual valencia simbélica. Esto es, se muestra la quema de 100 kg de marihuana, los 300 de cocaina o la lagrima de P3C que tenia el infanto juvenil de turno, equivalentes simbdlicos de la DROGA, esa cosa mala que en una progresién lleva del porro a la merca, de la merca a la lata de Ia lata al pico, dejando de lado cualquier atisbo de individualided, libre albedrio o autonomia Por que encuentro necesario realizar este diferenciamiento? Es en razén de que al ser considerada como un imperceptible inmanente, se logra abrir visibilidad sobre otras relaciones, lo que permite iniciar un camino de elucidacién mucho mas rico que el espiral 24 descendente porroporromercamercalatalatapicopico. Para tomar uno: estas significaciones poseen cada vez mas en la sociedad una justificacién de hecho, positiva “(...) la cuestiOn de la legitimidad no se plantea, y el término mismo de legitimidad es anacronico aplicado a la mayoria de las sociedades tradicionales” (Castoriadis, 1996:145) Como plantea Spinoza, para moralizar basta con no comprender. Si no la comprendemos, la ley se nos aparece como obligacién, como obligacion moral, La postura con respecto a las drogas demuestra que el control de la oferta no es sustentable, ni redituable, ni ético. En cambio el apostar a la informacién, al respeto al otro (conocer y respetar son movimientos necesarios y consuetudinarios). La informacién es herramienta primera en la prevencién. Prevencién que por otra parte solo puede ser social. La complejidad de los problemas sanitarios torna en necesidad, mas atin en alternativa Unica de accion No debemos sustituir la cosa, con la riqueza de comportamientos de sentidos posibles, por una construccién a la cual se le impone una determinada i{logica y un determinade discurso externo a ella misma. Estariamos creando una realidad a la que sclo cierta légica (la nuest‘a) puede acceder. Es:o no quita que sepamos que la realidad solo es accesible mediante esta mediaci6n: “(...) por definicion, no hay posibilidad de acceso a la realidad material-concreta si no es a través de un ejercicio de intermediacion; no se accede a lo material concreto sino a representaciones de ello. (...) Esie universo de representaciones conforma un nuevo orden de lo real; otro tipo de realidad, (...) una diferente dimensién de realidad; lo real- ideal-simbélico..”... (Eira, 2005:35) La investigacién debe ser herramienta orientada a la prevencién y de esta manera extender la cobertura sanitaria a sectores que actualmente quedan excluidos (como los borrachos de CIUDAD VIEJA). Pero no solo basados en las cuestiones sanitarias. Accién y reflexion, unidas como Unica manera de entender/eambiar la realidad BIBLIOGRAFIA Acier, M. (1995) Lugares y redes. Las mediaciones de la cultura urbana Revista colombiana de antropologia. Vol. XXXII Baucrillard, J. (1988} El otro por si mismo. Anagrama Barcelona Bayce, B. (1987) Mito _y suefio en la narrativa de Onetti. Arca Montevideo Breton, A. (1935) Antologia del humor negro. Anagrama. Barcelona Castoriadis, C. (1983) La instituci6n imaginaria de la sociedad. Tusquets, Barcelona (1997) Elavance de la insignificancia. Eudeba. Bs. As (1994) Los dominios del hombre. Gedisa. Barcelona. Deleuze, G. (1987) Foucault. Paidés. Buenos Aires (1984) Spinoza: Filosofia Practica Tusquets, Barcelona Eira, G. 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