P Réshetov Teoria y practica . de la labor, . ideoldgica Editorial Progreso Moscajiutat ‘Traducido del ruso por M. Ciutat TI. PeureroB ak THKA Te opi Ha Hr gleonorHdeck Ha ucnancKom ASbIKE © Editorial Progreso, 1985 Impreso en la URSS 0302030000-216 01401) -85 154~85 INTRODUCCION La atencién creciente de los partidos comu- nistas por la ideologia, las actividades ideoldgi- cas se debe, ante todo, a la profundidad y ex- tensién de los cambios sociales que abarcan to- das las esferas de la vida social, todos los aspec- tos de las relaciones humanas. La significacién de la ideologia aumenta a medida que crece la pugna entre los dos sistemas sociales —el socia- lismo y el capitalismo—, pugna que ejerce in- fluencia decisiva sobre todo el sistema de rela- ciones econémicas, politicas y culturales en el mundo. Los problemas ideolégicos adquieren asimismo cada vez mayor peso como conse- cuencia de la revolucién cientifico-técnica en tempestuoso desarrollo. Al crecer el rol de la ideologia aumenta a su vez la necesidad de conocimientos especificos —la teoria dela ideologia y de la actividad ideo- légica—, de argumentar las leyes del desarrollo de la ideologia, del funcionamiento de sus princi- Pios y leyes en la sociedad. La ideologia y la ac- tividad ligada con su reproduccién y difusion se convierte en uno de los objetos actuales del and- lisis histérico, sociopolitico y sociofiloséfico.fi los paises capitalistas se eae ail a eorle ae la “‘desideologiza- 6 Ja lama a d aoa a res se referian al “ocaso de cba Ss A eis relaciones ideoldgicas”, i n su opinion, rela- ene lugar deere Ceaonie En nuestros Con yoclamaban con tanto dias, los que hace poco pro eae celo la “desideologizacion | han Pee hee del “‘renacimiento ideoldgico”. La “i eologiza: cién”, como tendencia ideolégica y po aan le pensamiento, ha cedido lugar a la “reideologi- zacion”. Sus adeptos intentan buscar cuales- quiera medios eficaces para contrarrestar la influencia creciente cada vez més en el mundo de las ideas marxistas-leninistas. : La actividad ideolégica de los partidos mar- xistas-leninistas se basa en varios principlos y regularidades generales. Lenin escribio: el socialismo, que es la ideologia de la lucha de clase del proletariado, esté subordinado a las condiciones generales de nacimiento, desarro- lo y consolidacién de la ideologia, es decir, se funda en todo el patrimonio del conocimiento humano...”! Al mismo tiempo, la ideologia so- cialista y en consecuencia, la actividad ideol6gi- ca en la sociedad que ha emprendido la via de construccién del socialismo o que ya lo ha construido, se distingue por sus condiciones y leyes de desarrollo especificas. La ideologia socialista como sistema de concepciones e ideas cientificas de la clase obrera no ha tenido en la 1v, 1. Lenin, Carta a la Unién del Norte del POSDR. Obras Completas, 5* ed. en Tuso, t, 6, pig, 362. 4 practica histérica analogias de relaciones so- ciales, productivas, politicas, morales u otras. Para resolver las nuevas tareas se precisa or- ganizar cientificamente la propia actividad ideolégica. La actividad ideolégica es, ante todo, una actividad dirigida a formar la con- ciencia. La formacién de la conciencia en el amplio sentido representa, a su vez, un proceso complejo y multifacético, que incluye la propia produccién y desarrollo de la teorfa, su difusion y asimilacién por las amplias masas populares. Precisamente los componentes sefialados vienen a constituir la esencia del proceso ideolégico fundido orgénicamente. Los estudios sobre la teorfa de la ideologia y de la actividad ideolégica se llevan a cabo con bastante intensidad ante todo en los parses socialistas. La comunidad de las principales tareas socioeconémicas y politicas que resuel- ven explica el que se elaboren direcciones, for- mas y métodos comunes de labor ideoldgica. Ast, tienen un enfoque comin de clase, de par- tido de la labor ideolégica; comprenden la ne- cesidad de perfeccionar constantemente esta labor a medida del desarrollo progresivo de la sociedad, de mantener en manos del partido y - sus organizaciones todas las palancas de la earn y direccién de este sector de Jo extraordinariamente importante. Al mismo tiempo, las condiciones de cada pais, las peculiaridades de su desarrollo eco- nomico, histérico y cultural dan origen a mu- chos rasgos especificos en este campo. Las re- voluciones en los paises socialistas se han reali-—. n algunos paises, zado de ee ee ha efectuado elu- Ja transicion on Gesarvolo capitalista (Mon- golia). En varios paises Saeed) eae ano Se ae oe Pal reviste ‘un Ca- nizacion po ita. Todo ello no puede por mode influir en el contenido y as formas de organizacién de labor ideoldgica. eT ~ yor variedad se acusa en el enfoque de la labor Meologica en los paises que acaban de empren- der la via de construccion socialista., La propia esencia de la ideologia socialista que tiene un caracter profundamente interna- cionalista dicta la necesidad de estudiar y apli- car la experiencia de la labor ideolgica de los comunistas de diversos paises. Estudiando esta experiencia, cada partido puede tener en cucn- ta en su politica las tendencias generales y las condiciones concretas del desarrollo. Por ulti- mo, la comparacién de la experiencia nacional con la practica internacional permite estable- cer con mayor plenitud y profundidad los limi- tes de lo especifico y contribuye a revelar las formas dptimas de relacién entre lo comun y lo particular en la actividad politica e ideold- gica de cada partido. Se trata pues, de saber acumular tanto experiencias como datos cienti- ficos sobre este terreno y hacerlos patrimonio comin de todos los destacamentos del movi- miento revolucionario. En documentos de va- tios partidos marxistas-leninistas se subraya que la pluralidad de las formas y los métodos de la actividad ideolégica, la necesidad de con- 6 frontarlos con los principios generales, hace necesaria la cooperacién tanto en el desarrollo de la teorfa como en la labor practica. El estudio de la actividad ideoldgica, la gene- ralizacién de la experiencia existente en este terreno se basa en un sdlido fundamento cien- tifico-metodolégico: el marxismo-leninismo, en su método dialéctico-materialista. Antes de los fundadores del marxismo-leninismo también hubo algunos intentos de crear una determina- da idea acerca de la actividad ideoldgica. El tér- mino “ideologia” fue introducido por primera vez en la practica social por el fil6sofo y econo- mista francés Antoine Dustutt de Tracy (1754- 1836). Junto con Pierre Cabanis (1757-1808) y Constantin Volney emprendié el intento de ela- borar una “ciencia de la ideologia” especial, que explicara como se forman las ideas (por las sensaciones y por las percepciones), cémo fun- cionan en la sociedad. Pero no tuvieron éxito. Solo al eparecer el marxismo la ideologia comenz6 a adquirir un cardcter verdaderamente cientifico, convirtiéndose no solo en instrumen- to del conocimiento, sino en medio de la trans- formacién del mundo. Por primera vez en la historia del pensamiento social, el marxismo puso al descubierto y fijd las regularidades ob- Jetivas de la aparicion, el desarrollo y la pro- pagacién de la ideologia. El marxismo colocé el estudio de los problemas relacionados con la ideologia y las regularidades du su funciona- miento en la sociedad sobre el terreno firme del anilisis cientifico de los factores socioeco- nomicos y los intereses de clase. Las obras de 7gels La Ideologta Alemana, La Miseria de la filosofia, El cay : ‘ is Bonaparte y otras’ ieee bg cn ako Luis ia pare la interpreta- aon ‘del enfoque marxista de la ideologia. Estas obras comprenden todas las tesis iniciales, que determinan los aspectos gnoseolégicos y socia- les de la ideologia, los principlos y las leyes de su funcionamiento en la sociedad. : i: Lenin estudié los problemas de la ideologia en un amplio contexto social, en el miltiple en- trelazamiento de los factores ideologicos con. la economia, la politica, las relaciones internacio- nales, la ciencia, la cultura, la literatura y el arte, la sicologia social. El inmenso trabajo de Lenin en este terreno fue determinado ante to- do por las tareas sociopoliticas que planted ante la clase obrera la nueva época historica: la época de la transicion revolucionaria de la humanidad de la vieja formacién capitalista a la nueva, comunista. Ninguna época de la histo- ria humana necesité una interpretacién ideo- légica y un anilisis teérico tan universal. El mé- rito trascendental de Lenin consiste ante todo en que estudid a fondo la aparicién y el desa- rrollo del marxismo como ideologya cientifica de la clase obrera. Lenin mostré la esencia revo- lucionario-critica de la ideologfa socialista, ana- lizé su papel en diferentes etapas de la lucha re- volucionaria del proletariado. Lenin argument el significado de la ideologia socialista como C. Marx y F. En Sagrada Familia, a. ‘Véase C.Marx y F.Engels. Obras, 2 ed. en ruso, t. 8, pgs. 7- 544; t 2, pags. 3-230; t, 4, pégs, 65-185; t. 8 pags. 115-217. 7 fuerza de cohesién de la clase, el papel y el lugar de la ideologia y de la actividad ideolégica del partido marxistaleninista después de la conquista del poder, cuando se plantea en el primer plano la tarea de la construccién econd- mica, la defensa de la Patria socialista, la educacién comunista de las generaciones crecientes de amplias masas de trabajadores, de superacién de los restos del pasado en la con- ciencia y la conducta de los hombres. Lenin re- velé las leyes de la lucha de clases en la esfera ideolégica; mostré que el pugilato de las ideo- logfas socialista y burguesa determina el prin- cipal contenido espiritual de la época contem- pordnea, siendo reflejo de la contraposicion de sus dos clases fundamentales —la burguesia y el proletariado— en escala histé6rico-mundial. Lenin demostro que la labor ideoldgica del par- tido es componente inalienable du su papel rec- tor en la evolucion social. Lenin argumenté los principios de la direccién ideolégica. Fuente importante para investigar los problemas ideolégicos y de la actividad ideo- lor parador marnstaslecinuty El comnts desarrollo. tanto de la ideologia como de la fedividad adeslouien ea utaeley acleeese qe: gica es una ley del consecuente avance de la sociedad. Esta ley dicta la ne- cesidad de confrontar constantemente los objetivos de la labor ideolégica, dela educacién, Propaganda y agitacién con los problemas socioeconémicos y politicos concretos plan- teados ante la sociedad en las diferentes etapas de su evolucién.i ido al lector se contemplan En el libro ofrecido Leste ea pee tincipales problemas y ‘iow de la Gok ideoldgica y, en particular, la i i +4 comunista, las leyes de esencia de la ideologia com . a su desarrollo y funcionamiento en la socieda socialista, los fundamentos cientificos de orga- nizacion de la labor ideologica. El autor ha in- tentado conjugar las ideas cientificas modernas sobre la actividad ideolégica con la gran expe- riencia_practica del PCUS y otros partidos marxistas-leninistas. | El autor no se ha planteado el objetivo de analizar en todo su volumen la teorta y la prac- tica de la actividad ideolégica. En el libro se consideran solo los problemas cardinales del funcionamiento de la ideologya proletaria cien- tffica, asf como las cuestiones de organizacién y direccién de estos procesos por parte de los partidos marxistas-leninistas. Las tesis teorl- cas expuestas en el libro pueden ser objeto de discusién y desarrollo, tanto mas si se tienen. en cuenta las peculiaridades y la experiencia espectfica de cada uno de los partidos comu- nistas. Capitulo | EL PAPEL Y EL LUGAR DE LA IDEOLOGIA EN EL DESARROLLO SOCIAL 1. La concepcién idealista y la concepci6n materialista de la ideologia Los intentos del filésofo y economista francés Antoine Dustutt de Tracy de elaborar, junto con otros cient/ficos, una especial “‘ciencia de la ideologfa” no dieron ningin resultado sustancial. Tanto ellos como sus continuadores, desde sus posiciones idealistas desprendidas de las raices sociohistéricas de la evolucién no Iegaron a crear una concepcién de la ideologia que se distinguiera por su integridad o su caracter cientifico. Al no comprender que la ideologfa, como esfera determinada de la conciencia social, se halla condicionada por las circunstancias materiales econdmicas del de- sarrollo, los cientificos Iegaron a falsas de- ducciones sobre la autonomia del automovi- miento de las ideas. Las ideas en opinién de los idealistas (de ahi el término —idealistas) son la Ee y unica fuerza motriz que determina la realidad social, las relaciones sociales, los institutos politicos; son producto del pensa- miento puro, independiente de la actividad practica de los hombres. La ideologia y la actividad con ella relacio- nada recibieron verdadera argumentacién cien- lltifica solo en el siglo XIX, con la aparicién del marxismo. Por primera vez en la arena pensamiento social el marxismo descubrio € ; constar las leyes objetivas del ee e desarrollo y la difusion de la ideologia. C. Marx F. Engels mostraron convincentemente que la fuente de las ideas y de las teorias sociales, de los conceptos y representaciones no se halla en la esfera del pensamiento puro, sino en la propia realidad social —en el ser social— que constituye una totalidad de diferentes partes y procesos de la vida material de la sociedad, en la cual el papel rector le pertenece al modo de produccién de los bienes materiales. C, Marx escribié en el Prélogo de la “Contribucion a la critica de la Economia Politica”: “Y del mismo modo que no podemos juzgar a un individuo por lo que él piensa de si, no podemos juzgar tampoco a estas épocas de revolucién por su conciencia, sino que, por el contrario, hay que explicarse esta conciencia por las contradicciones de la vida material, por el conflicto existente entre las fuerzas productivas sociales y las relaciones de produccion””!. Esta tesis de principio sefiala la dependencia de la conciencia social del ser social, el caracter secundario de lo ideal respecto de lo material oo Poe histérico. O sea, que las fuentes ao Bae oes del desarrollo ideolégico ida material de la sociedad, en las relaciones econdmicas. En los origenes de la 1. Marx. Prologo de la nom{a Polftica”. C. ‘Contribucién a Ia critica de la Eco- Marx y F. Engels. Obras, t. 18, pdg. 7. 12 historia de la humanidad, la conciencia de los hombres se hallaba en relacion directa con el proceso de su actividad en la vida, estaba “‘...en- trelazada con la actividad material ... de los hombres”2. La percepcién inmediata del tra- bajo, del medio ambiente, preferentemente sensorial, venfa a constituir la base de la prac- tica cognoscitiva de los hombres. A medida que la sociedad se desarrolla, que se hacen mas complicados los medios de produccion y que el trabajo se divide en intelectual y fisico, aparece una forma de actividad especifica relacionada con la cognicién del mundo, surge la produc- cién espiritual independiente. Aparece el cono- cimiento cientifico, se elabora la ideologya. “Las relaciones econdmicas de una sociedad dada se manifiestan, en primer lugar, como intereses’’3, escribid Engels. Esos intereses hallan su reflejo en unos u otros sistemas de ideas, en cuya formalizacién tedrica laboran los idedlogos, creadores representantes de la clase. La causa principal del cambio de la ideologya, de la conciencia social radica en las leyes obje- tivas del ser social, y ante todo en la vida eco- némica de la sociedad... Los cambios sustan- ciales en la produccién, en las fuerzas produc- tivas siempre han provocado y provocaran cambios en la conciencia social, en el modo de pensar de las gentes. La condicionalidad socio- econémica de la vida espiritual de la sociedad he Marx y F. Engels. La Ideologta Alemana. Obras, t. 8, pag. 3 F, Engels. Contribuctén al problema de la vivienda. C. Marx y F, Engels. Obras, t. 18, pag. 271. asrepresenta la ley principal, ee aie = ideolégico. Esta condicionalidac s Pifesta ‘siempre en forma histérica concreta. ‘Al modo de produccién medieval le correspon- did un tipo de produccion espiritual, al capi- talista, otro. Solo al considerar la produccion material en su forma histrica concreta, podre- mos comprender “... lo que hay de preciso en la produccion intelectual correspondiente y en lacorrelacion entre ambos’”*. Fn la actualidad, el caracter histérico concre- to de los fendmenos ideolégicos se manifiesta con nitidez en la contraposicion de principio de dos ideologias —la socialista y la burguesa—, de dos tipos de conciencia social —la socialista y la burguesa—. La ideologia burguesa contem- pordnea atraviesa una crisis mas profunda; en ella se refleja la enfermedad incurable del or- ganismo social de la sociedad burguesa. Es la ideologya de la crisis, la ideologia de una época caduca. A ella se opone activamente la ideologia socialista, revolucionaria, la ideologia de rea- lismo politico, de riguroso criterio cientifico y optimismo social. Ella viene a determinar el perfil intelectual de la época contempordnea. 2. ideologia y conciencia social Las nociones ‘“‘ideologia” y “‘conciencia social” no son idénticas. La ideologia es com- ponente muy importante de este complejo pro- 4 . C. Marx. El Capital. C, Marx y F. Engels. Ln y F. Engels. Obras, t. 26, p. 1, 14 ceso social. La conciencia social refleja el ser social en general, todos sus fendmenos multi- formes. Puede ser considerada en sus diversos aspectos: a) por el nivel: corriente y cientifi- co-teérico; b) por sus formas principales: polt- tica, juridica, estética, ética, etc.; c) por los portadores: individual y social. La conciencia social, incluso en el sentido cientifico-tedrico, trasciende en mucho los marcos de la ideologia abarcando una amplia gama de conocimien- tos y representaciones de la vida material y espiritual. Mas la conciencia social no es mero reflejo especulativo del mundo. Este reflejo siempre esta dictado por cierto interés de los hombres. Cuando la sociedad se divide en clases, este in- terés empieza a vincularse con la pertenencia a una u otra clase. La ideologia es precisamente este aspecto clasista de la conciencia social. Constituye la parte ideolégica de la concien- cia representada por el conjunto de ideas y opi- niones que expresan los intereses y las nece- sidades de una clase determinada. La ideologia es, por consiguiente, conciencia de clase. Refle- Jando las distintas formas del ser a la luz de su interés, la clase crea diversas teorias, doctrinas, que en su integridad vienen a constituir en ulti- mo término la ideologia de la clase. De una ma- nera especifica a ellas inherentes, estas teor/as reflejan la multivariedad y la complejidad de la realidad social. En ellas se manifiesta la esencia de la ideologfa, su capacidad de interpretar la realidad y servir a los fines de la orientacién Social de las clases de la sociedad. 15ede formar un sistema inte- ponies Ban Fido elaborados sus cimientos veéricos. La ideologfa burguesa, Por ejemplo, ued formada solo después de que se ¢ab0- ioe las teorias sociales, politicas, juridicas, econdmicas qué expresan los intereses de la clase burguesa. La ideologia de la clase obrera se elabord asimismo a base de la fundamenta- cién filoséfica, econdmica y politica del papel histérico del proletariado, partiendo de la ge- neralizacin de la experiencia historica de la lucha de clases. Su creacién seria inconcebi- ble igualmente sin la labor universal critica del pensamiento, dirigida a asimilar todas las riquezas espirituales que ha acumulado la humanidad. En los orfgenes de la ideologia proletaria se encontraron C. Marx, F. Engels y V. 1. Lenin, quien continué su labor ya en nuevas condiciones histéricas. Asi pues, la ideologra es ante todo concien- cia de clase que refleja la situacién social de de- terminadas clases sociales. Su funcién social principal es defender los intereses radicales de la clase. Los sistemas de ideas de clases de la sociedad opuestas, determinados por los intereses de las clases, se encuentran en estado de oposicién. En la sociedad capitalista se hallan opuestas una a otra las dos ideologias fundamentales dia- metralmente contrarias en cuanto a su conte- nido, principios y métodos: la burguesa y la so- cialista. Lo cual no quiere decir que en la so- ciedad capitalista no existan otras concepciones y corrientes ideologicas intermedias, situadas 16 entre las dos clases fundamentales —la bur- guesia y el proletariado— (por ejemplo, la ideo- logia pequefioburguesa). Sin embargo, lo admi- tido en la practica politica no es del todo justo desde el punto de vista de la ciencia. La ideo- logia, como sistema de concepciones, debe re- lacionarse solo con la clase. Diversos grupos sociales —la pequefia burgesia, los intelectua- les, las capas medias, etc.— tienen sus propios intereses especificos distintos de los intereses de la gran burguesia. Pero estas distinciones no son de cardcter principista. Coinciden en lo fundamental, en lo principal —en su relacién a los medios de produccién, al Poder—, o con los intereses de la burguesia 0 con los intereses del proletariado. De ahi se desprende la in- consistencia de todos los intentos de crear una ideologia “‘al margen de las clases”. En el curso del desarrollo histérico, los conceptos ideo- légicos de unos u otros grupos sociales se unen inevitablemente a la ideologia burguesa o a la ideologya proletaria. _En la epoca actual la amplitud del antago- nismo entre las dos ideologias fundamentales se ha extendido hasta la confrontacion ideold- gica entre los sistemas sociales mundiales: el capitalismo y el socialismo. A los teéricos burgueses y revisionistas les gusta decir que la posicién clasista en la ideolo- gia conduce al subjetivismo y relativismo. Di- cen que por cuanto las posiciones tedricas ex- presadas desde el punto de vista de diferentes clases son multiples, mientras existe solo una verdad objetiva, la doctrina marxista por lo 2-576 .tanto, es la verdad de la clase en y ed puede ser, en consecuencia, verdad para a ‘as Clases. Cabe sefialar que en este caso S€ confun- den dos cuestiones diferentes: la verdad objetiva y el interés que tiene por ella una clase deter- minada. Por su contenido la ciencia marxista- leninista es una verdad objetiva. Es una verdad para todos, y ello es precisamente lo que refuta Ja burguesia. Con este motivo ofrecen interés los razonamientos del filésofo marxista inglés M. Comforth. El escribe en su libro Filosofia. abierta y sociedad abierta que la doctrina mar- xista es una verdad para todos, mas no todos estén interesados en su veracidad. Cuanto afirma el marxismo es tan justo para las clases gobernan- tes como para los trabajadores, porque les per- mite a las clases gobernantes conocer su propio precio. El marxismo muestra a la clase obrera cémo terminar con la explotacién, pero dista mucho de mostrar a las clases gobernantes como conservar para siempre la explotacién. Esta ver- dad precisamente no le conviene a la burguesta. La ideologia, como ya hemos sefialado, no es idéntica a la conciencia social. Es su aspecto ideolégico que expresa los intereses y las metas de una determinada clase social, la cual persi- gue objetivos bien determinados: fortalecer o eliminar las relaciones sociales existentes. 3. ldeologia y sicologia social La ideologia no ha de identificarse con la si- cologia social, otro campo de la conciencia. La sicologia social asf como la ideologia brota del 18 ser social, tienen el objeto de reflejo comin. Tienen de comun también el cardcter clasista. Se diferencian fundamentalmente en cuanto a los medios y resultados del reflejo de la reali- dad objetiva. La sicologia de las clases, naciones, grupos sociales, es su conciencia inmediata estrecha- mente entrelazada con la practica de la vida diaria. Surge como resultado del reflejo en la conciencia de los hombres de todo cuanto ellos experiementan, viven, observan durante la Jabor cotidiana, en la vida, en los miltiples tipos y formas de comunicaci6n con el ambien- te social mds proximo. La realidad cotidiana in- fluye en los hombres provocando determinados sentimientos, dnimos, los cuales influyen de forma directa en su conducta y actividad. Co- mo consecuencia del reflejo sicolégico en la conciencia de las clases, de los grupos sociales, surgen asimismo a un nivel comin representa- ciones sobre las condiciones y su modo de vida, sobre el entorno, se toma por primera vez con- ciencia de los problemas sociales de la clase, se hacen las primeras valoraciones. Son represen- taciones dispersas, a veces vagas, confusas que, sin embargo, difundidas en las masas, crean cierta mentalidad manifestada en las acciones de la comunidad social dada. Sin embargo, la conciencia formada a base del inmediato ambiente social percibido sen- sorialmente no da una representacién integra sistémica de la actividad social, sino solo datos particulares sobre la realidad social. Al nivel de la conciencia comin se crea una imagen od 19subjetiva aproximada de las neo y los intereses de los hombres. Ademas, la sicologia social, a la par con las ideas y eae Jus- tas, con las emociones y animos adecuados y tradiciones progresistas contiene crrores, pre- juicios, ilusiones que pueden frenar la concien- cia de los hombres. La sicologfa social se forma, de este modo, como esfera de la conciencia social, por efecto del reflejo inmediato de las relaciones sociales existentes, o sea que su “produccién” se reali- za por las propias masas. Se forma como con- secuencia del reflejo esponténeo del medio ambiente. , La sicologia social y la ideologfa acttan reci- procamente, se compenetran. Este proceso es incrementado especialmente en la sociedad so- cialista. En los paises socialistas la ideologia impregna e inspira cada vez més tanto la esfera material como la espiritual. La conciencia co- mun se apoya en medida considerable en co- nocimientos cientificos, en la justa interpreta- cién de la realidad social. A ello contribuyen considerablemente la ensefianza media general obligatoria, la actividad ideolégica de los organismos del partido y del Estado, de las organizaciones publicas, la acrecida acti dad cognoscitiva, sociopolitica y cultural-ideo- logica de los propios trabajadores. Todo ello viene a cambiar la correlacién de lo esponténeo y lo consciente a favor de lo ultimo, haciendo consciente en el sentido ideolégico la percepcién inmediata de la realidad social por las masas. No obstante, también en el socialismo la tarea 20 de introducir la conciencia en las masas tra- bajadoras sigue siendo actual. Los cambios operados en la estructura social y de clases, en la sicologia de las clases de la sociedad so- cialista exigen su concienciacién y la co- rrespondiente labor ideolgico-educativa. Vea- mos el siguiente ejemplo. En el sentido objetivo, la clase obrera es la fuerza rectora de la so- ciedad socialista. ¢Pero tienen conciencia de este hecho los destacamentos de la clase obrera? ¢Es confirmada la posicién objetiva de Ja clase obrera siempre, en todas las situaciones, por todos los grupos y colectivos con cualida- des subjetivas sociales, con correctos plan- teamientos sicolégicos, tradiciones progresistas, hdbitos, etc.? Las preguntas planteadas no tienen una contestacién univoca. Por ello la tarea de formacién de la respectiva conciencia de la clase obrera como fuerza rectora de la sociedad socialista siempre es actual. Ello es tanto mds importante porque sus filas se engrosan cada afio considerablemente a cuenta de la juventud. Tampoco debe olvidarse que las orientacio- nes sicolégicas de algunos grupos de hombres a veces se reducen a la satisfaccion de las nece- sidades y los intereses personales en contrapo- sicion a los de todo el Estado y todo el pueblo. En el socialismo no le ha eliminado atin el afan de algunos individuos e incluso grupos de “... dar lo menos posible y arrancar lo maximo al Estado. Precisamente de esa mentalidad surgen el egoismo y las actitudes pequefioburguesas, el afan de acumulacién, la indiferencia ante las 21ee preocupaciones y los asuntos del pueblo ie —se dijo en el XXVI Congreso del PCUS (19) a La elaboracion de la ideologia exige anali- zar en la teoria la posicién de la clase en la so- ciedad, sus relaciones mutuas con otras clases, sus intereses auténticos. El interes de la clase no se reduce simplemente a una suma mecanica de los intereses de los individuos ¢ incluso de los grupos que la componen. El interés de clase representa una nueva determinante cua- litativa de la suma de los intereses componen- tes: politicos, econdmicos, juridicos, morales, etc. La ideologia, pues, es un sistema de ideas y teorias filosoficas, politicas, morales, jurfdi- cas, estéticas y otras, que reflejan en ultima ins- tancia las relaciones econdmicas de la sociedad desde las posiciones de una clase social deter- minada. 4, Relativa independencia de la ideologi Al reconocer que el proceso ideolégico se halla condicionado por las relaciones econémi- cas, reservamos con ello a la ideologya el dere- cho a cierta autonom({a, idependencia. Consi- derando que el reflejo del ser social en las ideas, teorfas y concepciones sociales es el momento principal de la doctrina marxista-leninista so- bre el proceso ideolégico el materialismo hist6- 5 Documentos del XXVI Congreso del PCUS. a, Politiz- dat, 1981, pigs. 68-64, a te 29 rico nunca ha considerado este reflejo como un acto mecdnico, mera copia e impronta pasiva de la vida material de la sociedad. Las ideas y teorfas sociales —juridicas, politicas, estéticas, filosficas—, las concepciones morales y re- ligiosas son parte integrante de la superestruc- tura que surge sobre la base economica de la sociedad*. Pero la relacion mutua entre la su- perestructura ideolégica y la base econdmica no es unilineal, sino que reviste un cardcter dia- léctico complejo mediatizado. La estructura de toda ideologia comprende diversos valores, normas, ideales, programas de accion que Hi- gen la conducta del hombre en la sociedad. In- cluyendo en si el sistema de valores en los que se reflejan las necesidades, los intereses, los objetivos de las clases y de los grupos sociales, la ideologfa trasciende los marcos del mero conocimiento de los fendmenos y los proce- sos sociales; se convierte en una fuerza que orienta, moviliza a las masas y refunde su energia en la prdctica social concreta. Por consiguiente, la ideologfa siempre es eficaz, activa y esta orientada ala practica social. Las diferentes ideologias en todos los tiem- pos unieron a los hombres en torno a determi- nados fines y objetivos, formando el mecanis- * Base y superestructura: conceptos del materialismo hist6ri- co, que caracterizan la conexién entre las relaciones econé- micas y todas las demds relaciones sociales. La base es Ja es- tructura econémica de la sociedad, el conjunto de relaciones Productivas correspondientes a un determinado eslabén del ee Jas fuerzas productivas, La superestructura son cree! y convicciones polfticas, juridic: estéticas, filoséficas y religiosas. pousenss ao oe 23mo social de comunicacién, de unidad de accion jales. Dentro de los siste- de grandes grupos soci I mas de ideas se formaban las reglas y Jas aati de las relaciones entre los hombres, se estable- cfan los nexos entre el individuo y lacomunidad social (clase, nacion, etc.). Al expresar los intereses y los fines de una clase determinada, la ideologia siempre fue enfilada a la denuncia politica y moral de las ideas y Jas acciones del adversario. Sin la ideologia, sin su papel aglu- tinador, integrante, orientador de las aspiracio- nes y los actos de las gentes, es imposible todo movimiento, sea progresista 0 reaccionario. | El problema sefialado es uno de los principa- les en la teoria de la ideologra y de la actividad ideolégica. Fue objeto de activa elaboracién por parte de los fundadores del comunismo cientifico. C. Marx y F. Engels, al analizar en La Ideologia Alemana los fundamentos del pro- ceso ideolégico, subrayaron que las diferentes formas ideolégicas no se derivan solo de la prictica material y que no se debe negar determinada independencia de las formas ideolégicas y su participacion en el desarrollo histérico. Engels en las cartas a Bloch, Schmidt, Mehring y Borgius recalcé reiteradas veces la existencia de “leyes propias” de la esfera espiritual, de la “propia dindmica” que tiene sus “propias fases”; insistio en reconocer el desarrollo histérico independiente... de distintos campos ideolégicos, ee 6 F. Engels, A Conrado Schmidt, C. Marx y F, Engels, Obras, t. 37, pag, 415; Engels. A Francisco Mehring. C. Marc y F. En- gels. Obras, t. 39, pags, 83, 84. oA El cardcter de relativa independencia de la ideologia esta determinado en grado conside- rable por las particularidades especificas de una u otra forma ideolégica. Son independientes en medida mayor las formas de la conciencia so- cial mds distanciadas de la base econémica de Ja sociedad, tales como la filosofia o el arte. “y cuanto més alejado esté de lo econdmico el campo concreto que investigamos y més se acerque a lo ideolégico puramente abstracto, més Casualidades advertiremos en su desarrollo, més zigzagueos presentard su curva”’”, escri- bid F. Engels. La integridad del proceso histérico presu- one la interaccién de los diversos aspectos de la vida material y espiritual de la sociedad, la influencia de las formas ideoldégicas sobre la economia, asi como sobre todo el proceso de desarrollo social. El marxismo-leninismo hace hincapié en el papel activo, eficaz, transforma- dor de las ideas avanzadas en el desarrollo his- térico. El filésofo marxista bulgaro Todor Pavlov escribe en el libro Teorta del reflej +. sin la ideologia o, mds precisamente, sin una justa ideologia (aunque condicionada en el sentido histérico) no se puede librar con éxi- to ninguna lucha por los intereses econdmicos oe inmediatos. Las ideas sin el pan son ‘ismo, utopia, pasividad, reaccién. En oad que el pan por si solo sin ideas es pragma- }, ausencia de perspectivas, rebeldia espon- 7 F. Engels. A W.Borgius. C. Mi nae: Bes rg larx y F. Engels. Obras, t. 39, Omtdnea que ofrece terreno propicio para la dema- gogia 7 a reaccion. El pan y las ideas . os dicho, el pan en nombre de las ideas, y las ideas en nombre del pan: esa €s la combinacion mas acertada que transforma tanto el pan como las jdeas en un factor poderoso del desarrollo hu- mano y de la cultura humana”’’. : De este modo, las ideas son secundarias solo por su origen, por cuanto brotan sobre la base del ser social. Pero no son secundarias en cuan- to al papel que desempefian en el desarrollo his- térico. Nacen para servir a las necesidades so- ciales de los hombres, a su accién historica. La conciencia no copia simplemente la realidad, sino que pretende conocerla, asimilarla, desci- frar su esencia, cambiarla. “La conciencia del hombre no solo refleja el mundo objetivo sino que lo crea”, subrayé V. I. Lenin. Al conocer las leyes del desarrollo social, los hombres pue- den plantearse de manera consciente determi- nados objetivos y luchar por su realizacion. 8 T. Pavlov, Obras filosdficas escogidas (en bit t. 8, 5. 457-458, aa 'V. 1, Lenin. Resumen del bro de Hegel “Ciencia de la 6 Bica”, O. C., t. 29, pag. 194, Capttulo II LA IDEOLOGIA COMUNISTA Y SU PAPEL DE TRANSFORMA- CION REVOLUCIONARIA 1. Ideologia y ciencia Uno de los rasgos mas importantes de princi- pio de una u otra ideologya es el grado de su've- racidad, de su cardcter cientifico. La mayoria de los representantes de la ciencia burguesa nie- gan el cardcter cientifico de toda ideologia, in- tentando demostrar todo lo contrario: la in- compatibilidad de la ideologia y de la verdad. Con la particularidad de que procuran apelar para ello incluso a los fundadores del comunis- mo cientifico, que usaban aplicandolos a la ideologfa conceptos tales como conciencia “falsa”, “adulterada”!*, En representacién de 1 Véase C. Marx. Contribucién a Ia ortti . Marx, tica de ta filosofta derecho de HegeLC, Marx y F. Engels, Obras, t ie va aie F. Engels. d Francisco Mehring. C. Marx y F. Engels. Obras, 39, pg. 83; V. I. Lenin, Intervencién acerca de la actitud ante Ia juventud estudianti. O. C., t. 7, pég. 312; V. 1. Le- 2 git *ificado del materiakimo mititente 0. Ct. 45, * El uso por C. Marx y F, Engels del concepto ‘i P . to “ide e ga el sentio de conciencia “false”, “adultersa” estuvo cone ionado por la situacién histérica concreta, se referfa a las Tepresentaciones idealistas sobre el papel decisivo de las ideas en el i i ideologias di Ruch PTOBTEH social, a las ideas e ideologias divorciadas delden ser verdaderos solo los co- brindan las ciencias naturales, los burgueses, pue nocimientos que por cuanto, como pretenden, no estan condi- ionados por un punto de vista clasista. Tales Sapeculaciones catecen de todo fundamento. La ciencia y la ideologia son dos esferas de la conciencia social. Cada una de ellas es un siste- ma de conocimientos teéricos relativamente in- dependiente, y cada una tiene su objeto de re- flejo, de estudio, el modo y el campo de aplica- cién de los conocimientos obtenidos. Pero no se debe contraponer la ciencia y la ideologia; se puede y se debe contraponer ideologia cientrfi- ca e ideologia no cientifica, Con la particulari- dad de que el problema de lo cientifico o no cientifico de la ideologia no se resuelve de mo- do abstracto, sino que se revela como resultado del andlisis concreto de la realidad concreta, de la posicion de la clase como sujeto del conoci- miento ideoldgico en el sistema politico-social, de su actitud ante el desarrollo social y la ver- dad objetiva. En este caso el interés de clase obra en calidad de catalizador del cardcter cientifico o de la “falsedad” de la ideologia. El “...engafio puede ser comprendido justamente solo en el caso de que se pongan en claro sus raices de clase y su significado de clase. No se trata de un engajio personal, de una “fulleria” (hablano vulgarmente); se trata de una idea ilusoria, que dimana de la situacién econdmica de una clase”2 2 Vv, 1, Lenin. A s cerca de las ilusic ae 0.0, t 84, pdgn 3940, ilusiones constitucionalistas, 28 Si la ideologia defiende los estrechos intere- ses egoistas de la minoria explotadora, si la conciencia social de esta clase contradice al progreso social, tal ideologia es anticientrfi- ca. Y si los intereses de clase del sujeto vehicu- lo de la ideologia (por ejemplo, el proletariado) corresponden a las tendencias objetivas del desarrollo social, entonces estas ideas y teo- rias revisten caracter cientifico. El] proletaria- do, siendo él mismo una clase, resuelve la tarea de la supresién de las clases, de la sociedad cla- sista y, en ultimo término, se “anula” a st mis- mo. Su conciencia, que es clasista, se desprende de los signos de la anterior estrechez de clase que descansa en la justificacién de la inmuta- bilidad del dominio de clase, de aquello que C. Marx y F. Engels lamaron “falsa” concien- cia de clase. El proletariado parte de que las relaciones sociales, que él ejerce y desarrolla, en fin de cuentas se extinguiran como relacio- nes proletarias de clase. Por ello se convierte en una clase con extraordinarias ventajas para el'conocimiento y una singular garantia de ve- racidad. Dicha posicién extraordinaria de la clase obrera, cuya postura social estimula el Pensamiento y cuya accién histérica conduce a liquidar la estrechez clasista del pensamien- to condiciona el cardcter cientifico de su ideo- logia. “Las tesis tedricas de los comunistas no se basan en modo alguno en ideas y principios inventados... por tal o cual reformador del mundo. No son sino la expresién de conjunto de las condiciones reales de una lucha de clases existente, de un movimiento histérico que se 29estd desarrollando ante nuestros ojos”3, escyj. bieron C. Marx y F. Engels en el Manifiesto de] Partido Comunista. El proletariado no tiene interés de clase especial que difiera.de modo radical de los intereses de la mayoria de los trabajadores, Mds ain, pone conscientemente los intereses del desarrollo social por encima de los suyos Propios, subordinando su existencia a esos intereses. Por cuanto no siente temor ante la Perspectiva histérica, no estd interesado en Pintar de manera tendenciosa las relaciones existentes, disimular, adornar, deformar la verdad. Al contrario, el proletariado esta interesado en reflejar lo mds justo posible en sus ideas, teor{as y opiniones la realidad, en revelar y solucionar sus contradicciones poner al desnudo y eliminar las deficiencias con tal de cambiar lo mejor posible la vida social contribuir al progreso social. El arma espiritual que se hallan fundidas ideologya y la ciencia, 2. La ideologia comunista Como quiera se la lame clase obrera —proletaria, ocaceologia de Ia socialista, marxista- », SU esencia es tnic; i _ SU eser ‘a. Esta terminolégica indica en un caso el eae 3 C. Marx y F. Engels, Obras, t. 4, Pag, 438, 30 consecuente de la ideologia —el en el otro, su Ae social 16 cialismo, del comunis- - construccién, dot " Jos creadores de esta aieole nar, Marx, F. Engels, V. I. Lenin—. eos los casos, esta ideologia representa istema de ideas, teorfas, valoraciones cien- aed ian de modo objetivo la reali- tificas que reflejan de mo i bieti. dad social y expresan los intereses y a ic vos radicales de la clase obrera, de todos los trabajadores y que sirven a la transformaci6n de la sociedad sobre principios socialistas y, posteriormente, comunistas. La ideologia co- munista constituye un reflejo sistematizado cientifico-tedrico de los multiples aspectos de la vida social, de las relaciones sociales. Este sistema incluye ideas y teorias filoséficas, eco- ndmicas, politicas, juridicas, morales, estéticas, ateistas, asi como valoraciones, normas, ideales, programas, consignas, etc. El cardcter cientifico se funda en el reflejo adecuado de la vida so- cial, en la interpretacién materialista y dialécti- ca de los fendmenos y procesos sociales, en el enfoque histérico concreto y clasista-partidista de su andlisis e interpretacién. El objeto de este teflejo son: a) la realidad social socialista, el socialismo como un todo integro, como un sis- tema en desarrollo; b) las condiciones y el mo- do de vida de la clase obrera y de las masas trabajadoras explotadas de la parte no socia- lista del mundo, y en este sentido también las relaciones sociales capitalistas modernas; c) las telaciones entre los sist iali ita- tine los sistemas socialista y capita rincipal y més proletariado—, YLa ideologia comunista como sistema de i eorias, valoraciones cientificas de ees de la vida social en general, como sistema de formas ideologicas comprende Ia herencia tedrica ¢ ideologica de C. Marx, F. Engels y V. I. Lenin, representada en la filosofia marxista-leninista, economia politica, en doctrinas sociales, politicas, : juridicas, estéticas y ateistas. El patrimonio ideoldgico- tedrico marxistaleninista es su fundamento tedrico y contenido principal. Es perfeccionado constantemente por los partidos comunistas y obreros que actuan en diferentes condiciones sociales en los cinco continentes del mundo, en sus diversas regiones. Merced a ello, en la ideologia comunista se refleja la vida social contempordnea, las tendencias y las demandas fundamentales de su desarrollo, la experiencia acumulada por las fuerzas revolucionarias en distintos paises y en. distintas circunstancias; hallan su expresion los intereses y los objetivos de la clase obrera, de todos los trabajadores y las masas explotadas. La ideologia comunista es una ideologia de clase en cuanto a su cardacter y contenido. Sur- gid como la ideologfa del proletariado. En ed curso del proceso revolucionario, sobre la base de esta ideologia se cohesionan diferentes fuerzas y movimientos sociales que se suman ala lucha revolucionaria. En los paises donde ha triunfado el socialismo se torna de modo gradual en la ideologia de todo el publo. Pero tanto en el uno como en el otro caso la ideolo- gia no pierde su cardcter de clase. Continta ex- 32 presando el ideal socialista ‘de la clase obrera, ayudandole a cumplir su misién histérica. El destino social principal de la ideologia so- cialista es contribuir de manera activa a la transformacién de la sociedad sobre principios socialistas. En los afios anteriores a la revoly- cién ella ayuda a la ilustracién de la clase obre- ra y de sus aliados en la lucha. La ideologia marxista-leninista permite a las fuerzas com- batientes ver en las contiendas revoluciona- rias los objetivos finales de la lucha y las vias de su consecucién, aglutina a las fuerzas revo- lucionarias. Durante la construccién socialista la ideologfa marxista-leninista ayuda al desa- rrollo de las nuevas relaciones socialistas y a su transformacién gradual en relaciones comunis- tas. Pero tampoco en la sociedad socialista, donde predomina el aspecto de la edificacién, la ideologfa marxista pierde su significacion critica como factor de lucha contra las ideas, Lore de vista, prejuicios, tradiciones hostiles a a. 3. La fuerza transformadora revolucionaria de las ideas comunistas La peculiaridad més importante, mds carac- terfstica de la doctrina marxista-leninista es la unidad de la teoria y de la accion social, la union dé la teorta cientifica con la practica revolucionaria. No fue casual que la doctrina de los fundadores del comunismo cientifico 3-576 33encontrara desde el pane Pe mismo resuelta oposicién por parte de las fuerzas tee pecial y conservadoras. La lucha cobro especk agudeza en el umbral del siglo XX, cuando en Rusia empezé el auge del movimiento revolu- cionario. Los oportunistas y xevisionistas en el movimiento obrero de Rusia € internacional jntentaron negar la autenticidad del marxismo como ciencia y del marxismo como ideologia. Unos afirmaban que el marxismo ¢s ciencia, pero no ideologia, otros lo enfocaban como ideologia de clase, pero negaban su autenticidad cientifica. Al propio tiempo, tanto los unos como los otros trataban negar el caracter Gentifico del socialismo. Los asaltos revi- sionistas contra el marxismo fueron sometidos entonces a acerba critica, En esta relacion tuvo y tiene enorme significacion historica la obra de V. L Lenin éQué hacer? (marzo de 1902). Lenin da en ella una profunda fundamentacién teérica de la actividad del partido marxista, mostrando que la propia creacién de este partido es posible tnicamente si la vanguardia del proletariado se une ideologicamente sobre la base firme de la teorfa del socialismo cien- tifico. Deca que sin la teor{a revolucionaria el movimiento obrero estarfa condenado in- eluctablemente a vagar y vatilar, carente de perspectivas, y Megarfa a fin de cuentas a la bancarrota politica. “...Solo un partido dirigido por una teoria de vanguardia puede cumphir la mision de combatiente de vanguardia’’*, tal era 4 -V.1. Lenin, éQué hacer? 0. C., t. 6, pag. 25. 34 Ja deducci6n leninista fundamental. Explicando su intransigencia en esta cuestion, Lenin subrayd que “la actitud despectiva hacia la teoria, la ambigitedad y veleidad con relacién a la ideologfa socialista hacen indefectiblemente el juego a la ideologia burguesa”>. Lenin des- tacaba como tarea mas importante de la social- democracia yevolucionaria la necesidad de guardar la pureza del marxismo, combatir contra todo tipo de sus seudointerpretadores. La solucién leninista de este problema, su experiencia tienen inapreciable significado tam- bien en nuestros dias, cuando presenciamos un auge de los movimientos obrero y de libera- cion nacional. Los socidlogos y los filésofos burgueses, todo tipo de revisionistas de dere- chas e “‘izquierdas” intervienen hoy desde posiciones de contraposicion abstracta de la ciencia a la ideologfa. La esencia politica de este recurso es clara: tratar de deformar el marxismo, extirpar de él lo més importante, el contenido revolucionario. Con la particulari- dad de que los oportunistas y revisionistas mo- dernos intentan con ingenuidad alcanzar este Propésito a través del propio Marx, aludiendo a él mismo. Tal viraje en la tactica de lucha tiene sus motivos. En nuestros dias resulta ya impo- sible el bloqueo ideoldgico del marxismo, que intentaron los tedricos burgueses a fines del siglo XIX y comienzos del XX. El marxismo- leninismo se ha convertido en la ideologia rec- 5 -V. 1. Lenin. éPor qué la socialdemocracia debe declarar una guerra resuelta y sin cuartel a los socialistas-revolucionarios? 0. G, t. 6, pag. 874. - 35tora del siglo XX, y,con este hecho ¢s preciso contar. De ahi los “reconocimientos y sobre todo los “medio reconocimientos cada vez més frecuentes del marxismo. Llaman a Marx pionero en el campo de la teorta de la ideolo- gia y afirman al mismo tiempo que su doctrina es incompatible con el enfoque de clase que lleva supuestamente a la estrechez de pensa- miento, a la limitacién de miras y la escision del movimiento revolucionario. La esencia del marxismo-leninismo reside en lo indisoluble del principio clasista con el rigu- roso y objetivo caracter cientifico. El hecho de que el movimiento revolucionario se apoye en la ideologia cientifica constituye su inmensa ventaja, es sintoma de su enorme fuerza es- piritual. Sin la ideologia marxista el_movi- miento revolucionario de los trabajadores estarfa condenado a la impotencia y desorienta- cién, Esto precisamente pretenden los nu- merosos anticomunistas al atacar el marxismo- leninismo. La ideologia marxista reviste caracter cien- tifico por su contenido y métodos, correspon- de a todas las demandas y criterios de la objeti- vidad cientifica. Pero su cardcter cientifico es indisoluble con determinada orientacién socioclasista, reviste caracter politico clara- mente manifiesto. La ideologia del marxismo sirve a la clase obrera de guia en la lucha emancipadora, en la construccién de la nueva sociedad. La ideologia marxista-leninista es una expresion consecuente de los intereses cardina- les de la clase obrera, de todos los trabajadores 36 al mismo tiempo es una teorfa cientifica probada en la practica, que brinda un cuadro del mundo objetivo justo, un norte seguro en la actividad practica. La ideologia comunista desempefia su papel constructivo-transformador por medio de las funciones (0 sea, formas, métodos de expresion de la actividad, de la vida) a ella inherentes, determinadas por las necesidades espirituales practicas de la lucha revolucionaria y de la edificacién socialista. “‘...Las diversas funciones sociales no son més que otras tantas manifesta- ciones de actividad que se turnan y relevan”6, escribié C. Marx. Como ya se ha sefialado, la fuerza y la vitali- dad de la ideologYa marxista-leninista consisten en que refleja certeramente las necesidades del desarrollo progresivo de la sociedad, en que se desarrolla y se enriquece de manera cons- tante y dindmica. El reflejo objetivo, profundo, polifacético de los procesos sociales se ejerce merced a la funcién teérico-cognoscitiva de la ideologia. Esta funcién es ejercida por todas las formas de la ideologia comunista: la politica, la juridica, las doctrinas econémicas, éticas y esté- ticas. En las teorfas politicas, econdémicas y ju- ridicas se hallan concentrados los conocimien- tos sobre las relaciones sociales econémicas y juridicas, sobre los modos de influir en estas relaciones, etc. La ética marxista-leninista estu- dia las leyes de surgimiento, funcionamiento y i Marx. El Capital. C. Marx y F. Engels. Obras, t. 23, pag. g7desarrollo de la moral. La cognicién artistica es otra de las formas de conocimiento del mundo. El arte posee su propio contenido informativo sobre la sociedad, el hombre, sobre sus cualida- des sociales y personalistas. : La filosoffa marxista-leninista y, en particu- lar, su componente —el materialismo histori- co—, ciencia sobre las leyes mas generales del desarrollo social, ocupan importante lugar en el proceso ideolégico cognoscitivo. Al mismo tiempo, la filosofia del marxismo-leninismo constituye el fundamento metodoldgico del proceso cognoscitivo en general, actua como metodologia del desarrollo de ciencias sociales y naturales concretas. La ideologia marxista-leninista ensefia a la clase obrera, a todos los trabajadores a obrar considerando las leyes objetivas del desarro- lo social. El papel de la ideologia es dirigir Conscientemente el desarrollo de unos u otros fenémenos en conformidad con las condiciones objetivas dadas. Ello se refleja en la funcion ortentadora (pronosticadora). Al comprender la designacién de los objetivos, el planteamien- to de los fines, la anticipacién, la previsién del futuro, trazando las vias que conducen a la consecucién del objetivo —un determinado modelo espiritual del porvenir deseado de uno u otro proceso o fenomeno-, la ideologra ac- tua como medio de orientacién social de las masas. La ideologfa marxista-leninista brinda una comprensién correcta de la perspectiva histérica, ayuda a definir la direccién del desa- rrollo socioeconémico y politico, a orientarse 38 acertadamente en los acontecimientos interna- cionales. Indica la tendencia de la accién so- cial, de las transformaciones sociales. Para cumplir dicha funcién, la teorfa marxista- leninista debe reflejar oportunamente los cambios operados en la realidad social, vis- lumbrar las tendencias esbozadas y determi- nar, conforme con ellas, los fines perspecti- vos y las tareas inmediatas. La ideologia marxista-leninista desempefa el papel de fuerza movilizadora. Su funcion movilizadora se manifiesta en que expresando los intereses de la clase obrera, de los trabajado- res, les ayuda a tomar conciencia de la unidad de los intereses de todas las clases, capas y grupos sociales, individuos, a comprender los objetivos y el destino histéricos de la clase obrera. En el capitalismo, a base de la ideologia marxista-leninista la clase obrera y los traba- jadores explotados en el curso de la lucha de clases cobran conciencia de la comunidad de sus intereses radicales. Las ideas marxistas- leninistas desempefan enorme papel en la transformacién del proletariado de “clase en si” en “clase para si”, en su organizacién y cohesién en fuerza politica independiente, en la creacién del partido de la clase obrera, en la unién de las fuerzas revolucionarias y los participantes de la lucha de clases. A tra- vés de la ideologiala clase obrera toma concien- Cia de su papel de fuerza rectora del proceso revolucionario, Las ideas organizan, aglutinan a las masas, ayudan a alcanzar la unidad de objetivos, de voluntad, de accién. “La or- 39ganizacién carente de ideologia no tiene senti- do...7, sefialaba Lenin. Le fal Los partidos marxistas-leninistas emplean la enorme fuerza movilizadora de sus ideas para levantar y organizar a las masas obrero-cam- pesinas, a los intelectuales, a la lucha por la encarnacién de sus ideales en la vida. Por su funcién organizadora y movilizadora, la ideo- logfa comunista obra.como medio de desper- tar y estimular la actividad creadora de las ma- sas. La ideologia comunista sirve a la educacién de un determinado tipo de personalidad, a for- mar las necesarias relaciones sociales ideolé- gicas. La ideologia esté enfilada a la “produc- cién” de la conciencia, a la formacién de la concepcién del mundo comunista y de una de- terminada conducta de las clases trabajadoras, grupos sociales, capas, individuos. Sirve de me- dio de orientacién en el ambiente social, en lo cual se manifiesta su funcién educativa que se realiza principalmente por medio de la ac- tividad del partido comunista, del Estado so- cialista orientada a un fin. En la sociedad de clases (en la capitalista, en la socialista) la funcién educativa se realiza co- mo educacién de clase, que representa una in- fluencia orientada de una clase determinada y de su Partido sobre todas las clases y capas de la sociedad conforme a sus necesidades econd- micas e intereses, a su cosmovisién, ideales 7 V, 1, Lenin, La bicha contra los socialdemécratas de tenden- cia demé crata-constitucionalista y la discipliy ido. 0. C., Apacer: y ladisciplina de partido. O. 40 sociopoliticos y moral-estéticos con la finali- dad de inculcarles determinadas ideas y cua- lidades sociales. La educacién es uno de los ele- mentos del sistema para asegurar en la practica la defensa de los intereses de la clase dominan- te dada, para cambiar o preservar las relaciones sociales existentes. La ideologfa marxista-leninista formula los ideales sociopoliticos, morales, estéticos co- munistas. Rige las normas, los principios de las relaciones interclasistas, nacionales, familiares, entre los individuos, la actitud del individuo hacia la sociedad y el colectivo, hacia el partido y el Estado, la actitud de la sociedad y el colec- tivo hacia el individuo, etc. En la ideologya se formula, se elabora lo “debido”, lo que se hace “real” como resultado de los esfuerzos educativos del partido y del Estado socialista, de otras instituciones de la sociedad, ast como por medio de la autoeducacién. De acuerdo con los principios de la ideologia comunista se estructura la educacién ideoldégico-politica, econémica, juridica, laboral, moral, estética, se forma la concepcién comunista del mundo de las masas trabajadoras. La ideologia marxis- ta-leninista determina las principales direc- ciones de la educacién de las masas. _ La ideologia, las formas en que ella existe intervienen como factor de creacién y fortale- Cimiento de las relaciones sociales espectficas entre los individuos y distintos elementos de la estructura social (naciones, grupos sociales, colectividades, etc.). Las ideas contribuyen a la transmisién de la experiencia social, sirven de 41medio de comunicacién entre los hombres. Y no solo unen a cuantos viven en la época dada y en la sociedad dada, sino que obran como hilo de engarce entre las distintas genera- ciones y diferentes épocas tanto a escala nacional como internacional ejerciendo una funcién organizativa. : En la vida real las funciones examinadas de la ideologia se encuentran en interrelacién ¢ interaccion, por lo cual la ideologia comunista desempefia su ped de transformacién revolu- cionaria y de edificacién de la sociedad. Las funciones de la ideologia comunista se cumplen a través de la labor de organizacién politica del partido, del Estado socialista, de diversas organizaciones sociales, encaminada a que los trabajadores asimilen las ideas, las teorias y los principios comunistas para que éstos se conviertan en impulso de sus actividades. Los partidos comunistas han considerado y consideran como su tarea prdctico-espiritual indivisible el conocimiento del mundo, la instruccion y educacién de las masas, su orien- tacin y organizacién. Siempre es actual la tesis leninista de que sin la respuesta tedrica a los interrogantes cardinales de la vida “...es imposible avanzar un solo paso en la agitacion, la propaganda y la organizacin”®. Al propio tiempo, incluso la ideologia mas avanzada devie- ne fuerza real solo cuando, apoderandose de las masas, las mueve ala accién, rige las normas de su conducta. 8 V. 1. Lenin, Notas de un publicista, O. C, t. 19, pag. 277, 42 Asi pues, la ideologfa marxista-leninista, como tipo determinado de sistema de ideas, teorfas, valoraciones, determina el tipo de acti- vidades ideolégicas, el cardcter de la propagan- da y el contenido de la educacién. El partido acttia como sujeto de la labor ideoldgica. El ejerce directamente todos los tipos de la labor ideolégica y educativa. En los paises socialis- tas esta direccién se ejerce en cooperacién con las organizaciones estatales y sociales. 4. Leyes del desarrollo y dei funcionamiento de la ideologi comunista en la sociedad La ideologfa como formacién espiritual es- pecifica posee determinadas regularidades del desarrollo y del funcionamiento. Mas arriba ya se ha hablado de tales leyes del desarrollo de la ideologya como su condicionamiento por las premisas materiales, econédmicas de la vida, de la relativa independencia de la ideolo- gia. El papel determinante de la vida social respecto a la ideologia y la relativa autono- mia de la ideologia son leyes comunes del funcionamiento y del desarrollo de cualquier ideologfa, incluida la comunista. Pero la ideolo- gia comunista es un fendmeno espiritual de tipo especial que se diferencia de principio por su esencia de todas las demés ideologias. Por ello también obedece en su desarrollo y fun- cionamiento a otras leyes especificas. Una de ellas es el cardcter creador de la ideologia 43marxista-leninista. Dicha ley se debe a la li- gazén inmediata que existe entre la ideologia comunista y las necesidades del desarrollo so- cial, a la prdctica social progresista que exige un andlisis creador constante de toda la multi- variedad de la realidad viviente, de la viva experiencia de la actividad social de las masas. “Un partido marxista-leninista no puede cum- plir su papel si no concede la debida atencion a la inteleccién de todo lo que ocurre, a la sintetizacién de los nuevos fenémenos de la vi- da y al desarrollo creador de la teor’a marxista- leninista”9, se sefalé en el Informe del CC al XXVI Congreso del PCUS. Cabe sefialar que en esto precisamente radica el cardcter univer- sal del marxismo-leninismo. “La doctrina del marxismo es un crisol en el que se cumple un hecho de importancia histérica excepcional: civilizaciones diversas, diversas culturas y con- cepciones de la vida,. diversas tradiciones y estructuras sociales son sometidas al andlisis y confrontadas .., sobre una base comin...”19, —se sefialé en el XII Congreso de los comunis- tas italianos (1969) y se subrayé que esta gran fusién debe realizarse sobre la base y en el cauce del marxismo. Una ley especifica del funcionamiento y del desarrollo de la ideologia comunista (socialista) es la lucha contra la ideologta burguesa. Las ideologias comunista y burguesa son los dos ti- Pos principales de ideologia clasista en la so- 1 geimentes de XXVI Congreso del PCUS, pag. 77. Riuniti, 1969, page 88.00 tet Pet sci dalla crisi Editori 44 ciedad moderna. La pugna entre ellas es natu- ral porque cada una de ellas expresa los inte- reses de clases contrapuestas. Cuanto més ex- tensa y mas honda es la influencia de la ideolo- gia comunista, cuanto més significativas son sus conquistas practicas en la transformacién revolucionaria del mundo, en la construccién del socialismo, tanto mds aguda se hace la lu- cha, tanto mds tenaces y furiosos se hacen los ataques de los enemigos contra la ideologia marxista-leninista. Una de las leyes especificas del funciona- miento y del desarrollo de la ideologifa comu- nista es también la lucha por su pureza. Esta lucha se libra actualmente en lo fundamental contra el social-reformismo, contra el re- visionismo de derecha y de “izquierda”, El social-reformismo —ideologfa que elaboran y difunden los partidos socialdemécratas y socia- listas— intenta influir sobre vastas capas del movimiento obrero. Por su esencia social es un vehiculo de ideas burguesas en las masas tra- bajadoras. El social-reformismo, apela, por ejemplo, francamente a las actuales doctrinas burguesas de “la paz de clases“, de “asocia- clon social”, del “Estado del bienestar gene- tal”, etc. Sus tedricos propagan el modelo del amado “socialismo democratico”, que pre- tendidamente surge de modo directo de la so- Ciedad capitalista por medio de reformas y que funciona sin la dictadura del proletariado. El revisionismo de derécha y de “izquierda”, ‘eva a cabo la lucha dentro del movimiento Comunista. Sus tedricos y portadores, auto- 45denominandose marxistas, pretenden “defen- der”, “enmendar”, “mejorar’ el marxismo- leninismo, abogan por su supuesta mejor apli- cacion. Pero en realidad revisan el marxismo- leninismo intentando suplantarlo por plantea- mientos burgueses. Emprenden furiosos ata- ues contra las leyes generales del desarrollo de Ja revolucién y de la construccién del socia- lismo y elcomunismo. Una ley del funcionamiento y del desarrollo de la ideologia comunista es el acrecentamien- to de su papel en cada mueva etapa del proceso revolucionario, a medida que aumentan las tareas de la construccién socialista. Este acre- centamiento obedece a toda una serie de razones de orden interior e internacional. Tiene importancia primordial la creciente par- ticipacién de las masas en el proceso revolucio- nario, la profundidad y las proporciones de la practica de transformacién revolucionaria en la construccién socialista. La solucién de las tareas de formacién del ejército politico de la revolucién, asi como de la construccién del so- cialismo, es inconcebible sin incorporar las amplias masas de los trabajadores a la lucha activa, sin desarrollar su firmeza ideolégica ac- tiva social. El papel de la ideologfa comunista crece asimismo debido a razones de politica exterior. Ello se debe a la presente correla- cién de las fuerzas de clase en el mundo, a la necesidad de seguir combatiendo enérgicamen- te contra las ideologias burguesa y revisionista en la palestra mundial. La pugna ideoldgica exige afilar constantemente el arma ideoldgi- 46 ca marxista-leninista, por cuanto crece constan- temente la necesidad social de ideas y teorias que reflejen con mayor adecuacién el estado moderno de la sociedad y las tendencias de su desarrollo, los intereses y las aspiraciones de Tas masas trabajadoras. La ideologfa marxista-leninista en la etapa actual es el logro supremo del pensamiento so- cial, la teorfa cientrfica del socialismo, probada en la practica, que brinda un cuadro objetivo justo del mundo y constituye un norte seguro en la actividad practica. El marxismo-leninismo es la idea rectora de nuestro tiempo, la gran fuerza creadora de la historia contempordnea, sirve de arma espiritual en la lucha de clases en la creacién de 1a nueva sociedad. En los pai- ses capitalistas esta doctrina sirve a las necesi- dades prdcticas del movimiento proletario, de la lucha revolucionaria de la clase obrera, escla- reciendo las nuevas condiciones, las nuevas for- mas y procedimientos de esta lucha. Para los pueblos de los paises en desarrollo, las ideas del socialismo cientifico son una guia segura en la opcién de los caminos de desarrollo. El papel de transformaci6n revolucionaria de la teoria marxista-leninista, su unidad con la Practica revolucionaria hallaron brillante mani- estacién en el triunfo de la Gran Revolucién Socialista de Octubre en Rusia (1917). En la actualidad, en la URSS ha sido creada y se per- fecciona una sociedad socialista desarrollada, Tesultado de la creacién histérica de las masas, Plasmacién viva de las ideas del socialismo Az‘entifico. El socialismo desarrollado se carac- eo teet la combinacién de los logros cae revolucién tecnocientifica con las ventajas lel sistema de economfa socialista, por el viraje de- cisivo a los métodos intensivos de desarrollo econdmico, el nivel cualitativo nuevo y pro- porciones de la produccién que permiten re- solver de manera directa las tareas de la cons- truccién de la base material-técnica del comu- nismo, alcanzar importantes éxitos en la emu- laci6n econémica con el capitalismo. La URSS avanza firmemente en todas las di- recciones del desarrollo. En la Unién Soviéti- ca han sido liquidadas para siempre lagas so- ciales inherentes al capitalismo tales como el hambre y la miseria, el desempleo y el analfa- betismo, el yugo social y nacional. Esta ase- gurada en realidad la verdadera igualdad de Tas mujeres. El socialismo ha abierto a los tra- bajadores el acceso mds amplio a los conoci- mientos, a las riquezas de la cultura espiritual. En la Rusia prerrevolucionaria, era analfabeta cerca del 75% de la poblacion adulta. Mientras hg ahora, mas del 80% de la poblacién ocupa- la en la economia nacional posee ensefianza superior o media (completa o incompleta). En el curso de la construccién revolucionaria y de la lucha por la libertad, en el proceso de la edi- ficacién socialista, en la URSS se ha formado un hombre nuevo, una personalidad de nuevo tipo socialista, que conjuga profundas convic- ciones ideolégicas con una gran energia vital, una constante aspiracién a alcanzar las cumbres del saber y de la cultura, una conciencia y 48 sentido de colectivismo y ayuda mutua creadora. “El soviético es un trabajador hones- to de amplios horizontes politicos, un patriota e internacionalista... Vive la pletorica vida de arquitecto del mundo nuevo”! 1) dice el In- forme del CC al XXVI Congreso del PCUS. El proceso revolucionario universal en la se- gunda mitad del siglo XX se incrementa incon- teniblemente. El movimiento comunista mun- dial ha devenido la fuerza més masiva e in- fluyente de la contemporaneidad. En la ac- tualidad, en 94 paises del mundo funcionan activamente partidos comunistas. El nimero de miembros de los partidos comunistas y obreros supera los 70 millones, o sea que por cada 60 habitantes del planeta hay un comunista. Ha crecido la solidaridad internacional de las masas revolucionarias, se ha reforzado el papel del internacionalismo y se ha extendido laesfera de aplicacién de sus principios. La ascendencia de la ideologia marxista-leni- nista sobre la vida social moderna se manifiesta en que ha crecido el nimero de aliados del proletariado, se ha ampliado la base social de su lucha de clase, la clase obrera logra conquis- tas en los paises capitalistas, crece el afén de cambios socioeconémicos y politicos radicales. Tiene lugar una profundisima reestructuracién Tevolucionaria de todo el fundamento de la exis- tencia humana. El espiritu de la época se ex- Presa en las revoluciones, en las batallas revo- lucionarias. El despliegue de los movimientos 11 Documentos del XXVI Congreso del PCUS, pig. 68. 4-576 49nal, la liquidacion de los im- la envergadura ee re ‘a antimperialista, la megativa de cada eae: miimero de paises y pueblos a seguir la via de desarrollo capitalista, su orientacion al socialismo: todo ello es el resultado del influjo de las ideas del marxismo-leninismo. 7 La ideologia marxista-leninista, arma teorica y espiritual de la clase revolucionaria, cobra cada vez més un espiritu combativo y mili- tante. El espiritu combativo y militante consti- tuye uno de los rasgos més importantes de la ideologia comunista. de liberacién nacio’ perios coloniales, Capitulo HI PROBLEMAS DEL DESARROLLO DE LA IDEOLOGIA Al examinar el problema del desarrollo de la ideologia, chocamos sin falta con los interro- gantes: écual es la necesidad, el grado de la ne- cesaria y posible renovacién de unas u otras tesis ideolégicas? éCudles son los criterios de este desarrollo? Estas cuestiones tienen gran significado metodoldégico e ideoldégico-politi- co. De hecho ahj pasa la divisoria entre el enfo- que cientffico-revolucionario de la teoria y el dogmatismo, entre los revolucionarios y los revisionistas. Los dogmaticos so pretexto de la fidelidad a la doctrina en realidad hacen im- posible su desarrollo y con ello llevan al divor- ciamiento de la vida, condenan el movimiento revolucionario a la estrechez sectaria, a la rup- tura con las masas, conducen al aventurerismo politico. Los revisionistas, al contrario, insisten en modificar cualesquiera tesis marxistas, in- cluidas las cardinales, probadas por la prac- tica revolucionaria. Declarando la necesidad de tener en cuenta constantemente las demandas de la vida, se gufan en realidad por circunstan- cias coyunturales. Tales son, por ejemplo, las demandas de los revisionistas de reconsiderar la 4 51doctrina de la dictadura del proletariado, del papel del partido en la revolucién y del acre- eetamiento de su papel dirigente a medida del avance del desarrollo socialista. La actividad revolucionaria de las masas, la experiencia de la lucha revolucionaria y de la construccién socialista muestran que la teorfa puede cumplir el papel de fundamento cienti- fico de la politica del partido, ser instrumento del conocimiento y la transformacion del mundo solo al ir al compds de la vida, en- riqueciéndose y renovandose sin cesar de acuerdo con las condiciones cambiantes. Una teoria estancada que no refleja las leyes y las tendencias del desarrollo social puede desorien- tar la accién practica de los hombres, orientan- dola en una direccién que no corresponde a las necesidades reales, convirtiéndose de tal modo en un freno del progreso social. 1. El marxismo-leninismo: doctrina viva en continuo desarrollo E] partido comunista puede cumplir su misi6n solo si se preocupa permanentemente por el desarrollo de la doctrina en que se apoya. Esta importante idea leninista ha sido confirmada reiteradas veces durante el desarrollo histérico. El jefe del proletariado comprendia que la re- volucién social no puede seguir un camino facil y rectilineo. Sefialo que sera un camino dificil y contradictorio. “...Imaginarse que la historia ag universal avanza suave y ordenadamente, sin gigantescos saltos atrds en algunas ocasiones, no es dialéctico, es acientifico, falso desde el punto de vista tedrico”!. Premisa indispensa- ble de la actividad del partido si éste desea con- servar su papel de vanguardia en la revolucién debe ser la busqueda consciente, incesante de nuevas soluciones, consideraba Lenin, la pre- cisién de Ja lfnea politica, el desarrollo de tales o cuales tesis tedricas. El partido no solo es el dirigente politico de las masas, sino también el centro del pensamiento cient/fico-tedrico, donde actiia cada vez como factor determinan- te para hallar, comprender y realizar las posibi- lidades abiertas ante las masas revolucionarias. De la capacidad de la vanguardia politica de ir al paso con el tiempo, de acumular sin cesar y generalizar en la teorfa la experiencia revo- lucionaria depende en sumo grado la actividad de las masas revolucionarias, el desenlace de la lucha en general. No cabe considerar que el marxismo com- prende solo las tesis formuladas por Marx y Engels en el siglo pasado. Pensar asi significa empobrecer y disecar el marxismo, haciendo de él un esquema apartado de la practica. La ideologia de la clase obrera hoy es inconce- bible sin el reflejo de la época histérica gigante de las revoluciones proletarias, sin el trabajo de V. I. Lenin, sin la experiencia de la Gran Revo- lucién Socialista de Octubre y de las batallas Tevolucionarias desplegadas después de ella 1V. 1. Lenin, Sobre el folleto de Junius, O. C., t. 80, pée. 6.ontinentes de la Tierra, sin tener dos los . ter oe de la inmensa edifica- en cuenta la experiencia én socialista. Toda la labor de Lenin, desplegada ya en ja nueva época, constituye una confirmacién brillante del enfoque no estereotipado sino creativo del marxismo. ¢Cabe decir acaso que Lenin imité y aplicé simplemente Ja doctrina de Marx en las condiciones de Rusia como di- cen los revisionistas? “No enfocamos, en abso- luto, la teorfa de Marx como algo acabado e in- tangible —asi formulé Lenin su actitud ante Ja doctrina de Marx en visperas de la Revolucion de Octubre—, estamos convencidos, por el con- trario, de que colocé solo las piedras angulares de la ciencia que los socialistas deben impulsar en todas direcciones, si no quieren quedar re- zagados en la vida”2. Las ideas leninistas sobre el. Poder revolucionario-democratico del proletariado y el campesinado, sobre el papel de la vanguardia revolucionaria —el partido— en el proceso revolucionario, la teor{a de la revolu- cidn socialista son un ejemplo de actitud crea- dora hacia la teorfa. Las peculiaridades histori- cas de la época imperialista fueron sometidas en el laboratorio del pensamiento leninista a un anilisis plurifacético desde posiciones de la vision marxista; de ellas se distinguid y se elevé al nivel de lo general lo que en la realidad adquirfa fuerza de ley e influfa de manera sus- tancial sobre el contenido y el cardcter de la revolucién socialista. Merced a tal enfoque Le- 2V. 1. Lenin, Nuestro programa, O. C., te 4, pag. 184, ra nin, permaneciendo fiel a los principios de la doctrina marxista, la elevé a un eslabén cuali- tativo més alto de generalizacién de la experien- cia revolucionaria de la nueva época. Lenin enriquecid y desarrollé esencialmente el marxismo con datos de las leyes del desarrollo de la sociedad en la época nueva: la época de transicién del capitalismo al socialismo. La teoria y la practica marxista-leninista en los Ultimos afios se ha enriquecido en los do- cumentos del PCUS y de los partidos comunis- tas de otros paises con nuevos estudios sobre los cambios sociales en las fuerzas motrices del proceso revolucionario, sobre la via de desarrollo no capitalista, sobre las nuevas for- mas de poder, tipos especificos de dictadura del proletariado (la sostenida en el frente nacional, el Poder del pueblo armado, etc.), sobre la dialéctica de lo general y particular en el progreso social, sobre la nueva etapa de la construccién socialista: la etapa del socialismo desarrollado. Ya Lenin subrayé la importancia de “la di- ferenciacién rigurosa entre etapas que son dis- tintas por su naturaleza, la investigacién sobria de las condiciones en que esas etapas se cum- plen...”3 Esta es una premisa necesaria de la elaboracién y aplicacién de una politica activa y al mismo tiempo realista que impide tanto adelantarse demasiado y plantear tareas incon- sistentes e irreales, como retrasarse de las nece- 3 ine L. Lenin, La autocracia y et proletariado, O. C.,t. 9, P&B. &idades de la realidad que cambia raépidamente. Ngee los procesos de reestructuraci6n de las relaciones socialistas en la URSS y de creacién de las bases del socialismo en otros pafses socialistas, ha surgido precisamente tal situacion de inicio de una nueva etapa del de- sarrollo social —la etapa del socialismo desa- rrollado—, cuya inteleccién cientifica ha adqui- rido una significacién teérica y practica pri- mordial. ce La concepcién del socialismo desarrolla- do fija con precisién el, lugar histdrico de la etapa actual de construccién socialista y esclarece el problema de periodizacién de la formacién de la sociedad comunista. Tal como se ha sefialado en el XXVI Con- greso del PCUS, el socialismo desarrollado “..e8 un perfodo necesario, lédgico e his- téricamente largo del devenir de la forma- cién socialista”*. De esta formula se desprende que, ioe una parte, el socialismo no es un perfodo breve, de corta duracién, sino una etapa relativamente larga de desarrollo de la nueva sociedad con dimensiones cuantitativas y cualitativas determinadas. Por otra parte, es la sociedad en cuyos marcos se solucionan de manera directa las tareas de la construccién comunista, se crea la base material-técnica del comunismo, se forman las relaciones sociales comunistas y la personalidad comunista, o sea, Ja sociedad que se transforma en comunista. En el ejemplo de la concepcién del so- 4 Documentos del XXVI Congreso del PCUS, pag. 78. 56 cialismo desarrollado se puede seguir pal- pablemente la manifestacion de la mas impor- tante regularidad del desarrollo ideolégico, la que determina la necesidad de su desarrollo como unidad de todos sus componentes. Se trata en este caso de que este proceso afecte en medida igual la funcién cognoscitiva como todas las demas funciones de la ideologfa (de pronosticacién, de educacién y de organiza- cién). Por ejemplo, gen qué se manifiesta el papel de transformacién y de moviliza- cién de la concepcién del socialismo desa- rrollado? Por un lado, la concepcién hace constar lo logrado, lo conseguido y materiali- zado. Por otro lado, esclarece las vias del sucesivo avance hacia el comunismo. El hecho de la creacién de la sociedad socialista desarrollada no evidencia atin la plena identidad de la teorfa del socialismo desarrollado y el estado real de la sociedad en toda su variedad. En este caso, al deter- minar el estado cualitativo de la sociedad se toman las caracteristicas mAs sustancia- les de las esferas fundamentales de la vida Social. Estas no pueden y no deben encu- brir los problemas sin resolver, las dificul- tades, sino, al contrario, deben contribuir @ que sean cumplidos y resueltos. Tales fend- menos “residuales” como el peso espectfico atin grande del trabajo manual, la falta de algunos bienes de consumo, las diferencias territoriales de las condiciones de vida de la Sente, los casos de comportamiento no socia- ita, filisteo, se encuentran en aguda contra- RTdiccién con todo el modo de vida en la socie. dad socialista desarrollada. En estas curcuns. tancias, la concepcién del socialismo desa- rrollado adquiere una importante funcién normativomoral. La evaluacién social de unos y otros aspectos de la vida social, de la labor de los colectivos, de las Personas, puede y de- be hacerse de acuerdo con los altos crite- tios del socialismo desarrollado. El comienzo de la etapa del socialismo desarrollado en el pats significa igualmen- te la ampliacién considerable de las Posibili- dades para aprovechar las ventajas del régimen socialista. Pero su realizacién no puede transcu- trir de manera automitica. Exige una gran pene ¥, consciente de toda la socie- q ido, las o: izaci connie Sibi rganizaciones estatales, a fundamentacién tedrica de la e oe del desarrollo socialista orienta al partido, . ieee 7 logro de nuevas Posiciones reales, ae ‘andolos a Superar los obstdculos que ene a en este camino. Asi la concepcién aay Te integridad: en la unidad de sus fun- a eS Cognoscitiva e ideolégica (de transfor- ee Tevolucionaria), ides tn aamo-leninismo vive en la actua- eee © de nuevo auge creativo, va vida, el proceso yr uci e yen Gea Tevolucionario, la prac- la const i complejos problemas = ae plantean proletarado! Gee ante la doctrina del ‘ancia de la sintetizacié nuevo gue aaa oportuna de todo lo dad, del anélisis 58 crftico de las contradicciones del desarrollo social. Se hace cada vez més necesaria la sucesiva labor ideolégica. La necesidad de activar esta labor se debe ante todo a la com- lejidad y lo contradictorio del desarrollo del proceso revolucionario mundial, a cuya érbita han sido atrafdos la mayor parte de pajses y continentes del mundo, diversas capas y grupos sociales. Este proceso es aun mas complejo or el hecho de que se desenvuelve en mul- tiples condiciones socioecondmicas, politicas y cultural-ideolégicas de transformaciones revo- lucionarias de distinto cardcter (socialistas, de liberacién nacional, democriticas). El proceso revolucionario choca con dificultades especiales en el 4rea del movimiento de liberacién nacio- nal. En esa parte del mundo el desarrollo del proceso revolucionario mundial se enfren- ta no solo con el retraso econdémico, sino también con la falta de desarrollo de las estruc- turas y relaciones sociales y polfticas. Las fuerzas imperialistas reaccionarias no cesan su actividad contrarrevolucionaria empefiadas en frenar el progreso social en esa 4rea del mundo. De este modo, en el desarrollo del proceso revolucionario mundial halla su reflejo la dia- léctica de la época actual de transicién. Cuanto mds préximo est el fin del capitalismo, tanto més furiosa es su resistencia, su afan de afer- Tarse a todo lo viejo, caduco, obstruyendo la formacién de la nueva sociedad, las nuevas telaciones, la nueva moral. : .El papel de la teorfa crece también de- ido a las demandas de la etapa actual de