You are on page 1of 3

MATERIALES DE LA ASIGNATURA “ECONOMÍA MUNDIAL”. PRIMER CURSO DE ADE (GRUPOS 2 Y 3). LUIS FERNANDO LOBÉJÓN.

TEXTO DE REFERENCIA PARA LA PRÁCTICA SOBRE MEDIDAS DE SOSTENIBILIDAD

La discusión parte de la idea de una idea común: la sostenibilidad requiere producir los bienes y
servicios necesarios para satisfacer las necesidades (de la generación presente y de las futuras)
contando para ello con la producción de bienes y servicios que se precise.

La producción de esos bienes y servicios precisa, a su vez, disponer de trabajo y capital. En relación con
este último factor de producción, la noción de sostenibilidad implica que, a la noción clásica de capital
manufacturado habría que añadir la de “capital natural” (recursos naturales y ecosistemas).

Para que el desarrollo sea sostenible es necesario mantener constante el stock de capital total
(manufacturado + “natural”), es decir:

Stock de Capital Total = Km + Kn = cte.

En esta expresión, “Km” es el capital manufacturado y “Kn” el capital “natural”.

A partir del planteamiento común surgen tres posibilidades de interpretar la sostenibilidad, que influyen
sobre la forma de medirlo:

a) La economía ambiental propone mantener constante el stock de capital total, pero entendiendo
que si se reduce (o deprecia) dicho capital natural, la pérdida de éste puede compensarse con un
aumento de capital manufacturado (y viceversa). La hipótesis en la que se basa esta perspectiva es,
por tanto, que ambos tipos de capital son sustitutivos. A esta noción de sostenibilidad, se le
denomina sostenibilidad débil.

b) La economía ecológica sostiene que ambos tipos de capital no son sustitutivos, sino
complementarios, es decir, si el capital natural se agota no es posible compensarlo con un
incremento del capital manufacturado (dicho capital manufacturado está elaborado a partir de
recursos naturales que, si no existen, no es factible fabricar). A esta noción de sostenibilidad se la
denomina sostenibilidad fuerte.

c) Desde un punto de vista complementario al de la sostenibilidad fuerte, la economía ecológica


también interpreta la sostenibilidad como una cuestión de escala, teniendo en cuenta la
proporción que representa el sistema económico dentro del conjunto de la biosfera. Cuanto mayor
sea esa proporción tamaño, mayor será la presión sobre los recursos naturales y la generación de
residuos y, por tanto, menor será la sostenibilidad de ese sistema económico.

Para cada uno de los tres casos se han desarrollado distintos indicadores de sostenibilidad, que se
aplican sobre distintos ámbitos (nacional, regional o local), e incluso para actividades o agentes
económicos concretos.

a) Indicador de sostenibilidad débil: Ahorro Genuino o Verdadero (también conocido como Ahorro
Neto Ajustado). Se suele expresar como porcentaje de la Renta Nacional Bruta o Ingreso Nacional
Bruto. El planteamiento en el que se basa esta medida es el siguiente: una economía será sostenible
si es capaz de generar una cantidad de ahorro (medida también, generalmente, como porcentaje de
la Renta Nacional Bruta) que sea suficiente para compensar monetariamente (a través de la
inversión) la depreciación del capital natural y del capital manufacturado, manteniendo de esta
forma, al menos, constante el stock de capital total.
MATERIALES DE LA ASIGNATURA “ECONOMÍA MUNDIAL”. PRIMER CURSO DE ADE (GRUPOS 2 Y 3). LUIS FERNANDO LOBÉJÓN.

Desde la primera aplicación a comienzos de la década de los noventa en la que se contemplaba


únicamente la depreciación del capital manufacturado y el capital natural, se han incorporado
posteriormente dos ajustes por parte del Banco Mundial:

1. Con signo positivo, el gasto público en educación (considerado como inversión en capital
“humano”).
2. Con signo negativo, el daño ambiental por emisión de partículas (daño ambiental provocado
por las emisiones de dióxido de carbono y partículas). La expresión resultante es:

ANA = ANB – CKF – ARN + GPe – DAmb

En esta expresión: ANA = ahorro neto ajustado; ANB = ahorro nacional bruto; CKF = consumo de
capital fijo; GPe = gasto público en educación; ARN = agotamiento de recursos naturales; DAmb =
daños ambientales por emisiones de CO2 y partículas.

Si el análisis se hace por países, los resultados posibles serían los siguientes:

 ANA > 0, el país es sostenible

 ANA = 0, el país es cuasi-sostenible

 ANA < 0, e país es insostenible

b) Indicadores de sostenibilidad fuerte. En este caso es preciso mantener constante, por una parte, el
stock de capital en términos físicos, y, por otra el stock capital natural, ya que no se consideran
sustitutivos. Dada la complementariedad de ambos, el esfuerzo principal consistiría en mantener
constante el stock de capital natural para que la capacidad de utilización por las generaciones
futuras sea, al menos, la misma. En este sentido, el economista ecológico Herman Daly ha
propuesto unos criterios operativos de desarrollo sostenible (en sentido fuerte):

Criterio de extracción sostenible: los recursos naturales renovables deben extraerse a una tasa
menor o igual que su tasa de renovación natural (ej. Acuíferos, bosques, etc.).
Criterio de agotamiento sostenible: en el caso de los recursos no renovables energéticos, la
tasa de utilización debe ser menor o igual a la tasa de sustitución de esa fuente por una energía
renovable. En el caso de los minerales, debe procurarse la reutilización.
Criterio de emisión sostenible: las tasas de emisión de contaminantes deben ser iguales o
inferiores a la capacidad de absorción por parte de los ecosistemas. De esta manera no se
deteriora la base de recursos en términos de calidad y cantidad.

c) Indicadores de sostenibilidad como cuestión de escala. Para la economía ecológica la


sostenibilidad sería también una cuestión de “escala” o tamaño que el subsistema económico
ocupa dentro de la propia biosfera. En este sentido se trata de ir más allá del tradicional flujo
circular de renta entre hogares y empresas, e incorporar los recursos naturales antes de ser
valorados, así como los residuos una vez que han perdido su valor. Ese tamaño o escala se puede
medir desde dos puntos de vista complementarios.

1. En primer lugar, contemplando el sistema económico en términos de metabolismo social.


Una economía capta energía y materiales del entorno, los “digiere” para producir bienes y
MATERIALES DE LA ASIGNATURA “ECONOMÍA MUNDIAL”. PRIMER CURSO DE ADE (GRUPOS 2 Y 3). LUIS FERNANDO LOBÉJÓN.

servicios y como genera residuos que van a parar de nuevo a la naturaleza. Uno de los
indicadores utilizados desde esta perspectiva es el Requerimiento Total de Materiales (RTM)
que mide la base material total (tamaño) de una economía a través de los flujos de recursos
naturales (valorados o no) que entran en el sistema económico para su posterior
transformación en bienes, infraestructuras o servicios.

2. La segunda alternativa para medir esta “escala” es traducir a términos territoriales el


consumo de recursos naturales y la generación de residuos. En este sentido, el indicador más
utilizado es la huella ecológica (HE): “la superficie de tierra y mar ecológicamente productiva
necesaria para satisfacer el consumo de una población y absorber los residuos gaseosos
generados por la quema de combustibles fósiles (CO2)”. La sostenibilidad o insostenibilidad se
determina en este caso comparando la huella ecológica con la capacidad biológica o
biocapacidad, entendida como “la capacidad de los ecosistemas de producir materiales
biológicos útiles y absorber los materiales de desecho generados por los seres humanos,
usando esquemas de administración y tecnologías de extracción actuales”. La comparación da
lugar a las dos posibilidades siguientes:

 Si la huella ecológica > la biocapacidad o capacidad biológica, existe


déficit ecológico insostenibilidad.

 Si la huella ecológica < la biocapacidad o capacidad biológica, existe


excedente ecológico o reserva ecológica sostenibilidad.

Todas las variables contempladas en este tipo de análisis (huella ecológica, biocapacidad o
capacidad biológica y déficit ecológico o reserva biológica) se expresan en hectáreas
(normalmente hectáreas por habitante). Si el análisis se realiza por países (puede efectuarse
para territorios más pequeños, para determinadas actividades o para individuos concretos) se
tienen en cuenta hectáreas representativas a escala mundial, normalizándolas teniendo en
cuenta la productividad de la superficie total del mundo, lo que da lugar a “hectáreas
internacionales”. En esos análisis por países, dado que el consumo incorpora la producción
doméstica más el saldo comercial (importaciones – exportaciones), la superficie ocupada
realmente en forma de huella puede exceder a la capacidad ecológicamente productiva
(biocapacidad) de ese mismo país (y por tanto se está ocupando en el resto del mundo). En ese
caso, si se extendiera la situación del país al conjunto del mundo, necesitaríamos una superficie
mayor que la de éste para garantizar la sostenibilidad. Se habla de “equivalentes en planeta” de
estos países, que en ese caso serían superiores a uno.

Los resultados que se obtienen a escala internacional para cada tipo de indicadores no son coincidentes,
lo que pone de manifiesto la importancia del enfoque escogido para evaluar la sostenibilidad.

Más información:

Sobre ahorro neto ajustado:

http://datos.bancomundial.org/indicador/NY.ADJ.SVNG.GN.ZS/countries?display=map

Sobre sostenibilidad como cuestión de escala:

http://www.footprintnetwork.org/content/images/uploads/Ecological_Power_of_Nations_ES.pdf
http://www.wwf.es/nuestro_trabajo_/informe_planeta_vivo/
http://www.footprintnetwork.org/en/index.php/GFN/page/glossary

You might also like