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fr a TEA Ediciones’ CPQ Cuestionario de Personalidad para Nifios (8-12 afios) R.B. Porter y R.B. Cattell MANUAL (78 edicién) PUBLICACIONES DE PSICOLOGIA APLICADA Serie menor ntim. 120 Publicado por TEA Ediciones, S.A., segtin acuerdo especial con el propietario original, INSTITUTE FOR PERSONALITY AND ABILITY TESTING (illinois, USA) que se reserva todos los derechos TEA Ediciones, S.A. MADRID, 2002 INSTITUTE FOR PERSONALITY AND ABILITY TESTING El disefio y construccién originales de la Forma A del Cuestionario CPQ son de Titulo original del test: ‘Childrens Personality Questionnaire, Form A, Parts Al and A2 (1963 Edition).” A.B. Porter (Universidad de Indiana) y A.B. Cattell (Universidad de Illinois). Adaptacién espafiola: Colaboracién técnica de ICCE Instituto Calasanz de Ciencias de la Educacidn (Isxacio Denoaiuce Secunoia) y del Departamento I+ de TEA Ediciones, S.A. (AGUSTIN Coadeno Panoo ¥ NicoLAs ‘SeisDEDOS CUBERO) Redaccién del Manual: NicoLss Copyignt © 1980, 1965, 1989, 202 by TEA Ediiones, SA, 12 de los tures dol ‘Copyright, uao las sanciones establec- Mid (Espa, das on ls yes, a rproiucin otal o parca d9 esa obra pot cual medio oztoceimienta, comprendis a reprogtatia y (SBN 84-7174- 730-8 eltratamient iniormeny la dstibucon de eempares deel Deopbsio legat: M- 42.454 -2002 madianealqul opréstam publens. FEdta: TEAEsielanes, SA; Fray Bematdino de Sahagén,2¢ - 26088 Maxi, (Copysght © 1959, 1969 by IPA, noi, USA, CGuodan rgurasamente prohibices, sila autorzacdn esr Print in Span. Impreso en Espa por inp. Casas; Agustin Calo, 47, 28049 Madd. INDICE INTRODUCCION ......... 5.055 1. DESCRIPCION GENERAL, 1.1. Ficha técnica....... ae 1.2, Naturaleza y finalidad del CPO. 1.3. Escalas del CPQ 2. JUSTIFICACION ESTADISTICA. 24, Estudios originales........06.c00e8 2.2, Adaptacion espafnola 2.3. Fiabilidad y validez. 2.4, Andlisis factorialas (dimensiones secundarias) . 3. NORMAS DE APLICACION Y CORRECCION........... 3.1. Insirucciones generalos 3.2. Instrucciones especificas . - 3.3. Correccién y obtencién de puntuaciones directas 4, NORMAS DE INTERPRETACION ...........000000005 4.1, Conversion de puntuaciones directas en decatipos. . 4.2. Elaboracién del perfil individual 4.3. Cuadros auxiliares para la interpretaci6n BARENOS cf reea 9) ce intone nia gene emo fuearasee 5. BIBLIOGRAFIA 6. INSTRUMENTOS COMPLEMENTARIOS DE EVALUACION oxy nn 25 25 26 29 32 INTRODUCCION Hace algunos affos se introdujo en Espafia el afamado, y no siempre aceptado, Cuestionario de Personalidad 16PF (del que ya existen publicadas tres Formas: A, B y C). Poco a poco el psicélogo espaiiol se va familiarizando con la teorfa de la personalidad de R. B. Cattell y su especificacién ea las escalas de sus cuestionarios. Es verdad que la terminologia que emplea, en cierto modo extratia en muestra cultura psicolégica, y la abundancia de escalas y Factores que presenta sorprenden y re- traen al usuario; tal vez estén mas acostumbrados a la simplicidad de la estructura de dos o tres dimensiones de Eysenck y continuadores. Esta multidimensionalidad de la estructura que ofrece Cattell es dificil de captar en una labor de diagndstico individual o colectivo; son muchos Jos facto- res ¢ interrelaciones a tener en cuenta, y exigen un esfuerzo y experiencia que probablemente se aleanza después de algtin tiempo de contacto con los resultados de los instrumentos de Cattell Se han publicado (TEA Ediciones, 8. A., 1981) los materiales y resultados de Ja adaptacién espafiola de Ia Forma A de otro cuestionario de Cattell, el ESPQ, para nifios de seis a ocho aifos; con ste se ha cubierto la aplicabilidad de sus instrumentos en la parte inferior del amplio abanico que cubren los cuestionarios de personalidad. El presente CPQ, para niflos de ocho a doce afios, se solapa con el anterior y viene a cubrir una zona inmediatamente superior de ese abanico de aplicabilidad; dicha zona es completada también ahora con la publicacién de 1a adaptacién espafiola del HISPQ, para sujetos de doce a dieciocho aos, que se solapa con el presente CPQ en su parte inferior y con el 16PF en su parte superior; de esta manera, los cuestionarios de Cattell (ESPQ, CPQ, HSPQ y 16PF, con igual estructura de personali- dad y casi idénticas escalas o factores) cubren una extensa zona de aplicabilidad que va desde aifios de seis afios hasta adultos de la tercera edad. En el presente instrumento, CPQ, la multiplicidad de las escalas de Cattell es de 14, 13 rasgos de personalidad y una escala de habilidad mental o inteligencia. Comparada su estructura con la del instrumento de Cattell més conocido, el 16PF, han desaparecido cuatro escalas (L, M, Qi y Q), y se han introducido dos nuevas: D (Excitabilidad) y J (Inhibicién), fruto de los andlisis factoriales de los autores en la personalidad de los niffos de ocho a doce aiios. Estas 14 escalas 0 factores de primer orden permiten obtener unos factores de segundo orden o dimensiones mis generales en la estructura de la personalidad, Probablemente, para el psicslogo que toma contacto por primera vez con los resultados de estos cuestionarios sea preferible comenzar la interpretacién por las dimensiones secundarias y pasar Iuego a incorporar en ellas Ia interpretucién de los puntos bajos y altos obtenidos en las escalas o factores primarios; aungue existen algunas divergencias entre la estructura simplificada de Eysenck y la complejidad de Cattell, en lineas gene- rales tienen bastantes semejanzas; por tanto, una vez que se ha captado Ia estructura de personalidad del sujeto o grupo en sus factores secundarios, es mds ffcil adentrarse en esa tica multiplicidad de escalas que ofrecen estos cuestionarios cattellianos. Sin embargo, no hay que olvidar que las puntuaciones obtenidas en los factores de segundo orden son sdlo estimaciones, es decir, son resultados de aplicar una férmula de regresién; ésta es valida en 1a muestra de tipificaci6n © andlisis y, por inferencia, en sujetos de caracteristicas simila- res, pudiendo presentar algunas peculiaridades (¢ incluso contrasentidos) cuando se aplica a un suje- to determinado. En estas situaciones paraddjicas, tal vez es preferible atender prioritariamente a la significacién de las escalas primarias, porque ese sujeto, probablemente, es un caso que se aleja demasiado de la estructura factorial de covariaciones que presentaba la muestra de estudio y en él la estimacién mediante la f6rmula de regresiGn tiene un mayor error. Aunque no definitivos, los estudios realizados en la adaptacidn espaiiola del CPQ son esperun- zadores. Se han analizado muestras bastante grandes y de sujetos procedentes de diversas partes del pats y, aprovechando toda la informaci6n recogida hasta el momento, se ha considerade convenien- te lanzar una primera edici6n que pueda ser ya utilizada por los psicblogos espaiioles y que permita especificar los sujetos de estudio, asf como recoger en el futuro informacién y contrastes sobre su aplicahilidad y resultados en diferentes entidades de diagndstico infantil. En los estuclios actuales se ha podido disponer de las datas y anilisis que, sobre varios millares de sujetos, ha ofrecido la colaboraci6n del ICE (Instituto Calasanz de Ciencias de la Educacién), en el que han trabajado varias personas: Arturo Arin, Valentin Azpilicueta, Ignacio Dendaluce, Narciso Garcia, M." Teresa Gomez, Luis Gonzdlez, Félix Iguacen, Melchor Ramirez y José Rioja. En su mayorfa, estos datos han sido analizados de nuevo, principalmente para definir la estructura superior de los factores ce segundo orden, determinar los pasos numéricos para su obteneién pricti- cay elaborar los baremos necesarios para la interpretacién de todas las escalas. N. SEISDEDOS Seccién de Estudios 1. DESCRIPCION GENERAL 1.1. FICHA TECNICA Nombre original: “Children's Personality Questionnaire (CPQ) Form A”. Autores: R. B, Porter y R. B. Cattell, Procedencia: Institute for Personality and Ability Testing (IPAT), Champaign, Illinois, USA, 1959. Adaptacién espaiiola: I.C.C.E, (Madrid) y TEA Ediciones, S.A. (Madrid). Administracién: Individual y colectiva. Duracién: Variable, entre 30 y 40 minutos cada parte (1.* y 2. sesién). Aplicacion: Ocho a doce afios de edad (aproximadamente, 3.° de Primaria a 1° de la ESO), Significacién: Apreciacién de 14 rasgos de primer orden y 3 de segundo orden de la personalidad. ‘Tipificacién: Baremos de escolares. 1.2. NATURALEZA Y FINALIDAD DEL CPQ Desde hace tiempo, psiedlogos y edueado- res han reconocido la’ necesidad de instru- mentos més adecuados y convenientes para evaluar la personalidad de los nifios en edad escolar; porque este drea, 1a escolar, junto con la de tipo clinico, han sido las dos principales esferas de aplicacion de tales instrumentos. La importancia de los tests de personalidad para el diagnéstico y tratamiento de los pro- blemas emocionales y de conducta, es obvia en una labor clinica. Y poco a poco se va reconociendo también su valor en las situa- ciones escolares; utilizados por el orientador, Jos instrumentos pueden tener una finalidad similar a la de la labor clinica. Por otra parte, en manos de un profesor © docente que domine la métrica de la personalidad, los resultados de estos tests aplicados a sus mis- ‘mos alumnos pueden asumir una finalidad ciferente: permitirén ampliar su comprensién de las necesidades de desarrollo personal de cada nifio, hacer més fable esta comprensién con el contacto personal y ayudarle a inter pretar los diferentes aspectos de la adap- taci6n escolar del alumno (por ejemplo, las discrepancias entre las aptitudes y el rendi- miento escolar) El centro escolar tiene actualmente, para bien o para mal, un papel principal en Ja vida emocional del nifio. En Ia medida en que los educadores se preocupen cada vez mis de que ese papel sea constructive, aumentard el reconocimiento de la necesidad de tests de personalidad que, aplicades colectivamente, puedan ser titiles (1). Para lograrlo, estos ins- trumentos deben medir dimensiones impor- tantes de la personalidad ¢ identificables en la ciencia psicol6gica, ser susceptibles de apli- cacién colectiva, ofrecer un miximo de infor- macién psicolégica en un tiempo minimo de aplicacién y ser econémica y objetivamente puntuables. El psicdlogo puede desear, en primer lugar, analizar el disefto del Cuestionario CPQ des- de la perspectiva del panorama de los tests existentes. Por lo menos en el drea clfnica, actualmente parece que se esté en el momen- 10 final del monopolio de los instrumentos de medida “proyectiva” y “profunda” y han sur- gido varias criticas sobre su fiabilidad, vali. dez y objetividad (véase el apartado 1.2. del Manval del ESPQ. TEA, 1981). Por estas razones, muchos psicélogos y educadores se han decidido a utilizar los cuestionarios para una evaluacién comprensiva de los factores de la personalidad; la investigacién ha mos- trado en muchas situaciones clinicas que estos instrumentos, aunque no estan libres de iertos sesgos, poseen unos valores que pro- bablemente les hacen ser cl tipo de test mas aplicable y dil; exigen pocos requisitos del examinador, ofrecen un sistema de puntua- cién facil y objetivo y pueden ser diseflados para evaluar una gran diversidad de atributos, A pesar de las fundadas virtudes del cues- tionario, hasta cl momento su principal desa- srollo se ha centrado en el area del examen de Ios adultos. El autor y colaboradotes han ela- borado nuevos instrumentos para otras eda- des: HSPQ (12-18 afios), el presente CPQ (1) Besta efectividad de los tests en los centros escolares depends (8-12 aftos) y el ESPQ (6-8 aftos). Los estu- dios realizados hasta el momento han mostra- do que, con unas pocas excepciones, la misma estructura de rasgos encontrada en los adultos (cuestionario 16PF) es aplicable y demostra- ble entre los nifios y adolescentes. Administrado en dos sesiones, con 70 ele- mentos en cada una, el CPQ es aplicable a escolares de 3.° de Primaria a 1.” de la ESO y, atendiendo a la personalidad del nifio y sus posibles problemas en esos cursos de la acti- vidad escolar, el test permite puntuaciones en catorce dimensiones de la personalidad, incluyendo el aspecto intelectual, en un tiem- po minimo de aplicacién (unos 35 minutos cada sesién) El CPQ puede resultar una evaluacién especial en relacién con la adaptacién de los nifios al final del primer ciclo de Primaria. Con ella el profesor puede comprender me- {jor las necesidades y predisposiciones de los alumnos de su clase y adaptar su actividad instructiva y disciplinatia a cada nifio; puede facilitar esa intuicién del docente acerca de los muchos pequeftos problemas de adapta- cién que inevitablemente surgen en estos ailos, asi como ayudar en su resolucién, pues- to que oftece algunas bases como punto de partida en la comunicacién entre padres y profesores. Para que este upartado no resulte demasia- do optimista, hay que afiadir algunas palabras de precauci6n. Fl instrumento no debe ser considerado como algo definitivo en su forma actual; es fruto de una adaptacién y, ademds, como en cualquier test psicolégico, sus pun- tuaciones pueden ser interpretadas de manera no valida. Habré que seguir estudiando sus resultados para Hegar a un cuestionario mejor construido, con una tipificacién mds extensa y especffica que incluya grupos especiales y que permita una medida més fiable y «il. noturalment, dela formceién y experiencia profesionales de los cedueadores. Al redactar este Manual se astime gue, en el futuro, los ecucedorescecibrsin una mejor Tormacion psicoldgiea 0 sein ayudados por psicdlogos escolares profesional. ns Las 14 escalas del CPQ apuntan a dimen- siones cuya naturaleza, funcionalmente in- dependiente, ha sido establecida mediante investigacién factorial. Sin embargo, cada una de ellas es mds que una escala factorial; representa un constructo que ha demostrado tener valor general como una estructura psi- colégicamente significativa dentro de la per- sonalidad; asi hay que entender, por ejemplo, la Fuerza del superego (escala G), la Do- minancia (E), la Estabilidad emocional o fuerza del yo (C) o la Surgencia del tempera- mento (F). Es necesario subrayar la abundante investi- gecién que ha servido de base para Ia cons- truccidn de este instrumento de evaluacién de la personalidad, porque todavia se publican algunos cuestionarios que no tienen mis bases que comelaciones empiricas de los ele~ mentos con unos criterios de valoracién, son un aprioristico disefio de “mesa de despa- cho” con unos elementos de validez “aparen- te” para medir unos “rasgos” arbitrariamente definidos. En el primero de los casos (corre- laciones con criterios de valoracién), 12 vali- ESCALAS DEL CPQ dacién tiene una objetividad aparente, pero implica un error circular, puesto que el “ras- go” evaluado no tiene un estatus seguro en la estructura de la personalidad, y las valoracio- nes contienen mis errores subjetivos que las mismas respuestas a los clementos que se intentan validar, Las 14 escalas aluden a variables psicolégi- as que han sido aisladas factorialmente; cada factor representa una dimensiGn estadistica- mente separable en el conjunto de respuestas al cuestionario, Cuando las escalas se constru- yen asf, necesitan mucha investigacién poste- rior para identificar las aplicaciones prifeticas de cada una de clas. Las descripciones que vienen a continuacién resumen esas implica- ciones; en cada escala 9 factor existen dos polos, y el que aparece a Ja izquierda corres pond siempre a las puntuaciones bajas en el mismo. No se han inluide aqui los nombres técnicos (Afectotimia, Dominancia, Surgen- cia, Parmia, Coastenia, ete.}, mas utilizados en la literatura factorial de las investigacione sino las adjetivaciones més populares y utili zadas en el lenguaje corriente FACTOR A Reservado, alejado, critico. Abierto, afectuoso, reposado, participativo, EL nio que puntda alto, generalments se caracteriza por ser abierto y social, ¥ el que puntia bajo por ser mi frfo y alejado. En esta época de la infancia, in diferencia entre ambos se pone particularmente de manifiesto en el grado en que el nifto responde favorablemente a la actua ién de los profesores y, en general, « toda la situaci¢n escolar FACTOR B Inteligencia baja, pensamiento concreto, Inteligencia alta, pensamiento abstracto. Una puntuacién atta indica un nifio “brillante”, répido en su comprensién y aprendizaje de las ideas, mientras que en el outo polo esté el nifio ms “cori de lento aprendizaje y comprensidn. Este factor es una medida muy simple de los aspoctos intelectuales y nunca debe reemplazar a una medida mas estable de cociente intelectual obtenida con otro test més apropinda, FACTOR © Afectado por los sentimientos, emocional- Emocionalmente estable, tranguilo, maduro, mente poco estable, turbable. afronta Ta realidad. El niffo con punuuscién alta se muestra con una relativa calma, parece estable y socialmente maduro, y esi mejor preparado para relacionarse con los dems, mientras que en el otro polo el no tiene menos tolerancia a la frustracisn ¥¥ 88 més propenso a perder el contral emocional. FACTOR D Calmoso, poco expresivo, poco activo, algo Excitable, impaciente, exigente, hiperactivo, “soso”, cauto. no inhibido, [Esta escala parece medi la tendencia a exhibir excitacién a una pequefia provocaciGn, o una hiperactivacion a dife- rentes tipos de estfmulos. La puntuaci6n baja parece describir al nifio emocionalmente placido, FACTOR E Sumiso, obediente, décil, acomodaticio, cede Dominante, dogmitico, agresivo, obstinado. facilmente. E| nitlo E+ es relativamente activo, dogmétice y agresivo, mientras gue en el polo opuesto este niio es mis décil [Ba esta época de Ia infancia, Ia probable expresidn de este factor es ms la conducta agresiva que una dominancia que tenga éxito, puesto que los nifios no han aprendido todavia las técnicas de manipulacién social. Un sujeto E= tiene a ‘menudo problemas de conducta, pero si su dogiatismo es manejado de modo que desarrolle una expresi¢n mis cons- tructiva, la adaptacién posterior del nifio puede tener mis Exito. FACTOR FE Sobrio, prudente, serio, taciturno. Entusiasta, confiado a la buena ventura, incauto. EL nfo alto en F es bastante eniusiasia, optimista y segura de sf misino, El bajo en F es més serio y se autodesa- prueba. Los estudios realizados parecen mostrar que el nifio F proviene en mayor proporci6n de un medio familiar ela tivamente seguro y carifioso, mientras que el ambiente familiar del nino desurgente F— estd mis caracterizado por una privacidn de afectos, FACTOR G Despreocupado o desitento con las reglas, Consciente, perseverante, moralista, sensato, acta por conveniencia propia, con poca fuer sujeto a las normas, con mucha fuerza del za del superego. superego. La escala parece reflejar el grado en que el nifio hi incorporado los valores del mundo de los adultos. ca dela infuncia tiene especial importancia la valoracién que da él a su rendimiento cn la situaci6n escolar. esta épo- 10 FACTOR H Cohibido, timido, sensible a la amenaza. Emprendedor, socialmente atrevido, no inbi- dido, espontineo, Junto con ta escala A, este factor H es un componente de la Extraversién-Inuroversién, y se expresa en diferentes sridos de sociabilidad, Mientras que el A+ es sociale en el sentido de que muestra una sespuesta emocional positiva a las personas, el H+ lo es en el sentido de que se relaciona libre y airevidamente con los dems. El nifio H- es més sen- ible, se amedranta facilmente y, mediante el alejamiento, intenta evitar la amensza y excesiva estimulacisn sociales. FACTOR I Sensibilidad dura, rechazo a 1as ilusiones, Sensibilidad blanda, impresionable, depen- realista, confianza s6lo en si mismo diente, superprotegido, Los resultados de los estudios sefialan que el modelo de personalidad asociado con el pola alto de esta escala es un tipo de sensibilidad fomentada por la superproteceién, Consecuentemente, un nifio 1 tiende a mostrar una mayor depen: jencia (temerosa evitacion de la amenaza fisica y simpatia por las necesidades de Jos demas), que la que muestra el nino TE, que es mis independiente y de “piel dura”. FACTOR J Seguro, le gusta 1a actividad en grupo, activo, Dubitativo, irresoluto, reservado, individua- vigoroso. lista, no le gusta actuar en grupo. | nifo con puntuaciGn alta tiende a ser individualista, motrizmente reprimido, erftico com los cemis y desprecis= tivo, mientras que el niflo J~ es mas libremente expresivo y activo, asi camo poco critico. FACTOR Sencillo, natural, franco, sentimental Astuto, calculador, prudente, perspicaz. Entre los adultos, el sujeto N+ se describe como socialmente reeeptivo y habilidoso, realista y oportunista, mien- tras que el N= es més Ilano, sentimental y tompe socialmente. La expresién especitica de este fuctor en los nifios parece menos claramente definida. Sin embargo, Ia puntusci6n alta seflala ese sujeto que ha capiado mejor los modos de los adullos ¥ de sus compaiieros y, consecuentemente, persigue sus propios intereses mejor que cl nifilo N=, aunque ello no quiere decir que resulte mas maduro, FACTOR O Sereno, apacible, confiado, seguro de sf. Aprensivo, con sensacién de culpabilidad, inseguro, preocupado, turbable, con autore- proches. Esla escala mas directamente relacionada con una zozobra subjetiva manifiesta, y entre los adultos ese) factor que mejor diferencia a los neurdticos de los normales. La reaccign de aprensividad del sujeto O+ se podifa earacterizar de diferentes modos:iritablidad, ansicdad o depresién, segtin Jas situaciones, u FACTOR Q Menos integrado, relajado, sigue sus propins Mis integrado, socialmente escrupuloso, necesidades, descuidado de las reglas socia- autodisciplinado, compulsive, control de su les. autoimagen. En Jos adlultase! factor sefiala los sujetos que tienen mucho control de sus emociones y de su conducta en general, EL Qo indica despreocupaci6n por el control de los desens y por Ias demandas sociales. Un nitio Qe podria, por ejem= plo, tener mis problemas con las noras escolates, no con una intencién deliacuente, sino por despreocupacién y neali- FACTOR Q: Relajado, tranquilo, pesado, sosegado, no Tenso, fiustrado, presionado, sobreexcitado, frustrado. inquieto. Entre los adultos, esta eseala se zelaciona con muy diferentes conductas sintométicas que generalmente podrian cexplicarse en términos de “tensidn nerviosa’’o impulso no descargado. El niflo Qt se siente frustrado y puede mostrar inritabilidad o mal humor; ol nito Qu-, polo relajado de la escala, parece reflejar un tipo de compostura que hace fic la sociabilidad. 2. JUSTIFICACION ESTADISTICA La edicién original americana del Manual acumula informacién y andlisis con la Forma A del CPQ (normalmente junto con los estudios de Ia Forma B, no editada en espaiiol). En los estudios espafioles realiza- dos hasta el momento se han obtenido ya 2.1, ESTUDIOS ORIGIN En su formato actual, los elementos estén ordenados segtin un modelo cfclico conside- rado 6ptimo desde dos puntos de vista. En primer lugar, la vatiedad de contenido de las catorce escalas hace que la tarea del nifto resulte mds interesante. En segundo lugar, la ordenacién actual hace més conveniente y ffeil la oblenciGn de las puntuaciones me- diante una plantilla de correccién. Los ele- mentos que puntiian en cada escala estén indi- cados en el cuadro auxiliar A, en el capitulo 4, inmediatamente antes de los baremos. Todos los elementos, excepto los de la escala B, tienen dos alternativas. En el cues-~ tionario para Jos adultos (16PF) existe una tercera altemnativa, de “compromiso”, para aquellos sujetos que consideran inaplicables a sus sentimientos los dos extremos de respues- ta propuestos. En el CPQ sélo hay dos alter- nativas de respuesta, puesto que el niflo no es capaz, como el adulto, de un uso equilibrado de la alter iva media, Es una “realidad” psicométrica que, en general, los cuestionarios son mds propeusos a los efectos de Ja distorsién, tanto por un intento deliberado de enmascaramiento como por unos agentes motivacionales subcons- cientes, Sin embargo, la erftiea de que esto destruye completamente el valor de la medida muestras suficientes y se espera poder ampliarlas en el futuro. En los aparlados siguientes, se resume la informacién estadis- tica original y la obtenida con sujetos espa- fioles, y en el capftulo 4 se presentan los haremos elaborados. ALES mediante cuestionarios es injustificada. Bn la construcciGn del CPQ se tuvo esto en cuenta para minimizar esta fuente de error de medi- da, Por ejemplo, las cuestiones se redactaron de modo que fueran todo lo més “neutrales” posibles en relacién con 1a deseabilidad social. Ademas, se ha equilibrado el némero: de respuestas de acuerdo y en desacuerdo que puntian en cada escala, para eliminar los efectos de la aquiescencia. Ova estrategia, tal vez técnicamente mas ignificativa, consistié en elegir al final aque- los elementos que tvieran poca “validex aparente”, pero mantuvieran su capacidad disctiminativa del rasgo que intentan medi No obstante, esto no es una importante medi- da de preveneién en el caso de los niffos, por- que les falta esa sofisticacién que les eapacita para definir cudl es la “buena imagen”. Sea como fuere, hay que subrayar que es el aplicador el que tiene la responsabilidad de reducir los efectos de la distorsién a un mfni- mo; debe lograrlo haciendo que todos los nifios se sientan confortables y exista un buen lima durante toda 1a aplicacién; mds impor- tante atin, debe captar la cooperacisn de los nifios y lograr que contesten con sinceridad a todas las cuestiones. En cuanto a las caracteristicas psicométri- cas del CPQ, lo que muchos psicdlogos deno- minan fiabilidad, Cattell lo identifica mejor como consistencia. Este término comprende diferentes enfoques de estimacién de la varianza verdadera de un test. Asi, especifica- mente, se pueden obtener medidas de: 1) fia- bilidad, que incluye la dependencia (correla- ciones test-retest con intervalo pequefio) y la. estabilidad (correlaciones test-retest con intervalo grande); 2) homogeneidad (consis- tencia interna); 3) equivalencia (correlaciones interformas). La tabla 1 ofrece indices (en centésimas) tanto de la fiabilidad como de la idez del cuestionario. En la primera fila de indices de la tabla 1 se presentan los coeficientes de dependencia calculados en una muestra de 88 varones (V) y mujeres (M), con intervalo de sGlo dos dias entre test y retest. En Ja segunda fila de la tabla 1 se recogen los coeficientes de homo- geneidad obtenidos en una muestra de 124. V + M, calculados segiin la formula KR20 (Kuder-Richardson); idealmente estos indices deberfan ser bajos 0 moderados, puesto que se ha tomado sélo una pequefia muestra del uni- verso total de conductas diferentes para cada rasgo o escala, y esto conlleva pequeiias inter- cortelaciones entre Jos elementos 0 étomos de conducta. En la tercera fila de la tabla se Tablat encuentran coeficientes de equivalencia obte- nidos correlacionando, en una muestra de 2.930 V + M, sus puntuaciones en a Forma A con las de la Forma B del CPQ, y estos in- dices corregidos con Ia formulacién de Spearman-Brown; en realidad, no son preci- samente coeficientes de equivalencia de la Forma A, sino infraestimaciones de Ia depen- dencia de A +B; con excepeidn de la escala J, sefialan una gran precisién cuando se utilizan ambas Formas. En cuanto a la validez, se construyen muchos tests con la finalidad de predecir algiin uspecto de la conducta 0 medir una tini- ca dimensién de la personalidad; la validez de estos tests seffala el grado de relacién entre lo especificamente medido y lo que se ha inten- tado medir. El CPQ, como los cuestionarios hermanos suyos aplicables en otras edades, es un test de medida multiple y simultanea de muy diferentes aspectos de ix personalidad, y puede ser dtilmente aplicable en la prediccién y medida de muy diferentes situaciones. A causa de esto, y también porque no tiene una larga historia de aplicaciones practicas, el cuestionario no puede presentar una informa- cién de validez. conereta, Sin embargo, es mas importante la relaciéin entre lo que el instrumento mide y alguna hipGtesis de un constructo referido x la estruc- Fiabilidad y validez del CPQ Forma Ay estadisticas basicos ate[c[o[e[rl[e[ul[i[s[ulolala Dependencia ....| 59 | 72 | 47 | 67 | 67 | 70 | 66 | 58 | 72 | 89 | 70 | 60 | 61 | 56 Homogeneidad..| 51 | 37 | 62 | 58 | 53 | 60 | 59 | 52 | 68 | 25 | 40 | 45 | 55 | 41 Equivalencia.....| 53 | 67 | 67 | 68 | 61 | 67 | 57 | 63 | 67 | 43 | 64 | 65 | 70 | 68 Validez ss | 82 | 73 | a3 | 33 | 91 | 72 | 64 | 69 | 65 | 52 | 68 | 79 | 76 qatavelt 65 |69| 60) 46) 54) 56] 59) 56/32) 37| 38] 41] 56) 44 SRY 18] 20} 20] 23 | 21| 19 | 19 | 1.9 | 22| 18 | 21 | 22| 24| 22 eae 69] 7,3] 62] 39] 35 | 28| 76 | 55/65 | 38] 26] 43] 7.1) 39 420M oy 49] 1.9 | 20 | 22 | 18 | 1.9 | 4.9 | 1.9 | 22 | 19 | 19 | 22 | 24 | 22 14 tura de la personalidad. Se construyen muchos tests sobre unos fundamentos estri tamente empiricos, ¢s decir, sin una orienta- cién tedrica; su utilidad es extremadamente limitada, porque su aplicabilidad s6lo se refiere a un ctiterio, Muy distinta ha sido Ja construceién tedricamente basada del CPQ; sus escalas son relevantes en una hipétesis de Ia estructura de la personalidad, y su validez vendiré a indicar tanto la bondad de la hipéte- sis como la adecuacién de la medida de cada consiructo introducido en la hipétesis; es una validez de concepto (0 de constructo). El pro- ceso para obtener estos indices es bastante complejo y surge de las técnicas del andlisis factorial, lo cual no puede ser explicado en las paginas de este Manual, No obstante, cada Coeficiente puede ser considerado como una correlacién media entre un grupo de elemen- tos y el factor que, en su conjunto, intenta medir, Con unos términos mas precisos, esta es una validez directa de concepto. Los resul- tados obtenidos con Ia Forma A del CPQ se allan en la tiltima fila de la tabla 1. En la base de Ia tabla 1 se encuentran los estadfsticos basicos de varones (V) y mujeres (M) de la muestra de tipificacién original. El lector puede utilizarlos para examinar las diferencias intersexos (en origen y en Ia adap- tacién) e interculturas (cuando se analizan las diferencias entre éstos y los estadfsticos que incluyen los baremos espafioles). 2.2. ADAPTACION ESPANOLA. Fruto de Ja colaboracién con el ICCE (Instituto Calasanz de Ciencias de la Edu- cacidn, Madrid), se ha dispuesto de dos mues- ‘vas generales: una compuesta por 7.151 casos (3.372 V y 3.779 M) en una primera fase, y otra de tipificacién, con 5.058 casos (2.667 V y 2.391 M), en una segunda; en ambas se ha tomado el 5.° curso de EGB como entidad representativa del dmbito de aplicabilidad en a que realizar los anzlisis y obtener los resul- tados que se presentan a continuacién. La primera fase fue realizada en 1976 por Quintina Martin-Moreno a partir de la edicion original de 1963, con datos procedentes de un 80% de Jas provincias espafiolas. La segunda fase ha sido levada a cabo por Ia Seccién de Estudios de TEA Ediciones, S.A., recogiendo los datos recientes del ICCE y las Gitimas publicaciones de Cattell y colaboradores. En sus inicios (entre 1970 y 1972) se pre~ paré y depuré la redaccién de un primer ins- trumento que ha sido aplicado durante este tiempo a gran niimero de nifios de muy diver- sas partes de Espaita, Con los resultados de miles de alumnos del curso escolar 1975-76 se ha llevado a cabo (Q. Martin-Moreno, 1976) una investigacién de tipo correlacional y factorial de las catoree escalas del CPQ. Posteriormente, se tomé otra muestra de alumnos del curso 1979-80, y la Seccién de Estudios de TEA Ediciones empleé una metodologia similar, incluyendo el andlisis de distribuciones y promedios, variabilidad y correlaciones, asi como diversos andlisis fac- toriales, para disponer los resultados de forma que pudieran ser wtilizados por los aplicado- res del CPQ en su labor préctica. Aunque en este proceso se ha intentado, primordialmente, conservar los valores diseri- minativos del Cuestionario para las aplicacio- nes priicticas, se ha seguido una metodologia que pudiera reproducir y comprobar también en muestra cultura el esquema y modelo de personalidad que proponen los autores (Porter y Cattell), No obstante, una adaptacién y tipi- ficacién no terminan nunca y seran necesarios 15 nuevos andlisis y estudios para conocer mejor el instrumento y su aplicabilidad En la publicacién biisica original del CPQ Handbook”, IPAT, 1972), se sefiala que existen diferencias claras en cuanto a la edad y el sexo y se aconseja Ia existencia de bare- mos separados para cada sexo (y en algunas escalas para la edad si el intervalo es de varios afios). Estas diferencias en estudios america- nos (sobre una muestra de 2.834 V + M) muesttan que las mujeres son més abiertas (A+), sensibles (4), conscientes (C+), apren- ivas (O+) ¢ imtegradas (Q+), mientras que los varones destacan por ser mas dominantes (E+), excitables (D+), entusiastas (F+) y ten- sos (Q:+). Estos resultados concuerdan con Jos hallados en otros estudios; ocho de los catorce factores del CPQ (A, B, E. F, G, I, N yO) son consistentes con los hallazgos de diferencias intersexos en otros instrumentos cattellianos (ESPQ, HSPQ y I6PF); en térmi- nos de factores de segundo orden se observa que las nifias son menos ansiosas y més extro- vertidas que los nifios, pero al egar a la pubertad se vuelven mds introvertidas y ansiosas. En los estudios espafioles (con una muestra total de 11.468 V + M) se encuentran resulta- dos parecidos. En un grupo de 3.095 Vy 1579 M, éstas destacan con I+, O+ y Qu, mientras que los varones sobresalen por st Et, P+, Ht y Ne. Las muestras son muy grandes, lo cual hace que pequeiias diferencias en puntuaciones directas sean pronto significativas al N. c. del 1%, aunque también es verdad que en ellas Jos promedios empleados (M) son mucho mas estables y significativos de los promedios verdaderos (Ms) de la poblacién, Con esta sale vedad, y cuando se toma la muestra total espaiiola, se puede afirmar que, en general, cada sexo presenta unas caracteristicas: 16 a) Los varones son més reservados, domi- nantes, entusiastas, duros, astutos, sere nos, descuidados de reglas y relajados. 4) La mujeres son mas inteligentes, abier- tas, sumisas, sobrias, cohibidas, sensi- bles, sencillas, aprensivas, integradas y tensas. En un estudio difereneial interculturas se observa que los nifios espaiioles (comparados con los americanos de su mismo sexo y edad aproximada de once ajios) son A~, B+, C+, BFL, Ho, J+ y O-, mientras que las nitias espafiolas son A-, B-, C+, D+, E+, G-, He, 1, J+, Q- y Qet en relacién con las nifias americanas. Aungue e] Cuestionario CPQ ha suftido las modificaciones naturales de una adaptacin y ya no es exactamente el mismo instrumento, el lector podrfa tomar los pro- medios espafioles de las tablas de baremos, transformarlos en decatipos a partir de los estadisticos basicos americanos ineluidos en la tabla | y elaborar el perfil caracteristico de los nifios espaftoles Finalmente, en los andlisis de las muestras existentes, al lado de Ios miles de sujetos de 5° de EGB ya citados, se dispuso de dos muestras, una de 4.° de EGB con 351 casos, y otra de 6.° de EGB con 400 casos; en las dos habia sujetos de ambos sexos. Como es sabi- do, la variable curso escolar est muy relacio- nada con la edad, pero, probablemente por la pequefia amplitud del émbito de aplicabilidad del CPQ, no parece que esta variable provo- que diferencias sustanciales, puesto que en ninguna de las catorce escalas (excepto, natu- ralmente, la de inteligencia o factor B) se observan aumentos o disminuciones sistema- ticos. Por estas razones, los anilisis se han continuado con ese curso central de la aplica- bilidad, 5.° de EGB, y Ia tipificaci6n y bare- mos se han referido a esa entidad escolar. 2.3. FIABILIDAD Y VALIDEZ En los estudios de adaptacién espaitola no se han realizado atin estudios de fiabilidad del Lipo de los indicados en el apartado anterior y cuyos resullados vienen resumidos en la tabla 1. A partir de los resultados encontrados en los anilisis ya realizados, se puede estimar que los indices de fiabilidad que se obtengan en el futuro con sujetos espavtoles seriin similares a os encontrados en nifios americanos. Una de las caracteristicas del CPQ que inte- resa conover al psicdlogo que utiliza en la prictica el Cuestionario hace referencia a las errelaciones existentes entre las miiltiples escalas © puntuaciones que presenta; esta informacién permite unas notas adicionales sobre su naturaleza y caracterfsticas. La tabla 2 presenta en centésimas estos indices en dos muestras de varones (en la mitad superior derecha del cuzdro, con 3.095 y 2.667 casos, respectivamente) y dos de mujeres (en la mitad inferior izquierda, con 1,579 y 2.391 casos, respectivamente); ambus muestras son de alumnos de 5.° curso de EGB de muy Tabla 2 Intercorrelaciones de las escalas del CPQ (muestras espatiolas) esata | al e|clolelri[e[u[i[v|[n[oleala] A 14| 39|-27|-09] 03 | 27| 36 | -o0 | -22 | -20| -s5 | 26 | -24 os} 40| -35| 13] -01 | 28 | 36 | -00 | -31 | -25 | 39 | 26 | -20 B 09 17| 04} 04] 04| 09 | o4| o2| o1|-06}-07 | 09| 08 7 48 | 00] -0 | -07 | 09 | -o1 | -03 | 01-12) -11 | 05] 03 c | 4] 10 28 | -02| 14 | 28 | 37 | -05 | -29 | -17 | 49 | 24 | -27 40| 13 -32|-07 | 06| 30| 34] -03 | -2 | -26 | -51 | 28 | -30 bd |-29| 1] -28 32| 12| -a7 | -34| -09| 34] a8] 37 | -36| 47 40 | 03 | -32 29 | 12 | 41 | -35| -08| 35] 33] 37 | -a7| 47) Ee |] 13]-02] 35 as | a3 |-06 | -34| 11] 30] 10|-36| 34 15 | 08 | -00| 34 32| -30|-06 | 85] 08] a2] 10|-36| 25 F o2| | 14] 21] 50] ~1o| 14] -38} -08} 21 | -07 | 1} 11 00} 08] 17) 11} 40] 18 | 11] -32| -11| 19| 08 | 16] o7 | @ | 20] -c2| 27 | —44 | -25 | ~20 a7 | 22} -17 | 35 | 24 | 44} -41 29-01] 27 | 43 | 34 | 14 23 | 14] -23 | 26 | -a2 | 39 | -41 h | 36] 03] 38] -32| 02] 10] 27 ~08 | -36 | 18 | -26 | 24 | -s2 3a | o7| 40| -37 | -07| 09 | 26 -09 | -30 | -23 | -40 | 28 | -33 1 07 | -05 | -01 | -18 | -49 | -51| 28 | -05 or | 23 | 06 | 31 | -10 | o7 | -05 | 01 | 16 | -45 | 44] 23 | -03 os|-21| 04 | 26 | -08 J | 34} -02 | -33] 38) 04) 12) 22] 38] 11 24 | 35 | 23] 34 35 | -06 | -36 | 39 | 04 | -13 | -25 | a2 | 08 22| 36|-25| 36 nN | -26 | -09 | -22 | 41 | 41| 26 | 6 | -21 | -34 | 24 26 | -41| 40 | -32 | -05 | -23 | 39] a5] 17 | -41 | -27 | -27 | 26 27 | -42 | 36 o | 42] -10] -48| 36] 12] +05 | -31 | 0 | -04 | 38 | 28 -22| 35 ~#3| -14| 55 | 40] 18] -07 | -24 | -43 | -06) 38 | 30 26 | 32 34 | -02| 30| 45 | -37 | -19] 50] 27] 33] -2e | -48 | -28 2 ar | -o2| 30/45 29 | 43] 49 | a1) 25 | “a1 | 4s | a5 43 -30| 10|-28| 55) s6| 21|-s1|-sz|-22| a4] 48] a7 | -31| 05|-31| 53| 31] o8|-19|-38 | 15 | 37| 40] 37 | -s0 a7 diversas partes de Espaiia. La similitud entre los indices de las dos muestras de cada sexo indica la estabilidad de las interrelaciones de Jas esealas; sin embargo, al buscar diferencias intersexos se observan algunas particularida- des muy caracteristicas. Asi, por ejemplo, es curioso encontrar que entre las nifias son esta- disticamente mas significativas las interrela ciones entre los rasgos que Cattell denomina Dominancia (E), Surgencia (F) y Premsia (D, 5 decir, entre las nifias hay una mayor ten- dencia a que las dominantes (E+) sean tam- bién entusiastas (P+) y de sensibilidad dura (D), 0 viceversa, asi como que las entusiastas, (P+) son también duras (I), aunque estos indices no permiten sefialar cudl de los rasgos ¢s la causa y curiles los efectos. A nivel de fac- tores de segundo orden, los tres rasgos y con 808 signos puntiian en la dimension que se ha denominado Excitabilidad 0 Dureza, aunque E-e I~ también ayudan a definir la dimensién de Extraversi6n, y F- la de Ansiedad. 2.4, ANALISIS FACTORIALES (DIMENSIONES SECUNDARIAS) ‘Las catorce escalas del CPQ, conglomera- dos © paquetes de elementos contestades en una determinada direccién y moduladas me- diante Ie introduccién de alguna variable con- siderada importante (como el sexo, la edad 9 el curso), han sido sometidas a diferentes anélisis factoriales. Se ha partido de aceptar aprioristicamente la direccién o alternativa propuesta por la plantilla original de corree- cién, con la cual se han obtenido las puntua- ciones directas de los sujetos en esas catorce escalas, En los anilisis realizados en 1975-76 se utilizaron las matrices de intercorrelaciones de cada sexo que aparecen en la primera linea de las casillas de la tabla 2: los estudios leva dos a cabo posteriormente han erpleado tas matrices de intercorrelaciones que se inclu- yen en la segunda linea de las casillas de la tabla 2 (2.667 varones y 2.391 mujeres, alum- nos de $.° de EGB); los estadisticos basicos de estas dos tltimas muestras son muy simi- lares a los que presentan las tablas de bare- mos, porque estos mismos sujetos han sido utilizados para la elaboracién de los decatipos junto con otras mnesteas, Las matrices de intercorrelaciones citadas han sido factorizadas mediante saluciones oblicuas (que permiten a las dimensiones definidas quedar relacionadas si asf Jo piden, 18 os datos), y con diversos procedimientos de rotacién: componentes principales, factores principales y de méxima verosimilitud; 1a rotaci6n final aceptada a sido la de factores principales. En los estudios originales, con una muestra de 300 V + M escolares de 4.” grado y de comunidades rurales, se han definido los cuatro ya clisicas factores de segundo orden de Cattell: Extraversin (A+, E+, Ft, Ht y Qe), Ansiedad (C-, D+, F+, G-, H-, 0+, Qe y Qe+), Dureza (A-, E+, G-, Ht, ry Qe-)e Independencia (C+, D+, E+, Ft, J+, N-, O+ Qst y Qrt}. Aunque entre los adultos, las publicaciones originales de los instrumentos de Cattell consideran_independientemente ambos sexos en el tratamiento y obtencion de las dimensiones secundarias, en el caso del CPQ, tanto el Manual de Porter y Cattell como el “Handbook” publicados por la enti- dad IPAT, no distinguen entre varones y muje~ res. Por otra parte, en el citado Manual s6lo se informa de Extraversi6n y Ansiedad, por con- siderar que esos son mds pricticos en la labor de psicodiagnéstico, Sin embargo, en los estudios espaftoles se han mantenido separados ambos sexos, por- que presentan alguna peculiaridad a la hora de definir dimensiones secundarias; i, por ejemplo y en la practica, en el perfil de facto- Tabla3 Saturaciones y pesos factoriales del CPQ Saturaciones factoriales Pesos factoriales | Escalas Varones Mujeres Varones, Mujeres Hpoepo tee fp Po pe Ppa Po fa A | -49] 14 | 02) 36] -68) 07] 10] 40} -16] 05] 01] -18] 03 | -02 Bo | -25 | -21 | -06 | 43 | -23 | -11 | 01 | 14 | -08 | -08 | -03 | -07 | -03 | ot | G9} -01) 01) 47 | -64) 04} 08] 48 | -28| -00} 02] -24| 02 | o7 D 17 | 52] 13) 45] 38] -35] 12] 53} o7|-22] 05] 12| -16| 04 | E | -00/-19] 88) 41} 05} -21] 58] 51 | -o1 | -06] 29} -03} 10} 31 F | -10/ 02) 54| 30] -05] 05] 66| 43 | -o4| 02] 24] -08 | 00 | 30 G | -20| 34|-26| 37 | -02| 64] 07 | 45 | 06] 12] -11| -02| 20 | -5 H | -40| 30] 15] 39] -s5| 12] 09] 20 | 415] 12] 09 | 16] 05] 07 1 02 | -09 | -62) 37] -00] 07 | 67] 49 | o2| -05| -30| 02] 04 | -35 | i 26 | 42] -18) 36) 44 | -22| -20| 40 | 10] -16 | -10| 13 | -07 | -11 | N 21/26) 35] 36 | 15|—44| 20] 39} 07 | -09| 15] 06] -13] 09 ° 11 | -03 | -03 | 52) 72|-01| o7| 53 | 32|-02| -04| 28 | -02 | 00 Q@ | -17 | 35} -a7 | 43 | -05 | 69 | -06 | 54 |-05| 14| -18] -05| 29 | 08 Q | 03 | -68| o7| 51 | 1 | -66| -06| 58 | 01 | -33| o2| 04 | -27 | 02 % t2| 1] to] a] sa] 13] 10] 45 [ 228 ase | 490 | 638 | 655 | 196 res de segundo orden impreso al dorso de la Hoja de respuestas, la Dureza de las mujeres da més peso que la de los varones a F+ (Surgencia) y a IL (Harria o sensibilidad dura). Ademis, aunque en Ios andlisis facto- tiales se han legado a determinar cuatro dimensiones, las soluciones que se proponen a continuacién s6lo incluyen las tres prime- ras, porque la cuarta (Independencia) no se presenta tan consistentemente como en los estudios de muestras de sujetos de mayor edad con el HSPQ 0 16PF. La tabla 3 presenta, independientemente para cada sexo, las saturaciones factoriales de la solucién rotada en las tres dimensiones: 1 (Ansiedad), II (Extraversi6n) y III (Exe bilidad/Dureza), asi como las comunalidades (h? ) de cada variable, es decir, el cuadrado de su cortelacién con todos los fuctores; en Ja base se encuentran los porcentajes de varian- za total explicada por cada factor y pot el CPQ (debajo de los h’) (2), En la mitad dere- cha de Ta tabla 3, separada por una doble linea vertical, se encuentran los pesos factoriales de cada variable para estimar el decatipo de un sujeto en una dimensién a partir de los deca- tipos en las escalas; en la base se encuentran Jas constantes “a” a afladir en ta formula de regresiGn para estimar dicho decatipo Dien la dimensiGn I con los pesos Ki a Kn de la tabla y los decatipos D: a Ds en las catoree escalas de personalidad; es una f6rmula del tipo de: Di=KiDi + KD: +... + KuDa +a ‘Como es sabido, las puntuaciones factoria- Tes de un sujeto en las dimensiones secunda- tias no puede realizarse con las saturaciones factoriales presentadas en la mitad izquierda de la tabla. Ambas matrices de saturaciones (@e varones y de mujeres) deben ser transfor- ‘madas para hallar los pesos o coeficientes de (2) Estas tres dimensiones no son independiante; Ia rotacin Direct Quartiaén empleada presenta unas correlacioncsinterfactores dé ~0,59 cntre Ly Tl en ambos sexos, y de -0,24 y -0,36 entre ILy II en varones y mujeres, respectivamente; In eorelacisn entre Ty Uno es signiticativa, 19 ponderaci6n y calcular después 1a constante “a”, Excepto los porcentajes, todos los indi- ces de la tabla 3 vienen dados en cemtésimas, A modo de ilustracién de la obtencidn pric tica de las dimensiones secundarias se puede tomar un hipotético sujeto varén de 5.° de Primaria que ha obtenido en el CPQ las pun- tuaciones dicectas (PD) que vienen a conti- nuaci6n; inmediatamente debajo se ha tado los decatipos obtenidos consultando la tabla que se encuentra al final del Manual ano- escas [aleleclelelele|xl|s[s[nlolala PD 7 7lal2ls[slel2lz7][s]s][7]s Decatipo...| 7| 5, e]|3]2|5|4]7 | sleal2{3iz7|4 En ese hipoiético sujeto, su ExtraversiGn, factor II, vendrfa estimada a Dy (0,05) — 5 (0,08) ~ 3 (0.22) ~ 2 (0,06) +5 (0,02) +4 (0,12) + 7 (0,12) -5 (0,05) —8 (0,16) — 2 (0,09) — 3 (0,02) + 7 (0,14) —4 (0,33) + 8,58 = 7,06. Este decatipo del sujeto, 7,06, indica un significado alejamiento del promedio (5,50) hacia el polo extravertide de la dimensién Jntroversiéa-Extraversion. Los céleulos anteriores, sino se dispone de un proceso de mecanizaci6a, resultan algo engorrosos, sobre todo cuando se desean obtener los tres factores de segundo orden en una muestra grande de sujetos. La figura 1, dentro del apartado 4.3, muestra el procedi- micnto simplificado y grafico para elaborar un perfil general y obtener estos factores de segundo orden. Se han redondeado a décimas los pesos 0 coeficientes de la tabla 3 (con lo qe surgiran pequeiias diferencias con el pro- cedimiento numérico en centésimas), se han calculado de nuevo las constantes “a” y se ha climinado la coma decimal, por lo que el pro- cedimiento exige dividir el resultado final por 10 (en las tres casillas finales del grafico se ha inelnido ya una coma decimal). Este impreso, al dorso de la Hoja de respuestas, permitiré elaborar rapidamente un perfil general y obte- ner estimaciones de los fuctores de segundo orden, En el citado apartado 4.3 se ejemplifi- ca el mismo sujeto incluido en los pérrafos anteriores y se seffalan los pasos @ seguir. 3. NORMAS DE APLICACION Y CORRECCION 3.1. INSTRUCCIONES GENERALES, ELCPQ fue disefiado para empleo con gru- 0s, y se puede aplicar convenientemente en un aula de clase con 20 a 30 nifios. Nor- malmente, no ¢s aconsejable hacerlo a un gru- po mayor a causa de Ja dificultad de mantener un buen clima de examen y de supervisién. En consecuencia, e] mismo profesor, con una pequefia preparacién, podria aplicar el Cues- tionario a su mismo grupo de clase No es necesario subrayar que la aplicacién se puede hacer individualmente; en este caso, siempre que sea posible, se seguirin las mis- mas instrucciones que para la aplicacién en grupo, Una vez que el nifo ha comprendido cémo hacerlo, se le puede dejar solo y acudir cuando pida alguna ayuda. Cuando el CPQ se aplique individualmente a causa de algiin pro- blema especial (incapacidad lectora, ceguera, etc,), el aplicador seguird el procedimiento normal con este tipo de sujetos, leyéndole las cuestiones y anotando las respnestas en la Hoja de acuerdo con las contestaciones orales del n En la aplicacién e] examinador debe inten- tar por todos los medios mantener un buen clima y alcanzar una efectiva comunicacién. En cualquier situaci6n hay que asegurarse de que el nifilo conoce lo que tiene que hacer, més que intentar seguir rfgidamente unas ins- trucciones verbales. No es posible establecer un conjunto de instrucciones normalizadas que sean completamente adecuadas a todas las situaciones de examen con nifios; las que vienen a continuzcién se recomiendan como una normativa aproximada. Es muy impor- tante que él examinador recuerde en todo momento la tarea que espera del nifio, y esté preparado para repetir unas instrucciones para asegurarse de su comprensién. Debe estar preparado para solucionar y atender los muy. diferentes pequetios problemas que plantean 10s nifios, especialmente los més pequeiios Normalmente no es necesario explicar o repetir con otras palabras las cuestiones, por- que ya han sido disefiadas para estos nifios de edad escolar. Ademfs, es muy conveniente evitar estas explicaciones con los elementos de inteligencia (cuestiones 2, 16, 30, 44 y 58 en cada parte). Sin embargo, es permisible la repeticién de toda una cuestién o parte de ella, porque para algunos nifios es tal vez mas comprensible la audicién que Ia lectura de una frase. El Cuestionario se aplica sin tiempo limita- do, y con los nifios mas pequeftos tal vez serie preferible dividir la aplicacién en dos sesio- nes; el disefio actual del Cuadernillo y Hoje de respuestas permite estas dos sesiones apli- cando una parte en cada una, puesto que se presentan como si fueran dos entidades sepa- radas, En los exémenes con nifios no conven dria alargar una sesién mds alld de tos cin- cuenta minutos. La aplicacién del CPQ exige una Hoja de respuestas dividida en dos partes y con espa- cios destinados a los datos de identificacién y ejemplos de entrenamiento; el examinador debe estar familiarizado con el impreso, la forma de anotar las respuestas y 1 procedi- miento a emplear para eliminar y cambiar una contestaci6n; facilitarfa Ja tarea tener a mano una Hoja para aludir a ella en las explicacio- nes, En cada parte, los espacios destinados a las respuestas estin ordenados en cinco columnas que tienen que ser completadas de arriba a abajo antes de pasar a la siguiente; en cada columna hay espacios para catorce cues tiones y se van cortespondiendo exacta y correlativamente con las péginas del Cua- dernillo, lo cual puede evitar las contestacia- nes en espacios distintos al de su numeracién. Téngase en cuenta que en la fase siguiente, correcci6n y puntuacién, es muy dificil detec: tar con la plantilla estos errores de anotacién. Para la aplicaciéa es imprescindible que haya unas buenas condiciones de examen, sin interrupciones, y que los sujetos estén separa- dos para evitar que puedan comunicarse entre El examinador procuraré motivar a los sujetos para que pongan el maximo interés en realizarlo bien, y en la presentaci6n de las ins- trucciones utilizard una pronunciacién clara y pausada, 3.2. INSTRUCCIONES ESPECIFICAS Una vez repartides los Mépices y Hojas de respuestas, se pediré a los sujetos que anoten en la parte superior sus datos de identificacién; en algunos casos, probablemente, seré necesario entregat la Hoja con el nombre ya anotado o hacerlo en ese momento de Ia aplicacién, Mientras tanto, el exa- minador puede dibvjar en el encerado las letras y pequefios rectingulos verticales necesarios para los ejemplos de entrenamiento. Luego, repartiré los Cuadernillos, dejamdolos delante del ni portada hacia arriba, a la izquierda de la Hoja de respuestas, y diré: io con la «Ahora todos tenéis a la derecha una Hoja (MOSTRAR) para dar las con- testaciones y un Cuadernillo (MOSTRAR) a la izquierda. No abréis todavia el Cuadernillo y poned la Hoja a su lado, asé (DE FORMA APAISADA) para con- estar. No escribdis nada en este Cuadernilto y maread todas las contestaciones en Ja Hoja de respuestas. Ahora voy a leer ent voz alta, y vasotros en voz baja, las ins- irueciones de la primera pagina del Cuadernillo; atended bien y ast podréis lue- go contestar mejor.» Se leen las instrucciones de la portada del Cuadernillo con voz pausada, utilizando el encerado para indicar c6mo dar las respuestas y cambiar una contestacién, y se pide a los nifios que ellos to hagan en el espacio destinado a los Ejemplos en la Hoja de respuestas. Al terminar, y antes de dar la. orden de comenzar con la pagina siguiente, se les explica a los nifios la ordenaci6n en columnas de los espacios destinados a las respuestas y su equiparacién dentro de cada una de las pi Cuadernillo; asf podrin evitar desplazamientos a la hora de dar sus contestaciones. iginas del ‘Como todos los nifios (excepto los zurdos) tendrin la Hoja a la derecha del Cuadernillo, tal vez resulte conveniente pedirles que al comenzar metan debajo del Cuademillo Ja parte izquierda de la Hoja puesta en forma apaisada, de modo que pueda verse la primera columna de espacios destina- dos a respuestas; una vez completada, pueden meter esta columna debajo del Cuadernillo y pasar a contestar a 1a columna siguiente; con este procedimiento probablemente la tarea exija menos con- centracién del nifio en la tare meciinica de dar las contestaciones. Cuando el examinador se haya asegurado de que todos los nifios han comprendido la tarea a rea- lizar y les haya motivado para que lo hagan con sinceridad, puede dar la orden de pasar la pagina y comenzar a responder a las cuestiones, animéndoles a que no se entretengan demasiado en una cues- tién. Durante el examen, y sobre todo en los primeros momentos, conviene que el examinador com- pruebe que se siguen las instrucciones dadas y Ins contestaciones se van dando en la forma y lugar indicados. La mayor parte de los nifios completan una sesién o parte en poco més de media hora, pero siempre hay alguno que se retrasa y convendré animarie (no forzarle) a que lo haga mas deprisa. De modo general, para todo el grupo, a los veinte minutos del comienzo se podrfa decir en yor alta: «No os entretengdis demasiado en una cuestién; la mayoria de los mifios ha contestado ya a la pregunta 45%.» Cuando los sujetos vayan terminando, y para evitar que interrumpan a los que atin estén trabi Jando, se recoge su material (Hoja de respuestas, Cuadernillo y lépiz) y se les pide que salgan del aula, En la recogida se comprueba si se han contestado todos los elementos y anotado bien los datos de identificacién; en caso contrario habré que pedirles que lo hagan antes de abandonar el aula. En el caso de una segunda sesién para completar la segunda parte del CPO, las Hojas de respuestas pue- den recogerse 0 clasificarse de una manera que facilite la entrega en la segunda sesién. 3.3. CORRECCION Y OBTENCION DE PUNTUACIONES DIRECTAS Las contestaciones anotadas en la Hoja de Tespuestas se corrigen y puntiian con Ia ayuda de la plantilla de correceion. En la adaptacién espafiola se ha modificado el disefto de la Hoja y plantillas originales para que todo este proceso se reduzca a una sola Hoja y una sola plantilla, construida sobre material transpa- rente. La plantilla se colocard sobre ta Hoja de modo que el recuadro de Ja misma coincida con el existente en la Hoja, y en el margen izquierdo coincidan los asteriscos existentes en ambos impresos. A continuaci6n se procederg a obtener las puntuaciones directas en las escalas o factores (Aa Qo que en la plantilla ocupan una franja horizontal separada por Mneas claramente diferenciadas. Bn cada escala se concederd un unto por cada respuesta del sujeto que apa- rezea debajo de los cuadrados transparentes y su suma, en cada escala, se anotard en el espa- cio correspondiente del margen derecho de la Hoja. La puntuacién méxima en cada escala es de 10 puntos, 23 4. NORMAS DE INTERPRETACION 4.1. CONVERSION DE PUNTUACIONES DIRECTAS EN DECATIPOS Las puntuaciones directas abtenidas en la fase anterior no son interpretables por si mis- mas, no tienen significacién por su valor absoluto; es necesario transformarlas en unos valores o escala de significacién universal, Fsta transformacién se realiza mediante una comparacién con los datos 0 puntuaciones obtenidas por una muestra 0 muestras norma- tivas (y de algiin modo representativas) de la poblaciGn general a la cual pertenecen los. sujetos cuyas puntuaciones directas se preten- de interpretar. Las tablas construidas en la tipifieacién espaiiola permiten la conversidn de las pun- tuaciones directs en otras -denominad: decatipos (en inglés “stens”, s-ten, s = stan- dard y ten = diez), una escala tipica de 10 puntos que ha mostrado en la prdctica un gra- do bastante bueno en la diseriminacién de los resultados. Los decatipos se distribuyen sobre una escala de 10 puntos equidistantes en unidades tipicas (supuesta la distribucién normal), con tuna media en el decatipo 5,50 y una desvia- cién tipiea de dos decatipos. Asi, pues, los decatipos 5 y 6 se extienden, respectivamen- te, a media desviacién tipica a ambos lados de la media, y comprenden el grupo central de la poblacién, mientras que los extremos superior del decatipo 10 e inferior del decatipo 1 se encuentran a dos y media desviaciones tipicas a ambos lados de 1a media. Se puede, por tanto, considerar que los decatipos 5 y 6 son valores medios, 4 y 7 ‘muestran una pequefia desviacién (en una y ota direccién respectivamente), 2-3 y 8-9 indican una gran desviacion y 1 y 10 son valo- Tes extremos, entendiendo todas estas posicio- nes como relativas a la poblacién especifica sobre la cual se realiz6 la tipificacién En la tipificacién espafiola (N = 11.468 casos), dado cl pequeiio Ambito de aplicabili- dad del CPQ (8-12 afios), se ha buscado una entidad escolar representativa del mismo y de la labor prictica de los psicdlogos: el curso 52 de BGB (actual 5.° de Primaria), y en él se han conjugado los criterios de significacién estailfstica (diferencias intersexos significati- vas). Consecuentemenie, se ha tomado este curso 5.° como variable de aplicacién précti- ca, muy relacionada con Ia edad, y el sexo como variable diferenciadora de significacién psicoldégica. En cada uno de los sexos (5.574 varones y 5.894 mujeres) se han construido baremos para cada una de las eatoree esealas del CPQ, y los estadisticos descriptivos (media y desviacién tipica) de cada una se encuentran en las columnas finales de las tablas de baremos. En estas tablas, cada linea se refiere a un factor o escala ¢ incluye sus puntuaciones directas; en Ia cabecera y pie de enda colum- tna se halla el decatipo correspondiente, En algunas escalas, dada la pequefia variabilidad de las puntuaciones directas del CPQ, no han aparecido algunos decatipos; cuando esto ocurre en un extremo de la escala de decati- pos (1 6 10), se debe a una pequefta asimetria de las distribuciones, y en esa zona el instru- mento resulta menos discriminativo. Conviene seffalar que existen dos clases de decatipos: los t”picos (que normalizan la dis- tribueién a partir de Tos estadisticos descript vos del grupo, media y desviacién tipica), y Jos decatipos normatizados (que normaliza el grupo no sélo por sus estadisticas descripti- ‘vos, sino en todas los intervals de la distri- buciGn). Como ha mostrado la préctica en Este y otros cuestionarios de personalidad, existen algunas variables cuyas distribuciones no son simétricas, y puede ocurrir que los decatipos tipicos extremos no comprendan ningdn sujeto o se salgan de los dmbitos de la variable; esto no sucede normalmente con los decatipos normalizados, Todos los decatipos que presentan los baremos del CPQ son normalizados; no han sido obtenidos mediante una mera transfor maci6n “lineal” de las puntuaciones directas, sino que han sido fruto de una (ransforma- ci6n de tipo “superficial”, teniendo en cuenta el drea o frecuencia existente en cada uno de los intervalos de amplitud unidad de las dis- tribuciones; aun asi, en el caso del CPQ, como sélo existen diez puntuaciones directas para los diez decatipos, el decatipo extremo hha quedado vacfo. El lector interesado en estos problemas puede encontrar una detalla- da especificacién de {a elaboracién de un baremo en decatipos normalizados en el apartado 4.1 de la Monografia técnica del IOPF (Seisdedos, 1981), cuya tabla 21 ejem- plifica los célleulos. 4.2. ELABORACION DEL PERFIL INDIVIDUAL, Para una mejor interpretacidn de los facto- res de primer orden (escalas A a Q.), es con- yeniente elaborar el perfil individual del suje~ to (impreso existente al dorso de la Hoja de respuestas) y analizarlo teniendo en cuenta las descripciones recogidas en el apartado 1.3, (o cl resumen incluido como cuadro C en el apartado siguiente) y los resultados presemta- dos en el capitulo 2. En primer lugar, es necesatio anotar en cabecera los datos de identificacidn det sujeto y copiar en 1a columna correspondiente los decatipos obtenidos consultando los baremos con las puntuaciones directas en las catorce escalas de] CPO. El modelo del perfil de los factores de primer orden es independiente del sexo del sujeto (variable que ya se ha tenido en cuenta a la hora de consultar los baremos), pero en Ja interpretacién psicolégica del gré- fico sf es necesario considerar ésta y otras variables del nif. Si los valores de los decatipos se trasladan al grafico existente a la izquierda de los mis- ‘mos, s¢ puede dibujar el peril o linea quebra- da resultante. A su vez, si estos decatipos se 26 multiplican por los pesos impresos delante de las casillas © pequefios recuadros del gréfico de la derecha de la columna de decatipos, y sus resultados se yan anotando dentro de las sillas, se ha realizado ya el paso mas impor- tante (ponderacién de las escalas 0 factores primarios) para la obtencién de los factores secundarios descritos en el capitulo 2, y cuyos resultados pueden incluirse tambign en el gré- fico de la izquierda, en la parte inferior. La utilizaci6n de pesos diferentes para cada sexo tiene en cuenta las pequefias diferencias inter- sexos existentes a este nivel de la estructura de la personalidad. Para ilustrar lo indicado anteriormente, la figura 1 presenta un impreso de pertil cumpli- mentado con el ejemplo del hipotético sujeto utilizado en el apartado 2.4, varén de 5.° de EGB. Presentados con orden y aisladamente, Jos pasos anteriores y ejemplificados en la figura 1, son los siguientes: 1. Incluir los decatipos hallados (de acuerdo con el baremo correspondiente) en la columna destinada a ellos. “apjease oj 9p uorsusdutos sola fe ue s9jgewea se) eiuoweoliouel Anw ueayuept anb soujuupL S6UN UBD01j0 09 eUOWeONLN (4) +s eauoianes vaLL 144186! ‘i ys) oun exed jenueyy [9 9893]p8u09 “eojod sop [Ee ‘reina/ pepIIgeI>»-onmeIng | | 1 sri aiolelelaletela|s rc 3 a alii ECON e Pppasuy-asnly es 4 |") ‘osuay- opelojey ae 2/9 opeiBowa spw-somew | | £ |o| aie soos = [N lo g(r Samo onee | epvelg - #2MG PEPHIGISUAS ae oa STD So ain Torn BigeH9x3 - oFOW|ED 1859 - operayy eueUNeuO!OW eany = ofeg eu ‘ouigy -openoray noni] <|c0/ GO] jw/e lolz [— (4) NoIgaiwosaa Gsiouedss soipniea) NSGNO OGNNDss 2a SRHOIDVS Sogavose NB IWEaNSS Vauao oungunins CLEGG FAY voy Oda PE a Ts ye aaa 2. Multiplicar ef decatipo de cada escala por el niimero 0 peso anotado delante de las casillas existentes a la misma altura y debajo de los signos mas (+) y menos (-) de las tres dimensiones a estimar, y anotar el resultado dentro de esas casillas. Como se indica en la base del grifico, si el sujeto €5.un var6n, se utilizardn los pesos metidos dentro de unos pequeiios circulos; si mujer, se empleardn los otros pesos. na 3. Introducir en las casillas siguientes las constantes correspondientes al sexo del sujeto. 4, Sumar, independientemente para cada dimensién, los valores anotados en todas Jas casiflas de una misma columna, incl da 1a constante registrada en la base, y anotar el resultado en la casilla inmediata- mente inferior. Cada dimensién o factor secundario presenta dos columnas: una de valores positivos (+) y otra de valores negatives (-). 5. Obtener la diferencia entre las sumas de las dos columnas y anotar el resultado en. la casilla final. Como las ponderaciones vienen dadas en décimas y se ha operado con decatipos, el resultado final es también un valor decatipo en décimas; basta, pues, dividir por 10 (en el impreso se ha coloca- do ya la coma decimal) para tener ese decatipo en la dimensién correspondiente. 6. Trasladar estos valores finales al perfil de Ja iaquierda y proceder a la interpretacién de ambos perfiles (de primero y segundo orden) atendiendo a los cuatro puntos vientes: altura absoluta de las escalas; —pendiente o forma general del perfil; — variabilidad o dispersin de las crestas y valles; y —mayor validez y fiabilidad de los facto- res de segundo orden, es decir, el psics- logo deberfa comenzar por interpretar as dimensiones secundarias y pasar lue- go a considerar las diferentes escalas 0 factores primarios como una especifica- cin de los tres factores secundarios. El significado de las desviaciones en una u otra direccién, a partir del promedio, en estos fac- tores de segundo orden, puede definirse con las breves explicaciones siguiente: Puntuaciones bajas (1-3) Puntuaciones altas (8-10) FACTOR Q Ansiedad baja (Ajuste) El nino que puntia bajo suele encontrar que ka vida, os gratificante y que logra Tlevar a caho la que cree importante. Sin embargo, una puntuaciOn baja exirema puede indicar falta de motivacién ante las tareas difici- les, tal como ha mostrado el estudio de relacién entre Ja ansiedad y el rendimiento. Ansiedad alta El niflo que puntda alto se presenta Teno de ansie~ iad (en su sentido corriente), No es necesariameate un neursiico, pues la ansiodad puede ser ccasional, pero puede presentar algGn desajuste, como estar insatisfe- ccho con su posibilidad de responder a lax urgencias de la vida 0 con sus éxitos en lo que desea, En el extremo 8 umn indice de desorganizaci6n de la accién y de posi- bles altoraciones fisioldgicas. FACTOR Q, Introversién El nitio que punata bajo tende a ser reservadio,axto- suficiente ¢ inhibido en los contactos personales. Esto pede ser favorable 0 desfavorable, segin la situacién particular en la que tiene que actuar; asf, por ejemplo, Ja intoversion es una variable predictiva interesante para el tmbnjo de precision Extraversién El nifio que puntda alto es socialmente desenvuelto, no inhibido, con buena capacidad para lograr y mante= ner contactos personales. Bato puede ser muy favorable cones situaciones que exigen este tipo de temperamen- 10; pero no debe considerarse en general como buen predictor, por ejemplo para el rendimionto escolar. FACTOR Q: Calma {que punttia bajo es de sensibilidad blanda, impresionable, acomodaticio y sumiso, sobrio y pru- dente, sentimental, socialmente eserupuloso y poco expresivo, Excitabilidad/Dureza El nifo que puntia alto tiende a ser hiperactivo y de sensibilidad dura, agresivo y ebstinado, entusiasta, cal- culador y perspicaz; aunque le gusta la actividad en grupo, se despreocupa de las mormas y sigue sus pro- pias necesidades. Naturalmente, las descripciones anteriores son solamente unas breves indicaciones sobre la natu- raleza de estos factores, pero ttiles al lector de este Manual. En el “Handbook” original (Porter y Cattell, 1972) existe una descripcién y discusién mas amplia de los resultados de los andlisis y estudios, as{ como varios procedimientos y formulaciones para predecir diferentes perfiles de personalidad. 4.3, CUADROS AUXILIARES PARA LA INTERPRETACION A continuacién se presentan algunos cua- dros, preparados durante las fases de la adap- tacién y tipificacién, que se consideran auxi- liares para una mejor interpretacién de los resultados del CPQ. En la distribueién del contenido del Manual, estos cuadros se han colocado inmediatamente delante de los baro- ‘mos, como complementarios de ellos. Son los siguientes: A) Elementos de la adaptacién espanola (con Ja ordenacién original entre parénte- sis) y alternativas puntuables de cada scala, Como se ha indicado anteriormen- te, en la edici6n original existen dos plan- tillas de comeccién, y para simplificar este proceso y material con una sola plan- tilla, se han reordenado los elementos en Ja adaptacién espafiola. Por tanto, el psi- c6logo que desee contrastar © comparar sus resultados u observaciones con los obtenidos mediante la versién original (0 de similar estructuracién), debe consultar este cuadro. Al lado de la numeraci6n de cada elemento se indica la alternativa, Ao B, puntuable. B) Conversin de decatipos a centiles. Tal vez resulte interesante para los psicdlogos mis acostumbrados a Ia eseala de centiles pata interpretar medidas de personalidad. En el uso corriente de aplicacién practica se utilizaran los valores enteros de decati- pos (en cursiva) y se redondearfn al ente- 10 mas proximo los centiles equivalentes, excepto en el caso de los decatipos de las dimensiones secundarias, que en su céleu- lo se obtienen en décimas. Los valores decimales de decatipos se incluyen para uso de aquellos investigadores que em- pleen estas puntuaciones tipicas como promedios de grupos espectficos, Cuadro A. Elementos y alternativas puntuables para cada escala en la ordenacién espafiola y original (entre paréntesis) Escala | Elementos y alternativas puntuables A 4( 4A | 18( 2)6 | 20( 88 | 43¢ 7B | 57( 9A | B 2(11)A | 16(15)C | 30(19)B | 44(23)C | 58(27)A c 3(6)B | 17( 4)B 31 3)A | 45(10)A | 59( 8)B D 4(12)A | 18(16)A | 32(@0)B | 48(24)B | 60(28)A E 5(13)B | 19(17)A | 33(21)B | 47(25)A | 61 (29)8 F 6(14)A | 20(18)A | 34(22)A | 48(28)B | 62(30)B G6 | 7 (31)B | 21(35)A | 35(39)B | 49(43)B | 63(47)A H 8 (32)A | 22(36)B | 36(40)B | 50(44)A | 64 (48) A 1 9 (33)B | 23(37)A | 37(41)B | 51(45)A | 65(49)B J | 40 (24)A | 24(28)A | 38.(42)A | 52148) | 66 (50) 8 N 41 (51)A | 25(55)A | 39(59)B | 53(83)B | 67 (67)A © | 12(52)B | 26(66)B | 40(60)B | 54 (64)A | 686A) @ | 13(53)8 | 27(67)A | 4161)B | 55(65)A | 69 (69)8 Q | 14 (54)A | 28(58)A | 42(52)A | 56 (55) B | 70(70)B Cuadro B Conversién de decatipos en centiles Decatipe Centil | Decatipo Centil | Decatipo Gentil | Decatipo Gentil 40 12 | 33 136 | 56 520 79 885 ata | 34 147 | 57 540 Bo 894 12 18 | 35 159 | 58 560 81 903 | Arai tS) :\iraie 17; 59 87.9 82 912 14 20 | 37 184 | 60 599 83 91,9 15 23 | 38 198 | 61 618 84 926 146 26 | 39 212 | 62 637 85 93,3 Aro 28) | 40,0827 | Ga bab 86 93,8 18 32 | 41 242 | 64 674 a7 345 19 38 | 42 258 | 65 692 88 95.0 20 40 | 43 274 | 66 709 89 95,5 Bi aoe 44 aa;t 67 726 90 96,0 22 50 | 45 308 | 68 742 | 91 964 23 55 | 46 326 | 69 758 92 968 24 60 | 47 345 | 70 773 93 974 a5 ler |hag aes | gers 94 974 |S Pes eiise massa | Ta crad 95 977 pearance 50 40.1 | 73 816 96 98,0 | 28 Be fosa aad 74 829 97 982 } 29 97 | 52 440 | 75 841 98 984 30 196 | 53 460 | 76 853 99 986 31 15 | 54 490 | 77 864 | 100 998 32 125 | 55 500 | 78 876 C) Deseripeidn de las escatas det CPQ. Es simplemente un recordatorio resumido de la significacién operativa (con adjeti- Cuadro Descripcién de las escalas del CPQ (Polos bajo y alto) vos) de las variables, més condensada que la que presenta el apartado 1.3 del Manual. Puntuaelones bajas Escala Puntuaciones altas Reservade, alejado, critica, fro. A | Abierto, afectuoso, reposado, patticipativo, sociable | Bajo en inteligencia, pensamiento concreto, |B | Alto en inteligencia, pensamlento abstracto, corto. brillant. Aiectado por los santimientos, emocional- | C | Emacionalmente estable, trancuilo, maduro, mente poco estable, turbable | afronta ta realidad. Catmoso, poco expresivo, cauto, poco active,| D | Excitable, impaciente, exigente, hiperactivo, algo "$080". 1 inhbido. Sumiso, obediente, éécil, acomodaticio, cede | | Dominante, dogmatico, agresivo, obstinado. facilmente. Sobrio, prudente, serio, tacitumo, se autode- | FF | Entusiasta, incauto, conflado a la buena ven- saprueba. ura, Despreccupado o desatento con las normas, |G | Gonseiente, perseverante, moralista, sensa- acta por conveniencia propia, |_ to, sujoto a las normas. Cohibido, timido, sensible a la amenaza. H | Emprendedor, socialmente atrevido, no inhi- bido, insensible. Sensibilidad dura, rechazo a Ias ilusiones, || Sensibiticad bfanda, impresionabie, depen- ova simpatia por las nocesidades de los | diento, superprotegido, evitacién de la ame- demas. | naza tisica. Seguro, con gusto por la actividad en grupo, | J Dubitativo, irresoluto, reservado, incividualis- activo, vigeroso. 12, precavido, reprimide interiormente. Sencillo, franco, natural, sentimental. N__| Astuto, caloutador, prudente, perspicaz. Sereno, apacible, confiado, seguro de si © | Aprensivo, con sensacién de culpabilidad, inseguro, preocupado, turbable con repro- ches. Poco integrado, descuidado, autocontlictivo, @ | Muy integrado, socialmente escrupuloso, sigue sus propias necesicades, autodisciplinade, compulsive, control de su autoimagen Retajado, tranquilo, pesado, sosegace, no | Q: | Tenso, frustraco, presionado, sobreexcitado, frustrado, inguieto. 31 BAREMOS ESPANOLES Varones (N=5.574) Factor] 2 Si 4 8 6 Tv 8 910 | M ot | Factor) Wee a ase) Tea = Bs ft | Gee ex || A | Bl/o2 3 45 6 7 8 9 - 10 - | 714 205] B | e}/oz 3 4 5 @ 7 8 9 - 10 ]661 190] c | p}/o 4 2 38 4 5 6 7 8 910] 440 1,90] D E/or 2 3 4 5 6 7 = 8 #10] 499 1,03] E Flot 2 3 4 5 6 - 7 8 s10|489 184] F @|o2 Ss 4 5 6 7 8 » = | 6a 487| c Hod 2 a9 94 § = 67 = & 40] 503 488] 4 tr] = 0 4 - 2 3 4 85 er Biol 322 168] | eps SS Osh Rs sg 9 7 a on S01 as | N 0 1 = 2 3 4 5 8 7 840/373 1,89) N ° 0 - 1 2 3 4 5 67 8 910/378 203) 0 @lor 2 3 4 5 6 7 8B 98 1] 529 200) @ Gi) 0, ad So as, OPS 7s 8 (01 Aas | Ii) | ch 1 gee gS yp es ae [rol 42. 23 4 5 6 7 8 9 40 | M oF |Factor | a | 0g @ 4 see iz 8 = 9 40 | 21 467!) A Bl/o2 34 5 6 7 8&8 $8 - 10 - |695 201] B C02 4a" 4 se 7 8 BS 40 | mei tra | p/o 4 2 3 4 5 6 7 8 910] 428 1,93] D e}/o 1 2 3 4 5 6 7 8 10} 412 199] E Fi= "0 4 2° °= 3 4 68 7 ‘e10| 312 47] e]o2 3 4 5 6 7 8 98 1% - | 645 100] 6 H]ot - 2 3 4 5 6 7 @ 910/478 186] H eaOM, eM ea ety 6) 2) Se Sue fOa| asd tor) 1 sfor 2 3 4 -~ 5 6 7 8 940) 507 178] J NJ - 0 4 = 2 3 4 5 6 710] 294 1,80] N Go| Ce tani: BB Sup 4 4) 28798 GiD)06..261)) 10. Got "2 wg abe 7 8 a 10 | 608 1,96] @ a}o 1 2 3 4 5 6 7 8 S10} 458 216) a 1 2 8 45 6 7 & 8 40 32 5. BIBLIOGRAFIA CATTELL, R. B.: Personality and motivation struciw: ze and measurement, New York: Harcourt, Brace & World, 1957. —Annxiety, extraversion and other second-order perso- nality factors in children. J. of Personality, 1959, 27, 464-476, Validity and reliability: 2 proposed more basic set of concepts. J. of Educ. Psychol, 1964, 55, 1-22, El anilisis cientfico de ta personalidad, Barcelona: Fontanelia, 1972. JSPR. Cuestionario de personalidad. Madrid: TEA Balcones, $.A., 4* edicién, 1982, CATTELL, R. B, y CATTELL, M. D.: #SPQ, Cuestionario de Personalidad para Adolescentes Madrid: TEA Ediciones, 5.4., 1982, CATTELL, R. B. y GRUEN, W: The personality structure of 11 year-old children in terms of beha- vior rating data. J. of Clin. Psychol., 1953, 9, 256- 266. COAN, R. W. y CATTELL, R.B.: ESPQ, Cuestionario de personatidad para niffos (6-8 afios). Madrid TEA Faiciones, S.A., 198] MARTIN-MORENO, Q: El Cuestionario Cattell de personalidad (Nivel-2) y su aplicacién a una muese tra expaiiola: factores primarios y estructura de segundo orden. Rev. de Ciencias de la Eaueaciéin, 1976, 88, 581-599, PORTER, R.B. y CATTELL, R. B.: Handbook for the Children’s Personality Questionnaire. Champaign (llinois): IPAT, 1972, PORTER, R. B. y colaboradores: A comparative inves tigation of the personality of educable mentally retarded children and those of 1 norm group of chil- ten, Except. Children., 1965, 31, 457-463, SANTOS SANCHEZ, M. A. y MARTIN-MORENO, Q: El problema de la determinacién del ndimero de factores en el anzlisis factorial y la solucién ofteci- da porel “scree test”. Rev, Pste, Gral. y Apl,, 197, 147, 647-662. SEISDEDOS, N.: 16PF Monografia técnica, Madrid: TEA Ediciones, 8.A., 2. edicién, 1981 6. INSTRUMENTOS COMPLEMENTARIOS DE EVALUACION Puesto que la finalidad del cuestionario CPQ es obiener una apreciaci6n global de la estructura de 1a personalidad del nitio, resulta itil disponer de otros instrumentos que ayu- den a: —profundizar en ciertos aspectos que hayan aparecido como problematicos, —indagar las causas © razones explivativas de modos peculiares de comportamiento, —explorar otras reas relacionadas con la personalidad de! niffo. Pueden conttibuir a estos fines Jas siguien- tes pruebas del fondo de distribucién de TEA. Ediciones WISC-R: Escala de Inteligencia para Niflos, que aporta, ademés de datos métrices para la determinacién de C.1., valiosa informa- cidn de cardcter clinico. STAIC: Cuestionario de Autoevaluacién de la Ansiedad Estado/Rasgo en Nios. CAS: Cuestionario de Ansiedad Infantil, CDS: Escala de Depresién para Niflos. CACIA: Cuestionario de Auto-control Infan- til y Adolescente. FABULAS DB DUSS: Prueba proyectiva para el diagnéstico de complejos incons- cientes y conflictos de comportamiento. TAT ESCOLAR: Método proyective que Tefleja la actitud del nifio frente a la activi- dad escolar. BAS: Baterfa de Socializacién que permite obtener un perfil de socializacién y una apreciacién global del grado de adaptacién social. IAC: Inventario de Adaptacién de Conducta (en Jas Greas personal, familiar, escolar y social). TAMAL Test Autocvaluativo Multifactorial de Adaptacién Infantil. Incluye gran ntime- ro de escalas que permiten diagnosticar las causas de la inadaptacién. CPQ Hoja de respuestas Ne 120 dod Apalidos y nome \Curso/Pussio Sento: Para dar las contestaciones, girar la hoja a la izquierda. EJEMPLOS x 2Oue Ye gGual de las Age 0 [__PRIMERA PARTE [SEGUNDA PARTE | oR A Ae ABE web — ad ae asc 1g 200 svt “ANG sol 90 1399 70 Po 200 sof ss000 |7000 sof id wlll mgd wet tt}, - 7 att wd a s9 00 BOQ s7fl imi 129 Of 40] wot 20 oot 700 e301 wet 1300 501 100 330 add HO) soft i300 ib f elf ~0t sf e20f 00 oft sof 12 OO Tol ahh 350 if 700 11 10500 500 | ef 4 AB ae ae as aa Ag as |G aod eg B00 wht w610 120 134 00 900 600 700 9300 w700 wtp issgd |# 100 66 J sol $0 1300 20) 193800 |, up 67 10 sil0 9500 1900 130d asQe P 20 68 Qf s20) 00 i000 rt 13900 | y 300 Com 3300 9700 im00 12500 i9)g {> “Ql OO fed fd wet0 wet) wet |g Q Zoom “ondp g1 waveteg ‘uecutg Aes v2 A USHA 830 075889 03 7 sus nse mele 83 ve ‘unBayes op ounurg fey '¥S 9 Se] 9p uoIsuasdwoo Jolew eun juouIBDL9UOB Anu ued} 1 an Ipeueg ‘sojod Sop soun vagaijo es eiwewestUn (+ eraing/ papsiseH>ya -orwrnied UpYsIBADIPCY -UpIEIEACNU] Peperuy- early ja (wie lolzl-|2/2/0} tipo t i cotta] palopy oppiBoiu spW-sOuaW onjsuaidy - ou919s 4 oaney “onus ‘onpenigng - oanBas ‘agg opeisayy auamjevaRsou3 © ouoigy - opras epuelg - cura PepIGEsUNS Topape ding -OpEBIED piusiaeuog- opedmaosadseg ayveuruiog os 9x3 - as0u109 ey -eleg eroueb ‘oruebeg 3109 VAL “Ppa - scpeniesa: si 8 ApEISEDY "WS “SeuoIoI WAI Aa TVIONSOISNOO a ovo oO % gl|Faid/4 =x=\—/>3|Z/0 o)oOj0,0 Oo Oo loo /Fo)2 e19p | ep UaB:eW |e Ue LeUULE) BiSey “(SolUBIEdsuEN sope:peNd so] 1od -801 ap fo 1 opUBUINS & BpYeINDZ! P| 1od optiezEWO> (yc By) BIROse EPED Ue UoIDE\UNd F] PBUEIIO « upozarede enh efoy Bue sos: 18) BP SoIpEPH) SO} Jod an’ opoW Bp Id Ise endo} & ee Cattell ha desarrollado otros cuestiona personalidad into, cubren todo el Ambito del praceso evoluti- ‘yo: El ESPO esté diseitado para edades inmediatamente antetiores (entre 6 y 8 ‘atios); el HSPO es aplicanle a adolescentes {12 a 18 aos) y finalmente, el 1SPE en. sus diverses formas, a la poblacién acuilta. De todos ellos existe adaptacion espa Aola. EPQ-J, EPO-A y EP! Bal, Eysenck 7 $8.6. Eysenck Partiendo de su pecular concepeién ce la estructura de la personalidad, Eysenk y

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