Aparece un niño jugando en la play station con un control.

La mama desde la cocina la llama.

MAMÁ
Joaquín te estoy llamando hace 10 minutos tu comida está fría
NIÑO: ya voy
MAMÁ: Joaquín te estoy llamando
NIÑO: ¡Espera!
MAMÁ: Dame el control. A almorzar
NIÑO: no quiero, espera
MAMÁ: como que espera
NIÑO: no me jodas quiero te pudras mamá

Niño sale corriendo hacia otra habitación

El padre se va detrás. Se encierra en su habitación.
El papá entra atrás.

NIÑO: Hola papá

PAPÁ: Hijo te escuché hablando con tu mamá, ¿qué manera es ese de responderla?

NIÑO: Tú también me jodes papá en esta casa nadie me deja en paz.

PAPÁ: Haber, haber tranquilo, tranquilo, sí no tienes porque ponerte así ni molestarte, calmado sí.

¿Te puedo enseñar algo?

PAPÁ Otra vez pa’

PAPHaber cálmate, respira.

Salen de la habitación dados de la mano. Se dirigen al jardín.

PAPÁ: Quiero mostrarte algo cada vez que te molestes con tu mamá conmigo o con cualquier
persona y no puedas controlar tu carácter vas a clavar un clavo en esta madera, ¿podrás?

PAPÁ: Vamos llévatelo.

Al día siguiente: (recuerda lo que le dijo el papá)

NIÑO: Voy hacer lo que me dijo mi papá

Se pone a clavar un clavo en la madera, lo hace por varias ocasiones.

NIÑO: Papá mira ya están varios clavos clavados y están martillados

sabes que, ahora hazme otro favor cada vez que controles tu carácter
vas a sacar un clavo, ¿de acuerdo?

El niño sale contento.

Días después…

NIÑO: Papi mira la tabla

PAPÁ: Haber déjame ver ok has trabajado mucho hijo, quiero que veas esto la madera no quedó
igual
NIÑO: ─no
PAPÁ: te das cuenta hijo cuando tú tienes mal carácter y tratas mal a una persona le dejas una
huella que es difícil de componer, sobre todo, a personas que amas como tu mamá imagínate
cómo está su corazón.
NIÑO: Debe estar triste.
PAPÁ: Ves por eso es importante controlar tu carácter y pensar antes de hablar si no puede
herir a las personas

NIÑO: Mamí perdóname.

MAMÁ: Ay mi amor…
a veces las palabras lastiman más que nuestras propias acciones por eso cuida
lo que sale de tu boca nunca sabes el impacto que puede tener en alguien más
no digas palabras hirientes cuando estás de mal humor tendrás muchas
oportunidades para cambiar tu estado de ánimo, pero nunca tendrás la oportunidad
de reemplazar las palabras que dijiste

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