La singularidad Cézanne

HAV3
Cátedra Noé
En Cézanne encontramos la semilla de todo el arte
del siglo XX
Cézanne, que si bien pertenecía al grupo de
impresionistas, siempre se alejó de los problemas
pictóricos del grupo.
Para Cézanne, el esfuerzo consistente en captar
sucesivos e indefinidas instancias espaciales
atmosféricas, a través del espontaneismo, , lleva a
la disgregación de la experiencia pictórica.
Lo que mas criticaba Cézanne del impresionismo
era su falta de estructura, ausencia compositiva, la
falta de un principio rector que estructurara con
precisión y claridad la bidimensión del cuadro, su
escaza solidez
Así como se alejaba del impresionismo, también se aljaba
del simbolismo, por entenderlo más como un intento
literario, en lugar de ser pictórico.
Además se alejó del centro del arte Paris y se instaló en
Aix – en Provenza, desde allí, realizaría a mayor parte de
sus obras
Para Cézanne, el arte, no debe ser un reproductor servil
de la naturaleza
Pintar significa registrar y organizar sensaciones
cromáticas de acuerdo a una lógica óptica. La lógica
óptica es para Cézanne algo diferente del aparato lógico
discursivo, y él reconoce en la percepción una facultad
sintética de la visión humana, que es la que deben guiar
al artista por encima de los prejuicios intelectuales
discursivos.
La pintura es, para Cézanne, al igual que para Leonardo,
una tarea mental, pero independizada de la esfera moral,
de la esfera lógica y literaria
El artista debe cuidarse de la inclinación a
lo literario que, con tanta frecuencia, hace
que el pintor desvíe el verdadero camino:
el estudio concreto e inmediato de la
naturaleza. Es falso poseer una mitología
prefabricada, y pintarla en lugar de la
tierra verdadera – Cuando no se puede
ofrecer los reflejos en el agua, debajo del
follaje, entonces de coloca allí una diosa:
¿qué tendrá que ver eso con el agua?
La poesía podrá llevase en la cabeza, pero
jamás –si no se quiere caer en la
literatura- habrá que llevarla al cuadra:
entrará por sí sola
Para un pintor lo único real son los
colores. Un cuadro no representa
ante todo, y no debe representar,
nada más que colores. La pintura
es una óptica, y el contenido de
nuestro arte reside en primer lugar
lo que piensan nuestros ojos.
Pintar la naturaleza no significa copiar
el objeto, sino realizar sensaciones
cromáticas – Existe una verdad
puramente pictórica e las cosas –
no de debe representar la naturaleza,
sino realizarla, por medio de
equivalentes cromáticos
estructuradores. Sólo hay un camino
para reproducirlo todo, para traducirlo
todo: el color. El color le da vida a las
cosas
Del impresionismo quise hacer algo tan solido y
perdurable como el arte de los museos.
No es licito aislar el dibujo del color; es como si
quisieras pensar sin palabras.
Mostradme en la naturaleza algo dibujado. No
existe ninguna línea, ningún modelado, sólo existen
contrastes. Pero los contrastes no son blancos y
negros, sino movimiento cromático. En la misma
medida en la que se pinta, también se dibuja
Los contrastes y correspondencias de los matices:
allí reside el secreto del dibujo y del modelado. No
debería llamarse modelar (cuerpos), sino modular
(colores )
Uno tiene que ir más allá de sus
sentimientos, debe salirse de sus
sentimientos, debe salirse de ellos,
tener la audacia de objetivar, de
querer reproducir fielmente lo que
ve y sacrificar lo que siente; tiene
que haber sacrificado lo que siente
• Cézanne queda atrapado en medio de una
tormenta, mientras realizaba una pintura al
aire libre. Su esposa e hijo vivían en Paris,
Cézanne contrajo una neumonía que acabaría
con su vida, principalmente porque, en lugar
de cuidarse, decidió seguir pintando.
Cézanne dijo La muerte me encontrará en mi
taller pintando, y no en una cama. Señala
Rilke que se interesará, un año después de la
muerte del artista, por comprender la visión
particular de Cézanne.
 Llegará un día en el cual una
zanahoria, que un pintor haya visto
con ojos de pintor, podrá provocar
una revolución.