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ORGULLO VS
HUMILDAD
JONATHAN EDWARDS
IGLESIA BÍBLICA PETRA- MANAGUA
INTRO
HOLA AMADO HERMANO, ESTÁS A PUNTO DE LEER UN ESCRITO
DE JONATHAN EDWARDS TOMADO DE DE SU RELATO DEL
AVIVAMIENTO EN NUEVA INGLATERRA, CUARTA PARTE .
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El ORGULLO ESPIRITUAL dispone a uno a hablar mucho de las faltas de
los demás, y a hacerlo con amargura, o con ligereza, y un aire de desprecio.
La pura HUMILDAD cristiana dispone más bien a callar sobre ellas, o a
hablar de ellas con pena y piedad. El orgullo espiritual es muy apto para
sospechar de los demás; un santo humilde es muy celoso de sí mismo. La
persona espiritualmente orgullosa es apta para encontrar faltas en otros que
son bajos en gracia, y para ser mucho en observar lo fríos y muertos que son,
y gritar sobre ellos y reprenderlos agudamente por ello. El cristiano humilde
tiene tanto que hacer en casa con su propio corazón, que no suele ocuparse
mucho de los corazones de los demás, y es propenso a estimar a los demás
mejor que a sí mismo, y a fijarse más en lo que hay de bueno en ellos,
mientras que se fija más en lo que hay de malo en sí mismo en sus
descubrimientos más claros de la gloria de Dios, y en sus estados más
arrebatados, está más abrumado por un sentimiento de su propia vileza, y
siente la más profunda humillación de sí mismo.
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El ORGULLO ESPIRITUAL suele provocar cierta rigidez e inflexibilidad
en las personas, en su propio juicio y en sus propios caminos. La
HUMILDAD inclina a una disposición dócil y flexible. El cristiano humilde
está dispuesto a ceder ante los demás, a conformarse con ellos y a
complacerlos, en todo menos en el pecado.
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Asumir es una marca de ORGULLO ESPIRITUAL: darse aires de amo, a quien le
corresponde dictar. La HUMILDAD lleva al cristiano a tomar el lugar de un
aprendiz, a ser "rápido para oír, lento para hablar". El cristiano eminentemente
humilde quiere la ayuda de todos; mientras que el que es espiritualmente orgulloso,
piensa que todos quieren su ayuda. La humildad cristiana, bajo el sentido de la
miseria de los demás, suplica y ruega; el orgullo espiritual pretende mandar y
advertir con autoridad.
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TOMA UN TIEMPO PARA MEDITAR EN LO QUE ACABAS DE LEER.