Ÿ Debemos ser bau zados.

Jesús lo dijo: “El que

crea y sea bau zado, será salvo; pero el que
no crea, será condenado” (Marcos 16:16);
Pedro lo dijo: “Arrepen os, y bau cese cada
uno de vosotros en el nombre de Jesucristo
SEÑORES,
para remisión de los pecados” (Hechos 2:38);
y eso es exactamente lo que hizo el carcelero
¿Qué
de Filipos después de que Pablo y Silas "le
hablaran la palabra del Señor" el y los suyos debo
fueron bau zados. El bau smo es el punto en
el que comienza nuestra “nueva vida” en
Cristo (Romanos 6:4-6). El bau smo bíblico es
hacer
inmersión (sepultado en agua) para obtener el
perdón de pecados. ¿Ha usted sido bau zado
para
de este modo y con este propósito? Si no, que
le impide ser bau zado? El carcelero y los ser
suyos fueron bau zados para perdón de sus
pecados pasada la medianoche.
(Hch.16:25,33). No hay duda, ellos creyeron
salvo?
en Jesucristo y quisieron ser salvos en esa La historia del carcelero de Filipos
Hechos 16:23-34
misma hora. La fe requiere obediencia.

Por supuesto, no queremos dejar a nadie con la

impresión de que esto es todo lo que implica la
salvación. Pablo escribió que el bau smo es el
punto en el que comienza nuestra nueva vida en
Cristo (Romanos 6: 4-6). Lo que hemos Iglesia de Cristo Pulaski Street
considerado en este breve estudio es cómo uno 247 Pulaski Street
se vuelve cris ano. Una vez que nos hemos Lawrenceburg, TN 38464
conver do en cris anos, es hora de que
Oficina: (931) 762-5161
caminemos en una vida nueva, regocijándonos
en la salvación de Dios, como se regocijó el
carcelero y los suyos, haciendo morir la voluntad Servicios en Español
de la carne para que Dios sea ahora glorificado en Domingos 10:30 a.m.
nuestras vidas. Miercoles 7:00 p.m.

Le instamos a que considere la claridad de las Solicite su estudio bíblico

Escrituras concerniente a la salvación. Se ha por correspondencia en Español.
hecho todo lo posible para dar una explicación Escríbanos a este email o llámenos.
justa y comprensible de lo que hizo el carcelero de
Filipos para ser salvo. Ahora todo dependera de
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vuestra decision.

¿Qué debo hacer para ser salvo?
(La historia del carcelero de Filipos)
Escribe Rodolfo Espinoza
Con una pregunta de tal magnitud, usted no
puede darse el lujo de estar equivocado. ¿Será el
cielo su hogar eterno? La respuesta a esta
pregunta ene implicaciones tanto en esta vida
como en la venidera. El plan de Dios revelada en
Su palabra (Nuevo Testamento) no cambia, desde
el principio del cris anismo hasta hoy,
permanece el mismo. Lo invitamos a leer este
folleto con mente abierta y corazón dispuesto
para escuchar la respuesta divina.
El carcelero de Filipos (Hechos 16:23-34)
“Después de haberles azotado mucho, los echaron en
la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con
seguridad. El cual, recibido este mandato, los me ó en
el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el
cepo. Pero a medianoche, orando Pablo y Silas,
cantaban himnos a Dios; y los presos los oían.
Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de
tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y
al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas
de todos se soltaron. Despertando el carcelero, y
viendo abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada
y se iba a matar, pensando que los presos habían
huido. Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo:
No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí. El
entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y
temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas; y
sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para
ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y
serás salvo, tú y tu casa. Y le hablaron la palabra del
Señor a él y a todos los que estaban en su casa. Y él,
tomándolos en aquella misma hora de la noche, les
lavó las heridas; y en seguida se bau zó él con todos
los suyos. Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y
se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios”.
La conversión del carcelero de Filipos nos
muestra que, contrariamente a la creencia popular, la
salvación involucra mente y corazón para examinar la
evidencia presentada por la predicación de la palabra
de Dios. Cuando una persona cree en la palabra de
Dios y responde a las instrucciones de la palabra, será
salva. Consideremos brevemente la respuesta a la
pregunta: "¿Qué debo hacer para ser salvo?", como
es revelada en las Escrituras.
Debemos escuchar la palabra de Dios. Debe
predominar en nosotros la buena ac tud de querer
saber la verdad. "Así que la fe viene por el oír y el oír
por la palabra de Dios". (Romanos 10:17) Después de
que Pablo y Silas le dijeron al carcelero: "Cree en el
Señor Jesucristo", "le hablaron la palabra del Señor a
él ya todos los que estaban en su casa". Dado que la fe
viene al oír, esto es exactamente lo que esperaríamos.
No es exagerar la necesidad de escuchar la palabra
para ser salvo. Piénselo: sin escuchar palabra de Dios,
¿cómo podriamos conocer la voluntad de Dios?
¿Dejaría usted que Dios le hable a su corazón a través
de Su palabra?
Debemos creer en Jesucristo. Las primeras
palabras que salieron de la boca de Pablo y Silas
fueron: "Cree en el Señor Jesucristo". Por lo tanto, una
mera creencia en Dios no es suficiente. Tampoco es
suficiente una mera creencia en Jesús, porque Pablo y
Silas dijeron: "Cree en el Señor Jesucristo".
Debemos reconocer la “autoridad” de Jesús
como Señor y reconocerlo como el Cristo
resucitado. Claramente, nuestra salvación está
condicionada a nuestra fe en Jesús. Si usted cree
en El, debe reconocer Su autoridad sobre usted, y
estar dispuesto a obedecer, haciendo todo lo que
El le pida. ¿Reconoce usted la autoridad del Señor
en su vida?
Debemos arrepen rnos. Por supuesto,
Pablo no dice nada específicamente sobre el
arrepen miento al carcelero, pero el relato nos
dice que Pablo y Silas “le hablaron la palabra del
Señor”. Jesús enseñó que el arrepen miento es
esencial: “Les digo que no; pero a menos que se
arrepientan, todos también perecerán.” (Lucas
13: 3). En Hechos 2:38, el arrepen miento es
requerida como condición de “Arrepen os, y
bau cese cada uno de vosotros en el nombre de
Jesucristo para remisión de los pecados”. Por lo
tanto, incluir el arrepen miento en la conversión
del carcelero de Filipos es consistente con la
enseñanza de Jesús y de Pedro. Arrepen miento
es la renuncia a todo lo malo que ofrece el
mundo, para aprender hacer lo bueno que
enseña Dios.
D e b e m o s c o n fe s a r . I n c l u i m o s l a
confesión en la conversión del carcelero de
Filipos por la misma razón que incluimos el
arrepen miento. Aunque Hechos 16 no dice
nada de confesión, Pablo y Silas "le hablaron la
palabra del Señor". En Romanos 10: 9, 10 Pablo
escribe: “que si confiesas con tu boca al Señor
Jesús y crees en tu corazón que Dios lo levantó de
los muertos, serás salvo. Porque con el corazón
se cree para jus cia, y con la boca se confiesa
para salvación.” El mundo debe saber que somos
confesos sequidores de Jesús. ¿Estaría usted
dispuesto a confesar a Jesús como Señor de su
vida delante de los hombres?
 LA CRUCIFIXIÓN DE JESÚS EN EL GÓLGOTA
FUE VOLUNTARIA
“En esto hemos conocido el amor, en que El puso Su
vida por nosotros” (I Jn 3:16). Nadie se atrevería a
ofrecerse voluntariamente y soportar una muerte
cruel y violenta en una crucifixión romana donde sus
muñecas y pies fueran clavadas sobre vigas de
madera. Como Hijo de Dios, el pudo haber llamado a
12 legiones de ángeles para que lo rescaten, pero no lo
hizo (cf. Mt 26:53-54).
LA CRUCIFIXIÓN DE JESÚS EN EL GÓLGOTA FUE
POR SUSTITUCIÓN DE OTROS
“quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre
el madero, para que nosotros, estando muertos a los
pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis
sanados. Porque vosotros erais como ovejas
descarriadas...” (I Pe 3:24-25). Imagina cómo sería este
mundo si todos los seres humanos apreciaran lo que
Jesús hizo por ellos en el Gólgota.
LA CRUCIFIXIÓN DE JESÚS EN EL GÓLGOTA
FUE VICTORIOSA
La cruz fue un instrumento de muerte, pero dio vida. La
crucifixión de Jesús fue un asesinato premeditado, pero
también un sacrificio predestinado. Fue un gran acto de
pecado de parte de judíos y romanos, pero también la gran
cura para el pecado. La crucifixión de Jesús demostró tanto
la ira de Dios (cuánto Dios odia el pecado) y la misericordia
de Dios (cuánto Dios ama al pecador).
En la cruz, Jesús ganó perdiendo, triunfó rindiéndose y
conquistó muriendo. El Gólgota, una vez estuvo
asociado con muerte y condenación, se ha convertido
en el lugar donde millones ahora asocian la vida y la
salvación. “Estando ya justificados en su sangre por ÉL seremos
salvos de la ira” (Ro 5:9).
En esa cruz Dios declara al pecador libre de culpa y de
las consecuencias del pecado para los que ponen su fe
en Su Amado Hijo. “Bienaventurados aquellos cuyas
iniquidades son perdonadas. Y cuyos pecados son cubiertos.
Bienaventurado el varón a quien el Señor no inculpa de pecado”
CRISTO CUMPLIÓ LA LEY A FAVOR DE TODOS
NOSOTROS LOS PECADORES
La fe en Cristo Jesús nos declara justos e inocentes.
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por
nosotros maldición, porque está escrito maldito todo
el que es colgado en un madero, Cristo padeció unas
sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para
llevarnos a Dios.
CRISTO Y SU MENSAJE PARA EL MUNDO
“Finalmente se apareció a los once mismos, estando ellos sentados
a la mesa, y les reprochó su ¿CÓMO OBEDECER EL EVANGELIO?
incredulidad y dureza de corazón,
LA AGONÍA
porque no habían creído a los que
le habían visto resucitado. Y les
Y LAGLORIA
dijo: Id por todo el mundo y
predicad el evangelio a toda
criatura. El que creyere y fuere
DE LACRUZ
bautizado, será salvo; mas el que
no creyere, será condenado” (Mc
16:14-16).
Fe, arrepentimiento y bautismo para perdón de pecados.
“¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo
Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos
sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de
que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así Iglesia de Cristo Pulaski Street
también nosotros andemos en vida nueva” (Ro 6:3-4) 247 Pulaski Street
Lawrenceburg, TN 38464
Oficina: (931) 762-5161
Servicios en Español
Domingos 10:30 a.m.
Miercoles 7:00 p.m.
Solicite su estudio bíblico
por correspondencia en Español.
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El bautismo (inmersión en agua) es para perdón de
pecados (Hch. 2:38) y para unirnos a Cristo.
 LA AGONÍA Y LA GLORIA LA CRUCIFIXIÓN DESPOJABA A LAS PERSONAS DE EN LA CRUZ ERA DIFÍCIL RESPIRAR
SU DIGNIDAD HUMANA Era más difícil exhalar que inhalar. El crucificado se
DE LA CRUZ elevaba mediante flexión de sus piernas para respirar,
La Crucifixión de Jesús en el Gólgota
El objetivo fundamental de la crucifixión era matar a lo que aumentaba el dolor producido por los clavos. La
¡Brutal, barbara, cruel e inhumana!
un hombre, pero en el proceso se buscaba mantenerlo muerte se producía principalmente por el shock
Por: Rodoldo Espinoza
vivo tanto tiempo como fuera posible. A vista del hipovolémico (disminución de sangre circulando en el
público, al crucificado cuerpo) y asfixia por agotamiento. Cuando a las
Abordemos el estudio de la cruz con corazones
se le dejaba desnudo y víctimas se les quebraban las piernas, tardaban pocos
temblorosos. Un estudio que se debe realizar durante
expuesto al maltrato. minutos en morir.
toda la vida.
A u n co n to d o e ste
dolor, había hombres ERA UN DOLOR INSOPORTABLE EL QUE SE SUFRÍA
SUFRIMIENTOS DEL SIERVO DE JEHOVÁ
Profetizado por el profeta Isaías 700 años A.C. que podían vivir 2 o 3 Cualquier movimiento en la cruz multiplicaba el
días. Las manos no sufrimiento. No había modo de hallar una postura
“...Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros podían soportar el peso cómoda. El dolor era inmenso. Se experimentaban
dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y
abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por
del cuerpo. Los clavos dolores de cabeza, una sed quemante y espasmos
nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga se introdujeron por Sus musculares y nerviosos, eran millones de descargas de
fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como muñecas, que son parte dolor las que sacudían el cuerpo.
ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el
de las manos. La herida por incisión sirvió para confirmar que Jesús
pecado de todos nosotros. Angustiado él, y afligido, no abrió su boca;
como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus estaba muerto, herida que se produjo cuando un
trasquiladores, enmudeció, soldado perforó Su costado con una lanza (Juan
y no abrió su boca... Con
19.34). Los soldados romanos no dejaban a la víctima,
todo eso, Jehová quiso
quebrantarlo, sujetándole a hasta estar seguros de su muerte.
padecimiento. Cuando
haya puesto su vida en
LAS ESCRITURAS EVITAN TODOS LOS
expiación por el pecado,
verá linaje, vivirá por largos HORRIBLES DETALLES
días, y la voluntad de Jehová Los pecadores son salvos por la muerte de Jesús, no
será en su mano
por el dolor de Este. Sin embargo, el sufrimiento
prosperada. Verá el fruto de
la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento estuvo claramente
justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ello” (Is presente. La cruz
53:3-11). En 1968 se descubrieron varias tumbas en Jerusalén era una muerte
LA FLAGELACIÓN que datan de la época de Jesús, en una de las tumbas lenta y silenciosa;
“El instrumento empleado para flagelar, tenia en las puntas de cada se encontró un hueso de tobillo con un clavo las víctimas se
cuerda trocitos de metal y hueso. La flagelacion era un preliminar legal atravesado, este hallazgo es significativo, es el único
en toda ejecucion romana. Los azotes eran crueles, producian profundos quedaban sin
cortes y dejaba el cuerpo hinchado, a menudo se perdian los dientes y los hallazgo arqueológico de una persona crucificada.
fuerzas ni aliento
ojos. El latigo era castigar, los clavos eran para dar muerte.El castigo con L o s c l avo s
latigazos hacia mas intenso el dolor de la crucifixion”. necesarios para
atravesaban
gritar. A los azotes
LA CORONA DE ESPINAS el tobillo y
se les llamaba la
Las heridas por penetración se produjeron por las no sobre el
«pequeña muerte»; a la crucifixión se le llamaba la
afiladas puntas de la corona de espinas que los antepie
como se «gran muerte».
soldados le forzaron en Su cabeza.
“y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una creía. No deje que su corazón se vuelva insensible al dolor de
caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le la cruz. ¡Nunca se permita desentenderse del shock de
escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos! Y escupiéndole, este horror!
tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza” (Mt 27:29-30).