Víctor Manuel Pérez Hernández.

antropología económica.

En los presentes textos que abordamos podemos encontrar este contraste entre las
denominadas economías precapitalistas y la economía campesina, dentro del cual
podemos aclarar este mismo concepto de precapitalistas como un sistema escaso de
elementos constitutivos que lo eleven al grado de economía y es bajo esto texto y su
contraste que podemos identificar que en realidad estas economías precapitalista
también gozan de una complejidad constitutiva que engloba elementos y prácticas que
genera un sistema de producción, distribución comercio y consumo.

Ahora bien, en este sentido podemos identificar que, si bien la mayoría de sus
características tanto de las economías “primitivas” son distintas, se puede señalar que
tienen elementos constitutivos que se asemejan, principalmente la tenencia de la
tierra y la organización de la producción y explotación de los recursos naturales que
se encuentran a la mano, pero con otras particularidades que contrastan como la
dirección del producto que surge del trabajo de la tierra y demás, pues el campesino
como bien señala el texto es miembro de un sistema más complejo y amplio el cual lo
condiciona bajo ciertas prerrogativas que generan una dependencia de los mismo por
sobre el colectivo y en contraste las denominadas economías primitivas contiene un
sistema económico más local que responde a un jefe o mago que regula y determina
ciertas características de la propia economía tribal.

Es aquí donde podemos mencionar que el campesinado al formar y responder a una

dinámica más global, evidente encuentra más problemas para su desarrollo holístico
por esta misma complejidad el mercado económico al que responde y el cual ha
modificado la relación de ambos ya que como bien se señala en el texto el
campesinado es quien dota de la mayor parte de la alimentación de la población
urbana es importante que pongamos sobre la mesa esta determinación de la vida y
medios económicos de subsistencia del campesinada como Analís central tanto de su
reconocimiento como sociedad especifica así como la explotación y usufructo de su
necesidades en una sociedad que amenaza su existencia y relación con las demás
aristas de la sociedad.