ientras bajaban por las escaleras del ayuntamiento ponceno, Patria y Bayodn fueron transportados asu nave, Sentados frente al monitor de ésta, recordaron las experiencias de la guerra de 1898. ~{Cudntos cambios para Puerto Rico y sus habitantes! Imaginate —comenté Bayodn—, hasta entonces, la Isla estaba relacionada con un pais de habla hispana. Pero, ahora, al pertenecer a uno de habla inglesa, serian muchas las cosas que cambiartan en la vida del puertorriquefio. ~{Debe de haber sido muy dificil! —senals Patria-. La escuela tiene que haber sido la clave tanto en ese momento como en el futuro. Era como si surgiera un nuevo hombre. —Es cierto. Un hombre nuevo porque tenia que conocer su cultura y, a la vez, aprender la de un pats diferente senalé Bayodn con seguridad. —Lo que me pregunto es si alguien pudo idear una forma de enseftar que ayudara a resolver ese problema —planteé Patria. Como respuesta a la inquietud de Patria, en el monitor, aparecié la imagen de un hombre. El hombre, de corta barba y rostro delgado, estaba sentado en su despacho. Sobre el escritorio, un documento que decia: “Escuela Normal, Repiblica Dominicana”. En ese momento, comenz6 a firmarlo. Muy claramente, vieron cuando escribié: Eugenio Marta de Hostos. ~zHostos y la educacién? Eso st es interesante —dijo Bayodn—. ¢Qué habré hecho por las escuelas? —4Por qué no lo investigamos? Me encantarta conocerlo —respondié Patria. Un instante después, una luz los Uevaba a su nueva aventura, ¢Acaso, conocertan a Hostos?CAPITULO jHoy nos visita Hostos! Para sorpresa suya, Patria y Bayodn descubrieron que estaban en una estacion de trenes de la Reptiblica Dominicana. A su alrededor, nifios de su edad, quienes, como ellos, llevaban uniforme escolar y estaban atentos a su maestra, la sefiorita Ureiia, que les decia: =Nitios, hoy, nos visitar4 el mas grande educador de Puerto Rico, don Eugenio Maria de Hostos. £1 fue mi maestro, y es quien ha disefiado los nuevos métodos de educacién de nuestro pais. El ruido del tren que se acercaba los interrumpié. {El gran maestro Hostos habia llegado! Los aplausos del piiblico se hicieron mayores cuando el ilustre puertorriquefio descendié del tren. En su honor, tes niiios, cubiertos con las banderas de las tres Antillas hermanas, se acercaron a saludarlo. -No puedo creerlo ~coment6 Patria con orgullo-. ;Todos parecen quererlo tanto! —Yo, s6lo, sé que, hoy, me siento mas orgulloso atin de ser puertorriquerio ~dijo cuando vio que Hostos saludaba a todos. Alver a la profesora Ureiia, don Eugenio la abraz6 con cariio, y le prometié visitarla en su escuela. Cuando soné la campana, anunciando un nuevo dia escolar, Patria, Bayoan y el grupo de cuarto grado ocuparon sus asientos. Habia flores en el sal6n, y una enorme sonrisa en el rostro de la profesora Ureha.-Niiios, hoy, tendremos un invitado especial -comenzaba a decir la profesora cuando Hostos entr6 al salon. —|Buenos dias! -saludé sorprendiendo a todos, quienes, puestos de pie, le dieron la bienvenida. —Siéntense, niiios, por favor. Hoy, su maestra me ha permitido disfrutar de un rato junto a ustedes —dijo con alegria. La mirada bondadosa del Maestro les dejé saber a los nifios que estaban con un amigo. En ese momento, Hostes, al ver el libro de lectura sobre el escritorio de Patria, se acercé a ojearlo, —Héroes de la Antigitedad, muy buen libro —comenté y, en seguida, pregunté—: Te gusta? Pues... si—respondié Patria un tanto nerviosa. ~Ah, una compatriota ~dijo al escucharla hablar-. ;Cémo te Hamas? ~Patria, sefior Hostos. ~Y yo, Bayodn, y soy su hermano —aftadié nuestro amigo. —Patria y Bayoan... jcudntos recuerdos me traen sus nombres! —sefialé Hostos con nostalgia-. Bueno, aver, zqué les ha gustado de Héroes de la Antigiiedad? —Pues, ibamos a comenzarlo hoy ~apunt6 Patria. —Entonces hablemos sobre ello —dijo mientras caminaba entre Jos asientos de los nifios-. :Alguien puede decirnos qué es un héroe? —pregunté, al tiempo que escribia la palabra héroe en la pizarra. Hubo un breve silencio durante el cual todos se miraron tratando de pensar una respuesta. a responder? parecia que todos se preguntaban.‘Timidamente, Patria alz6 la mano para hacerlo: ~Yo creo que un héroe es una persona muy valiente ~dijo mientras Hostos se acercaba a la pizarra. =Muy bien —dijo y escribi6 “valiente” en la pizarra~. A ver, algo més. De pronto, el salén se pobl6 de manos. {Todos parecian querer hablar! —Son las personas que defienden a otros; que no Ie temen a nadie ~aiiadié un jovencito. ~También, los que son fuertes, y ayudan a todos cuando hay peligro =dijo otro nino. —Para mi, son los que luchan por su pueblo ~sefialé Bayon. La lista de anotaciones cubria casi toda la pizarra cuando Hostos les pidié que construyeran una definicidn con sus ideas. Poco a poco, los niios fueron ayndando al Maestro a establecer lo que, para ellos, era un héroe. =Me parece que nos ha quedado muy bien ~dijo terminando de escribir-. ;Quién la puede leer? ;Nuestro amigo Bayoan? -pregunt6 para sorpresa del jovencito, quien, puesto en pie, comenzé a leer: —Un héroe es aquella persona que es valiente y fuerte; que no siente temor; que ayuda a los demis, y que defiende su patria, y lucha por ella. ~Gracias, Bayoan dijo Hostos dindole uma palmada en el hombro- Mientras lefas ~continué diciendo-, pensé en los nombres de muchos que han sido héroes. Pero zy ustedes?, gen quiénes pensaron? Esta ver, varias manos se alzaron deseosas de compartir con Hostos lo que pensaban. Una niia, de mirar profundo, fue la primera en hablar Yo pensé en mi padre —dijo con seguridad, —zPuedes decirnos por qué? —pregunté Hostos. —Pues... la tiltima vez que creci con orgullo. Muy bien, sin duda, es un héroe. :Y ti? -le dijo a un jovencito que, ansioso, alzaba su mano. La verdad es que yo pensé en Simén Bolivar ~exclamé6 el nifio=. 100He leido que él luché por la libertad de todos los latinoamericanos. Eso es defender un pueblo ~subrayé el nifio, ~As es, jovencito. :Alguien mas? —Seiior Hostos, yo pensé en Jestis ~dijo Patria. Como él ayudé a todos, sin temor de ser castigado, creo que es un héroe. —Estoy de acuerdo contigo, Patria -le dijo~. Sin duda, es el héroe de todos los tiempos. —Don Eugenio, cle puedo preguntar alg {Por supuesto! ~respondié Hostos. -Yusted, cen quién pens6? —le pregunté nuestro amigo. Sorprendido por la pregunta, a la vez que satisfecho, Hostos no vacil6 en responder: —Jovencito, la verdad es que pensé en muchos pero recordé a uno en particular... ;Agiieybana! —sciialé Hostos. {El es muestro cacique! —dijeron a la par nuestros amigos, Patria y Bayoan, recordando las experiencias de aquella aventura —exclamé Bayoan. que les permitié conocerlo, Y les diré por qué —continué hablando Hostos-. El verdadero héroe es quien busca y defiende la justicia, y Agiieybana supo hacerlo. Pero bien— exclamé mirando a todos-, volvamos a pensar en todos los nombres que hemos mencionado; qué podemos decir? ‘Yo dirfa que todos son héroes pero por diferentes razones -le dijo laniiia que dio el ejemplo de su padre. =... Pues yo pienso que todos son héroes pero de diferentes épocas sefial6 otro nino. A mi me parece que todos los paises tienen héroes ~dijo Bayoain ~Estoy de acuerdo con todos ~dijo Hostos-. Ahora, za cudntos les gustarfa acompaiiarme a conocer a otros que, también, fueron héroes? =pregunté. La campana de la escuela anunci el final de Ia clase. Un murmullo se escuché entre los nifios, quienes lamentaban que la hora del recreo pusiera punto final a la interesante leccién. =Nos ha encantado su clase— le coment6 Patria a Hostos mientras salian al patio, ~jGracias, niftos! -jUR. qué miedo nos hizo pasar -le dijo Bayoan -Eso es, justamente, lo que persigo: hacer pensar —exclamé Hostos, al tiempo que se sentaba en uno de los bancos del patio. =cPensar? ~Asi es -afirmé el Hostos-. Hay que cultivar la razén. Mi mayor anhelo es ver que todas las escuelas ensefien a pensar. $6lo asi, podremos mejorar nuestra sociedad ~exclamé con ilusi6n. -Un ser pensante —dijo Bayon mientras don Eugenio sonrefa yasentia—. Me gusta esa idea Pero —comenz6 a decir Patria— estamos en la Reptiblica Dominicana... Qué pasard con los estudiantes pucrtorriqueiios? ~Fsa es mi mayor preocupacién, Patria -le dijo don Fugenio-. Sin embargo, sé que, algin dfa, todas las escuelas en Puerto Rico ensefiaran a pensar. Entonces, surgira el verdadero ser humano que tanto necesitamos. 101Actividades © Demuestra tu comprensién! 1. Describe la escena de recibimiento a Hostos en la estacién del tren. 2. {Por qué acompaiaron Patria y Bayoan a la maestra hasta la estacion del tren? 3. {Por qué era tan importante Hostos en la Republica Dominicana? A. ;Cual era el tema que se discutia en clase? » jAnaliza! 1. {Qué método de ensefianza utiliz6 Hostos? Describelo. Compéralo con el método que utilizan tus maestros. 2. {Como fue la participacién de los nifios? 3. Por qué se desarrolla esta aventura en Santo Domingo? SS © jCrea y evaliial 1. Escribe cinco caracteristicas que consideres necesarias en tu héroe favorito. Selecciona una de ellas, y escribe un parrafo diciendo por qué. sa cE « ilntegra materias! Estudios Sociales y Espafiol 1. Prepara una biografia de tu héroe favorito. La misma puede ser escrita, pictérica, etc. (Usa tu imaginacién! 102