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UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE LOS ANDES

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS, CONTABLES Y


SOCIALES.
ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO.

DOCENTE :
CURSO :
ESTUDIANTE : SERRANO CABALLERO, RUBEN ITALO

ABANCAY- APURIMAC
2022
DEDICATORIA

Este trabajo lo dedico primero a mis padres, porque es una parte


indispensable de mi vida; el motor de mi proyecto; la guía; y para ayudar a
plantear dudas cuando surjan.
A Dios, sin él no podría llevar a cabo este trabajo
INDICE
INTRODUCCIÓN......................................................................................................................4
¿QUÉ ES LA TEORÍA DEL DELITO?...................................................................................5
ELEMENTOS QUE CONFORMAN LA TEORIA DEL DELITO...................................5
¿Qué es un delito?......................................................................................................................6
LA ACCIÓN...........................................................................................................................6
LA TIPICIDAD......................................................................................................................6
LA ANTIJURICIDAD...........................................................................................................7
LA CULPABILIDAD....................................................................................................................8
CASO 1.......................................................................................................................................9
“BEBER HASTA LA MUERTE”.............................................................................................9
CASO 2 “TAXISTA”...............................................................................................................10
CASO 3.....................................................................................................................................11
“JEFE DE BANCA PERSONAL”..........................................................................................11
CONCLUSIÓN.........................................................................................................................12
BIBLIOGRAFIA......................................................................................................................13
INTRODUCCIÓN

La teoría del delito dentro del quehacer del proceso penal y, más concretamente,
dentro del derecho penal, representa uno de los instrumentos más importantes para
establecer la responsabilidad penal de una persona procesada por la supuesta comisión
de un hecho delictivo. En este sentido, la teoría del delito señala una serie de parámetros
que, en cada caso en particular, deben ser analizados con la finalidad de establecer si se
ha dado la afectación a un bien jurídico considerado fundamental, y por ende, si la
potestad persecutoria que ejerce el Ministerio Público, debe aplicarse o no. Toda acción
para constituir un delito debe ser una conducta típica, antijurídica y culpable. Es por ello
que el análisis de lo que presuntamente constituye un ilícito, obliga a su revisión en
estos tres estadios. El cumplimiento de los diversos requisitos que conforman cada uno
de estos estadios, va a originar el carácter de ilícito de la conducta acusada. De esta
manera, el análisis de cada uno de ellos, implica una tarea seria, cuidadosa, pero sobre
todo, sumamente técnica que demanda del estudioso de la teoría del delito,
conocimientos claros para su aplicación. Por tanto, no podría concebirse el dictado de
una sentencia condenatoria en contra de una persona acusada, si antes dicha conducta no
ha sido analizada a la luz de lo que informa la teoría del delito, como medio idóneo para
verificar el carácter delictivo de la misma. En esta misma orientación, la falta de acción,
la atipicidad de la conducta, la confluencia de una causa de justificación en dicha
conducta, o la inimputabilidad de la persona acusada, podrían señalar que la conducta
no puede ser considerada delictiva y, de esta manera, debe cesar la facultad represiva del
Estado que, en su nombre y el de la colectividad, lleva a cabo el Ministerio Público.
¿QUÉ ES LA TEORÍA DEL DELITO?

Conjunto ordenado y lógico de preguntas, que funciona como un sistema de filtros,


que establece de manera abstracta las características pertenecientes a los delitos en todas
sus manifestaciones.

Porfirio Luna Leyva: Es una parte de la ciencia del derecho penal que se encarga de
analizar cuáles son los elementos o características que deben de concurrir en una
conducta para que esta sea considera como delito, o en su caso cuales son los
elementos para que esta conducta se le niegue la calidad de delito. La teoría del delito
determina cuando una conducta es verdaderamente delictiva.

De ahí surge la enorme importancia de que los operadores del sistema de justicia
penal, abogados deben tener conciencia sobre la necesidad de consolidar los
conocimientos como son: la definición del delito, sus presupuestos, su aspecto positivos
(conducta o hecho, tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad y punibilidad) y aspecto
negativo (ausencia de conducta, atipicidad, causas de justificación, inculpabilidad y
excusas absolutorias), su clasificación, tentativa, la autoría y participación.

Indudablemente la teoría del delito dentro del derecho penal representa uno de los
instrumentos más importantes para establecer la responsabilidad penal de un individuo
procesado, indiciado por la supuesta comisión de un hecho delictivo. Y es necesario y
de gran importancia analizar y establecer si se ha dado la afectación a un bien jurídico
protegido y considerado fundamental.

ELEMENTOS QUE CONFORMAN LA TEORIA DEL DELITO


Hecho social

ACCION/OMISION

TIPICIDAD

ANTIJURICIDAD

CULPABILIDAD

PUNIBILIDAD
DELITO
¿Qué es un delito?

 Un DELITO es una acción típica, antijurídica, punible y atribuible e a un actor.


 Sus elementos coinciden con los niveles de análisis de la teoría del delito
representados en el sistema de filtros

LA ACCIÓN.
La acción y omisión es el elemento básico del delito conforme a la teoría finalista.
Comprende dicha acepción tanto la acción positiva, como la acción omisiva, es decir, la
acción que origina el delito bien sea de forma comisiva; bien lo sea de forma omisiva.
Siguiendo a MUÑOZ CONDE es un elemento independiente y de carácter apriorístico
con respecto a los restantes elementos del delito. Comporta el presupuesto básico para la
existencia de los demás elementos del delito y obviamente su inexistencia, conlleva la
exclusión de valorar los ulteriores elementos configurativos del delito. Es la premisa
inicial para poder contemplar la existencia del delito el elemento de la culpabilidad. Lo
relevante es que la acción manifestada como consecuencia de la voluntad del sujeto, no
ya el contenido de dicha voluntad. Para que la conducta sea constitutiva de delito, debe
ser típica, antijurídica y culpable.

LA TIPICIDAD.
Es preciso que la acción llevada a cabo se encuentre castigada legalmente, esto es,
penada por la ley. Esa regulación legal es precisamente la que comporta la tipicidad de
la acción. Una vez constatada la existencia de la acción, seguidamente debe valorarse la
relevancia penal de la misma, comprobar si encaja en un posible delito. A tal efecto, el
ilícito penal únicamente puede estar establecido por la ley, en cumplimiento del
principio de legalidad. No cabe definir una conducta punible si no es en la ley,
denominándose tipos penales que constituyen una forma específica del ilícito
susceptible de castigar con la pena correspondiente. El tipo penal cumple con una
función motivadora al señalar a los ciudadanos cuáles son las conductas prohibidas
legalmente, conminándoles a que se abstengan realizar dichas conductas. Las leyes
formulan tipos según diferentes técnicas de prohibición, lo que da lugar a distintas
estructuras típicas. Las conflictivas y el consiguiente campo de prohibición de la
conducta puede llevarse a cabo mediante la individualización de la conducta bien
atendiendo al fin propuesto por el agente, en cuyo caso concurre un tipo doloso, bien
puede optarse por señalar la acción prohibida atendiendo a que ésta se realice de un
modo erróneo al deber objetivo de cuidado, imprudentemente, concurriendo así un tipo
imprudente. E igualmente, puede el tipo referir la conducta prohibida ocasionando así
un tipo activo, o bien referir la conducta debida, resultando así un tipo omisivo de
conducta. La valoración de tipicidad la lleva a cabo el Juzgador para determinar si la
conducta particular y concreta encaja en el tipo penal; lo que necesariamente lleva a
examinar si la conducta encaja en la descripción del tipo penal. Es la subsunción de la
aquella en el supuesto descrito en la norma legal. Los diferentes delitos se catalogan en
función de la estructura del tipo.

LA ANTIJURICIDAD.
En cuanto a la antijuricidad va ínsita en el concepto del delito, supone el desvalor
que posee un hecho típico contrario a las normas del derecho en general (no sólo al
ordenamiento penal). Es lo contrario a derecho, por lo tanto, no basta que la conducta
encuadre en el tipo penal, se precisa que esta conducta sea antijurídica, considerando
como tal, a toda aquella definida por el ordenamiento, no protegida por causas de
justificación. La antijuridicidad precisamente radica en contrariar lo establecido en la
norma jurídica. Para que sea delictuosa, la conducta ha de ser típica, antijurídica y
culpable. La antijuricidad es otro de los elementos estructurales del delito. Se le puede
considerar como un "elemento positivo" del delito, es decir, cuando una conducta es
antijurídica, es considerada como delito. Para que la conducta de un ser humano sea
delictiva, debe contravenir el derecho, esto es, debe ser antijurídica. Se considera un
concepto jurídico que supone la comparación entre el acto realizado y lo establecido por
el ordenamiento y que denota como ésta es una conducta contraria a derecho, aunque en
realidad la conducta antijurídica no esté fuera del derecho, por cuanto éste le asigna una
serie de consecuencias jurídicas. Podemos distinguir entre la antijuricidad formal y la
antijuricidad material. Tradicionalmente se ha distinguido entre la antijuridicidad
formal, que es aquella que viola lo señalado por la ley, y el material, cuando se trata de
una conducta antisocial. Por lo tanto, la antijuricidad formal no es más que la oposición
entre un hecho y el ordenamiento jurídico positivo, juicio que se constata en el modo
expuesto.

LA CULPABILIDAD
Es el elemento de la teoría del delito en el que se agrupan las circunstancias
específicas que determinaron en el sujeto autor de la acción en el momento de la
comisión del hecho ya calificado como típico y antijurídico. Se trata del elemento del
delito en el que la persona del autor se relaciona dialécticamente con el detentador del
ius puniendi. La culpabilidad actúa como la reprochabilidad de un acto típico y
antijurídico, fundada en que su autor, en la situación concreta, lo ejecutó pudiendo
haberse comportado de otra forma diferente. No contraviniendo el derecho. La doctrina
española pone de manifiesto como el término reprochabilidad se asocia al
reconocimiento de la existencia del libre albedrío, algo imposible de probar en el caso
concreto (ENRIQUE GIMBERNAT), por lo que desde teorías preventivas de la pena se
propugna su sustitución por la idea de notabilidad (M.UÑOZ CONDE) o de exigibilidad
(DE LA CUESTA AGUADO). La imputabilidad Establece la capacidad de conocer lo
injusto, su "maldad" o inconveniencia para la sociedad, o simplemente, que esta no es
apropiada; así como de reconocer la posibilidad de actuar de otra manera. Un imputable
es capaz de comprender el elemento de reproche que forma parte de todo juicio penal, y
por lo tanto, si se le hallare culpable, se haría acreedor a una pena; si no lo puede
comprender, será un inimputable, no le será reprochada su conducta, y el juez,
eventualmente, lo podía someter a una medida de seguridad.

Es de suma importancia utilizar la teoría del delito, pues dicha teoría proporciona
un sistema de análisis para ordenar e interpretar las normas penales sustantivas para
determinar si la conducta desplegada por el sujeto activo es o no constitutiva de delito.
Y la responsabilidad penal es cuestión de carácter procesal que se determinará en la
resolución del justiciable.

En la jurisprudencia 1a./J. 143/2011 de la Suprema Corte de Justicia de la Nación


estableció que en toda sentencia definitiva debe analizarse si existe o no delito, esto es,
una conducta típica, antijurídica y culpable. Una conducta es típica cuando tiene
adecuación a los elementos del tipo penal. Así, de la interpretación sistemática de los
artículos 7o, 8o, 9o, 12, 13, 15, fracciones II y VIII, inciso a) y 17 del Código Penal
Federal, se advierte que los elementos del tipo penal que deben examinarse en la
sentencia son:

I) los elementos objetivos de la descripción típica del delito de que se trate;


II) si la descripción típica los contempla, los elementos normativos (jurídicos
o culturales) y subjetivos específicos (ánimos, intenciones, finalidades y
otros);
III) la forma de autoría (autor intelectual, material o directo, coautor o
mediato) o participación (inductor o cómplice) realizada por el sujeto
activo; y,
IV) el elemento subjetivo genérico del tipo penal, esto es, si la conducta fue
dolosa (dolo directo o eventual) o culposa (con o sin representación).

CASO 1
“BEBER HASTA LA MUERTE”

SALA PENAL/R.N. N° 6239-97/Ancash. Tres de junio de mil novecientos


noventiocho.

El 5.08.1994, los encausados Luis Alberto Bulnes Sotelo y Emerson Ulderico


Méndez Torres se encontraron con la agraviada Rocío Burgos Sánchez en las
inmediaciones de la universidad. Los 3 tomaron la decisión de ir a la habitación de
Méndez Torres en donde escucharon música y libaron licor hasta altas horas de la
noche, al extremo de alcanzar la citada agraviada un estado de inconsciencia por el
exceso de consumo de alcohol, quedándose dormida sobre una cama en posición de
cúbito dorsal. La agraviada fue encontrada posteriormente muerta, en el mismo lugar y
en la misma posición, por los encausados luego que éstos regresaran al amanecer a la
habitación, en donde solamente se había quedado la agraviada descansando a fin de que
desaparezca los efectos de la ebriedad. El protocolo de necropsia, concluyó que la
agraviada Burgos Sánchez falleció por «muerte rápida por asfixia por sofocación a
consecuencia de aspiración de vómitos en estado etílico»

ABSOLVIERON a Luis Alberto Bulnes Sotelo y Emerson Ulderico Méndez


Torres de la acusación fiscal por el delito de homicidio en agravio de Rocío Burgos
Sánchez, por falta de elevación del riesgo, de conformidad con los siguientes
fundamentos:

DOCTRINA

 “(…) El deceso de la aludida agraviada se ha producido por un caso fortuito


o hecho accidental, por lo que el hecho global no constituye así de ningún
modo delito de homicidio y tampoco genera responsabilidad penal para los
agentes (…)”
 “(…) al existir el resultado lesivo de un bien jurídico que no ha sido
producido por la intervención humana, sino que ha sobrevenido por un
hecho fortuito atribuible solamente a las leyes que rigen la causalidad, no
puede sostenerse que la conducta de los agentes haya estado precedida por
un dolo eventual (…)”
 “(…) mal puede imputarse objetivamente el resultado a un autor que no ha
creado ningún peligro relevante para el bien jurídico (…)”

CASO 2 “TAXISTA”

Sala Penal Suprema/ Expediente Nº 4166-99-Lima/ 07 de marzo del 2000

Villalobos Chumpitaz, el día de los hechos, se encontraba por inmediaciones del


domicilio de los agraviados, realizando su labor habitual de taxista, siendo requerido su
servicio por un individuo que lo condujo hasta el inmueble en mención. Al llegar al
lugar recibió la indicación de hacer ingresar el vehículo hasta la cochera del mismo,
lugar donde esperaban otros 5 sujetos, quienes introdujeron diversas especies al
vehículo. Posteriormente le indicaron que iniciara la marcha, siendo intervenidos
durante el trayecto por la autoridad policial. Conforme ha quedado sentado en su
manifestación policial, el encausado Villalobos Chumpitaz afirmó haberse percatado de
las intenciones delictivas de los sujetos que tomaron sus servicios en el instante que lo
hicieron ingresar a la cochera del inmueble, situación ante la cual, refirió, no haber
podido hacer nada dado que ya se encontraba dentro.

ABSOLVIERON a Luis Alberto Villalobos Chumpitaz, de la acusación fiscal por


el delito contra el Patrimonio –robo agravado-, en aplicación del instituto de imputación
objetiva denominado Prohibición de Regreso para excluir tipicidad de la conducta de
quien actuó conforme a un rol social:

DOCTRINA

 “A efectos de determinar si las conductas devienen en penalmente


relevantes, el punto inicial de análisis es la determinación del rol
desempeñado por el agente en el contexto de la acción. (…)
 Queda demostrado que el procesado se limitó a desempeñar su rol de
taxista, el cual, podríamos calificar de inocuo, ya que no es equivalente, ni
siquiera en el plano valorativo, al delito de robo agravado. De otro lado, se
ha establecido en autos que el citado encausado, en un momento
determinado del desarrollo de la acción, tuvo pleno conocimiento de la
ilicitud de los hechos desplegados por sus contratantes, lo cual tampoco es
sustento suficiente para dar lugar a alguna forma de ampliación del tipo.
 (…) Si bien intervino en los hechos materia de autos, su actuación se
limitó a desempeñar el rol de taxista, de modo que aun cuando el
comportamiento de los demás sujetos fue quebrantador de la norma, el
resultado lesivo no le es imputable en virtud a la Prohibición de Regreso”

CASO 3

“JEFE DE BANCA PERSONAL”

SALA PENAL PERMANENTE R.N. N° 2270 – 2004 LA LIBERTAD, 16 de


septiembre de 2004

Se imputa al encausado Vílchez Pella que en su condición de Jefe de Banca


Personal del Banco de Crédito en Trujillo, habría recepcionado 4 cheques del encausado
Inafuku Higa (Presidente del Consejo Transitorio de Administración Regional de La
Libertad) colocando el visto bueno para que de ese modo los cheques se hagan efectivos
y para que dicho monto pueda ser depositado en la cuenta personal del señor Inafuku
Higa. El dinero era fruto del delito de enriquecimiento ilícito.

DOCTRINA

 Declararon FUNDADA la ENA y mandaron a archivar definitivamente la


causa, en aplicación del instituto de Prohibición de Regreso, en base a los
siguientes fundamentos.
 “(…) Existe un ámbito de actuación inocua y cotidiana, y que solo mediante
la puesta en práctica de planes de otras personas se convierte en un curso
causal dañoso, lo que obliga a distinguir entre intervenciones propias y
creación de una situación en que otros realizan el tipo (…)”
 “(…) En lo que respecta a la intervención del encausado Vílchez Pella, se
relaciona con las prácticas bancarias que están en el ámbito de actuación del
procesado y que no importaron, en sí mismas, vulneración de la legislación
bancaria ni una realiación de actos fuera de lo cotidiano (…)
CONCLUSIÓN
BIBLIOGRAFIA

 https://forojuridico.mx/teoria-del-delito/

 https://idehpucp.pucp.edu.pe/images/documentos/justicia_ddhh/talleres/

teoria_del_delito-guzman_y_quevedo-ayacucho2010.pdf

 https://www.mpfn.gob.pe/escuela/contenido/actividades/docs/

4643_03imputacionobjetiva_20.6.16.pdf

 https://lpderecho.pe/teoria-delito-concepto-sujeto-objeto/

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