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en comunig con auenes caracen de alien stfacenos ong Sis necesidades, Mateo no lo entende a, por lo questiala cig cian de dar de comer al hambriento en el context del ucio ers I6gico. Pablo también sta el olvdo del hambriento en el contents del jucio. En la celebracidn eucaristica en Corinto, que inelula un bhanquete coma, los que comen mientras que ottospasan hans ‘muestran que desprecian ala iglesia de Dios yhumillan aos que no tienen nada” (1 Cor 11,22). Aquellos que de un “modo Indign’ par ticipan del cuerpo y la sangre de Cent, “comen y beben el uo con ls mismo (1.2725, Qulens ene noses parc ‘hos en fa eucarstia mientras ignoramos a los hambrientos, podem {star comiendo y bebiendo nuestra condenacion. * La evcaita coca lucene contest escola dela ap- ci del lode Dos. a eicatlot rslana noes os! logon leat de Adam Sih on progres gratia manent hacia ur anc, meiante el que a mane ive ol mercado, ques dear las traves de nes consumo, gromete una sbunancts pases ae coc sumore won pte aos deuce cra cris aruncla la legada seta dl Reo de Dos, que yes Sent ori racia de Dios. La contituisn sacrosanct Conan del Vater aa a cmerién esata de ecarsten ey Slauiente éminos “Ena Ira trena preguntas y paces er latugaceleste que se clara en a cua sana, rus hve is que nes digimos como peregrinos.. En laevis Dstar lac irumpe en fa desesperaeén gca del historia hunara con Lin mensae de expeanaa yuna exigent de usc lhanbren no cde esperar el banqute celestial acontece shor. Econ {plabe de Io oveead superficial erompe pola promesa don a, ET Reino hace el que ahs we dnig ye ya hrumpe en ms Fist 1 Reino noes sulado por nuestros deter, sno por el en de Dos, que esbimos como don en fa eucarsa Creo que ya sé por qué habria sido un error dar dinero Rosainds por el péjar. Habra anulado el don y lo habrfa convertdo en un ner ‘cambio, Habra restablecido os limites entre fo que era suyo lo que fea mio, por tanto, haba reforzado los limits ere los dos. La euta- risa nds euenta una historia elferente sobre quignes somos reament, tanto los hambrientos como los satsfechos, y hacia dénde caminames. ‘Traducdo dal ings por lose Pérez Escobar ° Suerosanctum Conelim Luiz Carlos Susin * LIMOSNA, AYUNO Y ORACION: LA OBRA O EL CIRCULO DE LA MISERICORDIA Y LA ADORACION = hhambre, la carencia, el pan y la palabra estén estechamente relacionados ene si, En medio de a temtacién, Jess pasa del hambre de pan al hamire de palabra: “No slo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca fe Dios" (Mt 4,4. CI. Dt 6,2-3). Sin embargo, Jests conocta bien e! slgnificado del proverb judo segin el que “el hombre que come es, 2 mds justo de fos hombres" justo y sosegado, satisfecho ~saciado fen sy sta medida-,en tanto que un vacioy una carencia bésica hhambre, sume al ser humano en el peligro y la ansiedad, convitén dolo incluso en un ser peligroso y violento E| hambre, la debilidad, te hortor, a verglenza, la compasion, pueden sin embargo conduct 8 un camino sin retorno, a una aventura de encamacién y anima ‘iin, de espritvaidad que se enrafza en el reraso y en el excesa de fecorro al cuerpo que se pierde solo. Jest, como nos muestran sus * Le Caton Sun es rile capuchino, doctor en Tolga sitematca por Ia Universided Gregotana de Roma. Taba en le Facultad de Tecogla dei Universidad Catlin Panttela ce Rio Grande do Su (FATEONPUCRS y en ft Escusla Superior de Teologa yEspitivaided Francscana (ESTER) s mien lo indador de la Atocialén de Teologi y Ciena de a Religion de Bras ¥ del Equipo de ReflexicaTeolgica de a Confeencia de Relilosos de Bra- Si Ente sus Investigaciones actuals, cabe mencionar as relaciones de la tcolagia con las clencias y con la ecologta,y ha publicado textes en ot {Ebo deta talaga de la creacin y la escatclogt Diroccin: un Juarez Tivra, 171 ~91520-100- Porto Alera (Brasil. Correa eletrénico lessens " Mucha de lo que voy a dsarollar en este acu, conrad en Jest lo debo a soto y gran maestro judio Emmanuel Levinas, cuyo penso- 268 ‘conc 2108 Concie 2108 269 Luzcamvos us OSHA, AVUNO YORACION: LA OBRA OL CRELLOBE CA MERICORDIA| testes de auxilio, conocia bien Io que era el hambre fiscal clamor tl estémago y del cuerpo. Ayudé a la multitud hambriena; ese jgesto mds repetidoy preciso de su misin. EI hambre de los demds y su compasidn por quienes lapadecian llevaron también a jest ala tentacion mas recurrente, desde el nicio ‘mismo de su misin, en el exrafo paisaje del desiero de su pueblo, §si como lambign en las relaclones mds cercanas y cotidianas con sy ppueblo, que lo buscaba porque querfa comer y garantizarse ol pan, Rasta ei punta de convertila en administrador y garante del pan ¥ 65a fue para él una tentacién obsesiva, porque permanecié ene! hor- ‘zonte de su misiOn como algo que parecta bueno, que tenta algo de thueno, de estomacalmente bueno. Ante esa situacin, indvcid por cl vertigo del hambre de quienes lo buscaban, jess neces discer ni. Pero discernit, al menos en portugues, significa ir al “cere”, aa ‘médula, aclaar las sombras que pueden provocar desvios para qu, de la propia realidad de la tertacin, se desprenda e irae la luz de Ta verdad plena, que se presenta en ella cual verdad oscura, como en tun abisma de sombras. Se trata asimismo, en este caso, dela verdad {desu misién en torno a una cuestién primordial: el hambre,e pan, palabra, la oracign, en resumidas cuentas, la glarificacién de Dias en tl se" humano vivo, tal como dio san Ireneo: “la gloria de Dios ese ser humana vivo, a gloria del ser humano es la vision de Dis" En el evangelio de Mats, Jats welve a exponer-en lt alias programatcas del Sermon de Ia Montaha- au punto de vis sobre Una uestion tradicional, coy orgen se remota Tos ators de is reigiones In prictea sel iosna, el ayuno y la orci. Seta de tna prctica que persistent religiones come acto de iad y ‘de mascricordia, Ain hoy, en ernie, in gene que seude ls vee nes. I cludad antiga pra esa unto 3 ls mesqutas eI xl nada del tempo, tra franguear las puertas de las mura, eas Ries jer y ion sponds um es Sada, puede que incluso eleganterente vests, de domingo, en postures eaticementeerereatipadas como de mendlgo, dese Inclinacign de cabera,elamento des labios, las manos exter ddasen forma de concha, ala humildad dela posture senada © tnconada, No son forzacamenta mis pobreso esvaldos eet ‘Teno foe el ema de mi tests actor Levinas se acupé de forma lead {lel drama del ambre, del cuerpo, del pan, come recames dos y fds mmentos para una espirivaliad rsl de sccion de gracias. Para una sites Alocumentada, véase Luiz Carlos Susi, © Hamer messinico, Uma ino- ‘dugso a0 pansamenta de Emmanuel Levins, €STNoves, arte Alege 1908, pp. 345-350, que pasan ante ellos, Todo esto forma parte de un ritual en el que el ‘mendigo desempefa un papel, casi hace un favor alos que acuden al ‘emplo a rezar: porque la oracién implica limasna y ayuno, es deci, dar y despojarse, Sin limosna ni ayuno la oracién no es profunda ni verdadera sino una escenificacién, En el Sermén de la Montana, Jests nos lleva hasta fo mas profundo de ese darse, despojarse, hasta esa Soledad extrema en la que una ‘mano no sabe lo que hace la otra, nadie conoce la que ocurre en la inimidad del aposento donde se cleva la oracion, incluso a pesar de ‘estar en la. misma casa (cf, Me 6,1-6). Se trata, pues, de una bondad tina piedad hasta tal punto desprendidas y oreccas, sin esiridencias ni conciencia, que ni siquiera el sujto sabe que en su gesto de ple dad y de misericoraia existe bondad: el don puro es aquel en el que una mano no sabe lo que hace la otra; verdaderamente bueno es ‘aquel que ni siquiera sabe que es bueno, En estos tiempos en los que las desigualdades del mundo parecen haber escapade a todo control, donde, por un ado, los sintomas de besidad alcanzan casi las proporciones de una epidemia, y por otro aistimos a la violencia generada por el cinismo y por la revuelta, merece [a pena revisar a “triple abra de misericodia” que acompaa 3 toda actitud verdaderamente religiosa, donde espirtualidad y mate falidad 6 corporeidad se unen y se dan la mano en la unficaciGn de ‘tes gests religiosos fundamentales: limosna, ayuna y oracion. 1. La “imosna” 0 la santidad de dar En primer lga Ia imosn. La liosna es metodligle y pedags- afcamtete anterior a reso, pus los es gexoso moments a dea Aboracién, el ayuno yin rscion- clean cys a els ‘Ties Gracies” de a adton griegsy romana, Secomunican ene 5 sour imps arene poet” cn en stoi, ar loo a gal Que cre con ls ves personas dea nidad Sin embargo el punto por el que debernos comenca, la Festa, posce una (gia liga gue quad close vuelve tat mente clara y neces al ial Junto a ands elevde ce as reco. Tesla mis pura accion Ge gracias, fa adorcions y quizis mas desde el punto de vita diving qu del human, ay ta analogs ‘ue puede resutamos Gti tambien el conoctmianta dea Tinlad Bare necesaiamente dela humid de Jess jo en su cond Si mar, pra nalmente sumerve en mister una dl 270 one 370 Gotan 2011 2 LUMOSHA, AYUNO YORACION:LA OHRA OL CIECULO DE LA MSERICORDIA Limosna’, eleemosyne en griego, procede de la ratz éleos, una palabra griega que, segdin Bultmann, en la literatura eldsica India “la ‘conmacion protucida por la vision de un mal que afecta a ote pe. ona”, lo que redunda en compasién y piedad. ES un sentimienia de Zando el cansuimo, constituye un ejemplo claro a respecto. La inten- ign altima de tado este movimiento no se reduce al don, a la Gfrenda, sino que afecta a fa necesidad humana de crear lazos, de testablecery fortalacer allanzas sagradas, sobre las que reposan, en “ima instanca, la sociedad yla autoafirmacién de la individualida- des, Esta misma logica, en su version mds dramatica, es la que se pula abservar en el cartel que una ONG colocs de forma estatégica Junta ala Candelaria en Rio de Janeiro, en ol lugar donde se produjo lun asesinato colectivo de nifios de la calle a manos de la policfa “ayuda hoy a quien To necesita para que manana no seas ta su vie~ Danatives, ofrendas, generosidad, inversiones a fondo perdido para los inversores, todo esto constituye la base dela Justicia que se "Sigla en francés, en homenaje al inspradar del Movimiento, Marcel Mauss * Sole a “paradigma del don” y el MA.USS, véanse en portugués: A. Cali, Antrpologia do Dom. © Tercita Paradigms, Vozes,Ptrépoks 2002, PH. Mains (og), elidiva entre os modems. Discussio sobre os funda -meniono as regras do socal, Vozes, Pepalls 2002... Gedbout, O espr- ‘io da didiva Fundacto Cetalio Vargas, Rio de Jansiro 1998, M. Maus, Enso sabre a didva, edigbes 70, Lisboa 1950. mm coca ochan 8 273 LIMOENA, AVUNO Y ORKCION:LA OBRA OE CRCULO DELA MSERICORDIA busca no sdlo en las relaciones primarias de la familia, donde los padres invierten de forma unilateral en sus hijos, sino también en la ‘que encontramos en las innumerablesiniciativasfilaneopicas,en les ‘ONG, en los movimientos sociales o en las ompanizaciones popula: res, Eisen infinidad de formas de voluntariado, de ayuda, deren. tes de las relaciones de intercambio que ponen de manifesto la per. rmanencia y [a permeabilidad del “paradigma del don* por encima de los paradigmas del mercado y del Estado, En la 6poca dela teria econdmica y de Ia politica “keynesiana, ‘cuando surgié el "Estado de bienestar, el Estado empez6 a asumic de forma creciente el papel de proveedor, de suministrador, deforms ‘que su relacién con los cludadanos se tradujo de forma paulatna en derechos de los ciudadanos y deberes del Estado cada vex més amplios, Al mismo tiempo que desaparecia la figura del "benefactor publica”, aquel personaje relativamente poderaso de una localidad {que ligaba sus empresas al bien comdn y acababa ganéndose un ‘monumento o una calle en su honor, y justamente en proporeiin inversa ala pérdida de importancia de tal figura, se agigantaban los daberes del Estado y los derechos y expectativas de los ciudadans, Se produ tl inflacidn dela esfera publica que actualmente se cone. tala cierta “quiebra", una desaceleracién, un desmantelamionto del Estado tendente 2 un "Estado minimo", peligrosamente minimo. De tal forma que el mercado y a iniciativa privada, cuya ideologia, bisica sigue el paradigma del individualism respecto a las inverso- nes y las gananclas, han vueto a serllamados a ocupar la esr con- siderada pablica y de accion del Estado. En la actualidad aos encontramos en una encrucijada: la prvaie- cién de los servicios bienes mas elementales cuyo destinatrio es toda la colectividad, esto es, servicios publicos que, en lugar de ofe- cersedirectamente por el Estado, pasan a ser prestados por empresas Drivadas que obtienen sus beneficos; o la convoucién del mercado Yyde [a iniciativa privada a las cuestiones sociales. O tambien, de forma ain més confusa y voluntarist, las dos cosas ala vez. Muchas ‘empresas que desean mostarse “polticamente corrects" y anatse tuna buena imagen ante potenciales clientes, asocian sus marcas 2 ‘mejoras y campanas sociales, etc. Pese a ello, existen tambign ‘muchas iniciativas que pretenden de forma sincera buscar una slu- ida a los problemas sociales. La campafia brasileha Hambe Cero puede convertirse en un buen ejemplo, al demostrar que les poderes {de [a sociedad han de ener en cuenta que ésta no puede sabeivir al margen del ‘paradigma del don”. A ese llamamiento general se unen, ‘dems de ls fueraas de Estado que se movilizan y del sector empre- sarial las iglesias, que actdan dentro del "tercer sector’. De hecho, resulta algo absolutamente natural, pues natural es que el acto rl fioso vel paradigma del don estén intrinsecamente ligados. En el {aso que nbs acupa, es intrnsecamente biblico y evangélico, [En térmings biblicos, hasta recordar Ia instauracién det Sabado y del Jubileo, Sus fundamentos teol6gicos se remontan a la creacion: el ‘descanso del Creador en sus criaturas. Pero hay medidas de orden socal todas las craturas, también los animales de trabajo y no sola- mente los péjaros, junto con los humanos, ya sean hijos 0 siervos, fdeben gozar del derecho a descansar, a comer y a tenet una terra segura, Los tempos crean desis, carecias cada vez més trandes para unos y acumnulaciones para oles, Son necesaras, pues, fredidas sabsticasy jubilares,S6lo ast se puede sofar con una tera Mlevada a la plenitud del Sabado escatoldgico, al descanso junto al reader Jesis,insistiendo en la ofrenda, en la generosidad, en la misericor- dia, en ia justica creativa y no simplemente en la jsticia retributive “Gar slo 3 fos que nos dan, saludar Gnicamente a los que nos salu- dan, o incluso pagar rigurosamente en funcién del tiempo y del ren- flimiento de cada obrero (cf. Mt 20,1-16)-, ompe con la tinea dura fea ley, 257 como con a preerencia por el ritual como préctica de la religion. Consecuencia de ello es, por ejemplo, la sntesis de Santiago Ge la verdaderareligién, “pura y sin mancha": visa als hudfanos vyalas viudas (ef. Sant 1,27), Y respecto a la viuda, jesds nos da un magnifico ejemplo, que recoge la sensibilidad de Lucas ella, a ofrecer las “dos moneditas* fue tenfa,en su indigencia, dio mas que las ricascantidades de los hombres de bien, de los que gozaban de una buena reputacién, pero ddaban fo que les sobraba, La viuda encarna aqut el paradigma dela ‘ofrenda al que queremos llegar. "Os aseguro que esta pobre viuda ha techado mas que todas fos demas; porque esos otros han echado de lo ‘que les bra, pero ella ha echado de su pobreza todo lo que tenia para vivir" (Le 21,34). Esta es Ia verdadera limosna, la misericordia Hlimitad, cuya generosidad saca las propias entranas fuera de uno, para abrigary nutrir alos demds a expensas de la propia vida: el don fe fo que significa la propia vida, no lo supertiuo sino lo necesario, lo que implicara carenci, pérdida y ayuno, * Sobre la teologfa del Ano lubilary del Sdbado, cf Luiz Carlos Susin, {Gps senor do Sade, en Convert 35.37, 200, Bp 43+ a4 Concon 2118 Crete 215 275 tua exmos ssn LinOSNA, AYUND Y ORACION: LA 088A OE CIRCLLO DELA MSRICOROIA 2, De la limosna al ayuno de lo esenciat La viula dio de su pobreza de lo que necesitaba para vivir, todo lo {que tenfa, Excavé en sf misma, en [a falta de lo que habia orecidn, tina pobreza atin mayor, la peruria amenazadora del hambye de falta de medios propios para satisfacer sus necesidades. Su “boca, fl que correspondia a su boca y a su hamibre, su “Justa medida" 6 ‘quits de la boca para darselo a aquellos que, segin la costumbre, recibician las limosnas del templo. Lo que la interpela y le anebata 6 poco que ella tiene es Ia boca de los pobves, su estomago y ss cuer- pos hambrientos. 6a una mujer desamoarada a causa dle su vude- ad, y arcesgé mis de lo que aconsejaba la prudencia de la razon Razond, sin duda, con el vienice materno, con los gemidos de miser- cordia del vientre que busca protegery nutri. Lo hizo, sin embargo, a ‘costa de s{ misma, de su hambe, desu boca sin bocado, quedindose peligrasamente hambrienta, ayunando de lo que era esencial para ‘cuerpo. Las finalidades y las formas del ayuno son mitipes y ena aetal- dad se fomenta el ayuno terapéutico y estético. La viuda de evange- Tio, sin embargo, nos conduce, nos sumerge en el sentido biblicay teolbgico del ayuno, que isaias describe de forma conmovedora: El pueblo pregunta a Dios: *JPor qué vamos a ayunar nolo ves, por qué morificrnos si 18 no te enters?” El Dios mo res onde rade! dia de ayuno andais de negocios y opm nos ‘Yuestos jomaleros,Ayundi,s entre disputay na, glpeando i= “aamente con el puto. No, ne ayunes come shor haciendo of al Sirioa uesra vor, fe te aceso el ayuna que me aad el di en ‘que el hombre se montis? (.) JNO sabes eusl es el ayuro que me Sgreda? Abr oe prisonesinjstas, solar las coyundas del ogo, {efar ibre 3 los oprimidos, romper todos los yds; reparit pa con et ambient, hospdar alos pobres sn tach, vest al que vas Sesnudo yno eludi al que est propia came, Entonces sg ty az ‘coma la aurora y sherds curaran en seguida;(.) Eons sche fag, Sefer responders a tus gritos leas jAqui estoy” Us 8834, ear E/ayuno, en este caso, es el resultado de la oftenda, del cudado, de la misericordia, del hambre y de la lucha por la justicia, La vada de Lucas 21, com la de Nain, en el mismo L¢ 7,115, recuerda dare. mente a la viuda de Sarepta que auxilié a Elias a expenses de si misma y de su hijo, ariesgindose a acortar sus propias vidas pare ‘compartir el resto de a harina con el forastero y huésped inopotuno (cf.1 Re 17,8-24), En fos evangelios hay también un ayuno asociado a la ofrenda del tiempo, que en la actualidad adqulere un gran significado en el \oluntariado entre fos pobres que, sin tener ninguna otra cosa que Gat, ofrecen su bien mas preciado: el tlempo. Cuando Jesds invita a fos apéstoles a descansar, el evangelista observa agudamente: “Por- {que eran tantos fos que iban y venfan, que no fentan tiempo ni para Come?” (Wc 6,31). fsta es, en un crescendo, la mas elaborada de las iversas observaciones del evangelist, puesto que el exceso empieza pronto para Jest, inmediatamente después del primer sermén de Cafarnauin: “Todos te buscan, le dicen Simén y sus compafieros, intereumpiendo su oracién y buscéndole ellos mismos ansiosos y lle~ ros de fantasias de poder (cf. Mc 1,358), fs ese verbo “buscar’, el ‘que se utilizard para perseguir y justficar la muerte de Jess (ef. Mec 14'55)..De nuevo en Cafarnatin, “acudieron tantos que nia le puerta ‘ablan® (Me 2,2). Al regresar, ahora con los discipulos, a casa, "se Teunid de nuevo tanta gente que no podtan comer. Los suyos, al ente- favs, salieon para levarselo con ellos, pues dectan que estaba loco” (Me 3,20-21), Vemos aqui el ayuno'como consecuencia de una tentrega misionera, en el que se incluye el don més precioso, el tiempo. 3, Del ayuno de fo esencial a la oracién sustancial En el ayuno de lo esencial, et de la viuda, del mistonero entre los pobres, ayuno inevitable, obligade por la herida de la misericordi, fn [a ofrenda de lo absolutamente necesario, del “bocado” que se ddesvia dolorosamente de la boca para nuttiry saciar la boca de los hambrientos, la carencia y el hambre hacen del ayunador todo boca para el hambre de Dios. Ese es el ayuno que conduce a la aracién mis verdadera y fundamental, No se trata del ayuno igiénico 0 pre- paratorio para na ovacin mas concentrada, en estado mental alpha. ‘Antes al contraio: se trata del ayune como "en detrimento de uno mismo", por estar demasiado sobrecargado de los demés, por tener que nuttiry preocuparse de los demés, una experiencia bastante habitual de las madres al cargo dela familia, ‘Tras permanecer un tiempo embargado por fa preocupacién y el cuidadi de necesidades ajenas, un coraz6n vaciado por la misericor- aia, un estémago transido de hambre por haber oftecido su bocado, absen la boca *sinceramente” -llevando el corazén ala boca aall- ‘mentarse con el pan que nutre y da sentido al hambre del corazén: fa Palabra de Dios, Sdlo quien ha pasado por el despojamiento radical 276 Coch Corie 17 27 LIMOSNA, VUNG Y ORACION: LA BRA OL CIRCLLO DEL MISERICOROYA de darse a 3f mismo al dar lo que le era mas esencial y justo ~ay bocado, su herencia o su derecho- se arriesga en el ayuno que se ‘wuelve todo boca, como las eras en el nido ante el pjaro que ls va a aleanzar la comida, para alimentarse asf con la Palabra de Dios, ts fs la. ad-oracidn que prefiere Jesus. Ad-oracion, etimoldgicamente, significa volver la boca hacia fo que es promesa de alimento, hacia fo ‘que nos puede llenar la baca y sacar el coraz6n necestado, La ado. racién, en téminos lacanianos y posmodemes, quiza sea el "deseo" proveniente del vacfo, de la carencia y de la precariedad. As! se puede entender la aflrmacién evangelica ante la tentacion que apre- €ia al principio del texto: “No solo de pan vive el hombre, sina de toda palabra que sale de la boca de Dios" (Mi 4,4), La Palabra, entonces, sale de Ia "boca de Dias", por lo que de alguna manera el mismo Dios, al abrir la boca para dona su Palabra, se despoja, renuncia a quedarse el alimento que guarda en el cos: 26n,y la Palabra se hizo Carne (cf. Jn 14). Dios se acerca, iy co}, de forma escandalosa, humilde y pobre, para nutri alos aue tienen hambre de Dios. Alimenta el vacio y el hambre de los que ayunan abriendo su boca con su propio vacto divino y con su fraglidad de Dios hambriento que se identifica con fos més pequefios que tienen hambre (cf, Is 57,15; Mt 25,40; 43). Pablo afirma categéricamente este misterio al promover la colecta para los necesitados de Palestina ‘como un intercambio de generosidad, de donaciones y de auxlo en las pobrezas de ambas partes, de los palestinas y los griegos:"Voso tros ya conacéls la generosidad de nuestro Sefior Jesucriso, el cual siendo rico se hizo pobre por vosotros para enriqueceros con pobreza” (2 Cor 8,9) Por Io tanto, el que ayuna y desea se aliments on la pobeeza -con la carencia y con el desco- del Hijo de Dies, y hho con riqueza. Es el vacio y el deseo de Dios el que da valor y dice ‘Te quiero” al ayunante que busca alimentarse de la boca de Dis. & el encuenvo de vactos y de deseos, de un quererse mutuo. Hay ura falta adn mas profunda, un deseo ain mis inmenso, una bésqueda Incluso mas intensa, que es el movimiento que lleva a la adoacia, el més alto homenaje a Dios y la més delicada y paradjica presencia de Dios: misericordiosa,solidaria, confortadora y consoladora, en su palabra, que convierte todo el pcoceso la limosna, el ayuno y lar lén= eh un proceso del propio Dios y de la afliaciom a su forma de ser, El primero que amo, que dio la limosna radical ~se dioa si mismo en su Hijo amado-, que ayuna de su Hijo y nos ad-oray nos desea viniendo a nuestro encuentro en su Hijo, fue, es el propio Dios Para acercarnos a él hemos de aplicarel mismo método y la misma pedagogta de desprendimiento y amor. De esta forma comprobamos que estamos a salvo del materialismo e nuestros cuerpos, de nuestra hambre y de nuestra busqueda de ppan para nosotros mismos, mediante la espirtualidad que empieza ‘en la vulnerabilidad ante el hambre y los cuerpos de los demds, ante la busqueda de pan para los otras, empezando por ofrecer el bocado ‘de nuestra propia boca. Asi también nos salvamos del narcisisma del fyuno y dela lusién de [a oracién, pues solo la boca de Dios, su Palabra oftecida y despojada, puede ayudar a un ayuno impuesto por ‘el don excesive provocado por otis que tienen hambre. Dentro de esta desmesura de la misericorda alcanzamos incluso la medida justa para nuestro propio cuidado, para el cuidado de nuestra hhambre, nuestros cuerpos y nuestro pan, con derecho al descanso y a Ia anicipacion del Sabado, ala festa y ala aleria. Eso es justamente To que, cegin Lucas, podemos deducir de lantas comidas compart= das por Jesus con gonerosa y escandalosa hospitalidad: ‘Al hora determinada se puso a la mesa con sus disciples. ¥ les dijo: He deseado vivamente comer esta pascua con vosotos antes ‘dem pain. Os digo que ya no la comere hasta que se cumpla en ff elmo de Dios (..] Vosoves habels peseverado conmigo en ms pruebes, yo os vay a dare eine como mi Padre me loo 2h, Para que eomdisy Debs ami mesa en mireino” (Le 22,1416) Concluimos paraftaseando a santa Teresa y a san Juan de la Cruz “famor con amor se paga’~ y diciendo de Dios que "hambre con mds hambre se retribuye’, asf como “deseo con deseo ain mas ldiente", dado que, en el amor, lo que mas se desea de alguien, al Gesear su palabra y su presencia, es desear que nos desee, que nos bfrezca su deseo, que nos haga su deseo, para que nuestra falta se haga plena en la carencia que el otro tiene de nosotros. Y en ese com-padecer de hambre y ayuno, entre el Creador y sus criaturas, ‘entre el Padke y sus hijos, se habrin de encontrar las palabras, las ad- ‘oraciones, la hosptalidad del Reino, “alimento que permanece hasta Tavida eterna Jn 6,270). (aducido del portaguts por Jone Ares 278 can 218 Coton 219 279

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